Está en la página 1de 58

ANTOLOGÍA DE

LOS CREEPYPASTAS
QUE NO DEJARÁN
TU MENTE

COMPILADOR: LUCIANO MARTÍN ANRIQUEZ BARRANCO.

1
ÍNDICE
Pág.

Dedicatoria…………………………………………………………………………………..…. 3

Prólogo………………………………………………………………………………………..… 4

Jeff The Killer………………………………………………………………………………...5-12

Laughing Jack……………………………………………………………………………...13-20

Bloody Painter…………………………………………………………………………….. 21-24

Homicida Liu………………………………………………………………………………. 25-29

Ben Drowned……………………………………………………………………………… 30-33

Jane The Killer…………………………………………………………………………..... 34-36

Tails Doll…………………………………………………………………………………… 37-38

Ticci Toby…………………………………………………………………..……………… 39-46

Sonic.exe………………………………………………………………………………..… 47-53

SlenderMan…………………………………………………………………………..…… 54-57

Referencias………………………………………………………………………………….... 58
2
“A mis padres que me han apoyado en todo momento y también para que entiendan un
poco sobre mis gustos personales”

3
PRÓLOGO
Saludos estimado lector:
Posees ante ti una antología que contiene algunos de los creepypastas más
reconocidos de su género ya que todos los lectores que contienen en sus mentes estas
historias, no de algún modo no dejan de pensar en ellas, ya sea por su trama terrorífica
o por sus antagonistas de diferentes tipos ya que son muy variados en el mundo de los
creepypastas.
Algunostítulos de estos son: Sonic.exe, Jeff The Killer, Ticci Toby, Laughing Jack, entre
otros; espero disfrutes de esta antología y te guste saber más sobre los creepypastas.

Pero recuerda….una vez que los conozcas….y te agraden…. No podrás sacarlos de tu


mente…
4
JEFF THE KILLER

Jeff y su familia acababan de mudarse a un nuevo vecindario. Su padre había conseguido un ascenso en el trabajo. Pensó
que sería mejor vivir en una de esas casas de "fantasía". Sin embargo, Jeff y su hermano Liu no podían quejarse. Mientras
desempacaban, uno de sus vecinos pasó por allí, era una mujer relativamente joven.
"Buenos días, soy Bárbara, vivo al otro lado de la calle, solo quería presentarme a mí y a mi hijo", se da la vuelta y llama a
su hijo, "Billy, estos son nuestros nuevos vecinos."

Billy dijo hola y corrió de nuevo a jugar en su patio.

“Bueno”, empezó la madre de Jeff, "Yo soy Margaret, este es mi marido Peter, aquí están mis dos hijos, Jeff y Liu."

Cada uno de ellos se presentó, Bárbara los invitó al cumpleaños de su hijo. Jeff y su hermano intentaron protestar, pero su
madre aceptó encantada. Cuando Bárbara por fin se fue, Jeff encaró a su madre.

“Mamá, ¿por qué una fiesta infantil? Por si no lo ha notado, ya no soy más un niño."
"Jeff", replica su madre, "Nos acabamos de mudar aquí, debemos demostrar que queremos pasar tiempo con nuestros
vecinos. Iremos a esa fiesta."

Jeff intentaba protestar, pero se detuvo, sabiendo que él no podía hacer nada. Siempre que su mamá decía algo, era
definitivo. Jeff se encierra en su cuarto y se deja caer sobre su cama. Él se acuesta allí mirando su techo, poco a poco lo
invade una extraña sensación. No es tanto un dolor, pero sí una sensación extraña. Lo ignora y lo confunde con un
sentimiento al azar, de esos que te persiguen cuando experimentas una duda muy profunda.

Al día siguiente, Jeff se prepara para la escuela. Mientras estaba sentado, tomando su desayuno, una vez más padece
esa sensación, esta vez más fuerte. Y le afligió un dolor, como un leve tirón, pero nuevamente lo ignoró.

5
Liu y él terminaron su desayuno y se dirigieron hasta la parada de autobús. Mientras aguardaban, un chico montado en
una patineta salta sobre ellos, a solo unos centímetros por encima de sus rodillas. Ambos se sobrecogen por la sorpresa.

"¡Hey! ¿Qué diablos?"

El chico se cayó y se volteó hacia ellos. Pateó la patineta y, al rebotar esta por uno de sus costados, la sostuvo con sus
manos. El chico parece tener cerca de doce, un año menor que Jeff. Lleva una camisa de Aeropostal y pantalones
vaqueros azules algo rasgados.

"Bien, bien, bien. Parece que tenemos un poco de carne nueva."

De repente, aparecen otros dos chicos. Uno de ellos es súper delgado y el otro es enorme.

"Bueno, ya que son nuevos aquí, me gustaría presentarnos. El de ahí es Keith y el otro es Troy. Y yo soy Randy. Ahora,
para todos los niños en este barrio hay un pequeño precio por el pasaje, si es que me entienden."

Liu se puso de pie, listo para golpear al chico, pero sus dos amigos levantan sendas navajas hacia él, en actitud ofensiva.

"Esperaba que fueran más cooperativos. Parece que tendremos que hacerlo de la manera difícil."

Keith le pegó un puñetazo en el estómago a Liu, y Troy lo estrechó contra el piso. Randy se acercó a Liu, rebuscando en
sus bolsillos y extrajo, al fin, una billetera. Jeff, inmóvil, padecía esa sensación desagradable, fría, erizada de ardores
insoportables. Ahora ha sido muy potente, demasiado potente. Se pone de pie, pero Liu le hace gestos para que vuelva a
sentarse en la banca de espera. Jeff lo ignora y se acerca a los chicos.

"Escúchame bien, pequeño punk, devuélvele la billetera a mi hermano, de lo contrario…"

Randy guarda la billetera en su bolsillo y saca su cuchillo.

"¿Ah sí? ¿Y qué vas a hacer?", se mofa, mientras desfila su cuchillo frente a la cara de Jeff. Pero este, en un movimiento
rápido, toma la muñeca de Randy y se la rompe. Randy soltó un terrible grito; de inmediato, Jeff tomó el cuchillo caído.
Troy y Keith se asustaron, indecisos ante los chillidos de dolor de su líder, y trataron de huir, pero Jeff es demasiado
rápido. Lanza a Randy al suelo y arremete contra Keith, apuñalándolo en el brazo.

Keith se arranca el cuchillo y lo deja caer al piso, cayendo al suelo en medio de gritos espantosos. Troy continúa
corriendo, pero Jeff logra alcanzarlo. No necesita ni siquiera el cuchillo. Le aprieta la garganta y con la otra mano le da de
lleno en el estómago una serie de puñetazos, que obligan a Troy a vomitar incluso la cena de la noche pasada. Liu está
perplejo, mudo de asombro.

"Jeff, ¿cómo?", susurra brevemente.

Saben que serán culpados por todo el asunto, así que empiezan a correr tan rápido como les es posible. En tanto corren,
ladean sus rostros hacia atrás y logran ver al conductor del autobús corriendo hacia Randy y sus compinches.

Cuando Jeff y Liu llegaron a la escuela, no se atrevieron a contar lo que pasó. Todo lo que hacen es sentarse y escuchar.
Liu se apacigüaba pensando en que su hermano solo había golpeado a unos cuantos chicos, pero Jeff disfrutaba del
oscuro goce de sentirse poderoso, superior, la necesidad de lastimar por el mero placer de demostrarlo.

Cuando llegó a casa, sus padres le preguntaron cómo había sido su día, a lo que Jeff respondió con una voz un tanto
desanimada:

"Fue un día maravilloso."

A la mañana siguiente, oyó que llamaban a su puerta. Caminó hacia abajo para encontrar a dos policías en la puerta y a
su madre mirándolo con expresión de enojo.

"Jeff, estos oficiales me dicen que atacaste a tres niños, que no fue una pelea normal, los heriste con un cuchillo."

6
La mirada de Jeff se sepultó en el suelo.

"Mamá, fueron ellos los que nos atacaron a Liu y a mí".


"Hijo", se pronunció uno de los policías, "encontramos a tres chicos, dos apuñalados y uno tiene un moretón en el
estómago, tenemos varios testigos de que los vieron huyendo de la escena. Ahora, ¿qué tienes que decir ante esto?".

Jeff sabía que era inútil. Él podía decir que su hermano y él habían sido atacados por ellos, pero no había pruebas de tal
hecho. No podría decir que no estaban huyendo, porque a decir verdad sí lo hacían. Así que Jeff no podía defender ni a
Liu ni excusarse a sí mismo.

"Hijo, llama a tu hermano."

Jeff no podía hacerlo, ya que fue él quien golpeó a todos los niños.

"Señor... Fui yo", declaró Jeff, "yo fui quien atacó a los niños, Liu trató de detenerme, pero no pudo."

El policía miró a su compañero y ambos se sorprendieron.

"Bueno, chico, parece que te espera un año en prisión..."


"¡Esperen!", gritó Liu. Todos se sorprendieron al verlo sosteniendo un cuchillo. Los oficiales sacaron sus armas y
apuntaron a Liu, "Esperen por favor, no disparen, Jeff es inocente yo hice todo, perdí el control, me golpearon un poco
esos punks y me enojé. Tengo las marcas para probarlo."

Él levantó su camisa para revelar heridas y moretones, como si hubiera estado en una lucha.

"Hijo, solo tienes que dejar el cuchillo", dijo el oficial.

Liu soltó el cuchillo, levantó las manos y se acercó a los oficiales.

"No, Liu, fui yo, ¡yo Lo hice!", gemía Jeff con lágrimas corriendo por su rostro.
"¿Eh?, pobre hermano, tratando de tomar la culpa de lo que hice", sonrió tristemente Liu.

La policía llevó a Liu a la patrulla.

"¡Liu, diles que fui yo, diles, yo fui quien golpeó a los niños!"

La madre de Jeff puso las manos sobre sus hombros.

"Jeff, por favor, no tienes que mentir, sabemos que fue Liu, puedes detenerte."

Jeff observa con impotencia cómo la patrulla se aleja. Unos minutos más tarde, el padre de Jeff se detiene en el camino
de entrada, examina rápidamente la cara de Jeff y sabe que algo anda mal.

"¿Qué sucede?"

Jeff no puede responder. Sus cuerdas vocales están tensas por el llanto. En cambio, la madre de Jeff lleva a su padre a
una habitación aparte. Jeff llora sin descanso. Tras una hora de pensamientos extraviados y deseos fallecidos, vuelve a
entrar a la casa. Sus padres están tristes y decepcionados.

Él solo quiere a dormir, en la esperanza de que el sueño le haga olvidar sus males. Pasaron varios días, sin noticias sobre
Liu. No hay amigos para distraerse, nada más que tristeza y culpabilidad; por lo menos, hasta el sábado, día en que Jeff
se despertó y vio a su madre jovial y risueña.

"Jeff, hoy es el día", saluda mientras abre las cortinas y la luz alumbra el cuarto de Jeff.
"¿Qué, qué día es hoy?", pregunta Jeff semidormido.
"Hoy es el cumpleaños de Billy", le responde su madre.

Jeff se despierta rápidamente.


7
"Mamá, debes estar bromeando, ¿verdad? Cómo puedes esperar que vaya a una fiesta después de...”

Hay una larga pausa.

"Jeff, ambos sabemos lo que pasó. Creo que esta fiesta podría ser lo que ilumine estos últimos días. Ahora, vístete."

La madre de Jeff sale de la habitación y baja para prepararse. Jeff lucha por levantarse, realmente no tiene ánimos de
hacerlo. Elige al azar una camisa y un par de pantalones vaqueros y baja por las escaleras. Su madre y padre se han
vestido muy formalmente.

"Jeff, ¿es eso lo que vas a usar?"


"Mejor ve y busca otra cosa", le recomienda su madre, disimulando su fastidio con una sonrisa.
"Jeff, a esta fiesta tienes que ir bien vestido, si quieres causar una buena impresión", explica su padre.

Jeff empieza a gruñir y vuelve a subir a su habitación.

"¡No tengo nada de ropa elegante!", grita desde las escaleras.


"Solo tienes que elegir algo decente", insiste su madre.
Mira a su alrededor, pero no encuentra nada "decente". En su armario hay un par de pantalones de vestir negros que tenía
para las ocasiones especiales, pero le hace falta una camisa que combine perfectamente.

Hurgando durante unos minutos todavía, lidiando con que eso sí encaja y aquello no, logra toparse con una sudadera con
capucha blanca, tendida en una silla. Le convence, así que la usa.

"¿Eso es lo que llevarás?", le preguntan sus padres. Su madre mira el reloj.


"Oooh, no hay tiempo para cambiarse, vámonos de una vez."

Cruzan la calle hacia la casa de Bill. Tocan a la puerta, siendo recibidos en el acto por Bárbara junto y su esposo, quienes
los invitan a pasar. Dentro de la casa abundan los adultos, Jeff no descubre el menor indicio de un niño.

"Los chicos están en el patio, Jeff… ¿Qué te parece si conoces a algunos de los niños?", le invita Bárbara alegremente.

En efecto, los niños están corriendo por el patio en trajes de vaqueros y se disparan los unos a los otros con pistolas de
plástico. Jeff se queda de pie, algo incómodo. Entonces un chico se le acerca y le entrega una pistola de juguete y un
sombrero.

"Hey, ¿no quieres jugar?"


"Ah, no creo, eso es para niños, estoy demasiado viejo para estas cosas."

El chico lo mira con expresión de cachorrito enternecedor.

"Por fa", suplica.


"Está bien", murmura Jeff. Se pone el sombrero y finge dispararle a los niños. Al principio piensa que es totalmente
ridículo, pero luego comienza a sentir que es realmente divertido. Puede que no sea algo súper genial, pero es la primera
vez que él ha hecho algo que tiene fuera de su mente a Liu.

Así que juega con los niños por un rato hasta que escucha un ruido, como de pesadas y diminutas ruedas girando en sus
ejes. Luego, algo lo golpea en la nariz, parece una piedra. Cuando reacciona, se encuentra ante Randy, Troy y Keith,
todos acaban de saltar a través de la valla, balanceándose en sus patinetas. Jeff deja caer el arma de juguete y se quita el
sombrero. Randy le clava en los ojos una mirada llena de ardiente odio.

"Hola, Jeff, tenemos algunos asuntos pendientes."


"Creo que estamos a mano, después de todo, los vencí a todos ustedes… ¡Son una mierda!", le espetó Jeff.
"Oh, no, no hay manera. Te patearé el culo ahora mismo."

Randy se lanza sobre Jeff. Los dos caen al suelo. Randy golpea a Jeff en la nariz, y Jeff lo agarra por las orejas y le da de
cabezazos. Luego lo aparta de un fuerte empujón. Los niños gritaban, corriendo donde sus padres, quienes aún estaban
dentro de la casa. Troy y Keith desenfundan pistolas de sus bolsillos:
8
"Será mejor que nadie nos interrumpa."

Randy saca un cuchillo y apuñala a Jeff en su hombro, quien pierde el equilibrio al intentar evitar la hoja fría del arma.
Randy se le abalanzó sin darle tiempo de respirar, cubriéndole el rostro de patadas. Jeff hizo fuerzas y tomó del pie a
Randy, torciéndolo a sangre fría. Mientras Randy chilla, hecho un ovillo, Jeff se levanta y se dispone a retirarse cuanto
antes. Pero entonces la mano de Troy le detiene, cogiendo su hombro herido.

"No lo creo."

Toma a Jeff por el cuello, sin dejar de apretar la herida de su hombro, y lo lanza contra el piso. Cuando Jeff trata de
ponerse de pie, recibe una patada por parte de Randy, descargando más patadas hasta que le obliga a escupir sangre.

"Vamos, Jeffy, ¡pelea conmigo!"

Coge a Jeff del brazo y lo avienta fuera del patio, a la cocina. Toma una botella de vodka, puesta sobre la mesa, y rompe
el cristal en la cabeza de Jeff.

"¡Pelea!", vocifera Randy, fuera de sí, empujando a Jeff a la sala de estar a fuerza de patadas y puñetazos, "Vamos, Jeff,
¡mírame!".

Jeff levanta la vista, con el rostro ensangrentado.

"¡Conseguí que tu hermano fuera a prisión, y ahora solo vas a sentarte aquí y dejar que se pudra allí durante un año
entero! ¡Deberías avergonzarte!"

Jeff empieza a levantarse.

"Oh, ¡por fin! Parece que ya quieres pelear."

Jeff permanece en silencio, con la sangre y el vodka goteando de su rostro. Esa extraña sensación carcome su corazón,
arde en sus venas, ese impulso animal de supervivencia que se pervierte, que adquiere el fuego de la locura primitiva.

"Por fin, ¡vamos, arriba!"

En ese momento algo sucede dentro de Jeff. Todo pensamiento piadoso ha muerto, toda represión racional ha
desaparecido, excepto el deseo de la muerte, la capacidad de engendrar dolor por el placer de saborear el sufrimiento
ajeno. Incluso experimenta un vigor, una energía poderosa que alimenta sus músculos, que frunce su entrecejo y oprime
su cerebro al máximo de adrenalina. No, no hay pensamientos, no hay siquiera una palabra en su mente, solo instintos,
impulsos terribles e insondables como la naturaleza. Alza el puño y derriba a Randy, quien ha estado desprevenido,
hablando de más. Instantáneamente, en cuestión de segundos, concentra la fuerza de su cuerpo en su puño y lo imprime
directo en el corazón del pobre diablo.

Randy jadea, cubierto de abundante sudor, agitándose con desesperación. Golpe tras golpe, Jeff le arrancó su último
aliento.

Todo el mundo está mirando a Jeff ahora. Los padres, los niños llorando, incluso Troy y Keith. A pesar de que esos dos
tiemblan sin control ante su horrible mirada, sostienen sus armas, apuntándolo. Jeff, veloz, se precipita sobre las
escaleras, mientras Troy y Keith abren fuego hasta agotar inútilmente sus balas. Jeff se encierra en el baño. Toma el
pequeño estante donde reposan utensilios higüiénicos, como la toalla y el cepillo de dientes, y lo arranca de la pared.

Troy y Keith golpean la puerta del baño, forcejeando. Jeff, entonces, los recibe con el estante en la cabeza, el cual
desploma a Troy, dejándolo inconsciente. Keith, que es más ágil, se inclina y toma impulso sobre sus pies, esquivando los
puños de Jeff y reteniéndolo contra la pared, hundiendo las uñas en su garganta. Desde lo alto de un escaparate superior,
el recipiente de lejía se tambaleó por el impacto y terminó por derramarse. Ambos se quemaron, chillando alocadamente
por el escozor. Jeff se secó los ojos con el dorso de su manga y, a ciegas, le propinó a Keith unos cuantos golpes en el
cráneo con el estante arrancado, que recogió del suelo. Mientras se desangraba lentamente, a Keith se le escapó una
sonrisa siniestra.

9
"¿Qué es tan gracioso?", preguntó Jeff, desconcertado.

Keith sacó un encendedor.

"Lo que es gracioso", dijo, en tanto activaba el aparato y la llama ardía en la punta del encendedor, "es que tú estás
cubierto de lejía y alcohol."'

Keith tiró el encendedor sobre Jeff. Tan pronto como la llama entró en contacto con él, encendió el alcohol del vodka. El
alcohol lo quemaba... La lejía le blanqueaba la piel... Jeff dejó escapar un grito terrible, sintiéndose desmayar del dolor.
Corrió por el pasillo, desesperado, aullando, y cayó por las escaleras. Todo el mundo empezó a gritar, despavorido,
procurando auxiliar al adolescente en llamas, casi muerto, tendido en el piso.

Lo último que vio Jeff era a su madre y a los otros padres de familia tratando de apagar las llamas. Cuando despertó, tenía
un yeso envuelto alrededor de su rostro. No podía ver nada, también sintió el peso de otro yeso en su hombro. Trató de
levantarse, pero se desplomó. Se sentía tan débil y enfermizo... Una enfermera se apresuró a ayudarlo.

"No creo que puedas salir de la cama todavía", le dijo.

Jeff se sentó en su lecho, confundido. Finalmente, después de unas horas, oyó la voz de su madre.

"Cariño, ¿estás bien?"

Jeff no podía responder, su rostro estaba cubierto por el yeso: era incapaz de hablar.

"Cariño, tengo una gran noticia. Después de que todos los testigos le dijeron a la policía lo que pasó en la fiesta, ellos
decidieron liberar a Liu. Él estará aquí mañana. Volverán a estar juntos de nuevo."

Jeff por poco pega un salto de alegría que le habría retirado el tubo que conectaba su brazo al suero. Su madre lo abrazó
y le dijo adiós. Las siguientes semanas lo visitaron sus familiares y, al cabo de unos meses, llegó el día en que sus vendas
habrían de desplegarse. Su familia se reunió para presenciar cómo removían el último vendaje de su rostro.

"Esperemos lo mejor", dijo el médico.

Rápidamente tiró de la última venda, dejando expuesto el rostro de Jeff. La madre de Jeff dio gritos. Jeff notó los rostros
atemorizados de Liu y su padre

"¿Qué? ¿Qué pasó?", susurró Jeff.

Salió corriendo de la cama y corrió hacia el baño. Se miró en el espejo y comprendió la angustia de su madre y el temor
de su padre y su hermano. Su rostro. Su rostro es horrible, sus labios se han quemado, semejantes a una sombra
profunda de color rojo; la piel que se extiende sobre su faz es blanca como la nieve, y su pelo chamuscado ofrece a la
vista el negro marchito que reemplazó a su cabellera castaña.

Deslizó una mano por su rostro. Se sentía como cuero. Volvió a mirar a su familia y luego al espejo.

"Jeff", suspiró Liu, "No está tan mal..."


"¿No es tan malo?", murmuró Jeff, "¡Es perfecto!"

Su familia quedó completamente sorprendida. Jeff comenzó a reír incontrolablemente, sus padres notaron que sus manos
temblaban.

"Uh... Jeff, ¿estás bien?"


"¿Estar bien? ¡Nunca me he sentido más feliz! Ja, Ja, Ja, Ja, Jaaaaaa, mírenme, este rostro combina a la perfección
conmigo!"

No podía parar de reír. Él se acarició el rostro, mientras se miraba en el espejo. ¿Por qué se comportaba así? Ustedes
recordarán que cuando Jeff peleó con Randy su mente fue devastada por la locura, una que dormía en su espíritu y que
se alzó infernal y demoníaca cuando su juicio crítico no pudo contener más los instintos oscuros de Jeff.
10
"Doctor", inquirió la madre de Jeff, "¿Está bien mi hijo... Bueno, ya sabe, de la cabeza."
"Oh sí, este comportamiento es típico de los pacientes que han tenido grandes cantidades de calmantes para el dolor. Si
su comportamiento no cambia en unas pocas semanas, tráiganlo de vuelta aquí y le realizaremos un examen
psicológico."'
"Oh, gracias, doctor."

La madre de Jeff se acercó a este:

"Cariño, es hora de irse."

Jeff mira hacia otro lado del espejo, su cara todavía se ensancha en una sonrisa loca.

"Ay mamá, ja, ja, jaaaaaaaaaaaa!"

Su madre lo tomó del hombro y lo condujo despacio a tomar su ropa.

"Esto es lo que traía", se limitó a decir la señora de la recepción.

Los pantalones de vestir negro y la sudadera blanca se hallaban libres de rastros de sangres. La madre de Jeff lo vistió
dentro de una habitación pequeña.

El crepúsculo de la tarde enrojecía el cielo cuando la familia de Jeff volvió a casa, ignorantes de que ese sería su último
día. Más tarde, a mitad de la noche, la madre de Jeff se despertó por causa de un sonido proveniente del cuarto de baño.
Parecía el ruido de llanto y de suspiros entrecortados. Intrigada, se aproximó al baño y abrió la puerta. El espectáculo era
horrendo.

Jeff había tomado un cuchillo y se había tallado una sonrisa de oreja a oreja, surcando sus mejillas exageradamente.

"Jeff, ¿q-qué estás haciendo?"

Jeff miró a su madre.

“No podía seguir sonriendo mamá. Me dolió un poco, ahora puedo sonreír para siempre.”

La madre de Jeff notó sus ojos, rodeados de negro, ni siquiera pestañeaba.

"¡Jeff tus ojos!"


"No podía ver mi rostro, me cansé y mis ojos comenzaron a cerrarse, me quemé los párpados. Ahora siempre podré ver...,
mi nuevo rostro."

La madre de Jeff retrocedió lentamente.

“¿Qué pasa mamá? ¿Acaso no soy hermoso?”


"Sí, sí lo eres. D-déjame ir a buscar a papá para que pueda ver tu bello rostro."

Ella corrió a la habitación y sacudió al padre de Jeff.

"Mi amor, saca el arma que...", se detuvo cuando vio a Jeff en la puerta, con un cuchillo.
"Mami me mintió."

Eso es lo último que dijo Jeff, antes de lanzarse contra ellos con el cuchillo de carnicero en alto.

Su hermano Liu despertó de improviso con un desagradable sabor en la boca y el corazón palpitándole a mil por hora.
Creyó que era cuestión de un mal sueño, así que cerró los ojos.

Cuando se encontraba a un paso de sumirse en el sueño, tuvo la extraña sensación de que alguien lo estaba observando.
Miró hacia arriba, pero antes de poder decir algo, la mano de Jeff cubrió su boca. Poco a poco, su propio hermano levantó

11
el cuchillo, con la muerte sombría en sus ojos. Liu se esforzó por incorporarse, luchó y pataleó, pero el oxígeno huía de su
pecho, ahogándose. Entonces Jeff le susurró con una sonrisa gigantesca y retorcida:

"Shhh, ve a dormir."

12
LAUGHING JACK

Era una noche de Navidad, en la nevada Londres, Inglaterra, en el año 1800, en una pequeña casa en las afueras
de la ciudad, vivía un solitario niño de 7 años de edad, llamado Isaac. Isaac era un niño triste y sin amigos. Aunque
la mayoría de los niños estaban pasando la noche con sus familias y esperando con impaciencia la apertura de los
regalos que se colocaban cuidadosamente debajo de los árboles de Navidad bien decorados, el pequeño Isaac pasó
la noche a solas en su frío, y polvoriento desván.

Los padres de Isaac eran muy pobres, su madre era una mujer estricta que se quedaba en casa y educaba a Isaac.
Su padre trabajaba largas horas en el puerto de Londres para mantener a su familia, a pesar de que una gran parte
de sus ingresos se destinaba a la compra y el consumo de grandes cantidades de alcohol al final de su jornada de
trabajo. A veces llegaba a casa borracho después de haber sido expulsado de todos los bares de Londres, y le
gritaba a su "amada esposa", la madre de Isaac.

De vez en cuando, se enfurecía y la golpeaba salvaje-mente durante su ebriedad. Como da la casualidad de esta
noche en particular, era una de esas ocasiones. Isaac sólo permaneció en silencio, temblando bajo sus sábanas
sucias hasta que los gritos y fuertes golpes cesaron. Una vez el pobre, y asustado Isaac finalmente fue capaz de
conciliar el sueño, él sueña con lo que sería tener un amigo con quien jugar, así tal vez podría reír y ser feliz como
los demás niños de Londres, en sus sueños. Por suerte para el pequeño Isaac, esta Nochebuena marcó un gran
cambio, cuando su soledad abismal, llamó la atención de un ángel de la guarda que luego diseñó un regalo muy
especial para el pequeño muchacho triste de Londres.

Al salir el sol, en la mañana de Navidad, Isaac abrió los ojos y se encontró una extraña caja de madera a los pies de
su cama. Los ojos de Isaac se abrieron con asombro al mirar la caja que estaba hecha a mano, y estaba pintada con
unos colores hermosos, preguntándose por quien la había dejado. Isaac no estaba acostumbrado a recibir regalos,
13
especialmente juguetes. ¿Cuántos juguetes tenía el pequeño Isaac que había encontrado abandonados en la calle o
arrojados en las cunetas?

Isaac se deslizó hasta los pies de su cama, en frente de la caja misteriosa, y la agarró con las dos manos. La caja
tiene maravillosamente pintadas caras de payaso felices en la parte lateral, con unos colores brillantes y muy
bonitos. Había una etiqueta en la caja que simplemente decía "Para Isaac". En la parte superior de la caja había un
texto grabado.

Isaac entrecerró los ojos mientras leía el texto, "L-laugh-ing-J-Jack-in-a-b-box... " hizo una pausa, "...¿Laughing
Jack-in-a-box ?" Isaac había oído hablar de un Jack-in-a-box (caja sorpresa), pero nunca de un Laughing Jack-in-a-
box. Su mente divagaba con curiosidad mientras agarraba la manivela metálica de la caja. Isaac hizo girar la
manivela y la canción "Pop Goes The Weasel" sonó al ritmo de los giros de la manivela. Cuando que la canción llegó
a su clímax, Isaac cantó el verso final. Pero no pasó nada. Isaac dejó escapar un suspiro, "Está rota..." Puso la caja
en el borde de la cama, y arrastrando los pies a través de su pequeña habitación polvorienta, fue a la cómoda donde
cambió de su ropa de dormir sucia, a sus ropas andrajosas habituales.

De repente Isaac escuchó un ruido fuerte proveniente de la cama, detrás de él. Se dio vuelta para presenciar la caja
de madera sacudirse violentamente. Entonces, sin previo aviso, la parte superior de la caja se abrió y un desfile de
humo de colores y confeti salió de allí. Isaac se frotó los ojos con incredulidad sobre lo que estaba viendo. A medida
que el humo se disipaba, el niño pudo distinguir que allí estaba un hombre alto y delgado, era un payaso multicolor,
tenía el pelo de color rojo brillante, una nariz de cono anillada con los colores del arcoiris, y en los hombros plumas
color cían sobre blanco; este se sentó encima de su traje de payaso andrajoso y colorido.

El payaso colorido extendió los brazos y emocionado anunció: "Venga uno, ¡vengan todos! ¡Sean grandes o
pequeños! ¡PARA VER AL MEJOR PAYASO DE TODOS! El único, ¡Laughing Jack-in-a-Box!"
Los ojos de Isaac se iluminaron, "¿Q-Quién eres?", preguntó.
El payaso colorido bajó de la cama y con una sonrisa feliz dijo: "¡Me alegro de que lo preguntes!, Me llamo
¡Laughing Jack, tu nuevo amigo para TODA LA VIDA! Soy mágico, nunca me canso de jugar, soy un genio
en el acordeón, y puedo adaptarme y desarrollarme a tu propio cambio de personalidad... En otras palabras,
¡lo que te gusta a ti, me gusta a mi!"
Isaac levantó la vista hacia el misterioso payaso. "¿S-somos amigos?" tartamudeó.
Jack miró al muchacho enarcando una ceja. "¿AMIGOS? ¡Somos los mejores amigos! Fui creado
especialmente para ser TU amigo no tan imaginario Isaac."
La mandíbula de Isaac se dejó caer: "¿Sabes mi nombre?"
Jack dejó escapar una risa caprichosa, "Por supuesto que sé tu nombre. ¡Lo sé todo sobre ti! Así que, ahora
que terminamos de presentarnos... ¿Te gustaría jugar un juego de Veo, veo?"
Isaac sonrió de oreja a oreja, "¿De verdad? ¿Podemos jugar? ¡me encantaría! Yo-... Oh..."
Hizo una pausa, "No puedo... tengo que ir abajo para ver a mi madre y hacer las tareas..." su sonrisa se
desvaneció por la decepción.
Jack puso su mano sobre el hombro de Isaac y con una cálida sonrisa, dijo: "Está bien, estaré esperando aquí por
ti hasta que regreses."

Isaac sonrió mientras miraba a su nuevo mejor amigo. Justo entonces oyó la voz chillona de su madre que lo
llamaba desde abajo. "Bueno, me tengo que ir, vuelvo después de haber terminado, ¿bien Jack?" Dijo mientras
se dirigía hacia la puerta.
Jack sonrió: "¡Absolutamente niño! Oh, ¡Isaac! "
Isaac volvió a mirar a Jack, quien le dio un guiño y dijo: "Deberías usar esa sonrisa más a menudo. Te queda
bien."

Isaac sonrió felizmente, y salió por la puerta.

Todo el día, Isaac le contaba a su madre acerca del increíble, y colorido payaso que había salido de una caja
mágica que apareció al pie de su cama. Su madre, sin embargo, no creía ni una palabra de eso. Finalmente
convenció a su madre de que lo siguiera a su habitación para poder contemplar a Laughing Jack por sí misma.
Subieron las escaleras e Isaac se abrió la puerta de su habitación.

14
"¿Ves mamá? Tenía razón, él-..." Isaac hizo una pausa mientras examinaba la habitación que no contenía ni al
mágico payaso, ni a la caja de madera misteriosa. A la madre de Isaac no le hizo gracia. Ella le dio a Isaac una
mirada tan amenazadora que hizo que sus rodillas se pusieran débiles y se sintiera enfermo del estómago.
"P-pero mamá... él-" La madre de Isaac le abofeteó rápidamente en la cara. Los ojos de Isaac comenzaron a
romper en lágrimas, y su labio empezó a temblar.
"¡ESTÚPIDO NIÑO INSOLENTE! ¿¡Cómo te atreves a mentirme sobre tal idiotez infantil!? ¿¡Quién querría ser
amigo de un gusano inútil como tú!? Ahora permanecerás en tu habitación el resto de la noche, y no tendrás
cena... Ahora, ¿qué dices ingrato?"

Isaac se las arregló para tragarse el nudo que tenia en la garganta con el fin murmurar una respuesta: "G-gracias
mamá." Su madre lo miró por un momento, antes de salir de la habitación disgustada.

Isaac se levantó y corrió a su habitación para tirarse en la cama. Ríos de lágrimas corrieron por sus mejillas mientras
gemía y lloraba.

"¿Qué es lo que ocurre, niño?" Gritó una voz.

Isaac miró por encima del borde de la cama, Laughing Jack estaba de repente sentado a su lado.

"¿D-Dónde estabas?" Isaac murmuró. Jack pasó su mano por el pelo de Isaac para consolarlo, mientras
suavemente le respondía: "Yo estaba escondido... No puedo dejar que tus padres me vean... De lo contrario,
no nos dejarán jugar más." Isaac secó las lágrimas de sus ojos.
"Mira niño, siento haber tenido que ocultarme, pero yo te haré feliz porque esta noche podremos jugar y
tener un montón de diversión" dijo Jack sonriendo.

Isaac sintió su vibrante paz y asintió en silencio. Una pequeña sonrisa comenzó a formarse en las comisuras de su
boca. Esa noche Laughing Jack e Isaac jugaron muchos juegos divertidos. Con un movimiento de su mano, Jack
hizo que todos los soldados de plomo de Isaac cobraran vida y marcharan alrededor de la habitación. Isaac se
sorprendió al ver a sus juguetes moviéndose alrededor de la habitación por sí solos. Entonces Laughing Jack e Isaac
se contaban historias terroríficas de fantasmas. Isaac le preguntó a Jack si él era un fantasma, pero Jack le explicó
que el era más bien una entidad cósmica. Al final de la noche, Jack metió la mano en su bolsillo y sacó un surtido de
deliciosos dulces. Isaac entró en éxtasis cuando puso el primer dulce de colores en su boca, ya que era la primera
vez que probaba algo tan dulce. Isaac estaba muy entretenido y se rió tan fuerte esa noche que las cosas parecían
estar finalmente mirando hacia arriba para Isaac. Al menos hasta aquel incidente que se produjo 3 meses después...

Era un día agradablemente, cálido y soleado en Londres, eso era un poco raro. Así que con la ayuda de un cierto
amigo no tan imaginario, Isaac pudo terminar sus tareas temprano y se le permitió salir a jugar un rato. Las cosas
empezaron de manera bastante simple, el dúo estaba en el jardín trasero, detrás de la casa jugando a los piratas,
cuando Isaac vio al gato de los vecinos quien saltó furtivamente en su jardín.

"¡Sí! Tenemos a un espía enemigo" Gritó Isaac, cautivado por la fantasía y la imaginación.
"¡Yo lo atraparé, Capitán Isaac!", exclamó Jack con su mejor acento de pirata. Riendo, alargó los brazos
estirándose a través del jardín y atrapó a el felino desprevenido, que comenzó a luchar muy vigorosamente.
"¡No dejes que se escape JACKIE! ¿¡O acaso quieres caminar por la plancha!?" gritaba Isaac.

Jack apretaba el gato, sus brazos crecieron y se extendieron como anacondas envolviendo alrededor del felino
mientras luchaba por su vida. Los brazos de Jack seguían apretando a el animal, comenzando a vaciar el aire de sus
pulmones. Cuando los ojos del animal, comenzaron a hincharse en las órbitas y se oyó un fuerte ruido, Jack soltó
rápidamente a la criatura, viendo como la cáscara sin vida peluda, dio un vuelco contra el suelo. Hubo un silencio
cuando los dos observaron el cadáver retorcido, y destrozado del gato. El silencio se rompió finalmente por una
estruendosa carcajada... proveniente de Isaac...

"¡JAJAJAJA, Wow! Supongo que los gatos realmente no tienen nueve vidas ¡JAJAJAJA!" Isaac exclamó con
los ojos casi llorosos de la risa.
Laughing Jack se echó a reír también, pero concienzudamente le dice a su amigo: "Je je. Sí... ¿Pero no te vas a
meter en problemas si tu madre encuentra el gato de su vecino muerto en el jardín?" La risa de Isaac se calmó
15
rápidamente. "¡Oh, no ! ¡Tienes razón! Ummm... sólo... ¿tíralo de nuevo en el patio del vecino?" Isaac entró en
pánico, mientras agarraba una pala cercana, y recogió el cadáver destrozado del gato, lanzándolo sobre la cerca de
nuevo en el jardín de los vecinos. Rápidamente volvieron a entrar a la habitación de Isaac.

Alrededor de una hora más tarde, ocurrió. La madre de Isaac gritaba su nombre desde abajo. Ni Jack ni Isaac
dijeron una palabra, Isaac se arrastró por las escaleras solo, para enfrentar el horrible destino que "se merecía".
Jack pudo oír mucho griterío proveniente de abajo, pero no podía entender lo que decían. Después de unos treinta
minutos, Isaac, con los ojos llorosos subió las escaleras de nuevo hacia la habitación.
"¿Qué pasó?", preguntó Jack con nerviosismo.
Isaac sólo actuó en el suelo mientras hablaba, "Yo... Traté de decirle que fuiste tú el que lesionó a el gato... Pero
ella no me creyó... Ella dice que tu no eres real..."
Jack frunció el ceño sabiendo que esto era su culpa. Isaac uso su manga para secarse las lágrimas. "Voy a ser
enviado a un internado... Me voy esta noche... y no puedes venir conmigo..."
Laughing Jack se puso en shock: "¿¡Qué!? ¿¡No puedo ir?! ¿A dónde voy a ir?".

Isaac señaló a la caja de colores hermosos, de donde su amigo había salido.

"¿Volver allí? Pero no voy a poder salir hasta que..." Jack hizo una pausa.
Isaac levantó la cabeza, cuando vio a su único amigo con lágrimas corriendo por su rostro dijo: "Jack... ¡te prometo
que voy a volver tan pronto como pueda!" Jack miró la caja, luego miró a Isaac. "Y voy a estar aquí esperando
por ti niño." Jack sonrió mientras una lágrima corrió por su mejilla. Se acercó a la caja y con una nube de humo fue
succionado de nuevo, no podía ser libre hasta que alguien abriera la caja.

Esa noche, Isaac fue enviado a un internado. Por primera vez, Laughing Jack sintió lo que era estar solo. Aún
estando atrapado en su caja, Jack fue capaz de ver las cosas que sucedían a su alrededor, por lo que cada día
esperaba a su amigo, y cada día la habitación se llenaba de polvo, y más polvo. Laughing Jack iba a ser el mejor
amigo de Isaac para toda la vida, y ahora esperaba día tras día, mes tras mes, para reunirse con su amigo especial.
Los padres de Isaac aún vivían en la casa, pero nunca subieron a la habitación de Isaac. Las únicas veces que
hicieron conocer su presencia, fue cuando Jack los escucho pelear. Así la vida de Jack se convirtió en soledad y
desilusión. Con los años, los colores, una vez brillantes de Jack comenzaron a desvanecerse en un monocromático
de vacío negro y blanco rígido. Atrapado solo... eternamente, y sin esperanza.

13 años pasaron hasta que una noche, el padre de Isaac vino a casa borracho, y tuvo una discusión con su esposa
como de costumbre. Las cosas se intensificaron a la violencia física, una vez más, sin embargo esta vez, ella no se
salvó. El padre de Isaac había golpeado a su esposa de una forma tan sanguinolenta que la mató. El padre de Isaac
fue sentenciado a la horca al día siguiente. Con sus padres muertos, esto significaba que Isaac, que ahora tenía 20
años de edad, heredó la casa vieja y polvorienta donde había pasado la mitad de su infancia. Laughing Jack se
sorprendió cuando escuchó los pasos de su viejo amigo subir las escaleras hasta la habitación por primera vez en
13 años, sin embargo, no fue el reencuentro que Jack estaba esperando.

Isaac parecía... diferente. No sólo era más grande, sino que también parecía poseer una mirada sombría y extraña.
Ya no era el chico joven, dulce y curioso con el que Jack se había reunido hace tantos años. Jack estaba esperando
a que Isaac lo liberara de la prisión en la que había estado durante trece años, pero la caja de Jack seguía allí sin
que nadie la tocara y pasaba desapercibida en un estante en la esquina de la habitación con todos los demás
objetos de adorno no deseados, y polvorientos. Isaac se había olvidado por completo de su viejo amigo. Esto hizo
que Laughing Jack sintiera... nada. Él era un hueco, 13 años de espera y decepción dejaron al vacío payaso blanco
y negro de la tristeza y la auto compasión. Jack se quedó en su caja, sin colores ni emociones.

Al día siguiente, Isaac se fue a trabajar a su puesto de trabajo como tapicero, haciendo reparaciones de mobiliario
para la buena gente de Londres, mientras Jack esperó en cautiverio. Horas más tarde, Isaac llego borracho a su
casa, y tropezó por las escaleras a su habitación, pero esta vez él tenía a alguien con él. Era una amiga de Isaac
que había conocido en el bar esa misma tarde. Ella era hermosa, con una larga cabellera rubia, ojos azul zafiro, y
una sonrisa que podría hacer que los corazones se derritieran. Esto llamó la atención de Laughing Jack, que se
sintió atraído por la invitada de Isaac: "¿Quién es esta? ¿Un nuevo amigo? ¿Por qué Isaac necesita nuevos
amigos? Pensé que YO era el único amigo de Isaac." Jack pensó para sí mismo desde dentro de su encierro

16
infernal. Isaac y su amiga se sentaron en la cama y conversaron acerca de la vida en Londres. Isaac hizo una broma
sobre el tiempo y los dos se rieron.
Riendo entre dientes, con Jack envidioso por el nuevo amigo de Isaac. Isaac y la chica se miraron profundamente a
los ojos, y lentamente se inclinaron para poder besarse, cerrando los labios en un giro apasionado. Jack se quedó
perplejo por esta extraña muestra de afecto, porque el nunca había visto a alguien besarse antes. Cuando el beso
se hizo más intenso, Isaac pasó la mano por el muslo suave de la chica y su vestido. Isaac era persistente, sin
embargo, la chica sintió gran descontento con los avances sexuales de Isaac y empujó a Isaac antes de darle un
golpe muy duro en su cara. Los ojos de Isaac se tornaron oscuros mientras miraba a la mujer, su pasión, el alcohol
la tornó en ira. El corazón de la mujer se aceleró cuando vio la cara de Isaac hervir de rabia.
"¡PUTA ESTÚPIDA!" gritó Isaac mientras le dio un golpe en la cara a la chica. Los ojos de Laughing Jack se
abrieron cuando fue testigo de las largas franjas de líquido rojo que brotaban de la nariz de la chica: "¿Qué juego es
éste?", pensó. Isaac agarró con firmeza la muñeca de la chica con una mano, mientras le arrancaba las bragas con
la otra.

La chica aterrorizada intentó defenderse, pero Isaac era más fuerte que ella. Él acariciaba sus pechos mientras
agarraba su pelo salvajemente, y forzaba su lengua por la garganta de la joven chica que sollozaba, quien respondió
mordiendo tan duro como pudo en la lengua de Isaac. Jack miraba con los ojos muy abiertos y curiosos como su
viejo amigo lanzó su nueva compañera de juegos y se aferró a su boca, ya llena de sangre caliente. La muchacha
asustada se cayó de la cama y se dejó caer en el suelo mientras ella se escabullía hacia la salida. Isaac
rápidamente se tambaleó hacia delante y fue capaz de agarrar a la chica por la parte de atrás de su vestido.

Isaac rápidamente agarró un candelabro que tenía en la mesita de noche al lado de él, y con todas sus fuerzas
golpeó en la parte posterior de la cabeza de la joven, que se abrió como una sandía madura. La sangre espesa
salpico por toda la habitación. El cuerpo de la niña se convulsionó en el suelo durante varios segundos antes de
quedar completamente inmóvil. Había sangre por todas partes, algunas gotas incluso llegaron a la caja de Jack,
quien estaba disfrutando mucho el espectáculo. Por primera vez en 13 años largos, una sonrisa comenzó a dibujarse
a través la cara de Laughing Jack, y una risa repentina escapó de sus labios fríos, luego otra, y otra, hasta que Jack
estaba cacareando y aullando de risa desde el interior de su caja sellada .

"¡Que juego tan maravillosamente fascinante!" Pensó Jack mientras observaba al pelo rubio dorado de la chica
inmóvil, mezclado con la sangre.
A medida que la adrenalina comenzó a bajar, Isaac se dio cuenta de que tenía que deshacerse del cuerpo. Tomó el
cuerpo sin vida de la chica, y lo dejó caer sobre la cama. El salió de la habitación, cerrando la puerta detrás de él y
asegurándola antes de salir de la casa. Regresó casi en un día entero después y volvió a entrar en la habitación
trayendo con él un cubo de basura de metal y su bolsa de herramientas de tapicería que usaba en el trabajo. Luego
quitó todo lo de la mesa de madera en la pared opuesta a la puerta, y arrastró a la cama con el cuerpo
ensangrentado al medio de la habitación. Esto no sólo dio a Isaac espacio para trabajar, sino que también le dio a
Laughing Jack un asiento de primera fila a todo el espectáculo. Jack miró con una gran sonrisa inmarcesible como
Isaac interpretó su nuevo juego con el cadáver manchado. Una vez que Isaac tenia todo listo, se puso a trabajar.

Primero, él descargó el contenido de su gran bolsa de herramientas en la mesa de trabajo a sus espaldas. Un
surtido de cuchillos, martillos, alicates y otras herramientas fueron presentados a Jack. Su primera selección fue un
cuchillo curvo, que él utilizó para pelar cuidadosamente el cuerpo. Luego la piel se colocó en bastidores para que se
estirara y se convirtió en cuero. Una vez que puso todo en su lugar, Isaac entonces utilizó una sierra de mano para
cerrar los brazos, las piernas y la cabeza, perturbando el hogar de varias familias de gusanos en el proceso.
Después de llenar el cubo de la basura con cloro y otros productos químicos viles, sumergió las extremidades hasta
que la carne fue despojada de los huesos. Isaac sacó los huesos del cadáver, y los colocó en la mesa de trabajo, a
continuación, en la oscuridad de la noche se llevó el bote de basura fuera y tiró los restos podridos en las
alcantarillas de Londres para ser barridos en el puerto.

Para los próximos 3 días Laughing Jack observó con asombro cómo Isaac había elaborado la anatomía humana en
un sillón grotesco. Las patas traseras del sillón se hicieron con los fémures, mientras que las patas de las sillas
delanteras se hicieron con las tibias y los huesos de los pies. Un marco de madera fue utilizado para la base y el
respaldo de la silla, sin embargo el borde del respaldo fue labrado utilizando la columna vertebral. Los huesos del
brazo se utilizaron como los brazos de la silla, y se fijaron en su lugar con algunas costillas.
17
La carne correosa ahora fue cosida en el asiento y el respaldo de la silla, y el pelo rubio de oro estaba trenzado en
un adorno de la base. Encima de este sillón del infierno se colocó el cráneo que perteneció a la chica que tenía el
pelo rubio dorado, los ojos de zafiro, y la sonrisa que podría derretir corazones. Isaac estaba muy satisfecho con su
trabajo, y Laughing Jack también estaba impresionado por la profunda creatividad de su antiguo compañero de
juegos. Después de esa noche Isaac nunca tocó otra gota de alcohol de nuevo, porque ahora tenía sed de sangre.

En las semanas siguientes, Isaac hizo varias mejoras a su pequeño taller de los horrores. Quitó el colchón de la
cama y puso una fila de gruesos tablones de madera en su lugar, luego ató seguros para los brazos y piernas a la
parte inferior y los lados. Esto significa que él sería capaz de entretener a sus invitados por un período más largo, sin
que ellos traten cualquier intento de escape. Isaac necesitaba sólo una última cosa antes de planear otra fiesta
grotesca. Trabajó en ella durante una semana consecutiva, tallando en madera a mano.

Después le aplicó una capa de pintura blanca, la creación de Isaac estaba completa. Era una máscara de madera
que se asemeja a una que se podría usar en un baile de máscaras veneciano. Tenía el ceño fruncido y una larga
nariz como la de los trolls, y le permitía infundir miedo en los corazones de sus queridos invitados. Con su nueva
cara completa, la sala se transformó en un sangriento nido de asesinatos. Llegó la hora de que Isaac Lee
Grossman traiga a casa un nuevo compañero de juegos.

Esa noche, Laughing Jack vio como el enmascarado Isaac Grossman subía por las escaleras, llevando consigo un
gran saco de arpillera con su más reciente invitado retorciéndose dentro. Dejó la bolsa sobre la cama de tortura, y
sacó a un joven atado, amordazado, y muy asustado, probablemente de sólo 5 o 6 años de edad. Isaac se encargó
rápidamente del chico y lo mantuvo presionado mientras sujetaba sus manos y pies a la bancada de acero. Las
lágrimas corrían sin cesar por la cara del niño indefenso, cuando Isaac colocó sus herramientas en la mesa de
trabajo. Isaac volvió blandiendo un par de alicates oxidados, y sin perder tiempo deslizaba la mandíbula inferior de
las pinzas bajo la uña del muchacho en su dedo índice derecho y la sujeta firmemente. Los ojos del niño se
estremecieron cuando comenzó a murmurar a través de su mordaza, le decía a Isaac que lo dejara ir. Isaac sonrió
mientras lentamente inclinó la pinza hacia atrás, dolorosamente le arrancó la primera uña.
El niño gritó a través de su mordaza mientras se retorcía de dolor en los tablones de madera, con el dedo del pie
comenzando a chorrear sangre. Isaac entonces pasó al dedo medio del chico, sujetando firmemente la uña con los
alicates oxidados. Una vez más, él tiró de los alicates, pero esta vez sólo le arrancó la mitad de la uña. El niño gritó
de dolor mientras sus dedos se crisparon y dispararon sangre. Sujetó la otra mitad de la uña forzosamente, Isaac le
dio otro tirón. Le arrancó la uña, pero no sin tener una buena cantidad de piel con ella. Incluso para Isaac era un
poco doloroso a la vista, a diferencia de Laughing Jack, quien estaba cacareando de alegría por la acción
perturbadora mientras observaba desde el interior de su caja polvorienta.

Isaac volvió a la mesa de trabajo y cambió las pinzas por un gran martillo de hierro. Luego se dirigió a los pies de la
cama de tortura, donde con una mano sostenía la pierna izquierda del muchacho. Levantó el martillo sobre su
cabeza mientras el chico lloró y pidió clemencia a través de su mordaza sucia, entonces con todas sus fuerzas Isaac
golpeó con el martillo la rótula desnuda del muchacho, rompiendo el hueso en la grava con un fuerte crujido. El niño
se convulsionó del dolor con gritos estridentes amortiguados través de la mordaza atada firmemente a su cara.

Al comprobar que el niño tenía problemas por el dolor intenso, Isaac colocó el martillo debajo de la cama de madera,
y regresó una vez más a la mesa de trabajo en la que se equipó con un largo cuchillo afilado. Sin demora comenzó a
tallar las palabras "Gusano inútil" en el pecho tembloroso del niño. Cuando terminó, el muchacho estaba apenas
consciente. Isaac se arrodilló y le susurró al oído del niño: "Esto es lo que pasa con los niños que hacen caras
desagradables a la gente..."

Los ojos del niño se llenaron de lágrimas por última vez, cuando Isaac comenzó a sacar la piel de la cara del niño,
pero para sorpresa de Isaac el niño todavía estaba vivo. El niño mutilado simplemente se quedó mirando Isaac con
sus grandes ojos redondos, que llenó el corazón negro de Isaac de rabia y de odio.

"¡¡AÚN SIN ROSTRO SIGUES SIENDO FEO!!" Isaac gritó mientras agarro el martillo desde el pie de la cama y
comenzó a golpear el cráneo del pobre chico. Lo golpeó una y otra vez, hasta que no quedó más que una sangrienta
masa de carne, derramando sangre espesa y trozos de materia cerebral. Desde el otro lado de la habitación
Laughing Jack observó con regocijo el gran final, que había estado a la altura de sus expectativas maravillosamente.

18
El siguiente invitado de Isaac era una anciana ciega a quien había invitado a tomar un té. Le llevó casi 5 minutos
darse cuenta de que la silla en la que estaba sentada fue diseñada mediante restos humanos, y otros 6 minutos para
encontrar las escaleras, sólo para caer rodando por ellas agitándose y gritando como una loca. Isaac decidió poner
fin a la cruel broma allí con una sencilla puñalada a través de su cuenca ocular.

Después, él trajo a una niña a quien forzó a comer vidrios rotos antes de utilizar su estómago como un saco de
boxeo. Pasaban las semanas más y más almas desafortunadas encontraron su fin en el desván de Isaac Grossman,
y su personalidad se hizo cada vez más oscura y sádica. Jack lo siguió mientras se pudría dentro de su caja
polvorienta... Hasta una noche muy fría de Diciembre.

Los clavos oxidados que sostenían la plataforma de cosas olvidadas finalmente cedieron y todas las cosas se
desplomaron al suelo. Isaac oyó el ruido sordo desde la planta baja, y decidió subir al desván a investigar. Caminó a
través del pasillo manchando de sangre hacia la plataforma caída. Isaac dejó de lado algunas de las baratijas que se
rompieron en el accidente, cuando por fin se encontró con la caja sorpresa de su infancia. Isaac apenas reconocía la
caja andrajosa, antigua como él. La recogió, la sopló, e hizo volar parte del polvo. Entonces, porque era nostálgico,
decidió agarrar la caja oxidada y comenzó a girar la manivela.

Sonó una versión horrible de la canción "Pop Goes The Weasel", canción que resonó la caja vieja y desgastada, y
cuando la canción llegó a su clímax, Isaac canto el verso final. La parte superior de la caja se abrió, pero no pasó
nada, estaba vacía. Isaac esperó un rato, y luego tiró la caja vieja a la basura con el resto de los adornos rotos. El
desastre fue limpiado, e Isaac fue a abrir la puerta para ir a la planta baja, pero estaba atorada. Isaac tiró con fuerza
, pero la puerta no se movía. Justo entonces, Isaac oyó una voz ronca horrible, llamarlo detrás de él.

"IsSsaAac..." Un frío recorrió la espalda de Isaac, y los pelos de la nuca se le pusieron de punta, se dio la vuelta
lentamente... Laughing Jack estaba completamente blanco y negro, su pelo negro le caía sobre los hombros,
desmarañado, con dientes afilados y decorados con su sonrisa torcida, y demencial. Y sus brazos colgaban como un
muñeco de trapo con sus grotescamente largos dedos casi raspando el piso.
Luego, con una escalofriante voz rasposa de payaso diabólico dijo: "¡Qué bueno es ser finalmente libre!... ¿Me
extrañaste, Isaac?" Isaac estaba paralizado de miedo, "P-Pero pensé que no eras real..." Isaac tartamudeó. Jack
respondió con una carcajada horrible.
"Jajajaja Oh, soy muy real... De hecho, yo he estado esperando mucho tiempo para que este día llegara, y
finalmente llegó... Ahora podré jugar con mi mejor amigo para toda la vida..."

Antes de que Isaac pudiera responder, los largos brazos de Jack se extendieron a lo largo de la habitación,
agarrándolo de sus piernas.

El payaso comenzó a acercarlo más, arrastrándolo a su propia cama de tortura de madera con las uñas de Isaac
raspando el suelo. Haciendo caso omiso de las restricciones, Jack cogió rápidamente 4 clavos de hierro largos, de
tres pulgadas, de la mesa de trabajo y los clavó directamente a través de las manos y los pies de Isaac, clavándolo
en la cama de tortura. Isaac gruñó de dolor y le gritó a su captor.

"¡AAAH! ¡JÓDETE! ¡¡¡MALDITO PAYASO!!!"

Laughing Jack simplemente rió entre dientes mientras sostenía fuertemente la cabeza de Isaac diciendo:

"¡Si no puedes decir algo bueno, entonces no digas nada en absoluto!"

Los largos dedos torcidos de Jack, llegaron a la boca de Isaac, sujetándole firmemente la lengua, y la extendió hacia
fuera. El payaso luego estiró la lengua de Isaac hacia atrás, y tomó un largo cuchillo afilado de la mesa y lentamente
comenzó a cortar la carne de la lengua de Isaac. Una vez que le sacó la lengua, la boca de Isaac comenzó a
desbordarse de sangre. Jack empujó un pequeño tubo de metal cilíndrico a través de la garganta de Isaac para
actuar como un agujero de respiración temporal. En este punto, Isaac sentía un gran dolor, y tenía los ojos bien
cerrados para no ver los horrores repugnantes que se estaban realizando en su cuerpo.

"¡Vamos!, ¡no es divertido si no miras!" Dijo Laughing Jack bromeando, pero Isaac mantuvo los ojos fuertemente
cerrados. Laughing Jack suspiró, "Haz lo que quieras." Jack entonces sostuvo con fuerza uno de los ojos de Isaac
19
para tratar de abrirlo a la fuerza. Estiró de nuevo su gran brazo y sacó unos largos ganchos de pesca de la mesa de
trabajo. Lentamente Jack empujó la punta del anzuelo a través del párpado superior derecho a través de la parte
inferior de la ceja y por la parte superior, de forma permanente, clavándolo. Luego sacó un segundo gancho
empujando a través del párpado inferior y lo fijó a la mejilla. Jack repitió el proceso para el otro ojo, y en poco tiempo
una serie de ganchos de metal afilados aseguraron a Isaac para que no se pierda nada de la acción. Laughing Jack
entonces tomó el mismo cuchillo que había utilizado para cortarle la lengua a Isaac, y comenzó a centrarse en la
eliminación de los labios de Isaac. Jack cortó cuidadosamente. Dos largas tiras de carne con los labios superior e
inferior de Isaac, haciendo que sus dientes y encías quedaran completamente expuestos.
"Hmm... parece que alguien no ha usado el hilo dental con regularidad..." Laughing Jack se rió entre dientes
mientras se estiró hacia atrás y agarró el martillo. Isaac trató de murmurar una especie de ruego por misericordia, sin
embargo, sólo gemidos salían de su garganta. Jack levantó el martillo en el aire y con una sonrisa retorcida golpeó a
Isaac, emitiendo un fuerte crujido, el martillo de hierro rompió los dientes de Isaac como si fueran arcilla frágil. Jack
dejó caer el martillo y comenzó a aullar de risa mientras desgarraba la camisa de Isaac. Tomando el cuchillo más
afilado, Jack cortó el pecho de Isaac hasta el fondo, más allá del estómago. Isaac gimió de dolor.
Primero Jack empezó a sacar los intestinos de Isaac de la misma manera que un mago saca una serie de telas de
colores de su bolsillo. Luego, después, cortó una pequeña porción de los intestinos, Jack presionó un extremo con
sus labios negros y fríos y comenzó a soplar aire al interior del órgano. Una vez inflado, lo retorció dándole la forma
de un perro, y con una risa en voz alta exclamó: "¡Puedo hacer jirafas también!" Isaac permaneció inmóvil de el
dolor y la conmoción, al ver como el payaso colocaba suavemente el animal de globo macabro junto a su cabeza.

Para su siguiente truco, Laughing Jack metió su brazo profundamente en la cavidad del estómago abierto de Isaac y
arrancó uno de sus riñones. Sosteniéndolo en la mano, Jack miro a su amigo cautivo, y se encogió de hombros
diciendo:

"Los riñones no son realmente lo mío..." Tras tirar el órgano, Laughing Jack se dio cuenta de que Isaac estaba
empezando a morir. "¿Te sientes cansado ya? ¡Por qué estamos casi en la gran final!" Laughing Jack exclamó
mientras metía la mano en la manga y sacó una inyección de adrenalina con una aguja larga. "¡Esto debería
animarte!" gritó Jack mientras clavaba la inyección en la retina de Isaac e inyectó el líquido en la cuenca de su ojo
derecho. Jack movió y giró la aguja más adentro en el globo ocular de su antiguo compañero de juegos, porque
Isaac se tambaleó hacia atrás al sentir una aguja afilada que raspaba la parte posterior de la cuenca de su ojo. Con
una risa siniestra, Jack tiró de la aguja, arrancando del globo ocular hacia fuera con esta. El ojo derecho de Isaac
ahora colgaba fuera de su órbita por el pedúnculo ocular, y quedó colgado a un lado de su cara.
Jack sonrió: "Bueno, ahora que tengo tu atención..." El payaso luego tomó su largo dedo índice e hizo un agujero
en el estómago de Isaac. Jack inclinó su cabeza, hacia la cavidad torácica abierta de Isaac, y dejó la boca bien
abierta. En cuestión de segundos un torrente de cucarachas inmundas salieron de la boca de Jack, y se arrastraron
por el esófago del payaso, derramándose en el pecho abierto de Isaac. Cada cucaracha se arrastraba y hacia su
camino en la pequeña abertura del estómago de Isaac. A medida que su estómago se hinchaba por los insectos, las
cucarachas empezaron a escurrirse hasta su garganta, apretando la salida de su boca y la cavidad nasal.

Isaac estaba a centímetros de la muerte cuando Jack se arrodilló junto a él, y le habló al oído: "Has sido un niño
explosivo, pero parece que nuestro tiempo juntos ya ha terminado. No hay necesidad de llorar, porque tengo
la intención de difundir mi amistad a todos los niños solitarios del mundo." Y con esto dicho, Laughing Jack
metió su mano en el pecho de Isaac y arrancó su corazón, que seguía latiendo.
A medida que su vida se acababa en esa fría cama de madera, la vida de Isaac pasó ante sus ojos. Vio a su madre,
su padre, el internado, sus víctimas, y el último pensamiento que revolotea por su mente, era aquella Navidad muy
especial donde se despertó para encontrar aquella caja de madera bellamente colorida, y tallada a mano que dentro
contenía a su primer mejor amigo...

Hay rumores de que cuando la policía finalmente encontró el cadáver podrido de Isaac Grossman
deteriorado severamente, a pesar de que su rostro había sido golpeado y roto en pedazos... Él casi parecía ...
Feliz...

20
BLOODY PAINTER

Este es Helen, 14 años. Sus ojeras lo hacen ver como si nunca durmiera. No le importa mucho su desordenado
cabello negro, ya que no le interesa poner demasiado esfuerzo en arreglarse; es innecesario.
Se sienta al final de la clase, junto a la ventana; él siempre se encuentra tranquilamente dibujando, es todo para el.
No le gusta socializar con las personas, haciendo de él una persona solitaria. Hay una persona siendo empujada a la
salida de la escuela. Ese es Tom, quién siempre es victima de bullying, no porque alguna vez haya hecho algo, es
solo que a la gente le desagrada. Estas cosas pasan a menudo, y Helen sabe de ello. A pesar de que se siente mal
por Tom, no quiere interferir, ya que sería bastante molesto.

Durante el receso, Judy dijo que había perdido su reloj, así que comenzó a buscarlo. Helen no quería ayudarla, ya
que no es de su interés. De repente, alguien vio algo que brillaba de la mochila de Helen.

-¿Qué es esto?- dijo Ban, mientras metía sus manos en la mochila, y sacaba un reloj adornado con diamantes
falsos. Helen estaba muy sorprendido, ya que no tenía idea de como habría llegado eso ahí.

-¡Ah! ¡Ese es mi reloj!- Judy recibió el reloj de Ban, mientras veía la situación. Ambos observaron a Helen con un
mirada extraña.

-No fui yo- dijo Helen, mientras seguía dibujando sin levantar la cabeza.

-Sí, claro- Judy dejó el salón junto con Ban.

21
El día siguiente, como era usual, Helen estaba en su mesa dibujando. Él noto que la atmósfera a su alrededor no se
sentía bien; las personas susurraban cosas sobre él, incluso algunos comenzaron a llamarlo “ladrón”. Decidió no
excusarse, ya que sabe que es inútil hacerlo. A medida que el tiempo pasaba, Helen se convirtió en el nuevo blanco
de bullying; todo lo que él hacía ahora era exagerado. No le gustaba, pero no se resistía. Mantenía ese sentimiento
en su corazón, en silencio. Hasta que un día, Ban tomo el cuaderno con los infinitos dibujos de Helen sin terminar.

-Siempre haciendo estas cosas sin sentido- dijo Ban mientras agarraba unas cuantas páginas de su cuaderno y las
rompía en muchos pedazos, esperando a ver la reacción de Helen.

En estos momentos, los sentimientos que había estado ocultando, estallaron. Golpeó a Ban en el rostro, y comenzó
la pelea. Helen no era tan fuerte, por lo que fue golpeado. Otros estudiantes miraban la pelea, sin detenerlo, incluso
había gente que le pisoteaba la cara y el estomago. Después de que sonará el timbre, todos se detuvieron y fueron
a sentarse antes de que llegará la profesora. Helen regresó a su asiento, como si nada hubiese pasado. La
profesora llegó un poco tarde.

-Oh por di... Otis Helen ¿Qué te pasó?.-

Helen tenía algunos golpes y cortes visibles así que su profesora lo notó apenas entro. Todos lo miraban con esa
expresión asesina como diciendo, esperamos una buena respuesta.

-Me caí de las escaleras profesora - dijo Helen, mientras desaparecían las miradas - solo fue eso

Luego de llegar a casa después de la escuela, sus padres al ver sus condiciones decidieron preguntarle qué le había
pasado, y respondió lo mismo. La chaqueta que estaba usando tenía algunos cortes parecidos a los de su cara. Sus
padres le creyeron sin dudar. Usualmente cuando los padres de Helen le preguntaban por la escuela, él siempre
decía que estaba bien. Incluso mentía diciendo que tenía muchos amigos, viviendo feliz cada día. Helen se negaba
a decirle la verdad a sus padres, no quería hacer que se preocuparan por él. Unos meses más tarde, Helen ya se
había acostumbrado a los comentarios negativos sobre él, a ser golpeado y humillado, ya se volvió algo normal, ya
no le afectaban esas cosas. ¿Quién lo culpó en primer lugar? ¿Por qué querrían hacerlo el culpable de eso? Eso ya
no importa. Nada más importa ahora.

"¡Hola! ¿Estás ahí?"


Helen recibió un mensaje de un usuario desconocido en Facebook.
"¿Quién eres?"
"Soy Tom, tu compañero de clase"

Tom nunca había hablado con él antes, así que se sorprendido.

"¿Qué sucede?" escribió Helen.

"Um… ¿Te encuentras bien?" le pregunto Tom

"No es de tu importancia" Concluyó Helen a la pregunta de Tom.

Tom chateó con él por un rato, hasta que le dijo:

"Mira, se que no te sientes bien. Estas en la misma situación que yo. Realmente quiero ayudarte, pero no puedo…
Lo lamento".

Después de eso, Tom y Helen se hablaron durante un tiempo, Helen se sintió mejor contando todo el dolor y los
sentimientos que tenía. Él incluso bromeaba con Tom usando “:)” para mostrar su felicidad. Esa era la primera vez
que Helen había hecho un amigo.

Era una cálida tarde.


"Ven a verme en el techo después de que termina el primer periodo. Necesitamos hablar. No preguntes." envió Tom
la noche anterior.
22
Siguiendo sus instrucciones, Helen fue a ver a Tom en el techo, saludando y caminando hacía él dijjo:
-¡Hey Tom! ¿Qué pasa amigo?-
-Um...tengo que decirte algo….algo importante..- dijo Tom con una expresión seria-¿Recuerdas el incidente del reloj
robado?-
¿Cómo Helen iba a olvidarlo? Ese fue el inicio de su sufrimiento. Helen asiente.
-¡Yo fui el culpable!- Tom miró hacía abajo, asustado de mirar a Helen.
-¡¿QUÉ?!- Helen estaba sorprendido
-Robe el reloj de Judy y te culpe
-¿Por qué hiciste eso?
-Con un nuevo blanco de victima, mi vida es mucho mejor- Tom sonrió.
Es verdad que cuando todo el mundo decidió hacerle bullying a Helen, no volvieron a molestar a Tom. Era como un
juguete abandonado. Para él era totalmente perfecto. Siempre y cuando estuviera en silencio sería capaz de vivir su
vida escolar sano y salvo. Tuvo éxito, el plan era increíblemente perfecto. Helen agarró el cuello de su camisa, y,
después le dio un pequeño empujón, que hizo que terminara cerca del borde. Tom se resbaló y se cayó del techo.
Helen lo agarró al instante, y trató de tirar hacia arriba, pero no tenía la suficiente fuerza.
-Lo siento mucho, Helen-
Tom cayó. Helen cerró sus ojos, asustado de mirar lo que iba a suceder. No podía imaginar lo que sucedería
después de caer de 6 pisos de altura... La policía llegó, interrogaron a Helen. Estaba demasiado horrorizado por el
accidente, y no pudo decir ni una palabra. Una vez más, Helen se convertía en el tema de discusión de los
estudiantes. Algunos pensaban que Helen había empujado a Tom desde el techo, pero la mayoría pensaban que
Tom se suicidó, y Helen no pudo salvarlo, ya que lo habían visto agarrando la mano de Tom antes de caer.
Esa noche Helen se encontraba en su cuarto llorando, temblando, no podía sacar la culpa de su interior. Necesitaba
calmarse y de repente un pensamiento se cruzó en su mente: "No es mi culpa que Tom haya muerto. ¡Merecía
morir!". Esto hizo que se sintiera mucho mejor, y que su culpabilidad se desvaneciera. Helen sonrió espeluznante
mente, "Tom ha tenido su castigo...Supongo que es hora de que los otros tengan el suyo, ¿no?" Su llanto se
convirtió en una sonrisa cubierta por la oscuridad y su sed de venganza.
Los compañeros de Helen decidieron tener una fiesta de Halloween, pero no para celebrar Halloween, sólo para
tener una fiesta. Como siempre, Helen había sido invitado a la fiesta. La noche antes de Halloween, Judy y Maggie
se estaban enviando mensajes en Facebook. Ambas vivían en la residencia de estudiantes de la escuela, y la
habitación de Judy estaba al lado de la de Maggie.
09:03 – Judy: quien vendrá mañana a la fiesta? Estoy muy emocionada :D
09:03 – Maggie: la mayoría de nuestra clase estará ahí. Pero le mande muchos mensajes a Ban, y todos los
mensajes que envié fueron leídos, pero nunca me contesta, que demonios esta mal con él?
09:04 – Judy: probablemente este trabajando, supongo
09:06 – Maggie: algo raro esta pasando… he estado escuchando pasos viniendo de mi puerta por un largo
tiempo… creo que alguien esta caminando alrededor del dormitorio
09:06 – Maggie: espera, iré a ver
Usando la mirilla de la puerta Maggie vio algo inusual...
09:07 – Maggie: ¡oh dios! Hay un tipo afuera con una mascara y una chaqueta azul, tiene un cuchillo y ESTA
CON SANGRE—
09:07 – Maggie: mie*da! Esta golpeando mi puerta —
09:08 – Maggie: oh dios oh dios oh dios!!!
09:08 – Judy: cálmate! y encuentra un arma o algo!—
09:08 – Judy: solo protégete!
09:09 – Maggie: giró el pomo de la puerta, que bueno que puse llave...—
09:09 – Maggie: tengo miedo!
09:09 – Judy
09:09 – Maggie: que debo hacer?!
09:09 – Judy: Maggie, escucha
09:09 – Maggie: SÁLVAME!
09:09 – Judy: Maggie, cálmate—
09:09 – Judy: Maggie—
09:10 – Judy: Maggie?

23
Se muestra que el mensaje ha sido leído, pero Judy simplemente no obtiene respuesta de Maggie. De repente oye
el sonido de su puerta abriéndose. Se da vuelta, y siente un terrible dolor en el estómago. Una persona con sangre
en su mascara y una chaqueta azul irrumpió en su habitación y la apuñalo.

Esa noche, todos los estudiantes que se encontraban en la residencia fueron asesinados. Nadie sabe cómo lo hizo.
El asesino usó la sangre de las víctimas para pintar en las paredes de la residencia de estudiantes ":)" .Muchos de
los cadáveres estaban mutilados y triturados, posiblemente para conseguir más "pigmentos". Helen Otis, el culpable,
sigue desaparecido. Sin embargo, en el chat donde Judy y Maggie estuvieron hablando, un mensaje fue escrito,
respondiendo al primer mensaje de Judy a las 09:03:

11:15 – Judy: no estés emocionada por mañana :) porque no habrá un mañana”.

24
HOMICIDA LIU

Todo comenzó una noche, la noche que Jeffrey Woods enloqueció completamente y asesinó a sus padres y a su
querido hermano Liu Woods. Jeff dejó de ser el muchacho que era y se convirtió en un monstruo sin alma con el
puro deseo de matar. Pero, ¿en serio había muerto su hermano Liu después de recibir múltiples cortes y puñaladas?

No, sobreviví al ataque de mi hermano, a duras penas como un vil gusano, desangrándome a cada centímetro que
recorría, sentía cómo estallaba mi corazón por el esfuerzo, sin embargo, resistí deseoso de vivir, por ir hacia Jeff.
Luego todo se volvió negro y me desmayé.

Pasó mucho tiempo para que despertara. Estaba en un cuarto bastante iluminado, lleno de tubos y medicinas.
Apenas sentía mi cuerpo, no podía hablar, no podía comer, me alimentaban a través de un tubo, respiraba por
medio de un pulmón artificial, apenas podía distinguir quién era yo; solo escuché a un doctor hablando con una
enfermera: "Este paciente puede que no sobreviva, necesita muchos trasplantes, su pulmón izquierdo colapsó, su
corazón está muy delicado y sus riñones están fallando. Es casi imposible que sobreviva". Esas palabras me
quitaron toda la esperanza de sobrevivir a lo que me había pasado.

Llegó el día en el que me harían los trasplantes que necesitaba, y, como no lograba hablar aún y estaba bastante
sedado, no pude expresar mi alegría en ese momento, así que la guardé para cuando me recuperara. La enfermera
me saludó: “Hola, soy Susan, te deseo la mejor de las suertes. Eres muy fuerte, apenas sobreviviste a ese intento de
asesinato. Yo personalmente me quise encargar de ti, porque admiro mucho tu fortaleza. Me gustaría que cuando
salgas del hospital salgamos alguna vez”. Besó mi mejilla y se sonrojó. No podía negar que era una muchacha muy
hermosa, pero no sabía si saldría vivo de esto.

Llegó la hora, la hora donde se decidiría si viviría o moriría. El doctor me dijo que como era un joven muy fuerte y
había sobrevivido mucho tiempo, era probable que sobreviviera. Me puso la mascarilla y me dormí, ¿pero por qué
25
aún sentía lo que me hacían? En ese momento, sentí cómo una hoja fría me perforaba un lado del corazón. El
primer corte fue lo más doloroso, luego algo abrió mi piel, el dolor era más intenso a cada segundo que pasaba,
cada corte era más doloroso que el anterior, pero lo más doloroso fue cuando comenzaron a cortar mi corazón y a
sacarlo de mi cuerpo. Ese momento fue solo el comienzo de mi tortura, horas de un dolor insoportable, cada corte,
cada parte de mi que reemplazaban, cada sutura, todo el dolor que recorría mi cuerpo destruía la poca cordura que
me quedaba, hasta quedar hecha añicos.

Pasaron días en esa cama sin poder moverme, sin poder hablar, solo escuchando la voz de aquella enfermera.
Susan estaba conmigo día y noche, hablándome, diciéndome que resistiera, que me quería con vida, que quería
conocerme en verdad y que esperaba hablar conmigo y escuchar mi voz. Pasó una semana y ella venía más a
menudo, venía y me cantaba, me leía, pero un día, antes de poder mover mi cuerpo, me susurró: “Ya quiero que
despiertes”. Me besó al terminar esa frase y empecé a sentir mi cuerpo, logré abrir mis ojos y pude admirarla. Ella
lloraba de alegría al verme despertar. “Hola Susan, soy Liu Woods”. Ella quedó atónita. “Enserio, eres… ¿El
hermano de Jeff Woods? Él estuvo aquí hace un tiempo. Quedó muy mal, me enteré de que se volvió loco y mató a
su familia, ¿cómo es que sobreviviste, Liu? También supe que hace 3 días raptó a una joven y la quemó viva con
lejía y gasolina, luego escapó de allí y no se le ha vuelto a ver, pero en la casa, o lo que queda de ella, no se
encontraron más que 2 cadáveres. Se rumorea que la joven sobrevivió, pero no supieron qué pasó con el cadáver
del hermano de Jeff.

Algunos decían que se lo llevó, pero en el cuarto donde dormía su hermano, o sea, donde dormías, encontraron
escrito con sangre en la pared “Ve a dormir” y en el baño escrito “Sonríe” en el espejo. Lamento mucho la muerte de
tus padres, en serio, y, como no creo que quieras volver a ese lugar, ¿querrías quedarte a dormir en mi casa por un
tiempo? Bueno, cuando salgas de recuperación, vivo sola desde que mis padres murieron en un accidente de auto,
así que me sobra un cuarto”.
Acepté la oferta de Susan: “Cuando salga de aquí, quiero llevarte a cenar, a donde quieras, solo necesito que un día
me acompañes a mi viejo hogar a buscar mi ropa, aunque no creo que siga allí”. Aceptó con un poco de miedo. Los
siguientes días ella me visitaba todos los días, reíamos juntos, éramos muy cercanos, casi parecía que éramos
pareja, así que le pregunté si quería ser mi novia. Ella dijo: “Sí, Liu, quiero ser tu novia, yo te lo iba a preguntar, pero
no sabía cómo hacerlo”. Se me acercó y nos besamos. Estaba tan feliz, las cosas se estaban arreglando para mí,
tenía una persona que sería mi nueva familia.

Salí del hospital, era mi primer día fuera de ahí, Susan me recibió con los brazos abiertos, como era de día, le dije
que fuéramos por mi ropa a mi nuevo hogar, dijo “Sí, pero hay que llevar algo para protegernos por si tu hermano
sigue rondando por ahí”. Le contesté “De acuerdo, un par de cuchillos de carnicero, una jeringa, un poco de
calmantes, también un poco de equipo de emergencias por si necesitamos suturar, a ti o a mí, en caso de que un
vidrio pueda causar una herida que necesite sutura, una botella de agua recién sacada de la nevera y una lata de
gaseosa por si tenemos sed”.

Fuimos a su casa y recogimos todo lo necesario, además de una maleta para llevar mis cosas. Ya en mi antiguo
hogar, sujetó con fuerza mi brazo, le dije “No temas, todo estará bien.” La besé para que se calmara, abrí la puerta
de una patada, estaba cerrada, entramos y vimos que las paredes de mi casa estaban llenas de sangre, la sangre
de mis padres, encontramos en la cocina un galón de gasolina, un frasco vacío de lejía y unos cerillos, seguimos
recorriendo la casa, vimos el baño, que estaba con la puerta abierta, y vimos el espejo, con la palabra “Sonríe”
escrita con sangre, el lavabo y el suelo llenos de sangre, toda mi casa estaba igual, llena de sangre. Al final,
entramos al lado, estaba el cuarto de mis padres y encontramos las sábanas llenas de sangre, toda mi casa estaba
igual, llena de sangre.

Finalmente, entramos al lugar más perturbador de mi casa: Mi cuarto. La frase “Ve a dormir” estaba escrita con
sangre en la pared, tal como dijo Susan. Busqué en mi ropero mis pertenencias, mi laptop, mi mp3, mi celular y mi
ropa, solo lo que no estaba lleno de sangre, cuando volteé para ver mi cuarto, recordé la perturbadora cara de Jeff
viéndome con esos ojos llenos de locura sosteniendo un cuchillo ensangrentado en la mano diciéndome “Shh, solo
ve a dormir”. Ese recuerdo fue lo que terminó de romper la poca cordura que me quedaba, le dije a Susan que me
diera la mochila donde llevábamos las cosas, fui al baño, tomé el cuchillo y dije “Jeff… te veré en el maldito infierno
cuando los dos hayamos muerto.”

26
Terminada la frase, le hablé a Susan, la besé, le dije “Adiós amor mío, pero, quiero ver a Jeff para vengarme de lo
que me hizo, vengarme porque mató a mis padres y de que casi me mata a mí, te amo Susan, pero, no te podré ver
después de que muera, lamento mucho esto”. Estuve a punto de matarla, pero, no, no lo hice, no me convertiría en
Jeff, le rogué a Susan que me perdonara, que venir a mi viejo hogar me había afectado, me dijo “Esta bien, Liu, yo te
amo, y sé que estar tan cerca de la muerte puede afectar, vámonos a casa”. Me besó, pedimos un taxi y nos fuimos
a casa, y me metí a bañar.

Mientras me bañaba, recordé todos los momentos que pasé con mi familia, con mamá, con papá, mi infancia con
Jeff, las travesuras que hicimos, todo lo que pasamos juntos, la alegría de tener a mi familia cerca, comencé a llorar,
pero, el sonido del agua cayendo ahogaba mis sollozos, así que, no importaba.

La primera noche fue algo traumatizante para mí. En mis pesadillas podía ver a Jeff, como era antes del accidente,
siendo asesinado brutalmente por el nuevo Jeff, luego éste me volteó a ver y me digo “Liu, ¿por qué no te fuiste a
dormir como te lo pedí?” Desperté con un susto terrible, Susan fe corriendo a mi cuarto, me dijo, “¿Qué pasó Liu?
¿Estás bien?” le respondí “Sí… Solo fue una pesadilla, no te preocupes”.

Al día siguiente, al despertar, sentí un aroma que hacía mucho que no disfrutaba, era el olor a hot-cakes recién
hechos, fui al comedor y ahí estaba Susan, preparando el desayuno, tal y como mamá lo hacía, me dio los buenos
días, se sentó y empezamos a comer, ¿cuánto tiempo había pasado desde que no comía hot-cakes hechos con
amor?, no lo sé, pero, el sabor… era tan agradable, me sentía amado una vez más, pero, la felicidad no duraría
mucho.

Me estaba volviendo loco, cada día que pasaba, Susan me recordaba más a mamá, así que, tomé un cuchillo de la
cocina, corrí hacia su cuarto, se estaba arreglando para salir conmigo a una cita, se veía tan hermosa, no me sentí
capaz de matarla, no así, no sin que supiera cuánto la amaba, no sin que sintiera amor por última vez en su vida…
Yo la amaba, pero, me estaba volviendo cada vez más loco, cada vez me costaba más vivir sin clavarle un cuchillo
en el corazón, no podía estar así, no quería matarla, pero, no tenía otra opción, o eso creía.

Ya a la salida del cine, caminábamos a casa, le decía “Te amo Susan, pero, hay algo dentro de mí que me… me
está matando y no sé si pueda soportarlo más, así que, quiero que sepas que yo te amaré pase lo que pase”.
Terminada la frase, un malviviente salió de un callejón y tomó el bolso de Susan, la hirió, me enfurecí, quería matarlo
por herir a Susan, lo perseguí con el cuchillo que había guardado en mi chaqueta, lo arrastré al callejón donde robó
el bolso de mi amada, en frente de ella lo obligué a disculparse, quería tomar su vida, pero antes, le dije a Susan
“Corre, no quiero que veas esto, te amo Susan, y no quiero que veas esto”. Corrió lo más lejos que pudo, cuando
supe que era el momento, le dije al tipo “No te perdonaré por haber lastimado a Susan, ella es tan buena, tan pura,
herirla es un crimen muy grave, por eso, tomaré tu vida, y solo así pagaras por herirla”.

Levanté mi cuchillo y comencé a apuñalarlo repetidas veces, solo podía ver sufrimiento en la mirada de ese hombre,
pero, aún así seguí apuñalándolo hasta que murió de múltiples apuñaladas, limpié la sangre de mi chaqueta de
cuero, la cual estaba bastante manchada. Aún así el día era de temperatura cálida, por lo que pude quitarme la
chaqueta y doblarla, haciendo que solo se viera la parte interior, así que, en definitiva, ocultar mi homicidio hacia el
ladrón. Salí del callejón y me encontré con Susan en la cafetería de la esquina tomando un expreso bien cargado.

Ella estaba bien, la gerente había vendado su herida, se lo agradecí ocultando mi chaqueta. Llevé a Susan a casa
con mucho cuidado, la llevé a su cuarto y la recosté en su cama, le dije “Susan, no quería que esto te pasara, pero,
me he dado cuenta de una cosa, no dejaré que nadie te haga daño, a partir de hoy, nunca volverás a tener miedo,
nadie te volverá a lastimar, lo juro”. La besé y me fui a dar una ducha, me di cuenta de que no podía matarla, ella era
todo lo que tenía en el mundo, era la única persona que amaba, pero, había disfrutado matar aquel tipo del callejón,
pero, no podía matar a cualquier persona, decidí solo matar a las personas que lastimaran a los inocentes, personas
que hicieran el mal a la gente que me importara, y sobre todo, que mataría a cualquier persona que tratara de dañar
a Susan.

27
Pasaron los días, cada vez mataba a más personas, pero, era molesto tener un pantalón lleno de sangre, así que,
compré un pantalón de cuero, luego, matar fue menos molesto, una chaqueta y un pantalón, ambos de cuero, los
cuales fácilmente podía limpiar con gasolina blanca que había comprado hacía tiempo.

Matar se volvió un hábito cada vez más aburrido, matar con simples puñaladas era muy repetitivo, así que, fui
empleando modos más retorcidos cada vez, a algunos los quemaba vivos con gasolina, a otros los operaba sin
anestesia, a otros los obligaba a comerse sus propias tripas, a otros los cortaba en pedazos y se los echaba a los
perros callejeros, pero, nunca maté a ningún inocente, solo mataba criminales y malvivientes, eso me hacía un
héroe, ¿no? Acabar con los criminales haciéndolos sufrir de las formas más horribles, cada día usaba formas más
horribles y retorcidas para matar, llegaba a casa, limpiaba mi ropa de la sangre de los criminales y pasaba tiempo de
calidad con Susan, hasta que un día, la invité a cenar, como yo tenía un empleo de cocinero en un restaurante,
ganaba bastante dinero, pero, la llevé a un lugar muy bello, a la luz de las velas, le dije “Susan, ya llevamos casi un
año juntos, sé que eres el amor de mi vida, pues no sabría cómo podría vivir sin ti, quiero proponerte algo”. Me puse
de rodillas y saqué una sortija de mi saco “¿Quieres casarte conmigo?” Se emocionó, y con lágrimas en los ojos me
dijo “Sí, Liu, quiero casarme contigo”. Salimos del restaurante, no me había sentido tan feliz en toda mi vida, pero, un
maldito llegó con un arma y le disparó.

Me llené de ira y odio, pero, no podía dejar a Susan allí sola, desangrándose, muriendo, corrí y la lleve al hospital
más cercano, los doctores me dijeron “Está muy delicada, quizá no despierte, hay que esperar lo peor”. Fui a buscar
al maldito que le había disparado, nunca olvidaría su rostro, pasé horas recorriendo las calles hasta que lo encontré,
lo golpeé hasta dejarlo casi inconsciente, y le dije, “Me darás tu vida, maldito bastardo, por tu culpa mi Susan está al
borde de la muerte, y pagarás con tu vida”. Murió en el momento que terminé la frase.

Llegué al hospital, el médico me dijo que Susan ya había despertado, que fuera a hablar con ella, y eso hice. Ya en
el cuarto de Susan, ella me vio y dijo “¿Liu? ¿Eres tú? Me alegro de que vinieras, espero poder resistir así como tu
lograste resistir a lo que te pasó, te amo Liu, no quiero morir, pero si lo hago, no quiero que te suicides, te amo
demasiado como para que mueras por mí, yo sé lo que hacías, yo se que matas criminales, y aunque no sea un
método muy noble, la misión que tienes lo es, no dejes de hacer lo que haces Liu.”

Pasó una hora en la que estuvimos hablando, en la que le dije todo lo que le tenía que decir, no quería perderla, no
quería perder a la única persona que me quedaba en este mundo. El doctor entró y dijo “Necesitamos operarla,
señor Woods, se recuperará”. Se la llevaron a la sala de operaciones, fueron 3 horas que parecían eternas, quería
sacarme los ojos de la desesperación, pero la esperanza de que Susan sobreviviera era lo me mantenía en pie.
Terminó la operación, el doctor que se encargó de todo me dijo “La operación fue todo un éxito, ella está estable,
mañana despertará y en 2 semanas podrá salir del hospital”. Esas palabras me emocionaron tanto, me sentía tan
tranquilo por saber que Susan estaría bien.

Estuve en su cuarto todo el día esperando a que despertara, despertó y me dijo “¿Quién eres y dónde están mis
padres?” esas palabras me llenaron de tristeza, Susan me había olvidado, pero, tenía que hacer que me recordara,
cuando se recuperó, la llevé al hospital donde nos conocimos, dijo “¿Eres tú, Liu? Como has cambiado”. Ella
comenzó a recordar, la llevé a mi vieja casa, y recordó lo que pasamos allí, seguí llevándola a todos los lugares
significativos para nosotros en el transcurso de la semana, hasta que llegamos al restaurante en el que le propuse
matrimonio, ella lo recordó todo, me abrazó y me dijo “Liu, ahora lo recuerdo todo, gracias por estar conmigo hasta
que me recuperara”. Y le respondí, “Tú hiciste lo mismo por mí, te debo muchas cosas, Susan.” La besé, pero
cuando nos separamos, empezó a convulsionar, me asusté mucho y la lleve al hospital, no podía seguir así, pero, yo
la amaba.

No la dejaría sola cuando me necesitaba, me quedé allí a esperar las noticias del médico, y éste me dijo “Lo lamento
señor, pero su novia ha muerto”. Esa frase me llenó de tristeza y odio, tomé al doctor y le troné el cuello, ya no había
razón para contenerme, comencé a matar a todos en el hospital, hombres, mujeres, niños y enfermos, los maté a
todos, no podía soportar que ellos vivieran y mi Susan no, ella no podía morir así, no dejaría que eso pasara, pero,
era inevitable, mi ropa estaba llena de sangre de inocentes, mis manos estaban llenas de sangre y mi mirada había
cambiado, así que decidí hacer algo, fui por un bisturí y empecé a cortar un corazón en mi pecho, con la iniciales de

28
Susan y su hora de muerte, nuestro aniversario y la fecha en la que nos conocimos, luego, fui a por una aguja y un
hilo y me cosí los extremos de mis labios formando una sonrisa, para que nadie viera como sufro por dentro.

Cuando terminé, fui a casa, tomé mi ropa de cuero y las cosas con las que acostumbraba a matar, y salí de allí, para
no volver jamás, ahora, vivo matando a todas las personas que sean felices, pero, cuando muera, no podre verla,
pero, matar me consuela, si me ves, corre y no muestres tu felicidad, o morirás de una forma muy despiadada y
retorcida, que no podrán distinguir tu cuerpo de cómo era antes de encontrarte conmigo, Homicidal Liu, el
sobreviviente de Jeff The Killer.

29
BEN DROWNED

PERO..... en verdad No Se exactamente si es correcto que cuente estos hechos aquí. Mi nombre es John Coiffure y
conocí a Ben, estuve bastante tiempo investigando sobre él y sobre lo irreales que parecían los hechos que
ocurrieron poco después de su muerte.
Empezaré desde el principio, tanto Ben como yo teníamos la misma edad y actualmente yo tengo 24 años mientras
que él murió a los 13. Nos conocimos a los 10 años, llegamos a ser muy amigos y aunque él era muy tímido nos
unía el hecho de que a ambos nos gustaba jugar a videojuegos, entre ellos el juego de The Legend of Zelda:
Majora's Mask; este juego es un pilar importante en la historia de Ben, ya que en algún momento llegó a
comentarme algo respecto al juego que me hizo sentir muy incomodo.

Ben y yo íbamos a la misma clase, él era un chico rubio, de estatura baja y cuerpo delgado, más bien debilucho, su
cabello le rozaba los hombros y sus ojos eran color celeste. No se llevaba bien con la gente debido a su timidez,
según todos él era el raro de la clase y tres chicos siempre estaban metiéndose con él, le pegaban o se reían de él a
la salida del colegio constantemente.

Algunas veces llegaron a propasarse dejándole heridas más graves que el par de moretones que solían hacerle de
costumbre. Sus nombres eran: Jacke, un chico delgado pero con músculos marcados, Alex, un niño rellenito que
30
tenía bastante fuerza y por último estaba Matt, se podría decir que él era el líder de la pandilla, el que más
molestaba a Ben y le asestaba más golpes. Matt era un año mayor, a diferencia de todos nosotros y estaba en
nuestra clase porque había repetido curso; era un niño más alto que Ben, mucho más fuerte y con una cicatriz en el
labio de la que solía alardear. Solía decir que esa cicatriz era de una vez que había peleado con un chico de 15 años
y que mientras el chico solo le dejó aquella cicatriz, él le había destrozado la cara a puñetazos.
Jacke y Alex eran los únicos que le creían a Matt, aunque nadie se atrevía a decirle que aquello era mentira.

Ben estaba harto de la situación que vivía en el colegio, además, su ambiente en casa tampoco era del todo bueno,
era hijo de una mujer viuda, ya que su padre murió un el invierno anterior debido a un accidente automovilístico.
Aquel día nevó y Ben quería acompañar a su padre a recoger unas cosas del trabajo pero su padre no le dejó
porque tenía que ir a clase; poco después le informaron de que el coche de su padre patinó en la nieve hasta
estrellarse con un muro.

El padre de Ben falleció con el cráneo aplastado contra el volante. Antes de su muerte, antes de que su padre se
fuera, Ben había estado hablando con él sobre los matones del colegio. Después de calmarlo, diciendo que iría al
colegio a quejarse, le dijo a Ben: Seguro que esto tiene un final maravilloso, ¿no es así? Le dio un beso en la frente
y rió, sin saber que esas serían sus últimas palabras. Su madre se quedó sola con él y sus dos hermanos pequeños
y normalmente no estaba en casa porque tenía que trabajar. Los hermanos pequeños de Ben solían quedarse en la
escuela hasta las 6 o 7 de la tarde, ya que la escuela hacía también la función de guardería (siempre y cuando los
padres pagaran un cargo adicional). Ben, sin embargo ya era lo suficientemente mayor como para ir a casa y saber
cuidar de sí mismo, así que él nunca se quedaba allí.

El día que Ben logró ahorrar el dinero suficiente para comprarse el juego de Majora’s Mask, fue uno de los pocos
que verdaderamente le vi sonreír. Recuerdo perfectamente que íbamos al colegio, de repente sacó el cartucho de su
bolsillo y con una gran sonrisa me dijo:

"¡Eh John, ¡Mira lo que he conseguido!

Me puso muy contento que sonriera, porque nunca lo había visto hacerlo de forma sincera. Honestamente por un
momento lo envidié, en mi familia nunca hemos andado sobrados de dinero, así que no pude comprármelo, pero
Ben era muy noble y me dijo que me lo dejaría cuando pudiera.

Durante esos días, Ben solo me hablaba del juego. Más de una vez me dijo:

“Ojalá yo fuera como Link, pudiera ser valiente y enfrentarme a esos matones” En estos casos me incomodaba y no
sabía qué decirle.

Todos en clase sabíamos lo de los matones, yo quería ayudarle pero no era lo suficientemente fuerte como para
enfrentarme a alguien como Matt.

Unos dos días después, antes de entrar a clase estuve con Ben mientras jugaba Majora’s Mask, recuerdo
perfectamente que guardó la partida y dejó de jugar justo en la parte del Chico Calavera. Ese mismo día después del
descanso entre clase y clase, Ben vino a buscarme desesperadamente porque su juego había desaparecido de su
mochila y estaba seguro de que había sido Matt o alguno de sus secuaces. Incluso me dijo que vio a Matt rebuscar
en su mochila durante el descanso, acompañé a Ben a la sala de profesores para buscar a nuestra profesora y
estuve con él mientras le contaba lo que pasó; después fuimos a buscar a Matt y entramos en una clase vacía. La
profesora revisó la mochila de Matt y sacó un cartucho del cual había sido removida la pegatina del juego.

A decir verdad, no sé que hacía yo con ellos, pero a Ben le reconfortaba que su mejor amigo estuviera con él en ese
momento. La profesora preguntó a Ben si estaba seguro de que había sido Matt, y él dijo varias veces "¡Yo lo vi!"
Escuché algo que sinceramente hubiera preferido no escuchar: cuando Ben dijo que había visto a Matt, este
murmuró: “Ten por seguro que no volverás a verlo”. Lo dijo con una voz tan fría e insensible que se me heló la
sangre por un segundo.

31
Vi de reojo a la profesora y a Ben y me dio la impresión de que no lo habían escuchado, la profesora le devolvió el
juego a Ben y tanto ella como Matt se fueron a hablar con el director del colegio. Al parecer, iban a ponerle un
castigo pero Ben seguía preocupado de que a la salida de clase le dieran su habitual paliza y le volvieran a robar el
juego, así que me pidió que lo guardara y que esa tarde llevara el juego a su casa, que me llamaría al llegar para
decirme una hora exacta, yo sin problema alguno acepté.

Al salir de clase, él tomó el camino habitual para ir a su hogar y yo fui a la mía como normalmente hacía.
Normalmente Ben llegaba a casa antes que yo, ya que yo tenía que pasar por el trabajo de mi padre para que me
diera las llaves de casa y la paliza que los tres matones propinaban a Ben todos los días no duraba más de 10
minutos, me puse a esperar su llamada justo al abrir la puerta, pero no pasó nada.

Pasaron diez minutos, veinte, treinta y no llamaba. Me preocupé, ¿Qué tal si lo dejaron inconsciente? como ya dije
antes, a veces se propasaban. Pero nunca pude imaginar lo que realmente sucedía.

Salí corriendo hacia la casa de Ben con el juego en la mano pero justo antes de llegar, en la orilla del lago que había
frente a su casa oí unas risas, algunos gemidos y alguno que otro grito; Ben vivía en las afueras y nadie solía pasar
por allí, así que me extrañó escuchar todo eso.

Busqué con la mirada y entonces, lo vi: aquellos matones estaban pateando algo, algo que estaba tirado en el suelo.
Después de forzar un poco la vista, vi que era Ben, quien emitía gemidos de dolor y se cubría el rostro con las
manos. El miedo me paralizó y me quedé quieto, observando. Vi que Matt cogió un palo de madera y le gritó a Ben:

“Decías que me viste coger tu asqueroso juego, ¿no? Tranquilo, ¡No vas a volver a ver nada!” Entonces alzó la
mano e hincó el palo en el ojo derecho de Ben.

No pude contener el gemido y unas lágrimas salieron de mis ojos mientras Matt sacaba el palo y lo clavaba con
fuerza en el otro ojo de Ben. Caí de rodillas sobre el asfalto y vomité mientras oía los gritos de desesperación de
Ben. Quería acercarme, pero la sensación de miedo que me recorría el cuerpo me lo impedía. Levanté la vista, me
sequé las lágrimas y al ver con más claridad, noté que todo estaba lleno de sangre. La ropa de Matt y el rostro de
Ben estaban manchados de una sustancia roja que salía a borbotones por sus ojos. Y entonces lo oí. A pesar de
estar a 10 metros de ellos, oí a Ben decir con una voz entrecortada:

“No debiste hacer eso”.

Matt cogió del cuello a Ben y lo levantó, arrojándolo al lago y poniéndose de cuclillas a su lado.

Tomándolo del cuello, hundió su cabeza en el agua. Matt reía al observar a un Ben sin ojos, con los pulmones
llenándose de agua, vi como su vida se escapaba por entre sus manos, pero en el rostro de Jacke y Alex había una
expresión de terror. Les oí decir:

“¡Detente! ¡Es suficiente!”. Trataron de detenerle pero Matt les propinó una patada a ambos y estos se alejaron de él.

Al poco tiempo de haberlo tenido bajo el agua, diciéndole todo tipo de insultos, Matt le soltó. Se puso de pie y lo
miró. Jacke y Alex se habían ido, y temiendo que lo viera alguien, salió corriendo. Imagino que iría a su casa, ya que
una vez desaparecido de la escena morbosa, no presté atención a donde se dirigía. Me acerqué a Ben con las
piernas temblorosas, llorando, y lo zarandeé. Le abracé con toda la fuerza que pude y lloré. No sé cuanto tiempo
estuve allí, llorando mientras lo abrazaba, solo recuerdo que en todo momento traté de no soltar el juego de Majora’s
Mask que aún tenía en la mano. Estuve allí, sollozando hasta que llegó la policía. Una vecina de Ben los había
llamado al oír esos gritos en el lago. Y esto no pude perdonármelo jamás, no ayudar a mi mejor amigo es algo con lo
que todavía tengo pesadillas.

Me llevaron a casa, y una vez estuve allí, me duché y, mientras me limpiaba la sangre de Ben, me di cuenta de que
el cartucho de Zelda también estaba manchado. Se me escaparon unas cuantas lágrimas y lo limpié con un trapo.
Debajo de la gruesa capa de sangre, había una palabra escrita: “Majora”. Esa palabra no estaba esa mañana,

32
cuando Ben me dio el juego, pero lo pasé por alto, pues no era lo que más me preocupaba en ese momento. Dejé el
juego en la mesita de noche, ya que quería guardar el último recuerdo que tenía de él.

Al día siguiente desperté y el juego no estaba en mi mesita, y aunque lo busqué no lo encontré por ningún lado, ni
mis padres lo habían visto. No quería pensar mucho en el tema, pero me deprimí más de lo que ya estaba por no
guardar ningún recuerdo suyo. Los próximos días estuve todo el día dando declaraciones a la policía sobre lo que
ocurrió, lo que no me permitió distraerme sobre Ben y todo lo sucedido.

A Matt no le metieron en la cárcel por ser menor de edad, pero planeaban internarlo en un centro de menores. Tres
días después, me enteré de su muerte. Decían que los ojos se le salieron de sus cuencas mientras jugaba a un
videojuego, The Legend Of Zelda: Majora’s Mask y en la televisión salió una foto del cartucho. ¡Una foto del mismo
cartucho que desapareció de mi mesita días antes, con las mismas letras escritas en él! Ese cartucho desapareció
después del crimen. Al oír esto, un sentimiento de terror y de curiosidad me recorrió el cuerpo.

Entonces fue cuando empecé a investigar sobre Ben, y descubrí que tanto Alex como Jacke habían muerto de forma
similar a Matt. Supe que Ben estaba detrás de todo esto, que tenía ansias de venganza, pero esperaba que fuera a
parar tras matar a sus verdugos, aunque para mi desgracia, me equivoqué: hubo más muertes, gente que no tenía
nada que ver con lo sucedido. Luego de un tiempo, la masacre se redujo, ya no se cometían con tanta frecuencia.
Logré hablar con gente y me describieron cómo era el juego y en qué se diferenciaba del original. A Ben le gustaba
jugar con sus mentes, quería que sintieran miedo. Alguien que tenía el juego, me dejó jugar una vez. Miré la partida
vacía. Si no hubiera pasado aquello, mi nombre estaría ahí, y debajo el de Ben. Conforme pasaban las pantallas, me
di cuenta de que en una parte decía:

“Encontraste un final terrible, ¿No es así?” Eso me recordó a esa historia que me contó con lágrimas en los ojos, la
de la charla antes de que su padre haya salido de casa para encontrarse con un destino mortal.

Hubo una parte, que según me dijeron, no les salió a los demás jugadores. Solo a mí. Cuando Link se quemaba,
abajo aparecía un diálogo, donde ponía:

“Aunque no me ayudaras, no te guardo rencor, amigo” Esta parte hizo que se me empaparan los ojos.

Quizás ustedes piensen que mis reacciones eran demasiado sentimentales, pero no es fácil ver a tu mejor amigo
morir cuando solo tienes 12 años.

Las muertes causadas por el juego habían llegado a su fin pero de vez en cuando, Ben cometía algún crimen a
través de él. El anciano que vendió el juego al usuario que lo compró, era el abuelo de un niño ahora muerto. El niño
dejó el juego en su casa, y quería irse de allí para no recordarlo más, además de vender alguna que otra de sus
pertenencias. Logré hablar con el anciano, siguiendo la pista del juego.

No puedo dejar de pensar qué podría haberle salvado, podríamos haber seguido jugando juntos, pero no. A pesar
de eso, después de 12 años, me he dado cuenta de que no puedo seguir viviendo con esta culpa que llevo en la
espalda, me está comiendo por dentro. Pero antes de precipitarme a la muerte y acabar con esto de una vez por
todas, sentía la necesidad de aclarar la historia de Ben, el amigo al que nunca pude salvar.

El amigo del que pude evitar su muerte, pero no lo hice por miedo.

33
JANE THE KILLER

Su verdadero nombre es Jane Arkensaw, ella era una chica muy hermosa; piel clara de ojos verdes, era vecina
de Jeffrey Woods y prima de una niña llamada Vanessa Kennedy, pero esa es otra historia. Bueno, Jane vigilaba a
Jeff de vez en cuando por la ventana, un día llegaba tarde a la escuela y vio a Randy y su pandilla amenazando a
Jeff y a su hermano Liu, ella sabía perfectamente que Randy era un matón que hacía pagar a todo el mundo una
pequeña comisión de dinero en efectivo o el bocadillo del desayuno, a cambio de que no se ganaran una paliza...
Luego miró unos segundos más tarde y vio como Randy le robaba la cartera a Liu, y empujaba a Jeff contra el suelo,
entonces él se levantó, y Jane se dijo para sí misma: “¡Quédate sentada, no seas estúpida!”. Entonces vio cómo Jeff
se abalanzó contra Randy, luego cogió a Troy, que se tiró al suelo gritando de dolor, era preocupante ver la pelea de
Jeff, parecía que se estaba divirtiendo demasiado, y al ver la cara de Liu, Jane intuyó que Jeff no hacía este tipo de
cosas normalmente. Lo siguiente que se oyó fue el sonido de las sirenas de un coche de policía, y el padre de Jane,
que era policía, salió de su casa y se montó en el coche.
Cuando los padres de Jane la llevaron a la escuela le dijeron muy claramente que no querían que hablara con Jeff,
así que no lo volvió a ver hasta que terminó el día. Cuando lo vio salir de allí, notó como si Jeff estuviera fingiendo
estar feliz, para que la gente no sospechara del delito que había cometido, pero en realidad estaba mostrando una
sonrisa un poco sádica, “era como la sonrisa de un loco” pensó Jane. Al día siguiente Jane se asomó por la ventana
y vio un coche de policía frente a la casa de Jeff, pensó que se llevarían a Jeff por lo que había hecho, pero se

34
equivocó, en lugar de él, arrestaron a Liu, luego vio llorando a Jeff por lo ocurrido, y a partir de ahí la gente empezó a
soltar muchos rumores sucios sobre Liu.

Días después, el hijo de la vecina de al lado de la casa de Jeff montó una fiesta de cumpleaños, y Jane vio cómo
Jeff jugaba con los niños a las pistolitas, hasta que aparecieron Randy y sus amigos saltando la valla, a continuación
Randy se abalanzó hacia Jeff y lo derribó, luego Troy y Jake sacaron unas pistolas y entonces Jane supo que iban a
matarlo, entonces Jane decidió llamar a la policía. Luego escuchó unos disparos, y cuando volvió a mirar, vio las
llamas de un fuego y escuchó gritos, entonces cogió un extintor y se dirigió hacia la casa, pero cuando llegó vio a
Jeff sentado en las escaleras ardiendo en llamas, con grandes partes de piel rosa y chamuscada, entonces Jane se
desmayó.

Cuando Jane despertó, se encontraba en el hospital, entonces le dijo la enfermera que ya se podía ir a su casa, pero
Jane quiso preguntar cómo se encontraba Jeff, y la enfermera le dijo que no podía dejarla verlo ni aunque se tratara
de su novia. A lo que ella respondió con voz temblorosa: “¡Él no es mi novio!” Así que salió del cuarto, vio a los
padres de Jeff, que le dieron las gracias por haber intentado salvar a su hijo, le dijeron que Jeff estaba con vendas,
que se las quitarían en unos días, y que cuando llegara el momento la avisarían. Luego ella contó todo lo que vio
cuando Jeff se peleó con la pandilla de Randy, y los padres de Jeff dijeron que si eso era cierto dentro de unos días
soltarían a Liu.

Días después los compañeros de clase de Jane empezaron a meterse con ella porque se pensaban que estaba
enamorada de Jeff, y entonces apareció Liu y le avisó de que al día siguiente le quitarían las vendas a Jeff. A la
mañana siguiente, Jane vio el coche de los padres de Jeff aparcado en su casa y se puso muy contenta, pero
cuando vio salir a Jeff del coche se le cambió la cara del susto; el pelo castaño claro de Jeff ahora de color negro y
largo hasta los hombros, su piel era blanca y con la misma sonrisa sádica, que vio el mismo día que se peleó con
Randy. Luego vio cómo Jeff la miraba fijamente con esos ojos tan abiertos y aterradores, entonces Jane entró en su
casa y los padres le preguntaron qué le pasaba, a lo que Jane respondió con un chillido, y se desmayó.

Cuando Jane despertó ya había oscurecido y sus padres no estaban en casa, se levantó de la cama con un vestido
negro, bajó las escaleras y vio que la luz de la cocina estaba encendida, había una nota sobre la mesa que decía:
“¿No vienes a cenar? Tus amigos están aquí". Después de leer esto, Jane empezó a temblar y vio por la ventana
que las luces de la casa de Jeff estaban encendidas, entonces vio a Jeff apoyado en la ventana de su casa, mirando
a Jane con un cuchillo en la mano golpeando la ventana y sonriendo. Jane asustada cogió un cuchillo y salió
corriendo de la casa, fue a la puerta de la casa de Jeff, intentó girar el pomo de la puerta, pero no podía porque
empezó a temblar y se le aceleró el pulso, entonces cerró los ojos y la abrió, pero tenía miedo de abrir los ojos,
hasta que escuchó a alguien decir: ¡Lo has conseguido, me alegro amiga mía! Luego Jane echó un grito, y vio que
sus ojos eran grandes y no parpadeaban, y su sonrisa era de color rojo, él había tallado una sonrisa en su cara, su
ropa estaba llena de sangre y al ver eso Jane se desmayó.

Cuando despertó, estaba en una mesa de comedor, su cuchillo había desaparecido y cuando miró hacia arriba vio a
gente sentada alrededor de la mesa, se trataba de sus padres, los padres de Jeff, y sus amigos, todos estaban
muertos con una sonrisa tallada en sus caras y enormes cavidades rojas en el pecho, trató de gritar, pero estaba
amordazada y atada a una silla. Lágrimas de sangre salían de sus ojos, “Mira quien ha despertado finalmente”, Jane
miró a su lado y vio que Jeff estaba allí. Ella trató de chillar, pero Jeff estaba detrás suyo, acercándole un cuchillo a
la garganta y le dijo: “Cállate, cállate, que a los amigos no se les debe chillar, seguro que estás enfadada porque no
te ves tan bella como ellos, pero no te preocupes que pronto haré que luzcas bella también. ¿Qué me dices?”
Entonces le cortó la mordaza con el cuchillo, Jane se la escupió y le miró fijamente a los ojos y le susurró: “Vete a la
mierda…”

Entonces Jeff le dijo: “Me pareces más divertida de lo que pensaba, los amigos se hacen favores entre ellos, ¿no?,
bueno pues te voy a hacer un favor.” Jeff salió, y mientras tanto Jane se puso a llorar por sus padres y amigos que
hace apenas unas horas estaban vivos, luego Jeff regresó, “No llores”, dijo. Jane vio que sostenía una jarra de lejía y
un bidón de gasolina, entonces le vertió la lejía y la gasolina, “Tranquila ya he llamado a los bomberos”, le dijo Jeff, y
luego le echó fuego. Tan pronto el fuego entró en contacto con Jane, ardió en inmensas llamas y Jeff se largó
diciendo: “¡Nos vemos mi querida amiga! Espero que quedes tan hermosa como yo".

35
Cuando Jane despertó estaba de nuevo en el hospital y la cabeza le daba tumbos, luego vino una enfermera y le
dijo que lo sentía, pero su familia había muerto en el incendio, entonces Jane empezó a llorar, y la enfermera le dijo
que no llorara o sino su cuerpo no iba a poder respirar, minutos después se quedó dormida. Al volver a despertar,
vio que ya no tenía vendas y que había varios ramos de flores, entonces la enfermera la dijo que la durmieron
durante dos semanas para que su cuerpo pudiera recuperarse, “Dame un espejo”, dijo Jane. Al verse, tiró el espejo
al suelo del horror, al ver su horrible y quemado rostro, luego llegó un paquete del mismo destinatario que el de las
flores, la enfermera salió un momento de la habitación.
Jane se dispuso a ver el interior del paquete, había una máscara blanca con negro alrededor del hueco de los ojos y
una sonrisa femenina pintada de negro, con un encaje negro que podía cubrirle los ojos, y una peluca de color negro
con hermosos rizos, junto con todas estas cosas había un ramo de rosas negras y un cuchillo de cocina afilado,
junto a la máscara también había una nota: "Jane siento que no hallas quedado tan hermosa, pero ésto te servirá
para taparte el rostro mientras te recuperas, y te dejaste el cuchillo en mi casa, así que pensé en
devolvértelo". Luego de leer ésto, salió del hospital, se puso la peluca y se fue al cementerio, vio las tumbas de sus
padres y se puso a llorar por última vez, luego se puso la máscara y agarró el cuchillo con todas sus fuerzas.
Desde ese día Jane juró venganza, y cada vez que el sol se pone, va en busca de Jeff para encontrarlo y matarlo…
La imagen que ronda de Jane dice lo contrario a la de Jeff, "No te vayas a dormir", para así evitar que Jeff consiga
hacerles lo mismo a más víctimas inocentes.

36
TAILS DOLL

Todo sucedió en Los Ángeles, California. Allí, cierta noche la madre de un niño subió a buscar a su hijo para la cena.
Como de costumbre, el niño estaba jugando con la Sega Saturn en su habitación. La puerta estaba cerrada y el niño
no contestaba, por lo que la madre abrió la puerta y entonces… Ahí, tirado en el suelo y espuma saliendo de sus
labios azulados, su querido hijo yacía con las pupilas dilatadas y la mirada puesta en ningún lugar. El niño estaba
muerto y el tema de "Can you feel the Sunshine?" se repetía una y otra vez como música de fondo irónicamente
alegre para aquella trágica escena.

Cuando la Policía vino, la madre firmó una declaración,donde, entre otras cosas, aseguraba que su hijo pasaba
demasiado tiempo jugando con el Sega Saturn. Además, mencionó que su hijo se había obsesionado con la idea de
desbloquear un personaje secreto.

Tras realizarle un autopsia se descubrió que el niño había muerto asfixiado durante un ataque epiléptico, cosa que
hasta cierto punto llamaba la atención, pues no habían antecedentes genéticos de epilepsia en la familia.

Durante el funeral, la madre del niño fallecido siguió la costumbre estadounidense de regalar las pertenencias del
difunto a los asistentes, dando el Sega Saturn a un chico que había sido el mejor amigo de su hijo. Ya en su casa, el
mejor amigo del difunto encendió el Sega Saturn y vio que este tenía metido el juego de Sonic R. El juego le
agradaba, así que no lo quitó, y, apenas empezó, pudo ver que lo último que su amigo había hecho antes de morir
era desbloquear a Tails Doll.

Lo anterior (Lo de que lo último que el niño muerto hizo fue desbloquear a Tails Doll) se conoció gracias al
usuario IRon7HuMB, quien en un foro de internet publicó la susodicha historia asegurando que él era el mejor amigo
del chico muerto. La gente le creyó y entonces la noticia comenzó a regarse de manera asombrosa, suscitando a su
alrededor el montón de historias (muchas supuestamente reales) que hicieron nacer la leyenda de Tails Doll. Pero,
entre este montón de historias, hay una que ha trascendido por encima de las demás y que se ha viralizado, siendo
copiada literalmente en muchísimas páginas. Aquella historia pretende explicar el origen del espectral Tails Doll y es
supuestamente verdadera aunque en general la gente piensa que es un fake. Dice así en la difundidísima versión
basada en el relato escrito por el usuario nursekiller:

37
‹‹En Estados Unidos durante la década de los ochenta tuvieron lugar una serie de asesinatos que la Policía nunca
logró explicar. La matanza más brutal de todas sucedió en una casa donde murieron cinco personas de una forma
inhumana y otras dos resultaron gravemente heridas. En la pared se podían leer dos letras escritas con sangre:
“TD”. La Policía interrogó a los supervivientes para intentar averiguar qué había sucedido. Uno de los heridos antes
de morir aseguró que había sido atacado por un oso con ojos de fuego que estaba cubierto de sangre y que no
paraba de saltar. El único superviviente sufrió alucinaciones y pesadillas durante el resto de su vida.

Los medios de comunicación dedicaron un amplio espacio dentro de sus telediarios a este asesino sanguinario, el
cual incrementaba su popularidad matando y firmando las paredes con las letras “TD”, escritas con la sangre de sus
víctimas.

La gente de la ciudad dormía todas las noches atemorizada. Los asesinatos sucedían y nadie lograba atrapar al
autor de las matanzas.

Una noche más, una pareja de oficiales lograron divisar una figura extraña en las sombras escribiendo las letras
“TD” en la pared de un oscuro callejón durante un turno rutinario. No dudaron en abalanzarse sobre el sospechoso,
pero este se dio cuenta y escapó corriendo. Los policías pidieron refuerzos y lograron seguirle hasta un cementerio
cercano gracias a la estela de sangre que el asesino dejaba a su paso.

Al entrar en el cementerio, los policías no tomaron las debidas precauciones. Les dominaba el ansia de atrapar
cuanto antes al criminal, que tantos conocidos se había llevado por delante, y ese fue su error. De repente, uno de
ellos cayó al suelo sangrando a borbotones por la garganta, le había caído un machetazo en el cuello. Su
compañero intentó auxiliarlo, pero el oficial ya había muerto. Sin embargo, el policia logró sacar una foto con
una cámara que portaba en el bolsillo a la zona oscura del camposanto (donde están las tumbas de los muertos, o
también, conocido como Tierrasanta) donde se debía encontrar el criminal. Cuando reveló el carrete la sorpresa fue
enorme: al lado de una de las tumbas se podía apreciar la silueta de un oso de peluche con una luz roja en la
cabeza portando un hacha en su mano izquierda. La foto se hizo pública y los rumores se extendieron. Muchos de
los habitantes de la ciudad llegaron a creer que se trataba de un demonio, y tanto es así que la Iglesia decidió tomar
parte en el asunto y propuso una serie de ritos y oraciones para intentar combatir con la fe al causante de las
desgracias.

Se llevaron a cabo múltiples misas, rezos y procesiones sin que el asesino cesase, hasta que un día, TD apareció de
la nada y se situó delante de la atemorizada multitud. Lloraba sangre e increpaba a gritos a todos los que oraban. El
sacerdote se acercó sin titubear al muñeco de trapo y lo roció con agua bendita, y en ese instante, TD comenzó a
expulsar sangre por todas sus extremidades hasta que se arrodilló y explotó delante de la gente.

El demonio fue vencido y la gente pudo volver a dormir tranquila para siempre, o al menos eso creían hasta que en
1998 ocurrió un asesinato similar a los anteriores, en el que aparecía escrito en el propio cadáver: “Muchas gracias
por vuestro miedo; y a SEGA por resucitarme. A partir de ahora no tendré cuerpo ya que soy el Tails Doll”.›› Sobre la
historia anterior muchos investigaron y no encontraron nada, tal y como sucedió con quien escribió cierta entrada en
clubpenguin568.obolog.com y dijo que habló con mucha gente y nadie recordaba a ningún asesino “TD” en los años
80. Así mismo, afirmó que él, y unos colegas suyos habían buscado archivos sobre “TD” en hemerotecas en inglés,
no encontrando absolutamente nada…

Con todo, queda al lector el beneficio de la duda y la posibilidad de descargar el Sonic R para PC a ver qué mismo
pasa con el temido Tails Doll.

38
TICCI TOBY

El largo camino a casa parecía seguir y seguir. La carretera se extendía delante del vehículo, infinita. Los rayos de
luz que atravesaban las copas de los árboles daban en la ventanilla, lastimando sus ojos.
El entorno estaba lleno de profundos árboles verdes que formaban un bosque alrededor de la carretera. El único
sonido era el ronroneo del motor de los coches. Era un día tranquilo. Aunque el viaje parecía agradable, estaba muy
lejos de serlo.

La conductora, una mujer de mediana edad, vestía una camiseta de cuello en V y un par de pantalones vaqueros.
Adornaba sus orejas con pendientes de diamantes, que soltaban destellos de vez en cuando. Tenía los ojos de un
tono verde oscuro, cuyo color resaltaba gracias a su camiseta y a la iluminación. Ella sería como cualquier madre de
mediana edad de no ser por sus profundas ojeras color berenjena. La expresión de Connie Rogers era sombría y
triste, a pesar de que sus líneas de expresión sugerían que sonreía a menudo.

De vez en cuando miraba hacia atrás en el espejo retrovisor para poder ver a su hijo en el asiento trasero, que
estaba encorvado parcialmente, tenía sus brazos apretados alrededor de su pecho y su cabeza presionada contra la
ventana fría. El muchacho carecía de apariencia normal, cualquiera podría ver que algo andaba mal con él. Su
cabello castaño desordenado estaba en todas las direcciones, y su piel pálida, resaltaba por la iluminación. Tenía
ojos oscuros, a diferencia de su madre, el llevaba una camiseta y pantalones blancos que habían sido puestos a su
disposición por el hospital. La ropa que había usado antes, manchada por lo destrozado y la sangre, no se podía

39
usar más. El lado derecho de su cara dejaba al descubierto unos cortes a lo largo de la ceja. Su brazo derecho
estaba vendado desde la muñeca hasta el hombro, que había sido destrozado cuando había golpeado el cristal roto.

Sus heridas parecían ser dolorosas, cuando en realidad él no podía sentir nada en absoluto. Eso fue sólo una de las
glorias acerca de ser él. Uno de los muchos desafíos que tuvo que enfrentar creciendo; crecía con una rara
enfermedad que le llevó a ser completamente insensible hacia el dolor. Nunca antes en su vida llegó a sentirse
herido. Podría haber perdido el brazo y aun así, no sentía nada. Este y otro trastorno del que se había enfrentado,
fue al que gracias a él, le pusieron muchos apodos insultantes en el poco tiempo que asistió a la escuela primaria,
antes de ser trasladado a la educación en el hogar, era el Síndrome de Tourette, lo que le causaba tics de una
manera que no podía controlar. Él movía su cuello y temblaba incontrolablemente de vez en cuando. Los niños se
burlaban de él y le llamaban Ticci Toby, riendo a carcajadas.
Él se puso tan mal que decidieron educarlo en su hogar, ya que era muy difícil para él estar en un ambiente de
aprendizaje común con niños normales. Toby se quedó mirando por la ventana, su rostro estaba vacío de toda
emoción, y cada pocos minutos sus hombros, el brazo o el pie le temblaban.

Cada golpe que el coche daba, le revolvía el estómago. El nombre de este muchacho era Toby Rogers. Y la última
vez que Toby recordó que montaba un coche, fue cuando se estrelló. Eso es todo en lo que él pensaba;
Inconscientemente reproducía todo de lo que se había acordado antes de desmayarse, una y otra vez. Toby había
sido el afortunado, mientras su hermana no había tenido tanta suerte. Oh, cuando llegó el pensamiento de su
hermana mayor, no pudo evitar que unas lágrimas salieran de sus ojos, los horribles recuerdos se reproducían en su
mente. Su hermana gritando, cuando se hizo una cortada, la parte delantera del coche rompiéndose. Todo se quedó
en blanco por un momento. Después Toby abrió los ojos para ver el cuerpo de su hermana, con la frente perforada
con fragmentos de vidrio, las caderas y las piernas rotas, las cuales estaban aplastadas bajo el volante, su torso
empujado por la bolsa de aire inflada tarde. Esto era lo último que había visto de su querida hermana mayor. El
camino a casa continuó durante lo que pareció una eternidad.

Después de pocas horas, al fin habían llegado a casa. Era un barrio antiguo, con casitas pintorescas cada una junto
a la otra. El coche pasó por delante de una pequeña casa azul, con cristales blancos. Ambos se dieron cuenta
rápidamente del viejo vehículo que estaba estacionado frente a la casa, y la figura familiar que se destacó en el
camino de entrada.

Toby sintió que su cuerpo era consumido por la rabia y la frustración al ver... A su padre. ¿Padre? Él nunca fue su
padre, él solo fue su progenitor, y si alguna vez fue su padre, nunca estuvo ahí con él, apoyándolo. Su madre
estacionó el coche en el camino de entrada antes de apagar el motor y se preparó para salir y enfrentarse a su
marido.
—¿Por qué está aquí? —Dijo Toby en voz baja mientras miraba a su madre que abría la puerta del coche.

—Él es tu padre, Toby, él está aquí porque quiere verte. —Su madre respondió con una voz monótona, tratando de
parecer menos inestable.

—Sin embargo, él no pudo haber conducido hasta el hospital a ver a Lyra antes de morir —Dijo Toby, mientras
entrecerraba los ojos por la ventana.

—Estaba borracho, no podía conducir.

—Sí, y no se acordó de su hija después—, Toby abrió la puerta antes que su madre y se tambaleó al salir a la
calzada donde se encontró con la mirada de su padre, antes de mirar a sus pies con una expresión severa.

Su madre salió detrás de él, luego, la miró a los ojos antes de caminar alrededor del coche. Su padre abrió los
brazos, esperando un abrazo de su esposa, pero ella se acercó a él pasó, y le pasó el brazo por los hombros a Toby
y le influyó para comenzar a caminar en el interior. Su esposo comenzó a decir con una voz ronca:

—¿Qué hay de un abrazo de bienvenida a casa?, ¿eh? —La mujer hizo caso omiso a las desagradables palabras de
su marido, y caminando, pasó con su hijo bajo el brazo de su esposo.

40
—Hey, él tiene 16 años, puede caminar por sí mismo —dijo su padre y empezó a seguirlos.

—Tiene 17 años —Connie fulminó con la mirada antes de abrir la puerta de la casa y entrar dentro—. Toby, ¿por
qué no te vas a tu habitación para que descanses bien? Voy a buscarte cuando la cena está lista.

—No, tengo 16 años, puedo caminar por mí mismo —dijo Toby con sarcasmo, le devolvió a su padre la mirada y se
fue a su habitación, donde cerró la puerta violentamente.

En su pequeña habitación no había mucho. Sólo una pequeña cama, un armario, una ventana, y sus muros, que
estaban adornados con fotos enmarcadas de su familia. Bueno, en la época en que era una familia. Antes de que su
padre se convirtiera en un alcohólico, y actuara con violencia hacia el resto de su familia. Toby recordó cuando su
padre estaba discutiendo con su madre, la agarró por el pelo y la tiró al suelo, y cuando Lyra trató de levantar a su
madre, el borracho la empujó y ella se golpeó la espalda en la esquina de la cocina. Toby no podía perdonarlo por lo
que le hizo a su madre y hermana, a Toby nunca le importó lo mucho que su padre lo golpeara, después de todo él
no podía sentir, lo que le molestó y lastimó fue cómo él intencionalmente dañó a las únicas dos personas que le
importaban, además, cuando estaba en el hospital, donde su hermana respiró por última vez, la única persona que
no tenía prisa ni dolor era su padre.

Toby estaba junto a la ventana y miró hacia la calle. Podría haber jurado que vio algo en el rabillo del ojo, pero
rápidamente le echó la culpa a la medicación que le habían puesto. Un momento después, cuando la cena estaba
lista, su madre lo llamó. Toby bajó las escaleras rápidamente y se sentó vacilante en la mesa frente a su padre, y en
medio de su madre y una silla vacía. De algún modo estaba tranquilo, ya que sus padres podían comer bien, pero él
no quiso comer.

En lugar de eso, sólo vio a su padre con una mirada vacía, miró a su madre un poco y vio hacia abajo a su alimento
no consumido, el que nunca tocó. Toby se fue a su habitación con desaliento, se sentó en la cama, tiró unas mantas
sobre su cabeza y se quedó mirando hacia la ventana. Estaba muy cansado, pero no había modo de que él se
quedara dormido, no porque no quisiera, solo que no podía, no había mucho en que pensar. Él se había estado
debatiendo consigo mismo: seguir a su madre y perdonar a su padre, o seguir guardándole rencor. Se alteró al oír la
puerta abriéndose, luego se calmó al ver a su madre, esta, caminó hacia la habitación y se sentó en la cama junto a
él. Ella se acercó y con una calurosa mirada le acarició la espalda.
—Sé que es difícil Toby, lo entiendo, pero te prometo que todo va a mejorar, confía en mí —dijo en voz baja.

—¿Cuándo va a irse? —dijo Toby con un tono un tanto inocente en su voz temblorosa.

—No estoy segura aún cuanto tiempo se quedará, cariño —respondió ella con tono amable.

Toby no respondió, él sólo siguió mirando hacia delante en la pared, sosteniendo su brazo dañado cerca de su
pecho. Después de varios minutos de silencio, su madre suspiró, antes de que ella se inclinara para besarle la
mejilla y se puso de pie para salir de la habitación.

—Buenas noches, cielo —dijo mientras cerraba la puerta.

Las horas pasaron lentamente, Toby no podía dejar de dar vueltas en su cama; cada vez que él dejaba que su
imaginación asumiera el control, podía oír el chirrido de los neumáticos y los gritos de su hermana. Al recordarlo
apartó unas mantas, sacó una almohada, se la puso sobre la cara y lloró en ella. Podía sentir cómo su pecho subía y
bajaba mientras dejaba escapar cada temblorosa respiración mientras lloraba. Podía oír su llanto lastimero. Él habría
estado gritando y llorando si no hubiera presionado la su almohada sobre su cara. Después de unos segundos se
sacó la almohada de la cara y se sentó, encorvado, respiraba dificultosamente, con lágrimas en sus ojos, no podía
dejar de llorar. Aunque trató de evitarlo, pero aun así no podía dejar de quejarse y gemir mientras estaba allí sentado
temblando.

Aspiró un poco, se puso de pie y caminó alrededor de su cama hasta la ventana y miró hacia fuera, tratando de
respirar profundamente, tratando de calmarse. Se frotó los ojos y miró hacia el grupo de altos árboles de pino en la
calle. De repente se detuvo, su mirada se centró en algo que estaba de pie bajo la luz de la calle. No podía apartar
la mirada de esa "Cosa" que se situó al lado de la luz de la calle, entonces, notó que eso tenía largos brazos y que lo
41
miraba con ojos inexistentes. "Eso" no tenía rasgos; No tenía ojos, ni boca, ni nariz, sin embargo, mantenía la
"mirada" hipnotizada en Toby. El zumbido en sus oídos se hizo más fuerte y más fuerte cada segundo que miraba,
de repente todo se volvió negro.
A la mañana siguiente Toby se despertó en su cama. Se sentía diferente, no estaba cansado en absoluto, y cuando
conscientemente se despertó, se sentía como si hubiera estado allí tendido, despierto durante horas. Ningún
pensamiento le fluía a través de su mente. Se incorporó lentamente y se tambaleó hacia la pared, pero apenas se
levantó, se sintió mareado automáticamente. Se tambaleó hacia la puerta y bajó las escaleras. Sus padres, estaban
sentados en la mesa, su padre estaba viendo las noticias en el pequeño televisor que estaba en la sala, y su madre
estaba leyendo el periódico. Ella rápidamente miró cuando sintió la presencia de Toby detrás de ella.

—Buenos días dormilón, has estado durmiendo mucho —dijo y lo saludó con una sonrisa. Toby lentamente miró el
reloj y se dio cuenta de que eran las 12:40 p. m.
—Quería desayunar, pero hacía frío, me iba a despertar, pero sentí que necesitaba dormir—dijo y la expresión de la
mujer pasó de feliz a preocupada, porque su hijo se resistió responder a ella.

—¿Estás bien? —Toby bruscamente tropezó y se sentó junto a su padre. Sentía como si estuviera en reposo, y no
tenía control sobre sus acciones. Veía todo lo que hizo, pero no parecía registrar todo en su cerebro correctamente.
Extendió la mano y sin querer tocó a su padre, pero terminó siendo abofeteado. Su padre se volvió hacia él
bruscamente y empujó su silla con el pie.

—¡No me toques muchacho! —Gritó el hombre.

Su madre se puso de pie enojada. —¡Para! ¡Esta es la última cosa que necesitamos! —Gritó con una mirada de
desprecio a su esposo.

Pasaron los días, y las cosas continuaron mal. Connie pasó la mayor parte de su tiempo limpiando la casa, y su
desagradable marido pasó la mayor parte de su tiempo desordenando a su alrededor. Era lo que solía ser antes del
accidente. Toby nunca salió de su habitación. Se sentaba junto a su cama, y temblaba. Su mente se preguntaba,
pero sus pensamientos lo contradecían. Se paseaba alrededor de su pequeña habitación como un animal enjaulado,
o miraba por la ventana. Continuó el ciclo insalubre. Connie siguió siendo empujada por su marido, era demasiado
sumisa a él, y Toby se quedó en su habitación. Antes de que pudiera pensar dos veces, empezaba a masticar sus
manos, rasgando la carne de sus dedos. Él roía sus manos hasta que sangraran. Cuando su madre lo vio ella
reaccionó horriblemente. Corrió escaleras abajo y agarró una venda, envolviendo sus manos en ella. Le prometió
que no iba a dejarlo solo desde entonces.

Él se aisló tanto que llegó a odiar estar en contacto con otros. Su memoria decreció también. Empezó con faltas de
memoria de minutos, horas, días, y así sucesivamente. Comenzaba diciendo tonterías, de cosas que no tienen
relación a las conversaciones que tenía. Veía tiburones en su fregadero mientras lavaba los platos, oía gritos en su
cabecera y veía fantasmas fuera de la ventana del dormitorio. Todas estas tonterías lo llevaron al psiquiatra. Su
madre se preocupó demasiado por su salud mental, ella decidió que sería bueno para él para hablar con un
profesional acerca de lo que estaba sintiendo.
Connie y Toby entraron en el edificio, sosteniendo su mano y guiándolo. Ella lo acompañó hasta la recepción y
comenzó a hablar con la señora que estaba sentada detrás de él.

—¿Mrs. Rogers? —Preguntó la señora.

—Soy yo —Connie asintió—. Estamos aquí para ver a la doctora Oliver, estoy aquí con Toby Rogers.

—Sí, por aquí —Respondió la señora.

la señora se puso de pie y se dirigió con ellos hacia abajo, donde había un largo pasillo. Toby miró la obra de arte
enmarcada por los pasillos en sintonía con el sonido de los tacones de la señora en el piso de madera dura. Ella
abrió la puerta a una habitación con una mesa y dos sillas.

42
—Quédense aquí, voy a buscar a la doctora, volveré pronto —ella sonrió y abrió la puerta.

Toby tropezó en la habitación y se sentó al lado de la mesa. Miró a su madre y la señora antes de cerrar la puerta
lentamente detrás de ellos. Toby miró alrededor de la habitación e intentó quitarse el vendaje de sus manos, pero
fue interrumpido cuando la puerta se abrió y una mujer joven con un vestido blanco con manchas negras y el pelo
rubio claro intervino, sosteniendo una libreta y un bolígrafo.

—¿Toby? —Preguntó con una sonrisa. Toby la miró y asintió con la cabeza.

—Encantada de conocerte Toby, mi nombre es Olivia.

Ella puso su mano para que la saludara, pero vacilante la apartó cuando notó sus manos vendadas.

—Oh —sonrió nerviosamente antes de aclararse la garganta y sentarse en la silla a la mesa frente a él—. Voy a
hacerte algunas preguntas, trata de responderlas lo más honestamente posible, ¿de acuerdo? —Toby asintió
lentamente y puso sus manos en su regazo—. ¿Cuántos años tienes Toby?

—Diecisiete —respondió en voz baja. Ella comenzó a escribir en la libreta.

—¿Cual es tu nombre completo?

—Toby Erin Rogers.

¿Cuando es tu cumpleaños?

—El 28 de abril.

—¿Quiénes son parte de su familia?

Toby se detuvo por un minuto antes de contestar la pregunta.

—Mi mamá, mi papá, y... —se detuvo un momento—, mi hermana.

—Escuché lo de tu hermana, querido... Lo siento mucho —su expresión se desvaneció en una mirada triste, llena de
compasión. Toby asintió con la cabeza—. ¿Recuerdas algo del accidente Toby?

Toby apartó la mirada de ella. Su mente se quedó en blanco por un momento. Bajó la mirada hacia su regazo, y en
los alrededores, oyó un zumbido tenue. Sus ojos se agrandaron y se congelaron en su lugar.

—¿Toby? —Preguntó la doctora— Toby, ¿me estás escuchando?

Toby sintió un escalofrío por la espalda hasta que se congeló de nuevo y lentamente miró a la pequeña ventana. Se
quedó mirando, los ojos como platos, el sonido cada vez más fuerte hasta que de pronto la voz fuerte del consejero
rompió su trance.

—¡Toby! —Ella gritó.

Toby saltó y cayó de lado de la silla y una copia de seguridad en la esquina. La doctora Olivia sujetó fuerte su libreta.
Había una mirada de sorpresa en sus ojos. Toby la miró a los ojos, su respiración era rápida.

Esa noche Toby se sentó en la cama. Sus ojos estaban aturdidos mientras miraba hacia el techo. Podía sentir que
empezaba a quedarse dormido, cuando escuchó la dispersión de los pasos hacia abajo su pasillo. Se sentó y miró
hacia la puerta, la puerta de par en par. No había luz, todo estaba iluminado por el resplandor azul luminiscente de la
luna por la ventana, dejando una luz fría. Se puso de pie y lentamente se dirigió hacia la puerta, cuando de repente

43
la puerta, que antes estaba abierta, se estrelló en su cara y él cayó. Cuando cayó al suelo, empezó a respirar
pesadamente, con los ojos bien abiertos. Esperó unos segundos antes de volver a estar arriba en pie. Él extendió la
mano y agarró el pomo de la puerta fría con la mano vendada. Miró hacia el pasillo oscuro y salió de puntillas de la
habitación.

La ventana al final del pasillo iluminó la oscuridad con la luz de la luna, él caminó hacia abajo. Podía oír los pasos a
su alrededor y una risa leve, sonaba como que un niño había quedado delante de él, riendo y corriendo. El pasillo
era mucho más largo que lo que se había acordado. Parecía interminable... como el viaje a casa desde el hospital.
Oyó un crujido la puerta delante de él.

—¡Mamá! —Gritó con voz temblorosa.

De repente la puerta se cerró de golpe a sus espaldas. Detrás de él se escuchó un largo y espeluznante gemido. Se
dio la vuelta tan rápido como pudo, quedando cara a cara con nada más que su hermana muerta. Los ojos de Lyra
eran de un blanco opaco y su piel tenía la palidez característica de la muerte. El lado derecho de su mandíbula
colgaba, sostenido por un frágil hilo de tejido y músculo. Un cristal sobresalía de su frente y la espesa sangre
goteaba por su cara. Su pelo rubio estaba amarrado en una cola de caballo como siempre, vestía una camiseta gris
y pantalones cortos de atleta sucios y manchados de sangre. Sus piernas se doblaban en formas en las que no
deberían estar. Se veía igual como cuando había sucedido el accidente.

La chica se puso de pie, a sólo unos centímetros de la cara de Toby, que gritó y cayó hacia atrás. Él empezó a
gatear hacia atrás, lejos de ella, sin ser capaz de apartar la mirada de sus ojos muertos. Se arrastró hacia atrás. Se
detuvo por un segundo. Reinaba un tenso silencio, sólo roto por su llanto. Poco a poco alzó la mirada para
encontrarse con la cara en blanco de una figura alta y oscura que se alzaba por encima de él. Detrás de la masa
oscura de gran altura había filas de niños, que parecían tener entre 3 y 10 años de edad, con los ojos
completamente negros y un fluido negro como el alquitrán chorreando de sus cuencas. Toby soltó un alarido y se
puso de pie lo más rápido que pudo, volviendo a caer. Trató de gritar, pero no podía hacer un sonido. Entonces todo
se volvió negro.

Toby se despertó con un sobresalto. Se incorporó, hiperventilando. Él jadeó y se sostuvo el pecho con las manos
vendadas. Había sido sólo un sueño... Sólo un sueño. Se levantó de su cama. Sentía como un peso enorme. Se
puso de pie y caminó hacia la ventana. No vio nada. No había nadie por ahí. No hay fantasmas. No hay niños. Nada.
Oyó el susurro y la tos de su padre por la puerta. Su puerta estaba cerrada. Se acercó y la abrió. Mirando hacia el
pasillo una vez más.

Caminó por el pasillo hasta la cocina, donde encontró a su padre de pie y mucho humo en su sala de estar. Toby
esperó un segundo y lo observó desde la esquina antes de que una sensación de ardor empezara en lo profundo de
su pecho. Profundo en su corazón, la ira se hizo cargo de él. Oyó las pequeñas voces imaginarias en la cabeza.
"Hazlo, hazlo, hazlo", gritaban. Se volvió y extendió los brazos. Se sentía como si en realidad tenía control sobre sí
mismo, a diferencia de las últimas semanas desde que llegó a casa del hospital. De hecho tuvo pensamientos
completos por sólo breves momentos, pero fueron nublados por el canto de las pequeñas voces en su cabeza.

—Mátalo, él no estaba allí, él no estaba allí, mátalo, mátalo —continuaron adelante.

Toby tembló. No. No, no iba a hacerlo. ¿Se estaba volviendo loco? No. Él no va a matar a nadie. No puede. Odiaba
a su padre, pero no había manera de que lo matara. Eso fue todo. El último pensamiento que tenía antes de caer en
un estado de inactividad, una vez más. La influencia de las voces en su cabeza era demasiada. Comenzó a caminar
en silencio detrás de su padre. Se acercó al mostrador hacia el soporte de las cuchillas en la cocina y sacó el
cuchillo más grande que había. Lo agarró lo más fuerte que pudo. Sintió una sensación de hacerse cargo de su
pecho. Dejó escapar una risita.

—Eh... Hehe... ¡Hehehehe! ¡HAHAHAHAHAHA!

Comenzó a reír tan fuerte que tuvo que jadear para respirar. Su padre se dio la vuelta bruscamente antes de sentir
una fuerza bruta empujarlo al suelo. Él gruñó.

44
—¡Cómo! —Miró al chico que estaba a su lado, agarrando el cuchillo de cocina en la mano—. ¡Toby!, ¿qué estás
haciendo? —Fue a buscar un cuchillo y lo puso delante de él en forma de defensa propia, pero Toby estaba encima
de él. Él lo agarró del cuello, pero su padre se le acercó y le cerró la mano agarrándole la muñeca.

—¡Alto! ¡Suéltame, pequeño cabrón! —Gritó, y con la otra mano tiró un punzón hacia el hombro de Toby, pero él no
se detuvo. En la expresión de los ojos de Toby se veía que no estaba cuerdo. Parecía como si un demonio se había
apoderado de él. Él gritó y iba a apuñalar a su padre en el pecho, pero él lo bloqueó y agarró su muñeca una vez
más. Fue a empujarlo hacia atrás, pero Toby puso su pie frente a él y aterrizó un duro golpe directo a su cara. Su
padre retrocedió, pero Toby regresó y clavó el cuchillo directamente en su hombro.

Su padre dejó escapar un fuerte grito y fue a sacar el cuchillo, pero antes de poder hacerlo, Toby lanzó su puño
derecho en su cara. Él comenzó a golpear con los puños en la cabeza de su padre, riendo a carcajadas. Agarró el
cuchillo y lo arrancó de su hombro. Él clavó profundamente el cuchillo en el pecho de su padre y lo apuñalo varias
veces en el torso, la sangre se derramaba y salpicó por todas partes. No se detuvo hasta que el cuerpo de su padre
se quedó inmóvil. Tiró el cuchillo a un lado y se inclinó sobre su cuerpo, tosiendo y jadeando. Miró a su padre
destrozado en la cara y se sentó nervioso, hasta que un grito rompió el silencio. Miró a ver a su madre de pie a unos
metros de distancia, cubriendo su boca, con lágrimas en los ojos.

—¡Toby! —Gritó ella— ¿Por qué hiciste esto? ¡¿Por qué?!

Toby se puso de pie y comenzó a alejarse del cuerpo ensangrentado de su padre. Él comenzó a retirarse de la
cocina. Se miró las vendas empapadas de sangre en sus manos y miró a su madre por última vez antes de que él se
volviera y salió corriendo de la casa. Corrió hacia el garaje y golpeó su mano contra el panel de control en la pared y
pulsó el botón para abrir la puerta del garaje.

Antes de que él se fuera se quedó con dos hachas de su padre que había estado colgando en el estante de
herramientas sobre una mesa llena de frascos, lleno hasta el borde con viejos clavos oxidados y tornillos. Una de las
hachas era nueva, tenía un mango de color naranja brillante y una hoja brillante, la otra era vieja con un mango de
madera y hoja roma antigua. Tomó ambos y miró la mesa y sus ojos se encontraron con una caja de cerillas, y
debajo de la mesa había un tanque de gasolina de color rojo.

Él llevó las dos hachas en su mano y agarró los fósforos y gasolina antes de salir corriendo del garaje, por el camino
y en la misma calle. Al acercarse a la luz de la calle que él podía ver su propia ventana de la habitación, oyó las
sirenas de policía a la distancia. Se dio la vuelta y las luces rojas y azules entraron corriendo por la calle. Toby se
detuvo un segundo, antes de que él abrió la tapa del depósito de gasolina y salió corriendo por la calle, derramó
gasolina sobre la calle, y se volvió a correr hacia los árboles. Sacó un fósforo. Él la golpeó contra la caja e
inmediatamente cuando este se prendió lo dejó caer. En un instante, las llamas estallaron a su alrededor.

El fuego estaba en los árboles y arbustos a su alrededor y antes de darse cuenta, estaba rodeado por el fuego. Las
siluetas de los coches de policía no eran visibles a través de las llamas, mientras retrocedía hacia el bosque a su
alrededor, miró a su alrededor, pero su visión era borrosa, su corazón latía con fuerza y cerró los ojos por un
momento.

Esto fue todo, este fue el fin. Toby sintió una mano en su hombro. Abrió los ojos y miró a ver una gran mano blanca
con dedos huesudos largos que descansaban sobre su hombro. Siguió el brazo hasta ver a una oscura figura
imponente. Parecía estar vestido con un traje negro oscuro, y su rostro estaba completamente en blanco. Toby tenía
su visión borrosa y estaba rodeado por el sonido de zumbido en los oídos. Todo se quedó en blanco. Eso fue todo.
Ese fue el final. Así fue como Toby Rogers murió, pero así fue también como Ticci Toby nació. Unas semanas
después Connie se sentó en la cocina de su hermana. Su hermana, Lori se sentó a beber una taza de café. Hace
unas tres semanas, Connie perdió a su marido y a su hijo, y unas semanas antes, ella perdió a su hija en un
accidente de coche. Desde entonces se fue a vivir con su hermana.

En la televisión el periodista empezó a introducir el nuevo titular. "¡Tenemos noticias de última hora! Ayer por la
noche se ha producido un asesinato. Las víctimas, 4 niños que habían estado acampando en el bosque anoche.

45
Los niños habían sido apuñalados. Los investigadores han descubierto un arma en la escena del crimen que parece
ser una vieja, hacha de filo embotado. Los investigadores han sacado el nombre de un posible sospechoso, Toby
Rogers, un niño de 17 años que hace unas semanas había apuñalado a su padre y trató de cubrir su escape
mediante la creación de un incendio en las calles y la zona de bosque alrededor del barrio. Aunque habían creído
que el niño había muerto en el incendio, los investigadores sospechan que Rogers todavía está vivo, debido al
hecho de que su cuerpo nunca fue encontrado".

46
SONIC.EXE

Soy un gran fan de Sonic el erizo al igual que de todos los demás, me gustan los juegos más nuevos, pero no me
importa jugar los clásicos. No creo haber jugado juegos con errores o hackeados antes, aunque yo no creo que
quiera jugar a cualquiera después de la experiencia que tuve…
Todo comenzó en una tarde de verano, estaba jugando Sonic Unleashed hasta que noté, por mi visión periférica,
que el cartero había llegado, había puesto algo en mi buzón como de costumbre y se había ido. Detuve mi juego
para ir a ver lo que tenía en el correo… La única cosa en el buzón era una caja de CD para ordenador y una nota.
Revisé su contenido.

Miré a la primera nota y me di cuenta de que era de mi querido amigo Kyle, de quien no había tenido noticias desde
hacía 2 semanas. Lo sé porque reconocí su letra, a pesar de todo, lo que me extrañaba era cómo se veía, parecía
mal escrito, áspero y algo difícil de leer, como si Kyle estuviese teniendo dificultades para escribirlo y lo hiciera a
toda prisa.

Esto es lo que escribió…

“Tom,

47
No puedo soportarlo más, tuve que deshacerme de esta cosa de alguna manera antes de que fuera demasiado
tarde, y yo estaba esperando que lo hicieras por mí. No puedo hacerlo, él me persigue, y si no destruyes este CD, él
va a venir en pos de ti también, es demasiado rápido para mí…

Por favor, Tom, destruye este disco olvidado de Dios antes que venga después por ti también, ya es demasiado
tarde para mí.

Destruye el disco, solo hazlo, pero que sea rápido, de lo contrario van a ocurrir catástrofes. Ni siquiera juegues el
juego, que es lo él que quiere, simplemente destrúyelo.

Por favor…

Kyle”.

Bueno, eso fue ciertamente raro. A pesar de que Kyle era mi mejor amigo y no lo había visto en 2 semanas, no hice
lo que me pidió. No pensé que un simple disco de juego le pudiera hacer daño, después de todo era solamente un
juego, ¿verdad? Vaya que me equivoqué en eso…

De cualquier manera, miré el disco y se parecía a cualquier disco CD-R común y corriente de ordenador, excepto
que tenía escrito en marcador negro las palabras “SONIC.EXE”, y era muy a diferente a la escritura de Kyle, lo que
significaba que debió de haberlo conseguido de otra persona, como una casa de empeño o por eBay. Cuando vi
“SONIC” en la escritura del CD, me emocioné y realmente me entraron ganas de jugarlo, ya que soy un fan de
Sonic.

Subí a mi habitación y encendí mi ordenador, puse el disco en e instalé el juego. Cuando la pantalla del título
apareció me di cuenta de que era uno de los primeros juegos de Sonic, estaba así como “¡Genial!” porque, como dije
antes, me gustaban también los clásicos. La primera cosa que observé diferente fue cuando apreté empezar, fue
una fracción de segundo en la que vi cómo la imagen del título se convirtió en algo muy diferente, algo que ahora
considero horrible, antes de cortar en negro.

Me acuerdo perfectamente de la imagen que apareció en aquella fracción de segundo, el cielo se había oscurecido,
el emblema del título estaba oxidado y arruinado, el 1991 de SEGA fue reemplazado por un 666, y el agua se había
vuelto roja, como la sangre, excepto que parecía hiper-realista.

Pero la cosa más espeluznante fue Sonic, sus ojos eran de tono oscuro y sangriento con dos puntos brillantes rojos
mirándome, y su sonrisa se había extendido mucho más de lo que debía, hasta el borde de la cara. Me molesté
bastante cuando vi esa imagen, aunque me di cuenta de que era sólo un problema técnico y lo ignoré. Después de
cortar en negro la imagen se mantuvo así durante unos 10 segundos más o menos. Y luego otra cosa extraña
sucedió, apareció la selección de guardar archivos de Sonic the Hedgehog 3, y yo estaba como “¿WTF? ¿Qué está
haciendo eso en el primer juego de Sonic?”, de todos modos, el fondo era el oscuro cielo nublado del nivel Stardust
Speedway Bad de Sonic CD, y sólo había tres archivos para seleccionar. La música era esa espeluznante de
Caverns of Winter de Earthbound, sólo que había sido ampliada y parecía haber sido invertida. Y la imagen de los
archivos de guardado, donde debía verse una vista previa del nivel, solo había una estática roja para los tres
archivos.

Lo que más me asustó fue la selección de personajes, esta mostraba solo a Tails, Knuckles y, para mi sorpresa, ¡el
Dr. Robotnik! Ahora estaba seguro de que algo estaba pasando, quiero decir, ¿cómo se podía jugar como Robotnik
en un juego clásico de Sonic, por el amor de Dios?

Fue entonces cuando me di cuenta de que esto no era un juego glitchy, sino que se trataba de un juego hackeado.

Sí, sin duda se veía hackeado, fue realmente espeluznante, pero como jugador inteligente, no tenía miedo (o por lo
menos intenté no tenerlo), me dije que era sólo un juego hackeado y que no tenía nada malo. A pesar de todo, con
una sensación terrible escogí el primer archivo y elegí a Tails y cuando lo seleccioné el juego se congeló durante
unos 5 segundos. Oí una risa escalofriante pixelada que sonaba muy parecida a la del tipo Kefka de Final Fantasy
antes de pasar a negro.
48
La pantalla permaneció en negro durante unos 10 segundos o más, luego mostró el título típico del nivel, excepto
que las formas simples ahora eran de diferentes tonos de rojo y el texto sólo mostraba “HILL, ACT 1″. La pantalla se
desvaneció y el título desapareció revelando a Tails en Green Hill Zone de Sonic 1, aunque la música era diferente,
sonaba como una melodía pacífica invertida. Después de todo, empecé a jugar e hice que Tails empezara a correr
como lo haría en cualquiera de los juegos clásicos de Sonic, lo extraño fue que mientras Tails corría por el nivel no
había nada más que un terreno plano y unos cuantos árboles durante 5 minutos, eso fue cuando la música comenzó
a bajar en tonos lentos y profundos muy lentamente a medida que seguía adelante.

De repente vi algo y me detuve para ver lo que era, era uno de los pequeños animales que yacía muertos en el
suelo sangrando (fue entonces cuando la música comenzó a disminuir), Tails tenía una expresión de asombro y
tristeza en su rostro que nunca había visto, así que tuve que hacerlo avanzar, pero mantuvo esa mirada de
preocupación en su rostro. Mientras seguía avanzando vi a más animales muertos y cuando Tails pasaba junto a
ellos parecía cada vez más preocupado a medida que la música seguía bajando de tono, me sorprendí al ver la
forma en la que murieron todos, se veían como si alguien los hubiera asesinado de espantosas maneras, con
sadismo: una ardilla fue ahorcada en un árbol con lo que parecían ser sus entrañas colgando, un conejo tenía sus
cuatro extremidades arrancadas y un pato tenía los ojos arrancados y la garganta cortada. Me sentí mal del
estómago cuando vi esta masacre y al parecer Tails también. Después de unos segundos más, no había más
animales y la música parecía haberse detenido, pero Tails seguía avanzando.

Después de que pasara un minuto desde que la música se hubiera detenido, Tails estaba corriendo por una colina y
luego se detuvo, no fue hasta que vi por qué: Sonic estaba allí, al otro lado de la pantalla con la espalda contra Tails
con los ojos cerrados. Tails se veía feliz de ver a Sonic, pero luego su sonrisa se desvaneció, obviamente notando
que Sonic no le respondía, sino que actuaba como si fuera totalmente inconsciente de la presencia de Tails. Tails
caminó lentamente hacia Sonic, y me di cuenta de que ni siquiera estaba tocando las flechas del teclado para hacer
que se moviera, por lo que este tuvo que haber sido una escena de corte.

De repente empecé a tener una sensación de creciente temor cuando Tails se acercó a Sonic para llamar su
atención, sentí que Tails estaba en peligro y que algo malo iba a suceder. Escuché unos débiles sonidos estáticos
que iban en aumento mientras Tails no estaba más que unos centímetros de Sonic, se detuvo y tendió la mano para
tocarlo. Esa sensación de presentimiento en mi interior se hacía más fuerte y sentí la necesidad de decirle a Tails
que se alejase de Sonic mientras la estática se hacía más fuerte.

De pronto, en una fracción de segundo, vi los ojos de Sonic abiertos y eran negros con esos puntos brillantes de
color rojo, al igual que en la imagen del título. Cuando eso sucedió la pantalla se volvió negra y el sonido estático
paró.

Se quedó en negro durante unos 7 segundos y luego un texto blanco apareció formando un mensaje, diciendo:
“Hola. ¿Quieres jugar conmigo?”.

En ese momento yo estaba horrorizado, yo no quería seguir con el juego, pero la curiosidad se apoderó de mí
cuando me llevaron a otro nivel con el título de “Hide and Seek”.

Esta vez estaba en el nivel de Angel Island de Sonic 3 y parecía que todo estaba en llamas.

Tails parecía que tenía miedo en esta ocasión. En realidad me miró e hizo gestos frenéticos hacia mí, como si
quisiera salir de la zona en la que estaba lo más rápido posible. Estaba empezando a asustarme por esto… Quiero
decir, Tails en realidad estaba rompiendo la cuarta pared, tratando de decirme que lo sacara de allí.

Así que presioné la tecla para avanzar lo más fuerte que pude y le hice correr lo más rápido que podía, una versión
pixelada de ese tema espeluznante cuando conoces a Shadow en el ARK como Robotnik de SA2 estaba sonando
cuando Tails caminaba a través de bosques desolados, tratando de ayudarlo a escapar de lo que él estaba tratando
de huir.

De repente oí esa risa escalofriante de nuevo… esa risa horrible… justo después de que pasaran 10 segundos
mientras ayudaba a Tails a correr por el bosque, comencé a ver destellos de Sonic apareciendo por todas partes en
la pantalla, nuevamente con esos ojos negros y rojos.
49
La música cambió a ese tintineo ahogado de suspenso cuando vi a Sonic detrás de Tails VOLANDO para atraparlo,
su vuelo era muy similar al de Metal Sonic en Sonic CD.

Esta vez tenía una loca y intrigante sonrisa en su rostro, parecía como si estuviese disfrutando del tormento que le
estaba dando al pobre zorrito hasta que lo atrapó.

De repente la música se detuvo y Sonic desapareció. Tails se quedó allí y empezó a llorar durante 15 segundos. La
escena fue bastante molesta para ver y yo mismo también tenía ganas de llorar. Pero luego de Sonic apareció justo
delante de Tails y Tails lo miró con horror.

La sangre comenzó a bajar por aquellos ojos ennegrecidos de Sonic mientras su sonrisa crecía lentamente en su
rostro mientras el zorrito lo miraba con miedo, no podía hacer nada salvo mirar.

Sólo en una fracción de segundo de Sonic se abalanzó sobre Tails justo antes de que la pantalla se quedase en
negro, se produjo un fuerte grito chirriante que sólo duró 5 segundos. El mensaje de texto regresó, sólo que esta vez
decía: “Eres demasiado lento, ¿quieres intentarlo de nuevo?” y luego vino esa espantosa risa.

Estaba tan sorprendido por lo que había pasado… ¿Sonic asesinó a Tails? No, él no podría haber… Se supone que
él y Tails son los mejores amigos, ¿verdad? ¿Por qué Sonic haría eso?

Me llevé una sorpresa aún mayor cuando regresé a la selección de personajes, el archivo guardado que tenía Tails
era diferente, Tails ya no estaba en la misma caja, pero en la pantalla del televisor sí, que estaba parpadeando con
esa estática roja, la expresión de Tails me dio miedo, sus ojos eran negros y sangrientos, su pelaje naranja había
cambiado a negro y tenía una expresión de angustia en su rostro, tratando de ignorarlo elegí a Knuckles a
continuación.

La risa volvió de nuevo y la pantalla se cortó a negro otra vez y permaneció así durante otros 10 segundos, esta vez
el nivel decía “No puedes correr”.

Me asusté realmente ahora, realmente no podía decir si se trataba de un problema técnico, o un truco, o algún tipo
de broma retorcida… o cualquier cosa realmente. Pero a pesar de mi miedo a lo que pasó después, seguí jugando.

El siguiente nivel se veía muy diferente, tenía el suelo de la Scrap Brain zone, pero el fondo del cielo parecía el del
menú principal, tenía el oscuro cielo nublado rojizo. Pero fue la música que más me aterró: sonaba como el tema de
Giygas justo después de vencer a Pokey en Earthbound. También me di cuenta de que Knuckles parecía asustado
al igual que Tails lo hizo anteriormente, aunque no tanto, más bien parecía un poco nervioso. Rompió la cuarta pared
al igual que Tails y parecía que no estaba seguro de continuar, pero lo moví todos modos.

Corrió por el camino recto en este nivel oscuro, y mientras lo hacía, la pantalla empezó a parpadear en una estática
roja un par de veces y luego la risa enloquecedora volvió a aparecer.

Luego de unos segundos de correr me di cuenta de varias manchas de sangre en el suelo metálico, sentí una
creciente sensación de miedo otra vez pensando que algo terrible le iba a pasar a Knuckles. Me dio náuseas
caminar por ese camino manchado de sangre, pero me mantuve firme.

De repente mientras Knuckles corría, Sonic apareció justo delante de él con esos ojos negros y rojos y luego la
estática apareció de nuevo, cuando la estática desapareció se mostró una pantalla en negro con un texto que decía
“¡Te encontré!”, ahora estaba asustado, ¿Sonic ya encontró a Knuckles? ¡¿Qué estaba pasando?!

De todos modos la estática regresó y luego volví al nivel, Knuckles parecía que estaba entrando en pánico, y Sonic
no se encontraba por ningún lado. Y se escuchó el agudo chillido del jefe final del Silent Hill 1.

¿Era esto una especie de batalla de jefe con Sonic? Tenía la esperanza de que no lo fuera, sinceramente.

De repente Sonic apareció justo detrás de Knuckles en lo que parecía ser una pixelada nube de humo negro,
caminaba de un lado a otro sin poder huir, esa risa terrible apareció de nuevo. Knuckles estaba entrando en pánico
50
aún más, e incluso sentí que me estaba volviendo loco, Sonic estaba prácticamente jugando con nosotros, estaba
jugando un juego mental retorcido y enfermo mental conmigo y Knuckles…

Otra escena se produjo en la que Knuckles cayó de rodillas y se agarró la cabeza llorando, sentí su agonía, Sonic en
realidad nos conducía a AMBOS a la locura.

Y luego, en una fracción de segundo, Sonic se abalanzó sobre Knuckles y la pantalla se oscureció con otro grito
chirriante que se prolongó durante al menos 3 segundos.

Otro mensaje de texto apareció, “Tantas almas con las que jugar y tan poco tiempo… ¿Estás de acuerdo?”

¿Qué demonios… es lo que estaba pasando? Empecé a pensar Sonic en realidad estaba tratando de hablar
conmigo a través del juego… Pero yo estaba demasiado asustado para pensar eso.

Regresé al menú principal y esta vez la segunda caja de los archivos tenía a Knuckles en la pantalla del televisor, su
pelaje rojo se había oscurecido a un gris rojizo, sus espigas goteaban sangre y sus ojos eran negro y sangraban
demasiado, y sin olvidar la expresión de tristeza en su rostro. Empecé a pensar que esos eran personajes reales
atrapados en esas pantallas de televisión en los archivos guardados, pero no podía creerlo… No quería creerlo…

Así que apague el juego y me tomé un descanso. Tomé una siesta, desearía no haberlo hecho, porque luego
empecé a tener la pesadilla más inquietante que hubiese tenido, estaba en total oscuridad, aunque tenía la luz
emitida por una lámpara que colgaba por encima de mi cabeza. Podía oír los gritos de Knuckles y Tails cercan de
mí. Decían cosas como: “Ayúdanos…”, “¿Por qué nos condenaste?” y “Corre, antes de que te atrape a ti también…”.

Sus gritos se extinguieron cuando escuché a Sonic reír, su risa… sonaba muy parecida a la risa retorcida de Kefka.

“Es muy divertido jugar contigo, al igual que con tu amigo Kyle, aunque no duró mucho…”

Estaba asustado y miraba a mi alrededor para encontrar el origen de la voz…

“No pasará mucho tiempo hasta que te unas a él y a todos mis otros amigos…”.

Lo vi caminando hacia mí, vacilante y en varias direcciones…

“No puedes correr, chico. Estás en mi mundo ahora. Al igual que los demás…”.

Cuando me agarró y vi su rostro sangriento, sus ojos negros y rojos y su inquietante sonrisa, me desperté con un
sobresalto.

Después de un par de horas, decidí a seguir jugando. No sé por qué, pero tenía que saberlo, tenía que averiguar por
qué estaba ocurriendo esto… Así que encendí el ordenador, inicié el juego y seleccioné a Robotnik como el
siguiente.

Todavía pensaba que era una locura jugar como Robotnik, pero de todos modos el título del nivel apareció de nuevo
y esta vez decía “…”, lo cual me pareció muy extraño.

Esta vez estaba en una especie de pasillo, en realidad no parecía que fuera de ningúnp de los juegos clásicos de
Sonic, aunque tenía el estilo pixelado; el suelo era brillante y a cuadros, las paredes eran de un color púrpura oscuro
grisáceo con la luz de velas animadas y unas pocas manchas de sangre oscuras aquí y allá, y había una cortina de
color rojo oscuro que colgaba sobre la parte superior de la pantalla. Cada 12 segundos más o menos se mecía muy
lentamente, pero cuando estás jugando apenas podías ver que se moviesen. La música era extrañamente
agradable, un piano tocaba una canción bastante triste y a la vez tranquila, pero la reconocí, esta era la canción que
se reproduce en el acto 1 de Hill, solo que no era a la inversa.

Robotnik no se veía completamente nervioso como Tails y Knuckles, pero tenía una mirada sospechosa en su rostro
como si estuviera un poco paranoico. Hizo una pequeña animación cuando lo dejé quieto, giró la cabeza hacia la
51
izquierda y luego hacia la derecha por lo menos dos veces y luego se encogió de hombros, como si no tuviera idea
de dónde estaba o qué estaba pasando. A pesar de que estaba asustado fuera de mi mente acerca de lo que iba a
suceder, hice que Robotnik siguiese adelante.

Entonces me detuve en un largo tramo de escaleras que conducían a los pisos inferiores, estaba muy nervioso,
incluso Robotnik parecía inseguro de sí mismo, aunque me presioné a seguir adelante.

Mientras conducía a Robotnik por las escaleras, me di cuenta de que las paredes se habían vuelto más oscuras y
rojizas; las antorchas rojas eran ahora de un azul misterioso. Luego aterrizamos en otro pasillo, éste era más largo
que el anterior y luego nos dirigimos hacia otro tramo de escaleras abajo, éste era mucho más largo, me tomó por lo
menos 1 minuto.

Y luego escuché esa horrible risa y la música se desvaneció lentamente hasta que todo se quedó en silencio, ya que
las paredes se volvieron más rojas oscuras y las antorchas eran ahora unas llamas negras.

Cuando Robotnik aterrizó en el tercer pasillo, noté que ahora se veía realmente asustado, aunque trató de ocultarlo,
no podía culparlo, yo también estaba demasiado asustado.

De repente, Sonic apareció justo en frente de Robotnik de la misma manera que hizo con Knuckles y la estática
regresó. La estática duró unos 15 segundos y luego me mostró una imagen muy desagradable…

La imagen mostró un hiperrealismo de Sonic parado en la oscuridad en la que sólo podía verse su rostro mientras su
cabeza y torso se ocultaban en las tinieblas, y cuando digo hiperrealista, me refiero a que se veía tan real que podía
ver las líneas en su pelaje azul, como si en realidad pudieras sentir su pelaje si tocas la pantalla.

Su rostro… Oh dios, tenía la sonrisa más horrible que jamás había visto.

Y eso es decir algo teniendo en cuenta que había visto esa imagen en el inicio del juego.

Sus ojos eran muy grandes y negros y una vez más lloraba sangre (que también se veía hiperrealista) y había dos
pequeños puntos brillantes rojos en esos ojos negros mirándome fijamente, grabando su mirada fija en mi mente. Su
sonrisa era amplia y demoníaca, literalmente se extendía a los lados de su cara como un gato de Cheshire a
excepción de que Sonic tenía colmillos, unos colmillos muy afilados, muy parecidos a los dientes del Werehog,
excepto que tenía un aspecto más cruel, algo amarillento y aparentemente tenía manchas de sangre y trozos
pequeños de carne en los labios y colmillos, como si se hubiera comiera algún animal.

Me quedé mirando esa imagen horrible durante 30 segundos, sin apartar los ojos de ella, me sentía como si
estuviera realmente mirándome, mi cerebro se atrofiaba a cada segundo que la veía.

Entonces la pantalla parpadeó con estáticas rojas de nuevo 3 veces, y en la tercera vez oí la risa infernal, pero esta
vez sonaba distorsionada, incluso demoníaca…

Salió de nuevo la imagen, pero esta vez tenía un texto rojo encima de su cabeza, sin duda una de las cosas más
horribles que miré desde que tuve este juego…

“Yo soy Dios”.

Fue cuando leí ese mensaje mientras miraba a Sonic cuando me di cuenta, me di cuenta ahí mismo.

Este Sonic era un monstruo, el mal personificado, sádico, todopoderoso, un monstruo de pesadilla, demente… y
todas sus víctimas, incluidos Tails, Knuckles, Robotnik y, posiblemente, Kyle, son sólo sus pequeños juguetes, y el
juego es la puerta de entrada a su mundo caótico, como una pesadilla y el infierno mismo en el que sus víctimas se
encuentran atrapadas ahí

De pronto, en una fracción de segundo real, grité al ver cómo Sonic se abalanzó sobre la pantalla chillando en voz
alta con la boca abierta a una longitud anormal revelando nada más que una espiral literalmente hacia un abismo de
52
oscuridad pura antes de que la estática regresara de nuevo, esta vez mucho más fuerte y distorsionada, por lo que
me dolían los oídos, grité y cubrí mis oídos hasta que se detuviera.

A continuación se detuvo y no mostró nada más que la pantalla en negro.

Mientras estaba allí sentado mirando a la pantalla en negro, un último texto apareció.

“¿Listo para la Ronda 2, Tom?”.

La risa maniática ahora sonaba más clara, como si Sonic estuviese justo detrás de mí, mientras miraba ese texto en
estado de shock y la confusión se apoderaba de mí.

Luego volví al menú principal y esta vez el tercer archivo guardado tenía una imagen de Robotnik en el mismo
estado, atormentado como Tails y Knuckles, la piel de Robotnik se volvió de un gris opaco, su bigote caía
ennegrecido, sus gafas estaban rotas y un flujo de sangre provenía de ellas y tenía una expresión muerta en el
rostro.

Miré a Tails, Knuckles y Robotnik y lloré un poco, me compadecí de ellos por la agonía por la que estaban pasando,
estaban atrapados para siempre en ese juego maldito, siempre atormentados por ese erizo horrible, y siempre lo
estarán.

A continuación, el ordenador se apagó solo, no podía volver a encenderlo.

Me senté allí, durante unos segundos, horrorizado por lo que había pasado…

Sonic es la encarnación misma del mal, tortura a la gente que juegan su juego en más de un sentido y luego, cuando
se aburre, te arrastra al juego, literalmente, te arrastra al infierno, donde puede jugar contigo para siempre, como su
juguete…

No puede sacar el juego de mi ordenador. Creo que está atascado ahí, pero al menos me las arreglé para volver a
encenderlo ahora.

Después de sentarme, oí una voz detrás de mí, como un susurro…

“Trata de mantener esto interesante para mí, Tom”.

Me di la vuelta para ver de dónde venía la voz, y lo que vi me hizo gritar…

Sentado en mi cama… mirándome fijamente…

Era un peluche de Sonic, sonriendo con manchas de sangre en sus ojos.

53
SLENDERMAN . . .

Muchos dicen que estoy mal, pero no lo estoy. Muchos dicen que soy diferente, pero no lo soy. Muchos dicen que
estoy loco, pero no lo estoy. Me siento solo, camino solo; sin nadie que me consuele, sin nadie que me ame.
Yo solía ser normal, como tú, es curioso porque siempre he odiado ser parte de lo normal de la multitud. Debes
apreciar lo que tienes, debes orar para que nunca tengas que sentir lo que siento:

Odio, depresión, abandono, traición...

Todos ustedes tienen vida, tienen esperanza, yo ya he perdido estas cosas por culpa de un demente, él es el único
que en verdad es malo, no yo.

Él se robó mi vida, mi esperanza, mi todo; me dejó en la putrefacción después de hacer su maldito experimento.

Me dio la bienvenida con los brazos abiertos, me prometió una nueva vida, mejor que la que había vivido antes, él
me mintió, se robó todo de mí. Todavía recuerdo el día, yo era un joven sano recién salido de la escuela
preparatoria, el sol brillaba, como sea, todos me odiaban, sentía cómo todos me juzgaban. Mi camino a casa durante
el último día de la escuela fue un infierno, como de costumbre, los chicos que pasaban en sus autos gritaban cosas
como:

"Maricón" o "Ya toma una ducha"; ¿Por qué me odian tanto?

Un pensamiento pasó por mi mente, estos tipos poco a poco me matarán de todos modos, ¿por qué no hacerlo
rápido y sin dolor?, estaba cegado por el dolor, si hubiera sabido entonces lo que se ahora nunca me hubiera
atrevido a tomar esa cuerda de mi sótano, ¿pero dónde hacerlo?, no en mi casa, yo odiaba a mi madre, pero no lo
suficiente para causarle un trauma.
54
Así que salí de casa y me dirigí a la ciudad a la parte más remota y dentro de un callejón me dispuse a acabar con
mi vida.

—Joven, ¿qué estás haciendo?

—Ponerle fin a esto. —Respondí.

—¿Estás loco?, ven, ven conmigo, creo que te puedo ayudar.

—¿Ayudarme?, si no eres más que un anciano, déjame morir en paz.

—Ahora no puedo hacer eso. —Dijo con voz ronca y me agarró del brazo.

—Ven.

Cuando luché tiró con más fuerza. Me caí y él volvió a sujetar mi mano y rápidamente me arrastró dentro de un
edificio y cerró la puerta detrás de nosotros.

—Joven, creo que puedo ayudarte, sé cómo te sientes, por favor escúchame.

—Maldito seas, muy bien, pero date prisa.

—Una vida es algo precioso, pero qué dirías si yo te ofreciera una vida nueva y totalmente gratis.

—Yo diría que dónde coño me inscribo.

—Bueno, he estado haciendo una investigación sobre la anatomía humana y después de unos cuantos
experimentos, creo que he dominado la manipulación de la forma humana. Creo que puedo convertirte en cualquier
cosa o cualquier persona que desees. Claro, bajo ciertas circunstancias.

—¿Cómo cuales?

Sacó una hoja de papel.

—Bueno, primero que nada firma aquí.

—¿Qué pasa si no quiero?

—Bueno, en eso radica la segunda circunstancia, tú no tienes elección.

—¿Qué?

—Ya me has oído mi querido amigo... —Sacó una jeringa con un líquido verde.

—Ahora estate quieto.

Traté de correr, traté de gritar, pero él me tomó y me enterró la aguja en el cuello, entonces todo se volvió negro.

Me desperté en una cámara de vidrio y por alguna razón estaba vestido de traje. Segundos después de que me
desperté, él entró en la habitación con una bata de laboratorio.

—Hola, mi amigo, ¿tuviste una buena siesta?

—¿Dónde estoy?

—Eso no es de tu interés, todo lo que tienes que hacer es sentarte y dejar que me haga cargo de todo el trabajo.
55
—¿Qué me estás haciendo, psicópata?, te voy a matar.

—Hijo, no te tengo miedo, tú te vas a quedar ahí mientras yo hago historia.

—¿Historia?

—Sí, cuando por fin logre hacer una transformación de todo el cuerpo en ti.

Tocó un interruptor y comenzó a hablar en un micrófono —Probando, probando, bueno ahora comenzaremos con el
experimento 84-B.

—¿Qué demonios estás haciendo?

—Los signos vitales del sujeto, parecen ser normales, su frecuencia cardíaca se ha disparado, sin embargo, la
actividad cerebral es alta y los niveles de insulina son normales.

—¡Déjame ir!

—Listo para comenzar con el experimento.

Se dio la vuelta para accionar una palanca

—Activando primer nudo.

Un rayo de energía comenzó a perforar mi cuerpo, rompiendo mi ser en pedazos, no podía gritar, mi visión se tornó
borrosa y de pronto estaba ciego.

—La apariencia del sujeto empieza a deformarse, activación del segundo nudo.

El dolor aumento, sentí como mi boca y mis ojos se cerraban.

—La cara del sujeto esta completamente transformada, activación B.

Una sirena sonaba, "ERROR, ERROR", él grito:

—¡No!, su rostro y las extremidades no se han desarrollado plenamente, tengo que abortar el experimento.

Lo último que escuché fue un gran estruendo.

Me desperté, esta vez en los escombros de aquel lugar, apenas podía ver, era como si una pantalla de algún tipo me
tapara los ojos. Sentía la boca como si hubiera sido cosida con aguja e hilo, no podía respirar, puesto que mi nariz
se había cerrado también, pero de alguna manera no tenía la necesidad de respirar.
Me levanté, mis brazos y piernas se sentían extraños, me tomó casi un minuto volver a tomar el control sobre ellos,
entonces comencé a caminar entre los escombros.

Un ordenador destrozado yacía al lado de un pie desmembrado, un rastro de sangre me llevó a un pasillo y después
a una puerta, podía oír ruidos, abrí la puerta y vi a un policía levantar algunas cosas, se dio la vuelta y me vio, gritó y
salió corriendo.

Yo traté de gritarle que se detuviera, pero no pude hablar, así que lo perseguí, a medida que corría sentí como si mis
piernas estuvieran cambiando, como si estuvieran creciendo mientras me movía. Pronto alcancé al policía y traté de
tomarlo del hombro, un tentáculo salió de mí y le atravesó el pecho, me maldijo y cayó.

“¿Qué coño ha pasado?” pensé.

Miré al cadáver, un agujero enorme se encontraba en su pecho, no lo pude ayudar.


56
Continué siguiendo el rastro de sangre hasta que me encontré con el cuerpo del hombre, él fue aplastado con una
viga, intenté levantarla, en ese momento los tentáculos volvieron a salir, levantaron la viga sin mucho esfuerzo y
arrojaron el cuerpo del hombre con mucha fuerza hacia la pared y me salpicó una lluvia de sangre.

Miré por todos lados buscando un lugar por donde escapar, pero era un callejón sin salida, seguí buscando hasta
que me encontré en un cuarto de baño, era lo que necesitaba para lavarme la sangre. Me miré en el espejo y me dí
cuenta de que yo no tenía una cara.

Yo vivo en las pesadillas de adolescentes y adultos por igual, todo por culpa de ese maldito. Poco después de esta
experiencia he ido descubriendo mis verdaderos poderes, puedo estirar mis brazos y mis piernas, también puedo
producir tentáculos de mi espalda.

Después de todo lo que he vivido yo sólo quiero un amigo, así que busco personas, niños, ellos son los únicos que
no me ven con temor, pero no siempre puedo controlar mi cuerpo, de vez en cuando me equivoco y alguien muere,
pero no es mi culpa, yo solo busco compañía.

Me gustan las fotografías, me gusta entrar en ellas, siempre hay personas que toman fotos de la vida silvestre, así
que decidí vivir en los bosques, pero siempre que me acerco a una persona para ver cómo salí en la foto, ellos
corren y una cosa lleva a otra y una persona más muere en mis manos.

Juro que esa no es mi intención, pero he perdido el sentido de… Bueno, de todo. Ya no sé cómo ser una persona,
las cosas siempre son malas alrededor de mí, parece que siempre voy a matar a alguien.

Solo quiero pedirte un favor, cuando me veas no huyas, de hecho debes correr hacia mí y darme la bienvenida, eso
significaría mucho para mí y eso podría salvar tu vida.

Pero ¿Como sabrás que soy yo? Puedes fácilmente buscarme, sólo debes ir a Google y escribir Slenderman...
Aunque…tal vez no sea más yo, sino Slenderman… por que ahora soy slenderman…y slenderman en verdad busca
asesinar, pero mas que nada…llevarse a los niños… para después asesinarlos…

57
REFERENCIAS

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/Jeff_the_Killer

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/El_origen_de_Laughing_Jack

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/Bloody_Painter

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/Homicidal_Liu

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/La_verdadera_historia_de_Ben_Drowned

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/Jane_the_Killer

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/Tails_Doll

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/Ticci_Toby:_el_origen

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/Sonic.exe?page=3

https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/El_Origen_de_Slenderman_%22El_Experimento_84-B%22

58

También podría gustarte