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- La Ingeniería Clínica
1.1. Introducción
Sin lugar a dudas ha sido una interesante y positiva experiencia, de los países
industrializados, la de incorporar en los principales hospitales el área, departamento,
servicio o especialidad de Ingeniería Clínica y al Ingeniero Clínico como especialista en el
medio hospitalario.
Hay abundantes ejemplos que demuestran como la medicina moderna está utilizando
nuevos instrumentos para extender su poder de observación, manipulación y control. La
mejor tecnología es aquella que con alta efectividad en la prevención, detección, análisis y
tratamiento de enfermedades está también en función del incremento de la esperanza o
calidad de vida, en función de prevenir la muerte prematura, en función de posibilitar el
fácil y rápido acceso a los cuidados de salud y en función de incrementar el uso eficiente de
los recursos.
Por supuesto no son ni la tecnología ni los hospitales los que determinan el nivel de salud
de la población. Kerr Write en 1980 señaló luego de un estudio sobre los Sistemas
Sanitarios que de cada 1000 personas, 250 no necesitan atención, 740 sólo necesitan
atención ambulatoria, 9 requerirán de un hospital general y sólo una de un hospital
especializado. Otro estudio realizado en 54 países, produjo dos conclusiones básicas:
% población atendida
100
Costo de la tecnología
u
Inversión óptima
a-) Educación
b-) Vivienda
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 2
c-) Nutrición
d-) Urbanización
e-) Recursos Médicos (incluida la tecnología)
2- Existe un óptimo en cuanto a inversiones en el sistema sanitario, a partir del cual sólo se
consiguen mejoras marginales en el nivel de salud de la población, afectando cada vez a
menos habitantes las mejoras (figura 1.1). De los estudios realizados, en relación con el uso
de la tecnología biomédica, se ha comprobado que si establecer un diagnóstico con una
probabilidad de acierto del 95 % cuesta cinco unidades, para obtener una certidumbre del
96 % es necesario invertir 500 unidades, es decir hay que invertir 100 veces más.
Sin embargo los Sistemas Sanitarios actuales suelen estar más enfocados hacia la curación
de la enfermedad que hacia su prevención, lo que determina que sean sistemas caros e
intensivos en tecnología. La toma de conciencia por parte de los organismos internacionales
de esta realidad ha conducido a desplazar la atención de muchos estados, hacia la
intensificación de la asistencia primaria. La mayor atención hacia la asistencia primaria
modifica, en parte, las prioridades tecnológicas, al crear un nuevo tipo de demanda que sin
excluir la sofisticación técnica, prima la extensión del uso de esta, basándose en que resulta
más barato prevenir que curar.
Sin embargo, cada día los avances en el campo de las tecnologías médicas son más
espectaculares y por ende los equipos más sofisticados y costosos. Frecuentemente, en el
desarrollo de estas tecnologías, se utilizan logros obtenidos dentro de las investigaciones de
las Ciencias Técnicas y las Ciencias Exactas, por lo que sus principios de funcionamiento,
en muchos casos, están fuera del alcance de los profesionales de las Ciencias de la Vida,
quienes se convierten en meros usuarios.
De acuerdo con datos de la Food and Drug Administration (FDA), organismo que se
encarga en los Estados Unidos del registro, control y certificación de los dispositivos
médicos, en la actualidad pudieran existir más de 100 000 tipos diferentes de equipos
médicos y cada año se agregan a este arsenal 5 000 nuevos productos. Todo esto, es debido
a una fuerte relación entre la ingeniería y la medicina que ha dado origen, en los países
industrializados, a un gran complejo médico-industrial.
Por otra parte la industria de Equipos Médicos es una de las industrias de más alta
tecnología a nivel mundial. La inversión en Investigación y Desarrollo (I&D), como un
porcentaje de ventas netas, alcanza alrededor del 7%. Esto contrasta con las industrias
restantes las cuales giran en torno al 1%. La Investigación y Desarrollo (I&D), en la
industria de Equipos Médicos, está impulsada por una gran necesidad y potencial de
innovación.
La International Federation for Medical and Biological Engineering (IFMBE) así como el
American College of Clinical Engineering (ACCE) han definido al Ingeniero Clínico como
un profesional que mantiene y mejora los cuidados de salud aplicando la ingeniería y la
gestión de tecnología. En otras palabras el Ingeniero Clínico es un especialista, con
capacidad de gestionar integralmente la tecnología, dentro del ámbito clínico-hospitalario
y su presencia es parte integrante del hospital moderno.
- Lograr pequeños desarrollos para dar solución a diferentes problemas que se presentan en
el ámbito médico-hospitalario, propios del campo de la bioingeniería.
- Dirigir o participar en procesos de Evaluación, Valoración y Adquisición de Tecnologías
Biomédicas, escalonando las nuevas inversiones, a fin de propiciar la mejor selección de
acuerdo a la planeación estratégica de la organización, procurando adecuadas garantías de
mantenimiento del nuevo equipo a fin de asegurar su explotación durante toda su vida útil.
- Coordinar y administrar garantías y contratos de mantenimiento de la tecnología
biomédica instalada.
- Programar y dirigir la ejecución del mantenimiento preventivo para el equipamiento
médico instalado de acuerdo a las normativas oficiales vigentes y las recomendaciones del
fabricante.
- Efectuar el mantenimiento correctivo del equipamiento que lo requiera.
- Coordinar el almacenamiento y distribución de las partes, piezas de repuesto e insumos,
requeridos como soporte de la tecnología biomédica instalada en el hospital. Las piezas de
1.6. Bibliografía
El Instituto de Medicina estimó en el 2000 que la cifra de muertes por errores médicos
estaría entre 44000 y 98000 solo en los hospitales de EE.UU1, ya para el 2004 el mismo
Instituto planteaba que estas cifras continuaban en aumento. Una gran parte de estos
accidentes son imputables al uso inadecuado de equipos médicos como resultado de una
preparación insuficiente y falta de experiencia. Ya desde inicios de la década del 70 Ralph
Nader y Carl Walter denunciaron que unos 1200 norteamericanos podían ser electrocutados
cada año durante procedimientos rutinarios de diagnóstico y terapia. Walter H. Olson
plantea en los 90 que el incremento de la complejidad en los equipos médicos y su
utilización en más procedimientos, parejo a sus beneficios implica unos 10 000 accidentes,
sólo en Estados Unidos, en los cuales el paciente recibe algún tipo de daño. Una situación
tan o más aterradora es de esperarse en otros países, especialmente en el sur, infeliz
mercado de tecnologías biomédicas, que exhibe muy débiles procesos de adquisición y
deficiente gestión de riesgo en la operación de Tecnologías Biomédicas.
Tratando de especificar más las fuentes de riesgo que se deriven del uso del equipo
electromédico, se pueden citar:
1.- Procedente de la energía eléctrica, bien directamente a través del paso de corrientes por
el organismo, alterando sus funciones, o bien de forma indirecta debido a la generación de
radiaciones nocivas para el propio organismo.
2.- De causas mecánicas. Tal es el caso de equipos que presentan aristas vivas, equipos
inestables mecánicamente, mecanismos que favorecen la aparición de averías eléctricas,
etc.
3.- Las perturbaciones de alta frecuencia pueden enmascarar señales biológicas que sirven
de referencia al control de procesos automáticos, dando lugar a respuestas erróneas del
sistema.
5.- Las elevaciones excesivas de temperatura pueden provocar quemaduras o sobresaltos
indeseables.
5.- La posibilidad de producir explosiones, sobre todo cuando el equipo se utiliza en lugares
en que se trabaja con gases tales como el oxígeno, óxido nitroso y otros, normalmente
utilizados en aplicaciones terapéuticas.
6.- El funcionamiento incorrecto del equipo, por corrimiento de su punto de operación
conduciéndolo a brindar resultados alterados, diagnósticos equivocados o acciones
terapéuticas insuficientes que generarían nuevos problemas, como es el caso de
esterilizaciones defectuosas, tradicional fuente de infecciones.
También existen fallos catastróficos debido a la avería de componentes, todos los cuales el
diseñador debe saber prevenir.
Los equipos electromédicos de calidad están protegidos ante un fallo simple y en la
mayoría de los casos son capaces de indicarla y conectar circuitos adicionales para la
protección del paciente.
7.- Los errores humanos en la reposición de piezas, operaciones erróneas, etc., pueden
derivar en problemas de seguridad.
8.- Finalmente, los fallos en la alimentación del equipo han de preverse, especialmente en
aquellos casos en que un equipo garantiza la continuidad de una vida humana.
Tanto el diseñador como el fabricante y el usuario han de ser conscientes, en la medida que
les corresponda, de los riesgos apuntados. Cabe destacar que el paciente no suele estar
consciente del peligro a que está sometido, siendo incapaz de escapar de él, por estar en la
mayoría de los casos sin sus barreras naturales de protección y condicionado mentalmente a
recibir una ayuda y no una agresión.
Por otra parte no es solo el paciente el sujeto a tener en cuenta al valorar la seguridad de un
sistema. El médico u operador pueden verse expuestos a riesgos repetidos, como es el caso
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 8
de los radiólogos. Sin embargo en cualquier caso, el trabajador de la salud es el responsable
de los efectos que sobre el paciente tenga la aplicación del equipo, por lo que se le deberá
exigir un conocimiento preciso del manejo de los equipos y los riesgos de su uso.
La electricidad afectará de alguna forma al organismo cuando este entre a formar parte de
un circuito eléctrico. Para que circule una corriente eléctrica tienen que existir cuando
menos dos conexiones entre el cuerpo y una fuente de tensión externa. Pueden ocurrir 3
fenómenos cuando la corriente eléctrica fluye a través del tejido biológico:
Los efectos de corrientes eléctricas sobre el organismo dependen de varios factores, como
son:
Se puede definir como nivel de percepción, al mínimo nivel de corriente, que puede ser
detectado por una gran mayoría de personas, quienes la perciben, cuando resultan excitadas
sus terminaciones nerviosas.
Cuando alguien con las manos humedecidas agarra en cada mano un pequeño alambre de
cobre, conectados a un generador eléctrico, el más bajo umbral de percepción se detecta
alrededor de los 0.5 mA a 60 Hz. El umbral para corriente directa está entre 2 y 10 mA,
cuando se siente un ligero calentamiento de la piel.
Un efecto que puede ocasionar una corriente de elevado valor aplicada de manera continua,
al atravesar las fibras musculares, es el fenómeno de contracción muscular aguda,
produciendo además dolor, posibles desgarraduras del músculo, roturas de ligamentos e
incluso rotura de tejido óseo.
El mínimo umbral para la corriente límite del control muscular, es decir cuando la persona
no puede soltarse voluntariamente del contacto eléctrico, es de 6 mA.
i
músculo t
nervio tc
i = iR ( 1 + )
t
2 i
R
reobase
i
R
tc
cronaxia
Figura 2.1. Curva de intensidad-duración.
Cuando el nivel de corriente aplicado está por encima de la corriente de reacción puede
ocurrir una pérdida del control motor, motivando que el individuo no pueda, bajo esta
acción, aislarse del punto de aplicación de la corriente.
En dependencia del material biológico que se encuentra entre los electrodos, o sea
músculos, fibras nerviosas, receptores sensoriales, glándulas y fluidos del cuerpo, se
tendrán curvas de intensidad de estímulos contra duración similares, con diferencias
principales en la escala del eje tiempo. El umbral para el nervio es mucho menor por lo que
en pocas ocasiones se produce la activación directa del músculo.
Del análisis de estas curvas puede llegarse al criterio que mientras más corta sea la duración
del estimulo, mayor será la corriente requerida para lograr la estimulación, es decir para
frecuencias más altas es necesaria mayor amplitud, no obstante la intensidad del estimulo
aplicado tiene un límite, puesto que un estimulo de muy alta intensidad puede producir
Mediante experiencias con corrientes del orden de magnitud del umbral de percepción y de
la corriente de pérdida del control motor se ha deducido que los efectos de la corriente son
casi independiente de la frecuencia hasta unos 1000 Hz, figura 2.2, por encima de este
límite, si se desea obtener el mismo efecto, hay que aumentar la corriente proporcional a la
frecuencia.
En 1883, D’Arsonval demostró que la corriente a través del cuerpo humano no causa
sensación si se aumente la frecuencia más allá de 2 500 a 5 000 Hz. Otros investigadores
han coincidido también en que la tolerancia del cuerpo humano a la corriente se
incrementa con el aumento de frecuencia. Ejemplo de esto son las experiencias llevadas a
cabo por D'Arsonval, quien hizo pasar corriente de 1 A a través de dos sujetos para
encender una lámpara, con una frecuencia que oscilaba entre 0,5 y 1 MHz, sin que ninguno
de los individuos tomados de la mano experimentaran sensación alguna, además de dejar
pasar a través de su propio cuerpo una corriente de 3 A empleando alta frecuencia.
Cuando la corriente que atraviesa el tejido es incrementada por encima del valor umbral,
aparecen una serie de sensaciones que dependen del área del electrodo, su localización,
frecuencia y forma de onda de la corriente aplicada.
Con el aumento del área de los electrodos, con una densidad de corriente menor se llega a
la sensación de dolor, debido a que una mayor área del electrodo estimula un mayor
número de receptores, aumentando desproporcionalmente la percepción del estimulo.
Una corriente que atraviesa el organismo puede ser peligrosa o fatal si crea densidades de
corrientes locales en órganos vitales que sean suficientes para interferir con su
funcionamiento.
100
50
6
20 5
10 4
2 3
2
1
0.5 1
Un estimulo que contraiga el corazón provoca la obstrucción completa del miocardio, que
detiene la acción de bombeo del corazón interrumpiendo la circulación sanguínea. En el
límite, las fibras del miocardio se contraen caóticamente, perdiendo eficiencia el corazón,
dando lugar a una disminución generalizada de la presión arterial, que en un periodo breve
de tiempo puede producir daños irreversibles en el sistema nervioso central por carencia de
oxigeno, provocando la muerte. A este fenómeno se le denomina fibrilación cardíaca. La
fibrilación muscular es la causa que produce la muerte con mayor frecuencia en accidentes
eléctricos.
Quemaduras, daños
Fibrilación ventricular
Umbral de la percepción
Mínimo Típico
Umbral de percepción 0.5 mA 0.7 - 1.1 mA
Corriente límite de control muscular 6 mA 10.5 - 16 mA
Parálisis respiratoria 18 - 22 mA
Fibrilación ventricular 75 - 400 mA
Contracción sostenida del miocardio 1-6A
Tabla 2.2. Efectos fisiológicos de corrientes eléctricas.
Por lo general, son muchos los efectos que influyen en la magnitud de corriente eléctrica
necesaria para producir un efecto fisiológico concreto en un individuo. En la tabla 2.2 se
dan los valores aproximados de corrientes, así como efectos que producen estas para un
tiempo de exposición de entre uno y tres segundo y varios niveles de corriente alterna de 60
Hz aplicada al exterior del cuerpo. En las consideraciones precedentes se ha empleado
siempre la magnitud de la corriente eléctrica para describir el efecto de la electricidad.
115 V, 60 Hz
Vivo - negro
Tierra - verde
120 V Neutro - blanco
4 800 V
desde la subestación tubería de agua
tierra física
Vivo - negro
Tierra - verde
Neutro - blanco
El National Electrical Code (NEC) en su artículo 517-13 de 1990 establece que todos
receptáculos sean aterrados mediante cable (verde) aislado de cobre. Algunas viejas
Dentro de los casos típicos que se pueden presentar en una instalación hospitalaria y que
pueden dar lugar a peligros para el estado del paciente, produciéndole contracciones
musculares, fibrilación, etcétera, están el denominado macrochoque que ocurre cuando
fluye suficiente corriente a través de la piel del individuo para causar efectos motores,
quemaduras, fibrilación, etcétera y está el denominado microchoque referido a aquellas
situaciones en las que debido a la utilización de electrodos invasivos o próximos al corazón,
cantidades pequeñas de corriente, que no son detectadas por un individuo pueden provocar
fibrilación del músculo cardiaco u otros efectos adversos. Valores típicos que pudieran
producir la muerte por macrochoque y por microchoque se muestran en la Tabla 2.3.
Macrochoque Microchoque
[mA] µA]
[µ
20 - 200 20 - 200
Tabla 2.3. Nivel de corriente a 50 - 60 Hz que puede producir la muerte.
Desde luego los pacientes son sujetos que no están preparados para recibir estos riesgos
pues sus problemas son otros y se han puesto en manos del personal médico, luego es
necesario combinar todos los esfuerzos con el objetivo de contribuir a elevar la fiabilidad y
disminuir el riesgo de rotura de los equipos y las instalaciones.
Macrochoque Microchoque
[mA] µA]
[µ
2-5 < 10
Tabla 2.4.- Niveles de seguridad generalmente aceptados en caso de falla simple.
Los dos casos que por su importancia pueden darse como típicos en una instalación
hospitalaria son los siguientes:
Puesta a tierra
Red
Figura. 2.4.- Peligro de macrochoque.
El caso más típico de macrochoque se muestra en la figura 2.4, donde las partes metálicas
de un equipo no se ponen a tierra, luego un cortocircuito ocasional, o pérdida de
aislamiento del cable de alimentación con el chasis puede colocar a este a la tensión de
línea. En caso que un usuario toque el equipo, establece un retorno a tierra de la corriente.
E 110 V
Ip = = ≈ 11 mA
Rcc + Rc 10 kΩ + 1 Ω
Desgraciadamente este es al caso más burdo que pudiera encontrarse en una red
hospitalaria, pero que en muchos de los hospitales se viola, luego una medida que debe ser
prevista es la utilización de un tercer conductor de puesta a tierra, tal y como se ilustra en la
figura 2.5 evitándose los adaptadores de enchufe de 3 a 2 conductores, así como los
alargues y empalmes que pueden provocar aumentos de la resistencia del tercer conductor.
R cc Ip
Equipo
Cortocircuito Red
E Rm
Rc
Puesta a tierra
Red
Figura 2.5. Puesta a tierra de las partes metálicas accesibles.
Note que fallas por cortocircuito entre el vivo u otro alto voltaje dentro del equipo y tierra
no son tan comunes. Durante la operación normal del equipo son muy pequeñas o casi
nulas las corrientes que fluyen por el tercer conductor de tierra. El conductor de tierra no es
necesario para el funcionamiento del equipo, incluso ni para la protección al macrochoque
si no existe una falla. Por ello un cable de tierra roto o una pobre conexión del mismo no
son detectados durante la operación normal del equipo. Razón por la cual la continuidad del
conductor de tierra y la correcta conexión de la tierra en el receptáculo deben ser
comprobadas periódicamente, durante las tareas de mantenimiento preventivo, en las
instalaciones hospitalarias o por circuitos adicionales.
Este tipo de corriente presenta una pequeña componente resistiva que fluye a través del
aislamiento, el polvo y la humedad, así como una fuerte componente reactiva debido a los
acoplamientos capacitivos e inductivos entre los cables de alimentación, transformadores;
etcétera y el chasis del equipo. Si el aparato dispone de un tercer conductor (conductor de
tierra), la corriente fluirá por él, de forma que el chasis se situará a un potencial igual a la
corriente de fuga multiplicada por la resistencia del hilo de tierra. En casos normales esta
tensión nunca deberá exceder unos pocos mV, provocando una situación no peligrosa para
el paciente como fue analizado en la figura 2.4.
Otra situación se presenta cuando existe una conexión directa al sistema cardiovascular, de
manera tal que la corriente de fuga pueda atravesar el miocardio, en este caso aunque no
exista falla de aislamiento la corriente que se deriva a través del paciente, aunque muy
pequeña, pudiera causar estimulación no controlada del miocardio y poner en peligro la
vida del paciente (riesgo de microchoque), esta situación se ilustra en la figura 2.6.
Chasis
R . If
Catéter Ip =
R + Rp
If
R If If
EQUIPO Z
Ip
Enchufe Red
E R Rp
Puesta a tierra
Insistimos que un paciente está en peligro de microchoque sólo cuando tiene alguna
conexión eléctrica al corazón. La resistencia interna de un catéter lleno de fluido está entre
50 kΩ y 1 MΩ mucho mayor que la resistencia de los electrodos y conductores metálicos
que presentan los marcapasos y EGM. La resistencia interna del cuerpo al microchoque es
de unos 300 Ω y la resistencia de la piel puede ser bastante variable.
Hay dos métodos fundamentales de proteger a los pacientes del choque eléctrico: Primero
el paciente puede ser completamente aislado con respecto a todos los objetos conectados a
tierra y todos los equipos conectados a la corriente eléctrica. Segundo todas las superficies
conductoras en las cercanías del paciente pueden ser mantenidas al mismo potencial, el cual
no tiene necesariamente que ser el potencial de tierra. No obstante ninguna de estas
soluciones puede ser aplicada en su totalidad en la mayoría de los casos, combinándose
ambas y aproximándose todo lo que permita la práctica y la necesidad de aplicar tecnología
biomédica en los procesos de diagnóstico y terapia.
Por supuesto no sólo hay que proteger a los pacientes del peligro de accidentes eléctricos o
de otro origen, sino también al staff médico, paramédicos, personal de apoyo y visitantes.
Necesitan mayor protección los pacientes que tienen equipos directamente conectados,
ECG, EEG, EMG, etc., aumentándose el cuidado a pacientes con conexiones de equipos a
sus partes internas, como es en el caso de catéteres intravenosos y diálisis, necesitan la
máxima protección los pacientes con conexiones directas al corazón dada la existencia del
riesgo de micro choque. Estos criterios serán retomados en el momento de clasificar los
equipos de acuerdo a su riesgo, a fin de darle prioridad con respecto al mantenimiento.
Muchos de los métodos específicos de protección que serán descritos en este epígrafe
pueden ser usados en combinación para producir seguridad redundante.
Receptáculos
A la tierra física
a) Esquema
b) Diagrama eléctrico
La norma NEC Artículo 517-15 de 1990 regula la máxima diferencia de potencial que es
permitida en condiciones normales de operación, entre dos cualesquiera superficies
conductoras en la proximidad del paciente, según se muestra en la Tabla 2.5.
Por cada cama para paciente en áreas de cuidados generales deben existir al menos cuatro
receptáculos de corriente de toma simple o dos de doble toma. En áreas de cuidados
intensivos por cada cama para paciente deben existir al menos seis receptáculos de
corriente de toma simple o tres de doble toma. Se recomienda que todas las tomas de
corrientes próximas al paciente se ubiquen en un panel único con todas las tierras unidas a
una altura de 1,5 m.
En los receptáculos debe comprobarse que exista el voltaje de línea adecuado, baja
resistencia a tierra y la apropiada tensión mecánica a fin de garantizar el contacto firme
cuando se conecta el cable de alimentación de un equipo al receptáculo.
Las resistencias de la tierra y el neutro no deben exceder los 0.2 Ω. La mínima fuerza
mecánica para poder retirar una conexión individual en cualquiera de las tres salidas de un
receptáculo es de 115 g, tal y como se ilustra en la figura 2.9.
En el sistema de la figura 2.11, el LIM activa la alarma cuando la corriente total de fuga
excede los 5 mA, para el voltaje normal de línea. El LIM no debe accionar la alarma para
fugas por debajo de 3.7 mA. Las especificaciones completas al respecto aparecen en la
norma NFPA 99. La alarma del LIM significa que ha fallado el aislamiento, no significa
que esté circulando una corriente peligrosa, se indica un primer fallo que puede conducir a
una situación peligrosa. En otras palabras no hay por que desconectar de inmediato equipos
imprescindibles para algún paciente, puede incluso desactivarse la alarma a fin de que no
moleste, pero debe reportarse de inmediato al departamento de Ingeniería Clínica a fin de
restablecer íntegramente el sistema. El personal médico y paramédico debe estar entrenado
con respecto a la conducta a seguir ante este tipo de alarma.
Transformador
de Potencia Monitor de aislamiento de línea (LIM)
Aislado
Alarma
Vivo
Detector
Neutro
Tierra
Instrumentos
Los interruptores de circuitos con falla a tierra (ground-fault circuit interrupters: GFCI),
desconectan la fuente de suministro de potencia eléctrica cuando ocurre una falla a tierra
que deriva una corriente alrededor de los 6 mA o superior. En equipos eléctricos donde la
corriente de fuga es despreciable, la corriente por el vivo es igual a la corriente por el
neutro. El GFCI detecta la diferencia entre estas dos corrientes e interrumpe el suministro
de potencia cuando esta diferencia excede los 6 mA. Este dispositivo no distingue la vía de
retorno a tierra de la corriente es decir si es a través de el cable de tierra de un equipo o si es
a través de una persona.
Los estándares de la NEC, artículos 210-8 y 680-5 de 1990 establecen el uso de GFCI en
circuitos que sirven cuartos de baño, garajes, piscinas y otros similares. La NFPA-99
establece el empleo de GFCI en locaciones húmedas, particularmente áreas de hidroterapia.
El común de todas las áreas donde diferentes normas recomiendan o establecen el uso de
los GFCI es que la continuidad del suministro de potencia no sea esencial, más claramente
que al producirse la desconexión no se corte el suministro de equipos que soportan o
apoyan procedimientos terapéuticos que pudieran poner en peligro la vida de pacientes. Es
decir no se usan GFCIs en áreas de cuidados intensivos, salones de operaciones y similares.
Cuando puede interrumpirse el suministro eléctrico, el bajo costo de los GFCIs de unos 10
USD, los convierten en una atractiva alternativa económica con respecto a los sistemas de
distribución aislados cuyo costo está alrededor de los 2 000 USD.
Transformador
diferencial
Transformador de distribución
a)
mA
ms
b)
c)
La Guide for the Development of Medical Device Regulations. PAHO-WHO, 2002, enfoca
la seguridad del equipo medico como un proceso de gestión de riesgo durante toda su vida
útil, iniciándose desde su concepción, diseño y fabricación, por lo que diseñadores y
fabricantes deben tomar medidas para garantizar:
La importancia de contar con un buen circuito de puesta a tierra ya ha sido explicada en los
epígrafes precedentes. La mayoría de las fallas de la puesta a tierra en los equipos médicos
se producen en los contactos de la toma a tierra entre el receptáculo y el conector del cable
de alimentación del equipo, así como en el propio cable de alimentación donde se producen
roturas del conductor por fatiga a causa el uso o maltrato. Los cables de alimentación de los
equipos y conectores deben ser lo suficientemente robustos, así como deberán ser
comprobados frecuentemente durante las tareas rutinarias del mantenimiento preventivo.
Se debe alertar a todo el personal sobre la prohibición de usar adaptadores de dos a tres
conductores en equipos de uso médico, ya que interrumpen el retorno a tierra en caso de
falla.
La reducción de las corrientes de fuga en el chasis del equipo y en cables de paciente es una
importante meta para los diseñadores de instrumentos médicos. Se fabrican cables
especiales de alimentación para conectar a la red de suministro, con fugas por debajo de 1
µA/m. En cualquier caso es conveniente mantener los cables de alimentación tan cortos
como sea posible.
Las fugas internas entre el equipo y el chasis pueden ser reducidas colocando capas y
materiales aislantes que separen los potenciales del chasis y reduzcan las capacidades
parásitas asociadas. Particular atención debe brindarse a la solución tecnológica a fin de
El objetivo de la conexión a tierra es eliminar los potenciales peligrosos entre todas las
superficies conductoras. Una buena solución se logra si se emplean capas de aislamiento
para prevenir el contacto entre cualquier persona y el chasis o superficie conductora.
V Vo
b
Capacidad y Resistencia
asociada al aislamiento
Vcm
Vcm Viso
Vo = Vb ± ± × Ganancia
CMRR IMRR
Figura 2.13. Circuito equivalente de un amplificador aislado.
El voltaje de aislamiento Viso se define como el voltaje que existe a través de la barrera
aislante o entre el común de entrada y el común de salida y puede alcanzar valores entre 1 y
10 kV, sin llegar a ruptura. Las tres características principales de un amplificador aislado
son su alto aislamiento entre la entrada y la salida ( > 10 MΩ ), alto voltaje de modo aislado
( > 1000 V ) y alto rechazo de modo común ( > 100 dB ).
Barrera de
Aislamiento
Señal
- IN
+ IN
Vo
común
entrada
Potencia
voltaje +
flotante Fuente Oscilador +
-
Vcc = 15 V
-
Barrera de aislamiento
Vi Vo
Común de entrada
Común de salida
Figura 2.15. Circuito equivalente simplificado del ISO100 de la Burr-Brown.
+- 15 V Barrera +- 15 V
aislante
Convertidor
Señal, Vi frec.-voltaje Salida, Vo
Oscilador de
frec. controlada
Figura 2.16. Circuito equivalente simplificado del ISO106 de la Burr-Brown.
Clase I: Son aquellos equipos en los cuales la protección no solo se obtiene con el
aislamiento básico sino que se incluirán precauciones auxiliares, de manera que se disponga
de una conexión de las partes conductoras accesibles al conductor de tierra de forma
permanente, para que en caso de que exista fallo de aislamiento y exista un sobrevoltaje,
entren a jugar los órganos de protección separando o aislando el equipo de la fuente
principal. Un esquema básico donde se destaca el empleo del 3er conductor o cable de
tierra se muestra en la figura 2.17.
Clase II: Son aquellos equipos en los que la protección no solo recae sobre el aislamiento
básico, sino que se dispone de un doble aislamiento o se refuerza el aislamiento, no
existiendo nada previsto para una puesta a tierra de seguridad. Un esquema básico donde se
destaca el doble aislamiento se muestra en la figura 2.18.
Figura 2.17. Equipo Médico con tipo de protección contra descargas eléctricas Clase I
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 30
Figura 2.18. Equipo Médico con tipo de protección contra descargas eléctricas Clase II
Equipos B: Son aquellos clases I, II, o con alimentación interna que tienen previsto un
adecuado grado de protección contra corrientes de fuga y fiabilidad de la conexión de
tierra, se clasifican en este grupo todos aquellos equipos de uso médico que no tengan una
parte directamente aplicada al paciente, permitiéndose valores del orden de 0,1 mA de
corrientes de fuga en condiciones normales de explotación y de hasta 0,5 mA en la
condición de simple falla. Se emplean en aplicaciones con contacto externo o interno que
no incluya al corazón.
Equipos BF: son aquel tipo B con la entrada o parte aplicada al paciente, flotante
eléctricamente, permitiéndose niveles de corrientes idénticos a los del tipo B. Se emplean
en aplicaciones con contacto externo o interno que no incluya al corazón.
Equipos CF: Son aquellos clases I o II con alimentación interna que permiten un alto grado
de protección, en relación con corrientes de fugas y entrada flotante. Incluyen todos
aquellos equipos en que se pueda establecer un camino directo al corazón. Aquí debe
reducirse las corrientes de fuga hasta 0,01 mA en condición normal de trabajo y 0,05 mA
en condiciones de simple falla para pacientes y hasta 0,5 mA para corriente de pérdida de
lazo cerrado. Son obligatorios en aplicaciones cardiacas directas.
IEC 60601-1-1 Ed. 2.0 b:2000 Medical electrical equipment - Part 1-1: General
requirements for safety - Collateral standard: Safety requirements for medical electrical
systems
IEC 60601-1-2 Amd.1 Ed. 2.0 b:2005 Amendment 1 - Medical electrical equipment - Part
1-2: General requirements for safety - Collateral standard: Electromagnetic compatibility -
Requirements and tests
IEC 60601-1-2 Ed. 2.1 b:2005 Medical electrical equipment - Part 1-2: General
requirements for safety - Collateral standard: Electromagnetic compatibility - Requirements
and tests
IEC 60601-1-3 Ed. 1.0 b:1994 Medical electrical equipment - Part 1: General requirements
for safety - 3. Collateral standard: General requirements for radiation protection in
diagnostic X-ray equipment
IEC 60601-1-4 Amd.1 Ed. 1.0 b:1999 Amendment 1 - Medical electrical equipment - Part
1: General requirements for safety - 4. Collateral standard: Programmable electrical
medical systems
IEC 60601-1-4 Ed. 1.1 b:2000 Medical electrical equipment - Part 1-4: General
requirements for safety - Collateral Standard: Programmable electrical medical systems
IEC 60601-1-6 Ed. 1.0 b:2004 Medical electrical equipment - Part 1-6: General
requirements for safety - Collateral standard: Usability
IEC 60601-1-8 Amd.1 Ed. 1.0 b:2006 Amendment 1 - Medical electrical equipment - Part
1-8: General requirements for safety - Collateral Standard: General requirements, tests and
guidance for alarm systems in medical electrical equipment and medical electrical systems
S1 H
H
N
2 1 Equipo
N G bajo prueba
G
Chasis
partes conductoras
R < 0.15Ω en la superficie
Ohmetro
Figura 2.19. Esquema de medición de resistencia entre terminal de tierra y chasis.
La resistencia entre el terminal de tierra y el chasis del equipo o cualquier parte metálica no
debe exceder los 0.15 Ω. El esquema de medición es mostrado en la figura 2.19.
S1 H
H
N
2 1 Equipo
N G bajo prueba
G
Chasis
S4
Medidor
a)
mV
b)
Figura 2.20. a) Circuito para medir las corrientes de fugas del chasis. b) Circuito para
el medidor a ser usado.
Las corrientes de fugas del chasis no deben exceder 500 µA en equipos que se ubicarán a
trabajar fuera de las áreas de pacientes. Para equipos que estarán en la cercanía de pacientes
solo se permitirán fugas de hasta 100 µA. El esquema de medición se muestra en la figura
2.20.
partes aplicadas
S1 H al paciente
H
N
2 1 Equipo
N G bajo prueba
G
Chasis
S4
Medidor
Figura 2.21. Circuito para medir las corrientes de fuga a través de paciente.
terminales
de paciente
S1 H
H Equipo
N
bajo
2 1 µA
N G prueba
G
S4
También la corriente de fuga entre cualquiera dos terminales en contacto con el paciente o
entre cualquier terminal y los terminales restantes debe ser medida a fin de garantizar que la
corriente de fuga esté por debajo de 50 µA para equipos no aislados, para equipos aislados
el límite máximo será de 10 µA. El circuito de medición se muestra en la figura 2.22.
La corriente de fuga que circularía en el caso extremo que apareciera el voltaje de línea
sobre el paciente, puede medirse empleando el circuito que se muestra en la figura 2.23. La
corriente de fuga en este caso debe ser menor de 50 µA, a través de cada uno de los
terminales de paciente en un equipo aislado.
Microamperímetro
terminales de
..... paciente
H
S1 H
N
2 1 Equipo
N G bajo prueba
G
Figura 2.23. Circuito para medir la corriente de fuga que circularía si apareciera el
voltaje de línea sobre el paciente.
terminales de
..... paciente
H
S1 H
N
2 1 Equipo
N G bajo prueba
G
Microamperímetro
Figura 2.24. Circuito para medir la corriente de fuga a través del tercer conductor.
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 36
2.11.6. Corriente de fuga a través del conductor de tierra.
Un circuito para medir la corriente de fuga a través del tercer conductor o conductor de
tierra se muestra en la figura 2.24.
1
S2
H
S1 H 2
N
2 1 Equipo Cal
N G bajo prueba Start
G
S5
Chasis
S4
Cal
Microamperímetro
Medida S1 S2 S3 S4 S5
Calibración * * * * Cal
Fuga de chasis con polaridad normal a la entrada. 1 2 off on Start
Fuga a través del paciente con polaridad normal a la entrada. 1 1 off on Start
Fuga de chasis con polaridad invertida a la entrada 2 2 off on Start
Fuga a través del paciente con polaridad invertida a la 2 1 off on Start
entrada
Fuga de chasis con tercer conductor abierto y polaridad 1 2 off off Start
normal a la entrada
Fuga de chasis con tercer conductor abierto y polaridad 2 2 off off Start
invertida a la entrada
Fuga a través del paciente con tercer conductor abierto y 1 1 on off Start
corto circuito entre un terminal de paciente y el vivo.
Figura 2.25. Diagrama en bloques de un Equipo Analizador de Seguridad Eléctrica y
tabla de funcionamiento.
Un Equipo Analizador de Seguridad Eléctrica, está destinado para realizar todas las pruebas
de rutina, a fin de determinar, si los equipos eléctricos, las superficies conductoras y
receptáculos son eléctricamente seguros según los estándares reconocidos de seguridad. Un
diagrama en bloques de este equipo se muestra en la figura 2.25. El analizador de seguridad
es calibrado pasando el conmutador S5 a la posición de calibración. El equipo bajo prueba
es conectado mediante un receptáculo de salida del equipo analizador de seguridad
Dentro de las pruebas de aceptación que deben efectuarse a todo equipo que se adquiera por
el hospital, están las pruebas de seguridad eléctrica, las cuales comprueban el cumplimiento
de las normas de seguridad eléctrica vigente, tal como IEC 60601-1 y las especificaciones
del fabricante. Este registro constituye además un importante dato, pues constituye el punto
de partida de la estadística que posibilita estudiar la evolución de las corrientes de fuga y
otros parámetros en el tiempo, Este estudio permitiría establecer los tiempos mínimos, de
intervenciones entre mantenimientos preventivos, propios del hospital de acuerdo a sus
condiciones específicas.
Una propuesta de parámetros a medir durante una prueba de aceptación sobre la Seguridad
Eléctrica de un equipo electromédico siguiendo el estándar IEC 60601-1, se presenta en la
Tabla 2.7.
Tabla 2.7. Test de Seguridad Eléctrica para prueba de aceptación, IEC 60601-1.
1- “To Err is Human: Building a Safer Health System,” US Institute of Medicine (Report
2000).
2- IEC 60601-1; Medical electrical equipment - Part 1: General requirements for basic
safety and essential performance, 2005.
3- Rodríguez, E. y otros. Seguridad eléctrica en el diseño de Equipos Electromédicos I.
Ingeniería Electrónica, Automática y Comunicaciones. Vol. X, No.4, 1989.
4- A Guide for the Development of Medical Device Regulations. PAHO-WHO, 2002
5- Burr-Brown: Integrated Circuits Data Book, Chap. 3, pp.3.1 - 3.40, 1986.
6- The Use of Electricity in Patient- Care Areas of Hospitals. Federal Pioneer Limited,
Edmonton, May, 1985.
7- Galván, J y Pallás, R. Seguridad eléctrica en equipos e instalaciones hospitalarias,
Mundo Electrónico, Parte Y Rev. No. 93, pp. 43-53, Parte II, Rev. No. 94, pp. 67-78, 1980.
8- "Principles of Biomedical Inst. and Meas.". R. Aston, Merrill Publishing Company.
USA. 1990.
9- "Medical Instrumentation". John G. Webster, Houghton Mifflin Company. USA. 1992.
10- Uyttendaele, K. and others, Monitoring Instrumentation: Isolated Inputs, Electrosurgery
Filtering, Burns Protection: What Does It Mean? AN-748 Hewlett-Packard.
11. "Introduction to Biomedical Equipment Technology". Carr. J.J. Prentice-Hall, Inc. USA
1998.
Instalação/Aceitação
Infraestrutura
Uso Clínico Normas de Uso
Predial
3.2. 2. Gestión del Equipo Médico, tiene como objetivo general garantizar: operación
segura, máximas prestaciones y costo efectivo, de todos los Equipos Médicos (EM) en
uso, mediante el mantenimiento orientado a riesgo, a fin de, proporcionar un entorno seguro
y funcional, de todos los equipos y espacios, balanceando adecuadamente Mantenimiento
Preventivo (MP) y Mantenimiento Correctivo (MC). Sus tareas principales incluyen:
Conducir los procesos de adquisición del equipo médico.
Planificación, adquisición y distribución de piezas de repuesto, material gastable y
reactivos.
Controlar la instalación de EM, realizando las pruebas de seguridad y aceptación.
Administrar y controlar las garantías de los EM, asegurando que estos queden como
nuevos al concluir el periodo de garantía.
Diseñar y ejecutar Planes de Mantenimiento orientados a riesgo, documentando
adecuadamente todas las acciones de MP y MC.
Investigar, documentar e informar acerca de los eventos adversos que involucran a
EM.
Control de la accidentalidad relacionada con EM, removiendo del servicio EM
inseguros.
Mantener los inventarios de EM actualizados.
Control mediante indicadores y comparación con sus iguales a fin de mantener
estándares de calidad y excelencia en la prestación de servicios.
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 46
3.2.3. Gestión de riesgos, su objetivo es el de prevenir accidentes vinculados a la
tecnología biomédica, mediante los siguientes procedimientos:
Disciplina Tecnológica. Define el conjunto de reglas que propician el
funcionamiento seguro de la TB, relacionando los subsistemas de la Gestión
Tecnológica Hospitalaria con este fin.
Vigilancia del Equipo Médico, tiene como objetivo documentar los accidentes
vinculados a los Equipos Médicos y emitir alertas a la comunidad internacional a fin
de evitar su repetición.
3.2.6. Aseguramiento de la calidad tiene como objetivo brindar servicios de salud con el
empleo de TB, para la plena satisfacción de los pacientes, garantizando su Equidad,
Efectividad, Eficacia y Eficiencia, mediante prácticas de mejoramiento continuo de la
calidad, que incluyen:
Acreditación como entidad prestadora de servicios de salud.
Seguimiento, incorporación y cumplimiento de estándares, a partir de:
- Leyes y Regulaciones
- Normativas
- Estándares (ISO 9000, IEC, etc.)
- Recomendaciones (ECRI, FDA, NFPA, etc.)
- Otras.
Aseguramiento Metrológico. (Seguridad, Calibración, Verificación,)
Medición y evaluación mediante indicadores y comparación con sus iguales.
Mejoramiento Continuo y Rediseño de Procesos, para toda la Organización y cada uno de
sus establecimientos.
3.2.7. Información
Biblioteca Técnica
- Manuales de Servicio de todo el inventario de EM.
- Manuales de Operación de todo el inventario de EM.
- Leyes y Regulaciones
- Normativas
- Estándares (ISO 9000, IEC, etc.)
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 47
- Recomendaciones (ECRI, FDA, NFPA, etc.)
- Textos principales.
Conectividad en red.
3.2.8. Investigación-Desarrollo
Ejecución de proyectos y tareas de I + D.
Participación en eventos científicos.
En la figura 3.4 se presenta un gráfico que resume las funciones de la Gestión Tecnológica
Hospitalaria según se propone por el autor en este texto.
Información
•Biblioteca Técnica
I+I+D Capacitación •Conectividad
Figura 3.5. Principales funciones del Departamento de Ingeniería Clínica (Duke University)
- Dirección.
- Secciones o Especialidades Técnicas.
- Talleres Generales.
- Capacitación.
Equipos de Laboratorio.- Agrupa los equipos del Laboratorio Clínico y otros dedicados a la
Investigación Médica, Biotecnológica o Farmacéutica. Participan especialistas en
electrónica, automática, instrumentación y electromecánica
Equipos para la Oftalmología.- Agrupa los diferentes equipos utilizados para el diagnóstico
en la especialidad, así como otros de características especiales empleados para la terapia.
Participan especialistas en electrónica, instrumentación, óptica, automática y
electromecánica.
Óptica.- Agrupa los diferentes medios de magnificación y aplicaciones médicas del Láser.
Participan especialistas en electrónica, instrumentación, óptica, física, automática y
electromecánica.
Equipos Especiales.- Agrupa otros equipos que por su complejidad no se agrupen en otros
grupos, estos pudieran ser, litotricia extra corpórea, cámara gamma, RMN, oxigenación
hiperbárica, corazón artificial, etc. Participan especialistas en, electricidad, mecánica,
electrónica, instrumentación, automática y electromecánica.
Por supuesto otras agrupaciones más simples o más complejas pudieran hacerse siempre a
la medida de la institución en particular y buscando un uso eficiente de los recursos
humanos y medios disponibles.
3.4.3. Talleres Generales. Esta sección agrupa todas las acciones de apoyo al trabajo del
servicio de carácter general tal como: pintura, latonería, soldadura, maquinado,
galvanoplastía, circuito impreso, vidrio, reparación de motores, bombas, compresores,
transformadores, etc.
3.6. Bibliografía
− David, Y. and Judd T., “Medical Technology Management”, SpaceLabs Medical Inc.,
1993.
- Stephen L. Grimes, Convergence of Clinical Engineering and Information Technology,
CHIME, August 24, 2006.
- Duke University Health System. Department of Clinical Engineering,
Las organizaciones con liderazgo en cuidados de salud llevan a cabo una exitosa planeación
estratégica. El plan anual de planeación estratégica establecerá la visión de la organización
para un año así como sus objetivos y necesidades. La planeación estratégica se realiza a
largo plazo (normalmente de 2-5 años) y se actualiza anualmente.
2- Toda tecnología que se adquiera será aprobada de antemano por el área médica
especializada y el área ingeniería, a fin de cumplir los requerimientos de servicio en el
hospital, las normas de seguridad e higiénicas, garantizando ante todo su funcionamiento y
sotenibilidad a partir de la adecuada capacitación de los recursos humanos para su
operación y mantenimiento. Esta aprobación será reflejada por escrito y archivada por el
área de Ingeniería Clínica.
El servicio de Ingeniería Clínica debe brindar las respuestas a esas preguntas. Para un
proceso de planeación estratégica, el gerente de tecnología debe proporcionar a su
organización las entradas siguientes:
- El estado de la tecnología instalada.
- Resumen del estado del arte de las tecnologías biomédicas y su posible
impacto sobre el hospital.
- Justificación para la adquisición de nuevas tecnologías o mejoramiento de
las existentes.
Los ingenieros clínicos están calificados para participar en cada fase del ciclo de vida del
equipamiento, desde el inicio dentro de la investigación clínica hasta su retiro definitivo.
Ellos aplican sus experiencias y los conocimientos que tienen de sus hospitales e
intervienen y lideran el proceso de valoración tecnológica, planificación del presupuesto,
evaluación del equipamiento, el entrenamiento de los operarios, los servicios de reparación
y mantenimiento y la investigación acerca de nuevas alternativas de soluciones a problemas
de ingeniería. La participación de los ingenieros clínicos mejora la planificación para
nuevos equipos y la dirección de los ya existentes, y determinan en gran medida el impacto
positivo sobre la calidad en la atención, la dirección financiera o la efectividad de los costos
y el control de los riesgos.
Los ingenieros clínicos, como máximos responsables del proceso de VT, deben seleccionar
y aplicar la metodología para llevarlo a cabo de manera exitosa. Para ello el ingeniero
clínico debe poseer una detallada información de las necesidades reales del solicitante, ya
que sin una completa evaluación, el ingeniero clínico no es capaz de proveer una correcta
recomendación respecto a la compra del equipo en particular. Un proceso de VT incluye los
siguientes pasos:
b) Revisar toda la información relacionada con el equipo en cuestión como: Literaturas que
describan aplicaciones, regulaciones, riesgos, entre otras. Otro servicio complementario es
chequear base de datos en CD-ROM (ECRI) que proveen una muy útil información acerca
del proceso de toma de decisiones y valoración de la tecnología.
c) Hacer una lista con los requerimientos técnicos y clínicos del producto, indicando la
frecuencia de su uso y cómo se utiliza, además de las características que debe poseer, con el
propósito de ser considerado, teniendo en cuenta la fase del ciclo de vida a la que pertenece.
El equipo médico tiene un ciclo de vida que puede definirse como:
Estas fases difieren una de otra en el plano profesional de acuerdo a las técnicas que cada
una requiere, su impacto en el cuidado al paciente de acuerdo con los requerimientos y el
apoyo operacional requerido. Al evaluar la aplicabilidad de un dispositivo o sistema para
usarse en un hospital es necesario determinar a qué fase del ciclo de vida este equipo
pertenece actualmente.
d) Organizar dentro de las categorías los criterios antes señalados con el objetivo de realizar
una eficiente evaluación. Una lista de categorías puede ser la siguiente:
Una vez que se tienen bien enfocados los criterios a tener en cuenta, se hace una lista con
las características que reúne el “producto ideal”, es decir, aquel que cumple los mínimos
requerimientos, y se cumplen los siguientes pasos:
De acuerdo a los resultados del proceso de VT se expone cuál y por qué es el producto
seleccionado como el óptimo. Además, se presentan las recomendaciones para una futura
VT del área, así como la bibliografía, datos, literatura relevante y la información de los
fabricantes que se ha recogido.
Las crecientes presiones por una mejor calidad en la atención médica y el control de riesgo,
deben ser tomadas desde la objetiva proyección de las nuevas tecnologías. Un programa
bien organizado de valoración tecnológica deberá tener un impacto significativo en los
hospitales, con resultados positivos en su funcionamiento permitiéndole obtener el máximo
de prestaciones de calidad y seguridad a costos efectivos.
4.6. Bibliografía
− David, Y. and Judd T., “Medical Technology Management”, SpaceLabs Medical Inc.,
1993.
− Biomedical Engineering Handbook, Ed. J.D. Bronzino, CRC Press, Inc. 1995.
− Stiefel R. and Rizcalia E.,“Biomedical Instrumentation & Technology”. The elements of
a complete product evaluation, december 1995.
− Ronney B. Panerai y Jorge Peña Mohr.,“Medical Instrumentation”. The clinical
engineer’s role in selecting equipment, 1990.
− Staewen WS.,“Evaluación de tecnologías en salud, metodologías para países en
desarrollo, 1984.
− “Procedimiento para la evaluación y el registro de los equipos médicos importados”.
Centro de control estatal de equipos médicos. Cuba, marzo 1993.
− "While management of equitment service is important". Health Technology. vol 3. No.
4, winter 1989. ECRI.
− "Deciding on a type of service ". Health Technology. vol 3. No. 4 ,winter 1989. ECRI.
− "Formalizing contractual arrangements ". Health Technology. vol 3. No. 4 ,winter 1989.
ECRI.
− "Sample service contract and comentary ". Health Technology. vol 3. No. 4 ,winter
1989. ECRI.
− "Monitoring outside vendor service ". Health Technology. vol 3. No. 4 ,winter 1989.
ECRI.
5.1. Introducción
La Gestión del Equipo Médico, tiene como objetivo general garantizar: operación segura,
máximas prestaciones y costo efectivo, de todos los Equipos Médicos (EM) en uso,
mediante el mantenimiento orientado a riesgo, a fin de, proporcionar un entorno seguro y
funcional, de todos los equipos y espacios, balanceando adecuadamente Mantenimiento
Preventivo (MP) y Mantenimiento Correctivo (MC). Sus tareas principales incluyen:
Conducir los procesos de adquisición del equipo médico.
Planificación, adquisición y distribución de piezas de repuesto, material gastable y
reactivos.
Controlar la instalación de EM, realizando las pruebas de seguridad y aceptación.
Administrar y controlar las garantías de los EM, asegurando que estos queden como
nuevos al concluir el periodo de garantía.
Diseñar y ejecutar Planes de Mantenimiento orientados a riesgo, documentando
adecuadamente todas las acciones de MP y MC.
Investigar, documentar e informar acerca de los eventos adversos que involucran a
EM.
Control de la accidentalidad relacionada con EM, removiendo del servicio EM
inseguros.
Mantener los inventarios de EM actualizados.
Control mediante indicadores y comparación con sus iguales a fin de mantener
estándares de calidad y excelencia en la prestación de servicios.
1.- No necesariamente comprar el más barato, ya que puede ser el más caro de operar y
mantener. Considere el costo para adquirir los ítems necesarios para la operación,
mantenimiento o reparación, tales como electrodos, cables, baterías, reactivos y otros
insumos, así como piezas de repuesto, gastos de mantenimiento, etc. Un elemento
importante es el tiempo de garantía que ofrece el fabricante o su representante.
2.- Evite ser de los primeros en adquirir un nuevo modelo de equipo. Algunos modelos
aunque son probados y funciona bien como prototipos, al pasar a escala industrial presentan
deficiencias, en algunos casos toma entre 6 meses y un año remediar esta situación.
5.- Compruebe el equipo antes de su compra. Se reporta que hasta el 50% del
equipamiento en venta puede estar, en algún modo, defectuoso. Escoja las firmas que le
instalan el equipo en el hospital y le ofrecen un mes de prueba antes de la venta, junto a una
garantía mínima de un año. Eso solo puede ofrecerlo quien vende con calidad. Pasados el
periodo de prueba además de comprobar las condiciones técnicas es indispensable, para
autorizar la compra, el criterio favorable del staff médico.
6.- Compruebe particularmente antes de la compra. Que el equipo reúne todas las
condiciones de seguridad para pacientes y operadores que específica, que estas son las
adecuadas para su hospital y que cumplan con las regulaciones que están vigentes, tanto
nacional como internacionalmente. Estas pruebas deben hacerse por personal especializado
propio del hospital o por terceros sin vínculos con el vendedor o el fabricante.
El equipo debe pasar las siguientes pruebas eléctricas: Si no trabaja directamente sobre
pacientes su corriente de fuga entre la tierra y la cubierta y los controles ha de estar por
debajo de 500 µA. Si el equipo trabaja en pacientes su corriente de fuga ha de ser menor de
10 µA entre cualquiera de sus partes en contacto con el paciente (electrodos, transductores,
catéteres, etc.), incluidas la cubierta y los controles y tierra. Estas pruebas deben ser
aplicadas operando desde la red con el equipo conectado y desconectado de tierra y
desconectado de tierra invirtiendo la polaridad de la alimentación desde la red.
Todas las pruebas de seguridad normadas, más las especificadas por el fabricante deben ser
hechas o repetidas con el equipo instalado en el hospital y siempre por personal ajeno al
fabricante o vendedor.
7.- Entrenamiento del personal. Entre el 80-90% de los problemas que se reportan al área
de mantenimiento en un hospital, pueden llegar a ser por ignorancia o error de los
operadores, por falta de entrenamiento. Es importante garantizar el entrenamiento de los
operadores, así como del personal encargado del mantenimiento por parte del fabricante o
su representante. Es conveniente luego de un corto tiempo de explotación, cuando
8.- No compre lo que no pueda mantener. Ningún equipo opera sin un mínimo de
cuidados. Al instalar el equipo, debe incorporarse al sistema de mantenimiento preventivo y
comenzar su ejecución.
• Pruebas de seguridad
• Verificación y Calibración
• Mantenimiento Preventivo
En todos los casos a fin de seguir sus recomendaciones el fabricante o su vendedor deben
suministrar, los procedimientos y cartas para efectuar la verificación del equipo, y en
algunos casos, también debe suministrar accesorios específicos.
Las facilidades del taller de electrónica deben incluir probadores de CI, osciloscopios,
generadores de baja y alta frecuencia, fuentes, cargadores y probadores de baterías,
Es imprescindible seguir en cada caso las recomendaciones del fabricante, según las
instrucciones del manual de mantenimiento. Es recomendable la planificación de estas
acciones en fecha, empleando técnicas de mantenimiento programado en computadora.
Cada equipo tendrá un registro donde se anotará en detalle las acciones de mantenimiento
efectuadas.
Los Procedimientos para el Mantenimiento deben ser obtenidos a partir del fabricante y/o
agencias especializadas, tales como ECRI, AAMI, etc. Los contenidos y la frecuencia de
cada uno de los Procedimientos para el Mantenimiento, no son estándares sino modelos
sujetos a una adecuación particular en cada hospital
Las Tablas 5.1 a la 5.3 agrupan de acuerdo a ECRI a los Equipos Médicos en estos tres
niveles de riesgo.
- Aplicación Clínica- Considera los resultados sobre el paciente o usuario ante una falla del
equipo; el riesgo físico asociado con la aplicación clínica.
- Incidentes del Equipo/ Historia de fallas- se evalúa por los usuarios del equipo, gerentes
de la sección y personal del Departamento de Ingeniería Biomédica a partir de una
programación a fin de suministrar una base de datos para determinar tendencias y
requisitos. Hay equipos que se pueden eliminar del Inventario de Mantenimiento si su
historia sugiere que no requieren de estos servicios. De igual manera equipos que no estén
en el Inventario de Mantenimiento pero tienen una historia de reparación que lo aconseje se
pueden incluir en el programa.
- Requisitos del Mantenimiento- Los requisitos del Mantenimiento varían con el tipo de
equipo. Algunos equipos tales como ventiladores, máquinas de la diálisis y artículos
similares requieren mantenimiento extensivo. Equipos mecánicos, neumáticos o hidráulicos
requieren de alineación rutinaria o calibración por el personal de mantenimiento. Equipos
como los monitores fisiológicos y las bombas de infusión necesitan solamente que sea
comprobado su funcionamiento y su seguridad, por lo que tienen requisitos de
mantenimiento promedio.
Pi = E + C+ F + M + O (5.1)
Hay cuatro categorías de equipos cuyos intervalos no deben ser flexibles, independiente de
su historia de servicio, estos son:
1. Equipo de apoyo a la vida.
2. Equipo con reemplazo obligatorio de partes a plazos fijos.
3. Equipo que manejan altos niveles de energía.
4. Equipo con intervalos de mantenimiento sujetos a regulaciones de obligatorio
cumplimiento.
T
Donde:
Tareas Propuestas
1- ) Que nivel de prioridad asignaría a cada uno de los equipos médicos, que se reciben
directamente desde fabrica en el hospital.
1. Ventilador
2. Maquinas de circulación extracorpórea
3. Unidad de Electrocirugía
4. Monitor Signos Vitales
5. Computador para procesar datos clínicos
Cuando los procedimientos se diseñen a partir de la propia experiencia del hospital, estos
deben tener en cuenta o responder a las siguientes preguntas:
• ¿Qué hacer? identificar la tarea
• ¿Cómo hacerlo? El procedimiento a seguir
• ¿Cuándo hacerlo? La frecuencia que se debe aplicar
• ¿En que tiempo? Tiempo en el cual debe realizarse la tarea
• ¿Con qué? Herramientas y materiales a utilizar
• ¿Quién? Cantidad y calificación del personal
Cada equipo médico debe tener un expediente donde se recoja toda la información de
interés, a este expediente se le asocia un número que es único y que identificara al equipo
en particular, este número puede ser el de inventario o catastro. Se recomienda que
independientemente que se use un sistema informático, una ficha resumen de cada equipo y
el inventario general se conserve como copia escrita en archivo.
La información básica que el expediente de cada equipo medico, en formato digital, debe
incluir sería:
Las Órdenes de Trabajo (OT). Como su nombre lo indica, es una orden que indica llevar a
cabo una actividad de mantenimiento sobre un ítem específico, las OT generadas pueden
ser producto de: acciones correctivas, preventivas o inspecciones. La gestión de una OT
tiene varias etapas: apertura, ejecución, introducción de los resultados al sistema y cierre
como tal de la OT.
Las órdenes de servicio deben resultar funcionales y contener los datos mínimos necesarios.
Un formato básico de una OT aparece en la Figura 5.1, consta de tres partes la primera
recoge la solicitud de servicio, centro de costo, fecha y hora, nombre y ubicación del
equipo, problema que presenta y persona que emite la orden. La segunda parte se llena por
el técnico encargado y refleja su nombre, la hora en que se comienza atender la solicitud,
identifica al equipo con su código y número de inventario y las acciones llevadas a cabo
para restablecer el funcionamiento normal del equipo. La tercera parte recoge la fecha y
hora de la entrega al servicio del equipo de alta, la persona que lo recibe, la cual puede
reflejar cualquier observación que considere pertinente. De esta manera la orden de servicio
debe permitir calcular, el tiempo de respuesta, el tiempo de la intervención y el tiempo total
de cambio de estado, debe servir además para calcular el costo de servicio y relacionarlo
con un centro de costo y reflejar la historia de cada equipo médico.
Fecha:______________________________ Hora:___________________________
Equipo:_________________________________________________________________________________
Problema o Síntoma:______________________________________________________________________
________________________________________________________________________________________
Nombre:_________________________________________________ _______________________
Firma
Fecha:______________________________ Hora:___________________________
Equipo:_________________________________________________________________________________
# inventario: ____________________________________
________________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________________
Nombre:_________________________________________________ _________________
Firma
Fecha:______________________________ Hora:___________________________
Una vez que se logra un balance entre la carga planificada y los recursos humanos y
materiales disponibles, se hace la planificación anual. Es recomendable la planificación
semanal y organizar el trabajo de manera tal, que las tareas de mantenimiento preventivo se
inicien en los primeros días de cada semana, así si se producen órdenes de correctivo con
prioridad superior, estas pueden ser atendidas y después se continúa con el preventivo
planificado. No se recomienda iniciar trabajos de preventivos al final de la jornada semanal,
si estos pudieran comprometer la disponibilidad del equipo durante el fin de semana.
En este formato cualquier actividad de mantenimiento puede ser programada dibujando una
barra horizontal y cuyos extremos indiquen las fechas de inicio y fin de la actividad,
asociada además a esta barra debe ir también el recurso que se necesita para la realización
de la actividad. Adicionalmente, puede dejarse espacio para graficar una barra, adyacente y
paralela a la anterior, que muestra el progreso en la ejecución de la actividad. Es necesario
destacar que antes de colocar las barras en el gráfico hay que conocer la prioridad del
equipamiento.
Resulta conveniente llevar a cabo todas las acciones apuntadas apoyándose en un sistema
automatizado, cuya finalidad será la de proporcionar la documentación esencial y necesaria
de todos los equipos y espacios, en un tiempo mínimo, permitiendo además el análisis de
los datos y el control y evaluación de la gestión del mantenimiento. Existen varios sistemas
disponibles en el mercado, el HECS 4 de ECRI, es una buena referencia.
5.4. Bibliografía.
Como en una empresa, el servicio de Ingeniería Clínica tiene costos fijos y costos variables,
costos directos e indirectos, de mano de obra y otros. Y de manera similar a como la
empresa administra sus ingresos y egresos, el servicio de Ingeniería Clínica independiente
que funcione dentro de instituciones sin fines de lucro o públicas debe hacer lo mismo.
Una vez que ha sido determinada y aprobada la compra de un equipo médico, es necesario
la elaboración de un contrato de compra-venta, basado en requerimientos de carácter
internacional y que permite además la protección de los intereses del hospital. Muchos
contratos son firmados sin el verdadero o completo entendimiento por ambas partes. Los
contratos ofrecidos a hospitales no son una excepción en este sentido. Mientras el hospital
está enfrascado en la negociación de los términos como precio y servicio a realizar, otros
términos y condiciones son aceptados sin mucha discusión o entendimiento.
En este trabajo se presenta un estudio acerca de los aspectos más importantes a tener en
cuenta durante las discusiones para establecer un contrato de compra-venta. Se particulariza
en el aspecto de la garantía describiendo cada una de las funciones que esta incluye, y sobre
la responsabilidad que en el cumplimiento de sus acciones poseen ambas partes una vez que
halla sido contemplada dentro del contrato.
Debido a la alta responsabilidad que implica el cuidado del paciente, el hospital posee
inevitables motivos que lo obligan a tomar las medidas más razonables, que aseguran la
realización apropiada del servicio convenido. Por esta razón el servicio del vendedor
durante el período de garantía, debe ser monitoreado de acuerdo con los requerimientos
propuestos en la documentación, con el fin de verificar la calidad de cada acción realizada.
1. Objeto del contrato.- Adquisición de un equipo, o sistema que cumpla con las
especificaciones técnicas solicitadas.
2. Importe total.- El valor total del contrato que incluye el costo de empaque, marcaje, y el
por ciento de descuento para la empresa importadora. También pudiera abarcar la
documentación técnica, servicios de dirección y montaje, pruebas de funcionamiento,
puesta en marcha y etapa de garantía, derechos de aduana, impuestos, etc.
3. Ejecución del contrato.- Se considera ejecutado después que halla sido firmado por
ambas partes, las cuales poseen las copias firmadas.
9. Condiciones y formas de pago.- Puede ser contra la presentación de los documentos, por
carta de crédito hasta 10000 USD, o por carta de crédito superior a 10000 USD.
11. Penalidades.- Podrán aplicarse por demoras en las fechas pactadas y/o incumplimientos
en los parámetros técnicos requeridos. No será motivo de penalidades los retrasos
producidos por causa de fuerza mayor.
12. Reclamaciones.- El comprador tiene derecho a reclamar, por escrito al vendedor por
todos los incumplimientos en que este incurra. El vendedor está en la obligación de
examinar las reclamaciones e informar las medidas para su solución en un término de 30
días. El comprador tiene derecho a reclamar por todos los defectos ocultos del suministro
dentro del período de garantía.
15. Garantías.- Aspectos que deben tenerse en cuenta al establecer las condiciones de la
garantía.
El personal de mantenimiento encargado de estas acciones, por parte del vendedor, tiene
que poseer un mínimo de calificación. Existen regulaciones que permiten que ciertos tipos
de equipos sean atendidos por el vendedor o por personal cuya calificación es equivalente a
la del vendedor. En estos casos el personal de servicio tiene que poseer evidencia de
entrenamiento que satisfaga los requerimientos del vendedor.
4) Partes y materiales: El servicio del vendedor incluye las piezas de repuesto para las
partes defectuosas y materiales del equipo, de acuerdo al listado de la solicitud de oferta.
Exceptuando un listado de partes que será facturado por el vendedor de acuerdo a un listado
de precios de los mismos.
Un representante del hospital debe estar presente durante el momento que el vendedor
brinda el servicio. Debe facilitarse al vendedor el acceso al equipo, y a la información que
requiera, así como un espacio de trabajo adecuado a una distancia razonable del equipo.
Todas las excepciones que el hospital podría esperar recibir, deben aparecer en esta
sección. Se prevé que el vendedor no tiene que brindar servicio por hechos ajenos al
desgaste o rotura normal del equipo, por lo que el hospital tendrá que pagar por tal servicio.
VI. Terminación.
Cada parte tiene el derecho de terminar el contrato si al menos una, rompe o incumple
algunas de sus obligaciones. Y tales incumplimientos son imposibles de ser solucionados,
en el periodo de tiempo dispuesto, según el evento de incumplimiento que se trate. Estos
son:
- Si ocurre algún evento de incumplimiento, cada parte debe devolver a la otra, cualquier
equipo o propiedad de la otra parte, en su posesión.
La responsabilidad potencial del hospital por los daños a pacientes como resultado del
servicio deficiente al equipamiento, ya sea por su propio personal, o por el del vendedor, es
otra razón para una cuidadosa supervisión de todo servicio al equipamiento.
El mito de que el servicio de garantía no cuesta nada no es una justificación para ignorar las
obligaciones del fabricante, pues el hospital ha pagado por ese servicio como parte del
precio de adquisición. Por lo tanto el monitoreo durante el período de garantía debe incluir
el chequeo para asegurar que todo el mantenimiento preventivo es realizado, si está
incluido en la garantía, y que los requerimientos de reparación se realizan a tiempo y
apropiadamente. Sólo con un cuidadoso control de los registros del servicio podrá el
hospital tomar decisiones sobre la base de la experiencia, acerca del servicio de post-
garantía.
Otra medida importante de este servicio es la seguridad que antes que la garantía expira,
todos los problemas presentados han sido reportados al fabricante. Esto requiere que se
lleve un documento de control por los departamentos de usuarios, de forma que los mismos
tengan conocimiento de la fecha de expiración de la garantía. Además si existen problemas
pendientes cuando la garantía expira, el hospital podría obtener una confirmación escrita de
que la reparación será completada bajo garantía.
Se considera que el monitoreo del servicio externo es mejor manipulado por el servicio de
Ingeniería Clínica, si su dirección entiende y es capaz de poner en práctica los temas
presentados en este estudio.
El hospital debe prestar particular atención a los equipos cuyo costo de servicio es muy
alto, tales como la TAC y RMN.
Para facilitar el monitoreo de un número sustancial de servicios externos son necesarios dos
métodos de registro:
• Uno que contenga todos los documentos, incluyendo el contrato, notas de discusiones y
correspondencia. Este modelo debe mostrar datos importantes del diario, copias de los
reportes de servicio, y otros documentos que permitirán revisar el cumplimiento del
contrato y la historia de servicio al equipo. Toda la información debe ser recogida en un
sistema de control computarizado.
Ambos métodos de registro deben revisarse periódicamente, para tener la seguridad que
todos los vendedores cumplen los requerimientos.
Si la calidad del servicio del vendedor es medida sólo por realimentación desde los
departamentos usuarios, puede darse el caso de que existan servicios sin la adecuada
calidad, debidamente notificados y corregidos, al menos hasta que el problema conlleve a
serias consecuencias. En estos casos la calidad del cuidado del paciente puede ser
adversamente afectada.
Por esta razón el monitoreo de la calidad del servicio del vendedor es un aspecto muy
importante a tratar. Un sistema de control computarizado del equipamiento puede proveer
un volumen considerable de información útil para este propósito, si todos los detalles
pertinentes del servicio son introducidos en el sistema. Tales datos almacenados permitirán
seguir el curso del tiempo de respuesta y de solicitudes repetidas para el servicio de un
equipo en particular. Siendo estas últimas dos señales importantes de la calidad del
servicio. Otra herramienta de monitoreo lo constituye la revisión periódica de los registros
Además el servicio de alta calidad debe incluir la comunicación con usuarios del equipo,
idealmente con la persona que reporta el problema. La causa del problema y los pasos para
corregirlo, deben ser documentados en el reporte de servicio técnico. Adicionalmente se
elevará el nivel de satisfacción con el servicio, comunicar la misma información,
personalmente o por escrito, a la persona que reporta el problema.
Todo esto permite un control estricto sobre el equipamiento médico, incluyendo los equipos
que se encuentran dentro del período de garantía del fabricante. Y contiene la historia de
eventos e incidentes de los equipos, facilitando las decisiones en la búsqueda de nuevas
variantes de tecnologías presentes en el mercado.
Se recomienda además la necesidad del seguimiento de todas las acciones que realiza el
vendedor sobre el equipo objeto del contrato, montaje y puesta en marcha, sustitución de
partes, verificación y calibración, mantenimiento preventivo; y todas aquellas que expresen
idea de la calidad del servicio ya pagado. Por esa vía el personal de ingeniería protegerá al
hospital de gastos adicionales.
6.5. Bibliografía.
1. "The Clinical Engineering Profession. Mutual Recognition of Qualifications for
Clinical Engineers". International Federation for Medical and Biological
Engineering, 1989.
2. "While management of equitment service is important". Health Technology. vol 3.
No. 4, winter 1989. ECRI.
3. "Deciding on a type of service ". Health Technology. vol 3. No. 4, winter 1989.
ECRI.
4. "Sample service contract and comentary ". Health Technology. vol 3. No. 4, winter
1989. ECRI.
5. "Formalizing contractual arrangements ". Health Technology. vol 3. No. 4, winter
1989. ECRI.
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 86
6. "Monitoring outside vendor service ". Health Technology. vol 3. No. 4, winter
1989. ECRI.
En el Sector Salud se utilizan habitualmente cuatro palabras con las que se pretende
enmarcar el accionar sanitario. Estas son: Equidad, Efectividad, Eficacia y Eficiencia.
Cuando la prestación de servicios se realiza con equidad, esto es dar más a quién más
necesita garantizando la accesibilidad, con eficacia, esto es con metodologías y tecnologías
adecuadas, con efectividad, esto es alcanzando cobertura e impacto adecuados, y con
eficiencia, esto es con rendimiento y costos acordes, podemos decir sin duda que esto
constituye Calidad de los Servicios de Salud.
Existen algunas consideraciones importantes respecto del término calidad que vale la pena
tener en cuenta. En primer lugar calidad no es sinónimo de lujo o de complejidad, sino que
por el contrario la calidad debe ser la misma en todos los niveles de atención. En segundo
lugar no constituye un término absoluto sino que es un proceso de mejoramiento continuo.
En tercer lugar es una cualidad objetivable y mensurable. Por último no depende de un
grupo de personas sino que involucra a toda la organización.
Decimos también que es el grado en el cual los servicios de salud para los individuos y
poblaciones mejoran la posibilidad de lograr resultados deseados en salud y son
congruentes con los conocimientos profesionales actuales.
Otra forma posible de definir la calidad es como el grado en que el servicio prestado se
aproxima al prototipo, entendiendo por tal, el modelo óptimo de asistencia que debería
prestarse a tal paciente.
Este concepto de calidad exige la definición previa de las características del modelo de
atención o servicio prestado (normas), en función de poder determinar el grado de
aproximación al ideal u óptimo que, a su vez, definirá el grado de calidad alcanzado.
Otra de las corrientes actuales es la orientación hacia los resultados en detrimento de los
procedimientos: Las normas ISO están dirigidas a crear patrones, guías de actuación, sin
embargo, últimamente los servicios sanitarios han entendido que no basta con garantizar la
calidad, sino que es necesario incluir dentro de los planes estratégicos la mejora continua de
la calidad. Esto significa que no basta con cumplir patrones de calidad en los
procedimientos, sino que los resultados de aplicarlos serán los que nos avalen la calidad.
Las sociedades científicas tienen la responsabilidad de crear y revisar los estándares en los
que se basan las acreditaciones. Los modelos que se están utilizando actualmente son
demasiado empresariales y es el propio colectivo médico el que debe revisar los patrones y
ajustarlos a la realidad sanitaria. Estos patrones deben, además, ajustarse a las posibilidades
de cada país. Afortunadamente cada vez las claves del éxito son más públicas y se está
llegando a unos estándares internacionales que son realmente capaces de asegurarnos la
calidad.
La situación del hospital es única ya que involucra a pacientes cuya seguridad y cuidado
depende completamente del personal médico y paramédico, cuando estos conectan a
aquellos, a diferentes instrumentos o equipos médicos, durante el diagnóstico o el
tratamiento.
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 89
Debido a la proliferación de instrumentación y equipos médicos en hospitales y clínicas con
sus riesgos y problemas asociados, muchas tragedias han ocurrido entre las cuales se
cuentan prótesis e injertos ortopédicos de materiales inapropiados, desfibriladores cardíacos
con circuitos eléctricos defectuosos, válvulas defectuosas en respiradores de oxígeno de
emergencia, marcapasos defectuosos, quemaduras con unidades de electro cirugía y
explosiones de cámaras hiperbáricas entre otras muchas.
Para garantizar que la seguridad y eficacia sean prioridad durante los procedimientos para
el diagnóstico y la terapia, así como también para garantizar seguridad al personal del
hospital, varias regulaciones y estándares se han establecido. Las regulaciones y estándares
cubren un amplio espectro de funciones en instalaciones dedicadas al cuidado de la salud,
tales como el mantenimiento del edificio, los sistemas eléctricos, la preparación del
personal, la instrumentación y los equipos médicos usados en unidades de cuidados críticos
para emergencias, salas de operaciones y unidades de cuidado intensivos.
No resulta ocioso advertir que la FDA solo protege con su acción al ciudadano
norteamericano, en otras palabras, si por no cumplir con regulaciones vigentes cualquier
fabricante en los Estados Unidos se le prohibe la venta de sus productos por parte de la
FDA en ese país, porque se considera que puede representar peligro para las personas, la
prohibición no limita al fabricante de vender sus productos a otro país diferente de Estados
Unidos. Por lo que en última instancia la responsabilidad con respecto a la seguridad y
eficacia de un equipo médico, en la mayor parte del mundo, es del comprador.
ECRI se auto titula agencia de investigación al servicio de la salud sin fines de lucro y
colabora activamente con la Organización Mundial de la Salud. Por más de 30 años se ha
mantenido suministrando información y asistencia técnica a organizaciones relacionadas
con el cuidado de la salud. Los resultados de las investigaciones y experticia de ECRI
pueden adquirirse a través de sus publicaciones, sistemas de información, archivos,
programas de asistencia técnica, servicios de laboratorio, seminarios y becas.
ECRI cuenta con staff de tiempo completo que incluye, especialistas en la tecnología de los
cuidados de la salud, administración hospitalaria, análisis financiero, administración de
riesgos, ciencias de la computación y la informática, planificación hospitalaria, abogados,
médicos, biomédicos, ingenieros eléctricos, electrónicos, químicos, mecánicos, así como
Las diferentes áreas para las cuales la JCAHO genera estándares y realiza evaluaciones a
fin de acreditar al hospital son:
Estas normas resultan muy útiles al ingeniero clínico al llevar a cabo sus funciones en
sistemas de emergencia, seguridad de pacientes, choque eléctrico, gestión de riesgos y otros
aspectos relacionados.
IEC es la organización mundial que realiza y publica los estándares internacionales para la
tecnología eléctrica y electrónica. IEC fue fundada en 1906, como resultado de una
resolución aprobada por el Congreso Eléctrico Internacional en St. Louis en 1904. Los
miembros pertenecen a unos 50 países. Los miembros dan a los países la posibilidad de
participar de las actividades de estandarización internacional; los miembros regulares son
comités nacionales los cuales tiene igual derecho de votación.
Toda la organización de IEC es diseñada para asegurar que los comités nacionales tengan
gran peso en la toma de decisiones.
La IEC, posibilita la participación limitada de países con pocos recursos, estos pueden tener
la condición de observador y pueden participar de todos los encuentros de la IEC, pero sin
tener derecho a votar.
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 99
La misión de la IEC es promover a través de sus miembros la cooperación internacional en
todo lo que refiere a la estandarización electrotécnica y materias relacionadas, como la
valoración de estándares en los campos de la electricidad, la electrónica y tecnologías
afines. IEC abarca todas las electrotecnologías incluyendo electrónica, electromagnetismo,
electroacústica, telecomunicaciones y producción y distribución de energía y asociaciones
de disciplinas como tecnología, desarrollo, dependencia, diseño y seguridad del medio
ambiente.
Según esta misión los objetivos de la IEC son:
• Determinar los requerimientos del mercado global de manera eficiente.
• Asegurar la primacía y el máximo cubrimiento del uso de los estándares.
• Valorar y mejorar la calidad de los productos y servicios hechos por estos estándares.
• Establecer las condiciones para el intercambio de sistemas complejos.
• Incrementar la eficiencia de procesos industriales.
• Contribuir a la protección del medio ambiente.
Un estándar provee un criterio para realizar un juicio, para el IEC son documentos
establecidos por consensos y aprobado por un reconocido grupo.
En 1946 en Londres, se funda ISO, eligiendo para su sede a Ginebra, Suiza con el objetivo
de oficializar la coordinación internacional y la unificación de estándares industriales. Entra
en operación el 23 de febrero de 1947. Es un error común el pensar que ISO significa
International Standards Organization - Organización Internacional de Estándares, o algo
similar; ISO no es un acrónimo; proviene del griego “iso”, que significa igual. En inglés su
nombre es International Organization for Standardization, mientras que en francés se
denomina Organisation Internationale de Normalisation; el uso del acrónimo conduciría a
nombres distintos: IOS en inglés y OIN en francés, por lo que los fundadores de la
organización eligieron ISO como la forma corta y universal de su nombre.
Hay poco acuerdo o estandarización acerca de los indicadores para evaluar a las
organizaciones relacionadas con la gestión de equipos médicos. Y las que dan sus primeros
pasos en este terreno, necesitan de propuestas claras. En el presente capitulo se sugieren un
grupo de indicadores para controlar y evaluar la gestión de mantenimiento del equipo
medico. Los indicadores propuestos permitirán, a la organización que los emplee, efectuar
correcciones y ajustes al programa de gestión, con vistas a mejorar los resultados y
enriquecer su experiencia. La selección de los indicadores se ha hecho a partir de los que
con mayor frecuencia son empleados por prestigiosas instituciones prestadoras de servicios
de salud, a veces con diferente nomenclatura pero sin diferencias significativas. La adopción
por cualquier organización de este conjunto de indicadores permitirá un medio de
comparación con sus iguales, así como una vía de medir sus resultados y calcular sus
potencialidades.
Los indicadores son esenciales en la gestión de calidad y el cambio y por tanto para la
supervivencia de la organización. Un indicador debe reunir las siguientes características:
– Bien definido: Deben ser consistentes para todos los observadores y su
forma de medición estar claramente establecida
– Objetivo: Que sea claro y conciso. Que no sea alterado por opiniones, o
estados de ánimo. Todos los observadores obtienen el mismo resultado.
– Mesurable:¿Sí usted no sabe lo que va a medir o como lo va a medir como
sabrá luego que un cambio determinado en el indicador le representa una
mejoría o lo contrario en el comportamiento de cierto evento?
– Válido: El indicador debe tener una relación directa con la estructura,
proceso o suceso que esté midiendo, para que exista una posibilidad real de
validación (gráficas de ajuste, etc.).
Real
% Disponibilidad = %
Programada
(7.1)
Ejemplo; si un equipo del Laboratorio Clínico pudiera ser utilizado en este servicio,
programado de lunes a viernes en el horario de 8:00 AM a 11:00 AM, este equipo deberá
estar 15 hrs. disponibles a la semana y 15 x 52 = 780 horas al año. Si el equipo estuvo de
baja desde un jueves a las 10:00 AM hasta el siguiente lunes a las 9:00 AM, el equipo
incumple su plan de disponibilidad en 5 horas, entonces:
Horas realizadas
Cumplimiento en tiempo % = × 100 (7.2)
Horas planificadas
Mantenimientos realizados
Cumplimiento en eventos % = × 100 (7.3)
Mantenimientos planificados
7.5.2.4. Eficacia del mantenimiento correctivo: Este indicador permitirá una evaluación
de la eficacia del mantenimiento correctivo y a la red comparar a los distintos integrantes a
fin de perfeccionar el trabajo de cada uno de ellos.
∑ tiempos de respuestas
Tiempo de respuesta promedio = (7.5)
# de solicitudes
Estos indicadores son útiles y aportan otros criterios valorativos sobre la eficacia del
mantenimiento correctivo y se recomiendan si el sistema está automatizado. La cantidad de
solicitudes resueltas en el día precisa pero no brinda más información que el tiempo
promedio de cambio de estado, que si por ejemplo, es bajo, digamos 3 horas; se puede
suponer entonces que la mayor parte de las solicitudes se resuelven en el día. La cantidad
de solicitudes repetidas, resulta útil, ejemplo típico es el caso de un equipo al cual como
resultado de la primera solicitud se le cambio un fusible, pero que a las 2 horas se recibe
otra solicitud por la misma causa que la primera, lo cual indica que la falla no fue
solucionada y está aún latente. Ello es un indicador que puede estar relacionado con
necesidad de superación, demasiada presión sobre el personal técnico o negligencia, entre
otros. De igual manera es útil registrar las falsas solicitudes, es decir aquellas llamadas que
se producen estando el equipo 100 % operacional, tal es el caso que puede producirse con
un equipo desfibrilador/cardioversión, en que el operador selecciona para desfibrilar
cuando el paciente presenta complejo QRS, no es el equipo el que falla, es error del
operador. Este registro, mide la necesidad de superación del personal del servicio médico
en relación con la tecnología instalada.
7.5.2.5. Costos
Este indicador compara los costos de mantenimiento, contra los costos de adquisición del
equipo.
Gastos totales - Costo repuestos
Costo hora =
Costo del Mantenimie nto =
Gastos totales %
% (7.9)
(7.8)
Tiempo preventivo + Tiempo correctivo
Costo del Equipamiento
Este indicador, permite conocer el costo de la hora de servicio y se utiliza además para
facturar las tareas de mantenimiento por centros de costo. Se considera que el costo del
mantenimiento está entre el 1.75 y el 5 % del costo de adquisición del equipamiento, si este
se mantiene dentro de límites aceptables. El costo de la hora de servicio en EEUU está
entre los 45 y los 65 USD4, pero no son una referencia valida para el resto de los países al
sur por diferentes razones. El término equivalente en lengua inglesa de este indicador es el
de “Costs”.
7.6. Bibliografía.
1. Food and Drug Administration. "Everything You Always Wanted to Know about
the Medical Device Amendments and weren't Afraid to Ask." HEW Publ. No. (FDA)
77-5006. Silver Spring. Maryland. 1977.
2. Accreditation Manual for Hospitals.’ JCAHO. 875 N. Michigan Avenue, Chicago,
Illinois.
3. “ANSI/NFPA 99 Health Care Facilities.” Boston. Massachusetts.
4. “OSHA Safety and Health Standards” (29 CRF 1910). U.S. Dep. Labor.
Washington. D.C.
5. “Hospital Occupational Health and Safety.” NIOSH 77-41. Washington. D.C.
6. “Hospital Occupational Health Services Study.” NIOSH 75-104, 75-154, 76-107,
76-115. Washington. D.C.
7. “Code of Federal Regulations.” U.S. Title 10 and Title 42. U.S. Gov. Print. 0ff.,
Washington. D.C. 1977.
8. Food and Drug Administration. “Bureau of Medical Devices Standards Survey.”
International Edition. Silver Spring. Maryland. 1978.
9. Food and Drug Administration. “Bureau of Medical Devices Standards Survey.”
National Edition. Silver Spring, Maryland, 1978.
En la actualidad se reconoce que los conceptos de seguridad y riesgo deben ser dirigidos a
través de normas que enfoquen la gestión de riesgo, lo cual ha sido definido como la
aplicación sistemática de políticas de gestión, procedimientos y prácticas que involucran el
análisis, la evaluación, el control y la comunicación del riesgo.
CONCEPCIÓN
Y
DESARROLLO
I+D
DOCUMENTACIÓN
TÉCNICA
EMPAQUETAMIENTO
FABRICACIÓN Y FABRICANTE
ETIQUETEADO
GESTIÓN DESTINACIÓN
DE Y
ADVERTENCIAS
VENTA VENDEDOR
RIESGO
INSTALACIÓN
USO
ADQUISICIÓN Y
MANTENIMIENTO
EVALUACIÓN
Y USUARIO
VALORACIÓN
DESHECHO
O
REEMPLAZO
Una referencia obligada para cualquier análisis o proyección sobre vigilancia de equipos
médicos lo constituyen los más de 25 años de experiencia transcurridos desde que en los
Estados Unidos de América se iniciaron los estudios para determinar la incidencia de los
efectos adversos, los daños y las muertes, asociados con los equipos médicos. No existían
entonces requisitos que establecieran que los equipos médicos debían ser vigilados
1) Determinar la incidencia y las características de los efectos adversos causados por los
equipos médicos entre los pacientes y los profesionales de la salud;
2) Recomendar un sistema de medición práctico que permitiera identificar, informar,
analizar y prevenir la ocurrencia de los eventos.
Durante 1973, los resultados del estudio de ECRI para la FDA reflejaron que:
• los profesionales de la salud percibían que los peligros con los equipos médicos podían
ocurrir ocasionalmente;
• las áreas clínicas de los hospitales (unidades de cuidados intensivos y coronarios,
salones de operación, departamentos de emergencias ) eran especialmente peligrosas;
• los profesionales de la salud, aún en áreas especiales, no estaban bien entrenados en el
uso de los equipos médicos;
• los profesionales de la salud reportarían los peligros de los equipos que pudieran ser
utilizados para la información de tendencia o como base para la investigación de un
equipo particular o clases de equipos, o ambos.
Este informe originó el desarrollo, por la FDA de una red, la Voluntary Devices Experience
Network (DEN), la cual incorporó, además, el programa que había sido desarrollado para
los medicamentos y drogas, bajo la rectoría de la United States Pharmacopeia (USP).
Los estudios realizados entonces ayudaron a establecer las bases para la primera regulación
de Reportes de Equipos Médicos (MDR), publicada el 14 de Septiembre de 1984 como
regulación final, la que entró en vigor a partir del 13 de Noviembre de 1984 y que fue
codificada en el Título 21 del Código de las Regulaciones Federales (CFR) como la Parte
803. La aparición en el Titulo 21 CFR Parte 803 de la Regulación MDR estuvo
acompañada de un esfuerzo educacional de la FDA por lograr un entendimiento uniforme
de la misma, publicando y actualizando diferentes documentos para garantizar su
comprensión dentro de la FDA y en los segmentos de la industria de equipos médicos que
fueron afectados.
Con el transcurso del tiempo los esfuerzos realizados han potenciado un mejor manejo de
los riesgos asociados con los equipos médicos y elevado la conciencia del personal
relacionado, sobre la necesidad e importancia de reportar.
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 111
El 11 de Diciembre de 1995, la FDA publicó una nueva regulación para el reporte de
problemas con equipos médicos por parte de los usuarios y los fabricantes de equipos
médicos, denominada Regulación Final. Esta regulación implementó los requisitos para el
reporte de los usuarios bajo la SMDA, que habían entrado en efecto desde el 28 de
Noviembre de 1991. Además, revisó las regulaciones para el reporte de fabricantes,
vigentes desde 1984 y presentó cambios significativos para las instituciones de salud.
Fueron ampliados el número y el tipo de instituciones que debían cumplir la obligación de
reportar y los requisitos fueron más allá de la SMDA, incluyendo elementos como el
mantenimiento de un expediente y retención de la información sobre los eventos ocurridos,
todos los cuales enfatizaban los aspectos de la salud pública a partir del análisis de los datos
de seguridad postmercado y abordaban con mayor profundidad las investigaciones de los
problemas reportados. La regulación final entró en vigor el 31 de Julio de 1996.
Otro país con antecedentes notables en la vigilancia de equipos médicos lo es Canadá, que
en sus inicios concibió un sistema de vigilancia postmercado, de carácter voluntario, en que
los fabricantes y los usuarios de los equipos médicos informaban a la autoridad regulatoria,
el Buró de Radiaciones y Equipos Médicos (BRMD), los problemas e incidencias ocurridas
con los equipos durante su uso. El BRMD y el Buró de Operaciones de Campo (BDF), una
vez recibido el reporte, realizaban su evaluación y proponían las decisiones para el
establecimiento de las medidas correctivas.
Para cumplir los objetivos trazados para la Armonización Global en materia de vigilancia y
reportes de incidentes de equipos médicos, el SG2 seleccionó un grupo de tareas, logrando
desarrollar hasta el momento diferentes proyectos de reglas y regulaciones para el reporte
de eventos adversos y la vigilancia postmercado en todo el mundo, que pudieran ser
empleadas por las dos partes involucradas en la vigilancia: el fabricante de equipos médicos
y la agencia reguladora de cada país. Es importante destacar, que aunque la información
concerniente a los eventos adversos de importancia clínica son primeramente reportados
por los profesionales de la salud, el peso de la acción recae sobre el fabricante del equipo en
cuestión.
Los miembros del grupo de trabajo (SG2) han dejado claro, como concepto, que los
reportes de eventos adversos y problemas asociados con los equipos médicos deberán
reflejar problemas reales, que una vez investigadas las causas que lo originaron, permitan
tomar las medidas correctivas para evitar la repetición de su ocurrencia en otros lugares.
Por otra parte, las organizaciones de acreditación hospitalaria prestan gran atención a los
requisitos legislativos. Las normas de acreditación de la comisión conjunta para la
Acreditación de Organizaciones de Salud (JCAHO) exigen, un plan para la gerencia del
equipamiento médico con un proceso para el control, seguimiento y el reporte de los
eventos adversos.
A partir de 1996 los esfuerzos de armonización global han requerido una actividad
voluntaria de todos los gobiernos participantes. En Octubre de 1996 Cuba se incorporó al
trabajo del grupo internacional de vigilancia de equipos médicos, donde presentó y validó
sus experiencias en esta esfera, mostrando los resultados obtenidos en la introducción de un
Ingeniería Clínica, Ernesto B. Rodríguez Denis, 2006 113
sistema de reportes de problemas en 17 unidades del SNS y las perspectivas para el
establecimientos de las diferentes etapas de un Sistema de Vigilancia de Equipos Médicos
en el SNS.
Los requisitos para el reporte de problemas con equipos médicos en cualquier país plantean
claramente, que todos los usuarios de estos deberán desarrollar e implementar un programa
de reporte escrito. Este programa deberá, como mínimo, asignar la responsabilidad de
reportar, identificar las tareas para ser asignadas, establecer los requisitos de
documentación necesarios y detallar el flujo de la información. Deberán establecerse los
procedimientos para el reporte de eventos adversos, llenado y envío de los modelos de
reporte hacia las agencias reguladoras o cualquier otra entidad externa (fabricantes, etc.),
así como deberán ser definidas la fiabilidad, el mantenimiento y la conservación de los
registros por la institución. El programa que se desarrolle por una institución de salud para
el reporte de problemas deberá contemplar los programas de capacitación y métodos de
comunicación para proveer a todo el personal de la información necesaria sobre sus
obligaciones de reportar.
Se puede plantear, de forma general, que las tres actividades básicas para el establecimiento
de estos programas, son:
• la planificación,
• la introducción,
Este programa de equipos médicos se extiende a todas las áreas clínicas de la institución
médica, por lo que requiere de una adecuada comunicación y coordinación entre varios
departamentos. El encargado del reporte deberá tener la autoridad para asegurar la
participación de todos los departamentos y servicios de todas las áreas en el programa.
El encargado del reporte deberá estar estrechamente familiarizado con los requisitos legales
del reporte de equipos médicos. Esta persona deberá poseer un estilo de comunicación
superior, ser capaz de obtener la cooperación del personal clínico y estar dispuesto a
dedicar el tiempo necesario para asegurar la efectividad del programa.
Otro aspecto no menos importante para la introducción exitosa del programa de reporte, lo
es sin dudas, la educación y capacitación efectivas del personal responsable por el cuidado
del paciente. Este es, quizás, el mayor desafío, especialmente, para aquellas instituciones
con una elevada rotación del personal. El encargado del reporte deberá garantizar que todo
el personal indicado - médicos, enfermeras, profesionales de la salud en general y de apoyo
- sea provisto de las instrucciones e información detalladas sobre el programa de reporte de
la institución. Estas personas deben ser informadas sobre los requisitos legales, políticas
internas y del uso apropiado del programa de reporte de incidentes de la institución.
8.5. Bibliografía:
1- T. M. Ballenilla, S. H. Esquivel. Enfoques sobre la Gestión de Riesgo para Equipos
Médicos. Memorias VI Congreso de la Sociedad Cubana de Bioingeniería. 2006.
2- Capuano, Mike y Steve Koritko. "Risk Oriented Maintenance. Increase the effectiveness
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3- Dolan, A, M. Risk management and Medical devices. Biomed, Instrum, Technol. Jul-
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4- ANSI / AAMI / ISO 14971: 2000- Medical Devices. Application of Risk Management to
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5- Rudolph, H. Risk Management-a global requirement? Biomed. Instrum.Technol. Mar-
apr, 38 (2). 2004.
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