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FACULTAD DE JURISPRUDENCIA
Karla Vinueza
Paralelo 1
2019-09-01
LA CUESTIÓN SOCIAL
Junto con este problema social, surgen doctrinas e ideas que buscan ponerle fin a la
injusticia que vivía la clase más desfavorecida. Empezando con el liberalismo clásico,
que empezaba a proclamar la máxima de la libertad de la industria y comercio, que cada
uno debe actuar de acuerdo a sus intereses ya que cada uno tenía la responsabilidad de
la satisfacción de sus necesidades materiales. Esta doctrina fue calificada por la Iglesia,
de egoísta y contraria a la moral.
Sin embargo, frente a estas ideas revolucionarias, que tenían más bien un carácter
político, aparecieron otras de carácter social, que respondían a las necesidades de las
personas en aquel contexto de la revolución industrial. “El socialismo tenía como
medida del valor de cualquier bien el trabajo, y no el dinero” (Martínez, 2012), y es así
como exponen esa doctrina los autores que la defienden, que, al empezar a ponerla en
práctica, así mismo empiezan a nacer las distintas organizaciones sociales como
sindicatos o cooperativas, que luchaban por la reforma social.
Frente al liberalismo, existía también una gran tensión con la Iglesia Católica, en ese
entonces mucho más poderosa, pues las premisas del Liberalismo tenían que ver con la
libertad del individuo para interpretar la Biblia, la relegación de lo religioso a lo privado
(quitándole su protagonismo social), y el intento de someter a la Iglesia a las leyes
nacionales. Es por todo esto que el papa Gregorio XVI condena esta indiferencia hacia
lo religioso en la encíclica Misari Vos de 1832. S
Sin embargo, años después, el papa León XIII propone una postura menos hostil frente
a las ideas de la sociedad moderna, en la encíclica Rerum Novarum de 1891. En esta, el
sumo pontífice manifiesta que la Iglesia se interesa por los aspectos religiosos y
morales, y por eso, en el contexto de la Revolución Industrial, se pronuncia diciendo
que, “el Estado, el empresario y el trabajador tienen que trabajar juntos”. De ninguna
manera pretendía que los trabajadores se revelen con sus patronos, sino que estos
últimos debían ser más justos en cuanto a las condiciones laborales y la remuneración a
favor de los primeros. Decía también que “el Estado debe intervenir para que haya
Justicia; y los trabajadores y empresarios deben organizar asociaciones que les
protejan”. (S/A).
BIBLIOGRAFÍA
Biblioteca Nacional de Chile. "La cuestión social", en: La cuestión social en Chile
(1880-1920). Memoria Chilena. Tomado el 2019-09-02 disponible en
http://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-93136.html
Carta encíclica Rerum Novarum del sumo pontífice León XIII sobre la situación de los
obreros. La Santa Sede. Tomado el 2019-09-02 de: http://w2.vatican.va/content/leo-
xiii/es/encyclicals/documents/hf_l-xiii_enc_15051891_rerum-novarum.html