Está en la página 1de 2

TRATADO DE ECONOMÍA POLÍTICA, ANTOYNE DE MONTCHRÉTIEN

Se divide en cuatro libros: en el primero, que trata de las manufacturas, el autor enseña la
utilidad de las artes mecánicas, e indica el sistema más conveniente de las reglamen-
taciones industriales, el grado de conveniencia del desarrollo de las distintas industrias; en
el segundo libro, que habla del comercio, censurando el excesivo interés por los productos
extranjeros, Montchrétien propugna una política económica protectora del producto
nacional, y que a la vez favorezca su venta en el extranjero; el tercer libro, dedicado a la
navegación, bajo la influencia de los éxitos alcanzados por otros pueblos en este campo,
estudia el desarrollo de la expansión marítima, en vista de una final expansión colonial; el
último libro trata de los específicos cuidados del príncipe en lo relativo a la administración,
asistencia y hacienda.
Famoso por su título, en que por primera vez se habla de «economía política», puede
considerarse como fuente de primer orden para el conocimiento de la doctrina voluntarista
de tipo mercantil. Sin embargo, a su autor no le pertenece el título de fundador de la
economía política, que le dio en 1889 Funck-Brentano al publicar una magnífica edición
del Traité.
LA SINTESIS DE MARSHALL:
La síntesis de Marshall es un enfoque desarrollado por Alfred Marshall que propone
reconciliar y sintetizar las ideas clásicas y marginalistas. Su enfoque está explicado bajo la
perspectiva del equilibrio parcial.
Tal como recoge la historia del pensamiento económico, la economía clásica trata de
explicar el valor de los bienes por sus costes (lado de la oferta). Mientras, la economía
marginalista o neoclásica, afirma que el valor de los bienes se explica por su utilidad
marginal. Es decir, el valor que se le da a la última unidad consumida (lado de la demanda).

Así pues, cuando Marshall decidió estudiar la economía desde su propio prisma extrajo una
conclusión. Aquella conclusión dictaba que ni los clásicos ni los neoclásicos tenían razón,
y a la vez, ambos tenían razón. Dicho de otra forma, tanto la oferta como la demanda juegan
un papel crucial a la hora de asignar un valor a los bienes. En ese momento nace la síntesis
de Marshall.
La síntesis de Marshall

Se puede decir que Alfred Marshall fue el padre de un gráfico que en la actualidad es
ampliamente utilizado en economía. El gráfico de oferta y demanda.
La síntesis de Marshall se resume en las dos siguientes afirmaciones:

 La curva de demanda (consumidor) tiene pendiente negativa. Suponiendo que todas las
demás variables se mantienen constantes (ceteris paribus), a menos precio más cantidad
podremos comprar. Es decir, si tenemos 100 dólares y cada una unidad vale 1 dólar,
podremos adquirir 100 unidades. Si tenemos 100 dólares y cada unidad vale 2 dólares
podremos adquirir 50 unidades. Y así sucesivamente.
 La curva de oferta (productor) tiene pendiente positiva. Ceteris paribus, a mayor precio más
querrá producir el empresario. Y al revés, si el precio cae el empresario se verá incentivado
a producir menos.

De estas dos afirmaciones, la síntesis de Marshall concluye que el equilibrio se encuentra


en el punto en que se cruzan estas dos curvas. Dicho de otra manera, el punto en el que
productores y consumidores «están de acuerdo» de forma inconsciente. Inconsciente, ya
que no se realizan una reunión para acordar cuanto se producirá y cuanto se comprará.

EL POEMA LAS GEÓRGICAS DE VIRGILIO:

El poema de las Geórgicas (de ge y orgon, que en griego significan trabajos de la tierra, agricultura)
consta de cuatro libros o partes, y fue escrito por Virgilio en Roma pocos años antes de la venida de
Jesucristo y a los 33 de su propia edad; habiéndole sido sugerida la idea por su protector Mecenas,
gran privado de Augusto, emperador entonces, con la mira política de enaltecer a los ojos de los
romanos la agricultura que ellos habían tenido siempre en mucha estima y que se hallaba entonces
en decadencia. El primer libro del poema latino se ocupa de las sementeras y de la labranza de la
tierra; el segundo, del cultivo de la viña y del plantío de los árboles; el tercero, de los pastos y
ganados; y el cuarto de las abejas.

También podría gustarte