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“Día de novios”

ELENCO:

Carmine: Andy Loeza

Lupita: Amayrany Ruíz

Juana: Sthephany Fuentes

Mateo: Juan Ramírez

Ana Karen: Diana Góngora

Matilda: Arely Chan

Iván: Sergio Balam

Mauricio: Cristóbal Parra

Maradonio: Marcos Chimas

Chayan: Jonathan Escobedo

GUIÓN:

Acto 1

(Se abre el telón y están Lupita, Carmine y Juana, comiendo en la cocina. Entra
Iván).

Iván: (sonriente) Hola mamá.

Lupita: (Le da un beso en la mejilla a Iván) Hola hijo, ¿y Ana Karen? ¿Dónde está
tu hermana?

Mauricio: (con no mucha importancia) Se quedó platicando en la escuela, dijo que


no tardaba (Entra Ana Karen con su uniforme llegando de la escuela).
Lupita: (con algo de enojo) ¡Mira nomas qué horas de llegar tienes! (jala a Ana
Karen del brazo) ¡Nos tenías preocupados! Y, además, ni siquiera traes tus llaves.

Ana Karen: (Roda los ojos, fastidiada) Pues porque tú me las quitaste mamá.

Lupita: ¡Pues si te las quité fue porque te portaste mal!

Juana: No señora, acuérdese que se las dio al aguador.

Carmine: (se levanta sorprendido) ¡¡¿Qué?!!

Lupita: Las llaves… Las llaves se las di al aguador para que no toque en la mañana
y no moleste a nadie de la familia, mi amor (gira hacia Ana Karen). Pero ese no es
el tema en este momento (la sienta rápidamente y le dice molesta), ¿¡Por qué
llegaste hasta ahora!?¿Dónde estabas?

Ana Karen: (fastidiada) Me quedé platicando un ratito con Mateo, un compañero


del salón.

Lupita: ¿¡Y qué!? ¡No eres mayor de edad para decidir por tí misma! ¡Carmine, dile
algo!

Carmine: (medio comiendo) Si… Ana Karen, estábamos preocupados. Sabes muy
bien tu hora de llegada.

Ana Karen: Ay papá, pero si solo fue un momento.

Carmine: (Se gira hacia Ana Karen) ¿¡Y!? ¿Sabes lo que tu mamá y yo hacíamos
en ese “momento”?

Lupita: Ana Karen, estás castigada.

Ana Karen: (Suspira y les quita lo que comen. Puede ser una bolsa de Sabritas o
algo como eso).

Todos: (extrañados y enojados) ¡¡Eh, ey ey ey!!

Ana Karen: Antes quiero contarles sobre algo muy importante…


Carmine: (fastidiado) ¿Más importante que mi comida? (medio enojado) no pude
desayunar (pausa pequeña), ¿y me haces esto?

Ana Karen: ¡Sí! Sólo escúchame una vez.

Carmine: (restándole importancia) Cuéntanos sobre eso tan interesante que tú


dices (se cruza de brazos).

Ana Karen: (nerviosa)… Es que… Invité a Mateo a que venga mañana en la noche.

Carmine: (Enojado y alzando la voz) ¡¿Al tipo ese con el que te quedaste
platicando?, ¿no es muy pronto para eso?!

Lupita: (Enojada) ¿¡Y quién es ese tal Mateo!?

Ana Karen: Es… (pensativa), es mi novio.

Todos: (dejan todo lo que hacían, sorprendidos) ¿¡¡Qué!!?

Ana Karen: ¡Ayúdenme a arreglar todo para cuando venga!

(Se arregla la mesa de la cocina mientras se cierra el telón. Se escucha una voz
fuerte y clara que dice “Al día siguiente”. Se abre de nuevo y están todos sentados
en la cocina esperando).

Lupita: (Impaciente) Pues ya se tardó tu supuesto novio.

(Suena la puerta, y todos miran hacia esa dirección)

Ana Karen: (emocionada) ¡Ya llegó! (se levanta de su asiento)

Juana: (Corre hasta la “puerta”, que será a un lado de la escenografía al entrar) ¡Yo
abro, yo abro! A ver quién es tu novio, niña. (la ve con cara de burla, luego entra
Mateo con unas rosas)

Maradonio: (Con voz de niño, al ver a Mateo) ¡Un drogadicto!

Mateo: (Nervioso) Hola, vengo a ver a Ana Karen.

Juana: (Le quita las rosas y se emociona) ¡lo sabemos, te estábamos esperando!
Mateo: Buenas tardes, ¡Hola, Ana Karen! Te traje unas flores, pero bueno, la señora
me las quitó…

Ana Karen: (lo jala de la mano) ¡Qué lindo!, ¡pasa, pasa!

Lupita: (le susurra a Carmine) Ese Mateo es un niño rarito.

Mateo: (le tiende la mano a Lupita) Mucho gusto señora, Mateo para servirle.

Lupita: (le regresa el saludo a Mateo) Bueno, al menos es educado.

Carmine: jmmm (pensativo) Así son todos al principio, pero, así como estamos en
México, luego se vuelven drogadictos, alcohólicos o narcotraficantes, engañando a
sus parejas y dejando solos con sus hijos.

(Lupita le pega en el brazo)

Carmine: (se queja) ¡Ay!

Ana Karen: Y él… (señala a Carmine) Es mi papá.

Mateo: (Le tiende la mano a Carmine) Es un gusto conocerlo señor.

Carmine: Bueno pues, el placer fue mío (Le toma la mano, lo gira y lo empuja hacia
un lado, simulando la puerta), hubiera sido lindo que las cosas funcionaran entre mi
hija y tú, pero ya vez, suele pasar que no.

Lupita: (molesta) ¡¡Ey, ey, ey!! ¿¡Qué te pasa!? ¡No seas grosero! (jala a Mateo),
disculpa, tiene sus momentos.

Mateo: Sí, no importa. No se preocupe (toma asiento junto a Ana Karen).

Lupita: (le grita a Carmine) ¿¡Ya viste que niño tan educado!? ¡No como tú, que
vomitaste cuando te presenté a mi mamá!

Carmine: ¡Pues que esperabas, si me obligaste a saludarla de beso!

Ana Karen: (a Mateo) No te preocupes, te vas a ir acostumbrando.

Iván: (Se sienta junto con ellos) Hola, yo soy Iván. Si me regalas algo, no haré mal
tercio.
Mauricio: (se sienta junto a ellos igual que Iván) Hola, yo soy Mauricio. Si también
me llevas por dulces no los espío mientras se besan.

Mateo: (medio extrañado y sarcástico) Qué agradables hermanitos tienes, Ana


Karen.

(Entra Matilda corriendo)

Matilda: ¿¡Ya llegó!? ¡hola, yo soy Matilda! mucho gusto (le sonríe y se sienta) (se
dirige hacia Ana Karen) ¡Ay, felicidades Ana Karen! tienes mejores gustos que tu
madre, porque pobre, vela, en lo que fue a acabar.

(Lupita y Carmine se miran molestos)

Matilda: Oigan, pero sí hacen bonita pareja en serio (sonríe)

Mateo: (le abraza la cara a Ana Karen y sonríe) Gracias.

Carmine: (mal mira a Mateo)

Mateo: (miedoso por ver la reacción de Carmine) ¡disculpe!

Carmine: (renegando, hace burla del “disculpe”) disculpe, ¡Ja! Bueno, y tú, niño, ¿A
qué te dedicas? ¿Qué le puedes ofrecer a mi hija?

Mateo: Bueno, en realidad nada, aun no lo pienso, soy joven aún, ¿no?

Matilda: (se ríe fuerte) ¡eso mismo decía Carmine cuando era niño y mira cómo
acabó!

Mateo: (se ríe)

Carmine: (ofendido) ¡¡Ey!!, ¿te estás burlando de mí?!!

Mateo: (para la risa) No señor… No, es que me reí porque…

Carmine: (lo interrumpe) ¡No trates de componerlo! Si eso es ahorita, ¡¿qué será
cuando me oigas decir estupideces?!

Mateo: (asustado) ¡No señor!, es que yo no-no…


Carmine: (levanta la voz, enojado) ¡Maldito mentiroso! ¡¡Tú solo quieres jugar con
los sentimientos de mi hija, y luego botarla para irte con alguien más!!

Mateo:(apresurado por corregir a Carmine) ¡¡No señor!! ¡Yo solo tengo ojos para
Ana Karen!

Carmine: (lo apunta acusándolo) ¡Mientes!

Mateo: ¡No! ¡Es en serio!

Carmine: ¡¿Ah, ¿sí?! ¡mejor salgamos un rato, que me estreso! (empuja a Mateo
hasta la puerta y salen).

(Se cierra el telón, Hay música para ambientar el lugar, que se mantiene durante
toda esa escena, y aparece cambio de escena: el escenario es la cafetería. Se abre
de nuevo)

Carmine: (Tomando un café tranquilamente en una de las mesas, junto con Mateo)

(Aparece una mesera extraña al lado de un hombre elegante en un rincón, y éste le


dice)

Chayan: Anda con aquellos hombres… (apunta a Carmine y a su acompañante)


Uno luce como si fuera adinerado, quizás requiera tus servicios. Y tienes qué
cumplir con la cuota que debes darme… (saca un arma disimuladamente entre ellos
dos) O si no… Ya sabes qué pasará.

Tiffany: (Temeroso) Claro, señor. Solo… Por favor, mi familia debe estar bien.

Chayan: Tráeme lo que te pido, y lo estará. (le sonríe y lo empuja hacia adelante)

Tiffany: (Para sí mismo) Aquí voy… Hazlo (Se comporta coqueto) ¿Qué quieren de
tomar?, (les sonríe y alza las cejas) ¿Horchata?

(Carmine y Mateo se miran entre sí, confundidos).

(Se cierra el telón, se quita la música, y se cambia a la cocina, aparecen Ana Karen,
Lupita, Matilda, Iván, Mauricio, Maradonio, ...)

Ana Karen: (preocupada) ¿A dónde habrán ido?


Lupita: (Sin importancia) De seguro a los bares…

Matilda: (Roda los ojos) Seguramente…

Ana Karen: (Asqueada) ¡Ay no!

Lupita: (Mirando a Ana como si fuera muy inocente) ¡Ya Ana! Que así son todos
los hombres.

Matilda: Tu madre tiene razón, es mejor que te acostumbres.

Ana Karen: Pero Mateo no es así, él no toma, ¡aun es pequeño!

Lupita: ¿¡Y!? ¿¡Crees que por ser un niño no va a ser un patán, borracho, bueno
para nada como tu papá!? ¡podemos fingir que estamos en una buena familia! ¡pero
no significa que lo seamos!… Gracias a sus cervecitas de tu papá, ¡con trabajo
comemos!

Matilda: No es momento para esa plática, Lupe (antes de decir algo más,
interrumpe Iván).

Iván: ¡Ana, Ana!

Ana Karen: ¿Qué pasó?

Iván: Ya cambié de idea, ¡mejor dile a tu novio que juegue con nosotros videojuegos
y de paso nos compre unos!

Ana Karen: (interrumpe) ¡Iván!

Lupita: ¡A ver! ¿¡Por qué se están peleando!?

Iván: Yo solo le estaba diciendo a Ana que debería pedirle un videojuego para mí
(hace carita de angelito).

Mauricio: ¡Entonces si te dan un videojuego a ti, yo quiero una tele!

Juana: ¡Si es así, yo quiero también una tele!

(en eso Maradonio interrumpe)


Maradonio: ¿para qué quieres una tele si con mis poemas bastan?, allí te va uno:
A la madre:

A la madre, hoy en tu día, te canto con alegría, brindando y festejando, con agüita
de sandía, madre, por mí estuviste puje y puje todo el día, te quedarán las caderas
muy chuecas y muy vencidas, es por eso, madre mía, que te recito esto en tu día.

Juana: (hace cara de extrañada ante el poema de su hijo)

Ana Karen: (fastidiada) ¡No van a pedir nada!

Juana: (Se acerca) Mira, Ana Karen, si le pides a tu novio una tele, prometo cubrir
tus salidas con el patrón.

Ana Karen: Nadie va a pedirle nada.

Mauricio: Y si le pides una para mí, prometo… (emocionado) ¡No decirle a papá
cuando se besen!

Iván: (fastidiado) Eso ya lo dijiste.

Mauricio: (se pega a él mismo al darse cuenta de su error) Es que no se me ocurría


nada más.

Iván: Mira Ana, primero le pides tus cosas de ropa y zapatos, como toda una buena
novia manipuladora, y ya después, le pides algo para nosotros.

Juana: (se emociona) Pídele un vestido rojo pasión, ahora que puedes entrar en él,
no como tu mamá que usa 5 tallas menos y hasta lo que no te imaginas se le ve…

Ana Karen: ¡Ya!

Lupita: ¡Ay Ana! ¡Qué amargada eres! ¡no puedes tomar nada como broma!

Mauricio: (confundido, más para sí mismo) ¿quién dijo que era broma?

Matilda: ¡Si Ana, así te va a dejar muy pronto!

Ana Karen: Pero es que… ¿Qué no entienden que en el amor lo material no


importa?
(Todos se quejan)

Juana: Bueno, ya me voy a dormir, vamos Maradonio (se va).

Lupita: Niños, ustedes también deberían irse a dormir.

(Salen de escena todos, menos Mauricio, Iván y Lupita, para irse a cambiar y poner
ropa de dormir).

Mauricio: (Quejándose) ¡Ay no, mamá! Queremos esperar a que llegue mi papá
borracho para ver la pelea.

Lupita: (Sin entender a sus hijos) ¿Qué pelea?

Iván: (Haciendo obvia la respuesta) Pues la de ustedes dos.

Lupita: (se queda pensando por aquello que le dicen).

(Se cierra el telón) (Alguien dice *4 horas más tarde* con voz fuerte y clara)

Ana Karen: (Con el telón abajo) ¡Ay… ¡Ya se tardaron mucho!

(Suena afuera la serenata, Marcos toca la guitarra)

Lupita: (emocionada) ¿Oyeron eso?

(Se abre el telón en la calle; Carmine y Mateo están de un lado y los demás van
saliendo del otro).

Carmine: (está cantando con Mateo)

Matilda: (Junto a Ana, emocionada) ¡Ana, te trajeron serenata!

Ana Karen: ¡Ay!, ¡qué romántico!, ¡Mateo me trajo serenata!

(Carmine está cantando borracho).

Matilda: ¡Míralos, están bien borrachos!

Lupita: ¡Que tierno y qué vergüenza! ¿cómo que borrachos?

Juana: (Entra toda adormilada tropezándose con su hijo) ¿Qué es todo ese ruido
que no me deja dormir?
Ana Karen: (Corre y la abraza) Mateo me trajo serenata.

Carmine: (A toda voz, alzando una botella) ¡Viva AMLO!... Ah no…. Ana-Ana
México…. Mejor vamos pa dentro

Todos: ¡Aaaayy!

(Se cierra el telón, y se abre en la cocina otra vez) (Entran Carmine tambaleándose
y Mateo)

Ana Karen: (Corre a abrazar a Mateo) ¡¡Ayyy muchas gracias!! Pero, ¿cómo
acabaste así? (lo mira extrañada).

Mateo: (Perdido) ¿así cómo? (se tambalea). Ahhhh, ¿así? (se señala a sí mismo)
no recuerdo nada Ani (se ríe).

Carmine: (Los separa) ¡Fue mi idea!, ¡MI idea!

Matilda: (En tono burlesco) Carmine, parece que deberás preparar la boda.

Carmine: (feliz) ¿Sí, ¿verdad?

(Mientras tanto, Mateo que está en la parte de adelante, al dejar a Ana más
confundida, empieza a buscar cosas para robar. Entre ellas, encuentra en la mesa
de la sala, dinero y disimuladamente lo mete en su pantalón)

Lupita: ¡Ay no! ¡para nada, mi bebecita todavía está muy chiquita! (le da un beso
en la frente a Ana).

Carmine: (Susurrando a Lupita) Shhhhhh ¡Callate! ¿Qué no ves que el papá de


Mateo es el dueño de Segovian's City?

Lupita: (Lo mira con ojos muy abiertos y lo empuja) ¡Ayyy Ana, creo que Mateo sí
es un buen tipo! (Empuja a Ana hacia Mateo) ¡debemos planear la boda!

(Mauricio e Iván entran de un lado corriendo y gritando burlando a Ana y salen del
otro).

Mateo: ¡Oigan, pero es que yo…!


Carmine: ¿Qué, ya te vas a arrepentir? ¡Si esto es ahora… ¿Qué será cuando ya
tengan hijos?! (aún se tambalea).

(Entran de nuevo Iván y Mauricio gritando, con las cosas de Ana)

Ana Karen: (sorprendida, confundida y enojada) ¡Hey! ¿qué hacen? (los dos tiran
sus cosas) (se altera y se molesta) ¿¡¡Por qué están tirando mis cosas!!?

Iván: (También le grita) ¿¡No que ya te ibas!?

Mauricio: Siii, ¿Para qué queremos toda esta basura?

Iván: ¡Pido la hamaca de Ana!

Mauricio: (emocionado y brincando por momentos) ¡Y yo pido sus muñecas! Digo…


yo pido sus ropas… No, mejor sus juguetes.

Ana: (Los jala a los dos del brazo) ¡Hey!, ¡No me voy a casar! Es mi novio, pero no
me pienso casar.

Mateo: (Regresa junto a todos ellos) De hecho, yo tampoco quiero casarme.

(Todos se espantan)

Carmine: ¿¡Qué!? (Agarra el cuello de la camisa de Mateo) ¡mira niño!... ¡Aquí las
cosas son serias!

Mateo: (alza la voz, harto y consumido por alcohol y sustancias) ¡Ya me cansé de
ser amable señor! ¡No me haga eso!, le informo que mi barrio me respalda.

Carmine: ¿Qué tu barrio está en tu espalda? ¿Y eso cómo lo haces?

Mateo: (Confundido) ¿Qué? No estoy jugando. No le conviene meterse conmigo


(hace señas de cholo).

Lupita: (Jalonea a Carmine) ¡Quítate! (Avienta a Carmine y le agarra el cuello a


Mateo) ¡Eres como todos! Cuando mencionan “boda”, ya no quieren.

Carmine: (Alza la voz, hacia Lupita) ¿eso es acaso una indirecta? ¿Por qué dices
eso?
Lupita: (Le grita a Carmine) ¡Porque así te comportas! ¡no me quieres!

(Mateo mientras ellos discuten, rondando por la sala encuentra más cosas que los
empieza a robar hasta llenar sus bolsas, incluso mantiene uno de los objetos en su
mano).

Mateo: (terminado su robo, da la vuelta hacia ellos de nuevo) Bueno, creo que ya
me tengo que ir

Ana: Sí, creo que es lo mejor. Estás ebrio… Pero, ¿por qué tienes eso? (señala un
objeto de su casa), ¿es de nosotros?

Mateo: Es para recordarte, lindura. Lo pondré en la casa de mi madre junto con las
demás cosas que tengo.

Ana Karen: Eso es muy lindo Mateo, gracias… Esperaré una explicación sobre lo
que pasó hoy.

(Ambos se acercan para abrazarse y todos los demás los observan, Ana los mira y
se apartan).

Carmine: (Se acerca hacia Ana y le dice bajito) Conoció a Tifanny (se ríe solo).

Mateo: (extrañado) ¿Qué sucede?

Ana Karen: (Sin saber sobre quién era Tífanny, pero más confundida) Nada, mejor
no quiero.

(Se dan la mano, Mateo, confundido, sale por la puerta, Mauricio está jugando con
su celular con Iván).

Carmine: Hija, no importa que hayas fracasado en tu relación, habrá mejores.

Matilda: (Confundida) ¿se acabó? ¡Ay, qué bueno! Yo nunca le vi buenas


intenciones a ese niño, desde la primera vez que lo vi, me di cuenta que era igual
de bueno para nada que Carmine (sale).

Mauricio: (A Ana) Entonces… ¿No te vas a ir?


Ana Karen: (Los ve con ternura) Ay, claro que no. No tienen qué preocuparse… No
podría estar con alguien problemático como él.

Mauricio: (Decepcionado, exagerando con sus manos) ¡Me lleva! Yo lo decía


porque ya estamos empeñando tus cosas por internet (alza el celular).

Iván: ¡Bueno! Al menos tienes dinero para comprar tus cosas para tu boda…

Ana Karen: (rueda los ojos) ¡Que no me voy a casar!

(Se cierra el telón) (Se abre el telón y están Ana, Iván y Mauricio en el comedor)
(Alguien dice: “Días después” fuerte y claro”).

Ana Karen: (Se quema con su café) ¡Auch! (tono bajo) ¡Me duele mucho!

Carmine: (Va entrando) ¡Ay hijita! Ya no sufras por ese bueno para nada, algún día
encontrarás a otro que valga la pena y tendrás una bonita relación, tal como tu
madre y yo.

Ana Karen: (confundida, más para sí misma) Espero que no… (se levanta y sale).

Lupita: (Entra enojada) ¡¡Óyeme estúpido, otra vez me volviste a dejar tus calzones
en el microondas!!

Carmine: (Contento) ¿Ya se secaron? Es que vi en internet que es la mejor manera


y aparte es más rápido.

Lupita: (Gritando) ¡¡Eres un cerdo!! ¡No me vuelvas a hacer eso! ¿Me oíste? (Se
va) (ya fuera de escena, se escucha que dice: “¡tenías qué ser hombre!” gritando,
molesta).

Carmine: (Le contesta en tono alto para que ella escuche) Es que soy un hombre
moderno.

(Se cierra el telón abriéndose en el cuarto de Ana)

Ana: (Pensativa, sentada en una parte de su habitación) ¿Qué será de Mateo?, ¿en
qué estoy pensando? ¿qué habrá en la tele? (Enciende la “televisión”, extendiendo
su mano con el control en ella, hacia un lado de la escenografía)
(Rápidamente se cierra el telón y se escucha Música de noticiero mientras. Se abre,
en la parte de la ciudad, con Mateo tirado atrás, con pastillas y botellas junto a él).

Reportero: Buenas tardes, desde Segovian´s City, reportando un caso. Tenemos


a un joven muerto esta mañana aquí en el centro, las autoridades lo identificaron
con el nombre de Mateo, al parecer es dueño del Cártel Fuentes que siempre vende
drogas a menores de edad en las afueras de las escuelas; y, además, hijo del
fundador… De igual manera, se encontraron objetos que no parecen ser propios…
(muestra el objeto que antes Ana vio que se llevara). Una gran pena para la familia…
Mi nombre es Federico, muy buenas tardes (Sonríe).

(Se cierra el telón).

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