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APROXIMACIÓN AL PACIENTE

CON ENFERMEDAD PLEURAL


VALORACIÓN CLÍNICA
Teodoro Gutiérrez Jiménez

TÉCNICAS DE IMAGEN (Rx DE TÓRAX, ECOGRAFÍA


TORÁCICA, TAC, RNM)
Juan Ortiz de Saracho y Bobo

PARÁMETROS DEL FLUIDO PLEURAL,


PROCESAMIENTO, INTERPRETACIÓN
Y TIPOS DE DIAGNÓSTICO
David Jiménez Castro

Los síntomas más prevalentes en patolo- de hidrotórax, pleuritis húmeda y empiema,


gía pleural son la disnea, el dolor torácico y la hemotórax y quilotórax.
tos. Las características de estos síntomas y los – Neumotórax: la presencia de contenido
signos acompañantes variarán según el tipo aéreo en el espacio pleural puede ser proce-
de patología pleural y el grado de afectación dente del exterior o de la vía aérea. La reper-
de la misma. Para una descripción más orde- cusión clínica será diferente según que el neu-
nada agruparemos la valoración clínica de la motórax sea cerrado, valvular o abierto.
patología pleural en cuatro síndromes clíni- – Paquipleuritis: es el proceso caracteri-
cos(1), irritación pleural, derrame, neumotórax zado por la adhesión de las dos hojas pleura-
y paquipleuritis. les y el engrosamiento de las mismas a base
– Irritación pleural o pleuritis seca: es la del desarrollo de tejido conjuntivo fibroso.
que origina un agente inflamatorio sobre la
superficie pleural convirtiéndola en áspera y MANIFESTACIONES CLÍNICAS
rugosa por depósito de un exudado rico en La disnea. Es el síntoma más frecuente(2)
fibrina. Esta irritación pleural es debida, casi sobre todo en los derrames cardiogénicos,
siempre, a un proceso patológico de las estruc- paraneumónicos y tuberculosos. Si bien el volu-
turas próximas, es decir, de la pared costal, men del derrame puede influir en el grado de
del mediastino, del abdomen superior y, sobre la disnea, no siempre existe una relación direc-
todo, del pulmón. Especialmente, las neumo- ta entre ambos; es posible que la existencia
nías y el embolismo pulmonar con infarto. de dolor acompañante o la patología pulmo-
Otras veces la irritación pleural obedece a la nar subyacente así como la velocidad de acu-
manifestación local de una conectivopatía. mulación del líquido justifiquen esta disocia-
– Derrame pleural: es el resultado de la ción(3). La disnea, secundaria a neumotórax,
presencia de líquido de naturaleza diversa –tra- es mayor en los pacientes con patología car-
sudado, exudado, sangre y líquido linfático- diopulmonar previa o en los casos de neu-
en el espacio pleural, recibiendo los nombres motórax valvular e hipertensivo.

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 T. GUTIÉRREZ JIMÉNEZ

El dolor torácico. En el caso de la pleuritis La exploración física. La inspección orde-


seca el dolor torácico es agudo y preciso, y nada y simétrica de ambos hemitórax per-
aumenta con la respiración profunda y la tos. mite apreciar una disminución de los movi-
Se localiza en la pared torácica o abdominal mientos respiratorios, por el dolor pleurítico,
si la irritada es la pleura parietal o la región en presencia de una pleuritis seca. En los
periférica de la pleura diafragmática, mientras pacientes con derrame pleural relevante, el
que el dolor será percibido en el hombro y en hemitórax afecto puede encontrarse abom-
el cuello si el proceso afecta a la región cen- bado y relativamente inmóvil; en cambio si
tral de la pleura diafragmática, cuya inerva- el derrame es pequeño o hay atelectasia pul-
ción depende del nervio frénico. También apa- monar asociada, la inspección puede ser nor-
rece dolor torácico en los derrames pleurales mal. En los pacientes con neumotórax, al des-
secundarios a embolismo pulmonar y hasta aparecer la presión negativa intrapleural, la
en el 32% de los derrames pleurales cardio- pared torácica se distiende y aumenta el volu-
génicos, en contra de lo esperado en un derra- men del hemitórax afecto a la vez que redu-
me de características no inflamatorias. En el ce la motilidad, por el dolor. En pacientes con
caso de los neumotórax, hasta el 66% de los paquipleuritis hay reducción de volumen y
pacientes cursan con dolor torácico. de movilidad del hemitórax afecto, por rigi-
La tos. Es seca, improductiva o ineficaz, dez del bloque pleuropulmonar. A la palpa-
y es debida a irritación pleural tanto en el sín- ción, en pacientes con derrame pleural, neu-
drome de pleuritis seca como en el de derra- motórax y paquipleuritis, muestra una
me pleural o en el de neumotórax. disminución o abolición de las vibraciones
La fiebre y la expectoración son más habi- vocales y a la percusión, matidez en presen-
tuales en los derrames paraneumónicos y cia de derrame y timpanismo si hay neumo-
tuberculosos(2). tórax. En la auscultación pulmonar, los
Es frecuente la ausencia de sintomatolo- pacientes con pleuritis seca pueden presen-
gía en las enfermedades pleurales yatrógenas. tar un roce pleural. En los pacientes con
Un 50% de los derrames pleurales y neumo- derrame pleural hay abolición del murmu-
tórax yatrogénicos cursan de forma asinto- llo vesicular, y en el límite superior del derra-
mática y sólo se descubren radiológicamen- me puede auscultarse un soplo pleural espi-
te(4). La distensión de las venas del cuello o ratorio. En los pacientes con neumotórax y
edemas periféricos sugieren un derrame pleu- paquipleuritis hay una disminución o aboli-
ral secundario a fallo cardiaco congestivo; la ción del murmullo vesicular, dependiendo del
tromboflebitis en pacientes con derrame pleu- volumen del aire o del grosor de la capa de
ral sugiere embolia pulmonar(5). tejido fibroso.

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TÉCNICAS DE IMAGEN
(Rx DE TÓRAX, ECOGRAFÍA TORÁCICA, TAC, RNM)

INTRODUCCIÓN El derrame subpulmonar tiene caracterís-


La enfermedad pleural se manifiesta por ticas propias. En la proyección PA el vértice
la existencia de derrame pleural y engrosa- del hemidiafragma está desplazado lateral-
miento pleural. No siempre la presencia de mente con una caída posterior brusca, y si
líquido pleural indica enfermedad, pudién- afecta al lado izquierdo existe una separación
dose detectar en un 4-6% de individuos sanos de la burbuja gástrica superior a 2 cm y los
pequeñas cantidades de este en el espacio vasos pulmonares, que se suelen ver debajo
pleural(1). La radiografía de tórax es la técni- del contorno diafragmático, desaparecen.
ca radiológica inicial en el estudio del derra- La ecografía torácica es un procedimiento
me pleural, siendo la ecografía, la TAC y la no invasivo y fácil de realizar en la cama del
RNM técnicas complementarias en el aborda- enfermo, es de gran utilidad, no sólo en la deter-
je posterior(2). Por ello analizaremos la pato- minación del derrame sino también en su uti-
logía pleural y las aportaciones de las distin- lización como guía para realizar toracocentesis
tas técnicas de imagen en su diagnóstico. diagnóstica o terapéutica. Esta técnica es supe-
rior a la proyección en decúbito lateral para la
DERRAME PLEURAL detección de derrames de escasa cuantía. La
La radiografía de tórax es la técnica de principal desventaja es su incapacidad para la
imagen diagnóstica por excelencia. En la pro- identificación de la patología subyacente y su
yección postero-anterior (PA) el derrame se variabilidad dependiente del explorador.
visualiza como una opacidad alta lateral que La tomografía axial computarizada (TAC)
se curva ligeramente hacia abajo y con un detecta pequeñas cantidades de líquido y ayu-
borde superior liso en forma de menisco, ter- da a caracterizar mejor la localización y dis-
minando en el borde cardiaco. En la proyec- posición del derrame. Sus indicaciones gene-
ción lateral observamos una densidad semi- rales son diferenciar la patología pleural de
circular, siendo alta por delante y detrás con la pulmonar, determinar las características de
un punto de inflexión en la línea media axi- la patología subyacente, definir el derrame
lar. El líquido en la cisura es fácil de distin- como libre o loculado, servir de guía terapéu-
guir ya que la colección líquida se localiza en tica, identificar la colocación de tubos de dre-
el área teórica de ésta y a menos que la cisu- naje, detectar las complicaciones de los derra-
ra sea exactamente perpendicular al plano mes y los cambios residuales secundarios a
de la radiografía, los márgenes de la colec- estos(3,4). El líquido pleural libre en la TAC pre-
ción líquida aparecen mal definidos. Siem- senta un aspecto típico en “menisco” ocu-
pre se debe realizar una proyección en decú- pando el espacio pleural posterior. Los valo-
bito lateral para valorar la presencia de líquido res de atenuación están entre los del agua (0
libre. Pequeñas cantidades de líquido pueden unidades Hounsfield [UH] ) y los de tejidos
producir atelectasias por compresión del pul- blandos (100 UH), por tanto son fácilmente
món adyacente y los derrames masivos, un distinguibles del engrosamiento pleural o las
colapso pulmonar completo. En el caso de masas pleurales.
los derrames masivos es preciso descartar La distinción entre el derrame pleural y el
por otros signos la existencia de patología no abdominal se realizan basándose en cuatro
pleural. signos radiológicos: signo del diafragma, sig-

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 J. ORTÍZ DE SARACHO Y BOBO

géneo y muestra el signo del menisco. Cuan-


do se locula presenta aspecto lenticular y ángu-
lo obtuso con la pared torácica.
La TAC es el mejor método para diferen-
ciar el empiema del absceso de pulmón. El sig-
no radiológico más relevante es el refuerzo de
la pleura visceral y parietal (signo de la pleura
escindida) debido al incremento del soporte
vascular en la pleura inflamada tras el con-
traste intravenoso (11). Ambas hojas pleurales
pueden engrosarse y la grasa extrapleural adya-
cente entre el empiema y la pared torácica
FIGURA 1. RNM de placas pleurales.
aumenta de tamaño y atenuación, particu-
larmente si es un empiema crónico. Los bor-
no de la interfase, signo del pilar desplazado des están bien definidos y suelen tener un
y signo del área denudada(5-8). aspecto lenticular.
La evaluación de la atenuación del líquido La TAC determina la presencia de locula-
pleural tiene un valor limitado para diferen- ciones, permite la realización de biopsias pleu-
ciar exudados, trasudados y quilotórax(9), pero rales y el drenaje dirigido, objetiva el engro-
los derrames hemorrágicos sí pueden ser iden- samiento pleural, la extensión del pulmón
tificados por su densidad en la TAC. El engro- atrapado y el fracaso en su expansión tras el
samiento pleural y el refuerzo tras el contras- drenaje pleural, pero no interviene en la indi-
te se observan con más frecuencia en los cación de decorticación(12).
exudados. Estos hallazgos son típicos del
empiema y menos frecuentes con los derra- NEUMOTÓRAX
mes neoplásicos(10). El diagnostico se realiza mediante radio-
La resonancia nuclear magnética (RNM) t i e- grafía de tórax en proyección PA en espira-
ne un papel limitado en el derrame pleural, ción completa visualizando la línea pleural. La
teniendo una resolución ligeramente superior TAC es útil en los neumotórax de pacientes
a la TAC en la caracterización del líquido (Fig. politraumatizados y en las unidades de cui-
1). Las colecciones líquidas presentan baja dados intensivos, donde la radiografía de tórax
señal en T1 y alta señal en T2 por el conteni- realizada en supino no nos da toda la infor-
do en agua y los exudados complicados tie- mación.
nen mayor intensidad de señal y son más bri-
llantes que los trasudados. El quilotórax podría ENFERMEDAD FOCAL PLEURAL
ser definido con una señal similar a la de la
grasa subcutánea. Los hematomas subagudos Fibrosis pleural. Enfermedad pleural
o crónicos muestran una señal típica como un inducida por exposición al asbesto
anillo concéntrico, consistente en una sombra En relación con el asbesto destacan prin-
exterior compuesta por hemosiderina y una cipalmente el engrosamiento pleural difuso y
señal brillante en el centro en T1 por la meta- las placas pleurales. Radiológicamente se con-
hemoglobina(2). sidera que hay engrosamiento pleural difuso
al visualizar una densidad pleural regular con-
EMPIEMA tinua que se extiende al menos un 25% de
Los empiemas son derrames pleurales cuya la pared torácica, con o sin obliteración del
disposición en la radiografía de tórax puede seno costofrénico (13). Es preciso realizar una
ser atípica. Cuando no está loculado es homo- radiografía en decúbito lateral para diferen-

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APROXIMACIÓN AL PACIENTE CON ENFERMEDAD PLEURAL. TÉCNICAS DE IMAGEN… 

tumores pleurales y de los que más de la mitad


son benignos. Radiológicamente son encap-
sulados, con amplia base de contacto pleural,
con pedículo que puede ser móvil y cambiar
de posición en la seriación radiológica o con
la posición. Los que invaden la pared torácica
suelen recurrir localmente y algunos se aso-
cian a derrame pleural. Los que alcanzan gran
tamaño (> de 10 cm de diámetro) suelen ser
malignos, forman un ángulo agudo con la
pared y se calcifican en menos del 5% de los
FIGURA 2. Placas pleurales bilaterales posteriores:
casos. Los hallazgos de la TAC son similares a
TAC.
los de la radiología convencional, encontrán-
dose lesiones heterogéneas por la necrosis y
ciarlo del derrame pleural. En la TAC se defi- la hemorragia(16).
ne cuando se extiende más de 8 cm en sen- Los lipomas y liposarcomas suelen ser
tido craneocaudal, 5 cm en sentido lateral y la lesiones asintomáticas, descubriéndose de for-
pleura mide más de 3 mm de espesor(14). La ma casual. La radiología convencional no ayu-
grasa subcostal puede simular engrosamien- da en el diagnóstico. La TAC delimita el origen
to difuso en personas obesas, y se identifica pleural y su composición grasa (-50 a
como tejido de baja densidad interno a las cos- 150HU)(17). Los lipomas benignos presentan
tillas y externo a la pleural parietal. uniformidad grasa. El liposarcoma es hetero-
En la radiografía de tórax las placas pleu- géneo con atenuación superior a –50 HU.
rales relacionadas con la exposición al asbes-
to aparecen casi exclusivamente en la pleura Extensión pleural del carcinoma
parietal y pueden calcificarse (10%). Su valor broncógeno
predictivo es del 79%, frente al 100% de la La TAC y la RNM se utilizan para demos-
TAC de alta resolución (TACAR). Se localizan trar la afectación T3 de estos tumores(18,19). Sig-
bilateral y posterolateralmente, en los márge- nos de invasión son la destrucción costal o la
nes inferiores de las costillas y en la superfi- presencia de una masa de tejido blando fuera
cie diafragmática (Fig. 2). Si son unilaterales del margen costal en la pared torácica. La
suelen ser izquierdas. El TACAR es superior en pared torácica se valora mejor con la RNM
la detección de dichas placas(15), distinguién- especialmente en los tumores de Pancoast(20).
dolas de la grasa extrapleural. Las placas apa- La señal en T1 y T2 se ve incrementada con
recen como áreas de engrosamiento pleural la administración de gadolinio.
separadas de la costilla y del tejido blando por
una fina capa de grasa. Es frecuente el ensan- ENFERMEDAD PLEURAL DIFUSA
chamiento de las costillas adyacentes al foco
de pleura engrosada y calcificada. Mesotelioma maligno
Es una neoplasia infrecuente y existen en
Tumores localizados un 80% antecedentes de exposición al asbes-
Los tumores pleurales se dividen en dos to. Radiológicamente se detecta un engrosa-
grupos: localizados generalmente benignos y miento difuso y nodular asociado o no a derra-
difusos invariablemente malignos. Los tumo- me pleural. La TAC y la RNM permiten valorar
res pleurales localizados son infrecuentes. la extensión y el estadiaje(21). Los hallazgos más
Entre ellos se encuentran los tumores fibro- frecuentes son: engrosamiento pleural (92%),
sos, que representan menos del 5% de los engrosamiento de cisuras interlobares (86%),

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 J. ORTÍZ DE SARACHO Y BOBO

derrame pleural (74%) y pérdida de volumen La morfología en TAC y RNM es similar, obser-
del hemitórax afecto (42%). La RNM muestra vándose en esta última aumento de la intensi-
incremento de señal T1 y moderado en T2 y dad en T2 en las lesiones malignas (sensibili-
es superior a la TAC en la valoración de la dad 100% y especificidad 87%)(23).
extensión del tumor. La tomografía de emisión
de positrones puede en un futuro desempeñar CALCIFICACIÓN PLEURAL
un papel importante en su diagnóstico. Localizadas en la pleura visceral, suelen
ser el resultado de hemotórax, piotórax o
Metástasis pleurales derrame tuberculoso y se asocia a engrosa-
Son la afectación neoplásica pleural más miento pleural extenso.
común (95%). Suelen ser de adenocarcinomas
de origen en pulmón, mama, ovario o estó- AGRADECIMIENTOS
mago. El derrame pleural es la manifestación A la Dra. Esther Yagüe Zapatero, del Ser-
más frecuente y ocasionalmente aparece engro- vicio de Radiodiagnóstico del Hospital El Bier-
samiento pleural difuso y nodulación pleural(22). zo, por la colaboración en este capítulo.

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PARÁMETROS DEL FLUIDO PLEURAL,
PROCESAMIENTO, INTERPRETACIÓN
Y TIPOS DE DIAGNÓSTICO

INTRODUCCIÓN significativa a pesar del escaso edema pul-


Habitualmente el espacio pleural contiene monar, se debe realizar una toracocentesis
pocos mililitros de líquido pleural. Si hay una diagnóstica. Las indicaciones de toracocen-
cantidad suficiente como para ser detectada tesis son idénticas en los pacientes ingresados
en una radiografía de tórax, se debe buscar en unidades de cuidados intensivos(8).
alguna de las causas descritas como respon- La principal contraindicación para la rea-
sables de derrame pleural. En la tabla 1 se reco- lización de una toracocentesis diagnóstica es
ge la incidencia anual aproximada de las enfer- la diátesis hemorrágica. No obstante, y en fun-
medades más frecuentemente causantes de ción de la urgencia, se puede realizar una tora-
derrame pleural(1). En una serie de 850 pacien- cocentesis empleando una técnica cuidadosa
tes(2), las 3 causas más frecuentes de derrame en casi cualquier paciente(9). No debe realizarse
pleural fueron la malignidad, los derrames la toracocentesis en un área cutánea afecta de
paraneumónicos y la tuberculosis pleural. La cualquier proceso patológico. En nuestra expe-
insuficiencia cardiaca congestiva y la cirrosis
hepática fueron las causas más frecuentes de
trasudados pleurales mientras que la maligni- TABLA 1. Incidencia anual
dad y la neumonía se encuentran a la cabeza aproximada de distintas causas de
de las causas de exudado pleural(2). derrame pleural en Estados Unidos
La historia clínica y la exploración física Insuficiencia cardiaca congestiva 500.000
son básicas en la evaluación de los pacientes
con derrame pleural. Jiménez y cols.(3) obtu- Neumonía 300.000
vieron un rendimiento diagnóstico de pre- Neoplasias 200.000
sunción de pretoracocentesis de un 74,19% Pulmón 60.000
en una serie de 720 derrames pleurales. En Mama 50.000
los casos de derrames neoplásicos, la sospe- Linfoma 40.000
cha clínica ascendió hasta el 85,25%. Otras 50.000
La toracocentesis está indicada en presen-
cia de un derrame pleural de más de 10 mm Embolia de pulmón 150.000
en una radiografía de tórax en decúbito late- Enfermedad viral 100.000
ral(1). Se trata de una técnica con baja morbili-
Cirrosis hepática 50.000
dad(4,5) que proporciona información importante
para el diagnóstico o tratamiento de la mayo- Enfermedad gastrointestinal 25.000
ría de los pacientes con derrame pleural(6).
Enfermedad colágeno-vascular 6.000
Si el paciente es diagnosticado de insufi-
ciencia cardiaca congestiva se debe realizar Tuberculosis 2.000
tratamiento diurético(7). No obstante, si el derra-
Asbestosis 2.000
me persiste durante más de 3 días, se acom-
paña de fiebre o dolor torácico, es unilateral Mesotelioma 1.000
(sobre todo izquierdo) o se asocia a hipoxemia

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 D. JIMÉNEZ CASTRO

TABLA 2. Diagnóstico y pruebas indicadas en función del aspecto del líquido pleural
Aspecto del líquido Prueba indicada Interpretación del resultado
Hemático Hematócrito < 1%: no significativo
1-20%: cáncer, embolia o traumatismo
> 50% del hematócrito sérico: hemotórax
Purulento Gram y cultivo Empiema
Turbio Centrifugación Sobrenadante turbio: alto contenido lípidos
Sobrenadante turbio Triglicéridos > 110 mg/dL: quilotórax
50-110 mg/dL: realizar lipidograma
Presencia quilomicrones: quilotórax
< 50 mg/dL y colesterol > 250 mg/dL: pseu-
doquilotórax
Achocolatado Estudio microbiológico Amebiasis
Viscoso Estudio citohistológico Mesotelioma
Amarillo-grisáceo Citología Células gigantes multinucleadas en fondo gra-
nular necrótico: artritis reumatoide(20)
Olor amoniacal Creatinina pleural Creatinina pleura/suero > 1: urinotórax
Olor pútrido Gram y cultivo Infección por anaerobios

riencia(4), la única contraindicación absoluta minar un hematócrito del líquido pleural para
para la realización de una toracocentesis es la descartar el diagnóstico de hemotórax.
del paciente no colaborador. La presencia de un líquido pleural turbio
Habitualmente no es necesaria la realiza- puede deberse a células y detritos o a una ele-
ción de una radiografía de tórax tras una tora- vada concentración de lípidos (1). Un líquido
cocentesis, excepto si la toracocentesis es trau- pleural achocolatado (frecuentemente des-
mática y se extrae aire del espacio pleural crito como “pasta de anchoas”) sugiere el diag-
durante el procedimiento, o el paciente pre- nóstico de amebiasis con fístula hepatopleu-
senta tos, dolor torácico o disnea(10,11). ral (14). La presencia de un líquido pleural
altamente viscoso es muy sugestiva de meso-
ASPECTO DEL LÍQUIDO PLEURAL telioma maligno; en estos casos, la viscosidad
El aspecto del líquido pleural proporcio- es secundaria a la presencia de niveles ele-
na una información muy útil (Tabla 2). La pre- vados de ácido hialurónico en el espacio pleu-
sencia de un líquido pleural hemático estrecha ral(15). Un líquido de color amarillento-grisáceo
el diagnóstico diferencial. En una serie de 21 o la presencia de restos de tejido sugiere pleu-
casos de derrame pleural hemático, 12 se debí- resía reumatoidea(16). La presencia de partícu-
an a cáncer, 5 a embolia de pulmón, 2 a trau- las de comida orienta hacia una rotura de esó-
ma y 2 a neumonía (12). En la serie de García fago(16). En pacientes portadores de sonda
Luján(13), la causa más frecuente de derrames nasogástrica, la presencia de líquido pleural
pleurales hemáticos fue la malignidad. Si el semejante a la solución de alimentación ente-
derrame pleural tiene un aspecto macroscó- ral sugiere que la sonda ha atravesado el parén-
pico claramente sanguinolento se debe deter- quima pulmonar(17).

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APROXIMACIÓN AL PACIENTE CON ENFERMEDAD PLEURAL. PARÁMETROS DEL FLUIDO PLEURAL, PROCESAMIENTO, INTERPRETACIÓN… 

También el olor del líquido pleural pro- trario, si se trata de un trasudado, se debe dife-
porciona información muy útil. La presencia renciar clínicamente entre la insuficiencia car-
de olor fétido orienta a infección por bacterias diaca congestiva, la cirrosis hepática o el sín-
anaerobias y la de olor amoniacal a la pre- drome nefrótico e iniciar el tratamiento de una
sencia de un urinotórax(1). de estas causas.
Los criterios de Light han sido empleados
MEDICIÓN DE LA PRESIÓN PLEURAL clásicamente para diferenciar entre exudados
Las mediciones de presión pleural duran- y trasudados pleurales (22); según estos crite-
te la toracocentesis han sido propuestas como rios, un exudado pleural debe cumplir alguno
una ayuda útil para el diagnóstico. En un estu- de estos criterios, mientras que un trasuda-
dio realizado por Light y cols.(18), se realizaba do pleural no cumple ninguno de ellos:
el diagnóstico de pulmón atrapado cuando la – Relación proteínas pleura/suero mayor
presión pleural inicial era menor de –5 cm de de 0,5.
H2O y bajaba rápidamente durante la toraco- – Relación lactato deshidrogenasa (LDH)
centesis. pleura/suero mayor de 0,6.
En el momento actual se propone la moni- – LDH pleural mayor de 2/3 del límite
torización de la presión intrapleural para evi- superior sérico de LDH.
tar los efectos adversos de una disminución Distintos estudios han tratado de identi-
de la misma durante la toracocentesis eva- ficar parámetros más eficaces que los crite-
cuadora(19). Si las presiones pleurales no se rios de Light (23-25). Un metaanálisis publicado
monitorizan durante la toracocentesis, Light en 1997 demostró la excelente capacidad dis-
recomienda no evacuar más de 1.000 milili- criminativa de estos criterios(26). Los criterios
tros de líquido al día a fin de evitar el riesgo de Light son muy sensibles para el diagnósti-
de que se produzca edema pulmonar. Sin co de exudados pleurales pero disminuyen en
embargo, estas recomendaciones no se han especificidad, es decir, algunos trasudados
evaluado con exactitud. pleurales son erróneamente clasificados como
exudados. Si la clínica del paciente sugiere que
ANÁLISIS MÍNIMO DEL LÍQUIDO PLEURAL la causa del derrame pleural es trasudativa
Un derrame pleural trasudativo ocurre pero el derrame es clasificado como exudado
cuando se acumula el líquido pleural como según los criterios de Light, se ha propuesto
consecuencia de un desequilibrio entre las pre- la medición del gradiente de albúmina entre
siones hidrostáticas y oncóticas. Las princi- el líquido pleural y el suero. Casi todos los
pales causas de trasudados pleurales son la pacientes con un gradiente mayor de 1,2 gra-
insuficiencia cardiaca congestiva y la cirrosis mos por decilitro tendrán un trasudado pleu-
hepática. ral(27, 28).
Un exudado pleural se produce cuando los Por tanto, el análisis mínimo del líquido
factores locales que influyen en la acumula- pleural debe incluir la determinación de los
ción de líquido pleural se encuentran altera- criterios de Light o, en su defecto, la de LDH
dos. Las principales causas de exudados pleu- y colesterol en el líquido pleural(29).
rales son las neoplasias, las infecciones y la Actualmente se admite que los resultados
tuberculosis pleural. de la toracocentesis se deben utilizar para modi-
La distinción entre trasudados y exudados ficar la probabilidad pretest del clínico(30,31). De
constituye el primer escalón en el diagnóstico un 3,8 a un 11% de los derrames malignos
diferencial de los derrames pleurales (21). Si se (confirmados por citología) son trasudados
trata de un exudado pleural, se requieren prue- según los criterios de Light(32,33). Como la pre-
bas diagnósticas adicionales para establecer sunción clínica pretoracocentesis del diagnós-
la causa local de la enfermedad; por el con- tico de exudado pleural es alta(3), si se sospe-

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 D. JIMÉNEZ CASTRO

cha una etiología causante de exudado pleural malignos o tuberculosos(36). En función de estos
se deberían solicitar igualmente los análisis hallazgos, la presencia de linfocitosis en un
complementarios destinados a su diagnóstico. exudado pleural es habitualmente indicación
para la realización de una biopsia pleural cerra-
ANÁLISIS COMPLEMENTARIO DE LOS da. Un tercio de los trasudados pleurales son
EXUDADOS PLEURALES predominantemente linfocíticos, pero este
En el grupo de los exudados pleurales se hallazgo no supone una indicación para la rea-
requieren pruebas diagnósticas adicionales lización de una biopsia pleural(12).
para establecer la causa del derrame pleural. La presencia de células mesoteliales en
el líquido pleural puede ser de gran ayuda diag-
Recuento celular nóstica ya que este hallazgo prácticamente
El recuento celular total y diferencial es descarta la tuberculosis pleural como causa
útil en el diagnóstico diferencial de los exu- del derrame(37,38).
dados pleurales. La presencia de más de un La eosinofilia pleural sugiere normalmen-
50% de neutrófilos en el líquido pleural indi- te una enfermedad benigna y autolimitada,
ca la existencia de un proceso pleural agudo. habitualmente asociada a la presencia de aire
En una serie, el 81% de los derrames para- o sangre en el espacio pleural(12). Sin embar-
neumónicos, el 80% de las tromboembolias go, varios estudios han demostrado que las
de pulmón y el 80% de las pancreatitis pre- neoplasias son tan frecuentes entre los derra-
sentaban más del 50% de neutrófilos y sólo mes pleurales eosinófílos como en los no eosi-
el 16% de los derrames malignos y ninguna nófílos(36,39). Nosotros encontramos que la pre-
de las tuberculosis pleurales presentaban neu- valencia de eosinofilia en los derrames
trofilia(12). Si el paciente presenta simultánea- malignos es baja (4,3%), pero que la malig-
mente un infiltrado parenquimatoso, el diag- nidad constituye la segunda causa de eosino-
nóstico más probable es el de neumonía o filia pleural(39). Además, existe la misma pro-
tromboembolia de pulmón(1). Si el paciente babilidad de que sea maligno tanto un derrame
no presenta infiltrados parenquimatosos, los pleural eosinófílo como no eosinófílo. Por tan-
diagnósticos más probables son la trombo- to, la eosinofilia pleural no debe impedir la
embolia de pulmón, las enfermedades vira- búsqueda de malignidad en caso de que exis-
les, procesos gastrointestinales y, en raras oca- ta una sospecha clínica fundada(39).
siones, la tuberculosis pleural aguda(1). Aunque El diagnóstico diferencial de los derrames
aproximadamente un 10% de los trasudados pleurales eosinófílos incluye la pleuritis secun-
pleurales contienen neutrófilos predominan- daria a fármacos(12), la asbestosis pleural (40),
temente, este hecho carece de importancia paragonimiasis(41) o la enfermedad de Churg-
clínica (12) . Strauss(42). Entre los fármacos que producen
Un predominio de células mononucleares pleuritis eosinófíla destacan el dantrolene, la
indica la presencia de un proceso pleural cró- bromocriptina y la nitrofurantoína.
nico. En los casos en los que predominan los La eosinofilia pleural prácticamente exclu-
linfocitos, los diagnósticos más probables son ye el diagnóstico de tuberculosis pleural(39,40).
las neoplasias y la tuberculosis pleural, aun- En nuestra serie, la presencia de eosinofilia en
que se han descrito en derrames secundarios un derrame pleural idiopático es un dato de
a cirugía de revascularización miocárdi- buen pronóstico y es factible la vigilancia estre-
ca(12,34,35). Los datos combinados de 2 series(12,34) cha del paciente sin necesidad de progresar a
demuestran que el 94% de los exudados pleu- técnicas invasivas(39). Es probable que la mayo-
rales linfocíticos se debían a cáncer o tuber- ría de estos derrames se deban a infecciones
culosis. En nuestra experiencia, el 62,5% de virales o a tromboembolias de pulmón no diag-
los derrames pleurales linfocíticos resultaron nosticadas(1).

26
APROXIMACIÓN AL PACIENTE CON ENFERMEDAD PLEURAL. PARÁMETROS DEL FLUIDO PLEURAL, PROCESAMIENTO, INTERPRETACIÓN… 

Estudio microbiológico nes pleurales por organismos anaerobios(45).


Tradicionalmente se ha recomendado el Sin embargo, se trata de un procedimiento
cultivo (aerobio y anaerobio) del líquido pleu- caro y laborioso que requiere personal espe-
ral de pacientes con exudados pleurales no cializado, por lo que tampoco se recomienda
diagnosticados(1). También se aconseja la tin- su uso rutinario.
ción de Gram de la muestra pleural. El rendi- Si existe sospecha razonable de tuber-
miento de los cultivos se incrementa si las culosis pleural(47) se debe solicitar cultivo para
muestras de líquido pleural son inoculadas a micobacterias. La tinción para micobacterias
pie de cama(43). tiene un rendimiento muy bajo excepto en
No obstante, sólo existe un estudio que los casos de empiema tuberculoso o infec-
haya valorado de forma prospectiva la utilidad ción por el virus de la inmunodeficiencia
de los estudios microbiológicos en una serie humana(48, 49) , por lo que no se recomienda
consecutiva de derrames pleurales(44). En este rutinariamente.
trabajo, el rendimiento del estudio microbio-
lógico de los derrames pleurales paraneumó- Glucosa pleural
nicos fue tan sólo de un 19,7%. La tinción de La medición de la glucosa pleural es útil
Gram aportó un diagnóstico rápido únicamente puesto que valores menores de 60 mg/dL indi-
en 5 casos. El pH pleural presentó un valor pre- can que el paciente probablemente presente
dictivo positivo de un 82% para indicar la nece- un derrame paraneumónico complicado(50) o
sidad de drenaje torácico. En ningún caso el una neoplasia pleural(51, 52). Otras causas infre-
estudio microbiológico de los derrames pleu- cuentes de valores pleurales bajos de gluco-
rales aportó información que modificara la sa incluyen la tuberculosis pleural, la parago-
supervivencia de los pacientes con derrame nimiasis, el hemotórax, la enfermedad de
pleural. Churg-Strauss y, raramente, la pleuritis reu-
La contrainmunoelectroforesis (CIE) es una matoidea o lúpica(1). Los bajos niveles de glu-
técnica que detecta antígenos bacterianos en cosa encontrados en los derrames pleurales
el líquido pleural. La ventaja sobre los cultivos secundarios a artritis reumatoidea se deben
es que los resultados están disponibles antes probablemente al paso alterado de glucosa
y se puede aplicar un tratamiento antibiótico al líquido pleural y a la eliminación deficitaria
apropiado precozmente. Otra ventaja es que de productos del metabolismo glucosado(53).
los resultados permanecen positivos varios En el estudio de Carr y cols.(54), 10 de 11 pa-
días después de que se haya iniciado el tra- cientes con derrame de origen reumático tení-
tamiento antibiótico(45,46). La CIE es especial- an niveles de glucosa en el líquido pleural infe-
mente útil en niños con derrame pleural, en riores a 17 mg/dL. En otro estudio retrospectivo
los que la mayoría de los derrames pleurales de 18 derrames reumáticos, el 82% de los
se deben a Streptococcus pneumoniae, Staphy- pacientes tenían niveles de glucosa pleural
lococcus aureus o Haemophilus influenzae. Sin menores de 38 mg/dL(55).
embargo, una proporción importante de derra- La glucosa pleural se ha utilizado clásica-
mes paraneumónicos en adultos se deben a mente para establecer la necesidad de drena-
bacterias anaerobias, para las que no hay dis- je torácico en los derrames paraneumóni-
ponibles antígenos para realizar estos estu- cos(56,57). No obstante, un metaanálisis realizado
dios. Por tanto, en el momento actual no se por Heffner y cols.(50) demostró que el pH pleu-
pueden recomendar rutinariamente para el ral posee la mayor eficacia para identificar los
diagnóstico etiológico de los derrames para- derrames paraneumónicos complicados.
neumónicos. Varios estudios(52,58) han demostrado que
La cromatografía de gases es una técnica niveles bajos de glucosa en los derrames malig-
propuesta para el diagnóstico de las infeccio- nos se correlacionan con un mayor rendi-

27
 D. JIMÉNEZ CASTRO

miento diagnóstico de la citología y tienen un La medición del pH pleural se debe realizar


valor predictivo de peor pronóstico. mediante una máquina de gases(63) y se debe
evitar la anestesia previa(64).
LDH pleural El pH pleural tiene gran utilidad para esta-
Los valores pleurales de lactato deshidro- blecer la necesidad de drenaje torácico en los
genasa (LDH) reflejan el grado de inflamación derrames paraneumónicos(56,57). Un metaaná-
de las superficies pleurales. El aumento de los lisis publicado por Heffner y cols.(50) establece
niveles de LDH en sucesivas toracocentesis es un punto de corte que varía entre 7,21 y 7,29
indicativo de empeoramiento de la inflama- en función de consideraciones coste-preva-
ción pleural, y se debería perseguir el diag- lencia.
nóstico agresivamente. Por el contrario, si los Un pH menor de 7,30 en los derrames pleu-
valores de LDH disminuyen en sucesivas tora- rales malignos se asocia con peor pronóstico,
cocentesis, la inflamación pleural está mejo- mayor rendimiento de la citología y de la biop-
rando, y no es necesario ser agresivo en la sia pleural y menor éxito de la pleurodesis quí-
aproximación diagnóstica al paciente(1). mica que cuando el pH es mayor de 7,30(65).
En los exudados pleurales definidos úni- Sin embargo, 2 metaanálisis de más de 400
camente por la LDH, se debe considerar el pacientes con derrame pleural maligno han
diagnóstico de neoplasia(22) o de neumonía por demostrado que el pH no debería usarse como
Pneumocystis carinii(59). criterio único para decidir la conveniencia de
Aunque los valores pleurales de LDH se la pleurodesis o para predecir la superviven-
han utilizado para predecir la necesidad de cia(66,67). Otros factores, como el estado gene-
drenaje torácico en los derrames paraneu- ral del paciente (68) y el tipo de neoplasia(66),
m ó n i c o s (56,57), son menos eficaces que la deben ser tenidos en cuenta. Los pacientes
determinación del pH pleural(50) y no se reco- deben ser evaluados individualmente a la hora
miendan de forma rutinaria con esta finali- de decidir la posibilidad de una pleurodesis.
dad(60).
Amilasa
pH pleural Un nivel aumentado de amilasa en el líqui-
La determinación del pH pleural es útil en do pleural puede ayudar a reducir el diagnós-
el diagnóstico diferencial de los exudados tico diferencial a tres situaciones: enfermedad
pleurales. La presencia de un pH pleural pancreática, neoplasia o rotura esofágica(51).
menor de 7,20 reduce el diagnóstico a algu- Light encuentra elevación de la amilasa pleu-
na de las siguientes causas(1): derrame para- ral en 4 de 5 pancreatitis con derrame aso-
neumónico complicado, rotura esofágica, ciado, normalmente con valores mucho más
pleuresía reumatoidea, tuberculosis pleural, altos que los de la amilasa sérica. Los niveles
enfermedad maligna, hemotórax, urinotó- elevados de amilasa en los pacientes con rotu-
rax(61), acidosis sistémica, paragonimiasis o ra esofágica se deben al paso de la saliva al
pleuritis lúpica. espacio pleural(69). La amilasa se encuentra ele-
El pH pleural debe ser medido con el mis- vada aproximadamente en el 10% de los
mo cuidado que el pH arterial. El líquido pleu- derrames pleurales malignos(70). En la mayo-
ral debe ser recogido en una jeringa heparini- ría de los casos la relación amilasa pleura/sue-
zada. Se debe conservar en hielo antes de su ro es mayor de 1. Las neoplasias pulmona-
transporte al laboratorio debido a la genera- res y ginecológicas son las que con más
ción espontánea de ácido por el líquido(18), aun- frecuencia se asocian a niveles altos de ami-
que un estudio reciente demostraba que el pH lasa en el líquido pleural.
no se modifica a temperatura ambiente duran- La amilasa pleural debe ser medida sólo si
te la primera hora después la toracocentesis(62). la historia clínica o los síntomas sugieren enfer-

28
APROXIMACIÓN AL PACIENTE CON ENFERMEDAD PLEURAL. PARÁMETROS DEL FLUIDO PLEURAL, PROCESAMIENTO, INTERPRETACIÓN… 

medad pancreática o rotura esofágica. En 90% (54,74,76), raramente son realizadas y no


ausencia de estas indicaciones, la determi- resultan fiables(77).
nación rutinaria de la amilasa pleural carece Halla examinó la utilidad de la determi-
de utilidad(71). nación de inmunocomplejos y complemento
en el líquido pleural de 12 pacientes con artri-
Creatinina tis reumatoide, 9 con lupus eritematoso sisté-
Stark publicó 3 casos de urinotórax aso- mico y 39 con otras enfermedades(78). Los nive-
ciados a niveles elevados de creatinina en el les bajos de complemento sirvieron para
líquido pleural(72). En 71 pacientes con derra- diferenciar los derrames reumatoideos y lúpi-
mes de otras etiologías, los niveles de creati- cos de los controles, pero no diferenciaban
nina pleural no estaban por encima de los valo- entre uno reumatoideo y uno lúpico. Los nive-
res séricos, lo que sugería que la relación de les de inmunocomplejos estaban elevados en
la creatinina pleura/suero mayor de 1 podía el líquido pleural en comparación con el sue-
ser específica de urinotórax. No obstante, su ro en los derrames reumatoideos; por el con-
sensibilidad se desconoce. trario, en los lúpicos eran normales.
Por tanto, los estudios inmunológicos en
Lípidos el líquido pleural proporcionan escasa infor-
El análisis de los lípidos del líquido pleural mación diagnóstica(79). El diagnóstico de la pleu-
está indicado en los casos de sospecha de qui- ritis lúpica o reumatoidea se debe realizar
lotórax y pseudoquilotórax. El diagnóstico de mediante la presentación clínica y la deter-
quilotórax se realiza si se cumplen los 3 crite- minación de niveles de anticuerpos antinu-
rios siguientes: triglicéridos pleurales mayores cleares y factor reumatoide en suero.
de 110 mg/dL, relación de triglicéridos pleu-
ra/suero mayor de 1 y un cociente de coles- Citología pleural
terol pleura/suero menor de 1(73). Cuando los La citología del líquido pleural es un medio
valores de triglicéridos se encuentran entre 50 eficiente, barato y mínimamente invasivo para
y 110 mg/dL, la presencia de quilomicrones establecer el diagnóstico de enfermedad malig-
en el líquido pleural confirma el diagnóstico. na. El análisis citológico del líquido pleural esta-
blece el diagnóstico en más del 70% de los
Inmunología casos de adenocarcinomas metastásicos(80,81).
En un trabajo, 11 de 13 pacientes con pleu- El estudio citológico es menos útil en los casos
ritis lúpica tenían anticuerpos antinucleares de mesotelioma, carcinoma epidermoide, lin-
(ANA) en el líquido pleural con títulos mayo- foma o sarcoma. Si se sospecha derrame pleu-
res de 1:160; en 9 pacientes, la relación ANA ral maligno, se deben recoger varios cientos
pleura/suero fue mayor de 1(74). En un grupo de mililitros en la primera toracocentesis(82).
control de 67 derrames pleurales de origen no Este procedimiento no aumenta el rendimiento
lúpico, ninguno tenía niveles de ANA en el mis- del estudio inicial pero, si es negativo, la
mo. Por el contrario, en otro estudio recien- siguiente toracocentesis puede proporcionar
te la determinación de anticuerpos antinucle- un líquido pleural con menos células degene-
ares fue positiva a títulos altos en 13 de 145 radas y más células malignas recién exfolia-
pacientes con derrames pleurales no lúpicos(75). das. Light y cols.(12) encuentran que una segun-
En el estudio de Good (74), la presencia de da citología por toracocentesis aumentaba el
células LE confirmó el diagnóstico en 7 de los rendimiento diagnóstico del 63 al 70%.
8 pacientes analizados. Sin embargo, las pre- La biopsia pleural cerrada tiene un rendi-
paraciones de células LE no se recomiendan miento menor que la citología puesto que las
puesto que, aunque parecen específicas para metástasis pleurales suelen ser focales y la
el diagnóstico, su sensibilidad oscila del 0 al biopsia es un procedimiento diagnóstico cie-

29
 D. JIMÉNEZ CASTRO

go(80,81,83). No obstante, añade un 11% de ren- Los niveles de interferón-γ también se


dimiento a la citología en el diagnóstico de encuentran elevados en los pacientes con
enfermedad pleural maligna y, dada su baja tuberculosis pleural. Villena y cols.(89) demos-
morbilidad, nuestro grupo la recomienda ruti- traron una sensibilidad del 99% y una espe-
nariamente en los casos de sospecha de enfer- cificidad del 98% en una serie de 388 derra-
medad neoplásica (81). Si los resultados son mes pleurales, que incluía a 73 tuberculosos.
negativos, la toracoscopia es el procedimien- Valores pleurales de interferón-γ de 140
to de elección en los pacientes con sospecha pg/mL son comparables a niveles de ADA de
de derrame pleural maligno. 40 UI/L para el diagnóstico de la tuberculosis
En los casos en los que se sospecha el diag- pleural(90).
nóstico de linfoma, la citometría de flujo pue- Algunos autores han recomendado la deter-
de establecer el diagnóstico al demostrar una minación de la PCR para ADN micobacteria-
proliferación celular clonal en el líquido pleu- no como método de elección de la tubercu-
ral(84). Por el contrario, los marcadores tumo- losis pleural(91). No obstante, la PCR ofrece
rales no han demostrado excesiva utilidad en resultados dispares(92,93) debido al escaso núme-
el diagnóstico de la enfermedad neoplásica ro de micobacterias en el líquido pleural, el
pleural(85). bajo número de neutrófilos y la falta de repe-
titividad del test(92). Por lo tanto, no puede ser
Pruebas diagnósticas para tuberculosis recomendado actualmente como método de
Dado el bajo rendimiento de los estudios elección para el diagnóstico de tuberculosis
microbiológicos en la tuberculosis pleural(86), pleural(94).
se han propuesto métodos alternativos de diag-
nóstico como son la adenosín deaminasa, el ÁREAS INCIERTAS Y GUÍA DE MANEJO
interferón-γo la reacción en cadena de la poli- DE LOS DERRAMES PLEURALES
merasa (PCR) para determinación del ADN Actualmente no existe consenso sobre si
micobacteriano. los exudados pleurales con niveles elevados
Los niveles de ADA son útiles para el diag- de ADA deberían ser tratados para tubercu-
nóstico de la tuberculosis pleural porque en losis pleural sin un diagnóstico de confirma-
esta patología son mayores que en otros exu- ción mediante biopsia pleural(79). Nuestro gru-
dados. Bañales y cols.(87) realizaron un metaa- po recomienda el diagnóstico mediante biopsia
nálisis de 2.251 casos en los que se determinó pleural cerrada excepto en aquellos casos en
el ADA pleural mediante el método Blake-Ber- los que existan dificultades técnicas para su
man. Encontraron una sensibilidad de un 99% realización (poca cantidad de líquido pleural
y una especificidad de un 89%. Los puntos de o pacientes no colaboradores).
corte variaban entre 40 y 71 UI/L, por lo que En los casos en los que el exudado pleural
se recomendaba la necesidad de establecer un permanece sin diagnosticar a pesar de toraco-
punto de corte de referencia para cada centro. centesis y biopsia pleural, nuestro grupo y
Se puede concluir que el ADA pleural es un otros(62) recomiendan la realización de una bate-
buen parámetro para el diagnóstico de la pleu- ría de estudios pleurales y generales (fibro-
ritis tuberculosa y puede evitar la realización broncoscopia, tomografía axial computarizada,
de biopsias pleurales en aquellas regiones con toracoscopia), aunque ningún estudio pros-
alta prevalencia de tuberculosis(88). Los niveles pectivo ha evaluado esta aproximación diag-
elevados de ADA en el líquido pleural se deben nóstica.
a aumentos de la isoenzima ADA2 y algunos En el momento actual, no existe ningún
autores han obtenido eficacias diagnósticas del algoritmo que establezca el procedimiento
88-89% mediante la determinación de isoen- diagnóstico de los derrames pleurales idio-
zimas del ADA(48,86). páticos.

30
APROXIMACIÓN AL PACIENTE CON ENFERMEDAD PLEURAL. PARÁMETROS DEL FLUIDO PLEURAL, PROCESAMIENTO, INTERPRETACIÓN… 

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES nez Ruiz CA, Pérez Rodriguez E, eds. Madrid


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Todo derrame pleural debe ser estudiado
4. Martínez Berganza A, Araiz JJ. Contribution de
mediante una toracocentesis excepto si es de
la pathologie iatrogène à l’ensemble des mala-
pequeña cuantía (menos de 10 mm en la radio- dies de la pléure. Rev Pneumol Clin 1978; 43:
grafía de tórax en decúbito ipsilateral) o secun- 151-5.
dario a insuficiencia cardiaca congestiva y bila- 5. Light RW, Light MD. Pleural effusion. N
teral. England J Med 2002; 346: 25, 1971-7.
Si se sospecha que el paciente tenga un
trasudado pleural, las únicas determinaciones Técnicas de imagen
necesarias son las de la LDH y las proteínas 1. Hessén L. Roentgen examination of pleural
pleurales. fluid: A study of the localization of free effu-
Si se sospecha la existencia de un exudado sion: The potentialities of diagnosing minimal
pleural, se deben determinar además el pH y quantities of fluid and its existence under
physiological conditions. Acta Radiol 1951; 86
la glucosa pleurales, recuento celular comple-
(suppl).
to y diferencial, y estudio citológico. Los estu-
2. McLoud TC, Flower CDR. Imaging the pleura.
dios microbiológicos deben ser solicitados en Sonography, CT and MR imaging. AJR Am J
pacientes con sospecha de exudado paraneu- Roentgenol 1991; 156: 1145-53.
mónico y mala respuesta al tratamiento inicial. 3. Kreel L. Computed tomography of the lungs and
En los exudados pleurales linfocíticos se debe pleura. Semin Roentgenol 1978; 13: 213-25.
solicitar una determinación de marcadores para 4. Pugatch RD, Faling IJ, Robbins AH, Zinder GL.
tuberculosis pleural (ADA, interferón-γ o PCR Differentation of pleural and pulmonary lesions
en función de la disponibilidad de cada medio). using computed tomography. J Comput Assist
Si después de la primera toracocentesis el Tomogr 1978; 2: 601-6.
diagnóstico no es evidente, recomendamos 5. Alexander S, Proto AV, Clark RA. CT diffe-
rentiation of subphrenic abscess and pleural
un nuevo estudio pleural (incluida biopsia pleu-
effusion. AJR Am J Roentgenol. 1983; 140(1):
ral cerrada) y alguna de las pruebas diagnós- 47-51.
ticas destinadas a descartar la presencia de 6. Dwyer A. The displaced crus: A sign for dis-
una tromboembolia de pulmón. tinguishing between pleural fluid and ascites
En caso de que el diagnóstico permanez- on computed tomography. J Comput Assist
ca aún incierto, la sospecha clínica, la situa- Tomogr 1978; 2: 598-9.
ción del paciente y los resultados del estudio 7. Naidich DP, Megiow AJ, Hilton S, Hulnick DH,
pleural deben modular la necesidad de prue- Siegelman SS. Computed tomography of the
diaphragm: Peridiaphargmatic fluid localiza-
bas diagnósticas invasivas como la toracos-
tion. J Comput Assist Tomogr 1983; 7: 641-9.
copia o la biopsia pleural abierta.
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