Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Conjunción: es una clase de palabra invariable que une palabras independientes entre sí, o también oraciones.
Sintácticamente funciona como enlace entre palabras (Mario y María), sintagmas (Mi perro y el tuyo) u
oraciones (Luchar para ganar)
Morfológicamente es una palabra invariable
Semánticamente no posee significado
Interjección: es una palabra que, pronunciada en tono exclamativo, expresa por sí sola un estado de ánimo, una
impresión, un aviso, una orden, etc. Se escribe entre dos signos de exclamación y no presenta flexión.
Clasificación
Interjección propia
Usada exclusivamente como interjección, como ¡ah!, ¡eh!, ¡oh!, ¡ea!, ¡uf! ¡bah!, ¡ay!, ¡huy!, ¡olé!, ¡zas!, ¡puf! ¡oe!,
etc.
Interjección impropia
Utilizada como interjección pero que en su origen era un sustantivo:¡hombre!, ¡Jesús! ¡demonios!, ¡Dios mío!,
¡Virgen santísima!, ¡ánimo!, ¡caracoles!; un adjetivo: ¡bravo!, ¡otra!, ¡qué!; un verbo: ¡vaya!, ¡anda!, ¡calla!, ¡dale!;
un adverbio: ¡fuera!, ¡despacio!, ¡atrás!; un grupo nominal: ¡ay! mi madre!, o una oración: ¡habráse visto!, ¡qué
pena!
Interjecciones onomatopéyicas
Expresan adaptaciones fonéticas de ruidos y acciones, que realizan una función lingüística. ¡Cataplum!, ¡paf! ,
¡zas!, ¡pum!
Interjecciones apelativas
Sirven para llamar la atención o imponer algún comportamiento al oyente. ¡Hola!, ¡chao!, ¡abur!, ¡ey!, ¡ea...ea!,
¡chito!
Interjecciones sintomáticas o anímicas
Expresan el estado de ánimo del hablante y se interpretan según el contexto. ¡Ah!, ¡ay!, ¡bah!, ¡caramba!, ¡huy!,
¡olé!, ¡qué hubo!