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Aunque la ciudad se convierte en un contenido cercano por el hecho de habitarla, dado que
en ella se construyen las cercanías rectas (recorridos) e indirectas (vivencias, opiniones y
relatos), tales cercanías muchas veces se pueden considerar como ventaja y desventaja,
ya que en muchas ocasiones pueden enmascarar el aprendizaje y dificultar la comprensión
de la complejidad del espacio urbano. Por ello, los autores parten de que la ciudad como
contenido “cercano” en las cuestiones escolares se ha limitado a la distancia o las escalas,
estableciendo los contenidos cercanos: ciudad, barrio, localidad, etc. como más fáciles,
dada la proximidad del sujeto con estos, además se da por sentado que son enseñados y
supuestamente aprendidos en la escuela, dependiendo la etapa evolutiva de los alumnos.
Es fundamental tener en cuenta que, para el análisis de tal complejidad, el estudiante debe
contar con bases conceptuales que le permitan relacionar y problematizar su entorno, para
asi llegar a un análisis crítico del mismo. Es por ello que el medio o el espacio se configura
como el recurso para el estudio y la observación de las posibilidades históricas y
geográficas del entorno, por ello las salidas escolares al territorio se proyectan como un
punto de apoyo para la conceptualización, ya que se tiene una experiencia con el mundo
real. Por tal motivo estas salidas deben estar bien elegidas y deben provocar al estudiante,
ya que se puede caer en el error de que el solo contacto con el territorio o la inmediatez
enseñan por sí misma. Por ello, para que haya un proceso de aprendizaje significativo, es
necesario que en el trabajo de campo se generan relaciones entre lo observado y el sentido
que se le otorga, además es necesario que se trabaje con preguntas que permitan movilizar
hacia el objeto de estudio.
Por otro lado, es esencial tener en cuenta que el conocimiento de la ciudad en el contenido
escolar debe ir encaminado a dos finalidades específicas, la primera la formación de un
ciudadano, el cual se sienta identificado, actué e imagine escenarios del futuro y a su vez,
entienda la ciudad como un lugar de pertenencia para todos, en el cual tiene
responsabilidades, y a su vez donde debe propender por la participación y la gestión. Y el
segundo, se refiere a que la enseñanza de la ciudad, debe orientarse hacia la comprensión
de la dinámica social y espacial, en donde se superen las visiones fragmentadas de los
problemas urbanos y se entienda la ciudad como un objeto social de competencia y conflicto
de intereses.