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UNIVERSIDAD VERACRUZANA -Xalapa

Facultad de Ciencias Químicas/Ingeniería Química


Ingeniería de reactores

051219

BIOETANOL

No. lista Nombre


2 Ariel Francisco Barquín Jiménez
Integrantes del equipo
13 Jessica Guadarrama Galván
20 Alejandro Jafet Palafox Casas

Objetivos:

Producir bioetanol a partir de la fermentación de la cáscara y el corazón de la piña


utilizando la levadura Saccharomyces cerevisiae

Objetivos específicos:

Dimensionar el impacto social y ambiental de la implementación de gosoholes


generados a partir de bioetanol y gasolina.

Antecedentes:

El monóxido de carbono es considerado uno de los mayores contaminantes de la atmósfera


terrestre. Sus principales fuentes productoras responsables de aproximadamente 80% de las
emisiones, son los vehículos automotores que utilizan como combustible gasolina o diésel y
los procesos industriales que utilizan compuestos del carbono. Esta sustancia es bien conocida
por su toxicidad para el ser humano. Sus efectos tóxicos agudos incluida la muerte han sido
estudiados ampliamente; sin embargo, sus potenciales efectos adversos a largo plazo son
poco conocidos. En los últimos años, los estudios de investigación experimentales en animales
y epidemiológicos en humanos han evidenciado relación entre población expuesta en forma
crónica a niveles medios y bajos de monóxido de carbono en aire respirable y la aparición de
efectos adversos en la salud humana especialmente en órganos de alto consumo de oxígeno
como cerebro y corazón. Se han documentado efectos nocivos cardiovasculares y
neuropsicológicos en presencia de concentraciones de monóxido de carbono en aire inferiores
a 25 partes por millón y a niveles de carboxihemoglobina en sangre inferiores a 10 %. Las
alteraciones cardiovasculares que se han descrito son hipertensión arterial, aparición de
arritmias y signos electrocardiográficos de isquemia. Déficit en memoria, atención,
concentración y alteraciones del movimiento tipo parkinsonismo, son los cambios
neuropsicológicos con mayor frecuencia asociados a exposición crónica a bajos niveles de
monóxido de carbono y carboxihemoglobina.

De acuerdo con la Environmental Protection Agency, en los Estados Unidos las emisiones de
monóxido de carbono al ambiente son producidas en un 95 % por los vehículos automotores
(5). La Comisión Nacional del Medio Ambiente de Chile informó que para el año 2000, el 91 %
de las emisiones de monóxido de carbono en la región metropolitana de Santiago de Chile
fueron producidas por el transporte automotor.

En Brasil, el monóxido de carbono es el polutante emitido en mayor cantidad a la atmósfera.


En Sao Paulo 1,5 millones de toneladas son lanzadas al aire anualmente; de estos el 78 %
son producidos por los automotores a gasolina o diésel, 15 % por automotores con combustible
alcohol, 3 % por motocicletas, 2 % por taxis y 2 % resultan de procesos industriales.

En Colombia, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, estimó para


1996 las emisiones atmosféricas de gases con efecto local en 8 612 kilotoneladas, de las
cuales el monóxido de carbono representó el 58 %.

En Bogotá, el Departamento Administrativo del Medio Ambiente estima que la concentración


media de monóxido de carbono atmosférico en un día normal se encuentra entre 30 y 35 partes
por millón. En el informe sobre monitoreo realizado en el “día sin carro” en 2005, se estimó que
la concentración ambiental de monóxido de carbono disminuyó en un 76 % respecto a un día
normal. (Téllez, 2006)

El CO en México

En México el sector transporte es uno de los principales emisores de contaminantes a escala


nacional, siendo responsable de 90.03 por ciento de las emisiones de monóxido de carbono
(CO) y de 45.67 por ciento de óxidos de nitrógeno (NOx), en todo el país.

Dentro del sector transporte los vehículos de pasajeros —denominados ligeros— emiten 74.41
por ciento de CO, 52.55 de NOx, 73.55 de Compuestos Orgánicos Volátiles (COV) y 94.50 de
amoniaco (NH3). (Navarro, 2014)

Otro de los problemas que presentan algunos de estos contaminantes liberados hacia la
atmosfera es que reaccionan con los compuestos presentes en ella generando nuevos
contaminantes.

Un ejemplo de este dinamismo es la transformación del CO a CO2.


Una vez que el CO es emitido, su evolución en la atmósfera depende de muchos factores. La
meteorología es uno de los factores que más influye porque va a determinar cuánto se
dispersa, o lo que es lo mismo se diluye, haciendo que la concentración emitida pueda
reducirse desde el foco emisor.

La vía principal a través de la cual el CO se transforma a CO2 es a través de su reacción con


el llamado “detergente atmosférico”, el radical hidroxilo, OH· (R3). El OH· recibe la
denominación de “detergente atmosférico” por su capacidad de reaccionar con la mayoría de
los compuestos emitidos a la atmósfera disminuyendo sus concentraciones (Baeza, 2018):

OH· + CO → CO2 + H· (R3)

El CO2 es uno de los gases de efecto invernadero que aportan al calentamiento de la


atmosfera terrestre.

Datos arrojados por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) en su


Inventario Nacional de Emisiones de Gases y Compuestos de Efecto Invernadero 2015;
México emitió 683 millones de toneladas de bióxido de carbono equivalente (MtCO2e) de
gases efecto invernadero (GEI) en el 2015. El 23.4% de estos gases corresponde a emisiones
por subcategoría autotransporte.

Tabla1. Emisiones de gases y compuestos de efecto invernadero en México 1990- 2015 (BNDES, 2008.)

Al llevar a cabo el análisis sobre estadísticos a cerca de las fuentes de contaminantes y las
propiedades/aplicaciones de nuestro producto (bioetanol) determinamos que lo emplearíamos
para trabajar en la generación de una mezcla de este con gasolina. A esta mezcla se le conoce
como “gasohol”. Este producto es un combustible para motores de combustión diseñados para
quemar derivados del petróleo. El gasohol puede estar constituido por distintas proporciones
de estos dos combustibles.

E10: es una mezcla de 10% de etanol y 90% de gasolina. Esta es la mezcla más utilizada en
los Estados Unidos, ya que hasta esta proporción de mezcla los motores no necesitan
ninguna modificación e incluso produce una elevación de un octano en la gasolina. El etanol
es, reconocidamente, un excelente aditivo antidetonante y mejora el octanaje de la gasolina-
base de modo sensible.

Tabla 2. Composición química de gasolina base y de los gasoholes (BNDES, 2008.)

A raíz de la composición, la combustión de la gasolina con etanol, en comparación a las


gasolinas típicas, produce menores emisiones de monóxido de carbono (CO), óxidos de azufre
(SOx ), hidrocarburos y otros compuestos contaminantes. Al mismo tiempo, se elevan los
aldehídos (compuestos del tipo R-CHO) y, dependiendo de las características del motor, los
óxidos de nitrógeno (NOx ). (BNDES, 2008.)

El propósito de este proyecto es generar bioetanol que pueda ser adicionado a la gasolina
convencional, en una proporción 1:9, respectivamente, con la finalidad de volver más eficiente
la combustión de la gasolina en los motores de los vehículos convencionales. Esto tiene la
finalidad de reducir las emisiones de CO por parte del parque vehicular de México

La obtención del etanol que utilizaremos para volver más eficiente la combustión de la gasolina
se llevará a cabo a través de la fermentación anaerobia de la glucosa contenida en la piña.

Cabe mencionar que la introducción de este tipo de biocombustibles aporta al desplazamiento


gradual del uso de combustibles fósiles en el sector transporte.

Marco teórico
Biocombustibles

Se entiende por biocombustible aquellos combustibles que se obtienen de biomasa. El término


biomasa, en el sentido amplio, se refiere a cualquier tipo de materia orgánica que haya tenido
su origen inmediato en el proceso biológico de organismos recientemente vivos, como plantas,
o sus deshechos metabólicos (el estiércol); el concepto de biomasa comprende productos
tanto de origen vegetal como de origen animal. En la actualidad se ha aceptado este término
para denominar al grupo de productos energéticos y materias primas de tipo renovable que se
origina a partir de la materia prima orgánica formada por vía biológica. Quedan por tanto fuera
de este concepto los combustibles fósiles o los productos orgánicos derivados de ellos, aunque
también tuvieron su origen biológico en épocas remotas. Hoy en día se pueden diferenciar
distintos tipos de biomasa (Salinas, 2009).

Tabla 3. Tipos de biomasa

Los biocombustibles son aquellos biocarburantes como alcoholes, éteres, ésteres y otros
productos químicos que provienen de compuestos orgánicos de base celulósica (biomasa)
extraída de plantas silvestres o de cultivo, que sustituyen en mayor o en menor parte el uso de
la gasolina en el transporte o destinados a producir electricidad (Salinas, 2009).

Obtención de biocombustibles
Tabla 4. Tipos de biocombustibles

Según la naturaleza de la biomasa, su uso energético y el uso del biocombustible deseado,se


puede contar con diferentes métodos para obtener biocombustibles: procesos mecánicos
(astillado, trituración y compactación), termoquímicos (combustión, pirolisis y gasificación),
biotecnológicos (micro bacterianos y enzimáticos) y extractivos para obtener combustibles
líquidos, sólidos y gaseosos (Salinas, 2009).

Tabla 5. Procesos de obtención de biocombustibles

Generalidades de la piña

La piña, Ananas comusus, es una fruta de la familia de las bromelias (sub Clase de
Monocotiledóneas) tiene alrededor de 1400 especies en todo el mundo; es oriunda de
Suramérica, sin embargo su cultivo se ha logrado extender de manera considerable a múltiples
zonas tropicales. El cultivo debe de realizarse en zonas con poco drenaje, abundante luz solar,
poca altura y temperaturas entre los 20oC y los 32oC (Herrera, 2008).
Esta fruta está compuesta principalmente por agua en un 80-90%, los carbohidratos son cerca
de un 85% de los sólidos totales en la piña, los cuales representan un alto contenido de azúcar
(entre 15º y 17º Brix), estos azúcares son principalmente: glucosa, fructuosa y sacarosa;
mientras que la fibra representa de un 2 a 3% de los sólidos totales. También se encuentra
pequeñas cantidades de otras sustancias como: ácidos orgánicos, sales, proteínas minerales,
pigmentos, gomas, pectina entre otros (Araya, 2010) (Corella, 2013).

La fermentación alcohólica

La fermentación alcohólica es una biorreacción que permite degradar azúcares en alcohol y


dióxido de carbono. La conversión se representa mediante la ecuación:

Las principales responsables de esta transformación son las levaduras. La Saccharomyces


cerevisiae, es la especie de levadura usada con más frecuencia. Por supuesto que existen
estudios para producir alcohol con otros hongos y bacterias, como la Zymomonas mobilis, pero
la explotación a nivel industrial es mínima. A pesar de parecer, a nivel estequiométrico, una
transformación simple, la secuencia de transformaciones para degradar la glucosa hasta dos
moléculas de alcohol y dos moléculas de bióxido de carbono es un proceso muy complejo,
pues al mismo tiempo la levadura utiliza la glucosa y nutrientes adicionales para reproducirse.
Para evaluar esta transformación, se usa el rendimiento biomasa/producto y el rendimiento
producto/ substrato.

El rendimiento teórico estequiométrico para la transformación de glucosa en etanol es de 0.511


g de etanol y 0.489 g de CO 2 por 1 g de glucosa. Este valor fue cuantificado por Gay Lussac.
En la realidad es difícil lograr este rendimiento, porque como se señaló anteriormente, la
levadura utiliza la glucosa para la producción de otros metabolitos. El rendimiento experimental
varía entre 90% y 95% del teórico, es decir, de 0.469 a 0.485 g/g. Los rendimientos en la
industria varían entre 87 y 93% del rendimiento teórico (Boudarel, 1984). Otro parámetro
importante es la productividad (g/h/l), la cual se define como la cantidad de etanol producido
por unidad de tiempo y de volumen (Vázquez, 2007).

Mecanismos de fermentación

El mecanismo de la fermentación empieza con la glucólisis, es decir, la ruptura enzimática del


azúcar por la ruta de Embden Meyerholft, tal y como se muestra a continuación: (McGuilvery,
1977) (Corella, 2013).
Figura 1.1 Formación de los aniones piruvato.

Una vez con las 2 moléculas de piruvato, actúa una enzima llamada piruvato descarboxilasa,
la cual cataliza una reacción de descarboxilación, lo que hace que se forme un acetaldehído,
(Corella, 2013).

Figura 1.2 Formación del acetaldehído

Por último, se da la reducción del acetaldehído a etanol (Figura 1.3) la cual es catalizada por
la enzima alcohol deshidrogenasa, lo cual regenera el NAD+ que se consumió en la formación
del piruvato (Voet, et al 2009) (Corella, 2013).

Figura 1.3 Formación del etanol

Entonces, la reacción global de la fermentación está dada por la ecuación que se muestra en
a Figura 1.4 (Corella, 2013):

Figura 1.4 Reacción general de fermentación alcohólica

De los productos de esta reacción, la energía en forma de ATP y en forma de calor es


aprovechada por la levadura Saccharomyces cerevisiae, para sus funciones vitales y su
reproducción, el etanol es nuestro producto de interés, y el dióxido de carbono se utiliza como
un método de medición del avance de la reacción (Corella, 2013).
Biorreactores

Por lo general, un bioreactor es un recipiente cilíndrico de doble pared, de vidrio o de acero


inoxidable (para el control de la temperatura y esterilización en línea), cubierto de una platina
de acero inoxidable. La platina está dotada de entradas y salidas que permiten agregar
substratos, nutrientes y substancias como ácidos o bases, extraer productos, o bien, hacer
mediciones en línea. La platina permite acoplar un sistema de agitación para mantener la
homogeneidad y facilitar, en su caso, la transferencia de oxígeno y nutrientes.

El Bioreactor es el elemento central para la realización de la fermentación alcohólica. Existen


diversas opciones para disponer de esta tecnología; por ejemplo, construir una instalación
simple (Make your own fuel, 2006), hasta la adquisición de una instalación completa con
especificaciones técnicas adecuadas a las características concretas del proceso. Entre estas
dos opciones existen múltiples posibilidades caracterizadas por diferentes precios, volúmenes,
tecnologías, modos de funcionamiento (discontinuo, fed batch, continuo, cascada), etc. (Monte
et al., 2003), (Bailey, 1986). La elección depende de los recursos económicos disponibles y
del interés por desarrollar una tecnología propia (Vázquez, 2007).

Diagrama 1. Biorreactor
Cinética de las reacciones bioquímicas

La cinética de una reacción se define como la velocidad de formación o consumo de una


sustancia, esta velocidad depende de muchas variables, las más comunes son: temperatura y
las concentraciones de reactivos y productos, sin embargo en las reacciones donde intervienen
micro organismos tales como: hongos, algas y bacterias, la cinética es más compleja ya que
hay formaciones de productos intermedios y las reacciones ya no se comportan como
reacciones elementales, estas reacciones dependen de las condiciones en las que se
encuentre el organismo (pH, presencia de sustancias inhibitorias, fuentes de nitrógeno, fosforo,
magnesio, vitaminas, minerales, trazas de otros compuestos como cobre, hierro entre otros)
para que este se pueda reproducir y formar el producto de interés (Corella, 2013).

Cinética de fermentaciones alcohólicas batch

En reactores “batch” o por lotes, en las fermentaciones anaeróbicas se presentan cuatro zonas
típicas:

La primera es una zona de retraso o de adaptación celular en la cual no hay crecimiento de la


población celular ni se observa una gran producción de etanol, en esta zona los
microorganismos se adaptan al sistema, el tiempo de esta zona varía dependiendo de los
microorganismos y que tan diferentes sean las condiciones con respecto a las condiciones que
tenían originalmente, industrialmente esta etapa no se realiza en un reactor de tamaño
industrial, para disminuir los costos operativos.

La segunda zona es de crecimiento exponencial del número de microrganismos, en esta zona


se observa una gran producción de etanol.

La tercer es una zona estacionaria en la cual se da una muy baja formación de etanol y el
crecimiento celular es nulo, ya que se da el agotamiento del sustrato, de alguno de los
componentes necesarios para el crecimiento, o la acumulación de productos que son
inhibidores tóxicos para las células (como el etanol), en este caso para maximizar la producción
se recomienda diluir la solución o trabajar con una concentración inicial de sustrato que sea
menor, en el caso de agotamiento de sustrato, no hay nada que se pueda hacer para maximizar
la producción.

La cuarta zona que es la de muerte celular, no es importante ni deseable a nivel industrial, en


esta zona no hay producción etanol y se da la muerte de las levaduras (Izquierdo, 2004)
(Corella, 2013).

Estequiometria de biorreactores por lotes


Dado que en este proceso se forman muchos productos intermedios, y el crecimiento celular
depende de muchas variables como ya se mencionó anteriormente, una manera simplificado
de tratar esto es analizar la estequiometria en función del consumo de sustrato.

Donde:

YC/S: es el coeficiente de la masa de células nuevas entre la masa del sustrato consumido para
formar este producto.

YP/S: es la masa del producto formado entre la masa del sustrato consumido para formar este
producto (Fogler, 2001) (Corella, 2013).

Cinética del crecimiento celular

Generalmente se cree que el crecimiento en la zona exponencial es proporcional al número de


células presentes en ese instante, lo cual se describe en la ley de Malthus:

𝑑𝑥
=𝐾𝑥
𝑑𝑡
Donde:

x: es la concentración de células, g/L.


t: es tiempo, h.
k: es la constante de crecimiento celular g/ L h.

Como resultado de esta integración se obtiene una ecuación exponencial y evaluando la


condición de frontera en la que en el tiempo 0 corresponde la concentración de células iniciales
x0, se obtiene:

𝑥 = 𝑒 𝑘𝑡 + 𝑥0

De esto se derivan muchos modelos matemáticos, conocidos como las ecuaciones de


crecimiento (Rao, 2010) (Corella, 2013).
.
Sin embargo, las reacciones de fermentación normalmente atraviesan las cuatro zonas
mencionadas anteriormente, ya que la velocidad de crecimiento varía en cada zona, y depende
de la concentración del sustrato, por lo cual se han desarrollado muchos modelos empíricos,
tales como el de Monod:

Dónde:

µm: es crecimiento celular máximo, g/L h. s: es concentración del sustrato, mg/L.


Ks: Es la concentración limitante de crecimiento, es decir, es la concentración de sustrato que
se tiene cuando la velocidad de crecimiento es el valor de la mitad del crecimiento máximo.
(Izquierdo, 2004) (Corella, 2013).

En el caso de la Saccharomyces cerevisiae utilizando glucosa como sustrato el valor de la Ks


es de 0,5 mg/L. Como se mencionó antes, existen muchas otras variables que afectan el
proceso de la reproducción de los microorganismos, se han desarrollado otros modelos que
incluyen aspectos como la cantidad de nitrógeno y la presencia de etanol que en este caso es
una sustancia inhibitoria, estos otros modelos ganan precisión, pero pierden sencillez y son
más complejos de utilizar ya que al medir más variables los costos aumentan (Rao, 2010)
(Corella, 2013)

Otro modelo comúnmente usado en fermentaciones en las que se produce gas es una
ecuación modificada de Gompertz, la cual considera el tiempo de producción máxima, el
máximo producido y el tiempo de adaptación celular (Montoya, 2012) (Corella, 2013).

Donde:

Pm: Es la producción máxima, %v/v.


Rm: Es la tasa de producción máxima, (%v/v)/h.
λ: Es el tiempo de adaptación celular, h.

Microorganismo

El nombre de Saccharomyces cerevisiae proviene del griego sákchar σακχαρ−αρος (latín


saccharum, azúcar) y mykes μυκης (hongo) y del latín cerevisia (cerveza). Este es un hongo
ambiental ampliamente utilizado en la elaboración de cerveza, vino, pan y otros alimentos.
La levadura es un microorganismo mesofilo por lo cual su rango de temperatura optimo se
encuentra entre 13 a 35ºC, ya que a temperaturas de 40 a 42 ºC son consideradas como limite
de su crecimiento y a temperaturas mayores de 54ºC se logra la muerte del microorganismo;
el rango de pH para el crecimiento de la mayoría de levaduras se encuentra entre 2.4 a 8.6 y
el optimo empieza en 4, para Saccharomyces C. el rango optimo se encuentra entre 4 a 4.5
(Salinas, 2006) (Temistocles, 2008).

Metodología

El proceso de fermentación de nuestro sustrato para la obtención de bioetanol duró alrededor


de 96 horas.

A continuación se detalla cada una de las etapas en el proceso de generación del bioetanol

La obtención del bioetanol se llevó a partir de 6 etapas:

1. Activación de la levadura Saccharomyces cerevisiae


2. Preparación del sustrato
3. Inoculación de la levadura en el sustrato
4. Montado del biorreactor
5. Monitoreo de la fermentación en el biorreactor
6. Destilación del producto obtenido de la fermentación en el biorreactor

Activación de la levadura Saccharomyces cerevisiae

Se activaron 1.0 gr de extracto de levadura para la fermentación de 1 Lt de sustrato. Esta


relación inoculo/sustrato fue reportada por Saldaña, 2005 en su trabajo Obtención de bioetanol
a partir de residuos de cáscara y pulpa de piña.

Materiales:

 2 gr de glucosa
 100 mL agua destilada
 0.5 gr de KH2PO4
 0.2 gr de (NH4)2SO4
 0.04 gr de Mg(SO4)7H2O
 1 gr de levadura Saccharomyces cerevisiae de la marca “Tradi-Pan” utilizada para
pastelería
 Matraz Erlenmeyer de 100 mL
Procedimiento:

Todo el material se mezcló en el matraz Erlenmeyer de 100 mL, posteriormente se introdujo


este en la autoclave por un periodo de 20 minutos. Luego de este tiempo se dejó inoculando
por un periodo de 24 hrs en el horno a una temperatura de 35 °C

Al finalizar este proceso se obtuvo una solución de 100 mL de levadura Saccharomyces


cerevisiae activada.

Preparación del sustrato

Se preparó 1 Lts de caldo de cascara y corazón de piña como sustrato para la fermentación.

Materiales:
 1.450 kg piña
 1 L de agua destilada
 Licuadora
 Colador de cocina
 Gasa simple

Procedimiento:

1. De la masa total de la piña fueron retirados 400 gr de corazón y 432 gr de cascara.


2. Esta masa extraída fue licuada, para lo cual se le adicionaron 500 mL de agua destilada.
3. El producto de este licuado fue filtrado en el colador de cocina para así extraer la fibra
y demás componentes sólidos que no servirían en el proceso de fermentación.
4. Posterior a este filtrado, el caldo obtenido fue sometido a otra filtración, esta vez a través
de una gasa simple.
5. Al finalizar este proceso se obtuvo un total de 1 Lts de caldo de piña y 400 gr de biomasa
filtrada.

Inoculación de la levadura

Para esta etapa el volumen total de caldo de piña obtenido fue calentado a una temperatura
de 35 °C para posteriormente ser vinculado con los 100 mL de levadura activada. Luego de
ser inoculado se mezcló durante 5 min para asegurar una completa distribución de la levadura
en todo el volumen del caldo.

Montado del biorreactor

Para asegurar una eficiente degradación del sustrato por parte de las levaduras, decidimos
montar 3 pequeños biorreactores con un volumen de 300 mL cada en lugar de un biorreactor
de volumen de 900 mL. Al dividir el volumen en 3 pequeños biorreactores se disminuye la
sedimentación de la levadura en el caldo, propiciando un mejor homogeneizado de estas en el
volumen a fermentar.

Materiales:
 3 botellas de vidrio de 350 mL
 1 foco incandescente de 100 watts
 3 mangueras
 Cinta de aislar
 1 botella de platico de 1 Lts
 Agua simple

Procesamiento:

1. El volumen de 1 Lts de caldo de piña ya inoculado y perfectamente mezclado fue


repartido en las tres botellas de vidrio. A cada una se le agregaron 300 mL del caldo.

2. Cada una de estas botellas fue sellada con su tapa, la cual tenía conectada una
maguera que serviría para capturar el CO2 generado por el proceso de fermentación.
Esta captura de CO2 se llevó a cabo en la botella de 1 Lts llena de agua simple, donde
terminaban las mangueras dispuestas en las tapas de cada una de las botellas de vidrio.

3. Las tres botellas de vidrio con un volumen de 300 mL de caldo de piña inoculado fueron
dispuestas alrededor del foco de 100 watts “envueltas” por una pared de pape de
aluminio. Esto con la finalidad de mantener una temperatura adecuada (30-35 °C) para
que se llevase a cabo la fermentación por parte de las levaduras.

A continuación, se ilustra el biorreactor, así como un diagrama de él.


Imagen 1. Biorreactor casero montado

Mangueras
conductoras del CO2
generado en el proceso
de fermentación

Capturador
de CO2

Foco 100 watts


Biorreactores
(proveedor de calor al
sistema)

Diagrama 2. Biorreactor casero. Función de los elementos que lo componen

Monitoreo de la fermentación en el biorreactor


En esta etapa duró alrededor de 4 días ( 96 hrs) del lunes 23 de noviembre al viernes 29 del
mismo mes. El monitoreo consistió en la verificación de la temperatura y la homogeneidad de
nuestro biorreactor.

Materiales:
 Termómetro digital

Procedimiento:

 La verificación de la temperatura se realizaba cada 8 horas con el termómetro digital.


En la mayoría de las ocasiones la temperatura caía dentro del rango óptimo para la
fermentación (30-35 °C), sin embargo, se registraron algunas caídas en la temperatura
del biorreactor cuando el monitoreo se realizaba en la noche. Este comportamiento era
esperado debido a que la temperatura ambiente disminuye y por lo tanto existe una
mayor perdida de calor por parte del sistema hacia el ambiente. La temperatura
promedio registrada en ese intervalo de días en horario nocturno fue de (13-18 °C)
(Weatherspark, 2019)

 La homogeneización de los biorreactores se realizaba cada 4 horas. Todo esto por


medio de una agitación que duraba alrededor de 10 segundos.

Observaciones durante el proceso:

 A los pocos minutos del montado del biorreactor y a su debida agitación para
homogeneizar la levadura en el caldo, se observó un burbujeo en la trampa para CO 2.
Este burbujeo permaneció “constante” durante todo el proceso de fermentación.

 En las noches y en las mañanas, cuando caía la temperatura, se observaba una


disminución el burbujeo de CO2.

 También observamos que cada vez que se realizaba la homogeneización por medio de
una agitación mecánica la fuerza del burbujeo en la trampa para CO 2 se intensificaba.
Creemos que esto se debe a que la agitación perturba la solubilidad del CO2 en el caldo
produciendo que este escape del caldo. Tal y como sucede cuando se agita un refresco.
Esto se debe a que los refrescos tienen CO2 disuelto, pues está gasificados con él.
Imagen 2. Burbujeo de CO2 en el capturador de este.

Destilación del producto obtenido de la fermentación en el biorreactor

Al finalizar el proceso de fermentación se obtuvieron tres volúmenes de 300 mL cada uno de


sustrato fermentado. Tales volúmenes fueron mezclados y homogeneizados para
posteriormente ser destilados para extraer el bioetanol generado por las levaduras.
El proceso de destilación se llevó a cabo en el Laboratorio 34 de nuestra facultad de ciencias
químicas.

Material:

 2 Matraz de fondo redondo de 300 ml


 2 Tubos refrigerantes.
 2 Agitadores/placas de calor.
 4 Mangueras
 2 Bomba de agua
 2 Vasos de precipitado
 2 Soporte universal
 2 Pinzas
 2 Tapón monohoradado
Procedimiento:

1. Se montaron dos equipos de destilación con una capacidad de 300 mL cada uno
2. El volumen de sustrato fermentado (900 mL) fue filtrado a través de una gasa simple
con la finalidad de separar la biomasa producida por el crecimiento de la levadura.
3. El volumen filtrado de fermentado se depositó en un recipiente de agua.
4. Se trasvasaron 300 mL de fermentado a cada uno de los equipos notados de
destilación (600 mL totales).
5. Se llevó a cabo la destilación del fermentado tratando de mantener una temperatura
menor al punto de ebullición del agua (100 °C)
6. El proceso de destilación duró alrededor de 150 minutos
7. Al finalizar el proceso se obtuvieron 50 mL de etanol hidratado por cada una de los
equipos de destilación.

Imagen 3. Equipos de destilación montados con el fermentado


Resultados y discusión

Resultados

Al finalizar el proceso de destilación se obtuvo un volumen total de 100 mL de etanol


hidratado, el cual fue sometido a una determinación del % de alcohol puro contenido en él
por medio de un densímetro alcoholimétrico. La lectura de este fue 12.5. Por lo tanto, del
volumen de 600 mL de fermentado que se destiló se obtuvieron 75 mL de bioetanol.

Extrapolando nuestro 12.5% de alcohol obtenido de la destilación de 600 mL de fermentado


al volumen total del fermentado (900 mL) determinamos que se logró producir un total de
112.5 mL de etanol. Todo esto bajo el supuesto de una completa homogeneización del
alcohol en todo nuestro volumen total de fermentado.

Se obtuvo, entonces, bajo este supuesto, un rendimiento del 12.5% de sustrato (caldo de
cascara y corazón de piña) a bioetanol a partir de su fermentación alcohólica por
Saccharomyces cerevisiae.

Discusión

Para alcanzar altos índices de rendimiento en este tipo de procesos es necesario tener bien
controladas todas las variables que influyen de este tipo de procesos; como lo es la
temperatura, pH, mezclado, hermetismo. Creemos que nuestra producción de bioetanol
tiene un índice bajo de rendimiento debido a que el diseño y montado de nuestro biorreactor
fue muy elemental, motivo por el cual la regulación de las variables que deseábamos
controlar (temperatura y mezclado) fue muy ineficiente. Aunado a esto, determinamos que
este bajo índice se debe a que solo tratamos de “controlar” estas variables, dejando fuera el
pH, quien juega un papel importante en este tipo de fermentaciones.

Otro de los factores que debió influir en nuestro rendimiento fue el hermetismo de nuestros
biorreactores. Creemos que no logramos sellar bien las entradas de aire/ oxigeno, por lo que
pudo existir un envenenamiento de nuestras levaduras disminuyendo la eficiencia de estas.

Conclusiones

Las ventajas de la generación de biocombustibles a partir de la transformación de residuos


agroindustriales no sólo radican en el aprovechamiento de estos mismos, sino también en la
generación de productos con un valor económico agregado, debido a que tienen demanda
en el mercado. Además, también es la posible aplicación de este tipo de productos en
distintos sectores económicos; como lo podría ser el sector energético. La implementación
del bioetanol como aditivo para la gasolina convencional implica no solamente una reducción
en el consumo de combustibles fósiles y una disminución de la contaminación que supone
la extracción y refinamiento de estos; sino también es una medida que impactaría
directamente en el sector salud.

Debido a que el uso de aditivos 1: 9 etanol, gasolina, respectivamente, vuelve más eficiente
la combustión, las emisiones de CO derivados de una mala combustión de gasolina se verían
reducidos. Proporcional a la disminución de emisiones de CO por parte del sector energético
en la quema de gasolina convencional es la reducción en el índice de enfermedades
cardiovasculares y neuropsicológicos provocadas por contaminación crónica por CO. Esta
disminución en el índice de enfermedades también implicaría una reducción del gasto
público en tratamientos para este tipo de padecimientos por parte del gobierno mexicano.

Así mismo, una disminución en las concentraciones atmosféricas de CO implicaría una


reducción en las velocidades en las que se genera CO 2 (gas de efecto invernadero) por las
interacciones del CO con OH- en la atmosfera.

Otra de las ventajas de la generación de biocombustibles es la cogeneración de biomasa


durante su proceso. Esta biomasa puede ser aprovechada directamente como abono para
actividades agroindustriales.

Hay que mencionar que este tipo de prácticas estarían direccionando el desarrollo de México
hacia una economía circular.

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