Colibrí

Los colibrís, también conocidos como picaflor, quindes o “pájaro-mosca”, son

aves tropicales que pertenecen a la familia de los troquilidos (Trochilinae). Entre las
principales características del colibrí destacan su pequeño tamaño (son
consideradas las aves más pequeñas del mundo) y sobre todo, su forma de volar;
ya que pueden mover o batir sus alas hasta 200 veces por segundo. Esto hace que
pueda permanecer estático, como “flotando en el aire”, o pueda volar incluso hacia
atrás.

El plumaje de suele ser de colores muy variados y llamativos. Pero en las

especies más populares, las plumas son básicamente de color verde o gris claro
con ciertos detalles metalizados.

El color de las plumas en las hembras es muy similar a los machos, pero las
manchas de la garganta y del oído son un poco más pequeñas. Por tanto, el colibrí
tiene muy poco dimorfismo sexual (diferencia entre macho y hembra).

Tienen cola bifurcada o redonda, bastante amplia respecto al tamaño total del
cuerpo. La especie Topaza bella, del nordeste de América del sur, posee una cola
en forma de cruz; Sappho sparganura, de Bolivia, Argentina y Perú, tiene la cola
bifurcada.

Su pico es de color negro y muy delgado. El colibrí pico de espada es el que más
grande lo tiene, con una longitud total de 10 cm.

Dentro de él cuenta con una lengua bífida muy larga en forma de tubo que emplea
de forma tremendamente efectiva y le sirve para obtener el néctar de las
flores que necesita para alimentarse.
Las alas de un colibrí volando casi no se pueden ver
Pero lo que más llama la atención de las características de los colibríes es su
sorprendente forma de volar. Pueden batir sus alas entre 80 a 200 veces por
segundo. Esto hace que tenga la capacidad de poder quedar estático o suspendido
en el aire sin avanzar gracias a su vuelo.

Cuándo el pájaro se encuentra así, mueve tan rápido sus alas que a la vista del ojo
humano casi no se pueden apreciar. Esta característica le permite poder volar
como si fuera un helicóptero; es decir, arriba, abajo, adelante e incluso atrás.
En este aspecto y como curiosidad, el colibrí de Ana (Calypte anna), mueve tan
rápido sus alas que puede volar a una velocidad de 400 veces la longitud de su
cuerpo por segundo. Además puede resistir aceleraciones de hasta 10 g, es decir,
10 veces el peso de su cuerpo. Por este motivo es considerado el vertebrado más
rápido del mundo.

Sus patas son tan cortas, delgadas y frágiles, que muchos de ellos prácticamente
ya han perdido la capacidad de caminar con ellas. Aunque pueden hacerlo.
Otro rasgo de esta ave tropical es su metabolismo, que es muy elevado. Por
ejemplo, el corazón de la especie colibrí de garganta azul (Lamporis clemenciae)
puede llegar a latir hasta 1.200 veces por minuto.

Cuánto pesa un colibrí

Los colibrís son pájaros extremadamente ágiles y muy ligeros. En función del tipo o
especie el peso de un ejemplar adulto varía entre los 1,5 g hasta los 12 g.

Cuánto mide un colibrí

Como hemos comentado anteriormente, el colibrí es el ave más pequeño del
mundo. El tamaño del colibrí depende, naturalmente, de la especie a la que
pertenezca. Pero las dimensiones varían desde los 5 cm (2 pulgadas) el más
pequeño, hasta los 25 cm (10 pulgadas) del más grande.

¿Cuánto viven los colibríes?

La esperanza de vida media del colibrí depende mucho de la especie a la que

pertenezca, pero el promedio se estima entre 4 y 5 años. Pese a ello, se tiene
constancia de ejemplares que han conseguido alcanzar la edad de 12 años.
Cabe destacar que muchos mueren durante su primer año de vida, especialmente
en el vulnerable periodo entre la incubación y el momento de abandonar el nido. Es
cuándo más fácilmente puede caer en manos de sus depredadores.
Aquellos ejemplares que viven en los jardines y parques de zonas urbanas o
semiurbanas tienen una alta mortalidad, debido sobre todo a que suelen ser una
presa fácil para los gatos callejeros.

Comportamiento del colibrí

Los colibrís tienen un comportamiento muy especial ya que suelen vivir solos o en
pareja. Son muy irritables y no se soportan ni entre sí ni aguantan a las demás aves
de otras especies. Los machos, sobre todo, se atacan con furia en pleno vuelo.
En general, son unos pájaros muy sedentarios. Hacen suyo un cierto área de terreno
y no permiten que otros ejemplares entren en él. Si esto se produce, pueden llegar
a luchar incluso hasta la muerte.

Dónde viven los colibríes

Los colibríes viven principalmente en las regiones tropicales y subtropicales,
pero también en las regiones templadas de América del sur y del norte. Pese a
ser nativas de América Central, se les puede encontrar desde Alaska hasta el
centro y norte del continente sudamericano.
Del mismo modo, es posible localizarlas en ciertas regiones subtropicales
como Argentina, Uruguay y Chile. El hábitat natural del colibrí no sólo se los
encuentra en las llanuras, ya que suben hasta los 5.000 metros.

¿Qué come el colibrí?

Respecto a la alimentación de los colibríes, básicamente se compone del néctar

que obtienen de las flores. Esta sustancia natural está formada casi en su totalidad
por azúcar. Cómo hemos comentado en el apartado “características del colibrí”, esta
ave tiene un metabolismo muy elevado, por este motivo necesitan alimentarse de
azúcar para obtener las elevadas cantidades de energía instantánea que
necesitan
Como curiosidad, sientes predilección y se sienten especialmente atraídos por las
flores de colores naranja y rojo. Aunque naturalmente, tampoco desprecian las de
otros colores.
Aparte del azúcar que obtienen del néctar que succionan de las flores,
también necesitan ingerir proteínas. Esto lo consiguen gracias a la ingesta de
pequeños insectos (hormigas, lombirces, abejas, avispas…), que suponen cerca de
una cuarta parte de todo lo que comen los colibrís.

¿Cómo se reproducen los colibrís?

Nido de colibrí
Los machos son unos excelentes procreadores, ya que en la época de cría y
apareamiento pueden llegar a copular hasta con una decena de hembras. Pero aquí
acaba su función. Son las hembras las encargadas de empollar los
huevos y alimentar a los polluelos recién nacidos.
Los colibrís construyen sus nidos suspendidos con ramas, plumas e hilos de
tela de araña que moldean con su lengua y pisándolos. En el proceso de incubación,
son aún más agresivos territorialmente si cabe, evitando el acercamiento de
cualquier otro animal a las proximidades de su nido.
La hembra pone dos huevos blancos con un día de separación entre ellos. Los
empolla por espacio de 12 a 16 días. Los pequeños permanecen en el nido durante
cerca de 14 días y la hembra los alimenta con néctar.
A las cuatro semanas de vida, las crías de colibrí ya comienzan a abandonar el nido
e intentar procurarse su alimento. No obstante, regresan por las noches a su nido
donde se sientes más seguros. A las ocho semanas, esta vez sí, dejan
definitivamente el nido para buscar un nuevo hogar.