Uno de los factores que puede afectar la adherencia son las lesiones que tienen que

ver con la corrosión de la armadura, que produce una disminución en la sección

transversal de la barra de acero provocando la reducción de la adherencia.
Figura 9 Variación de la adherencia con el grado de corrosión
inicialmente, la adherencia aumente para grados de corrosión bajos, donde se forma
una capa de corrosión firme que contribuye a la mejora de la adherencia. A medida
que la corrosión aumente, la adherencia comienza a reducirse, una vez que se
producen fisuras longitudinales, es cuando se produce una disminución apreciable de
la adherencia. En estos estados avanzados de corrosión, la capa de corrosión se
hace más débil además de producirse un desacoplamiento entre las corrugas y el
hormigón que puede provocar una reducción del área de contacto efectiva de la
corruga.
La durabilidad es la manera de soportar el paso del tiempo y las condiciones
ambientales a las que está expuesto.
El ACI, Committe 201 (1992) entiende por durabilidad de un hormigón su capacidad
para resistir a la acción ambiental, ataque químico, abrasión o cualquier otro
proceso de deterioro, y considera que un hormigón durable mantendrá su forma
original, calidad y serviciabilidad cuando sea expuesto a su ambiente en obra.
Según (Calleja, 1995) al hablar de durabilidad nos referimos a: la persistencia o
duración en el tiempo de un elemento, estructura u obra a lo largo de su vida útil
de servicio, y en las condiciones de todo tipo, sobre todo externas, en que este
servicio debe prestarse, estando garantizada en todo momento la necesaria
seguridad.
Según (Gettu, Aguado, & Olivera, 1996) los daños en las estructuras hidráulicas de
hormigón se podrían imputar a tres tipos de acciones: acciones químicas, acciones
físicas y otras acciones. La acción química puede ser ejercida por agentes
gaseosos, líquidos o sólidos, pero siempre en presencia de agua o humedad.
La durabilidad del concreto depende de las circunstancias, ya sea el material dado
que puede ser afectado por el deterioro del alma del acero, del concreto o de ambos
(Posada Bustamante, 2004). El deterioro de una infraestructura existente es un
problema serio en la actualidad que afecta no solo a las dependencias responsables
de ellas, sino que repercute indirectamente a la sociedad debido a que estas
estructuras quedan inservibles en el tiempo antes de alcanzar el final de su vida
útil.
El hormigón armado es un material que debe alcanzar un tiempo prolongado de
servicio, puede alcanzar una durabilidad importante debido a sus características y
propiedades antes mencionadas, pero puede verse afectada por lesiones existentes
que deben ser inspeccionadas, estudiadas y analizadas para poder repararlas y poder
cumplir con la vida útil de las edificación (Parrales Cantos, Moreno Ponce, Cobos
Lucio, & Ponce Reyes, 2018).