Nubecita triste

Escrito por:

@leamosuncuento

Ilustraciones: Manka Kasha

Hace muchas lluvias atrás, cuando el viento era muy niño y jugaba sin parar, había una
nubecita que no paraba de llorar, pues el viento jugaba con todas las nubes y con ella nadie
quería hablar.
Llegó a mí un día cuando andaba en bicicleta, ¡Jamás imaginaría lo que le haría a mi cabeza!.
No sólo eso, aquella nubecita me inundaría el corazón, póngase cómodo y preste atención, no
sea que un día le suceda lo mismo que pasé yo.
Empezó a lloverme con malos recuerdos, aquellos que remueven tus peores miedos. Llovió
ansiedad y preguntas sin contestar, caían gotas que poco a poco comenzaron arreciar. - ¡Ya
basta! ¡Deja de llorar!, Le grité a la nube pero ella seguía sin parar.
- ¡Tú no me entiendes!, Eres como los demás, no comprendes que ya no tengo ganas de
luchar.

Que no sale el sol, que hay lágrimas adentro, en este dolor.

Replicó la nube, sintiéndose peor.

- Tranquila nube triste, perdona mi indiscreción, te escucharé y tal vez eso te haga sentir
mejor, si nada cambia iremos al doctor, pero de acá no te vas hasta que cambies de color.