Está en la página 1de 7

El estudio de las propiedades de las plantas tiene su origen en la herbolaria, una ciencia

ancestral cuya influencia se extiende hasta nuestros días.

Herbolaria: ciencia que estudia las plantas y sus beneficios

Desde tiempos remotos, habitantes de todos los rincones de la tierra han utilizado las
plantas para tratar enfermedades.

Ötzi, el hombre de hielo proveniente de los Alpes que data de 5.300 millones de años
atrás, tenía hierbas medicinales entre sus pertenencias.

De esta forma, queda en evidencia que el conocimiento de las plantas y sus propiedades
ha sido una constante desde los inicios de nuestra existencia en la Tierra.

Algunos antropólogos sostienen que animales y humanos acostumbraban a seleccionar la


porción amarga de las plantas para aliviar padecimientos.

La herbolaria o fitoterapia es la ciencia que estudia el uso de las plantas medicinales para
la recuperación de la salud.
https://nutricioni.com/medicina-herbolaria-que-es-y-como-aplica-en-nuestra-salud/

La consideración de las hierbas como parte de la cotidianidad se desarrolló en respuesta


a la presencia de patógenos en los alimentos.

Algunas investigaciones reportan que en los climas tropicales hay mayor crecimiento
microbiano, por lo tanto, en este ambiente, tiende a utilizarse mayor cantidad de plantas.

En la naturaleza, las aves escogen ramas con potencia antibacteriana para evitar,
instintivamente, que sus crías enfermen.

Estos descubrimientos son el resultado de la práctica y han sido inicialmente recopilados


por curanderos indígenas.

Hoy en día, el estudio de los beneficios de las plantas se encuentra en constante revisión,
ya que permanentemente son identificadas nuevas especies de hierbas.

Aunado a ello, se descubren numerosos efectos farmacológicos a partir de los cuales se


sintetizan nuevos medicamentos.

La herbolaria parte de un aspecto fundamental del método científico: la observación. A


partir su aplicación, se ha obtenido la base para fabricar analgésicos y antibióticos.

Partiendo de este punto, se hace evidente que la herbolaria como forma de medicina
alternativa no dista de la medicina tradicional en términos de componentes activos.
https://nutricioni.com/medicina-alternativa-la-mejor-respuesta-para-su-salud/

Resulta interesante que la naturaleza ofrezca todo lo que necesitamos para vivir bien,
pero también para sanar en caso de enfermedad.
La herbolaria es, sin temor a equivocación, una de las más importantes razones de
nuestra preservación en la Tierra.

La herbolaria ha existido desde la antigüedad hasta nuestros días

Desde los inicios de la creación, la curiosidad del hombre le ha permitido indagar acerca
de todo cuanto le rodea.

Como parte del instinto de supervivencia, la búsqueda del sitio de habitación, la


vestimenta, la alimentación y la salud eran merecedoras de su atención.

Mantenerse sano para llevar a cabo estas actividades, era justo y necesario.

La herbolaria nació en épocas prehistóricas cuando los humanos recorrían territorios en


busca de vivienda y alimentos a través de la caza, la pesca y la recolección de plantas.

Desde la experimentación, los nómadas se convirtieron en conocedores de las


propiedades curativas y nutricionales de las hierbas.

En China, Egipto, Grecia y Roma, las plantas se utilizaron, por primera vez, como método
curativo.

Hipócrates y Galeno hicieron uso de la herbolaria para curar. Sus principios rigieron la
práctica de la medicina hasta la edad media.

Con la conquista de América, fue descubierto un nutrido censo de plantas que indígenas y
frailes documentaron en el código Badiano.

Mayas, Zapotecos y Mixtecos estaban al tanto de estos temas, incluyéndolos como parte
de su día a día.

Aunque hoy es considerada una forma de medicina alternativa, en la antigüedad


constituía la única opción terapéutica.

A partir de la difusión del conocimiento de generación en generación, se dispone de lo


que hoy en día sabemos de las plantas.

Existen registros bibliográficos del concepto de la herbolaria o fitoterapia como se hace


constar en la obra "Précis de Phytothérapie" del médico francés Henri Laclerc.

Los principios de la fitoterapia se fundamentan en las investigaciones de disciplinas como


la química, botánica, biología y farmacología.

Su aplicación se ha mantenido en la actualidad y es la base de la farmacología moderna,


de la cual derivan nuevos componentes activos y por ende, novedosos fármacos.

Para cada síntoma existen medicamentos, cuya preparación deriva de las poderosas
propiedades herbáceas que veremos a continuación.

El uso de las plantas en medicina, artes culinarias y decoración


Las plantas medicinales son aquellas cuyo extracto o distintas partes son utilizadas para
el tratamiento de enfermedades de un ser humano o animal.

También se les define como la materia prima necesaria para producir medicamentos a
partir de compuestos químicos con efecto terapéutico.

Datan de millones de años y desde la creación, han sido utilizadas en todo el mundo para
atenuar enfermedades y mejorar las condiciones de vida.

Mezclando ensayo y error, necesidad y casualidad, se han obtenido remedios naturales


que constituyen la base de la farmacología moderna.

El uso de las plantas abarca, además de la medicina, el ornamento, la alimentación de


humanos y animales, la aromaterapia, entre otras.

En la cocina, el uso de hierbas aromáticas forma parte de una alimentación natural


cargada de sabor.

Al mismo tiempo, las plantas aromáticas son ricas en aceites esenciales, pudiendo
consumirse crudas o frescas para preservar su potencial culinario.

En el mundo gastronómico, el sabor del perejil, la albahaca, el hinojo y el tomillo realza el


sabor de los platos.

Adicionalmente, pastos, forrajes, gramíneas y leguminosas son utilizados para la


alimentación animal.

En cuanto a las plantas ornamentales, la orquídea, por ejemplo, aporta elegancia a los
ambientes.

Su belleza adorna y ofrece mayor colorido a los espacios. Tener plantas en el interior de
la casa o sitio de trabajo alegra el panorama.

El olfato también es favorecido gracias a la elaboración de perfumes y cremas


aromatizados con extractos naturales.

En este sentido, es frecuente hallar olor a menta, manzanilla o rosas en los productos de
higiene de uso cotidiano.

Por tales motivos, debemos agradecer la existencia de las plantas. Sin duda alguna,
nuestras aliadas desde la antigüedad.

De la valeriana al tomillo: plantas medicinales más utilizadas

Afortunadamente, para cada mal existe una planta medicinal. De esta forma, es posible
inferir que existen hierbas con efectos analgésicos, antiinflamatorios y antimicrobianos.

Entre las más utilizadas tenemos:

-Valeriana: es una de las más conocidas. Es adecuada para tratar la ansiedad y la


depresión.
-Ginseng: actúa como energizante, por lo que es indicado para combatir el cansancio y
aumentar los niveles de actividad.

-Aloe vera: ayuda a aliviar el ardor provocado por las heridas y quemaduras. También
mejora la función respiratoria.

-Romero: se utiliza en la cocina para condimentar guisos. Además, mejora problemas


digestivos, respiratorios y musculares.

-Manzanilla: disminuye la irritación, calma los nervios y mejora los trastornos digestivos.

-Diente de león: reduce los niveles de colesterol y mejora el tránsito intestinal.

-Menta: de uso culinario y medicinal. Alivia la irritación de la garganta y disminuye la


flema provocada por los resfriados.

-Equinácea: estimula el sistema inmunológico y reduce el malestar del catarro común.

-Perejil: además de su uso gastronómico, tiene efecto antioxidante y contribuye a mejorar


la salud renal.

-Salvia: cicatriza heridas y combate las bacterias de forma efectiva.

-Hierbabuena: ayuda a reducir molestias estomacales y respiratorias. Asimismo, alivia el


dolor y la inflamación.

-Cilantro: combate el insomnio, la fatiga y los problemas estomacales. Igualmente, aporta


un rico sabor a las comidas.

-Albahaca: evita la caída del cabello, alivia el dolor menstrual, combate los problemas de
sueño y refuerza el sistema inmunológico.

-Jazmín: ayuda a eliminar el estrés y la ansiedad, al mismo tiempo que tiene un efecto
afrodisíaco.

-Hinojo: masticar semillas de hinojo después de cenar, relaja la musculatura estomacal y


mejora la digestión.

-Árnica: es un potente antiinflamatorio para el tratamiento de esguinces, hematomas,


picaduras de insectos y enfermedades reumatológicas.

-Toronjil: sus propiedades sedantes, relajan el sistema nervioso y disminuyen el


agotamiento cerebral.

-Tomillo: se utiliza con frecuencia en la cocina. Mejora la digestión y alivia los problemas
respiratorios.

Un estilo de vida natural con variedad para escoger, anula la monotonía y te permite estar
más sano.
¿Estás triste? El tratamiento natural para el ánimo decaído

La depresión es un trastorno ampliamente conocido caracterizado por la aparición de


apatía e insatisfacción.

Esta alteración del estado de ánimo obedece a la conjugación de distintos factores.

Desde el punto de vista biológico, bajos niveles de serotonina, un potente neurotransmisor


cerebral, se asocian con episodios depresivos.

Por otro lado, el componente psicosocial determina, en gran medida, la manera en la cual
percibimos las situaciones a las cuales debemos enfrentarnos diariamente.

En este sentido, la ansiedad y el estrés favorecen la depresión, puesto que añaden la


percepción de que las circunstancias exceden la capacidad de respuesta.

Con la finalidad de aliviar tus sensaciones, [p4a] ofrece un excelente concentrado de


hierbas y vitaminas que mejorará tu estado de ánimo.

Gracias a su contenido de óxido de magnesio y vitamina B, ganarás vitalidad y


disminuirás el riesgo de desarrollar depresión.

El efecto de [p4t] se ve reforzado con las semillas de Gryffonia simplicifolia, una planta
con elevadas concentraciones de hidroxitriptófano, precursor de la serotonina.

Dicho precursor favorece la formación de este neurotransmisor, con lo cual se espacian


los episodios de depresión.

A diferencia de los fármacos sintéticos, las semillas de Gryffonia cumplen su cometido sin
generar dependencia.

Al mismo tiempo, la hierba de San Juan de [p4t] mejora el estado de ánimo y se vincula
con el tratamiento de la depresión moderada.

El extracto de raíz de Ashwagandha de [p4a] mejora los casos de fatiga de las glándulas
suprarrenales, las cuales trabajan incesantemente en situaciones de estrés.

Dile adiós a la sensación de opresión estomacal, pues el extracto de flor de manzanilla


tiene un efecto relajante y antiespasmódico que tranquilizará tu estómago.

Ahora que conoces todos estos maravillosos beneficios, te corresponde apropiarte de las
bondades que la herbolaria trae a tu vida.

Cambia tu tristeza y enfermedad, dile adiós a los días grises y ten una visión optimista del
mundo.

Ya no tienes excusas, inicia hoy un colorido futuro. ¡Anímate!


Infusiones, compresas y más formas de preparación de las hierbas

Como hemos visto, las hierbas pueden utilizarse con distintos fines, pero ¿cómo se
preparan?

Las plantas medicinales tienen distintas formas de preparación que varían según su uso
interno o externo.

En este orden de ideas, encontramos:

-Infusiones: consiste en mezclar hojas o partes secas de la planta con una taza de agua
hirviendo, con lo cual se obtiene una bebida caliente saborizada.

-Decocciones: las hojas o partes secas de la hierba son colocadas en agua fría para ser
hervidas y mezcladas con endulzante.

-Maceración: se colocan hierbas frescas en una taza de agua, alcohol o vino y se deja
reposar durante 8 a 12 horas a temperatura ambiente, para luego tibiar y endulzar.

-Compresas frías: se cuece la planta, dejándola enfriar por completo. Luego, se envuelve
en una fina tela y se aplica sobre el área afectada.

-Compresas calientes: después de su cocimiento, las plantas calientes deben aplicarse


sobre la lesión.

-Cataplasma: se trituran las hojas de las plantas y se extienden sobre una tela para ser
colocadas en el sitio comprometido.

-Jabones: las plantas se hierven, obteniéndose un zumo que debe mezclarse con jabón
neutro.

-Jarabes: los extractos de plantas son espesados y endulzados con azúcar o miel para
obtener mejor sabor.

-Ungüentos: luego de hervir las hojas, se obtiene un concentrado al que se añade alguna
pomada incolora para obtener crema.

-Aceites: resultan de la mezcla de hierba seca o fresca con aceite vegetal.

-Polvo para cápsulas: la hierba seca es molida en un mortero hasta su


empaquetamiento dentro de cápsulas.

-Jugos: las plantas frescas exprimidas a mano destilan jugos que pueden beberse.

-Baños: los baños de hierbas pueden ser fríos o calientes. Consisten en la inmersión total
o parcial del cuerpo.

-Gargarismos: hacer gárgaras con cocimientos de plantas alivia el dolor de garganta.

-Inhalaciones: aspirar por la nariz y por la boca el vapor del cocimiento de la planta
escogida, ayuda a desinflamar las mucosas.
Variadas formas de preparación que podrás seleccionar según tu gusto y requerimientos.

Las bondades de las preparaciones naturales para la salud

Recurrir a las preparaciones naturales representa una opción saludable ante el mar de
fármacos sintéticos existentes en la actualidad.

Sus bondades han sido el cimiento que sustenta la permanencia de esta alternativa en la
actualidad.

Si eres de los que evitan las tabletas y cápsulas, considera que los remedios caseros
traen consigo muchos beneficios.
https://nutricioni.com/los-beneficios-del-remedio-casero-para-su-salud/

A continuación, algunos de los más destacados:

-Actúan de múltiples formas: tienen efecto antioxidante, relajante, digestivo, analgésico,


diurético y nutritivo.

-Tienen pocos efectos secundarios: a diferencia de los fármacos convencionales, las


plantas son libres de aditivos químicos que podrían generar reacciones adversas.

-Son baratos: las hierbas pueden utilizar sin necesidad de gastar grandes sumas de
dinero.

-Tienen preparaciones sencillas: el proceso de elaboración de los remedios caseros es


rápido y nada engorroso.

-Están al alcance de la mano: las plantas están disponibles en tiendas físicas o digitales.

-Se orientan a la prevención: el uso de plantas ayuda a prevenir enfermedades antes de


su establecimiento.

-Existe una planta para cada síntoma: gracias a la diversidad del medio ambiente,
contamos con componentes naturales para tratar la mayoría de las afecciones corporales.

-Son adaptables: no sólo se adaptan a los síntomas, también se ajustan al paladar.

-Estimulan la producción de algunas sustancias: algunas plantas favorecen la síntesis


de neurotransmisores necesarios para el funcionamiento del sistema nervioso.

Ahora que ya conoces del tema, opta por lo natural y conviértete en una persona longeva
y saludable.

Tu cuerpo experimentará un bienestar sin igual. Vive feliz, haciendo uso de las bondades
que la naturaleza nos ofrece.

También podría gustarte