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Resumen El sistema urbano colombiano pasó de una estructura policéntrica, en el siglo XIX, a una
red organizada alrededor de cuatro ciudades, dinamizada por el desarrollo industrial, en
la primera mitad del siglo XX. A partir de la década del cincuenta, el aceleramiento de la
industrialización bajo un modelo keynesiano y la reestructuración de las economías re-
gionales con la diversificación de exportaciones y la minería, condujeron a una creciente
primacía de Bogotá. La entronización del país en un proceso de globalización en la dé-
cada del noventa y la consecuente crisis industrial y agraria remodelaron las economías
regionales, provocando el marasmo de algunas regiones como el Eje Cafetero y el valle
alto del Magdalena y la revitalización de ciudades como Bucaramanga y Cartagena. Este
escrito examina este último período, con la pretensión de ofrecer una panorámica de la
estructura actual de la red de ciudades, modelada ahora por procesos de globalización
económica y liberalización política.
302
* Artículo de investigación científica y tecnológica, derivado de la tesis “Bogotá: crecimiento urbano y cambio morfológico, 1538-2010”, presentada para
optar al Doctorado en Ciencias Geográficas, ante la Université Laval. Fue elaborada bajo la dirección del profesor Guy Mercier, de la Université Laval y
con el apoyo del Departamento de Geografía de la Universidad Nacional de Colombia.
The Colombian urban system in the face
of globalization: economic restructuring and regional change
Abstract The Colombian urban system went from a polycentric structure, in the nineteenth cen-
tury, to a network organized around four cities, energized by industrial development in
the first half of the twentieth century. From the fifties, the acceleration of industrializa-
tion under a Keynesian model and the restructuring of regional economies by diversify-
ing exports and mining, led to a growing primacy of Bogotá. The enthronement of the
country in the process of globalization in the nineties and the subsequent industrial and
agricultural crises remodeled regional economies, causing stagnation in some regions
such as the Coffee and the upper valley of the Magdalena and revitalization of cities such
as Bucaramanga and Cartagena. This paper examines the latter period, with the aim of
providing an overview of the current structure of the network of cities, now modeled by
processes of economic globalization and political liberalization.
Jhon Williams Montoya Garay. El sistema urbano colombiano frente a la globalización: reestructuración económica y cambio regional
Key words Industrialization, Colombia, history, economic openness,
plus
economic development.
Jhon Williams Montoya Garay. El sistema urbano colombiano frente a la globalización: reestructuración económica y cambio regional
gulación keynesiana, que daba apoyo filosó- Precisada así la naturaleza de la globalización y el
fico al régimen fordista (Harvey, 2006; Storper, neoliberalismo como fuerzas esenciales que han
1987)1. Al inicio, el neoliberalismo se sustentó modelado el cambio económico y, con él, la or-
en una política monetarista que, para Kalmano- ganización espacial de las regiones y ciudades en
vitz (1983), interpretaba mejor la estanflación las últimas tres décadas, se procede ahora a exa-
de la década del ochenta y las necesidades de las minar la implementación del modelo neoliberal
burguesías, tanto externas como internas, permi- en Colombia y su impacto en el sistema urbano.
tiéndoles imponerse y sugerir respuestas a la cri-
sis, bien domesticando los sindicatos por medio
del crecimiento del desempleo, destruyendo el
Crisis económica y la entronización
capital “ineficiente” mediante el libre cambio y del modelo neoliberal
altas tasas de interés o reduciendo los impuestos
sobre las ganancias y los altos salarios, aumen- Tras una prolongada crisis a comienzos de la dé-
tándolos en forma simultánea sobre el trabajo, cada de los ochenta, desde 1990 Colombia entró
de manera directa o tras la reducción del gasto en un proceso acelerado de liberalización eco-
público. Todo ello en conjunto con una acción nómica, la cual partía del interés por eliminar el
autoritaria para controlar los tres únicos factores viejo modelo de desarrollo e implementar una
de producción que no fueron liberados: el trabajo estrategia económica para el posicionamiento de
(que debía mantenerse por debajo de los precios los actores económicos nacionales en la economía
de mercado), las tasas de interés (por encima) mundial. La justificación de tal programa de libe-
y las tasas de cambio (orientadas a favorecer a ralización, dirigido por el gobierno de César Ga-
los exportadores). viria, surgía de la consideración de que el llamado
305
1 Para Harvey, desde 1982 los preceptos keynesianos habían sido erradicados del FMI y del Banco Mundial y a finales de la década ya habían dejado de ser dominantes en
la mayor parte de las universidades norteamericanas, convirtiendo la mayor parte de los economistas a los preceptos del monetarismo (Harvey, 2006, p. 33).
viejo modelo —alusivo al modelo cepalino, que los países industrializados y la caída en ellos de
además ya había sido reestructurado— conducía las tasas de interés, situación que se pretendía
al estancamiento económico, pues se había ago- aprovechar para “capitalizar” el país sin recurrir
tado, convirtiéndose “en una fuente de trabas, al endeudamiento externo. Como consecuencia
retrasos, imposibilidades y frustraciones” (Hom- de esta política, se presentó una debacle en el sec-
mes, Montenegro, Roda y Vélez, 1994, p. x), lo tor agrícola e industrial y también una aguda cri-
que llevó a una economía cerrada con mercados sis financiera, resultado del alto flujo de capitales
regulados y protegidos en exceso. Ello incluía la que incrementó el consumo: entre 1992-1995,
incursión del Estado en numerosas actividades aumentó un 6% en el sector privado y un 9%
que se consideraban fuera de su competencia y en el sector público (Caballero Argáez y Urrutia,
lo conducían a desatender sus obligaciones cen- 2006). Por otra parte, entre 1990-1994, la in-
trales en educación, salud y seguridad. versión privada creció un 20,4% y la cartera de
los bancos se expandió por encima de 50% entre
El diagnóstico dado por la “tecnocracia neolibe- 1993 y 1994, mientras el ahorro interno se des-
ral”, como la denomina Ahumada (1996), era plomó de 15,1% del PIB en 1988, a un 8,9% en
contundente: el país se encontraba en una caída 1994 (Caballero Argáez y Urrutia, 2006). Bajo
en la productividad, aparejada con la concen- estas condiciones, la expansión de la economía
tración de las actividades económicas y una baja se hizo insostenible y se desencadenó la más pro-
competitividad derivada de la protección, lo que funda recesión que el país haya conocido.
significaba una escasa vinculación al mercado in-
ternacional (Hommes et al., 1994). La solución Por otra parte, es necesario señalar que el pro-
no podía ser menos radical: un paquete integral yecto neoliberal también tuvo una dimensión
de reformas que empezaba con la legislación la- que podría denominarse político-administrativa,
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Jhon Williams Montoya Garay. El sistema urbano colombiano frente a la globalización: reestructuración económica y cambio regional
es, sin otra interferencia política que la de los in- del modelo neoliberal, en conjunto con la rei-
tereses que representan los miembros de la Junta. vindicación esporádica de políticas keynesianas.
En resumen, la implementación radical de las Estos cambios tuvieron impactos tanto secto-
nuevas políticas condujo a una fuerte crisis finan- riales como espaciales. En el primer caso, la li-
ciera en 1998, la cual obligó a reorientar la eco- beralización económica iniciada a mediados de
nomía, aunque sin abandonar del todo el modelo la década del setenta condujo a una reestruc-
neoliberal. De acuerdo con Caballero Argáez y turación y pérdida de dinamismo en el sector
Urrutia, si bien al final de la crisis financiera la industrial y agrícola, a la vez que estimuló el cre-
economía colombiana podía caracterizarse como cimiento del sector terciario, sobre todo en el
cerrada, con altos aranceles, baja productividad, área de servicios financieros y de comunicacio-
alta inflación, baja generación de empleo y ta- nes. En segunda instancia, los procesos de libe-
sas de crecimiento inferiores a las de la década ralización y globalización llevaron tanto a una
del setenta (2006, p. 123), el sistema financiero influencia directa de procesos externos en las eco-
se había reestructurado a profundidad y, al igual nomías regionales, como a una ampliación de los
que en la mayor parte del mundo occidental, ad- intercambios en ese ámbito. El boom de mate-
quirió una importancia desproporcionada frente rias primas, con la expansión del sector minero,
a los otros agentes económicos. tuvo importantes repercusiones en la región. En
cuanto a los intercambios, el país experimentó
El fin de la crisis financiera puede situarse hacia un notable incremento de los mismos y una im-
el año 2003, coincidiendo con el inicio de una portante diversificación de los mercados. Entre
expansión económica ligada al bum de las ma- 1994 y 2008 fue significativo el crecimiento del
terias primas, uno de los más largos y de mayor comercio internacional del país y el incremento 307
aumento en la historia del mundo (Gallagher y del número de socios comerciales, en especial
Porzecanski, 2009, p. 15). Este incremento se los países vecinos y asiáticos. Se destaca el peso
del mercado venezolano, que en 2002 recibía rural, aunque la crisis paralela de la industria li-
un 50% de los productos manufacturados que mite la oferta de trabajo en las grandes ciudades.
exportaba Colombia. Sin embargo, las dificul-
tades políticas posteriores provocaron el congela- Una comparación rápida del comportamiento
miento del comercio y una caída de 71,5% de las demográfico rural entre 1985 y 2005 muestra un
exportaciones a Venezuela en los primeros cinco decrecimiento anual promedio de 0,6%; además,
meses de 2010 (Elespectador.com, 2010). Por úl- en 1985, solo un tercio de los 1.022 municipios
timo, los datos de exportaciones (Ministerio de tuvo tasas de crecimiento anual positivas y 100
Comercio, Industria y Turismo, 2010) también municipios crecieron por encima de 2%. Mu-
evidencian el peso comercial de otros países la- chos de los que crecieron se ubican cerca de las
tinoamericanos y muestra que, contrario a mu- grandes ciudades, es decir, en las áreas metropo-
chas predicciones, durante la etapa neoliberal el litanas o están asociados con actividades urbanas
país diversificó y fortaleció sus relaciones econó- como centros de descanso o áreas agroindustria-
micas con múltiples países como México y Mer- les, manejadas desde las metrópolis mayores.
cosur, debilitando la tendencia a que el comercio Aquellos que escapan a esas condiciones deben
colombiano dependiera casi por completo de Es- su crecimiento a la expansión de la actividad mi-
tados Unidos que, en todo caso, sigue siendo el nera (por ejemplo, localizados en Putumayo, La
principal socio comercial. Guajira, sur de Bolívar, Casanare y Arauca), con
frecuencia mezclada con la producción de nar-
cóticos. De otra parte, las áreas rurales de los
La creciente primacía de Bogotá municipios de los departamentos centro-andinos
y la red contemporánea de ciudades cayeron en población rural. En Antioquia, por
colombianas ejemplo, esta población perdió un 0,5% anual y
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3 Aunque es necesario tener en cuenta que, con frecuencia, se subvalora el crecimiento vegetativo de la población y se sobredimensiona la migración. Al respecto, Martínez
Gómez (2006, p. 96) afirma, por ejemplo, que Bogotá recibió 100.000 migrantes anuales en el período 1985-1993; sin embargo, la tasa de crecimiento intercensal anual
fue de 3,2%, esto es, en promedio, 154.000 personas por año y, si se tiene en cuenta una natalidad estimada de 114.604 personas en 1990 (Alcaldía Mayor de Bogotá,
Departamento Administrativo de Planeación Distrital, 2000, p. 150), el valor aproximado sería de 40.000 migrantes, menos de la mitad del valor calculado.
El mapa de la Figura 1 permite poner en pers- Dicho crecimiento está asociado con una sa-
pectiva las dinámicas demográficas más recientes. turación de los núcleos centrales, la elevación
Por un lado, es evidente que las grandes ciuda- consiguiente de los precios de la vivienda y la
des absorben la mayor parte de la población búsqueda de suelos más baratos en los asenta-
migrante, seguidas de ciudades intermedias y mientos próximos a las grandes ciudades. Esta
asentamientos que han tenido un protagonismo situación condujo a un proceso de traslado de
reciente en el desarrollo de actividades de expor- la industria hacia los municipios periféricos en
tación —banano en Urabá, petróleo en Casa- busca de suelos más baratos y ventajas tributa-
nare y Arauca y carbón en La Guajira— como rias, al menos en el caso de la sabana de Bogotá
también núcleos industriales consolidados como (Alfonso, 2001). Es verificable un proceso seme-
Duitama o Barrancabermeja. También es visible jante en Medellín, que desarrolló núcleos indus-
que los núcleos alrededor de las grandes ciuda- triales externos a la ciudad (Itagüí y Envigado)
des andinas tienen un protagonismo importante y ha experimentado el traslado de fábricas hacia
en la recepción de la población migrante. Por otros núcleos, como Caldas y Rionegro. Este fe-
otra parte, la cartografía es clara en mostrar los nómeno se intensifica, debido a la fuerte presión
sitios con mayor movilidad de población; allí se por espacio residencial en Medellín, la cual es
destaca el oriente colombiano, no solo por ser mucho más intensa que en cualquier otra ciudad,
destino de una población migrante significativa, por lo que el Gobierno regional ha impulsado
Jhon Williams Montoya Garay. El sistema urbano colombiano frente a la globalización: reestructuración económica y cambio regional
como lo atestiguan los volúmenes de población la construcción de zonas francas en los munici-
externa en los municipios del piedemonte y su pios cercanos.
participación en el total de la población (supe-
rior a 30%), sino también por la alta movilidad, Podría señalarse que, mientras la crisis agraria es-
pues con frecuencia más de un 30% ha cambiado timuló el crecimiento demográfico de las áreas
de residencia. Los valores más altos se registran metropolitanas y los núcleos periféricos de las
en el suroriente y en los municipios ubicados grandes ciudades, la crisis industrial debilitó la
sobre el borde de la cordillera4. También resalta posición de primacía de algunas ciudades como
la movilidad poblacional en el noroccidente y el Barranquilla, Cali, Manizales y Pereira, a la vez
Magdalena Medio, regiones sacudidas por fuer- que fortaleció la de Bogotá —en especial, si se in-
tes transformaciones socioeconómicas que inclu- cluye su área metropolitana— y también dio di-
yen la violencia política. namismo a ciudades como Cartagena y Montería.
Los mapas de la Figura 1 permiten verificar un El anterior análisis puede complementarse con el
proceso —similar a las décadas anteriores— de examen del índice de primacía para las once ciu-
crecimiento urbano superior a 4% en las ciu- dades (Figura 2), el cual evidencia que no solo la
dades medianas y asentamientos cercanos a ciudad primada ha obtenido altos beneficios de
las grandes metrópolis (Soledad, Piedecuesta, los procesos recientes, sino también que las cua-
Rosario, Chía, Mosquera). Incluso en algunos tro ciudades mayores se han favorecido con res-
municipios la tasa de crecimiento es superior pecto a las que están más abajo en la jerarquía.
a un 9% anual como Soacha, Floridablanca y Así, los altos valores en períodos recientes expre-
Girón (área metropolitana de Bucaramanga) y san la mayor fortaleza demográfica y económica
309
Malambo (área metropolitana de Barranquilla). de las ciudades de la cuadricefalia, más cuando se
4 Que se corresponde bastante bien con la idea de un poblamiento del oriente derivado de una “reflexión” el poblamiento andino o “efecto espejo” (Jiménez y Montoya, 2003).
Figura 1.
Población y crecimiento urbano 1985-2005
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resultados se asocian con la migración, efecto país en la ciudad. Tal unión se hizo en el con-
de la baja creación de trabajo en las áreas rura- texto de una creciente competencia mundial y
les, pues entre 1950 y 1987 el empleo rural solo regional por el mercado de valores y en un mo-
creció un 0,6%, cuando la tasa de crecimiento mento en que el negocio accionario tuvo un cre-
de la población fue de 2,5% (Jaramillo, 2002, cimiento considerable: el Índice General de la
Figura 2.
Índices de primacía en el sistema urbano colombiano
1,60
1,50
1,40
1,30
1,20
1,10
1,00
0,90
0,80
0,70
0,60
1843* 1898 1938 1951 1964 1973 1985 1993 2005
Cuatro ciudades ------ 0,80 1,04 0,85 0,78 0,91 1,02 1,12 1,18 1,27
Once ciudades --------- 0,70 0,91 0,96 0,94 1,11 1,29 1,41 1,44 1,51
311
Fuente: DANE (2009); Vergara y Velasco (1974); DNP (2005); Pérez (1861)
* Datos de Cantón
5 En particular con la riqueza agrícola de su hinterland inmediato e incluso con la explotación de canteras en su perímetro.
Bolsa de Colombia (IGBC) se multiplicó por equivalentes a 1,8% del presupuesto de la Na-
12,2 entre 2001 y 2010 (Banco de la República, ción, apenas un 17% del que posee Bogotá, si
2010). Dicha expansión fue apalancada por el bien su población es un 32% de la de la capital.
boom minero, el flujo de inversión extranjera y Para las otras ciudades, la distancia es aún mayor,
la incorporación a la bolsa de grandes empresas alcanzando, en el caso de Cali y Barranquilla, va-
como Isagén, ETB y Ecopetrol; esta última repre- lores iguales a un 7% del presupuesto de Bogotá.
sentaba, para junio de 2008, un 37% del IGBC. Los valores per cápita del presupuesto refuerzan
no solo la interpretación de una fuerte desigual-
En el caso del sistema bancario, la crisis y poste- dad en el acceso a recursos, sino también que
rior privatización del sistema financiero desem- las ciudades que siguen a Bogotá se encuentran
bocó en la conformación de tres grandes grupos en desventaja frente a capitales de rápido creci-
que dominan el mercado: el Grupo Aval, con miento como Cartagena, Bucaramanga y Pereira,
matriz en el Banco de Bogotá (29,6% de los ac- que cuentan proporcionalmente con más presu-
tivos a junio de 2010); el Grupo Bancolombia puesto que Cali y Medellín (Cuadro 1).
(20,2%), con sede en Medellín y varias filiales
en Centroamérica y Davivienda (12,3%), tam- Una tercera variable que se añade al sector finan-
bién con sede en Bogotá y que adquirió el Banco ciero y gubernamental es el comercio. A pesar
Cafetero, símbolo de la pujanza del negocio del de que no sea común reconocer a Bogotá como
café en el siglo XX. A estos tres conglomera- un nodo importante de intercambio, en par-
dos se agregan los dos grandes bancos españo- ticular por su posición alejada de los puertos,
les, BBVA (9,4%) y Santander (2,8%), también la ciudad ha tenido un papel importante en el
con sede principal en Bogotá, al igual que Ci- comercio nacional. De otra parte, los cambios
tibank (3,6%); el resto del sistema lo integran recientes reorientaron también la economía ur-
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el Banco Agrario (6,2%) —único banco estatal bana y dispararon el consumo, que se convirtió
remanente— y ocho bancos más pequeños con en un elemento esencial de la economía, con
sede para Colombia en Bogotá, que representan una participación de 12% del PIB y asciende
un 22,3% de los activos restantes (Superinten- tres puntos porcentuales de participación desde
dencia Financiera de Colombia, 2010). el comienzo de la apertura económica en 1993.
Esta expansión se asocia con la transformación
Una segunda expresión de la relación entre la pri- profunda que ha tenido la venta al por menor
macía bogotana y el sector terciario está dada por desde la década del noventa. En ese sentido, Wri-
la concentración de actividades gubernamenta- gley, Coe y Currah (2005) recalcan que las mul-
les. A pesar de la descentralización política de la tinacionales del comercio al detalle tuvieron un
década del noventa, el Gobierno central conti- crecimiento espectacular, reorganizando y ex-
nuó con muchas prerrogativas en el manejo del pandiendo sus negocios con un especial inte-
presupuesto público, a lo que se suma que el Go- rés en América Latina; desarrollaron estrategias
bierno mismo de Bogotá tenía un presupuesto para lidiar con un ambiente económico volátil,
anual de 14 billones (2009), igual a un 10% del lo que los llevó, por ejemplo, a una fuerte inte-
presupuesto de la Nación cuyo manejo es autó- gración con los proveedores locales y la adap-
nomo e incluye una nómina de cerca de 20.000 tación de prácticas mercantiles de los lugares
312
empleados. Las siguientes ciudades tienen, por el de localización.
contrario, presupuestos modestos, como lo refleja
el Cuadro 1. En el caso de Medellín, por ejem- En el caso colombiano, dos multinacionales del
plo, el presupuesto anual alcanza 2,5 billones, comercio al detalle tuvieron un rol fundamental:
la multinacional francesa Carrefour penetró con más tradicionales de la clase media bogotana.
grandes inversiones en Bogotá, para luego exten- Hoy, Almacenes Éxito, propiedad de Casino en
derse a ciudades grandes, medianas y pequeñas6. un 54% y un 46% de los fondos de pensiones
Hoy mantiene sesenta tiendas en veintiocho ciu- (Grupo Éxito, 2009), está compuesta por siete
dades, aunque veintiuno de ellas se ubican en Bo- firmas que mantienen su identidad comercial y
gotá y tres más en municipios vecinos; Medellín es la compañía más grande del país por ventas,
solo registra seis tiendas, mientras Cali y Barran- ocupando también la posición número 10 en
quilla tienen cinco. La otra multinacional que patrimonio. Carrefour se ubica en la posición 9
compite en el sector en Colombia, la francesa Ca- y 21 respectivamente (Superintendencia de So-
sino, no se basó en la apertura de grandes super- ciedades, 2010)7.
ficies, sino en la adquisición de la mayor cadena
nacional: Almacenes Éxito. Esta cadena, de ori- Otras multinacionales del sector han entrado al
gen antioqueño, se expandió con rapidez desde mercado con menor fuerza. Es el caso de Makro,
la década del noventa, después de estar restrin- propiedad de la holandesa SHV, que en Bogotá
gida al mercado del área metropolitana de Me- tiene tres de las doce tiendas que registra en todo
dellín, donde fue fundada en 1949. Su primer el país y que incursionó apoyándose en capital
hipermercado en Bogotá lo construyó en 1989 local, para luego absorber el 100% de la propie-
(Grupo Éxito, 2009) y entró a competir con las dad. Restan algunas cadenas nacionales relativa-
Jhon Williams Montoya Garay. El sistema urbano colombiano frente a la globalización: reestructuración económica y cambio regional
otras cadenas, en especial mediante la adquisi- mente fuertes como la barranquillera Olímpica
ción de otras compañías menores: Almacenes (posición 12 en ventas y 67 en patrimonio),
Ley, de origen barranquillero y Carulla Vivero, pretendida por Walmart para penetrar el mer-
fundada en 1905 y uno de los supermercados cado colombiano, pero sin resultados hasta hoy.
Cuadro 1.
Presupuestos municipales para las principales ciudades
Fuente: elaboración propia con datos de DANE (2009) y páginas web oficiales de las ciudades
6 En 2012, la crisis de Carrefour en Europa llevó a la reorganización de sus negocios y la venta de sus tiendas en Colombia a la chilena Cencosud.
7 Datos para 2008.
De la misma manera, se mantienen los minoristas Bogotá como ciudad global
asociados con las Cajas de Compensación, crea-
en formación
das en la década del cincuenta con aportes obli-
gatorios de los patronos y que ahora cuenta con
una parte importante del mercado al detal, aun- La situación descrita nos ratifica la creciente pri-
que sometidas a la presión tanto de competencia macía de Bogotá y su incontestable control sobre
por el mercado, como de reformas fiscales que la administración de las economías regionales y,
pretenden aligerar las cargas de los empleadores. en general, como motor de la economía nacional.
Sin embargo, Bogotá también ha venido conso-
Para concluir este examen del terciario y la es- lidando una posición importante en el contexto
tructura urbana, conviene examinar el compor- del sistema urbano latinoamericano, haciendo
tamiento de las cien compañías más grandes del de intermediaria tanto entre la economía nacio-
país. En este listado es evidente la concentración nal y la economía internacional, como en los flu-
de las grandes empresas en Bogotá, la cual, ade- jos que dinamizan las economías nacionales de
más, ha aumentado de modo considerable su po- América Latina y sus vínculos con Estados Uni-
der económico en las últimas décadas, frente a dos y Europa.
un avance más lento o el retroceso de las regio-
nes (Moncayo, 2007). Los porcentajes demues- En ese sentido, es claro que Bogotá se ha con-
tran el estancamiento de Barranquilla y el avance vertido en una centralidad importante dentro de
de nuevos núcleos, como Cartagena y Bucara- la red internacional de intercambios, especial-
manga. En términos sectoriales, el peso del ter- mente entre América Latina y Estados Unidos y,
ciario sobre la economía colombiana es notable8, en menor medida, Europa. En tal condición, Bo-
en particular del sector financiero, que domina gotá ocupa la posición 49 como Ciudad Mundial
CUADERNOS DE VIVIENDA Y URBANISMO. ISSN 2027-2103. Vol. 6, No. 12, julio-diciembre 2013: 302-320
la jerarquía de las grandes empresas con una ca- Beta, de acuerdo con la clasificación del grupo
racterística importante y es que su control reposa GAWC (Globalization and World Cities Re-
sobre todo en capital nacional. Contrario a otros search Network [GAWC], 2008) y se incluye,
países y otras actividades, el sector financiero en según el índice derivado de la especialización
Colombia es controlado en un 79% por conglo- en servicios globales9, dentro de las llamadas
merados nacionales, mientras que en México, por wannabe world cities, definidas como núcleos
ejemplo, el capital nacional solo retiene un 10% importantes y con políticas orientadas a realzar
y en Chile y Argentina, menos de 60% (revista su estatus global, aunque están por fuera de la
Semana, 2010). red central de ciudades que comandan la econo-
mía global (Taylor, 2004, p. 160). En este con-
Cabe anotar que a las variables examinadas pue- texto internacional, la ciudad posee el primer
den incorporarse muchas otras, como educación, aeropuerto de carga en América Latina, con 530
investigación científica, comunicaciones, salud millones de toneladas movilizadas en 200810 y
y transportes, variables cuyo examen ratificaría el cuarto lugar en pasajeros con 13,5 millones,
una considerable concentración allí donde se dis- solo superado por Ciudad de México y los dos
pone de más recursos para su desarrollo, es de- aeropuertos principales de São Paulo (Invest in
cir, en Bogotá. Bogotá, 2010). Asimismo, Bogotá es la cuarta
314
8 Verificado por los pesos del PIB, donde el terciario agrupado pasó de 52% en 1975 a 63% en 2007, superando con amplitud a la agricultura (8,3%), minería (4,6%) e in-
dustria (14,8%) (Banco de la República, 2010).
9 En especial los servicios al productor y que Taylor descompone en legislación bancaria y financiera, consultoría para administración, finanzas y banca, publicidad, legisla-
ción y contabilidad.
ciudad con mayor penetración de Internet por Brasil, México y Argentina— suman un 69,4%
banda ancha en América del Sur, superada por del PIB regional (Cepal, 2012). A ello se suma
Buenos Aires, Montevideo y Santiago; además, que en la primera década de 2000 el país creció
registra altas inversiones en el desarrollo del sec- a tasas superiores a las del promedio en América
tor de comunicaciones (Invest in Bogotá, 2010). Latina y el Caribe, exceptuando los años 2004 y
2008 (Cepal, 2010; 2012).
Esta posición de Bogotá deriva, en gran medida,
del peso de la economía colombiana en el con- Esta situación ubica a Bogotá como una me-
texto latinoamericano, caracterizada por su es- trópoli latinoamericana desde donde se organiza
tabilidad a largo plazo y por el cumplimiento una parte importante de las actividades de mul-
estricto de las recomendaciones de las agencias tinacionales para atender sus negocios en Amé-
multilaterales. En ese sentido, el desempeño de la rica Latina, pero también como un núcleo que
economía colombiana respecto a la de sus vecinos concentra las funciones de comando principal
ha sido mejor, en particular para atraer inversión de empresas que tienen un importante alcance
extranjera11 y con ella elevar otros indicadores. regional. Así, en el listado de las 500 empresas
De tal manera, el índice de la Bolsa de Valores más grandes de América Latina aparecen veintio-
con base 100 en el año 2000, subió a 1.404 para cho compañías colombianas, en su mayor parte
2009, muy superior a la mayor parte de países, con sede completa en Bogotá (América Economía,
Jhon Williams Montoya Garay. El sistema urbano colombiano frente a la globalización: reestructuración económica y cambio regional
cuyos valores estuvieron, con frecuencia, por de- 2010a). El examen de algunas de ellas evidencia
bajo de 1.000 (489 para Brasil, 300 para Chile y la alta participación de multinacionales de larga
782 para Venezuela). El flujo de divisas permi- data como Exxonmobil y de reciente conforma-
tió la multiplicación por tres de las reservas in- ción a partir de la compra de conglomerados
ternacionales entre 2000 y 2009, lo que generó nacionales (Éxito, Avianca, Bavaria) y otras, en
una de las mayores revaluaciones del mundo y especial del sector energético, compuestas de ca-
permitió mantener las tasas de interés por debajo pital nacional (Terpel, ISA, Ecopetrol). En todo
de las que tienen países con economías de simi- caso, estas compañías desarrollan sus negocios
lar tamaño. Esta revaluación también permitió desde Bogotá y muchas de ellas mantienen una
bajar la inflación —a valores históricos— de un presencia activa en otros países o interactúan con
2,7% en 2009 frente a un promedio de 4,5% las correspondientes filiales. El punto a resaltar es
para América Latina y el Caribe y tasas más al- que estas compañías poseen un rango de acción
tas que las de países vecinos: 4,5% para Brasil; más amplio que la economía nacional y concen-
3,5% para Ecuador y 28,9% para Venezuela (Co- tran sus funciones de administración en Bogotá,
misión Económica para América Latina y el Ca- incluyendo aquellas que tuvieron origen regional,
ribe [Cepal], 2010)12. pero que requieren de la centralidad que ofrece
la capital (por ejemplo, Avianca o Argos).
En resumen, según el valor bruto del PIB para
2011, Colombia es la cuarta economía de Amé- Los datos de América Economía también ilustran
rica Latina y el Caribe con un 5,6% del PIB to- el alcance regional de los negocios de las com-
tal regional; este es un valor significativo, si se pañías colombianas orientados hacia América
tiene en cuenta que los tres primeros países — Central y los países andinos. Además, es clara la
315
10 Aunque un peso importante de ellas corresponde a las flores exportadas por Colombia a Estados Unidos.
11 En 2008, la inversión extranjera en Colombia fue la cuarta en volumen para América Latina y el Caribe, siendo superada con amplitud por Brasil y México y muy próxima
en el caso de Chile. No obstante, Colombia logró atraer más inversión que Argentina y que Venezuela, la cual acusó una desinversión de 923 millones de dólares (Cepal,
2010, p. 163).
12 Otros indicadores, sobre todo sociales, se mantienen por debajo del promedio de América Latina, en particular, el desempleo urbano y los indicadores de pobreza.
articulación de una gran parte de ellas con capi- “poder de marca”, que ilustra la percepción de
tales multinacionales, aunque algunas de capital los lectores de la revista respecto a las condiciones
nacional compiten con grandes conglomerados para los negocios y, de modo más específico, la
y demuestran su ambición de copar los merca- calidad de vida y atracción que ejercen las ciuda-
dos regionales. des para los ejecutivos de las empresas. La ciudad
mantiene indicadores modestos en PIB per cá-
Esta situación es correspondiente con el creci- pita, desempleo, servicios a empresas y ejecutivos
miento de los países y las compañías del Tercer e infraestructura (América Economía, 2010b)14.
Mundo y que, para algunos autores, es prueba
de un cambio en la economía global, con un
progresivo peso de las economías emergentes. Se Conclusiones
resalta, entonces, la emergencia de los llamados
BRIC (Brasil, Rusia, India y China), países cu- El examen elaborado muestra la metamorfosis
yas economías pasaron de significar un 8% del del modelo urbano cuadricefálico vigente hasta la
PIB global en 2001, a 15% en 2009 (O’Neill década del ochenta y que constituía una particu-
y Stupnytska, 2009), aparte del incremento de laridad especial del sistema urbano colombiano.
otras economías emergentes que incluyen la de Aunque el sistema urbano sigue dominado por
Colombia, expuesta como una de las de mejor el llamado “triángulo de oro”, las ciudades prin-
desempeño en los últimos años13. De esta manera, cipales han retrocedido en su participación po-
algunas compañías colombianas se están expan- blacional respecto a Bogotá, con excepción de
diendo hacia países vecinos, sumando a Bogotá Cúcuta y Cartagena. Caso distinto son algunas
la función de comando de sus operaciones. ciudades que han tenido un crecimiento espec-
tacular, impulsado con frecuencia por la cercanía
CUADERNOS DE VIVIENDA Y URBANISMO. ISSN 2027-2103. Vol. 6, No. 12, julio-diciembre 2013: 302-320
Producto de esta reciente centralidad latinoame- a las áreas metropolitanas y les permite ascender
ricana, Bogotá se ha ubicado en una posición pri- en la jerarquía. Sin duda, el caso más notorio es
vilegiada en el ranking de las grandes ciudades de el de Soacha que escala del puesto 942 al 10 en
la región. En efecto, en la clasificación de América escasos treinta años. También se destaca Villavi-
Economía, Bogotá se ubica en la octava posición cencio, que pasa de la posición 23 a la 12. Por
según el índice compuesto (ICUR) usado por la otro lado, ciudades que inspiraban la interpreta-
revista, por debajo de las ciudades capitales de ción de un sistema urbano con tendencia al equi-
las grandes economías regionales (México, Brasil, librio, como es el caso de las del Eje Cafetero,
Argentina y Chile), pero superando a las ciudades perdieron participación frente a Bogotá, cedieron
secundarias de dichas economías y a las capita- su posición e incluso desaparecieron de la lista de
les de los otros países latinoamericanos (América las veinte mayores ciudades, situación particular
Economía, 2010b). De otra parte, el detalle de las de Armenia (Cuadro 2). El grupo de ciudades en
variables insumo del índice muestra algunos in- los puestos inferiores del listado mantuvo dicha
dicadores positivos en servicios financieros, PIB posición gracias a tasas de crecimiento mayores
total, revistas académicas y en el denominado a las metrópolis y se beneficiaron de la posesión
316 13 De hecho, en 2008 el Banco HBSC agrupó con el nombre de “civets”, un conjunto de países con las economías emergentes más dinámicas y que, según The Economist,
tendrán un crecimiento superior a 4,5% anual durante los próximos veinte años (Goodburn, 2010). Los países civets son Colombia, Indonesia, Vietnam, Egipto, Turquía
y Suráfrica.
14 En todo caso, el ranking de América Economía ha de ser considerado con precaución, pues, más que medir la posición o especialización funcional de las ciudades, se ins-
cribe en la idea de crear un índice correspondiente con el mercadeo urbano orientado a empresarios y ejecutivos.
de importantes fuentes de migrantes rurales en la mayor parte de los departamentos que tuvieron
su hinterland, pero también de un desarrollo eco- un buen desempeño en el período ISI.
nómico importante en el sector agrícola y mi-
nero, en especial. Por último, es necesario resaltar que tanto la eco-
nomía interna como externa tuvieron un cambio
En síntesis, los datos del Cuadro 2 evidencian dos importante. Por el lado interno, cambios como
hechos: la creciente primacía de Bogotá y las di- la liberalización de los recursos de pensiones y
ficultades de las ciudades inmediatas en la jerar- la desregulación financiera permitieron un au-
quía, que ven disputada su posición por ciudades mento considerable de recursos en la economía
en rápido ascenso. Esta reflexión nos conduce al que impulsaron el consumo y, con este, la expan-
examen de las economías regionales y su desem- sión geográfica de las compañías relacionadas con
peño en las últimas décadas. Al respecto, el tra- el comercio y los servicios. Este proceso trans-
bajo de Moncayo (2007) muestra el retroceso de formó la estructura urbano-regional del país.
Cuadro 2.
Jerarquías poblacionales y funcionales, 1973-2005
Posición 1973 Ciudad Población 1973 PobB/Pob* Posición 2005 Población 2005 PobB/Pob Posición por IUA**
Jhon Williams Montoya Garay. El sistema urbano colombiano frente a la globalización: reestructuración económica y cambio regional
1 Bogotá 2.845.361 1,0 1 6.763.325 1,0 1
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