a. Mantener el equilibrio en la práctica del don de profecía
Es necesario entender que la palabra de inspiración que viene a la vida de las personas es el resultado de lo que Dios tiene para esa persona no es el hombre quien habla. Muchas de las veces se mal entiende diciendo que es el hombre quien posee siendo que es el señor que actúa sobre él.
b. Mantener el equilibrio en la práctica del don de
interpretación de lenguas Es necesario saber que la interpretación de lenguas es un regalo especial y que en muchos casos el don de hablar en lenguas es para la edificación de la iglesia cuando hay quien interprete esas lenguas por que son mensajes que Dios da en forma particular a la iglesia
c. Mantener el equilibrio en la práctica del don de palabra
de ciencia o conocimiento Este don de ciencia es uno de los más críticas por las personas por que los incrédulos consideran que esas situaciones son inventadas o que la gente está organizada para decir tal o cual cosa es importante que primero se interceda y que después de testifique para que la iglesia vea los milagros que Dios ha realizado.
d. No confundir los dones con los talentos naturales
Es fácil pensar que por que desarrollamos una actividad secularmente o socialmente nos capacita para activar un don espiritual, se puede ser un maestro excelente pero no tener el don de la enseñanza
e. No confundir los dones con el fruto del Espíritu
El fruto del espíritu santo es el resultado de la madurez de un cristiano producto de una experiencia con Dios en cambio los dones se pueden manifestar aunque una persona no tenga mucho tiempo pero cuando recibe el espíritu santo activa ese don que Dios le dio f. Estar conscientes de que tenemos distintos dones Dice la palabra que algunos los hizo profetas, apóstoles o maestros para edificar el cuerpo de Cristo, no todos los dones son iguales pero se requieren de todos para que la iglesia pueda desarrollarse.