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SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0607/2015-S2

Sucre, 28 de mayo de 2015

SALA SEGUNDA
Magistrado Relator: Dr. Juan Oswaldo Valencia Alvarado
Acción de amparo constitucional

Expediente: 09270-2014-19-AAC
Departamento: Chuquisaca

En revisión la Resolución 420/2014 de 19 de septiembre, cursante de fs. 97 a 100 vta., pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por José Martínez Rivera y Virginia Sivila
de Martínez contra Rita Susana Nava Durán y Rómulo Calle Mamani, Magistrados de la Sala Civil del
Tribunal Supremo de Justicia.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 11 de noviembre de 2014, cursante de fs. 50 a 60 vta., los accionantes,
manifestaron que:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

Pablo Sivila Santi y Lucía Romero Durán de Sivila, iniciaron en su contra demanda de reivindicación
del bien inmueble situado en la calle Tomás Frías 431 de la ciudad de Tupiza, que lo poseen por más
de doce años, habiendo formulado demanda reconvencional de usucapión decenal o extraordinaria;
radicándose la causa en el Juzgado de Partido Mixto y Liquidador de Sentencia Penal, cuyo titular
pronunció la Sentencia 25C/2014 de 26 de marzo, declarando probada la demanda ordinaria de
reivindicación y la excepción de falta de acción y derecho e improbada la demanda reconvencional
de usucapión, contra la que interpusieron recurso de apelación, que mereció el Auto de Vista
88/2014 de 29 de mayo, que confirmó la Sentencia, y que motivó planteen recurso de casación;
instancia en la cual, los Magistrados demandados, emitieron el Auto Supremo 452/2014 de 21 de
agosto, declarando infundado el recurso de casación en la forma y en el fondo, vulnerando de esta
manera sus derechos fundamentales, porque no se pronunciaron sobre uno de los puntos
reclamados, relativo al error de hecho en la valoración de la prueba en que incurrió el Tribunal de
alzada, lesionando el principio de congruencia, elemento de la garantía jurisdiccional del debido
proceso, toda vez que no refirió si el ad quem, incurrió o no en error de hecho en la apreciación de
las pruebas, además de actuaren forma ultra petita, resolviendo cuestiones que no se pidió,
referentes al art. 404.II del Código de Procedimiento Civil (CPC) y arts. 87 y 89 del Código Civil (CC),
respecto a los cuales tampoco el Tribunal de alzada se pronunció; empero los Magistrados
demandados, no obstante de no haberlos expuesto como agravios basaron su decisión en esas
disposiciones legales; es decir, fundamentaron aspectos que no fueron recurridos, lo que prueba
que dicha Resolución fue dictada sin observar los principios de congruencia y pertinencia, que son
elementos del debido proceso.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

Los accionantes alegan la lesión de su derecho al debido proceso en su vertiente congruencia y


pertinencia, citando al efecto los arts. 115.II y 117.I de la Constitución Política del Estado (CPE).

I.1.3. Petitorio

Solicitan se conceda la tutela; y en consecuencia, se deje sin efecto el Auto Supremo 452/2014 de 21
de agosto, debiendo los demandados dictar uno nuevo, conforme al principio de congruencia y
pertinencia, resolviendo el error de hecho en la apreciación de las pruebas.

I.2. Audiencia y Resolución del Tribunal de garantías

Celebrada la audiencia pública el 19 de noviembre de 2014, conforme consta del acta cursante de fs.
89 a 96, se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

La parte accionante ratificó la acción planteada, y la amplió señalando que: a) Remitiéndose a


las SSCC “593/2012 y 99/2012”, se ha vulnerado el debido proceso, por cuanto los Magistrados
debieron dar respuesta a todos los puntos fundamentados, lo que no ocurrió en el caso de autos,
puesto que no se pronunciaron sobre la valoración probatoria (error de hecho o de derecho),
resultando ser una resolución ultra petita, presentando al efecto prueba de última obtención, por lo
que el Tribunal de garantías debe disponer que los demandados emitan un nuevo fallo; y, b) El
Tribunal Supremo de Justicia, en la Resolución emitida se refiere a aspectos no pedidos por las
partes, señalando artículos que no han mencionado en el recurso, vulnerando de esta manera los
derechos fundamentales al resolver más allá de lo pedido, emitiendo una Resolución ultra petita;
solicitando por lo expuesto, se le conceda la tutela impetrada.

I.2.2. Informe de las autoridades demandadas

Rita Susana Nava Durán y Rómulo Calle Mamani, Magistrados de la Sala Civil del Tribunal Supremo
de Justicia, en su informe escrito de fs. 86 a 88 vta., manifestaron que: 1) Los accionantes cuestionan
dos puntos del Auto Supremo que emitieron señalando que: i) Omitieron pronunciarse sobre el error
de hecho en la apreciación de la prueba la que estaba fundamentada en el recurso de casación; y, ii)
Fundamentaron su resolución con aspectos que no estaban contemplados, como son los arts. 87 y
89 del CC; 2) Los impetrantes en su recurso en los puntos primero y tercero, hicieron referencia a la
errónea interpretación del art. 1453 del mencionado Código, por parte del Tribunal ad quem,
indicando solamente cuál sería la correcta interpretación de dicha norma, aduciendo que respecto a
la usucapión decenal, únicamente debió importar la posesión continuada por más de diez años,
debido a la dejadez de los propietarios, puesto que habrían demostrado la procedencia de ésta;
empero, si bien indicaron la existencia de error de hecho en la valoración de la prueba; sin embargo,
de la revisión del tercer agravio en el cual consideran haberlo fundamentado, lo que en realidad
hicieron fue denunciar la equivocada interpretación del art. 1453 del CC, más no así, el error de
hecho que aducen, puesto que no cumplieron con la explicación respectiva, limitándose a señalar
que demostraron la posesión por más de diez años; 3) El error en la valoración de la prueba que
pretendían, está referida a la aparente demostración de la posesión que tuvieron sobre el inmueble
que pretendían usucapir, con lo cual procuraban acreditar la procedencia de su pretensión; sin
embargo, en la fundamentación del Auto Supremo cuestionado, se procedió a desvirtuar tal extremo
en virtud a la propia confesión de la parte, que manifestó que se encontraba en calidad de
detentador del bien inmueble objeto de la litis; y, 4) Respecto al segundo punto cuestionado por los
accionantes, que en el Auto Supremo se contemplaron aspectos que no se mencionaron en el
recurso; no es evidente, puesto que hicieron referencia a los arts. 87 y 89 del CC, porque guardan
relación con la usucapión y fueron empleados para fundamentar aún más el motivo por el cual,
tanto el Juez a quo como el ad quem, declararon improbada su pretensión de usucapión, por lo
tanto, el haberse aplicado dichas normas en la fundamentación de la citada Resolución, no puede
considerarse como extra petita, más si éstas, se encuentran estrechamente relacionadas con el caso
concreto. En consecuencia, el Auto Supremo 452/2014, no ha violado ningún derecho y/o garantía
constitucional; peticionando por lo expuesto, se deniegue la tutela solicitada.

I.2.3. Intervención de los terceros interesados

Lucía Romero Duran de Sivila y Pablo Sivila Santi, a través de su abogado manifestaron que el
precitado Auto Supremo cuenta con todos los elementos formales y de fondo; sin embargo, los
impetrantes pretenden con esta acción tutelar, se de curso a su demanda de usucapión. Además,
mencionaron vulneración a los principios de congruencia y pertinencia, sin explicar en qué forma los
Magistrados demandados lo hubieren hecho. Por otro lado, los arts. 87 y 89 del CC, diferencian lo
que es detentación y posesión, y que debieron ser citados por los ahora accionantes en su memorial
de casación, pero no lo hicieron; por ello, es que el Tribunal Supremo de Justicia aplicó dichas
disposiciones legales con criterio jurídico, ya que son pertinentes y adecuadas para resolver el caso
en cuestión; pidiendo por lo señalado, se deniegue la tutela pedida, con costas.

Miguel Orlando Cachambi Aramayo, Alcalde del Gobierno Autónomo Municipal de Tupiza del
Departamento de Potosí, mediante su abogado en audiencia manifestó que, se ratifica en su
memorial de respuesta al recurso de casación presentado el 8 de agosto de 2013, en el que se indica
que el predio en cuestión, es propiedad privada y no municipal.

I.2.4. Resolución

La Sala Penal Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Chuquisaca, constituida en Tribunal
de garantías, mediante Resolución 420/2014 de 19 de noviembre, cursante de fs. 97 a 100 vta.,
denegó la tutela solicitada, con los siguientes fundamentos: a) Las autoridades demandadas
resolvieron el recurso de casación interpuesto por los accionantes, con la pertinencia, congruencia y
exhaustividad exigidas por ley; toda vez, que los actores solo aludieron la existencia de error de
derecho y/o de hecho en la valoración probatoria por el Tribunal ad quem a momento de confirmar
la Sentencia apelada, respecto al cual, los demandados no solo analizaron las normas aplicables al
caso concreto para establecer si hubo o no error de derecho, además de valorar la prueba esencial y
decisiva inherente a los institutos procesales sometidos a juzgamiento (reivindicación y usucapión
decenal) de acuerdo al art. 397 del CPC, incluida la confesión judicial espontánea de los accionantes;
b) Luego de ese análisis, concluyeron que los accionantes nunca tuvieron el animus ni corpus
necesarios para la procedencia de la usucapión decenal, y más bien se acreditó que estuvieron en
posesión del inmueble en representación de sus verdaderos propietarios, como simples
detentadores y que en esa condición, conforme lo disponen los arts. 87 y 89 del CC, no podían
fundar la usucapión demandada; declarando en consecuencia, infundado el recurso de casación en
el fondo; y, c) No es evidente, que los Magistrados demandados, dictaron su resolución en forma
incongruente, ni aplicaron normas legales que no fueron mencionadas en el recurso, al contrario
actuaron correctamente, sin incurrir en actos y omisiones ilegales o indebidas, violatorios de los
derechos constitucionales aludidos en la acción de defensa.

II. CONCLUSIONES

De la revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo siguiente:

II.1. Dentro de la demanda de reivindicación del bien inmueble, situado en la calle Tomás Frías
431 de la ciudad de Tupiza, interpuesta por Pablo Sivila Santi y Lucía Romero Durán de Sivila contra
José Martínez Rivera y Virginia Sivila de Martínez, ahora accionantes, quienes al contestar
reconvinieron de usucapión decenal o extraordinaria, el Juez de Partido Mixto, Liquidador y de
Sentencia Penal del departamento de Potosí, pronunció la Sentencia 25C/2014 de 26 de marzo,
declarando probada la demanda ordinaria de reivindicación como la excepción de falta de acción e
improbada la demanda reconvencional (fs. 1 a 5 vta.; y, 20 a 22 vta.).

II.2. Contra la citada Sentencia, los impetrantes interpusieron recurso de apelación, que mereció
el Auto de Vista 88/2014 de 29 de mayo; emitido por la Sala Civil y Comercial del Tribunal
Departamental de Justicia de Potosí; que confirmó el fallo impugnado, Resolución que fue recurrida
en casación, por parte de los accionantes; instancia en la cual, la Sala Civil del Tribunal Supremo de
Justicia, declaró infundado el recurso (fs. 30 a 34 vta.).

II.3. Los accionantes interpusieron recurso de casación en el fondo y en la forma, contra el citado
Auto de Vista dictado en apelación; que fue resuelto por la Sala Civil del Tribunal Supremo de
Justicia, mediante el Auto Supremo 452/2014 de 21 de agosto, declarando infundado el recurso de
casación en el fondo y en la forma (fs. 36 a 39 vta.; y, 44 a 47 vta.).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Los accionantes, alegan por parte de las autoridades demandadas, la vulneración de su derecho al
debido proceso en su vertiente congruencia y pertinencia, por cuanto la Sala Civil del Tribunal
Supremo de Justicia, declaró infundado el recurso de casación que interpusieron contra la
Resolución que confirmó la Sentencia que declaró improbada la demanda reconvencional de
usucapión decenal que presentaron, mediante el Auto Supremo 452/2014 de 21 de agosto, en el
que los Magistrados demandados, omitieron pronunciarse sobre el error de hecho en el valor
probatorio, así como aplicaron normas legales que no fueron mencionadas en el recurso.

En consecuencia, corresponde determinar si los extremos demandados son evidentes para conceder
o denegar la tutela solicitada.

III.1. Debido proceso y el principio de congruencia

Uno de los elementos que conforman el debido proceso y que cobra importancia es el principio de
congruencia que debe aplicarse y contener toda resolución sea judicial o administrativa, puesto que
como lo estableció la jurisprudencia constitucional, se constituye en la garantía del debido proceso.
Así, la SCP 0049/2013 de 11 de enero, entre otras, señaló que: “El principio de congruencia hace a la
garantía del debido proceso, que en definitiva marca el desarrollo del proceso para poder llegar a la
sentencia, estableciendo un límite al poder discrecional del juzgador. A través de este principio se
obtiene la concordancia entre el petitum de las partes y la decisión asumida por el juez o tribunal;
quedando entendido que los mismos no pueden modificar el petitorio ni los hechos planteados en la
demanda. En ese sentido, el juez o tribunal no podrá iniciar una acción invocando ciertas conductas
previamente tipificadas para en el curso de la sustanciación del proceso, cambiar las mismas, o peor
aún, arribar a una conclusión de que fueron vulnerados otros preceptos por los cuales no se dio
inicio al proceso en curso, aquello indudablemente significaría vulneración del principio de
congruencia y atentatorio contra el debido proceso y el derecho a la defensa, por cuanto
efectivamente se deja en indefensión al procesado quien no podrá asumir la misma de una manera
efectiva, alterando inclusive la producción de la prueba de descargo.

Una resolución incongruente es arbitraria, por tanto su impugnación hace viable su revocación;
mejor dicho, impone al tribunal o juez de alzada el deber de su rectificación, asegurándose la estricta
correspondencia entre la acusación y el fallo, garantizando de esta manera la sustanciación de un
proceso justo.

En ese contexto la SCP 0593/2012 de 20 de julio de 2012, ha señalado: 'El principio de congruencia
adquiere manifiesta relevancia en dos ámbitos, por una parte respecto al proceso como unidad, a
delimitar el campo de acción de las partes y del órgano jurisdiccional en la que condiciona su
desenvolvimiento; por otra, respecto a la estructura de la Resolución, a fin de que absuelva todos los
puntos a consideración del juzgador.

La SC 0486/2010-R de 5 de julio, establece y concatena el debido proceso con el principio de


congruencia, refiriéndose a los siguientes aspectos señalados en dicha sentencia: «La Constitución
Política del Estado, en consideración a la naturaleza y los elementos constitutivos del debido proceso
como instituto jurídico y mecanismo de protección de los derechos fundamentales, lo consagra
como un principio, un derecho y una garantía; es decir, está reconocido por la misma Constitución
en su triple dimensión: como derecho fundamental de los justiciables, un principio procesal y una
garantía de la administración de justicia. De ello, se desprende el debido proceso como derecho
fundamental autónomo, indirecto o garantía, que a decir de Carlos Bernal Pulido en «El Derecho de
los Derechos»: «El derecho fundamental al debido proceso protege las facultades del individuo para
participar en los procedimientos del Estado constitucional democrático y el ejercicio dentro del
marco de dichos procedimientos de las facultades de hacer argumentaciones, afirmaciones, aportar
pruebas, y las capacidades de rebatir los argumentos de los demás y de autocriticarse (…) es un
mecanismo para la protección de otros derechos fundamentales en el estado democrático…»'”.

Como se advierte de la jurisprudencia citada, la congruencia se constituye en un principio procesal


que hace a la garantía del debido proceso, que le señala el camino al juzgador para llegar a una
resolución o sentencia, además de fijarle un límite a su poder discrecional. Es así, que el principio de
congruencia, se manifiesta en la concordancia entre lo pedido y la decisión judicial, puesto que ésta
debe estar referida exclusivamente a las partes intervinientes, al objeto o petición y a la causa. Por
ello, el juzgador, debe fundamentar y motivar el por qué de su decisión, haciendo alusión a los
hechos que las partes invocaron y a las pruebas producidas y aplicando las normas jurídicas
pertinentes.

III.2. Análisis del caso concreto

De los antecedentes procesales que cursan en obrados, se advierte que los accionantes cuestionan
como vulneratorio de sus derechos fundamentales invocados en la presente acción de defensa, el
Auto Supremo 452/2014 de 21 de agosto, emitido por los Magistrados de la Sala Civil del Tribunal
Supremo de Justicia. Por ello, es imperioso remitirse al Auto Supremo impugnado, a efectos de
verificar si efectivamente, las autoridades demandadas al pronunciar su resolución, incurrieron en la
vulneración de los derechos fundamentales que se invocan en el memorial de demanda de esta
acción constitucional.

Es así, que contra la Resolución de alzada los accionantes interpusieron recurso de casación en el
fondo y en la forma, advirtiéndose de su contenido: 1) Con relación a la casación en la forma,
señalaron que se incurrió en la violación del art. 254 inc. 7) del CPC., toda vez que la demandante en
la acción de reivindicación actuó sin personería respecto a la representación de su esposo; por
cuanto, el mandato que presentó no le otorgaba esa facultad y que en el Auto de Vista cuestionado,
se menciona otro nombre ajeno al proceso; y 2) Respecto a la casación en el fondo, expusieron
como agravios: i) La aplicación incorrecta y errónea del art. 1453 del CC, al haber concluido el
Tribunal de alzada, que el propietario que hubiere perdido la posesión de una cosa puede
reivindicarla de quien la posee o la detenta, sin tener presente que cuando el reivindicador entrega
voluntariamente la posesión del inmueble al reivindicado, la reivindicación es desestimada; y ii) Error
de hecho y de derecho en el valor probatorio, reiterando la incorrecta aplicación del art. 1453 del
citado Código, y que sus personas cumplieron con los requisitos para la procedencia de la usucapión
al haberles dejado los propietarios en forma voluntaria en el inmueble en cuestión, además que en
el Auto apelado no se valoraron correctamente las pruebas presentadas.

Es así, que al asumir conocimiento del recurso de casación, la Sala Civil del Tribunal Supremo de
Justicia, pronunció el Auto Supremo 452/2014, declarando infundado el recurso, con los siguientes
argumentos: i) Con relación a la casación en la forma, y la impugnación de la personería de la
demandante en la acción de reivindicación, señaló que la misma se apersonó por sí y por su esposo
adjuntando el poder notarial, ratificando la demanda, siendo admitido y reconocido su
apersonamiento por decreto de 3 de mayo de 2013, dictado por la autoridad jurisdiccional, con el
que fueron notificados los demandados (ahora accionantes) el 8 del mismo mes y año, contestando
que se ratificaban en la reconvención, sin que hubieren objetado el apersonamiento, consintiendo
de esa manera ese actuado procesal; es decir, que al no objetarlo lo convalidaron, dejando precluir
su derecho, en aplicación del art. 16 de la Ley del Órgano Judicial (LOJ). Sobre el nombre ajeno al
proceso y que se menciona en la Resolución cuestionada, ello no le hace al fondo de la misma ni le
causa agravio alguno a los recurrentes; y, ii) Resolviendo el recurso de casación en el fondo, los
Magistrados demandados argumentaron: a) Sobre la alegada incorrecta aplicación del art. 1453 del
CC., se tiene que del texto de esa norma, se deduce que la reivindicación al ser una acción real, tiene
por objetivo la defensa de la propiedad y la respectiva posesión de la cosa sin ostentar ningún
derecho o título que le faculte para la posesión; es decir, que está destinada para quien hubiere
perdido la posesión de una cosa, para reclamar la restitución de la misma, en razón a que tiene
derecho a poseerla en contra del poseedor que no es propietario y que se encuentra en posesión de
la misma. Es decir, que lo reclamado es la posesión, debiendo demostrar el título de propiedad. En el
caso en análisis, los demandantes cumplieron con los requisitos para la procedencia de la
reivindicación, al haber acreditado su derecho propietario sobre el inmueble, la determinación de su
ubicación y la posesión de los demandados. Por otra parte, sobre el agravio denunciado que no
procedería la reivindicación por haber sido entregado el inmueble de manera voluntaria, se
establece que no tiene importancia, por cuanto lo que esta acción conlleva es recuperar la posesión
sin que sea imprescindible que los propietarios demuestren haber estado o no en posesión del
mismo; b) Respecto a lo denunciado por los accionantes que cumplieron con los requisitos que
hacen a la procedencia de la usucapión decenal o extraordinaria al haber demostrado la posesión
continua de diez años y que no fue valorado por el ad quem; cabe establecer, lo que dispone el art.
87 del CC, respecto a la posesión entendida como el poder de hecho que se ejerce sobre una cosa,
mediante actos que denotan la intención de tener sobre ella el derecho de propiedad u otro derecho
real, normativa que de igual manera habla sobre la detentación y del detentador como son los
inquilinos, anticresistas, usufructuarios u ocupantes, quienes por su condición de transitorios no
ejercitan posesión por sí mismos, sino para el propietario; y en el caso concreto, los demandantes no
cumplieron con los requisitos del corpus y el animus; es decir, manifestarse como propietarios de la
cosa y tener la posesión pública, continua y pacífica, que son elementos que la diferencian de otras
figuras jurídicas como la detentación, respecto a la cual el art. 89 del CC, establece que “…quien
comenzó como detentador no puede adquirir la posesión mientras su título no se cambie…”; como
ocurrió en el caso concreto, en el que los recurrentes confesaron que se encuentran en calidad de
detentadores del bien inmueble; razón por la cual, no resulta procedente la usucapión, pues al estar
ocupando el inmueble en dicha calidad, no se opera el plazo para la usucapión, conforme lo
estableció correctamente el Juez a quo y que fue confirmada por el Tribunal ad quem.

Por lo relacionado y de la revisión del Auto impugnado, se constata, que los Magistrados
demandados, actuaron correctamente, al haber analizado los argumentos contenidos en el recurso
de casación planteado por los accionantes, pronunciándose respecto a los agravios denunciados en
la forma como en el fondo, aplicando en su caso, las normas legales que rigen la materia, para
concluir que los recurrentes, al encontrarse habitando u ocupando el inmueble en cuestión con el
permiso o la anuncia de los propietarios, no pueden adquirir la posesión por el transcurso del tiempo
ni por otro derecho real sobre la cosa, pues ésta se considera como un acto de tolerancia por parte
de los propietarios del inmueble, objeto de la litis. Asimismo, ponderaron el actuar del Tribunal ad
quem, al establecer que realizó una adecuada valoración de la prueba presentada en el curso de la
proceso, puesto que por confesión de los ahora accionantes, el inmueble les fue entregado
voluntariamente por los propietarios en razón a que los mismos se trasladaron con su familia a la
ciudad de Yacuiba, lo que denota que los mismos accionantes admitieron su condición de
detentadores del inmueble cuya usucapión decenal pretenden, además que es evidente lo
expresado por las autoridades demandadas, que cuando se invoca error de hecho o de derecho en la
valoración de la prueba, corresponde a quien lo denuncia concretizar a qué elemento probatorio se
asignó erróneamente una ponderación y explicar a su vez cuál sería el correcta: Lo que en el caso de
autos, no se presentó y que fue advertido por el Tribunal de casación.

De la misma manera, respecto a lo alegado por la parte accioinante que en el Auto Supremo
impugnado, se aplicaron los arts. 87 y 89 del CC, que no fueron mencionados por ellos ni por el
Tribunal ad quem, habiendo actuado en forma ultra petita, afirmación que no resulta evidente; toda
vez, que en el análisis del recurso de casación planteado fueron contempladas las disposiciones
legales citadas, al estar directamente vinculadas a la usucapión decenal o extraordinaria pretendida
y que fueron las que sustentaron jurídicamente el Auto Supremo que se pronunció en casación, lo
que desvirtúa la supuesta actuación ultra petita; por lo tanto, lo denunciado por los impetrantes,
que los Magistrados demandados emitieron un Auto Supremo incongruente, sin pertinencia y
actuaron de manera ultra petita; carece de mérito, contrariamente como se advierte,
fundamentaron uno por uno los agravios expuestos tanto en el recurso de casación en la forma
como en el fondo, aplicando las normas legales que sustentaron su decisión; es decir que los
demandados cumplieron con las reglas del debido proceso, al emitir el Auto Supremo impugnado,
que fue pronunciado con la debida fundamentación, motivación, congruencia y pertinencia, al existir
correspondencia entre lo peticionado, lo considerado y lo resuelto, cumpliendo de esta manera con
las reglas del debido proceso, y con lo establecido por la jurisprudencia constitucional citada en el
Fundamento Jurídico III.1 de la presente Sentencia Constitucional Plurinacional, lo que determina se
deniegue la tutela impetrada, ante la inexistencia de acto ilegal vulneratorio de derechos por parte
de los Magistrados de la Sala Civil del Tribunal Supremo de Justicia, quienes como se ha evidenciado,
actuaron conforme a derecho.

En consecuencia, la situación planteada no se encuentra dentro de las previsiones del art. 128 de la
CPE, por lo que el Tribunal de garantías, al haber denegado la tutela, efectuó una correcta compulsa
de los antecedentes procesales y aplicación al citado precepto constitucional.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Segunda; en virtud de la autoridad que le


confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional, en revisión, resuelve: CONFIRMAR la Resolución 420/2014 de
19 de noviembre, cursante de fs. 97 a 100 vta., pronunciada por la Sala Penal Segunda del Tribunal
Departamental de Justicia de Chuquisaca; y en consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dr. Juan Oswaldo Valencia Alvarado


MAGISTRADO

Fdo. Dra. Mirtha Camacho Quiroga


MAGISTRADA

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