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Articulo Dolor Cronico Digi
Articulo Dolor Cronico Digi
Autores:
Hugo René Puaque Muñoz2 puaqmiyer@gmail.com
María de las Rosas Castillo González2 mariadelasrosas19@gmail.com
Elba María Arana Dávila2 polliarana@gmail.com
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RESUMEN
Propósito: Determinar la prevalencia de dolor crónico en una población adulta del área norte
micro-región III, Salamá, departamento de Baja Verapaz, Guatemala, periodo de abril-mayo
2017. Metodología: Estudio descriptivo, transversal. Se realizó un muestreo bietápico, tomando
en cuenta 243 viviendas y 367 personas, estas últimas se encuestaron utilizando la escala de
gradación del dolor modificada, avalada por la Sociedad Española de Reumatología, ésta evaluó
la prevalencia del dolor, características sociodemográficas, promedio de días con dolor,
intensidad y discapacidad, localización y comorbilidades asociadas; se aplicó un consentimiento
informado. El estudio tuvo el aval del Comité de Bioética en Investigación de Salud de la
Facultad de Ciencias Médicas, USAC. Se utilizó estadística descriptiva, frecuencias y
porcentajes para variables categóricas y medidas de tendencia central y de
dispersión para variables numéricas. Resultados: La prevalencia de dolor crónico fue
9.12% (211), en una población 100% indígena, con una edad media de 41 años ± 16DE, 82.9%
(175) de sexo femenino. El promedio de días de dolor fue de 74 días en los últimos tres meses.
En el 54.03% (114) el dolor fue de intensidad severa, con discapacidad leve en 67.78% (97). La
cabeza, rodillas y columna lumbar fueron las localizaciones más frecuentes. Las comorbilidades
que predominaron fueron hipertensión arterial, gastritis y cefalea. Conclusión: Se determinó
que la prevalencia del dolor crónico en una población rural, del municipio de Salamá, Baja
Verapaz es de 9.12%, con intensidad severa en la mitad y discapacidad leve en 7 de cada 10
habitantes.
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ABSTRACT
Purpose: To determine the prevalence of chronic pain in an adult population in the northern
micro region III, Salamá, department of Baja Verapaz, Guatemala, period of April-May 2017.
Methodology: Descriptive, cross-sectional study. A two-stage sampling was performed, taking
into account 243 homes and 367 people, the latter were surveyed using the modified pain
gradation scale, endorsed by the Spanish Society of Rheumatology, which evaluated the
prevalence of pain, sociodemographic characteristics, average days with pain, intensity and
disability, location and associated comorbidities; Informed consent was applied. The study was
endorsed by the Committee on Bioethics in Health Research, Faculty of Medical Sciences,
USAC. Descriptive statistics, frequencies and percentages were used for categorical variables and
measures of central tendency and dispersion for numerical variables. Results: The prevalence of
chronic pain was 9.12% (211), in a 100% indigenous population, with a mean age of 41 years ±
16DE, 82.9% (175) female. The average number of days of pain was 74 days in the last three
months. In 54.03% (114) the pain was of severe intensity, with mild disability in 67.78% (97).
The head, knees and lumbar spine were the most frequent locations. The comorbidities that
predominated were hypertension, gastritis and headache. Conclusion: It was determined that the
prevalence of chronic pain in a rural population in the municipality of Salamá, Baja Verapaz is
9.12%, with severe intensity in half and mild disability in 7 out of 10 inhabitants.
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1. INTRODUCCIÓN
El dolor crónico es muy común y se define como el dolor que dura más de 3 meses y se
caracteriza por un continuo con un pronóstico intrínsecamente incierto (Pergolizzi, J. et al..
2012). En su mayoría es de naturaleza no específica y de etiología multifactorial. El dolor en su
forma severa afecta significativamente la salud física y mental (Kroenke, K. et al., 2013). Se
estima que el 80% de consultas médicas se hacen por quejas de dolor y que aproximadamente un
30% de ellas refieren dolor crónico. Sólo en EE.UU., aproximadamente 100 millones de personas
sufren de dolor crónico. Al menos el 20% de la población adulta de los países occidentales
padece dolor crónico en cualquier etapa de la vida y aproximadamente el 40% manifiesta su
insatisfacción por el manejo adecuado del mismo (Breivik, H., et al., 2006).
Un estudio realizado en España, Cataluña, reportó una prevalencia de 78.6% de dolor. Las
localizaciones anatómicas más afectadas fueron la espalda (50.9%), cabeza (42%) y las piernas
(36.8%) (Bassols, et al., 1999). En el año 2007 Obregón-Ponce y colaboradores reportaron una
prevalencia de dolor de 11.90 % en las últimas dos semanas previas a la encuesta, en dos regiones
del departamento de Guatemala, Guatemala (zona 5 de la ciudad capital y San Juan
Sacatepéquez). En Guatemala no existen estudios epidemiológicos sobre dolor crónico.
2. POBLACIÓN Y MÉTODOS
La recolección de datos se llevó a cabo por medio de visitas domiciliarias a 243 viviendas
y de estas se escogió 3 personas de forma aleatoria por cada 2 casas, los encuestados dispuestos a
ser parte del estudio se les solicitó firmar un consentimiento informado que contó con la
aprobación del Comité de Bioética en Investigación de Salud de la Facultad de Ciencias Médicas
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de la Universidad San Carlos de Guatemala. Se procedió a obtener la información a través de la
encuesta modificada “Escala de gradación del dolor 2.0” propuesta por la Sociedad Española de
Reumatología. Las variables cualitativas fueron analizadas por frecuencias y porcentajes. Las
variables cuantitativas fueron analizadas por medio de medidas de tendencia central y de
dispersión.
3. RESULTADOS
Fueron obtenidos los datos de 367 participantes. La media de edad fue de 40.71 con una
desviación estándar de 16.25. La aldea El Tempisque fue el principal lugar de procedencia (Tabla
1).
Al estudiar las características del dolor crónico se encontró que la intensidad severa
predominó en ambos sexos, siendo un total de 54.03% de los casos (Tabla 3). Sin embargo, al
observar la discapacidad producida por este, 67.68% de la muestra estudiada presentó una
discapacidad leve sin diferencia significativa entre hombres y mujeres (Tabla 4).
Entre las comorbilidades con mayor prevalencia en las personas que referían dolor crónico se
evidenciaron las siguientes: hipertensión arterial, gastritis y cefalea (Tabla 6). Estando la primera
presente en 2 de cada 10 personas.
4. DISCUSIÓN
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comunidades de San Juan Sacatepéquez, e indican una prevalencia de dolor (referente a atralgias)
de 11.90% en las últimas semanas. En el presente estudio se determinó una prevalencia de dolor
crónico de 9.12%, dato menor a los reportados en otros estudios como la encuesta realizada por
(Breivik, Collett, Ventafridda, & Cohen, 2006) en 15 países de Europa e Israel, que demostró una
prevalencia promedio del 21.6%; por otra parte (Society & Kong, 2014) de Hong Kong,
reportaron una prevalencia de 34.9%. A su vez, (Miranda et al., 2013) determinó la prevalencia
de Chile por medio de una revisión sistemática sobre la epidemiología del dolor crónico la cual se
encuentra entre los rangos del 10 al 50%. Estas variaciones pueden ser resultado de factores
como la definición del tiempo establecido para la clasificación del dolor como crónico,
diferencias sociodemográficas regionales, metodología utilizada y variaciones entre los
instrumentos de recolección de datos empleados (Varanda et al., 2014).
De acuerdo a los datos reportados en el estudio de (Breivik, Collett, Ventafridda, & Cohen,
2006) sobre el porcentaje de personas afectadas por el dolor crónico se evidenció que 56% de
esta pertenecía al sexo femenino. Posteriormente, en los resultados reportados por (Society &
Kong, 2014) evidenciaron que 40% de las mujeres encuestadas reportaron sufrir dolor crónico.
En la presente investigación se estimó una prevalencia en la población femenina mayor de 20
años de 14.13%, donde 58.33% de las mujeres entrevistadas refirieron padecer dolor de más de 3
meses de evolución.
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Con respecto a la intensidad, se encontró que más de la mitad de los hombres y mujeres
encuestados con dolor refirieron intensidad del dolor severo, dato que no se compara entre los
estudios realizados por (Breivik et al., 2006), quienes estimaron que únicamente 1/3 de la
población estudiada referían dolor severo. Mediante el estudio de (Society & Kong, 2014), por
medio de una encuesta telefónica se encontró que el 44% de los participantes refirió una
intensidad alta. Llama la atención que cada estudio realizó una escala diferente para determinar la
intensidad del dolor por lo que se observa la falta de estandarización en el uso de escalas para
medidas de la intensidad de dolor e inclusive cuando son semejantes de la escala numérica (0-
10), muchas veces el rango de los puntajes que caracterizan la intensidad como “leve”,
“moderada”, “fuerte” y “peor dolor posible” no es el mismo (Varanda et al., 2014).
Otro hallazgo por resaltar es la discapacidad ya que 7 de 10 personas con dolor crónico la
presentaba de forma leve, seguida por moderada y severa. Uno de los pocos estudios que
documentan información relacionada con discapacidad por el dolor crónico es el de (Society &
Kong, 2014), donde se menciona que aproximadamente 75% de la población estudiada presentó
discapacidad leve y el resto severa; es importante mencionar que en este estudio se empleó una
escala de medición diferente a la del presente, sin embargo, el resultado encontrado es similar.
De las características del dolor, se identificó que las localizaciones anatómicas afectadas con
mayor frecuencia fueron: cabeza, seguida por rodillas, columna lumbar y articulaciones de
pie/tobillo. Este dato se puede comparar con los resultados de estudios similares como: la
encuesta realizada por (Breivik et al., 2006), quienes reportaron la espalda (sin especificar) como
la localización más frecuente en el 24%, seguida de espalda baja 18%, rodillas 16%, cabeza 15%
y piernas 14%; (Society & Kong, 2014) determinaron que el 33% de la muestra estudiada
presentó dolor en las piernas, seguido por un 29% en espalda y 19% en cabeza y en el estudio de
(Miranda et al., 2013) se reportó que las regiones más afectadas eran: rodillas 29.7%, tobillos
11.6%, región lumbar 11.5% y dedos de las manos 8%. Estos resultados son semejantes a los
reportados internacionalmente respecto a las características del dolor.
De acuerdo al estudio de (Breivik et al., 2006) se observó que las comorbilidades asociadas a
dolor crónico más frecuentes fueron: artritis/osteoartritis, hernia/deterioro discal, lesión
traumática y artritis reumatoide. También en el artículo de (Miranda et al., 2013), las
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comorbilidades que predominaron fueron dolor lumbar, cefalea y dolor articular. En la
investigación realizada se documenta que las comorbilidades más frecuentes identificadas en la
muestra fueron: hipertensión arterial, gastritis, cefalea, lumbago, artritis y lesión traumática. Con
respecto en lo anterior se puede evidenciar que existe una alta prevalencia de patologías
musculoesqueléticas en Europa, Chile y Guatemala.
Se concluyó que la prevalencia del dolor crónico en una población adulta de un área rural en
Guatemala es de 9.12%, con predominio en sexo femenino, donde un poco más de la mitad
refiere intensidad severa con discapacidad leve. Las localizaciones más afectadas por el dolor
crónico fueron la cabeza en aproximadamente 1 de cada 4 personas, seguida por rodillas,
columna lumbar y articulación del pie/tobillo, y las comorbilidades que se presentan con mayor
frecuencia son hipertensión arterial, seguida por gastritis, cefalea, lumbago, artritis y lesión
traumática.
Con respecto a todo lo expuesto anteriormente es difícil hacer la comparación con otras
publicaciones nacionales debido a que no se han realizado investigaciones epidemiológicas de tal
magnitud en Guatemala. Con lo que se ve reflejada la necesidad de realizar otros estudios
epidemiológicos a nivel nacional para determinar la exacta prevalencia de dolor crónico en
Guatemala.
5. AGRADECIMIENTOS
El presente trabajo fue financiado por los propios investigadores, por lo que los autores
agradecen a la Dra. Marjorie Vásquez por el apoyo brindado en el desarrollo de este estudio y al
Distrito de Salud No. 1 de Salamá, Baja Verapaz junto al personal del puesto de salud “El
Tempisque” por abrirnos sus puertas y haber facilitado nuestro trabajo de campo.
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6. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Breivik, H., Collett, B., Ventafridda, V., Cohen, R., Gallacher, D. (2006) European Journal of
Pain. Survey of chronic pain in Europe: prevalence, impact on daily life, and treatment, 10(4).
287-333. Doi: 10.1016/j.ejpain.2005.06.009
Wong, W., Fielding, R. (2012). European Journal of Pain. Prevalence and characteristics of
chronic pain in the general population of Hong Kong. 12(2). 236-45. Doi:
10.1016/j.jpain.2010.07.004
Miranda, J., et al. (2013). Revista El Dolor 60. Validación primera encuesta chilena de dolor
crónico no oncológico, 23 (60). 10-18 Recuperado de
http://www.ached.cl/upfiles/revistas/documentos/54983802911a6_original1.pdf
Varanda, L., et al. (2010). Prevalencia, intensidad de dolor crónico y autopercepción de la salud
entre ancianos: estudio de base poblacional. Revista Latino-Americana de Enfermagem , 22(4).
662-9. Doi: 10.1590/0104-1169.3591.2465
López, M., Penide, L., Rodríguez, J., Sánchez, N., Arroyo, V. (2014). Servicio de Salud de
Castilla La Mancha. Dolor crónico no oncológico,15 (1). 1-8. Recuperado de
http://sescam.castillalamancha.es/sites/sescam.castillalamancha.es/files/documentos/farmacia/dol
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Miranda,JP., et al. (2013) Revista El Dolor 59. Revisión Sistemática: Epidemiología de Dolor
Crónico No Oncológico en Chile, 22(59). 10-17. Recuperado de
http://www.ached.cl/upfiles/revistas/documentos/53dfbe675a347_original1_59.pdf
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Bassols A, Bosch F, Campillo M, Cañellas M, Baños JE. An epidemiological comparison of pain
complaints in the general population of Catalonia (Spain). Pain 1999;83:9-16.
Pergolizzi, J. et al. The chronic pain conundrum: should we CHANGE from relying on past
history to assessing prognostic factors? Curr. Med. Res. Opin. 28, 249–56,
doi:10.1185/03007995.2011.651525 (2012).
Kroenke, K. et al. Association between anxiety, health related quality of life and functional
impairment in primary care patients with chronic pain. Gen. Hosp. Psychiatry. 35, 359–65,
doi:10.1016/j.genhosppsych.2013.03.020 (2013).
http://glifos.concyt.gob.gt/digital/fodecyt/fodecyt%202006.70.pdf
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Tabla 1
Características de la población
Encuestados (n= 367)
Edad en años (media ± SD) 40.71 (±16.25)
Sexo (%)
Femenino 300 (81.74)
Masculino 67 (18.26)
Etnia (%)
Indígena 367 (100)
Estado Civil (%)
Casado 267 (72.75)
Soltero 72 (19.62)
Escolaridad (%)
Ninguna, primaria incompleta y primaria completa 313 (85.29)
Básica, diversificada y universitaria 54 (14.71)
Residencia (Aldea) (%)
El Tempisque 199 (54.22)
San Nicolás 93 (25.34)
Paso Ancho 47 (12.81)
Las Tunas 28 (7.63)
Profesión (%)
Oficios no remunerados 274 (74.66)
Trabajadores no calificados 88 (23.98)
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Tabla 2
Prevalencia de dolor crónico en la población
Sexo Casos con dolor crónico Prevalencia (%)
Hombres 36 3.35
Tabla 3
Intensidad del dolor crónico según sexo
Intensidad Femenino % Masculino % Total %
Tabla 4
Discapacidad del dolor crónico según sexo
Discapacidad Femenino % Masculino % Total %
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Tabla 5
Localización anatómica del dolor
Localización anatómica Frecuencia Porcentaje %
Cabeza 75 23.22
Cuello 25 7.74
Hombros 19 5.88
Codos 8 2.48
Manos/muñecas 9 2.79
Caderas/muslos 12 3.71
Rodillas 47 14.55
Piernas 14 4.33
Abdomen 4 1.24
Otros 13 4.02
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Tabla 6
Comorbilidades
Comorbilidad Frecuencia Porcentaje %
Otros 8 3.38
Ausente 79 33.47
Chikungunya 3 1.28
Hiperuricemia 2 0.84
Mialgia 6 2.55
Gastritis 25 10.59
Lumbago 19 8.05
Cefalea 23 9.74
Obesidad 3 1.28
Diabetes 5 2.13
Artritis 13 5.51
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