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CUADERNOS TÉCNICOS
Sumario Nº 26
Sesión integrada: hacia una enseñanza
adecuada y significativa del Fútbol
José Alfonso Morcillo Losa / Rafael Moreno del Castillo /
Luis Francisco Jiménez Bonilla....................................................3
WANCEULEN
EDITORIAL DEPORTIVA S.L.
FÚTBOL:
Nº 26
CUADERNOS TÉCNICOS
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publicados en esta revista, ni de la opinión de los autores de los mismos.
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('") Li cen ciado E. F. Entrenador 1m peri o de Alb ol ote de División de Honor juvenil
1. INTRODUCCIÓN.
Antes de comenzar, queremos realizar un comentario aclaratorio sobre el enunciado. Consideramos
pertinente significar que cuando hablamos de sesión integrada, nos referimos a una sesión en la que los
distintos ámbitos de formación-rendimiento (físico-motriz, psíquico, técnico-táctico, ... ) se trabajan de forma
conjunta aunque con la posibilidad de predominancia de uno/s sobre otro/s, eso si con la comprensión y
aplicación de la lógica funcional, "siempre" por objetivo. Es decir, consideramos necesario, hacer manifiesta la
importante diferencia existente entre los términos integrado y global, ya que no proponemos un modelo de
sesión global, simplemente centrado en situaciones de juego (1 x 1, 2 x 3, etc.), sino en un uso de los medios
de enseñanza (situaciones didácticas) que tienen la intención de alcanzar objetivos parciales que permitan
un aprendizaje específico, significativo y adecuado del fútbol.
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Pro ceso de e nse ñanz a-aprendiz aj e a bso lutam ente Pro ce so de en señ anza-ap re ndizaj e depositado en 1a
depositado en 1a situación intervención i ntenci on ada de 1entrenador como
conductor del proceso
3
etapas de formación, resulta significativa pues el alumno es protagonista directo de sus aprendizajes, que por
otro lado se basan en el propio juego.
Aprovechando la atracción natural e intrínseca, en definitiva, el interés, por el deporte en general y por los
juegos deportivos colectivos en particular, que generalmente existe en la población en edad escolar,
proponemos ahora, un modelo de sesión cuyo centro de interés es el fútbol, y la cual permite ser utilizada
tanto en horario escolar como extraescolar, pues posee una gran flexibilidad en función de los objetivos
pretendidos.
Nuestra intención, es básicamente, localizar una forma de practicar y un medio de enseñar que aúne la
consecución de objetivos procedimentales, actitudinales y conceptuales, es decir, a través de ella, alcanzar el
desarrollo de los distintos ámbitos de actuación humana: motriz, cognoscitivo y socio-afectivo. En palabras de
Torrescusa, Costerón y López (1994), el juego además de ser un método de enseñanza y un factor motivador y
canalizador del desarrollo de habilidades, es el principal medio de socialización y sintetiza de forma perfecta los
diferentes ámbitos de la motricidad.
Además, dentro del ámbito motriz, la estructura de sesión diseñada, permite trabajar simultáneamente,
tanto sobre la mejora de la condición física, como el logro de aprendizajes deportivos, ya sean básicos
(adquisición del control y conciencia corporal, desarrollo de las capacidades perceptivo-motrices y habilidades
básicas) como específicos (aprendizaje de habilidades genéricas y específicas de los deportes).
En lo que más nos interesa en este caso, incluso, dentro de un mismo deporte (modelo comprensivo
vertical) o de aquellos que tienen una estructura y funcionamiento similar (por ejemplo los de cooperación-
oposición ó de espacio común y participación simultánea, mediante un modelo de enseñanza comprensiva
horizontal), se abordará dentro de la misma sesión, la adquisición y/o mejora de:
elementos técnico-tácticos individuales, (desplazamientos, orientaciones corporales, pase,
...)
de grupo (cobertura, desdoblamiento, ...)
de equipo (basculación, sistemas, ...),
consiguiendo así además con ello, si se enfoca adecuadamente, un mayor entendimiento del porqué de las
cosas, puesto que en la medida de lo posible, se encontrará impregnado de un metodología basada en el
juego y centrada en los procesos cognoscitivos, ya que la noción de transferencia y análisis estructural y
funcional de los juegos, son los pilares sobre los que se sustenta la enseñanza.
De forma general, podemos resumir diciendo que tras la elección de un contenido general (por ejemplo la
Progresión como principio básico del ataque), tratamos de que, a lo largo de la sesión, el niño entienda y
desarrolle, la motricidad básica, la técnica necesaria, las intenciones tácticas individuales, los medios de
grupo y de equipo que lo posibilitan, ..., es decir las adquisiciones motrices y cognitivas que permitan
aprender el deporte sin perder de vista el ciclo del juego.
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- Se incluye el entrenamiento físico en el aprendizaje de los gestos técnicos,
- Etc.
Evidentemente, todas ellas son ciertas, pero bajo nuestro punto de vista la razón fundamental, es la
información que recogemos del análisis de la lógica del juego. Es decir, la estructura y análisis del fútbol nos
informa de que estamos ante un deporte en que se debe enseñar a tomar decisiones que posteriormente
debemos plasmar a través de la ejecución de un gesto, que no tiene que ser necesariamente correcto
biomecánicamente sino que busca la efectividad por encima de todo, y en el que por otro lado, las exigencias
físicas no son tan importantes como para necesitar un tratamiento predominantemente exclusivo, al margen
de los demás factores de rendimiento.
Por todo ello pretendemos encontrar el modo de enseñar y entrenar el fútbol mediante medios que sean:
Específicos: es decir que enseñen a dar respuesta a los problemas que el juego
plantea.
Adecuados: a las características, necesidades y posibilidades del grupo de edad con
el que se esté trabajando, ofreciendo en cada momento evolutivo, la posibilidad de
adquirir los contenidos más adecuados a las necesidades de los niños.
Desde esta perspectiva, la enseñanza de la técnica de ejecución adquiere sentido táctico, pasando de
responder exclusivamente al cómo hacer, para a hacerlo al qué y para qué hacer ó, al como hacer para
.... Esta reflexión, nos parece fundamental puesto que conlleva abandonar el tradicional planteamiento de la
enseñanza del fútbol en el que la táctica era el paso siguiente a la adquisición de la técnica, para pasar ahora
a plantear una enseñanza en la que lo mas importante y relevante será adaptar los niveles de dificultad a las
posibilidades de los jóvenes jugadores, sin perder de vista en ningún momento la lógica del juego que se
está enseñando, posibilitando que desde los primeros momentos el niño comprenda por y para que realiza
cada gesto.
Cuadro 2: Contenidos fundamentales en los modelos técnico y táctico de la enseñanza de las habilidades específicas del fútbol.
2.2. Qué y cómo enseñar en cada momento o etapa de aprendizaje: ¿Cómo desarrollar el
entrenamiento técnico-táctico?
La forma de enseñar, es decir, los medios utilizados y la intervención didáctica en general, es lo que debe
diferenciar la enseñanza-aprendizaje de las habilidades específicas en los distintos niveles que se puedan
dar. Pero, a pesar de esto, será difícil realizar un correcto entrenamiento técnico-táctico si antes no se definen
los contenidos a enseñar. Es decir, para poder llevar a cabo éste, es necesario estructurar los medios
técnico-tácticos, fusionando las intenciones y los gestos. En el cuadro 3 mostramos una propuesta de
estructuración (modificada de Antón, 1999) basada en la lógica del juego, cuya intención es dar sentido a las
adquisiciones específicas, aunando componente intencional y componente gestual. Únicamente mostramos
5
los fundamentos individuales, pero obviamente estos adquieren completo sentido en las relaciones de
cooperación y oposición que permiten o imposibilitan la consecución del objetivo de juego. Es decir, la táctica
individual se desarrollará dentro de las relaciones de grupo, que a su vez estará condicionada por el
comportamiento global como equipo, y todos se fundamentarán en la comprensión e incursión en los roles del
juego.
. Ataque recepción.
posesión.
permanente a
Progresar.
portería.
Finalizar.
Desmarcarse -
.Análisis pedir balón. Desplazamiento.
Reducir nº Compañero
permanente de Atraer - fijar Finta.
errores a
través de: la ubicación y Apoyar y ayudar movilizar.
actuación de os
ayuda Provocar y al compañero
oponentes.
mutua, reconocer la
. Lucha por la
anticipación superioridad
posesión.
y variedad numérica
. Ajuste espacio Controlar al Marcaje
en propia y
temporal de poseedor. (posición).
acciones evitar la del
las intenciones.
Repliegue Defensa organizada
continuo de el espacio.
Recuperar intenciones.
posesión.
Evitar . Ocupar la línea Controlar al
progresión. de avance o tiro. poseedor.
Proteger . Proporción Controlar al no
óptima entre Marcaje
portería. poseedor.
Oponente (posición).
reacción y Disuadir.
acción. no directo Finta.
Provocar
Interceptación.
dejar en fuera
de juego.
Interceptar.
El hecho de que en los primeros momentos de aprendizaje, prime la ejecución sobre la percepción,
no quiere decir que no se pueda enseñar de forma contextualizada, es decir, sabiendo hacia donde se
progresa, como se puede hacer más rápido, cuando no se puede pasar, etc, Es decir sabiendo la intención
con la que se utiliza cada medio técnico-táctico. En definitiva, será cuestión de adaptar los niveles de
complejidad y dificultad a las posibilidades de los participantes, pero involucrando mentalmente, al niño en su
aprendizaje.
Una solución a esta problemática, es establecer una clasificación de situaciones didácticas
específicas, la cual responda a todas las necesidades del juego, pero que a su vez permita la adaptación a
grupos y jugadores con distintos niveles de juego. A continuación (cuadro 4), mostramos un ejemplo de
clasificación (Morcillo y Moreno, 1999) cuyo criterio de ordenación son los mecanismos de la acción de juego
(percepción, solución mental y solución motriz), concretamente podemos decir que la diferencia básica entre
unas y otras es la participación o no, mayor o menor, del mecanismo de percepción.
6
TIPO DE SITUACIÓN MECANISMO PERCEPTIVO
7
como unidad de enseñanza que nos asegure un aprendizaje adecuado, significativo, específico y basado en
la transferencia.
La sesión que proponen Chesnau y Duret, 1995; que adaptaron Fradua y Moreno, 2000; y que han
utilizado autores como Lillo (2000), nos parece una muy buena forma de adecuar la enseñanza de los
contenidos específicas a cada momento evolutivo, ya que asegura la inclusión en todos los entrenamientos,
de un apartado dedicado a cada una de las variables de la enseñanza y rendimiento del joven futbolista
(desarrollo de la motricidad, fundamentos individuales, de los fundamentos de grupo y de equipo). (Cuadro
5). Antes de ocuparnos de ella, consideramos oportuno realizar una aclaración terminológica al respecto de
los enunciados de cada parte de la sesión. Decimos esto, puesto que los citados enunciados se refieren tanto
a los contenidos que en cada una se abordarán de forma preferente, como sobre todo al tipo de participación.
Es decir, por ejemplo en benjamines, como veremos más adelante, los fundamentos de grupo y equipo tienen
una importancia mínima, pero por contra no debemos olvidar que los niños tienen la necesidad de jugar y por
ello esta última parte será fundamental para ellos, aunque los objetivos que en ella nos planteemos nunca
serán referidos a aspectos de táctica de equipo, y sí por ejemplo al desarrollo de la motricidad, de contenidos
perceptivos o de fundamentos individuales, eso sí desarrollados dentro del propio juego. También
consideramos oportuno aclarar la importancia que para nosotros tiene el carácter flexible con que debemos
aplicarla. Es decir, no sólo debe ser adaptada a las características, categoría y/o edad de los sujetos, sino
también a las circunstancias de realización de ésta, como pueden ser, si se trata de una sesión de
competición ó no, el día ó momento del microciclo, los contenidos fundamentales pretendidos en la sesión, la
en cualquiera de sus apartados de los contenidos complementarios pero importantes de otros ámbitos de
rendimiento (socio-afectivo, físico-motriz, psicológico, etc). Por último, el hecho de que no hagamos mención
a la estructura tradicional (calentamiento, parte principal y vuelta a la calma) , no quiere decir que obviemos la
necesidad de tener en cuenta y aplicar, los principios metodológicos del entrenamiento, como es la
progresión.
ESTRUCTURA DE LA Orientaciones
SESIÓN Principal Secundaria
Fundamentos motrices El niño y su cuerpo El niño y el balón
Fundamentos
*** ** *** ** *
Individuales
Fundamentos
* * ** *** ***
de grupo
Fundamentos
* ** ** *** ***
de equipo
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Igual que realizamos esta aproximación a lo que consideramos son los contenidos más importantes
de cada momento evolutivo, a continuación mostramos, cuales pensamos que son los tipos de situación mas
utilizables o adecuadas (cuadro 7). Evidentemente, sólo se trata de una propuesta generalizada que será
necesario adaptar a cada grupo e incluso a cada jugador, pero que al menos permite conocer los contenidos
más apropiados a cada momento, así como la forma de pretender su adquisición.
TIPOS DE CATEGORÍAS
SITUACIONES
Benjamín Alevín Infantil Cadete Juvenil
En entorno ** *** ** ** *
inestable
SESIÓN INTEGRADA
Además, como vemos en la figura 1, dentro del ámbito motriz, la estructura de sesión diseñada, permite
trabajar simultáneamente, tanto sobre la mejora de la condición física, como el logro de aprendizajes
deportivos, ya sean básicos (adquisición del control y conciencia corporal, desarrollo de las capacidades
perceptivo-motrices y habilidades básicas) como específicos (aprendizaje de habilidades genéricas y
específicas de los deportes).
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ÁMBITO MOTRIZ
Figura 1: Aspectos del desarrollo de la motricidad sobre los que se puede incidir.
Como podemos observar, en la figura 1, a pesar de existir una completa interrelación entre los distintos
contenidos de enseñanza y las partes de la estructura de la sesión, se da un mayor o menor grado de
posibilidades en una u otra parte, respecto a cada contenido fundamental (como indica la intensidad y
grosor de las flechas). Además, como observamos en el cuadro, las relaciones que en cada parte de la
sesión, se dan entre los elementos estructurales que en cada una predominan, son las que condicionan el
tipo de práctica que en ellas utilizaremos y en consecuencia las características y condiciones de las
situaciones que diseñemos.
Esta propuesta de sesión integral, como antes ya mencionamos, no obvia el respeto a la estructura
tradicional, desde el punto de vista fisiológico y progresivo-regresivo, por lo que, además del calentamiento
adecuado, incluirá una parte final de vuelta a la calma, que en ocasiones se podrá aprovechar para analizar
y reflexionar colectivamente sobre lo aprendido.
Incluso, dentro de un mismo deporte, como es el fútbol o de aquellos que tienen una estructura y
funcionamiento similar (por ejemplo los de cooperación-oposición ó de espacio común y participación
simultanea), se posibilita abordar dentro de la misma sesión, la adquisición y/o mejora de: elementos técnico-
tácticos individuales, (desplazamientos, orientaciones corporales, pase, ...), de grupo (cobertura, apoyo, ...),
de equipo (basculación, contraataque, ...), bajo una idea global de juego como pueden ser los principios
fundamentales (cuadro 2) mantener posesión, progresar y finalizar, consiguiendo así con ello, si se enfoca
adecuadamente, un mayor entendimiento del porqué de las cosas, puesto que en la medida de lo posible, se
encontrará impregnado de un metodología basada en el juego y centrada en los procesos cognoscitivos, ya
que la noción de transferencia y el análisis estructural y funcional de los juegos, son los pilares sobre los que
se sustenta la enseñanza.
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Motricidad básica
Habilidades Genéricas Juego simple, dirigido, sensoriomotriz, ...
FUNDAMENTOS
Prima mecanismo de Situaciones en entorno estable e inestable.
INDIVIDUALES Ejecución (Técnica)
Medios T-T individuales.
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PARTES DE LA SESIÓN
INFORMACIÓN INICIAL: El técnico comentará con su grupo la sesión que van a realizar en cuanto a los objetivos que se
pretenden conseguir, algunas situaciones que se dan en la competición y como resolverlas, los puntos en los que tienen que
prestar más atención y reflexionar para comentarlos en la parte final de la sesión, etc. (Duración aprox. 5 min.)
FUNDAMENTOS MOTRICES
( Duración aprox. 15 min)
CONTENIDOS:
Motricidad General y sobre todo específica de las conductas motrices. En este caso especialmente las defensivas: equilibrio
dinámico, control corporal, frenada, cambio de ritmo, etc
OBJETIVOS:
- Mejorar el control de la postura y de los desplazamientos en el desarrollo y ejecución de acciones específicas de fútbol.
METODOLOGÍA
Tareas lúdicas en entorno estable e inestable (aisladas o combinadas, competitivas o no).
Nº DESCRIPCIÓN CONTENIDO PARCIAL/GRÁFICO
Intentar tocar el hombro y que no me lo Posición defensiva: pies activos, orientación defensiva. ofrecer un
toquen lado.
1 Variante: .Pisar y que no me pisen.
. La espalda.
FUNDAMENTOS INDIVIDUALES
( Duración aprox. 20-25 min)
CONTENIDOS:
Medios técnico-tácticos individuales de defensa (desplazamientos (velocidad, orientación,
),
OBJETIVOS:
Mejorar los medios técnico tácticos individuales de defensa más relacionados con evitar la progresión.
Conocer los estímulos relevantes para el defensor que se enfrenta al poseedor del balón.
Reflexionar y comprender el porqué de las cuestiones y soluciones planteadas.
METODOLOGÍA
Tareas lúdicas en entorno estable, inestable (aisladas o combinadas, competitivas o no) y reducidas.
Nº DESCRIPCIÓN CONTENIDO PARCIAL/GRÁFICO
(la mitad del mismo color).
Cada uno con un balón en las
manos botar de distinta forma, en
espacio compartido. Coordinación dinámica general y óculo-
-Botar evitando al resto del grupo. manual.
-Idem a la velocidad que marca el
1 entrenador.
-Idem. En la dirección que marca el Ampliación del campo visual (disociación)
entrenador.
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. A la señal, intercambiar el balón
con el compañero.
-Sólo mismo color.
-Sólo distinto color. Percepción espacio-temporal.
-Idem. Hacer la recepción con
2 cualquier parte del cuerpo menos las
manos.
- Sólo intercambia un color mientras Amortiguamiento
los del otro color realizan entradas
después del primer contacto.
FUNDAMENTOS DE GRUPO
( Duración aprox. 25-30 min)
CONTENIDOS
Medios técnico-tácticos de grupo, complementados con los individuales de ataque y defensa relacionados.
OBJETIVOS
Conocer y mejorar los medios básicos de grupo más relacionados con el principio en cuestión (cobertura y
permuta).
Ser consciente de los aspectos individuales que favorecen el desarrollo de los citados medios de grupo.
METODOLOGÍA
Tareas reducidas con oposición disminuida y de entorno inestable.
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FUNDAMENTOS DE EQUIPO (GRUPO 1 CONTRA GRUPO 2)
( Duración aprox. 10-15 min)
CONTENIDOS
Medios técnico tácticos de equipo (básicamente Basculación).
OBJETIVOS
Comprender y desarrollar comportamientos tácticos de equipo simples.
Reforzar la relevancia del concepto: pensamiento colectivo.
METODOLOGÍA
Tareas reales libres y dirigidas o focalizadas.
PARTE FINAL
Duración 5-10 min
CONTENIDOS
Relajación y estiramientos
Reflexiones interpersonales sobre la sesión y sus juegos
OBJETIVOS
Colaborar en la recuperación del organismo ( relajación, estiramientos, hidratación)
Reflexionar, debatir y puesta en común de las impresiones de la sesión
METODOLOGÍA
Juegos de relajación , ejercicios de estiramientos (parejas) y Asamblea
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SECUENCIACIÓN DE CONTENIDOS EN EL MODELO DE
FORMACIÓN INTEGRAL DEL PORTERO DE FÚTBOL.
NIVELES Y ETAPAS DE
FORMACIÓN
Secuenciación y Ordenación Competencia de los
2º NIVEL Temporal de los contenidos, así Clubs y Escuelas de
CONCRECIÓN como el establecimiento de los
Objetivos Específicos en los fútbol
diferentes niveles y etapas de
formación
Fig. 1: El Segundo Nivel de Concreción del modelo de formación integral del portero de fútbol.
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Adecuación de los nuevos contenidos a los conocimientos previos de los porteros.
Progresión, partiendo de los más detallados y simples a los más complejos y específicos.
Relación con los contenidos de los niveles o etapas de formación anteriores y posteriores.
Equilibrio entre los diferentes tipos de contenidos.
Correlación con los Objetivos Generales y Específicos de la etapa.
CONTENIDOS PROCEDIMENTALES
TÉCNICOS
DEFENSIVOS:
OFENSIVOS:
TÁCTICOS
1.2. Utilización de las decisiones tácticas específicas del portero de fútbol:
DEFENSIVOS:
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1.2.4.2. Comunicación defensiva entre el portero y los defensores.
OFENSIVOS:
1.2.9. Lectura y control del ritmo del partido con las iniciaciones ofensivas según:
1.2.9.1. Factores externos: el resultado, la actuación arbitral, y el tiempo restante.
CONTENIDOS CONCEPTUALES
1.3. Conocimiento de los principales gestos técnicos del portero de fútbol (todos los anteriormente
mencionados).
1.4. Conocimiento de las reglas y normas del fútbol.
1.5. Conocimiento de las principales decisiones tácticas del portero de fútbol (todas las anteriormente
mencionadas).
18
MODULACIÓN MODULACIÓN EDAD
EDAD CATEGORÍA NIVEL Y ETAPA
NORMAL AVANZADA
Nivel 1: MODULOS
10 11 Alevín
Etapa de aprendizaje. 1y2
MODULO A
Nivel 3: MÓDULOS
14 15 Cadete
Etapa de especialización 5y6
MODULO C
Nivel 5:
18 Juvenil A
Etapa de rendimiento.
MÓDULOS 9,10,etc MODULO E, F, etc.
Fig. 2: Modulación para cada nivel y etapa formativa del modelo de formación integral del portero de fútbol
Esto se debe a que la secuenciación de fases para la enseñanza del juego del portero son unos pasos a
seguir sea cual sea la edad inicial del practicante, ya que dependen más de la experiencia motriz anterior que de
la edad. Por eso, si los porteros son de edades diferentes, lo que ocurrirá será que algunos de estos pasos se
alcanzarán con mayor facilidad debido a la experiencia o a la mayor capacidad física y cognitiva de los mayores.
Imaginemos que un chico de 13 0 14 años quiere iniciarse en el juego del portero. Evidentemente no va a
poder seguir todos los niveles y etapas, así que habrá una modulación paralela para los porteros que se inician en
edades avanzadas, que intentará cumplir con todos los requisitos aunque se disponga de menos tiempo para ello
(ver figura 2). En esta modulación para edades avanzadas se intentará trabajar todos los objetivos y contenidos
de dos años (una etapa de formación) en un solo año. Para ello se trabajarán los contenidos de dos en dos.
En resumen, hay dos tipos de modulación:
1. La modulación normal, para porteros que se inician en edad alevín y que van a seguir la totalidad de los
niveles y etapas formativas del modelo de formación integral del portero de fútbol.
2. La modulación paralela de edades avanzadas, para aquellos porteros que se inician relativamente tarde (13-
14 o 15 años) y que no van a poder seguir la totalidad de los niveles y etapas formativas del modelo de
formación integral del portero de fútbol.
Pero antes de ver cada una de estos dos tipos de modulación, veamos que criterios hemos seguido para
su elaboración.
19
Secuenciación para la enseñanza del juego del
portero en los diferentes niveles del modelo de
formación integral del portero de fútbol
Fig.3: Secuenciación para el aprendizaje del juego del portero en los diferentes niveles y et apas de formación del modelo d
formación integral del portero de fútbol.
En esta figura podemos observar que, para la enseñanza del juego del portero, en cada uno de los
niveles o etapas de formación del modelo integral del portero de fútbol hay que pasar por cinco fases:
1. Presentación global del deporte:
Durante esta fase hay que dar a conocer las reglas fundamentales del reglamento y los objetivos del
juego. La rigurosidad de aplicación del reglamento debe ir en función del desarrollo de un juego ágil y motivante
para el portero. Esta fase es muy importante sobretodo en los tres primeros niveles o etapas formativas, para que
el portero vaya asimilando las normas y el reglamento que inciden directamente en el juego del portero.
2. Familiarización perceptiva.
El portero debe aprender rápidamente los patrones perceptivos principales del fútbol y de la posición
específica del portero, para empezar a progresar con éxito. Esta es una fase muy importante porque da una
lógica motriz a los elementos técnicos que serán aprendidos en la siguiente etapa. El olvido de esta fase
entrañaría el peligro de no entender el porqué del aprendizaje de las habilidades motrices o técnicas en la
siguiente etapa.
3. Enseñanza de las habilidades motrices básicas (técnica específica del portero) y su integración en las
situaciones básicas de aplicación.
El fútbol tiene una serie de habilidades, de eficacia reconocida, que se dan con frecuencia en el juego. En
el caso del portero, estas habilidades técnicas todavía tienen más importancia, para una práctica exitosa, que las
desarrolladas en cualquier otra posición del campo. En función de la fase de la sesión en la que nos encontremos
utilizaremos una metodología más global o analítica para trabajarlas.
20
Como en el juego del portero hay que tomar decisiones a menudo en función del adversario, a medida
que los procesos de control motor se van desplazando hacia las sensaciones kinestésicas, el aspecto perceptivo
y de toma de decisiones se verá beneficiado.
4. Formación de los esquemas fundamentales de decisión.
La capacidad de anticipación y de sentido táctico es el objetivo de esta etapa. Nuevamente es
imprescindible que el control motor de las acciones recaiga sobre el sentido kinestésico, de manera que la toma
de información visual quede libre para anticipar y prever las acciones de los oponentes. Esta habilidad es
imprescindible en el juego del portero.
El planteamiento de juegos reducidos y con modificación del reglamento, las situaciones de superioridad
e inferioridad numérica (Juegos Correctivos y Juegos de Fútbol) son los principales medios para alcanzar los
objetivos de esta etapa.
5. Enseñanza de los esquemas tácticos colectivos y el acoplamiento técnico-táctico de conjunto.
La comprensión de los sistemas de juego es el paso final en la construcción de los aprendizajes de los
deportes colectivos, y como no del juego del portero. Sería un grave error proponer este paso con anterioridad a
las anteriores etapas ya que se producirían muchos errores en la continuidad del juego debido a la falta de
recursos para anticipar situaciones que exigen los sistemas de juego.
La construcción del trabajo en equipo y la alternancia estratégica en la toma de iniciativa dentro de un
colectivo es el momento culminante en la iniciación deportiva. Esta no puede ser llevada a cabo hasta que las
etapas anteriores se han pasado y han sido dominadas.
Cada nivel o etapa de formación va a tener que respetar esta secuenciación de cinco etapas.
Los objetivos específicos de etapa de cada uno de los niveles, han surgido en base a esta secuenciación,
seleccionando los contenidos idóneos para el nivel técnico-táctico del portero (experiencia motriz anterior) y su
edad.
1.3.2. MODULACIÓN NORMAL.
La modulación normal del modelo de formación integral del portero de fútbol, es la que deben seguir
todos aquellos porteros que se inician en edades tempranas y que van a seguir la totalidad de los niveles y etapas
formativas del modelo de formación integral del portero de fútbol.
NIVEL 5
NIVEL 1 NIVEL 2 NIVEL 3 Etapa NIVEL 4 Etapa
NIVELES Y Etapa
Etapa Aprendizaje Etapa Desarrollo (12- Especialización (14- Dominio (16-17
ETAPAS Rendimiento
(10-11 años) 13 años) 15 años) años)
(18 años)
Fig.4: Distribución de módulos en la modulación normal del modelo de formación integral del portero de fútbol.
Como ya hemos visto con anterioridad, los objetivos específicos y los contenidos de cada nivel o etapa
formativa se han escogido bajo el criterio establecido por la secuenciación de fases para la enseñanza del juego
del portero, en la que hay que pasar por 5 fases.
Veamos ahora los módulos de cada una de las etapas de formación de este modelo de formación
integral del portero de fútbol:
Recordemos los rasgos más importantes que caracterizan el trabajo a desarrollar con los porteros de
esta etapa.
21
NIVEL 1: APRENDIZAJE
FINALIDAD: La finalidad fundamental del Nivel 1 es la de conseguir la total familiarización del portero con
el balón, así como tener una mínima aproximación a los elementos técnicos específicos más adecuados a
su nivel.
METODOLOGÍA: Los contenidos aplicados en este primer nivel estarán canalizados a través de un trabajo
ALEVÍN 10-11 global, ya que quedan ajustados con mayor precisión a los objetivos genéricos fijados, combinado con un
mínimo trabajo complementario de carácter analítico.
FORMAS DIDÁCTICAS: El juego real y los ejercicios correctivos serán los principales argumentos
utilizados en este contexto, y será el natural desarrollo del juego el que originará la aparición de las
acciones técnicas específicas a trabajar.
CONTENIDOS PROCEDIMENTALES
TÉCNICOS
DEFENSIVOS:
OFENSIVOS:
22
TÁCTICOS
1.2. Utilización de las decisiones tácticas específicas del portero de fútbol:
DEFENSIVOS:
1.2.1. Posicionamiento en diversas situaciones:
1.2.1.1. En centros laterales ( línea de fondo, laterales, atrasados ).
1.2.1.4. En situaciones estratégicas.
OFENSIVOS:
1.2.7. Utilizar diversas iniciaciones ofensivas según:
1.2.7.1. Ataque: lanzamientos con las manos.
1.2.7.2. Contraataque: lanzamientos con las manos y con los pies.
1.2.8. Discriminar ataque o contraataque según los factores internos:
1.2.8.1. La distancia (corta, media, larga).
1.2.8.2. El recorrido (raso o aéreo).
1.2.8.3. La situación de superioridad, igualdad o inferioridad numérica entre compañeros y
adversarios (1x1, 2x1, 2x2, etc.).
CONTENIDOS CONCEPTUALES
1.3. Conocimiento de los principales gestos técnicos del portero de fútbol (todos los anteriormente
mencionados).
1.4. Conocimiento de las reglas y normas del fútbol.
1.5. Conocimiento de las principales decisiones tácticas del portero de fútbol (todas las anteriormente
mencionadas).
23
MÓDULO 1
Nivel 1: Etapa de aprendizaje (10 años- Alevín B)
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA TÉCNICA TÁCTICA
TÁCTICA DEFENSIVA
DEFENSIVA OFENSIVA OFENSIVA
Bisectriz y
Blocaje Parada Posiciona Inhibir el Saque Saque
reducir 1x1 Discriminar
frontal lateral -miento peligro mano pie
ángulo
Frontal
Botepronto
Controlado
Comunicar
Volea front
Contrataq.
Estrategia
En juego
BLOQUE
Posición
½ altura
½ altura
½ altura
Dividido
Ataque
Raso
Raso
Raso
SESIÓN
1
BLOQUE 1 2
3
4
5
BLOQUE 2 6
7
8
9
BLOQUE 3 10
11
12
13
BLOQUE 4 14
15
16
17
BLOQUE 5 18
19
20
21
BLOQUE 6 22
23
24
25
BLOQUE 7 26
27
28
29
BLOQUE 8 30
31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.5: Módulo 1 del modelo de formación integral del portero de fútbol.
24
MÓDULO 2
Nivel 1: Etapa de aprendizaje ( 11 años- Alevín A)
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA TÉCNICA TÁCTICA
TÁCTICA DEFENSIVA
DEFENSIVA OFENSIVA OFENSIVA
Bisectriz y
Blocaje Parada Posiciona Inhibir el Saque Saque
reducir 1x1 Discriminar
frontal lateral -miento peligro mano pie
ángulo
Frontal
Botepronto
Controlado
Comunicar
Volea front
Contrataq.
Estrategia
En juego
BLOQUE
Posición
½ altura
½ altura
Dividido
½ altura
Ataque
Raso
Raso
Raso
SESIÓN
1
BLOQUE 2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2
7
8
9
BLOQUE 10
3
11
12
13
BLOQUE 14
4
15
16
17
BLOQUE 18
5
19
20
21
BLOQUE 22
6
23
24
25
BLOQUE 26
7
27
28
29
BLOQUE 30
8
31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.6: Módulo 2 del modelo de formación integral del portero de fútbol.
25
MÓDULO 2 y 3: Nivel 2: Etapa de desarrollo (12 a 13 Años, Infantil)
Recordemos los rasgos más importantes que caracterizan el trabajo a desarrollar con los porteros de
esta etapa.
NIVEL 2: DESARROLLO
FINALIDAD: La finalidad fundamental de este segundo periodo, es la de conseguir un nivel medio en las
acciones genéricas inherentes al juego real, así como la iniciación a unas determinadas acciones
técnicas específicas.
FORMAS DIDÁCTICAS: El juego real seguirá siendo el principal argumento utilizado en este contexto,
aunque ya toma un mayor protagonismo el trabajo analítico (ejercicios y juegos correctivos), que nos
permitirá trabajar en mayor profundidad las acciones técnicas específicas.
TÉCNICOS
1.1. Ejecución de los gestos técnicos específicos del portero de fútbol.
DEFENSIVOS:
1.1.1. Posición básica y fundamental.
1.1.2. Blocaje frontal y lateral del balón: raso, ½ altura y alto.
1.1.3. Parada frontal y lateral del balón: raso, ½ altura y alto.
OFENSIVOS:
1.1.6. Iniciación ofensiva: saques con las manos:
1.1.6.1. Lanzamiento raso.
1.1.6.2. Lanzamiento a ½ altura.
1.1.6.3. Lanzamiento alto.
1.1.7. Iniciación ofensiva: saques con los pies:
1.1.7.1. Balón estático:
1.1.7.1.1. Saque de meta, faltas, etc.
26
1.1.7.2. Balón en juego:
1.1.7.2.1. Lanzamiento de volea frontal.
1.1.7.2.2. Lanzamiento a bote-pronto.
TÁCTICOS
1.2. Utilización de las decisiones tácticas específicas del portero de fútbol:
DEFENSIVOS:
1.2.1. Posicionamiento en diversas situaciones:
1.2.1.1. En centros laterales ( línea de fondo, laterales, atrasados ).
1.2.1.2. En el juego ofensivo del equipo contrario : cobertura a los defensores.
1.2.1.3. En el contraataque del equipo contrario: cobertura a los defensores.
1.2.1.4. En situaciones estratégicas.
OFENSIVOS:
1.2.7. Utilizar diversas iniciaciones ofensivas según:
1.2.7.1. Ataque: lanzamientos con las manos.
1.2.7.2. Contraataque: lanzamientos con las manos y con los pies.
1.2.8. Discriminar ataque o contraataque según los factores internos:
1.2.8.1. La distancia (corta, media, larga).
1.2.8.2. El recorrido (raso o aéreo).
1.2.8.3. La situación de superioridad, igualdad o inferioridad numérica entre compañeros y
adversarios (1x1, 2x1, 2x2, etc.).
CONTENIDOS CONCEPTUALES
1.3. Conocimiento de los principales gestos técnicos del portero de fútbol ( todos los anteriormente
mencionados ).
1.4. Conocimiento de las reglas y normas del fútbol.
1.5. Conocimiento de las principales decisiones tácticas del portero de fútbol ( todas las anteriormente
mencionadas ).
27
MÓDULO 3
Nivel 2: Etapa De Desarrollo (12 Años- Infantil B)
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA TÉCNICA TÁCTICA
TÁCTICA DEFENSIVA
DEFENSIVA OFENSIVA OFENSIVA
Bisectriz y
Blocaje Parada Posicion- Inhibir el Saque Saque
reducir 1x1 Discriminar
frontal lateral amiento peligro mano pie
ángulo
Botepronto
Controlado
B. Dividido
Comunicar
Volea front
Contrataq.
Estrategia
B. Parado
BLOQUE
En juego
SESIÓN
Posición
½ altura
½ altura
½ altura
Ataque
Frontal
Raso
Raso
Raso
Alto
Alto
Alto
2x1
1
BLOQUE
2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2
7
8
9
BLOQUE 10
3
11
12
13
BLOQUE 14
4
15
16
17
BLOQUE 18
5
19
20
21
BLOQUE 22
6
23
24
25
BLOQUE 26
7
27
28
29
BLOQUE 30
8
31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.7: Módulo 3 del modelo de formación integral del portero de fútbol.
28
MÓDULO 4
Nivel 2: Etapa De Desarrollo (13 Años- Infantil A)
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA TÉCNICA TÁCTICA
TÁCTICA DEFENSIVA
DEFENSIVA OFENSIVA OFENSIVA
Bisectriz y
Blocaje Parada Posicion- Inhibir el Saque Saque
reducir 1x1 Discriminar
frontal lateral amiento peligro mano pie
ángulo
Botepronto
Controlado
B. Dividido
Comunicar
Volea front
Contrataq.
Estrategia
B. Parado
En juego
SESIÓN
Posición
½ altura
½ altura
½ altura
BLOQUE
Ataque
Frontal
Raso
Raso
Raso
Alto
Alto
Alto
2x1
1
BLOQUE
2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2
7
8
9
BLOQUE 10
3
11
12
13
BLOQUE 14
4
15
16
17
BLOQUE 18
5
19
20
21
BLOQUE 22
6
23
24
25
BLOQUE 26
7
27
28
29
BLOQUE 30
8
31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.8: Módulo 4 del modelo de formación integral del portero de fútbol.
29
MÓDULO 5 y 6: Nivel 3: Etapa de especialización (14 a 15 Años, Cadete)
Recordemos los rasgos más importantes que caracterizan el trabajo a desarrollar con los porteros de
esta etapa.
NIVEL 3: ESPECIALIZACIÓN
FINALIDAD: La finalidad fundamental de este nivel 3, es la de conseguir un nivel alto en las acciones
genéricas inherentes al juego real, así como el perfeccionamiento de unas determinadas acciones
técnicas específicas.
CADETE 14-15 METODOLOGÍA: En el nivel 3, se equilibran los porcentajes de la aplicación global de los contenidos
con el trabajo de un mayor componente analítico.
CONTENIDOS: Los ejercicios y juegos correctivos, que tienen un marcado carácter analítico, son
combinados en la totalidad del entrenamiento con los juegos de fútbol, que son más representativos
del juego real.
TÉCNICOS
DEFENSIVOS:
OFENSIVOS:
30
1.1.6. Iniciación ofensiva: saques con los pies:
1.1.6.1. Balón estático:
1.1.6.1.1. Saque de meta, faltas, etc.
TÁCTICOS
1.2. Utilización de las decisiones tácticas específicas del portero de fútbol:
DEFENSIVOS:
OFENSIVOS:
CONTENIDOS CONCEPTUALES
1.3. Conocimiento de los principales gestos técnicos del portero de fútbol (todos los anteriormente
mencionados).
1.4. Conocimiento de las reglas y normas del fútbol.
1.5. Conocimiento de las principales decisiones tácticas del portero de fútbol (todas las anteriormente
mencionadas).
31
MÓDULO 5
Nivel 3: Etapa de especialización (14 Años- Cadete B)
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA DEFENSIVA TÁCTICA DEFENSIVA TÉCNICA OFENSIVA
OFEN
TÁCT
Blocaje Parada Desvío 1x1 Saque Saque
Discriminar
red ángulo
frontal lateral Frontal y mano pie
Bisectriz y
Posicion-
Inhibir el
ofensivo
amiento
peligro
Juego
lateral
BLOQUE
B. Dividido
Botepronto
Controlado
Apoyo-des
Comunicar
Volea front
Contrataq.
Control ori
Estrategia
B. Parado
En juego
SESIÓN
Posición
½ altura
½ altura
½ altura
½ altura
Ataque
Frontal
Raso
Raso
Raso
Raso
Pase
Alto
Alto
Alto
Alto
2x1
1
BLOQUE 2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2 7
8
9
BLOQUE 10
3 11
12
13
BLOQUE 14
4 15
16
17
BLOQUE 18
5 19
20
21
BLOQUE 22
6 23
24
25
BLOQUE 26
7 27
28
29
BLOQUE 30
8 31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.9: Módulo 5 del modelo de formación integral del portero de fútbol.
32
MÓDULO 6
Nivel 3: Etapa de especialización (15 Años- Cadete A)
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA DEFENSIVA TÁCTICA DEFENSIVA TÉCNICA OFENSIVA
OFEN
TÁCT
Blocaje Parada Desvío 1x1 Saque Saque
Discriminar
red ángulo
Bisectriz y
frontal lateral Frontal y mano pie
Posicion-
Inhibir el
ofensivo
amiento
peligro
Juego
lateral
Botepronto
Controlado
Comunicar
Volea front
B. Dividido
Apoyo-des
Contrataq.
Control ori
Estrategia
B. Parado
En juego
SESIÓN
Posición
½ altura
½ altura
½ altura
½ altura
BLOQUE
Ataque
Frontal
Raso
Raso
Raso
Raso
Pase
Alto
Alto
Alto
Alto
2x1
1
BLOQUE 2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2 7
8
9
BLOQUE 10
3 11
12
13
BLOQUE 14
4 15
16
17
BLOQUE 18
5 19
20
21
BLOQUE 22
6 23
24
25
BLOQUE 26
7 27
28
29
BLOQUE 30
8 31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.10: Módulo 6 del modelo de formación integral del portero de fútbol.
33
MÓDULO 7 y 8: Nivel 4: Etapa de dominio (16 a 17 Años, Juvenil C y B)
Recordemos los rasgos más importantes que caracterizan el trabajo a desarrollar con los porteros de
esta etapa.
NIVEL 4: DOMINIO
FINALIDAD: La finalidad prioritaria en el nivel 4 del programa responde a la consecución por parte del
portero de un alto dominio de las acciones genéricas inherentes al juego real, así como un alto dominio de
las acciones técnicas específicas trabajadas.
JUVENIL METODOLOGÍA: En este ámbito existe ahora una transformación substancial, ya que el planteamiento de
16-17 situaciones analíticas cobra un protagonismo que anteriormente no tenía. El desarrollo de acciones
C-B globales no desaparece, pero si que pasa a ocupar un segundo término.
CONTENIDOS: La característica más representativa aquí es el paso de un contexto de juego real ( juego
de fútbol ), a la predominancia de ejercicios orientados a la mejora exclusiva de las acciones técnicas
específicas ( ejercicios y juegos correctivos ).
CONTENIDOS PROCEDIMENTALES
TÉCNICOS
1.1. Ejecución de los gestos técnicos específicos del portero de fútbol.
DEFENSIVOS:
1.1.1. Posición básica y fundamental.
1.1.2. Blocaje frontal y lateral del balón: raso, ½ altura y alto.
1.1.3. Parada frontal y lateral del balón: raso, ½ altura y alto.
1.1.4. Desvíos frontales, laterales y prolongaciones: raso, ½ altura y alto.
1.1.5. Rechace de puños frontal y lateral del balón: raso, ½ altura y alto.
OFENSIVOS:
1.1.6. Iniciación ofensiva: saques con las manos:
1.1.6.1. Lanzamiento raso.
1.1.6.2. Lanzamiento a ½ altura.
1.1.6.3. Lanzamiento alto.
1.1.7. Iniciación ofensiva: saques con los pies:
1.1.7.1. Balón estático:
1.1.7.1.1. Saque de meta, faltas, etc.
1.1.7.2. Balón en juego:
1.1.7.2.1. Lanzamiento de volea frontal y lateral.
1.1.7.2.2. Lanzamiento a bote-pronto.
34
1.1.7.2.3. Lanzamiento raso con el balón en juego.
1.1.8. Juego ofensivo del portero (con el pie):
1.1.8.1. Control en parada y control orientado.
1.1.8.2. Regates (exterior e interior).
1.1.8.3. Pase (corto, medio, largo).
TÁCTICOS
1.2. Utilización de las decisiones tácticas específicas del portero de fútbol:
DEFENSIVOS:
OFENSIVOS:
1.2.9. Lectura y control del ritmo del partido con las iniciaciones ofensivas según:
1.2.9.1. Factores externos: el resultado, la actuación arbitral, y el tiempo restante.
CONTENIDOS CONCEPTUALES
1.3. Conocimiento de los principales gestos técnicos del portero de fútbol (todos los anteriormente
mencionados).
1.4. Conocimiento de las reglas y normas del fútbol.
1.5. Conocimiento de las principales decisiones tácticas del portero de fútbol (todas las anteriormente
mencionadas).
35
MÓDULO 7 Nivel 4: Etapa de dominio (16 Años, Juvenil C)
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA DEFENSIVA TÁCTICA DEFENSIVA TÉCNICA OFENSIVA
OFEN
TÁCT
Parada Rechace Desvío 1x1 Saque Saque
Discriminar
red ángulo
lateral de puños Frontal y mano pie
Bisectriz y
Posicion-
ofensivo
amiento
Juego
frontal y lateral
lateral
Botepronto
Controlado
Frontal
B. Dividido
Apoyo-des
Volea later
Contrataq.
Control ori
Estrategia
B. Parado
En juego
½ altura
½ altura
½ altura
½ altura
Regate
BLOQUE
Ataque
SESIÓN
Raso
Raso
Raso
Raso
Pase
Alto
Alto
Alto
Alto
2x1
1
BLOQUE 2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2 7
8
9
BLOQUE 10
3 11
12
13
BLOQUE 14
4 15
16
17
BLOQUE 18
5 19
20
21
BLOQUE 22
6 23
24
25
BLOQUE 26
7 27
28
29
BLOQUE 30
8 31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.11: Módulo 7 del modelo de formación integral del portero de fútbol.
36
MÓDULO 8 Nivel 4: Etapa de dominio (17 Años, Juvenil B)
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA DEFENSIVA TÁCTICA DEFENSIVA TÉCNICA OFENSIVA
OFEN
TÁCT
Parada Rechace Desvío 1x1 Saque Saque
Discriminar
red ángulo
Bisectriz y
lateral de puños Frontal y mano pie
Posicion-
ofensivo
amiento
Juego
frontal y lateral
lateral
BLOQUE
Botepronto
Controlado
B. Dividido
Apoyo-des
Volea later
Contrataq.
Control ori
Estrategia
B. Parado
En juego
SESIÓN
½ altura
½ altura
½ altura
½ altura
Regate
Ataque
Frontal
Raso
Raso
Raso
Raso
Pase
Alto
Alto
Alto
Alto
2x1
1
BLOQUE 2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2 7
8
9
BLOQUE 10
3 11
12
13
BLOQUE 14
4 15
16
17
BLOQUE 18
5 19
20
21
BLOQUE 22
6 23
24
25
BLOQUE 26
7 27
28
29
BLOQUE 30
8 31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.12: Módulo 8 del modelo de formación integral del portero de fútbol.
37
MÓDULO 9: Nivel 5: Etapa de rendimiento (18 años, Juvenil A)
Recordemos los rasgos más importantes que caracterizan el trabajo a desarrollar con los porteros de
esta etapa.
NIVEL 5: RENDIMIENTO
FINALIDAD: La finalidad es clara en este quinto periodo. El guardameta debe tener las condiciones
necesarias para ofrecer un rendimiento óptimo en un marco competitivo de máximo nivel.
JUVENIL METODOLOGÍA: La base del trabajo pasa a ser analítica, y la aplicación de situaciones globales se limita a
18
A la propia competición y a la complementación del trabajo prioritario.
FORMAS DIDÁCTICAS: El componente fundamental a trabajar pasa a ser las acciones técnicas específicas
mediante ejercicios y juegos correctivos analíticos. Los aspectos propios del juego real quedan subyugados
a ellos, aunque no desaparecen.
En esta Etapa de rendimiento se buscará mejorar aquellos aspectos que el portero no haya logrado
dominar en la Etapa de dominio, o se intentará perfeccionar aquellos aspectos que ya se han dominado
mínimamente.
En este nivel no voy a proponer ningún módulo, ya que su elaboración dependerá del nivel técnico-táctico
conseguido por el portero en su periplo por las etapas de formación anteriormente expuestas.
Los objetivos específicos a conseguir en esta etapa son los mismos que en la etapa anterior, pero con la
particularidad de que han de manifestarse todos y cada uno de ellos en un contexto competitivo de máximo nivel,
ofreciendo el portero en cuestión un rendimiento óptimo.
1.3.3. MODULACIÓN PARALELA EN EDADES AVANZADAS DEL MODELO DE FORMACIÓN
INTEGRAL DEL PORTERO DE FÚTBOL.
Como hemos comentado en páginas anteriores, este es el segundo tipo de modulación, en el que se
intenta reunir los contenidos de dos módulos en un solo módulo.
Esto es así porque se trata de una modulación para edades avanzadas, en la que el niño ya tiene una
cierta experiencia motriz anterior y una mayor capacidad cognitiva que nos permite sobrecargar su proceso de
enseñanza, con lo que el aprendizaje puede realizarse de una manera más rápida.
NIVEL 1
NIVELES Y NIVEL 2 NIVEL 3 Etapa NIVEL 4 Etapa NIVEL 5
Etapa
ETAPAS Etapa Desarrollo Especialización Dominio Etapa Rendimiento
Aprendizaje
MÓDULO
PARALELO MÓDULO A MÓDULO B MÓDULO C MÓDULO D MÓDULO E
Fig.13: Distribución de módulos en la modulación paralela en edades avanzadas del modelo de formación integral del portero de
fútbol.
Pese a la diferente edad y capacidad cognitiva entre ambos tipos de modulación, los objetivos
específicos de etapa y los contenidos escogidos para cada uno de estos módulos son los mismos que los
escogidos para cada uno de los niveles o etapas formativas de la modulación normal.
Esto se debe a que el proceso de iniciación a un determinado deporte es idéntico en ambos casos
(Sánchez Bañuelos, 1986). En ambos tipos de modulación se han de pasar por una secuenciación de 5 fases que
les permitirá iniciarse, desarrollar, especializarse, dominar y obtener un mayor rendimiento en el juego del portero.
Veamos ahora los módulos de cada nivel y etapa de formación de esta modulación paralela para edades
avanzadas:
38
MÓDULO A Nivel 1: Etapa de aprendizaje
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA TÉCNICA TÁCTICA
TÁCTICA DEFENSIVA
DEFENSIVA OFENSIVA OFENSIVA
Blocaje Parada Posiciona Bisectriz y 1x1 Inhibir el Saque Saque Discriminar
frontal lateral -miento reducir peligro mano pie
ángulo
Contraataque
Frontal
Botepronto
Controlado
Comunicar
Volea front
Estrategia
En juego
BLOQUE
Posición
½ altura
½ altura
½ altura
Dividido
Ataque
Raso
Raso
Raso
SESIÓN
1
BLOQUE 2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2
7
8
9
BLOQUE 10
3
11
12
13
BLOQUE 14
4
15
16
17
BLOQUE 18
5
19
20
21
BLOQUE 22
6
23
24
25
BLOQUE 26
7
27
28
29
BLOQUE 30
8
31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
39
MÓDULO B Nivel 2: Etapa de desarrollo
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA TÉCNICA TÁCTICA
TÁCTICA DEFENSIVA
DEFENSIVA OFENSIVA OFENSIVA
Blocaje Parada Posicion- Bisectriz y 1x1 Inhibir el Saque Saque Discriminar
frontal lateral amiento reducir peligro mano pie
ángulo
Contraataque
BLOQUE
Controlado
Botepronto
Comunicar
Volea front
B. Dividido
Estrategia
B. Parado
En juego
Posición
½ altura
½ altura
½ altura
Ataque
Frontal
Raso
Raso
Raso
SESIÓN
Alto
Alto
Alto
2x1
1
BLOQUE 1
2
3
4
5
BLOQUE 2 6
7
8
9
BLOQUE 3 10
11
12
13
BLOQUE 4 14
15
16
17
BLOQUE 5 18
19
20
21
BLOQUE 6 22
23
24
25
BLOQUE 7 26
27
28
29
BLOQUE 8 30
31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
40
MÓDULO C Nivel 3: Etapa de especialización
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA DEFENSIVA TÁCTICA DEFENSIVA TÉCNICA OFENSIVA
OFEN
TÁCT
Blocaje Parada Desvío 1x1 Saque Saque
frontal lateral Frontal y mano pie
Discriminar
red ángulo
Bisectriz y
Posicion-
Inhibir el
ofensivo
amiento
lateral
peligro
Juego
Botepronto
Controlado
Frontal
B. Dividido
Apoyo-des
Comunicar
Volea front
Contrataq.
Control ori
Estrategia
B. Parado
BLOQUE
En juego
Posición
½ altura
½ altura
½ altura
½ altura
Ataque
Raso
Raso
Raso
Raso
Pase
Alto
Alto
Alto
Alto
2x1
SESIÓN
1
BLOQUE 2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2 7
8
9
BLOQUE 10
3 11
12
13
BLOQUE 14
4 15
16
17
BLOQUE 18
5 19
20
21
BLOQUE 22
6 23
24
25
BLOQUE 26
7 27
28
29
BLOQUE 30
8 31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.16: Módulo C de la programación paralela en edades avanzadas.
41
MÓDULO D Nivel 4: Etapa de dominio
CONTENIDOS DEFENSIVOS CONTENIDOS OFENSIVOS
TÉCNICA DEFENSIVA TÁCTICA DEFENSIVA TÉCNICA OFENSIVA
OFEN
TÁCT
Parada Rechace Desvío 1x1 Saque Saque
lateral de puños Frontal y mano pie
Discriminar
red ángulo
Bisectriz y
Posicion-
ofensivo
amiento
frontal y lateral
Juego
lateral
BLOQUE
Botepronto
Controlado
Frontal
B. Dividido
Apoyo-des
Volea later
Contrataq.
Control ori
Estrategia
B. Parado
En juego
½ altura
½ altura
½ altura
½ altura
Regate
Ataque
Raso
Raso
Raso
Raso
Pase
SESIÓN
Alto
Alto
Alto
Alto
2x1
1
BLOQUE 2
1
3
4
5
BLOQUE 6
2 7
8
9
BLOQUE 10
3 11
12
13
BLOQUE 14
4 15
16
17
BLOQUE 18
5 19
20
21
BLOQUE 22
6 23
24
25
BLOQUE 26
7 27
28
29
BLOQUE 30
8 31
32
33
34
RECUPERACIÓN
35
SESIONES
36
37
38
39
40
Fig.17: Módulo D de la programación paralela en edades avanzadas.
42
MÓDULO E: Nivel 5: Etapa de rendimiento.
En esta etapa de rendimiento se buscará mejorar aquellos aspectos que el portero no haya logrado
dominar en la etapa de dominio, o se intentará perfeccionar aquellos aspectos que ya se han dominado
mínimamente.
En este nivel no voy a proponer ningún módulo, ya que su elaboración dependerá del nivel técnico-táctico
conseguido por el portero en su periplo por las etapas de formación anteriormente expuestas.
43
EL ENTRENAMIENTO TÁCTICO INDIVIDUAL EN
DEFENSA: Organización, Metodología y Aplicación
Práctica.
El proceso seguido en la elaboración del presente trabajo, establece las funciones y las tareas que cada
jugador está obligado a asumir, desempeñar y desarrollar en función del puesto o la demarcación que ocupa
dentro del esquema del equipo, y del sistema de juego empleado. En nuestro caso, como ya hemos reseñado, el
1.4.4.2., puesto que tal sistema goza de una inigualable simplicidad estructural y muestra una clara definición de
funciones, con una evidente y lógica interrelación entre sus demarcaciones.
Para ello, dividiremos las tareas a realizar siguiendo tres pautas de actuación fundamentales, e
intrínsecamente interrelacionadas entre sí, en lo relativo a la concepción del juego en defensa en el plano
individual:
Organización del Trabajo Defensivo dentro de una Organización del Trabajo Defensivo por carriles en
misma línea en Amplitud Profundidad
Basándonos en esta estructura de trabajo dentro de la organización de las tareas defensivas, intentamos
diferenciar, organizar y matizar por separado, todos aquellos aspectos que intervienen de forma decisiva en la
forma de concebir el comportamiento individual defensivo del jugador de fútbol, aunque como es lógico en la
práctica todos estos factores a tener en cuenta nos los encontremos íntimamente interrelacionados entre sí.
44
1. FUNDAMENTOS TÁCTICOS INDIVIDUALES DEL JUEGO EN DEFENSA.
Complementando todo lo expuesto anteriormente, podemos enumerar un decálogo de reglas que son
generales para cualquier tipo de comportamiento táctico defensivo en el plano individual. Son principios simples y
adaptables a cualquier sistema de juego, consejos de orden general, su eficacia es incuestionable y siembra la
base para el correcto funcionamiento defensivo a la hora de afrontar cualquier situación de amenaza rival.
Puntualizamos sobre situaciones concretas, en las que la capacidad de decisión por parte del jugador
está coartada por el inminente peligro que la no aplicación de estas normas puede acarrear para la correcta
neutralización del juego ofensivo del contrario. Son consejos con los que pretendemos que el jugador consolide y
afiance su comportamiento destructivo. Desplegando con determinación el dominio de reglas fundamentales que
le capaciten en la comprensión de la fase defensiva del juego.
1º. Defender tras la línea del balón, estar siempre en situación de ofrecer nuestra ayuda, mirando la portería rival,
lo que nos mantendrá siempre como jugador activo, capaz de intervenir en cualquier momento en la recuperación
del balón mediante coberturas. Y si el balón nos desborda debemos replegarnos de manera que nos
manifestemos en forma de permutas o achicando espacios hacia atrás.
2º. Provocar o precipitar el error del contrario, mediante el juego de engaños o fintas defensivas tendremos
siempre al rival poseedor del balón pendiente de nuestros movimientos y no podrá pensar en su acción ofensiva,
lo que probablemente le conduzca al error forzado.
3º. Repliegue sin dejar de observar la posición del balón y del contrario, ello evitará ser sorprendidos por cualquier
jugada sorpresiva o de contraataque y nos ayudará a mantener nuestra concentración defensiva.
4º. No dejar que bote el balón en primera instancia durante la fase defensiva, pues la segunda jugada de un bote
de balón en una zona peligrosa para nuestros intereses puede acarrearnos muchos problemas, el principal el
control del balón por un jugador rival y su definición. Por el contrario el evitar el bote del balón evita las dudas
concernientes a la conveniencia del despeje contundente o el control del balón por parte del defensa, si definimos
esta regla como obligatoria disipamos las dudas, y si hay dudas ya no hay dudas. Despeja.
5º. Coordinar tanto verbal como físicamente las acciones defensivas. Para que el trabajo entre todos los
jugadores implicados en la acción defensiva esté perfectamente coordinado ya sea en una cobertura o permuta
como en un achique de espacios. La implicación individual tanto en la ejecución como en la organización es
fundamental para el buen funcionamiento defensivo.
6º. Temporizar el avance del rival, particularmente cuando este se produce en superioridad numérica o somos el
último defensor. Hemos de darle tiempo a la permuta a los compañeros que han sido superados, para poder
nuevamente volver a organizarnos defensivamente. Hemos de preparar la acción defensiva que terminará con la
entrada sobre el rival mediante la temporización.
7º. Realizar coberturas sucesivas escalonadas y ocupar los espacios descompensados sobre todo en los
movimientos de basculación, como en los achiques de espacios. Equilibrar las diferentes demarcaciones del
equipo en amplitud y profundidad, donde el comportamiento erróneo de un solo jugador puede ser fatal para el
correcto funcionamiento del ordenamiento táctico defensivo.
8º. Aumentar la agresividad, la contundencia y la sobriedad defensiva conforme se aproxime el avance del rival
sobre nuestra portería. Al aumentar el peligro de encajar un gol debemos mostrarnos más contundentes en
nuestras acciones de defensa.
9º. Despejar hacia banda, donde la recuperación del balón por parte del rival le obligaría a una segunda jugada
para encarar portería, tiempo que ganaremos para la organización defensiva.
10º. Presionar al poseedor del balón, sobre el balón siempre hemos de manifestar una presencia intensiva de
manera que el rival no tenga capacidad, tiempo, ni espacios para organizar su avance. Aún sin balón podemos
ser dominadores del juego, debemos acosar constantemente al contrario poseedor del balón y canalizar su
avance hacia las bandas donde le reducimos su campo de acción.
45
Hay que trabajar, mediante la realización de tareas y funciones, para recuperar el balón. No podemos
basar nuestro Ordenamiento Táctico Defensivo en esperar el error del contrario o en su falta de aptitud o
ineficacia ofensiva. Nuestro cometido es orientar a los jugadores hacia:
1. ¿Quién? Tiene el deber de intentar recuperarlo.
2. ¿Cómo? Ha de hacerlo.
3. ¿Dónde? Se ha de intentar la recuperación y ...
4. ¿Cuándo? Ha de realizarse.
Esto dependerá probablemente de la táctica a emplear. Lo que es seguro, es que, para ello, tendrán
que dominar los Fundamentos y Principios Defensivos, independientemente del tipo de marcaje, de la situación
espacial de la acción, de la pauta de juego del adversario, etc.
Cualquier jugador está capacitado para el trabajo defensivo. A algunos la tarea les resultará ingrata y a
veces tediosa, otros se verán incapacitados para realizarla, otros simplemente renunciarán a ella, y los menos; la
realizarán con convicción y entusiasmo. Más que nada, debido a su positivo rendimiento en esta faceta del juego.
Lo que se deberá, seguramente, a su buen hacer innato, o a su meritorio poderío físico. Es aquí, en la aptitud
frente a las labores defensivas, donde hemos de reclamar toda la atención y la concentración del jugador para
desarrollar la mejora técnico-táctica en el aspecto defensivo.
Cada miembro del equipo debe estar preparado y capacitado para la recuperación del balón,
independientemente de su demarcación. Evidentemente no podemos pedirle el mismo interés defensivo a un
jugador que juega en punta de ataque, que a uno que realice la cobertura del equipo. No obstante, si podemos, y
debemos, hacerles entender que todas las demarcaciones deben estar preparadas y organizadas para ello. El
robo, se puede producir en cualquier zona del campo, y las situaciones en las que aspiremos a apoderarnos del
balón, deben ser entrenables, y mejorables.
La táctica individual defensiva trata de dar solución a aquellas múltiples situaciones del juego que se le
presentan al jugador y en las que tiene que decidir de forma individual el comportamiento idóneo en defensa.
Raras veces la acción defensiva se produce sin ayudas de compañeros, pero aunque estos estén presentes, la
iniciativa táctica ante la situación de amenaza hemos de considerarla individual, aunque posteriormente se tenga
que compenetrar con sus compañeros para la resolución final de la jugada.
Queda por tanto claro que el jugador debe estar, continuamente, haciendo uso del análisis de situaciones
en las que tendrá que intervenir, bien; como protagonista activo, o facilitando soluciones a sus compañeros, y
tomar las soluciones correctas.
En el análisis de las situaciones, el jugador tiene que atender a una serie de parámetros, si quiere
resolverlas con éxito, con una buena decisión. Como son: El rival, la distancia en referencia a la situación de
juego, la zona del terreno donde se desarrolla y la velocidad con la que trascurre la acción, el grado de amenaza
que se cierne sobre nuestra portería, la relación numérica en la que se engloba la tarea a realizar, etc...
Trabajando mediante el análisis de las situaciones del juego en los entrenamientos, con ejercicios de
táctica posicional y situativa; como en partidos, con cambios circunstanciales de planteamiento, o jugando con las
variantes propias del sistema de juego, el jugador estará viviendo una serie de situaciones que tendrá que
resolver, ejecutando la situación concebida, como la solución ideal, para esa situación defensiva.
Unas veces las resolverá mal y las deberá olvidar cuanto antes, y otras bien, y esas soluciones para esas
situaciones son las que van a conseguir que su rendimiento en el trabajo defensivo vaya potenciándose. Ya que
irá tomando confianza en su quehacer en defensa, ira dominando su parcela del campo en las labores
defensivas. En definitiva, estará archivando situaciones en su memoria táctica, memoria, que estará siempre
presta para cuando haya que hacer uso de ella, ponerla en acción, pues la situación nueva será idéntica a una
vivida que ya tiene catalogada.
Con el fin de entrenar individualmente el aspecto táctico defensivo, planteamos dos situaciones generales
que se presentan ante cualquier adversario: En principio hemos de entrenar y desarrollar situaciones de juego:
1. Sobre el jugador rival que se encuentra en posesión del balón; y
2. Sobre las posibles ayudas del rival en posesión del balón.
La defensa individual se ejercitará mediante enfrentamientos en zonas habituales de actuación para
cada demarcación y contra relaciones numéricas diferentes. En donde, podamos observar los medios defensivos
adecuados para la resolución óptima de las mismas en relación a la táctica a utilizar. Para ello dividiremos el
terreno de juego en zonas de responsabilidad en amplitud y profundidad.
46
2.1. DIVISIONES DE LAS ZONAS DE RESPONSABILIDAD.
División del Terreno de Juego en Amplitud.
El objetivo defensivo requerido específicamente, dependerá de la zona de acción en la que nos
encontremos, que irá en relación con la demarcación en la que queramos trabajar. Para ello dividiremos el campo
en tres carriles en relación a su amplitud:
Carril derecho o banda derecha,
Carril izquierdo o banda izquierda, y...
Carril central; el cual a su vez debido a su importancia estratégica lo podemos dividir en dos mitades.
El grado de exigencia demandado al defensor, debe ir en concordancia con el riesgo relativo de encajar
un gol, que nos pueda plantear la situación propuesta. Dejando claro que es evidente que el carril central en la
zona cercana a nuestra portería es la que nos pueda acarrear mayor peligro de encajarlo. Ya que en la
mencionada parcela, es donde el rival disfruta del ángulo de tiro ideal para intentar el tiro a portería, aunque es
evidente que este no será el único parámetro que debemos de tener en cuenta.
División del Terreno de Juego en Profundidad.
A su vez, siguiendo con el concepto de parcelar el terreno de juego en zonas, también dividiremos los
carriles dependiendo de su profundidad, y de la posición de partida adoptada por el equipo.
Contempláremos el campo dividido en tres franjas. En ellas debemos de exigir niveles de responsabilidad
en el trabajo táctico defensivo, dependiendo de la altura del terreno de juego donde nos encontremos en relación
a la distancia del peligro de gol sobre nuestra portería. Como es lógico, la franja de terreno donde se encuentra
nuestra portería será en la que debemos de mostrarnos más contundentes en la realización del trabajo defensivo,
ya que el rival goza de la distancia y el ángulo de tiro idóneo para poder golearnos.
Dentro de cada franja del terreno de juego y en cada zona de actuación, hemos de considerar dos niveles
de amenaza defensiva, relacionadas con respecto a la profundidad de las mismas:
Uno cuando el rival entra en nuestra zona, donde debemos ir a su encuentro.
(Recuperar el balón)
Y el otro cuando el rival, ya dentro de nuestra zona, intenta progresar en ella, y nosotros impedir
dicha progresión.
(Evitar la progresión en el juego y en su caso evitar el gol)
Zonas de Responsabilidad Conjunta.
INTENSIDAD LINEAS DE
DEFENSIVA ACTUACIÓN
Niveles de Am enaza
Temporización Línea de Puntas.
El Portero.
47
Con la distribución espacial del terreno de juego conseguimos ubicar al jugador dentro de una zona de
responsabilidad desde donde poner en práctica los conocimientos y medios con los que deberá desenvolverse
para el dominio de los recursos tácticos individuales defensivos.
48
pues al controlar el adversario está concentrado en el control, y se apoya sobre una sola pierna, por lo que está
algo desequilibrado.
* Salvo en los enfrentamientos o duelos individuales en los que se debe usar la Temporización.
Con la ayuda de una división analítica de pequeñas jugadas típicas, se puede estudiar el comportamiento
individual y proporcionar al jugador los conocimientos esenciales para su aprendizaje, gracias al desarrollo de su
percepción y saber táctico.
49
Perfeccionamiento de la Táctica Posicional Defensiva del Lateral Derecho.
Mediante la Resolución de Situaciones contra Relaciones Numéricas Diferentes.
Dimensiones: Las sombreadas en el grafico.
Situaciones a desarrollar: 1x1, 2x1, 2x2, 2x3.
Posición de partida: Las relativas al sistema a utilizar.
Nº de jugadores en defensa: 2, + 1 portero.
Organización Un Lateral derecho
Un Central
Nº de jugadores ofensivos: 3. (Jugadores del carril Izquierdo y puntas)
Ejercicio Posicional I.
Un Jugador rival en posesión de balón avanza por la zona de responsabilidad que se ha de defender.
Jugador activo:
EL LATERAL DERECHO.
Defensa:
En zona, sobre el contrario en posesión de balón.
Situación:
Defensa Contra Igualdad numérica.
En situación 1x1.
Actuación / Tarea:
Temporización, dirigida a retardar el juego del rival
canalizando su avance y reduciéndole espacios contra la banda,.
Tapándole sus posibilidades de pase o de tiro llevándolo
irremisiblemente a tener que decidir entre el recorte o el cambio
de ritmo. Esperaremos el momento de la entrada.
50
Ejercicio Posicional III.
Un Jugador rival en posesión de balón avanza junto con la ayuda o el apoyo de un compañero por la
zona de responsabilidad que se ha de defender.
Jugador activo:
EL LATERAL DERECHO
Y EL CENTRAL de su lado.
Defensa:
En zona sobre el contrario en posesión de balón
y su ayuda.
Situación:
Defensa contra igualdad numérica.
En situación 2x2.
Actuación / Tarea:
Presencia Intensiva, (Presión + Cobertura). Precipitar el
juego del rival, provocar el error forzado. Un defensor temporiza
el avance rival, mientras su compañero está atento entre hacer efectiva su cobertura o anticiparse a la
posibilidad de entrar en juego del otro rival.
En el sistema 1-4-4-2 podemos establecer el comportamiento posicional de todas las demarcaciones del
sistema, definiendo las zonas de trabajo, e influencia, como hemos hecho con el lateral derecho. Por tanto con
todos los jugadores se puede perfeccionar y desarrollar funciones defensivas dentro del ordenamiento táctico del
equipo en defensa.
1. (1x1) Temporización. Def. zonal sobre el rival en posesión del balón en Igualdad.Nca.
2. (2x1) Presión. Def. zonal sobre el rival en posesión del balón en Superioridad Numerica
Ejercicio Posicional V.
Un Jugador rival en posesión de balón avanza por la zona de responsabilidad que se ha de defender.
Jugador activo:
EL LATERAL Y EL INTERIOR DERECHO.
Defensa:
En zona, sobre el contrario en posesión de balón.
Situación:
Defensa Contra Inferioridad numérica.
En situación 2x1
Actuación / Tarea:
Presión, dirigida a la pronta recuperación del balón al ir al
encuentro del rival con decisión y agresividad al observar como el
interior sale al encuentro del rival, el lateral achica espacios hacia
delante, prestando cobertura a su compañero permitiéndole realizar la entrada o la anticipación con total
confianza.
52
Ejercicio Posicional VI.
Un Jugador rival en posesión de balón avanza junto con la ayuda o el apoyo de un compañero por la
zona que se ha de defender
Jugador activo:
EL LATERAL Y EL INTERIOR DERECHO.
Defensa:
En zona, sobre el contrario en posesión de balón
y su ayuda.
Situación:
Defensa Contra Igualdad numérica.
En situación 2x2.
Actuación / Tarea:
Presencia Intensiva, (Presión + Cobertura) encaminada
a precipitar el juego del rival por nuestra insistencia. El lateral
reduce espacios con su compañero con la intención de presta cobertura y a su vez, vigila la posibilidad
de participación en el juego del otro rival
Previniendo las supuestas subidas al ataque del interior derecho, seria conveniente trabajar el carril
derecho con la ausencia de dicho jugador. Por ejemplo, realizar acciones donde una vez comenzada la jugada
apareciera el interior haciendo efectivo su movimiento de repliegue mediante la reducción de espacios hacia
atrás.
Desarrollaremos a tal efecto el trabajo con la ayuda del medio centro de nuestro lado, para potenciar la
zona en los posibles trastornos que las incorporaciones del interior nos pudieran plantear.
Al incorporarse a las tareas defensivas un jugador de otro carril, debemos ampliar la zona de
responsabilidad. Ya que la influencia zonal de los jugadores activos aumenta, con lo que disminuye su control
sobre esa zona, estamos pues a la espera de la ayuda del interior, para reforzar y equilibrar los dominios zonales.
53
Ejercicio Posicional IX.
Un Jugador rival en posesión de balón avanza junto con la ayuda o el apoyo de un compañero por la
zona que se ha defender
Jugador activo:
EL LATERAL DERECHO
Y EL MEDIO CENTRO de su lado.
Defensa:
En zona, sobre el contrario en posesión de balón
y su ayuda.
Situación:
Defensa Contra Igualdad numérica.
En situación 2x2.
Actuación / Tarea:
Presencia Intensiva, (Presión + Cobertura) encaminada
a precipitar el juego del rival por nuestra insistencia. El medio
centro sale al encuentro del rival en posesión del balón mientras el lateral orienta su acción hacia la
cobertura de su compañero y la vigilancia del rival abierto en banda.
Ejercicio Posicional X.
Un jugador rival en posesión de balón que penetra en la zona a defender junto con las ayudas o los
apoyos de dos compañeros.
Jugador activo:
EL LATERAL DERECHO
Y EL MEDIO CENTRO de su lado.
Defensa:
En zona, sobre el contrario en posesión de balón
y sus posibles ayudas.
Situación:
Defensa contra Superioridad numérica.
En situación 2x3.
Actuación / Tarea:
Temporización, retardar el avance del rival, ganar tiempo para
organizarse. El medio centro intentará anular la línea de pase
hacia el centro y canalizar el avance hacia la banda, donde el lateral tendrá que prestarle cobertura y
cubrir al contrario posicionalmente más peligroso.
Al finalizar la coordinación del trabajo defensivo dentro de una misma línea (En amplitud), pasaremos a
interrelacionar las labores defensivas del lateral derecho con su unidad de trabajo dentro del carril derecho como
es el interior de su lado (En profundidad). Para mas tarde interrelacionarlo con las demarcaciones limítrofes en
amplitud y profundidad a su demarcación (Organización Zonal). Volviendo a repetir la secuencia de trabajo contra
relaciones numéricas diferentes.
54
Interrelaciones del lateral derecho
Dejaremos pues como término del trabajo individual la realización espacial del marcaje zonal entre
grupos de 3 jugadores, donde el jugador se relacione con las demarcaciones más próximas al puesto a potenciar.
La coordinación del trabajo posicional relaciona dentro del marcaje zonal al menos a tres jugadores
responsables para un espacio de juego o zona. Uno por delante, otro por detrás y otro al lado.
Dentro de la zona de responsabilidad del lateral derecho, esté intervendrá interrelacionando sus
funciones dependiendo por donde venga la amenaza del rival con balón, con:
1. Cuando el avance rival avanza por banda, -Con su interior y el central de su lado-.
2. Cuando el rival avanza por el carril central, -Con el medio centro de su lado y su central-.
3. Incluso podemos trabajar la coordinación entre: el punta, el interior, y el lateral de un mismo lado, sobre
todo en movimientos de presión sobre banda.
Si quisiéramos continuar la progresión en la organización del trabajo defensivo, debemos de recurrir a la
defensa zonal donde las interrelaciones entre jugadores, encamina la tarea mas bien hacia el trabajo en grupo.
Este pues seria el limite, en cuanto a la cantidad de jugadores activos a intervenir en el desarrollo y
perfeccionamiento del trabajo táctico individual.
55
Para lo cual la dinámica de juego a seguir será buscar la amplitud con los jugadores más abiertos en
banda, alejando con ello el balón de la zona frontal, la más peligrosa para nuestros intereses defensivos.
56
Es evidente que tras el planteamiento de la jugada, puede venir el éxito y el reforzamiento de la conducta
correcta, o el fracaso; y en este caso, entra en juego el factor de corrección; que será decisivo para la conducta
de juego final. Las correcciones son ayudas metódicas para el aprendizaje. Deben de construirse sobre las
experiencias del jugador durante la búsqueda de una solución a la tarea propuesta, y se dan en dificultades
persistentes de un jugador para facilitar la superación de la tarea.
Propondremos situaciones en defensa elegidas por nuestra experiencia del juego, donde el jugador
defensor debe actuar poniendo de manifiesto su saber táctico, para lograr un comportamiento situativo optimo. La
planificación del comportamiento táctico defensivo debe ir en concordancia con el grado de aptitud y eficacia
mostrado por los jugadores en sus acciones. Es por tanto una labor tanto de aprendizaje de los medios tácticos
defensivos, como de perfeccionamiento de los resultados obtenidos.
La Táctica Situativa se ejercitará mediante enfrentamientos en espacios reducidos y contra relaciones
numéricas diferentes, el los que podamos observar los mecanismos de defensa adecuados para la resolución de
las mismas, dependiendo del tipo de sistema de juego empleado y de la táctica a utilizar. En este caso y
siguiendo con el ejemplo utilizaremos el sistema 1-4-4-2.
A la hora de planificar el trabajo hemos de observar el dominio que cada jugador tiene en la fase
defensiva del juego, para lo cual no hay nada como un enfrentamiento o duelo 1x1, para empezar, en el que cada
jugador ponga de manifiesto sus aptitudes o defectos a la hora de afrontar las tareas defensivas.
Estos ejercicios antes de realizarlos en su referencia posicional en el terreno de juego (por
demarcaciones), pueden efectuarse mediante un duelo 1x1 en el que se ejerciten las pautas requeridas para cada
acción desencadenante de la conducta de juego posterior. El escenario quedaría limitado a un atacante, un
defensor y una acción que posibilite el desarrollo posterior de la jugada.
Comenzando por la situación propuesta en los ejercicios situativos relacionados a continuación, el trabajo
defensivo ira en paulatina progresión en cuanto a las variantes en las relaciones numéricas.
El ejemplo muestra una situación 1x1 y una acción desencadenante del comportamiento de juego
posterior que ira cambiando en función de la relación numérica que propongamos. Recordemos que según la
relación numérica hemos de afrontar la situación mediante temporización, presencia intensiva o presión. Teniendo
presente que tal progresión en lo que respecta a la táctica individual situativa, finaliza cuando el nº de jugadores
inmiscuidos en la situación nos hace pensar mas en un trabajo coordinado de grupo que en un perfeccionamiento
individual.
ENFRENTAMIENTOS.
Ejercicio Situativo I.
El marcaje es sorprendido por un pase en profundidad sobre la banda a los espacios a la espalda del
defensor.
Jugador activo:
EL LATERAL DERECHO.
Marcaje:
En zona sobre el contrario.
Efectivo mediante la Anticipación y la Entrada.
Defensa:
Contra igualdad numérica.
En situación 1x1, mediante Presión.
Actuación / Tarea:
El defensor se anticipa al rival, evitando el recorte hacia dentro
y enviando fuera el balón por medio de una entrada lateral.
57
Ejercicio Situativo III.
El rival al que marcamos de cerca mediante un desmarque de apoyo logra recibir un pase que tendremos
que temporizar.
Jugador activo:
EL LATERAL DERECHO.
Marcaje:
En zona sobre el contrario.
Efectivo mediante la Agresividad en el Marcaje.
Defensa:
Contra igualdad numérica.
En situación 1x1
Actuación / Tarea:
El defensor trata de anticiparse o dificultar el control
impidiendo en última instancia que el rival se vuelva hacia
nuestra portería.
Ejercicio Situativo V.
El rival al que vigilamos intenta recibir un pase en profundidad sobre la banda a la espalda del lateral, que
trataremos de interceptar.
Jugador activo:
EL LATERAL DERECHO.
Marcaje:
En zona sobre el contrario.
Efectivo mediante la Interceptación.
Defensa:
Contra igualdad numérica.
En situación 1x1
Actuación / Tarea:
El defensor sale al encuentro intentando interceptar o
dificultar el control rival evitando ser desbordado e
interrumpiendo el avance.
58
Ejercicio Situativo VII.
El rival entra en juego mediante un cambio de orientación, controla el balón e intenta progresar en
velocidad por nuestra banda.
Jugador activo:
EL LATERAL DERECHO.
Marcaje:
En zona sobre el contrario.
Efectivo mediante la Temporización y la Entrada.
Defensa:
Contra igualdad numérica.
En situación 1x1
Actuación / Tarea:
El defensor le sale al encuentro controladamente le tapa
el recorte e intenta impedir su avance, evitando en todo
momento el centro sobre el área y la posibilidad de tiro a puerta.
Ejercicio Situativo X.
El rival lucha por la posesión de un balón aéreo dividido en la zona de responsabilidad del lateral.
Jugador activo:
EL LATERAL DERECHO.
Marcaje:
En zona sobre el contrario.
Efectivo mediante la Interceptación.
Defensa:
Contra igualdad numérica.
En situación 1x1
Actuación / Tarea:
El defensor sale al encuentro del balón para interceptar
arriba, previniendo la posibilidad de una 2ª jugada por parte del
rival.
59
La táctica situativa persigue la elección correcta por parte del jugador de todas sus destrezas técnicas
individuales, en una jugada concreta. Es por tanto, sumamente importante que le facilitemos al jugador un amplio
abanico de recursos técnicos defensivos, así como un amplio número de ejercicios relacionados con sus tareas
destructivas.
Cuanto mas conocimientos y recursos tenga el jugador de cualquier situación, cuantas mas soluciones y
habilidades domine, mejor, y mas correctamente empleará sus destrezas técnicas defensivas en la resolución de
la acción.
Perfeccionando todo tipo de destrezas, habilidades o recursos técnicos defensivos, ampliaremos la
capacidad de resolución táctica. Y empleando jugadas o situaciones donde el defensa se ejercite contra igualdad
o inferioridad numérica potenciaremos sus posibilidades de superación en el ámbito defensivo.
Como el tema que nos ocupa es el de fomentar los aspectos defensivos particulares de cada jugador,
hemos de escoger el juego contra igualdad numérica como el ideal para favorecer los medios propuestos en
defensa, ya que si planteáramos el juego de defensa contra inferioridad numérica, mas que el carácter individual
del defensor estaríamos desarrollando su colaboración con los demás defensores organizándose mediante
presión para recuperar el balón, y si lo programáramos mediante juego de defensa contra superioridad numérica
lo que conseguiríamos desde el punto de vista del comportamiento individual es dificultar en exceso las labores
defensivas, con el consiguiente agravio para la mejora y evolución del trabajo.
No obstante, claro está, las exigencias en las propuestas de trabajo deben ir en concordancia con el nivel
demostrado por los jugadores, orientándonos en un principio desde lo fácil a lo complejo y evolucionando
secuencialmente como exponemos a continuación, para generar el comportamiento defensivo óptimo.
60
Sin olvidar que cada enfrentamiento con una relación numérica diferente le exigirá al defensor un tipo de
comportamiento defensivo desigual, simplemente con la mera elección de un medio defensivo u otro, el jugador
estará avanzando individualmente en su forma de entender el comportamiento del juego destructivo.
1º Juego de Defensa contra Inferioridad Numérica. (Presión)
Realizado mediante Presión y orientado a la pronta recuperación del balón a través de la anulación de las
posibilidades de juego al poseedor del balón y marcaje agresivo a sus posibles ayudas, impidiendo las
posibilidades de las líneas de pase para finalmente terminar interceptando. Para ello achicaremos espacios sobre
el rival, avanzando el equipo en bloque sobre el terreno dominado por el contrario y fijando férreamente al
contrario que cada uno marca. Previamente al poseedor del balón se le entra con decisión, con la cobertura de
uno o dos compañeros. Y se le anulan a la vez todas las soluciones de juego por marcaje agresivo a todos los
compañeros que le ofrezcan apoyos.
2º Juego de Defensa contra Igualdad Numérica. (Presencia Intensiva)
Realizado mediante Presencia Intensiva y enfocado a marcar a los rivales mas avanzados o
posicionalmente mas peligrosos, mediante presión mas cobertura sobre el poseedor del balón, para inducirle al
juego precipitado o al error forzado. Al Poseedor del balón se le comprime el tiempo y el espacio alrededor del
balón, presionándolo al menos con dos jugadores. Ante esta situación y tratando de eludir el 1x1, que
presumiblemente perdería, el contrario se vera obligado a jugar rápido y precipitado, no encontrará demasiados
apoyos, pues sus compañeros cada vez tendrán menos tiempo para poder desmarcarse.
3º Juego de Defensa contra Superioridad Numérica. (Temporización)
Realizado mediante temporización a través de marcaje por zonas retardante, para dar tiempo a la
permuta de los compañeros superados, retrocediendo ante el contrario en posesión del balón y ocupándonos
prioritariamente de los rivales posicionalmente más peligrosos. Amagaremos continuamente la entrada para que
el atacante no pueda jugar con tranquilidad. A la vez nos mantendremos a la distancia necesaria para bloquear
los pases peligrosos o los disparos a puerta.
La practica de este tipo de juegos y enfrentamientos en espacios reducidos lleva integrados todos los
componentes necesarios para el rendimiento del jugador, tanto ofensivos, como defensivos. No obstante
mediante la implantación de ciertas reglas o normas, en concordancia a la relación numérica existente, podemos
condicionar la posesión del balón o el avance del rival y facilitar el trabajo de recuperación de los defensores.
Fomentando por tanto, el comportamiento destructivo, generando un pensamiento mas rápido y agresivo en las
formas de actuación individual.
Mediante las alteraciones en los grados de dificultad podemos favorecer el espíritu defensivo, por
ejemplo: disminuyendo el terreno de juego logramos que el juego ofensivo del rival en posesión del balón sea por
lo general mas difícil de desarrollar, al disfrutar de menos espacio donde maniobrar y menos tiempo para realizar
los desmarques, por lo que consiguientemente disminuye su visión de juego. Además la exigencia física es
inferior al movernos en un terreno reducido por lo que aumenta proporcionalmente la concentración defensiva.
En lo referente al número de jugadores, el juego de defensa contra igualdad numérica no es ventajoso
para la planificación del trabajo, ya que podríamos defender en superioridad numérica, no obstante frente a
igualdad el grado de exigencia es mayor, y no difiere en mucho de la dificultad que nos vamos a encontrar en el
ámbito competitivo, por lo tanto optamos por un juego de defensa equilibrado, que nos ofrece grandes
posibilidades individuales de experiencia y repetición, y eventualidades para entrenar la aplicación de los medios
tácticos adecuados.
Si a todo esto elevamos la velocidad en el juego, el ritmo o la intensidad, por ejemplo con normas como
la de no vale pararse el balón, jugar hacia delante obligatoriamente o reduciendo el número de toques, logramos
asimismo también favorecer nuestros intereses defensivos ya que esto hace que el juego del equipo poseedor del
balón sea mas difícil, y sus exigencias tanto físicas, como técnicas y tácticas sean mas altas.
En cuanto a la duración del juego en lo referente al aspecto defensivo tener en cuenta que a mayor
duración del ejercicio se va perdiendo la intensidad, la atención y la capacidad de concentración, por lo que para
fijar buenos comportamientos destructivos hemos de mantener al jugador con un alto grado de concentración en
el juego, no es conveniente alargarlo en exceso.
A modo de ejemplo mostramos algunos juegos contra igualdad numérica, en situación 5x5, en los que
determinamos los objetivos y dependiendo de ellos, la utilización de algunos de los medios adecuados para su
realización.
Con reglas adicionales orientamos la tarea hacia el trabajo defensivo concreto que vamos a potenciar.
Los juegos relacionados a continuación no tienen solución de continuidad, salvo el factor tiempo, asimismo no
reflejamos la superficie del área a utilizar, pues debe ir en concordancia con la calidad técnica del grupo y la
capacidad física sobre la que queramos incidir. La elección de conjuntos aproximadamente de 10 jugadores es
pensando en la normal composición de una plantilla: 20 jugadores de campo mas los porteros.
61
Las Superficies de Utilización del Terreno de Juego.
10 11 7 2
3 12
1 5
4 9 6
A la hora de plantear el desarrollo de una situación podemos utilizar las líneas del campo como referencia
para la creación de las áreas donde se desplegarán los juegos. Para la confección de los mismos hemos de tener
en cuenta las dimensiones donde los vamos a realizar atendiendo a las consecuencias que sobre el plano táctico
van a tener. En los gráficos anteriores podemos observar doce parcelas, numeradas desde el 1 en color claro,
como la zona mayor hasta el 12 en color oscuro, como la zona menor, con dimensiones diferentes en donde
poder adaptar los juegos y con las que aumentar o disminuir los grados de dificultad en función de la dimensión
de la zona en donde vayamos trabajar.
Si Reducimos la Extensión del Campo: Influiremos sobre el desarrollo del mismo en que es mas difícil
conservar el balón, ya que se goza de menos espacios libres para desmarcarse, lo que favorece a su vez la
realización del pressíng por parte de los defensores y la realización de mejores o mas eficaces marcajes y por
consiguiente una mas fácil anticipación.
Si Ampliamos las Dimensión del Terreno de Juego: lograremos una mejor conservación del balón, mas
espacios hacia donde dirigir los desmarques, la posibilidad de que existan espacios libres para conquistar por
medio de cambios de orientación, mayor dificultad defensiva, por consiguiente marcajes menos eficaces y menos
posibilidades para la anticipación.
Juegos tácticos enfocados a impedir la participación en el juego del rival y hacia la rápida recuperación
del balón, mediante el juego de defensa contra igualdad numérica.
Tarea:
Pase, recepción y devolución del balón
Organización:
Nº de jugadores. 1 + 4 x 4 en parejas.
Material. Balón / Petos / Conos.
Espacio de juego. Zona nº 3.
Duración. 3 x 7´
Desarrollo del juego:
Dos equipos de 4 jugadores y un neutral en el centro con
un balón, tratará de apoyarse con los jugadores del equipo ofensor, que tendrán que devolverlo tras una
pequeña conducción, durante la cual el defensor intentará efectuar la entrada. Los defensores estarán en
todo momento pendientes del marcaje para que la ayuda de su marca no sea efectiva.
62
JUEGO nº 2. Defensa Contra Igualdad Numerica.
Marcaje / Anticipación / Interceptación / Entrada / Vigilancia.
Objetivo: Impedir la participacion en el juego del rival y recuperar el balón.
Tarea:
Marque / Desmarque. Marcaje al hombre.
Organización:
Nº de jugadores. Enfrentamiento 5 x 5.
Material. Balón / Petos / Conos.
Espacio de juego. Zona nº 10.
Duración. 3 x 7´
Desarrollo del juego:
Se enfrentan 2 equipos de cinco jugadores. A cada uno
de los cuales se le asigna un rival a marcar, del cual es el único
responsable y al que tendrá que seguir por todo el terreno de
juego. Una vez recuperado el balón el equipo que lo recuperó pasa a mantenerlo y el que lo ha perdido,
respetando las marcas debe recuperarlo.
63
JUEGO nº 6 . Defensa Contra Igualdad Numerica.
Marcaje / Anticipación / Interceptación / Entrada / Vigilancia.
Objetivo: Impedir la participacion en el juego del rival y recuperar el balón.
Tarea:
Golear las porterías pequeñas.
Organización:
Nº de jugadores. Enfrentamiento 5 x 5.
Material. Balón / Petos / Conos.
Espacio de juego. Zona nº 5.
Duración. 3 x 7´
Desarrollo del juego:
Dos equipos pugnan por la posesión del balón con el
objetivo de intentar golear mediante tiro en las cuatro porterías
pequeñas de 2m. El equipo que recupera el balón pasa a golear y
el que lo ha perdido debe trabajar en defensa para recuperarlo. Variar las porterías a golear.
5. BIBLIOGRAFÍA
M. A. Godik, A. V. Popov
La Preparación del Futbolista.
Editorial Paidotribo.
Erlander J. Neinek.
Fútbol Total.
Editorial Paidotribo.
L. Kasani.
Entrenamiento de Fútbol.
Editorial Ágonos.
Erick Mombaerts.
Fútbol: Entrenamiento y Rendimiento Deportivo.
Editorial Hispano Europea.
Bernhard Bruggman.
1000 Ejercicios y Juegos de Fútbol.
Editorial Hispano Europea.
64
DISEÑO DE UN PROCEDIMIENTO PARA EVALUAR EL
PROGRESO DEL FUTBOLISTA EN UNA HABILIDAD
TÉCNICA.
1. INTRODUCCIÓN.
La evaluación de las habilidades técnicas debe centrarse en la ejecución motriz que constituye cada
habilidad, diferenciándose las situaciones de test o de entrenamiento de las situaciones reales en el contexto
competitivo.
La evaluación apropiada de las habilidades técnicas nos permitirá conocer las distintas necesidades de
mejora de los deportistas, y la progresión que van experimentando, debiendo observarse, también, la relevancia
de esta progresión en el rendimiento global y en los resultados deportivos en las competiciones. En este sentido,
se debe tener en cuenta:
Primero; observar si se produce una mejora técnica en situaciones controladas de test.
Seguidamente; si los resultados de estos test tienen una relación con la utilización de la habilidad técnica
en el contexto de la competición.
Para concluir; si la utilización de esta habilidad se relaciona con una mejora en el rendimiento global y en
los resultados del deportista en la competición.
En el presente artículo, ofrecemos un procedimiento que podríamos utilizar con el fin de evaluar la
habilidad técnica del pase, con el correspondiente diseño del test para evaluar la acción en situaciones
controladas, además del diseño de una ficha de registro que nos permitirá registrar la decisión que debe tomar el
futbolista sobre la ejecución inmediata de las dos habilidades que se tratan en el artículo: pase corto y pase largo;
pues puede pasar que, al trabajar las dos habilidades, el futbolista las controle y ejecute correctamente en
ejercicios específicos, pero en situaciones reales de juego competitivo, puede que no presente la misma
precisión, debido a diferentes causas que trataremos de analizar en la segunda parte del artículo.
65
Los pases en fútbol, se emplean para mantener la posesión del balón y llegar a la portería contraría; lo
más eficaz es llegar con el menor número de toques o pases.
La utilización del pase, es la forma más rápida para sorprender al contrario, y no, el intentar llevar el
balón en los pies un mismo jugador por todo el terreno de juego. Por ello, lo más eficaz es que se consiga con
pases cortos a gran velocidad de ejecución, o en su defecto, con pases largos bien orientados a un compañero,
que se desmarca para sorprender a la defensa contraria, o incluso, un pase largo para cambiar el juego de banda.
Pases cortos. Son los más utilizados, la regla general es tener los ojos fijos en el balón y haber
percibido antes la situación del compañero o compañeros.
Interior del pie: se le da con el interior del pie justo en medio, formando casi un ángulo recto
respecto al pie de apoyo, que queda apuntando hacia el objetivo.
Exterior del pie: se puede disimular mejor, por lo que es más fácil engañar al contrario. Se golpea
con la parte externa del pie a la altura del dedo meñique, su precisión es menos exacta al tener menos zona de
contacto entre el pie y el balón.
Tacón: se utiliza cuando no hay opción de avanzar, tenemos enfrente o de espaldas a un contrario,
y la única manera de realizar el pase es con el tacón, golpeando el balón justo con el centro del tacón.
Pases largos. Para todos los pases largos, ya sea para sorprender al contrario hacia portería o un
cambio de juego, sirve el mismo consejo: se debe de extender bien los brazos, para facilitar el equilibrio y facilitar
un mejor golpeo.
Empeine: el pie de golpeo se echa bien hacia atrás y el de apoyo se coloca justo al lado del balón.
Hay que golpear en el centro y un poco debajo del balón para que salga elevado. Es el pase con el que más
distancia se puede conseguir.
Rosca interior: El cuerpo se inclina hacia el pie de apoyo y el de golpeo busca el exterior del balón
para darle un efecto de fuera a dentro, que podría ser valido para los cambios de juego.
Rosca exterior: de similar ejecución al anterior, sólo que se golpea con la parte exterior del pie
3. TEST A REALIZAR.
Una vez explicada la habilidad técnica que se pretende evaluar, el pase (corto, largo), recordando que
estamos con un equipo de categoría Cadete de segundo año, haremos al principio de la temporada una
evaluación inicial. Esta evaluación o test consistiría en lo siguiente:
TEST 1: Pase
El jugador tendrá 10 balones en línea, y, a unos 8 o 10 metros, un compañero. El jugador tendrá que
pasar el balón al compañero y se contabilizará la ejecución técnica, si le ha pegado correctamente, si no va
botando, si va raso, si va bien dirigido, etc.
X X X X X X X X X
10 mts.
66
TEST 2: Pase Largo
Se acotarán tres zonas y le diremos al jugador que dirija el balón simulando un pase largo dentro de la
zona acotada; si da un bote dentro de la zona, es válido. Tendrá cinco balones para cada zona. Los lanzamientos
siempre desde el mismo sitio.
Recorrido balón
Balón
Jugador
67
En resumen, nuestro proceso de evaluación irá a evaluar la ejecución técnica del pase largo y corto, y del
progreso que llevan los jugadores a lo largo de la temporada, lo que nos llevará a replantearnos, con casi toda
seguridad, tanto los test de evaluación, (según donde los vayamos a utilizar), como la programación del
entrenamiento de esta habilidad, según se vayan consiguiendo o no los objetivos propuestos, y a intentar tener
controladas o tener en cuenta todas las variables que pueden interferir en la evaluación.
Estímulos Decisión
Estímulos
estables Sobre
variables
ejecución
ALTERNATIVA 2
Compañero desmarcándose al espacio PASE LARGO
libre.
Compañero desmarcado.
Juego espeso en una banda y pressing
del contrario (Cambio de Juego)
Esta ficha de observación, nos permite tomar nota y visualizar las decisiones que puede tomar el jugador,
según los estímulos antecedentes variables que se le presenten, tomar nota del tipo de pase que decide y si
corresponde con las variables correctas que ya hemos explicado y trabajado con los jugadores, sobre todo con
los que hemos visto que perdían muchos balones no por la ejecución técnica en si, sino por la decisión errónea
según la situación.
Esta ficha de observación es una hoja individual para un solo jugador, donde presentamos una cabecera
para recoger datos que pueden ser interesantes tener en cuenta, como: nombre del jugador, dorsal, posición en la
que juega, fecha, terreno de juego. El tipo de ejercicio, la duración, observaciones a tener en cuenta, y a partir de
establecer los estímulos antecedentes estables y los estímulos antecedentes variables, señalamos cuales son las
alternativas (pase corto, pase largo) y los impedimentos que pueden perjudicar la realización de cada una de las
alternativas.
5. FICHA DE OBSERVACIÓN.
68
6. CONCLUSIÓN.
Una completa evaluación de la puesta en práctica de las habilidades técnicas en contextos competitivos,
debe tener en cuenta las cuestiones que llevan al futbolista a utilizar una u otras habilidades técnicas para
superar cualquier dificultad que se le pueda presentar. A través de este artículo podemos apreciar las estrategias
que se pueden llevar a cabo, primero para evaluar una habilidad técnica, y una vez que esta se domina, podemos
tratar de evaluar la utilidad dada por el futbolista en un contexto educativo.
7. BIBLIOGRAFÍA
Blázquez, D. Evaluar en educación física Editorial Inde. Barcelona, 1990.
Turpin, B. Fútbol, la formación del joven jugador. Editorial Hispano Europea, Madrid, 1998
Buceta, J.M. Psicología del entrenamiento deportivo. Editorial Dykinson. Madrid, 1998.
Buceta, J.M. , Terrados, N. Definición y evaluación del rendimiento deportivo. Material de los
cursos de Master y Especialista Universitarios en Psicología de la Actividad Física y el Deporte, y Experto
Universitario en Entrenamiento Deportivo de la U.N.E.D., 2001.
Casimiro Andujar, A.J. Apuntes Teoría y práctica del acondicionamiento físico. Universidad de
Almería, 1997.
Castejón, F.J. Evaluación de programas en educación física. Editorial Gymos. Madrid, 1996.
Maccario, B. Teoría y práctica de la evaluación de las actividades físicas y deportivas. Editorial
Lidium. Buenos Aires, 1989.
Pila Teleña, A. Evaluación de la E.F. en los deportes Editorial Pila Teleña, S.A. Madrid, 1985.
Varios. Entrenamiento, rendimiento y salud. Material de los cursos de Master y Especialista
Universitarios en Psicología de la Actividad Física y el Deporte, y Experto Universitario en Entrenamiento
Deportivo de la U.N.E.D., 2001.
Varios. Planificación y programación del entrenamiento deportivo. Material de los cursos de
Master y Especialista Universitarios en Psicología de la Actividad Física y el Deporte, y Experto
universitario en Entrenamiento Deportivo de la U.N.E.D., 2001.
Varios. Psicología y deporte de iniciación. Material de los cursos de Master y Especialista
Universitarios en Psicología de la Actividad Física y el Deporte, y Experto universitario en Entrenamiento
Deportivo de la U.N.E.D., 2001.
69
•JUGADOR:_________________________________ •Fecha:____________ •Terreno de juego:______________
•Nº:________ •Ficha Nº:__________ •Posición juega:___________________
EJERCICIO: Partidos de ESTIMULOS ANTECEDENTES ESTABLES: Recibir el balón y el defensor no esta encima, y podemos percibir lo de
Entrenamiento 11 x 11 alrededor-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
DURACIÓN: 20 min.
OBSERVACIONES:_____
__________________________ ESTIMULOS ANTECEDENTES VARIABLES
__________________________
APOYO COMPAÑEROS LIBRES APOYO COMPAÑEROS CON ADVERSARIO DESMARQUE ESPACIO COMPAÑERO CAMBIO DE JUEGO
NO MUY ENCIMA LIBRE DEL COMPAÑERO DESMARCADO (presión contrario)
PASE CORTO
ALTERNATIVAS
PASE LARGO
PIERDE EL BALÓN
ANTES DE TOMAR
LA DECISIÓN
OTROS MOTIVOS
QUE LE IMPIDEN
TOMAR LA
DECISIÓN
70
CONCEPCIÓN DE LA ENSEÑANZA COMPRENSIVA EN
EL DEPORTE: MODELOS, TENDENCIAS Y
PROPUESTAS.
1. INTRODUCCIÓN.
Si tratáramos de explicar nuestro interés por la enseñanza del deporte, nos llevaría una amplitud tal, con
tantos matices y singularidades que acarrearía más de lo que este libro pretende. Creemos que el deporte, en la
educación, se merece un tratamiento serio, fuera de espíritus y filosofías que le sitúa en un lugar que no merece,
ya sea porque hay personas que creen que el deporte es todo lo que se puede hacer en Educación Física, como
al contrario, porque opinan que el deporte no debería estar en Educación Física.
Creemos que es un problema de entendimientos. Hay personas que entienden el deporte de una manera
que quizás no sea la única, es un entendimiento múltiple. Muchas de estas opiniones, las que están en contra,
aparecen por personas que no han tenido relación con el deporte, o la han tenido de una manera marginal. Por el
contrario, las opiniones a favor aparecen desde aquellos que insinúan que el deporte abarca todo y no merece la
pena hacer otro tipo de cosas.
Desde nuestro punto de vista, nada está más lejos de la realidad. El deporte es un simple instrumento,
complejo, con muchas prerrogativas, pero complejo. No se puede aislar en algunos de sus componentes sin que
deje de tener sustantividad. No obstante, y siguiendo con nuestro punto de vista, el deporte ofrece grandes
posibilidades educativas, que no todas, a la hora de la enseñanza en Educación Física (y si no, por qué hay tanta
controversia). Lo cual nos sitúa de lleno en el campo de la didáctica.
Es desde la enseñanza, desde donde postulamos la incidencia del deporte, aunque como mencionamos
anteriormente, sin quitar otros atributos, sean en el nivel educativo o en el aprendizaje. Es por ello que
entendemos que hay formas de enseñar el deporte que merecen mayor atención que otras, porque ofrecen
mejores opciones para conseguir desarrollar de forma integrada las capacidades cognitivas, motrices y afectivo
sociales del alumnado.
En las dos últimas décadas, con más énfasis que en años anteriores, se ha ido introduciendo una idea
más educativa del deporte, quizás avalada por intentar que el deporte se aleje de un compromiso social que no se
puede trasladar a la escuela, debido a su carácter competitivo, poco participativo, etc. Es el concepto de
enseñanza comprensiva en el deporte, el que ha enfatizado en una forma de enfocar la enseñanza deportiva más
cercana a las expectativas educativas del área de Educación Física, con interés por la motivación, la participación
y el aprendizaje de destrezas válidas para practicar durante las clases.
Queremos utilizar como hilo conductor este concepto de enseñanza para comprobar si estamos cerca de
una ilusión, de una propuesta empírica o de datos que vienen de investigaciones que avalen una puesta en
práctica que tenga garantías de ser viable.
1.1.- CONCEPTO DE ENSEÑANZA COMPRENSIVA EN EL DEPORTE.
La enseñanza deportiva fundamentalmente en las clases de Educación Física, ha supuesto un cambio
importante, nos gusta decir duda razonable, respecto a la forma en la que enseñamos el deporte. Es cierto que
se han venido utilizando distintas maneras de enseñar el deporte, incluso nos atreveríamos a decir que tantas
como enseñantes hay, pero aparte de modos intuitivos de proceder, se pueden identificar diversos modelos de
enseñanza del deporte, lo cual, no nos exime de preguntarnos ¿por qué unas formas de enseñanza pueden ser
mejor que otras?
En este sentido, creemos necesario caracterizar los diversos modelos que se vienen diferenciando en la
enseñanza del deporte. Algunos de estos modelos han sido caracterizados y resumidos en algunos trabajos
anteriores (Devís y Sánchez Gómez 1996, pp. 159-181; Méndez Giménez, 1999; Jiménez Jiménez 2000).
71
Asimismo, las explicaciones que matizan sus planteamientos también han sido propuestas (Contreras, De la
Torre y Velázquez, 2001). En nuestro caso, vamos a discriminar los siguientes:
Con el objeto de contrastarlos e identificar sus ventajas y limitaciones tomaremos las siguientes
dimensiones de análisis:
B) CONTENIDO DE REFERENCIA
72
73
74
Como apuntan Devís y Sánchez Gómez (1996, p. 176), los diversos modelos de enseñanza o iniciación
parecen estar mediatizados por los propósitos o fines últimos (educativo o rendimiento) y por los intereses
institucionales que arropan a cada uno de ellos (federaciones o centros educativos). Así, de la caracterización de
los modelos, se deduce que el modelo técnico se relaciona con el ámbito de las federaciones que toman como
referencia una sola modalidad deportiva y la práctica deportiva se orienta al rendimiento. Mientras tanto, el
modelo comprensivo en sus diversas opciones encaja mejor con los intereses educativos, sobre todo las opciones
horizontales que permiten una iniciación común y polivalente sin intereses de rendimiento deportivo.
Puede decirse que en el campo de la iniciación deportiva se esta produciendo un cambio de concepción,
donde cada vez se presta más atención al tipo de aprendizaje que realizan los alumnos y alumnas. Este interés
se pone de manifiesto en la idea expresada por Bruner (en Linaza, 1984, p. 21), al plantear la necesidad de
defender un nuevo concepto de aprendizaje que se exige la comprensión por parte de quien aprende y no la
mera realización de acciones que no entiende.
En relación con esta implicación cognitiva en el aprendizaje, la psicología del desarrollo, el desarrollo
motor y los estudios sobre la adquisición de habilidades han mostrado como los útiles cognitivos son más
tempranos que lo que muchos técnicos deportivos piensan, y que el conocimiento está presente desde la más
tierna infancia. Ante este hecho, cabría preguntarse: ¿Hasta qué punto es adecuado retrasar el conocimiento
táctico y estratégico de los deportes en el proceso de iniciación deportiva, dando únicamente énfasis al dominio
de la técnica? (Ruiz Pérez, 1996, p. 145). Por otra parte, y como señala este mismo autor, las investigaciones
realizadas en los últimos diez años sobre las características de los expertos y las diferencias entre expertos-
noveles, ofrecen un panorama en el que destaca la denominada ventaja cognitiva, que resalta el papel del
conocimiento y la experiencia en el deporte, conocimiento que en el experto se muestra organizado y
jerarquizado. El reto, en el ámbito de la iniciación deportiva estará por tanto, tal y como señala Ruiz Pérez (1996,
p. 147), en saber como proporcionar ese conocimiento desde los primeros pasos de la iniciación, de manera que
los alumnos y las alumnas puedan, desde el principio, organizar sus recursos cognitivo-motores para dar solución
a los problemas de juego sin tener que esperar al dominio de las técnicas.
En cuanto al conocimiento implicado en los juegos deportivos, es un conocimiento práctico o saber
cómo. Para Arnold (1991, p. 38) este conocimiento en un sentido fuerte exige dos importantes premisas: la
comprensión de los procedimientos implicados en el juego, y la adquisición contextual de las habilidades, donde
una habilidad técnica sólo tiene sentido dentro de un contexto y es en él donde debe aprenderse y donde
adquiere completo significado.
Teniendo en cuenta las exigencias cognitivas del aprendizaje deportivo, el modelo comprensivo de
enseñanza del deporte busca propiciar que el jugador acceda a reconocer los problemas a resolver y generar sus
propias soluciones, e identificar los recursos motores que ha movilizado en su desarrollo. Esto posibilitará a los
alumnos y alumnas en los deportes sociomotores, donde existe un alto grado de variabilidad, deducir reglas o
pautas de acción, a modo de autoconsignas, a partir de la evaluación de la relación entre los medios que se
utilicen respecto al objetivo que se pretenda conseguir en cada momento. Para ello, será necesario como
plantean Devís y Peiró (1995, p. 339) enseñar los aspectos contextuales y los principios tácticos de los juegos
deportivos porque son los que configurarán su entendimiento, la implicación activa inteligente y la utilidad del
dominio de la habilidad técnica. Lo que permitirá al alumnado organizar su acción de juego de una manera
intencional y adaptada a las características contextuales de cada juego deportivo, y asimismo, que puedan aplicar
estas pautas o reglas de acción a otras situaciones similares.
Por ello, consideramos que en la enseñanza de los juegos deportivos podremos afrontar mejor el reto de
promover el saber cómo en sentido fuerte desde cualquier opción del modelo comprensivo, ya que este se basa
en el reconocimiento de las capacidades cognitivas del alumnado y fomenta que estos se impliquen de manera
activa en la construcción y control de su propio aprendizaje, de manera que el sujeto llegue a organizar su
motricidad de manera autónoma.
El modelo técnico, centrado en un dominio de la ejecución antes de pasar a la táctica, ha ofrecido
garantías a unos pocos, pero tiene claras limitaciones en Educación Física, y cuando se trata de iniciar al deporte,
a la mayoría. No obstante, la enseñanza del deporte hay que entenderla también como una trasmisión de valores,
y en este caso, un planteamiento centrado exclusivamente en la representación de uno o varios modelos de
ejecución contrastados, pero con una clara incitación a la imitación, implica también un aprendizaje mimético, el
cual no puede tener ningún sentido para los aprendices, además de inculcarles un plan poco crítico y que no
fomenta la autonomía.
No tratamos de poner en duda que hay que dominar, si no a un nivel elevado, sí al menos con un mínimo
en calidad y cantidad, varias habilidades deportivas que permitan una mínima participación, pues éste es uno de
los objetivos de la iniciación deportiva. Pero no puede realizarse a costa de una exclusión de la mayoría, y sí
intentando que los alumnos sepan qué es lo que hacen y por qué lo hacen. Este conocimiento implica un saber y
saber cómo (Arnold, 1991) que hace que la enseñanza y aprendizaje del deporte ofrezca toda su potencialidad
educativa.
75
Lo que muchas veces se considera básico, desde el punto de vista del profesor para poder participar,
puede ser demasiado exigente para el alumnado. Hay que entender que la práctica debe ser la que necesitan los
alumnos y alumnas, y no la que desea el adulto.
Pero también hay que comprobar, y no darse cuenta de ello sería un error, que los niños y niñas
despliegan una imagen que está en consonancia con lo que ellos creen y comparan con otros. Su imagen puede
verse deteriorada por otras referencias, pero el profesor, cuando introduce el deporte, debe hacer ver que los
alumnos tienen distintos niveles y también distintas exigencias.
La presentación, desarrollo y afianzamiento de las destrezas deportivas, debe suponer un interés dentro
de las posibilidades del alumno. Para ello, el que sea significativo para dicho alumno implica que él o ella
comprueban que utilizan adecuadamente lo que ya saben con lo que ahora se les presenta. Con un
planteamiento exclusivamente técnico, el alumnado se encuentra sin saber para qué es todo aquello que se le
ofrece.
La enseñanza comprensiva (EC) del deporte ofrece más soluciones respecto a la participación, aunque
no parece que sí lo haga respecto al aprendizaje. Como veremos más adelante, en los dos casos (desde la
técnica a la táctica y viceversa), hay dificultades, y en los dos no parece que haya soluciones sencillas. Si
enfatizamos en una enseñanza desde la técnica es porque creemos que no vale la pena insistir en el modelo
inicial técnico, porque sus limitaciones nos hacen tomar partido por otras iniciativas, en este caso un modelo
comprensivo que será el enfoque de enseñanza desde la táctica (Bunker y Thorpe, 1982; Devís, 1990b; Devís,
1990a; Devís y Peiró, 1992; Werner, 1989; Werner y Almond, 1990); una cuarta vía dentro de éste la podemos
encontrar en el modelo integrado que permite iniciar y participar en el deporte actuando los dos elementos de
forma simultánea, aunque con equilibrio entre estos dos elementos durante la práctica (Castejón y López Ros,
1997; French, Werner, Rink, Taylor y Hussey, 1996; French, Werner, Taylor, Hussey y Jones, 1996; García
Herrero, 2001; López Ros y Castejón, 1998a; López Ros y Castejón, 1998b).
El modelo integrado (Castejón y López Ros, 1997; López Ros y Castejón, 1998a; López Ros y Castejón,
1998b) también propone una enseñanza sin que tenga que comenzar el trabajo técnico previo, sino que debe ser
desde las habilidades y destrezas básicas desde donde se comienza con la enseñanza del deporte (ver figura
2.1). Cuando se da el siguiente paso, hay una presentación de los elementos técnicos y tácticos de manera
simultánea, pero equilibrando su exigencia. Con ello se pretende que el alumno no se presente ante las tareas
con una carga tal que impida ejecuciones correctas, dentro de su limitado bagaje motriz y táctico. Cuando se
logra una superación de esta fase, el siguiente paso es introducir las habilidades aprendidas en la situación real
de juego, es decir, el contexto real. Este ciclo se repite, tal como se ve en la siguiente figura.
Habilidades y destrezas
básicas
Hay que señalar, no obstante, que muchos de los que ahora participan en el deporte se iniciaron desde
un modelo técnico, sin embargo, también hay que decir, que hay personas que no practican deporte quizás
porque se iniciaron desde un modelo técnico. En estos momentos, para poder hablar de los que participan ahora,
todavía es pronto para afirmar que se interviene más y a más largo plazo, desde un modelo comprensivo. En
cualquier caso, y como construcción educativa de la enseñanza del deporte, no asumimos el modelo técnico ni
76
siquiera para hacer bueno a otros a costa de hacer malo a éste, lo que sí creemos es que los modelos
comprensivos ofrecen más garantías de aplicación y utilización en el inicio del deporte1. La enseñanza
comprensiva del deporte fomenta, a través de la reflexión en y sobre la práctica, la relación de lo que están
aprendiendo con la ya conocido y, a su vez, reconoce y promueve la autonomía del alumnado mediante la
constante evaluación de la adecuación de los medios empleados con el objetivo a conseguir en cada situación de
práctica. Con esta forma de proceder se puede ayudar al alumno a construir conocimiento mediante la práctica
deportiva (Castejón y López Ros, 1997, p. 146).
En la EC que tiene su base y fundamentación en la enseñanza desde la táctica, se propone que los
alumnos tengan una idea inicial del deporte y de lo que se espera de ellos, para así despertar su conciencia
táctica y que ello les permita solicitar las técnicas que son necesarias para el juego (ver figura 2.2).
1. JUEGO
6. RESULTADO DE LA
2. APRECIACIÓN REALIZACIÓN
DEL JUEGO
ALUMNO/A
5. EJECUCIÓN DE
3. CONCIENCIA HABILIDADES
TÁCTICA
4. TOMA DE DECISIONES
APROPIADAS
- ¿QUÉ HACER?
- ¿CÓMO HACERLO?
Figura 2.2.- Modelo comprensivo para la enseñanza del deporte según Thorpe y Bunker (en Werner y Almond, 1990).
Veamos a continuación, por un lado, salvedades, impedimentos, y por otro, posibilidades y aplicaciones,
que tienen las alternativas de enseñanza desde la táctica e integrada.
1
Hablamos de iniciación al deporte, pero hay que decir que no existen todavía suficientes estudios para ampliar la enseñanza desde la
táctica a otros momentos en la evolución de un practicante cualquiera, sea en el nivel inicial o experto.
77
La evolución sobre cómo las HDB van mejorando se constata en las sucesivas edades de la Educación
Primaria (Castejón, 2000; Fernández García, Gardoqui Torralba y Sánchez Bañuelos, 1999). Sin embargo, la
posibilidad de que nuevos aprendizajes, combinación de las HDB o bien otras totalmente nuevas aparezcan, es
bastante más difícil. Es necesario un lento y largo proceso y las dificultades son obvias. En el caso concreto de la
Educación Física, el principal factor es el reducido número de horas, a todas luces insuficientes, en las que los
alumnos tienen escasas posibilidades de practicar, lo que hace necesario que la enseñanza tenga una incidencia
clara en el desarrollo de las habilidades.
No obstante, el proceso de aprendizaje sigue una serie de pautas, alguno más investigado y otros quizás
no tan conocidos. Como de lo que se trata es de conseguir aprendizajes motrices que puedan ser aplicados en el
deporte, bien porque sean habilidades más o menos efectivas, bien porque sean acciones que conducen a
situarse en posición de ventaja ante uno o varios oponentes, y posteriormente realizar o controlar algún tipo de
respuesta, el caso es que es necesario que ese aprendizaje se produzca en el contexto en el que se va a aplicar.
La variabilidad que se da en el deporte, necesita a su vez, una variabilidad en el aprendizaje (Ruiz Pérez,
1995; Ruiz Pérez, 1998; Schmidt, 1988). Los movimientos técnicos deben realizarse en situaciones cambiantes
para que el alumno comprenda cuándo y dónde puede llevar a cabo determinada acción, porque si fuera
necesario que una persona necesitara saber todo el repertorio técnico que puede realizar en la situación real, y
ese repertorio se aprendiera fuera de la situación real, además de necesitar un tiempo incalculable, también
necesitaría aprender el contexto donde aplicar la técnica, sin embargo, las situaciones reales suelen ser
irrepetibles, por lo tanto, necesitamos un modelo general, básico, que se puede utilizar en diferentes situaciones.
La teoría del esquema de Schmidt (1988) es quizás la que más nos ayuda a solventar la aplicación de la
variabilidad como situación de enseñanza aprendizaje, mientras que otras teorías no aclaran cómo se pueden
lograr los aprendizajes si no es en situaciones más estables.
La teoría del esquema indica que el sujeto aprende un conjunto de acciones generales que puede utilizar
en diferentes situaciones, y dependerá de cómo sean las situaciones, para que se tenga que mejorar hasta un
determinado nivel. Es decir, según la teoría de Schmidt, lo que se aprende son esquemas que pueden ser
aplicados en diferentes situaciones, aunque un modelo más refinado del esquema necesita práctica específica.
Pero esta práctica específica debe realizarse, con la variabilidad suficiente, en el contexto indicado.
Pensemos que los estudios en el aprendizaje motor ya habían determinado que los movimientos
analíticos necesitaban realizarse de manera que los sujetos tuvieran constancia de dónde iban a aplicarse. Sólo
cuando tenga que aprenderse en partes, se recomienda ensamblar la totalidad lo antes posible (Knapp, 1981;
Ruiz Pérez, 1994; Singer, 1986). Es decir, desde el aprendizaje, se establecía que era mejor una enseñanza
global para que se pudiera saber qué hacer en determinadas circunstancias. Un ejemplo es el de Whiting (1969),
que al igual que otros autores relacionados con el aprendizaje motor, nos describe cómo puede plantearse la
enseñanza de los deportes, en este caso, los deportes en los que se utiliza un móvil. Hay tres posibles formas de
intentar la enseñanza de los deportes en los que hay destrezas con balón:
a) Experimentación libre con una amplia variedad de implementos (raquetas, bates, etc.) con los que intentar
explorar la potencialidad en amplia variedad de situaciones. Bajo estas circunstancias, el sujeto aprenderá
según el criterio del profesor, que es el que se encarga de proporcionar el conocimiento de los resultados.
Este tipo de situaciones se utiliza en estados iniciales, donde la diversidad de experiencias es más importante
que adquirir habilidades específicas.
b) Un sistema de enseñanza que va desde lo específico a lo general. Los juegos de pelota se dividen en
partes, destrezas, subdestrezas y situaciones tácticas. Se hace una práctica aislada o en pequeños grupos y
se va construyendo el deporte desde dichas destrezas aisladas. A medida que se progresa se vuelven las
destrezas más complejas hasta que se llega a la situación real de juego, algo que ocurre al final de la
práctica.
c) Un procedimiento inverso que va desde lo general a lo específico. En este sistema, los sujetos son
introducidos al juego más o menos inmediatamente, y las destrezas se adquieren durante el desarrollo del
propio juego. En estas situaciones no se considera necesario intentar una práctica aislada.
Por lo tanto, desde el aprendizaje deportivo, y en fechas relativamente lejanas, se proponía (o mejor, se
afirmaba) que la enseñanza del deporte se hacía siguiendo una idea tradicional, o enseñanza por partes,
simplificada con la intención de hacerla más asequible al alumnado, o bien una enseñanza más global, sin aislar
los elementos que se desean aprender y poner en práctica.
Vemos, en líneas generales, que desde el aprendizaje motor ya se había hecho hincapié en realizar una
práctica global, aunque no desdeñaba que se pudiera hacer analítica. Cada una de ellas ofrece diferencias, pros y
contras, y en ningún caso se ha tomado como una línea única de actuación, simplemente, se indica qué es lo
mejor en caso de ir por un lado, o por el otro.
Para los educadores, la enseñanza global, desde el punto de vista del aprendizaje motor, implica una
dificultad que no es fácil de solucionar. ¿Qué ocurre cuando se plantea a un grupo de alumnos una situación
táctica que no logran solucionar porque no tienen las herramientas (técnica) que les ayudarían a satisfacer tal
78
situación? Cuando hemos planteado esta pregunta, hemos obtenido dos tipos de respuestas, una que entonces
se les enseña a los alumnos las técnicas que pueden utilizar ante el problema (y nosotros contestamos, entonces
esto es comenzar por la técnica); y la otra es que hay que plantear el problema de otra forma, más sencilla, para
que se den cuenta de la técnica o técnicas a utilizar (y nosotros contestamos que la simplificación tiene un límite,
porque podemos llegar a la descontextualización).
¿Y desde el punto de vista integrado? La solución está en la misma propuesta, hay que aprender una o
varias técnicas en la situación táctica, insistiendo en el balanceo en la exigencia de la técnica y la táctica de cada
momento. Es decir, si lo que deseamos es que los alumnos realicen una técnica con alto nivel de exigencia2, será
proporcionando un ambiente táctico sencillo, y viceversa.
¿Qué es lo que ha supuesto la EC? Muchos de los trabajos anteriores, sobre todo los que se habían
realizado en situación de laboratorio, no ofrecían garantías de aplicación en la realidad educativa, y en el caso de
los que se basaban en una práctica deportiva determinada, eran generalizados a otros sin que existiera una
mínima garantía de que esa transmisión se produjera. Lo que ha aportado la EC es buscar soluciones desde la
dinámica de las clases de Educación Física, además de la necesidad educativa de implicar a todos los alumnos,
un mayor tiempo de práctica, enfatizando en la variabilidad en los deportes, fomentando una mayor participación
del alumnado en la toma de decisiones, en la comprensión táctica, en la evaluación de ésta, y propiciando el
control su propio conocimiento..
Existen otras restricciones que debemos atender. Desde el punto de vista de la percepción y la memoria,
hay que añadir que las limitaciones que encontramos en los principiantes, sobre todo cuando hablamos de niños
y niñas en Educación Primaria, deben ser tenidas en cuenta. En el caso de la memoria (Chi, 1976), los niños
tienen más dificultades que los mayores para poder mantener más información, debido a sus deficiencias de
formación y aprendizaje, mientras que los adultos, sabemos por diferentes trabajos (Miller, 1956; Simon, 1974),
que pueden mantener esa información y además relacionarla de forma acertada si son expertos (Allard y Starkes,
1991).
En el caso de la percepción también hay que tener en cuenta las diferencias que se producen al
comienzo de la práctica deportiva y que determinan que podamos realizar una influencia en la que la táctica
ofrece múltiples situaciones que deben ser controladas. En estos casos, los novatos tienen menos posibilidades
respecto a los expertos (Abernethy, 1987; Castejón, en prensa). En este libro, el capítulo desarrollado por
Castejón trata de aclarar algunas de estas situaciones entre expertos y novatos y su implicación en la enseñanza
del deporte.
La acción táctica en cualquier deporte es muy compleja, tanto como pueda ser la técnica precisa. Como
la táctica necesita de la correcta percepción e interpretación de múltiples señales que ocurren en el entorno del
sujeto, además de las limitaciones que vienen desde el dominio técnico de aquello que es difícil de utilizar cuando
no se sabe hacer, el control automático que parece imprescindible en algunas actuaciones deportivas no es
posible, precisamente porque el alumno no tiene dominio de las acciones motrices que le permitan atender a
otras situaciones que comprometen su intervención. La percepción necesita de cierto control automático y
voluntario (Schneider y Shiffrin, 1977; Shiffrin y Schneider, 1977), y en el deporte afloran con más intensidad,
debido a las dificultades motrices (Tenenbaum y Bar-Eli, 1993).
Por lo tanto, la acción táctica inicial, y a medida que avanzan en el deporte con más o menos intensidad,
puede verse comprometida por las dificultades que tienen los alumnos para utilizar adecuadamente la percepción
y la memoria, además de no tener los recursos motrices que pueden implicarse en la práctica.
Por último, deberíamos plantearnos ¿qué tipo de aprendizaje queremos promover en el proceso de
iniciación deportiva? Sobre esta cuestión, se han realizado interesantes aportaciones. Arnold (1991) refiriéndose
al conocimiento práctico, ya planteó la necesidad de discriminar entre saber cómo en sentido débil y saber
cómo en sentido fuerte, justificando las ventajas de promover un saber cómo en sentido fuerte que integre el
conocimiento práctico y declarativo, para que el aprendizaje así adquirido permita el sujeto no sólo ser
intencionalmente capaz de ejecutar con éxito unas actuaciones sino que pueda identificarlas y describir cómo se
realizan,
explicando como se relacionan medios y fines (p. 38). Es decir, el sujeto adquiriría la capacidad de
evaluar y modificar sus acciones de manera autónoma.
También Wall y col. (citados por Ruiz Pérez, 1995, p. 24 y ss.) señalan la relación existente entre
conocimiento sobre las acciones y el control y ejecución de las habilidades, llegando a distinguir cuatro tipos de
conociendo sobre la acciones: 1. Conocimiento declarativo, 2. Conocimiento procedimental, 3. Conocimiento
afectivo, 4. Metaconocimiento sobre las acciones. Debemos de ser conscientes que estos diversos tipos de
conocimiento van a incidir en el grado de competencia motriz que se consiga en un determinado aprendizaje
deportivo.
2
Cuando hablamos de alto nivel de exigencia, se entiende que es proporcional al nivel que tiene el propio alumno, no al del modelo
de ejecución en sí.
79
1.3.- FACTORES DESDE LA ENSEÑANZA.
Independientemente de las dimensiones que ha tomado la enseñanza del deporte a raíz del modelo
comprensivo, han existido propuestas desde la enseñanza, desde la didáctica, que han permitido también
plantear una enseñanza deportiva en la escuela que no ha seguido un modelo tradicional puro, del estilo de
comienzo técnico con alto nivel de exigencia y precisión para luego pasar a la táctica, aunque sí habría que decir
que las propuestas que han asumido otra forma de iniciar al deporte no han cuestionado que haya que dominar
cierta técnica para pasar a la táctica. Desde la didáctica, sin que haya una intención específica por el deporte, que
también se ha producido, se hacen indicaciones basadas en diferentes estudios, con el fin de realizar una práctica
física más global.
Al respecto Sánchez Bañuelos (1984) señalaba las diferencias en cuanto a la enseñanza de los
movimientos siguiendo diferentes estrategias durante la práctica y las obvias diferencias entre una y otra
actuación. En el espectro propuesto por el autor se distingue desde una estrategia de enseñanza analítica hasta
una global. La primera sería la que hace que el movimiento se realice por partes para luego unirlas en el
momento final, mientras que la segunda sería la enseñanza del movimiento al completo, tal y como se realiza en
la realidad. Entre estos dos límites existen propuestas intermedias que matizan una u otra estrategia. Podríamos
decir que la primera sería una exigencia de ejecución técnica para llegar a la táctica, mientras que la segunda
comienza por la táctica.
El trabajo de Blázquez (Blázquez, 1986, Blázquez, 1995) también ha sido una propuesta que ha matizado
claramente cómo plantear una enseñanza en la que lo importante no sea el deporte, sino los sujetos que lo
aprenden. La propuesta es que se parte de una comprensión del deporte con un planteamiento global para ir
matizando a medida que se avanza, donde la reflexión que se hace con el aprendiz indican al profesor que deben
manipularse los tipos de ejercicios, las reglas, el medio y entorno social para que puedan adaptarse a sus
necesidades.
Devís (1996) hace un análisis de diferentes corrientes que han influido en los modelos de enseñanza
deportiva. Estas influencias tienen diferentes propuestas y caminos. En la mayoría de ellos encontramos que
impera un modelo de ejecución técnica inicial para luego pasar a la táctica. Es con la aparición de autores como
Bunker, Thorpe o Mahlo, cuando el punto de vista táctico comienza a tener importancia en la enseñanza por ser
el que verdaderamente determina que el practicante asuma la práctica real y no desde un prisma aislado de
movimientos que luego no funcionan en la situación de juego.
En dicho análisis se comprueba cómo han ido evolucionando las diferentes tendencias, asumiendo
protagonismo algunas de ellas, hasta llegar a una efecto más educativo en la enseñanza de los deportes 3. No
obstante, hay que hacer alguna matización.
Mahlo (1974) no propone un comienzo táctico, sino que insiste en la educación de la táctica. Pero en sí,
su modelo incita a un dominio previo de técnica para que la educación táctica sea efectiva. Por ejemplo, para
redundar en la necesidad del conocimiento específico del baloncesto, afirma que la percepción y significatividad
táctica depende de la edad, de la experiencia y de los conocimientos específicos. Más concretamente, el autor se
refiere a la formación técnico táctica que va de este modo del aprendizaje de las técnicas y de las combinaciones
gestuales, hasta la educación táctica individual y colectiva (...) La formación técnica constituye la base de la
educación táctica, pero las habilidades gestuales siguen siendo el contenido de la educación táctica (Mahlo,
1974, p. 124). Sirva como ejemplo para una propuesta que trata de demostrar que el apartado táctico aparece
como más importante, pero el componente técnico es el que inicia todo el proceso.
Hay que fijarse que los trabajos que recomienda la EC tampoco han demostrado muchos avances. Por
ejemplo, el trabajo inicial de (Bunker y Thorpe, 1982) se basó en la enseñanza del bádminton, y posteriormente,
otros trabajos han aumentado confirmaciones, pero sin que se llegue a una revalidación absoluta (ver por
ejemplo, Romero, 2000; Turner y Martinek, 1992).
Aunque anterior en el tiempo y por lo tanto, no tuvieran como referencia el trabajo mencionado antes,
Durán y Lasierra (1987) pusieron en práctica un diseño de investigación con el fin de comprobar las diferencias
que existían en la enseñanza del hockey con un planteamiento global y con un planteamiento analítico. Los
resultados se manifiestan más en el apartado motivacional que en el motriz. No obstante, supone una clara
intención sobre cómo podrían realizarse actividades que nos informaran de forma correcta sobre la enseñanza del
deporte en Educación Física.
Otros trabajos en los que se insiste en la necesidad de plantear situaciones contextualizadas, donde hay
que manipular escenarios globales para que la dificultad no sea tan grande que los sujetos no puedan participar,
han supuesto matizaciones que bien se podrían integrar más en una enseñanza integrada que comprensiva. Es el
caso de Jiménez (Jiménez Jiménez, 2001; Jiménez Jiménez, Navarro Adelantado, Álvarez Pérez y col., 1999)
que comprueba que las situaciones de enseñanza adolecen, en la mayoría de los casos, de la situación real del
juego, lo que impide que el sujeto pueda integrar los aprendizajes en la lógica interna del deporte. En este libro,
3
Seguimos manteniendo que nos referimos fundamentalmente a deportes donde existen las dos manifestaciones, técnica y táctica
80
hay un capítulo donde el autor realiza un estudio al respecto y las implicaciones que se hacen para la enseñanza
de los deportes de cooperación/oposición.
En el caso del entrenamiento, también hay que hacer hincapié por un modelo de enseñanza que no sea
el asumido, es decir, una enseñanza desde un alto grado de dominio técnico. En muchos casos, los entrenadores
son correa de transmisión de cómo aprendieron, sin pararse a pensar que esta forma de aprender y enseñar no
tienen siempre validez. El trabajo de Giménez (Giménez, Sáenz-López e Ibáñez, 1998) es un claro ejemplo de
estas situaciones. El capítulo que desarrolla el autor en este manual demostrará estas situaciones.
Por lo tanto, creemos que en todos estos casos, en los que se insiste en la enseñanza del deporte
alejándose del enfoque técnico, en el que se incidía en los modelos de ejecución para luego intentar ponerlos en
práctica en la situación real, han adolecido de un marco conceptual, que la enseñanza comprensiva ha realizado.
Ese marco conceptual, en línea con las propuestas educativas cognitivas y asumiendo una mayor participación,
motivación y aprendizajes que puedan ser útiles para el alumno, ha definido cómo actuar, pero creemos que
dicho marco, como casi todas las teorías y modelos que aparecen, no tiene por el momento, suficientes aportes
científicos como para acoger sus ideas y propuestas y dejar de lado otras posibles actuaciones docentes, las
cuales, por supuesto, tampoco es que tengan marcos de referencia sólidos4.
Aunque pueden tener algunas situaciones no suficientemente demostradas, es cierto que la EC tiene
campo de actuación en los deportes técnico tácticos. Cuando no existe esta última característica, las
posibilidades no parecer ser tan útiles, aunque se intentan modelos de aplicación a deportes individuales
(Almond, 1987), pero más como doctrina que efectivas.
Otro peculiaridad de la EC, ha sido su vinculación con planteamientos de enseñanza horizontal, en la
línea de las propuestas de Bayer (1979) y Blázquez (1986). Es decir, la identificación de rasgos estructurales y
funcionales comunes entre diversas modalidades deportivas y la propuesta de situaciones de enseñanza con las
características esenciales de estas modalidades con el objeto de propiciar el desarrollo de capacidades tácticas
comunes. De esta manera, se intenta trascender el modelo vertical centrado en la enseñanza de una sola
modalidad deportiva, y donde se busca que las situaciones de enseñanza reflejen la especificidad técnica y
táctica de la modalidad deportiva que se enseña, sin preocuparse de las posibles transferencias que se puedan
dar en otras modalidades similares.
Sí es clara su aplicación en deportes colectivos y de adversario, también hay que tener en cuenta las
dificultades que nos encontramos. En los deportes de adversario, por ejemplo el tenis o la lucha, y en los
colectivos, como el baloncesto o el voleibol, admiten un tratamiento táctico siguiendo la línea propuesta por los
autores. Pero ahora hay que implicar a los conceptos de horizontalidad y verticalidad.
En el modelo de enseñanza desde la táctica, hay tres pasos que tienen sentido en su enseñanza, estos
pasos son:
1. Una mayor implicación de las habilidades y destrezas básicas para que el alumno conozca el deporte.
Estas destrezas pueden ser motrices y tácticas.
2. Un mayor interés por la motivación del alumnado.
3. Un mayor interés porque sea el propio alumno el que busque soluciones y no que sea el profesor el
que las proporciona.
Ante estas situaciones, el planteamiento de horizontalidad, es decir, situaciones que son similares entre
los deportes y que se espera que el alumno las pueda transferir de uno a otros, parece que tienen aplicación.
El primer punto implica la enseñanza de los deportes en los que hay una base común, siguiendo una
actuación en la que las propuestas tienen diferentes ámbitos de actuación, de forma que una tarea propuesta en
este nivel puede servir para varios deportes, es decir, implica un concepto de transferencia. El segundo punto
hace que la práctica sea cercana al juego real, de manera que todos pueden participar sin que haga falta un
aprendizaje previo exhaustivo de elementos técnicos y con gran precisión en su ejecución. Mientras que en el
punto tres, se plantean situaciones que el alumno va solventando independientemente de sus limitaciones.
La verticalidad implica que las tareas ahí propuestas son de aplicación a un deporte específico. Es decir,
aquí las tareas se enmarcan en actividades que van dirigidas a que los alumnos vayan aprendiendo el deporte de
que se trate.
En ambos casos, los juegos simplificados, aquellos que tienen características similares al deporte final,
sirven como lugar de aprendizaje para que el alumno compruebe las dificultades y posibilidades que tiene de
participar en el deporte y la necesidad de aprender determinadas habilidades. Ejemplos al respecto pueden verse
en Contreras, De la Torre y Velázquez (2001).
4
Marco de referencia que sí ha tenido la enseñanza de modelos de ejecución técnica, basado en el conductismo como teoría
imperante durante décadas, en la educación.
81
La enseñanza del deporte, como todos los contenidos de enseñanza, tienen que encontrarse en una
concepción que suponga un aprendizaje duradero en los alumnos. Quizás la teoría que más aporta, en estos
momentos, las soluciones respecto al aprendizaje, sería el constructivismo (Pozo, 1993) y el concepto de
aprendizaje significativo. Las bases de estos elementos están estudiadas por diferentes autores (Antonio Moreira,
2000; Ausubel, Novak y Hanesian, 1991; Coll, 1985; Coll, 1988). Y en Educación Física cada vez es mayor el
interés al respecto (Contreras, 1997).
Pretender aunar los tres aspectos que tratamos en este apartado (el valor educativo del deporte, el
aprendizaje y la enseñaza), en cuanto al proceso de enseñanza aprendizaje, supone tener que conocer las bases
de cada uno de ellos y comprobar si tienen puntos en común.
Desde la EC se insiste en la necesidad de que el sujeto tome conciencia de los movimientos que tiene
que realizar, y además, asumir cómo se realizan, lo que desemboca en el aprendizaje de la técnica, que hará
posible una participación que supone un nuevo comienzo de conciencia del movimiento a realizar, etc. Este
planteamiento se ha propuesto en los trabajos de EC y construcción del conocimiento como el de Contreras, De
la Torre y Velázquez (2001), en el que se apuesta por una mayor integración de estos conceptos.
Es cierto, desde nuestro punto de vista, que existen verdaderas posibilidades de que en la EC se
ofrezcan soluciones a un aprendizaje significativo y al constructivismo, incluso matizado por los autores citados.
Sin embargo, creemos que hay que añadir otros factores que todavía hacen que el aprendizaje significativo y el
constructivismo sean más plausibles, como el conocimiento compartido, la enseñanza problemática, el
conocimiento procedimental y declarativo y su influencia en el proceso de aprendizaje y enseñanza, etc., que
suman más aspectos de la práctica deportiva para un aprendizaje más elaborado. En los siguientes capítulos
tratamos de ofrecer algunas soluciones a estas dudas que se han ido manifestando y que creemos que deben ser
resueltas.
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