ESTRUCTURA DEL ESTADO COLOMBIANO

En términos generales, para la administración la estructura del Estado Colombiano encuentra su

fundamento en tres grandes principios, como son la separación de poderes, el Estado unitario y la
centralización política y descentralización administrativa en los que de manera alguna coincide
gran parte de la doctrina nacional. (Publicación del Departamento Nacional de Planeación
Elementos Básicos del Estado Colombiano).

Conforme al artículo 113 de la Constitución Política, se mantiene la división tripartita del poder
público, como son la rama legislativa, ejecutiva y la judicial, pero adicional a ésta, señala la misma
norma superior que existen otros órganos autónomos e independientes, para el cumplimiento de
las demás funciones del Estado.

Por otro lado, y de forma muy precisa, el inciso final del artículo citado enaltece el principio de
colaboración armónica en virtud del cual los órganos del estado deben orientar el ejercicio de sus
funciones, para la realización de los fines estatales.

Es necesario precisar, que lo anterior no quiere significar en manera alguna que cada una de las
ramas del poder público se limiten exclusivamente a la función asignada por el constituyente, pues
para el cumplimiento de los fines estatales es necesario que cada una, en menor grado, ejerza
funciones de las otras ramas, y de esta manera garantizar un equilibrio en el sistema de
organización estatal.

Por ejemplo; el congreso de la república ejerce función judicial cuando investiga al presidente de la
república, el juez de paz, el ejecutivo en las superintendencias; además de la rama ejecutiva, la
rama legislativa, judicial y las demás autoridades autónomas independientes ejercen función
administrativa. Todas las entidades del estado tienen autonomía, no es exclusivo de las entidades
territoriales, pues los demás órganos y entidades del estado requieren de cierta autonomía para
poder ejercer la función pública.

El carácter unitario del Estado Colombiano se traduce en el hecho de existir una centralización
política y gubernamental, en la que las funciones se ejercen bajo el control político de un solo
titular, garantizando un mínimo de descentralización en materia administrativa.
Cuando hablamos de Estado unitario, en el ámbito internacional e interno existe un solo Estado
representado en la Nación y las entidades territoriales, donde éstas se encuentran sometidas a una
sola constitución política y a las leyes que expide el Congreso de la República, los decretos del
ejecutivo y demás normas nacionales de carácter general.

Así las cosas, existe en el Congreso de la República una reserva de ley en los distintos temas que
interesan a la Nación, y a nivel territorial las autoridades (asambleas y concejos) se tiene que
supeditar a lo señalado de manera imperativa por el legislador.

El Estado se rige por el principio de la centralización política y descentralización administrativa

El principio de Centralización quiere expresar que la política nacional es determinada por el centro
de impulsión política, es decir, las directrices sobre cómo se alcanzarán los fines estatales en
ejercicio de cada una de las funciones de los órganos del estado se encuentra centralizadas en un
titular, y ese titular es el ejecutivo, el cual periódicamente debe presentar un programa de gobierno,
previo a la elección para presidente de la república, y éste se convierte en lo que actualmente
conocemos como Plan Nacional de Desarrollo.

En cuanto a la descentralización administrativa, tenemos que la misma persigue otorgar un grado

de autonomía e independencia a ciertas entidades, para lograr hacer más eficiente la prestación de
los servicios públicos a cargo del Estado, pues la centralización absoluta impediría que la acción
del Estado llegara a ciertos lugares donde en igual sentido el Estado debería ejercer su soberanía,
al servicio del ciudadano.
Teniendo en cuenta el organigrama del Estado Colombiano, este posee tres ramas del poder
público que son: Legislativa (Senado y Cámara). Ejecutiva (Gobernación Nacional, gobernaciones
y alcaldías) y, la rama judicial se encuentra constituida por las altas cortes, los tribunales de distrito
judicial, tribunales contencioso administrativos, juzgados, tanto en la jurisdicción ordinaria como en
la jurisdicción contencioso administrativa.
Por otra parte, se encuentran los Órganos de Control (Ministerio público y organismos de control).
Por último, la Organización Electoral (Consejo Nacional Electoral, Registraduría Nacional del
Estado Civil).