Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El fuego de la Antigüedad clásica ilumina los claustros y la bilis negra extingue la luz del
paisaje heroico a finales de la Edad Media. En el campo de fuerzas de estos dos polos del
Renacimiento, la Melencolia I1, que en el siglo XVI inaugura la modernidad en la obra de arte,
«productor»2.
panorama del siglo XV, momento en que el comercio ya ha emergido de las estructuras del modo
de producción feudal, que había predominado desde alrededor del siglo IX. Al superar la
catástrofe de la peste negra, los reyes recuperan, con la consolidación de las monarquías
autoritarias, el poder que habían repartido desde la desintegración del Imperio carolingio. Ahora
la vida se ordena en torno a las plazas, donde están los mercados y las ferias, pero también, a lo
largo de las calles, donde se erigen tiendas y talleres (Duby, 1986)3. Y es que los artesanos se
El creciente poder proveniente de las cortes de la realeza genera una demanda de objetos
de lujo, al igual que la proveeduría para los ejércitos, que reclama el trabajo de los metales.
1
Durero, A. (1514). Melencolia I [Grabado en papel]. Karlsruhe, Staatliche Kunsthalle Karlsruhe. Recuperado de
https://www.kunsthalle-karlsruhe.de/kunstwerke/Albrecht-Duerer/Melencolia-I-Die-Melancholie-
/6ABE53364495E90C2D7B0E8D99C2B03B/
2
Benjamin, W. (2018). Iluminaciones (trad. Jesús Aguirre y Roberto Blatt. 1𝑎 ed.). Madrid: Taurus.
3
Duby, G. (1986). Europa en la Edad Media (trad. Luis Monreal y Tejada. 1𝑎 ed.). Barcelona: Paidós.
1
innovaciones en el ámbito naval. La demanda de herramientas e instrumentos de medición
decorativo. En ese momento depende únicamente de procedimientos técnicos. Pero en Italia, que
tradición traslada el interés, desde el lujo y lo ornamental, a una belleza que configura al hombre
y la naturaleza. El Humanismo impulsa un retorno a las formas clásicas, donde lo bello es casi
una ecuación.
Al norte de los Alpes, la fijación por el lujo da paso a la fascinación por las ilustraciones
que, desde la invención de la xilografía en China, antes del siglo III, hasta entonces, tenían una
función puramente alusiva en los textos, en especial los de contenido religioso. La creación de la
imprenta de caracteres móviles, de la mano de Johannes Gutenberg hacia 1450, no sólo facilitó
una producción exponencial de estos textos, sino que promovió un nuevo objeto de mercado, y
con ello demolió, a un nivel nunca antes visto, la autenticidad del producto artístico, ligada al
El epicentro de esta revolución técnica fue la ciudad de Núremberg, pues gozaba de una
comunicación entre Italia, los territorios de la Liga Hanseática, y también China. El intercambio
comercial con el país asiático le permitió albergar la primera fábrica de papel de Alemania, y
Es en medio de esta emergente modernidad que se forma Alberto Durero, quien además
de aprender el oficio de orfebrería en el taller de su padre, comienza a trabajar desde muy joven
4
Benjamin, W. (1989). Discursos interrumpidos I (trad. Jesús Aguirre. 1𝑎 ed.). Buenos Aires: Taurus.
2
con el pintor y grabador Michael Wolgemut. A partir de allí recibe el carácter de Pasión de la
cultura nórdica, en la que el gótico había ejercido un enorme peso y mantenía una impetuosa
presencia. El arte alemán se nutría del imaginario gótico flamenco, donde imperaba “(…) el
2005: 229)5, sobre todo gracias a los aportes del retrato de donante, desarrollado por pintores
como Jan van Eyck. Para el nórdico, el cuestionamiento de su contexto y su comprensión exigía
distanciamiento y la abstracción que para ese instante ofrecían por primera vez las ciencias al
arte; algo que perseguían los italianos con su afán cientifizante y estandarizante.
lo llevan a mostrarse a sí mismo en diversas obras, sin embargo, a la par continúa la tendencia de
los temas religiosos que recibe por encargo y relega las técnicas de grabado a la ilustración de
textos como las Crónicas de Núremberg (1493). En sus dos viajes a Venecia se sumerge en los
aspectos teóricos del arte italiano con los trabajos de da Vinci y reproduciendo grabados de
gestualidad del «pathos» mitológico; aspectos formales de que carecía el arte alemán.
composición, hecha a partir de una matriz de cobre, no sólo exhibe el gesto del montaje de las
sobrias formas de la representación italiana en una atmósfera patética propia del lenguaje
nórdico, sino que emancipa a la imagen de su subordinación a la página de un libro como simple
5
Warburg, A. (2005). El renacimiento del paganismo: Aportaciones a la historia cultural del Renacimiento europeo.
Madrid: Alianza Editorial.
6
Mantegna, A. (1470). Bacanal con Sileno [Grabado con punta seca]. Nueva York, The Metropolitan Museum of
Art. Recuperado de https://www.metmuseum.org/art/collection/search/361898
3
fundidas en el modo de producción económico e ideológico de su propio aquí y ahora. Pero este
Esta destrucción del aura del libro ilustrado —algo que ya había experimentado con no
demasiada timidez en 1498 con sus composiciones del Apocalipsis, asomando una liberación de
la xilografía— coincide con la destrucción del aura de la pintura, haciendo posible la renovación
del concepto de arte al liberar las técnicas de impresión del aparato gremial para su uso en una
composición que, por primera vez en la tradición alemana, se comporta como el cuadro pero
mercancía de un anónimo que recurre al procedimiento del ojo con la mano en servicio de la
Durero distingue, en la imprenta, el medio por el cual puede cumplir su ambición de ser
reconocido como genio a escala global y que su obra se convierta en un nuevo modelo, pero
del problema de la autenticidad. La paradoja del sacrificio mediante el que se ofrece a instruir y
sacralizarse como autor, conserva la fragilidad de quien se expone en cada momento a ser
profanado.
meramente técnico. De esta forma Durero comprende que el arte requiere consejo y estudio,
uso de las ciencias condujo a una serenidad idealista como resultado de la formulación de
4
singularidades no son más que reproducciones. Dentro de esta fórmula, Durero reconoce el
sentido de «variable», aquello que sólo puede provenir de lo singular y lo inmotivado, y cómo en
sostiene Agamben (2006)7, es una “(…) di-versión de las posibilidades (…)” (p. 29). El
melancólico es aquel que desespera una respuesta, el objeto de su deseo, pero se ha hecho
se cuestiona su experiencia, y duda antes de salir a cumplir su fin; a diferencia del caballero que
se va por un camino boscoso y se entrega a la voluntad de una fuerza que ha hecho más poderosa
que él mismo, como Dios o la muerte9. Esta vez la senda se ha perdido; no hay camino ni
experiencia para continuar. Quien se expone fuera del orden y está falto de consejo, fija la mirada
Así, al reducir a escombros el arte gótico tardío, que estaba a favor de lo ilustrativo
en las técnicas y formas de cada uno en pro de una revolución: el Renacimiento alemán, la
7
Agamben, G. (2006). Estancias. La palabra y el fantasma en la cultura occidental (trad. Tomás Segovia.
2𝑎 reimpresión). Valencia: Pretextos.
8
Durero, A. (1514). San Jerónimo en su gabinete [Grabado en papel]. Londres, British Museum. Recuperado de
https://www.britishmuseum.org/collectionimages/AN00027/AN00027726_001_l.jpg
9
________ (1513). El caballero, la muerte y el diablo [Grabado en papel verjurado]. Washington D. C., National
Gallery of Art. Recuperado de https://www.nga.gov/collection/art-object-page.598.html
10
Panofsky, E. (1955). The Life and Art of Albrecht Dürer (4𝑎 ed.). Nueva Jersey: Princeton University Press.