MANIFIESTO DEL MOVIMIENTO AL SOCIALISMO –

INSTRUMENTO POLÍTICO POR LA SOBERANÍA DE LOS

PUEBLOS (MAS – IPSP)
Circunscripción 14
Un espíritu recorre por todo el mundo, en donde los pueblos y naciones se revelan contra la
opresión, contra la esclavitud, contra la dominación del Capital, contra el imperialismo
colonialista y todas sus formas de expresión que han monopolizado el poder; ese espíritu que
quita el sueño a los que durante 510 años han sometido a nuestros pueblos, un espíritu que
hace estremecer las entrañas de la clase dominante, que tiene como su referente al gendarme
del mundo, EEUU, que siente que los días de su dominio está por terminar. Este espíritu es el
de las naciones milenarias, son el espíritu de la Pachamama que llama a sus hijos a liberarla
de la opresión, del pisoteo de su dignidad, es el espíritu del Tupaj Katari, de Pablo Zárate
Willca, de Bartolina Sisa y otros líderes nacido de las entrañas del ABYA YALA y que ha elegido
a sus hijos para consolidar este propósito de liberar a su pueblo.

Durante 510 años no pudieron doblegarnos nuestros opresores bajo ningún argumento, nos
han dicho de todo, indios, indígenas, campesinos de forma despectiva, nos han mostrado su
odio, su desprecio, siendo simplemente unos miserables inquilinos. Siendo así nos impusieron
sus costumbres, su cultura, su forma de pensar individualista.

El 30 de Junio los trabajadores del campo y la ciudad, expresamos en las urnas lo que
veníamos haciendo con la lucha en el campo y las calles: nuestro rechazo al hambre, la
desocupación y la entrega del país a las transnacionales imperialistas y los planes del FMI.
Derrotamos en su misma cancha electoral a los partidos de la burguesía. La victoriosa votación
del MAS, como segunda fuerza con el 21% y 35 parlamentarios que lo ha habilitado para
disputar la presidencia y el propio MIP de Felipe Quispe que alcanzó el 6% y 6 Diputados, es la
expresión electoral del ascenso de nuestras luchas, que se inscribe en el contexto de las
luchas de los trabajadores de Argentina, Venezuela, Perú, Paraguay, y toda Latinoamérica,
contra los planes del imperialismo.

La votación del MAS y del MIP, es continuidad del asenso de luchas abiertas en Bolivia desde
antes de la llamada “Guerra del agua” de Cochabamba en abril del 2000. Desde entonces las
luchas encabezadas por los campesinos del Chapare y el Altiplano, seguidas después por los
trabajadores y sectores populares de las ciudades, no solo lograron algunas reivindicaciones, si
no que en varias ocasiones pusieron al gobierno de Banzer al borde de su caída. Por eso la
masiva votación del MAS y el MIP, son una contundente victoria de los trabajadores del campo
y la ciudad y un golpe a los planes del imperialismo y sus sirvientes.

Esta victoria ha profundizado la crisis política de la burguesía, de la clase dominante y su

régimen.