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  • Dios Uno y Trino Gonzalo Lobo Mendez

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    68. (0861-60-81 idea PP HA GL61-€0-p) 11-06) eypuanangy ur ry ef “ne oe eoxducpry "OI fp x, onuarunyduino ns upspuar anb esesatuords { wsorsumue» sour ~wooua ‘omtiatueIsay, oAanNY [> UD orstions9f [J 9p ojaaaz ony anb of ootun & oats sorq [> to sesquinysia uelap anb — ous ondnauy jp ua anb 25 Js anb 07 oistiansaf so o1ues jain sand ‘earn Aap anunurese|o $9 wasandsor | “BUY [9 UD 1s ap UH { opearueyd uey sazoane soood oN, gowowesay onfpuy [2 w 88 ‘2p exueuosu> e ausue © opeunsep owuowinsop ‘eyianbvany paced 9p ois “a3 euo1aucy pp sopewos ups soperywoaosiua sojsapd 30 “YC 92) ,1,S0> woo oun 9$ & ‘opesod jp sod soper vrpfouopar ‘epaaat as ‘oxreg mud +53 4 oltpy ‘supeg ‘o2run & exapepioa so1c] fp sofena so] sod soip au so] & ourtue> [ap eLs0rsiy 8] anb ws09 BNO so ou UOIDEAyEs 3 {94 &] 9p SoLsdIs}U so110 so] sopor ap a1uaNy & ua S01C] ap ovraistw Jp Sq eUENISUD ep 1un20p 9p 021 SOIC] ap osouanstut A [9p a[gu}eU! 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Prov 8-9), ambas fuerte- Tod dad de a paternidad de Dios, dre de su jeracin de Egipto: ‘As! habla el Sefior Israel es mi mando que dejes a i hijo ir...” (Ex 4, 22-23)», Juan 10-1985, 2. mente personalizadas. Pero Dios también se formas: por medio de su «Angels, o més bien del pata indicar la presencia y a intervencién directa de Dios cn favor del pucblo clegido, por ejemplo, en la zarza ardiente: Angel del Sefior se le manifesté [a Moisés] en forma de na de fuego» (Ex 3, 2), Respecto al Espiritu Santo vemos que Dios tambien acta derramando su sp «La tierra era cao: fatra diciendo que sla presencia de! poder amoroso de Dios, simbolizado en un viento suave, 0 un soplo —el texto lo ‘en hebreo ruaj—, que se ci en desorden, muestra que vida de la criacura estin la Palabra de Dios y su Soplo. De sio, hayan visto ref del Espiritu Sanco como Pers Padre y el Hijo, en la creacién del m la Promesa del Padre: a anunciada de toda carne» (J13, (Ex 36, 26) Gran parte de la tradicién cxistiana —particularmente San Ireneo de Lyon y Tertuliano— ha visto en el relato de la crea- cin del hombre un reflejo de la Sancisima Trinidad en el plu- ral «Hagamos al hombre a nuestra imagen, segdin nuestra se- mejanza» (Gén 1, 26). Algunos escritores cristianos, en ; «infundiré en vosotros un espiritu nuevo __ ‘Facultad de Teologta. Universidad de Navara, Sa Testarent. 1 in le. * Juan Pablo. Biblia, Antiguo on edancia con igamos» la solemnidad que da rombre, como si Dios se reuniese para deliberar con la ‘antes de crear al hombre; otras la ven como re- flejo de la grandera y del poder de Dios (Otro pasaje famoso que prefigura la Santisima Trinidad es manifestacién de Dios a Abraham en el encinar de Mambré, gue le prome jo de su mujer Sara, ain siendo és de edad avanzada, y en la que / cercede a favor d Sodoma y Gomorra, «Abraham alz6.la vista y vio que tes hombres estaban de pie junto a él». Esta nuev ién de Dios a Abraham esti revestida de un caricter misterioso, co menta la Biblia de Navarra, pues los tres hombres repre li Seftor» —, como si fuese uno solo; otras lo hace e1 |, como si fussen tres —sun poco de os pies, y descansaréis bajo el rbol para que reparéis vuestras fuerzas, y luego se: pues por algo habéis pasado junto a vuestro siervo 4.5)—. De ahi nos Padres de la Iglesia hayan interpre- tado esta aparicién como un anuncio anticipado del de la Santisima Trinidad; otcos, siguiendo la tradi entendieron que aquellos personajes eran angeles’ 2. El Padre revelado por el Hijo nvocacién de Dios como padre los origenes del hecho religioso: de in pretio de Hineria Sagrada. Li Universidad de Navarra, Sagrada Biblia. Ami incidn de sexos. Dios la vivencia mis 0. Jestis revela que Dios, el Dios de Cle M. Guerea, Historia de li By s.93ys Sal 131, 2). que indica In intimidad encte Dios y su criaura ia dice también que los padre far la imagen de la paternidad y de bre mujeres Dis Trend ambien pater mana, did, Nadi spade como 93 re suyo en sentido estricto los hombres son elevados salvadora de Jest. de Jacob, es p Iijos de Dios Dade por Es preciso anotar que en el Nuevo Testamenco la palab : ade» como primera Persona de la Sant sima Trinidad, exceptuando seis veces que se refiere mente a Jesucristo. que Jess hace de Dios Padre la intetizamos a Dios Padre En el Discurso del Monte, mente Padre de todos los hombres. fos, quienes no pron: por temor. Mas s es en su providencia y misericordioso. En las palabras de Jestis hay continuid: sfanza del Antiguo Testamento, pero hay tambi zosa novedad: Dios no sélo es el Padre del pueblo elegides J siis confirma que el Dios de Abrahin, de Isaac y de Jacob es también y de modo definitivo Padre amoroso de cada uno de los hombres. Destacamos estas frases de Jesis en el Discurso del Monte: Para que sedis hijos de vuestro Padre que esta en los cielos» (Me 5, 45); «sed vosotros perfectos como vues tro Padre celestial es perfecto» (Mt 5, 48); «ora a tu Pa: Esta revelackn es sonpren nel nombre de Cf. Comité para el Jubileo del ano 2000, Dis, P ae. pig. Sy 8. 94 é tendis necesidad, antes de que se lo |. «Vosorros, orad asi: Padre nuestrov (Mt 6 9); asi les perdondis a los hombres as, también 0s perdor tro Padre celestial las (Mr 6, 26 sabe vue que de cod eso estdis necesitados» (Mc 6, 36) nies Padre que estd en los cielos dard cosas buen dan» (Me 7, 11) prende que las gences sen guieran a Jestis, qui revelado a los pequefios [...] Todo me lo ha ent } Todo m entregad mi Padre, y nadie conoce al Hijo sino el Padre, ni nadie conoce al Padre sino el Hijo y aqucl a quien quiera revelarlo» (Me 11, 25-27). r. Este pasaje es considerado por rodos los ¢ i por todos los especialistas como pital imporcancia, pues en él Jesus da a conocer a sus dis 95, {pulos que Dios no es solamente el Padre de Israel el P sino umi Padre». Precisamente por esto smaba a Dios su Padre» (Jim, 1a Jesis, porque Padre conoce al Hijo; @ quien ha en- ablar a los hombres y «lo ha encregado: an la palabra de Dios! ica com el Padre «El que cree en mi, no cree (Jn 12, 44). «Yo no he hal mismo, sino que el Padre que me envié, E me ha orde- ie decir y hablar» (Jn 12, 49). «En que el Hijo no puede liacer nada por si mismo, sino lo que ve hacer al Padre; pues lo nado lo que tengo verdad, en verdad 0s di "Cf K. Adam, El Grito blo I, Creo on Jeera, ac, pig. 83 YS que El hace, eso lo hace del mismo modo el Hi 19). «Pues como el Padre tiene vida en si mismo, dado al Hijo tener vida en si mismo» (Jn 5, 26). «El Pa- dre que tiene la vida me ha enviado, y yo vivo por el Padre (Jn 6, 57). En plena sintonfa con esta revelacién, Jestis manifests pi- blicamente su identidad con el Padre en la fiesta de la Dedi- habjan subido a la fiesta: «Si et eres el Crisco, dinoslo clara- mente» (Jn 10, 24). Jesis les respondié: «Os lo he dicho y no creéis; las obras que hago en nombre de mi Padre son las que dan testimonio de mi. Pero vosotros no creéi 25.26). Termina esa respuesta afirmando con tod: su identidad con el Padre: «¥o y-el Padre somos uno» (Jn 10, 30). «El Padre esti en mi y yo en el Padre» (Jn 10, 38), Este eYor de Jes Yor de Yahweh cuando se rev arza que no se consume (cfr. Ex3, 14). ) Jesis lama a Dios «Abba, Padre miow (Me 14,36) «Abba», Antes de su pasié hhuerto de Getsemani a orar. Toma con: Ya Juan, San Marcos conserva la expresidn aramea «Abba» con la que Jestis invoca a Dios, expresién que sera recogida por San Pablo (cfr. Gal 4, 6; Rom 8, 15). En Israel nunca se habia in- Yocado a Dios con este vocablo’ al designar a Dios de Se modo, utiliza el lenguaje Familiar e intimo con el que los ——— Cl J. Gnitha, El Evangelio sein Sem Mares, I, pig. 300 ys. muerte, Jestis va al Pedro, a Santiago 7 nifios llamaban a sus padres —padre que en su aba padre en se dotal Jestis pide a Dio: I, Jestis se presen Venid, benditos de mi Pady tivo que Jest diseipul expr tefervse a Dios le lama «i Padre» (Me discipulos a llamar a Dios «Padre nuestr modo Jess subraya la exch Dios, distinguiendo la drado eternamente por el Padre, de pate! fos hombres, que es don alcanzado para nosotros por Ja acci redentora de Jestis. Incluso después de su Rest Vete donde estén mis hermanos ¥ dice a Maria Magdalen: 1 quedar impresionados de ese trato tan intim ios la palabra Padre para invocar a Di En la oracion (Le 23, 46). Y, una ver resu «Yo os envio al que mi Padre jén «nuestro Padre». Por el conte: jad de su relac rernidad de Dios sobre Jest, enge re a, Je diles: “Subo a mi Padre y a vuestro Pade, a mi Dios y a vuestt® Dios» (Jn 20, 17). ‘Asi, pues, «pot medio del Hijo (cfr. Hebr 1, 2) —airma Juan Pablo II—, Dios se ha revelado en la plenitud del terio de su paternidad. Sélo el Hijo pod isterio, porque sélo “el Hijo ¢ 11, 27). “A Dios nadie lo ha visto jams: 98 jo conoce revelar esta Padre” (Mt | Dios Unigénit®® el que esté en el seno del Pad: (Jn, 18)0"4, I mismo lo dio a conocer” 3. Ladivinidad de Jesiis en el Nuevo Testamento Jesucristo, al revelar al Padre, se ha manifestado paralela- jo consustancial al Padre. La pa- teenida y a filicion divina estn en intima con acién En tre sf dentro del misterio del Dios Uno y Trino; son inseparables, Los textos napa tior, al revelar la cipulos confiesan importantes ©) Jesis adolescente manifesta su divinidad ido en el Templo de Je- ts 35 se centta en el didlogo de Jesis con su Mac re: «Al verlo se mara le dijo su madre: "Hijo, por Qué nos has hecho esto? Mira que tu padte y yo, angusrnder ff buscdbamos”. Y dl les dijo: “Por qué me buscabais? No sa, Pat que e# necesario que yo esté en las cosas de mi Dadre™ llos no comprendieron lo que les dijo» (Le 2, 48-50) ste relato nos muestra que Jesus, ala edad de dove afos, ia de que el Dios al que habfan subido a celebrar ln Pascua, es decir, el Dios de Abraham, de Issac 23-10-1985, 3, y de Jacob, es su Padre en sentido estricto", Ma < dow a los doctores y de sus res- do y pregui 2, 46), quienes estin vadmitados de ass (2, 47). También qued: admi ri wellos no comprendieron lo que les dijor (2, 50). Pero nos da la clave para entender la revelacidn de Dios, techat lo qu no comprende con si intligene idu ‘Mari que jue piensa en ello, pide luces a Dios dice su prender su significado. San Lucas n daba todas estas cosas en su corazs b) Jess se lama «Flijo del Hombres bre» del libro.de-Daniel, para expresar pr aftentas de su pasi6n y para anunciar su triunfo escatolégico de icio final. En el texto se des- vela Ja divinidad del Mesias prome he aqui que con como un hijo de hombre. Avanzé hasta fue llevado ante dl. A él se le dio dominio, dos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieron. Su dominio es un doi su reino no serd destruido» Che Com roy de ala Padre, Su comporamiento ys pals vidoe” perfecto, implican una aucoridad que supera la de los antiguos p is « slo a Dios, Jeais tamaba esta aucoridad incomparsl a su glor y Hijo del Hombre, entonces conoceréis que Yo soy, i como el Padre me ensei que su welevacidno en la cruz con bandonar Judas el Ce Jestis: «Ahora-es glorificado el Hijo del Hombre y Dios es gl tificadoend » por ejemp! licodemo, miembro del Sanedrin de Je pasién, muerte y resurreecién (Mc 8, 31-33), al de Caifis (Mc 14, El de ellos, le di perdonados” |. yrvere atc Exte texto destaca con fuerza el poder divine de Jestis de perdonarlos pecados, demostrando tal poder con la cu in duda a confesidn de Jesis ante el Sanedein, pues 3s sacerdotes y todo el Sanedrin buscaban contra Je- tun testimonio para darle muerte, y no lo encontraban» (Mc 101 14, 55). Jestis permanece en silencio ante las acusaciones de los falsos testigos, pero confiesa que es el Mesias ance la pregunta que le hace el sumo sacerdore: «gBites tel Cristo, el Hijo del Bendito? Yo soy, respo Jesis,y veréis al Hijo del Hombre sentado a la diestra del Poder y venir sobre las nubes del cielo». El sumo sacet- dore se rasga las vest Acabiis de oir la {ee} todos ellos sentenciaton que era reo de asfen 6) Jestis manifesta su divina preexistencia: «Yo soy» jene de su misién divina de salva- rencia como La conciencia que Jes cin implica la conciencia de su divina preesi Hijo Unigéniro»". El que «se hizo carne», es deci el tiempo, es desde la eternidad el Verbo mismo, el Dios que cen el seno del Padre» y por quien «todas las cosas fueron hhechas» (Jn 1, 1-18). Jestis declara esca preexistencia o eterni dad utilizando el nombre «Yo soy», igual que siglos antes, al pie del monte Horeb, habia dicho Yahveh a Moisés cuando le preguntaba el nombre: «Yo soy el que es» (Ex 3, 14), signifi- cando que Dios es el Ser supremo en sentido absoluro, pleno y etemo, y que no depende de ningtin otro ser. Después de perdonar a la mujer adiiltera (cft. Jn 8, 3-11), Jestis dice: «Yo soy la luz del mundo» (Jn 8, 12). «Yo soy el "6 Chr el andlisis y comentario de J. Gnilka, en El Evangeio seein Sart Marcos, I, oc pig 322 y st "Ch K. Adam, EI Crit de nuestra fe, ou pig. 166 y 3. 102 que da testimonio de si mismo, viado, rambies tros sois de aba el Padre, que me ha en- a testimonio de mi» (Jn 8, 18). «Voso- Yo soy de arriba [...] si no credis que en vuestros pecados» (Jn 8, 23-24) yais levantado al Hijo del Hombre, entonces conoceréis que Yo soy, y 4 sino que como el Padre me ens blo» in 8, 2 ‘Antes de que Abrahan naciese, Yo soy» (Jn 8, 58). de que sus oyentes entendicron que Jestis mismo que era Dios, como el Padre, es que m creyeron en J n de Judas: «Os lo digo desde i 2 que cuando ocurra ue Yo soy» (Jn 15, 19). Poco después les dice: «Sali dal Padee y vine Poca I Padre» (Jn 4) El Padre confirma la divinidad de Jestis se palabras de Jess sobre su fliacién divin han sido con- firmadas por el Padre en dos momentos especialmente solem- la Transfiguracién en cuando Jestis sali do» (Mt 3, 17). El ticulo y unido a la expre Hijo mio», normalmente se refiere a un precedido por el «mi Hijo» 0 « 103 hijo tinico™, En la Transfiguraci6n de Jestis en el monce Tabor, poco antes de su pasién, el Padre dice: amado: escuchadle» (Me 9, 7). La Transfigu ene a ser una llamada a seguitle por el camino de la cruz biendo que tras la muerte cién del Hijo de Dios"”. ©) Los discipules proclaman la divinidad de Jets Durante la vida historica de Jesis ls discipulos fueron des cubriendo progeesivamente la divinidad de Jests y la procla- ciendo: porque no te ha revelado eso nila carne ni i Padre que esté en los cielos» (Me 16, 16- 17). en la que proclaman a Jesis como Hijo de Dios. Bsa confesién no’es el resultado de un desarrollo tardio en la Iglesia primitiva, sino que esti en el corazén de las més antiguas confesiones de fe: Jesuctisto, «constituido Hijo de Dios» (Rom 1, 3), «siendo de condicién divina... se anonadé a si mismo hasta la ™ Chr, por cjemplo, Gén 22, 2.12.16, que se refiere a Isaac, wu nico Chi. CCE, 535-537. ka, El Evangelio segin San Marcos Il, oc, pp. 33-45. Cf Che J CE, 554.556. Chi, CCE, 426-429. 104 muerte de cruz. Y por es0 Dios lo e ip 2,6.7.8.9). ible» (Col 1, 15). «En el habira ida conpersmencs (Cal 4, Revelacién del Espiritu Santo El Hijo de Dios nos ha revelado cambi dado a conocer: sona divina: Al mismo tiempo, el Espi 0 y; por medio d Padre no le nocer el pues «nad: chos exegetas que esa 4) Los Nombres del Eipritu Santo La palabra «espiritu» aparece desde las primeras paginas de ia: wel espititu de Dios se cernfa sobre Ia superficie de las aguas» (Gén 1, 2). El téemino hebreo «raj se traduce por wes- 2 Jess os Apostoles: Jens or (fr. 430-455) OciieMateoSeeorRcsra, El mitered enero, uc pg. M15 a, 2, pag ys, 105 apnewnas y rirualidad es atributo esenc a (Jn 4,24), varios nombres ¢ lo, en Me 10, 20; Expiritu de Jestis» en Hechos 16,7. Todas estas expre 1n que el Espiritu Santo procede del Padre y del Hijo. Para ficadora sobre los hombres, recibe prin- Dice Juan Pablo I gu yente el Nuevo al Ser Testamento. mismo de Dios, con el Padre y el Hijo. Son numerosos os textos, especialm: de San Juan, que ponen de relieve este hecho: de s del discurso de despedida de Cristo a Cen do particular los p Sefior, el jueves antes de la Pascua, durante la al Padre y os dard tto Pariclito para que esté Yo rogat ‘con vosotros siempre: el Espiritu de la Verdad> (Jn 14, es mucsto Abogado y spn Si se da ida Biblia en luge revels Buns dre (fe UJ. ‘Abogado 0 Defensor que dela Sancisima Trinidad. Sagr 0 de 13-11-1985, 4 16-17). co que el Padre en- odor (Jn 14, 26), ‘Cuando venga el Paricliro que yo'os envineé de parte 1 Espiricu de la Verdad que-procede del Padi P d iro tres Promesa del En la tercera (Jn 15, 26-16, 14-15) Jest Juan Pablo TI comenta los text tado: cextos evangélicos citados arriba de este modo: Juan Pablo I, 85, 3. 2% “eBste texto, tan importance en cuanto sintess explcita es considerado hoy por la mayorfa de los exegeras como un vest encl que se ictica bautismal de prderica id Fs gulada por el Esp texto no representa novedad al jindptiea y de todo el Nuevo Ti directos de Je: Esp s, los Apéstoles, fo 1 Santo desde Pentecostés A) Los escritos apostélicos La revelacién de Jests sobre la Sant cexpresada en algunas cartes apostél de San Pablo: idad es reco- «La gracia del Seftor Jesuctisto y el amor de Dios (Padre) y la comunién del Esp: tros» (2 Cor 13, 13). Hay diversidad de dones, pero el Espiritu es diversidad de ministetios, pero el Sefior es diversidad de acciones, pero Dios (Padre) es el mismo, que obra todo 1 Gor 12, 4-6), «Bendito sea adre de nuestro Sefor Jesu: fuisteis sellados con el 1,3-13). esto que sois hijos, Dios envié pirieu Santo prometidor turgia, testi- meras comunidades cristianas en la Sant inidad en cl Nuevo Testamento, son muy oportunas esta is de Juan Pablo Il: «E] Nuevo Testamento contiene plenitud de la revelacién trinitaria. Dios, al revelarse en Jesu- cristo, por una parte desvela quién es Dios para el hombre y, por otra, descubre quién es Dios en Si mismo, es decir, en su vida intima, La verdad “Dios es amor" (1 Jn 4, 16), expres en la primera Carta de Juan, posee aqui el valor de clave de veda. Si por medio de ella se descubre quién es Dios hombre, entonces se desvela también (en cuanto es posible qu na lo capte y nuestras palabras lo expres quign es El en Si mismo. El es Unidad, es decir, Comunién del y del Espiritu Santon”. © Juan Pablo I, 116 Capitulo V HACIA LA FORMULACION DOGMATICA DE LA FE TRINITARIA y fue un elemento a de los hombres al nuevo ‘omprensign de revelido, ante todo, por la ac para salvamnos del pecado: el Hijo se entrega al Padre hasta a icado por la Resurreccién y la 0 al Padre al Espiritu Santo. lamada economia de la salva- cion— nos hace ver, una vez més, que la revelacién del Dios Uno-y Trino no es-una-cuestidn para ilustrar simplemente iscurso de 9-10-1985, 5, en Creo en Dios Padre. ne. nuestro conocimientoy sino que se-dirige-especificamente a fa viday en conci evangelizadora del cristiano en el: mundo. La contem| dela T a substancia de nues Hemos sido creados dos prec P tiempo nos muestra que el desarrollo progresivo del conoci- id no se debe lectual sobre las ve profunda y eficazmente en No cabe d mente las verdades revel que los Th «Se debe concluir que el cud de la evelacién sobre la Santa T ia ha estado desde el principio en la ratz de comunidad cristiana, por medio del bautismo y de la liu Simulténeamente iban las reglas de la fe, con las que nos en- contramos abundantemente tanto en las Cartas apostélicas, como en el testimonio del Kerigma, de la catequesis y de la oracion de la Igles ‘A continuacién rescfiamos cl desarrollo histérico de la ilus- «racién racional del misterio del Dios Uno y Trino que intenta- ron algunos estudiosos y pastores, pero no todos acertaron. Ante los errores enunciados por algunos, el Magisterio, asis- 521 yss3 Mateo-Seco, ac. pig. 146 y sido por el E . formuld progresivamente la doc- trina de fe de la Iglesia. Como veremos, no se trata de res un problema de matemiticas—cémo uno puede ser igual a tres— sino de ilustrar racionalmente la verdad revelada de que hay tres Personas distincas en una sola-nacuraleza divina; se iterio de fe para el que nuestras palabras son st- ivadas, 3s textos de las Cartas aposté- :nzos como doxologias ndida proviene de la segund: ios: «La gracia de amor del Padre y la comunién del Espiritu Santo es- todos vosotross Algunos textos que se citan a continua ineos o incluso anteriores a los Nuevo Testament, Este hecho i de los escritos que, sin formar parte de la Sagrada Escritura, ex- presan gozosamente la fe trinitaria que vivian los pr 120s y las tradiciones procedentes de los Apéstoles’, n son contempo- ros del Didajé, Didaché o Doctrina de los Doce Apéstoles Es uno de los primeros escricos cristianos, que recoge mate- ales de diversa época, Suele fecharse su composicidn antes del aio 70 y, en todo caso, en la segunda mitad del siglo I. Enlaza con la predicacién de los Apéstoles y en este libro se pone de ‘anifiesto la fe rinitaria de la Iglesia primitiva y su clara ex- Presién en el sacramento del bautismo, que se administraba + Misal romano, Rios inicials. * Chr. Mateo-Seeo, ac, pig 146 y 4 Rovira Bel $0, 26, pl 533 ys 119 ordinariamente por inmersién en los sfos, aunque se admit también por infusién derramando agua sobre a cabeza mo, bautizad de esta manera: Después y del Espiricu Santo, en agua viva , bautiza con otra agua. Si no puedes waalo con agua caliente. Y es en el nombre del P: Carta a los Covintios de San Cle El papa Clemente I, tezeer sucesor de San Pedro, escribis poco antes de! afi0 96 una carta a los Corintios en Ia que en- mos la fe erinitar tendré! -«Aceptad nuestro consejo Porque vive Dios ue arrepent co y el Espi que con senti: cién, sin echarse atris, obra mientos dados por Dios, ése encre el ntimero de los salvados por Je del cual a El la gloria por los siglos de los siglos. Am En la misma carta del papa San Clemente encontramos el guiente parrafo de fe trinitaria en el que se nos ensefia que isterio eclesial se jerce en obediencia a Cristo: «Los Apéstoles nos predicaron el Evangelio de parte del Sefior Jesucristo; Jesucristo fue enviado de parte de Dios © Diddajé,7.1-3, en La Trinidad en ls Padres de la iglesia, oc. pig. 28. 18 Didajécontiene normas morale, licirgicas y de or i race que su origen es sirio pales San C no, Carta a ls Corin 0s, 6, pag. 121 y 58,25 ef, Padres Ap 120 (Pade). Asi pues, Cristo de parte de Dios, y los Apésto- les de parte de firmados en la certidumbre en el seno de iedras del templo del Padse, dispuestos para la edi- de Dios Padre, elevados a lo alto por la mi de Jesucristo, que es la cruz, y ayudados del Esp Santo que es la cuerda. Vuestra fe es la el camino que os conduce a Dios EL Pastor de Hermas Este libro, escrito'en su primera parte, probablemente, comienzo del siglo I, y a segunda entre los afios 140-150; per- tenece a Ia llamada literatura apocaliptica judia. En el encon tramos, en el primer mandamiento que recibe Hermas, trafo que confiesa la existencia de un Dios tinico: «Ante todo, cree que existe un tinico Dios. El ha creado y ordenado el universo; ha hecho pasar todas las cosas del dre Apouslica, 0. bo in 9 en Paes Apostion 121 rin de San Policarpo carta escrita en 156 por un cristiano ny de Esmirna, se describe el martirio de S, ecutrido unos meses antes. El-autor pone en k taria, es de +Sefior Dios omnipotente: Padre de tu amado y bende- ido siervo Jesucristo, por el que te hemos conoci Dios de los angeles y de las potestades y de toda cuerpo, en la incortupti Yo te bendigo y tc glo ccual sea dada Santo» in marcado cardcter pastoral. Van diri- gidos a fortalecer la fe de los cristianos en el Dios sea en el cién senci y honda de los primeros cristianos a la Trinidad. No se encuentra en ellos ninguna teflexidn teolégicay ni-nin- gtin afin apologético, sino la ensefia: lateo-Seco, 0. pig nos se encontraron con culturas iadas. En Grecia predominaba | perio que ya es pueblo. Yen Oriente habi n sincretista. La mas poderosa de es Ja primera embestida doctrtal, el Padres dela Iglesia desenmascararon los refuraron desde la revelacién y con argume «este modo dieron origen a la prime 6 into de Dios, San juan y San Pablo ablo para expresar que el c sobrenacural es Cristo: «Esta es Dios verdadero, y a Jesuctisto, a quien Ti has enviad: 4 3). ¥ San Pablo dice: «A uno se le concede por el Espicitu pala- bra de sabidur » (1 Cor 12, 8) nos, la agnosis» s, por tanto, un conocimiento sobrenatural que procede de Dios; de que los autores hablen de la existencia de una legitima gno- que te conozean a naria de Tealogta, voce 3 y ss Moling, Los pig. 7 y's. enon y osc Padres dela gli. pe cropocént medio de su vari trismo: estima que as del ser st estado inicial. 2) Dualismo de proce le entre el espirin blas: la materia no puede proc so presi .y decia aceptar n eoerecta y profunds; un nivel mis simples y paecidas a ls cr tere orn an li desde deem 6,0. pig. 143, ‘Segin Teevjano, dad inferior, de un dem pore nto de ideas astrolégicas y esotér Jos astros infh el mundo y c hombres. 4) Revelacin: descenso de ria, para despertar al-hombre de bre autoconciencia de defensa de y San Ireneo de e de cia de un ser supremo, mutable, perfecto y tinico creador de todo lo la Trinidad: «Los cristianos toman su origen del Seftor Jesu- isto, Este es confes: u Primera apologia, ex Roma haciael muestra que el dios que los filésofos griegos concibe ide idre de la reudes, que no tiene co En San Justino ene los imeros balbuceos teoldgicos sobre la Sant wero, Pa Atendgoras (+ h. 177) ria al defender |: nos de ateos: y su distincién San Ireneo de Lyon es el tedlogo més importante del Oriundo de Esmirna (h. 130), fue disci en el I77 yas presbicero de Lye 200. Refut6 las fantésticas especulaciones de los gnésticos sobre tun dios que se degrada en emanaciones, pig, 423: el Vives, ac, pig. 89. entero. Es ¥ que nos res apologistas nos enco Brupo de grandes tedlogos de ln escu Mos con wn e alejandrina, que pro- Fndizan en laexplicacinsistemitica y ane de toda la — 3 $29 Irenco de Lyon, Adverts haere, en Vives, ac 00, 2, pig de | Ibidem, 5, 20, en Mateo y Origenes. ‘A.comienzos del siglo III Clemente de Alejandria (+ 211/215) tunicidad de Dios frente al politeismo pagano; para le brindan las pruebas de (185/255) sucede a e en la escuela de Ale- nsidera la existencia de Dios como una verdad ase al conocimiento del mal no proviene de Dios, sino de la En lo reference a la Trinidad, Origencs la considera en el marco. de la economia de la salvacién: el Padre es el creador y principio de todas las cosas et Logos ¢sel mediador: el Espl- tu Santo esté presente dondequiera que hay santidad. Frente alos gndsticos afirma que el Hijo no procede del Padre pordi- Origenes, Contre C ig, 160 ys, 44, en Vives, 0, pig, 256: eft. Trev 3, en Vives, 2 pag. 258. {4 en Mateo-Seco, 0 pig 186. sino que procede ude una gene! , aoe como el resplandor v por esto, no-hubo momento en el que existiera. Taml eae ta ahora no he hallado pasa} guno de las Escrituras que sugiera que el Espiritu Santo sea un ser creado westd eternamente con el Padre y el el Hijo existe siempre, existis y exis unicidad de Dios se fue impor chambiente cultural: Qued6 clara fr zu pobl seno de-los . patte debido a la propia profundi eorciia 9 sompinetarnbids, dabidcealadglin losofia y de unos términos que lo explicasen adecus- amen Algunes pst lf defen de un ad.de Dios, algo que aparecia tan evidente y racional, que su- propios crist dad del mister deuna 2,4, en Vives cw pig 264 dom 13.3 Vises, aca pig Ae ® Origenes, Com, ee * Juan Pal dad is profundo misterio dela fey tambign a 2 pues la posibilidad de interpeta- eas Se tabs deiner" conctamentee uno “en Ia terminologi del sc", deci, de época los conceptoz 129 idad de personas-en aras defendieron la trinidad jidad de Dios. frieron la tentacién de sa de launidad. Otros, por divina de tal modo que de hecho destruian la Entre los primeras e pretende defender posible admitir la crinidad de personas. El vocablo «monarquia- mo» se debe-a Tertuliano, quien agrupa bajo este los que, al defender la unidad de Dios, caen en el error de ad solo monarez” ciren Dios una sola persona, mo presenta dos caminos: el adopcionistay el modalisa a) Monarquianismo adopcionista. unidad de Dios y la distincidn personal entre el P pero para defender la unidad no ve otro camino dad del Hijo. En tal caso, Cristo, el Hijo de Dios, tend aque ser un hombre que recibi nidad divina al descender sobre élel 1 de Dios: resar que Jestis seri es decit; por Segiin San Ireneo de Lyon, los. tianos judaizantes, decian en tor un hombre «elegido por Dios» tun «mero hombre» engendrado por Mat virginalmente. Segiin el historiador Eusebio de Cesdrea™, el primer defen- sor de la teorfa adopcionista fue Teddoto de Bizancio, disc adre y el Hi ga adop- re y amorosa del Padse. grupo de eris- 0 que Cristo fue el mayor de los proferas, pero y José, no nacido y otro, que e lo que quicren estos superficial hs lateo-See0, 2, pa, papa San Vicror yy padie de esta aposas ode ios pine oes 1, 5, 28, 6, en Mateo-Seco, 0. 130 pulo de Valentin y t ¥ te lo I, Para “Teédoro, Cristo fa un hombre comtin, nacido de la Virgen it edynamnis» 0 fuerza divina el Espiritu Santo sobre él en el Bautismo. Esea d aplicado al Para esto afirmaban que el Verbo era 1os», que nos revela este mist os teoigics, ox. pig. 131 gunta squés es, «qué s abra persona responde a la pregunta aleza dice relacién a nuestro abrar; piedras, ni rboles, ‘mos y lo que podemos hacer de acuerd ejemplo, podemos pensar, pero no pod rismos. La persona se ha definide como ssu decidir fuestras persor apacidad de pensar y de Por nosotros mismos y que somos los sujetos de to ‘ciones, sca pensat, decidir o correr’ azn de que Dios es espititu, Arr lectual de Dios Ia genera hombre, al conocerse a si mismo, produce una imagen in sconcepro», es decir, una «idea concebidar, que 10 «verbumn»es llamada con frecuen- terior. De este modo, se aplica ala generacién del Joel término «ancepto» eterno y Verbo interior de Dios. La “plicacién que dan los Padres de la Iglesia s a siguiente: Dios, — Che Sheed, EJ, Toop y s Herder, Barcelo Verbo-Hijo, que ¢s Dios Padre, como el que engendra, e Hijo, com 8. La divinidad del Espirie nto Después del Concilio de Nicea hubo un periodo de luchas a negar fambi n grupo enemigo de Atri 362), obispo de Constant fe que el Hi Padre por haber sido todas las ¢ creado a este grupo hechas por el Hijo, por dad y por cl eumatdimacos 10 de ellos era “desde el pr cpio” (I Jn 1 35 tres, Si tte abajas oso decirte que San Basilio de Cesérea (+ 379) es el primero que escribe un tratado «Sobre el Espiritu Santo» en el afio 375* y perfila la mer Con lio de Constantino- de Cesires, 1 ys cursos sobre el Esprieu San de Jerusoén en su catequsis del ao 350, Di 375. San Grepoto Naciancenoha Un estupendo resumen de la doctrina de San Basilio sobre el Espirin Pablo Il: «Es el Espirieu dado a todo el que se bautiza quien infunde en cad: carismas y les recuerda los preceptos del Seftor; es el Espi coda la Iglesia y la ordena y vivifica con sus d io plantea la divinidad del Es Iglesia; en concreto, desde | mandato de Me 28, 19. El ma Padre y del F del Hijo en el Espiricu Santo» y otra q Padre con el Hijo y con el Espiritu Sant * Juan Pablo I, Prtre Ecclesiae (Canta Aposs ig. © Cli Sam Basilio, Sobre e Espiritu 142 (a spi £0 sigue el amor, Cuando cono £0, si este algo cs bueno y perfec despierta en nosotros un amor proporcicnado mor que procede de nuestro acto de v mpulso hacia el ser amado, una fuer 0s lleva a el, acto infinito y

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