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“AÑO DEL BUEN SERVICIO AL CIUDADANO”

MATERIA : HISTORIA, GEOGRAFÍA Y ECONOMÍA

TEMA : VIRREYES DEL PERÚ

PROFESOR : EMILIO VILLAVICENCIO GALLAC

GRADO : 3ro

RESPONSABLE : MARY CLARA BARDALES COTRINA


ÍNDICE
EN EL CAMPO ADMINISTRATIVO .................................................................................................. 1
EN EL AMBITO ECONOMICO ......................................................................................................... 1
EN EL AMBITO COMERCIAL ........................................................................................................... 1
CONQUISTA Y CREACION DEL VIRREYNATO.................................................................................. 2
ORGANIZACIÓN DEL VIRREINATO ................................................................................................. 2
BIOGRAFIA DE LOS 40 VIRREYES DEL PERU:....................................Error! Bookmark not defined.
1° BLASCO NÚÑEZ VELA ............................................................................................................ 4
2° JOSÉ ANTONIO DE MENDOZA CAAMAÑO Y SOTOMAYOR ................................................... 5
3° ANDRÉS HURTADO DE MENDOZA ........................................................................................ 6
4° DIEGO LÓPEZ DE ZÚÑIGA Y VELASCO ................................................................................... 7
5° FRANCISCO DE TOLEDO ........................................................................................................ 8
6° MARTÍN ENRÍQUEZ DE ALMANSA ......................................................................................... 9
7° FERNANDO TORRES Y PORTUGAL ....................................................................................... 11
8° GARCÍA HURTADO DE MENDOZA ....................................................................................... 13
9° LUIS DE VELASCO Y CASTILLA .............................................................................................. 14
10° GASPAR DE ZÚÑIGA ACEVEDO Y VELASCO ....................................................................... 16
11° JUAN DE MENDOZA Y LUNA ............................................................................................. 17
12° FRANCISCO DE BORJA Y ARAGÓN ..................................................................................... 18
13° DIEGO FERNÁNDEZ DE CÓRDOBA (MARQUÉS DE GUADALCÁZAR).................................. 19
14° LUIS JERÓNIMO FERNÁNDEZ DE CABRERA Y BOBADILLA ................................................. 20
15° PEDRO ÁLVAREZ DE TOLEDO Y LEIVA ............................................................................... 21
16° GARCÍA SARMIENTO DE SOTOMAYOR.............................................................................. 22
17° LUIS ENRÍQUEZ DE GUZMÁN ............................................................................................ 23
18° DIEGO IV DE BENAVIDES Y DE LA CUEVA .......................................................................... 24
19° PEDRO ANTONIO FERNÁNDEZ DE CASTRO ....................................................................... 25
20° BALTASAR DE LA CUEVA Y ENRÍQUEZ DE CABRERA.......................................................... 26
21° MELCHOR DE LIÑÁN Y CISNEROS ...................................................................................... 27
22° MELCHOR DE NAVARRA Y ROCAFULL ............................................................................... 29
23° MELCHOR PORTOCARRERO LASSO DE LA VEGA ............................................................... 30
24° MANUEL DE OMS Y DE SANTA PAU .................................................................................. 32
25° DIEGO LADRÓN DE GUEVARA ........................................................................................... 33
26° CARMINEO NICOLAS CARACCIOLA.................................................................................... 34
27° DIEGO MORCILLO RUBIO DE AUÑÓN ............................................................................... 35
28° JOSÉ DE ARMENDÁRIZ ...................................................................................................... 37
29° JOSE ANTONIO DE MENDOZA ........................................................................................... 39
30° JOSE ANTONIO MANSO DE VELASCO ............................................................................... 40
31° MANUEL DE AMAT Y JUNIET ............................................................................................. 42
32° MANUEL GUIRIOR ............................................................................................................. 43
33° AGUSTÍN DE JÁUREGUI Y ALDECOA .................................................................................. 44
34° TEODORO DE CROIX .......................................................................................................... 44
35° FRANCISCO GIL DE TABOADA ........................................................................................... 46
36° AMBROSIO O'HIGGINS ...................................................................................................... 47
37° GABRIEL DE AVILÉS ........................................................................................................... 48
38° JOSE FERNANDO DE ABASCAL .......................................................................................... 49
39° JOAQUIN DE LA PEZUELA .................................................................................................. 50
40° JOSE DE LA SERNA ............................................................................................................. 52
CONCLUSIONES: .......................................................................................................................... 54
BIBLIOGRAFÍA: ............................................................................................................................. 54
INTRODUCCIÓN
El Virreinato del Perú fue una entidad político-administrativa
fundada en 1542 tras el sometimiento del Imperio Inca.
Abarcó, en su máxima extensión, territorios que actualmente
se corresponden con Perú, Ecuador, Bolivia, Colombia, parte
de Argentina y Chile.

Los primeros asentamientos comienzan a desarrollarse tras la


captura de Cuzco, principal ciudad inca, por parte de Francisco
Pizarro, en 1534. Tras este hecho, se provoca una
fuerte disputa por el control de una serie de expediciones
destinadas a Birú, territorio peruano del cual se presumía que
poseía grandes riquezas, entre Francisco Pizarro y Diego de
Almagro. El enfrentamiento se saldó con la victoria de Pizarro,
y la posterior ejecución de Almagro.

El virreinato vivió cuarenta años de caos administrativo, fruto


del choque de intereses entre los distintos conquistadores, y el
desigual reparto de la tierra. A mediados del siglo
XVI, Francisco de Toledo, virrey del Perú, logra encauzar la
situación y establecer un marco administrativo estable, que se
prolongaría durante todo el período colonial. Esta
normalización de la situación, fue gracias a la voluntad de
Toledo, de llevar a cabo un proceso organizador, reflejado
en medidas tales como el censo tributario, censo de
pobladores nativos y la realización de un registro de los
recursos naturales y humanos del Perú. Estas medidas
permitieron la implantación de los sistemas de
trabajo (mita, repartimiento) y a la larga, hicieron de este
virreinato el más rico e influyente.

La capital fue situada en la ciudad de Lima, fundada por


Francisco Pizarro como la «Ciudad de los Reyes», mientras
que el puerto del Callao, monopolizaba todo el comercio
marítimo americano.
PRESENTACION

En esta oportunidad me es grato hacer


llegar a ustedes el tema sobre “Virreyes del
Perú”, como prueba del cumplimiento de mis
deberes como estudiante, en base a la
investigación.

El mismo que contiene en cada una de


sus hojas la información sobre los 40 virreyes
que tuvo el Perú y como ha transcurrido la
historia desde la primera instancia.

Finalmente pongo a disposición el


presente material para la lectura y
conocimiento de las personas que estén
interesadas en este contenido.
DEDICATORIA

Este trabajo dedico con mucho respeto y cariño a

mis queridos padres por sus sabios consejos para

conducirme correctamente y a mis profesores por

ser buenos educadores, quien día a día nos imparte

sus conocimientos y experiencias; lo cual incentiva

a cada alumno a seguir adelante; y sobre todo a

Dios todopoderoso, quien por su voluntad nos

conducimos en bien en esta vida.


AGRADECIMIENTO

En primer lugar doy gracias a Dios por brindarme la vida,


salud, de igual manera a mis queridos padres, por brindarme
su apoyo incondicional y así ser una estudiante con éxito para
mi futuro.

Así mismo brindo un agradecimiento muy sincero a todos los


docentes de nuestra institución, quienes nos aportan su
sabiduría para cada día ser útiles a la sociedad un mejor
mañana, y a mis compañeros por acoger con sabiduría el
presente trabajo.
EN EL CAMPO ADMINISTRATIVO
El virreinato está constituido por dos audiencias, las de Lima y Cusco, que fueron
sustituidas por intendencias tras las Reformas Borbónicas en el siglo XVIII. Al igual que
en el resto de virreinatos, existían también organismos tales como los corregimientos,
encargados de la administración de zonas habitadas por nativos, cabildos, que cumplían
diversas funciones administrativas similares a las que actualmente realiza la
municipalidad o ayuntamiento, y diversas autoridades indígenas que se encargaban de
mediar entre éstos y los españoles.

EN EL AMBITO ECONOMICO
La principal actividad desarrollada en el virreinato era la minería.
El trabajo en la mina era desarrollado por aborígenes que pasaban entre una y dos
semanas sin salir de ella en condiciones realmente duras. En un principio, la actividad se
desarrolló en torno a pequeños depósitos de superficie, pero gracias a las mejoras en las
técnicas mineras, los colonos pudieron a acceder a grandes minas. Es a partir de este
momento en que la minería termina de consolidarse como principal actividad en el
virreinato. Los principales yacimientos mineros fueron: Castrovirreyna, Cerro de Pasco,
Cajabamba, Contumanza, Carabaya, Cayllama,
Hualgayoc, Huancavelica y Potosí, todas ellas ubicadas en el territorio del actual Perú.
Potosí, por si sola, aportaba dos tercios de la producción minera del Perú, hasta que en
1776 cambió de jurisdicción a favor del Virreinato del Río de la Plata. A causa de las
malas condiciones y la dureza del trabajo realizado por los aborígenes en la mina, eran
frecuentes los alzamientos de mineros, que eran sistemáticamente sofocados por las
autoridades coloniales.

EN EL AMBITO COMERCIAL
España aplicó medidas proteccionistas y favoreció el monopolio de los puertos de Sevilla
en España, Veracruz, en México, Callao en el Perú, Panamá y Cartagena en Nueva
Granada. Debido a que Panamá y Cartagena eran considerados puertos de tránsito, el
Callao pasó a ser el único puerto autorizado para comerciar en América, lo cual convirtió
al Virreinato del Perú en el centro comercial de las colonias Españolas en América. Pero
la preeminencia de ciertos puertos sobre otros, en este caso el Callao con respecto al resto
de América, hizo que el contrabando y la piratería, actividades desarrolladas la primera
por criollos y la segunda por corsarios ingleses y holandeses en su mayoría, floreciesen,
logrando erosionar lenta pero inexorablemente el monopolio de los grandes puertos, hasta
que en 1778 Carlos III decretó el libre comercio y el Callao perdió su posición de ventaja
frente a los otros puertos, posibilitando el surgimiento de los de Montevideo, Buenos
Aires o Guayaquil.

Durante el siglo XIX, época en la que se suceden los distintos alzamientos


independentistas a lo largo del continente, el Virreinato del Perú se mantendrá como
principal bastión de los realistas, hasta su disolución, en 1824, tras la Batalla de
Ayacucho. A pesar de esto, el Perú será también testigo de los alzamientos de Tupac
Amarú y Tupac Katari, precedentes de la futura emancipación Latinoamericana.

CONQUISTA Y CREACION DEL VIRREYNATO


Con la entrada de los españoles en la ciudad de Cuzco en 1534, concluyó la conquista
militar del Perú, llevada a cabo por Francisco Pizarro, y dio comienzo el desarrollo del
asentamiento colonial en el área dominada hasta ese momento por el Imperio inca o
Tahuantinsuyo que, a partir de 1542, entró a formar parte del virreinato de la Nueva
Castilla, conocido más tarde como virreinato del Perú, y que estableció su capital en
Lima, fundada en 1535. Su demarcación incluyó con el tiempo el espacio comprendido
entre Panamá y Chile, de norte a sur, a excepción de la actual Venezuela, y, hacia el este,
hasta Argentina, con la excepción de Brasil, que pertenecía al dominio portugués. El
periodo transcurrido desde 1534 hasta 1544 estuvo presidido por los enfrentamientos
entre los partidarios de Francisco Pizarro y Diego de Almagro, los dos socios que se
habían unido en 1524, junto a Hernando de Luque, para llevar a cabo una expedición en
busca de las tierras del Virú o Birú (Perú), de las que llegaban noticias que hablaban de
la existencia de grandes riquezas. El nombramiento de Pizarro como primer gobernador
y el desigual reparto de los beneficios en la concesión de tierras y títulos entre ambos
socios fue una fuente permanente de luchas, conocidas como ‘guerras civiles’, que
continuaron tras la ejecución de Almagro, derrotado en la batalla de las Salinas en 1538,
y la de Pizarro, asesinado por los almagristas en 1541.
El reparto de las tierras y de los indios llevado a cabo entre los conquistadores por
el sistema de las encomiendas, y la supresión legal de éstas con la promulgación de
las Leyes Nuevas en 1542, mantuvo abierto el enfrentamiento con el poder real,
representado por el segundo gobernador Cristóbal Vaca de Castro y por el primer virrey
Blasco Núñez Vela, el cual murió en 1546, en lucha con los partidarios de la encomienda,
quienes se hallaban dirigidos por Gonzalo Pizarro, que se consideraba heredero de su
hermano Francisco. El presidente de la audiencia de Lima y tercer gobernador Pedro de
La Gasca consiguió la pacificación del territorio peruano, atrayendo al bando oficial a la
mayor parte de los insurrectos y apresando, en 1548, al hermano de Pizarro, en la batalla
de Xaquixahuana.

ORGANIZACIÓN DEL VIRREINATO


En 1550, fue nombrado virrey Antonio de Mendoza, que ya había ejercido el cargo en el
virreinato de Nueva España. El virrey Francisco de Toledo, que gobernó entre 1569 y
1581, llevó a cabo la más importante labor de organización de la administración colonial
en el virreinato peruano durante el siglo XVI, estableciendo las normas para la agrupación
de los indios en reducciones y la distribución del trabajo indígena por medio de la mita.
Mediante el empleo de ésta, el virrey Toledo proveyó de mano de obra a las minas de
Potosí (productora de plata) y Huancavelica (de la que se extraía mercurio, necesario para
la purificación argentífera), logrando así convertir al Perú en uno de los centros más
importantes de producción de plata en el mundo entero. En el siglo XVIII, destacaron las
figuras de los virreyes que introdujeron las medidas creadas por el reformismo llevado a
cabo por la Casa de Borbón, especialmente Manuel de Amat y Junyent, que gobernó entre
1761 y 1776, Manuel de Guirior (1776-1780), Agustín de Jáuregui (1780-1784) y
Teodoro de Croix (1784-1790), destinadas a revitalizar la administración colonial con
actuaciones como la incorporación del sistema de intendencias. Con él se intentó
profesionalizar el gobierno, sustituyendo las inoperantes figuras de los corregidores y los
alcaldes mayores, dedicando especial interés a todo lo relacionado con la Hacienda.
La reorganización territorial llevada a cabo a lo largo del siglo XVIII disminuyó la
importancia del virreinato peruano, que perdió una gran parte de su espacio y de su
capacidad comercial. En 1717, se creó el virreinato de Nueva Granada, restaurado en
1739 tras un periodo de supresión. En 1776, la creación del virreinato del Río de la Plata
supuso la pérdida de la explotación de las importantes minas de Potosí, que pasaron a
integrarse dentro de la nueva demarcación, y del protagonismo comercial de Lima y su
puerto del Callao, frente al adquirido por Buenos Aires.
José de la Serna e Hinojosa fue el último virrey y gobernó desde 1821 hasta 1824,
asistiendo a la desintegración del Ejército realista, en la batalla de Ayacucho.
1° BLASCO NÚÑEZ VELA
Blasco Núñez Vela y Villalba (Ávila, España, 1495 - Iñaquito,
actual Ecuador, 1546), fue un militar y político español, Capitán
General de la Armada de las Indias.
En 1537, fue el primero que capitaneó la Flota de Indias que cruzó
el Océano Atlántico llevando los cargamentos
de oro y plata al rey Carlos I de España evitando las amenazas de
los corsarios y en 1543 fue el primero que envió hacia España, por
demanda de los comerciantes de Sevilla, la navegación de
convoyes protegida por buques de guerra, sustituyendo por primera vez
en Hispanoamérica los navíos sueltos.
Fue nombrado primer Virrey del Perú en 1543, con la tarea de hacer cumplir las Leyes
Nuevas redactadas para poner fin a los abusos cometidos con los indios por parte de
los encomenderos. De buen parecer y gentil presencia, debido a su empeño en hacer
cumplir la nueva legislación, entró rápidamente en conflicto con las élites locales, de
manera tal que fue depuesto de su cargo por la Real Audiencia de Lima, en 1544, la cual
entregó el poder a Gonzalo Pizarro.3 Enviado de vuelta a España, desembarcó
en Tumbes y reunió un ejército con el que marchó contra los gonzalistas, con el ánimo
tenaz de recuperar el poder. Pero hubo de retroceder y en la batalla de Iñaquito, cerca de
la ciudad de Quito, fue derrotado y decapitado, el 18 de enero de 1546.
DATOS BIOGRÁFICOS:
El linaje de los Vela en Ávila tuvo su origen en el conde Nuño Vela, originario de
una familia condal alavesa arraigada en León bajo la protección real. De este rico-hombre
procedieron los apellidados Vela Nuñez o Nuñez Vela.
Descendiente de un Nuñez-Vela fue Blazquez Vela, que fundó mayorazgo con facultad
Real, siendo su hijo Luis Núñez-Vela, señor del mayorazgo de Tabladillo, y casó con la
que fues madre de Blasco Núñez Vela, doña Isabel de Villalva.
Blasco Nuñez Vela ejerció los cargos de Corregidor de Málaga y Cuenca, Capitán de
lanzas de Orán, Veedor general de las galeras y de la gente de guerra de Castilla, e
Inspector general de la frontera de Navarra.
Como capitán general de la armada, realizó numerosas pero cortas travesías
entre España y América, por lo que al momento de confiársele la alta responsabilidad en
el Perú ya estaba un tanto familiarizado con el Nuevo Mundo. Para entonces era ya
conocido por la rigurosidad de sus castigos, al punto de dejar lisiados a varios soldados y
marineros.
Estaba casado con doña Brianda de Acuña, con la cual tuvo siete hijos. Dos de
ellos, Cristóbal Vela y Acuña y Diego Vela fueron arzobispos de Burgos y Lugo,
respectivamente. A don Antonio y don Juan se les dio el hábito de la Orden de Santiago a
uno y el de la Orden de Alcántara al otro; a ambos hízoles primero Meninos de
la Emperatriz y luego sus propios Gentiles-hombres; murió el mayor proveído
para embajador en Francia, el segundo de Capitán general de artillería de España y
Consejero de guerra. Blasco era también Caballero de la Orden de Santiago.
2° JOSÉ ANTONIO DE MENDOZA CAAMAÑO Y SOTOMAYOR
José Antonio de Mendoza Caamaño y Sotomayor (Vegas de
Matute,1 Segovia, España, 13 de marzo de 1667 - Aguas del Cabo
de Hornos, Virreinato del Perú, 15 de diciembre de 1746), tercer
Marqués de Villagarcía de Arosa y caballero de la Orden de
Santiago.
BIOGRAFÍA
Nacido en Vegas de Matute en 1667, fue hijo de Antonio Domingo de Mendoza Caamaño
y Sotomayor, II marqués de Villagarcía y II vizconde de Barrantes, y Juana Catalina de
Ribera Ibáñez de Segovia y Ronquillo. Su padre fue embajador de Carlos II en Venecia,
gobernador de Santiago y virrey de Valencia (1699-1707).

En 1694, casó con Clara de Barrionuevo y Monroy, hija de los marqueses de Monroy y
Cusano. La pareja tuvo tres hijos: Josefa, marquesa de Monroy; Rodrigo, marqués de
Villagarcía; y Mauro.
Fue el embajador de España en Venecia y virrey de Cataluña (1705). A la muerte de su
padre en 1713, heredó los mayorazgos pontevedreses de Villagarcía de Arosa, el
marquesado de esta denominación y el vizcondado de Barrantes. En 1735, con 68 años,
ya anciano y viudo, fue nombrado XXIX virrey del Perú por el rey Felipe V, viajando
con él los famosos marinos Jorge Juan y Antonio de Ulloa que formaban parte de
la expedición de Charles Marie de la Condamine para medir la línea del ecuador.
Entre 1735 y 1745, tiempo en el que permaneció al frente del virreinato peruano, se ocupó
especialmente de mejorar la hacienda y la producción minera. Reprimió las sublevaciones
de 1739 y 1742 y, a partir de entonces, trató de controlar la corrupción que, junto con la
esclavitud a la que en la práctica estaba sometida la población indígena por el sistema de
la mita y el incumplimiento de las ordenazas reales, habían provocado las mencionadas
rebeliones.
Por otra parte, Caamaño y Sotomayor, teniendo en cuenta el conflicto bélico existente
con Inglaterra en la llamada Guerra del Asiento (1739-1748), tuvo que afrontar
numerosos problemas defensivos por la presencia activa de los navíos del almirante
Anson en las costas del virreinato y del almirante Vernon en el área del Caribe, que
llegaron a provocar el saqueo de Paita y la caída de Portobelo. También en las fronteras
terrestres tuvo que afrontar algunos conflictos con los portugueses de Brasil.
Después de solicitar su sustitución, falleció durante la navegación de su viaje de regreso
a España, dejando una impresión de buen gobierno en el territorio de su jurisdicción.
3° ANDRÉS HURTADO DE MENDOZA
Andrés Hurtado de Mendoza y Cabrera, II Marqués de
Cañete (Cuenca, 1510 - Lima, 14 de septiembre de 1560) fue
un militar y político español que llegó a ser el III Virrey del Perú,
entre 1556 y 1560. Su gobierno marcó la culminación del período de
guerras civiles, caracterizado por continuas revueltas y
modificaciones en el escenario del poder. Pacificó el Virreinato,
impuso el respeto a la autoridad y fomentó la colonización.
INFANCIA Y JUVENTUD
Miembro de un distinguido linaje alcarreño, fue hijo de Diego Hurtado de Mendoza y
Silva, I Marqués de Cañete, de la poderosa Casa de Mendoza (Italia), y de Isabel de
Cabrera y Bobadilla, hija del Marqués de Moya. Nieto de Onorato de Mendoza,
Corregidor de Salamanca durante los Reyes Católicos y de Francisca de Silva y Ribera.
Bisnieto de Juan Hurtado de Mendoza, II señor de Estado de Cañate. Guardamayor de
Cuenca y montero mayor del Rey, e Inés Manrique, hija del adelantado, Pedro Manrique.
Heredó el marquesado de Cañete, concedido a su padre Diego Hurtado de Mendoza y
Silva por Carlos I el 7 de julio de 1530, aunque se había creado (pero sin emitir el
oportuna Real Despacho), en 1490 por los Reyes Católicos.
Sucedió a su padre en sus posesiones conquenses, siendo Guarda Mayor de Cuenca.
Luego, fue Montero Mayor de Castilla y acompañó al emperador Carlos I en las
campañas militares que libró en Alemania y Flandes, donde se distinguió.
NOMBRAMIENTO COMO VIRREY DEL PERÚ
El 10 de marzo de 1555 recibió la designación de Virrey, Gobernador y Capitán General
del Perú y Presidente de la Real Audiencia de Lima. Todavía antes de la partida escribió
una carta al emperador, manifestándole tener noticia de que en el Perú habitaban entonces
cerca de ocho mil españoles, de los cuales solo quinientos poseían repartimientos de
indios, un millar tenían algún negocio u oficio y el resto carecía de medios para subsistir:
era necesario, pues, “desaguar” la tierra de tantos elementos ociosos. Con este ideal en la
cabeza, y con un nutrido séquito de parientes y criados, entre quienes se contaban sus
hijos Felipe y García Hurtado de Mendoza, el conquistador Jerónimo de Alderete como
gobernador designado de Chile, el poeta Alonso de Ercilla y el oidor Gregorio González
de Cuenca, se hizo a la vela en el puerto de Sanlúcar de Barrameda, el 15 de
octubre de 1555.
Apenas tocó tierra en Panamá inició juicio de residencia a los magistrados de la
Audiencia y diversos funcionarios, y reprimió a una partida de cimarrones o esclavos
negros fugitivos que asolaban la región. El encargado de esta última misión fue Pedro de
Ursúa, quien logró apresar al autodenominado “rey de Bayano”, caudillo de los negros,
quien fue ahorcado.
El virrey Marqués de Cañete arribó al Perú tocando tierra en Paita el 24 de
marzo de 1556; pasó a Trujillo y continuó finalmente por el camino de los llanos hasta
arribar a Lima. Era recibido en la Ciudad de los Reyes el 29 de junio de 1556.
4° DIEGO LÓPEZ DE ZÚÑIGA Y VELASCO
Diego López de Zúñiga y Velasco (Burgos, ca. 1500 – Ciudad de
los Reyes, 19 de febrero de 1564), IV conde de Nieva y caballero
de la Orden de Santiago, fue el IV virrey del Perú, cargo que ejerció
de 1561 hasta su asesinato ocurrido en 1564, muerte que hasta hoy
día está teñida de misterio.
DATOS BIOGRÁFICOS
Diego López de Zúñiga y Velasco era hijo de Antonio de Velasco y Enríquez de Lacarra y
de Francisca López de Zúñiga, III Condesa de Nieva. Desde temprana edad se inició en
los ejercicios caballerescos, y en armonía con los designios paternos, contrajo matrimonio
en 1522 con María Enríquez de Almansa, hija de Francisco Enríquez de Almansa,
I marqués de Alcañices, y hermana de Martín Enríquez de Almansa, VI virrey del Perú.
Deseoso de hacerse méritos, participó al lado de Carlos V en la Jornada de
Túnez en 1535, donde fueron liberados 20 000 prisioneros cristianos. Luego continuó en
la campaña italiana de 1535 a 1536. De vuelta a sus posesiones de Burgos, alternó
la montería con las aventuras galantes y el juego.
Luego, se incorporó en el séquito del infante Felipe (futuro Felipe II) durante el recorrido
que este efectuó por Flandes y Alemania (1548-1550). Cuando dicho príncipe subió al
trono en 1555, fue nombrado Gobernador y Capitán General de Galicia. De otro lado
obtuvo el título de cuarto conde de Nieva de Cameros y le correspondieron los señoríos
de Arnedo, Valverde, San Ascencio, Cerezo y la Torre de Sartaguda.
ELECCIÓN COMO VIRREY DEL PERÚ
Debido a la muerte repentina de Diego de Acevedo y Fonseca, quien preparaba su viaje
para hacerse cargo del Virreinato del Perú en reemplazo del Marqués de Cañete, el rey
Felipe II lo reemplazó por el Conde de Nieva, despachando el día 15 de
diciembre de 1558 las provisiones que lo nombraban como virrey, gobernador y capitán
del Perú, así como presidente de la Real Audiencia de Lima.
Por problemas administrativos se retrasó su viaje al Perú, hasta que al fin, rodeado de un
numeroso grupo de oficiales, deudos y protegidos, partió el 28 de enero de 1560 desde el
puerto de Cádiz. Atravesó el istmo de Panamá en mayo y tras superar unas fiebres
tropicales, arribó al puerto de Paita, en la costa norte peruana, desde donde siguió el viaje
a Lima por tierra. Hizo su entrada oficial en la capital del Virreinato el 17 de
abril de 1561.
El Conde de Nieva se distinguió por sus hábitos cortesanos, su desidia para atender los
negocios públicos y su codicia. Lima se transformó en escenario de una suntuosa vida
cortesana, con ceremonias de espléndido boato, capilla musical y lucimiento de trajes
aparatosos, todo lo cual fue reglamentado por el virrey mediante ordenanzas. Su mandato
solo duró tres años.
5° FRANCISCO DE TOLEDO
Francisco Álvarez de Toledo (Oropesa, 15 de julio
de 1515 – Escalona, 21 de abril de 1582) conocido también
como El SolónVirreinal,1 fue un aristócrata y militar de la Corona de
Castilla, que fue el quinto Virrey del Perú. Ocupó dicho cargo desde
el 30 de noviembre de 1569 hasta el 1º de mayo de 1581, un total de
once años y cinco meses. Si bien para la mayoría de los historiadores
fue el más importante de los virreyes del Perú y ha sido elogiado como
el “supremo organizador” del inmenso virreinato, por darle una
adecuada estructura legal, afianzando importantes instituciones
indianas, en torno a las cuales giró la administración del país durante doscientos años,
para otros fue el gran tirano de los indios por haberlos explotado de forma exagerada, al
conservar la mita minera del Imperio Inca pero tergiversando su sentido original, y por
haber ordenado la ejecución del último inca de Vilcabamba, Túpac Amaru I.
BIOGRAFÍA
Nacimiento y primeros años
Francisco de Toledo nació el 15 de julio de 1515,4 en el Castillo de Oropesa perteneciente
a la noble familia Álvarez de Toledo. Fue el cuarto y último hijo del II conde de
Oropesa, Francisco Álvarez de Toledo y Pacheco y de María de Figueroa y Toledo —
primogénita de Gómez Suárez de Figueroa, II conde de Feria y de su segunda
esposa, María Álvarez de Toledo, hija de los I duques de Alba de Tormes—. Su
nacimiento se produjo al tiempo que fallecía su madre, lo que influyó en su talante serio
y taciturno. Sus tías María e Isabel se encargaron de su crianza.
Al cumplir ocho años se trasladó a la corte del rey Carlos I de España, para servir
como paje de la reina consorte Isabel de Portugal.
Aprendió latín, historia, retórica y teología, además de esgrima, música, baile y modales
cortesanos.
Al servicio del emperador Carlos V
Francisco de Toledo tenía quince años cuando en 1530 el rey Carlos I lo aceptó en su
casa. Acompañó al emperador hasta sus últimos días en las más variadas circunstancias
tanto de paz como de guerra. Este contacto personal con el monarca, de quien adoptó la
prudencia política, el “maquiavelismo” y la tendencia a buscar contrapesos entre sus
colaboradores, le serviría de provechosa experiencia para su labor gobernativa posterior.
En 1535, cuando tenía veinte años, fue investido con el hábito de caballero de la Orden
de Alcántara, una orden religioso-militar, y en 1551 se le dio en esta corporación la
encomienda de Acebuchar.
La primera acción militar en la que intervino fue la expedición a Túnez en 1535, gran
triunfo de las tropas imperiales sobre los turcos otomanos a quienes arrebataron dicha
plaza del norte de África. Siguiendo al emperador en su recorrido por Europa, el joven
Álvarez de Toledo pasó por Roma, donde Carlos I desafió al rey de Francia Francisco I,
lo que desencadenó otra guerra con dicho país (la tercera del reinado del emperador),
entre los años 1536-1538. Tras la firma de la paz, Álvarez de Toledo regresó a España y
marchó más tarde a Gante, en Flandes. Participó enseguida en la expedición a Argel,
importante plaza turca del norte africano, campaña que culminó en fracaso debido al mal
tiempo (1541).
Se ocupó de los asuntos de Hispanoamérica interesándose respecto del estatus jurídico
que debían tener los indios. Estuvo en Valladolid cuando fray Bartolomé de las
Casas presentó ante una junta de teólogos el texto de la Brevísima relación de la
destrucción de las Indias y supo de la redacción de las Nuevas Leyes de Indias que tanto
revuelo provocaron en el Perú.
Nombramiento como Virrey del Perú
Fue mayordomo en la casa del rey Felipe II, hijo y sucesor de Carlos I, y asistió en calidad
de delegado regio al concilio provincial de Toledo de 1565. Tuvo el decisivo apoyo que
le otorgó el cardenal Diego de Espinosa, presidente del Consejo Real de Castilla, durante
las deliberaciones de la Junta Magna de 1568. Entre los resultados de la junta, donde se
tomaron acuerdos importantes sobre la organización administrativa de las Indias, surgió
el nombramiento de Álvarez de Toledo como virrey, gobernador y capitán
general del Virreinato del Perú, el 30 de noviembre de 1568.
A fines de diciembre de 1568 salió de Madrid y tras visitar a sus familiares llegó
a Sevilla el 23 de febrero del año siguiente; se embarcó en Sanlúcar de Barrameda el 19
de marzo, en la armada que conducía el general Diego Flores de Valdés. Llegó junto con
su secretario Eusebio de Arrieta, quien desempeñara como secretario del santo oficio
limeño, la misma familia Arrieta establecida en Lima y Tarma.

6° MARTÍN ENRÍQUEZ DE ALMANSA


Martín Enríquez de Almansa y Ulloa (¿Toro?, Zamora, Corona
castellana, ¿1510? – Lima, Perú, 1583), político y militar español
que fue el cuarto Virrey de la Nueva España y el sexto Virrey del
Perú.
PRIMEROS AÑOS
Fue el tercer hijo de Francisco Enríquez de Almansa, I Marqués de Alcañices y Señor de
la villa de Almansa, e Isabel de Ulloa y Castilla. Su padre creó el mayorazgo
de Valderrábano (Toro), el 19 de febrero de 1540. Su hermano mayor heredó el
marquesado de Alcañices.
VIRREY DE LA NUEVA ESPAÑA
En 1568 el rey de España Felipe II convocó en Madrid a una Junta Magna de los
miembros del Consejo de Indias, del Consejo de Castilla, entre otros magistrados y
políticos, con el fin de tomar innovadoras medidas con respecto a la administración de
los dominios de América, asunto que había sido postergado por la corona. Felipe II, hasta
entonces absorbido por los problemas europeos, volcó de pronto su interés en sus colonias
ultramarinas, con el fin de reforzar en ellas su poder. En dicha Junta se acordó la elección
de Francisco Álvarez de Toledo como virrey del Perú y la de Martín Enríquez de
Almansa como virrey de la Nueva España.
El gobierno de Martín Enríquez de Almansa en la Nueva España se inició el 5 de
noviembre de 1568 y culminó doce años después, antes de ser promovido al virreinato
del Perú. Diversos autores concuerdan en que esta larga administración fue hábil y
benéfica. En un libro publicado en 1983, Antonio F. García-Abásolo ha estudiado los
aspectos principales de este gobierno, basándose en abundante documentación (Martín
Enríquez y la reforma de 1568 en Nueva España, Sevilla).
OBRAS Y SUCESOS IMPORTANTES
 La primera acción que hizo Enríquez de Almansa al llegar al puerto de Veracruz fue
desalojar un puesto de piratería que habían establecido los ingleses en la Isla de
Sacrificios, desde donde atacaban a los barcos que entraban o salían de la bahía.
Los españoles ganaron la batalla de San Juan de Ulúa y entre los piratas
o corsarios que fugaron derrotados estaban los famosos Francis Drake y John
Hawkins.
 Poco después, ya instalado en la capital, tuvo que enfrentar el conflicto de intereses
entablado entre los frailes franciscanos y el clero secular, pretendiendo los unos que
se volviese a su convento la procesión que por costumbre antigua conducían
aquellos a la Iglesia de Santa María la Redonda. Las palabras no pudieron satisfacer
a los contendientes, que en medio de la procesión y turbando la solemnidad de la
fiesta religiosa, apelaron a la vía de los hechos, tomando parte en favor de los frailes
la numerosa población de indios de aquel barrio que dejó harto mal parados a sus
contrarios, hiriendo y matando a algunos con la nube de piedras que sobre ellos
descargaron. Se evitaron mayores consecuencias por la prudente conducta del
virrey, que a fuerza de medidas conciliatorias logró calmar los irritados ánimos.
 En 1570 el virrey organizó una campaña militar contra los huachichiles, indios
chichimecas que amenazaban los centros mineros de Querétaro, a consecuencia de
la cual fundó en Zacatecas los presidios de Ojuelos y Portezuelos y
en Guanajuato el de San Felipe.
 Bajo su gestión, se creó formalmente el Tribunal del Santo Oficio o la Inquisición,
llegando en 1571 el primer inquisidor Pedro Moya de Contreras. En 1574 se efectuó
el primer auto de fe en Ciudad de México, en el que se castigaron a 63 penitentes.
 También ingresaron nuevas órdenes religiosas, como las de los Hospitalarios de
San Hipólito y la Compañía de Jesús en 1572. Los hospitalarios levantaron el
Hospital de San Hipólito, y los jesuitas abrieron el Colegio de Pátzcuaro, en 1574.
 Tuvo un serio incidente con el comisario de los franciscanos Francisco Rivera.
Este, molesto porque el Virrey no le había concedido una audiencia luego de larga
espera, lo zahirió en una prédica que dio en la catedral. Celoso de su autoridad, el
virrey logró que se ordenara al comisario volver a España. Para eludir dicha pena,
el comisario reunió a todos sus frailes y, entonando los salmos sagrados, tomaron
camino a Veracruz, conmoviendo a la supersticiosa población indígena, a tal punto
que el virrey, temeroso de una revuelta, tuvo que cejar y escribir a Rivera en
términos comedidos, suplicándole que volviese a obtener la justicia que reclamaba.
 En 1573 se fundó el Convento de religiosas de Balvanera con el título de Jesús de
la Penitencia y el Colegio de Santa María de Todos los Santos, que en 1700 fue
declarado colegio mayor. También se comenzó la edificación de la
magnífica Catedral de México y un año después las construcciones del Convento
de la Merced. En 1575 se fundó la Parroquia de San Pablo y en el siguiente año el
Santuario de Nuestra Señora de los Remedios, lugar este último que tenía
la ermita fundada en recuerdo de la Noche Triste. Por último, en 1579 se fundó el
Convento de religiosas de Santa Clara.
 Se fundó la villa de Celaya, en 1571, por obra de vizcaínos (su nombre deriva
de Zelaya, localidad vizcaína), y la villa de San Felipe, en los despoblados de San
Luis de Potosí.
 En 1576, funda la Villa de León, lo que hoy es León, Guanajuato. Estalló
una epidemia de viruela que mató a millares de indígenas, hecho que motivó que el
virrey ordenara que se establecieran hospitales para la atención de los enfermos,
declarando además que los afectados quedaran exentos del tributo.
 Comisionó a los indios la construcción de obras defensivas destinadas a evitar las
constantes inundaciones provocadas por el desborde de los ríos del valle de México
durante la época de las lluvias.
Quebrantada su salud por un largo mandato de más de una década, solicitó al rey Felipe
II que lo relevara del cargo. Pero el monarca, queriendo aprovechar su experiencia en el
manejo de los asuntos indianos, lo promovió el 26 de mayo de 1580 a los oficios de
Virrey, Gobernador y Capitán General del Perú y Presidente de la audiencia de Lima.
Debía sustituir en el mando al enérgico y exitoso Francisco Álvarez de Toledo, el
organizador del virreinato peruano.
VIRREY DEL PERÚ
Ya achacoso, Enríquez se embarcó en el puerto de Acapulco el 9 de diciembre de 1580 y
tras 85 días de viaje arribó al Callao, donde desembarcó el 4 de mayo del año siguiente.
Luego entró a Lima bajo palio, tomando oficialmente posesión de su gobierno el 15 de
mayo de 1581. En las cartas escritas por el virrey tras su instalación en el Perú puede
descubrirse alguna traza de envidia o enfado por el sello demasiado personalista que su
antecesor había impreso a las tareas administrativas.

7° FERNANDO TORRES Y PORTUGAL


Fernando de Torres y Portugal y Mesía Venegas y Ponce de León (siglo
XVI) fue un noble y administrador colonial español. Miembro de una
antigua estirpe de la región de Jaén y descendiente de la familia real
portuguesa, fue Señor de Villardompardo y Escañuela y luego I Conde
de Villardompardo. Fue además alférez mayor de
Jaén, corregidor de Asturias y de Salamanca, asistente
de Sevilla (1578 – 1583) y VII Virrey del Perú (1585 - 1589).
Sancho Fortuniones es el primer señor de Torres otorgado en 936 por contraer matrimonio
con la infanta, hija del Rey Garcia de Navarra.
La casa de Torres poseía tierras en Jaén, Álava y Burgos así como en Navarra. Abarcaba
en Jaen las jurisdicciones de Villardompardo y Escañuela, tuvo su origen en Pedro Ruiz
de Torres, adelantado de Cazorla y alcalde de los alcázares de Jaén, quien apoyó a Enrique
II de Castilla en su lucha contra su hermano Pedro I. Victorioso Enrique II, no solo hizo
Señor a Pedro Ruiz de Torres, sino que le concedió importantes privilegios (1371), que
fueron acrecentándose con el correr del tiempo. Entre esos privilegios se hallaban el
derecho al cobro del estanco de tintes, tenerías, alabardería y jabón de la ciudad de Jaén.
Pedro Ruiz de Torres casó con Isabel Méndez de Biedma y con ella tuvo a Fernando Ruiz
de Torres. Éste a su vez se casó con Inés de Solier y tuvo cuatro hijos: Pedro, Carlos, Juan
y María. El primero murió sin descendencia, por lo que el señorío pasó a Carlos de Torres.
Éste se casó con Guiomar Carrillo, con quien tuvo a Teresa de Torres y Carrillo, que llegó
a ser señora de Villardompardo. Los señores de Villardompardo se entroncaron con la
nobleza portuguesa a través del matrimonio de María de Torres de Navarra y Solier con
Fernando de Portugal, hijo del infante don Dionis de Portugal. De esta unión nació Dionis
de Torres y Portugal, quien asumió el señorío de Villardompardo a falta de los herederos
mayores, y fue el bisabuelo de nuestro biografiado, Fernando de Torres y Portugal.
Del lado materno provenía de la ilustre Casa de Messía Carrillo (señores de La
Guardia y Santofimia), beneficiada también con muchos privilegios adquiridos en
tiempos medievales.
Fernando de Torres y Portugal acrecentó su posición con el cargo honorífico de alférez
mayor de Jaén, que el rey le otorgó a perpetuidad. Dicha investidura le hacía jefe de las
milicias, guardián de las llaves de la ciudad, portador del pendón y uno de los pocos
privilegiados que podían entrar en el cabildo con la espada al cinto. No se conocen más
detalles acerca de su juventud y formación intelectual.
PRIMEROS SERVICIOS A LA CORONA
Su primer escalón en su ascendente carrera administrativa fue como corregidor en
el principado de Asturias, y posteriormente en Salamanca, de 1565 a 1568. Su buen
desempeño en ambos lugares y sus influencias en la corte hicieron que el 30 de
abril de 1576 se le concediera el título de conde del Villardompardo y que
en setiembre de 1578 se le nombrara asistente de Sevilla. Este último cargo era muy
importante, similar al de corregidor: como representante del poder central y cabeza de la
corporación municipal, acaparaba multitud de atribuciones: militares y civiles, ejecutivas,
legislativas e incluso judiciales.
La labor que realizó como asistente en Sevilla, de 1578 a 1583, la conocemos gracias a
una relación que él mismo escribió: «Relación de las cosas en que el conde del Villar,
asistente que fue de Sevilla, sirvió a Su Majestad en cinco años o casi que tubo el oficio».1
Esta relación ha sido estudiada por Antonio Domínguez Ortiz, quien destaca algunos
aspectos interesantes de la gestión del conde del Villar, de los que mencionamos algunos:
 Se mostró muy preocupado por los problemas hacendísticos: aumentó
los almojarifazgos e intentó obtener cuantiosos donativos y empréstitos para
auxiliar al rey.
 Durante la guerra con Portugal brindó todo su apoyo a las tropas que iban y
regresaban del frente de lucha: alojó en Sevilla a gran número de soldados con cargo
a su cuenta, asistió a los enfermos y heridos, y formó tres compañías.
 Tomó prevenciones para reprimir el levantamiento de los moriscos.
 Intervino en el traslado de los cuerpos de los príncipes a la nueva capilla real.
No faltaron, sin embargo, enfrentamientos con la Inquisición, un problema que volvería
a tener posteriormente, estando ya en Perú. De todos modos, tras cinco años de gestión,
esta fue muy valorada en el juicio de residencia que se le siguió al poco de culminarla, y
fue fundamental para que se le designara como virrey del Perú. Ya para entonces era de
edad muy madura.

VIRREY DEL PERÚ


La muerte del virrey del Perú, Martín Enríquez de Almansa, tras un breve gobierno
(1584), sorprendió al rey Felipe II, que se apresuró en buscarle sucesor. Se barajaron los
nombres de varios candidatos, como el del marqués de Almazán, el de García Hurtado de
Mendoza, el del conde de Miranda y marqués de Velada. Pero al rey no le satisfizo
ninguno de estos. Fue propuesto entonces Lorenzo Suárez de Mendoza, conde de Coruña
y Virrey de Nueva España, y hasta se llegó a extender su nombramiento, pero por razones
desconocidas este quedó sin efecto. Surgieron entonces otros nombres, entre ellos el del
conde del Villardompardo, quien fue finalmente el elegido por Felipe II, contra la opinión
de sus consejeros, pues consideraban que su avanzada edad podría ser un impedimento
para desempeñar a cabalidad su labor, como había sucedido con su antecesor. Según
parece, pesó en el criterio del rey el buen desempeño del conde como asistente de Sevilla,
particularmente su labor hacendística.

El 31 de marzo de 1584, en San Lorenzo del Escorial, se suscribió la cédula que investía
al conde del Villardompardo como virrey, gobernador y capitán general del Perú y
presidente de la Real Audiencia de Lima. En octubre el flamante virrey se hizo a la vela
en Sanlúcar de Barrameda con un numeroso cortejo de parientes y criados, entre los que
se contaba su hijo Jerónimo de Torres y Portugal, su nieto Fernando de Torres, su sobrino
Diego de Portugal y su hermano político Hernán Carrillo de Córdoba, este último capitán
general de Mar y antepasado del ilustre José Baquíjano y Carrillo. Si bien apresuró su
viaje, su mala salud lo obligó a prolongar algunas de sus etapas. Arribó a Panamá a
principios del año siguiente y en mayo se embarcó para el Perú. Desembarcó
en Paita el 11 de junio de 1585, continuó su viaje por tierra, y tras pasar
por Piura y Trujillo, hizo su entrada solemne en Lima el 21 de noviembre de 1585.

8° GARCÍA HURTADO DE MENDOZA


García Hurtado de Mendoza y Manrique, IV marqués de
Cañete (Cuenca, 21 de julio de 1535 - Madrid, 4 de
febrero de 1609). Fue un militar español, que llegó a ser gobernador
de Chile y Perú. Fue gobernador de Chile (1556-1561), donde derrotó
a Caupolicán (1557) y se encargó de organizar la administración
española. Durante su etapa como virrey del Perú, apresó a Hawkins
(1594) y mejoró las finanzas y la administración.
VIRREY DEL PERÚ
El rey Felipe II, considerando la larga experiencia de García Hurtado de Mendoza como
militar tanto en el Viejo como en el Nuevo Mundo, así como su conocimiento de las
tierras y gentes americanas, lo nombró virrey, gobernador y capitán general del Perú (30
de julio de 1588). Partió éste de Sanlúcar de Barrameda el 13 de marzo de 1589, a bordo
de una flota que hizo escala en Cartagena de Indias, ubicada en la costa caribeña, luego
pasó a Nombre de Dios en Centroamérica para ir por tierra a la ciudad de Panamá y desde
allí continuar por vía marítima hacia la costa pacífica de Sudamérica, haciendo escala
en Paita, hasta llegar al Callao el 28 de noviembre de 1589.
García Hurtado de Mendoza fue recibido en la ciudad de Lima con pompa extraordinaria
el 6 de enero de 1590, y se encontró con el virrey saliente, el anciano conde de Villar-
don-pardo. Vino acompañado de su esposa, una dama de noble alcurnia llamada Teresa
de Castro y de la Cueva, que resultó ser así la primera virreina que radicó en el Perú y
cuyo nombre sería perennizado mediante la fundación de la villa de Castrovirreyna
(1591), elevada luego a la categoría de ciudad. Junto con el virrey y la virreina vinieron
con un crecido séquito, conformado por caballeros, damas, pajes y criados.
EL AUGE DE LA MINERÍA
En 1590 el minero Antonio Pérez Griego descubrió los yacimientos argentíferos
de Orcococha, en la sierra central del Perú. Pronto se difundió la fama de su riqueza, y
desde Huamanga y Huancavelica acudieron muchos españoles para instalarse en el lugar,
pese a lo áspero del territorio. El virrey decidió entonces fundar allí una población, que
fue Castrovirreyna, llamada así en homenaje a su esposa Teresa de Castro (1591). Estas
minas fueron tan productivas, que se dice que en solo dos días un español sacó el valor
de 50.000 pesos. También tuvieron notable rendimiento las minas de azogue o mercurio
de la vecina Huancavelica, metal este fundamental para la obtención de la plata por el
método de la amalgamación; tan elevada fue la producción de azogue que se pudo
exportar a México y almacenarse miles de quintales dentro del territorio peruano. Otro
yacimiento de plata se descubrió en el cerro de Colquepocro, en la provincia de
Huaylas (actual Áncash). También se empezaron a explotar varias minas de oro, y se
intensificó la labor en otras, como las del cerro de Zaruma (en el actual Ecuador). Este
auge minero permitió el envío a España de enormes remesas de dinero, como veremos
enseguida.

9° LUIS DE VELASCO Y CASTILLA


Luis de Velasco y Castilla (Carrión de los Condes, 1539 - Sevilla, 7 de
septiembre de 1617), I marqués de Salinas del Río Pisuerga, fue
un noble, político y militar español, que fue virrey de Nueva España en
dos ocasiones (1590-1595 y 1607-1611) y también virrey del
Perú (1596-1604).
BIOGRAFÍA
Nació en Carrión de los Condes (Palencia) en 1539, fue hijo de Luis de Velasco y Ruiz
de Alarcón, señor de Salinas y pariente de los Condestables de Castilla, perteneció a
la Casa de Velasco, y de su mujer Ana de Castilla y Mendoza, descendiente del rey Pedro
I de Castilla.
Tras haber ocupado el Virreinato de Navarra, don Luis padre es nombrado Virrey de
Nueva España, por lo que la familia se traslada al Nuevo Mundo. A la muerte de su padre,
siguió en Nueva España como regidor, pero a consecuencia de sus enfrentamientos
con Álvaro Manrique de Zúñiga, el nuevo Virrey, volvió a España donde Felipe II lo
nombró embajador en Florencia.
De regreso a la Nueva España continuó la labor de su padre con sus medidas a favor de
los indígenas. Conquistó a los chichimecas fundando establecimientos de tlaxcaltecas,
aliados de los españoles, entre ellos, en varias ciudades en los actuales estados
de Coahuila (Saltillo), Jalisco, Guanajuato, Zacatecas y San Luis Potosí, o la de San Luis
de la Paz. Duplicó el tributo que pagaban los naturales. Embelleció la Ciudad de México,
abriendo el parque de la Alameda Central, mejoró las fortificaciones de Veracruz y
encargó a Juan de Oñate la exploración y conquista de los territorios conocidos
posteriormente como Nuevo México.
En 1595 fue nombrado virrey de Perú, cargo que comenzó a desempeñar en junio del año
siguiente. Como había hecho en Nueva España, trató de mejorar las condiciones de
trabajo de los indígenas, particularmente en las minas. Don Luis de Velasco gobernó en
Lima durante ocho años, hasta la llegada de su sucesor, el conde de Monterrey, su sucesor
en Nueva España, según costumbre adoptada por la corte en los últimos años. Tras zarpar
de Acapulco desembarcó en Paita, desde donde hizo el recorrido hacia Lima por tierra.
Entró en la capital bajo palio el 23 de junio de 1596. Durante su gestión, la Hacienda Real
remitió a España un total de 11.112.008 ducados en dinero y metales finos. Las ciudades
más importantes fundadas durante su mandato fueron Carrión de Velasco, hoy Huaura -
Villa Huaura - Villa Carrión de Velasco (1597), y San Felipe de Austria de Oruro en
Charcas (1604). En lo que respecta a su labor en el campo de la educación, destaca la
fundación de varias escuelas en Lima para la educación de los niños pobres criollos y
peninsulares, así como la inauguración de la Ermita de la Caridad, donde las niñas de la
nobleza se instruían, dotaban y casaban.
En 1604 volvió a Nueva España, siendo nombrado de nuevo virrey en 1607 a la edad de
70 años.
Durante su segundo mandato en Nueva España comenzó las obras del desagüe del valle
de México, remedio propuesto por el ingeniero y cosmógrafo Enrico Martínez para
resolver el problema de las frecuentes inundaciones que sufría la Ciudad de México.
Sofocó una revuelta de esclavos negros cerca de Orizaba y financió las exploraciones
de Sebastián Vizcaíno a Japón (1611).
Concluido su mandato, regresó a España donde se le confió la presidencia del Consejo de
Indias. Considerado uno de los administradores coloniales más capaces, en recompensa a
sus servicios recibió el título de marqués, con lo que pasó de señor a marqués de Salinas
del Río Pisuerga.
10° GASPAR DE ZÚÑIGA ACEVEDO Y VELASCO
Gaspar de Zúñiga Acevedo y Velasco nació en Monterrey, castillo
del municipio de Monterrey, provincia de Orense, en 1560 y falleció
en Lima el 10 de febrero de 1606, noble español de la Casa de
Zúñiga, V conde de Monterrey, señor de Biedma, Ulloa y de la casa de
la Ribera, pertiguero mayor de Santiago de Compostela, virrey,
gobernador y capitán general del reino de la Nueva España (México),
presidente de la Real Audiencia de México, luego virrey, gobernador y
capitán general del reino del Perú, presidente de la Real Audiencia de
la Ciudad de los Reyes (Lima).

VIRREY DEL REINO DEL PERÚ


El conde de Monterrey, fue el décimo virrey del Perú, que gobernó del 1604 al 1606. Su
despedida de México fue muy suntuosa y espléndida, se embarcó en Acapulco el primero
de abril de 1604 estando delicado de salud, arribó a Paita el 24 de mayo y por diversas
causas, enfermedad y mal tiempo se vio obligado a proseguir el viaje por tierra, no
obstante lo fatigoso de las jornadas y el 14 de julio salió en dirección a Lima, en agosto
pasaba por Lambayeque y en octubre salía de Trujillo, en noviembre pasó unos días en
Huaura y, finalmente, después de haberse entrevistado con su antecesor, nuevamente Luis
de Velasco y Castilla, Marqués de Salinas, hizo su entrada oficial en Lima el 8 de
diciembre de 1604.
El cabildo de Lima hizo postergar las fiestas, que de costumbre se celebraban al
advenimiento del nuevo virrey, por tener que realizarse un auto de fe el 13 de marzo de
1605 (reos de poca consideración, que no fueron quemados). Las fiestas en honor del
conde de Monterrey se celebraron con corrida de toros y juego de cañas el 15 de abril y
los estudiantes del colegio de San Pablo le dieron recibimiento el 29 de julio del mismo
año.
El virrey conde de Monterrey impuso en 1604 el impuesto de pesas y medidas para
financiamiento del Cabildo. El 25 de noviembre de 1604 fuertes temblores de tierra
causaron en la provincia de Arequipa graves daños. Conociendo el conde de Monterrey,
la emigración de indios, que por temor huyeron de sus pueblos, a consecuencia de los
grandes estragos y repetidos temblores que causó la erupción del volcán Huaynaputina
en 1600 en la provincia de Arequipa, comisionó al licenciado Juan Antonio de Rivero y
Alderete para que dé un informe sobre los daños ocurridos y para que consiga buscar los
prófugos, hacer que regresen con sus familias y trabajen en la reconstrucción de sus
pueblos.
El conde de Monterrey al tener conocimiento, envió una nave a la isla de Galápagos para
rescatar a diez naufragados, que habían permanecido allí dos años de penurias. La nave
trajo a los rescatados en noviembre de 1605 a Lima.
Mandó crear el Tribunal de Cuentas con los fueros y preeminencias de la Contaduría
Mayor de Castilla. El Tribunal quedó organizado en febrero de 1607. Se erigió el
obispado de Santa Cruz de la Sierra en 1605. Se fundaron en Lima los monasterios de la
recoleta de Belén, de religiosos mercedarios, la recolección de Santa María Magdalena,
de religiosos dominicanos y el colegio de San Ildefonso, de la orden de San Agustín.
Su obra colonizadora prevenía la fundación de villas. Se fundó el 29 de septiembre de
1606 la villa de San Miguel de Ibarra en el Ecuador. Esta villa debía de servir de enlace
entre Quito y Pasto, así como entre Quito y la provincia de Esmeralda. San Felipe de
Austria de Oruro en Bolivia se fundó el primero de noviembre de 1606. La villa situada
en un centro minero creció rápidamente.

11° JUAN DE MENDOZA Y LUNA


Juan de Mendoza y Luna,
(Guadalajara, España, Enero de 1571 - Madrid, ibid., 9 de
octubre de 1628), de la Casa de los Mendoza, III Marqués de
Montesclaros y administrador de las provincias españolas en América.
Fue sucesivamente el undécimo Virrey de Nueva España (1603-1607) y
del Perú (1607-1615).
BIOGRAFÍA
Juan de Mendoza y Luna era el hijo póstumo del II Marqués de Montesclaros. Fue criado
por su madre, Isabel Manrique de Padilla.
Se distinguió en el servicio en el ejército del Duque de Alba en la campaña portuguesa,
como un Capitán de lanceros. Para su servicio, le concedieron el honor de
ser Caballero de la Orden de Santiago en 1591. Más tarde será Gobernador de Sevilla.
VIRREY DE NUEVA ESPAÑA
Sirvió en el ejército con distinción en la campaña de Portugal. Fue nombrado Virrey de
la Nueva España el 19 de mayo de 1603, acompañado de su esposa, Ana de Medoza
(también conocida como Ana Messía), llegando el 27 de octubre del mismo año. Al poco
de su llegada, en Agosto de 1604, una inundación asoló a la Ciudad de México, por lo
que propuso el traslado de la capital a Tacubaya. Ante lo costoso del plan, pues
los palacios virreinales no se podían abandonar, pues su construcción fue muy cara,
ordenó una serie de obras para el desagüe de las lagunas de la Ciudad de México (desagüe
de Huehuetoca, que no fue terminado hasta el mandato de su sucesor), de forma que se
evitasen nuevas inundaciones. También mandó empedrar las calles de la Ciudad de
México, construir un acueducto para el abastecimiento de agua potable desde
las fuentes de Chapultepec al centro de la ciudad (que no sería finalizado tampoco
durante su mandato) y una serie de calzadas que de la Ciudad de México llevaban
a Guadalupe, San Cristóbal, San Antonio Abad, Chapultepec y otras; Terminose su
gobierno en el 2 de julio de 1607, embarcándose en Acapulco, destino: Lima.
VIRREY DEL PERÚ
Durante su mandato como Virrey del Perú, que comenzó desde el 21 de
diciembre de 1607, fomentó la flota, mandó confeccionar el primer censo de Lima,
construyó el Puente de Piedra sobre el río Rímac y la Alameda de los Descalzos, y se hizo
conocido por su protección de los indios, por la denuncia ante el Rey de las excesivas
riquezas que atesoraban las órdenes religiosas, así como por la institución del
primer tribunal mayor de cuentas del virreinato. Durante su mandato (que terminó el 18
de diciembre de 1615) se descubrió una mina de mercurio en Huancavelica.

12° FRANCISCO DE BORJA Y ARAGÓN


Francisco de Borja y Aragón (mar Tirreno 1581- Madrid, 1658) fue un
noble, militar, escritor y poeta español, II conde de Mayalde y conocido,
por su matrimonio, como el Príncipe de Esquilache, fue hijo de Juan de
Borja y Castro, I conde de Mayalde (tercer hijo de San Francisco de Borja),
y de Francisca de Aragón y Barreto, I condesa de Ficalho, y descendiente
del rey Fernando II de Aragón.3
Aprovechado en los estudios desde su infancia, se inclinó tempranamente
por las artes y las letras. Por méritos familiares, fue nombrado caballero de la Orden de
Montesa en 1588, así como de la de Santiago con dos encomiendas. También
fue gentilhombre de cámara del rey Felipe III. Contrajo matrimonio en 1602 con su
pariente Ana de Borja, Princesa de Esquilache y condesa de Simari.
EN EL PERÚ
Nombrado Virrey del Perú el 19 de julio de 1614, obtuvo licencia para llevar consigo un
séquito de sesenta válidos y servidores, además de las veinticuarto criadas que
acompañaron a su esposa. Hizo su solemne entrada en Lima el 18 de diciembre de 1615,
reemplazando al marqués de Montesclaros. Para atender las funciones de gobierno
solicitó la asesoría de Leandro de Larrinaga Salazar.
Amenazado el litoral peruano por incursiones piráticas, proveyó de inmediato la defensa
de la costa merodeada por marinos holandeses, como Jacob Le Maire y Willem Schouten.
Favoreció la reglamentación de los repartimientos para evitar los abusos cometidos en
perjuicio de los indios, no obstante durante esos años el procurador Juan Ortiz de
Cervantes presentó sucesivos memoriales en la Corte a favor de la perpetuidad de
las encomiendas. Creó en Lima el Colegio del Príncipe, para la educación de los hijos de
indios nobles (1620), y en Cuzco los colegios de San Francisco de Borja y San
Bernardo (1619) para los hijos de caciques y de conquistadores, respectivamente. Dio
cumplimiento a las bulas de erección de las diócesis de Trujillo, Concepción y Buenos
Aires (1616). Favoreció la entrada de Diego Vaca de Vega a las tierras habitadas por los
nativos de Maynas y la fundación del pueblo que, en su homenaje, lleva el nombre
de Borja (8 de diciembre de 1619). Procedió a reglamentar e instalar el Tribunal del
Consulado (20 de diciembre de 1619).
A su solicitud, se le nombró sucesor y sin esperarlo, emprendió viaje de regreso a España
el 31 de diciembre de 1621.
13° DIEGO FERNÁNDEZ DE CÓRDOBA (MARQUÉS DE
GUADALCÁZAR)
Diego Fernández de Córdoba y López de las Roelas, I marqués de
Guadalcázar y conde de las Posadas (Sevilla, 1578
– Guadalcázar, Córdoba, 6 de octubre de 1630), fue Virrey de Nueva
España del 18 de octubre de 1612 al 14 de marzo de 1621 y Virrey del
Perú del 25 de julio de 1622 al 14 de enero de 1629.
BIOGRAFÍA
Nacido en Sevilla, hijo de Francisco Fernández de Córdoba y Manrique, IX señor de
Guadalcázar, y de Francisca Melgarejo de las Roelas. En 1598, a la edad de 20 años,
recorrió Centroeuropa como Embajador para traer a España a Margarita de Austria-
Estiria, hija del archiduque Carlos II de Austria y esposa del rey Felipe III, siendo
honrado con el título de marqués de Guadalcázar en 1609.
Casó con la dama noble alemana Mariana Riederer de Paar y Ahahim (†25 de febrero de
1619), nacida en la ciudad de Paar en Baviera. Tuvo tres hijos:
 Francisco Antonio Fernández de Córdoba y Riederer de Paar, II marqués de
Guadalcázar, I conde de las Posadas. Casado con doña Luisa de Benavides y
Bazán.
 Mariana Francisca, dama de honor de la reina Isabel de Francia, primera mujer
de Felipe IV, que casó con su primo lejano Francisco Fernández de Córdoba y
Rojas, I conde de Casa Palma, caballero de la Orden de Alcántara.
 Brianda, casada con Baltasar Álvarez de Toledo, conde de Cedillo.

VIRREINATO DE NUEVA ESPAÑA


Diego Fernández de Córdoba fue nombrado Virrey de Nueva España por Felipe III, para
quién había servido de ayudante de cámara.
Durante su mandato como virrey de Nueva España, envió al capitán Diego Martínez de
Hurdáiz para evitar un levantamiento por parte de los tehuecos, un subgrupo étnico de los
cahuitas de Sinaloa. Martínez de Hurdáiz logró vencer tras varias duras batallas. Como
virrey fundó también algunas ciudades en América como Lerma en 1613, Córdoba en
1618, y Guadalcázar en 1620.
La Córdoba mexicana, ahora situada en el Estado de Veracruz fue fundada en parte para
ayudar a eliminar las bandas de esclavos negros saqueadores que se aprovechaban de los
viajeros entre Veracruz y México. Completó además el Fuerte de San Diego
en Acapulco.
En 1616, reinició las obras del acueducto que abastecía al Valle de México, suspendidas
desde 1614. El rey Felipe III había elegido al hidrógrafo neerlandés Adrian Boot para
realizar el proyecto de alcantarillado y hacerse cargo de las operaciones. Boot, que estuvo
al cargo de numerosos proyectos de abastecimiento en Francia, viajó a la Ciudad de
México (con un sueldo de 100 ducados al mes) y revisó el trabajo ya realizado. Su opinión
fue que no serviría para drenar los lagos, pero que podría servir para desviar el río
Cuautitlán, la principal causa de las continuas inundaciones de la zona. El
ingeniero Enrico Martínez se ofreció para completar el trabajo con 300 hombres y 100
000 pesos, pero la obra se retrasó en espera de la aprobación del rey.
El 16 de noviembre 1616 se desató otra insurrección indígena, esta vez entre
los tepehuanes y las tribus vecinas del norte. El movimiento, encabezado por un cacique
que afirmaba ser el «Hijo del Sol y Dios de los Cielos y la Tierra», logró acabar con la
vida de varios misioneros jesuitas españoles y con unos 200 mestizos de diferentes edades
y sexos. El gobernador de Durango, con la ayuda enviada por el virrey, levantó una
milicia que, tras tres meses de intensos combates, consiguió acabar prácticamente con la
revuelta.
También en 1616 se produjeron muy malas cosechas debido a la sequía, lo que provocó
hambruna por toda Nueva España. En 1620, un incendio destruyó gran parte de Veracruz.
Diego Fernández de Córdoba también mejoró el saneamiento y abastecimiento de agua
de la Ciudad de México, completando en 1620 el acueducto de Chapultepec, formado por
900 arcos. Estableció un tribunal para regular la compra y venta de mercurio, utilizado en
la producción del oro y la plata que las minas de la Nueva España habían comenzado a
exportar en buena cantidad en Huancavelica. Debido a sus grandes obras, recibió el apodo
de «El Buen Virrey».
VIRREINATO DEL PERÚ
En Perú, Diego Fernández de Córdoba reformó el sistema fiscal y acabó con las luchas
entre familias rivales que ensangrentaban el virreinato, sobre todo en la ciudad de Potosí.
También defendió Lima de los ataques piratas, incluidos los de Jacques L'Hermite, un
comerciante y almirante neerlandés, conocido por sus viajes alrededor del globo con
la Flota de Nassau (1623–1626), y por su ataque a El Callao en 1624, viaje en el que
perdió la vida. En 1629, Diego Fernández de Córdoba renunció a su cargo y regresó
a España, donde murió al año siguiente en su palacio de Guadalcázar en la villa de su
nombre, a la edad de 52 años. Fue enterrado en la iglesia de Nuestra Señora Virgen de la
Caridad y Santísimo Sacramento de la Salud en Guadalcázar.

14° LUIS JERÓNIMO FERNÁNDEZ DE CABRERA Y BOBADILLA


Luis Jerónimo de Cabrera y Bobadilla (Madrid, 1589 – ib., 28 de
octubre de 1647), cuarto conde de Chinchón y funcionario colonial
español. Fue tesorero general del Consejo de Aragón entre 1612 y 16271
y virrey del Perú desde 1629 hasta 1639.
BIOGRAFÍA
Cabrera y Pacheco nació en Madrid en 1589 perteneciente a una familia
cercana al trono español. Sus padres fueron Diego Fernández de Cabrera y Mendoza,
tercer conde de Chinchón, e Inés Pacheco, hija del marqués de Villena y duque de
Escalona Diego López Pacheco, y de Luisa Bernarda de Cabrera y Bobadilla, tercera
marquesa de Moya. Los padres de Don Luis eran primos.
De la época de su mandato datan el hallazgo de minas de plata en el Cerro de Pasco y el
hallazgo de las propiedades febrífugas de la corteza de quina.
Al concluir su mandato como virrey en 1639, Cabrera regresó a España, donde llegó a ser
consejero de estado y acompañó al rey Felipe IV en la campaña de Navarra, Aragón y
Valencia.
Contrajo matrimonio dos veces: la primera con Ana Osorio Manrique, hija de
los marqueses de Astorga, con quien no tuvo sucesión; la segunda con Francisca Enríquez
de Rivera, hija de Per Afán de Rivera, con quien tuvo un único hijo, Francisco, que le
sucedió en sus títulos nobiliarios.

15° PEDRO ÁLVAREZ DE TOLEDO Y LEIVA


Pedro (Álvarez) de Toledo y Leiva (Úbeda, 1585 - Mancera de
Abajo, 9 de marzo de 1654) fue
un noble, político y militar español titulado primer marqués de
Mancera y IV señor de las Cinco Villas, que llegó a ser
gobernador y capitán general de Galicia durante ocho años
y Virrey del Perú (1639-1648). Tuvo entre sus hijos a Antonio
Álvarez de Toledo y Salazar, Virrey de Nueva España y II
marqués de Mancera y a Francisca Álvarez de Toledo, I marquesa
de Montalbo.
PRIMEROS AÑOS
Nació en la ciudad de Úbeda (Jaén) en el año 1585, siendo hijo de Luis de Toledo y Rojas,
V señor de Mancera en la provincia de Salamanca y Cinco Villas
y comendador de Alange en la Orden de Santiago, y de Isabel de Leiva, hija de Sancho
Martínez de Leiva, Virrey de Navarra, y de Leonor de Mendoza, hija de los señores de
La Corzana. Fue comendador de Esparragal y caballero de la Orden de Alcántara de
la Orden de Calatrava.
Desde muy joven sirvió a bordo de las galeras, con quince años ya se halló combatiendo
en Italia (1600), y un año después en la campaña de Argel conducida por el príncipe Juan
Andrea Doria. Al mando de cinco galeras concurrió a la defensa del estrecho de
Gibraltar (1607), atacado por los moros. Después ejerció cargos de gobierno: como
miembro del Consejo colateral de Nápoles durante el virreinato de Antonio Zapata y
Cisneros,1 y llegó a ser teniente general de las galeras de Sicilia (1622).
Una vez en la corte, recibió el título de Marqués de Mancera (17 de julio de 1623) y pasó
a integrar el Consejo Supremo de Guerra. El 4 de agosto de 1631 fue designado
gobernador y capitán general de Galicia, cargo que ocupó hasta 1637, que fue nombrado
gobernador de Orán. Finalmente recibió el 24 de febrero de 1638 el cargo de Virrey del
Perú, y empleó más de un año en los preparativos de viaje, pues salió de Cádiz el 20 de
mayo de 1639.
VIRREY DEL PERÚ
Tomó posesión de su cargo el 18 de diciembre de 1639, y lo entregó a García Sarmiento
de Sotomayor, II conde de Salvatierra el 20 de septiembre de 1648; de modo que rigió los
destinos del Perú durante ocho años, nueve meses y dos días.
Ante las frecuentes incursiones de los piratas, y aconsejado por su experiencia militar,
dispuso la fortificación del Callao (1640) levantando una muralla de 4 Km de largo, la
erección de fuertes en Arica y Valdivia (isla Mancera, denominada así en su honor), y
aún la defensa de Buenos Aires. Introdujo el uso del papel sellado (1641). Visitó las
minas de azogue de Huancavelica (1645), para reformar su administración y asegurar el
aprovisionamiento del metal; intentó ordenar la explotación del mineral de Potosí.
Dispuso la venta y composición de tierras, y mediante su ejecución obtuvo 2 millones de
pesos para la Corona. Aunque tendió a "la conservación, buen tratamiento y alivio de los
indios", reconoció que éstos tenían por enemigos a corregidores, curas y caciques,
"atentos a enriquecer de su sudor", y que ninguna preocupación mostraban por obedecer
las providencias dictadas para amparar a aquellos.
Para conocimiento de su sucesor preparó una Relación del estado del gobierno del
Perú (al parecer impresa en Lima hacia 1648). De vuelta en la corte, se retiró a su palacio
de Mancera, donde murió el 9 de marzo de 1654.

16° GARCÍA SARMIENTO DE SOTOMAYOR


INFANCIA Y JUVENTUD
Hijo de Diego Sarmiento de Sotomayor, primer conde de
Salvatierra y marqués del Sobroso, y Leonor de Luna Enrríquez
Sarmiento y Manrique, hermana del conde de Fuentidueña.
Visto su celo en el cumplimiento de diversos cargos cortesanos, el 31 de
marzo de 1631 fue nombrado maestre de campo de la infantería
organizada en Galicia para marchar a Flandes; y sucesivamente pasó a ser
asistente y maestre de campo general de Sevilla (1634), y gobernador de la armada real.

VIRREY DE LA NUEVA ESPAÑA


Elegido Virrey de la Nueva España, el 1 de julio de 1642, tomó posesión de su gobierno
el 13 de noviembre de 1642, y lo ejerció hasta el 13 de mayo de 1648. Allí se enemistó
con el obispo de Puebla, Juan de Palafox y Mendoza, debido al apoyo que brindó a
los jesuitas en las disputas que mantuvieron con el prelado y, llegadas algunas quejas a la
corte, se resolvió su traslado al Virreinato del Perú, el 8 de julio de 1647. Sin embargo,
demoró su viaje para hacer entrega del gobierno a su sucesor.
VIRREY DEL PERÚ
Llegó al Callao el 28 de agosto de 1648, pero su entrada oficial en Lima se efectuó el 20
de septiembre de 1648. Ante posibles incursiones de los portugueses, dispuso que los
comerciantes de esa nacionalidad vendieran las naves que poseían para sus operaciones
en el Océano Pacífico, y para cortar la circulación de la moneda de baja ley, limitó
primero su valor cancelatorio y luego declaró su invalidez. Ordenó la Real Hacienda,
cobrando los adeudos al fisco y promoviendo la actividad minera. Favoreció las misiones
de Maynas, atendidas por los jesuitas. Afectado el Cuzco tras el terremoto del 31 de
marzo de 1650, comenzó las tareas de reconstrucción. En Lima dispuso la construcción
de la pila ornamental de la plaza mayor.
Concluyó su mandato el 24 de febrero de 1655, pero permaneció en Lima, debido al
estado de guerra entre España e Inglaterra.

17° LUIS ENRÍQUEZ DE GUZMÁN


Luis Enríquez de Guzmán (c. 1600 – 12 de marzo de 1667) fue
un noble y político español que desempeñó los cargos de 21º Virrey de
Nueva España y 17º Virrey del Perú.
ORÍGENES
Nació hacia el año 1600, siendo hijo de Luis Enríquez de Almansa y Rojas
(hijo de Juan Enríquez de Almansa, II marqués de Alcañices), conde de Almansa y
de Vila Flor, y de Juana Ignacia Quaresma Peçanha, hija de Manuel Quaresma, veedor de
la hacienda real de Sebastián I de Portugal y del Consejo de Estado del Reino de Portugal.
Fue segundo conde de Vila Flor, IX conde de Alba de Liste, Grande de España, señor de
las villas de Garrovillas, Membibre y Castrocalbón, alférez y alguacil mayor de Zamora;
y posteriormente alcaide perpetuo de las torres y fortalezas de dicha ciudad, alcaide y
escribano mayor de rentas de Sacas, y caballero y comendador de la Orden de Calatrava.
VIRREY DEL PERÚ
Llegó a Paita el 3 de enero de 1655, donde recibió la noticia de la pérdida de la nao
capitana de la Armada del Sur en un naufragio, con 600 hombres y seis millones de pesos
en oro y plata. Hizo su entrada oficial en Lima el 24 de febrero del mismo año, y la
primera orden recibida fue la de enviar a España un millón de pesos.
Durante su gobierno, en el mediodía del 13 de noviembre tuvo lugar un terrible terremoto
que estremeció Lima y destruyó Callao, causando grandes daños materiales y humanos.
Pasó grandes apuros para mitigar el desastre y conseguir devolver todo a la normalidad.
Afrontó y redujo la sublevación iniciada en Tucumán por Pedro Bohórquez, combatió a
los araucanos, quienes saquearon Valdivia y Concepción, y se descubrieron en 1657 los
minerales de Laicacota, cuya explotación originó el auge de Puno.
En colaboración con el Cosmografo Mayor Francisco Ruiz Lozano y Juan Ramón
Koenig, fundó la Academia Real de Náutica de Lima el 22 de diciembre de 1657, para la
instrucción de los pilotos de la Mar del Sur, y proyectó la derogación de la institución de
la mita, fuente de excesos contra los indios y de su permanente malestar.
Tuvo constantes desavenencias con la iglesia católica en general y con el arzobispo de
Lima, Pedro de Villagómez en particular, por cuestiones de jurisdicción y preeminencias,
y llegó a tener dificultades con los ministros de la Inquisición y con el tribunal de la Santa
Cruzada. Sus disputas eclesiásticas se originaron por un libro que siempre le acompañaba,
que estaba escrito por el holandés Guillermo Lombardo. Los problemas ocasionados
llegaron a tal punto que un día tuvo que abandonar la misa ante una lluvia de insultos,
siendo calificado como el Virrey hereje.
Una vez finalizado su gobierno, el 31 de julio de 1661 entregó el bastón de mando a su
sobrino Diego IV de Benavides y de la Cueva, VIII conde de Santisteban del Puerto y
I marqués de Solera, y permaneció en Lima hasta la resolución de su juicio de residencia,
que siendo favorable regresó a España el 2 de diciembre de 1662, donde falleció el 12 de
marzo de 1667.

18° DIEGO IV DE BENAVIDES Y DE LA CUEVA


Diego IV de Benavides y de la Cueva (Santisteban del Puerto, 25 de
febrero de 1607 - Lima, 19 de marzo de 1666) fue
un noble, militar, diplomático y escritor español, titulado octavo conde de
Santisteban del Puerto y creado primer marqués de Solera(1637). Fue
además, XVI señor de la Casa de Bedmar, XIX señor de la Casa de
Benavides, señor de la Casa de la Cueva, de Finelas e Ybros, caudillo
mayor del Reino de Jaén, caballero y Trece de la Orden de Santiago, gobernador y capitán
general de Galicia, Virrey de Navarra y del Perú.

BIOGRAFÍA
Nació en la villa de Santisteban del Puerto en el año 1607, siendo hijo de Francisco de
Benavides y de la Cueva, séptimo conde de Santisteban del Puerto, y de Brianda de Bazán
y Benavides, hija de Álvaro de Bazán, primer marqués de Santa Cruz. Se trasladó a
estudiar a Madrid, donde recibió una educación humanística de parte de los jesuitas en
el Colegio Imperial de Madrid, y posteriormente a la Universidad de Salamanca,
siendo colegial de San Bartolomé.
Luchó en Aragón y Portugal, y obtuvo la encomienda de Monreal por la Orden de
Santiago, de la que fue caballero y Trece de la orden. Después de la guerra con Portugal
en 1643, fue nombrado capitán general de las Fronteras y más tarde gobernador y capitán
general de Galicia. En 1653 fue nombrado Virrey y capitán general de Navarra. Por sus
invalorables servicios diplomáticos en la negociación de 1659 (Paz de los Pirineos) y el
posterior matrimonio de la princesa María Teresa de Austria con Luis XIV de Francia, el
rey Felipe IV de España elevó su señorío de Solera a marquesado, creando
el Marquesado de Solera.
Como escritor destacan entre sus obras los Epigramas latinos del humanista giennense D.
Diego de Benavides y de la Cueva (Latin epigrams) y Horae succisiuae siue
Elucubrationes. Esta última obra es una antología poética recopilada por sus
hijos Manuel y Francisco de Benavides que fue publicada en 1660 (Segunda
edición, 1664).
En 1661 fue nombrado virrey del Perú, llegando a Lima el 31 de diciembre. Durante su
administración, se preocupó mucho por la condición de los indígenas, particularmente
por su educación y condiciones de trabajo, estableciendo la llamada Ordenanza de
Obrajes en 1664.
Enfrentó terremotos y epidemias, y pudo erradicar las disputas mineras de los españoles.
Construyó el Hospital de San Bartolomé y también el primer teatro de Lima. Su tercera
mujer destacó en el mandato de su marido como una prevaricadora, pues su mayor tarea
fue la de vender cargos públicos, así como asistir a fiestas y actos públicos.
Falleció en la ciudad de Lima el 19 de marzo de 1666.

19° PEDRO ANTONIO FERNÁNDEZ DE CASTRO


Pedro Antonio Fernández de Castro Andrade y Portugal,
(* Madrid, 1632 - † Lima, 1672); X conde de Lemos,
VII Marqués de Sarria, VIII conde de Andrade, IX conde de
Villalba, III Duque de Taurisano y XIX virrey del
Perú de 1667 a 1672. Administrador y político español nacido en
Madrid en 1632, fue educado para la guerra, siendo favorito de la
corte cuando el rey Carlos II lo nombró virrey de Perú en 1666.
El 9 de noviembre de 1667 llegó al puerto del Callao e hizo su entrada en Lima tomando
posesión de su cargo el 21 de noviembre como nuevo virrey del Perú.
Fue famoso en ese período al ser justiciero e inflexible, se preocupó por la pureza de
prácticas religiosas. Dio impulso a la construcción de edificaciones en Lima, y fundó
algunas instituciones públicas en Lima, como un hospital para indios convalecientes y un
hospicio para mujeres arrepentidas: la Casa de las Amparadas. En el Perú, desciende de
Pedro Antonio Fernández de Castro la familia Castro-Sayán.
DESÓRDENES EN PUNO
Bandos de mineros se enfrascaron en disputas, el virrey conde de Lemos acudió para
resolver la situación, ejecutando a los principales revoltosos. Como principal dirigente
estaba don Felipe Corrales, señor de las propiedades cercanas a la ciudad, propietario de
principales minas en la región de Puno, acompañado de más de mil personas; mineros de
Puno, Potosí, y el norte de Chile que se revelaron ante el virrey conde de Lemos que había
llegado a la ciudad de visita.
EN LIMA
A principios de los 1670s las noticias que llegaron a Lima sobre el famoso corsario
inglés Henry Morgan, quien había tomado Chagres, capturado y saqueado la ciudad
de Panamá motivaron a que el virrey Fernández de Castro enviara una expedición de 18
barcos y casi 3 000 soldados, pero su arribo a Panamá fue demasiado tarde; Morgan ya
había abandonado la ciudad.
20° BALTASAR DE LA CUEVA Y ENRÍQUEZ DE CABRERA
Baltasar de la Cueva y Enríquez de
Cabrera (Madrid, 1627 – Madrid, 3 de abril de 1686) fue
un noble, político, militar y diplomático español que ocupó el
cargo de XX Virrey del Perú. Fue además, por su matrimonio,
séptimo conde de Castellar y cuarto marqués de Malagón, y
hermano, entre otros, de Francisco IV Fernández de la Cueva y
Enríquez de Cabrera, VIII duque de Alburquerque, Virrey de Nueva
España y de Sicilia.
PRIMEROS AÑOS
Nació en Madrid y fue bautizado en la iglesia de San Martín el 12 de abril de 1627,
siendo hijo de Francisco III Fernández de la Cueva, VII duque de Alburquerque,
IV marqués de Cuéllar, VII conde de Huelma y de Ledesma, que ocupó los cargos
de Virrey de Cataluña y de Sicilia, y de su tercera esposa, Ana Enríquez de Cabrera y
Colonna, hija de Luis Enríquez de Cabrera y Mendoza, cuarto duque de Medina de
Rioseco, octavo Almirante de Castilla, y de Victoria Colonna, hija del Gran Condestable
de Nápoles.
Fue enviado a Salamanca para comenzar con su instrucción, estudiando en el Colegio
Mayor de San Bartolomé, donde fue recibido como bachiller el 25 de marzo de 1647,
donde fue más tarde rector. Pasó después a la Universidad de Salamanca, de la que
salió licenciado en Cánones y Leyes en 1650, siendo nombrado el mismo año deán de
la Catedral de Salamanca, y un año más tarde ocupó la rectoría de la universidad.
En 1654 fue nombrado oidor de la Real Audiencia y Chancillería de Granada, y el 3 de
marzo de 1659 fue investido caballero de la Orden de Santiago. Sucesivamente ocupó los
cargos de ministro y fiscal del Consejo de las Órdenes, embajador real
en Venecia, gentilhombre de cámara del rey, miembro del Consejo Supremo de Guerra,
y ministro del Consejo de Indias. En 1665 y ocupando este último cargo, fue designado
como embajador extraordinario en Alemania ante Leopoldo I de Habsburgo, Emperador
del Sacro Imperio Romano Germánico hasta que 1671 regresó de nuevo a España siendo
nombrado en 1673 virrey, lugarteniente y capitán general del Reino del Perú, tierra firme
y Chile, además de presidente de la Real Audiencia de Lima.
VIRREY DEL PERÚ
Tras la muerte en el cargo de Pedro Fernández de Castro Andrade y Portugal, X conde de
Lemos, fue designado en funciones Álvaro de Ibarra, hasta que el 26 de
septiembre de 1673 el rey Carlos II de España expidió su Real cédula por la que le
nombró sucesor del conde de Lemos. A su favor jugaba la experiencia como virreyes que
había en su familia, su pertenencia al Consejo de las Indias, que le procuraba cierta
experiencia en los asuntos del Nuevo Mundo, y ser el mejor financiero con que se contaba
en la Corte, por lo que un virrey de estas características en las circunstancias económicas
que vivía el virreinato era una elección muy acertada.
Hizo su entrada en Lima el 15 de agosto de 1674, donde recibió el mando del virreinato
de manos de la Real Audiencia de Lima. La cámara de comerciantes de la ciudad cubrió
el suelo bajo el arco triunfal por donde pasó el nuevo virrey con 400 barras de plata de
4,6 kilogramos cada una. Su mandato se caracterizó por un gobierno económico nunca
antes visto: adoptó severas medidas para reducir considerablemente el gasto público, y
estableció por primera vez un presupuesto general anual. Además, ningún libramiento
podía ser cobrado sin su firma, medida nunca antes aplicada, con lo que consiguió vigilar
mejor que ningún otro virrey todos los movimientos del dinero de la Real Hacienda.
Además del importante ahorro que implantó, durante su mandato un minero de Potosí,
llamado Juan del Cerro, inventó una nueva manera de refinar la plata, consiguiendo con
ello un beneficio del 50 por ciento. Con todo ello, el virrey mandó a España más de 2,5
millones de pesos anuales durante su mandato, más otros 7 millones que envió
a Panamá, Valdivia, Buenos Aires, Huancavelica, Chile y Cartagena de Indias para
llevar a cabo importantes infraestructuras, como las murallas del presidio de El Callao,
que se llevaron a cabo bajo la dirección del ingeniero francés Alejandro de
Bournonville, duque de Bournonville.
La quiebra de diversos comerciantes limeños en 1677, y la decadencia que sufría la feria
de Portobello hicieron que el Tribunal del Consulado de Lima enviase una fuerte queja al
rey sobre el gobierno que llevaba a cabo el conde de Castellar. Carlos II dio la razón a los
comerciantes, y sin tan siquiera dejar que el virrey fuese escuchado, le notificó su
destitución en el cargo de una manera nunca antes vista, escribiendo luego al instante que
reciba el despacho en que se lo envío a mandar, es decir, le obligaba a abandonar su cargo
de manera inmediata.
El 7 de julio de 1678 fue relevado de su cargo, teniendo que entregar el gobierno
a Melchor de Liñán y Cisneros, recién nombrado arzobispo de Lima. Además, fue
obligado a permanecer desterrado en Paita a esperar la resolución de su juicio de
residencia, así como de un estricto juicio paralelo que se llevó a cabo sobre todos sus
actos. El fallo emitido el 24 de abril de 1680 lo dejó absuelto por completo y libre de todo
cargo, y le obligó a pagar 12.000 pesos en concepto de costas. Entonces obtuvo permiso
para trasladarse a Santiago de Surco el 5 de julio de 1681, y de allí nuevamente a Lima,
desde donde zarpó desde el Callao de regreso a España el 21 de septiembre de dicho año.

21° MELCHOR DE LIÑÁN Y CISNEROS


Melchor de Liñán y Cisneros (Torrelaguna, 19 de
diciembre de 1629 - Lima, Virreinato del Perú, 28 de junio de 1708), fue
un clérigo secular y político español que sirvió en distintos cargos
administrativos en los territorios de América. Fue Obispo de Santa
Marta (1664-67) y de Popayán (1667-71), Gobernador y Capitán General
del Nuevo Reino de Granada (1671-75) y Presidente de la Real
Audiencia de Santafé de Bogotá (1671-74), Arzobispo de La Plata (Charcas) (1675-76),
VIII Arzobispo de Lima (1678-1708) y XXI Virrey del Perú (interino, 1678-1681) .
ARZOBISPO DE LIMA Y VIRREY DEL PERÚ
El 14 de diciembre de 1676, Liñán y Cisneros fue promovido a arquidiócesis de Lima,
vacante entonces por la muerte del arzobispo fray Juan de Almoguera. Pero demoró en
tomar posesión de su nueva sede por no llegar oportunamente las bulas y el palio,
pudiendo hacerlo finalmente el 18 de febrero de 1678. Por entonces el virrey Conde de
Castellar era víctima de acusaciones calumniosas que motivaron a que la corte lo cesara
del gobierno y encomendara al arzobispo Liñán el mando interino del Virreinato (8 de
marzo de 1678).
Liñán se convirtió así en el octavo virrey del Perú, cargó que asumió el 7 de julio de 1678.
Por primera vez asumía un arzobispo el mando del virreinato peruano, aunque sólo a título
interino. Su gobierno duraría un breve período de tres años y cuatro meses (1678-1681).
OBRAS DE SU GOBIERNO VIRREINAL
 En el aspecto defensivo, Liñán no dispuso ningún refuerzo especial de Lima como
tampoco del puerto del Callao, y mantuvo la política defensiva de su antecesor.
En agosto de 1680 llegó la noticia de que los corsarios ingleses Bartholomew
Sharp y John Watling habían desembarcado en el golfo de Darién (Nueva
Granada) y capturado el fortín de Chepo además de tomar como presas a dos naves
mercantes. Liñán ordenó que parte de la Armada bajo el mando del
almirante Santiago de Pontejos-Salmón zarpara hacia el norte a enfrentar a los
corsarios. Pontejos partió del Callao al mando de tres buques armados, un patache
y un chinchorro, y 800 hombres para reconocer la costa hasta Panamá, en busca
de los invasores. Las naves corsarias y españolas se cruzaron sin advertirlo en la
zona de Tumaco, lo que permitió que las primeras prosiguieran su avance al sur
hasta llegar al puerto chileno de Coquimbo, que fue saqueado el 13 de
diciembre de 1680. A continuación, los corsarios se dirigieron al puerto
de Arica y, el 9 de febrero de 1681, pretendieron tomar dicha plaza, pero ésta fue
defendida con éxito por las tropas del maestre de campo Gaspar de Oviedo. Los
corsarios se retiraron entonces con dirección al Atlántico.

 La máxima preocupación del virrey-arzobispo se concentró en la protección de


los indios. A su gestión le correspondió aplicar la Recopilación de Leyes de
Indias, que fue promulgada el 18 de mayo de 1680. Un año antes Liñán había
prohibido la esclavitud de los indios apresados en la guerra de la frontera de Chile.
Por Real Cédula de 22 de febrero de 1680 hizo demoler los obrajes, batanes y
chorrillos que carecían de licencia real para funcionar. Sin embargo, en el caso
del trabajo forzado en las minas, autorizó a los corregidores a sustituir a los
mitayos ausentes y fugados con indios "forasteros" y con yanaconas. Dicha
medida condujo a un incremento en el rendimiento de las minas de Potosí y
de Huancavelica, la última de las cuales llegó a producir bajo su gestión 201.800
quintales de azogue.
 Como prueba de su buena administración de la Real Hacienda, Liñán remitió a
España la cantidad de 2.164.080 pesos, a los que se sumó el envío de 150.000
pesos en calidad de donativos de los comerciantes limeños con motivo del
matrimonio del rey Carlos II (a quien la posteridad recuerda con el apelativo de
“El Hechizado”). Liñán, a diferencia de sus antecesores, se negó a tomar prestado
el dinero de la Caja de Censos de Indios a la que el erario adeudaba ya 405.359
pesos y estimó que las deudas particulares ascendían a 3.806.623 pesos.

 Consumó la expulsión de los portugueses del territorio de Sacramento en el Río


de la Plata, y a fin de garantizar el dominio español ordenó la protección militar
de las misiones franciscanas de Carabaya y las jesuitas de Moxos, Chiriguanas
y Paraguay.

 En lo que respecta al Patronato regio, Liñán destituyó a varios curas de parroquia


por expoliar a los indios y conminó a las órdenes religiosas a no regir los curatos
con frailes suplentes. Se mostró más inclinado hacia la orden de los jesuitas, a la
que apoyó siempre en los capítulos para elección de prelados. Por el contrario,
los franciscanos de origen criollo y peninsular protagonizaron en 1680 disturbios
entre sí tanto en Cuzco como en Lima. Los franciscanos criollos (es decir, nacidos
en América) se oponían en el Cuzco al nombramiento de prelados venidos de
España. Los más recalcitrantes fueron trasladados a Lima, donde desencadenaron
violentos incidentes, los que obligó al virrey a usar la fuerza armada para
restablecer el orden. Otro escándalo ocurrió en Quito, donde el provincial de la
orden dominica pretendió ejercer coacción sobre las monjas del monasterio de
Santa Catalina en la elección de su Priora.
Entre otros sucesos importantes mencionamos la aparición en 1680 del primer
cuaderno de efemérides y calendario, publicado por el sabio Juan Ramón Koening,
capellán real, catedrático de matemáticas y cosmógrafo mayor del reino. Asimismo,
se descubrió una mina aurífera en el Illimani que produjo tanto, que bajó el precio de
la onza de oro a 8 pesos de plata.

22° MELCHOR DE NAVARRA Y ROCAFULL


Melchor de Navarra y Rocafull Martínez de Arroytia y Vique, duque
consorte de la
Palata (Torrelacárcel, 1626 - Portobelo, Panamá, 1691) fue un militar
y hombre de estado español, vicecanciller de Aragón y virrey del Perú.
PRIMEROS AÑOS Y FAMILIA
Oriundo de la región de Teruel, fue bautizado el 10 de septiembre de
1627. Hijo de don Melchor Sebastián Navarra y doña Magdalena de Rocafull. Hermano
de doña Juan Condori Navarro de Rocafull Martínez Vique, esposa de don Faustino
Cortés y Sangüesa, I vizconde de Torres Secas.
Fue colegial de Oviedo, en Salamanca y tras haber sido miembro del Consejo
Colateral de Nápoles y fiscal del Consejo de Italia, en 1672 fue nombrado vicecanciller
del Consejo de Aragón, y como tal, miembro de la Junta de Gobierno Universal durante
la minoría de edad de Carlos II. Sus diferencias con Juan José de Austria motivaron que
cuando éste tomó el poder en 1677, fuera destituido en represalia. Tras la muerte del de
Austria, Navarro fue restituido, siendo nombrado consejero de estado en 1680. Fue
Caballero de la Orden de Alcántara.
En el año 1780, doña Josefa Rocafull, condesa de Montealegre y baronesa de Polop y su
hija primogénita, la Marquesa de Albudeyte, solicitaron la facultad de hidalguía para el
Vizconde de Santa Clara, marido de la Marquesa.
VIRREY DEL PERÚ
Fue nombrado virrey del Perú entre los años 1681 y 1689, llegando a Lima el 20 de
noviembre de 1681. Llevó a cabo un censo de los indios para efectuar un nuevo reparto
de los que debían servir en la mita de Potosí; y para remediar su notoria disminución en
los pueblos próximos a dicho asiento, extendió la obligación pertinente aun a los de Canas
y Canchis. Restableció la Casa de Moneda de Lima (1683), que en 1572 había sido
suprimida. Piratas ingleses, comandados por Edward Davis, saquearon e intimidaron a
los pueblos de la costa, sin que hubiera fuerza para contenerlos (1686) y, al tiempo que
los comerciantes armaban naves para perseguirlos, el Virrey inició la fortificación de las
ciudades de Lima y Trujillo mediante la contribución de los gremios, las instituciones y
los vecinos. Pero aquella obra fue destruida por un violento terremoto en Lima y
Callao (20 de octubre de 1687), e incluso el propio Virrey hubo de pasar más de dos
meses bajo una toldería armada en la Plaza Mayor. Asimismo se esforzó por reducir
ciertos privilegios eclesiásticos (inmunidad, protocolo, provisión de curatos, etc.).
Al finalizar su periodo, el 15 de agosto de 1689, se quedó en Lima hasta 1691, pendiente
de la investigación de su administración. Luego se embarcó a España para ocupar la
Presidencia del Consulado de Aragón, pero falleció durante el viaje, el 13 de abril de ese
año, en Portobelo, Panamá.
Según Ricardo Palma "fue el virrey más virrey que tuvo el Perú".

23° MELCHOR PORTOCARRERO LASSO DE LA VEGA


Melchor Antonio Portocarrero y Laso de la Vega, III Conde de
Monclova (Madrid, 1636, España; †Lima, Perú 1705), fue
un aristócrata, militar y político español, XXIX Virrey de la Nueva
España, XVII virrey del Perú.
BIOGRAFÍA
Desde muy joven sirvió como capitán de infantería, maestro de campo
y teniente general de caballería. Acompañó a don Juan José de
Austria a Sicilia, Cataluña y Portugal (1662); estuvo en los sitios de Arrás, Condé y Saint
Guillame; perdió el brazo derecho en la batalla de las Dunas de Dunquerque (1658),
motivo por el cual sus soldados le llamaran: Brazo de Plata, pues usaba una prótesis de
este metal.
VIRREY DEL PERÚ
La Corona le nombró virrey del Perú el 20 de noviembre de 1688, pero no pudo embarcar
hacia El Callao hasta 1690, por falta de embarcaciones. El 11 de mayo de 1689 zarpó
de Acapulco hacia su nuevo destino, Paita, adonde llegó el 22 de junio. Hizo su ingreso
oficial en Lima bajo palio el 15 de agosto de 1689.
En el gobierno económico, se concentró en enfrentar el problema de la decadencia de la
producción minera. En relación con las minas de azogue de Huancavelica, afectadas por
el terremoto de 1687, dispuso la rebaja de la carga sobre los mitayos y ordenó que su
salario se elevara a siete reales por jornada. A continuación, trasladó las mismas reformas
a las minas de plata de Potosí, con las consiguientes protestas de los mineros que pagaban
hasta entonces cuatro reales a cada indio. Pese a esta medida, la villa potosina siguió
despoblándose y la producción de plata continuó su declive. El comercio del virreinato
entró en una fase de prosperidad, que se vio alentada por el tráfico de navíos que hacían
la ruta de Guayaquil, Panamá, Arica y Valparaíso, lo que animó a la Corona a proyectar
el financiamiento de las flotas y galeones de Indias con nuevos impuestos a este sector.
El Tribunal del Consulado de Lima, como representante de los grandes comerciantes,
elevó su protesta a la Casa de Contratación de Sevilla ante tal medida, pero sólo logró
paralizarla después de remitir dos donativos en 1690 y 1695 por un valor de 30.000.000
de pesos. El 21 de agosto de 1701, Portugal se enemistó con España a consecuencia del
contrato celebrado con la corporación francesa Compañía Real de Guinea, que concedía
a esta última la exclusividad en el tráfico de esclavos por sus territorios. Esta alianza
contribuyó al incremento del contrabando francés por las costas peruanas, en el que se
especializó el navío "Aurora" del capitán Rigodier.
En el área de la defensa, en 1696 el virrey tuvo conocimiento de que, aunque un corsario
francés había saqueado Cartagena de Indias, las tropas españolas al mando del general
Juan Díaz Pimienta habían logrado reconquistar dicho puerto caribeño. En 1700 el virrey
se dispuso a comandar una expedición naval hacia la zona del Darién con el fin de
enfrentar al corsario escocés que había ocupado Caledonia, pero la misma fue suspendida
al comunicarle Díaz Pimienta la expulsión de tales enemigos.
Uno de los primeros actos del conde de la Monclova fue emprender la reconstrucción de
la Lima arruinada por el terremoto de 1687. Bajo su gestión fueron reedificados el palacio
virreinal, la Catedral, la Real Audiencia y el Cabildo, y, asimismo, en 1693, quedó
concluida la remodelación de la Plaza de Armas con ochenta y tres portales. En 1696 se
terminó de construir el nuevo muelle del puerto de El Callao, hecho de piedras extraídas
de la isla San Lorenzo.
En lo que respecta al Patronato Real, bajo el gobierno de la Monclova se fundaron el
monasterio del Carmen de Huamanga en 1690, los beaterios de las Nazarenas del Cuzco
en 1695 y de las indias nobles de Nuestra Señora de Copacabana en Lima en 1698 y el
monasterio de Jesús María y José en Lima en 1699. La Inquisición celebró dos autos de
fe, el primero el 16 de marzo de 1693 en el que fueron penitenciadas catorce personas, y
el segundo el 20 de diciembre de 1694, con seis castigados, entre los que destacó la beata
agustina de origen tucumano Ángela Carranza por ejercer de iluminada.
En el terreno de la instrucción, fueron creadas en la Universidad de San Marcos las
cátedras de Método Galeno, Prima y Vísperas de Dogmas y Prima de Escoto. En el Cuzco
se fundó el colegio de San Buenaventura en 1691 y el colegio de San Antonio Abad fue
convertido en Universidad por Real Cédula de 1 de junio de 1692.
Entre los desastres naturales más importantes estuvo el terremoto de Quito de 1698, que
atañó también a las provincias de Latacunga, Ambato y Riobamba, con un saldo de tres
mil muertos, y la epidemia de viruela que afectó a los indios de Quito y Potosí en 1694.
Bajo el mandato del Conde de la Monclova se produjo la extinción de la Casa de
Austria en el gobierno de España y el advenimiento de los Borbones.
Al cumplir dieciséis años en el gobierno, el virrey falleció en Lima de una enfermedad
desconocida el 22 de septiembre de 1705. Sus restos fueron sepultados en la Catedral de
Lima; el mando interino fue asumido por el oidor decano Juan de Peñalosa hasta la
llegada del nuevo virrey.

24° MANUEL DE OMS Y DE SANTA PAU


Manuel de Sentmenat-Oms de Santa Pau y de
Lanuza (Barcelona, 1651 — Lima, 24 de abril de 1710) fue
un militar, político y diplomático español, I marqués de
Castelldosríus y vigésimo cuarto virrey del Perú (1707–1710).
BIOGRAFÍA
EN ESPAÑA Y FRANCIA
Después de cursar estudios en la Universidad de Barcelona inició una rápida carrera
militar y política. Fue nombrado maestre de campo de infantería en 1675, gobernador
de Tarragona en 1677, primer Maestre de Campo del Tercio de Barcelona en 1678,
virrey de Mallorca en 1681 y embajador en Portugal en 1690.
En 1696 el rey Carlos II le otorgó el título de primer marqués de Castelldosríus y dos años
más tarde le designó embajador en Francia, por lo que marchó a la Corte de Luis
XIV en Versalles.
A la muerte del rey Carlos II de España, de 1 de noviembre de 1700, Luis XIV lo mandó
llamar a su palacio de Versalles para que reconociera como Rey de España, el 15 de
noviembre de 1700, al que luego sería llamado Felipe V.
Oms, quien pertenecía a una familia de la nobleza catalana partidaria de los Borbones en
la Guerra de Sucesión Española (1701–1714), era muy francófilo y tomó partido
por Felipe V durante dicho conflicto. Por ello el monarca le nombró virrey del
Perú en 1704, aunque no ocupó el cargo hasta 1707.
VIRREY DEL PERÚ
Desde este puesto mandó una gran suma de dinero (1.600.000 pesos) reclamada por la
Corona para sufragar gastos de guerra, cosa que logró en parte gracias al descubrimiento
de las minas de Carabaya. Sin embargo, la recaudación mediante tributos provocó
malestar y protestas, especialmente de los comerciantes, que además recriminaban a Oms
su tendencia a proteger los intereses comerciales franceses. Lo cierto es que durante su
gobierno aumentaron considerablemente las importaciones (legales e ilegales) de
mercancías francesas, favorecidas por las circunstancias de la Guerra de Sucesión. Por
estas causas dichos comerciantes pleitearon con el virrey repetidas veces en el Tribunal
del Consulado.
A Oms se le acusó formalmente de contrabando y corrupción y en 1709 fue destituido del
cargo, pero debido a la rapidez con que envió las remesas de dinero y a las gestiones de
su hija Catalina, dama de compañía de la reina de España, lo ocupó de nuevo poco antes
de morir. No obstante fueron confiscados sus bienes en Cataluña, aunque devueltos a sus
herederos en 1714.
Para enfrentar los ataques ingleses a la costa, como los de Charles Wager y Thomas Colb
(en 1708) y Woldes (desde 1709 a 1711), el virrey intentó formar una armada reclutando
hombres mediante leva.
Por otra parte, Oms era un hombre culto y amante de la literatura. Tradujo
los Himnos de Santo Tomás y escribió un drama titulado El mejor escudo de Perseo.
Llevó a la corte virreinal de Lima el ambiente, las costumbres y las modas de Versalles,
y alentó el cultivo de las artes y las letras. Creó una Academia Familiar (1709) en el
propio palacio, a la que acudían artistas, músicos y escritores y donde se celebraban
tertulias literarias semanales, y fue mecenas de varios poetas indígenas.
Murió en Lima el 24 de abril de 1710 a causa de una enfermedad.

25° DIEGO LADRÓN DE GUEVARA


Diego Ladrón de Guevara Orozco y Calderón (1641-1718) fue un
funcionario colonial y eclesiástico, XXV virrey del Perú en los años de
1710 a 1716.
Inclinado hacia el sacerdocio por designio paterno, estudió en el Real
Colegio de la Universidad de Alcalá de Henares. Bachiller y licenciado
en Cánones y Leyes de la Universidad de Sigüenza, y catedrático de
Código en la misma. A poco, asumió la canonjía magistral en las catedrales de Sigüenza
y Málaga, desde donde fue promovido al obispado de Panamá (8 de octubre de 1689).
LABOR EPISCOPAL
EN PANAMÁ
En Panamá, edificó la catedral, además de construir los colegios de San Luis y de San
Diego. Allí se le encargó asumir interinamente la presidencia de la Real Audiencia (1695),
así como la gobernación y comandancia general de Tierra Firme, en lugar de Pedro José
de Guzmán-Dávalos, marqués de la Mina; y en atención a las acusaciones formuladas por
tres oidores, lo recluyó.
En el castillo de Chagres, tratándolo con más dureza y menos decoro del que correspondía
a su persona y circunstancia y a la piedad de un prelado eclesiástico, que se dejó llevar de
la pasión para vengar resentimientos particulares; y sin este borrón hubiera sido un jefe
cabal, pues renovó mucha parte de las fortificaciones de aquella importante plaza, la
proveyó de tropa, víveres y municiones, e impidió el desembarco que intentaron unos
piratas en la provincia del Darién.
EN HUAMANGA
Preconizado obispo de Huamanga (2 de noviembre de 1698), se dio el pase a las bulas
correspondientes al año siguiente y tomó posesión de su nueva sede el 7 de julio de 1700.
Efectuó la visita pastoral; y además de proteger el establecimiento de la Universidad de
San Cristóbal, impulsó la terminación del convento e iglesia de Santa Teresa. Pero pronto
hubo de trasladarse al obispado de Quito (1705), que se hallaba vacante.
EN QUITO
Tomó posesión de esta sede en 1706.

26° CARMINEO NICOLAS CARACCIOLA


Carmíneo Nicolás Caracciolo, 5° Príncipe de Santo Buono, Grande de
España (Castillo de Bucchianico,16 de julio de 1671 - Madrid, 26 de
julio de 1726) fue Virrey español del Perú, de 5 de octubre de 1716 al 26
de enero de 1720.
BIOGRAFIA
Hijo de Marino Caracciolo, 4° Príncipe de Santo Buono, y de su esposa, Donna Giovanna
Caracciolo dei Principi di Torella. Ambos progenitores pertenecían a la dinastía
Caracciolo. Es ancestro de la que fuera reina consorte de España entre 1871 y 1873, María
Victoria dal Pozzo della Cisterna, primera mujer de Amadeo de Saboya.
Su nombre completo fue: 'Don Carmine Nicolás Caracciolo, quinto príncipe de Santo
Buono, octavo duque de Castel de Sangro, duodécimo marqués de Buquianico, conde
de Esquiabi, de Santobido y de Capracota, barón
de Monferrato, Castillón, Belmonte, Roca
Espinalberti, Frainefrica, Grandinarca y Castelnuovo, señor de Nalbeltide y de la ciudad
de Auñón, y grande de España de primera clase'. Su nombre se detalla de varias maneras
diferentes, incluyendo Carmine Nicola Caracciolo, Carmine Niccolo
Caracciolo, Carmine Nicolás Caracciolo y Carmino Nicolás Caracciolo.
Carmine Caracciolo era descendiente de una antigua familia noble de Nápoles y fue un
Príncipe del Sacro Imperio Romano Germánico. Tanto su padre como su madre eran de
la dinastía Caracciolo. Él fue exiliado de Nápoles en el 1707 cuando pasó a la Corona de
Austria, porque fue un defensor de los Borbones. Sus bienes fueron confiscados. Un culto
hombre de letras, fue embajador en Roma y Venecia (1702). Se casó con Donna Giovanna
Costanza Ruffo dei Duchi di Bagnara. Tuvieron varios hijos.
Fue el primer italiano a ser nombrado Virrey del Perú. Esto ocurrió en 1713, aunque
retrasó algún tiempo en viajar a América. Llegó a Cartagena de Indias en la guerra
del Conde de Vega Florida, donde llegó a ser consciente de la corrupción en la política y
el comercio del virreinato. Él trajo con él las órdenes de la Corona para poner fin al
contrabando francés, algo que ha sido protegida y alentada por sus predecesores
inmediatos.
Entró en Lima y tomó posesión de su cargo el 5 de octubre de 1716. En celebración de su
llegada, el poeta Peralta publicó un panegírico en su honor, al igual que Bermúdez de la
Torre, "El sol en el zodíaco". Ambos son extravagantes en sus elogios para el nuevo
virrey.
En 1717 el Virreinato de Nueva Granada se creó en el norte del Perú, a partir de las
Audiencias de Bogotá, Quito y Panamá. Sin embargo, este establecimiento sólo duró
hasta 1724, cuando los territorios fueron devueltos al Virreinato del Perú. El Virreinato
de Nueva Granada se restableció sobre una base más permanente en 1734.
Entre los acontecimientos notables de su administración se encuentran los siguientes: Fue
incapaz de detener el contrabando. Durante su administración hizo que muchos
misioneros convirtiesen en la montaña, y se fundó el Colegio de Ocopa. Una epidemia
afectó a 60.000 indígenas. Una Real Orden prohibió el marcado de los esclavos negros.
Debido a los abusos de los encomenderos por el sistema de mita, Caracciolo solicitó su
abolición, aunque el rey decidió no actuar según sus recomendaciones.
El 15 de agosto de 1719 se produjo el primer eclipse total de sol registrado en Lima desde
la conquista española, justo antes de mediodía. El eclipse inspiró posteriormente
procesiones de penitentes.
Se desempeñó como virrey hasta 1720. Murió en 1727.

27° DIEGO MORCILLO RUBIO DE AUÑÓN


Era un religioso trinitario español que fue asignado como obispo de
León en Nicaragua de 1701 a 1708 y de La Paz de 1708 hasta 1714.
Luego fue nombrado como arzobispo de La Plata en Charcas desde
1714 a 1723. Además fue asignado como gobernador interino del Perú
en el año 1716 y finalmente fue nombrado como virrey desde 1720
hasta 1724, y por último, arzobispo de Lima desde 1723 hasta su
fallecimiento.

FORMACION Y PRIMEROS CARGOS


Diego Morcillo Rubio de Auñón nació el 3 de enero de 1642 en Villarrobledo, del Reino
de Toledo, siendo hijo de Alfonso Morcillo Rubio de Auñón1 y María Manzano. A
temprana edad ingresó en la Orden de los Trinitarios Descalzos de la ciudad de Toledo.
Realizó estudios de Filosofía y Teología en la Universidad de Alcalá, llegando a ocupar
el puesto de profesor.
La fama sobre su enorme cultura y aguda inteligencia fue creciendo hasta llegar a oídos
del rey. Mientras impartía clases en Alcalá, el rey Carlos II lo nombró predicador de la
Cámara Real y teológo de la Real Junta de la Concepción. Así mismo consiguió el puesto
de calificador dentro del Consejo Supremo de la Inquisición y el de teólogo consultor
del Nuncio de Su Santidad en Madrid.
Su imparable avance dentro de la jerarquía eclesiástica y política, le llevó a asumir
importantes cargos en el Nuevo Mundo. Así, el 21 de noviembre de 1701 fue
nombrado obispo de León (en Nicaragua), pero antes de tomar posesión y habiéndose ya
puesto en camino hacia aquella diócesis, fue nombrado sobre el 14 de
mayo de 1708 obispo de La Paz (Charcas).

PRIMER VIRREINATO
En 1716, durante su arzobispado de La Plata en Charcas, fue reclamado por el rey Felipe
V para asumir el título de virrey de Perúde manera interina. El 15 de agosto entró en Lima
substituyendo a Mateo de la Mata Ponce de León, presidente de la Audiencia. Mata
también había estado ocupando el cargo de manera interina, desde el retiro de Don Diego
Ladrón de Guevara el 2 de marzode 1716. Morcillo ocupó este puesto hasta el 5 de
octubre, cuando el cargo fue asumido por Carmine Nicolás Caracciolo, Príncipe de Santo
Buono y sucesor oficial de Ladrón de Guevara. Don Diego Morcillo retornó a sus deberes
eclesiásticos como arzobispo de La Plata, sin haber tomado decisiones de cierto calado
en su virreinato, más allá de las propias que garantizaran su continuidad y estabilidad.
SEGUNDO VIRREINATO
Al final del mandato de Caracciolo, Morcillo recibió de nuevo el encargó del Rey de
ocupar la sede vacante, esta vez como titular. Entró solemnemente en Lima y ocupó el
cargo el 26 de enero de 1720; el Cabildo metropolitano ofrecíole una misa de acción de
gracias en la Catedral (3 de febrero de 1720), durante el cual pronunció un sermón
laudatorio el canónigo Vicente Ortiz de Foronda; y Pedro de Peralta Barnuevopronunció
un discurso en su elogio durante el recibimiento que le tributó la Universidad de San
Marcos.
Sus biógrafos destacan a Morcillo como un inteligente administrador. Entre sus logros
políticos consta que, bajo su mandato, se registró un gran aumento de los ingresos reales
en la colonia. En ese sentido, en 1722 consiguió que llegara a Cádiz la fragataÁguila
Volante de D. Nicolás Giraldino con una importante carga de plata y otras riquezas.

En el aspecto de la defensa:
Entre 1720 y 1721 combatió a los piratas ingleses John Clipperton y George Shelvocke,
quienes, entrando por el estrecho de Magallanes, asolaron las costas del Mar del Sur, es
decir, el litoral chileno y peruano, en el marco de la guerra entre Inglaterra y España.
Clipperton apresó el galeón en el que venía de Panamá su viejo enemigo José Antonio de
la Rocha y Carranza (Marqués de Villa-Rocha) con su familia. En Nicoya (Costa Rica)
dejó libre a la esposa del marqués, y regresó a las costas peruanas, donde
bombardeó Arica en febrero de 1721, antes de retirarse rumbo a Oceanía, llegando hasta
las islas Marianas donde logró fugar el marqués. Cerca de las islas Filipinas Clipperton
fue reducido por navíos españoles y se presume que terminó ahorcado. Por su parte,
George Shelvocke saqueó Chiloé, capturó naves mercantes en Concepción, incendió el
puerto de Paita el 21 de marzo de 1720 al negarse su población a pagar rescate, y luego
de una serie de peripecias propias de un relato novelesco, prosiguió su viaje
hacia Panamá y California sin que los tres Navíos de Guerra Españoles enviados por el
Virrey, al mando del General Bartolomé de Urdinso, lograran capturarle. Finalmente,
hubo otra incursión, la del corsario holandés Jacobo Roggeween por el estrecho de
Magallanes, que concluyó con el descubrimiento de la isla de Pascua el 6 de abril de
1722.

En el gobierno económico:
Conminó a los oficiales reales de Huancavelica a adquirir el azogue a un precio más
favorable para la Tesorería Real. La superintendencia de minas registró un importante
superávit que se invirtió en el arreglo de las cureñas del puerto del Callao y en la
reparación del puente de Pilcomayo que comunicaba las ciudades de La Plata y Potosí.
Por bando del 11 de marzo de 1720 el virrey prohibió el comercio ilícito por las costas
peruanas y comunicó en 1722 al Consejo de Indias la captura de diez bajeles franceses
cargados de mercadería europea. En 1721 llegó a la feria de Portobelo el navío de
permiso "Royal George", en conformidad con lo dispuesto en el Tratado de
Utrecht firmado entre España e Inglaterra.

En el orden interno:
Este gobernante tuvo que enfrentar en 1723 el alzamiento de los
indios araucanos en Chile que condujo al abandono de los fuertes
de Concepción, Purén y Nacimiento. Por Real Cédula del 30 de diciembre de 1724 el
virrey ordenó que el número de hombres en armas en Chile se elevara a dos mil y que los
mismos procedieran a apaciguar a los indios.
En el terreno Social:
Correspondió a este gobierno aplicar la Real Orden de 1720 que suprimió el régimen de
la encomienda, lo que liberó a los indios de este sistema de explotación, aunque algunas
encomiendas persistieron hasta la segunda mitad del siglo XVIII, como fue el caso de las
de Chiloé.

En otros sucesos importantes que ocurrieron durante su mandato virreinal se deben


mencionar: La desaparición de Saña, próspera villa del norte peruano que sucumbió por
una inundación provocada por torrenciales lluvias (15 de marzo de 1720). La supresión
en 1722 del Virreinato de Nueva Granada (creado en 1717) reincorporándose el territorio
de su jurisdicción al Perú (aunque sería restablecido en 1739). En 1723 se celebraron en
Lima con pomposas fiestas el matrimonio del Príncipe de Asturias, después Rey bajo el
nombre de Luis I de España, con la princesa Luisa de Orleáns, que se había celebrado el
año anterior.

28° JOSÉ DE ARMENDÁRIZ


I marqués de Castel fuerte (Ribaforada, Navarra, 1670 - Madrid, 16 de
abril de 1740). Militar y administrador colonial español,
XXVIII Virrey del Perú.

CARRERA MILITAR
Nació en Ribaforada en el seno de una familia aristocrática
de Navarra formada por Juan de Armendáriz y García de Usechi y María Josefa Perurena
y Muguiro, teniendo un hermano menor de nombre Juan Francisco. Fue bautizado
cristianamente en Pamplona el 2 de noviembre de 1670.1 Ya de adulto, comenzó su
carrera militar sirviendo al ejército como capitán de caballería. Durante la guerra
de Flandes se halló en las batallas de Fleurus (1690) y Neerwinden (1693). Pasó
a Cataluña como maestre de campo del cuerpo de dragones, y concurrió al sitio
de Palamós y la campaña sobre Barcelona. Destinado a Nápoles y ascendido a brigadier,
participó en la guerra de Portugal. Estuvo presente en el sitio de Gibraltar (1704)
como mariscal de campo. Promovido luego a teniente general (1706), desempeñó cargos
en Extremadura; comandó las tropas reales en la batalla de Lagudina (1708) y tuvo acción
decisiva en Villaviciosa (1710). Fue entonces premiado con la Orden de Santiago y, en
tal virtud, beneficiado con las encomiendas de Montizón y Chiclana, además de
otorgársele, el 30 de junio de 1711, el título de marqués de Castelfuerte.
Intervino en la pacificación de Aragón y el sitio de Barcelona en 1714; ejerció la
gobernación de Tarragona; pasó a Cerdeña y durante la guerra de Sicilia contribuyó a la
toma de Mesina y la victoria de Francavilla (1719). Ocupó el puesto de inspector general
de la caballería y de los dragones de la Corona de Aragón. Era gobernador y capitán
general de Guipúzcoa cuando fue nombrado Virrey del Perú en los primeros días de
octubre de 1723.

VIRREY DEL PERU


Zarpó de Cádiz el 31 de diciembre de 1723; llegó a Cartagena de Indias en febrero de
1724, tras haber hecho escalas en Portobelo, Panamá, Perico y Paita. En Panamá
desautorizó la tolerancia hacia los comerciantes ingleses y atacó a los piratas que
merodeaban en las proximidades de las costas. Hizo su entrada oficial en Lima bajo palio
el 14 de mayo de 1724 recibiendo el poder de manos del arzobispo Diego Morcillo, a
quien iba a atribuir después la responsabilidad de la crisis que atravesaba el virreinato.
En defensa, asesorado por el marino Blas de Lezo, dispuso que, en Guayaquil, se
acelerara la carena de los navíos "Capitana" y "Almiranta", al tiempo que hizo poner un
nueva a quilla al navío de guerra San Fermín. Fortaleció a un coste de 150.000 pesos el
puerto de El Callao con nuevos rompeolas y murallas que encomendó al ingeniero Nicolás
Rodríguez. También hizo una inversión apreciable en el refuerzo de las defensas militares
de Santa Marta, Cartagena de Indias, Portobelo, Panamá, Valdivia, Buenos Aires y
Montevideo.
Bajo este gobierno comenzó una coyuntura de rebeliones en los Andes. La sedición más
importante ocurrió en Paraguay en 1721 cuando José de Antequera, fiscal de la Audiencia
de Charcas, se excedió en sus atribuciones de juez pesquisador, ordenó la destitución del
gobernador Diego de los Reyes y asumió tal cargo en contra de lo dispuesto desde Lima.
Antequera expulsó a los jesuitas del territorio guaraní en 1724, lo que provocó que el
virrey encomendara su captura a una expedición militar comandada por el gobernador del
Río de la Plata, Bruno Mauricio de Zabala. Antequera huyó a Córdoba desde Tucumán,
se refugió en un convento franciscano, y luego partió clandestinamente hacia Lima, en
donde fue capturado en 1726. Al finalizar su proceso, que duró cinco años, fue ahorcado
en la Plaza de Armas de Lima. Otro alzamiento que el marqués de Castelfuerte tuvo que
enfrentar fue el que protagonizaron los mestizos de Cochabamba liderados por Alejo
Calatayud en 1730. La causa de esta rebelión fue el rumor de que el virrey quería
empadronar a este sector social para que pagara impuestos. Calatayud fue capturado y
ajusticiado en su celda en enero de 1731. A esos desórdenes se unieron insurrecciones
indígenas en Azángaro, Carabaya, Cotabambas y Castrovirreina, que tuvieron como
causa los abusos que cometían los corregidores en el sistema de repartos de mercancías.
En cuanto al Patronato Real, en 1730 se inauguró en Lima el monasterio de las Nazarenas,
en 1732 el marqués de Casa Concha culminó las dos portadas posteriores de la Catedral
y se fundó una casa de recogimiento para mujeres de mal vivir. Las denuncias del virrey
referidas al enriquecimiento ilícito de los curas de parroquia y las órdenes religiosas
provocaron su enfrentamiento con el cabildo eclesiástico. Con la Inquisición, las
relaciones también fueron tensas, sobre todo en 1732, cuando el marqués de Castelfuerte
fue obligado a comparecer ante el Santo Oficio en calidad de testigo de una causa por
sacrilegio. Entre los desastres naturales acontecidos durante su mandato cabe destacar
el terremoto de Santiago de Chile y Concepción de 1730 que destruyó templos y casas.
Su gobierno culminó a los 11 años, 7 meses y 21 días cuando la Corona le relevó y nombró
en su lugar al marqués de Villagarcía. Al concluir su memoria de gobierno, en parte
redactada por el polígrafo Pedro de Peralta y Barnuevo, José de Armendáriz partió hacia
Acapulco a bordo del navío San Fermín el 17 de enero de 1736. En premio a sus servicios,
Felipe V le otorgó el collar de la Orden del Toisón de Oro. Residió en Pamplona y
en Madrid, lugar este último en el que murió, sin descendencia, el 16 de abril de 1740,
por lo cual todos sus títulos nobiliarios fueron legados a su hermano.

29° JOSE ANTONIO DE MENDOZA


(Vegas de Matute,1 Segovia, España, 13 de marzo de 1667 - Aguas
del Cabo de Hornos, Virreinato del Perú, 15 de
diciembre de 1746), tercer Marqués de Villagarcía de
Arosa y caballero de la Orden de Santiago.
BIOGRAFIA
Nacido en Vegas de Matute en 1667, fue hijo de Antonio Domingo
de Mendoza Caamaño y Sotomayor, II marqués de Villagarcía y II vizconde de Barrantes,
y Juana Catalina de Ribera Ibáñez de Segovia y Ronquillo. Su padre fue embajador de
Carlos II en Venecia, gobernador de Santiago y virrey de Valencia (1699-1707).

En 1694, casó con Clara de Barrionuevo y Monroy, hija de los marqueses de Monroy y
Cusano. La pareja tuvo tres hijos: Josefa, marquesa de Monroy; Rodrigo, marqués de
Villagarcía; y Mauro.
Fue el embajador de España en Venecia y virrey de Cataluña (1705). A la muerte de su
padre en 1713, heredó los mayorazgos pontevedreses de Villagarcía de Arosa, el
marquesado de esta denominación y el vizcondado de Barrantes. En 1735, con 68 años,
ya anciano y viudo, fue nombrado XXIX virrey del Perú por el rey Felipe V, viajando
con él los famosos marinos Jorge Juan y Antonio de Ulloa que formaban parte de
la expedición de Charles Marie de la Condamine para medir la línea del ecuador.
Entre 1735 y 1745, tiempo en el que permaneció al frente del virreinato peruano, se ocupó
especialmente de mejorar la hacienda y la producción minera. Reprimió las sublevaciones
de 1739 y 1742 y, a partir de entonces, trató de controlar la corrupción que, junto con la
esclavitud a la que en la práctica estaba sometida la población indígena por el sistema de
la mita y el incumplimiento de las ordenazas reales, habían provocado las mencionadas
rebeliones.
Por otra parte, Caamaño y Sotomayor, teniendo en cuenta el conflicto bélico existente
con Inglaterra en la llamada Guerra del Asiento (1739-1748), tuvo que afrontar
numerosos problemas defensivos por la presencia activa de los navíos del almirante
Anson en las costas del virreinato y del almirante Vernon en el área del Caribe, que
llegaron a provocar el saqueo de Paita y la caída de Portobelo. También en las fronteras
terrestres tuvo que afrontar algunos conflictos con los portugueses de Brasil.
Después de solicitar su sustitución, falleció durante la navegación de su viaje de regreso
a España, dejando una impresión de buen gobierno en el territorio de su jurisdicción.
30° JOSE ANTONIO MANSO DE VELASCO
Torrecilla en Cameros, 1688- Priego de Córdoba, 1767), I conde de
Superunda, fue un militar y político español, XXX Virrey del Perú.
Fue Gobernador de Chile entre 1737 y 1744. Virrey del Perú durante el
reinado de Fernando VI, gobernó el Virreinato del Perú entre los
años 1745 y 1761.

BIOGRAFIA
Fueron sus padres Diego Sáenz Manso de Velasco y Ambrosia Sánchez de Samaniego,
pertenecientes a la aristocracia riojano-alavesa. Se incorporó al ejército en 1705,
participando en la Guerra de Sucesión hasta 1714. Posteriormente lo hizo en
las expediciones a Cerdeña en 1717, en el sitio de Ceuta en 1720, en el sitio de
Gibraltar en 1727, en la reconquista de Orán en 1732, y en las guerras de Italia desde
1733 a 1736. Obtuvo al final de su carrera, el grado de Brigadier general y el título
de caballero de la Orden de Santiago.

GOBERNADOR DE CHILE
En octubre de 1736 se le otorgó el cargo de Gobernador de Chile. Llegó a Santiago de
Chile el 15 de noviembre de 1737, donde asumió como Gobernador, Capitán general y
Presidente de la Real Audiencia del reino. Ocupó el cargo hasta junio de 1744. Se destacó
por la fundación de nueve ciudades:

 Los Ángeles, (Los Ángeles), 1739


 San Felipe, (San Felipe de Aconcagua), 1740
 Cauquenes (Nuestra Señora de las Mercedes de Tutubén), 1742
 San Fernando (San Fernando de Tinguiririca), 1742

 Talca (San Agustín de Talca), 1742


 Melipilla (San José de Logroño), 1742
 Curicó (San José de Buena Vista), 1743
 Rancagua (Santa Cruz de Triana), 1743
 Copiapó (San Francisco de la Selva), 1744
También se preocupó del desarrollo urbanístico de Santiago de Chile, iniciando la
construcción de los tajamares del río Mapocho, para evitar las frecuentes inundaciones
que sufría la ciudad. Su gestión es reconocida como una de las más eficientes del reino.
Recibió en 1741 el grado de Mariscal de campo, y en 1743 el grado de Teniente general.
El 24 de diciembre de 1744 el rey le ordenó asumir el cargo de Virrey del Perú.

VIRREY DEL PERU


El 12 de julio de 1745 sucedió el virrey de José Antonio de Mendoza Caamaño y
Sotomayor, Marqués de Villagarcía.

EL TERREMOTO DE LIMA 1746


El 28 de octubre de 1746, a las 22:30 se produjo uno de los más grandes terremotos que
azotaron Lima y Callao; al menos, el que más muertes produjo. Los testigos difieren en
cuanto a la duración del evento, pues unos dicen que fue de tres minutos y otros que hasta
seis. Se calcula que su intensidad fue de 10 u 11 en la Escala de Mercalli. Las réplicas,
por centenares, continuaron en los dos meses siguientes. En Lima, de 60.000 habitantes,
perecieron 1.141; y en el Callao, un tsunami con una enorme ola de 17 metros de altura
que penetró cinco kilómetros tierra adentro, mató aproximadamente 5.000 personas, pues
apenas se salvaron 200. En Lima sólo quedaron 25 casas en pie. La nocturnidad del sismo,
al sorprender a la población en sus casas, contribuyó a aumentar las muertes. Las secuelas
de este terrible terremoto fueron el hambre y el miedo.
El terremoto de 1746 es tal vez, al que mayor cantidad de estudios y atención le han
dedicado los historiadores y especialistas. Pero sobre todo sigue siendo el paradigma del
triunfo de la ciudad sobre la destrucción y la muerte.
El virrey José Antonio Manso de Velasco decidió vencer la desolación y tomar cartas en
el asunto, emprendiendo la reconstrucción de Lima. Hizo tan magna obra que mereció el
reconocimiento de sus habitantes y del propio rey que lo premió en 1748 con un título
nobiliario que lo dice todo y que él mismo eligió: Conde de Superunda, que quiere decir
"sobre las olas".
Viejo y cansado, a los 71 años de edad, solicita autorización a Fernando VI para regresar
a España, lo cual le es concedido. Fue reemplazado por el virrey Manuel de Amat y Juniet.

ULTIMOS DIAS
Encontrábase de paso en 1762 por el puerto de La Habana en la Capitanía General de
Cuba cuando le sorprende un conflicto armado con Inglaterra que implica el sitio de la
isla. Por ser el militar de más alto rango en ese momento en el territorio, el Conde de
Superunda es nombrado por el Gobernador de Cuba con título de «Presidente de la Junta
Consultiva de Guerra». Es así como el viejo conde de 74 años encabezó la resistencia de
la plaza artillada de La Habana con tropas mal entrenadas y con peor equipamiento, la
cual sólo duró 67 días y tuvo que rendirse ante los ingleses.
Apresado por los ingleses es llevado a Cádiz en España, donde en su calidad
de Presidente de la Junta Consultiva de Guerra fue llevado ante la justicia marcial por el
oprobio causado a la corona española por los términos de la rendición de Cuba, y fue
condenado a la pena de "suspensión por 100 años de todo empleo militar" y confinamiento
en la ciudad de Granada. Murió finalmente en Priego de Córdoba donde se encuentran
sepultados sus restos, en la Iglesia de San Pedro.
31° MANUEL DE AMAT Y JUNIET
(en catalán Manuel D'Amat i de Junyent; Vacarisas, Barcelona, 1704-
Barcelona, 14 de febrero de 1782) Marqués de Castellbell, fue
un militar y administrador virreinal español. Gobernador de
Chile (1755-1761) y Virrey del Perú (1761-1776).
Nació en el seno de una aristocrática familia española, radicada
en Cataluña. Hijo de Josep d'Amat i de Planella (primer marqués
de Castellbell) y de Maria Anna Junyent i Vergós (hija del primer
marqués de Castellmeià).
Demostró tener dotes castrenses desde muy joven, participando ya en 1719 en acciones
bélicas contra los franceses en Aragón. A los 17 años ingresó en la Orden de Malta y
marchó a la isla como caballero permaneciendo en ella cuatro años. Sirvió en las guerras
de África y por ello obtuvo el mando del Regimiento de los Dragones de Sagunto.
Se destacó en la batalla de Bitonto (Reino de Nápoles, 25 de mayo de 1734) con el
contingente que al mando del conde de Montemar derrotó a las tropas austríacas de
Visconti y Traun, en la guerra de sucesión de Polonia y sobresalió en el asedio de
Gaeta (1734). En su carrera militar llegó a alcanzar el grado de mariscal de campo.

VIRREY DEL PERU


Fue nombrado Virrey del Perú y Presidente de la Real Audiencia de Lima en 1761,
sucediendo a José Antonio Manso de Velasco, conde de Superunda, que había gobernado
desde 1745. Llegó a la Ciudad de los Reyes el 12 de octubre de 1761 y tomó posesión del
cargo en diciembre del mismo año.
En su gobierno se dio la Guerra de los Siete Años entre España e Inglaterra; por ello Amat
tomó medidas de seguridad para asegurar la defensa de los litorales chileno y peruano,
especialmente para proteger las zonas costeras y puertos de Chiloé, Concepción, Valdivia,
Valparaíso, las islas Juan Fernández, Lima, el Callao y Guayaquil. Los planes de
fortificación preveían la construcción de castillos, refuerzo de murallas, construcción de
cuarteles, etc. Además creó nuevos cuerpos del ejército, entre ellos la Compañía de
Dragones.
Como Virrey también mandó hacer la relación o tipología de la población: enumeración
y descripción de diferentes grupos étnicos de América del Sur. En el marco eclesiástico,
apoyó a la división y jurisdicciones eclesiásticas en el Virreinato (actualmente Bolivia,
Chile y Perú): arquidiócesis, diócesis, provincias, repartos, parroquias, etc. y promovió
asignaciones, ingresos y vías para su financiación.
Durante su período de gobierno al frente del Virreinato del Perú hizo varias obras de
infraestructura en Lima: la Alameda de Acho (1773)3 como reconstrucción del paseo de
la Alameda de los Descalzos, la Plaza de Acho, la Quinta Presa, la Fortificación de
la fortaleza del Real Felipe, la Torre de la Iglesia de Santo Domingo y el Paseo de
Aguas en el actual distrito del Rímac. La tradición dice que dicha obra la hizo en honor a
su amante Micaela Villegas, más conocida como La Perricholi. Entre las casonas que,
según tradiciones orales y leyendas urbanas, tuvo como propiedad está la Quinta del
Prado,4 una señorial vivienda del Jr. Trujillo,5 entre otras.

VIDA EN ESPAÑA
En 1776 regresó a Barcelona y mandó construir un suntuoso palacio en La Rambla, luego
conoció a Maria Francesca de Fiveller i de Bru, con quien se casó el 3 de junio de 1779;
la boda se celebró por poderes, ya que el novio estaba en Madrid.6
El 14 de febrero de 1782 murió el virrey. Como herederos dejó a su mujer, su sobrino
Antonio Amat y Rocabertí y su hijo Manuel Amat y León (hijo que tuvo con la condesa
de Castilla, doña Josefa de León). El heredero del título fue su sobrino, mientras su hijo
con la condesa de Castilla heredó gran cantidad de dinero, tierras y joyas, y el hijo que
tuvo con Micaela de Villegas no tuvo ningún derecho. La viuda residió en el palacio hasta
1791, por lo cual se lo conoce como el palacio de la Virreina.

32° MANUEL GUIRIOR


(Aoiz, Navarra, 1708 – Madrid, 25 de noviembrede 1788),
primer Marqués de Guirior, fue militar y administrador de la Corona en
América.

ORIGENES Y CARRERA MILITAR


Guirior nació en 1708, en el seno de una familia noble del Reino de
Navarra. Era hijo de don José Carlos Guirior y doña María Josefa Portal de Huarte. Entró
en la Real Armada en 1733 como alférez de navío. Una vez admitido en la Real Armada,
ascendió a teniente de fragata, teniente de navío, capitán de fragata, capitán de
navío, mayor general y jefe de la Armada. Luchó en la Guerra de los Siete Años contra
Inglaterra y también contra los piratas berberiscos en el Mediterráneo. Fue caballero de
la Orden de San Juan de Jerusalén, más conocida como Orden de Malta.

VIRREY DE NUEVA GRANADA


Virrey de la Nueva Granada desde 1772 hasta 1776, su mandato se distinguió por su
labor en favor de la economía y la cultura. Fundó en Bogotá la Universidad y la Real
Biblioteca Pública de Santafé (actual Biblioteca Nacional de Colombia).

VIRREY DEL PERU


También nombrado Virrey del Perú desde 1776 hasta 1780, fomentó el comercio y
consiguió sofocar las sublevaciones de Arequipa y Cuzco. Dio cumplimiento al
desmembramiento del Virreinato del Río de la Plata que significó el empobrecimiento del
Virreinato del Perú al comenzar a embarcarse la plata de Potosí por Buenos Aires. Sufrió
las actividades del Visitador José Antonio de Areche (desde junio de 1777) quien excedió
los límites de sus atribuciones produciendo la reacción de Túpac Amaru II: Creó la
Contaduría de Tributos. Fue reemplazado como virrey por el Gobernador de Chile, el
también navarro Agustín de Jáuregui. En su período llegó la expedición
científica de Hipólito Ruiz, José Pavón y Joseph Dombey.

33° AGUSTÍN DE JÁUREGUI Y ALDECOA


Agustín de Jáuregui y Aldecoa (Lecároz, Navarra, España, 7 de
mayo de 1711 - Lima, Virreinato del Perú (Imperio Español), 29 de
abrilde 1784) fue un militar y político español, nacido en el Reino de
Navarra, que llegó a ser Gobernador de Chile y Virrey del Perú.

GOBERNADOR DE CHILE
Durante su gobierno se inauguró el servicio de Correos terrestre de Chile.
Se inauguró la catedral de Santiago de Chile el 8 de diciembre del mismo año, se creó la
Academia de práctica forense, anexo a la Real Universidad de San Felipe y se realizó el
primer censo de la población del Reino de Chile, el cual estableció que había 259.646
habitantes.
Es durante su gobierno que la Capitanía General de Chile sufrió la escisión de la región
de Cuyo (Mendoza, San Juan y San Luis) debido a la creación del Virreinato del Río de
la Plata en 1776.
En 1777 establece que las milicias tienen por objeto perseguir a los bandoleros rurales,
por lo que están obligadas a tener sus armas y uniformes, costeadas por ellas mismas,
debiendo estar preparadas para cualquier acción militar y de hacer alardes cada cierto
tiempo.
Célebre es su intento de conocer la población existente en Chile, para la cual ordena
realizar entre 1777 y 1778 el primer empadronamiento general de población, el cual dará
paso a los primeros censos oficiales en este territorio.

VIRREY DEL PERU


En 1780 fue nombrado virrey de Perú, donde tuvo que enfrentarse a la rebelión de Túpac
Amaru II (José Gabriel Condorcanqui), a quien venció en 1781, apresó y ajustició un mes
más tarde. También se interesó por mejorar las defensas, las milicias y el servicio de
correos. Dejó el cargo de virrey en 1784 y pocos días después falleció en Lima a causa
de un accidente.

34° TEODORO DE CROIX


Teodoro Francisco de Croix-Heuchin (cerca de Lille, Flandes, 30 de
junio de 17301 - Madrid, España, 8 de abril de 1792) fue un aristócrata
y militar español, de origen flamenco, que llegó a ser virrey del Perú.

BIOGRAFIA
Nacido en el castillo de Prévoté, cerca de la ciudad de Lille, en la parte de
Flandes ganada por Luis XIV a España en 1668. Tercer hijo gemelo de
Alexandre-Maximilien-François de Croix, marqués de Heuchin, e Isabelle-Claire-Eugène
de Houchin.2 A los 17 años, como su tío Carlos Francisco de Croix y su hermano mayor
el conde Felipe Carlos de Croix, ingresa en el Ejército español. Ese mismo año entra al
servicio del rey de España como alférez de granaderos de la Guardia Real y es enviado a
Italia. En 1750 se incorporó a la Guardia Valona, la guardia personal de los reyes
Borbones de España. En 1756 es ascendido a teniente y se le nombra caballero de la
Orden Teutónica, y en 1760 asciende a coronel.
En 1766 marcha a Nueva España como capitán en la guardia del virrey 3 Carlos
Francisco, su tío. Hasta 1770 sirvió como comandante de la fortaleza de Acapulco y como
inspector de las tropas del virreinato. Cuando finalizó el mandato del virrey de Croix
(1766-1771), retornó a España con su tío y con el visitador José de Gálvez.
El 16 de mayo de 1776, el rey Carlos III de España nombra al brigadier Teodoro de Croix
como primer comandante general de las Provincias Internas del Norte de Nueva España,
Comandancia establecida en 1776, y que comprendía Nueva Vizcaya, Santa Fe de Nuevo
México, Nuevo León, Coahuila, Sonora y Sinaloa, Las Californias, y Tejas. Esta
disposición fue respondida con varias revueltas de los indios apaches, seris, comanches y
otras tribus indígenas. El cuartel general se estableció en Arizpe, Sonora. De Croix
reemplazó a Hugo O'Conor, nombrado por el virrey Bucareli y que estaba al cargo de las
fuerzas españolas en la frontera norte. De Croix no dependía del virrey en la frontera pero
compartía jurisdicción con O`Conor en la Alta California. Tomo posesión del cargo el 1
de enero de 1777 y en agosto partió de México capital a inspeccionar su nueva
jurisdicción. Era el responsable de la defensa militar, la colonización civil y la conversión
de los indios de un extenso y poco poblado territorio. Respondía de sus acciones
directamente ante el visitador José de Gálvez. Renovó y organizó la mayor fuerza militar
de la frontera norte, de Tejas a Sonora, habida hasta entonces. El 24 de octubre de 1781,
el rey aprobó la separación de las Californias como nueva jurisdicción del mismo nivel
que las Provincias Internas de Occidente. Hizo también muchas cosas de buen proceder
en los territorios antes llamados Provincias Internas del Norte de la Nueva España.
Ya como teniente general, deja el mando en las Provincias Internas del Norte a Felipe de
Neve y es nombrado virrey del Perú (13 de febrero de 1783). En Perú descentralizó el
gobierno organizando siete intendencias. Creó el Anfiteatro Anatómico e inició el Jardín
Botánico de Lima, ciudad que le conocía como "El flamenco", por su país de origen.
Adoptó medidas rigurosas para impedir el avance del pensamiento enciclopedistas y
revolucionarios de franceses y norteamericanos. Mejoró las fortificaciones de la costa y
colaboró en la creación de la Junta Superior de Comercio y el Tribunal de Minería (1786).
Su mandato como virrey terminó en 1790. De regreso a España, es nombrado en 1791
coronel de las Guardias Valonas, y comandante de la Orden Teutónica. Murió en Madrid
al año siguiente, en 1792, a resultas de la pulmonía, derivada en tuberculosis, que contrajo
por los fríos del cabo de Hornos (la ruta de vuelta a España que él escogió).
35° FRANCISCO GIL DE TABOADA
Francisco Gil de Taboada Lemos y Villamarín (Santa María de
Soutolongo, Lalín (Pontevedra), 1733 - Madrid, 1809) fue
un noble, político, militar y marino español, IX virrey de Nueva
Granada (1789), XXXV virrey del Perú (1790-1796) y XIº capitán
general de la Real Armada Española.

BIOGRAFIA
Nacido en el seno de una distinguida familia gallega, sus padres fueron Diego Felipe Gil
de Taboada y Villamarín, señor de Dés, y María Josefa de Lemos y Rois. A los 16 años
de edad se convirtió en caballero de San Juan de Jerusalén, orden en la que llegó a ser
Gran Cruz y bailío, y comendador de Puertomarín.
Sentó plaza de guardiamarina en la Compañía del Departamento de Cádiz el 27 de
octubre de 1752. Fue ascendido a alférez de fragata el 23 de diciembre de 1754, a alférez
de navío el 12 de abril de 1760, a teniente de fragata el 8 de abril de 1765 y a teniente de
navío el 3 de septiembre de 1767. Durante estos mandos estuvo embarcado en diferentes
buques, haciendo cruceros por el Mediterráneo y los océanos Atlántico y Pacífico.
Ascendió a capitán de fragata el 22 de octubre de 1770. Con este mando se le
nombró gobernador de las islas Malvinas (1774 - 1777),1 pero luego fue ascendido
a capitán de navío el 17 de febrero de 1776, siendo nombrado capitán de la recién creada
Compañía de Guardiamarinas del Departamento de Ferrol, cargo que desempeñó durante
algunos años.
Fue ascendido a brigadier el 19 de junio de 1781, siguiendo en el cargo anterior; a jefe de
escuadra, el 21 de diciembre de 1782 y a instancias de Antonio Valdés, ministro de
Indias, a finales de 1788 fue nombrado virrey, gobernador y capitán general del Nuevo
Reino de Granada y presidente de la audiencia de Santa Fe. Ascendió a teniente
general el 4 de marzo de 1789.
Con este grado, pasó en 1790 a virrey del Perú y presidente de la audiencia de Lima. A
su regreso a España pasó con éxito por el Juicio de residencia, donde unos secretarios y
un tribunal especial analizaban todas las actuaciones de su gobierno como tal virrey, con
arreglo a lo establecido en las Leyes de Indias. En estos juicios nada quedaba sin
investigar, hasta cuadrar la última cuenta, dándose el caso de durar varios años.
El conde de Toreno, en su comentario sobre la junta, se expresa de la siguiente
manera: Continuó al frente de la marina don Francisco Gil de Taboada y Lemos, anciano
respetable, de carácter entero y firme. Esta cualidad pronto hubo de manifestarla
oponiéndose al deseo del gran duque de Berg de que le fuese entregado Godoy, que se
hallaba confinado en el castillo de Villaviciosa para ser sometido al fallo de un tribunal.
Previendo que la junta de ministros pronto sería anulada por la presión de los invasores,
Gil de Lemos lanzó la idea de que fuese sustituida por otra, reunida fuera de Madrid.
Cuando los franceses obligaron al infante don Antonio a salir hacia Bayona después de
la explosión popular del 2 de mayo, escribió a Gil de Taboada una carta instándole a que
la junta siguiese por los mismos cauces trazados para evitar males mayores. Pero el 4 de
mayoMurat quiso presidirla, asistiendo algunos de los miembros, que al fin cedieron. No
así Gil de Taboada, que se mantuvo firme, presentando su dimisión y retirándose a su
domicilio.
Al ser evacuado Madrid por los franceses después de la victoria española sobre los
ejércitos imperiales en Bailén, Gil de Taboada juró de nuevo su cargo el 29 de
septiembre de 1808 en Aranjuez, donde se reunió la Junta Central como depositaria del
poder supremo de la nación durante la ausencia del Rey.

36° AMBROSIO O'HIGGINS


Ambrosio Bernardo O'Higgins (en irlandés: Ambrós Ó hUiginn;
en inglés, Ambrose Bernard O'Higgins; Ballenary, Irlanda, 1720-
Lima, Virreinato del Perú, 18 de marzo de 1801), conocido con los
títulos de marqués de Osorno, marqués de Vallenar, barón de
Ballenary; fue un militar y gobernador español de origen irlandés al
servicio de la corona española, Virrey del Perú (1796-1801).
Fue el padre del héroe de la independencia de Chile, Bernardo
O'Higgins.

VIDA Y TRABAJO
Ambrosio Bernardo O’Higgins (bautizado Ambrose Bernard O'Higgins) fue hijo
de Charles O’Higgins y Margaret O’Higgins (hija de William O'Higgins y Winnifred
O’Fallon), su abuelos paternos fueron Charles O’Higgins de Ballinary y Margaret
Brehan. El bisabuelo de Charles O’Higgins, Seán Duff O’Higgins, tenía el título
territorial de Tiarna o Señor de Ballinary, y estaba casado con Margaret O’Connor, una
dama de la casa real de O’Connor del castillo de Ballintuber, quienes reinaron sobre
Irlanda hasta el año 1000.
Los O’Higgins poseyeron grandes extensiones de tierras en los condados irlandeses
de Sligo, Westmeath y Mayo, pero con las expropiaciones realizadas por Oliver
Cromwell contra los católicos, y con las deportaciones de inquilinos hacia el condado
de Sligodespués de la conquista de Irlanda por el mismo Cromwell, las tierras de los
O'Higgins se redujeron cada vez más. Debido a esto, el clan O'Higgins emigró al condado
de Meath, donde se convirtieron en pequeños arrendatarios/campesinos al servicio de la
familia Rowley-Langford. De hecho, se dice que Ambrosio fue empleado por Lady Jane
Rawley.
En 1751, Ambrosio arriba a Cádiz, en donde se dedica al comercio como un empleado de
la firma Butler Trading House. Como irlandés y católico, le fue posible emigrar
legalmente a la América española en 1756.
Tras pasar por la Capitanía General de Chile y Virreinato del Perú, una mala racha de
negocios lo devolvió a Cádiz en 1760. De allí volvió a Chile en 1761, como asistente de
otro irlandés, el ingeniero John Garland. Trabajó como dibujante y diseñó los refugios
cordilleranos que posibilitaron tener correo todo el año entre Santiago y Buenos Aires.

VIRREY DEL PERU


En 1796 fue designado Virrey del Perú, virreinato que desde 1776 comprendía los
actuales territorios de Perú, el norte de Chile, y parte del oeste de Brasil; y a la ciudad
Chilena de Osorno, que entre el 1 de junio de 1798 y el 28 de octubre de 1802 estuvo bajo
la jurisdicción directa del virrey del Perú.
Siendo el virreinato la colonia más rica del Imperio español, el título de virrey era una
destacada distinción. Ocupó el cargo hasta su fallecimiento en 1801. Sus restos reposan
en la Iglesia San Pedro, en Lima.

LEGADO
Con seguridad, el mayor legado de O'Higgins fue su hijo; sin embargo existen también
otras áreas en las que la influencia de Don Ambrosio O'Higgins se dejaron sentir, a saber:

 La recuperación y pacificación de territorios entre Valdivia y Chiloé.


 La bahía de Vallenar Bay en Alaska.
 El trazado de la actual Ruta 68 de Santiago a Valparaíso.
 Monumentos a O'Higgins en: la Plaza Merrion en Dublín, la placa recordatoria a
orillas del río Garavogue en Sligo y también el pequeño monumento a orillas del
lago Lough Arrow, en Ballenary, en Irlanda. Monumentos en Chile: Los Andes, San
José de Maipo y Vallenar.

37° GABRIEL DE AVILÉS


Gabriel Miguel de Avilés y del
Fierro (Vich, Barcelona, Cataluña, 1735 — Valparaíso, Reino de
Chile, 1810). IV Marqués de Avilés,1 militar y político español que
fue Gobernador de Chile (1796–1799), séptimo Virrey del Río de la
Plata (1799–1801) y trigesimoséptimo del Perú (1801–1806).
Era hijo de José de Avilés e Iturbide, I marqués de Avilés,1 2
coronel de dragones y corregidor de Vich (1728–1744), y de Isabel
del Fierro Brito. Al igual que su padre siguió la carrera militar y
en 1767 fue nombrado capitán del regimiento de Dragones de la
Reina.

MILITAR EN PERU
En 1768, con el grado de sargento mayor, fue destinado a Perú. En 1771 se le designó
sub-inspector para la instrucción de las milicias de caballería, aunque en la práctica
actuaba como director de las tropas. En 1776 obtuvo por Real Orden el grado de coronel.
Desde 1780 participó en la represión de las sublevaciones encabezadas por José
Gabriel y Diego Túpac Amaru. Siendo comandante de Cuzco resistió a los ataques del
primero y lo derrotó en varios enfrentamientos importantes. Más tarde, al mando del
cuerpo de reserva, participó en la expedición del general José del Valle contra los
rebeldes. En el Cuzco, se casó con la viuda del marqués de Santa Rosa, Mercedes del
Risco y Ciudad (1782), de quien se decía era persona en extremo piadosa.
En 1785 heredó de sus hermanos el título de Marqués de Avilés, concedido veinticuatro
años antes al entonces intendente de Zaragoza, su padre, el brigadier José de Avilés. En
1787 fue nombrado gobernador del presidio y plaza fuerte del Callao. Permaneció en
Perú hasta 1796, un año después de haber alcanzado el grado de teniente general.

VIRREY DEL PERU


En esta segunda etapa en Perú, Avilés residió como virrey, en la ciudad capital Lima.
Dedicaba gran parte de su tiempo a asuntos religiosos, por lo que era conocido
popularmente como el "virrey devoto". Contrajo matrimonio con la dama limeña
Mercedes Risco y Ciudad, apodada "la santa virreina", junto a la que sufragó diversas
obras de caridad, como el hospital del Refugio para mujeres.
Su labor al frente del gobierno fue semejante a la de sus dos anteriores destinos. Durante
el mismo se creó mediante Real Cédula la gobernación de Maynas, 15 de julio de 1802,
y se incorporó Guayaquil al virreinato.
Tras cesar en el cargo en julio de 1806, Avilés se quedó a vivir en Lima. Establecido en
el pueblo de la Magdalena cercano a la ciudad, en 1807, fallecida su esposa y sin hijos,
se trasladó a Arequipa, donde permaneció hasta 1810. Ese año decidió volver
a España pero enfermó durante el viaje y murió en Valparaíso en septiembre.
El marquesado de Avilés pasó a su hermano menor, a cuya muerte se extinguió por falta
de descendientes.

ESCUDO DE ARMAS
En campo de gules, un castillo donjonado de oro, con dos alas de plata, una a cada lado;
el cual se asienta sobre rocas y ondas de azur y plata. El escudo se encuentra adornado
con banderas y estandartes propios del rango de Teniente General que ostentaba y demás
ornamentos (cañones, lanzas, etc) característico de su profesión de armas. En la parte
superior porta un yelmo con lambrequines que salen del mismo. El todo timbrado con
una corona de marqués correspondiente a su título nobiliario.

38° JOSE FERNANDO DE ABASCAL

José Fernando de Abascal y Sousa (Oviedo, 30 de


mayo de 1743 - Madrid, 31 de julio de 1821), fue
un noble, militar y político español, mariscal de campo, trigésimo
octavo virrey del Perú (1806-1816) y primer Marqués de la Concordia
Española del Perú.

DILATADA CARRERA POLITICA-MILITAR


Era hijo de José de Abascal y Sainz de Trueba y de Gertrudis de Sousa y Sánchez. De
familia oriunda del Valle del Ruesga (Cantabria), establecida en Oviedo, Abascal ingresó
de cadete en el Regimiento de Infantería de Mallorca, en 1762, donde aprendió
gradualmente el arte de la estrategia que de tanto le sirvió después en América. Se
incorporó en la Orden de Santiago, en 1795, y en la de Carlos III. Combatió desde las
playas de Argel hasta los campos del Rosellón sin desdeñar para nada su dilatado servicio
en las provincias indianas comenzando con Santa Catalina y la Colonia del Sacramento,
y La Habana en 1796 hasta llegar a la Intendencia de Guadalajara. En este tiempo se forjó
un militar que –al igual que otros compañeros de profesión- ejerció también un mando
político conforme avanzó en edad y experiencia, sabiendo siempre conjugar ambas al
servicio de la monarquía hispánica. De hecho, estuvo tan ocupado en sus destinos que
poco dedicó a sus asuntos personales, como fue su matrimonio tardío.
En 1804 fue nombrado virrey del Río de la Plata. No llegó a tomar posesión del cargo, ya
que fue nombrado virrey del Perú en el mismo año, cargo que no desempeñó hasta 1806,
debido a que en su viaje a Lima fue apresado por los ingleses, lo que le obligó a realizar
un periplo alargado y costoso que supuso el traslado de Abascal a su último destino,
causado por los rápidos cambios que se dieron en la política internacional de entonces.
Sin embargo a éste inconveniente supo sacar partido el nuevo virrey al conocer, de
primera mano, el territorio que fue objetivo de su inmediata acción de gobierno.

SU POLITICA ILUSTRADA EN PERU


Este período supuso el reflejo del espíritu cultivado de Abascal, que se plasmó en acciones
encaminadas a favor de los súbditos españoles americanos del Perú, entendiendo éstos
como la élite social y a sabiendas de que toda medida tomada desde un organismo público
no era baladí sino que, por el contrario, iba encaminada a granjearse las simpatías de
dichos súbditos. Por este motivo, Abascal se centró en asuntos de salubridad pública,
cultura y defensa, que le sirvieron de apoyo en los momentos difíciles por los que atravesó
el virreinato, tanto en el interior como en el exterior del mismo.
En relación con las políticas de orden interno, el virrey se centró, como buen ilustrado que
era, en aspectos sanitarios y culturales. Creó numerosas escuelas-taller y con la
colaboración del pintor José del Pozo creó la Real Escuela de Pintura de Lima. Apoyó la
vacunación antivariólica de los súbditos peruanos, aprovechando la expedición del
doctor José Salvany y Lleopart por tierras hispanoamericanas y con el apoyo del
protomédico Hipólito Unanue. Otra medida ilustrada fue la creación, fuera de los muros
de la ciudad de Lima, de un cementerio para evitar enfermedades contagiosas que se
pudieran acarrear del hecho de enterrar a los muertos dentro de las iglesias y conventos
capitalinos, para lo cual hizo una cuantiosa inversión apoyada por aportaciones dispares
y con el claro sostén del alto clero limeño así como del colegio médico. Entre el segundo
tipo de medidas, surgió la creación del Colegio de Medicina y del Jardín Botánico
(contando para ello con claustro de profesores, biblioteca, salas de prácticas, etc.) para la
formación de galenos y especialistas, para lo que Abascal contó con muchos de los ilustres
hombres peruanos y de los antiguos territorios virreinales como Quito y Santa Fe. La
razón que le llevó a ello fue la observación que hizo, durante su penoso recorrido de toma
de posesión, de las carencias que sufría gran parte de Sudamérica en esta materia.
También empujó a los colegios de San Pablo y del Cercado para la instrucción de los
hijos de la elite peruana y fundó el Colegio de Abogados capitalino, netamente criollo.

39° JOAQUIN DE LA PEZUELA


Joaquín González de la Pezuela Griñán y Sánchez de Aragón Muñoz
de Velasco (Naval, 1761 - Madrid, 1830) fue noble, militar y
político español, I marqués de Viluma. Tras derrotar al
general rioplatense José Rondeau en la Batalla de Viluma o de Sipe
Sipe,1 fue nombrado trigésimo noveno virrey del Perú (7 de
julio de 1816 - 29 de enero de 1821) y capitán general de los Ejércitos.

INICIOS DE SU CARRERA MILITAR


Hijo de Juan Manuel de la Pezuela y Muñoz de Velasco y de Anna María Sánchez
Capay. De familia hidalga oriunda de Santander, estudió en el Colegio de Artillería
de Segovia y combatió en el sitio de Gibraltar y años más tarde
contra Francia en Guipúzcoa y Navarra (1793-1794).
En 1805 fue trasladado a América del Sur, donde ocupó cargos secundarios y
posteriormente el virrey del Perú José Fernando de Abascal y Sousa lo nombró Director
de la Artillería Real, que reorganizó profundamente.

VIRREY DEL PERU


En octubre de 1816 Joaquín de la Pezuela fue nombrado virrey del Perú, para suceder
a José Fernando de Abascal, que había ocupado ese cargo durante diez años.
Concentró sus esfuerzos en apoyar las expediciones hacia el norte de la
actual Argentina de su sucesor en el mando del Ejército del Alto Perú, José de la Serna,
y en apoyar a las fuerzas realistas de Chile.
Tras la victoria del patriota general José de San Martín en la batalla de Chacabuco, envió
a Mariano Osorio a Chile, donde éste organizó un ejército para intentar reconquistar una
vez más ese territorio. Pero cuando el general San Martín derrotó a Osorio en la batalla
de Maipú retiró las fuerzas realistas de Chile y dejó que la causa del rey fuera defendida
por guerrillas irregulares y por indígenas mapuches.
Durante dos años se limitó a apoyar al ejército que operaba en el Alto Perú y a lanzar
expediciones cada vez más débiles sobre Salta, mientras aguardaba el esperado ataque de
San Martín desde Chile. Éste finalmente se produjo el 8 de septiembre de 1820, cuando
arribó a Paracas la Expedición Libertadora del Perú. Desde allí, San Martín lanzó
la Primera campaña de Arenales a la sierra del Perú que recorrió el territorio de sur a
norte, mientras el resto del ejército se instalaba en Huaura. San Martín inició
negociaciones con Pezuela, que no lograron éxito alguno, debido a que el jefe
expedicionario proponía la independencia del Perú, lo que era inaceptable para el virrey.

ULTIMOS AÑOS
La exitosa campaña de la Sierra, la imposibilidad de expulsar a la escuadra de Thomas
Cochrane de la costa peruana y la fidelidad del virrey Joaquín de la Pezuela
al absolutismo provocaron su desprestigio, especialmente debido a que la mayor parte de
los oficiales a sus órdenes eran liberales.
El 29 de enero de 1821, los jefes liberales, dirigidos por el general José de la Serna, lo
derrocaron por medio del llamado Pronunciamiento de Aznapuquio.
Pezuela se embarcó inmediatamente hacia España, donde en 1825 fue nombrado Capitán
General de Castilla la Nueva.
Falleció en Madrid en 1830.

40° JOSE DE LA SERNA

José de la Serna y Martínez de Hinojosa, I conde de los Andes (Jerez de la


Frontera, 1770 - Cádiz, 6 de julio de 1832), fue un noble, militar y
administrador virreinal español que detentó el cargo de virrey del Perú en la
fase terminal de la dominación de España en Sudamérica.
CARRERA MILITAR
Hijo de Álvaro José de la Serna y Figueroa y de Nicolasa Martínez de
Hinojosa y Trujillo. Se forma como cadete en 1782 en la Academia de
Artillería de Segovia, y ascendió á subteniente en 1787, y siendo compañero de Luis
Daoíz consigue recibirse como oficial de artillería, participó en el año 1790 en la defensa
del sitio de Ceuta, participando en las salidas que destruyeron todos las baterías del
ejército sitiador del emperador de Marruecos, obligándole a levantar el cerco sobre la
ciudad.
Participa en la Guerra del Rosellón y Cataluña contra la Convención Nacional
(Revolución Francesa) de la primera república francesa, y embarcado también en distintas
campañas navales entre los años 1789 y 1802 continuó sus servicios en la escuadra
de José de Mazarredo contra la armada inglesa, y en la expedición sobre Brest del
año 1799. En 1805 ascendió al grado de teniente coronel.
Graduado sargento mayor del segundo Regimiento de Artillería, con cuya unidad
concurrió á la defensa de Valencia, y después a la de Zaragoza, a donde llegó en los
primeros días de agosto de 1808, mandando las compañías de artilleros de plaza
pertenecientes a las divisiones enviadas por la Junta Suprema de Valencia en auxilio de
los aragoneses.
Participa en la defensa de Zaragoza, concretamente en la defensa del Convento de San
José, en los arrabales de la ciudad, y en la defensa de Puerta Quemada y es hecho
prisionero en este segundo sitio de Zaragoza, llevado forzadamente a Francia, desde
donde emprende una temeraria fuga de su prisión consiguiendo huir por Austria hasta
Salónica y embarcarse a España para reincorporarse a la lucha contra Napoleón
Bonaparte. Ascendido á coronel del cuerpo de artilleros en 1812 obtuvo el mando del
tercer Regimiento, y al terminar la Guerra de la Independencia Española, en la que
alcanzó nombradía, merece el alto grado de brigadier del ejército.

CAMPAÑAS DEL ALTO PERU


Tras haber combatido en la guerra de independencia española contra la ocupación
Napoleónica, desde 1815 fue destinado para servir como oficial en el Virreinato del
Perú y afectado al teatro de operaciones en el Alto Perú.
Emprendió desde el año 1816 una serie de campañas militares para pacificar distintos
territorios altoperuanos ocupados por guerrilleros insurgentes,
denominados republiquetas, cada uno de los cuales ejercía una dominación en su zona
respondiendo a las Provincias Unidas del Río de la Plata por lo que quedaban fuera del
dominio de la monarquía.
En la misma línea procedió más al sur a la ocupación de Jujuy y Salta, intentando avanzar
a Tucumán, obstaculizado por la feroz resistencia que le opusieron los gauchos de
Güemes en la frontera norte, a pesar de haber derrotado a su comandante en La Puna,
el marqués de Yavi, el 15 de noviembre de 1816.
Sus tropas entonces estaban conformadas por más de siete mil soldados organizados en
catorce cuerpos de línea repartidos en dos armas, caballería e infantería. Estaban
compuestos por los Húsares del Rey, los Dragones de la Unión de Fernándo VII, dos
batallones de Granaderos de las Imperiales de Alejandro, el batallón de Granaderos de la
Guardia y el de Cazadores a Caballo. Contaba para tal invasión con mil caballos frescos
sin monta, otras mil mulas y el soporte de una fuerza de artillería de veinte cañones.

MANDO DE LA SERNA EN EL PERU


Los éxitos patriotas, la inactividad del ejército de Lima, y el proyecto de capitulación de
Pezuela ocasionaron que el bando español cuestionase el desempeño del virrey Pezuela,
contra quien los jefes españoles dan un ultimátum en Aznapuquio, tras lo cual se encarga
la dirección de la guerra al general de mayor graduación, José de la Serna e Hinojosa.
El 29 de enero de 1821, en razón del pronunciamiento de Aznapuquio contra Pezuela, La
Serna tomó el mando como capitán general y jefe político superior, lo que fue aprobado
por el trienio liberal. Más tarde, La Serna recibiría también la confirmación de su
nombramiento de Virrey por parte del gobierno absoluto de Fernando VII el 9 de
agosto de 1824, tres días después de la batalla de Junín.
Así las cosas se realizó entonces una reunión personal entre el comisionado por las cortes,
el general José de San Martín y el nuevo Capitán General José de la Serna, en Punchauca,
por orden de la monarquía constitucional de España. Nuevamente San Martín pidió el
reconocimiento de la Independencia del Perú, y De la Serna la indivisibilidad de la corona
española, y la reunión fracasó.
Después de la fracasada conferencia de Punchauca, el 5 de junio de 1821, el capitán
general José de la Serna, anunció a los limeños que abandonaba Lima, dejando al
entonces general realista, José de La Mar, con una fuerza que se refugiara en el Callao, al
amparo de la fortaleza del Real Felipe, y salió de la ciudad con todo su ejército, el 6 de
julio para asentar su gobierno en el Cuzco.
El General San Martín entonces entró en Lima el 10 de julio, donde fue recibido con
júbilo de sus adeptos y por el recelo de los partidarios españoles. El 15 de julio se firmó
el acta de la Independencia del estado peruano en el cabildo de Lima que era presidido
por el alcalde Isidro de Cortázar y Abarca.
De la Serna no tuvo mucho tiempo para gobernar sino para combatir. Logró llevar la
primera imprenta al Cusco y comenzó a imprimir desde allí el famoso periódico El
Depositario, en el cual colaboró por igual el cáustico escritor Gaspar García y Rico. En
espera de refuerzos que nunca llegaron al Perú consiguió sostenerse tres años más,
permaneciendo aún en la Provincia del Cusco en 1824, y tras sufrir la rebelión y traición
del general Pedro Antonio Olañeta fue derrotado por el general Antonio José de
Sucre con su ejército patriota en la Batalla de Ayacucho. La Serna resultó con siete
heridas de gravedad en la batalla; y bajo la capitulación de Ayacucho se le permitió
regresar a España.

CONCLUSIONES:
 En el Virreinato del Perú las revueltas anti fiscales, como su nombre lo indica, son
contra la política fiscal del Estado colonial español y se dan en las ciudades; las
que tienen dos motivaciones: la primera, el interés de comprender entre los
tributarios a los mestizos, cholos y castas; la segunda, el paquete de medidas
económicas que trató de implantar Areche, con el establecimiento de aduanas y el
alza de la alcabala.
 Puede decirse que políticamente, Túpac Amaru desarrolló un movimiento contra
el Virreinato Español, proyectando independizar al Perú. Pero en la colonia el
poder se le estaba escapando a la metrópoli, ya que los criollos ricos eran quienes
en verdad dominaban, corrompiendo a las autoridades enviadas por el rey y
utilizándolas para servicio de sus intereses. En consecuencia, el movimiento de
Túpac Amaru estuvo a punto de traer abajo la maquinaria de dominación criolla
montada por la burguesía comercial de Lima en alianza con los terratenientes
feudales y los propietarios de minas y obrajes. Esto explica también el por qué
algunos sectores de la pequeña burguesía, afectados por la clase dominante, se
plegaron al proyecto revolucionario. Explica también el por qué los criollos ricos
suspendieron de momento su disputa con la corona, ante el peligro indio.

BIBLIOGRAFÍA:
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