Está en la página 1de 21

INTRODUCCION

Las obras de defensa ribereña que se proponen tienen básicamente un enfoque de


protección hacia los pobladores y la agricultura, no obstante, los beneficios alcanzasen
todos los sectores y población en general.

A través de los tiempos, los seres humanos se han ubicado en las cercanías de los ríos,
por lo que se hace necesario la construcción de defensas, las cuales son estructuras
creadas para prevenir inundaciones, causadas por los desbordamientos de caudales en
épocas de lluvia, y así poder proteger tanto a los habitantes como a las infraestructuras
que se encuentran en el riesgo hídrico.

Debido a la problemática que presentan las inundaciones, se deben colocar


protecciones en las márgenes de los ríos. Para poder diseñar estas protecciones,
primero se deben realizar ciertos estudios preliminares como son: análisis hidrológico,
morfológico, topográfico y estudio de la situación actual, para que estas puedan cumplir
con eficiencia su objetivo y a su vez su vida útil, y poder así estimar su altura y la
distancia a la que se deben colocar.

Es importante determinar qué tipo de defensa se va a utilizar, de acuerdo con las


condiciones hidráulicas y a la naturaleza del terreno, disponibilidad de los materiales y
el tipo de uso que se da a las áreas aledañas, ya que en áreas rurales se usan diques
de tierra, mientras que en las áreas urbanas se utilizan diques de hormigón.
DEFENSAS RIBEREÑAS

Las defensas ribereñas son estructuras construidas para proteger de las crecidas de los
ríos las áreas aledañas a estos cursos de agua.

La protección contra las inundaciones incluye, tanto los medios estructurales, como
los no estructurales, que dan protección o reducen los riesgos de inundación.

 Las medidas estructurales incluyen las represas y reservorios, modificaciones a


los canales de los ríos por otros más amplios, defensas ribereñas, depresiones
para desbordamiento, cauces de alivio, obras de drenaje y el mantenimiento y
limpieza de los mismo para evitar que se obstruyan.

 Las medidas no estructurales consisten en el control del uso de los terrenos


aluviales mediante zonificación, los reglamentos para su uso, las ordenanzas
sanitarias y de construcción, y la reglamentación del uso de la tierra de las
cuencas hidrográficas para no ocupar los cauces y terrenos aluviales de ríos
y ramblas con edificaciones o barreras.

La forma y el material empleado en su construcción varía, fundamentalmente en función


de:

 Los materiales disponibles localmente


 El tipo de uso que se da a las áreas aledañas. Generalmente en áreas rurales se
usan diques de tierra, mientras que en las áreas urbanas se utilizan diques
de hormigón.

TIPOS DE DEFENSAS RIBEREÑAS

1.- OBRAS LONGITUDINALES: son generalmente utilizadas para

- delimitar el cauce y aprovechar los terrenos en los márgenes.

- proteger las orillas contra erosiones o inundaciones.

- recuperar terrenos ribereños.

Dependiendo de la situación local y de su finalidad, pueden ser diversificadas en


estructura gruesa y estructura delgada

Protege la orilla contra la erosión y


actúa como contención, confiriendo
estabilidad al talud natural
Utilizada para revestir la orilla, natural
o artificial, ya estable, oportunamente
perfilada, protegiéndola contra la
erosión

Las obras longitudinales deben interferir lo menos posible con el medio ambiente e
integrase fácilmente al mismo. Las soluciones recomendadas como los gaviones caja,
gaviones saco, colchones reno, terramesh y geomantas, se adecuan perfectamente a
este tipo de necesidades técnicas, constructivas y económicas a este tipo de obras.

2.- OBRAS DEFLECTORAS.

Al existir la necesidad de dirigir o centralizar el flujo de la corriente para recuperar el flujo


de la corriente para recuperar las márgenes de la erosión, se recurre a las estructuras
deflectoras, denominadas espigones.
Como en el caso anterior las caracteristicas de estas obras son la facilidad y rapidez de
construccion, la rapidez de construccion en ´presencia de agua y e flexibilidad . las
estructiuras en espigones son una excelente solucion para la construccion de
espigones.

MODELOS DE DEFENSAS RIVEREÑAS EN EL PERU

En el Perú existen muchas zonas bajo el riesgo de inundación. En particular son


vulnerables aquellas poblaciones de sierra y selva, que ven periodos de precipitaciones
anualmente y que se han asentado cerca de los caudales de los ríos.

Como muchos fenómenos naturales, los ríos tienen un comportamiento de difícil


proyección. Aquellos con tendencias a sufrir inundaciones suelen presentar
comportamientos imprevisibles que solo sirven para maximizar el nivel del riesgo de las
poblaciones que habitan cerca de ellos.

Las inundaciones no solo significan la pérdida de vidas humanas; afectan también los
medios de vida y de soporte económico de las poblaciones bajo situaciones económicas
marginales.

Una alternativa para lidiar con la realidad de las inundaciones en el Perú, mitigar sus
efectos y prevenir el escalamiento de situaciones de desastre es mediante controladores
ribereños, una forma de barrera de protección ante la subida del nivel de agua. Sirven
no solo para evitar la destrucción material causada por las inundaciones, sino como
alternativa ante la pérdida de vidas humanas.

La construcción de controladores es un proceso técnico que requiere de estudios


técnicos (hidrológicos y geomorfológicos) de aquellos tramos de ríos que sufren erosión
y desbordes.
USOS DE CONTROLADORES RIBEREÑOS

Los controladores para la defensa ribereña dependen de la cuenca de construcción, ya


que la geomorfología de la costa no es la misma que la de la sierra o de la selva. Sin
embargo, en general todos cumplen las mismas funciones:

• Reducir la velocidad de la corriente cerca de la orilla.

• Desviar la corriente de la orilla cuando ocurren desbordes.

• Prevenir la erosión de las márgenes del río.

• Establecer y mantener un ancho fijo para el río.

• Estabilizar el cauce fluvial.

• Controlar la migración de meandros.

Uso de gaviones

En el Perú los gaviones son usados como muros de contención; diseñados de tal
manera que tienen distintos niveles y combinan funciones de sostenimiento y drenaje.
Sin embargo, para la construcción de gaviones es necesario uniformizar el terreno
donde se ubicarán, sin la necesidad de excavaciones.

Los gaviones protegen los suelos en contra de la erosión hídrica, que afecta el nivel de
nutrientes de un suelo, sus características hidráulicas y el potencial agrícola.

Los gaviones también son usados como protección de obras transversales como
espigones y diques, así como en el revestimiento de vertederos, protección de tomas
de agua, etc.

Uso de los espigones

Se utilizan para desplazar las aguas y el cauce más hondo de un río hacia el centro.
También sirven para reducir la capacidad hidráulica, generando sedimentación de
partículas finas transportadas por el río y su anchura. Esto ofrece estabilidad a un tramo
del cuerpo de agua.

Los espigones permiten la sedimentación, estancamiento o colmatación en ríos de poca


pendiente que transportan materiales sólidos en suspensión.
¿CUÁLES SON LOS CONTROLADORES MÁS USADOS?

Los controladores ribereños, también llamados defensas ribereñas, son estructuras


construidas en las márgenes de los ríos para evitar procesos de erosión y
desbordamiento. En general pueden ser de dos tipos: no estructurales y estructurales.

Controladores no estructurales

Son desarrollados de forma artesanal y sin considerar criterios técnicos como una
alternativa de bajo coste y rápida construcción. Por este motivo, no se realizan estudios
previos de evaluación de la cuenca donde se construyen.

Cumplen la misma finalidad que los controladores estructurales, pero son usualmente
realizados por las poblaciones sin consultas de especialistas.

Una de las formas más comunes de control no estructural es el uso de zonificación para
asignar terrenos con la tendencia a ser inundados (aluviales) a actividades no
productivas o actividades no primarias, como la recreación. Sin embargo, su limitación
es que no se previenen las inundaciones.

Es muy frecuente el uso de defensas vivas o naturales. En este modelo se utilizan


especies de vegetación nativas o exóticas para crear una frontera natural contra la
erosión y el desborde de los ríos. Existen experiencias nacionales de este uso como,
por ejemplo, la aplicación de bambú como defensa implementado por el programa Sierra
Exportadora. Pero hay un límite de caudal frente al que este tipo de barrera puede dejar
de ser funcional.

Controladores estructurales

Controladores desarrollados utilizando herramientas y procesos técnicos, y bajo la


supervisión de especialistas. Pueden utilizar materiales locales, pero siempre cumplen
ciertos estándares de técnicos.

Se subdividen a su vez en dos tipos: flexibles (para suelos con deformaciones) o rígidos
(para terrenos uniformes). Los controladores más populares son:

Gaviones

Estructuras construidas con alambre de acero galvanizado o recubiertos de PVC, a


forma de malla, y rellenados de rocas redondeadas (cantos rodados). Los muros de los
gaviones protegen las zonas aledañas y son capaces de tolerar grandes deformaciones
sin perder resistencia.

Pantallas de concreto armado


Estructura de contención similar a los gaviones, pero de mayor profundidad de
excavación. No tienen espacios y son completamente impermeables. Como son
construidas in situ pueden usarse pilotes para dar flexibilidad a la estructura y puntos
adicionales de soporte.

Diques

Estructuras que controlan o impiden el paso del agua en un río. Existen dos tipos:
artificiales y naturales.

• Artificiales: previenen la inundación pues encajonan al río y dan más fluidez a su


cauce.

• Naturales: depósitos arrastrados por el río y depositados en sus márgenes.

Espigones o deflectores

Construcciones usadas a modo de rompeolas, permiten dirigir el cauce del río y


aumentarlo en una dirección específica. Usualmente son construidos de hormigón o
rocas de gran tamaño. Funcionan de tal manera que se dirige el sentido del agua,
alejando el punto de máxima profundidad de la orilla (evitando desbordes).

Muros de concreto armado

Elementos estructurales de concreto, son construidos en ambas orillas de un cauce de


agua para dirigirlo y controlar su flujo.

Muros de mampostería

Similares a los muros de concreto, pero se usan piedras o tabiques de madera, con
cierta separación, dando a la estructura cierto grado de permeabilidad. Elementos de
diseño.

ELEMENTOS DE DISEÑO

Para la construcción de cualquier sistema de controladores ribereños es necesario que


antes se realicen estudios científicos que permitan determinar las características del río
sobre el que se trabaja y las características de una posible inundación. Con esta
información, será posible construir controladores adecuados a la dinámica específica de
la cuenca. Los estudios más importantes para tomar en cuenta son: hidrológico, de
hidráulica fluvial y de tipos de socavación.

Estudio de hidrología
Un estudio hidrológico debe tomar en cuenta aspectos de precipitación y climatología
de la cuenca (precipitación media anual, tendencias mensuales, meses lluviosos y
meses secos), de eventos extremos y de transporte de sedimentos.

Para determinar la precipitación, se debe recurrir a la información oficial (datos del


Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología, para el caso de Perú). De no existir
información disponible, se pueden realizar medidas a lo largo de un periodo prudencial
o revisar información de proyectos de cooperación y desarrollo en la zona de trabajo.

Estudio de descargas máximas e hidrograma de avenidas

Este estudio consiste en observar los datos históricos de los caudales de un río, para
determinar cuáles son sus cargas máximas. Para ello se debe observar la serie histórica
de caudales obtenidos durante la estación de mayor aforo del río. En caso de que no
existan datos, se pueden obtener aforos alejados del lugar donde se planea construir un
controlador ribereño, pero en la misma cuenca. Luego, se deben corregir los datos de
acuerdo a la superficie de las cuencas.

El método más útil para cuencas pequeñas, donde no se cuenta con datos de caudales,
es el indirecto.

Está basado en tres factores: intensidad de precipitación, área de la cuenca y coeficiente


de escurrimiento.

La siguiente ecuación permite calcular el volumen medio de un río:

V= A x P x C

Donde:

V: volumen medio anual escurrido (m3).

P: precipitación media anual (m).

C: coeficiente de escurrimiento.

A: área de la cuenca de captación (m2).

El área de la cuenca de captación debe ser delimitada a partir del sitio identificado para
plantear la protección.

Estudio de distribución de eventos extremos es importante realizar un estudio de


distribución de eventos extremos porque es una de las metodologías más usadas para
el análisis de caudales de máximas avenidas anuales. Ello permite comprender cuántos
eventos extremos ocurren en una cuenca y adaptar el diseño de los controladores para
soportarlos.

La probabilidad de ocurrencia de un evento se determina conociendo el período de


retorno; los usuarios también pueden usar datos de serie de caudales para la zona en
estudio.

Distribución probabilística de las descargas anuales máximas la serie anual de un río


son los valores extremos de una serie de observaciones efectuadas durante un año.

Conocer estos datos permite aplicarlos a las ecuaciones de distribución de extremos y


hacer predicciones contando con la información de un cierto número de años.

En la práctica se usa el papel especial de probabilidades de extremos, denominado


papel de Gumbel o papel Gumbel aritmético (figura 3). Para el ploteo de los valores de
una serie de descargas anuales máximas, estas deben de ser ordenadas en forma
decreciente (de mayor a menor) y luego calcular para cada valor ordenado su
correspondiente tiempo de retorno usando la ecuación:

Tr = (n+1) /m

Donde:

T: período de retorno en años.

n: número total de máximas descargas anuales observadas.

m: número de orden de la magnitud dada cuando todas las descargas anuales


observadas son ordenadas en forma decreciente.

Con los datos resultantes se puede plotear en el papel de Gumbel cada valor, ordenado
con su correspondiente período de retorno. Para determinar la recta teórica de
distribución en el papel de Gumbel, se toman dos valores dentro del rango de los valores
ploteados, y haciendo uso de las relaciones encontradas para y, se calcula P y su
periodo de retorno. Con estos datos se tienen coordenadas de dos puntos a través de
los cuales se trazará una recta teórica de distribución.

Estudio de transporte de sedimentos el río trae consigo cargas de sedimentos que


afectan directamente sus laderas, debilitándolas y permitiendo inundaciones con mayor
facilidad. Para estimar la carga de sedimentos existen dos enfoques.
El primero toma en cuenta las características de la lluvia (pluviosidad media anual) y de
la cuenca (cobertura vegetal, pendiente) y de la composición granulométrica del material
del lecho del cauce del río. A estos valores se les asigna una carga específica de
transporte de sedimentos (en toneladas por km2 por año).

El segundo enfoque aplica fórmulas empíricas con datos de producción anual de


sedimentos de más de 250 cuencas alrededor del mundo para obtener una ecuación
general que tiene un error estimado de50%. La ecuación es:

𝑸𝒔 = 𝒂𝑸𝒏

Qs: Tasa media anual de transporte en suspensión (t).

Q: caudal medio anual (pies cúbicos por segundo).

Estudios de hidráulica fluvial

Los estudios de hidráulica fluvial son necesarios porque todos los ríos presentan
variaciones, están sujetos a mayor o menor grado de erosión, equilibrio y sedimentación.
Estos estudios brindan información necesaria para determinar el tipo de controlador que
se va a construir.

Sistema fluvial

El sistema fluvial está conformado por la franja por donde transcurre un río,
desde que nace hasta que muere en el mar, un lago o en otro río. Por simplicidad
y conveniencia, el sistema fluvial se ha dividido en tres zonas por las que pasa
un río al menos una vez a lo largo de su recorrido:

• Zona 1, de montaña o de juventud de un río: corresponde a la parte más alta


de la cuenca hidrográfica en donde se originan el caudal y los sedimentos. Está
caracterizada por tener fuertes pendientes, velocidades altas y caudales bajos.
El cauce transcurre por relieves escarpados y estratos rocosos. La energía del
río se consume en profundizar el cauce.

• Zona 2, intermedia o de madurez de un río: es la transferencia o transporte de


agua y sedimentos de la zona 1 a la zona 3. La energía del río se consume en
profundizar y ampliar el cauce. El río forma meandros y entrenzamientos.

• Zona 3, aluvial o de vejez de un río: corresponde a la parte baja en donde el


sedimento se deposita. Se caracteriza por tener dependientes bajas, velocidades
bajas y altos caudales. El cauce transcurre en estratos aluviales de gran espesor.
La tendencia del cauce es a ampliarse.
Morfología fluvial

La morfología fluvial se facilita mediante el estudio del alineamiento del cauce y de sus
secciones transversales. Las formas de las corrientes de agua son muy variadas y son
el resultado de la interacción de muchas variables (caudal, velocidad, pendiente, ancho,
profundidad, suelos, etc.). El cauce de un río presenta tres formas básicas: recto,
meándrico o entrenzado.

• Recto: se considera un estado de transición hacia cauces meándricos.

• Meándrico: el río se mueve transversalmente y origina la formación de


curvaturas en forma de S, que en general se deben a procesos de erosión y
sedimentación. Las velocidades son más bajas en la parte interna de las curvas,
dando lugar a sedimentación o formación de barras.

• Entrenzado: consiste en múltiples canales que se entrelazan y separan en el


cauce principal. Una causa del entrenzamiento es la gran cantidad de carga de
lecho que la corriente no es capaz de transportar, siendo la cantidad de material
más importante que su tamaño.

Estudios de socavación

La velocidad y las diferentes pendientes que se presentan en el cauce de un río generan


socavaciones a lo largo del curso. Estas varían según cada caso y es necesario tomarlas
en cuenta antes de diseñar un controlador ribereño. Los tipos de socavaciones más
importantes son:

Socavación normal o general

Es el descenso del fondo de un río que se produce al presentarse una creciente y es


debida al aumento de la capacidad de arrastre de material sólido que en ese momento
adquiere la corriente en virtud de su mayor velocidad. Este fenómeno es usual en las
partes altas y medias de la cuenca.

Socavación en estrechamientos

Se produce por aumento en la capacidad de arrastre de sólidos, es decir el río trae


consigo material suelto de diferente tamaño que adquiere una corriente cuando su
velocidad aumenta por efecto de una reducción del área hidráulica de su cauce. Se
observa en obras construidas en el cauce de un río, como puentes, asentamiento de
poblaciones y áreas agrícolas.

Socavación en curvas
Se forma cuando un río describe una curva por una tendencia en los filetes líquidos del
centro de la curvatura a moverse más rápido que los situados hacia el interior. Por esto
la capacidad de arrastre de sólidos de los primeros es mayor en la parte del cauce
exterior a la curva que en la interior.

Socavación en pilas

Se forma cuando se coloca una pila de puente en la corriente de un río y se produce un


cambio en las condiciones hidráulicas.

Estudio de socavación general del cauce

Para determinar la socavación general de un cauce es posible hacer una serie de


estudios y clasificaciones, de acuerdo a:

Cauce definido

• Material cohesivo: distribución de materiales homogéneos, distribución de


materiales heterogéneos.

• Material no cohesivo: distribución de materiales homogéneos, distribución de


materiales

heterogéneos.

Cauce indefinido

• Material cohesivo: distribución de materiales homogéneos, distribución de


materiales heterogéneos.

• Material no cohesivo: distribución de materiales homogéneos, distribución de


materiales heterogéneos.

DISEÑO DE MURO DE GAVIONES

Los g aviones

Son elementos modulares con formas variadas, confeccionados a partir de redes


metálicas en malla hexagonal de doble torsión que, llenados con piedras de
granulometría adecuada y cosidos juntos, forman estructuras destinadas a la solución
de problemas geotécnicos, hidráulicos y de control de erosión. El montaje y el llenado
de estos elementos pueden ser realizados manualmente o con equipos mecánicos
comunes.
Para las estructuras de contención a gravedad pueden ser utilizados los siguientes
tipos:
Gaviones tipo caja

El gavión tipo caja es una estructura metálica, en forma de paralelepípedo, producida


a partir de un único paño de malla hexagonal de doble torsión, que forma la base, la
tapa y las paredes frontal y trasera. A este paño base son unidos, durante la
fabricación, paneles que formarán las dos paredes de las extremidades y los
diafragmas (figura 2.4.1).

Después de retirado del fardo, cada elemento debe ser completamente desdoblado y
montado en obra, asumiendo la forma de un paralelepípedo (figura 2.4.1). Es
posteriormente transportado e instalado, conforme a lo definido en el proyecto y
amarrado, aún vacío, a los gaviones adyacentes (ver capítulo 4.2.1 “Como colocar los
gaviones tipo caja”).
Debe ser llenado con material pétreo, con diámetro medio nunca inferior a la menor
dimensión de la malla hexagonal.
La red, en malla hexagonal de doble torsión, es producida con alambres de acero con
bajo contenido de carbono, revestidos con una aleación de zinc, aluminio (5% ) y
tierras raras (revestimiento Galfan®), que confiere protección contra la corrosión.
Cuando está en contacto con agua, es aconsejable que sea utilizada la malla
producida con alambres con revestimiento adicional de material plástico, que ofrece
una protección definitiva contra la corrosión.
Las dimensiones de los gaviones caja son estandarizadas:

• El largo, siempre múltiplo de 1 m, varía de 1 m a 4 m, con excepción del gavión de


1,5 m;
• el ancho es siempre de 1 m;
• y el alto puede ser de 0,5 m o 1,0 m.
A pedido, pueden ser fabricados gaviones caja de medidas diferentes del estándar.

Tabla 2.4.1 - Dimensiones estándar de los gaviones tipo caja

Son las estructuras flexibles más adecuadas para la construcción de obras de


contención.

Figura 2.4.2 - Detalle constructivo de obra con gaviones caja


Gaviones tipo saco

Los gaviones tipo saco son estructuras metálicas, con forma de cilindro, constituidos
por un único paño de malla hexagonal de doble torsión que, en sus bordes libres,
presenta un alambre especial que pasa alternadamente por las mallas para permitir el
montaje del elemento en obra (figura 2.4.3).

Es un tipo de gavión extremadamente versátil debido a su formato cilíndrico y método


constructivo, siendo que las operaciones de montaje y llenado son realizadas en obra
para su posterior instalación, con el auxilio de equipos mecánicos.
Generalmente es empleado como apoyo para estructuras de contención, en presencia
de agua o sobre suelos de baja capacidad de soporte, debido a su extrema facilidad
de colocación.
Estas características hacen del gavión saco una herramienta fundamental en obras de
emergencia. Después de montado, es llenado con rapidez, cerca del lugar de
utilización. Su llenado es realizado por el extremo (tipo saco) o por el costado (tipo
bolsa). Después de concluidas estas etapas, los gaviones tipo saco pueden ser
almacenados para su posterior aplicación o pueden ser inmediatamente colocados en
el lugar de aplicación con el auxilio de una grúa.
El llenado con piedras no depende de una colocación tan cuidadosa como en los
gaviones tipo caja, debido a las características y funciones que desempeñan en las
obras en que son empleados. La menor dimensión de las piedras nunca debe ser
menor que la abertura de la malla. Los amarres entre los gaviones tipo saco no son
necesarios (ver capítulo 4.2.2 “Como colocar los gaviones tipo saco”).
La red, en malla hexagonal de doble torsión, es producida con alambres de acero con
bajo contenido de carbono, revestidos con una aleación de zinc, aluminio (5% ) y
tierras raras (revestimiento Galfan®), que confiere protección contra la corrosión.
Como estos elementos trabajan en contacto constante con agua y en ambientes
normalmente agresivos, se utiliza, para la producción de los gaviones tipo saco, la
malla producida con alambres con revestimiento adicional de material plástico, que
ofrece una protección definitiva contra la corrosión.
Las dimensiones de los gaviones saco son estandarizadas:
• El largo, siempre múltiplo de 1 m, varía de 1 m a 6 m;
• El diámetro es siempre de 0,65 m.

A pedido, pueden ser fabricados gaviones tipo saco de medidas diferentes del
estándar.
Gaviones tipo colchón Reno

El colchón Reno® es una estructura metálica, en forma de paralelepípedo, de gran


área y pequeño espesor. Es formado por dos elementos separados, la base y la tapa,
ambos producidos con malla hexagonal de doble torsión (figura 2.4.6).

El paño que forma la base es doblado, durante la producción, para formar los
diafragma, uno a cada metro, los cuales dividen el colchón en celdas de
aproximadamente dos metros cuadrados. En obra, el colchón es desdoblado y
montado para que asuma la forma de paralelepípedo. Posteriormente es transportado
y ubicado conforme a lo especificado en el proyecto y, cosido, aún vacío, a los
colchones Reno® adyacentes (ver capítulo 4.2.3 “Como colocar los colchones Reno).

Debe ser llenado con material pétreo, con diámetro medio nunca inferior a la menor
dimensión de la malla hexagonal.
Son estructuras flexibles adecuadas para la construcción de obras complementarias
tales como plataformas de deformación para proteger la base de los muros, canaletas
de drenaje, revestimiento de taludes además de su función principal, que es actuar
como revestimiento flexible de márgenes y fondos de cursos de agua.
La red, en malla hexagonal de doble torsión, es producida con alambres de acero con
bajo contenido de carbono, revestido con una aleación de zinc, aluminio (5% ) y tierras
raras (revestimiento Galfan), que confiere protección contra la corrosión. Como estos
elementos trabajan en contacto constante con agua y en ambientes normalmente
agresivos, utilizándose, para la producción de colchones Reno®, la malla producida
con alambre con revestimiento adicional de material plástico, que ofrece una
protección definitiva contra la corrosión. Se debe recordar que, aun cuando en la fase
de diseño el análisis del agua indique que esta no es agresiva, es casi imposible hacer
previsiones sobre cuáles serán su calidad después de algunos años.

Para el correcto dimensionamiento de los colchones Reno® consulte el manual técnico


“Revestimientos de canales y cursos de agua” editado por Maccaferri.

Cuando sea necesario, los colchones Reno® pueden ser montados, prearmados y
posteriormente colocados en agua, con el auxilio de equipos mecánicos.
Las dimensiones de los colchones Reno® son estandarizadas. Su longitud, siempre es
múltiplo de 1 m, varía entre 3 m y 6 m, en cuanto a su ancho es siempre de 2 m. Su
espesor puede variar entre 0,17 m, 0,23 m y 0,30 m. A pedido, pueden ser fabricados
colchones Reno® de medidas diferentes del estándar.

Tabela 2.4.3 - Dimensiones estándar de gaviones tipo colchón Reno®

Figura 2.4.7 -
Construcción de
plataformas de
deformación en
colchones Reno®
Estructuras en Gaviones: Ensayos Experimentales y
Referencias
A partir de las características de las estructuras en gaviones, se deduce que, para
obras de contención, los criterios de cálculo deben considerar la naturaleza particular
del material “gavión” y sus características físicas y mecánicas.

A continuación, serán presentados los resultados, observaciones y conclusiones de


pruebas realizadas por Maccaferri con el objetivo de individualizar los problemas
inherentes a las estructuras en gaviones.

Ensayos de Resistencia sobre Gaviones en Escala Real

Ensayo de Compresión Simple

Las primeras pruebas efectuadas fueron las de compresión simple sin restricción
lateral
(con deformaciones libres laterales). Estaban orientadas a formular indicaciones
sobre:

• La máxima resistencia del gavión a compresión;


• La secuencia de fenómenos que acompañan la deformación progresiva del gavión
debido a las cargas crecientes;
• El colapso de la estructura (acomodación del material de relleno, fracturas de las
piedras, deformación y ruptura de la malla con la consecuente fuga de piedras);
• La influencia del sentido de las mallas con respecto a los puntos de aplicación de
carga;
• El efecto de la presencia de eventuales diafragmas incorporados a los gaviones.

Para verificar la eventual influencia del sistema de aplicación de carga sobre la malla
que confina las piedras, algunas de las pruebas efectuadas sobre gaviones simples
fueron repetidas sobre dos gaviones superpuestos. Para cada tipo de gavión fueron
efectuadas 3 a 4 pruebas.
El tipo de estructura usado, su esquema (que representa la posición de las mallas en
las caras verticales libres y la eventual presencia de diafragmas internos), la sigla que
indica la muestra, las dimensiones iniciales de la muestra antes de la aplicación de la
carga vertical creciente son indicadas en la tabla 2.5.1.

Resultó confirmada la grande ductilidad de los g aviones que se deforman


sensiblemente antes de alcanzar la ruptura. Tal ruptura ocurre bajo valores de tensión
de compresión de 30 a 40 kg/cm2, en los ensayos en los cuales la disposición de la
malla y/o la presencia de los diafragmas, permiten un mayor confinamiento de las
piedras de relleno y también para las pruebas de compresión con restricción lateral
(con confinamiento de las laterales, a través de la disposición de dos placas verticales
de acero, oportunamente enrigecidas, confinando dos paredes laterales opuestas).
Tabla 2.5.1 - Ensayos de compresión simple sobre los gaviones [13]

Ensayo de Compresión con Restricción Lateral

Con tal terminología se quiere hacer referencia a un tipo de ensayo en el cual


prevalece la influencia de las tensiones tangenciales sobre las normales. El tipo y
esquema de la estructura sometida al ensayo, las dimensiones de su sección, la carga
alcanzada P, la tensión tangencial media máxima τ y las deflexiones (flecha) máximas
“H”, están indicadas en la tabla 2.5.2. Los resultados de los ensayos son mostrados
en la figura 2.5.3 y muestran una notable resistencia al corte de los gaviones,
acompañado por considerables deformaciones. La resistencia al corte es proveída por
la presencia de la malla y, por tanto, puede ser aumentada a través de la adecuación
de la misma o por la introducción de diafragmas (figura 2.5.3).
También en las pruebas de corte se observó una cierta acomodación inicial de las
piedras, con deformaciones relativamente grandes, seguidas por una fase de
endurecimiento, en la cual la estructura resulta más rígida, conforme la resistencia de
la malla pasa a ser más solicitada.

En la tabla 2.5.2 están indicados los valores del módulo tangencial “G = τ / (2H/l)”,
donde “l” es el valor libre entre los apoyos, de aproximadamente 0,55 metros,
calculado para la carga máxima y para una carga “P = 2500 kg” (que corresponde
medianamente al inicio de la fase rígida – ver diagrama “H x τ” de la figura 2.5.3).

También podría gustarte