Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Todo Por Nada 5B PDF
Todo Por Nada 5B PDF
Hechos 18:27
Filipenses 1:29
Juan 6:37,44,64-65
Sin embargo, Dios Padre no lleva a todos a Jesucristo, como está escrito:
“Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le
trajere… ninguno puede venir a mí, si no le fuere dado del
Padre”. En otras palabras, si Dios no concede fe en Jesucristo como don
de Gracia, no es posible creer en Él. Aquellos que no creen en Dios para
salvación no lo hacen porque el mismo Dios no les ha dado fe para creer;
por lo tanto, incluso aquellos que no creen en realidad están obedeciendo
la voluntad de Dios con respecto al camino que Él ha decretado para ellos.
Pueden gloriarse de que no son unos crédulos, de que sus inteligencias
son superiores a las de los pobres creyentes, pero finalmente están en las
manos de Aquel de Quien se dice que “de quien quiere, tiene
misericordia, y al que quiere endurecer, endurece” (Romanos
9:18).
1 Corintios 15:1-4
Entonces, el Evangelio se trata de la obra de Jesucristo en nuestro lugar.
El Evangelio es la muerte de Jesucristo por nuestros pecados, Su
sepultura por tres días y Su resurrección para nuestra justificación, todo
esto conforme a lo escrito anteriormente por los profetas en las Escrituras
(Romanos 1:1-4). El Evangelio consiste en proposiciones que hablan de
un suceso histórico ocurrido hace aproximadamente 2000 años, con
respecto a la obra de Jesucristo. El Evangelio no consiste en
mandamientos; el Evangelio tampoco consiste en la obra de
Dios en nosotros por medio de Su Espíritu Santo, sino que consiste en
hechos históricos objetivos con repercusiones espirituales. El Evangelio
consiste en la obra de Dios por nosotros, fuera de nosotros, en Jesucristo.
Entonces, Dios nos ofrece perdón por nuestros pecados y justicia perfecta
de manera gratuita en Jesucristo. ¿Cuál debe ser nuestra reacción con
respecto a esta buena nueva? 1 Corintios 15:1-2 nos da la
respuesta: Debemos creer en Él. Las expresiones “recibisteis” y
“retenéis la palabra” son equivalentes a creer. Debemos creer en el
Evangelio, en la persona y obra de Jesucristo en nuestro
lugar, para ser salvos. Aquel que cree en esto será salvo y aquel que
no ya está condenado y la ira de Dios está sobre Él (Juan 3:18,36).
¿Crees esto? ¿Crees que Jesucristo, el Hijo de Dios, murió por tus propios
pecados, fue sepultado y resucitó al tercer día por nuestra justificación?
¿Crees que eres un pecador merecedor de la ira de Dios y que tu única
esperanza es lo que Jesucristo hizo por ti? Si crees esto, entonces Dios ha
tenido misericordia de ti y te ha concedido fe en Su bendito Hijo
Jesucristo. ¡Gloria a Dios! ¿Cómo no amarle con todo nuestro ser por lo
que ha hecho por nosotros? ¿Cómo no amar a Jesucristo y entregar
nuestras vidas a Su servicio?