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Arquitectura de la red móvil Evolución hacia 5G

Resumen

Como una cadena es tan fuerte como su elemento más débil, también lo son la eficiencia, flexibilidad y
robustez de una red móvil, que depende de una gama de diferentes elementos funcionales y
mecanismos. De hecho, la arquitectura de la red móvil requiere una atención especial a la hora de
debatir la evolución del 3GPP EPS, ya que es la arquitectura que integra las diversas tecnologías del
futuro en una sola red móvil. Este artículo analiza la evolución de la red móvil 3GPP EPS como un
todo, analizando las propiedades específicas de la arquitectura que son críticas en futuras versiones de
3GPP EPS. En particular, este artículo analiza la evolución hacia una "red de funciones", el corte de
redes y el control, la gestión y la orquestación de redes móviles definidas por software. Además, se
detalla la hoja de ruta para la evolución futura del 3GPP EPS y sus componentes tecnológicos y se
enumeran las organizaciones que definen las normas pertinentes.

Introducción

El proyecto de asociación de tercera generación (3GPP), sistema de paquetes evolucionado (EPS) de


evolución a largo plazo (LTE), se refiere a la arquitectura lógica compuesta por la red de acceso
radioeléctrico (RAN), denominada red de acceso radioeléctrico terrestre universal evolucionado (E-
UTRAN) en el caso de LTE, y el núcleo de paquetes evolucionado (EPC), tal como se define en[1, 2] y
se ilustra en la Fig. 1. El objetivo de esta arquitectura lógica es permitir una red plana basada en IP y
proporcionar un conjunto estandarizado de elementos de red e interfaces de red. Los elementos e
interfaces estandarizados permiten a los operadores integrar equipos e implementaciones de diferentes
proveedores en un único sistema, garantizando al mismo tiempo la interoperabilidad. El diseño de una
arquitectura lógica satisface los requisitos derivados de los casos de uso que se espera sean de especial
interés para 3GPP EPS. Hasta ahora, el objetivo del 3GPP EPS ha sido principalmente la prestación de
servicios de banda ancha móvil, para lo cual el sistema hace un uso muy eficiente de los recursos
disponibles. Espectro.

Hasta ahora, las versiones anteriores (es decir, Rel-11, Re-12 y Rel-13) estudiaron y especificaron
cómo integrar otros servicios, como los servicios de datos pequeños y los servicios de comunicación de
tipo máquina (MTC). Mientras tanto, las tecnologías de computación en nube y los conceptos de nube
han cobrado impulso no sólo desde la perspectiva de la tecnología de la información (TI), sino también
dentro del mundo de las telecomunicaciones. La integración de los conceptos de nube en 3GPP EPS
permite el soporte de servicios nuevos y emergentes. Por otro lado, requiere conceptos arquitectónicos
novedosos, que soportan de forma nativa las tecnologías de nube. Sin embargo, la asignación estática
de funcionalidad a los elementos de red y las fuertes dependencias funcionales dentro de cada elemento
de red dificultan el soporte de la flexibilidad requerida para futuros despliegues 3GPP EPS. Las
siguientes secciones detallan conceptos que podrían contribuir a la evolución del 3GPP EPS con el fin
de proporcionar la flexibilidad necesaria para soportar servicios de red con diversos requisitos, permitir
diversos despliegues de redes móviles y proporcionar un mayor grado de conocimiento del contexto.
Específicamente, la siguiente sección presenta conceptos relevantes como la composición de funciones
flexibles, el corte de redes y el control de redes definido por software. A continuación, ofrecemos una
visión general de la hoja de ruta de la estandarización, y el artículo concluye en la sección final.
Figura 1. El (básico) sistema de paquetes evolucionado 3GPP Red de funciones.

Evolución de la red móvil

Con el fin de apoyar diversos servicios tales como la salud electrónica, la Internet de los objetos (IO) y
la tecnología vehicular para todo (V2X) en las futuras redes móviles, vemos la necesidad de mejorar la
EPS hacia una red móvil flexible que se adapte a los nuevos principios arquitectónicos, manteniendo al
mismo tiempo la compatibilidad con las versiones anteriores. Una arquitectura EPS tan evolucionada
debe ser compatible con tecnologías de radio heredadas, así como con interfaces de acceso
radioeléctrico novedosas, como la transmisión de ondas milimétricas (mmWave) o de ondas
centimétricas. Debe adaptarse a los paradigmas de procesamiento emergentes, tales como la
computación móvil periférica (MEC) y la Cloud-RAN (C-RAN), permitiendo al mismo tiempo
patrones de implementación flexibles basados en pequeñas, micro y macrocélulas y permitiendo la
programabilidad para soportar requisitos muy diferentes en términos de latencia, robustez y
rendimiento. Basándonos en esto, vemos dos objetivos principales que deben ser abordados por una
arquitectura 3GPP EPS evolucionada.

Adaptación multiservicio y contextual de la red móvil, lo que implica que la red móvil debe adoptar
su funcionamiento sobre la base de las necesidades reales del servicio y el contexto correspondiente. El
contexto incluye propiedades de despliegue, propiedades de red de transporte y propiedades de
servicio, así como las tecnologías RAN disponibles.

Multiarrendamiento de la red móvil, que tiene por objeto reducir los costes de capital y de
explotación permitiendo a los proveedores de infraestructura hacer el mejor uso posible de los recursos
disponibles, incluidos el espectro y la infraestructura. Por lo tanto, múltiples inquilinos pueden
compartir recursos dentro de la red móvil mientras ofrecen diversos servicios. Para lograr estos
objetivos, deben apoyarse las siguientes funcionalidades principales, que se detallarán en las secciones
siguientes.

Red de funciones: Tradicionalmente, las funciones de la red móvil se agrupan fácilmente en entidades
de red, cada una responsable de un conjunto predefinido de funciones e interfaces que conectan estas
entidades. El uso de una "red de funciones" flexible permite la adaptación a diversos servicios y la
optimización mediante software diferente en lugar de utilizar diferentes parametrizaciones. Cada
bloque puede ser reemplazable y puede ser instanciado individualmente para cada red lógica que
funcione en la misma infraestructura. Sin embargo, no debe implicar una multitud de interfaces, como
se detalla más adelante.

El corte de red permite que la misma infraestructura de red móvil sea utilizada por múltiples
operadores diferentes, incluidos los operadores del mercado vertical, cada uno de los cuales
implementa su propia red lógica, por ejemplo, una red lógica para banda ancha móvil con un
rendimiento muy alto, una red lógica que conecta una gran cantidad de nodos de sensores (incluidos los
interiores), o una red lógica que proporciona conectividad de infraestructura crítica para la gestión del
tráfico o el control de la energía. Por lo tanto, cada segmento de red satisface diferentes requisitos y
sirve para propósitos muy diferentes.

Se requiere un control de red móvil definido por software para controlar de forma flexible tanto
una red flexible de funciones como un conjunto de cortes de red. Este control debe ser programable
para adaptar el comportamiento de la red a los requisitos actuales. Esta funcionalidad va más allá de la
separación de los planos de control y datos, incluyendo el control de la funcionalidad RAN, así como el
avión de control de la red móvil.

Red de funciones

El objetivo de una arquitectura de red móvil es permitir la integración de diferentes tecnologías y


permitir diferentes casos de uso. Debido a los requisitos parcialmente contradictorios, es necesario
utilizar la funcionalidad adecuada en el lugar y momento adecuados dentro de la red. Para proporcionar
esta flexibilidad, se ha discutido recientemente si el paradigma de virtualización de funciones de red
(NFV) debería adoptarse en el dominio de la red de acceso móvil, es decir, permitir que la
funcionalidad de la red móvil se descomponga en bloques de funciones más pequeños que se instancien
de forma flexible. Hasta ahora, los grados de libertad para asignar funcionalidad de red a las entidades
de red son muy limitados. Por ejemplo, es posible colocar elementos EPC, tales como pasarelas, con
una estación base en EPS 3GPP. Sin embargo, no es posible colocar sólo partes de la funcionalidad de
una pasarela o entidad de gestión de movilidad (MME) con una estación base. Del mismo modo, es
posible centralizar completamente la funcionalidad RAN utilizando la interfaz de radio pública común
(CPRI) y las unidades centrales de banda base. Sin embargo, tales despliegues utilizan unidades de
banda base no virtualizadas en la ubicación central; por lo tanto, es más bien una reubicación de
funcionalidad que no aprovecha todas las características del cloud computing. Además, no es posible
mover sólo partes de la funcionalidad RAN excepto de una manera propietaria[3, 4]. La
descomposición de la funcionalidad de la red móvil implicaría una mayor disociación de la arquitectura
lógica y física que en el 3GPP EPS, como se ilustra en la Fig. 2, es decir, las funciones de la red física
(PNF) pueden ejecutarse sobre metal desnudo, mientras que las funciones de la red virtual (VNF)
pueden ejecutarse en centros de datos locales o remotos (a los que en la Fig. 2 se hace referencia como
nube de borde y central). Bare metal se refiere en este caso al acceso no virtualizado a los recursos de
acceso radioeléctrico, por ejemplo, a través de procesadores de señales digitales (DSPs), en lugar de en
plataformas de computación en nube. Por lo tanto, dependiendo del caso de uso, los requisitos y las
propiedades físicas del despliegue existente, la funcionalidad de la red móvil se ejecuta en diferentes
entidades dentro de la red. Esto impone una serie de desafíos; por ejemplo, el propio sistema no debe
volverse más complejo y debe evitarse en la medida de lo posible la introducción de nuevas interfaces.
Por lo tanto, la asignación VNF debe explotar un plano de control y orquestación eficiente como se
describe más adelante. Además, la coexistencia de diferentes casos de uso y servicios implicaría la
necesidad de utilizar diferentes asignaciones de VNF dentro de la red. Esto se explica más adelante
utilizando el modelo de corte en red. El reto de evitar muchas interfaces adicionales puede abordarse
mediante un protocolo de contenedor flexible en los planos de usuario[5] y de control. La red móvil
debe seguir integrando las tecnologías heredadas para garantizar que pueda funcionar con las redes
existentes. El principal beneficio de la arquitectura descrita es la posibilidad de explotar las ventajas de
la centralización siempre que sea posible, optimizar el funcionamiento de la red en función de la
topología real de la red y sus propiedades estructurales, y utilizar algoritmos optimizados para
determinados servicios, es decir, optimizar mediante implementaciones dedicadas en lugar de
parámetros. La Tabla 1 enumera ejemplos en los que la operación puede ser optimizada a través de
diferentes VNFs. Por ejemplo, puede ser posible utilizar una numerología de interfaz aérea flexible y,
dependiendo del terminal de red, diferentes estrategias de codificación, modos MIMO (multiple-input
multiple-output) y estructuras de enmarcado, que están optimizadas para el rendimiento, el retardo o la
fiabilidad. Sin embargo, la paquetización de la capa superior puede seguir siendo la misma para todos
los casos de uso, lo que permite reutilizar la misma implementación de software. Otro ejemplo incluye
la transmisión cooperativa, en la que las ganancias dependen en gran medida del entorno; por ejemplo,
si el sistema no funciona a plena carga, la programación cooperativa puede ser tan eficaz como la
transmisión multipunto cooperativa, mientras que a plena carga las ganancias dependen en gran medida
del número de interferencias y del conocimiento del canal.

Figura 2. Relación entre la asignación funcional y la arquitectura física.


Table 1. Examples for functional optimization.
Figura 3. Concepto de corte en red.

Orquestación y gestión

Como se mencionó anteriormente, un componente esencial de la red móvil es la orquestación y gestión


eficiente de las funciones de la red móvil a través de una interfaz de baja complejidad. En ese contexto,
la funcionalidad de red definida por software (SDN) ha cobrado impulso recientemente como un nuevo
enfoque para realizar operaciones de red. Con el SDN tradicional, las funciones de control se
desacoplan del plano de datos a través de una interfaz bien definida y se implementan en el software.
Esto simplifica el trabajo en red, proporciona un mayor grado de flexibilidad y una mayor
escalabilidad, a la vez que reduce los costes. De hecho, simplemente modificando el software de las
funciones de control, SDN permite que el comportamiento de la red cambie de manera flexible,
considerando servicios y aplicaciones específicos. Siguiendo el paradigma de SDN, el control de la
arquitectura de red móvil adopta el concepto de control de red móvil definido por software (SDMC)
que se centra en funciones inalámbricas específicas. Nuestro enfoque SDMC se asemeja a SDN al
dividir la funcionalidad inalámbrica en aquellas funciones que están siendo controladas y permanecen
relativamente estables, y aquellas funciones que controlan la red en general y que se ejecutan en el
controlador. Sin embargo, nuestro concepto SDMC está específicamente diseñado para controlar la
funcionalidad de la red móvil, y no se limita a funciones de plano de datos, sino que incluye funciones
de plano de control de la red móvil, las cuales pueden colocarse arbitrariamente en la nube de borde o
en la nube central, como se muestra en la Fig. 2. Para habilitar el paradigma SDMC dentro de 3GPP
EPS, donde la funcionalidad inalámbrica se controla de forma centralizada, colocamos el SDMC dentro
del sistema de gestión de red 3GPP. Esto aprovecha la monitorización del rendimiento heredado,
formando una base de información RAN global lógica que puede ser utilizada por el SDMC para
controlar varias funciones de red. El control de las redes inalámbricas comprende, entre otras cosas, la
selección de canales, la programación, la modulación y la codificación.
selección de esquema y control de potencia. La Figura 4 ilustra la arquitectura de SDMC mostrando las
principales características funcionales y operaciones. Con un enfoque basado en la definición de
software, todas estas funciones pueden ser realizadas por un controlador móvil programable definido
por software, que proporciona beneficios muy importantes para el funcionamiento de la red móvil.

Sin embargo, es esencial mejorar las actuales interfaces 3GPP Tipo 2 (ItfN) entre el sistema de gestión
de red y el equipo de red para permitir que el SDMC proporcione programabilidad de red y soporte
para multi-tenancy. Estas mejoras deben reflejar las capacidades de SDN, como la abstracción y el
control de la red, que proporcionan suficiente flexibilidad en la gestión de la red. La interfaz de SDMC
con el sistema de gestión de red de esta manera también puede permitir el soporte multi-tenancy y la
programabilidad de la red aprovechando la interfaz 3GPP Tipo 5. Esto permite recibir peticiones de
redes compartidas de MVNOs[12] y ofrece un medio de adquisición de recursos de red a proveedores
OTT y verticales a través de la interfaz de programación de aplicaciones (API) de SDMC en dirección
norte. Además, la interfaz en sentido norte ofrece la posibilidad de proporcionar de forma flexible las
denominadas aplicaciones SDMC. Para adaptarse a los requisitos de servicio relacionados con las
aplicaciones de multiarrendamiento y SDMC, el administrador de red del proveedor de infraestructura
debe interactuar con las políticas 3GPP, es decir, con la función de reglas de políticas y tarifas (PCRF),
a través de una nueva interfaz de red llamada ItfPolicy, para permitir la provisión flexible de políticas
para múltiples inquilinos y la innovación de la red. Entre las principales ventajas que se derivan del
enfoque propuesto figuran las siguientes.

Flexibilidad: Uno de los problemas a los que se enfrentan hoy en día los operadores de redes es que, si
bien los equipos inalámbricos son bastante caros, son muy rígidos y no se adaptan a sus necesidades.
Mediante el uso de SDMC, los operadores podrían adaptar el equipo a sus necesidades simplemente
reprogramando el controlador y reduciendo así los costes, al tiempo que podrían ampliar y reducir las
funciones virtuales, lo que también mejoraría la fiabilidad.

Gestión unificada: La adopción de un control lógicamente centralizado unifica tecnologías de red


heterogéneas y proporciona un control de red eficiente de redes desplegadas de forma heterogénea. En
particular, el control de la red debe tener en cuenta la evolución de las demandas de tráfico, la mejora
de la gestión de la movilidad y las características radioeléctricas dinámicas. Simplificado

Operación de la red inalámbrica Con SDMC, los operadores de red sólo necesitan controlar un
conjunto de entidades lógicamente centralizadas que ejecutan toda la red, lo que, dependiendo de los
requisitos reales de latencia, puede incluir tecnologías de radio heterogéneas.
Permitir la innovación de la red: Al modificar las funciones del controlador (es decir, las aplicaciones
SDMC), muchos de los nuevos servicios que no estaban incluidos en el diseño de la arquitectura inicial
pueden habilitarse modificando el comportamiento de la red para introducir mejoras específicas de
servicio en unas pocas horas en lugar de semanas[13].

Programabilidad: Adaptando las funciones, como la programación o la selección de canales, a las


necesidades específicas de las aplicaciones o del escenario, se pueden conseguir mejoras significativas
en el rendimiento. Por ejemplo, el controlador tiene una visión global de la red, lo que permite
optimizar la asignación de recursos y la programación en múltiples EB.

Control de recursos entre cortes: Siguiendo el concepto de rebanada de red descrito anteriormente, el
SDMC alojado en el dominio de infraestructura permite al proveedor de infraestructura asignar
recursos no utilizados para soportar servicios de terceros. Por lo tanto, el SDMC puede asignar una
porción de red con una capacidad de red específica, una división particular del plano de control/datos y
una selección de VNF.

Figura 4. Arquitectura y operaciones de SDMC.

PLAN DE NORMALIZACIÓN

El Sector de Normalización de las Radiocomunicaciones de la Unión Internacional de


Telecomunicaciones (UIT-R) está elaborando una visión a más largo plazo de las redes móviles y su
evolución hacia 2020 y más allá. Proporciona un marco y objetivos generales de los futuros desarrollos
de los sistemas 5G (denominados IMT-2020) que implican varias etapas:
- A principios de 2012, el UIT-R se embarcó en un programa para desarrollar "IMT para 2020 y más
allá", sentando las bases para las actividades de investigación de quinta generación (5G), que están
surgiendo en todo el mundo.
- En 2015, el UIT-R finalizó su visión de la sociedad de la banda ancha móvil 5G, que será
fundamental para establecer el orden del día de la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones de
2019, en la que se deliberará sobre el espectro adicional en apoyo del futuro crecimiento de las IMT.
- En el periodo 2016-2017, el UIT-R definirá en detalle los requisitos de calidad de funcionamiento, los
criterios de evaluación y la metodología para la evaluación de una nueva interfaz radioeléctrica IMT.
Se prevé que el plazo para la presentación de propuestas se centre en 2018.
- En 2018-2020 se llevará a cabo la evaluación por grupos de evaluación externos independientes y la
definición de las nuevas interfaces radioeléctricas que se incluirán en las IMT-2020. Al igual que las
generaciones anteriores de redes móviles, se espera que el 3GPP sea también el principal organismo de
normalización para la 5G, y la correspondiente hoja de ruta se muestra en la Fig. 5. El 3GPP ha
comenzado a trabajar sobre la 5G tanto en los grupos de trabajo de SA como en los de RAN. La actual
versión 13 del 3GPP y la próxima versión 14 del 3GPP proporcionarán mejoras a LTE-Advanced bajo
el nombre de "LTE-Advanced Pro". Esta se convertirá en la tecnología base para la evolución de LTE-
Advanced a 5G. Paralelamente, se estudiarán los escenarios y requisitos de la 5G, lo que
probablemente exigirá una nueva y revolucionaria arquitectura que proporcione una mayor flexibilidad,
tal y como se ha indicado en el apartado anterior. Se espera que esta labor concluya a mediados de
2017. SA1 ha estado trabajando en un "Estudio sobre Nuevos Facilitadores de Tecnología de Servicios
y Mercados" (SMARTER) desde abril de 2015. Como resultado, se han creado cuatro temas de estudio
adicionales que incluyen tres industrias verticales y un grupo horizontal. Las verticales son la banda
ancha móvil mejorada (eMBB), las comunicaciones críticas (CriC) y la IO masiva (mIoT); el estudio
horizontal se refiere al funcionamiento de la red (NEO). Esta última se ocupa, entre otras cosas, de la
fragmentación de redes, el interfuncionamiento y la migración, así como de la convergencia fijo-móvil
(FMC). En marzo de 2016, se acordó otro punto de estudio para la comunicación entre vehículos 5G y
cualquier cosa (V2X). La AE1 tiene previsto finalizar sus estudios en junio de 2016 y luego iniciar el
trabajo normativo en la versión 15 del 3GPP.
La AE2 tiene como objetivo finalizar su "Estudio de arquitectura para la próxima generación de
sistemas" en septiembre de 2016. Un tema importante en este estudio será la interfaz entre el LTE-
Advanced RAN y una futura red básica 5G (CN). La AE 2 ha acordado seguir la alianza de redes
móviles de la próxima generación (NGMN), en particular la opción 3 que se detalla en[12]. El nuevo
5G CN será capaz de soportar un nuevo 5G RAT así como un LTE-Advanced evolucionado y otros
RATs como el IEEE 802.11. Esto permite que los terminales de red 5G se muevan entre 5G y el LTE-
Avanzado evolucionado sin ningún tipo de interfuncionamiento entre los CNs 5G y 4G, y por lo tanto
proporciona una ruta de migración sólida desde el RAN basado en LTE hasta el 5G.
Los grupos de trabajo de RAN se centran en las primeras características 5G reales que aparecen en la
versión 15 del 3GPP (es decir, en la segunda mitad de 2018). Esto implica que el 3GPP completará sus
especificaciones iniciales de 5G justo antes de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2018, que tendrán
lugar en Corea. El enfoque de esta "Fase 1" de 5G se centrará principalmente en la habilitación de
nuevos espectros en altas frecuencias por encima de 6 GHz. Más características para la implementación
de la arquitectura
se introducirán mejoras en la "Fase 2" 5G con la versión 16 del 3GPP (es decir, a finales de 2019) a
tiempo para su presentación en el IMT-2020, así como en los Juegos Olímpicos de Verano de 2020 en
Japón. A pesar de estas mejoras arquitectónicas planificadas, es necesario que el 3GPP y el
otros organismos de estandarización para realizar la migración de 3GPP EPS hacia una nueva
arquitectura 5G. Hay que diseñar y estandarizar un tipo de interfaz completamente nuevo cuando la
"red de funciones" va a sustituir a la "red de entidades" actual, como se ha señalado anteriormente.
Además, el uso del corte de red para multi-tenancy y multiservicio descrito anteriormente requiere un
entorno de ejecución flexible que sea capaz de soportar la diversidad de funciones de red en paralelo.
Sin embargo, la aplicación de los conceptos de SDN que prometen esta flexibilidad a las redes de radio
móviles se encuentra todavía en una fase experimental, aunque el concepto de C-RAN, la virtualización
de RAN y sus beneficios esperados de centralización se han estado discutiendo durante varios años.
La evolución de la arquitectura de la red móvil, tal y como se discute en este artículo, afecta a muchos
componentes de red diferentes. Por lo tanto, además del 3GPP, otras organizaciones de desarrollo de
normas (SDO) participarán en la definición de la futura arquitectura de red móvil. En particular,
además del 3GPP, participarán los siguientes SDO:
-El Instituto Europeo de Normas de Telecomunicaciones (ETSI), el grupo de especificación industrial
NFV (ISG) ha creado un marco para la virtualización de las funciones de red. Este marco se ha
aplicado con éxito a las VNF, principalmente en la NC. En la RAN, donde el hardware todavía juega
un papel importante, la implementación de los conceptos de NFV es más difícil[14]; por ejemplo, el
concepto de C-RAN con una RAN totalmente centralizada y virtualizada fue uno de los primeros casos
de uso, ya discutido en 2012 en ETSI NFV. Sin embargo, a día de hoy, no existen implementaciones
comerciales a gran escala. Para lograr un mayor impacto, el marco del ETSI debe ampliarse para que
sea aplicable no sólo al hardware virtualizado, sino también al hardware no virtualizado y básico[14].
-El ETSI MEC ISG está estudiando cómo proporcionar capacidades de TI y cloud computing dentro de
la RAN en estrecha proximidad a los suscriptores móviles, lo que permite acelerar el contenido, los
servicios y las aplicaciones, y aumentar la capacidad de respuesta desde el borde.
-La Open Networking Foundation (ONF) es la fuerza líder en el desarrollo de estándares abiertos para
la adopción del concepto SDN. Sin embargo, con el fin de proporcionar los beneficios descritos
anteriormente, las funcionalidades del protocolo SDN desarrolladas por ONF (por ejemplo, OpenFlow
y OF-Config) deben ampliarse para cumplir con los requisitos de 5G y hacia 3GPP EPS.
-La Internet Engineering Task Force (IETF) también está considerando el uso de protocolos de Internet
(por ejemplo, IPv6 y Multicast IP) en redes 5G, aunque el trabajo requerido aún no tiene un alcance
claro. Hay propuestas para utilizar los protocolos desarrollados por el IETF, como el protocolo de
separación localizador/ID (LISP), el protocolo de identidad del host (HIP) y la red centrada en la
información (ICN), con el fin de subsanar las deficiencias de la actual CN 4G para el soporte de
funcionalidades adicionales de 5G (p. ej., reducir la latencia de la red o apoyar nuevos modelos de
movilidad). El IETF también está trabajando en el desarrollo de una arquitectura para el
encadenamiento de funciones de servicio que incluye los protocolos o extensiones de protocolo
necesarios para los nodos que participan en la implementación de las funciones de servicio, así como
mecanismos para dirigir el tráfico a través de las funciones de servicio.

Figura 5. Hoja de ruta para la estandarización del 3GPP LTE hacia el 5G.

Conclusiones y nuevos retos

Este artículo analiza la arquitectura evolutiva de la red móvil 3GPP EPS y la necesidad de proporcionar
una arquitectura flexible que integre diferentes tecnologías y permita diversos casos de uso.
Presentamos y explicamos varios conceptos como la transición de un conjunto predefinido de
funciones agrupadas en entidades de red a una red flexible de funciones, el concepto de corte de red y
el control, la orquestación y la gestión de redes móviles definidas por software. Además, se ha
esbozado la relevancia de las diferentes organizaciones que definen las normas y se ha detallado su
hoja de ruta. En nuestra opinión, es muy importante considerar la evolución futura del 3GPP EPS no
sólo como la introducción de una nueva interfaz aérea, sino como la evolución de una red móvil.
arquitectura hacia un "sistema de sistemas" en el que muchos casos de uso diferentes, tecnologías y los
despliegues están integrados, y la operación de cada sistema se adapta a su propósito real.

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