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Los pavimentos de concreto, frecuentemente llamados pavimentos rígidos, están formados por
losas relativamente delgadas de concreto de cemento Portland, que pueden o no tener una
capa base entre el pavimento y la subrasante. Como regla general cuando se habla de concreto
exceptuando la base se refiere al pavimento.
Por su capacidad para soportar cargas, el factor más importante a considerar en el diseño de los
pavimentos de concreto es la resistencia del concreto mismo, por esta razón, pequeñas
variaciones en la resistencia de la subrasante y/o base tienen poca incidencia en la capacidad
estructural del pavimento.
Cuando se habla de pavimentos rígidos, la capa de base con frecuencia se llama también capa
de sub-base y se usa bajo estos pavimentos por varias razones:
Control de bombeo.
Control de drenaje.
Facilidad de construcción.
En los primeros tiempos de la ingeniería de autopistas, las losas de pavimentos rígidos eran
construidas directamente sobre la subrasante sin considerar el tipo de subrasante y las
condiciones de drenaje.
Con el aumento del tráfico de camiones, especialmente un poco antes de la Segunda Guerra
Mundial, se hizo evidente que el tipo de subrasante ejercía una función importante en el
desempeño de los pavimentos.
En el período entre 1930 y 1940, era muy común construir secciones de bordes ensanchados.
Las secciones de bordes engrosados fueron construidas para intentar aumentar la resistencia a
las condiciones de elevados esfuerzos en los bordes de los pavimentos. En esos tiempos,
pavimento de 18 a 20 pies de ancho eran comunes, dando como resultado que los vehículos
pesados viajaban muy cerca del borde del pavimento.
Después, el fenómeno del bombeo en pavimentos rígidos fue la causa del colapso en algunas de
las más importantes autopistas, losas de autopistas rígidas se construyeron sobre capas de base
granular de variados espesores para protegerlas contra la pérdida de soporte de la subrasante
debido al bombeo. Se hicieron muchos estudios de los factores que provocaban el bombeo y se
desarrollaron criterios para el diseño de bases granulares para corregir este fenómeno. Se fue
incrementando gradualmente el espesor de los pavimentos hasta que 9 y 10 pulgadas de
espesor uniforme fueron adoptados por la mayoría.