HELADAS EN LAS ZONAS ALTO ANDINAS DEL PERÚ: PERSPECTIVA DESDE EL
DERECHO A LA SALUD ¿HACIA EL DERECHO A LA CALEFACCIÓN?
Durante los meses de junio, julio y agosto, las zonas alto andinas del Perú experimentan cambios bruscos de temperatura que producen consecuencias negativas en la población como daños a la vida, salud, educación, actividad agrícola y ganadera e infraestructura. Asimismo, tales consecuencias se agravan cuando los afectados son las poblaciones vulnerables de la zona. En esta línea, la acción del Estado representa la principal medida para contrarrestar estas consecuencias negativas, así, se recomienda el reconocimiento del derecho a la calefacción de las poblaciones vulnerables de las zonas alto andinas toda vez que se ven vulnerados en sus derechos fundamentales como el derecho de salud y este esté intrínsecamente relacionado con el derecho a la vida e integridad, a propósito del principio de dignidad de la persona. 1. SOBRE LAS HELADAS El Instituto Nacional de Defensa Civil define a las heladas como el descenso a 0°C o menos de la temperatura del aire cercano a la superficie del terreno durante un tiempo mayor a cuatro horas. Esta definición corresponde a las heladas meteorológicas, pues la referencia a las heladas agro-meteorológicas implica un descenso de la temperatura ambiente a niveles críticos de los cultivos y que mata los tejidos vegetales. Cabe señalar que el descenso de temperatura es brusco por lo que no se trata de una estación de frio que mantiene un grado de temperatura constante, sin dejar de ser temperatura baja o muy baja. Se entiende a las heladas producidas al evaporarse el agua depositada sobre las plantas, con el consiguiente enfriamiento al ser absorbido del aire el calor latente necesario para la evaporación; así, si después de una precipitación desciende la humedad relativa del aire, lo que es frecuente después del paso de un frente frio, el agua que recubre los vegetales se evapora rápidamente. Las heladas producen efectos negativos como el daño a la salud, educación, actividad agrícola y ganadera e infraestructura, llegando incluso a atentar contra la Vida de los pobladores. En materia de salud, la infección respiratoria se presenta como una de las mayores amenazas a la población ante las heladas. Esta es una enfermedad que ataca el aparato respiratorio y está caracterizado por fiebres, tos y catarros, asimismo, podría complicarse hasta la aparición de un cuadro de neumonía, entendiéndose por esta al tipo de infección respiratoria aguda que afecta a los pulmones. 1.1. Situación de heladas en el Perú En el Peru, las heladas se registran con mayor intensidad en las zonas alto andinas y entre los meses de junio, julio y agosto. La heladas pueden tener efectos negativos en tanto afecta a la poblaciones de los andes y que se encuentran en situación de alta vulnerabilidad sea por su condición social, por su edad o por su ubicación territorial que dificulta la presencia del Estado. El Estado priorizó la ejecución de su intervención en los departamentos de Puno, Ayacucho, Cusco, Huancavelica, Junín, Huánuco, Arequipa, Apurímac, Cajamarca, Pasco, Ancash, La Libertad, Lima, Piura y Tacna“, siendo Puno el departamento con mayor intervención. El Estado ha realizado acciones para contrarrestar las consecuencias nega tivas de las heladas; sin embargo, no se ha podido apreciar una sistematización sólida de dicha acción, 2. SOBRE EL DERECHO A LA SALUD De invisible a inalienable. El reconocimiento del derecho a la salud se llevé a cabo dentro de una lectura del reconocimiento de derechos que se derivan de los derechos civiles y políticos. Así, se puede tomar como puntos de partida la Declaración de los Estados Unidos de América y la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano con referencia a la libertad de toda persona y de su igualdad en derechos. En los posteriores instrumentos de derechos humanos no se realizó una mención expresa de los alcances del derecho a la salud, sino hasta 1946, toda vez que se trataba de un derecho nebuloso y cuya perspectiva dependía del contexto de cada Estado, hasta entonces, principal generador del ordenamiento jurídico. En 1946, se adopté la Constitución de la Organización Mundial de la Salud en cuyo preámbulo estableció que el goce del grado máximo de salud que se pueda lograr es uno de los derechos fundamentales de todo ser humano sin distinción. El Perú le reconoce importancia al derecho a la salud a partir de su Constitución Política (derivado de la defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad) así como en los distintos instrumentos internacionales que reconocen tal derecho. De esta manera, el Tribunal Constitucional del Perú. El derecho a la salud se presenta como un derecho humano fundamental inherente a toda persona humana por su condición como tal, basado en su dignidad y que constituye la tutela de su bienestar físico, mental y social desde una perspectiva integral. 2.1. Exigencia del derecho a la salud Los derechos económicos, sociales y culturales (DESC) son aquellos derechos humanos que posibilitan a la persona gozar de un nivel de vida adecuado, es decir, un nivel de Vida que permita satisfacer sus necesidades básicas. El nivel de Vida adecuado dependeré de cada contexto, por ejemplo, el problema que se aborda en este trabajo, consecuencias negativas de las heladas, no es un fenómeno que se presenta en todos los Estados y por lo tanto no tiene tal importancia como si lo tiene en el Perú. La exigencia de los DESC encuentra límites tal como lo sostuvo el Tribunal Constitucional del Perú: ”Debe entenderse, empero, que cuando se habla de exigencia, nos referimos al derecho de requerir que el Estado adopte las medidas adecuadas para el logro de fines sociales, pues no en todos los casos los derechos sociales son por si mismos jurídicamente sancionables, al ser necesario el soporte presupuestal para su ejecución.” 2.2. El derecho a la salud en el Derecho Internacional de los DD.HH. Es importante revisar lo que mencionan los instrumentos internacionales con respecto al derecho a la salud a propósito de su exigencia y condición como DESC. La Convención Americana sobre Derechos Humanos, al hacer referencia al desarrollo progresivo, menciona que los Estados Partes se comprometen a adoptar providencias, tanto a nivel interno como mediante la cooperación internacional, especialmente económica y técnica, para lograr progresivamente la plena efectividad de los derechos que se derivan de las normas económicas, sociales y sobre educación, ciencia y cultura, contenidas en la Carta de la Organización de los Estados Americanos en la medida de los recursos disponibles, por vía legislativa u otros medios apropiados. Los compromisos adquiridos por el Estado peruano son los parámetros de interpretación del reconocimiento del derecho a la salud. Asimismo, para el cumplimiento del derecho a la salud reconocido en los instrumentos internacionales, no es suficiente su consagración normativa, sino que hace falta la implementación de acciones estatales concretar dirigidas a su cabal cumplimiento. En ese sentido, y en el contexto de las heladas en zonas alto andinas, el Estado esté obligado a respetar, proteger y cumplir la tutela del derecho a la salud a fin de no obstaculizar el goce del Derecho y adoptar medidas que sean efectivas. 2.3. Situación del derecho a la salud en el Perú. El artículo 3° de la Constitución establece que serán derechos fundamentales de las personas aquellos que estén garantizados por la Constitución y aquellos que se fundan en la dignidad del hombre, o en los principios de soberanía del pueblo, del Estado democrático de derecho y de la forma republicana de gobierno. El artículo 7° de la Constitución estipula que todos tenemos derecho a la protección de la salud, la salud del medio familiar y la salud de la comunidad así como el deber de contribuir a su promoción y defensa. Asimismo, la cuarta disposición final y transitoria de la Carta Política menciona que las normas relativas a los derechos y a las libertades que la Constitución reconoce se interpretan de conformidad con la Declaración Universal de Derechos Humanos y con los tratados y acuerdos internacionales sobre las mismas materias ratificados por el Perú. La Ley General de Salud, ley N° 26842, establece que la salud es condición indispensable del desarrollo humano y medio fundamental para alcanzar el bienestar individual y colectivos. La problemática de las consecuencias negativas de las heladas debe ser abordada por una acción de la sociedad que contrarreste las barreras que se pueden presentar para la acción del Estado como por ejemplo las barreras presupuestales; esta es la finalidad de los llamados deberes solidarios. Es por ello que se rescata la vital importancia de los proyectos que se vienen emprendiendo para solucionar los descensos de las temperaturas en las zonas alto andinas del Perú sin la asistencia del Gobierno. 3. SOBRE EL DERECHO A LA CALEFACCION A partir de la información recogida, queda resolver Si ante las consecuencias negativas de las heladas se puede reconocer el derecho a la calefacción desde la perspectiva del derecho a la salud, vale decir, el derecho de las personas en las zonas alto andinas del Perú a recibir el apoyo permanente del Estado, entiéndase del Gobierno y de la sociedad, para otorgarles condiciones de Vida para el disfrute del más alto nivel posible de salud física y mental frente a los cambios bruscos de temperatura, en especial, frente a las heladas. El derecho a la salud, recordemos que un derecho puede ser definido, en términos sencillos, como la facultad determinada por un ordenamiento jurídico que permite a la persona satisfacer sus necesidades básicas. La calefacción, por su parte, es definida como la acción o efecto de calentar o calentarse. Mencionamos en líneas precedentes que principalmente la neumonía y otras infecciones respiratorias, son las consecuencias negativas con respecto a la salud de los pobladores ante las heladas en los Andes Peruanos. Estas infecciones respiratorias también se presentan en otras zonas, pero con menos intensidad y contradictoriamente reciben mejor tratamiento. Involucra una acción integral que vaya desde la impartición de información sobre las enfermedades respiratorias hasta las campañas obligatorias de impartición de medicinas que traten esta enfermedad. Se debe garantizar la temperatura idónea de Vida en las Viviendas rurales así como la implementación de tambos que contrarresten las bajas temperaturas. Se debe incentivar la creación de proyectos que reduzcan los costos de tales acciones a fin de ser implementados lo más pronto posible. Además, se debe realizar una mejor distribución de energía de tal manera que la misma sirva para fines de calefacción a los destinatarios. Por último, el reconocimiento del mencionado derecho implicaría su reclamo en sedes judiciales. Aquí, la sociedad juega un rol importante puesto que el trámite judicial es algo que puede estar muy lejano a las poblaciones vulnerables. 4. CONCLUSIONES Las heladas son un fenómeno de descenso brusco de temperatura que se repetiré con el transcurrir de los años. La acción del Estado, por lo tanto, no puede circunscribirse a medidas temporales como se venía trabajando hasta el año 2012. En ese sentido, se exhorta la institucionalización de las medidas permanentes en tanto hacemos referencia a un derecho intrínsecamente vinculado al derecho a la Vida, integridad y basado en el principio de dignidad de la persona. Hoy se discute la exigencia de los DESC, sobre todo por la perspectiva de los derechos reconocidos y ante las eventuales coyunturas que requieren una mayor tutela de derechos. En ese sentido, y en el contexto de las heladas en el Perú, el desarrollo progresivo implica que no se deje de llevar a cabo las iniciativas emprendidas por el Estado así como el mejoramiento de dichas acciones. El derecho a la calefacción implicaría el derecho de las personas en las zonas alto andinas del Perú a recibir el apoyo permanente del Estado, entiéndase del Agobiemos y de la sociedad, para otorgarles condiciones de Vida para el disfrute del más alto nivel posible de salud física y mental frente a los cambios bruscos de temperatura, en especial, frente a las heladas.