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Capítulo 4
Módulos semántico y pragmático
de BLOC en Chile
INTRODUCCIÓN
Este capítulo esta dividido en partes. La primera de ellas sintetiza las inves-
tigaciones que se han realizado con los módulos semántico y pragmático de
BLOC-C, y en una segunda parte se expone un análisis de casos, con niños chi-
lenos a quienes se les administraron estos módulos junto con otras pruebas
destinadas a medir el autoestima y la competencia social.
Las pruebas dirigidas específicamente a la evaluación de lenguaje que se en-
cuentran disponibles en el mercado chileno son usadas en el ámbito clínico, y de
la mayor parte de ellas no hay normas.
© Elsevier. Es una publicación MASSON. Fotocopiar sin autorización es un delito.
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BLOC_Aplicacion_167_182_04_AM_JC.qxd 11/6/07 10:20 Página 168
mensiones del lenguaje que evalúan, salvo la PLON, las demás abordan una di-
mensión específica.
Dentro de las pruebas usadas en Chile que contemplan la evaluación de habi-
lidades lingüísticas —y que cuentan con normas nacionales— se encuentran las
siguientes:
Entre los años 2001 y 2003 se adaptaron verbalmente los reactivos de los
módulos semántico y pragmático de BLOC, y se aplicaron a dos muestras de niños
chilenos. Para el módulo semántico se evaluaron 259 niños; 130 (50,2 %) eran
de sexo masculino y 129 (49,8 %) de sexo femenino, y sus edades fluctuaron en-
tre los 5 y 14 años, con un promedio de 9,56 años y una desviación estándar de
2,86 años. En cuanto al nivel socioeconómico, 98 (38,7 %) eran de nivel bajo, 82
(31,7 %) de nivel medio y 79 (30,5 %) de nivel alto.
Para el módulo pragmático se evaluaron 142 niños, de los cuales 69 (48,6 %)
eran de sexo femenino y 73 (51,4 %) de sexo masculino, todos escolares de la re-
gión metropolitana. Las edades fluctuaron entre los 6 y 14 años, con un prome-
dio de 9,7 años y una desviación estándar de 2,4 años. En cuanto al nivel socioe-
conómico, 32 (22,54 %) pertenecían al nivel bajo, 71 (50 %) al nivel medio y 39
(27,46 %) al nivel alto.
Este nivel socioeconómico fue estimado a partir del colegio al que asistía el
alumno. De este modo, los colegios dependientes de la municipalidad o del Esta-
do fueron homologados al nivel socioeconómico bajo, ya que son gratuitos; los co-
legios particulares subvencionados por el Estado fueron homologados al nivel so-
cioeconómico medio, ya que contemplan el pago de matrículas; y los colegios par-
ticulares sin financiamiento estatal se homologaron al nivel socioeconómico alto,
ya que las familias deben cancelar la totalidad de los costos que establece el cole-
gio para la educación de sus hijos.
Además del módulo semántico, los alumnos contestaron el inventario de au-
toestima de Coopersmith, adaptado y validado en Chile por Brikmann et al
(1989). Dicho inventario consta de 58 ítems, que tienen como objetivo medir le
autoestima a través de cuatro subescalas, además de contar con una quinta esca-
© Elsevier. Es una publicación MASSON. Fotocopiar sin autorización es un delito.
en términos positivos, donde el profesor debe puntuar, en una escala del 1 (no co-
rresponde) al 5 (sí corresponde), el grado en que la conducta habitual del niño se
ajusta a la afirmación contenida en cada ítem.
Cada uno de estos reactivos se agrupa en factores que representan un aspecto
importante de la competencia social. El factor 1, «Buen estudiante», involucra las
habilidades requeridas para un aprendizaje efectivo (9 ítems). El factor 2, «Asertivi-
dad», refleja la asertividad adaptativa (7 ítems). El factor 3, «Sociabilidad con los pa-
res», mide el funcionamiento interpersonal efectivo (10 ítems). El factor 4, «Nor-
mas», implica la habilidad del niño para funcionar dentro de las constricciones del
medio escolar (6 ítems), y el factor 5, «Tolerancia a la frustración», involucra la habi-
lidad del niño para afrontar el fracaso y otras presiones escolares (12 ítems).
Las intercorrelaciones entre los factores fueron positivas y significativas, y van
de 0,28 a 0,53. La fiabilidad test-retest para la puntuación total es de 0,87; para
las escalas buen estudiante el valor es de 0,83; para asertividad, de 0,77; para so-
ciabilidad de pares, de 0,72; para normas, de 0,91. y para tolerancia a la frustra-
ción, de 0,87 (Álvarez et al, 2003).
A la muestra a la que se aplicó el módulo semántico, y también a la del módu-
lo pragmático, se les registraron las calificaciones en las asignaturas de lenguaje,
matemática y comprensión del medio (Prado y Zabala, 2001; Olguín y Baeza,
2001, Duarte y Chamorro, 2003). En Chile, el sistema de calificación varía de 1,0
a 7,0, en el que la calificación mínima de aprobación en una asignatura es un 4,0.
Como el rendimiento a interior de los cursos y colegios tenía distintos valores de
dispersión, las calificaciones fueron estandarizadas. Esto se tradujo en que para
cada alumno se calculó la puntuación Z, y a la calificación observada se le restaba
la calificación promedio de su curso y se dividía esta diferencia por la desviación
estándar del curso.
Se escogieron como criterios de validación externos la autoestima, la compe-
tencia social y el rendimiento académico, ya que variados estudios han demos-
trado la relación entre la competencia comunicativa, los niveles de ajuste social y
el desempeño académico de los escolares. Se hipotetizó que las puntuaciones al-
tas en el módulo semántico estuviesen asociadas positivamente con las puntua-
ciones de autoestima y con el rendimiento en las asignaturas antes menciona-
das. Lo mismo se esperaba para el módulo pragmático, que tendría asociaciones
positivas con la competencia social y el rendimiento académico.
RESULTADOS
interna por bloque, los valores fluctuaron entre 0,27 y 0,67 para los del módulo se-
mántico y entre 0,31 y 0,71 para los del módulo pragmático (Castillo et al, 2006).
En cuanto a la validez de constructo del módulo semántico, con el análisis de
componentes principales categóricos se pudo detectar una gran dimensión, que
explica el 41,63 % de la variabilidad, con un nivel de consistencia del 0,79, que
agrupa la totalidad de los bloques. En el módulo pragmático también aparece una
gran dimensión que explica el 41,77 % de la variabilidad, con un nivel de consis-
tencia del 0,88 y que agrupa a la totalidad de los bloques (Prado y Zabala, 2001,
Castillo et al, 2006).
En cuanto a la validez predictiva del módulo semántico, éste explica el 18,8 %
de la variabilidad de la autoestima general (R = 0,43; F = 7,22, p < 0,001), el
15,0 % de la variabilidad de la autoestima social (R = 0,39; F = 5,53, p < 0,001), el
16,9 % de la variabilidad de la autoestima escolar (R = 0,41; F = 6,37, p < 0,001)
y el 18,1 % de la autoestima familiar (R = 0,43; F = 6,89, p < 0,001) (Ruiz y Fer-
nández, 2001).
Con respecto al rendimiento en las asignaturas, este módulo predice el
12,59 % de la variabilidad del desempeño en comprensión del medio (β = 0,36,
F = 7,99; p < 0,001), el 13,3 % en lenguaje (β = 0,36, F = 8,26; p < 0,001) y el
15,2 % en matemática (β = 0,39, F = 9,51; p < 0,001) (Olguín y Baeza, 2001).
Al analizar la validez predictiva del módulo pragmático con respecto a las esca-
las del HRI, éste predice el 4,3 % de la variabilidad de la escala «Buen estudiante»
(R = 0,21; F = 6,3; p < 0,05), el 3,9 % de la variabilidad de la escala «Normas»
(R = 0,197; F = 5,63; p < 0,05) y el 8,0 % de la variabilidad de la escala «Tolerancia
a la frustración» (R = 0,28; F = 6,04; p < 0,01). Para las escalas «Asertividad» y
«Sociabilidad con los pares», el módulo no tuvo capacidad predictiva (Álvarez et
© Elsevier. Es una publicación MASSON. Fotocopiar sin autorización es un delito.
al, 2003).
En cuanto a la capacidad de predecir el rendimiento académico, el módulo
pragmático predice el 16,6 % de la variabilidad del rendimiento en la asignatura
de lenguaje (F = 8,26; p < 0,05; 1- B = 0,418) y el 11 % de la variabilidad del ren-
dimiento en la asignatura de matemáticas (F = 5,11; p < 0,05; 1-B = 0,351), sin
que logre predecir el rendimiento en la asignatura de comprensión del medio
(Duarte y Chamorro, 2003).
Al comparar los resultados entre hombres y mujeres, no se observaron dife-
rencias estadísticamente significativas en ninguno de los módulos (p > 0,10).
Comparados por nivel socioeconómico, en el módulo semántico, los participantes
de nivel socioeconómico bajo presentaron un menor desempeño que los de nivel
socioeconómico medio y alto; quienes a su vez no se diferenciaron entre sí
(F = 17,84; p < 0,001; 1-β = 0,99); mientras que al compararlos en el módulo
pragmático, no se observaron diferencias estadísticamente significativas
(p > 0,30) (Castillo et al., 2006).
DISCUSIÓN
En estos estudios los niveles de fiabilidad fueron levemente más bajos que los
obtenidos en España, ya que el módulo semántico obtuvo un valor de 0,84 (0,90
en España) y el módulo pragmático un valor de 0,91 (0,97 en España). La hetero-
geneidad de consistencia a nivel de bloques sugiere la conveniencia de conside-
rar cada módulo como una sola escala, y de no realizar mediciones considerando
bloques aislados, pues los errores de medición pueden llegar a ser altos (Castillo
et al, 2006).
En cuanto a la validez de constructo, ambos módulos obtuvieron una solución
unidimensional, ya que el módulo semántico obtuvo una dimensión que explica
el 41,63 % de la variabilidad (similar al 41,54% obtenido en España), y el módu-
lo pragmático una dimensión que explica el 41,77 % de la variabilidad (menor al
77,9 % encontrado en España).
Tanto el análisis de consistencia interna como el de componentes principales
categóricos sugieren que, al igual que en la muestra española, los módulos semán-
tico y pragmático se organizan en torno a dimensiones únicas. Esto, aun cuando
en España los bloques mostraron cargas altas y negativas, mientras que en Chile
las cargas no fueron tan altas y en su totalidad presentaron valores positivos (Cas-
tillo et al, 2006).
Los análisis de validez predictiva de los módulos semántico y pragmático de
BLOC indican que hay una capacidad moderada de predecir la variabilidad de cri-
terios socioafectivos, donde el módulo semántico presenta mejores índices como
predictor de la autoestima que los que obtiene el módulo pragmático como pre-
dictor a la competencia social. En la predicción del rendimiento académico ocurre
algo similar, ya que ambos módulos logran explicar porcentajes de variabilidad
que no superan el 17 %.
Estudio de casos
FIGURA 4-1 Puntuaciones en los bloques del módulo semántico de la BLOC-C. NSE, nivel socioeconómico
12
10
0
Agente- Acción- Dativo Instrumental Locativo Modifica- Cuantifica- Modifica-
acción objeto dores dores dores
de tiempo
NSE bajo NSE medio NSE alto y sucesión
bajo que D.C. y C.R. Diferencias menos acentuadas se producen en el bloque ins-
trumental, donde nuevamente L.G. presenta un resultado más bajo; y en el blo-
que locativo, donde C.R. presenta un resultado mejor que las demás niñas.
Cuando se comparan simultáneamente se observa que el resultado más homo-
géneo es de D.C., niña proveniente del nivel socioeconómico medio, y quien posee
mayor variabilidad entre los bloques es L.G., niña proveniente del nivel socioe-
conómico bajo. Cuando se observan las puntuaciones en el cuestionario de auto-
estima de Coopersmith, se aprecia que la puntuación más alta de autoestima en la
escala social-pares corresponde a L.G., mientras que las niñas de nivel socioeco-
nómico medio y alto tienen mayores puntuaciones en las escalas de autoestima
escolar y de familia-hogar (v. fig. 4-1 y tabla 4-1).
Acción-Objeto 9 9 9
Dativo 1 8 6
Instrumental 7 9 9
Locativo 5 6 9
Modificadores 9 8 10
© Elsevier. Es una publicación MASSON. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Cuantificadores 10 9 8
Modificadores de tiempo 4 7 8
y sucesión
Puntuación total 59 65 68
Escala Escolar 6 12 10
Escala Familia-Hogar 6 12 10
Escala de Mentira 12 8 2
FIGURA 4-2 Puntuaciones en los bloques del módulo semántico de la BLOC-C. NSE, nivel socioeconómico
12
10
6
nción
espe ción
o neg ación
s
stas
ción
ué
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ómo
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ión
4
miso
cífica
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Requ
Requ
NSE bajo NSE medio NSE alto
De los seis casos vistos podemos observar que la variabilidad entre los distin-
tos bloques es más evidente en los escolares de nivel socioeconómico bajo, com-
parada con la homogeneidad de los niños de nivel socioeconómico medio y alto.
Lo otro que se puede apreciar, corroborando los análisis psicométricos, es la co-
rrespondencia de las puntuaciones del módulo semántico con las puntuaciones
© Elsevier. Es una publicación MASSON. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Conclusiones y discusiones
Quién / Qué 5 9 8
Dónde / Cuándo 5 9 6
De quién 10 9 7
Protestas 5 9 8
Total 67 113 95
Normas 38 33 49
Frustración 68 55 84
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Aguinaga G, Armentia ML, Fraile A, Olangua P, Uriz N. Prueba de lenguaje oral de Nava-
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