REPLANTEO Y CIMENTACIONES

El replanteo es una labor preliminar, en la ejecución de obras. Esta se realiza una vez se
haya realizado el descapotado, limpiado y nivelado del terreno de construcción. Replantear
es una de las labores importantes en la construcción ya que nos permite verificar los
diseños.
Consiste en trazar sobre el terreno la planta de ejes de cimientos y desagües con puntos y
líneas de referencia, también los ejes de construcción, niveles y las dimensiones de la
construcción de las excavaciones. Estas actividades se deben realizar con el plano
estructural. Una vez listas las actividades preliminares, se comienzan a realizar los puntos
de referencia, para los ejes analizados en el plano con diferentes herramientas como:
estacas, maceta, flexómetro, puntillas, cal, hilo, tablas para fabricar los puentes y escuadra
para medir los ángulos. Verificando las medidas en los planos de diseño.
Se verifican las marcaciones de linderos municipales, para comenzar a realizar la limitación
de ejes y ángulos, trasladándolos con la mayor exactitud. Para referenciar los ejes se realiza
un delineamiento con cal manteniendo un buen trazado el cual disminuye el error
mejorando la excavación. Chequee constantemente los angulos rectos para distancias
cortas se realiza con la escuadra y para distancias largas se utiliza el método 3 4 5. También
se debe revisar la colocación de vallas y señalización en obra. Lo más importantes es el
equipo de protección de seguridad, de las personas que realizaran la construcción siguiendo
lo planteado por el sistema de salud y seguridad en el trabajo (SSST).
La cimentación es una estructura de transición la cual se encarga de recibir la carga de la
superestructura y transmitirla hacia el suelo para que este esfuerzo se disipe generando el
menor daño posible a la estructura, ya que se ha evidenciado en algunas estructuras las
cimentaciones no logran disipar estos esfuerzos generando el colapso de la estructura.
Existen diferentes tipos de suelo los cuales cuentan con cualidades y características
diferentes a cortas distancias, lo que lo convierte en algo variable. Por esta razón para las
edificaciones civiles se debe realizar un estudio de suelo. El cual nos genera, información
acerca de la capacidad de carga del suelo y su caracterización geológica. Con esto se sabrá,
a que nivel se encuentra el sustrato del subsuelo el cual resiste, las cargas que genera la
estructura a construir.
Existen dos tipos de cimentaciones; cimentaciones superficiales y cimentaciones
profundas, las cuales dependen de la profundidad a la cual se halla el sustrato del suelo con
el esfuerzo admisible para soportar, la carga generada por la estructura.
Las cimentaciones superficiales son elementos estructurales, llamados: zapatas o placas de
cimentación. Existen diferentes tipos de zapatas; zapatas aisladas estas se construyen,
cuando la cimentación recibe la fuerza puntual de una columna. Zapatas combinadas esta
se construye cuando la zapata tiene que soportar más de una columna. Y las zapatas
corridas se construyen cuando se necesita soportar el peso de un muro continuo (ejemplo
de un muro pantalla).
Para la construcción de una zapata, en primer lugar, se deben realizar unas actividades
preliminares. Limpiar, descapotar y nivelar el terreno, para comenzar las excavaciones en
donde se construirá la zapata. Luego se procede a realizar la excavación, la cual tendrá una
profundidad que depende de la carga que debe disipar la zapata y además de la ubicación
del suelo que resiste la carga. Cuando se realiza esta excavación se deben saber las
dimensiones y los ángulos mostrados en los planos del diseño estructural, como también
las dimensiones adicionales para poder maniobrar la mimbra la mayoría de estos ángulos
se pueden verificar con la escuadra del constructor, debido a que son ángulos rectos.
Después se compacta el suelo de la excavación para mejorar su capacidad de disipación,
una vez terminadas todas las actividades preliminares se comienza a fundir un mortero de
concreto, este aísla el suelo de la zapata, para no generar daños en el acero que contiene
el elemento estructural. Para comenzar a construir la zapata, se arma una parrilla con barras
en sentido longitudinal y en sentido transversal, Estas últimas son de un tamaño menor,
cumpliendo la función de estribos. Luego se unen las barras con alambre, para darle una
mayor estabilidad a la parrilla. Una vez puesta la parrilla se procede a conectar las barras
verticales y estribos horizontales, se realiza un replanteo, y se conectan las barras y estribos,
para tener lista la estructura de acero, la cual soporta el concreto que se le funde. Para esto
se necesita una mimbra (láminas de madera) a las cuales se les esparce aceite quemado
para no generar expansión o compresión y para mejorar el retiro de las mismas, debido a
los cambios de temperatura. las mimbras sirven como molde para fundir el concreto y darle
la forma geométrica de la zapata. Una vez fundido el concreto, se deja en estado de reposo
la zapata durante 2 noches y se humedece con agua para que el concreto no pierda
humedad en la mezcla y tenga la resistencia requerida, luego se retira la mimbra dejando
ver la zapata construida.
Las cimentaciones profundas se construyen con pilotes, comúnmente cilíndricos. Y sus
dimensiones, como el diámetro de su sección transversal y la longitud, dependen de la carga
de la estructura, se tienen tres categorías dependiendo de su diámetro. Micropilotes (10-
20) cm, pilotes (25-60) cm, caissons (>80cm). Con el fin de que un operario pueda trabajar
dentro de la excavación que se realiza para construir el pilote.
Las cimentaciones realizadas con pilotes, también se pueden clasificar dependiendo del
proceso constructivo del pilote, como: los hincados, los de tornillo, los pre-escabados
mecánicamente y los pre-escabados manualmente (caissons).
En las cimentaciones profundas, las pre-escabadas manualmente son las que tienen un
protocolo de actividades mas amplio, primero se realiza el replanteo. Después se comienza
a realizar la excavación del subsuelo realizando anillos que en promedio tienen (1,20) m de
profundidad, retirando el material del suelo con ayuda de sistemas de poleas o molinetes y
recipientes resistentes (ejemplo canecas de hierro) luego se procede al armado de la
estructura de acero, con barras y estribos uniéndolos con alambre para ubicar la mimbra
para fundir el concreto, en el perímetro donde se ubicaron las barras. Esta mimbra también
es utilizada para hacer vibrar el concreto con el fin de que en el anillo no queden espacios
con aire. Después se siguen realizando los demás anillos inclinando un poco la mimbra.
Después se insertar una canasta prefabricada o creada in situ con refuerzos (ejemplo pata
de elefante), y luego fundir el concreto.