La murmuración

Un asesino silencioso
En los días antiguos existía un extraño grupo de hombres y mujeres que siempre vestían de negro.
Las ropas negras cubrían sus caras, un fieltro negro tapaba sus pies. Andaban en silencio y vivían en
la noche. Eran universalmente temidos y odiados. Estos caballeros de la noche eran asesinos
profesionales del Japón, conocidos como; Ninjas.
Contemporizar. Hay también un asesino silencioso en el mundo; empresarial, educativo,
legislativo y lamentablemente en la iglesia. Alguien escribió lo siguiente con respecto a este
asesino:
‘’Yo gano sin matar, destruyo casas, quebranto corazones y arruino vidas
(incluso inocentes). Mis víctimas son tantas como la arena del mar’’.

Filipenses 2:14-15
Vs.14. Haced todo sin murmuraciones ni contiendas
a. Algunos sinónimos: malas lenguas, chismes, calumnias, cuentos, patrañas, fabulas,
descréditos y habladurías.
b. Significado: ‘‘Comentario que se hace de una persona que no está presente ya sea mentira
o verdad, tratando de que esta no se entere y con la finalidad de hacerle daño o de
molestarla’’.
c. Contexto: Pablo anima a los filipenses que haya un solo sentir en amor y dirige a los
hermanos filopos a que miren la gloria del sacrificio de Cristo (vs.5-8) para que su actuar
sea moldeado y se asemeje al de Cristo.

¿Por qué se da la murmuración en la iglesia?

a. Por el mal entendimiento del evangelio.
b. Por falta de madurez.
c. Por el deseo de sentirse importante. ‘‘yo sé cosas que nadie sabe’’.
d. Por un corazón malvado.

¿Por qué es un asesino?

a. Porque mata el gozo.
b. Mata la comunión.
c. Mata el ánimo.
d. Corrompe el progreso de la iglesia.
Prov.10:19. ‘‘En las muchas palabras no falta pecado; Mas el que refrena sus labios es prudente’’.
Cuando uno habla mucho, tarde o temprano damos información de otra persona que no debíamos
decir. Santiago nos enseña a refrenar nuestra lengua, pero ¿Cómo refrenamos nuestra lengua?
Alimentando el corazón. Hay personas que son viciosamente chismosas, eso nos muestra un
corazón corrompido por su deseo de saber acerca de los demás y no solo saber sino divulgarlo.
La naturaleza del pecado siempre son palabras podridas. Efe.4:29. Corrompida-podrida.

Las palabras del cristiano deben ser:

a. Edificantes.
b. Santas.
c. Cristo debe abundar en nuestro vocabulario.
La murmuración y toda clase de chisme ya sea cierto o verdadero debe ser erradicado de la iglesia
porque es un mal que divide. Prov.16:28.

¿Cómo evitar caer en la murmuración?

1. Rechazar las conversaciones mal intencionadas
a. Pregúntese si en la conversa se habla de algo o de alguien.
b. ¿Es útil la información?
c. ¿Me edifica lo que me van a contar?
d. No juntarme con personas que nos buscan solo para chismear. ¿Qué pasa si es cristiano?
2. Reprende al calumniador
a. Enseñando a la persona que retrasa el progreso de la iglesia por el poder maligno de su
lengua no refrenada.
b. Llevando cautiva esa conversación o a esa persona a la palabra de Dios. 2. Cor.10:5.
c. Si tan mal te habla de una persona pues busca que conversen las dos partes involucradas
pero no busques saber lo que no necesitas saber. 1. Cor.2:2.
3. Redirigir
a. La persona que está murmurando se está alejando de Cristo, ¡hazla volver!
b. Busca la edificación en medio del mar de chismes, direcciona todo al sacrificio y la
persona de Cristo ¿Cristo haría esto? No, redirígete a Cristo.

Vs.15. Irreprensibles en medio de una generación maligna.

a. La iglesia debe ser un pedacito de cielo en la tierra, no un pedazo de mundo con sello
de iglesia. Debemos tomar en cuenta que nos diferenciamos del mundo cuando luchamos
por ser diferentes al mundo, eso hace la diferencia, ellos no buscan ser justos, ni
irreprensible y algo más sorprendente ellos no tienen la cualidad que Pablo da al pueblo
Filipo y al pueblo en general, el mundo no puede brillar.
b. Resplandecéis como luminares: “ustedes deben resplandecer”, lo cual significa que los
creyentes deben mostrar su carácter en medio de una cultura tenebrosa, como el sol, la luna
y las estrellas brillan en medio de un cielo que sin su presencia sería opaco del todo.

Conclusión
El cristiano está exhortado a no involucrarse en murmuraciones ya que dañan al cuerpo, divide,
mata, por lo contrario si tenemos algún problema con refrenar nuestro actuar debemos darnos
cuenta que es porque no estamos alimentando el corazón de palabra santas. Debemos edificarnos
con palabras que no estén podridas y buscar alejarnos de toda conversación que no produce ningún
fruto espiritual.
La lengua que brinda consuelo es árbol de vida;
la lengua insidiosa deprime el espíritu. Prov.15:4.