Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
LO CONCERNIENTE
A LA SANTA EUCARISTÍA
ACLAMACIÓN
El Pueblo de pie, el Celebrante dice éste o un saludo estacional (páginas 145-146)
En la estación de Cuaresma
EL RESUMEN DE LA LEY
Luego sigue el Resumen de la Ley, o El Decálogo (página 100).
EL KYRIE
El Celebrante y el Pueblo oran
o esto
EL TRISAGIO
Santo Dios,
Santo Poderoso,
Santo Inmortal,
Ten piedad de nosotros.
Pueblo Amén.
EL SERMÓN
EL CREDO NICENO
Los Domingos, los días de Fiesta Mayor y en otros momentos designados, puestos todos
de pie para recitar el Credo Niceno, el Celebrante dice primero
Silencio
Lector Señor, en tu misericordia:
Pueblo Escucha nuestra oración.
Silencio
Lector Señor, en tu misericordia:
Pueblo Escucha nuestra oración.
Silencio
Lector Señor, en tu misericordia:
Pueblo Escucha nuestra oración.
Silencio
Lector Señor, en tu misericordia:
Pueblo Escucha nuestra oración.
Silencio
Lector Señor, en tu misericordia:
Pueblo Escucha nuestra oración.
Recordamos ante ti a todos tus siervos que han partido de esta vida
en tu fe y temor, [especialmente _____________,] para que tu
voluntad se cumpla en ellos; y te pedimos que nos des la gracia de
seguir los buenos ejemplos de [N., y] todos tus santos, para que con
ellos, seamos partícipes de tu reino celestial.
Silencio
PALABRAS DE CONSUELO
El Celebrante puede decir entonces una o más de las siguientes sentencias, diciendo
primero
LA PAZ
Celebrante La Paz del Señor sea siempre con ustedes.
Pueblo Y con tu espíritu.
OFERTORIO
El Celebrante puede comenzar el Ofertorio con uno de los textos previstos de la Escritura.
El Celebrante continúa
En verdad es justo, nuestro deber y nuestro gozo, darte gracias, en
todo tiempo y lugar, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de
la tierra.
EL SANCTUS
Celebrante y Pueblo
ORACIÓN DE CONSAGRACIÓN
El pueblo se arrodilla o permanece de pie. El Celebrante continúa
Al decir las palabras relativas al pan, el Celebrante toma el pan o impone su mano sobre
él, aquí * puede partir el pan; y en las palabras relativas a la copa, se sostiene o se coloca
una mano sobre ella y cualquier recipiente extra que contenga el vino para ser consagrado.
Por él, y con él, y en él, en la unidad de el Espíritu Santo, tuyo sea
todo honor y gloria, Padre Todopoderoso, ahora y por siempre.
Amén.
EL PADRE NUESTRO
El Celebrante luego dice
LA FRACCIÓN
Si el Pan consagrado no ha sido partido antes, el Celebrante lo parte ahora.
Se mantiene un periodo de silencio.
o esto
Celebrante [Aleluya.] Cristo nuestro Cordero Pascual, ha sido
sacrificado, una vez para siempre en la cruz.
Pueblo Celebremos la fiesta. [Aleluya.]
AGNUS DEI
Aquí se puede cantar o decir la siguiente antífona u otra adecuada
MINISTRACIÓN DE LA COMUNIÓN
De frente al pueblo, el Celebrante puede decir la siguiente invitación
o ésto
El cuerpo de nuestro Señor Jesucristo, [el cual fue entregado por ti,
preserve tu cuerpo y alma para la vida eterna. Toma y come esto en
memoria de que Cristo murió por ti, aliméntate de él en tu corazón
con fe, con acción de gracias.]
ORACIÓN DE POSCOMUNIÓN
Después de la Comunión, el Celebrante dice
Oremos.
BENDICIÓN
El Obispo cuando esté presente, o el Presbítero, da ésta o alguna otra bendición
o esto
o esto
o esto
ACLAMACIÓN
El Pueblo de pie, el Celebrante dice éste o un saludo estacional (páginas 145-146)
En la estación de Cuaresma
EL RESUMEN DE LA LEY
Luego sigue el Resumen de la Ley, o El Decálogo (página 100).
EL KYRIE
El Celebrante y el Pueblo oran
o esto
EL TRISAGIO
Santo Dios,
Santo Poderoso,
Santo Inmortal,
Ten piedad de nosotros.
Pueblo Amén.
EL SERMÓN
EL CREDO NICENO
Los Domingos, los días de Fiesta Mayor y en otros momentos designados, puestos todos
de pie para recitar el Credo Niceno, el Celebrante dice primero
Por todos aquellos que han partido de esta vida con la firme
esperanza de la resurrección, [especialmente ______,] en acción de
gracias oremos.
Lector Señor, en tu misericordia:
Pueblo Escucha nuestra oración.
Se pueden agregar peticiones adicionales. Acción de gracias también pueden ser incluidas.
Dios de misericordia,
confesamos que hemos pecado contra ti
en pensamiento, palabra y obra,
por lo que hemos hecho,
y por lo que hemos dejado de hacer.
PALABRAS DE CONSUELO
El Celebrante puede decir entonces una o más de las siguientes sentencias, diciendo
primero
LA PAZ
Celebrante La Paz del Señor sea siempre con ustedes.
Pueblo Y con tu espíritu.
Luego los Ministros y el Pueblo pueden saludarse mutuamente en el nombre del Señor.
OFERTORIO
El Celebrante puede comenzar el Ofertorio con uno de los textos previstos de la Escritura.
El Celebrante continúa
En verdad es justo, nuestro deber y nuestra gozo, darte gracias, en
todo tiempo y lugar, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de
la tierra.
EL SANCTUS
Celebrante y Pueblo
ORACIÓN DE CONSAGRACIÓN
El pueblo se arrodilla o permanece de pie. El Celebrante continúa
Al decir las palabras relativas al pan, el Celebrante toma el pan o impone su mano sobre
él, aquí * puede partir el pan; y en las palabras relativas a la copa, se sostiene o se coloca
una mano sobre ella y cualquier recipiente extra que contenga el vino para ser consagrado.
Cristo ha muerto.
Cristo ha resucitado.
Cristo volverá.
Celebramos el memorial de nuestra redención, oh Padre, en este
sacrificio de alabanza y acción de gracias, y te ofrecemos estos dones.
Todo esto lo pedimos por medio de tu Hijo Jesucristo: por él, y con
él, y en él, en la unidad del Espíritu Santo, todo el honor y la gloria
son tuyos, Padre Todopoderoso, ahora y por siempre. Amén.
EL PADRE NUESTRO
El Celebrante entonces dice
Y ahora, nos atrevemos a orar, como nos enseñó nuestro Salvador
Cristo:
Celebrante y Pueblo juntos oran
o esto
Celebrante [Aleluya.] Cristo nuestro Cordero Pascual, ha sido
sacrificado, una vez para siempre en la cruz.
Pueblo Celebremos la fiesta. [Aleluya.]
MINISTRACIÓN DE LA COMUNIÓN
De frente al pueblo, el Celebrante puede decir la siguiente invitación
o esto
Oremos.
Padre Celestial,
te agradecemos por nutrirnos con el alimento espiritual
del preciosísimo cuerpo y sangre
de tu Hijo nuestro Salvador Jesucristo;
y porque nos aseguras, en estos santos misterios
que somos miembros vivos del Cuerpo de tu Hijo,
y herederos de tu Reino eterno.
Y ahora, Padre, envíanos para hacer el trabajo que tú
nos has encomendado, para amarte
y servirte como fieles testigos de Cristo nuestro Señor.
A él, a ti y al Espíritu Santo,
sea todo honor y gloria, ahora y por siempre. Amén.
BENDICIÓN
El Obispo cuando esté presente, o el Presbítero, da esta o alguna otra bendición
o esto
o esto
o esto
SOBRE LA DISCIPLINA EN LA
SANTA COMUNIÓN
Si el Presbítero sabe que una persona que está viviendo una vida
notoriamente mala, y tiene la intención de venir a la Comunión, el
Presbítero instruirá en privado a esa persona para que no venga a la
Mesa del Señor hasta que haya dado pruebas claras de
arrepentimiento y enmienda de vida. El Presbítero seguirá el mismo
procedimiento con aquellos que han hecho mal a su prójimo y son
un escándalo para otros miembros de la Congregación, no
permitiendo que esas personas reciban la Comunión hasta que hayan
restituido el mal que han hecho.
SALUTACIONES ESTACIONALES
La Aclamación de apertura puede ser reemplada por un saludo apropiado para la
estación o la ocasión, de la siguiente manera:
PARA ADVIENTO
Celebrante Sí, el Señor viene pronto.
Pueblo Amén. ¡Ven, Señor Jesús!
APOCALIPSIS 22:20
Tengan presente las palabras del Señor Jesús, el cual dijo, “Hay más
bendición en dar que en recibir.” HECHOS 20:35
Que su luz brille delante de todos, para que vean sus buenas obras, y
glorifiquen a su Padre que está en los cielos. MATEO 5:16
Así que, hermanos, les ruego por las misericordias de Dios, que
presenten sus cuerpos en sacrificio vivo, santo y agradable a Dios;
esta es su verdadera adoración. ROMANOS 12:1
EN CUALQUIER TIEMPO
Por Jesucristo nuestro Señor; porque él es tu Palabra viva desde
antes de todos los tiempos y por todas las edades; por él creaste
todas las cosas, y por él haces todas las cosas nuevas.
o ésto
ADVIENTO
Porque enviaste a tu amado Hijo para redimirnos del pecado y la
muerte, para hacernos en él herederos de la vida eterna; para que,
cuando venga de nuevo con poder y gran gloria a juzgar al mundo,
podamos sin vergüenza ni temor regocijarnos para contemplar su
regreso.
NAVIDAD
Porque nos diste a tu Hijo único, Jesucristo, para que naciera por
nosotros; quien, por el Espíritu Santo y la virgen María, su madre,
fue hecho verdaderamente hombre, sin mancha de pecado, para que
pudiéramos ser limpios del pecado y el derecho de convertirnos en
sus hijos.
P R E S E N T A C I Ó N, A N U N C I A C I Ó N y
TRANSFIGURACIÓN
Porque en el misterio de la Palabra hecha carne, has hecho que brille
una nueva luz en nuestros corazones, para darnos el conocimiento de
tu gloria en la faz de tu Hijo Jesucristo, nuestro Señor.
CUARESMA
Ofreciste a tu pueblo fiel limpiarle sus corazones y preparlos con
gozo para la fiesta de la Pascua; para que, fervientes en oración y en
obras de misericordia, y renovados por tu Palabra y Sacramentos,
puedan llegar a la plenitud de la gracia que has preparado para los
que te aman.
SEMANA SANTA
Por medio de Jesucristo nuestro Señor. Quien por nuestros pecados
fue elevado en lo alto de la Cruz para poder atraer al mundo entero
hacia sí mismo; y por su sufrimiento y muerte se convirtió en el
autor de la salvación eterna para todos los que confían en él.
JUEVES SANTO
ASCENSIÓN
Por medio de tu amado Hijo, nuestro Señor Jesucristo, quien después
de su gloriosa resurrección, se apareció a sus Apóstoles, y en
presencia de ellos ascendió al cielo, a preparar lugar para nosotros,
para que donde él esté, allí también nosotros podamos ascender y
reinar con él en gloria.
PENTECOSTÉS
DOMINGO DE TRINIDAD
Quien, con tu coeterno Hijo y el Espíritu Santo, eres un solo Dios,
un solo Señor, en Trinidad de Personas y en Unidad de Substancia.
Porque lo que creemos de tu gloria, oh Padre, lo mismo creemos de
tu Hijo, y del Espíritu Santo, sin ninguna diferencia o desigualdad.
CRISTO REY
Por medio de tu Hijo unigénito Jesucristo, el Rey de reyes y Señor de
señores, porque lo has sentado a tu diestra en gloria, y has puesto
todas las cosas en sujeción bajo sus pies, para que te las presente a ti,
oh Padre, perfectamente restauradas en belleza, verdad y amor.
APÓSTOLES y ORDENACIONES
Por medio del gran pastor de tu rebaño, Jesucristo nuestro Señor,
quien después de su resurrección envió a sus apóstoles a predicar el
Evangelio y enseñar a todas las naciones, y prometió estar con ellos
siempre hasta la consumación de los tiempos.
BAUTISMO
Porque en Jesucristo, nuestro Señor, nos has recibido como tus
hijos e hijas, nos has hecho ciudadanos de tu reino y nos has dado
el Espíritu Santo para guiarnos a toda verdad.
ENTIERRO o CONMEMORACIÓN DE
LOS FIELES DIFUNTOS
Por nuestro Señor Jesucristo, quien resucitó victorioso de la muerte
y nos conforta con la bendita esperanza de la vida eterna. Porque
para tu pueblo fiel, oh Señor, la vida cambia, más no termina; y
cuando nuestro cuerpo mortal muera, esté preparada para nosotros
una morada eterna en los cielos.
OCASIONES PENITENCIALES
Por medio de nuestro Señor Jesucristo, quien fue tentado en todos
los sentidos como nosotros, pero no pecó. Por su gracia somos
capaces de triunfar sobre todo mal y vivir ya no solo para nosotros,
sino para aquel que murió por nosotros y resucitó.
DÍAS DE ROGATIVA o
DÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS
Porque las maravillas de tu Creación reflejan tu bondad y hermosura;
y tus dones del sol y la lluvia, del tiempo de siembra y de cosecha,
manifiestan tu amor y cuidado constantes por todo lo que has hecho.
DÍA DE CANADÁ o
DÍA DE LA INDEPENDENCIA
Porque nos has hecho a tu imagen para que podamos servirte en
la tierra en libertad, justicia y paz; y nos has dado la esperanza de
nuestra ciudadanía eterna contigo en tu reino celestial.
DE UN MÁRTIR
DE UN MISIONERO O EVANGELISTA
Por los dones de tu Espíritu Santo, derramados sobre profetas y
evangelistas para proclamar el Evangelio hasta los confines de la
tierra, y para traer a todos los pueblos bajo el reinado de Jesucristo
nuestro Señor.
DE UN PASTOR
Por medio de Jesucristo, el gran pastor de las ovejas; en él llamas
pastores fieles y los unges con tu Espíritu Santo, para alimentar a tu
rebaño con la Palabra y el Sacramento, y para guiarlos en el camino
de la vida eterna.
DE UN MAESTRO DE LA FE
Porque tú has impartido dones de sabiduría y conocimiento, a
aquellos que enseñan el Evangelio en palabra y obra para edificar el
cuerpo de Cristo, hasta que todos alcancemos la unidad de la fe y el
conocimiento del Hijo de Dios.
DE UN ECUMENISTA
DE UN RENOVADOR DE LA SOCIEDAD
Porque nunca te apartas de nosotros y continuamente envías entre
nosotros a aquellos que buscan justicia, defienden a los oprimidos,
alimentan a los pobres y vendan a los quebrantados de corazón.
DE UN REFORMADOR DE LA IGLESIA
Porque tú, el maestro constructor, nunca abandonas a tu Iglesia, que
has construido con piedras vivas; llamas a tus fieles servidores para
que restauren sus muros antiguos y reparen sus murallas rotas, para
que pueda ser un santo templo de tu presencia.
EN CUALQUIER CONMEMORACIÓN
Por la gracia y la virtud que se manifiesta en [N. y todos] tus santos,
que han sido los vasos elegidos de tu amor, y las luces del mundo en
la generación que les tocó vivir.