SOLUCIONARIO

1. Para saber a qué clases de pena puede reconducirse, la pena conminada en el tercer párrafo de la ley
penal incluida en el artículo 107 del Código penal, ha de tenerse en cuenta que el referido párrafo incluye
el tipo agravado del parricidio, cuando el sujeto activo tiene hijos con la víctima, de allí que éste ha de
evaluarse siempre teniendo en cuenta el primero, donde, al incluirse el tipo base, se asigna como pena
conminada a la pena privativa de la libertad; por ello, es que en el tercer párrafo se indique: “(…)
además será reprimido con (…)”

Luego:

i) la pena de inhabilitación es originaria, al estar presente, en la conminación, de modo inicial.

ii) la pena de inhabilitación es principal, porque va conminada en forma independiente respecto de la

pena privativa de la libertad y, su duración, una vez se la imponga, no dependerá de aquella, lo
que es compatible con la definición de la pena de inhabilitación principal.

iii) la pena de inhabilitación es acumulativa, pues tanto en su conminación como en su aplicación va

unida a la pena privativa de la libertad, ello se expresa a través del “además”

iv) la pena de inhabilitación, por lo antes mencionado, no es alternativa; su aplicación no es opcional.

v) la pena de inhabilitación no es única, porque no está sola en la conminación, sino va acompañada

de la pena privativa de la libertad.

vi) la pena de inhabilitación, no es sustitutiva, pues, aun cuando es originaria, al momento de la

aplicación, no puede ser reemplazada por otra.

2. La observación que se puede hacer a la pena accesoria de inhabilitación conminada, en la ley penal
incluida en el artículo 181 del Código penal, es que su nominación como pena “accesoria de
inhabilitación” en la ley penal, resulta contradictoria con su propia definición, según la cual, “es aquella
que, sin estar establecida en un tipo penal concreto de la parte especial, se impone al sancionarse un
delito que constituye abuso de autoridad, de cargo, de profesión, oficio, poder o violación de un deber
inherente a la función pública, comercio, industria, patria potestad, tutela, curatela, o actividad regulada
por ley”, asumiendo, el carácter definitorio de la inhabilitación principal, a la que, precisamente, se la
entiende como aquella que se encuentra establecida en un tipo penal concreto de la parte especial. Ello
podría provocar que el juzgador, al aplicarla, asuma que no es una pena principal y, por ello, le asigne
los efectos propios de una inhabilitación accesoria, determinando que su duración se extienda por igual
tiempo que la pena privativa de la libertad establecida en el tipo base.