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(Adriana Figueroa Velasco. Editorial Univer-
sitaria, Santiago, 1994,310páginas)
STE es un libro para la enseñan-
za de la filosofía en el último
año escolar. Sin embargo, se
arm:a del programa oficial y va más
allá de éste, en cuanto elige sólo a unos
pocos filósofos, pero intenta adentrarse
algo más profundamente en su obra,
dando a “conocer el camino del pen-
samiento, el cómo ciertos hombres fue-
ron marcando el pensar occidental y có-
mo todavía estamos estructurados men-
talmente por ellos”. Se invita al profe-
sor de filosofía a utilizar este material
“con mucha libertad”, pues contiene
“la exposición del pensamiento de mu-
chos filósofos, materia que es imposi-
ble pasar en un ano de estudio”.
E n cualquier caso, quien sí puede
acercarse a este texto con toda libertad,
agrado y provecho es el lector adulto,
no ya para rendir prueba alguna, sino
por el solo placer de aumentar s u pro-
pio conocimiento. Después de todo, se-
gún se nos recuerda, ya Aristóteies es-
tableció que “el hombre tiende por na-
turaleza al saber”.
El amplio paseo por las praderas fi-
losóficas a que conduce la autora no es
una excursión trabajosa, sino simplifi-
cada respetuosamente, con miras a po-
ner en fácil contacto al lego con algu-
nas de las mentes más selectas que ha-
ya producido Occidente. Para disfrutar
tal encuentro, no se requiere de nin-
guna preparación adicional a la que su-
puestamente proporciona la enseñanza
media.
La reducción a lo fundamental de
dos milenios y medio de pensamiento
filosófico está hecha con mucho cono-
cimiento y cuidado, de tal modo que la
sencillez no vaya en desmedro de la so-
lidez de la información. Esta se entrega
didácticamente ordenada en cuatro
grandes capítulos, sobre la filosofía
griega, cristiana, moderna y contem-
poránea. Se incluyen pasajes seleccio-
nados de los más de treinta autores es-
tudiados.
Incidentalmente, quienes hayan
abandonado el colegio hace ya algunas
décadas, con probabilidad se admira-
rán del notable incremento de nivel de
los textos de estudio de nuestros días.
E n éste, son encomiables tanto el con-
tenido como la presentación, con la sola
salvedad de un par de errores ortográ-
ficos que convendría corregir en una
futura edición.
Con todo, es de temer que este li-
bro no sea debidamente apreciado en
todo s u valor y buena intención por el
grueso de los alumnos de secundaria.
E n cambio, sí es presumible que lo será
por cualquier padre o madre de familia
que, más allá de la actividad que desa-
rrolle para ganarse la vida, sienta en s u
interior alguna insatisfecha inquietud
por el significado de ésta. No es un li-
bro para especialistas, pero bien pudie-
ra ocurrir que algún lector se transfor-
mara en tal, a resultas de la inesperada
revelación de un resplandor que diese
sentido a sus afanes cotidianos.
Francisco José Folch