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1) a) Servicio Publico

La noción de Estado ha sido correctamente definida como “la persona


jurídica de derecho público, constituida por la comunidad de los habitantes de
un territorio determinado, organizada con arreglo a su Constitución para el
cumplimiento de sus fines específicos”. Por ello el Estado debe cumplir con un
preciso tipo de funciones que le resultan ineludibles. Esos deberes o cargas,
usualmente conocidos con la denominación de funciones públicas, tienen tal
grado de importancia que se identifican con el cometido o con la razón de ser
del Estado.
La función pública, por ser esencial para la concepción de Estado, se
caracteriza, enprimer término, por tener una naturaleza de carácter exclusiva e
indelegable. Por este motivo, funciones públicas tales como la administración
de justicia, el dictado de leyes, la defensa, la emisión de moneda, etc., solo
pueden ser cumplidas por el Estado, el cual no puede, por otra parte,
delegarlas a particulares. A su vez, esa circunstancia explica la segunda nota
distintiva de la función pública, o sea, la de ser ejercida por el Estado con todas
las prerrogativas del poder público. Por último y como tercera característica de
la función pública, esta tiende a satisfacer el interés público, lo cual debe ser
entendido como el conjunto de todos aquellos intereses comunes y
fundamentales a todos los miembros de la comunidad jurídicamente
organizada.
El concepto de servicio público es una creación de la jurisprudencia
francesa, la cual utilizo esos términos por oposición a actividad o servicio de los
particulares. En nuestro país, la idea de servicio público fue introducida por los
grandes maestro del derecho administrativo, entre ellos Bielsa y Villegas
Basalvilbaso, y también fue entonces adoptada, por nuestra jurisprudencia.
En los últimos tiempos, los modernos administrativistas argentinos, en especial
Fiorini, se han encargado de esclarecer la cuestión distinguiendo la función
pública (o servicios públicos esenciales) del servicio público. El servicio público
propiamente dicho, a diferencia de la función pública, no atañe al cometido
esencial del Estado. El servicio público tiende también a satisfacer el interés
público, pero no hace al cometido del Estado. Por ello no tiene su origen en
normas constitucionales, sino en mandatos del legislador, en disposiciones
legales. En segundo término el servicio público no es prestado por el Estado en
ejercicio de sus prerrogativas del poder público, esto es, no es de ejecución
directa del poder público. Por este motivo, se caracteriza en tercer lugar por
ser delegables a otros organismos, e incluso a particulares (denominados
concesionarios). Esto no significa que el Estado pierda el control de la gestión
de dicho servicio.

b) Las Necesidades Públicas.

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Atento a que la actividad del Estado tiende a satisfacer necesidades
humanas, en doctrina se ha practicado una distinción estableciéndose tres
grupo:
1) Necesidades individuales o privadas;
2) Necesidades del grupo o colectivas; y
3) Necesidades públicas.
La primera clase está conformada por aquellas que se identifican con la
existencia misma de las personas. Son congénitas a todo individuo como por
ej. La necesidad de alimentarse, cubrirse o vestirse contra las inclemencias de
la temperatura, etc.
El segundo tipo, es decir las necesidades del grupo o colectivas, son
aquellas que tienen su origen en la vida de sociedad que realiza el hombre.
Nacen de la agrupación de los individuos en sociedad, siendo ej. De ellas la
educación, la comunicación, el transporte, etc.
Por último, las necesidades públicas coinciden con el interés público,
necesidades comunes y fundamentales a todos los miembros de una
comunidad jurídicamente organizada. Ej. La seguridad interior, la
administración de justicia, la atención de los negocios públicos, etc. Estas
necesidades presuponen la existencia del Estado, al cual le compete
satisfacerlas.
Las necesidades individuales privadas se caracterizan porque pueden
ser indistintamente atendidas o satisfechas por el individuo, por el grupo o
colectividad, e incluso por el Estado. De la misma manera las necesidades
colectivas también pueden ser atendidas no solo por el grupo o el Estado, sino
incluso por el individuo, ya que este satisface su propia necesidad colectiva por
ej. En el caso de la educación, atiende así mismo a la del grupo y a la del
Estado a la cual pertenece.
Con las necesidades públicas no siempre ocurre lo mismo, ya que
pueden ser satisfechas indistintamente por el individuo, el grupo el Estado. Ya
que esta categoría exige una distinción entre necesidades publicas primarias y
secundarias.
Se entiende por necesidades públicas primarias las que surgen como
consecuencia de la existencia del Estado y se identifican con el cometido
esencial de este; ej. seguridad interior, justicia, defensa, representación
exterior, etc. Estas necesidades son la causa existencial de las funciones
públicas y solo pueden ser satisfechas por el Estado, mediante los
denominados servicios públicos esenciales.
Las necesidades públicas secundarias no tienen su origen en la
existencia propia del Estado, sino en la del grupo o la del individuo. Son
necesidades colectivas o individuales que han sido elevadas al rango de
necesidades públicas porque el Estado entiende que así lo reclama el interés
público. Por tal motivo admiten ser atendidas indistintamente por el individuo, el
grupo o el Estado.

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c) Actividad Financiera del Estado

Cuando el Estado realiza erogaciones o gastos, al igual que cuando


obtiene medios o recursos monetarios para atender aquellos, está
desarrollando una actividad especial, denominada Actividad Financiera. Esta
consiste, pues, en un conjunto de operaciones que la doctrina denomina
fenómenos financieros (realización de gastos u obtención de recursos) y cuyo
objetivo final es la satisfacción de las necesidades públicas.
Los elementos que integran los fenómenos financieros son:
1) políticos, dado que cada operación financiera presupone una elección a
priori de fines y medios para realizarla;
2) económicos, por cuanto los medios requeridos en toda operación
financiera son de naturaleza económica;
3)jurídicos, dado que cada una de las operaciones financieras del Estado
está regulada por normas y principios de derecho público:
4) sociales, porque todas las operaciones financieras tienden a la
satisfacción de necesidades públicas; y
5) administrativas, es decir, lo relacionado con la parte funcional o técnica
de cada operación financiera.

d) Características de la actividad financiera.

La primera nota distintiva de la actividad financiera reside en que se trata


de una actividad constituida por tres momentos distintos, que
esquemáticamente podemos clasificar como los correspondientes a:
1) la planificación o calculo, tanto de los recursos como de los gastos
públicos, que se materializan en un presupuesto;
2) el logro u obtención de los recursos públicos, lo cual implica una decisión
con respecto a cómo, cuándo y de donde obtenerlos, como también un análisis
sobre cuáles serán las consecuencias o efectos sobre la economía y el orden
social; y
3) la aplicación o inversión de tales recursos, o sea, las erogaciones o
inversiones en bienes públicos, la cual supone también un análisis sobre los
efectos que ella producirá en la economía y en la sociedad.
El segundo rasgo propio de la actividad
financieraesellareconocecomoúnicosujetoactivo al Estado. Empleando la
expresión Estado lato sensu, es decir el ente público que representa a la
sociedad jurídicamente organizada, comprendiendo, por tanto, no solo al
Estado nacional sino, además, a los Estados locales o provinciales y a los
municipios. La actividad financiera se caracteriza, pues, por reconocer como su
único y excluyente sujeto activo a un ente investido con poder de coacción o
poder de imperio. Este poder propio del Estado es denominado, en la
terminología de esta ciencia, poder financiero.

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La tercer característica está dada por tender siempre a la satisfacción de
las necesidades públicas, o sea, por el hecho de que sus fines se identifican
con el interés público.
En atención a que la actividad financiera no es sino el conjunto de
fenómenos financieros o sea, los producidos por las operaciones de obtención
de recursos, de administración y de aplicación o gasto de estos por parte del
Estado, dicha actividad no es simple, sino que presenta los mismos aspectos o
elementos que caracterizan a aquellos. Por tanto, la actividad financiera es
esencialmente multifacética, de naturaleza compleja, pues comprende
aspectos políticos, económicos, jurídicos, sociales y administrativos.

2) a) Fines de la Actividad Financiera.

En doctrina se ha discutido acerca de cuál es realmente la función de la


actividad financiera, o sea, si esta persigue una finalidad propia o, al contrario,
si cumple una función instrumental, la cual, por importante que sea, no
constituye un fin en sí misma.
Según el profesor italiano Gianini, la actividad financiera se distingue de
las demás actividades del Estado en que no constituye un fin en sí misma, o
sea, en que no se dirige directamente a la satisfacción de una necesidad, sino
al cumplimiento de una función instrumental de fundamental importancia, cuyo
regular desenvolvimiento es condición indispensable para el desarrollo de
todas las restantes actividades.
Este criterio tiene valor cuando se concibe la actividad financiera del
Estado a la manera en que lo hacían los clásicos, es decir, como la actividad
imprescindible para lograr los recursos que se emplearan en los gastos
necesarios para satisfacer las necesidades públicas.
Sin embargo, ese criterio no alcanza a explicar todas las funciones que
esta cumple en la actualidad. Lo que ocurre es que la actividad financiera, tiene
finalidades propias. Para ello es necesario distinguir, tal como lo hizo Griziotti,
entre los denominados:
1) Los fines fiscales que se materializan con la obtención de recursos con
los cuales se efectúan los gastos que irrogan las necesidades públicas. En tal
caso, la actividad financiera cumple el papel de medio o instrumento con que
se habrá de cumplir otra finalidad, esto es, la satisfacción de necesidades
públicas. En consecuencia, según Griziotti persiguen la satisfacción de los fines
públicos indirectamente, porque consisten en la actividad de procurarse los
recursos con los cuales se efectúan los gastos que cumplen los fines públicos.
2) Los fines extrafiscales: de la moderna actividad financiera son aquellos
que procuran atender el interés público en forma directa. Materializando una
intervención en las distintas actividades desarrolladas por la comunidad. Tal
intervención, es llevada a cabo mediante la política de gastos públicos, sino
también por medio de los recursos públicos. Por ej. El caso de aplicación de
elevados impuestos al consumo de bebidas alcohólicas; el Estado no procura

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la obtención de recursos sino atender directamente el interés público,
reduciendo el consumo de tales bebidas.
3) Por su parte los fines mixtos: participan de las características de los dos
anteriores. En el caso de los recursos públicos, este tipo de fines se manifiesta
cuando se trata por ejemplo, de un impuesto que se aplica no solo para lograr
medios financieros (fin fiscal) sino, además, para atender directamente el
interés público, mediante exenciones o deducciones para determinados grupos
sociales (fin extra fiscal).

b) Neutralismo.

La oposición entre neutralismo e intervencionismo de las finanzas


públicas; o, como también se dice, si ellas deben proponerse exclusivamente la
obtención de recursos (fin fiscal) o si, además, les corresponde perseguir
finalidades de naturaleza económica y social (fines extra fiscales).
Fácil es advertir que el asunto reconoce su origen en la misión que se
atribuya al Estado. Si éste debe ser un mero espectador de los problemas que
se plantean en materia económica y social, la actividad financiera
necesariamente adoptará carácter pasivo y estático; por el contrario, si se
establece que debe actuar positivamente en ellos con el fin predeterminado de
encauzarlos en cierto sentido, entonces aquella actividad adoptará una
modalidad activa y dinámica.
El Neutralismo, posición que se identificaba con los principios de la
denominada “escuela clásicade la economía”, le asignaba a las finanzas
públicas la exclusiva misión de obtener los recursos necesarios para afrontar
las erogaciones públicas (fin fiscal). A causa de dicha actitud, la ciencia de las
finanzas públicas se limitaba a ser una disciplina de los medios, o, como decía
Jese el problema financiero se reducía a un problema de cobertura de gastos.
La posición de un autor tan prestigioso como Trotabas", para quien la
neutralidad y el intervencionismo nada tienen que ver con las finanzas como
ciencia; la decisión que se adopte en un sentido o en otro, dependerá de
convicciones políticas o filosóficas. "La ciencia de las finanzas -dice, como toda
ciencia, tiende exclusivamente al conocimiento y no a la realización de un
apriorismo de cualquier naturaleza que fuere". Es materia perteneciente al
poder político, y no al financista.

c) Intervencionismo.
El Intervencionismo, por su parte, no concibe la actividad financiera
como una mera gestión de medios para cubrir los gastos públicos. Esta
posición, que coincide con postulados políticos que aboga por realizar
mediante esa actividad una intervención estatal en materia económica, social y
política (fin extrafiscal).
En los años que precedieron a la guerra de 1914-1918 se produjo la
modificación de las condiciones económicas y sociales como consecuencia del

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desarrollo del capitalismo, con sus grandes empresas, y la quiebra de los
principios de la libre competencia, que es reemplazada por los monopolios
ejercidos por las concentraciones industriales. Pero, a partir de aquel
acontecimiento mundial, se acentúan los desequilibrios económicos y sociales,
poniéndose de manifiesto la insuficiencia de los “mecanismos naturales" para
hacer frente a las nuevas exigencias, viéndose obligado el Estado a intervenir
para evitar abusos y aplacar la inquietud social estimulada por la prédica
extremista y el triunfo del comunismo en Rusia.
Refiriéndonos a las finanzas públicas, la necesidad de cubrir los ingentes
gastos bélicos provocó el desarrollo de la progresividad en !a imposición de las
rentas y las herencias, entreviéndose sus posibilidades como elemento
regulador: se acentuaron los tributos con finalidades extrafiscales (derechos
aduaneros proteccionistas, gravamen del celibato. estímulo a las familias
numerosas, etc.); aumentaron extraordinariamente las erogaciones ordinarias,
por el incremento de los gastos de tipo social, tales como subsidios familiares,
pensiones por invalidez, socorros a los desocupados; desarrollo del crédito
público: finalmente, el déficit presupuestario se intensificó e hizo crónico,
acentuándolo las fluctuaciones monetarias.
Al influjo de tales circunstancias la intervención oficial va en aumento,
evolucionando hacia el sistema que ha dado en llamarse del Estado
providencia, del liberalismo social, debilitándose paulatinamente los objetivos
del Estado liberal, que son reemplazados por otros de nuevo contenido,
especialmente social.

d) Planificación.

Para realizar esos objetivos, el Estado debe coordinar su actividad


económico-financiera, aparte de la jurídica, mediante la preparación y ejecución
de un plan económico, que es esencial para la realización de aquellas
finalidades. La planificación económica es realizada aun por los países
capitalistas, en mayor o menor grado según las circunstancias, y se ha
desarrollado al influjo de tres motivos principales": la experiencia soviética, que
ha mostrado la viabilidad del sistema y sus resultados extraordinarios; las
enseñanzas de la crisis de 1929-1933; los efectos de la movilización de las
fuerzas productivas con motivo de la segunda guerra mundial.
La planificación que expresa la política general del Estado y "determina
los objetivos a alcanzar en determinado plazo y los medios a emplearse al
efecto", se realiza de diferentes maneras según los conceptos políticos
imperantes, conociéndose estas tres formas principales: 1) la planificación
integral o planificación totalitaria, en la cual todos los medios materiales y
humanos pasan a disposición del Estado (Rusia soviética); 2) la planificación
liberal, en que no hay coordinación del conjunto de las actividades nacionales
sino elaboración de ciertas directivas para la política económica y social
(Estados Unidos y Holanda); 3) la planificación democrática, que coordina

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todos los elementos de la Nación (sector público, sector controlado y sector
libre) pero sin llegar a la rigidez del sistema totalitario (Gran Bretaña y Noruega
se orientan en esta dirección).
El conjunto de circunstancias económico-sociales examinadas ha
repercutido sobre las finanzas públicas y determinado cambios fundamentales
en los fines y medios técnicos para lograrlos, que pueden sintetizarse en esta
forma: 1 ) el presupuesto sufre la acción de la economía y, a la vez, influye
sobre ésta; se abandona la mística del equilibrio anual y se procura un
equilibrio económico (presupuestos cíclicos); 2) el gasto público no constituye
un simple medio para atender los servicios públicos; también debe cumplir
funciones económicas, fomentando el incremento del poder adquisitivo; 3) el
impuesto tiene finalidades extrafiscales y debe actuar positivamente como
elemento regulador y redistribuidor (cercenamiento de ciertas rentas; absorción
del ahorro. estímulo industrial, etc.); 4) el empréstito ya no es un recurso
"extraordinario"; puede ser empleado normalmente y utilizado en sus efectos
sobre el mercado de capitales; 5) creación de moneda en condiciones y
circunstancias especiales, con fines transitorios.

3) a)Derecho Financiero. Concepto.

Es la rama de las ciencias jurídicas que elabora, estudia y analiza todas


las normas que regulan el proceso legal de los fenómenos financieros. El
derecho financiero halla la materia viva o el germen de todos sus postulados en
los principios elaborados por la ciencia de las finanzas publicas. Al mismo
tiempo tiene por objeto de sus estudios a la actividad financiera del Estado, la
cual se concibe mediante el gobierno de las normas elaboradas por aquel.
El profesor Fernando Sáinz de Bujada, luego de hacer un meditado
estudio sobre las diversas definiciones que se han dado sobre esta parte del
derecho, concluye adoptando la siguiente: "Es la disciplina que tiene por objeto
el estudio sistemático de las normas que regulan los recursos económicos que
el Estado y los demás entes públicos pueden emplear para el cumplimiento de
sus fines, así como el procedimiento jurídico de percepción de los ingresos y de
ordenación de los gastos y pagos que se destinan al cumplimiento de los
servicios públicos”.
El italiano Giannini da una definición más simplificada al considerar al
derecho financiero como "el conjunto de las normas que disciplinan las
recaudaciones, la gestión y el gasto de los medios necesarios para la vida del
ente público”.
La obra básica en la formulación del derecho financiero fue la del autor
austríaco Myrbach Rheinfeld, aparecida a principios de este siglo. Este autor
fue el primero que señaló la necesidad de estudiar la materia desde el punto de
vista estrictamente jurídico, diferenciándolo del derecho administrativo y del
derecho privado. Es decir, planteó la necesidad de existencia de un derecho
financiero como rama jurídica independiente. Sostenía el autor mencionado

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que el derecho financiero debía ser caracterizado como un derecho público
cuyas relaciones jurídicas e instituciones jurídicas podían ser extrañas al
derecho privado, en cuyo caso no eran aplicables los principios ni las normas
del derecho privado.

b) Carácter.

Sostiene Ramón Valdés Costa que pese a existir grandes discrepancias


doctrinales, existen, sin embargo, algunos puntos de acuerdo respecto al
derecho financiero. Así, dentro de los caracteres del derecho financiero,
podemos decir que es una rama jurídica que debe ubicarse dentro del derecho
público. Cualquiera que sea el criterio que se utilice para distinguir el derecho
público del derecho privado, no puede caber duda alguna de que la disciplina
en estudio pertenece al derecho público.
Ello, porque las normas financieras no están destinadas a atender
directamente las necesidades de los particulares, sino a normar el poder estatal
de mando en el campo financiero (poder financiero), lo cual le permite actuar
como regulador general en cuanto a la debida atención de las necesidades que
esos particulares tienen, pero no aisladamente sino como integrantes de la
comunidad jurídicamente organizada.
En segundo lugar, el derecho financiero no es un derecho excepcional,
sino absolutamente normal. Pugliese sostiene al respecto que no es concebible
una ley más normal que aquella que regula la actuación del Estado procurando
los medios económicos que en el pasado, en la actualidad y siempre serán
indispensables para la existencia de la organización política de la sociedad.
Se debe advertir, sin embargo, .que el derecho financiero no constituye
un sistema orgánico de relaciones homogéneas, sino un conjunto de relaciones
de diversa naturaleza que sólo tiene en común el hecho de referirse a las
múltiples actividades que el Estado desarrolla en el campo financiero.

c) Contenido.

Dentro del contenido del derecho financiero encontramos varios sectores


con caracteres jurídicos propios:
a) La regulación jurídica del presupuesto. El presupuesto es, según veremos,
un instrumento legal que calcula y autoriza los gastos y prevé los ingresos para
solventarlos, determinando las respectivas atribuciones de los órganos del
Estado en la gestión financiera. Se habla incluso de un derecho presupuestario,
y este régimen jurídico se complementa con el de la ejecución de los gastos
públicos y su correspondiente control.
b) Las relaciones concernientes a la tributación en general, integran un sector
específico denominado "derecho tributario".
c) La regulación jurídica de la administración del patrimonio del Estado o
"gestión patrimonial". Debe destacarse, sin embargo, que la inclusión de este

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sector jurídico dentro del derecho financiero es discutible, puesto que para
algunos autores la regulación jurídica de la gestión patrimonial no integra el
derecho financiero, sino aquella parte del derecho administrativo que disciplina
la actividad privada de los entes públicos.
d) La regulación legal de todo lo atinente al crédito público, que está constituida
por todas aquellas normas jurídicas que disciplinan las múltiples relaciones que
surgen entre Estado y prestamistas cuando el primero utiliza los recursos
provenientes del crédito.
e) E1 conjunto de normas jurídico-económicas relacionadas con la moneda,
que constituiría un derecho monetario de muy reciente elaboración.

d) Fuentes del Derecho Financiero.

Son fuentes del derecho financiero los medios generadores, de las normas
que regulan la actividad financiera del Estado. Haremos referencia a la
constitución, la ley, el decreto-ley, el reglamento y los tratados internacionales
como fuentes del derecho financiero, limitándonos a una breve mención de
otras fuentes de esta rama jurídica.
A) La constitución. - Es un medio generador fundamental de normas
financieras. Las constituciones en los Estados de derecho contienen principios
generales básicos y disposiciones reguladoras de la materia financiera.
En nuestra Constitución existen principios generales de derecho que no
pueden ignorarse al crear normas financieras: tales, los principios relativos a la
libertad (individual, de cultos, dé prensa, de propiedad, de trabajar) y la
igualdad (ante la ley, el impuesto y las cargas públicas).
Sin embargo, es evidente que la Constitución argentina vigente requiere
reformas en materia financiera. Existen disposiciones constitucionales que
deberán merecer la atención de 1os reformadores. A título de sugerencias,
destacamos estos puntos: 1) Actualización del art. 4 sobre formación del
Tesoro nacional. 2) Solución, por vía constitucional, a las posibles restricciones
al tráfico interprovincial e internacional, a multiplicidad de gravámenes locales,
como el impuesto a los ingresos brutos, lo cual ha dado lugar a numerosas
resoluciones de la Corte Suprema Nacional, con resultado diverso según su
integración (así, por ejemplo, la resolución de la Corte en el caso
"Quebrachales Fusionados c. Provincia del Chaco", luego modificada por el
mismo tribunal -con otra integración- en la causa "Indunor" del 13/9/73). 3)
Clara y realística delimitación de las potestades tributarias entre Nación y
provincias, con prescindencia de la controvertida distinción entre impuestos
directos e indirectos. 4) Darse estado constitucional al régimen que rige la
materia (la coparticipación), limitarse la posibilidad de que la Nación avance
desmedidamente sobre las finanzas provinciales, indicándose el porcentaje
mínimo del producto total que deba distribuirse entre las provincias. 5) Inclusión
expresa del principio de capacidad contributiva como base del aporte de los
particulares a la cobertura del gasto público: 6) Delimitación o reglamentación

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de las frecuentes y amplias delegaciones que el Congreso hace al poder
ejecutivo en materia tributaria, lo cual se conecta, por un lado, con una vigencia
auténtica y no ficticia del principio de legalidad, y por el otro con la necesaria
agilización del tratamiento parlamentario de dichas leyes. La idea expresada en
el "proyecto Vanossi" en el sentido de dar sólo intervención a la Cámara de
Diputados en la sanción de leyes financieras, las cuales, por otra parte,
únicamente pueden ser proyectadas por el poder ejecutivo (art. 44 de ese
proyecto), podrá despertar críticas por la exclusión del Senado y la cuestión
podrá ser objeto de solución mejor, pero es ya un audaz paso adelante para
inducir a los especialistas a contemplar este espinoso problema. 7) Atribución
al Congreso para dictar un Código Tributario Nacional en el cual -como ocurre
en muchos países - se contengan los principios jurídicos fundamentales de la
tributación. 8) Solución por vía constitucional al también tan discutido problema
sobre las facultades tributarias provinciales sobre actividades, personas y
bienes ubicados en territorios provinciales pero “federalizados" (parques
nacionales, zonas aledañas. a instalaciones militares; zonas de yacimientos
petrolíferos o carboníferos, etc.). 9) Consagración constitucional del Tribunal de
Cuentas y del Tribunal Fiscal de la Nación.
B) La ley. - La ley, en sentido formal, es la manifestación de voluntad del
Estado, emitida por los órganos a los que la Constitución confía la tarea
legislativa, y es la fuente inmediata de mayor importancia en el derecho
financiero. Según el principio de legalidad financiera, todos los ingresos y los
gastos estatales deben ser dispuestos o autorizados por el organismo
legislativo.
Dice Gustavo Ingrosso qua así como los ingresos públicos están
sometidos a la legalidad financiera, también lo están los gastos públicos,
existiendo "paralelismo jurídico" entre ingresos y gastos.
Las leyes no pueden, por otra parte, vulnerar los principios básicos
establecidos en la constitución, ya que éstos tienen carácter de preeminencia
sobre la facultad legislativa de dictar leyes. En consecuencia, si el legislador de
alguna manera dejase de respetar tales principios constitucionales, el poder
judicial tiene la facultad de declarar inválidas dichas leyes.
C) El decreto-ley. - La facultad de sancionar leyes es exclusiva del poder
legislativo, y no resulta admisible la delegación en el poder ejecutivo en épocas
de normalidad constitucional.
En algunos países se autoriza que en caso de extraordinaria necesidad
o urgencia, el poder ejecutivo dicte decretos-leyes que regulen aspectos
financieros (por ejemplo, en Italia según los arts. 76 y 77 de su Constitución).

En nuestro país sólo se concibe la facultad legislativa del poder ejecutivo


en épocas de anormalidad constitucional (gobiernos de facto), pero no en
épocas normales.

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D) El reglamento. - Reglamentos son las disposiciones emanadas del poder
ejecutivo que regulan la ejecución de las leyes, el ejercicio de las facultades
propias y la organización y funcionamiento de la administración en general.
Según el art. 99, inc. 2, de nuestra Constitución nacional, es atribución
del presidente de la Nación expedir las instrucciones y reglamentos que sean
necesarios para la ejecución de las leyes de la Nación, cuidando de no alterar
su espíritu con excepciones reglamentarias.
En derecho financiero, y especialmente en derecho tributario, el
reglamento tiene importancia como creador de normas jurídicas. Esto significa
que el reglamento contiene también normas jurídicas aun cuando no emane del
poder legislativo sino del poder ejecutivo. La producción de normas jurídicas no
constituye una facultad exclusiva del poder legislativo, sino tan sólo su facultad
normal (conf. Giannini, p. 16). Incluso suele suceder que determinadas leyes
impositivas condicionen su vigencia a la reglamentación del poder ejecutivo.
Como hemos dicho, la facultad corresponde originariamente al poder
ejecutivo, o sea, al presidente de la Nación, pero puede delegarse a órganos
especializados ante problemas técnicos complejas. Vemos así que según la ley
11.683, la Dirección General Impositiva está facultada para impartir normas
generales obligatorias e interpretar con carácter general las disposiciones
legales (art. 8). La Dirección Nacional de Aduanas está facultada para
reglamentar los servicios de recaudación. Los códigos tributarios provinciales
conceden a los respectivos organismos impositivos facultades semejantes a las
concedidas en el orden nacional a la Dirección General Impositiva.
Debe destacarse, sin embargo, que las circulares o instrucciones de
estos organismos fiscales carecen de valor jurídico creador, y teóricamente no
pueden obligar a los contribuyentes. Sostenemos, por lo tanto, la ilegalidad de
tales circulares en cuanto establecen obligaciones específicas.
Concordantemente con esta posición, Giuliani Fonrouge dice que tales
circulares son sólo disposiciones internas con efectos en el orden jerárquico de
la administración, sin carácter obligatorio para los particulares. Agrega este
autor que si las normas contenidas en las instrucciones se apartaran, como
suele acaecer, de la ley, resultarían viciadas de ilegalidad y no deberían
aplicarse, aun resultando favorables a los contribuyentes.
E) Los tratados internacionales. - En virtud del creciente auge del derecho
tributario internacional, los tratados internacionales han adquirido extraordinaria
importancia. Los problemas de la doble imposición internacional pueden ser
solucionados únicamente mediante convenciones entre los países.
Se discute si los tratados internacionales son fuente directa o indirecta
del derecho financiero. Se dice que constituyen una fuente indirecta porque su
validez depende de una ley nacional aprobatoria.

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Sin embargo, debe tenerse en cuenta la categórica disposición del art. 31 de la
Constitución nacional, que dice en su primera parte: "Esta Constitución, las
leyes de la Nación que en su consecuencia se dicten por el Congreso y los
tratados con las potencias extranjeras son la ley suprema de la Nación...”.
Conforme a esta clara disposición, no puede caber duda alguna de que las
convenciones con países extranjeros constituyen fuente directa del derecho
financiero.
F) Otras fuentes. - También suele considerarse fuentes del derecho financiero
los acuerdos o convenciones internas que se celebran en los países de
organización federal entre las diversas entidades con poder financiero. Ello
sucede específicamente en materia tributaria, y en nuestro país podemos citar
especialmente los convenios multilaterales de actividades lucrativas (hoy,
impuesto a los ingresos brutos) y las leyes de coparticipación.
Algunos autores mencionan también otras fuentes del derecho
financiero: la doctrina, la jurisprudencia, los usos y costumbres y los principios
generales del derecho. La utilización de estas fuentes choca, sin embargo, con
el principio de legalidad, en materia tributaria.

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1) a) Derecho Tributario

El derecho tributario, en sentido lato, es el conjunto de normas jurídicas


que se refieren a los tributos, regulándolos en sus distintos aspectos.
La terminología no es uniforme respecto a esta rama jurídica. Hace notar
Giuliani Fonrouge que en tanto la doctrina italiana, española y brasileña usan la
denominación "derecho tributario”, los alemanes prefieren la expresión
"derecho impositivo", mientras que los franceses se refieren al "derecho fiscal",
que es la expresión más generalizada entre nosotros. Agrega el autor
mencionado que probablemente la denominación más correcta es la de
"derecho tributario", por su carácter genérico, pero que no encuentra
inconveniente en continuar utilizando el término "derecho fiscal" por estar en
nuestras costumbres. Aparte de ello, la expresión "derecho fiscal" ha adquirido
resonancia internacional por corresponder al nombre de la disciplina en el
derecho anglosajón y a la denominación de una prestigiosa institución: la
International Fiscal Association (IFA).
En América Latina predomina la expresión "derecho tributario", y la
principal entidad especializada se denomina "Instituto Latinoamericano de
Derecho Tributario". Sin embargo, la más importante entidad nacional de la
especialidad tiene el nombre de "Asociación Argentina de Estudios Fiscales".
No cabe duda de que el término "tributario" es más exacto que el término
"fiscal", porque esta última palabra puede interpretarse que se refiere al "fisco"
como entidad patrimonial del Estado. En tal sentido, la actuación del "fisco" no
se refiere sólo a la actuación estatal con respecto a los recursos tributarios,
sino también en relación a los restantes recursos del Estado.
Sin embargo, y dado que el uso común y la costumbre mantienen tal
nombre, debe concluirse en que las expresiones "derecho fiscal" y "derecho
tributario” pueden utilizarse con análogo significado.
Contemplado el contenido del derecho tributario en general y en forma
panorámica, observamos que comprende dos grandes partes: una primera
parte, o parte general, donde están comprendidas las normas aplicables a
todos y cada uno de los tributos, y una parte especial que contiene las
disposiciones específicas sobre los distintos gravámenes que integran un
sistema tributario.
La parte general es la parte teóricamente más importante, porque en ella
están contenidos aquellos principios de los cuales no se puede prescindir en
los Estados de derecho para lograr que la coacción que significa el tributo esté
regulada en forma tal que imposibilite la arbitrariedad. Para ello se consagran
los principios aplicables en las relaciones entre Estado y particulares,
armonizando la necesidad de eficacia funcional de los órganos fiscales con las
garantías individuales de los contribuyentes. Esa armonización constituye la
parte básica de la materia. Se busca, al igual que en las otras ramas del
derecho público, el equilibrio razonable entre el individuo y el Estado.
La parte especial, en cambio, contiene las normas específicas y
peculiares de cada uno de los distintos tributos que integran los sistemas
tributarios. Previo a este estudio suele hacerse consideraciones sobre "sistema
tributario", es decir, sobre el conjunto de tributos en determinado país y en un
momento dado, tomado ese conjunto como un todo.
La codificación del derecho tributario toma muy especialmente en cuenta
esta distinción entre la parte general y la parte especial del derecho tributario.

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Uno de los métodos de codificación consiste en limitar los ordenamientos a la
parte general,
Siguen esa modalidad, entre otros, los códigos tributarios de Alemania,
Méjico, Chile, España, Uruguay, Venezuela, etc., siendo la adoptada por el
Modelo de Código Tributario para América Latina OEA/BID.
Por el contrario, hay codificaciones que no sólo contienen los principios
generales sino también la parte especial, es decir, las disposiciones específicas
sobre los tributos en particular.
Así, el Código Tributario Nacional del Brasil (ley 5172), el Internal Revenue
Code de Estados Unidos, el Code General des Impóts de Francia. En nuestro
país se adhieren a este último sistema algunos códigos tributarios provinciales
(por ejemplo: el Código Tributario de Córdoba; etc.).

b) División

En el centro del derecho tributario está la relación jurídica tributaria


principal (obligación tributaria sustancial) distinguible de las restantes
relaciones jurídicas por su objeto, el tributo.
Si tomamos el tributo como núcleo de análisis, encontramos en el
derecho objetivo, múltiples y variadas normas jurídicas pertenecientes a
distintos sectores (al derecho constitucional, administrativo, penal, procesal,
internacional), que sin embargo, presentan en común el hecho de estar
referidas al tributo.
Esto significa que adoptando una concepción lata del derecho tributario
(que puede observarse no sólo en el campo docente sino también legislativo y
jurisdiccional), tenemos que comprender en su ámbito todas esas normas
reguladoras no sólo de la relación jurídico tributaria principal, sino de otras
relaciones jurídicas que de alguna manera se vinculan a ella ( delimitación
constitucional de la potestad tributaria, regulación de infracciones, de
controversias, de conexiones internacionales, de actividades administrativas
fiscalizadoras e investigatorias, etc. ) .
Esto da lugar a las divisiones del derecho tributario. Tales divisiones,
sobre las cuales no han faltado críticas do excesiva "fragmentación",
parecerían negar la existencia del derecho tributario como sector singularizado
del conocimiento jurídico, puesto que aparecen en su seno normas que en
realidad siguen perteneciendo a otros sectores jurídicos.
Pero la razón del estudio conjunto del derecho tributario en sentido lato
obedece a la misma razón que a la aceptación del estudio unitario del derecho
Financiero. Se trata de una autonomía didáctica basada en objetos comunes y
que se funda en razones prácticas o técnicas de oportunidad y utilidad, máxime
como cuando, por ejemplo, en el caso del derecho procesal tributario, sus
regulaciones van generalmente unidas a los ordenamientos tributarios
generales y son aplicadas por órganos jurisdiccionales tributarios.

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Veamos las mencionadas divisiones de la parte general del derecho
tributario, y lo que cada una de las secciones correspondientes estudia
concretamente:
El derecho tributario material contiene las normas sustanciales relativas en
general a la obligación tributaria. Estudia cómo nace la obligación de pagar
tributos (mediante la configuración del hecho imponible) y cómo se extingue
esa obligación; examina cuáles son sus diferentes elementos: sujetos, objeto,
fuente y causa, así como sus privilegios y garantías.
El derecho tributario formal estudia todo lo concerniente a la aplicación de la
norma material al caso concreto en sus diferentes aspectos: analiza
especialmente la determinación del tributo, pues su objetivo es establecer qué
suma de dinero concreta adeuda cada persona y cómo esa suma llega a
ingresar en las arcas estatales.
El derecho procesal tributario contiene las normas que regulan las
controversias de todo tipo que se plantean entre el fisco y los sujetos pasivos,
ya sea en relación a la existencia misma de la obligación tributaria, a su monto,
a los pasos que debe seguir el fisco para ejecutar forzadamente su crédito,
para aplicar o hacer aplicar sanciones, y a los procedimientos que el sujeto
pasivo debe emplear para reclamar la devolución de las cantidades
indebidamente pagadas al Estado. Cuestiones, todas éstas, que deben ser
resueltas por órganos jurisdiccionales, que en el caso de ser administrativos
(como los tribunales fiscales) deben dejar siempre margen para que sea el
poder judicial quien diga la última palabra sobre lo debatido.
El derecho penal tributario regula jurídicamente lo concerniente a las
infracciones fiscales y sus sanciones. Como no siempre el obligado actúa
conforme a la ley, corresponde el análisis de las normas aplicables en caso de
violaciones a las disposiciones tributarias, así como también las penalidades
aplicables a los trasgresores.
El derecho internacional tributario estudia las normas que corresponde
aplicar en los casos en que diversas soberanías entran en contacto, ya sea
para evitar problemas de doble imposición, coordinar métodos que eviten la
evasión y organizar, mediante la tributación, formas de colaboración de los
países desarrollados a aquellos que están en proceso de desarrollo.
El derecho constitucional tributario, estudia las normas fundamentales que
disciplinan el ejercicio de la potestad tributaria y que se encuentran en las
cartas constitucionales de aquellos países en que éstas existen. También se
ocupa de la delimitación y coordinación de potestades tributarias entre las
distintas esferas de poder en los países con régimen federal de gobierno
(nación o ente central y provincias o Estados).

c)Autonomía
Es legítimo que el derecho tributario adopte conceptos e instituciones del
derecho privado y les dé una acepción diferente de la que tiene en sus ramas
de origen (p.ej.: así sucede en la venta, permuta, locación de obras,

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enajenación inmobiliaria, domicilio, sociedad conyugal, residencia, ausentismo,
etc.).
Pero lo discutible es que de estas realidades intente extraerse una
noción de autonomía científica del derecho tributario. Al respecto, Becker
advierte que por la simple razón de no poder existir regla jurídica independiente
de la totalidad del sistema jurídico, la autonomía ( en el sentido de
independencia relativa ) de cualquier rama del derecho positivo, es siempre y
únicamente didáctica y su utilidad consiste en investigar los efectos jurídicos
resultantes de la incidencia de determinado número de reglas jurídicas,
descubrir la concatenación lógica que las reúne en un grupo orgánico y que
une este grupo a la totalidad del sistema jurídico.
Con fundamentos similares señala Norberto Godoy que prefiere no
utilizar el término "autonomía", puesto que se corre el peligro de propagar la
falsa creencia de que el derecho se halla constituido por partes autosuficientes,
cuando la realidad hace que sea menester tomar en cuenta al derecho de un
determinado Estado, en una visión total de conjunto, a fin de comprender de
mejor manera las instituciones y los conceptos jurídicos que se deba analizar.
También Andreozzi se expide en forma parecida, sosteniendo: "no
empleamos la palabra autonomía porque su uso podría llevarnos a la
consecuencia extrema de dar a esta rama del derecho caracteres de un nuevo
derecho, lo que no es posible, pues un derecho fiscal de semejante
especificidad pretendería fundamentos exclusivamente fiscales, con lo que se
llegaría a lo arbitrario y a una justicia fiscal reñida con la equidad y la
razonabilidad".
El autor últimamente mencionado se manifiesta acorde con la propuesta
de Gény y le parece aceptable que el derecho tributario tenga un
"particularismo" como consecuencia de su especificidad. Agrega que afirmar lo
contrario y sostener una independencia total de cualquier rama del derecho,
significaría lo mismo que aceptar su anarquía, es decir, precisamente lo
contrario de lo que es el derecho.
Por nuestra parte pensamos que puede aceptarse una autonomía
didáctica del derecho tributario. También es aceptable una autonomía funcional
derivada de que constituye un conjunto de reglas jurídicas homogéneas, que
funciona concatenado en un grupo orgánico y singularizado.
El singularismo normativo de este grupo de reglas, le permite tener sus
propios conceptos e instituciones o utilizar los de otras ramas del derecho
asignándoles un significado diferenciado.

d) Aplicación de la Ley Tributaria en el tiempo, La retroactividad fiscal

La determinación del momento a partir del cual son obligatorias las


normas tributarias no ofrece, en principio, mayor problema porque usualmente
cada ley expresa la fecha de su entrada en vigencia. Si tal mención se omite,
es aplicable el art. 2 del Código Civil, en virtud del cual si las leyes no expresan

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tiempo, serán obligatorias después de los ocho días siguientes al de su
publicación oficial.
El problema de la retroactividad de las leyes surge con respecto a las
relaciones jurídicas que nacieron durante la vigencia de una ley y cuyos efectos
se prolongan durante la vigencia de una nueva ley que modifica la anterior (por
ej., se contrata un alquiler por dos años en 1984; ?le son aplicables al contrato
modificaciones legales de 1985?).
El principio general que debe regir estas situaciones es que las leyes
deben regir para el futuro y no retrotraerse al pasado. La forma de asegurar la
certeza jurídica consiste en que los sujetos del derecho sepan que sus actos
cumplidos durante la vigencia de una ley, se rigen por dicha legislación que fue
la tenida en cuenta al planear y realizar esos actos.
En materia tributaria, y atento al principio de unidad del orden jurídico, es
de aplicación el art. 3 del Código Civil, según el cual las leyes se aplicarán
desde su vigencia las consecuencias de las relaciones jurídicas existentes.
Agrega esta disposición que las leyes no tienen efecto retroactivo, sean o no de
orden público, salvo disposición en contrario. Este último párrafo significa el
reconocimiento de que en ciertos casos el legislador puede asignar
retroactividad a algunas leyes, pero seguidamente el mismo art. 3 limita esta
posibilidad legislativa al estipular que esa retroactividad en ningún caso podrá
afectar derechos amparados por garantías constitucionales.
Esta redacción significa la admisión de la teoría de los derechos
adquiridos. En efecto, la remisión que el art. 3 hace a "los derechos amparados
por garantías constitucionales" no puede significar otra cosa que derechos
adquiridos por oposición a moras expectativas. García Belsunce señala al
respecto: "Compartimos el concepto de que la reforma al art. 3 no ha
introducido ninguna variante en cuanto a la limitación a la irretroactividad de las
leyes, porque lo mismo es decir que no se pueden alterar derechos adquiridos
o que deben respetarse los derechos amparados por garantías
constitucionales, en razón de que el derecho adquirido no es sino el respeto a
la inviolabilidad del derecho de propiedad que consagra el art. 17 de la
Constitución nacional.
Trasladada la teoría al ámbito específicamente tributario, entendemos
que el acaecimiento del hecho imponible genera un derecho adquirido en el
contribuyente: el derecho de quedar sometido al régimen fiscal imperante al
momento en que se tuvo por realizado o acaecido ese hecho imponible.
Respecto de este aserto, hay coincidencia doctrinaria general. Es
especialmente valedero el argumento de que el principio de legalidad no se
agota con el concepto de que no puede haber impuesto sin ley, sino también
de que la ley debe ser preexistente, única forma mediante la cual el particular
puede conocer de antemano tanto su obligación de tributar como los elementos
de medición de dicha obligación. Por otra parte, si hay acuerdo en que la
determinación tributaria tiene carácter declarativo, y no constitutivo de la

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obligación, ello es porque ésta nace al producirse el hecho imponible, siendo
este acaecimiento el que marca la ley aplicable.
Ahora bien, el hecho imponible puede ser "de verificación instantánea"
(por ej., ganar un premio en el Prode), y en este caso la aplicación de la ley
tributaria no presenta problemas, ya que dada la instantaneidad ninguna
legislación posterior a la producción de ese hecho puede ser utilizada para
modificar la obligación surgida (p.ej., no sería admisible que una norma
posterior a la fecha de obtención del premio elevara la alícuota.
Si el hecho imponible es de “verificación periódica”, ello significa que ese
hecho imponible es la resultante de un conjunto de actos jurídicos o
económicos que se desarrollan en un período temporal (p.ej., el impuesto a las
ganancias que grava los ingresos que se van produciendo a lo largo del
período).
En este caso, y tal como explicamos más adelante, el legislador tiene
por acaecido el hecho imponible en el último instante del período dentro del
cual se computan los ingresos. De tal manera, si se produce una modificación
legislativa durante el curso del ejercicio, la alteración es válida y no retroactiva,
puesto que el hecho imponible no se tuvo aún por realizado.
Analizando la cuestión desde el punto de vista jurisprudencial, cabe decir
que la Corte Suprema nacional y otros tribunales han reconocido que la
prohibición de retroactividad sólo tiene lugar en lo que respecta a situaciones
de derecho privado, pero no tiene lugar en relación a cuestiones de derecho
público, como son las tributarias.
Sin embargo, la Corte Suprema nacional, al tiempo de admitir que las
leyes tributarias pueden tener efecto retroactivo, trató de atemperar los efectos
perjudiciales que esta posición podía tener en relación a los derechos
adquiridos de los particulares. Dijo entonces la Corte que en materia tributaria
existe un derecho patrimonial garantizado por la Constitución, cuando media un
contrato o una convención especial en virtud de la cual ese derecho está
incorporado al patrimonio del deudor, como en el caso de que el Estado
mediante la intervención de sus funcionarios hubiere aceptado el pago de una
obligación fiscal otorgando el correspondiente recibo ( ver "Fallos", 161-270;
180-16; 209-213; 210-611; 213-34; 218~224-935; 225-703; 227-72; 269-261;
etc. ) .
Es decir que según la posición que nuestro más alto tribunal sostuvo en
numerosos casos, el pago de un tributo surte pleno efecto extintivo que no
permite revivir la obligación, salvo que mediante ocultación o por parte del
contribuyente, en razón de originar una relación de naturaleza contractual entre
fisco y contribuyente que determina el surgimiento de un derecho patrimonial
garantizado por el art. 17 de la Constitución nacional.
Quiere decir, entonces, que según nuestra jurisprudencia nacional, la ley
tributaria no puede ser aplicable retroactivamente cuando media un pago de
por medio. El pago libera al contribuyente y le otorga un derecho adquirido
imposible de ser modificado por una ley posterior.

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En un caso más reciente, la Corte precisó su posición sosteniendo que
nadie tiene derecho adquirido a la inalterabilidad de los gravámenes y de que
no cabe reconocer la existencia de un derecho adquirido por el mero
acaecimiento del hecho imponible. La irretroactividad sólo funciona si el
contribuyente realizó un pago aceptado por el fisco o si fue objeto de dispensas
o rebajas fiscales por tiempo determinado (caso "Moiso", fallo del 24/11/81, en
"Derecho Fiscal", XXXII, 923).
Analizando este fallo, encontramos válido como principio general que
nadie tiene derecho al mantenimiento de cierto régimen a perpetuidad (si, p. ej.,
alguien inicia su actividad sometida a cierto tributo, no tiene derecho a que éste
no se incremente en el futuro), pero siempre y cuando no altere los derechos
que ya adquirió (de que ese incremento no se lleve a los ejercicios pasados).
La segunda afirmación jurisprudencial es reprochable, ya que no puede
negarse, a la luz del más elemental sentido común, que el hecho imponible
acaecido genera un derecho adquirido. Jarach ilustra este punto con el
siguiente ejemplo: "Si efectúo un contrato por el que logro una ganancia de
$50, debo saber que esta ganancia es suficientemente remuneradora de mi
esfuerzo; pero si una vez realizado el acto de la ganancia llega el poder público
y me establece un impuesto que absorbe una parte importante que ya no hace
remuneradora mi actividad, es posible que, si hubiese conocido cuáles eran las
consecuencias de la misma, habría dejado de realizarla. Y no puede ser que el
poder público, por una decisión posterior de cualquier tiempo, invada mi esfera
de propiedad y me haga soportar sacrificios que, tal vez, no habría soportado
voluntariamente si hubiese sabido cuáles eran las consecuencias".
La tesis del pago como límite a la retroactividad es jurídicamente objetable y
tiene alcances muy relativos, ya que según el alto tribunal, el derecho adquirido
sólo se genera mediante la aceptación del pago por el ente recaudador que
debe entregar el correspondiente recibo con efecto cancelatorio. Pero ocurre
que en materia tributaria el pago no es casi nunca cancelatorio por sí solo, ya
que la declaración jurada y el importe cobrado en su consecuencia están
sujetos a verificación administrativa y el fisco está facultado a determinar el
tributo que en definitiva corresponda mientras no esté prescrita la acción ( art.
21, ley 11.683 ) . O sea que el contribuyente no obtiene la "aceptación" de un
pago con efecto liberatorio, sino tan sólo una mera constancia de recepción del
mismo, lo cual significaría su sujeción a cambios legislativos retroactivos al
menos durante el término de la prescripción. Aparte de esto, es inadmisible que
siempre exista la posibilidad de la aplicación retroactiva de nuevas leyes
respecto a quienes no hubieran pagado con anterioridad. Como si esto fuera
poco, existen casos de retroactividad donde toda posibilidad de pago es
imposible sencillamente porque el tributo no existió a la época de suceder el
hecho imponible. Un típico ejemplo de esto es el impuesto sobre los activos
financieros sancionado mediante ley 22.604, que creó con fecha 7/6/82 un
hecho imponible acaecido el 31/12/81. Esto es directamente atentatorio al
derecho de propiedad porque priva retroactivamente a los particulares de una

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porción de utilidad legítimamente obtenida o de un capital legalmente poseído.
Casos similares se dan con las leyes 22.752, que gravó los intereses y ajustes
de los depósitos a plazo fijo, y 22.915, que impuso un adicional de emergencia
al impuesto a las ganancias.
Semejantes engendros legislativos demuestran los peligros de la
doctrina de la Corte, que en definitiva ha trastrocado las cosas aprobando la
retroactividad de las leyes impositivas, como la conducta normal del legislador
tributario, siendo que debería ser exactamente a la inversa. Parece haberse
olvidado que el principio general del derecho es que las leyes rijan para el
futuro, lo cual no es nada novedoso si se tiene en cuenta que ya los romanos
decían: "leges et constituciones futuris certum est dara forman negotüs, nou ad
facta praeterita revocari" (las leyes y los edictos dan forma a los negocios
futuros, pero no se retrotraen a los hechos pretéritos).

a) Aplicación de la Ley Tributaria en el espacio


Conforme al principio de soberanía, cada Estado tiene amplias facultades para
gravar todas las situaciones imponibles situadas bajo su poder de imperio, lo
cual implica, en primer lugar, que, el poder de imposición se ejerce dentro de
los límites territoriales sometidos a la soberanía del Estado. El art. 11 del
Modelo de Código Tributario para América Latina dispone lo siguiente: "Las
normas tributarias tienen vigencia en el ámbito espacial sometido a la potestad
del órgano competente para crearlas".
Eventualmente, este principio puede ser modificado o atemperado
mediante convenios tendientes a evitar la doble imposición, y en sentido
inverso puede suceder que en virtud del principio de soberanía, el Estado grave
a sus nacionales, residentes o domiciliados, por las riquezas obtenidas fuera
del territorio del país (sobre el tema puede verse Alessi, p. 25; De la Garza, p.
329; Aftalión, p. 507, y bibliografía citada en el punto anterior).

b) Interpretación de las normas tributarias

INTERPRETACIÓN. NOCIÓN GENERAL. - Interpretar una ley es


descubrir su sentido y alcance. A1 intérprete corresponde determinar qué quiso
decir la norma y en qué caso es aplicable. Para ello, se ha preconizado la
utilización de métodos diversos. Dice al respecto Giuliani Fonrouge que la
continua búsqueda de métodos de interpretación más flexibles, es la eterna
lucha por la justiciacomo suprema aspiración del derecho. Nunca se ha podido
elegir un solo método como correcto repudiando a los demás, ya que ninguno
tiene validez universal, pero cada uno de ellos ofrece elementos de interés
parcial.
De esto se desprende que el intérprete puede y debe utilizar todos los
métodos a su alcance: debe examinar la letra de la ley, necesita analizar cuál
ha sido la intención del legislador, y tiene que adecuar ese pensamiento a la
realidad circundante; debe coordinar la norma con todo el sistema jurídico, así

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como contemplar la calidad económica que se ha querido reglar y la finalidad
perseguida.
En concordanciacon este criterio, el art. 5 del Modelo de Código Tributario para
América Latina dice que "las normas tributarias se interpretarán con arreglo a
todos los métodos admitidos en derecho, pudiéndose llegar a resultados
restrictivos o extensivos de los términos contenidos en aquéllas. La disposición
precedente es también aplicable a las exenciones". En la respectiva exposición
de motivos se explica que esta disposición responde al principio admitido en
nuestra época de que las leyes tributarias son normales y equiparables, desde
el punto de vista de la interpretación, a todas las normas jurídicas. Sin
embargo, las ya vistas peculiaridades del derecho tributario merecen algún
especial análisis en cuanto a interpretación. En efecto, los hechos elegidos
como imponibles son hechos de sustanciaeconómica, cuya selección se debe a
su idoneidad abstracta para revelar “capacidad contributiva”. Pero sucede que
a veces las palabras utilizadas no se ajustan, en el significado que se quiso
darles, con el que se tiene en el uso común. Determinar en tales casos "el
sentido y alcance" de las palabras que utilizó la ley, es quizá la parte más
dificultosa en la tarea del intérprete. Claro está que lo afirmado no puede llevar
a la errónea tesis de que para interpretar el derecho tributario debe recurrirse a
los criterios de la cienciade las finanzas (posición de Buhler). A1 contrario, y
como afirma Giannini, cualquiera que sea la corriente doctrinal en que se
inspiren los principios rectores de interpretación de leyes tributarias, y
cualesquiera que sean los medios utilizados en los casos particulares para
penetrar el pensamiento legislativo, es lo cierto que este complejo y delicado
trabajo de interpretación, debe llevarse a cabo con los criterios propios de la
lógica jurídica.
Haremos un ligero análisis de los principales métodos de interpretación
dentro del campo de la cienciajurídica.
MÉTODO LITERAL. - Se limita este método a declarar el alcance manifiesto e
indubitable que surge de las palabras empleadas en la ley, sin restringir ni
ampliar su alcance. Los términos legales son analizados mediante el estudio
gramatical, etimológico, de sinonimia, etc. (ver Aftalión, Introducción..., p. 464).
Los fines de este método consisten en asegurar los derechos de los
particulares y respetar la seguridad jurídica. Filosóficamente, significa aplicar
rígidamente las ideas racionalistas: si el derecho se resume en la ley, conocer
la ley es conocer el derecho.
Por ello Montesquieu decía que los jueces eran sólo la boca que
pronunciaba las palabras de la ley.
Los especialistas de la materia tributariacoinciden en señalar que este método
usado en forma exclusiva es insuficiente y según. Griziotti puede llevar a
conclusiones erróneas, porque el legislador no es siempre un técnico en
derecho tributario y, por tanto, puede suceder que la terminología empleada no
sea la adecuada a la realidad que se quiso legislar.

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MÉTODO LÓGICO. Este sistema interpretativo quiere llegar a resolver el
interrogante de qué quiso decir la ley. Quiere saber cuál es el espíritu de la
norma o su ratio legis. Según Savigny, la ley forma parte de un conjunto
armónico, por lo cual no puede ser analizada en sí misma, sino relaciona a con
las disposiciones que forman toda la legislación de un país. La Corte Suprema
nacional ha establecido mediante reiterada jurisprudencia, que las normas
tributarias deben ser entendidas computando la totalidad de los preceptos que
las integran, en forma tal que el propósito de la ley se cumpla conforme a una
razonable interpretación ("Fallos", 259391; 280-18; 295755).
El intérprete, además, debe actuar en concordanciacon los principios
constitucionales. Vale decir que según este método, la interpretación no se
limita a las palabras de la ley ni al pensamiento del legislador. La interpretación
lógica puede ser extensiva si se da a la norma un sentido más amplio del que
surge de sus palabras. Se entiende en este caso que el legislador ha querido
decir más de lo que dice la ley; puede ser también restrictiva cuando se da a la
norma un sentido menos amplio del que fluye de sus propios términos,
entendiéndose que el legislador dijo más de lo que en realidad quiso decir.
MÉTODO HISTÓRICO. - Sus sostenedores dicen que la tarea del intérprete es
desentrañar el pensamiento del legislador ya que conocer la ley no es otra cosa
que conocer la intención de quien la dictó. Para ello se debe valer de todas las
circunstancias que rodearon el momento de sanción de la ley (ocatio legis). Se
utilizan, por ejemplo, como instrumento de interpretación el mensaje del poder
ejecutivo que eleva la ley al congreso, la discusión en comisiones por parte del
poder legislativo, los correspondientes debates parlamentarios, los artículos de
la época aparecidos en la prensa, las opiniones doctrinales, etc.
Este método identifica la voluntad de la ley con la voluntad del legislador.
Sin embargo, este sistema es objeto de crítica en materiafiscal. Se dice que la
fiscalidad se caracteriza por su movilidad, y no se puede interpretar las
cláusulas impositivas según el pensamiento del legislador cuando la ciencia
tributariaestá en constante evolución.
MÉTODO EVOLUTIVO. - El problema que se plantea esta corriente es el de
enfrentar unanueva necesidad de la vida social con reglas jurídicas nacidas con
anterioridad a las condiciones sociales económicas, políticas y éticas que
determinan la nueva necesidad. Ante la nueva realidad, debe investigarse -
según los propugnadores de este método- cuál hubiera sido la voluntad del
legislador y qué solución habría dado.
Este método surge como reacción contra los métodos tradicionales.
Decía Saleilles que "la ley es base y fuente de todo sistema jurídico, pero debe
adaptarse a las nuevas exigencias determinadas por la evolución social".
Partiendo de esta idea, Saleilles confiere a los textos vida propia e
independiente de la voluntad del legislador, de la cual se desligan una vez
promulgados.
Autores como Recasens Siches, Gény, Radbruch y otros, propugnan
este método y atacan el histórico, que "en el fondo no hace sino paralizar la

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vida". La ley se desliga del legislador, y es el intérprete quien la revive dándole
un sentido y alcance que muchas veces no fue previsto por el mismo legislador.
En materia tributaria, el principio de legalidad es una valla para este método.
No se puede, por ejemplo, por vía de una interpretación evolutiva de la ley,
modificar la integración del hecho imponible.

c) Interpretaciónsegún la RealidadEconómica.

a) Origen. El enfoque económico en la interpretación de las leyes


impositivas apareció por primera vez en Alemaniaen 1919 con el
"Ordenamiento Tributario del Reich". Fue una reacción ante la situación hasta
entonces imperante: los tribunales fiscales se veían impedidos de aplicar en la
forma correspondiente los gravámenes, ya que la base de la imposición estaba
prefijada por elementos de derecho civil. Bajo la inspiración de Enno Becker se
incluyó la fórmula del art. 4 del Ordenamiento: "En la interpretación de las leyes
tributarias debe tenerse en cuenta su finalidad, su significado económico y el
desarrollo de las circunstancias". El criterio de interpretación surge, entonces,
como la combinación de los tres factores citados: 1) el fin u objeto de la ley; 2)
la significación económica de ella; 3) los hechos tal como han sucedido
realmente.
Tuvo acogida en Alemania, Francia, Itallay Suiza, entre otros países, y
en el nuestro comenzó a tener vigencialegal con las modificaciones que en
1947 se efectuaron a la ley 11.683, así como con el Código Fiscal de Buenos
Aires (1948), inspirado en Jarach, y al cual siguieron en sus lineamientos
principales los restantes códigos tributarios provinciales.
b) Fundamento. La interpretación según la realidad económica se basa
en que el criterio para distribuir la carga tributariasurge de una valoración
política de la capacidad contributiva que el legislador efectuó teniendo en
cuenta precisamente la realidad económica. Siendo ello así, sólo se logrará
descubrir el verdadero "sentido y alcance" de la ley, recurriendo a esa misma
realidad económica que se quiso aprehender en el momento genésico del
tributo.
El tributo, en efecto, se funda en la capacidad contributiva, y ésta es una
apreciación político-social de la riqueza del contribuyente. Para efectuar esa
apreciación, el legislador tiene en cuenta la forma en que objetivamente esa
riqueza se exterioriza (mi adquisición de una mansión fastuosa será un hecho
exteriorizante, por ejemplo, de potencialidad económica y, por lo tanto, de
capacidad contributiva), y por ello la interpretación de normas que establezcan
obligaciones tributarias y definan hechos imponibles, forzosamente deberá
tener en cuenta esos elementos objetivos de la riqueza que son económicos.
Pero lo dicho no debe llevar a confundir las cosas. La tarea de
interpretación de normas jurídicas es siempre tarea jurídica. El procedimiento
en estudio no es un "método económico" de interpretación con el sentido de
que las reglas interpretativas dimanen de la economía. Esta cienciano se ocupa

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de desentrañar el significado de la ley y no puede contener reglas o principios
sobre el punto.
c) Funcionamiento. Veamos cómo funciona la interpretación según la
realidad económica: cuando los hechos imponibles se vinculan con actos
jurídicos de carácter negocial o negocios jurídicos, existen circunstancias
originadas en la voluntad creadora de los propios particulares. En derecho no
está prohibido que las partes elijan, dentro de ciertos límites (demarcados por
el orden público; ejemplo: plazo de las locaciones), el tratamiento jurídico a que
quieren someter sus operaciones. Muchas veces existe la posibilidad de elegir
diferentes operaciones jurídicas para alcanzar fines económicos
sustancialmente idénticos. Por ejemplo, una realidad económica consistente en
la explotación de un campo a porcentaje puede asumir la forma jurídica de una
aparcería rural o la de una sociedad.
Es que cuando en general se realiza un acto jurídico o una negociación,
puede distinguirse la intención empírica (intentio facti) y la intención jurídica
(intentio juris).
La intención empírica es aquella que se encamina a obtener el resultado
económico para cuyo fin el acto se realiza.
La intención jurídica es aquella que se dirige a alcanzar; mediante el
acto o negocio, determinados efectos jurídicos, para lo cual se encuadra ese
acto o negocio dentro de un determinado molde o figura del derecho.
En el ejemplo señalado (explotación de un campo a porcentaje), la
intención empírica, el resultado económico buscado es que el aparcero explote
el campo del dador con distribución proporcional de utilidades o productos de la
explotación. La intención jurídica en cambio, es aquella que se encamina a que
el acto produzca determinados efectos jurídicos deseados. Para ello, las partes
adoptarán la forma (aparcería, sociedad, etc.) mediante la cual sientan sus
derechos más protegidos, o mediante la cual les sea más fácil exigir el
cumplimiento a la otra, o mediante la cual paguen menos tributos.
Es aquí donde entra en funcionamiento la interpretación según la
realidad económica. El derecho tributario se interesa de la operación
económica que hacen las partes, sin reconocer eficaciacreadora de efectos
jurídicos tributarios a la voluntad individual si las partes han distorsionado la
realidad de la operación mediante una forma jurídica inapropiada que se busca
al solo efecto de defraudar al fisco.
Mediante la aplicación de este criterio, los jueces tienen entonces la
herramienta necesariapara apartarse del formalismo conceptual en los casos
de evasiones fraudulentas y prescindiendo de las formas o apariencias
jurídicas engañosas, aplicar la legislación fiscal según la realidad de los hechos
económicos, sin necesidad de demostrar la nulidad del acto jurídico aparente o
su simulación. El tema de la "interpretación económica" ha sido muy tratado (y
controvertido) por la doctrina.
d) Legislación. La ley 11.683 establece, en el art. 12, que se tendrán en
cuenta los actos, situaciones o relaciones que efectivamente realicen, persigan

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o establezcan los contribuyentes, prescindiendo de las formas o estructuras
jurídicamente inadecuadas.
Análogas disposiciones tienen los códigos tributarios provinciales
(Código Tributario de Córdoba, art. 4; Código Fiscal de Buenos Aires, art. 7.
Este último ordenamiento expresa: "Para determinar la verdadera naturaleza de
los hechos imponibles se atenderá a los actos o situaciones efectivamente
realizados, con prescindenciade las formas o de los contratos del derecho
privado en que se exteriorizan, mientras que el código de Córdoba agrega en
forma categórica: "La elección por los contribuyentes de formas o estructuras
jurídicas manifiestamente inadecuadas es irrelevante a los fines de la
aplicación del tributo").
Por su parte, el Modelo de Código Tributario para América Latina dice en
su art. 8: "Cuando la norma relativa al hecho generador se refiera a situaciones
definidas por otras ramas jurídicas sin remitirse ni apartarse expresamente de
ellas, el intérprete puedo asignarle el significado que más se adapte a la
realidad considerada por la ley al crear el tributo. Las formas jurídicas
adoptadas por los contribuyentes no obligan al intérprete, quien podrá atribuir a
las situaciones y actos ocurridos una significación acorde con los hechos,
cuando de la ley tributariasurja que el hecho generador fue definido atendiendo
a la realidad y no a la forma jurídica. Cuando las formas jurídicas sean
manifiestamente inapropiadas a la realidad de los hechos gravados, y ello se
traduzca en una disminución de la cuantía de las obligaciones, la ley
tributariase aplicará prescindiendo de tales formas".
La interpretación que se basa en la realidad económica es aceptada
legislativamente en casi todos los países y proporciona a los intérpretes un
medio adecuado para la aplicación de las normas fiscales cuando se pretende
soslayarlas mediante fraude. Ello no significa que no encierre ciertos peligros
para la seguridad jurídica por lo cual requiere un cuidadoso manejo para que
manos inexpertas o con designios preconcebidos no conviertan la utilización
del método en abusivo.
e) Límites de aplicación. Debe también tenerse en cuenta que como bien
hace notar el Modelo de Código Tributario para América Latina, el
procedimiento sólo tiene aplicación en aquellos tributos cuyo hecho imponible
haya sido definido atendiendo a la realidad económica ( por ejemplo, el
impuesto a las ganancias), pero no la tiene en los tributos cuyo hecho
generador se definió atendiendo a la forma jurídica (por ejemplo, los impuestos
de sellos que gravan la "instrumentación", prescindiendo del contenido de los
actos comprendidos. en el instrumento). En estos casos en que el legislador
hace expresa renunciaa atenerse al principio de la realidad económica, no
parece correcto aferrarse a dicho principio, como alguna vez ha hecho la
jurisprudencia(p.ej.: en el caso "Perco", resolución de la S.C. de Bs. As.
publicada en "El Derecho", n° 3471).

13
Por último y para que la utilización de la interpretación según la realidad
económica sea realmente de estricta justicia, debe aplicarse aunque salga
perjudicado el propio fisco (conf. Jarach, El hecho imponible, p. 127).
f) Jurisprudencia. La jurisprudencianacional ha utilizado esta modalidad
interpretativa en casos en que los contribuyentes exteriorizaron dolosamente su
propósito efectivo (voluntad empírica) con apariencias formales distintas de las
apropiadas. Por ejemplo, aquellos que encubren una donación bajo el aspecto
de una compraventa, o disimulan un arrendamiento mediante un contrato de
sociedad, o entregan utilidades de capital con la aparienciade retribución de
servicios (ver un interesante caso de estas características en revista
"Impuestos", 1970, p. 599), documentan el pago de remuneraciones a
dependientes como si fuesen honorarios de no dependientes, etc. En estos
casos, y en otros similares, la jurisprudenciase apartó de las apariencias y
determinó la obligación fiscal según la realidad ocultada, sin necesidad de
demostrar la nulidad de los actos o accionar por vía de simulación.
g) Conclusión. Para finalizar el tratamiento de tan delicado asunto,
consignamos nuestra opinión en el sentido de que: 1) el criterio de
interpretación de las normas jurídicas tributarias según la realidad económica
ha sido acogido en fórmulas diversas, pero con similar significado, por la
legislación positiva argentina y de muchos países; 2) no tiene la entidad de
"método interpretativo" tal como a éstos entiende la cienciajurídica, sino que es
un instrumento legal que faculta a investigar los hechos reales (es decir,
labúsqueda de la intentio facti de las partes) (conf. Del Busto Quiñones,
Teoría..., p. 55); 3) su uso está justificado en derecho tributario, porque facilita
la lucha contra la evasión fraudulenta por abuso en las formas jurídicas.

2) a) Codificación

La tendencia hacia la codificación del derecho tributario es una realidad


demostrada por la enumeración de países que a continuación efectuaremos,
muchos de los cuales han seguido los lineamientos del modelo de código
tributario preparado por OEA/BID; el nuestro es de aquellos que se mantienen
a la zaga de esta corriente que bien puede calificarse de mundial; al respecto
nos referimos al ámbito del gobierno nacional, ya que todas las provincias
argentinas han sancionado sus códigos que rigen en el orden local.

b) ARGENTINA. Los antecedentes argentinos en materia de


codificación tributaria.
Como integrante del Seminario de Ciencias Jurídicas y Sociales de la
Facultad de Derecho de Buenos Aires, nos correspondió preparar el primer
anteproyecto de código fiscal, incorporando los principios específicos del
derecho financiero en sus aspectos sustancial y formal - inclusive en materia
penal fiscal -, y propiciando la creación de un tribunal especializado integrado
en el Poder Judicial, que pondría en acción un procedimiento más eficaz que el

14
tradicional heredado de la Colonia. Ofrecimos la fundamentación de cada
norma, proporcionando los antecedentes doctrinales y legislativos disponibles
en nuestro país en aquella época, con el propósito de propender al
conocimiento de la rama del derecho y mejorar nuestra organización fiscal.
En 1943 se conoció el resultado de la labor desarrollada por una
Comisión honoraria designada por el Poder Ejecutivo (decreto 90.074/41),
restringida al aspecto procesal y cuyas conclusiones fueron objeto de críticas.
Posteriormente, por decreto 1232/63, el Poder Ejecutivo nacional nos
confió la misión de preparar un proyecto de código tributario, que fue remitido a
consideración de las autoridades el 20 de julio de 1964, luego de esperar
infructuosamente el pronunciamiento de una comisión asesora designada en
aquel decreto.
El proyecto se limita a los principios generales de la tributación y al
régimen del contencioso, aplicable a todos los gravámenes federales,
incluyendo la materia aduanera y las contribuciones especiales. Consta de
doscientos cincuenta y un artículos distribuidos en seis títulos, v entre diversas
innovaciones puede señalarse la adopción de conceptos propios en materia de
infracciones y sanciones, para evitar la sujeción al código penal, y legisla en
materia de contrabando y de otras infracciones nuevas; en materia procesal
consolida al Tribunal Fiscal de la Nación como órgano independiente de la
administración activa, otorgándole facultades destinadas a convertirlo en un
verdadero tribunal de justicia y disciplinando el proceso - administrativo y
judicial - con miras a la protección de los derechos individuales sin desmedro
de los estatales y, por cierto, que mantiene la eliminación del solve et repete,
como ya lo estableció la reforma de 1960.
c) Estado Actual

Sin embargo, la situación continúa como antes, con remiendos de la ley


11.683, que siguen creando problemas interpretativos por su falta de
coordinación, aparte de la subsistencia de disposiciones en leyes especiales,
con el agravante de que sus disposiciones desde el año 1993 resultan en parte
de aplicación al régimen de contribuciones y aportes de la seguridad social.
Debemos confiar que algún día se logre el texto orgánico, ya que no es
cuestión de aglutinar normas dispersas, sino de elaborar un sistema de
principios generales, como lo concebía Vanoni para la codificación en Italia. En
1981 fue sancionado un código aduanero que, como su título lo indica, está
limitado a esa materia. Constituye un esfuerzo ponderable que ha puesto fin a
la "inextricable selva jurídica" que dificultaba la comprensión de la ley, pero
mucho tememos que no responda a las verdaderas exigencias de una
codificación y se limite a una recopilación de normas.

d) Códigos Fiscales Provinciales

15
0
1) a) El Gasto Público. Concepto

El Gasto Publico es el empleo de riqueza realizado por la autoridad


competente de Estado, en virtud de una autorización legal previa, destinado a
la satisfacción de necesidades públicas y, en términos generales, a la atención
del interés público. (José M. Martin)

Son gastos públicos las erogaciones, generalmente dinerarias, que


realiza el Estado en virtud de ley para cumplir con sus fines consistentes en la
satisfacción de necesidades públicas. (Villegas)

El gasto publico consiste en la erogación que el estado efectúa para


adquirir bienes intermedios y factores de la producción, a fin de combinarlos –
adecuadamente- para la producción de bienes y servicios públicos o para
adquirir directamente bienes en el mercado destinados a asumir la función de
bienes públicos, sin necesidad de transformación por el estado. (Dino Jarach)

Mediante el gasto público el estado se moviliza para atender a las


necesidades de la población por medio de los servicios públicos, cuyo destino
es la cobertura tanto de las necesidades públicas absolutas, como las
concernientes al progreso y bienestar. Pero también el estado puede satisfacer
dichas necesidades con prescindencia de los servicios públicos y utilizando los
efectos que en sí mismos los gastos públicos provocan en la economía
nacional, atento a su importancia cuantitativa y cualitativa (por ej. Un
incremento en la cuantía del gasto público puede obrar como reactivador de la
economía en recesión con prescindencia del gasto.).

El concepto está ligado al de necesidad pública. En efecto es el


presupuesto de legitimidad del gasto público. Esto significa que la decisión
sobre el gasto supone dos valoraciones:

a) La selección de la necesidad que la colectividad considere pública.

b) La comparación entre la intensidad y urgencia de tales necesidades.

Los gastos públicos son en cierta medida la indicación más segura de la


actividad que despliega cada pueblo

b) Características esenciales

La primera característica del gasto público consiste en un empleo de


riqueza, es decir, en dar destino, aplicación o utilización a bienes.Erogaciones
generalmente dinerarias; dichos bienes son valuables pecuniariamente y en la
actualidad se identifican con el dinero, pudiendo no ser así, tal el caso de las

1
erogaciones en especie (Por Ejemplo: viviendas para funcionarios, bonos en
concepto de pago para proveedores etc.).
En segundo lugar se caracteriza y distingue por constituir un empleo de
riqueza realizada por el Estado (Efectuadas por el Estado),o sea, el ente
público que representa, en su más amplia acepción, a la sociedad
jurídicamente organizada, es decir, los realizados no solo por el Estado
nacional, sino también por las provincias y los municipios; toda suma que sale
del tesoro público, puede ser de la administración central o entidades
descentralizadas pero siempre deben incidir sobre las finanzas del estado.
La tercera característica reside en la circunstancia que este depende de
una autorización legal (En virtud de ley). Este requisito pone de manifiesto el
elemento de juricidad que distingue a todas las gestiones del Estado, es de
carácter esencial para el concepto de erogación pública. Pues el desembolso
pecuniario o la inversión dispuesta por el administrador público sin autorización
legal previa, o realizada con fines distintos de los previstos por las normas
legales, aun cuando satisfaga necesidades públicas no constituye un gasto
público. Además, si se dan las pertinentes circunstancias, puede implicar la
figura delictiva de la malversación de caudales públicos contemplada en los
arts. 260 y ss. De nuestro Código Penal.
Finalmente, el cuarto rasgo propio de los gastos públicos consiste en
que estos tienen como finalidad la satisfacción de necesidades públicas, o en
otras palabras, para cumplir sus fines consistentes en la satisfacción de las
necesidades públicas, se refiere a la legitimidad del gasto antes que a su
esencia. Debe ser congruente con el interés público asignado por el Estado.

c) Evolución del concepto de Gasto Publico

Para el movimiento del Liberalismo político y económico que se impuso


hacia fines del siglo XVIII, y por obra de su armazón intelectual, logró hacer
respetar sus postulados. Hasta mediados de la década de 1930, la actividad
financiera del Estado debía limitarse a la satisfacción de las necesidades
públicas primarias. En consecuencia, la concepción sobre los gastos públicos,
aunque no fue expresa sino implícita en el conjunto de la exposición, los
concebía neutros, es decir, como factores que no debían alterar, interrumpir o
modificar de manera alguna los mecanismos naturales considerados como
únicos rectores de la actividad económica.
Pero los acontecimientos económicos y políticos que caracterizaron el
siglo pasado cambiaron radicalmente el carácter de las funciones del Estado.
Esos acontecimientos dieron entonces origen, en especial en el New deal
estadounidense, a una serie de investigaciones teóricas y, paralelamente, a la
aplicación de nuevas técnicas, reglas y procedimientos que culminaron con una
formidable expansión de la actividad financiera del estado. Se abogó por la
intervención del estado en todos los campos de la vida nacional. Esa
intromisión Estatal sólo pudo materializarse por medio de un notable y
sustancial incremento de los gastos públicos, a los cuales ahora se les adjudica

2
un carácter activo, en contraposición con la neutralidad de los clásicos, es la de
servir de medios de acción del Estado.

d) Efectos Económicos

La actividad financiera del Estado moderno ha dejado de ser neutra con


respecto a la actividad económica y, además, interviene activamente en el
orden social. Por ello el gasto públicoactúa, juntamente con las demás
medidas financieras, como un eficaz instrumento estatal. Permitiéndole, así, al
Estado actuar sobre los ciclos económicos, compensando o contrarrestando las
fluctuaciones de la inversión privada.
Duverger manifiesta que para tales intervenciones el Estado puede
valerse de otros medios, usando asimismo medidas coactivas (control de
precios); actuando más directamente, asumiendo el mismo una actividad
económica (nacionalizaciones). Pero la intervención a través de medidas
financieras es muy empleada porque es una medida menos coaccionadora,
más respetuosa de la libertad de los individuos.

e) Causas de su crecimiento

A partir de la Segunda Guerra Mundial se ha registrado un notable


incremento en el monto global de los gastos públicos de todas las naciones.
Razón por la cual, los especialistas han indagado sobre ello coincidiendo en su
mayoría con Griziotti, quien afirma que entre los motivos de aumento de los
gastos públicos hay que distinguir las causas:
Causas no reales o aparentes :Depreciación del signo monetario. Se
encuentra en destacado y sobresaliente lugar las variaciones en el valor de la
moneda. La devaluación es un fenómeno observable en la generalidad de los
países. Esta depreciación obliga a armonizar las cifras teniéndola en cuenta,
puesto que de lo contrario las conclusiones serán equivocadas. Por ejemplo si
este año he gastado mil millones de pesos y el año pasado gaste quinientos
millones, pero el dinero se ha depreciado en un ciento por ciento, es evidente
que nos hallaremos ante un incremento solo aparente de la erogación puesto
que en definitiva solo habré gastado lo mismo.

Evolución de reglas presupuestarias.Las nuevas técnicas de elaboración


presupuestaria. La adopción de ciertos principios de derecho presupuestarios
ha llevado a modificar las formas de computar las erogaciones, y esto también
puede dar lugar a un incremento aparente del gasto. Si siguiendo el principio
de universalidad se pasa de un presupuesto de cifras netas a un presupuesto
de cifras brutas, o sea, en vez de mostrar montos de gastos a los cuales se les
haya restado previamente los recursos afectados a tal fin, habrá incremento
que solo será aparente, si siguiendo el principio de unidad se reúnen múltiples
presupuestos en uno solo, es evidente que las cifras de ese único presupuesto
serán mayores, pero en este caso ese incremento será solo ficticio.
Causas Relativas:Estas no pueden ser clasificadas estrictamente como
aparentes, tampoco son reales. Son causas que se hallan compensadas en sí

3
mismas. Dentro de esta categoría se mencionan las anexiones de territorio,
aumento de población, de producción y de renta nacional, que por un lado
incrementan los gastos y por el otro los recursos.

Causas reales:Expansión de las Actividades del estado. Gestiones


industriales, comerciales, obra pública.

Aumento de costos. El aumento internacional de costos de bienes y


servicios, además del progreso técnico determina gastos antes desconocidos.

Gastos militares: sin necesidad de guerra, el equipamiento de las


Fuerzas armadas exige sumas que se incrementan por tensiones
internacionales.
Burocracia y presión Política. Son morbosos pero reales, como el
crecimiento desmesurado de la burocracia administrativa y la presión de grupos
o sectores con influencia política que tiende a satisfacer sus intereses
particulares a costa del estado.

2) a) Clasificación. Criterio Económico:

Este criterio permite analizar los gastos en relación a los recursos que
habrán de financiarlos; la importancia de dichos gastos con respecto al
patrimonio estatal; los posibles límites de aquellos y sus efectos sobre la
actividad económica.
Los economistas clásicos no elaboraron una clasificación de los gastos,
por ello y como consecuencia de los principios filosóficos que sustentan su
concepción del Estado, se limitaron a señalar la diferencia entre lo que ellos
denominaron Gastos Ordinarios, que eran aquellos que respondían y tenían su
origen en la actividad normal del Estado (asegurar los derechos individuales,
inalienables e indestructibles, dando satisfacción a las necesidades publicas
primarias). A estos egresos había que realizarlos siempre, repetirlos todos los
años y de allí su denominación de ordinarios. Y gastos Extraordinarios, que
consistían en erogaciones no habituales que se debían realizar pata afrontar
situaciones excepcionales, como la guerra, y también en inversiones
necesarias para las obras y trabajos públicos.
Esa distinción sólo había sido formulada por los clásicos con el propósito
de contemplar la clase recursos con que se debían financiar; los recursos
obtenidos por medio de empréstitos debían ser destinados sólo a la cobertura
de los desembolsos pecuniarios de carácter extraordinario nunca a los gastos
ordinarios, cubiertos con los recursos tributarios.
Los autores contemporáneos, sin embargo, trazaron una línea tajante
entre los gastos por operaciones normales y aquellos que implicaban una
colocación capitalizadora. Surgió así, la clasificación de los gastos públicos en
dos grandes clases:

4
1) Erogaciones de funcionamiento u operativas: comprenden todos los
desembolsos considerados como normales para el funcionamiento de los mal
denominados "servicios públicos esenciales", como los servicios públicos
propiamente dicho y, los necesarios para una normal marcha del Estado (pago
de sueldos a funcionarios y empleados públicos, conservación del material,
etc.)
Según indica Giuliani Fonrouge, es una reminiscencia de la antigua
clasificación, sin embargo, no se superponen, pues no se basan en la
periodicidad o habitualidad de las erogaciones.
Como apunta Duverger, estas erogaciones no implican transferencia de
capital del sector público al privado, ni dentro del sector público, sólo afectan el
empleo de las rentas del Estado.
2) Gastos de Capital: se refieren a inversiones en obras públicas,
trabajos de instalación o de reconstrucción inherentes al patrimonio o riqueza
del Estado.
Analizando este tipo de erogaciones se puede observar la evolución del capital
del Estado. Pero no se los puede denominar "extraordinarios" pues son, para
los Estados modernos, tan habituales o periódicos como los de funcionamiento.
Esta clasificación fue la adoptada por antigua Ley de Contabilidad en su art. 3°.
Existe una tercera clasificación económica del Gasto público expuesta
por el profesor Masoin, divididos en tres grupos:
1) Gastos públicos empleados en la producción de bienes y servicios;
estos gastos, a su vez, pueden tener algunos de los siguientes destinos: a) ser
cedidos contra el pago de una tasa, como ocurre con ciertos servicios públicos,
o contra el pago de un precio, como ocurre en los casos de las empresas
públicas; a este primer subgrupo de desembolso públicos, Maison los
denomina gastos productivos en atención a que se trata de egresos que tienen
su contraposición en el valor económico de los bienes que ayudan a producir y
se justifican por su rendimiento financiero y económico.
b) Ser provisto gratuitamente por el Estado tal como ocurre con la
enseñanza pública, estas erogaciones son gastos de reparto o transferencia,
por cuánto significan, para dicho profesor, una transferencia o redistribución de
bienes y servicios de un grupo de individuos (por eje. contribuyentes)
Y; c) Ser reservados por el estado para su propio empleo, como sucede
con los gatos de las fuerzas armadas estos constituyen los denominados
gastos reales, pues representan un gravamen para una parte de la renta
nacional, dado que sustraen riqueza del proceso económico, sin que la
actividad económica del país reciba contraprestación alguna.
2) Gastos públicos utilizados para el servicio de la deuda pública externa
este grupo de egresos representan también gato reales por los mismos motivos
antes explicados.
3) Gastos públicos empleados para ser devueltos a la economía
nacional sin mediar contraprestación por parte de esta ejemplo de teclas

5
erogaciones estatales son las ayudas sociales los subsidios y también el
servicio de la deuda pública interna estos desembolsos pecuniarios Qué
significan verdadera transferencias del sector público a la economía nacional
son gato de reparto.

b) Clasificación jurídico-administrativa

Este criterio divulgado en su momento por Jeze y que, actualmente en


forma conjunta con el moderno criterio de clasificación económica de gastos de
funcionamiento y de capital, responde a una técnica presupuestaria seguida
por casi todos los países occidentales.
Conforme a este criterio, los egresos estatales son clasificados en: 1)
Gastos constitucionales; 2) Gastos administrativos; 3) Gastos de justicia y
seguridad interna; 4) Gastos militares; 5) Gastos de instrucción pública; 6)
Gastos de higiene y bienestar social; 7) Gastos para obra públicas; y 8) Gastos
de la deuda pública.
Por su parte cada uno de ellos es agrupado en anexos, a los cuales se
divide contablemente en incisos, ítems y partidas. Este criterio, como lo afirma
Giuliani Fonrouge, permite apreciar la evolución de la administración y
comparar la importancia de cada uno de sus departamentos.

c) Clasificación. Resolución 71/2003 Ministerio de Hacienda

Las clasificaciones presupuestarias son instrumentos normativos


que agrupan los recursos y gastos de acuerdo a ciertos criterios, cuya
estructuración se basa en el establecimiento de aspectos comunes y
diferenciados de las operaciones gubernamentales.
Las clasificaciones presupuestarias al organizar y presentar todos
los aspectos posibles de las transacciones públicas, conforman un
sistema de información ajustado a las necesidades del gobierno y de los
organismos internacionales que llevan estadísticas sobre los sectores
públicos nacionales, posibilitando un análisis objetivo de las acciones
ejecutadas por el sector público.
Por tanto, el conjunto de clasificaciones presupuestarias
representa un mecanismo fundamental para el registro de la información
relativa al proceso de recursos y gastos de la actividad pública.
A. CLASIFICACION INSTITUCIONAL
(Sustituido por art. 1° de la Resolución N°13/2004 de la Secretaría de
Hacienda B.O.9/2/2004)

1. Concepto

6
La clasificación institucional ordena las transacciones públicas de acuerdo
a la estructura organizativa del sector público y refleja las instituciones y
áreas responsables a las que se asignan los créditos y recursos
presupuestarios y, consecuentemente, las que llevarán adelante la
ejecución de los mismos.
2. Finalidad
— Permite distinguir los diferentes niveles institucionales encargados de
la toma de decisiones, respecto de la obtención de ingresos y de la
realización de gastos.
— Facilita el establecimiento de la responsabilidad administrativa que
tiene cada institución en todo el proceso presupuestario, ante quien
jurídicamente aprueba su presupuesto.
— Permite establecer las orientaciones del gasto en función de la política
gubernamental.
Ejemplo:

Sector Público Nacional no Financiero

Administración Nacional

Administración Central

Poder Legislativo Nacional

Poder Judicial de la Nación

Ministerio Público

Presidencia de la Nación

B. CLASIFICACION POR TIPO DE MONEDA


1. Concepto
Esta clasificación se utiliza para reflejar las transacciones públicas en
moneda extranjera o moneda nacional. Cuando las instituciones públicas
realizan operaciones de ingresos o gastos bajo esta modalidad, debe
tenerse en cuenta la codificación establecida en el clasificador de
referencia.
La clasificación por tipo de moneda puede ser utilizada para diversos
fines; sin embargo es propósito principal de ésta brindar información para
las cuentas de la Balanza de Pagos y asimismo, mediante su uso se
contribuye a determinar el presupuesto de divisas del sector público.
2. Aspectos generales

7
El clasificador por tipo de moneda tiene una codificación de dos dígitos
numéricos, el código 1 sirve para clasificar las transacciones en moneda
nacional y el código 3 para moneda extranjera.
C. CLASIFICACION DE LOS GASTOS PUBLICOS. Aspectos
generales.
Los gastos públicos constituyen las transacciones financieras que
realizan las instituciones públicas para adquirir los bienes y servicios que
requiere la producción pública, o para transferir los recursos recaudados
a los diferentes agentes económicos.
La clasificación de los gastos consiste en las diversas formas de ordenar,
resumir y presentar los gastos programados en el presupuesto. Los
gastos organizados de esta manera sirven para proporcionar información
acerca del comportamiento de la economía pública en el sistema
económico.
Tratándose de un instrumento determinante de la gestión pública, la
clasificación del gasto se constituye en un elemento interactuante del
sistema general de cuentas, donde cada componente destaca aspectos
concretos del presupuesto y suministra información que atiende a
necesidades diferentes, pero conexas.
Finalidad
Independientemente de los propósitos generales planteados en la
definición anterior, las clasificaciones de los gastos posibilitan los
siguientes objetivos:
— Facilitan la definición de las orientaciones, prioridades, normas y
procedimientos a los cuales deben ajustarse las instituciones públicas en
la elaboración de sus presupuestos.
— Sirven para la determinación del ahorro o desahorro, superávit o déficit
financiero de las instituciones del Sector Público Nacional.
— Facilitan el desarrollo y aplicación de los sistemas de programación y
gestión del gasto público.
— Permiten la ejecución financiera del presupuesto y de todas las etapas
del proceso presupuestario.
— Son instrumentos que permiten realizar análisis de los efectos del
gasto público y de la proyección del gasto futuro.
— Sirven para determinar las distintas prioridades del gasto público, así
como para establecer responsabilidad en la administración de los
mismos.
1) CLASIFICACION GEOGRAFICA
El clasificador geográfico establece la distribución espacial de las
transacciones económico-financieras que realizan las instituciones

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públicas, tomando como unidad básica de clasificación la división política
del país.
Finalidad
— Permite evidenciar el grado de centralización o descentralización con
que se realizan las acciones del Sector Público Nacional.
— Brinda información que permite lograr una coordinación efectiva entre
los organismos que desarrollan acciones en cada uno de los ámbitos
geográficos.
— Suministra información que sirve de base para la formulación de
planes de desarrollo regional y para la compatibilización de los esquemas
presupuestarios consolidados.
— Posibilita la conformación de estadísticas regionales.
— Ofrece información que sirve de base para el establecimiento de
relaciones fiscales entre el Estado Nacional y las administraciones
provinciales y municipales.
Los criterios metodológicos para clasificar geográficamente el gasto son
los siguientes:
— Erogaciones Divisibles: En el caso en que los gastos son
perfectamente imputables a una determinada jurisdicción política
— Erogaciones Indivisibles: En los casos que no pueda ser posible imputar el gasto a
una determinada ubicación geográfica de acuerdo a los criterios expuestos
precedentemente, deberá estimarse la misma en base a metodologías que se
consideren apropiadas para efectuar la desagregación, vg: la ubicación ejecutada en
el ejercicio anterior.

Capital Federal - Ciudad de Buenos Aires

Provincia de Buenos Aires

Provincia de Catamarca

Provincia de Córdoba

Provincia de Corrientes

Provincia del Chaco

2) CLASIFICACION POR OBJETO DEL GASTO


La clasificación por objeto del gasto se conceptúa como una ordenación
sistemática y homogénea de los bienes y servicios, las transferencias y
las variaciones de activos y pasivos que el sector público aplica en el
desarrollo de sus actividades.
Finalidad
— Permite identificar con claridad y transparencia los bienes y servicios
que se adquieren, las transferencias que se realizan y las aplicaciones
previstas en el presupuesto.

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— Facilita la programación de las adquisiciones de bienes y servicios, el
manejo de los inventarios y otras acciones relacionadas con las
modalidades de administración de bienes del Estado.
— En el marco de las interrelaciones de los clasificadores, el clasificador
por objeto del gasto se constituye en uno de los principales insumos para
generar clasificaciones agregadas.
— Hace posible el desarrollo de la contabilidad presupuestaria.
— Permite ejercer el control interno y externo de las transacciones del
sector público.
— Ofrece información valiosa de la demanda de bienes y servicios que
realiza el Sector Público Nacional.
Ejemplo:
1 Gastos en personal (

11 Personal permanente

111 Retribución del cargo

112 Retribuciones a personal directivo y de control

113 Retribuciones que no hacen al cargo

114 Sueldo anual complementario

3) CLASIFICACION DEL GASTO POR CARACTER ECONOMICO


Concepto
La clasificación económica del gasto permite identificar la naturaleza
económica de las transacciones que realiza el sector público, con el
propósito de evaluar el impacto y las repercusiones que generan las
acciones fiscales. En este sentido, el gasto económico puede efectuarse
con fines corrientes, de capital o como aplicaciones financieras.
La clasificación económica del gasto se diseña a partir de la estructura
básica del Sistema de Cuentas Nacionales con el objeto de permitir la
integración de la información del sector público con el sistema
mencionado; este hecho facilita el análisis y estudio de los efectos del
sector público en un contexto más amplio de la economía.
Conviene destacar que los efectos económicos a que se hace referencia
son los originados por el monto y composición de las transacciones que
realizan las instituciones públicas en el mercado, y no por las acciones de
orientación y regulación de determinadas actividades que afecta en
mayor o menor grado la actividad económica.
Finalidad
— Permite la vinculación de la política económica y social con la política
presupuestaria.
— Permite identificar las relaciones que existen entre el presupuesto y la
economía.
— Las diferentes categorías económicas de los gastos facilitan las
proyecciones con fines de análisis macroeconómico.
— La desagregación de los gastos corrientes permite conocer la
remuneración a los factores de la producción y en consecuencia
determinar el valor agregado por el sector público.

10
— Los gastos de capital muestran la inversión que realiza el sector
público y su contribución al incremento de la capacidad instalada de
producción.
— Su contrastación con la clasificación económica de los recursos
posibilita la determinación del déficit o superávit financiero del sector
público en su conjunto, las fuentes de financiamiento interno y externo a
que el mismo recurre y la presión que ejercerá sobre la totalidad de
medios de financiamiento disponibles por la economía nacional.
— Sirve como estructura básica de cuentas para elaborar el presupuesto
consolidado del sector público y para relacionar las transacciones con las
cuentas nacionales.
Ejemplo:
2 Gastos

2.1 Gastos corrientes

2.1.1 Gastos de operación

2.1.1.1 Remuneraciones

2.1.1.2 Bienes y servicios

2.1.1.3 Impuestos indirectos

2.1.1.4 Depreciación y amortización

2.1.1.5 Previsiones
4) CLASIFICACION POR FINALIDADES Y FUNCIONES
Concepto
La clasificación funcional presenta el gasto público según la naturaleza de
los servicios que las instituciones públicas brindan a la comunidad. Los
gastos clasificados por finalidad y función permiten determinar los
objetivos generales y los medios a través de los cuales se estiman
alcanzar éstos. En estos términos la clasificación por finalidades y
funciones se constituye en un instrumento fundamental para la toma de
decisiones por el poder político.
Objetivos
— Permite analizar las tendencias de los gastos en funciones
determinadas.
— Facilita la elaboración de estadísticas del gasto, proporcionando
elementos suficientes para la proyección de los mismos.
— Permite conocer en qué medida las instituciones de la Administración
Nacional cumplen funciones económicas o sociales.
— Es un instrumento que favorece el análisis del gasto para estudios
económicos y sociales.
Ejemplo
1 Administración gubernamental
1.1 Legislativa
1.2 Judicial
1.3 Dirección superior ejecutiva
1.4 Relaciones exteriores
1.5 Relaciones interiores

11
1.6 Administración fiscal
5) CLASIFICACION DEL GASTO POR CATEGORIA
PROGRAMATICA
Concepto
Esta clasificación implica la asignación de recursos financieros a cada
una de las categorías programáticas del presupuesto (programa,
subprograma, proyecto, actividad y obra). El cálculo primario se realiza a
nivel de las categorías programáticas de mínimo nivel (actividad y obra) y
por agregación resulta la asignación de los recursos financieros en las
categorías programáticas de mayor nivel (proyecto, subprograma y
programa).
Por tanto, la clasificación programática del presupuesto es un aspecto
parcial de la aplicación de la técnica de la programación presupuestaria.
Expresa sólo uno de los elementos de la programación: los recursos
financieros. La utilización de esta clasificación es una condición
necesaria, pero no suficiente para la aplicación del presupuesto por
programas. Dicha aplicación implica vincular las variables financieras con
las reales (recursos físicos y producción terminal e intermedia).
Finalidad
— El usuario puede apreciar, los recursos financieros que se requieren
para adquirir los recursos reales que han de posibilitar la producción de
los bienes y servicios intermedios y terminales por parte de las
instituciones públicas.
— Posibilita visualizar la expresión financiera de las políticas de
desarrollo en el presupuesto, por cuanto a este último instrumento se lo
formula tomando en cuenta los programas del gobierno para el período
presupuestario.
— Permite establecer la responsabilidad de los funcionarios por la
administración de los recursos reales y financieros asignados a nivel de
cada categoría programática.
6) CLASIFICACION POR FUENTE DE FINANCIAMIENTO
Concepto
La clasificación por fuente de financiamiento consiste en presentar los
gastos públicos según los tipos genéricos de recursos empleados para su
financiamiento.
Este tipo de clasificación identifica el gasto según los ingresos que lo
financian, permitiendo conocer la orientación de los mismos hacia la
atención de las necesidades públicas.
La importancia de esta clasificación radica en que los recursos no son
indistintos y tampoco lo son los gastos. Así, es conveniente por regla
general, que recursos permanentes financien gastos permanentes,
recursos transitorios financien gastos transitorios y recursos por única vez
financien gastos por única vez.
Objetivos
— Permite identificar los diferentes tipos de financiamiento de la
producción pública.
— Facilita el control de los gastos en función de las fuentes de
financiación empleadas.
— Facilita la compatibilización de los resultados esperados con los
recursos disponibles y el cumplimiento de la restricción financiera en los

12
términos previstos en el artículo 34 de la Ley Nº 24.156 de Administración
Financiera y de los Sistemas de Control del Sector Público Nacional.
— Permite contemplar adecuadamente la restricción que impone el
artículo 56 de la Ley Nº 24.156 de Administración Financiera y de los
Sistemas de Control del Sector Público Nacional, de realizar operaciones
de crédito público para financiar gastos operativos (con algunas
excepciones establecidas en la reglamentación).
Ejemplo:
Catálogo de cuentas
11. Tesoro Nacional
12. Recursos propios
13. Recursos con afectación específica
14. Transferencias internas
15. Crédito interno

a) Finalidad del Gasto Publico

Los Gastos públicos han perdido el carácter neutro para transformarse


en verdaderos instrumentos o medios de acción del Estado.
Mediante su política de Gastos públicos, en unión con la de sus
recursos, el Estado puede actuar sobre la renta nacional, obtenerse el
consumo de la comunidad, alentar la inversión privada, asegurar el pleno
empleo de los recursos disponibles, influir decididamente en los precios de las
mercaderías, en las remuneraciones de los servicios y sobre las tasas de
interés, y, en términos generales puede producir notables alteraciones en toda
la actividad económica, con sus efectos en el orden social; que son materia de
estudio de la economía financiera.
Estos efectos o modificaciones son inducidos deliberadamente o con
reflexión por el Estado, materia investigada por la política financiera o política
fiscal. Ésta tiene por objeto determinar la elección de los Gastos públicos a
realizar como también de los recursos públicos necesarios, conforme a las
circunstancias particulares de cada economía y del estado en que ésta se
halle.
La política financiera tomó impulso después de la depresión de los años
treinta, y una de sus obras destacadas fue la Teoría general de la ocupación, el
interés y el dinero de Keynes, publicada en 1936, y como consecuencia se
elaboró la literatura que analizó los efectos de las erogaciones públicas durante
la etapa de crisis o recesión, con el objeto de lograr el pleno empleo y la
ocupación.

13
Esto llevó a creer que, a través de la utilización de los Gastos públicos
podían solucionarse todos los maltés de la economía. Se atacó entonces el
principio de equilibrio presupuestario, sosteniéndose su inconveniencia.
La política financiera depende de las circunstancias particulares de cada
economía y de la época o coyuntura que ella esté atravesando, por ello la
aplicación práctica de las conclusiones por esta literatura ha fracasado
rotundamente y producido efectos inflacionarios que desplazaron las
inversiones en actividades productivas hacia perjudiciales actividades
especulativas, según nos es bien conocido por la experiencia Argentina.
Por ello en la actualidad se ha abandonado ese enfoque y con los
efectos de las políticas de Gastos y recursos públicos en épocas de recesión
han alcanzado conclusiones con respecto a los Estados de prosperidad
económica y al control de la inflación, como también de las estructuras
económicas en desarrollo.
Para poder efectuar una correcta o adecuada elección de las erogaciones
públicas es necesario tener en cuenta factores como: 1) la estructura
económica (si se trata de una economía desarrollada o en vías de desarrollo);
2) la etapa o coyuntura de aquella (si setrata de un estado de recesión o de
expansión); y 3) los medios o recursos con los cuales habrán de ser
financiados los Gastos públicos.

b) Límites

Relacionado con el fenómeno del aumento de los egresos públicos


aparece el interrogante respecto de cuáles son los límites tolerables del
crecimiento de aquellos o si hay un tope para el incremento, más allá del cual
se pondría en peligro la estructura del estado y la existencia misma de la
Nación.
Para el profesor Maison, atendiendo a la clasificación de los Gastos
públicos, opina que, los gastos productivos no tienen por qué preocupado con
respecto a su aumento y no plantean problemas de límites pues se justifican
por su rendimiento Financiero. Ocurre algo análogo con los denominados gasto
de reparto pues crean en manos de los perceptores la capacidad tributaria para
enjugar los y compensar el sacrificio de aquellos que contribuyeron a
satisfacerlos. El problema queda circunscrito a los gastos reales, la norma de
limitación para este último tipo de gastos estaría dada, en el criterio del
profesor, por lo que él denomina principio de la utilidad social máxima posible,
o sea, que tales gastos pueden ser llevados a un nivel en que es utilidad social
se equilibre con las desventajas sociales resultantes del gravamen a la renta
nacional necesario para satisfacerlo.
Sin embargo, el profesor Martín piensa, que no es posible y,
probablemente tampoco útil, establecer topes o límites a priori a los gastos
públicos, ya sea en su conjunto o considerados individualmente. La cuestión
del límite de las erogaciones públicas no representa un problema que puede

14
ser resuelto mediante análisis económicos, porque esencialmente, esta es una
cuestión de naturaleza política.
Duverger, señala que, económicamente, nada impide que los gastos
públicos alcancen el ciento por ciento de la renta nacional, como ocurre en
algunos países socialistas donde el estado ha tomado a su cargo la totalidad
de la actividad económica.
Siendo un problema de naturaleza política, los límites de los Gastos públicos
dependerán, en todos los casos, de cómo y cuándo se los realice, o, como lo
expresa Groves, que depende principalmente de las circunstancias de lugar y
de tiempo.

a) El gasto público en Derecho Positivo Argentino. Régimen Legal.


Ley 24156

ARTICULO 14.- En los presupuestos de gastos se utilizarán las técnicas más


adecuadas para demostrar el cumplimiento de las políticas, planes de acción y
producción de bienes y servicios de los organismos del Sector Público Nacional, así
como la incidencia económica y financiera de la ejecución de los gastos y la
vinculación de los mismos con sus fuentes de financiamiento. La reglamentación
establecerá las técnicas de programación presupuestaria y los clasificadores de gastos
y recursos que serán utilizados.
REGLAMENTADO POR DECRETO N° 1344/2007: 13 ARTICULO 14.- a) El presupuesto de
gastos de cada una de las jurisdicciones y entidades de la Administración Nacional se
estructurará de acuerdo con las siguientes categorías programáticas: programa, subprograma,
proyecto, obra y actividad, y con las partidas de gastos que por su naturaleza no resulte factible
asignar a ninguna de dichas categorías.
b) Los créditos presupuestarios de las actividades o proyectos que produzcan bienes o presten
servicios a los diversos programas de una jurisdicción o entidad se incluirán en actividades o
proyectos centrales o comunes.
c) Para la presentación de los gastos se utilizarán las clasificaciones siguientes: I. Institucional.
II. Categoría programática. III. Finalidades y funciones. IV. Fuentes de financiamiento. V. Objeto
del Gasto. VI. Económica. VII. Tipo de moneda. VIII. Ubicación geográfica.
d) Los recursos se presentarán ordenados, por lo menos, de acuerdo a las clasificaciones
siguientes: I. Institucional. II. Por rubros. III. Económica. IV. Tipo de Moneda
e) La SECRETARIA DE HACIENDA establecerá las características especiales para la
aplicación de las técnicas de programación presupuestaria en los entes citados en los incisos
b), c) y d) del Artículo 8º de la Ley Nº 24.156, respetando los elementos básicos definidos en el
presente artículo.
f) Los créditos presupuestarios se expresarán en cifras numéricas y en moneda nacional

ARTÍCULO 20.- Las disposiciones generales constituyen las normas complementarias


a la presente Ley que regirán para cada ejercicio financiero. Contendrán normas que
se relacionen directa y exclusivamente con la aprobación, ejecución y evaluación del
presupuesto del que forman parte. En consecuencia, no podrán contener
disposiciones de carácter permanente, no podrán reformar o derogar leyes vigentes, ni
crear, modificar o suprimir tributos u otros ingresos. El Título I incluirá, asimismo, los
cuadros agregados que permitan una visión global del presupuesto y sus principales
resultados.
REGLAMENTADO POR DECRETO N° 1344/2007: ARTICULO 20.- El Título I, Disposiciones
Generales de la Ley de Presupuesto, contendrá el monto de los gastos autorizados de la
Administración Nacional, las estimaciones de recursos para su atención, los gastos y

15
contribuciones figurativas, las fuentes y aplicaciones financieras y los principales resultados.
Asimismo incluirá los cuadros desagregados de los gastos y recursos combinando las distintas
clasificaciones presupuestarias de acuerdo a los criterios que determine la SECRETARIA DE
HACIENDA.

16
0
1) a) Recursos públicos. Concepto.

Los mercantilistas, los fisiócratas y luego los clásicos, asignaron una


importancia fundamental a los ingresos Público relacionándolos con las
distintas concepciones filosóficas del Estado. Alexander Hamilton, primer
secretario de Hacienda de los Estados Unidos, sostuvo que, el dinero es, con
propiedad, considerado como el principio vital del cuerpo político, como aquello
que sostiene su vida y su acción y le permite llevar a cabo sus más esenciales
funciones. Consecuentemente, un completo poder para procurar su suministro
regular y adecuado, conforme lo permitan los recursos de la comunidad, debe
ser considerado como un ingrediente indispensable de toda Constitución. Esto
trae aparejado uno de estos dos males: 1) O el pueblo debe someterse a
continuos despojos, como sustituto para reemplazar las necesidades públicas,
o 2) el gobierno naufraga en una atrofia fatal y, en corto período, perece.
Han sido muchas las definiciones ensayadas para precisar los rasgos de
los recursos públicos, la mayoría los vinculan con las nociones de satisfacción
de necesidades públicas o, con la prestación de servicios públicos.
Giuliani Fonrouge los concibe, en sentido lato, como las entradas que obtiene
el Estado, preferentemente en dinero, para la atención de las erogaciones
determinadas por exigencias administrativas o de índole económico-social.
Martín, considera, que tales definiciones sujetas a la noción tradicional
de Gastos públicos, no atienden a la realidad de las finanzas públicas. Basando
su crítica debidoa la amplitud de la noción de Gastos públicos excediendo el
marco de erogaciones relacionadas con servicios públicos y, por otra parte, por
la necesidad de desvincular los conceptos de recursos y gastos públicos, ya
que es concebible un ingreso público que no tenga por finalidad atender dichos
gastos. El progreso propone un concepto de recursos públicos, aunque no sea
tan preciso, que resulte lo suficientemente amplio como para comprender en él
los tipos de ingresos con que cuentan los Estados. Considerando los recursos
públicos como toda riqueza devengada en favor del Estado y acreditada como
tal por su Tesorería.
Para Oria, es todo caudal que afluye a una entidad pública, en virtud del
ejercicio financiero de ésta, y que se destina a la realización de los fines de
ella.
Estas definiciones nos permiten incluir en ellos los ingresos tributarios
(los impuestos, tasas y contribuciones), los provenientes del uso del crédito
público y los de diversa naturaleza, como los ingresos provenientes de la
emisión de Títulos de la Tesorería, las multas, las subvenciones de otros
Estados, etc.

b) Evolución conceptual.

Para los económica de la escuela clásica, los recursos públicos debían


tener siempre una finalidad exclusivamente fiscal: la de servir sólo como

1
medios para satisfacer los gastos que el Estado necesariamente debía realizar
a fin de cumplir con sus funciones esenciales. Sin embargo, corresponde
reconocer que los maestros del liberalismo alcanzaron, en alguna medida, a
vislumbrar los empleos extrafiscales que hoy se les adjudica. prueba de ello Es
que en 1859, al tratar la imposición indirecta sobre bebidas alcohólicas y
resolver el interrogante de Si el estado debía desalentar aquellas conductas
contrarias a los mejores intereses de los individuos, John Stuart Mill concluyó
afirmando que es el deber del Estado considerar, mediante la imposición de
gravámenes, qué artículos pueden ser dejado de lado por los consumidores y,
a fortiori, seleccionar con preferencia aquellos cuyo uso, más allá de la
moderada cantidad, estime que es decididamente nocivo.
Esta concepción teórica ilimitada fue abandonada durante el curso del
siglo XX de acuerdo a las nuevas funciones asignadas al Estado. Los recursos
públicos abandonaron su finalidad exclusivamente fiscal para convertirse, al
igual que los gastos públicos, también en instrumentos extrafiscales o medios
de acción del Estado para intervenir en las distintas actividades desarrolladas
por la comunidad. Esta idea de concebir los recursos públicos como
instrumentos reguladores de la actividad económica no es novedosa, ya que
tiene su más importante antecedente en el sistema mercantilista qué imperio
hacia fines del siglo XVI y principios del siglo XVII, al menos en lo que atañe a
los derechos aduaneros.
Esta primera idea que habían esbozado los mercantilistas, fue
abandonada posteriormente, por la puesta en vigencia de los postulados de la
economía liberal, que tenía como máxima la de la menor intervención posible
del estado en las actividades económicas del país. Por ello durante el siglo XIX
se tendió a limitar los ingresos de los Estados a los recursos tributarios,
procurando reducir sus deudas públicas.
En el siglo XX, juntamente con el advenimiento de la nueva concepción
del Estado, los recursos públicos tomaron otro rumbo. A la par de los recursos
tributarios, que no han perdido su enorme gravitación para las finanzas
públicas, sí ha recomendado la utilización del Crédito Público, sin ninguno de
los temores que les infundía a los clásicos.
Además la mayoría de los países han hecho resurgir la importancia de
los recursos de tipo patrimonial sin identificarlos con los bienes inmuebles de
propiedad del Estado. No es la tierra pública la que tiene importancia, sino las
denominadas empresas estatales, a las cuales se les confía actividades
industriales, comerciales, financieras, de servicio, etc.

c) Clasificación. Criterio de José. M. Martin

Martín distingue tres grandes categorías: 1) los recursos provenientes de


liberalidades : son aquellas que el estado percibe gratuitamente, sin hacer uso
de su poder de imperio, ya sea: a) de las economías de los particulares, tal
como ocurre en el caso de donaciones, legados, etc., se distinguen por su
insignificancia cuantitativa y por su irregularidad; o b) de los tesoros de entes
públicos superiores en forma de subvenciones o ayudas (eje. del Estado

2
nacional am te público menores, provincias o municipalidades son los
denominados fondos no reintegrables aportados por la nación), pueden
alcanzar especial significación para las finanzas de las gentes perceptores.
2) Recursos originarios: son los que provienen de los bienes
patrimoniales del estado o de diversos tipos de actividades productivas
realizadas por éste. Estos recursos públicos tienen la característica económica
común de ser obtenidos por el Estado en condiciones similares a las cuales los
particulares obtienen sus propios ingresos. Tienen su origen en relaciones
establecidas entre aquel y los particulares, sin mediar coercitividad o ejercicio
del poder de imperio. Estas relaciones se encuentran gobernadas por reglas
del derecho administrativo (como ocurre con las concesiones) o por normas del
derecho privado (Como sucede con los servicios de las entidades bancarias del
Estado).
Dentro de esta categoría de recursos corresponde distinguir tres
especies: a) las rentas o resultados provenientes de la explotación, directa o
por delegación, hotel la venta de bienes patrimoniales: los bienes patrimoniales
del Estado son aquellos que el código civil argentino enumera la bajo la
denominación de bienes privados del Estado (no deben confundirse con los
bienes de dominio público). Ellos son: I) las rentas de capitales mobiliarios del
estado, los dividendos y los intereses percibidos por éstecomo consecuencia
de su participación en el mercado financiero o de la posesión de acciones y
obligaciones de las empresas privadas en nuestro país. II) Las rentas
provenientes de la explotación, si en forma directa por el estado o por
delegación mediante concesionarios de los bienes del dominio privado
(arrendamiento de tierras públicas o participaciones, regalías u otros ingresos
pagados por los concesionarios que explotan yacimientos, minas, bosques, etc.
Y, III) El producto de la enajenación de bienes de esta categoría.
b) Las tarifas o precios cobrados por las dependencias administrativas
del Estado que presentan determinados servicios públicos: estas tarifas o
precios establecidos, generalmente con criterio político, se distinguen de una
de las especies de los recursos tributarios destinados a financiar servicios
públicos, es decir, las tasas. Las tarifas son cobradas por dependencias u
organismos integrantes de la Administración pública denominados,
departamentos de la Administración central, organismos o dependencias
administrativas, se caracterizan por carecer de personería y se identifican con
el Estado mismo. La política de tales entidades debe ser fijada por el propio
Poder Ejecutivo nacional, por medio del ministerio correspondiente, su
administración corre por cuenta del ministerio y por lo general está a cargo de
un director general o nacional.
c) Las contribuciones o aportes de utilidades que deben realizar el tesoro
público, por disposición legal, las denominadas empresas del Estado: no son
los caudales que entran en la caja de las respectivas empresas del Estado lo
que hay que considerar como recursos públicos, sino aquella parte o
proporción de sus utilidades que legalmente tiene que ser transferida al tesoro
estatal. Dentro de las de la denominación genérica de empresas del Estado,
podemos distinguir: los establecimientos estatales propiamente dichos, las

3
sociedades de economía mixta, las sociedades anónimas y las sociedades
anónimas con mayoría estatal.
3) Los recursos derivados: comprende una variada gama de ingresos, no
sólo de distinta importancia cuantitativa para el Estado, sino también de diversa
naturaleza jurídica.
Ellos son: I) los recursos tributarios, II) los provenientes del uso del Crédito
Público, III) las multas y otras sanciones de carácter pecuniario, y IV) los
ingresos provenientes de gestiones de la tesorería.
Más allá de la diversidad y distinta composición de estos recursos
derivados poseen una misma característica que permite su agrupación. Esto
es, que el Estado, en todos los casos, obtiene este tipo de recursos de una
manera mediata, no como producto de negocios jurídicos, sino mediante
reclamos a las economías de los particulares. Estas exigencias las puede
formular el Estado, en virtud de su poder de imperio o poder fiscal ideal y que
todos esos recursos sean el fruto de relaciones entre el Estado y los
particulares, gobernadas por normas de Derecho Público.
I) Los Recursos Tributarios:se caracterizan por ser el más importante
ingreso con que cuenta las finanzas públicas contemporáneas. Desde el punto
de vista cuantitativo son el mayor rubro de recursos con que cuentan los
Estados Modernos y cualitativamente, son los medios materiales con los cuales
el Estado implementara su política económica y social.
Característica: de tipo económico, la cual consiste en una detracción de parte
de la riqueza de los particulares a favor del Estado. Es una prestación exigida
coactivamente por el Estado y en ejercicio de su poder de imperio. Al ser el
tributo una prestación ―pecuniaria-coactiva‖, esa coerción deriva
exclusivamente de la ley en el cual está sentado el principio fundamental de la
legalidad de la prestación tributaria, contenida en el aforismo latino ―nullum
tributum sine lege‖. Esta nota de tipo jurídico es de fundamental importancia. La
última característica es que las detracciones que exige el Estado son con la
excluyente finalidad de promover el bienestar general.
II) Los recursos públicos provenientes del Créditopúblico:está
contemplado en la Ley de Administración Financiera Nº 24156, que organiza
una Oficina Nacional del Crédito Público. Dicho régimen legal convierte en
norma jurídica un principio de las Finanzas Públicas, reconocido
universalmente, el de no utilizar los ingresos procedentes de esta fuente
financiera para destinarlos a gastos corrientes: se prohíbe –preceptúa- realizar
operaciones de crédito público para financiar gastos operativos.Entiende por
crédito público la capacidad que tiene el Estado de endeudarse con el objeto
de captar medios de financiamiento, y especifica la norma que ello puede tener
la finalidad de:
a- Realizar inversiones productivas;
b- Atender casos de evidente necesidad nacional;
c- Reestructurar la organización del Estado;
d- Refinanciar los pasivos del Estado, incluidos los intereses respectivos.
III) Los recursos públicos provenientes de multas y otras sanciones de
carácter pecuniario:Las medidas legales y administrativas dirigidas a
asegurar y controlar el cumplimiento de la prestación del tributo. Una de ellas

4
son las ―multas‖, la mayoría de los autores las mencionan como un recurso de
tipo derivado, ya que tales conceptos pasan a integrar las rentas generales,
resulta dificultoso aceptar que configuren un tipo de recurso público, porque la
imposición de multas no tienen por finalidad recaudar fondos para atender
servicios públicos o para la administración del Estado, se trata de una sanción
que recae sobre un infractor de disposiciones administrativas, y como tal está
regido por disposiciones de contenido penal. Según el pronunciamiento de la
Corte Suprema de Justicia respecto a la naturaleza de estas sanciones de
carácter pecuniario, ―...la salvaguardia del patrimonio nacional no puede
apuntar a la concesión de las multas como fuente de recursos fiscales (si
bien accesoriamente lo son); aun cuando es exacto que de la solución del
presente caso puede depender ingresos para el Fisco, ello no justifica
apartarse de los principios básicos que, en materia penal establece la
Constitución; ...‖ (Fallo, t. 287, ps. 76 y 78).
IV) Los recursos provenientes de gestiones de la Tesorería: son los
diversos ingresos obtenidos por la tesorería, mediante distintos procedimientos,
con la finalidad de costear o adelantar los fondos necesarios para lograr
equilibrios presupuestarios, como también el déficit temporario del tesoro
público. Son los ingresos cuya misión es la de cubrir el monto de los gastos
públicos que excede o supera a los recursos públicos previstos para el mismo
período. Éstas facultades que posee la Tesorería General de la Nación son: a)
adelantos transitorios: giros que efectúa la Tesorería contra el Banco Central
dentro de los límites legales para cubrir los faltantes estacionales de caja. La
Tesorería puede atender en cualquier momento las erogaciones que deba
realizar sin esperar el efectivo ingreso de los recursos calculados y devuelve
dicho adelanto transitorio en el momento de percibir los ingresos
correspondientes. Conforme a lacarta orgánica del Banco Central, está
facultado para hacer adelantos transitorios al gobierno nacional, hasta una
cantidad que no exceda el 30 % de los recursos en efectivo que haya obtenido
en los últimos 12 meses. Todos los adelantos realizados por este concepto
deben ser reembolsados dentro de los 12 meses de efectuados. Si quedará
impago, la Tesorería no podrá volver a usar esta facultad hasta que cancele las
cantidades adeudadas.
b) Emisión de letras de Tesorería: las Letras de Tesorería son Títulos
Públicos de hasta un año de plazo. Pueden ser emitidos en virtud de la facultad
del Poder Ejecutivo para hacer uso del crédito a corto plazo, para llenar
deficiencias estacionales rica y hasta el monto que fije anualmente la
respectiva ley de presupuesto.
c) Emisión de títulos públicos: la carta orgánica del Banco Central
autoriza a la Tesorería a emitir títulos de la deuda pública y colocarlos en el
Banco Central por un monto que no supere el 35 % del total de los depósitos
en el conjunto títulos son colocados en el propio Banco Central de bancos.
Conforme esta disposición se ha creado un mecanismo para financiar,
mediante la creación de moneda, las erogaciones no cubiertas con recursos
genuinos. El procedimiento es relativamente sencillo y funciona de la siguiente
manera: ante un déficit del presupuesto nacional, la tesorería emite títulos de la
deuda por un valor que no exceda el 35 % del total de los depósitos bancarios.
Dichos títulos son colocados en el propio Banco Central, institución que debe
emitir moneda por el valor a la par de dichos títulos. La Tesorería recibe,

5
entonces, la emisión monetaria provocada por los títulos así emitidos, y para
con aquella los gastos no cubiertos con recursos genuinos. Mediante el pago
de tales erogaciones se larga a la circulación la nueva emisión monetaria, la
cual entra rápidamente en el circuito bancario produciendo un incremento en el
monto de los depósitos realizados en los bancos; incrementando el margen del
35 % previsto en la norma legal. Se entra así en un círculo en que la emisión
de los títulos resulta la causa de un incremento en el total de dinero circulante y
ésta a su vez un motivo para justificar una nueva emisión de títulos y así
sucesivamente.

d) Clasificación. Desde el punto de vista económico.

Desde el punto de vista jurídico las clasificaciones de los ingresos


públicos son útiles ya que ayudan a conceptualizarlos con mayor precisión y a
reconocer cuáles principios son los aplicables en lo relativo a la obtención,
administración y destino aquellos. Utilizando este criterio se pueden dividir en
1) Recursos derecho privado, los cuales coinciden con los denominados
recursos originarios y 2) Recurso derecho público, categoría que comprende
los ingresos conocidos como derivados.
Desde el punto de vista económico, las clasificaciones sirven para
distinguir los diversos efectos que cada especie de ingreso produce en la
actividad económica, para establecer ciertos postulados sobre las clases de
entradas fiscales que deben financiar, con exclusión de otras, los tipos de
gastos públicos. Según este criterio los recursos públicos son clasificados
como: 1) ingresos corrientes o rentas generales, que son principalmente, las
entradas percibidas por el Estado como resultado de su facultad de imposición
y que deben tener por destino la financiación de las erogaciones de
funcionamiento operativas; y 2) ingresos de capital, que son aquellos
provenientes del uso del Crédito Público, de la venta de bienes que integran el
activo fijo Estatal y, en términos generales, cualquier bien cuya percepción
significa una modificación en el respectivo patrimonio; y, que tiene por destino,
la financiación de Gastos de capital o inversiones patrimoniales.

e) Clasificación. Desde el punto de vista jurídico

Desde el punto de vista jurídico las clasificaciones de los ingresos


públicos son útiles ya que ayudan a conceptualizarlos con mayor precisión y a
reconocer cuáles principios son los aplicables en lo relativo a la obtención,
administración y destino aquellos. Utilizando este criterio se pueden dividir en
1) Recursos derecho privado, los cuales coinciden con los denominados
recursos originarios y 2) Recurso derecho público, categoría que comprende
los ingresos conocidos como derivados.

f) Clasificación. Resolución 71/2003. Ministerio de Hacienda


1) CLASIFICACION DE LOS RECURSOS POR RUBROS
Concepto

6
La clasificación por rubros ordena, agrupa y presenta a los recursos
públicos en función de los diferentes tipos que surgen de la naturaleza y
el carácter de las transacciones que le dan origen.
Así, en la clasificación de los recursos por rubros se distinguen los que
provienen de fuentes tradicionales como los impuestos, las tasas, los
derechos y las transferencias; los que proceden del patrimonio público
como la venta de activos, de títulos, de acciones y las rentas de la
propiedad; y los que provienen del financiamiento como el crédito público
y la disminución de activos.
Aspectos generales
El clasificador de los recursos por rubros permite el registro analítico de
las transacciones de recursos, constituyéndose, por consiguiente, en
clasificador básico o primario del sistema de clasificaciones.
El clasificador de los recursos por rubros tiene una codificación múltiple
de seis dígitos agrupados en cuatro campos diferenciados.
Los grupos principales o tipos de recursos se identifican por los dos
primeros dígitos, estos grupos representan los rubros agregados de los
ingresos públicos; los subgrupos se codifican con el tercer, cuarto y con
los dos últimos dígitos y se denominan clase, concepto y subconcepto
respectivamente. La estimación de los recursos se realizará a nivel de
clase, concepto o subconcepto, si corresponde, y se registrará en cifras
brutas, sin deducciones, por jurisdicciones o entidades públicas y
representen o no entradas de dinero efectivo; en consecuencia, su
estructura agregada de presentación será la siguiente:
JURISDICCION O ENTIDAD
TIPO
CLASE
CONCEPTO
SUBCONCEPTO
Para clasificar los recursos por tipo de moneda se utilizará la codificación
establecida en el clasificador respectivo.
Catálogo de cuentas
RECURSOS POR RUBRO

11.0.0 Ingresos tributarios

11.1.0 Sobre los ingresos

11.1.1 Ganancias

7
11.1.2 Ganancia Mínima Presunta

2) CLASIFICACION DE LOS RECURSOS POR SU CARACTER


ECONOMICO
Concepto
Desde el punto de vista económico, los recursos se clasifican según sean
ingresos corrientes, ingresos de capital y fuentes financieras.
Los ingresos corrientes incluyen: las entradas de dinero que no suponen
contraprestación efectiva como los impuestos y las transferencias
recibidas; los recursos clasificados conforme a la naturaleza del flujo, es
decir, por venta de bienes, prestación de servicios, por cobro de tasas,
derechos, contribuciones a la seguridad social y las rentas que provienen
de la propiedad.
Los recursos de capital se originan en la venta de activos, la variación
positiva de la depreciación y amortización, las transferencias recibidas de
otros agentes destinadas a financiar gastos de capital, la venta de
participaciones accionarias en empresas y la recuperación de préstamos.
Finalmente las fuentes financieras son medios de financiamiento
constituidos por la disminución de la inversión financiera y el
endeudamiento público.
Finalidad
De acuerdo con las definiciones planteadas, a continuación se describen
las principales finalidades que cumple la clasificación económica de los
recursos.
— Sirve como elemento de análisis de la estructura y evolución del
sistema tributario.
— Se utiliza para análisis macroeconómicos, por cuanto tienen elementos
que permiten evaluar el rendimiento fiscal de una determinada actividad
económica y el grado de afectación del sistema tributario nacional, lo que
a su vez hace posible tomar decisiones en cuanto al uso que se le debe
dar a la tributación como instrumento a ser tomado en cuenta para la
redistribución del ingreso.
— Permite medir la elasticidad de los ingresos tributarios con respecto al
PBI, así como el cálculo de la presión tributaria.
— Orienta la asignación de recursos en función de la política
gubernamental.
— Permite determinar cuáles son las fuentes de ingresos públicos.
— Brinda información sobre la naturaleza de la deuda pública y su
distribución en instrumentos a corto y a largo plazo.
Catálogo de cuentas (versión sintética)

8
1 Recursos

1.1 Ingresos corrientes

1.1.1 Ingresos tributarios

1.1.1.1 Impuestos directos

1.1.1.2 Impuestos indirectos

2) a) Recursos Tributarios. Concepto

El vocablo tributo, tal como lo conceptuamos actualmente, poco o nada tiene


en común con el significado antiguo de esa misma voz. El tributo de la
antigüedad era un pago, en dinero o en especie, que tenía por objeto principal
lograr la protección de parte de un señor, de una tribu o de un pueblo más
fuerte.
Los tributos de la actualidad cumplen, usualmente, una doble finalidad: sirven
de medios al Tesoro público (finalidad fiscal, que coincide con los denominados
tributos financieros) y, además, como medios de acción del Estado para
cumplir con los objetivos económicos y sociales (finalidad extrafiscal de los
tributos de ordenamiento) que atañen a su política.
Los tributos son definibles como detracciones de parte de la riqueza de
los particulares exigidas en su favor por el Estado (aspecto económico),
mediante leyes dictadas en ejercicio de su poder tributario (aspecto jurídico),
con la finalidad de promover el bienestar general (aspecto político).
Ésta detracción puede tener una finalidad fiscal, extrafiscal o, como
generalmente ocurre, mixta.
Por otra parte, esas detracciones se caracterizan, por no ser voluntarias,
es decir, no se trata de liberalidades de los particulares en favor del Estado. Al
contrario, el traspaso de riqueza que involucra todo tributo se produce, en todos
los casos, por un reclamo, una exigencia o, más técnicamente, una coacción
ejercida por aquel sobre los particulares, en virtud de su poder tributario.
El Estado ejerce éste poder tributario a través de mandatos legales. Esto
equivale decir que esa prestación exigida por el Estado no es, para los
particulares, sino una obligatio ex lege concretamente de derecho público.
Hoy, los tributos, sea que tengan una misión fiscal, ordenamiento o
mixta, se los clasifica como impuestos, tasas o contribuciones, deben
necesariamente tener como último objetivo el beneficio general y el bienestar
del cuerpo político.

b) Clasificación

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Tradicionalmente, los recursos tributarios han sido objeto de una triple
clasificación, que los divide en impuestos, tasas y contribuciones especiales.
La clasificación financiera de los recursos tributarios tiene en cuenta tres
circunstancias: 1) el tipo de necesidad satisfecho con el servicio público; 2) la
clase de demanda con que se requiere dicho servicio; y 3) la posibilidad de
medir el grado de ventaja o utilidad obtenido por los particulares con él, o sea,
su prorrateabilidad.
El impuesto es el medio de financiación de servicios públicos indivisibles,
le demanda presunta o coactiva (no voluntaria de los individuos), que
satisfacen necesidades públicas, sean primarias o secundarias. Ejemplo: la
defensa nacional, el servicio diplomático, la actividad legislativa, etc., son
funciones realizadas por el Estado en beneficio de toda la comunidad, me
resulta imposible determinar qué parte corresponde a cada uno de los
individuos. Como consecuencia estos tributos no tienen una afectación
especial, no son especialmente recaudados para cubrir los gastos originados
en un servicio público determinado. Los impuestos ingresan al tesoro público
como recursos corrientes o rentas generales del Estado, y están
primordialmente destinados a la atención de todas aquellas erogaciones que
derivan del normal desenvolvimiento de los servicios.
La tasa es el medio de financiación de aquellos servicios públicos
divisibles, de demanda presunta o coactiva, que satisfacen necesidades
públicas o colectivas. La diferencia del impuesto, es que el servicio público se
materializa mediante un conjunto de prestaciones que a pesar de servir al
interés público, benefician particularmente a aquellas personas que las solicitan
o que deben requerirlas por exigencia de normaslegales. Ejemplo: los servicios
prestados por el registro de la propiedad inmueble, prestaciones consulares,
etc. Las tazas con Qué son cubiertos los gastos ocasionados por los
referidos servicios públicos deben, ser exigidas a quienes efectiva o
potencialmente las utilizan.
La contribución especial es el medio de financiamiento de determinadas
obras y servicios públicos divisibles, de los cuales, no obstante ser de demanda
presunto coactiva y satisfacer necesidades públicas o colectivas, derivan
ventajas especiales, de índole patrimonial para determinados particulares.
Ejemplo: pavimentación de una arteria urbana. Esa obra pública es realizada
en interés general dado que todos los miembros de esa comunidad se
beneficiarán de ella. Sin embargo, los propietarios frentistas de dicha calle,
además de la utilidad genérica, tienen una ventaja no sólo adicional, sino
también muy especial, por cuanto se incrementa el valor de sus respectivas
propiedades. Por cuánto se considera apropiado que sean ellos quienes
soporten el gasto de la pavimentación mediante este atributo específicamente
denominado, en este caso, como contribución de mejora.

c) Principios Superiores de la tributación

Son postulados o reglas que deben servir de guías para la elaboración de


una adecuada política tributaria. Numerosos estudiosos han realizado

10
investigaciones sobre el tema, sin embargo, ninguno de ellos alcanzó el
prestigio de Adam Smith, que a través de la claridad, sencillez y precisión de
sus enunciados, han perdurado hasta hoy como normas rectoras de esta
materia.
Ellos fueron agrupados por el bajo el rótulo "Cuatro máximas con
relación a los tributos en general": 1) Norma de la equidad: los particulares
deben contribuir al mantenimiento del Estado, tanto como ello sea posible, en
proporción a su respectiva capacidad económica. Deben pagar en proporción a
los ingresos de que disfrutan bajo la protección del Estado.
2) Norma de certeza: el impuesto que cada persona está obligada a
pagar debe ser cierto, y no arbitrario. La fecha y la forma de pago, como
también la cantidad, deben ser claras Y precisas tanto para el contribuyente
como para cualquier otra persona.
3) Norma de conveniencia: los tributos deben ser recaudados en la
forma y en la fecha que resulten más convenientes para el contribuyente.
4) Norma de economía: los tributos deben ser recaudados en forma tal
que siempre provoca en el mínimo costo de recaudación.
Se ha señalado que la primera norma, es decir, la de la equidad en
cuanto se refiere a la proporcionalidad de los tributos, no sólo ha perdido su
valor absoluto, sino que en la práctica ha sido reemplazada por la concepción
de la progresividad que hoy en día es utilizada en un impuesto tan importante
como el que se aplica a las rentas o a las ganancias de las personas físicas.
Igualmente, se ha hecho notar que la norma de la certeza es incompleta, Dado
que ella no sólo debería haber sido formulada con respecto a la fecha, cantidad
y forma de pago de los tributos, sino que además, debería estar dirigida contra
las frecuentes e intempestivas modificaciones de la legislación tributaria.
Según el criterio de José M. Martín, las sencillas normas enunciadas por
Smith han resistido la prueba del tiempo. Conforme maestros clásicos
principios, los tributos deben ser, sobre todo, equitativos, precisos, y no
arbitrarios, convenientes en lo que respecta a su recaudación, y económicos, o
sea, no deben ser de recaudación costosa ni desalentar a los contribuyentes.

d) Equidad tributaria y bienestar general

Uno de los problemas que ha debido enfrentar la ciencia de las finanzas


públicas es el determinar en qué grado y en qué medida cada persona debe
contribuir, mediante el pago de tributos, al logro de ese bienestar general que
se reconoce como objetivo último de la comunidad.
El pago de tributos debe ser mediante una proporción justa o equitativa,
jurídicamente avalada por las constituciones de prácticamente todos los países;
así por ejemplo, el artículo 16 de nuestra Constitución nacional dispone que "la
igualdad es la base del impuesto y de las cargas públicas".

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El problema queda circunscrito a conocer qué significado debe
atribuírsele a los términos equidad o justicia tributaria. La justicia, al igual que la
equidad, pertenecen al concepto que se denomina categoría ontológica del
valor y sobre ellos sólo puede anunciarse juicios de valor; que a lo que esta
materia se refiere, deben partir, justamente, de ese consenso general y ser
interpretados tanto por quienes formulan las leyes positivas como por quienes
tienen a su cargo la interpretación oficial de estas, es decir, y la jurisprudencia.
Respecto a la equidad tributaria no quiere decir que cada uno deba
pagar la misma cantidad; por tanto, y así lo ha considerado la jurisprudencia, la
equidad tributaria no es una igualdad matemática, sino que, según lo estableció
la Corte Suprema de los Estados Unidos, en un trato igual para circunstancias
iguales y en un trato desigual ante circunstancias desiguales. Nuestra Corte
Suprema ha resuelto, siguiendo esta doctrina, Qué es la igualdad ante la ley,
impuesta por el precepto del artículo 16 dela Constitución, comporta la
consecuencia de que todas las personas sujetas a una legislación determinada
dentro del territorio de la Nación sean tratadas del mismo modo, siempre que
se hallen en idénticas circunstancias y condiciones; y en materia impositiva ese
principio se cumple cuando en condiciones análogas se imponen gravámenes
iguales a los contribuyentes (CSJN, "Fallos", 149-417).
Este concepto tiene su complemento en la posibilidad de establecer
categorías o distingo que cumplan con el requisito de la razonabilidad.

e)Teorías

Teoría del beneficio.


También denominada Teoría de trueque, Teoría de equivalencia, Teoría de
intereses o Teoría de seguro.
Reconoce su fundamento en la doctrina política y económica del siglo XVIII, el
naturalismo, realizando estudios más generales y no específicamente referidos
a tributos, consideró que la respuesta correcta a los problemas planteados por
la equidad tributaria, residía en el beneficio recibido por cada contribuyente de
parte del Estado. Ésta teoría puede ser resumida con los términos de
Montesquieu, según los cuales las rentas del Estado son una porción que cada
ciudadano da de sus bienes para tener la seguridad de disfrutar del resto de
sus rentas tranquilamente.
En consecuencia, el tributo constituye la retribución o el precio de los
servicios prestados por el estado. Adoptando un criterio económico comercial
según el cual los contribuyentes que reciben idéntico beneficio deberían pagar
igual tributo, mientras que para aquellos que reciben un mayor beneficio la
carga tributaria debería, por tanto ser mayor.
Las ventajas de esta teoría residen en el indiscutible precepto lógico según
el cual, quién se beneficia con el uso de los servicios producidos por el Estado
es quien debe pagarlos; además, al aplicar esta teoría no se desalienta la

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iniciativa privada ni se castigan los éxitos, como inevitablemente ocurre al
aplicar la teoría de la capacidad de pago; y la tercera ventaja reside en que
ésta teoría obliga al Estado a una producción más eficiente de bienes y
servicios.
La crítica a esta teoría consiste en que la actividad realizada por el Estado
nunca puede ser equiparada a la de una empresa privada, ya que éste cumple
funciones y presta algunos servicios incompatibles con esa teoría.
Actualmente, por ejemplo, las inversiones en construcción y las erogaciones
propias del mantenimiento de un hospital benefician mucho más a los grupos
de pequeñas entradas que aquellos que tienen ingresos altos. Hacerles pagar
dicho gatos al grupo beneficiado significaría una profunda contradicción con el
principio de solidaridad social. Por otra parte, resulta casi imposible medir el
beneficio de cada uno de los miembros de una comunidad recibe en el caso de
los denominados servicios públicos esenciales.
Sin embargo, etas objeciones a la teoría del beneficio No necesariamente la
invalidan para el conjunto de recursos tributarios aplicadas en un país. Ésta
puede ser aplicada cuando los servicios públicos sean divisibles y estimables
los beneficios, tal el caso de las tasas y las contribuciones especiales.

Teoría de la capacidad contributiva


También conocida entre los anglosajones con la denominación de teoría de
la capacidad de pago (ability to pay). En términos generales, se entiende por
capacidad de pago o capacidad contributiva el nivel de vida o bienestar
económico de cada persona, como la medida más equitativa para establecer el
monto de la contribución particular, para el logro del bienestar general.
Éste nivel de vida o bienestar económico puede ser medido a través delas
siguientes manifestaciones: 1) Rentas: se sostiene que existe una relación
adecuada entre las rentas réditos utilidades obtenidas en determinado período
y el nivel de vida. A mayores rentas mejor nivel de vida y viceversa. Para ser
más exactas las comparaciones hay que tener en cuenta las circunstancias
especiales de cada contribuyente (si es casado y tiene hijos, el origen de sus
rentas, etc.). Lo que conforme a nuestra legislación se denomina ganancias
netas.
2) Patrimonio: el patrimonio o capital por ser fuente productora de rentas,
también sirve para medir la capacidad de pago de los contribuyentes. Éste
criterio es utilizado para la aplicación de tributos tales como el impuesto
territorial, el impuesto a los automotores, etc.
3) Consumos: la realización de una mayor cantidad de gastos o consumos
presupone un mayor nivel de vida. Utilizada para la aplicación de tributos tales
como el impuesto al valor agregado, los impuestos internos e incluso
parcialmente el impuesto a las ganancias.

Teoría del sacrificio

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Una vez establecido los diferentes niveles de vida, es decir, las distintas
categorías de contribuyentes según su respectiva capacidad contributiva,
queda todavía por determinar o resolver, cuál es la justa proporción con que
cada categoría debe contribuir al mantenimiento del Estado.
Ésta teoría se fundamenta en el conocido principio hedonístico y en los
análisis económicos sobre la utilidad marginal de los ingresos.
La teoría del sacrificio en sus tres variantes, del sacrificio igual, mínimo y
proporcional, se basa en dos postulados esenciales. El primero de ellos es que
la utilidad marginal está en relación inversa con el monto de los ingresos, es
decir, que a menores ingresos corresponde mayor utilidad marginal y al
contrario, cuando mayor es la cantidad de ingresos menores la utilidad
marginal o sacrificio obtenibles con los últimos ingresos. El segundo
principio que fundamenta esta teoría establece que todas las personas con
iguales ingresos obtienen una igual utilidad marginal de estos.
En consecuencia, las teorías del sacrificio consideran que la utilidad
marginal de los ingresos consagra una ley verificable y de valor absoluto, o
sea, aplicable en todos los casos.
De la premisa de esta teoría se pueden extraer dos conclusiones: 1) a
mayores ingresos el sacrificio representado por el pago de un tributo será
menor; y 2) la relación entre ingreso y sacrificio tiene una validez incuestionable
y resultaría aplicable a todas las personas.
El mayor aporte de la teoría del sacrificio la finanza públicas consiste en
haber ofrecido una justificación lógica al empleo de alícuotas progresivas
utilizadas especialmente en el caso del impuesto a las ganancias.
La crítica realizada por sociólogos y economistas ha cuestionado el
fundamento de estas teorías señalando que los análisis de la utilidad marginal
de los ingresos no son siempre verificables. Conforme a esas investigaciones,
la utilidad de los ingresos no guarda una relación matemática perfecta, sino que
depende de un conjunto de circunstancias personales o factores especiales los
cuales no son necesariamente válidos en todos los casos.

f) Prescripción tributaria. Ley de Procedimiento tributario 11683

CAPITULO VIIIDE LA PRESCRIPCION

ARTÍCULO 56.- Las acciones y poderes del Fisco para determinar y exigir el
pago de los impuestos regidos por la presente ley, y para aplicar y hacer
efectivas las multas y clausuras en ella previstas, prescriben:

a) Por el transcurso de CINCO (5) años en el caso de contribuyentes inscriptos,


así como en el caso de contribuyentes no inscriptos que no tengan obligación
legal de inscribirse ante la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS

14
PUBLICOS o que, teniendo esa obligación y no habiéndola cumplido,
regularicen espontáneamente su situación.

b) Por el transcurso de DIEZ (10) años en el caso de contribuyentes no


inscriptos.

(2) c) Por el transcurso de CINCO (5) años, respecto de los créditos fiscales
indebidamente acreditados, devueltos o transferidos, a contar desde el 1 de
enero del año siguiente a la fecha en que fueron acreditados, devueltos o
transferidos.

La acción de repetición de impuestos prescribe por el transcurso de CINCO (5)


años.

(2) Prescribirán a los CINCO (5) años las acciones para exigir, el recupero o
devolución de impuestos. El término se contará a partir del 1 de enero del año
siguiente a la fecha desde la cual sea procedente dicho reintegro.

Prescripción de impuestos

ARTICULO 57.- Comenzará a correr el término de prescripción del poder fiscal


para determinar el impuesto y facultades accesorias del mismo, así como la
acción para exigir el pago, desde el 1º de enero siguiente al año en que se
produzca el vencimiento de los plazos generales para la presentación de
declaraciones juradas e ingreso del gravamen.

Prescripción de multas y clausuras

ARTICULO 58.- Comenzará a correr el término de la prescripción de la acción


para aplicar multas y clausuras desde el 1º de enero siguiente al año en que
haya tenido lugar la violación de los deberes formales o materiales legalmente
considerada como hecho u omisión punible.

ARTÍCULO 59.- El hecho de haber prescripto la acción para exigir el pago del
gravamen no tendrá efecto alguno sobre la acción para aplicar multa y clausura
por infracciones susceptibles de cometerse con posterioridad al vencimiento de
los plazos generales para el pago de los tributos.

ARTÍCULO 60.- El término de la prescripción de la acción para hacer efectiva


la multa y la clausura comenzará a correr desde la fecha de notificación de la
resolución firme que la imponga

RECURSOS MONETARIOS: la concepción clásica consideraba que un


aumento de la moneda influía notoriamente sobre el nivel general de precios. Si
la cantidad de medios de pago aumenta y los bienes y servicios que están a
disposición de los consumidores permanecen constantes, los precios
evidentemente aumentaran. Este impuesto invisible, como lo llamaban,
provocaba un deterioro patrimonial muy importante en aquellos sectores de la
población de bajos ingresos (asalariados) y en aquellos otros que tenían
15
colocaciones a renta fija (rentistas), mientras que se beneficiaban otros
sectores como los industriales, comerciantes, etc.
Las finanzas modernas están en contra de la financiación del déficit
presupuestarios con la creación de la moneda. Considera que las emisiones
monetarias no deben ser un medio del Estado para procurar recursos, sino que
ella se justifica solo para intervenir en la economía con el objeto de ejercer una
función reguladora.

16
0
EL PRESUPUESTO

1) a) CONCEPTO. ORIGEN. EVOLUCION

Al estudiar la actividad financiera del Estado, vimos que para realizar sus fines el Edo.
Necesita realizar gastos y obtener recursos.

Duverger dice que en materia financiera los estados modernos tienen una actividad
planificada, determinando en forma precisa el conjunto de gastos y recursos, estos son
previstos con adelanto y generalmente para un año.

CONCEPTO: El presupuesto es un acto de gobierno mediante el cual se prevén los


ingresos y gastos estatales y se autorizan estos últimos para un periodo futuro
determinado que generalmente es de un año. (Villegas).

Consiste en la planificación de la actividad financiera del Estado, aprobada por ley y


que abarca un periodo generalmente anual. (Martín).

ORIGEN Y EVOLUCION: El origen del presupuesto es netamente político y tuvo por


objeto establecer el control parlamentario sobre el gobierno.

En Inglaterra en el año 1215 los Barones del Reino lograron un triunfo sobre el
monarca al lograr que se estableciera en la Carta Magna que ningún tributo -salvo
casos excepcionales- podía ser establecido por el Rey sin el consentimiento del
Consejo de Estado.

Luego a fines del siglo XVII en 1689, Guillermo de Orange debió aceptar la Carta de
Derechos, (Bill of Rights), preparada por el parlamento. Dicho documento establecía
que este además de la atribución de autorizar los impuestos y contribuciones que ya
se le había otorgado se reservaba la facultad de controlar y discutir los gastos; o sea el
destino o empleo de los recursos. El motivo de esta disposición fue político el control
parlamentario sobre el gobierno.

Esta facultad parlamentaria, que en principio había quedado limitada a la inspección


de gastos militares, en 1830 fue extendida también a los gastos de la administración
civil y finalmente en 1837 durante el gobierno de la reina Victoria el parlamento
además obtuvo el control de todas las erogaciones en forma anual. De tal manera
quedó establecida la costumbre de presentarle al parlamento, anualmente y en un solo
documento, el conjunto de los ingresos y gastos que requerían su aprobación.

b) CONTENIDO. Ley 24156

TITULO II DEL SISTEMA PRESUPUESTARIO

CAPÍTULO I Disposiciones generales y organización del sistema presupuestario

SECCIÓN I Normas técnicas comunes

1
ARTICULO 11 a 15 y DECRETO N° 1344/2007

c) ESTRUCTURA. Ley 24156

CAPÍTULO II Del presupuesto de la Administración Nacional SECCIÓN I De la


estructura de la Ley de Presupuesto General ARTICULO 19 a 23 y DECRETO N°
1344/2007

2) a) NATURALEZA JURÍDICA DEL PRESUPUESTO :


Atento a que la planificación de la actividad financiera del Estado, se destaca por ser
aprobada mediante un acto legislativo ley de presupuesto, nuestra doctrina nacional
ha indagado respecto de la naturaleza jurídica.

Se ha discutido si la ley de presupuesto tiene contenido material - normas por las


cuales se crean, modifican o extinguen derechos u obligaciones - o, carece de tal
contenido y en consecuencia, es una ley formal, un acto que cumple con todo el
proceso establecido por la Constitución Nacional para la formación y sanción de leyes,
pero que no tiene efectos jurídicos.

EL PRESUPUESTO COMO LEY FORMAL

Esta corriente doctrinal pretende que el presupuesto no contiene norma jurídica


alguna: reviste extrínsecamente la apariencia de ley, pero intrínsecamente es un acto
administrativo. Según esta interpretación, el presupuesto es un plan contable
elaborado por el Ejecutivo y que el Poder Legislativo aprueba o autoriza, facultando
para administrar los ingresos y los gastos preestablecidos por aquél.

Los primeros esbozos de la doctrina aparecen en las obras alemanas entre 1820 y
1840 pero tuvieron sistematización dogmática encuadrada en la concepción dualista
de la ley en una monografía de Laband. Luego fue aceptada por Jellinek, Mayer en
Alemania por Jèze y Duguit en Francia.

DUGUIT :

Para Duguit el presupuesto tan pronto es una ley propiamente dicha, con
significación jurídica, tan pronto una mera operación administrativa; estimando que no
puede considerarse como acto unitario sino separando la parte correspondiente a
gastos, de la referente a recursos. En lo que respecta a gastos nunca es ley sino acto
administrativo, en el cual el parlamento desempeña la función de agente
administrativo, en cuanto a los recursos donde no exista la regla de la anualidad de los
impuestos no es ley en sentido material; ahora si los tributos son anuales, el
presupuesto en este aspecto adquiere carácter de ley material, por generar
obligaciones fiscales de contenido jurídico para los contribuyentes.

JÈZE:

2
Para Jèze el presupuesto nunca es una ley propiamente dicha, ni tiene carácter
unitario. No se trata de un acto jurídico simple sino de una mezcla de actos jurídicos
reunidos en un solo documento.

Para su análisis debe dividirse en cuanto a:

Recursos:

a) si son de naturaleza tributaria, en el caso de votarse anualmente, el presupuesto


contiene autorizaciones para recaudarlos según reglas jurídicas existentes .Ahora
en los regímenes legislativos sin regla de anualidad, no tiene significación jurídica
alguna ;
b) si no revisten carácter tributario (locación o venta de bienes etc), el presupuesto
carece de significación por no surgir del mismo autorizaciones creadoras o
recaudatorias.
Gastos:

a) si son preexistentes, como intereses deudas públicas el presupuesto está


desprovisto de significado jurídico, pues el parlamento se halla ante un deber
jurídico, su competencia es vinculada.
b) si son futuros el presupuesto contiene autorizaciones para crear deudas, por lo que
se trataría de acto-condición sin significación jurídica.
Vemos en esta posición un criterio restrictivo de las facultades del P. Legislativo que
aparecen limitadas al otorgamiento de autorizaciones. El parlamento desempeñaría
una misión secundaria y el voto o sanción, solo le confiere al documento la
exterioridad formal de una ley.

b) EL PRESUPUESTO COMO LEY MATERIAL


En contraposición con la teoría de tipo administrativa, hay una segunda corriente
doctrinal que no acepta el dualismo entre ley formal y ley material y considera al
presupuesto como un documento unitario e indivisible, emanado del P.L. en ejercicio
de facultades incuestionables y que por lo tanto es una ley en sentido material.
Estiman que la ley de presupuesto puede y debe tener la fuerza jurídica suficiente
para innovar y modificar el derecho vigente.

En posición análoga Sainz de Bujada afirma que la ley d presupuesto es una ley en
la plenitud de su sentido: material, porque contiene normas jurídicas que vinculan a la
administración y a los particulares, y formal, porque ha de ser aprobada por el órgano
al que constitucionalmente corresponda la función legislativa.

Giuliani Fonrouge opina que es una ley perfecta, con efectos jurídicos normales. No
puede establecerse una separación entre la parte que contiene el plan financiero (que
sería el acto administrativo) y el texto legal que los aprueba (ley propiamente dicha),
porque ambos constituyen fragmentos de un todo orgánico. La ley presupuestaria es
un acto unitario.

La función legislativa, no se reduce a aprobar o autorizar lo que propone el


Ejecutivo. Las cámaras no reciben un acto concluido, sino un proyecto a considerar; el
Ejecutivo coparticipando en la acción de gobierno sugiere o propone una ley, el

3
legislativo la hace suya rechaza o modifica total o parcialmente sin existir límites
constitucionales.

La acción parlamentaria es Normal, no excepcional; Primordial y básica, no


secundaria; Originaria y no derivada.

El hecho de que en la Arg. la ley de presupuesto se limite a calcular los recursos, sin
crearlos , por ser ellos de carácter permanente y establecidos independientemente, no
disminuye la jerarquía del Congreso puesto que no existe disposición constitucional de
carácter limitativo, de manera que nada impide que en cualquier momento el Congreso
establezca o modifique tributos.

c) EL PROBLEMA EN NUESTRO PAIS


Para responder a la pregunta a quién le compete aprobar los gastos y las fuentes
de recaudación y a quien le corresponde ejecutar el presupuesto aprobado es
menester acudir al texto de nuestra carta fundamental.

En su art. 75 inciso 8 se establece que corresponde al Congreso “fijar anualmente,


conforme las pautas establecidas en el tercer párrafo inciso 2 de este artículo, el
presupuesto general de gastos y cálculo de recursos de la administración nacional…”

La confección técnica del proyecto de presupuesto es competencia del Poder


Ejecutivo, debiendo ser preparado por el Jefe de Gabinete, tratado en Acuerdo
General de Ministros y aprobado por el Presidente en forma previa a su envío al
Congreso (art.100 inc.6º). Es decir que por un lado, el Poder Ejecutivo, a través del
jefe de gabinete y en el marco de su plan de gobierno elabora y redacta el
presupuesto, que debe ser enviado a la Cámara de Diputados antes del 15 de
setiembre del año anterior (art. 26 de la ley 24.156).

La aprobación y sanción del proyecto de ley de presupuesto enviado por el Poder


Ejecutivo, corresponde como hemos visto al Poder Legislativo. El Congreso puede
introducir modificaciones en el marco de su competencia constitucional. En Inglaterra,
no existe la posibilidad de introducir variantes al proyecto enviado por el jefe de
gabinete de ministros: el Parlamento lo acepta in totum o lo rechaza in totum. Sin
embargo no se advierte daño a la soberanía popular, por cuanto, el jefe de gabinetes
de ministro integra el Parlamento, a diferencia de lo que ocurre en nuestro régimen
presidencialista, en el cual el jefe de gabinete se encuentra subordinado funcional y
jerárquicamente al titular del Poder Ejecutivo nacional. En nuestro país, el jefe de
gabinete elabora el proyecto de ley que envía al Congreso, ejecuta el presupuesto
aprobado por éste último y ejerce la administración general del país (cfr. CN, art. 100,
incs. 7 y 1).

1) Este cuadro competencial que surge de la Constitución Nacional y de la ley


24.156, sin embargo se ve afectado en los últimos años por prácticas que
devalúan la acción del Congreso nacional, erosionan el principio de
representación y lesionan la institución del Presupuesto.

4
0
3-a) PINCIPIOS GENERALES DEL DERECHO PRESUPUESTARIO

En el siglo pasado fueron elaborados ciertos principios o reglas con respecto a la


confección y contenido del presupuesto, los cuales tenían por objeto establecer el
orden en las finanzas del Estado. Esos principios fueron respetados como auténticos
dogmas financieros hasta después de la primera guerra mundial. Sin embargo a partir
de la década de los años 30 y después de la segunda guerra mundial, fueron puestos
en tela de juicio y en algunos casos reelaborados.

PERIODICIDAD:

A partir del siglo XVII y por influencia de prácticas británicas, el carácter anual del
presupuesto llegó a constituir un principio indiscutido en las finanzas clásicas.
Contribuyeron a su afianzamiento argumentos de orden político, ya que el sistema
robustecía la facultad parlamentaria de control al Ejecutivo, de esta forma está practica
de voto anual del impuesto, se transformó en un medio efectivo de vigilar, conocer y
limitar la acción del gobierno en la democracia clásica.

En Francia el presupuesto anual resulto un medio eficaz de poner fin al desorden y


despilfarro de antiguo régimen.

La Constitución de 1853 incorporó el principio de anualidad (art. 67 inc. 5) que fue


mantenido por la reforma de 1994 (art. 75 inc.8), pero las circunstancias han
impuestos numerosas derogaciones, como en casi todos los países.

La doctrina moderna no rechaza en forma absoluta la norma de anualidad ; pues si


bien algunos países implementaron sistemas presupuestarios que cubren un periodo
prolongado de tiempo ; no existe unanimidad en su favor y prestigiosos autores
prefieren el régimen tradicional, únicamente que o le atribuyen carácter riguroso y
arbitran procedimientos que permiten flexibilizarlo, es así que aun cuando
jurídicamente subsista el presupuesto con carácter anual, en la práctica sus
disposiciones cubren un período de tiempo más prolongado.

Cuando se habla de anualidad está implícita la idea de un período de tiempo


equivalente a doce meses, pero no necesariamente debe coincidir con el año
calendario. Generalmente se lo establece dentro de uno de los 3 periodos sgtes; del
01/01 al 31/12 (Arg., España, Holanda, Francia); del 01/ 04 al 30/03 (Inglaterra, India);
o del 01/07 al 30/06 (Canadá, E.E.U.U.).

Puesto que su aplicación en forma estricta resulto muy rígida o insuficiente para la
ejecución por ej. de gastos de capital o inversiones patrimoniales. No siempre es
posible observar estrictamente el principio de la anualidad especialmente en materia
de erogaciones. Veremos los medios generalmente adoptados par subsanar los
inconvenientes, estos medios son:

Créditos Adicionales: son los votados en cualquier época del año para paliar o cubrir
una insuficiencia de la dotación de recursos presupuestarios iniciales. En Inglaterra
estos son utilizados para cubrir la insuficiencia de las cargas de fondos consolidados
que son los intereses de la deuda pública, sueldo de jueces, establecidas por leyes
especiales que mantienen su vigencia hasta que el parlamento dispone lo contrario.

1
Duodécimos: consisten en una apertura de créditos o autorizaciones mensuales al
Poder ejecutivo para realizar los gastos previstos en el proyecto de presupuesto
todavía en discusión, como también para recaudar los impuestos según las tasas
vigentes, hasta tanto se sancione la pertinente ley de presupuesto. Dichos créditos
tienen, el carácter de sumas a cuenta y luego se imputa al presupuesto definitivo. Este
sistema es utilizado en Francia cuando un proyecto de presupuesto no puede ser
votado en el término debido.

Reconducción de Presupuesto: consiste en aplicar el presupuesto anterior hasta


tanto el P.L. apruebe el proyecto en discusión.

Es un sistema considerado deplorable desde el punto de vista financiero, por


acentuar el problema de la exactitud de las estimaciones y debilitar las prerrogativas
parlamentarias; sin embargo permite asegurar la continuidad de los servicios y tareas
de la administración, evitando que el retardo pueda trocarse en arma política para
dificultar la acción del Ejecutivo, por lo demás será un estímulo para que el P.L. no sea
remiso en el cumplimiento de su obligación de proveer el presupuesto.

La reconducción del presupuesto ha sido establecida por la Constitución Uruguaya y


Española. También es el sistema establecido entre nosotros por el dto. ley 23254/56
“Si al iniciarse el ejercicio no se hubiera aprobado el presupuesto genera, regirá el que
estuvo en vigencia en el anterior, a los fines de la continuidad de los servicios” y
contenía la aclaración de que esa norma no alcanza a los créditos sancionados por
una sola vez cuya finalidad hubiera sido satisfecha.

El sistema de la ley 24.156 mantiene el mismo criterio general en su art. 27. (Leer)

Presupuestos Plurianuales: Es otro medio para atenuar los inconvenientes de la


anualidad. Es el sancionado y aplicado por un periodo superior a los tradicionales de
12 meses. Se lo utilizo por ejemplo en Francia en 1955-56 conocido como
presupuesto bienal.

En nuestro país se pensó en una solución de esta especie al sancionarse la


Constitución de 1949, mediante la inserción de una cláusula que facultaba al congreso
a fijar por un año o por períodos superiores hasta un máximo de 3 años, a propuesta
del Ejecutivo, el presupuesto de gastos de administración de la Nación. (Nunca se
aplicó).

A pesar de su aparente semejanza con el sistema de reconducción, se diferencia por


que el presupuesto Plurianual es votado con el propósito deliberado de cubrir un
período de tiempo que abarque dos o más años.

En el orden nacional es y ha sido siempre de carácter anual.

Presupuestos Cíclicos: son los aprobados por más de un año con la finalidad de
aplicar una política compensadora de los desequilibrios que se producen en la
actividad económica como consecuencia de las distintas etapas coyunturales.

La influencia ejercida por los conceptos económicos y la ampliación del ámbito de la


actividad del Estado , ha conducido a prescindir de los presupuestos aisladamente
considerados en períodos anuales, para reemplazarlos por otros que, extendiéndose

2
en el tiempo, se ajusten a los ciclos económicos, esto es, a los períodos sucesivos y
alternados de expansión y de depresión. Así nació la teoría de los presupuestos
cíclicos, de manera tal que creándose una solidaridad entre los presupuestos anuales
sucesivos, los excedentes producidos en los períodos de prosperidad son
aprovechados en los de depresión, así como también que los gastos postergados en
las crisis sean efectuados en las épocas de bonanza. La realización de esas
finalidades se obtiene mediante tres procedimientos técnicos:

a) Constitución de Reservas: aprovechando los períodos de prosperidad para crear


excedentes o reservas, mediante la intensificación de los tributos y si fuera necesario
reducción de erogaciones: las reservas así constituidas se utilizarían en las épocas de
crisis, haciendo posible la reducción impositiva o el aumento de los gastos.

b) Créditos de anticipación: se propone combatir los efectos adversos de la coyuntura


mediante la realización de grandes obras, financiadas por empréstitos o por anticipos
del tesoro (emisión). La deuda emitida sería amortizada por los presupuestos de los
períodos de prosperidad.

c) Amortización alternada: consiste en reemplazar la amortización acelerada de los


empréstitos, por un régimen establecido en función del ciclo económico. Ellos serían
atendidos con los excedentes de los períodos de prosperidad y se paralizaría la
amortización, durante la depresión, para no eliminar otros gastos necesarios,
reanudándose en futuros ejercicios favorables.

b) UNIDAD DEL PRESUPUESTO

Consiste en la reunión o agrupación de todos los gastos y recursos del Estado en un


documento único. Por cierto que su enunciación como principio de derecho
presupuestario es una creación doctrina, pues no resultaba de ninguna disposición
constitucional o legal y hasta las viejas obras no lo consignan explícitamente, sino en
forma indirecta.

Modernamente este principio ha sido incorporado a algunas Constituciones y leyes


presupuestarias; como por ej. la de España. Las finanzas tradicionales fundamentan
esta exigencia en consideraciones de orden técnico y de carácter político, son: a)
permite apreciar fácilmente el presupuesto esta equilibrado. b) Facilita el control
presupuestario por el parlamento que se vería dificultado con las cuentas
fraccionadas. c) Dificulta la realización de maniobras, como la simulación de
economías o la ocultación de gastos en cuentas especiales. d) hace posible conocer la
magnitud efectiva del presupuesto y la porción de renta afectada por las erogaciones.
Al contrario Inglaterra e Irlanda exponen en documentos separados los ingresos y los
gastos.

Las nuevas corrientes en materia financiera aún aceptando las ventajas de este
principio propugnan la confección de presupuestos dobles, 1º de capital o inversión 2º
de operación o explotación. (Noruega, Dinamarca).

Nuestro país en lo que respecta a las finanzas de la Nación, se ha mantenido fiel al


principio de unidad presupuestaria. La reforma del decreto-ley 23.354/56, empero sin

3
apartarse sustancialmente de él, tuvo en cuenta la moderna tendencia dualista,
dividiendo el presupuesto en dos partes o secciones independientes: una que
agrupaba a los gastos de funcionamiento o de operación y otra que reunía los gastos
de inversión o de capital. El art3 de esta ley establecía que el presupuesto general se
dividirá en dos secciones: una que denominaba “presupuesto de gastos” equivalente
a lo que en otros países se llama presupuesto de funcionamiento o de operación; y
otra que es el “presupuesto de inversiones patrimoniales” o de capital. El primero
agrupaba los gastos derivados del normal desenvolvimiento de los servicios en el
respectivo ejercicio incluso los de conservación de bienes patrimoniales afectados a
los mismos; y el segundo comprendía el incremento patrimonial derivado de
adquisición de bienes de uso o de producción; ejecución del plan anual de obras y
trabajos públicos.

El presupuesto de gastos se atendía con recursos provenientes de rentas generales;


el de inversiones patrimoniales, con recursos provenientes del uso del crédito,
contribuciones especiales, donaciones legados fondos creados al efecto.

La ley 24.156 comprende la administración financiera y los sistemas de control del


sector público nacional así lo establece en su art.1º. En cuanto a su ámbito de
aplicación el art.8 señala su aplicación a todo el sector público nacional, al que
entiende integrado por a) Administración nacional, conformada por la Adm. Central y
organismos descentralizados; b) empresas y sociedades del estado, S.A. con
participación estatal mayoritaria, etc. La nueva ley mantiene el criterio anterior de
unificación sin presupuestos especiales. Pero según lo dispuesto en el art. 19 de la
ley, esta contendrá tres títulos correspondiendo el segundo y tercero al presupuesto de
recursos y gastos de la Adm. Central y de los organismos descentralizados,
respectivamente. Es decir que en la misma ley de presupuesto deben aparecer ambos
presupuestos desagregados, tanto el de la Adm. Central como el de organismos
descentralizados.

a) UNIVERSALIDAD :
Principio de universalidad también conocido como del producto bruto exige que no
haya compensación entre gastos y recursos; que tanto unos como otros sean
consignados en el presupuesto por su importe bruto sin extraer saldos netos. Así por
ej. las erogaciones de funcionamiento del correo deben ser consignadas por su
cantidad total en el presupuesto general de la Nación, sin descontar la cantidad de
recursos recaudados por esa misma entidad.

Este principio ha sido expresamente reconocido por la ley de contabilidad que en su


art. 2 dispone que los recursos u los gastos públicos figurarán en el presupuesto
separadamente y por su importe íntegro, no debiendo en caso alguno compensarse
entre sí. El art.4 del decreto-ley 23354/56 constituía una posible excepción al principio
de universalidad, al establecer que el régimen contable de las entidades que
desarrollan actividades comerciales o industriales, estableciendo que solo se
computan en el presupuesto general los aportes para cubrir sus déficits de
explotación, o sea, saldos netos.

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El art. 12 de la ley 24.156 mantiene la vigencia del principio de universalidad.
Expresa el art. que los presupuestos “comprenderán todos los recursos y gastos
previstos para el ejercicio, los cuales figurarán por separado y por sus montos íntegros
sin compensaciones entre sí”.

b) NO AFECTACION DE RECURSOS
El principio de no afectación de recursos tiene por objeto que determinados
recursos no se utilicen para la atención de gastos determinados, esto es que no
tengan una “afectación” especial, sino que ingresen a rentas generales ; de manera
que todos los ingresos, sin distinción entren a un fondo común y sirvan para financiar
todas las erogaciones.

Nuestra anterior ley de contabilidad lo adoptaba al establecer que el presupuesto de


gastos (pres. de funcionamiento) se cubría globalmente con rentas generales, sin
afectación particular de recursos especiales a gastos determinados.

La normativa actualmente vigente, establece que “no se podrá destinar el producto


de ningún rubro de ingresos con el fin de atender específicamente el pago de
determinados gastos”. Pero seguidamente establece algunas excepciones al sistema
que como se nota no presenta un aspecto férreo. Las excepciones son: a) los
provenientes de operaciones de crédito público; b) los provenientes de donaciones,
herencias o legados a favor del Estado nacional, con destino específico; c) los que por
leyes especiales tengan afectación específica.

A pesar de las ventajas de orden político y financiero que se atribuyen a esta regla,
no puede desconocerse que la afectación de recursos a determinados gastos ha dado
buenos resultados y que las modernas exigencias económico-sociales tienden a
acentuar las derogaciones a ella. Podemos citar lo que ha ocurrido con el impuesto a
las herencias y donaciones, cuya afectación a los fastos de educación primaria
durante muchos años hizo posible que no sufriera menoscabo, dignificando la
condición de los educadores.

c) ESPECIFICACION DE GASTOS
Como resultado de una prolongada lucha entre el parlamento y el P.E., desarrollada
durante el siglo XIX, llegóse a la formulación del principio llamado de especificación de
gastos generalizándose pronto e incorporándose a las prácticas presupuestarias de
casi todos los países. Conforme este principio la sanción parlamentaria no debe
traducirse en sumas globales libradas a la discrecionalidad de la administración, sino
consistir en importes detallados para cada tipo de erogaciones.

Se aduce a favor de este principio que en la autorización global sería prácticamente


imposible controlar la materialización de los gastos y puede afirmarse que en países
con sistema de gobierno de tipo presidencial y más aún en democracias recientes no
es aconsejable el procedimiento de partidas globales porque se presta a mayores
abusos.

5
Pese a ello en los últimos años se ha acentuado la tendencia hacia la adopción de
normas limitativas del principio de especificación, considerando que el presupuesto no
puede cumplir su finalidad orientadora o directiva de la economía en función de un
plan o de un simple programa de acción, si el P.E. no dispone de medios adecuados
para adoptar las rápidas medidas que exigen la movilidad y variabilidad de la evolución
económica. En este sentido se ha orientado la reforma presupuestaria Francesa al
autorizar los créditos globales para hacer frente a gastos eventuales o accidentales y
para gastos cuya distribución por partidas no pueda fijarse en el momento de su
sanción.

La ley 24.156 en su art 24, dispone que “en los presupuestos de gastos se utilizarán
las técnicas más adecuadas para demostrar el cumplimiento de las políticas, planes de
acción y producción de bienes y servicios de los organismos del sector público
nacional, así como la incidencia económica y financiera de la ejecución de los gastos y
la vinculación de lo mismos con sus fuentes de financiamiento” dejando librado a la
reglamentación el establecimiento de las técnicas de programación presupuestaria y
de los clasificadores de gastos y recursos que serán utilizados.

1) a) EQUILIBRIO
El principio del equilibrio consiste en que la cantidad total de los gastos autorizados
sea igual a la suma total de los recursos estimados para ese mismo año financiero. Si
la cantidad total de los gastos supera la suma total de recursos, el resultado es
negativo denominado déficit ahora bien si el la situación es inversa, los recursos son
superiores a los gastos, hay superávit.

Déficit es de caja cuando se produce en un mismo ejercicio financiero como


consecuencia de momentáneas faltas de fondo en la tesorería.

Déficit material cuando el presupuesto es sancionado a priori con déficit.

Déficit financiero es aquel que surge a posteriori es decir una vez cerrado el
ejercicio financiero.

a) TEORIA CLASICA
La posición antigua hallo ambiente en los medios populares por estar muy
generalizada la idea de identificar las finanzas públicas con las privadas, considerando
que el Estado al igual que los particulares, no debe gastar en un período determinado
más de lo permitido por los ingresos obtenidos.

La teoría clásica no se limitaba a condenar el déficit presupuestario, sino también el


superávit de ingresos. En cuanto al déficit y la forma de extinguirlo -empréstitos y
emisión de moneda- pueden concretarse en las sgtes. proposiciones : a)el desarrollo
del crédito público sustrae fondos a las actividades privadas productivas ; b) como los
déficit son menos dolorosos que los impuestos normales, los presupuestos
desequilibrados son propicios para expandir las actividades estatales y para la
irresponsabilidad gubernativa ; c) el uso del crédito determina el aumento futuro de las
cargas por la acumulación de intereses, estos son costosos y al acumular intereses a

6
la amortización , determinaría la necesidad de recurrir a nuevos empréstitos que, al no
ser atendidos por su magnitud, podrían conducir a la bancarrota del Estado. Otra
consideración estimable es el peligro de inflación por el emisionismo de papel moneda,
que aumenta los medios de consumo sin un incremento equivalente de los bienes de
consumo.

Sin embargo no rechazaban el déficit en forma absoluta, lo consideraban un mal


admisible únicamente en situaciones excepcionales, de lo cual resultaba que el uso
del crédito público debía ser limitadísimo y concretado a esos casos excepcionales.

Respecto al superávit tal situación denunciaba que el Estado había detraído de la


economía privada, una porción mayor de riqueza que la realmente necesaria para
cumplir sus funciones; y les había restado el natural desarrollo de ella.

b) DOCTRINA MODERNA
Parten de la idea de que los problemas financieros son inseparables de la vida
económica y social, la doctrina moderna considera que en determinadas
circunstancias el equilibrio nacional sólo puede lograrse mediante el déficit
presupuestario, y de aquí su denominación teoría del déficit sistemático sin que ello
signifique que el presupuesto siempre deba estar en déficit, ni que este siempre
resulte conveniente ; se trata de propiciar un método activo para estimular la economía
y combatir la crisis.

Fue Beveridge, quien impresionado como Keynes por la desocupación, quien


desarrolló ésta teoría sosteniendo que el estado tiene la obligación de suprimir los
males sociales, (ej. enfermedades), mediante los gastos públicos. Según él debe
gastarse hasta que todas las fuerzas humanas, sean utilizadas productivamente; y
puesto a seleccionar los medios para realizar el equilibrio del presupuesto humano, en
lugar del presupuesto financiero, prefiere incrementar los gastos antes que los
impuestos y cubrir el déficit con empréstitos, así aumenta la demanda global de bienes
de los particulares y es posible realizar inversiones productivas, lo que facilitará el
desarrollo de las empresas y el aumento de la producción.

Una vez desaparecida la emergencia nacional y restaurado el equilibrio


económico, deben disminuir progresivamente las erogaciones excepcionales
para volver al equilibrio financiero, que es consecuencia del primero; por otra
parte no se debe exagerar el déficit, para que los gastos y la creación de
moneda no superen los medios de producción lesionados, pues de lo contrario
habría una inflación destructora.

2) MODERNAS CONCEPCIONES PRESUPUESTARIAS


a) PRESUPUESTOS MÚLTIPLES:
Si bien la tendencia hacia los presupuestos dobles es reciente en la forma como
actualmente se concibe, las teorías tradicionales reconocían que los gastos normales
del Estado debían distinguirse de los excepcionales, y los gastos productivos de los
improductivos.

7
La primera distinción aplicaba el criterio de la regularidad, y entonces, mientras al
presupuesto ordinario iban los gastos que se reproducían periódicamente, el
presupuesto extraordinario contenía los gastos accidentales e imprevisibles (guerras,
catástrofes, terremotos, inundaciones, etc.).

La segunda distinción (gastos productivos e improductivos) aplicaba el criterio de


productividad, y consideraba que en el presupuesto ordinario debían estar
comprendidos los gastos improductivos (aquellos destinados a asegurar la marcha de
la administración y satisfacer las necesidades corrientes), en tanto que en el presu-
puesto extraordinario se incluían los gastos productivos como los de inversión. Sin
embargo, en la actualidad estas consideraciones han perdido vigencia y han sido
reemplazadas. Ciertos gastos aparentemente excepcionales en un período breve,
llegan a ser periódicos en un mayor lapso de tiempo. Asimismo, el criterio de producti-
vidad o improductividad de ciertos gastos es discutible (no todos los gastos de
inversión son productivos y, por otra parte, ciertos gastos de funcionamiento pueden
ser considerados productivos, por lo menos en forma mediata).

Las nuevas concepciones no se atienen a estos criterios, pero estiman necesario


que existan, por lo menos, dos presupuestos con contenido diverso, aunque ello no
obsta a que estén comprendidos dentro de un solo instrumento.

En el presupuesto de explotación u operación deben comprenderse los gastos


normales para el funcionamiento de la administración y la atención de los servicios a
su cargo, las cargas permanentes de la administración, el servicio de la deuda pública
y los gastos de conservación de los bienes patrimoniales.

En el presupuesto de capital o de inversión se incluyen aquellos conceptos que se


incorporan al patrimonio del Estado que incrementan su capital, tales como obras
públicas y adquisición de bienes de uso o de producción, cuya incorporación al
patrimonio estatal tiene el carácter de inversión.

Es decir que los criterios de regularidad y productividad se sustituyen por el de


finalidad de los gastos. Carece, pues, de significado que los gastos se produzcan
regular o accidentalmente, o que sean remunerativos o no. Lo que interesa es el
objetivo que el gobierno procura obtener mediante esos gastos. Países como Dina-
marca, Noruega y Suecia fueron los iniciadores de esta concepción presupuestaria,
que se expande rápidamente.

b) PRESUÙESTOS FUNCIONALES
Otra moderna técnica presupuestaria es la de los presupuestos funcionales. El
sistema consiste en reemplazar la tradicional especificación detallada de gastos
(principio de la especialidad) por un régimen de asignaciones globales en favor de los
funcionarios encarga os e os servicios estatales. La ley fija el máximo autorizado para
cada sección, determinando la forma más eficaz de realización según cálculos previos.
En este método, no se presta tanta atención a la utilización de las partidas
presupuestarias, como al control de la eficacia de los servicios de la administración
pública.

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Como puede verse, el presupuesto funcional prescinde de la especificación detallada
de los gastos y, en cambio, los agrupa según las funciones que ellos deben cumplir.
Se pone de relieve las cosas que el Estado hace, antes que las cosas en que el
Estado gasta. Se asignan, entonces, sumas globales a las distintas funciones, y los
jefes de las entidades destinadas a cumplir esas funciones deben distribuir las
erogaciones según las exigencias reales. Si bien este sistema dificulta el control
presupuestario y requiere mayor responsabilidad de los administradores, se estima
que es más adecuado a la expansión del sector público, tanto en cuanto al volumen de
los gastos, como a la cada vez mayor participación del Estado en la vida económica y
social de la Nación.

c) PRESUPUESTOS POR PROGRAMA


Un método que consiste en un perfeccionamiento del anterior es el que se consigna
con el nombre de "presupuesto por programa". Esta técnica consiste en que cada una
de las grandes funciones del Estado agrupa los gastos según programas o planes a
realizar y según las actividades concretas que deben cumplirse para ejecutar esos
programas.

Los programas establecen metas concretas a cumplir y vinculan los gastos con los
resultados obtenidos, de manera tal de posibilitar la medición de la eficiencia estatal
según los fines de la programación, y no limitándose a una mera contabilización de los
gastos según la técnica tradicional.

Conforme a la técnica de elaboración presupuestaria que estamos estudiando, se


entiende por programa al instrumento destinado a cumplir las funciones del Estado,
por el cual se establece un objetivo (cuantificable o no) en términos de un resultado
final que se cumplirá mediante la integración de un conjunto de acciones con recursos
humanos, materiales y financieros a él asignados, con un costo determinado y cuya
ejecución queda a cargo de determinada unidad administrativa de gobierno. A su vez,
se distinguen dos grandes grupos de programas: los que ponen énfasis en el fun-
cionamiento, o sea, los referidos a la prestación de servicios públicos, y los que ponen
énfasis en la inversión, referidos a obras y trabajos públicos. Este método, del
presupuesto por programa, ha adquirido gran actualidad y ha comenzado a aplicarse
en nuestro país, tanto en la esfera nacional como en las esferas provinciales.

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0
1) DINÁMICA DEL PRESUPUESTO. PREPARACION DEL PRESUPUESTO

La preparación del presupuesto es una tarea eminentemente técnica que consta


básicamente de dos etapas:

A) Determinación de la estructura formal del presupuesto: consiste en dividir el


presupuesto en secciones, anexos, ítems, incisos, partidas principales y parciales,
etc., de modo de presentar correctamente los cuadros de ingresos y egresos y poder
clasificar los gastos y recursos en base a diferentes criterios.

B) Cálculo de los gastos y recursos públicos: consiste en calcular los créditos o


autorizaciones presupuestarias para gastar y cuál será el probable rendimiento que
tendrán todas las fuentes de recursos del estado.

La técnica presupuestaria ha establecido y se sirve de ciertos principios para


realizar el cálculo de las previsiones presupuestarias en cuanto a gastos y recursos:
métodos de valuación directa, indirecta, promedio de las variaciones de los últimos
años, etc.

a) SISTEMAS

Organismos técnicos, Sistema adoptado en Estados Unidos.

El estudio racional del régimen presupuestario comenzó en 1911 con la designación


por el presidente Taft, de la Comisión of Economía and Eficiencia, cuyas
recomendaciones sirvieron de base a la primera ley orgánica sobre la materia. En
efecto, el Budget and Accounting Act de 1.921 se inspiró en ellas y entre otras
innovaciones creó la "Oficina del Presupuesto" (Bureau of the Budget), que luego de
las conclusiones de la Comisión Hoover (1949), se trasformó en una entidad
autárquica, dependiente directamente del presidente de los Estados Unidos.
Constituyéndose en la actualidad en un organismo técnico de excepcional importancia,
que tiene a su cargo el estudio permanente de las necesidades presupuestarias de la
Nación y la formulación del plan anual de gastos y recursos.

b) Organización del Sistema presupuestario en nuestro país

ORGANIZACION

En la República Argentina, la responsabilidad de la preparación presupuestaria


recae sólo sobre el presidente como jefe del poder ejecutivo (Art. 12, ley de
contabilidad).

1
El órgano específico de preparación es el Ministerio de Economía. En este
Ministerio se centralizan las estimaciones y cálculos de las diversas dependencias
estatales. Con estos elementos, se elabora el proyecto que es sometido a la
consideración del presidente de la Nación.

Dentro del régimen de la ley 24.156, sigue siendo el Poder Ejecutivo el órgano
encargado de formular el proyecto de ley anual de presupuesto (Art. 24), el cual es
realizado por la Oficina Nacional de Presupuesto sobre la base de los anteproyectos
preparados por las jurisdicciones y organismos descentralizados (Arts. 17 y 25). Este
proyecto debe ser enviado a la Cámara de Diputados de la Nación antes del 15 de
setiembre del año anterior para el que regirá (Art. 26).

Sin embargo, la reforma constitucional de 1994 en el Art. 100 inc. 6, estableció que
es el Jefe de Gabinete quien envía al Congreso el proyecto de ley de presupuesto
nacional, previo tratamiento en acuerdo de gabinete, y con la aprobación del Poder
Ejecutivo. También le adjudicó la función de hacer recaudar las rentas de la Nación y
de ejecutar la ley de presupuesto nacional (Art. 100. inc. 7), quedando para el
presidente de la Nación, a tenor del Art. 99 inc. 10, la supervisión del ejercicio de la
mencionada facultad del jefe de Gabinete.

En otros países la función preparatoria es confiada al presidente por disposición


constitucional; en tanto que en los de régimen parlamentario corresponde al gabinete y
por delegación al ministro de Finanzas. Que adquiere preponderancia decisiva en esa
tarea.

SECCIÓN II Organización del sistema. Ley 24156

ARTÍCULO 16 a 18 y DECRETO N° 1344/2007

c) Formulación del Presupuesto. Régimen Legal.

ARTÍCULO 24 a 26 y DECRETO N° 1344/2007

2) a) Sanción. Normas Constitucionales


b) Normas Legales (Ley 24156)

La doctrina prevaleciente y la práctica resultan en favor de que la iniciativa


corresponde a la Cámara de Diputados.

Si bien la Constitución no toma disposición al respecto, el punto está resuelto por la


ley de administración financiera 24.156, que en el Art. 26 dispone que la presentación
del proyecto de ley de presupuesto general se hace a la Cámara de Diputados de la
Nación.

El Ejecutivo debe enviar el presupuesto al Congreso, antes del 15 de setiembre de


cada año; en caso de que no lo hiciera; El anterior régimen del decreto-ley 23.354/56,

2
preveía en su Art. 12 que si la Cámara de Diputados no recibiera el proyecto en la
época indicada, "iniciará la consideración del asunto tomando como anteproyecto el
presupuesto en vigor"; redacción que autoriza la interpretación de ser norma
imperativa, y no facultativa, para que la, comisión del Ejecutivo no resulte en
detrimento de las facultades del Poder Legislativo, ni dificulte la organización
financiera del país.

La ley 24.156 no ha previsto tal situación. El problema debe ser abordado desde
dos puntos de vista. Desde una perspectiva constitucional y puramente normativa, tal
ausencia de previsión en el régimen legal no impide de ninguna manera que el
Congreso realice el tratamiento de la ley de presupuestos, por cualquiera de las
Cámaras, pues la ley así emanada resulta ser una norma de igual jerarquía a la ley
24.156. Pero desde una perspectiva funcional y realista, es la Administración el órgano
que tiene la mayor información y detalle sobre los temas presupuestarios, contables y
administrativos, por lo cual su facultad legislativa se verá en los hechos, seriamente
dificultada".

Existen dos sistemas en cuanto al procedimiento de consideración del presupuesto:


a) el observado por la mayoría de los países, en virtud del cual el Poder Legislativo
puede modificar el proyecto del Ejecutivo; b) el sistema de Gran Bretaña, que sólo
autoriza la aceptación o rechazo en bloque, de la propuesta del gabinete.

En nuestro país el proyecto sufre el mismo tratamiento que las leyes en general,
esto es, se gira a la comisión correspondiente y el despacho o informe que ésta
produce es considerado por la Cámara en conjunto; repitiéndose el procedimiento en
el otro cuerpo deliberativo.

La iniciativa parlamentaria en materia presupuestaria no reconoce limitaciones en


Argentina, de modo que el proyecto del Ejecutivo puede ser objeto de modificaciones
de cualquier naturaleza, pero como consecuencia del carácter permanente de las
leyes sobre recursos, la discusión anual del presupuesto sólo versa sobre
erogaciones.

La ley de administración financiera contiene dos disposiciones de importancia, que


tienden a prevenir abusos del pasado.

La primera establece que "todo incremento del total del presupuesto de gastos
previstos en el proyecto presentado por el Poder Ejecutivo nacional, deberá contar con
el financiamiento respectivo" (Art. 28), que complementa lo dispuesto más adelante
(Art. 38) en el sentido de que "toda ley que autorice gastos no previstos en el
presupuesto general deberá especificar las fuentes de los recursos a utilizar para su
financiamiento", y es similar a la adoptada por constituciones extranjeras y de las
provincias.

La segunda prescribe que "no podrán contener normas de carácter permanente, no


podrán reformar o derogar leyes vigentes, ni crear, modificar o suprimir tributos u otros
ingresos" (Art.20),

A pesar de tales excesos, que son innegables, nuestro sistema es preferible al de


concentración de poderes en el Ejecutivo, tan propenso al discrecionalismo y proclive

3
a la dictadura, como lo enseña la experiencia; únicamente es necesario buscar los
remedios para que el parlamento recupere su poder y de este modo proteger a la
democracia. Para ello es menester trasformar la actividad financiera del Poder
Legislativo para adaptarlo a las nuevas exigencias, la acción debe orientarse en tres
aspectos: 1) colaboración estrecha del parlamento en la planificación económica; 2)
coordinación de las previsiones financieras; 3) refuerzo del control presupuestario a
posteriori.

PROMULGACION Y VETO

El presupuesto adoptado por el Congreso pasa, como todas las leyes, al Poder
Ejecutivo para su aprobación y promulgación (Art. 78, C. N., o mediante el
procedimiento abreviado del Art.79). Si el P.E. no observa la sanción dentro del
término de diez días útiles, se la considera aprobada y adquiere fuerza obligatoria (Art.
80).

Este tiene el derecho de veto, facultad de desechar "en todo o en parte" el proyecto
sancionado, devolviéndolo con sus objeciones a la Cámara de origen para nueva
consideración (Art.93), pero se han suscitado dudas acerca de la legalidad del veto
parcial del presupuesto.

El Art. 83 permite el veto total o el veto parcial de cualquier ley, sin que nada
autorice una excepción con el presupuesto; y si se pretendiera argumentar con el
antecedente norteamericano, la situación no es análoga institucionalmente.

FALTA DE SANCIÓN DEL PRESUPUESTO

Si al tiempo de iniciarse el ejercicio no se hubiere aprobado el presupuesto "regirá


el que estuvo en vigencia el año anterior, con los consiguientes ajustes que deberá
introducir el Poder Ejecutivo nacional en los presupuestos de la Administración central
y de los organismos descentralizados", en función de lo establecido en el Art. 27 de la
ley 24.156.

Esta solución, denominada "reconducción del presupuesto", se presenta más


respetuosa de la soberanía popular representada por el Congreso, que el sistema de
la vieja ley 12.961, cuyo Art. 16 autorizaba decretos provisionales del Poder Ejecutivo
sobre la base del proyecto remitido al parlamento.

ARTICULO 27 a 29 y DECRETO N° 1344/2007

En sentido amplio, esta etapa consiste en operaciones o actos reglamentados que


tienen por objeto recaudar los distintos recursos públicos y realizar las erogaciones o
inversiones previstas.

Conforme a ello comprendía dos tipos de operaciones: las relacionadas con la


recaudación de los recursos y las vinculadas con la realización de los gastos. En la
práctica financiera se efectúan sólo las operaciones relativas a los gastos.

4
EJECUCIÓN DEL PRESUPUESTO :

a) EN MATERIA DE GASTOS.

Según la ley 24.156 las etapas de la ejecución son las siguientes:

ORDEN DE DISPOSICION DE FONDOS. Una vez en vigencia legal el presupuesto, el


P.E. debe dictar una orden de disposición de fondos para cada jurisdicción, hasta el
importe de los créditos otorgados en favor de los respectivos directores generales de
administración o funcionarios.

Este sistema es conveniente, pues evita el burocrático trámite anterior, donde cada
entrega de fondos a acreedores del Estado o agentes de la Administración, requería
orden escrita del presidente de la nación.

COMPROMISO. Una vez puestos los fondos a disposición de los jefes de servicios
administrativos, éstos se hallan en condiciones de llevar a cabo erogaciones previstas
en el presupuesto, pero antes éste debe comprometerse. Es el acto administrativo
interno por el cual se afecta el gasto al crédito pertinente autorizado por el
presupuesto, a fin de que no pueda autorizarse para objetivos distintos de los
previstos. La doctrina habla de autolimitación o de autoembargo, ya que una vez
comprometido el gasto, estos quedan imputados a él, con prohibición de darles otro
destino. Tiene gran importancia en los presupuestos de competencia, ya que basta
con que los gastos estén en esta etapa para que sean imputados al ejercicio en que el
compromiso se produce, con prescindencia de la fecha de su materialización.

DEVENGAMIENTO. El Art. 31 de la ley 24.156 y su reglamentación introducen el


concepto del gasto devengado. Implica la liquidación del gasto y la simultánea emisión
de la respectiva orden de pago, que debe efectivizarse dentro de los tres días hábiles
del cumplimiento de la recepción de conformidad con los bienes o servicios
contratados, o con los requisitos administrativos dispuestos para los gastos sin
contraprestación. Asimismo, implica la afectación definitiva de los créditos
presupuestarios correspondientes.

PAGO. La ley 24.156 no hace una separación tajante entre las etapas de
devengamiento y las de pago. De allí que el Art. 35 y especialmente su reglamentación
(decr. 2666/92), establecen las características de la orden de pago y la competencia
para librarla.

Como dice Giuliani Fonrouge, el pago no es únicamente la operación material de


entrega de dinero, sino también una operación jurídica, ya que el tesoro no es ejecutor
ciego de la orden de pago, sino un controlador de la “regularidad jurídica” del
libramiento.

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b) Ejecución del Presupuesto en materia de recursos

La diversidad de recursos del Estado y de organismos recaudadores, así como


también del régimen de percepción de aquellos explica que los procedimientos de
ejecución presupuestaria no ofrezcan uniformidad. La principal fuente de ingresos
corresponde a los tributos públicos. Pero son de carácter vario (impuestos, tasas,
contribuciones especiales) de manera que aun dentro de esta categoría existen
regímenes diferentes; los principales son recaudados por la Dirección General
Impositiva, Administración Nacional de Aduanas, por reparticiones estatales, etc.
Aparte de esto existen ingresos de orden dominical, de tipo empréstito,
correspondientes a actividades desarrolladas por el Estado, con numerosas
modalidades y tipos.

La función de centralizar la recaudación de los recursos de la administración central


y distribuirlos en las tesorerías jurisdiccionales para que éstas efectúen los pagos de
las obligaciones generadas corresponde a la Tesorería General de la Nación (Art. 74,
inc. c, de la ley 24.156). Los fondos que administren las jurisdicciones y entidades de
la Administración pública nacional deberán ser depositados en cuentas del servicio
bancario a la orden conjunta del jefe del servicio administrativo y de tesorero o
funcionario que lo suplante o haga sus veces (Art.78).

El Art.40 prevé el supuesto de las sumas a recaudar que no pudieran hacerse


efectivas, por resultar incobrables. La declaración de incobrabilidad no implica la
extinción de los derechos del Estado (sujetos a la regla de prescripción que
corresponda), ni de la responsabilidad en que pudiera incurrir el funcionario o
empleado recaudador o cobrador, si la situación le pudiera ser imputable.

6
0
CONTROL DEL PRESUPUESTO

a) FINALIDADES Y FORMAS DEL CONTROL

El control de la ejecución del presupuesto tiene una finalidad técnico-legal vinculada


con la regularidad de los actos de gestión y el adecuado manejo de los fondos
públicos; además, persigue un objetivo más amplio, de tipo político la apreciación de la
orientación general del gobierno del Estado, costo y eficiencia de los organismos
oficiales y adecuación de la actividad desarrollada a los planes de acción económico-
social. Esto explica que la doctrina establezca una distinción conceptual entre el
aspecto puramente contable (accountability function) y el aspecto directivo
(management function) que están implícitos en el control del presupuesto.

Desde el punto de vista teórico, es posible apreciar la función controladora en


distintos perfiles y clasificarla de este modo: 1) según las personas afectadas, en
control de los ejecutores administrativos y de los funcionarios contables; 2) en cuanto
a los hechos realizados, en control de recursos y de erogaciones; 3) considerando la
oportunidad en que se ejerce la fiscalización, en control preventivo también llamado a
priori o preaudit, que tiene lugar antes o durante la operación de ejecución y control
definitivo o a posteriori o postaudit; 4) según la naturaleza de los órganos
intervinientes, en control administrativo, jurisdiccional y político.

SISTEMAS DE CONTROL. - Existen dos sistemas principales aplicados por los


distintos países: el legislativo o tipo inglés y el jurisdiccional o tipo francés. Otros
autores agregan un tercer sistema denominado tipo político o político-partidario, que
correspondía al sistema de la ex Unión Soviética, en el cual el examen de cuentas y
control general de ejecución del presupuesto está a cargo del partido comunista.

a) Sistema legislativo o tipo inglés. En Gran Bretaña el control es realizado


directamente por el parlamento, al menos en principio, ya que la complejidad de la
tarea ha obligado en la práctica a confiar en otros organismos. La función técnica es
ejercida sustancialmente por el Departament of Exchequer and Audit, que obtuvo su
estructura actual en tiempos de Gladstone es independiente de la Tesorería aunque
actúa en relación con ella, y lo dirige el Controller and Auditor General, nombrado por
la Corona pero considerado "officer" de la Cámara de los Comunes y tiene la misma
condición que los jueces. Sus funciones son puramente de vigilancia, información,
averiguación, sin tener relación con la contabilidad general.

Por otra parte, el control parlamentario propiamente dicho, imposible de realizar por
la Cámara constituida en Comisión, como es práctica en cuestiones financieras, ha
derivado en la creación de comisiones especiales, siendo la más antigua e importante
el Public Accounts Committee (que también es de la época de Gladstone), compuesto
por quince miembros elegidos entre los distintos partidos representados en los
Comunes y cuya presidencia es confiada a un miembro de la oposición.

La técnica británica es muy particular, aplicándose al sistema llamado test audit,


que consiste en seleccionar determinadas actividades o reparticiones para una

1
fiscalización intensiva, prescindiendo de otras, e inspeccionarlas en forma
intempestiva, de manera que las obligue a una permanente regularidad.

El sistema de los Estados Unidos es de inspiración británica pero con variantes. El


Budget and Accouuting Act of l921 estableció la estructura actual del régimen de
control, creando una entidad independiente del Poder Ejecutivo pero con ciertas
funciones y responsabilidades de carácter administrativo (como el régimen de
contabilidad) y otras de fiscalización a posteriori con responsabilidad directa ante el
Congreso.

A su frente se halla el Comptroller Genneral, nombrado por el presidente con


acuerdo del Senado por el término de quince años, no reelegible, y que sólo puede ser
removido por causas graves. Por otra parte. Cuando este último sancionó su régimen
propio, el Legislative Reorganization Act of 1946, dejó sentado que pertenecen al
Poder Legislativo y amplió sus facultades de fiscalización sobre las dependencias
administrativas y corporaciones estatales; finalmente se estableció un régimen de
cooperación entre el Congreso, Comptroller-. La Tesorería y la Oficina del Censo, que
atribuye características singulares al sistema.

b) El control del Presupuesto en nuestro país

El sistema instaurado tanto por la ley 24.156, como por el Art. 85 de la Constitución
nacional reformada en 1994, se asimila a este tipo de sistemas de control, diferenciado
del tipo que veremos a continuación.

Sistema jurisdiccional o tipo francés. El sistema francés está estructurado sobre la


base de una Corte de Cuentas (o Cámara de Cuentas), tribunal independiente de gran
prestigio, con funciones de carácter jurisdiccional, pero esto no significa inexistencia
de un control interno de los órganos administrativos y de otro realizado por el
parlamento.

La Corte de Cuentas fue creada por Napoleón I en 1807 y está integrada por
funcionarios inamovibles, con categoría de magistrados, poseyendo una estructura
similar en cierto modo al Consejo de Estado. La principal función de la Corte reviste
carácter jurisdiccional y se ejerce únicamente sobre los contables, no con respecto a
los administradores, pero también desarrolla una actividad controladora de orden
administrativo no jurisdiccional. Las decisiones jurisdiccionales de la Corte son
susceptibles de un recurso de revisión ante el propio tribunal y de otro de casación
ante el Consejo de Estado.

La reforma de las instituciones presupuestarias, realizada en Francia en 1956 ha


acentuado la evolución en todos los países -inclusive anglosajones- hacia una
disminución del control parlamentario reteniendo la facultad de adoptar decisiones en
cuestiones sustanciales, de principios, y el “control supremo de la acción gubernativa”.

El control en la Argentina

2
CONSIDERACIONES PRELIMINARES. - El anterior régimen de contabilidad
pública instituido por el decreto-ley 23.354/56, especialmente al crear el Tribunal de
Cuentas de la Nación, estableció la separación entre el control interno y el control
externo de la actividad presupuestaria. Las provincias se dan sus propias instituciones
y pueden organizar libremente el control, por lo cual éste asume variedad de formas.

En atención a la naturaleza de los órganos que lo ejercen y siguiendo a la doctrina


francesa, tradicionalmente se distingue el control en administrativo, jurisdiccional y
parlamentario: el primero a cargo de la administración; el segundo, de un tribunal; el
último, del parlamento. Sin embargo, esta clasificación ya no es rigurosamente exacta
en Francia y menos entre nosotros.

Por la naturaleza de la tarea confiada por el decreto-ley 23.354/56 al Tribunal de


Cuentas -administrativa y jurisdiccional-, al carecer de status constitucional, quedaba
en situación anómala: aunque constitucionalmente pertenecía a la órbita de la
administración, gozaba de absoluta independencia funcional y era controlado por el
Congreso, no por el Ejecutivo.

No siempre esta independencia se mantuvo, llegando incluso a situaciones donde


los miembros del Tribunal de Cuentas fueron removidos por el presidente de la
Nación.

Actualmente fue instituido por la ley 24.156, el sistema de control interno del Poder
Ejecutivo nacional estuviera a cargo de un nuevo órgano, la Sindicatura General de la
Nación (Art. 96), y el control externo del sector público nacional a cargo de la Auditoría
General de la Nación (Art. 116). Respecto de este último órgano, se produjo una
particular situación jurídica, pues su creación legal fue luego retomada por la reforma
constitucional, la cual introdujo un capítulo nuevo (el sexto), dentro de la sección
primera (referida al Poder Legislativo), dentro de título primero (gobierno federal), de la
segunda parte (autoridades de la Nación) de la Constitución nacional.

Esta introducción posterior conlleva algunas modificaciones al texto de la ley, y de


su decreto de promulgación que introdujo observaciones parciales (veto parcial)
asimismo en cuestiones referentes a la Auditoría General de la Nación que, con
independencia de lo que disponga el texto legal, deben reputarse actualmente
vigentes y operativas en plenitud.

c) Funciones de la Sindicatura General de la Nación.


Régimen Legal

En el sistema anterior el registro de las operaciones económico-financieras


mediante una contabilidad central y el control realizado en la propia administración, el
control interno, estaban a cargo de la Contaduría General de la Nación, repartición que
otrora había concentrado todas las funciones de fiscalización y que fue trasformada en
un organismo de poderes limitados, subordinado jerárquicamente al secretario de
Hacienda, del cual dependía directamente.

3
Estaba integrado por el contador general, el subcontador general y un cuerpo de
contadores y empleados auxiliares que actuaban en las oficinas centrales y también
en cada una de las reparticiones estatales, en las cuales los contadores dependían de
los jefes de los respectivos servicios administrativos, actuando como agentes de
coordinación con la Contaduría General (arts. 72 y 77, ley contab., regl. por decreto
5506/58).

Si bien las principales funciones controladoras correspondían al Tribunal de


Cuentas, la Contaduría también actuaba en la faz preventiva y durante la ejecución del
presupuesto, ya que debía cuidar que las "órdenes de disposición" y los "libramientos"
hubieran sido intervenidos por dicho tribunal, habiéndole estado prohibido darles curso
en caso de incumplimiento de dicho requisito.

Por otra parte, cuando intervenía en actos administrativos "presuntivamente


violatorios de disposiciones legales o reglamentarias", debía suspender su trámite y
ejecución hasta que se pronunciara el Tribunal de Cuentas (Art. 75, modif. por decr.-
ley 3453/58).

Además de las funciones contable y de control interno mencionadas, el Art.73 del


decreto-ley 23.354/56 enumeraba otras, entre las cuales se destacaba la preparación
de la cuenta general del ejercicio, cuyo contenido estaba especificado en el Art. 37, y
que debía enviar al Tribunal de Cuentas antes del 31 de mayo del año siguiente a la
clausura del ejercicio financiero (Art. 38, párrafo segundo).

En el régimen actualmente vigente, la ley 24.156 ha puesto en cabeza de la


Contaduría General de la Nación la tarea de ser el órgano rector del sistema de
contabilidad gubernamental (arts. 85 a 95 de la ley), órgano integrado por un contador
general y un subcontador general. De entre todas sus tareas, la que es
institucionalmente más relevante, aparece en el inc. b del Art. 91; preparar anualmente
la cuenta de inversión contemplada en el Art. 67, inc. 7 (actualmente Art. 75, inc. 8 tras
la reforma de 1994) de la Constitución nacional y presentarla al Congreso nacional. El
Art.95 establece que la cuenta de inversión debe presentarse antes del 30 de junio del
año siguiente al que el documento corresponda.

Por su parte, el control interno del Poder Ejecutivo nacional ha quedado en manos
de la Sindicatura General de la Nación, órgano instituido por la ley 24.156, con
antecedentes en la ya mencionada Sindicatura General de Empresas Públicas (ver
punto 124, in fine, y el decreto 253/93). Se trata de una entidad con personería jurídica
propia, y autarquía administrativa y financiera, dependiente del presidente de la Nación
(arc.97), cuya competencia es el control interno de las jurisdicciones que componen el
Poder Ejecutivo nacional y los organismos descentralizados, y asimismo las empresas
y sociedades del Estado, sus métodos y procedimientos de trabajo (Art. 98).

El Art. 100 de la ley 24.156 establece que en cada jurisdicción y entidad sometida a
control se creará una unidad de auditoría interna, las que dependerán,
jerárquicamente, de la autoridad de cada organismo, y deberán actuar
coordinadamente en los aspectos técnicos con la Sindicatura General. El concepto de
auditoría interna aparece definido por el Art. 102 de la ley, como un servicio a toda la
organización, consistente en un examen posterior de las actividades financieras y

4
administrativas de las entidades abarcadas por el control, realizado por las unidades
de auditoría interna.

Un principio importante contiene la parte final del Art. 102 de la ley, en cuanto
establece que "las funciones y actividades de los auditores internos deberán
mantenerse desligadas de las operaciones sujetas a su examen". Si bien es un
principio lógico, en cuanto a la separación entre la tarea controlante y la tarea
controlada, no siempre se ha respetado tan elemental norma. Es por ello observable
que el decreto 971/93, que crea el cargo de auditor interno en cada jurisdicción y
entidad de la Administración Pública Nacional, en su Art. 5 establezca que el auditor
interno "no gozará de estabilidad en el cargo y podrá ser removido por resolución de la
autoridad máxima de la jurisdicción o entidad".

Entre las funciones de la Sindicatura General de la Nación (Art. 104 de la ley) está
la de vigilar el cumplimiento de las normas contables emanadas de la Contaduría
General de la Nación; facilitar el desarrollo de las actividades de la Auditoría General
de la Nación; comprobar que los organismos controlados pongan en práctica las
observaciones y recomendaciones efectuadas por las unidades de auditoría interna y
acordadas por los responsables; poner en conocimiento del presidente de la Nación
los actos que hubiesen acarreado o estime puedan acarrear significativos perjuicios al
patrimonio público; etc.

Como deberes, el Art. 107 establece el de informar: a) al presidente de la Nación


sobre la gestión financiera y operativa de los organismos comprendidos dentro del
ámbito de su competencia; b) a la Auditoría General de la Nación, sobre la gestión
cumplida por los entes bajo la fiscalización de la Sindicatura; c) a la opinión pública en
forma periódica.

d) Funciones de la Auditoria General de la Nación. Régimen


Legal

El régimen de control externo de la Administración pública ha sido sustancialmente


modificado tras la sanción de la ley 24.156 primero, y de la reforma constitucional de
1994 después.

La ley 24.156 creó la Auditoría General de la Nación, como ente encargado de


llevar a cabo el control del sector público nacional, dependiente del Congreso nacional,
con personería jurídica propia, independencia funcional, y con independencia
financiera (Art. 1 16). Pero los caracteres con que fue legalmente creada la Auditoría
General de la Nación fueron en parte confirmados y en parte modificados por la
reforma constitucional llevada a cabo en 1994. La Constitución reformada, en su Art.
85, contempla a la Auditoría General de la Nación como un órgano de control externo
del sector público nacional, que debe necesariamente existir, por mandato
constitucional.

5
Como primera característica debe señalarse que el sistema se aleja del anterior,
confiado a un Tribunal de Cuentas, que se vio en el punto 145 b como de tipo
jurisdiccional, para constituir un sistema legislativo.

La Auditoría General de la Nación es un ente que depende directamente del Poder


Legislativo. Dice el Art. 85 de la Constitución que el control externo del sector público
nacional "en sus aspectos patrimoniales, económicos, financieros y operativos, será
una atribución propia del Poder Legislativo". El texto constitucional anterior a la
reforma no establecía tal atribución, sino que ésta surgía implícitamente, como
derivación del examen de la cuenta de inversión, y por la creación por ley del Tribunal
de Cuentas.

La norma constitucional establece que "el examen y la opinión del Poder Legislativo
sobre el desempeño y situación general de la Administración pública estarán
sustentados en los dictámenes de la Auditoría General de la Nación", y que ella tendrá
a cargo "el control de legalidad, gestión y auditoría de toda la actividad de la
Administración pública centralizada y descentralizada, cualquiera que fuera su
modalidad de organización, y demás funciones que la ley le otorgue", y asimismo
tendrá intervención en forma necesaria "en el trámite de aprobación o rechazo de las
cuentas de percepción e inversión de los fondos públicos".

Si bien por una cuestión de práctica legislativa y funcional, la Auditoría General de


la Nación sigue funcionando regida por la ley 24.156, con la reforma constitucional se
originan conflictos entre las directivas constitucionales y algunas disposiciones de la
referida ley, como las que surgen de los arts. 116, tercer párrafo, 117 y 123 de esta
última.

Es decir que, resumiendo la normativa al respecto, la Auditoría General tiene a su


cargo el control externo de la Administración Pública nacional, centralizada y
descentralizada, cualquiera que sea su forma de organización, debiendo controlar los
aspectos patrimoniales, económicos, financieros, operativos, presupuestarios,
analizados en cuanto a su legalidad y a su gestión, mediante tareas de auditoría.

El control de la gestión de los funcionarios referidos en el Art. 45 de la Constitución


(actual Art.53, tras la reforma) será ejercido en forma global y exclusiva por las
Cámaras del Congreso de la Nación.

La ley en su Art. 117 establece, además, que tendrá que dictaminar sobre los
estados contables financieros de las empresas y sociedades del Estado, los entes
reguladores de servicios públicos, los entes privados adjudicatarios de procesos de
privatización (en cuanto a las obligaciones provenientes de los respectivos contratos),
y de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires. Sin embargo, respecto de este
último punto de la ley, debe ser interpretado a la luz de lo establecido por la
Constitución reformada, en su Art. 129.

RESPONSABILIDAD.

A diferencia del régimen anterior donde el Tribunal de Cuentas realizaba esta tarea,
junto con el juicio de cuentas, en la ley 24.156 los Arts. 130 y 131 establecen

6
escuetamente los lineamientos del régimen. El Art. 130 señala que toda persona física
que se desempeñe en las jurisdicciones o entidades sujetas a la competencia de la
Auditoría General de la Nación debe responder por los daños económicos que por su
dolo, culpa o negligencia ocasionara en el ejercicio de sus funciones a los entes
mencionados, siempre que no se encontrara comprendida en los regímenes
especiales de responsabilidad patrimonial.

El Art. 131 establece que la acción para hacer efectiva esta responsabilidad
prescribe en los plazos fijados por el Código Civil, contados desde el momento de la
comisión del hecho generador del daño o, producido éste, si es posterior, cualquiera
sea el régimen de responsabilidad patrimonial aplicable a estas personas.

CONTROL PARLAMENTARIO. FACULTADES DEL CONGRESO.

El control de la ejecución del presupuesto por el Poder Legislativo constituye la


etapa final del proceso señalado al comienzo del presente capítulo. Generalmente se
lo explica diciendo que el parlamento debe comprobar si sus decisiones han sido
respetadas, pero esto que es tan sencillo en el plano teórico resulta de difícil
cumplimiento en la práctica, pues el presupuesto ha asumido tal magnitud y
complejidad técnica, que el parlamento, absorbido por problemas de otra índole, no
puede realizar un control efectivo.

El reconocimiento general de la ineficacia y paulatina decadencia del control


legislativo a posteriori ha originado en los últimos años una tendencia hacia la creación
de organismos y medios que hagan factible el control durante la ejecución del
presupuesto. No se trata del control indirecto, realizado mediante interpelaciones y
pedidos de informes. Necesariamente restringido y de tipo político, sino de una
fiscalización de carácter técnico, amplia y permanente.

A esta orientación responde la creación en Francia de subcomisiones de control, los


Committees de la Cámara de los Comunes en Gran Bretaña y del Congreso de
Estados Unidos, así como también la institución de organismos separados del
Ejecutivo y dependientes, en mayor o menor grado, del Poder Legislativo.

Nuestro país se ha sumado a esta tendencia. El Art. 87 del decreto-ley 23.354/56,


sobre contabilidad, disponía que el Tribunal de Cuentas "comunicará de inmediato al
Congreso" los actos observados por él y que fueren mantenidos por el Ejecutivo, de
manera que se trata evidentemente de un control realizado durante la ejecución del
presupuesto. Pero esto suscita un interrogante: ¿tiene facultad el Congreso para
ejercitar esta forma de control?

El Art. 75, inc. 8, de la Constitución, confiere al Congreso la facultad de "aprobar o


desechar la cuenta de inversión", es decir, le atribuye el control a posteriori; nada dice
del control preventivo (que incluye el período de ejecución).

El Art.85 de la Constitución nacional establece que el control externo del sector


público nacional en sus aspectos patrimoniales, económicos, financieros y operativos
será atribución propia del Congreso, debiendo su examen y opinión estar sustentados
en los dictámenes de la Auditoría General de la Nación.

7
Si bien nada dice en cuanto al momento de examen, si éste debe ser anterior,
concomitante o posterior, del último párrafo del Art. 85 de la Constitución, parece
desprenderse que el control es amplio, abarcando el aspecto posterior de la gestión, o
concomitante a ella. En el sentido de observar v comunicar al Congreso en los actos
de larga duración en el tiempo, sin tener que esperar al cierre del ejercicio o al examen
de las cuentas públicas.

Esta interpretación en favor del Control preventivo del órgano constitucional


legislativo está conteste con las opiniones de los constituyentes en torno al debate de
la Convención Constituyente sobre la Auditoría General de la Nación.

EXAMEN DE LA CUENTA DE INVERSIÓN.

Según vimos oportunamente, el año financiero ahora termina el 31 de diciembre


(Art. 10, ley 24.156).

El Art. 91, inc. h), de la ley 24.156 establece que el órgano encargado de preparar
la cuenta de inversión es la Contaduría General de la Nación. El Art. 92 regula que
dentro de los cuatro meses de concluido el ejercicio financiero (hasta el 30 de abril) las
entidades del sector público nacional, excluida la Administración central, deberán
entregar a la Contaduría General los estados contables financieros de su gestión
anterior.

Paralelamente, el Art. 43 regula que al cierre de las cuentas del ejercicio los
organismos responsables de la liquidación y captación de recursos, como asimismo de
gastos y pagos, deberán reunir la información, que junto con el análisis de la
correspondencia entre los gastos y la producción de bienes y servicios que preparará
la Oficina Nacional de Presupuesto, se centralizará en la Contaduría General de la
Nación a los fines de la elaboración de la cuenta de inversión del ejercicio.

El Art. 95 establece que la cuenta de inversión deberá presentarse anualmente al


Congreso nacional antes del 30 de junio, conteniendo como mínimo: a) los estados de
ejecución del presupuesto de la Administración nacional, a la fecha de cierre del
ejercicio; b) los estados que muestren los movimientos y situación del Tesoro de la
Administración central; c) el estado actualizado de la deuda pública interna, externa
directa e indirecta; d) los estados contable-financieros de la Administración central; un
informe que presente la gestión financiera consolidada del sector público durante el
ejercicio y muestre los respectivos resultados operativos, económicos y financieros.

En su último párrafo, el Art. 95 menciona que la cuenta de inversión contendrá


comentarios sobre: a) el grado de cumplimiento de los objetivos y metas previstos en
el presupuesto; b) el comportamiento de los costos y de los indicadores de eficiencia
de la producción pública; y c) la gestión financiera del sector público nacional.

El Art.75, inc.8, de la Constitución nacional, establece que el Congreso nacional


tiene la facultad de "aprobar o desechar la cuenta de inversión", estableciendo de esta
forma un control parlamentario posterior a los actos del Poder Ejecutivo, que se suma
al control preventivo y concomitante que ya hemos analizado.

8
El anterior régimen del decreto-ley 23.354/56 establecía que llegado al Congreso,
los documentos eran examinados por una comisión bicameral, que podía requerir de
las oficinas administrativas los informes necesarios para el desempeño de su misión
(Art.39, decreto-ley 23.354/56). En verdad, ese organismo había sido instituido por la
ley 14.179, del año 1952, con la denominación de "Comisión Parlamentaria Mixta
Revisora de Cuentas de la Administración", estando integrada por dos senadores y
tres diputados e investida de las facultades que ambas Cámaras delegan en sus
comisiones permanentes y especiales.

Según el sistema, la Comisión debía expedirse antes del 15 de setiembre, esto es,
dentro de los tres meses y medio de la fecha máxima señalada para su recepción; si
no lo hiciere, el Congreso "tomará como despacho el informe del Tribunal de Cuentas"
(Art.40, decreto-ley 23.354/56); sin embargo, al transferirse del 31 de mayo al 31 de
julio la última etapa, forzoso es modificar la fecha 15 de setiembre por 15 de
noviembre.

Indudablemente, el término era exiguo pero la experiencia demostró que su


ampliación no conduciría a nada práctico, ya que aun contando con un equipo de
técnicos de que no se dispone, difícilmente se obtendrían resultados distintos de los
consignados por el Tribunal de Cuentas. Era preferible, pues, la solución de la ley:
tener por despacho el informe de dicho organismo, al expirar el plazo aludido.

El Congreso debía pronunciarse en un término que la ley 12.961 fijaba en cinco


años y que el decreto-ley 23.354/56 modificó parcialmente. Este último decía, en
efecto, que "si al clausurarse el quinto período ordinario de, sesiones posterior a su
presentación no existiera pronunciamiento del Congreso, la cuenta general del
ejercicio se considerará automáticamente aprobada” (Art.40, decreto-ley 23.354/56).
Como se ve, no se trata ahora de "cinco años", sino de "cinco períodos ordinarios de
sesiones", que por lo común serán cinco años pero que en casos especiales puede
representar un tiempo mayor.

Consideramos que la disposición era acertada, por la necesidad de dar estabilidad


y certeza a las situaciones jurídicas y la inconveniencia de mantener en suspenso las
cuentas del Estado por largo tiempo, con las perturbaciones imaginables. La acerba
crítica que mereció la ley anterior aparece exagerada; por lo demás, el término ha sido
ampliado en cierto modo de manera que el Congreso tiene plena oportunidad de
ejercer sus facultades de control.

La ley 24.156 vigente establece que la Comisión Parlamentaria Mixta Revisora de


Cuentas se conforma con seis senadores y seis diputados, cuyos mandatos durarán
hasta la próxima renovación de la Cámara a la que pertenezcan, elegidos
simultáneamente en igual forma que los miembros de las comisiones permanentes
(Art. 128).

La Comisión elegirá anualmente un presidente, un vicepresidente y un secretario,


que pueden ser reelectos. Las facultades de la Comisión serán las que ambas
cámaras delegan en sus comisiones permanentes y especiales. La Comisión, para el
cumplimiento de sus funciones, debe: a) aprobar juntamente con las comisiones de
Presupuesto y Hacienda de ambas Cámaras el programa de acción anual de control
externo a desarrollar por la Auditoría General de la Nación; b) analizar el proyecto de

9
presupuesto anual de la Auditoría General y remitirlo al Poder Ejecutivo para su
incorporación en el Presupuesto General de la Nación;

c) encomendar a la Auditoría General de la Nación la realización de estudios,


investigaciones y dictámenes especiales sobre materia de su competencia, fijando los
plazos para su realización; d) requerir de la Auditoría General toda la información que
estime oportuno sobre las actividades realizadas por dicho ente; e) analizar los
informes periódicos de cumplimiento del programa de trabajo aprobado, efectuar las
observaciones que pueden merecer e indicar las modificaciones que estime
conveniente introducir; f) analizar la memoria anual que la Auditoría General deberá
elevarle antes del 1 de mayo de cada año (Art. 129). Se ha criticado esta ley por
constituir una superposición normativa con lo dispuesto en los Arts. 8 y 9 de la ley
23.847, que rige la labor de la mencionada Comisión Parlamentaria.

5) CIERRE DEL EJERCICIO

a) Sistemas. IMPUTACION DE GASTOS Y RECURSO

Existen dos sistemas para referir los gastos y recursos a determinado ejercicio
presupuestario: el presupuesto de caja o de gestión y el presupuesto de competencia.

En el presupuesto de caja se consideran únicamente los ingresos y erogaciones


efectivamente realizados durante el período presupuestario, con independencia del
origen de las operaciones. Según este sistema, las cuentas se cierran
indefectiblemente en el término del año financiero y, por lo tanto, no puede haber
“residuo”.Lo que no se pagó o cobró durante el año, pasa al ejercicio siguiente. En
consecuencia, el ejercicio financiero coincide con el año financiero.

En el presupuesto de competencia se computan los ingresos y gastos originados en


el período presupuestario, con prescindencia del momento en que se hacen efectivos.
Conforme a este sistema, las cuentas no cierran al finalizar el año, pues deben quedar
pendientes hasta que se liquiden las operaciones comprometidas. El “residuo” que
resulte al final del año se imputa al mismo ejercicio en lugar de pasar a siguiente, y se
fija un período de tiempo adicional para que se contabilice. El ejercicio financiero no
coincide con el año financiero, ya que el primero es más extenso.

El sistema argentino, que estableció la anterior ley de contabilidad (decr. Ley


23.354/56), era de caja en cuanto a los recursos, dado que éstos se contabilizaban en
el momento en que se percibían materialmente, y no cuando se devengaren. En
cambio, para los gastos se adoptaba un sistema de “competencia atemperado”.
Consistía en que las erogaciones se contabilizaban en el período en que eran
comprometidas, y no materializadas.

b) Disposiciones de la Ley 24.156

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El régimen instaurado por la ley 24.156 contiene la sección IV, denominada “Del
cierre de cuentas”, compuestas por los Arts. 41 a 43. El Art. 41, concordando con el
Art. 10, establece la norma general según la cual las cuentas del presupuesto de
recursos y gastos se cierran el 31 de diciembre de cada año.

En cuanto a los recursos, después de la fecha de cierre, los ingresos que se


recaudan se consideran parte del presupuesto posterior, con independencia de la
fecha en que se hubiera originado la obligación de pago o su liquidación.

En lo ateniente a gastos, se refiere a ellos el Art. 41, párr. 2°, según el cual “con
posterioridad al 31 de diciembre de cada año no podrán asumirse compromisos ni
devengarse gastos con cargo al ejercicio que se cierra en esa fecha”. Este texto está
incorrectamente redactado en forma negativa, en lugar de expresar en forma
afirmativa el contenido del precepto. No obstante, no hay dificultad en interpretar que
en este ítem la ley adhiere al sistema de competencia.

Del presupuesto de la Administración Nacional SECCIÓN IV Del cierre de


cuentas

ARTÍCULO 41ª 43 y DECRETO N° 1344/2007

11
0
1) a) Teoría general del Crédito Público. Concepto

La palabra "crédito" deriva del latín “crédito”, y esta locución proviene a su

vez del verbo “cerdee”, que significa "tener confianza o fe".

El término "público" hace referencia a la persona de aquel (Estado) que hace


uso de la confianza en él depositada, pidiendo se le entreguen bienes ajenos
en contra de la promesa de la ulterior restitución. Sostiene Oria que la
expresión “crédito” se relaciona con dos formas de creencia: la confianza o fe
en la moral de una persona dispuesta a cumplir sus deberes y obligaciones, y
la creencia de que podrá cumplirlos por disponer de medios económicos.
Giuliani Fonrouge (t.2, p.1092) comenta favorablemente estas expresiones del
profesor Oria, manifestando que si en el caso del crédito privado pueden influir
otros factores, en el crédito público solo actúa la fe o confianza que inspira el
Estado, no tanto por su opulencia como por su conducta frente a los derechos
humanos y en el ámbito de la política nacional e internacional. Lo que cuenta,
entonces, es la seriedad y unidad de conducta, el cumplimiento escrupuloso de
los compromisos asumidos y el buen orden de la gestión de la hacienda
pública.
Por otra parte, José M. Martin, sostiene que el Crédito Publico se relaciona
1) con la aptitud del Estado que contraer una obligación, y 2) con la capacidad
económica, o sea, patrimonio y recursos, de que este dispone para cumplir con
dicha obligación.
Su aptitud se manifiesta por medio de un conjunto de fundamentales
condiciones político-institucionales, entre las cuales cabe destacar, por su
importancia, la normalidad o estabilidad de sus instituciones, la plena vigencia
de las garantías y derechos de los particulares en especial, los que atañen a la
libertad individual y a la propiedad privada, y el mantenimiento del orden
público. De igual modo, la capacidad económica de un Estado se juzga o
aprecia no solo, como comúnmente se cree, por la magnitud del valor de sus
bienes patrimoniales, sino también por otros factores económico-financieros,
tales como la política de gastos y recursos públicos, la política monetaria y su
balanza de pagos.
Podemos decir, entonces, que crédito público es la aptitud política,
económica, jurídica y moral de un Estado para obtener dinero o bienes en
préstamo; el empréstito es la operación crediticia concreta mediante la cual el
Estado obtiene dicho préstamo, y la deuda pública consiste en la obligación
que contrae el Estado con los prestamistas como consecuencia del empréstito.

TITULO III DEL SISTEMA DE CRÉDITO PÚBLICO DEL SISTEMA DE


CRÉDITO PÚBLICO
ARTICULO 56.- El crédito público se rige por las disposiciones de esta Ley, su
Reglamento y por las leyes que aprueban las operaciones específicas. Se
entenderá por crédito público la capacidad que tiene el Estado de endeudarse
con el objeto de captar medios de financiamiento para realizar inversiones
reproductivas, para atender casos de evidente necesidad nacional, para
reestructurar su organización o para refinanciar sus pasivos, incluyendo los

1
intereses respectivos. Se prohíbe realizar operaciones de crédito público para
financiar gastos operativos.
REGLAMENTADO POR DECRETO N° 1344/2007: ARTICULO 56.-
Considerarse gastos operativos a aquellas erogaciones de la Administración
Nacional incluidas como "Gastos de Consumo" en el Clasificador Económico
del Gasto. No se considerarán gastos operativos los destinados a ejecutar
programas de asistencia técnica financiados por Organismos Multilaterales de
Crédito.

b) Evolución del Crédito Publico

El hecho de que el crédito público se use actualmente sobre la confianza y


buena fe, es producto de su evolución histórica. Recuerda Ahumada (t.2 Pág.
896) que el auge de este recurso estatal comenzó en el siglo XIX. Los
prestamos entre los Estado de la antigüedad se hacían muy difíciles por el
procedimiento de la bancarrota frecuente que se producía con el advenimiento
de un nuevo soberano; el impuesto no existía como fuente de recursos
regulares y se daba con frecuencia el repudio de la deuda. Por ello, los
préstamos se hacían a breve plazo y por pequeñas sumas con garantías reales
(joyas, fuentes impositivas, las tierras de la corona, etc.) o personales (por
ejemplo, algún tercer soberano que aceptaba ser fiador), ya que siempre
estaba presente la posibilidad para las bancarrotas o repudios fraudulentos de
la deuda contraída.
A partir del siglo XIX los Estados se organizan jurídicamente, la gestión
administrativa mejora, los recursos pasan a ser permanentes, elásticos y
productivos, y la noción sobre la responsabilidad del Estado adquiere
relevancia; a ello se suma el gran desarrollo de los valores mobiliarios y el
nacimiento de bolsas y mercados para esos valores, todo lo cual es factor
decisivo para que adquiera auge el crédito público.

c) Doctrinas clásicas

La generalización en el uso de este medio como forma de procurarse


ingresos, trajo la discusión doctrinal de si realmente puede considerárselos
recursos públicos y en qué casos corresponde su racional utilización.
a) Los hacendistas clásicos distinguen netamente los recursos públicos
propiamente dichos, como, por ejemplo, el impuesto, de aquellas otras
medidas, como las del crédito público, que no tienen más objeto que distribuir
los recursos en el tiempo, al solo fin de adecuarlos a los gastos.
Así, por un lado, hay determinados momentos en que los fondos disponibles
en las tesorerías no son suficientes para cubrir ciertos gastos que no admiten
espera, ante lo cual se procuran dichos fondos mediante préstamos a corto
plazo, que luego se van rembolsando al ingresar los recursos y en el trascurso
de un ejercicio presupuestario. En cambio, si no se trata de gastos de tipo
ordinario sino extraordinario (guerras, inundaciones, terremotos, etc.), tampoco
puede prescindirse de efectuar el gasto estatal inmediatamente, pero en tal

2
caso el importe no podrá ser cubierto durante la vigencia de un solo ejercicio
presupuestario, siendo entonces cuando por medio del empréstito se reparte la
carga financiera entre varios presupuestos.
En consecuencia, del empréstito no derivan recursos en sí mismos, sino tan
sólo la anticipación de recursos futuros, que normalmente sólo se lograrían en
el curso de varios años, pero que se les debe reunir inmediatamente ante lo
impostergable de la erogación. Económicamente, esto significa que el crédito
público es similar, en su esencia, al préstamo privado, ya que el objetivo
perseguido es idéntico al que trata de obtener un particular cuando recurre al
crédito para hacer frente a gastos inmediatos que su presupuesto anual o
mensual no puede solventar.
Por otra parte el empréstito nunca puede ser un ingreso en sí mismo, ya que
se limita a hacer recaer sobre las generaciones futuras la carga de los gastos
efectuados mediante el empréstito: esto sucede porque como el empréstito es
sólo un préstamo, deberá ser devuelto posteriormente junto con sus intereses,
y esa devolución sólo podrá ser solventada mediante nuevos impuestos que
deberán pagar las generaciones venideras.
De estas argumentaciones se concluye que el crédito público debe ser
utilizado en forma excepcional y restringidamente, y no para cubrir gastos
considerados normales.

d) Doctrinas modernas

Las teorías modernas (Duverger, Somers, Laufenburger, Giuliani Fonrouge,


Hart), aunque no en forma unánime (Buchanan ha reivindicado en gran medida
las concepciones clásicas), consideran que el crédito público es un verdadero
recurso, y que no puede estar limitado por circunstancias excepcionales.
Por lo pronto se disiente en que la deuda pública pueda ser similar a la
privada. Según Hart, la diferencia esencial consiste en que el gobierno "dirige"
la magnitud y composición de su deuda mediante su control sobre la moneda y
la banca, poderes, éstos, de los cuales carece el prestamista privado. Por otra
parte, esa magnitud y composición no depende sólo de la necesidad de cubrir
apremios extraordinarios o déficit monetarios, sino que depende de otros
objetivos muy diferentes, como, por ejemplo, el deseo de iniciar obras públicas
para combatir la desocupación, el deseo de regular el mercado de capitales o
el volumen de la circulación monetaria. Tales esenciales diferencias entre las
funciones del Estado y de la utilización que haga del crédito, impiden identificar
deuda pública con deuda privada.
También se disiente en que la carga de la deuda pública pase a las
generaciones futuras. Autores como Einaudi, Duverger y Somers afirman que
es la generación presente la que soporta la carga de los gastos públicos
cubiertos con el crédito público.
Se sostiene que el empréstito significa una reducción a la renta nacional
actual, al disminuir el poder de compra de los particulares, dado que el dinero

3
es empleado para financiar gastos públicos en vez de ser destinado a fines
privados. Además, se dice que si bien es cierto que el empréstito constituye
una carga para los contribuyentes futuros, que ven aumentados sus impuestos
para hacer frente al servicio del interés y reembolso, no es menos cierto que
esa carga está compensada por la ventaja correlativa obtenida por los
prestadores que reciben dichos intereses y dichos reembolsos. A1 respecto,
Somers explica gráficamente que la conocida caricatura del niño recién nacido
con una piedra al cuello que dice "deuda pública de dos mil pesos", debería ser
completada poniéndole al niño en una mano un bono del gobierno por idéntica
suma.
La conclusión de los sostenedores de estas teorías es de que el empréstito
estatal es un recurso que nada tiene de anormal, y que no puede estar
rígidamente limitado a "circunstancias excepcionales o déficit circunstanciales",
que dan lugar a gastos imprevistos urgentes.

2) a) Deuda Pública. Concepto

Es la suma de todos los empréstitos públicos contraídos y adeudados por el


Estado, en determinado momento.
En consecuencia, la deuda pública es la constituida por el conjunto de los
diversos empréstitos emitidos y colocados por el Estado, en diferentes fechas,
y todavía no reembolsados. No comprende, por tanto los compromisos del
Estado que derivan de otro tipo de obligaciones; p. ej. Sueldos, pensiones,
depósitos, contratos administrativos, etc. El importe de la deuda publica figura
en el pasivo y su volumen constituye un importante elemento para su balance
patrimonial. Por su parte, el servicio o la carga de la deuda públicaestá
constituida por la cantidad de intereses que hay que pagar y las sumas
asignadas para reembolsos o amortizaciones, en determinado ejercicio
financiero. Este último concepto importa, por consiguiente, principalmente al
presupuesto del Estado, más que a su balance patrimonial.

ARTICULO 57.- El endeudamiento que resulte de las operaciones de crédito


público se denominará deuda pública y puede originarse en:
a) La emisión y colocación de títulos, bonos u obligaciones de largo y mediano
plazo, constitutivos de un empréstito.
b) La emisión y colocación de Letras del Tesoro cuyo vencimiento supere el
ejercicio financiero.
c) La contratación de préstamos.
d) La contratación de obras, servicios o adquisiciones cuyo pago total o parcial
se estipule realizar en el transcurso de más de UN (1) ejercicio financiero
posterior al vigente; siempre y cuando los conceptos que se financien se hayan
devengado anteriormente.
e) El otorgamiento de avales, fianzas y garantías, cuyo vencimiento supere el
período del ejercicio financiero.

4
f) La consolidación, conversión y renegociación de otras deudas. A estos fines
podrá afectar recursos específicos, crear fideicomisos, otorgar garantías sobre
activos o recursos públicos actuales o futuros, incluyendo todo tipo de tributos,
tasas o contribuciones, cederlos o darlos en pago, gestionar garantías de
terceras partes, contratar avales, fianzas, garantías reales o de cualquier otro
modo mejorar las condiciones de cumplimiento de las obligaciones contraídas o
a contraerse. No se considera deuda pública la deuda del Tesoro ni las
operaciones que se realicen en el marco del artículo 82 de esta ley. (Artículo
sustituído por el art. 10 del Decreto N° 1387/2001 B.O. 2/11/2001)
REGLAMENTADO POR DECRETO N° 1344/2007: ARTICULO 57.- a) y b)
Establécese un sistema para la emisión, colocación, negociación y liquidación
de los Instrumentos de Deuda Pública (I.D.P.) que se coloquen en el mercado
local. Estos instrumentos consistirán en los títulos valores que el Organo
Coordinador de los Sistemas de Administración Financiera determine y estarán
representados en forma escritural y registrados en cuentas abiertas en el
Registro del BANCO CENTRAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA o de la
OFICINA NACIONAL DE CREDITO PUBLICO dependiente de la
SUBSECRETARIA DE FINANCIAMIENTO de la SECRETARIA DE FINANZAS
del MINISTERIO DE ECONOMIA Y PRODUCCION o de la entidad que a esos
efectos designe el citado Organo Coordinador. La colocación de los
Instrumentos de Deuda Pública (I.D.P.) se realizará por licitación pública o
colocaciones por suscripción directa. Los Instrumentos de Deuda Pública
(I.D.P.) estarán denominados en moneda nacional o extranjera, a tasa
adelantada o vencida, fija o flotante, pudiendo utilizarse otras estructuras
financieras usuales en los mercados locales o internacionales. En el caso de
licitaciones públicas, las condiciones a que estarán sujetas las mismas serán
dadas a conocer al momento de disponerse el llamado a licitación de cada
instrumento. El Organo Rector del Sistema de Crédito Público podrá requerir la
asistencia de aquellas instituciones financieras con mayor relevancia en el
mercado de Deuda Pública a fin de que participen significativamente en la
colocación primaria y en la negociación secundaria de los Instrumentos de
Deuda Pública (I.D.P.), con el objetivo de promover la eficiencia, liquidez y
profundidad del mercado secundario, quedando facultado el Organo
Coordinador de los Sistemas de Administración Financiera a establecer las
categorías, los requisitos, los derechos y las obligaciones de las mismas. El
Organo Coordinador podrá instruir al agente de registro para que proceda a la
apertura de cuentas separadas de los cupones de renta y de amortización de
los Instrumentos de Deuda Pública (I.D.P.) que se emitan, a fin de que éstos
puedan negociarse individualmente en el mercado secundario. El BANCO
CENTRAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA o la institución que el Organo
Coordinador designe, tendrá a su cargo la liquidación de las operaciones con
los Instrumentos de Deuda Pública (I.D.P.) que realicen los intermediarios,
mediante las respectivas transferencias en las cuentas de registro de los títulos
escriturales, y en las cuentas de efectivo de los intermediarios abiertas a tales
efectos. A estos fines, el BANCO CENTRAL DE LA REPUBLICA ARGENTINA
o quien dicho Organo Coordinador designe, podrá abrir cuentas a nombre de: I.
Los intermediarios autorizados a actuar en la oferta pública de los títulos
valores o en los mercados de valores y otros mercados autorregulados
autorizados por la COMISION NACIONAL DE VALORES, entidad autárquica
en el ámbito de la SUBSECRETARIA DE SERVICIOS FINANCIEROS de la

5
SECRETARIA DE FINANZAS del MINISTERIO DE ECONOMIA Y
PRODUCCION. II. Los depositarios institucionales locales o internacionales;
III.Toda aquella institución a la que, a juicio de los organismos mencionados,
resulte conveniente dar participación. c) Sin reglamentar. DEL SISTEMA DE
CRÉDITO PÚBLICO 46 d) Sin reglamentar. e) A los efectos de propender a la
evaluación del riesgo asumido por parte del solicitante, como así también
propiciar una razonable distribución del mismo, los avales, fianzas o garantías
de cualquier naturaleza que otorgue la Administración Central quedarán
limitados al capital de la operación de crédito público de que se trate salvo que
la ley que autorice su otorgamiento indique en forma expresa que deben
incluirse los intereses. Las entidades financieras oficiales nacionales que
hubieran otorgado créditos con avales de la Administración Central, deberán
arbitrar todos los medios judiciales conducentes a recuperar la cartera de tales
préstamos, no pudiendo reclamar los avales otorgados hasta tanto no haber
agotado dichas instancias contra el deudor, incluida la declaración de quiebra
dictada por el juez competente. Cuando la solicitud de aval provenga del sector
público provincial o municipal no comprendido en los alcances del Artículo 8º
de la Ley Nº 24.156 o del Gobierno de la CIUDAD DE BUENOS AIRES,
además de los requisitos establecidos en el Artículo 62 de la Ley Nº 24.156,
deberá exigirse la autorización para la afectación de los fondos de la
coparticipación federal de impuestos en los términos de los Artículos 41 y 45 de
la Ley Nº 11.672 - Complementaria Permanente de Presupuesto (t.o. 2005). El
ESTADO NACIONAL podrá avalar o garantizar el pago de las deudas
contraídas mediante operaciones crediticias negociadas directamente por las
Provincias o por el Gobierno de la CIUDAD DE BUENOS AIRES con los
organismos financieros internacionales de los que la Nación forma parte,
cuando aquellas cuenten con su respectiva ley, que las autorice a: I. contraer el
endeudamiento por el monto, plazo de amortización y destino del
financiamiento, y II. afectar los fondos de la coparticipación federal de
impuestos para cumplir en tiempo y forma con todas las obligaciones de pago
contraídas. f) Sin reglamentar. A los efectos de lo establecido en el anteúltimo
párrafo del Artículo 57 de la Ley Nº 24.156, la Ley de Presupuesto General del
año respectivo o la ley específica que autorice el endeudamiento en los
términos del Artículo 60 de la Ley Nº 24.156, deberá especificar los recursos
que podrán ser afectados o la utilización de los otros mecanismos previstos en
el párrafo mencionado.

b) Clasificación

Se han efectuado muchas clasificaciones de la deuda pública.


Consideraremos aquí la más importante de todas ellas, que es la clasificación
en deuda interna y externa, distinción que ha dado lugar a importantes
divergencias doctrinales. También consideraremos la distinción entre deuda
flotante y consolidada, así como las antiguas distinciones entre deuda
administrativa y financiera y entre deuda perpetua y redimible.

DEUDA ADMINISTRATIVA Y FINANCIERA. –

6
Esta clasificación es originaria de Wagner, para quien las deudas son
administrativas si provienen del funcionamiento de las distintas ramas
administrativas del Estado (por ejemplo, deudas a los proveedores), y en
cambio las deudas son financieras cuando provienen de los empréstitos
públicos.

DEUDA FLOTANTE Y CONSOLIDADA. –

La distinción tradicional consiste en que la deuda consolidada es aquella


deuda pública permanente atendida por un fondo que no requiere el voto anual
de los recursos correspondientes. La deuda flotante, en cambio, es la que el
tesoro del Estado contrae por breve período de tiempo, para proveer a
momentáneas necesidades de caja por gastos imprevistos o retraso en los
ingresos ordinarios.
Esta clasificación carece en la actualidad de significación jurídica.
Actualmente se considera más ajustada la distinción entre deuda a largo y
mediano plazo (aproximadamente treinta años en el primer caso y de tres a
diez años en el segundo caso), por oposición a la deuda a corto plazo
(generalmente a un año). Las primeras, o sea, las deudas a largo y mediano
plazo, constituyen los empréstitos propiamente dichos, mientras que a las
deudas a corto plazo se las suele denominar empréstitos de tesorería. En
realidad, la única diferencia actual constante radica en el plazo, ya que otras
modalidades, como los recursos especiales para atender los servicios de la
deuda, formalidades distintas, tipos de interés, carácter nominativo o al
portador de los títulos, etc., se dan indistintamente en una u otra deuda.

DEUDA PERPETUA Y REDIMIBLE. –

Las deudas perpetuas o no redimibles son las que el Estado asume con la
sola obligación del pago de intereses, sin compromiso de reembolso o con
reserva de rembolsar cuando quiera. Se trata de un procedimiento casi
desconocido en nuestro país.
Las deudas redimibles son aquellas en que el Estado se obliga al reembolso
y al pago de intereses, con diferencia en los términos de duración y planes de
amortización (ver al respecto Griziotti, Ob. cit., p. 387, con notas 19H y 200 de
Jarach).

ARTICULO 58.- A los efectos de esta Ley, la deuda pública se clasificará en


interna y externa y en directa e indirecta. Se considerará deuda interna, aquella
contraída con personas físicas o jurídicas residentes o domiciliadas en la
República Argentina y cuyo pago puede ser exigible dentro del territorio
nacional. Por su parte, se entenderá por deuda externa, aquella contraída con
otro Estado u organismo internacional o con cualquier otra persona física o
jurídica sin residencia o domicilio en la República Argentina y cuyo pago puede
ser exigible fuera de su territorio. La deuda pública directa de la Administración

7
Central es aquella asumida por la misma en calidad de deudor principal. La
deuda pública indirecta de la Administración Central es constituida por
cualquier persona física o jurídica, pública o privada, distinta de la misma, pero
que cuenta con su aval, fianza o garantía.
REGLAMENTADO POR DECRETO N° 1344/2007: ARTICULO 58. - Al solo
efecto de su registración y contabilización, la deuda pública y las Letras del
Tesoro de conformidad con los lineamientos establecidos en el Artículo 57 de la
Ley Nº 24.156, podrán registrarse como deuda en moneda nacional y deuda en
moneda extranjera. Se considerará deuda en moneda nacional aquélla
contraída en moneda de curso legal con personas físicas o jurídicas,
domiciliadas o no en la REPUBLICA ARGENTINA y cuyo pago sea exigible
dentro o fuera del territorio nacional. Se considerará deuda en moneda
extranjera, aquélla contraída en otras denominaciones que la de curso legal,
con otro Estado u Organismo Internacional o con cualquier otra persona física o
jurídica, domiciliada o no en la REPUBLICA ARGENTINA y cuyo pago sea
exigible dentro o fuera del territorio nacional. En aquellos casos en que se
coloquen títulos, bonos, obligaciones de largo y mediano plazo o Letras del
Tesoro, se considerará deuda interna a las colocaciones a las que les sea
aplicable la Ley Argentina y se considerará deuda externa a aquélla cuya
jurisdicción o ley aplicable no sea la Ley Argentina.

c) Deuda Interna y Externa. Criterios de distinción.

La diferencia entre deuda interna y externa debe ser separadamente


considerada desde el punto de vista económico y jurídico.
Económicamente la deuda es interna cuando el dinero obtenido por el
Estado en préstamo, surge de la propia economía nacional, es decir,
corresponde la frase de "debemos a nosotros mismos". En cambio, la deuda es
externa si el dinero prestado proviene de economías foráneas.
Desde el punto de vista en estudio, la diferencia es significativa. En el
momento de la emisión y negociación, la deuda interna significará una
trasferencia del poder de compra privado hacia el sector público, lo cual no
ocurre en el caso de la deuda externa, ya que el Estado ve incrementadas sus
disponibilidades; pero como el dinero proviene del exterior, ello no significa
merma en las disponibilidades monetarias de las economías privadas
nacionales. También es importante la diferencia en el momento del reembolso
y pago de intereses, ya que si la deuda es interna, esas riquezas permanecen
en el país, mientras que si la deuda es externa se traspasan al exterior. De ello
-como hemos visto- surgen importantes consecuencias en lo relacionado a la
carga de la deuda pública a generaciones futuras. No es posible olvidar,
tampoco, las importantes implicancias políticas que puede tener el hecho de
que la deuda sea interna o externa.
Desde el punto de vista jurídico, deuda interna es aquella que se emite y se
paga dentro del país, siendo aplicables, por lógica, las leyes nacionales y
teniendo jurisdicción los tribunales nacionales. Por ejemplo: el crédito argentino
interno de 1990, el empréstito "Nueve de Julio” de 1962, etc. Desde este punto

8
de vista jurídico, es indiferente que los prestamistas sean nacionales o
extranjeros y que los fondos amortizados queden en el país o en definitiva
vayan al exterior.
En lo que respecta a la caracterización jurídica de lo que debe considerarse
deuda externa, no hay unanimidad doctrinal, y los autores han empleado
diversos criterios: lugar de emisión de los títulos, moneda elegida, lugar del
pago de la deuda, etc.
Creemos que jurídicamente la deuda es externa cuando el pago debe
hacerse en el exterior, mediante la trasferencia de valores, y especialmente
cuando no es aplicable la ley nacional sino la extranjera. El gobierno de nuestro
país ha suscrito varios préstamos de este tipo, entre los cuales citamos como
ejemplo los siguientes: "Empréstito Externo de la República Argentina 7 %
1967/1969", emitido por cien millones de marcos alemanes y sometidos a las
leyes de Alemania occidental; "Empréstito Externo de la República Argentina
6,5 % 1961/1973", emitido por veinticinco millones de dólares y sometido a las
leyes suizas; "Bonos seriados del empréstito con vencimiento en 1972/1974",
por cincuenta millones de dólares y sometido a las leyes inglesas: "Títulos
Externos de la República Argentina con tasa de interés variable 1970/1977",
por cincuenta millones de dólares y sometido a las leyes del Estado de Nueva
York.
El Banco Central de la República Argentina ha efectuado un importante
análisis estadístico sobre la evolución de la deuda pública federal interna y
externa documentada con valores a cargo de la Tesorería General de la
Nación, durante el lapso comprendido entre los años 1935 y 1973. Según allí
se explica, el período elegido no es arbitrario, sino que su iniciación coincide
con el año de creación del Banco Central, el cual, conforme a lo dispuesto en
su carta orgánica, desempeña funciones de agente financiero del Estado y
asesor económico y financiero del Poder Ejecutivo nacional (Evolución..., ps. 2
y SS.).

9
10
0
a) 3 a) Empréstito. Concepto

El empréstito es el recurso del Estado, basado en el crédito que el mismo inspira,


mediante el cual aquél obtiene, de patrimonios ajenos al suyo, sumas de dinero, a un
interés dado, y cuyo reembolso debe satisfacer oportunamente según las bases de
contratación establecidas al concertarlo

b) Naturaleza jurídica

BIELSA, considera que en el empréstito público como en todo contrato


debe considerarse en primer término sus elementos constitutivos, es decir:
a) los sujetos; b) el objeto y c) la causa.
El elemento subjetivo requiere que ambos sujetos sean capaces, por lo
que no debe olvidarse que la capacidad referida a una persona de derecho
público se expresa con el término competencia. El mutuante o prestamista,
también debe en principio ser capaz, obligándose por intermedio de su
representante legal.
En cuanto al objeto, es el dinero por regla general. Por lo que es
necesario distinguir y no confundirlo con las requisiciones, que pueden ser
de uso, aunque por lo común van a la transferencia de la propiedad.
La causa es el interés público que la ley o la Constitución misma pueden
definir. Así los ha establecido el art.4 in fine de la C.N.
Sentados estos elementos, BIELSA apunta: ―Desde luego se trata de un
contrato (no de un acto de autoridad) aunque ese contrato no sea regido por
el derecho privado, sino por el derecho público. Es un contrato
administrativo de índole financiera ―.
En materia doctrinaria sólo hay acuerdo en cuanto:
a) a la obligatoriedad de la convención denominada empréstito, y
b) en cuanto al carácter contractual de esa operación.
En lo que atañe a la obligatoriedad, todo aquél que contrae una
obligación o un préstamo, sea un Estado o un particular, debe devolver lo
prestado y abonar los servicios respectivos.
En lo que refiere al aspecto contractual, se hace necesario un análisis
de la naturaleza del contrato en cuestión:
1) Para algunos estamos frente a un contrato de derecho privado.
El Estado cuando cobra impuestos o demás tributos lo hace en ejercicio
de su poder fiscal, es decir que actúa con calidad de soberano, pero
cuando se limita a pedir dinero a crédito, actúa y se presenta similarmente a
un particular, y el público puede o no aceptarlo voluntariamente, lo que
revelaría la calidad de derecho privado del acto.
2) Otros, dicen que el empréstito es un mutuo o empréstito de consumo
(art.2240 del C.C.) y por ello estiman que corresponde remitirse al Código
Civil, para resolver las divergencias que el empréstito origina, tal como lo ha
hecho la Corte Suprema, acudiendo con frecuencia, en su jurisprudencia, a
las normas que regulan el mutuo, para resolver las divergencias que se

1
plantean entre el Estado y los particulares en materia de interpretación de
las obligaciones y derechos emergentes de los empréstitos.
3) Para otros autores, el empréstito no sería un mutuo, sino un contrato
de compraventa de títulos. El Estado, dicen, emite papeles y estos papeles
se venden, que es la característica de los títulos del crédito público. De tal
fondo infieren que se trata de un contrato de venta de fondos públicos.
Apoyan su opinión aún en el criterio y en la terminología popular, cuando
habitualmente se dice que se ―compran‖ y ―venden títulos‖.
Crítica:
Ninguno de estos dos criterios contractuales: mutuo y compraventa son
en realidad adecuados. No puede decirse que hay un contrato privado de
mutuo, desde que el Estado no puede asimilarse al prestatario ni tampoco al
vendedor, al atender los servicios públicos y los problemas financieros, por
lo que difiere del particular al que no cabe asignarle esta significación de
derecho público. Tampoco con la compraventa puede asimilárselo, ya que
indudablemente estamos frente a una operación de crédito.
4) Otros dicen que el empréstito es un acto de soberanía.
Así debe interpretarse la doctrina DRAGO, que no permite la ejecución
compulsiva contra un Estado deudor, porque en ello está en juego su
soberanía. El Estado, al suscribir o emitir un empréstito, lo hace con igual
jerarquía y condición que cuando emite moneda, vale decir, en ejercicio de
propia determinación y soberanía. También por ello el Estado podría,
siempre ejerciendo actos propios de un poder público soberano, aminorar o
modificar las consecuencias y disposiciones anteriores de un empréstito,
pero sin lesionar patrimonialmente a los inversores.
5) Para otros es un contrato colectivo. Estaríamos en presencia de una
especie de sociedad de hecho entre el Estado y los particulares, que
ejercen una acción colectiva conjunta. El Estado emite los títulos para hacer
una obra pública o cumplir una función social, y el particular o capitalista los
adquiere sabiendo que existe ese plan colectivo de conjunto.
6) Otros autores hacen una distinción entre el origen del empréstito. Si
es un crédito interno, el empréstito queda regido por las leyes del Estado,
pero si se trata de un crédito externo, la cuestión quedaría sometida al
Derecho Internacional Público, ya que afirman, tratándose de un empréstito
externo, no cabría aplicar el principio de soberanía, porque ésta tiene sus
límites en la jurisdicción territorial.
7) Otros autores concluyen afirmando que estaríamos frente a un
contrato suigeneris, es decir, diferenciado de los demás negocios jurídicos.
8) Para JÉZE, se estaría frente a un contrato de derecho administrativo,
esto es, concordantemente con BIELSA, que se trataría de un contrato
administrativo de índole financiera. Así lo interpretan porque por ese mismo
contrato se compromete el Estado, haciéndose pasible de las normas de
Derecho Administrativo, que interesan a la colectividad por el interés público
que las acompaña, lo que impide la confusión con un contrato privado.
9) DE JUANO comparte el criterio de que el empréstito es un contrato
de derecho público regido por normas constitucionales y administrativas,
especialmente por las leyes del crédito público, por las leyes de contabilidad
y por otras disposiciones atinentes a la materia.

2
Sin embargo esto no significa ni puede conducir a la arbitrariedad del
Estado, ya que toca a éste devolver lo prestado según las bases previstas
al emitir el empréstito. No debe olvidarse que la operación se hace en aras
del interés público, comprometiendo el buen nombre y honorabilidad del
Estado, y que por tanto, si el Estado deudor no cumple, repudia la deuda,
incurre en moratoria, etc., arriesga y compromete su crédito para el futuro,
pues no conseguirá concertar nuevos empréstitos, o éstos lo serán sobre
bases más severas, con otras garantías y en condiciones más onerosas.

c) Clases de empréstitos

Empréstitos Forzosos.
El empréstito forzoso es una medida compulsiva adoptada por el Gobierno
de un país cuando así lo requiere su situación interna, del mismo modo que
puede disponer una restricción a la importación, a la exportación, la clausura
del mercado a término, la prohibición de la negociación de títulos y valores,
etc. Es una medida de crédito, de carácter extraordinario y de indiscutible
riesgo.
El empréstito forzoso constituye la requisición de dinero fijada
unilateralmente por los Estados con la obligación de reembolsar y pagar un
interés.
No debe confundirse con otros ingresos tales como los tributarios donde la
entrega se hace con carácter definitivo y sin obligación de reintegrar o
reembolsar. En el empréstito forzoso el Estado no confisca sino que
aprovecha el préstamo que el mismo dispone sea realizado, pero sobre el
cual debe devolver el capital, pagar el servicio y satisfacer el interés.
Empréstitos Patrióticos.
En este caso el peligro inminente no es tal, pero la proximidad del riesgo
resulta previsible, o la necesidad del Estado, es de tal índole y naturaleza que
mueve al Gobierno a pulsar la fibra patriótica de sus ciudadanos a fin de
obtener de ellos el crédito necesario para solventar ciertas situaciones o
impulsar su progreso con estímulo mayor que el de los recursos
extraordinarios. El Estado no está pues en la misma situación de la prevista
para establecer un préstamo forzoso, no está en guerra, ni en situación tan
extrema, pero sí se halla en un clima propicio o bien en un momento dado de
su historia que permite preveer ciertos riesgos o ciertas necesidades que no
podrían postergarse razonablemente.
El empréstito patriótico es aquél que se ofrece en condiciones ventajosas
para el Estado, ya sea porque se pide a los particulares que suscriban a la par
los títulos a un interés más bajo que el corriente o movidos por cualquier otro
sentimiento patriótico.
El empréstito patriótico no es compulsivo, pero tienen de común con los
forzosos que el interés que ofrece es inferior al corriente en el mercado. Su
éxito depende en definitiva del grado de conciencia de los deberes ciudadanos
frente a un llamado de la Nación en momentos de crisis. Ellos alejan la
colaboración de los capitales extranjeros, por esto sólo logran sus fines por
sumas reducidas.
Empréstitos Voluntarios.

3
Por medio de los empréstitos voluntarios, y sin usar de la fuerza o
compulsión, ni ofrecer condiciones desventajosas a los prestamistas, el Estado
recurre exclusivamente a las conveniencias e interés privado de los particulares
ofreciéndoles títulos de la deuda pública en condiciones semejantes a las que
los capitales gozan en un mercado libre.
Como afirma AHUMADA, los únicos y verdaderos empréstitos son los
voluntarios u ordinarios, pues ellos son los que normalmente tienden a obtener
la colaboración de los particulares en condiciones paralelas a las que los
capitales gozan en los mercados libres.
En base a los empréstitos voluntarios es que se forma en su mayor parte la
deuda consolidada o flotante, según esté o no inscripta en el presupuesto. Esta
deuda puede ser amortizable o perpetua, según sea el convenio contractual
con los prestamistas; la amortizable se extinguirá en un período determinado
de años, mientras que en la perpetua sólo existe la obligación del pago de los
intereses, siendo siempre optativo el rescate, ya que la deuda perpetua
irredimible sólo puede considerarse tal desde el punto de vista formal.
Este sistema de deudas perpetuas, que no es de aplicación usual en
América, pero que sí utiliza en Europa, puede resultar peligroso si va
acompañado de un crecimiento desmedido de las deudas lo cual obligaría a
formar un gran fondo para el pago de los intereses que involucra su servicio. Es
preferible el sistema de amortización ya que la desvalorización monetaria va
aliviando la posición del deudor, puede éste aprovecharse de los beneficios
que dan las conversiones, y también puede, a su vez, resultar más llevadero si
se piensa en el aumento de la población, de los recursos y el acrecentamiento
de las inversiones y riquezas, los nuevos descubrimientos, etc. que al final de
cuenta valen para compensar la carga inicial.
Dentro de los empréstitos voluntarios amortizables existen diversas
formas, antiguas y modernas: a) Rentas vitalicias. b) Anualidades.
c)Obligaciones amortizables por extracciones periódicas y d) Bonos
reembolsables a plazos fijos.

a) Técnica del empréstito. Emisión de Títulos

Emisión: Instrumentos financieros que agrupados bajo características


similares según series, comportan la evidencia de una deuda entre una
entidad emisora que pretende captar fondos de terceros inversores.
(Diccionario del Mercado Financiero. Jorge Roberto Abram).
La emisión de un empréstito público supone la consideración previa de
un conjunto de cuestiones acerca del plazo, tasa de interés, los beneficios
accesorios, las garantías contra depreciaciones monetarias,etc., todas las
cuales incumben a la administración o técnica financiera, a la política
financiera, la economía financiera y la sociología financiera.
Es materia propia de la política financiera indicara cuándo está
justificada la emisión de un empréstito público, bajo qué condiciones y con
qué finalidades. La economía financiera debe determinar qué efectos
producirá dicha emisión en las actividades económicas del país; mientras
que la sociología financiera hará lo propio con respecto a las consecuencias
sociales que aquélla puede acarrear.
La técnica o administración financiera, considerando el monto de la
deuda pública acumulada y las fechas de amortización o vencimiento de los

4
diferentes empréstitos anteriormente emitidos, deberá establecer: 1) cuáles
son las condiciones y beneficios más razonables para otorgarles a los
suscriptores del nuevo empréstito, 2) qué procedimiento resulta más
conveniente para la colocación de los títulos.
Títulos del Empréstito: Las obligaciones asumidas por el Estado en
virtud de un empréstito público son documentadas en los denominados
títulos, bonos, obligaciones o valores. Estos documentos, jurídicamente
considerados, son cosas u objetos corporales ―susceptibles de tener un
valor‖, según el Art. 2311 del Código Civil Argentino. Pueden ser objeto de
los derechos reales de dominio, de condominio, de usufructo y de prenda,
de los contratos de compraventa, de permuta y de donación, o materia de
legados.
Estos títulos son también papeles de comercio, por lo que deben cumplir
con formalidades exigidas por los Arts. 744 y 745 del Código de Comercio.
Deben ser redactados, numerados e impresos con arreglo a la ley que
autorice su emisión; deben transcribir al dorso la parte del texto legal que
establezca las condiciones de pago. Conforme al Art. 848 de ese mismo
código, la acción para su cobro prescribe en el término de tres años a partir
del día del vencimiento de la obligación.
El Código Penal establece que los títulos de un empréstito público, al
igual que sus cupones, están equiparados a la moneda en lo que atañe al
delito de falsificación.
Otros beneficios otorgados a los suscriptores:
Podemos agruparlos en: 1) beneficios accesorios
2) garantías contra posibles depreciaciones.
Dentro de los beneficios accesorios tenemos: 1) las emisionesbajo la par
que consisten en que los suscriptores paguen por los títulos menos de su
valor nominal, lo que equivale a una mayor tasa de interés, dado que ésta
es liquidada sobre el valor nominal; 2) las exenciones tributarias, que los
intereses o utilidades obtenidas por los suscriptores al vender sus títulos
estén exentas del pago de todo impuesto.
Las denominadas garantías contra posibles depreciacionesmonetarias
comprenden: 1) la cláusula oro, 2) la garantía de cambio, y 3) la indexación.
Estas tres especies tienen como característica común la relación que se
establece entre la cantidad de dinero entregada al Estado, por medio del
empréstito, y el valor de algún bien material como el oro, que siga
fluctuaciones monetarias y, proteja a los tenedores contra las
depreciaciones de la moneda de pago.

b) Negociación. Procedimientos

Procedimiento para la colocación de los Títulos: Los títulos de un


empréstito público pueden ser colocados o negociados mediante diversos
procedimientos: - la participación de bancos: puede incluir también a las
compañías financieras, admite dos modalidades distintas: 1) la toma en
firme de parte o de toda la emisión de títulos, o 2) la actuación de estas
entidades como intermediarias, contra el pago de determinada comisión.

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- la suscripción pública: se identifica, en cierta medida con la segunda
modalidad del procedimiento anterior; se le suele agregar la posibilidad
de suscribir los títulos del empréstito en oficinas del correo u otras
dependencias de la Administración pública.
- La venta directa en las bolsas de comercio o mercados de valores: no
hay suscripción previa de los títulos, los cuales son vendidos
paulatinamente, a medida que las posibilidades del mercado de valores
lo permitan. Requiere una prudente y más costosa administración de
esos títulos, para lograr su mejor colocación sin perturbar las
cotizaciones de las acciones, obligaciones u otros valores privados, sino
también las correspondientes a títulos de otros empréstitos públicos
emitidos anteriormente y que estén siendo negociados en dicho
mercado. Le ofrece al Estado la posibilidad de colocar los títulos, si
éstos han comenzado a cotizarse por encima de su valor nominal, a
valores sobre la par, lo que significa más utilidad, una disminución de la
tasa de interés que habrá de pagar por ellos.

c) Intereses

Tasa de interés: El principal beneficio que los suscriptores obtienen de


un empréstito público es el interés o renta del capital prestado al Estado. La
fijación de la tasa de interés constituye un problema de naturaleza
económica, ya que aquella es determinada en relación con el tipo de interés
vigente en el mercado de capitales al momento de la emisión del empréstito.
Para un suscriptor de un empréstito público éste representa una
inversión en sus ahorros; por lo que habrá de compararla con el rendimiento
que podría obtener en otras inversiones.
Si con el objeto de colocar rápidamente un empréstito público el Estado
decide fijarle una tasa de interés superior a la vigente en ese momento en el
mercado de capitales, esa mayor tasa tiene efectos deflacionistas o
antiinflacionarios. Por lo que un empréstito público con una tasa de interés
elevada estimula a los bancos y compañías financieras a mantener en sus
carteras los títulos de dicho empréstito.
Una economía en desarrollo generalmente se caracteriza por la falta del
capital o del ahorro interno necesario para las inversiones requeridas por las
empresas. Si el Estado, ante este cuadro, atrae los pocos capitales disponibles
con tasas mayores que las vigentes, el resultado será una falta casi total de
ahorros para las inversiones de las empresas. Por tanto, estas últimas no
podrán aumentar su producción ni incrementar sus utilidades, lo cual implicará,
que los recursos tributarios del Estado, tampoco se incrementarán en la medida
necesaria para satisfacer los mayores gastos que representan esas elevadas
tasas de interés de sus empréstitos públicos. Como consecuencia, para hacer
frente a tales obligaciones del Estado no podrá elevar sus impuestos ni
contraer nuevos empréstitos, sino que deberá recurrir, al emisionismo
monetario.

d) Garantías

Garantías: Las diversas formas de garantías que suelen emplearse en los


empréstitos:

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a) Garantías Personales: consiste en el compromiso adoptado por un
tercero de efectuar el servicio del empréstito en caso de incumplimiento
del deudor; compromiso que puede importar una responsabilidad
subsidiaria o principal. Fue utilizado en épocas pretéritas, pero tiende a
desaparecer por las complicaciones políticas y problemas jurídicos que
puede suscitar. En la actualidad y en nuestro país, sirven de garantía a
compromisos estatales pero no a empréstitos públicos en sus formas
tradicionales.
b) Garantías Reales: consiste en la afectación especial de un bien
determinado del deudor al cumplimiento de la obligación, mediante la
constitución de prenda o hipoteca. Por sus dificultades prácticas y el
carácter vejatorio, se lo utilizó poco en empréstitos públicos. En países
donde la inmunidad del Estado no es absoluta, los inconvenientes
fueron superados mediante prendas sobre bienes situados en el
extranjero. En Argentina fue usado en los comienzos de la nacionalidad,
en el primer empréstito exterior contraído en 1824, con la firma Baring
Brothers, que tuvo por afectación la tierra pública.
c) Garantías Especiales:se recurrió con mayor frecuencia, en los
empréstitos internacionales, a la afectación de determinados ingresos
del Estado deudor, principalmente derechos aduaneros y producido de
monopolios fiscales y de servicios industriales. En Argentina, se lo puso
en práctica en el período 1881-1892, otorgándose en garantía los
ingresos aduaneros, producido de los ferrocarriles, rentas portuarias e
ingresos de obras sanitarias.

a) Amortización de los empréstitos. Sistemas

La amortización, que consiste en el pago, reembolso o devolución de


capital prestado al Estado, es el medio normal de extinción de las
obligaciones que para aquél derivan de la colocación de un empréstito
público.
Puede ser: - Obligatoria: el Estado se compromete a efectuar en una o
varias fechas prefijadas la amortización. Pueden hacerse por varios
sistemas: - Anualidades terminales: el Estado paga en las fechas previstas
el interés prometido más una fracción del capital. – Sorteo: cada título es
reembolsado íntegramente, mediante un sorteo que abarca una fracción del
total de la emisión. – Licitación: se llama a los tenedores para que hagan
ofertas de rescates y son aceptadas las más reducidas.
- Facultativa: el Estado se reserva el derecho de reembolsar el
empréstito antes de la fecha prevista obligatoriamente, caso que no es
frecuente porque en general, resulta preferible el rescate de títulos en la
bolsa.

b) Conversión

Es una operación de cambio o canje de los títulos de un empréstito


público por otros nuevos, los cuales a pesar de que documentan el mismo

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capital que los anteriores, estipulan otras condiciones con respecto a las
obligaciones del Estado hacia los tenedores de los referidos títulos.
La doctrina distingue: - Conversión Facultativa: es una operación de
cambio de títulos de un empréstito por nuevas láminas que estipulan otras
condiciones, pero sujeta a la voluntad del poseedor de aquéllos.
- Conversión Obligatoria: se les ofrece a los tenedores de los títulos de
un empréstito la opción entre su reembolso o amortización anticipada y el
canje de aquéllos por láminas de un nuevo empréstito, para el cual se ha
establecido una tasa de interés menor.
- Conversión Forzosa: cuando el Estado emisor de un empréstito
impone el cambio de sus títulos por otros de un nuevo empréstito, sin
alternativa para los poseedores de aquéllos.

c) Incumplimiento de la deuda publica

Incumplimiento de la deuda pública.


Hay incumplimiento, cundo el Estado no hace honor a las obligaciones
asumidas al emitir un empréstito, respecto de cualquier circunstancia
atinente a él (reembolso del capital, interés, plazos, etc.)
Puede ser total o parcial, según afecte a la operación en su integridad o
tan sólo en parte, y puede obedecer a una actitud deliberada o a la carencia
de medios para atender al servicio de la deuda, lo que significa la
bancarrota del Estado. Existen distintas formas de inejecución que, por lo
común, se clasifican en directas si afectan al empréstito mismo en sus
modalidades jurídicas, e indirectas si responden a interferencias oblicuas
que inciden sobre los efectos económicos del acto.
PROCEDIMIENTO FISCALES
Decreto 821/98
Apruébase el texto ordenado de la Ley N° 11.683, texto ordenado en
1978 y sus modificaciones.
Bs. As., 13/7/98
Ver Antecedentes Normativos
VISTO la Ley Nº 11.683, texto ordenado en 1978, y sus modificaciones, y
CONSIDERANDO:
Que resulta necesario aprobar el texto ordenado de las normas aludidas,
a fin de facilitar su consulta y evitar confusiones en su aplicación.
Que ha tomado la intervención que le compete la DIRECCION GENERAL
DE ASUNTOS JURIDICOS del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS
Y SERVICIOS PUBLICOS.
Que la presente medida se dicta en ejercicio de las atribuciones
conferidas por el artículo 1º de la Ley Nº 20.004.
Por ello,
EL PRESIDENTE DE LA NACION ARGENTINA
DECRETA:
Artículo 1º — Apruébase el texto ordenado de la Ley Nº 11.683, texto
ordenado en 1978 y sus modificaciones, de acuerdo al ordenamiento que,
como Anexo I, integra el presente decreto.

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El citado texto ordenado, elaborado según el índice agregado como
Anexo II, se denominará "Ley Nº 11.683, texto ordenado en 1998".
Art. 2º — Comuníquese, publíquese, dése a la Dirección Nacional del
Registro Oficial y archívese. MENEM - Jorge A. Rodríguez — Roque
Fernández.
TITULO I CAPITULO I DISPOSICIONES GENERALES
Principio de Interpretación y Aplicación de las Leyes
ARTICULO 1º — En la interpretación de las disposiciones de esta ley o
de las leyes impositivas sujetas a su régimen, se atenderá al fin de las
mismas y a su significación económica. Sólo cuando no sea posible fijar
por la letra o por su espíritu, el sentido o alcance de las normas,
conceptos o términos de las disposiciones antedichas, podrá recurrirse a
las normas, conceptos y términos del derecho privado.
ARTICULO 2º — Para determinar la verdadera naturaleza del hecho
imponible se atenderá a los actos, situaciones y relaciones económicas
que efectivamente realicen, persigan o establezcan los contribuyentes.
Cuando éstos sometan esos actos, situaciones o relaciones a formas o
estructuras jurídicas que no sean manifiestamente las que el derecho
privado ofrezca o autorice para configurar adecuadamente la cabal
intención económica y efectiva de los contribuyentes se prescindirá en la
consideración del hecho imponible real, de las formas y estructuras
jurídicas inadecuadas, y se considerará la situación económica real como
encuadrada en las formas o estructuras que el derecho privado les
aplicaría con independencia de las escogidas por los contribuyentes o les
permitiría aplicar como las más adecuadas a la intención real de los
mismos.
Domicilio Fiscal
ARTICULO 3° — El domicilio de los responsables en el concepto de esta
ley y de las leyes de tributos a cargo de la ADMINISTRACION FEDERAL
DE INGRESOS PUBLICOS, entidad autárquica en el ámbito del
MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS, es el
real, o en su caso, el legal de carácter general, legislado en el Código
Civil, ajustado a lo que establece el presente artículo y a lo que determine
la reglamentación. (Nota Infoleg: Por art. 3º del Decreto Nº 90/2001 B.O.
29/01/2001, se establece que donde dice "MINISTERIO DE ECONOMIA
Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS" debe entenderse "JEFATURA DE
GABINETE DE MINISTROS")
En el caso de las personas de existencia visible, cuando el domicilio real
no coincida con el lugar donde este situada la dirección o administración
principal y efectiva de sus actividades, este último será el domicilio fiscal.
En el caso de las personas jurídicas del Código Civil, las sociedades,
asociaciones y entidades a las que el derecho privado reconoce la calidad
de sujetos de derecho, los patrimonios destinados a un fin determinado y
las demás sociedades, asociaciones, entidades y empresas, cuando el
domicilio legal no coincida con el lugar donde esté situada la dirección o
administración principal y efectiva, este último será el domicilio fiscal.
Cuando los contribuyentes o demás responsables se domicilien en el
extranjero y no tengan representantes en el país o no pueda establecerse
el de estos últimos, se considerará como domicilio fiscal el del lugar de la
República en que dichos responsables tengan su principal negocio o

9
explotación o la principal fuente de recursos o subsidiariamente, el lugar
de su última residencia.
Cuando no se hubiera denunciado el domicilio fiscal y la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS conociere
alguno de los domicilios previstos en el presente artículo, el mismo tendrá
validez a todos los efectos legales.
Cuando se comprobare que el domicilio denunciado no es el previsto en
la presente ley o fuere físicamente inexistente, quedare abandonado o
desapareciere o se alterare o suprimiere su numeración, y la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS conociere el
lugar de su asiento, podrá declararlo por resolución fundada como
domicilio fiscal.
En los supuestos contemplados por el párrafo anterior, cuando la
Administración Federal de Ingresos Públicos, entidad autárquica en el
ámbito del Ministerio de Economía y Producción, tuviere conocimiento, a
través de datos concretos colectados conforme a sus facultades de
verificación y fiscalización, de la existencia de un domicilio o residencia
distinto al domicilio fiscal del responsable, podrá declararlo, mediante
resolución fundada, como domicilio fiscal alternativo, el que, salvo prueba
en contrario de su veracidad, tendrá plena validez a todos los efectos
legales. Ello, sin perjuicio de considerarse válidas las notificaciones
practicadas en el domicilio fiscal del responsable. En tales supuestos el
juez administrativo del domicilio fiscal del responsable mantendrá su
competencia originaria. (Párrafo incorporado por art.1° pto. I de la Ley N°
26.044 B.O.6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial)
Sólo se considerará que existe cambio de domicilio cuando se haya
efectuado la traslación del anteriormente mencionado o también, si se
tratara de un domicilio legal, cuando el mismo hubiere desaparecido de
acuerdo con lo previsto en el Código Civil. Todo responsable que haya
presentado una vez declaración jurada u otra comunicación a la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS está obligado
a denunciar cualquier cambio de domicilio dentro de los DIEZ (10) días de
efectuado, quedando en caso contrario sujeto a las sanciones de esta ley.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS sólo
quedará obligada a tener en cuenta el cambio de domicilio si la respectiva
notificación hubiera sido hecha por el responsable en la forma que
determine la reglamentación.
Sin perjuicio de ello, en aquellas actuaciones en las que corresponda el
ejercicio de las facultades previstas en el artículo 9°, punto 1, inciso b),
del Decreto N° 618 de fecha 10 de julio de 1997 y concordantes y en el
Capítulo XI de este Título, el cambio de domicilio sólo surtirá efectos
legales si se comunicara fehacientemente y en forma directa en las
referidas actuaciones administrativas.
Cualquiera de los domicilios previstos en el presente artículo producirá en
el ámbito administrativo y en el judicial los efectos de domicilio
constituido, siéndole aplicables, en su caso, las disposiciones de los
artículos 41, 42 y 133 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación.
(Artículo sustituido por art. 1º del Decreto Nº 1334/98 B.O. 16/11/1998)

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Artículo...: Se considera domicilio fiscal electrónico al sitio informático
seguro, personalizado, válido y optativo registrado por los contribuyentes
y responsables para el cumplimiento de sus obligaciones fiscales y para
la entrega o recepción de comunicaciones de cualquier naturaleza. Su
constitución, implementación y cambio se efectuará conforme a las
formas, requisitos y condiciones que establezca la Administración Federal
de Ingresos Públicos, quien deberá evaluar que se cumplan las
condiciones antes expuestas y la viabilidad de su implementación
tecnológica con relación a los contribuyentes y responsables. Dicho
domicilio producirá en el ámbito administrativo los efectos del domicilio
fiscal constituido, siendo válidas y plenamente eficaces todas las
notificaciones, emplazamientos y comunicaciones que allí se practiquen
por esta vía.
(Artículo s/n incorporado por art. 1° pto. II de la Ley N°
26.044 B.O.6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial)
Términos
ARTICULO 4º — Para todos los términos establecidos en días en la
presente ley se computarán únicamente los días hábiles administrativos.
Cuando un trámite administrativo se relacione con actuaciones ante
Organismos judiciales o el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, se
considerarán hábiles los días que sean tales para éstos.
Para todos los términos establecidos en las normas que rijan los
gravámenes a los cuales es aplicable esta ley, se computarán
únicamente los días hábiles administrativos, salvo que de ellas surja lo
contrario o así corresponda en el caso.
Artículo ...: Establécese un régimen de consulta vinculante.
La consulta deberá presentarse antes de producirse el hecho imponible o
dentro del plazo para su declaración conforme la reglamentación que fije
la Administración Federal de Ingresos Públicos, debiendo ser contestada
en un plazo que no deberá exceder los NOVENTA (90) días corridos.
La presentación de la consulta no suspenderá el transcurso de los plazos
ni justificará el incumplimiento de los obligados.
La respuesta que se brinde vinculará a la Administración Federal de
Ingresos Públicos, y a los consultantes, en tanto no se hubieran alterado
las circunstancias antecedentes y los datos suministrados en oportunidad
de evacuarse la consulta.
Los consultantes podrán interponer contra el acto que evacúa la consulta,
recurso de apelación fundado ante el Ministerio de Economía y
Producción, dentro de los DIEZ (10) días de notificado el mismo. Dicho
recurso se concederá al solo efecto devolutivo y deberá ser presentado
ante el funcionario que dicte el acto recurrido.
Las respuestas que se brinden a los consultantes tendrán carácter
público y serán publicadas conforme los medios que determine la
Administración Federal de Ingresos Públicos. En tales casos se suprimirá
toda mención identificatoria del consultante.
(Artículo s/n incorporado por art. 1° pto. III de la Ley N°
26.044 B.O.6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial)
CAPITULO II SUJETOS DE LOS DEBERES IMPOSITIVOS

11
Responsables por deuda propia
ARTICULO 5º — Están obligados a pagar el tributo al Fisco en la forma y
oportunidad debidas, personalmente o por medio de sus representantes
legales, como responsables del cumplimiento de su deuda tributaria: los
que sean contribuyentes según las leyes respectivas; sus herederos y
legatarios con arreglo a las disposiciones del Código Civil, sin perjuicio,
con respecto a estos últimos, de la situación prevista en el artículo 8º,
inciso d). Son contribuyentes, en tanto se verifique a su respecto el hecho
imponible que les atribuyen las respectivas leyes tributarias, en la medida
y condiciones necesarias que éstas prevén para que surja la obligación
tributaria:
a) Las personas de existencia visible, capaces o incapaces según el
derecho común.
b) Las personas jurídicas del Código Civil y las sociedades, asociaciones
y entidades a las que el derecho privado reconoce la calidad de sujetos
de derecho.
c) Las sociedades, asociaciones, entidades y empresas que no tengan
las calidades previstas en el inciso anterior, y aún los patrimonios
destinados a un fin determinado, cuando unas y otros sean considerados
por las leyes tributarias como unidades económicas para la atribución del
hecho imponible.
d) Las sucesiones indivisas, cuando las leyes tributarias las consideren
como sujetos para la atribución del hecho imponible, en las condiciones
previstas en la ley respectiva.
Las reparticiones centralizadas, descentralizadas o autárquicas del
Estado Nacional, provincial o municipal, así como las empresas estatales
y mixtas, están sujetas a los tributos (impuestos, tasas y contribuciones),
regidos por esta ley y a los restantes tributos nacionales (impuestos,
tasas y contribuciones), incluidos los aduaneros, estando, en
consecuencia, obligadas a su pago, salvo exención expresa.
Responsables del cumplimiento de la deuda ajena
ARTICULO 6º — Están obligados a pagar el tributo al Fisco, con los
recursos que administran, perciben o que disponen, como responsables
del cumplimiento de la deuda tributaria de sus representados, mandantes,
acreedores, titulares de los bienes administrados o en liquidación, etc., en
la forma y oportunidad que rijan para aquéllos o que especialmente se
fijen para tales responsables bajo pena de las sanciones de esta ley:
a) El cónyuge que percibe y dispone de todos los réditos propios del otro.
b) Los padres, tutores y curadores de los incapaces.
c) Los síndicos y liquidadores de las quiebras, representantes de las
sociedades en liquidación, los administradores legales o judiciales de las
sucesiones y, a falta de éstos, el cónyuge supérstite y los herederos.
d) Los directores, gerentes y demás representantes de las personas
jurídicas, sociedades, asociaciones, entidades, empresas y patrimonios a
que se refiere el artículo 5º en sus incisos b) y c).
e) Los administradores de patrimonios, empresas o bienes que en
ejercicio de sus funciones puedan determinar íntegramente la materia
imponible que gravan las respectivas leyes tributarias con relación a los
titulares de aquéllos y pagar el gravamen correspondiente; y, en las
mismas condiciones, los mandatarios con facultad de percibir dinero.

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f) Los agentes de retención y los de percepción de los impuestos.
Asimismo, están obligados a pagar el tributo al Fisco los responsables
sustitutos, en la forma y oportunidad en que, para cada caso, se estipule
en las respectivas normas de aplicación. (Párrafo incorporado por art. 1°,
punto I de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de
su publicación en el Boletín Oficial.)
ARTICULO 7º — Las personas mencionadas en los incisos a), b) y c) del
artículo anterior tienen que cumplir por cuenta de los representados y
titulares de los bienes que administran o liquidan, los deberes que esta
ley y las leyes impositivas imponen a los contribuyentes en general para
los fines de la determinación, verificación y fiscalización de los impuestos.
Las personas mencionadas en los incisos d) y e) de dicho artículo tienen
que cumplir los mismos deberes que para esos fines incumben también a
las personas, entidades, etc., con que ellas se vinculan.
Responsables en forma personal y solidaria con los deudores
ARTICULO 8º — Responden con sus bienes propios y solidariamente con
los deudores del tributo y, si los hubiere, con otros responsables del
mismo gravamen, sin perjuicio de las sanciones correspondientes a las
infracciones cometidas:
a) Todos los responsables enumerados en los primeros CINCO (5)
incisos del artículo 6º cuando, por incumplimiento de sus deberes
tributarios, no abonaran oportunamente el debido tributo, si los deudores
no cumplen la intimación administrativa de pago para regularizar su
situación fiscal dentro del plazo fijado por el segundo párrafo del artículo
17. No existirá, sin embargo, esta responsabilidad personal y solidaria
con respecto a quienes demuestren debidamente a la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS que sus representados,
mandantes, etc., los han colocado en la imposibilidad de cumplir correcta
y oportunamente con sus deberes fiscales. (Inciso sustituido por Título XV
art. 18 inciso 1) de la Ley Nº 25.239 B.O. 31/12/1999)
En las mismas condiciones del párrafo anterior, los socios de sociedades
irregulares o de hecho. También serán responsables, en su caso, los
socios solidariamente responsables de acuerdo con el derecho común,
respecto de las obligaciones fiscales que correspondan a las sociedades
o personas jurídicas que los mismos representen o integren. (Párrafo
incorporado a continuación del inciso a) por art. 1° pto. IV de la Ley N°
26.044B.O. 6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial)
b) Sin perjuicio de lo dispuesto en el inciso anterior y con carácter
general, los síndicos de los concursos preventivos y de las quiebras que
no hicieren las gestiones necesarias para la determinación y ulterior
ingreso de los tributos adeudados por los responsables respecto de los
períodos anteriores y posteriores a la apertura del concurso o auto de
quiebra, según el caso; en particular, si dentro de los QUINCE (15) días
corridos de aceptado el cargo en el expediente judicial, no hubieran
requerido a la Administración Federal de Ingresos Públicos las
constancias de las respectivas deudas tributarias, en la forma y
condiciones que establezca dicho organismo.(Inciso sustituido por art. 1°
pto. V de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su
publicación en el Boletín Oficial)

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c) Los agentes de retención por el tributo que omitieron retener o que,
retenido, dejaron de pagar a la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS dentro de los QUINCE (15) días siguientes a
aquél en que correspondía efectuar la retención, si no acreditaren que los
contribuyentes han pagado el gravamen, y sin perjuicio de la obligación
solidaria que para abonarlo existe a cargo de éstos desde el vencimiento
del plazo señalado; y los agentes de percepción por el tributo que dejaron
de percibir o que percibido dejaron de ingresar a la ADMINISTRACION
FEDERAL en la forma y tiempo que establezcan las leyes respectivas.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, podrá fijar
otros plazos de ingreso cuando las circunstancias lo hicieran conveniente
a los fines de la recaudación o del control de la deuda.
d) Los sucesores a título particular en el activo y pasivo de empresas o
explotaciones que las leyes tributarias consideran como una unidad
económica susceptible de generar íntegramente el hecho imponible, con
relación a sus propietarios o titulares, si los contribuyentes no hubiesen
cumplido la intimación administrativa de pago del tributo adeudado.
La responsabilidad del adquirente, en cuanto a la deuda fiscal no
determinada, caducará:
1. A los TRES (3) meses de efectuada la transferencia, si con antelación
de QUINCE (15) días ésta hubiera sido denunciada a la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.
2. En cualquier momento en que la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS reconozca como suficiente la solvencia del
cedente con relación al tributo que pudiera adeudarse, o en que acepte la
garantía que éste ofrezca a ese efecto.
e) Los terceros que, aún cuando no tuvieran deberes tributarios a su
cargo, faciliten por su culpa o dolo la evasión del tributo.
f) Los cedentes de créditos tributarios respecto de la deuda tributaria de
sus cesionarios y hasta la concurrencia del importe aplicado a la
cancelación de la misma, si se impugnara la existencia o legitimidad de
tales créditos y los deudores no cumplieren con la intimación
administrativa de pago.
g) Cualesquiera de los integrantes de una unión transitoria de empresas o
de un agrupamiento de colaboración empresaria, respecto de las
obligaciones tributarias generadas por el agrupamiento como tal y hasta
el monto de las mismas. (Inciso incorporado por art. 1°, punto II de la Ley
N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en
el Boletín Oficial.)
h) Los contribuyentes que por sus compras o locaciones reciban facturas
o documentos equivalentes, apócrifos o no autorizados, cuando
estuvieren obligados a constatar su adecuación, conforme las
disposiciones del artículo sin número incorporado a continuación del
artículo 33 de la presente ley. En este caso responderán por los
impuestos adeudados por el emisor, emergentes de la respectiva
operación y hasta el monto generado por la misma, siempre que no
puedan acreditar la existencia y veracidad del hecho imponible. (Inciso
incorporado por art. 1°, punto II de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
Responsables por los subordinados

14
ARTICULO 9º — Los obligados y responsables de acuerdo con las
disposiciones de esta ley, lo son también por las consecuencias del
hecho u omisión de sus factores, agentes o dependientes, incluyendo las
sanciones y gastos consiguientes.
Responsabilidad del consumidor final
ARTICULO 10 — Los consumidores finales de bienes y servicios, o
quienes según las leyes tributarias deben recibir ese tratamiento, estarán
obligados a exigir la entrega de facturas o comprobantes que documenten
sus operaciones.
La obligación señalada incluye la de conservarlos en su poder y exhibirlos
a los inspectores de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, que pudieran requerirlos en el momento de la operación o a
la salida del establecimiento, local, oficina, recinto o puesto de ventas
donde se hubieran celebrado las mencionadas transacciones. El
incumplimiento de esta obligación en las operaciones de más de DIEZ
PESOS ($ 10) será sancionado según los términos del primer párrafo del
artículo 39 de esta ley reduciéndose el mínimo de la multa a este efecto a
VEINTE PESOS ($ 20). La actitud del consumidor deberá revelar
connivencia o complacencia con el obligado a emitir o entregar la factura
o comprobante.
La sanción a quien haya incumplido el deber de emitir o entregar facturas
o comprobantes equivalentes será un requisito previo para que recaiga
sanción al consumidor final por la misma omisión.
CAPITULO III DETERMINACION Y PERCEPCION DE IMPUESTOS
Declaración jurada y liquidación administrativa del tributo
ARTICULO 11 — La determinación y percepción de los gravámenes que
se recauden de acuerdo con la presente ley, se efectuará sobre la base
de declaraciones juradas que deberán presentar los responsables del
pago de los tributos en la forma y plazos que establecerá la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS. Cuando ésta
lo juzgue necesario, podrá también hacer extensiva esa obligación a los
terceros que de cualquier modo intervengan en las operaciones o
transacciones de los contribuyentes y demás responsables, que estén
vinculados a los hechos gravados por las leyes respectivas.
El PODER EJECUTIVO NACIONAL queda facultado para reemplazar,
total o parcialmente, el régimen de declaración jurada a que se refiere el
párrafo anterior, por otro sistema que cumpla la misma finalidad,
adecuando al efecto las normas legales respectivas.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrá
disponer con carácter general, cuando así convenga y lo requiera la
naturaleza del gravamen a recaudar, la liquidación administrativa de la
obligación tributaria sobre la base de datos aportados por los
contribuyentes, responsables, terceros y/o los que ella posee.
ARTICULO 12 — Las liquidaciones de impuestos previstas en el artículo
anterior así como las de intereses resarcitorios, actualizaciones y
anticipos expedidos por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS mediante sistemas de computación, constituirán títulos
suficientes a los efectos de la intimación de pago de los mismos si
contienen, además de los otros requisitos y enunciaciones que les fueran
propios, la sola impresión del nombre y del cargo del juez administrativo.

15
Esto será igualmente válido tratándose de la multa y del procedimiento
indicados en el artículo 38.
ARTICULO 13 — La declaración jurada está sujeta a verificación
administrativa y, sin perjuicio del tributo que en definitiva liquide o
determine la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS
hace responsable al declarante por el gravamen que en ella se base o
resulte, cuyo monto no podrá reducir por declaraciones posteriores, salvo
en los casos de errores de cálculo cometidos en la declaración misma. El
declarante será también responsable en cuanto a la exactitud de los
datos que contenga su declaración, sin que la presentación de otra
posterior, aunque no le sea requerida, haga desaparecer dicha
responsabilidad.
ARTICULO 14 — Cuando en la declaración jurada se computen contra el
impuesto determinado, conceptos o importes improcedentes, tales como
retenciones, pagos a cuenta, acreditaciones de saldos a favor propios o
de terceros o el saldo a favor de la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS se cancele o se difiera impropiamente
(certificados de cancelación de deuda falsos, regímenes promocionales
incumplidos, caducos o inexistentes, cheques sin fondo, etc.), no
procederá para su impugnación el procedimiento normado en los artículos
16 y siguientes de esta ley, sino que bastará la simple intimación de pago
de los conceptos reclamados o de la diferencia que generen en el
resultado de dicha declaración jurada.
ARTICULO 15 — Las boletas de depósito y las comunicaciones de pago
confeccionadas por el responsable con datos que él mismo aporte, tienen
el carácter de declaración jurada, y las omisiones, errores o falsedades
que en dichos instrumentos se comprueben, están sujetos a las
sanciones de los artículos 39, 45 y 46 de la ley.
Sin perjuicio de lo que dispongan las leyes tributarias específicas, a los
efectos del monto de la materia imponible y del gravamen, no se tomarán
en cuenta las fracciones de peso que alcancen hasta CINCO (5) décimas
de centavo computándose como un (1) centavo de peso las que superen
dicho tope.
Determinación de Oficio
ARTICULO 16 — Cuando no se hayan presentado declaraciones juradas
o resulten impugnables las presentadas, la ADMINISTRACION FEDERAL
DE INGRESOS PUBLICOS procederá a determinar de oficio la materia
imponible o el quebranto impositivo, en su caso, y a liquidar el gravamen
correspondiente, sea en forma directa, por conocimiento cierto de dicha
materia, sea mediante estimación, si los elementos conocidos sólo
permiten presumir la existencia y magnitud de aquélla.
Las liquidaciones y actuaciones practicadas por los inspectores y demás
empleados que intervienen en la fiscalización de los tributos, no
constituyen determinación administrativa de aquéllos, la que sólo
compete a los funcionarios que ejercen las atribuciones de jueces
administrativos a que se refieren los artículos 9º, punto 1, inciso b) y 10
del Decreto Nº 618/97.
Cuando se trate de liquidaciones efectuadas con arreglo al último párrafo
del artículo 11 el responsable podrá manifestar su disconformidad antes
del vencimiento general del gravamen; no obstante ello, cuando no se

16
hubiere recibido la liquidación QUINCE (15) días antes del vencimiento, el
término para hacer aquella manifestación se extenderá hasta QUINCE
(15) días después de recibida.
El rechazo del reclamo autorizará al responsable a interponer los
recursos previstos en el artículo 76 en la forma allí establecida.
ARTICULO 17 — El procedimiento de determinación de oficio se iniciará,
por el juez administrativo, con una vista al contribuyente o responsable de
las actuaciones administrativas y de las impugnaciones o cargos que se
formulen, proporcionando detallado fundamento de los mismos, para que
en el término de QUINCE (15) días, que podrá ser prorrogado por otro
lapso igual y por única vez, formule por escrito su descargo y ofrezca o
presente las pruebas que hagan a su derecho.
Evacuada la vista o transcurrido el término señalado, el juez
administrativo dictará resolución fundada determinando el tributo e
intimando el pago dentro del plazo de QUINCE (15) días.
La determinación deberá contener lo adeudado en concepto de tributos y,
en su caso, multa, con el interés resarcitorio y la actualización, cuando
correspondiesen, calculados hasta la fecha que se indique en la misma,
sin perjuicio de la prosecución del curso de los mismos, con arreglo a las
normas legales y reglamentarias pertinentes.
En el supuesto que transcurrieran noventa (90) días desde la evacuación
de la vista o del vencimiento del término establecido en el primer párrafo
sin que se dictare la resolución, el contribuyente o responsable podrá
requerir pronto despacho. Pasados TREINTA (30) días de tal
requerimiento sin que la resolución fuere dictada, caducará el
procedimiento, sin perjuicio de la validez de las actuaciones
administrativas realizadas, y el Fisco podrá iniciar -por una única vez- un
nuevo proceso de determinación de oficio, previa autorización del titular
de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, de lo
que se dará conocimiento dentro del término de TREINTA (30) días al
Organismo que ejerce superintendencia sobre la ADMINISTRACION
FEDERAL, con expresión de las razones que motivaron el evento y las
medidas adoptadas en el orden interno.
El procedimiento del presente artículo deberá ser cumplido también
respecto de aquellos en quienes se quiera efectivizar la responsabilidad
solidaria del artículo 8º.
Cuando la disconformidad respecto de las liquidaciones practicadas por la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS con arreglo al
último párrafo del artículo 11 se limite a errores de cálculo, se resolverá
sin sustanciación. Si la disconformidad se refiere a cuestiones
conceptuales, deberá dilucidarse a través de la determinación de oficio.
No será necesario dictar resolución determinando de oficio la obligación
tributaria si -antes de ese acto- prestase el responsable su conformidad
con las impugnaciones o cargos formulados, la que surtirá entonces los
efectos de una declaración jurada para el responsable y de una
determinación de oficio para el Fisco.
Cuando los agentes de retención o percepción —habiendo practicado la
retención o percepción correspondiente— hubieran presentado
declaraciones juradas determinativas o informativas de su situación frente
al gravamen de que se trate o, alternativamente, la Administración

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Federal de Ingresos Públicos, constatare la retención o percepción
practicada a través de los pertinentes certificados, no procederá la
aplicación del procedimiento previsto en los artículos 16 y siguientes de
esta ley, bastando la simple intimación de las sumas reclamadas. (Párrafo
incorporado por art. 1° pto. VI de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial)
ARTICULO 18 — La estimación de oficio se fundará en los hechos y
circunstancias conocidos que, por su vinculación o conexión normal con
los que las leyes respectivas prevén como hecho imponible, permitan
inducir en el caso particular la existencia y medida del mismo. Podrán
servir especialmente como indicios: el capital invertido en la explotación,
las fluctuaciones patrimoniales, el volumen de las transacciones y
utilidades de otros períodos fiscales, el monto de las compras o ventas
efectuadas, la existencia de mercaderías, el rendimiento normal del
negocio o explotación o de empresas similares, los gastos generales de
aquéllos, los salarios, el alquiler del negocio y de la casa-habitación, el
nivel de vida del contribuyente y cualesquiera otros elementos de juicio
que obren en poder de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS o que deberán proporcionarles los agentes de retención,
cámaras de comercio o industria, bancos, asociaciones gremiales,
entidades públicas o privadas, cualquier otra persona, etc.
En las estimaciones de oficio podrán aplicarse los promedios y
coeficientes generales que a tal fin establezca el Administrador Federal
con relación a explotaciones de un mismo género.
A los efectos de este artículo podrá tomarse como presunción general,
salvo prueba en contrario que:
a) Las ganancias netas de personas de existencia visible equivalen por lo
menos a TRES (3) veces el alquiler que paguen por la locación de
inmuebles destinados a casa-habitación en el respectivo período fiscal.
b) Cuando los precios de inmuebles que figuren en las escrituras sean
notoriamente inferiores a los vigentes en plaza, y ello no sea explicado
satisfactoriamente por los interesados, por las condiciones de pago, por
características peculiares del inmueble o por otras circunstancias, la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrá
impugnar dichos precios y fijar de oficio un precio razonable de mercado.
c) A los efectos de cada uno de los impuestos que se indican
seguidamente, las diferencias físicas de inventarios de mercaderías
comprobadas por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, luego de su correspondiente valoración, representan:
1. En el impuesto a las ganancias:
Ganancias netas determinadas por un monto equivalente a la diferencia
de inventario en concepto de incremento patrimonial, más un diez por
ciento (10%) en concepto de renta dispuesta o consumida en gastos no
deducibles.
2. En el impuesto al valor agregado:
Montos de ventas gravadas omitidas, determinados por aplicación, sobre
la suma de los conceptos resultantes del punto precedente, del
coeficiente que resulte de dividir el monto de ventas gravadas,
correspondientes al ejercicio fiscal cerrado inmediato anterior a aquel en
que se verifiquen las diferencias de inventarios, declaradas o registradas,

18
ajustadas impositivamente, según corresponda, por el valor de las
mercaderías en existencia al final del ejercicio citado precedentemente,
declaradas o registradas, ajustadas impositivamente, según corresponda.
El pago del impuesto en estas condiciones no generará ningún crédito
fiscal.
Igual método se aplicará para los rubros de impuestos internos que
correspondan.
3. En los impuestos sobre el patrimonio neto y sobre los capitales: bienes
del activo computable.
Se presume, sin admitir prueba en contrario, que en relación a los
impuestos a las ganancias, sobre el patrimonio neto y sobre los capitales,
las diferencias de materia imponible, estimadas conforme a los puntos 1 y
3 precedentes, corresponden al último ejercicio fiscal cerrado
inmediatamente anterior a aquel en el cual la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS hubiera verificado las diferencias
de inventario de mercaderías.
Tratándose del impuesto al valor agregado, las diferencias de ventas
gravadas a que se refiere el apartado 2 serán atribuidas a cada uno de
los meses calendarios comprendidos en el ejercicio comercial anterior
prorrateándolas en función de las ventas gravadas que se hubieran
declarado o registrado, respecto de cada uno de dichos meses. Igual
método se aplicará para los rubros de impuestos internos que
correspondan.
c’) Las diferencias entre la producción considerada por el contribuyente a
los fines tributarios teniendo en cuenta las existencias iniciales y finales y
la información obtenida por relevamiento efectuado por imagen satelital,
previamente valuadas en función de precios oficiales determinados para
exportación o en función de precios de mercado en los que el
contribuyente acostumbra a operar, representan:
1) En el impuesto a las ganancias:
Ganancias netas determinadas por un monto equivalente a las diferencias
de producción en concepto de incremento patrimonial, más un DIEZ POR
CIENTO (10%) en concepto de renta dispuesta o consumida en gastos no
deducibles.
2) En el impuesto al valor agregado:
Montos de ventas omitidas, determinadas por la suma de los conceptos
resultantes del punto precedente.
El pago del impuesto en estas condiciones no generará ningún crédito
fiscal.
3) En los impuestos sobre los bienes personales y ganancia mínima
presunta:
Bienes del activo computable.
Se presume, sin admitir prueba en contrario, que las diferencias de
materia imponible estimadas, corresponden al ejercicio fiscal en el cual la
Administración Tributaria hubiera verificado las diferencias de producción.
Las diferencias de ventas a que se refieren el punto 2, serán atribuidas a
cada uno de los meses calendarios comprendidos en el ejercicio
comercial, prorrateándolas en función de las ventas gravadas y exentas
que se hubieran declarado o registrado, respecto de cada uno de dichos
meses.

19
(Inciso sustituido por art. 1° pto. VII de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial)
d) El resultado de promediar el total de ventas, de prestaciones de
servicios o de cualquier otra operación controlada por la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS en no menos
de DIEZ (10) días continuos o alternados fraccionados en dos períodos
de CINCO (5) días cada uno, con un intervalo entre ellos que no podrá
ser inferior a siete (7) días, de un mismo mes, multiplicado por el total de
días hábiles comerciales, representan las ventas, prestaciones de
servicios u operaciones presuntas del contribuyente o responsable bajo
control, durante ese mes.
Si el mencionado control se efectuara en no menos de cuatro (4) meses
continuos o alternados de un mismo ejercicio comercial, el promedio de
ventas, prestaciones de servicios u operaciones se considerará
suficientemente representativo y podrá también aplicarse a los demás
meses no controlados del mismo período a condición de que se haya
tenido debidamente en cuenta la estacionalidad de la actividad o ramo de
que se trate.
La diferencia de ventas, prestaciones de servicios u operaciones
existentes entre las de ese período y lo declarado o registrado ajustado
impositivamente, se considerará:
1. Ganancia neta en el impuesto a las ganancias.
2. Ventas, prestaciones de servicios u operaciones gravadas o exentas
en el impuesto al valor agregado, en la misma proporción que tengan las
que hubieran sido declaradas o registradas en cada uno de los meses del
ejercicio comercial anterior.
Igual método se aplicará para los rubros de impuestos internos que
correspondan.
e) En el caso que se comprueben operaciones marginales durante un
período fiscalizado que puede ser inferior a un mes, el porcentaje que
resulte de compararlas con las registradas, informadas, declaradas o
facturadas conforme a las normas dictadas por la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS de ese mismo período, aplicado
sobre las ventas de los últimos doce (12) meses, que pueden no coincidir
con el ejercicio comercial, determinará, salvo prueba en contrario,
diferencias de ventas que se considerarán en la misma forma que se
prescribe en los apartados 1 y 2 del último párrafo del inciso d)
precedente para los meses involucrados y teniendo en cuenta lo allí
determinado sobre la estacionalidad de la actividad o ramo de que se
trate.
Si la fiscalización y la comprobación de operaciones marginales abarcare
un período fiscal, la presunción a que se refiere el párrafo anterior se
aplicará, del modo allí previsto, sobre los años no prescriptos.
f) Los incrementos patrimoniales no justificados, representan:
1) En el impuesto a las ganancias:
Ganancias netas determinadas por un monto equivalente a los
incrementos patrimoniales no justificados, más un DIEZ POR CIENTO
(10%) en concepto de renta dispuesta o consumida en gastos no
deducibles.
2) En el impuesto al valor agregado:

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Montos de ventas omitidas determinadas por la suma de los conceptos
resultantes del punto precedente.
El pago del impuesto en estas condiciones no generará ningún crédito
fiscal.
3) El método establecido en el punto 2 se aplicará a los rubros de
impuestos internos que correspondan.
(Inciso sustituido por art. 1° pto. VII de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial)
g) Los depósitos bancarios, debidamente depurados, que superen las
ventas y/o ingresos declarados del periodo, representan:
1) En el impuesto a las ganancias:
Ganancias netas determinadas por un monto equivalente a las diferencias
de depósitos en concepto de incremento patrimonial, más un DIEZ POR
CIENTO (10%) en concepto de renta dispuesta o consumida en gastos no
deducibles.
2) En el impuesto al valor agregado:
Montos de ventas omitidas, determinadas por la suma de los conceptos
resultantes del punto precedente.
El pago del impuesto en estas condiciones no generará ningún crédito
fiscal.
3) El método establecido en el punto 2 se aplicará a los rubros de
impuestos internos que correspondan.
(Inciso sustituido por art. 1° pto. VII de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial)
h) El importe de las remuneraciones abonadas al personal en relación de
dependencia no declarado, así como las diferencias salariales no
declaradas, representan:
1) En el impuesto a las ganancias:
Ganancias netas determinadas por un monto equivalente a las
remuneraciones no declaradas en concepto de incremento patrimonial,
más un DIEZ POR CIENTO (10%) en concepto de renta dispuesta o
consumida en gastos no deducibles.
2) En el impuesto al valor agregado:
Montos de ventas omitidas, determinadas por la suma de los conceptos
resultantes del punto precedente.
El pago del impuesto en estas condiciones no generará ningún crédito
fiscal.
3) El método establecido en el punto 2 se aplicará a los rubros de
impuestos internos que correspondan.
Las diferencias de ventas a que se refieren los puntos 2 y 3 de este inciso
y de los incisos f) y g) precedentes, serán atribuidas a cada uno de los
meses calendarios comprendidos en el ejercicio comercial en el que se
constataren tales diferencias, prorrateándolas en función de las ventas
gravadas y exentas que se hubieran declarado o registrado.
(Inciso sustituido por art. 1° pto. VII de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial)
Las presunciones establecidas en los distintos incisos del párrafo
precedente no podrán aplicarse conjuntamente para un mismo gravamen
por un mismo período fiscal.

21
También la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS,
podrá efectuar la determinación calculando las ventas o servicios
realizados por el contribuyente o las utilidades en función de cualquier
índice que pueda obtener, tales como el consumo de gas o energía
eléctrica, adquisición de materias primas o envases, el pago de salarios,
el monto de los servicios de transporte utilizados, el valor del total del
activo propio o ajeno o de alguna parte del mismo. Este detalle es
meramente enunciativo y su empleo podrá realizarse individualmente o
utilizando diversos índices en forma combinada y aplicarse ya sea
proyectando datos del mismo contribuyente de ejercicios anteriores o de
terceros que desarrollen una actividad similar de forma de obtener los
montos de ventas, servicios o utilidades proporcionales a los índices en
cuestión. La carencia de contabilidad o de comprobantes fehacientes de
las operaciones hará nacer la presunción de que la determinación de los
gravámenes efectuada por la ADMINISTRACION FEDERAL en base a
los índices señalados u otros que contenga esta ley o que sean
técnicamente aceptables, es legal y correcta, sin perjuicio del derecho del
contribuyente o responsable a probar lo contrario. Esta probanza deberá
fundarse en comprobantes fehacientes y concretos, careciendo de
virtualidad toda apreciación o fundamentación de carácter general o
basadas en hechos generales. La probanza que aporte el contribuyente
no hará decaer la determinación de la ADMINISTRACION FEDERAL sino
solamente en la justa medida de la prueba cuya carga corre por cuenta
del mismo.
Artículo...: Cuando se tratare de ingresos de fondos provenientes de
países de baja o nula tributación —a que alude el artículo 15 de la Ley de
Impuesto a las Ganancias (texto ordenado en 1997 y sus
modificaciones)— cualquiera sea su naturaleza, concepto o tipo de
operación de que se trate, se considerará que tales fondos constituyen
incrementos patrimoniales no justificados para el tomador o receptor
local.
Los incrementos patrimoniales no justificados a que se refiere el párrafo
anterior con más un DIEZ POR CIENTO (10%) en concepto de renta
dispuesta o consumida en gastos no deducibles, representan ganancias
netas del ejercicio en que se produzcan, a los efectos de la determinación
del impuesto a las ganancias y en su caso, base para estimar las
operaciones gravadas omitidas del respectivo ejercicio comercial en los
impuestos al valor agregado e internos.
No obstante lo dispuesto en los párrafos precedentes, la Administración
Federal de Ingresos Públicos considerará como justificados aquellos
ingresos de fondos a cuyo respecto el interesado pruebe fehacientemente
que se originaron en actividades efectivamente realizadas por el
contribuyente o por terceros en dichos países o que provienen de
colocaciones de fondos oportunamente declarados.
(Artículo sin número incorporado por art. 1°, punto V de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
Artículo...: La determinación de los gravámenes efectuada por la
Administración Federal de Ingresos Públicos en base a lo previsto en el
artículo 18 o a los métodos de justificación de precios a que se refiere el

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artículo 15 de la Ley de Impuesto a las Ganancias (t.o. en 1997 y sus
modificaciones), o en la aplicación de precios de operaciones idénticas o
similares realizadas en la República Argentina u otros mecanismos que
contenga esta ley o que sean técnicamente aceptables, tendrá pleno
efecto y se presumirá correcta, cuando se origine en la falta de
presentación a requerimiento de declaraciones juradas con el detalle de
las transacciones celebradas entre sociedades locales, empresas,
fideicomisos o establecimientos estables ubicados en el país con
personas físicas, jurídicas o cualquier otro tipo de entidad domiciliada,
constituida o ubicada en el exterior, así como en la falta de registración
fehaciente de dichas operaciones o de los comprobantes respaldatorios
de las operaciones.
Sin perjuicio de ello, el contribuyente o responsable tendrá derecho a
probar lo contrario. Esta probanza deberá fundarse en comprobantes
fehacientes y concretos, careciendo de virtualidad toda apreciación o
fundamentación de carácter general o basadas en hechos generales. La
probanza que aporte el contribuyente no hará decaer la determinación de
la Administración Federal de Ingresos Públicos sino solamente en la justa
medida de la prueba cuya carga corre por cuenta del mismo.
(Artículo sin número incorporado por art. 1°, punto V de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
Efectos de la Determinación de Oficio
ARTICULO 19 — Si la determinación de oficio resultara inferior a la
realidad, quedará subsistente la obligación del contribuyente de así
denunciarlo y satisfacer el impuesto correspondiente al excedente, bajo
pena de las sanciones de esta ley.
La determinación del juez administrativo del impuesto, en forma cierta o
presuntiva, una vez firme, sólo podrá ser modificada en contra del
contribuyente en los siguientes casos:
a) Cuando en la resolución respectiva se hubiere dejado expresa
constancia del carácter parcial de la determinación de oficio practicada y
definidos los aspectos que han sido objeto de la fiscalización, en cuyo
caso sólo serán susceptibles de modificación aquellos aspectos no
considerados expresamente en la determinación anterior.
b) Cuando surjan nuevos elementos de juicio o se compruebe la
existencia de error, omisión o dolo en la exhibición o consideración de los
que sirvieron de base a la determinación anterior (cifras de ingresos,
egresos, valores de inversión y otros).
CAPITULO IV DEL PAGO
Vencimiento general
ARTICULO 20 — La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS establecerá los vencimientos de los plazos generales tanto
para el pago como para la presentación de declaraciones juradas y toda
otra documentación.
En cuanto al pago de los tributos determinados por la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS deberá ser efectuado dentro de
los QUINCE (15) días de notificada la liquidación respectiva.
Anticipos

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ARTICULO 21 — Podrá la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS exigir, hasta el vencimiento del plazo general o hasta la fecha
de presentación de la declaración jurada por parte del contribuyente, el
que fuera posterior, el ingreso de importes a cuenta del tributo que se
deba abonar por el período fiscal por el cual se liquidan los anticipos.
En el caso de falta de ingreso a la fecha de los vencimientos de los
anticipos que fije la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, ésta podrá requerir su pago por vía judicial. Luego de
iniciado el juicio de ejecución fiscal, la ADMINISTRACION FEDERAL no
estará obligada a considerar el reclamo del contribuyente contra el
importe requerido, sino por la vía de repetición y previo pago de las
costas y gastos del juicio e intereses y actualización que correspondan.
La presentación de la declaración jurada en fecha posterior a la iniciación
del juicio no enervará la prosecución del mismo.
Facúltase a la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS
a dictar las normas complementarias que considere necesarias, respecto
del régimen de anticipos y en especial las bases de cálculo, cómputo e
índices aplicables, plazos y fechas de vencimiento, actualización y
requisitos a cubrir por los contribuyentes.
Percepción en la fuente
ARTICULO 22 — La percepción de los tributos se hará en la misma
fuente cuando así lo establezcan las leyes impositivas y cuando la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, por
considerarlo conveniente, disponga qué personas y en qué casos
intervendrán como agentes de retención y/o percepción.
Forma de pago
ARTICULO 23 — El pago de los tributos, intereses y multas se hará
mediante depósito en las cuentas especiales del Banco de la Nación
Argentina, y de los bancos y otras entidades que la Administración
Federal de Ingresos Públicos autorice a ese efecto, o mediante cheque,
giro o valor postal o bancario a la orden del citado organismo. Para ese
fin la Administración Federal de Ingresos Públicos abrirá cuentas en los
bancos para facilitar la percepción de los gravámenes. (Párrafo sustituido
por art. 1°, punto VI de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a
partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS acordará
con los bancos el procedimiento para que éstos devuelvan a sus clientes
todos los cheques librados a la orden de la ADMINISTRACION FEDERAL
una vez cancelados y satisfechos los requisitos de orden interno, de
acuerdo con las prácticas bancarias.
Los saldos disponibles de las cuentas recaudadoras se transferirán
diariamente a la Tesorería General de la Nación con excepción de los
importes necesarios que requiera la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS, para atender los pedidos de devolución que la
misma ordene en cada uno de los tributos cuya percepción esté a su
cargo.
ARTICULO 24 — Si la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS considerara que la aplicación de las disposiciones relativas a
la percepción previstas por las leyes no resultan adecuadas o eficaces

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para la recaudación, o la perjudicasen, podrá desistir de ellas, total o
parcialmente, y disponer otras formas y plazos de ingreso.
Lugar de pago
ARTICULO 25 — El pago del tributo deberá hacerse en el lugar del
domicilio del responsable en el país, o en el de su representante en caso
de ausencia. El pago del tributo retenido deberá efectuarse en el lugar del
domicilio del agente de retención. El pago del tributo percibido por el
agente de percepción deberá efectuarse en el lugar del domicilio de dicho
agente.
Cuando el domicilio no pudiera determinarse, o no se conociese el del
representante en caso de ausencia del responsable, la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS fijará el lugar
del pago.
Imputación
ARTICULO 26 — Los responsables determinarán, al efectuar los pagos o
los ingresos a cuenta, a qué deudas deberán imputarse. Cuando así no lo
hicieren y las circunstancias especiales del caso no permitiesen
establecer la deuda a que se refieren, la ADMINISTRACION FEDERAL
DE INGRESOS PUBLICOS determinará a cuál de las obligaciones no
prescriptas deberán imputarse los pagos o ingresos.
En los casos de prórroga por obligaciones que abarquen más de un
ejercicio, los ingresos, en la parte que correspondan a impuestos, se
imputarán a la deuda más antigua.
ARTICULO 27 — El importe de impuesto que deben abonar los
responsables en las circunstancias previstas por el artículo 20, primera
parte, de esta ley, será el que resulte de deducir del total del gravamen
correspondiente al período fiscal que se declare, las cantidades pagadas
a cuenta del mismo, las retenciones sufridas por hechos gravados cuya
denuncia incluya la declaración jurada y los saldos favorables ya
acreditados por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS o que el propio responsable hubiera consignado en
declaraciones juradas anteriores, en cuanto éstas no hayan sido
impugnadas.
Sin la conformidad de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS no podrán los responsables deducir, del impuesto que les
corresponda abonar, otras cantidades que las provenientes de los
conceptos indicados.
En los impuestos, a las ganancias —para los sujetos comprendidos en el
Título VI de la ley del gravamen—, sobre los activos, sobre los capitales y
en la contribución especial sobre el capital de las cooperativas, el
gravamen determinado al cierre del ejercicio, como las sumas que se
computen a cuenta del mismo —incluso los anticipos dispuestos por el
artículo 21—, se actualizarán hasta el vencimiento fijado para la
presentación de la declaración jurada y pago del impuesto resultante o
presentación de la declaración jurada y pago, el que fuere anterior, por
los siguientes índices:
a) Precios mayoristas nivel general elaborado por el Instituto Nacional de
Estadística y Censos desde el mes de pago o de cierre del ejercicio fiscal
según corresponda hasta el penúltimo mes anterior al vencimiento o a la
presentación y pago, el que fuere anterior.

25
b) Indice financiero sobre base diaria que al efecto determine el Banco
Central de la República Argentina desde el último día del penúltimo mes
anterior al del vencimiento o presentación de la declaración jurada y
pago, el que fuera anterior, o el día de pago, según corresponda, y el día
anterior a dicho vencimiento o presentación.
A los efectos de lo dispuesto en el párrafo anterior no será de aplicación
el primer párrafo del artículo 134.
Cuando la presentación y pago se efectuara dentro del mes siguiente al
cierre del ejercicio, todos los pagos a cuenta se ajustarán como se indica
en el tercer párrafo hasta el mes de cierre del ejercicio. A partir del último
día de dicho cierre y hasta el día anterior al pago se aplicará el índice
financiero precedente sobre los conceptos mencionados en el presente
artículo.
Facúltase al Ministerio de ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS
PUBLICOS, cuando razones de orden económico lo aconsejen, a:
a) Suspender la aplicación de la actualización por índice financiero diario
a que se alude en el inciso b) del tercer párrafo y en el párrafo anterior in
fine.
b) Disponer la aplicación de una actualización por el mismo índice
financiero diario para los demás impuestos -no mencionados en el tercer
párrafo- y los regímenes de retenciones y percepciones, determinando
para cada uno de ellos los momentos entre los que deberá practicarse la
actualización.
En los períodos en que, por ejercicio de la facultad a que se refiere el
párrafo anterior, se encuentre vigente este sistema de actualización para
el impuesto al valor agregado, el mismo será utilizado también para la
actualización de saldos a favor a que se refiere el último párrafo del
artículo 24 de la ley del referido gravamen.
Compensación
ARTICULO 28 — La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS podrá compensar de oficio los saldos acreedores del
contribuyente, cualquiera que sea la forma o procedimiento en que se
establezcan, con las deudas o saldos deudores de impuestos declarados
por aquél o determinados por la ADMINISTRACION FEDERAL y
concernientes a períodos no prescriptos, comenzando por los más
antiguos y, aunque provengan de distintos gravámenes. Igual facultad
tendrá para compensar multas firmes con impuestos y accesorios, y
viceversa.
La facultad consignada en el párrafo anterior podrá hacerse extensible a
los responsables enumerados en el artículo 6º de esta ley, conforme los
requisitos y condiciones que determine la Administración Federal de
Ingresos Públicos.
(Párrafo incorporado por art. 1° pto. VIII de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Frase ", en todos los casos, previa sustanciación, del
procedimiento previsto en los artículos 16 y siguientes." Observada por
Decreto N° 777/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial)
Acreditación y Devolución
ARTICULO 29 — Como consecuencia de la compensación prevista en el
artículo anterior o cuando compruebe la existencia de pagos o ingresos

26
en exceso, podrá la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, de oficio o a solicitud del interesado, acreditarle el remanente
respectivo, o si lo estima necesario en atención al monto o a las
circunstancias, proceder a la devolución de lo pagado de más, en forma
simple y rápida, a cargo de las cuentas recaudadoras.
Cuando en virtud de disposiciones especiales que lo autoricen, los
créditos tributarios puedan transferirse a favor de terceros responsables,
su aplicación por parte de estos últimos a la cancelación de sus propias
deudas tributarias, surtirá los efectos de pago sólo en la medida de la
existencia y legitimidad de tales créditos. La ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS no asumirá responsabilidades
derivadas del hecho de la transferencia, las que en todos los casos,
corresponderán exclusivamente a los cedentes y cesionarios respectivos.
La impugnación de un pago por causa de la inexistencia o ilegitimidad del
crédito tributario aplicado con ese fin, hará surgir la responsabilidad
personal y solidaria del cedente si fuera el caso de que el cesionario,
requerido por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS para regularizar la deuda, no cumpliere en el plazo que le
fuere acordado con la intimación de pago de su importe. Dicha
responsabilidad personal y solidaria se hará valer por el procedimiento
previsto en el artículo 17.
Se presume, sin admitir prueba en contrario, que los cedentes y
cesionarios, por el solo hecho de haber notificado a la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS de la transferencia acordada entre
ellos, adhieren voluntariamente a las disposiciones de carácter general
que dictare la misma para autorizar y reglamentar este tipo de
operaciones.
Intereses y Costas
ARTICULO 30 — La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS podrá disponer el pago directo de intereses y costas
causídicas (honorarios, etcétera), aprobados en juicio, con fondos de las
cuentas recaudadoras y cargo de oportuno reintegro a las mismas. Estos
pagos se efectuarán mediante consignación judicial, observándose en lo
pertinente las disposiciones del Decreto Nº 21.653/45.
Este régimen será de aplicación en todos los casos de impuestos,
derechos o contribuciones a cargo de la ADMINISTRACION FEDERAL
DE INGRESOS PUBLICOS, respecto de los cuales se halle o fuera
autorizada para hacer directamente devoluciones con fondos de las
cuentas recaudadoras.
Pago provisorio de impuestos vencidos
ARTICULO 31 — En los casos de contribuyentes que no presenten
declaraciones juradas por uno o más períodos fiscales y la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS conozca por
declaraciones o determinación de oficio la medida en que les ha
correspondido tributar gravamen en períodos anteriores, los emplazará
para que dentro de un término de QUINCE (15)días presenten las
declaraciones juradas e ingresen el tributo correspondiente. Si dentro de
dicho plazo los responsables no regularizan su situación, la
ADMINISTRACION FEDERAL, sin otro trámite, podrá requerirles
judicialmente el pago a cuenta del tributo que en definitiva les

27
corresponda abonar, de una suma equivalente a tantas veces el tributo
declarado o determinado respecto a cualquiera de los períodos no
prescriptos, cuantos sean los períodos por los cuales dejaron de
presentar declaraciones. La ADMINISTRACION FEDERAL queda
facultada a actualizar los valores respectivos sobre la base de la variación
del índice de precios al por mayor, nivel general.
Luego de iniciado el juicio de ejecución fiscal, la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS no estará obligada a considerar la
reclamación del contribuyente contra el importe requerido sino por la vía
de repetición y previo pago de las costas y gastos del juicio e intereses
que correspondan.
Prórroga
ARTICULO 32 — Facúltase a la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS para conceder facilidades para el pago de los
tributos, intereses y multas, incluso en casos particulares a favor de
aquellos contribuyentes y responsables que acrediten encontrarse en
condiciones económico-financieras que les impidan el cumplimiento
oportuno de dichas obligaciones.
Cuando la deuda se encontrare suficientemente garantizada a
satisfacción de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, se aplicará un interés que no podrá exceder del previsto por
el artículo 37 y que resultará del cuadro de tasas que establecerá la
ADMINISTRACION FEDERAL en atención a la antigüedad de la deuda.
Podrá también la ADMINISTRACION FEDERAL, en tales casos, titulizar
los créditos mediante la constitución de fideicomisos financieros,
canalizándose el producido de la negociación de los títulos hacia las
cuentas recaudadoras.
Cuando la deuda no estuviere garantizada, se aplicará un interés que
fijará la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS dentro
de los límites establecidos en el párrafo anterior.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrá, en
los casos de contribuyentes y responsables concursados, otorgar
facilidades especiales para el ingreso de las deudas privilegiadas
relativas a tributos y sus actualizaciones a cargo de aquélla, originadas
con anterioridad al auto de iniciación del concurso preventivo o auto
declarativo de quiebra, estableciendo al efecto plazos y condiciones para
dicho acogimiento.
Asimismo, la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS
podrá votar favorablemente en las condiciones que se fijen en las
propuestas judiciales de acuerdos preventivos o resolutorios, por créditos
quirografarios en tanto se otorgue al crédito fiscal idéntico tratamiento que
al resto de las deudas quirografarias.
Artículo...: La constitución, ampliación, modificación, sustitución,
cancelación y extinción de garantías en seguridad de obligaciones
fiscales de cualquier naturaleza y de sus intereses, multas y restantes
accesorios, como también de los demás actos u operaciones que así lo
exijan, podrá efectivizarse por medios electrónicos o magnéticos que
aseguren razonablemente la autoría e inalterabilidad de las mismas, en
las formas, requisitos y condiciones que a tal efecto establezca la
Administración Federal de Ingresos Públicos

28
(Artículo s/n incorporado por art. 1° pto. IX de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial
CAPITULO V VERIFICACION Y FISCALIZACION
ARTICULO 33 — Con el fin de asegurar la verificación oportuna de la
situación impositiva de los contribuyentes y demás responsables, podrá la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS exigir que
éstos, y aún los terceros cuando fuere realmente necesario, lleven libros
o registros especiales de las negociaciones y operaciones propias y de
terceros que se vinculen con la materia imponible, siempre que no se
trate de comerciantes matriculados que lleven libros rubricados en forma
correcta, que a juicio de la ADMINISTRACION FEDERAL haga fácil su
fiscalización y registren todas las operaciones que interese verificar.
Todas las registraciones contables deberán estar respaldadas por los
comprobantes correspondientes y sólo de la fe que éstos merezcan
surgirá el valor probatorio de aquéllas.
Podrá también exigir que los responsables otorguen determinados
comprobantes y conserven sus duplicados, así como los demás
documentos y comprobantes de sus operaciones por un término de DIEZ
(10) años, o excepcionalmente por un plazo mayor, cuando se refieran a
operaciones o actos cuyo conocimiento sea indispensable para la
determinación cierta de la materia imponible.
Sin perjuicio de lo indicado en los párrafos precedentes, todas las
personas o entidades que desarrollen algún tipo de actividad retribuida,
que no sea en relación de dependencia, deberán llevar registraciones con
los comprobantes que las respalden y emitir comprobantes por las
prestaciones o enajenaciones que realicen, que permitan establecer clara
y fehacientemente los gravámenes que deban tributar. La
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrá limitar
esta obligación en atención al pequeño tamaño económico y efectuar
mayores o menores requerimientos en razón de la índole de la actividad o
el servicio y la necesidad o conveniencia de individualizar a terceros.
Asimismo podrá implementar y reglamentar regímenes de control y/o
pagos a cuenta, en la prestación de servicios de industrialización, así
como las formas y condiciones del retiro de los bienes de los
establecimientos industriales. (Párrafo incorporado por art. 1° pto. X de
la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su
publicación en el Boletín Oficial)
Los libros y la documentación a que se refiere el presente artículo
deberán permanecer a disposición de la ADMINISTRACION FEDERAL
DE INGRESOS PUBLICOS en el domicilio fiscal. (Párrafo incorporado por
art. 2º delDecreto Nº 1334/98 B.O. 16/11/1998)
Artículo...: Los contribuyentes estarán obligados a constatar que las
facturas o documentos equivalentes que reciban por sus compras o
locaciones, se encuentren debidamente autorizados por la Administración
Federal de Ingresos Públicos.
El Poder Ejecutivo nacional limitará la obligación establecida en el párrafo
precedente, en función de indicadores de carácter objetivo, atendiendo la
disponibilidad de medios existentes para realizar, la respectiva
constatación y al nivel de operaciones de los contribuyentes.

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(Artículo sin número incorporado por art. 1°, punto VII de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
ARTICULO 34 — Facúltase al Poder Ejecutivo nacional a condicionar el
cómputo de deducciones, créditos fiscales y demás efectos tributarios de
interés del contribuyente y/o responsable a la utilización de determinados
medios de pago u otras formas de comprobación de las operaciones en
cuyo caso los contribuyentes que no utilicen tales medios o formas de
comprobación quedarán obligados a acreditar la veracidad de las
operaciones para poder computar a su favor los conceptos indicados.
Idénticos efectos a los indicados en el párrafo precedente se aplicarán a
aquellos contribuyentes que por sus compras o locaciones reciban
facturas o documentos equivalentes, apócrifos o no autorizados, cuando
estuvieran obligados a realizar la constatación dispuesta en el artículo sin
número incorporado a continuación del artículo 33.
(Artículo sustituido por art. 1°, punto VIII de la Ley N° 25.795 B.O.
17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín
Oficial.)
ARTICULO 35 — La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS tendrá amplios poderes para verificar en cualquier momento,
inclusive respecto de períodos fiscales en curso, por intermedio de sus
funcionarios y empleados, el cumplimiento que los obligados o
responsables den a las leyes, reglamentos, resoluciones e instrucciones
administrativas, fiscalizando la situación de cualquier presunto
responsable. En el desempeño de esa función la ADMINISTRACION
FEDERAL podrá:
a) Citar al firmante de la declaración jurada, al presunto contribuyente o
responsable, o a cualquier tercero que a juicio de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS tenga conocimiento de las
negociaciones u operaciones de aquéllos, para contestar o informar
verbalmente o por escrito, según ésta estime conveniente, y dentro de un
plazo que se fijará prudencialmente en atención al lugar del domicilio del
citado, todas las preguntas o requerimientos que se les hagan sobre las
rentas, ingresos, egresos y, en general, sobre las circunstancias y
operaciones que a juicio de la ADMINISTRACION FEDERAL estén
vinculadas al hecho imponible previsto por las leyes respectivas.
b) Exigir de los responsables o terceros la presentación de todos los
comprobantes y justificativos que se refieran al hecho precedentemente
señalado.
c) Inspeccionar los libros, anotaciones, papeles y documentos de
responsables o terceros, que puedan registrar o comprobar las
negociaciones y operaciones que se juzguen vinculadas a los datos que
contengan o deban contener las declaraciones juradas. La inspección a
que se alude podrá efectuarse aún concomitantemente con la realización
y ejecución de los actos u operaciones que interesen a la fiscalización.
Cuando se responda verbalmente a los requerimientos previstos en el
inciso a), o cuando se examinen libros, papeles, etc., se dejará
constancia en actas de la existencia e individualización de los elementos
exhibidos, así como de las manifestaciones verbales de los fiscalizados.
Dichas actas, que extenderán los funcionarios y empleados de la

30
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, sean o no
firmadas por el interesado, servirán de prueba en los juicios respectivos.
d) Requerir por medio del Administrador Federal y demás funcionarios
especialmente autorizados para estos fines por la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, el auxilio inmediato de la fuerza
pública cuando tropezasen con inconvenientes en el desempeño de sus
funciones, cuando dicho auxilio fuera menester para hacer comparecer a
los responsables y terceros o cuando fuera necesario para la ejecución
de las órdenes de allanamiento.
Dicho auxilio deberá acordarse sin demora, bajo la exclusiva
responsabilidad del funcionario que lo haya requerido, y, en su defecto, el
funcionario o empleado policial responsable de la negativa u omisión
incurrirá en la pena establecida por el Código Penal.
e) Recabar por medio del Administrador Federal y demás funcionarios
autorizados por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, orden de allanamiento al juez nacional que corresponda,
debiendo especificarse en la solicitud el lugar y oportunidad en que habrá
de practicarse. Deberán ser despachadas por el juez, dentro de las
veinticuatro (24) horas, habilitando días y horas, si fuera solicitado. En la
ejecución de las mismas serán de aplicación los artículos 224, siguientes
y concordantes del Código Procesal Penal de la Nación.
f) Clausurar preventivamente un establecimiento, cuando el funcionario
autorizado por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS constatare que se hayan configurado uno o más de los
hechos u omisiones previstos en el artículo 40 de esta ley y
concurrentemente exista un grave perjuicio o el responsable registre
antecedentes por haber cometido la misma infracción en un período no
superior a un año desde que se detectó la anterior.
g) Autorizar, mediante orden de juez administrativo, a sus funcionarios a
que actúen en el ejercicio de sus facultades, como compradores de
bienes o locatarios de obras o servicios y constaten el cumplimiento, por
parte de los vendedores o locadores, de la obligación de emitir y entregar
facturas y comprobantes equivalentes con los que documenten las
respectivas operaciones, en los términos y con las formalidades que
exige la Administración Federal de Ingresos Públicos. La orden del juez
administrativo deberá estar fundada en los antecedentes fiscales que
respecto de los vendedores y locadores obren en la citada Administración
Federal de Ingresos Públicos.
Una vez que los funcionarios habilitados se identifiquen como tales al
contribuyente o responsable, de no haberse consumido los bienes o
servicios adquiridos, se procederá a anular la operación y, en su caso, la
factura o documento emitido. De no ser posible la eliminación de dichos
comprobantes, se emitirá la pertinente nota de crédito.
La constatación que efectúen los funcionarios deberá revestir las
formalidades previstas en el segundo párrafo del inciso c) precedente y
en el artículo 41 y, en su caso, servirán de base para la aplicación de las
sanciones previstas en el artículo 40 y, de corresponder, lo estipulado en
el inciso anterior.
Los funcionarios, en el ejercicio de las funciones previstas en este inciso,
estarán relevados del deber previsto en el artículo 10.

31
(Inciso incorporado por art. 1° pto. XI de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial)
ARTICULO 36 — Los contribuyentes, responsables y terceros que
efectúan registraciones mediante sistemas de computación de datos,
deberán mantener en condiciones de operatividad en los lugares
señalados en el último párrafo del artículo 33, los soportes magnéticos
utilizados en sus aplicaciones que incluyan datos vinculados con la
materia imponible, por el término de DOS (2) años contados a partir de la
fecha de cierre del período fiscal en el cual se hubieran utilizado. (Párrafo
sustituido por art. 3º del Decreto Nº 1334/98 B.O. 16/11/1998)
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrá
requerir a los contribuyentes, responsables y terceros:
a) Copia de la totalidad o parte de los soportes magnéticos aludidos,
debiendo suministrar la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS los elementos materiales al efecto.
b) Información o documentación relacionada con el equipamiento de
computación utilizado y de las aplicaciones implantadas, sobre
características técnicas del hardware y software, ya sea que el
procesamiento se desarrolle en equipos propios o arrendados o que el
servicio sea prestado por un tercero.
Asimismo podrá requerir especificaciones acerca del sistema operativo y
los lenguajes y/o utilitarios utilizados, como así también, listados de
programas, carpetas de sistemas, diseño de archivos y toda otra
documentación o archivo inherentes al proceso de los datos que
configuran los sistemas de información.
c) La utilización, por parte del personal fiscalizador del Organismo
recaudador, de programas y utilitarios de aplicación en auditoría fiscal
que posibiliten la obtención de datos, instalados en el equipamiento
informático del contribuyente y que sean necesarios en los
procedimientos de control a realizar.
Lo especificado en el presente artículo también será de aplicación a los
servicios de computación que realicen tareas para terceros. Esta norma
sólo será de aplicación en relación a los sujetos que se encuentren bajo
verificación.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS dispondrá
los datos que obligatoriamente deberán registrarse, la información inicial
a presentar por parte de los responsables o terceros, y la forma y plazos
en que deberán cumplimentarse las obligaciones dispuestas en el
presente artículo.
Artículo...: En el transcurso de la verificación y a instancia de la
inspección actuante, los responsables podrán rectificar las declaraciones
juradas oportunamente presentadas, de acuerdo a los cargos y/o créditos
que surgieren de la misma.
En tales casos, no quedarán inhibidas las facultades de la Administración
Federal de Ingresos Públicos para determinar la materia imponible que en
definitiva resulte.
(Artículo s/n incorporado por art. 1° pto. XII de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial)
CAPITULO VI INTERESES, ILICITOS Y SANCIONES
Intereses resarcitorios

32
ARTICULO 37 — La falta total o parcial de pago de los gravámenes,
retenciones, percepciones, anticipos y demás pagos a cuenta, devengará
desde los respectivos vencimientos, sin necesidad de interpelación
alguna, un interés resarcitorio.
La tasa de interés y su mecanismo de aplicación serán fijados por la
SECRETARIA DE HACIENDA dependiente del MINISTERIO DE
ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS; el tipo de interés que
se fije no podrá exceder del doble de la mayor tasa vigente que perciba
en sus operaciones el Banco de la Nación Argentina.
Los intereses se devengarán sin perjuicio de la actualización del artículo
129 y de las multas que pudieran corresponder por aplicación de los
artículos 39, 45, 46 y 48.
La obligación de abonar estos intereses subsiste no obstante la falta de
reserva por parte de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS al percibir el pago de la deuda principal y mientras no haya
transcurrido el término de la prescripción para el cobro de ésta.
En caso de cancelarse total o parcialmente la deuda principal sin
cancelarse al mismo tiempo los intereses que dicha deuda hubiese
devengado, éstos, transformados en capital, devengarán desde ese
momento los intereses previstos en este artículo. (Párrafo incorporado por
Título XV art. 18 inciso 2) de la Ley Nº 25.239 B.O. 31/12/1999)
En los casos de apelación ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION los
intereses de este artículo continuarán devengándose.
Infracciones formales - Sanciones
ARTICULO 38 — Cuando existiere la obligación de presentar
declaraciones juradas, la omisión de hacerlo dentro de los plazos
generales que establezca la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS, será sancionada, sin necesidad de
requerimiento previo, con una multa de DOSCIENTOS PESOS ($ 200), la
que se elevará a CUATROCIENTOS PESOS ($ 400) si se tratare de
sociedades, asociaciones o entidades de cualquier clase constituidas en
el país o de establecimientos organizados en forma de empresas estables
—de cualquier naturaleza u objeto— pertenecientes a personas de
existencia física o ideal domiciliadas, constituidas o radicadas en el
exterior. Las mismas sanciones se aplicarán cuando se omitiere
proporcionar los datos a que se refiere el último párrafo del artículo
11. (Expresión "UN CENTAVO DE PESO ($ 0,01)", sustituida por la
expresión "DOSCIENTOS PESOS ($ 200)" y la expresión "DOS
CENTAVOS DE PESO ($ 0,02)" sustituida por la expresión
"CUATROCIENTOS PESOS ($ 400)", por art. 2°, inciso a) de la Ley N°
25.795B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
El procedimiento de aplicación de esta multa podrá iniciarse, a opción de
la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, con una
notificación emitida por el sistema de computación de datos que reúna los
requisitos establecidos en el artículo 71. Si dentro del plazo de QUINCE
(15) días a partir de la notificación el infractor pagare voluntariamente la
multa y presentare la declaración jurada omitida, los importes señalados
en el párrafo primero de este artículo, se reducirán de pleno derecho a la
mitad y la infracción no se considerará como un antecedente en su

33
contra. El mismo efecto se producirá si ambos requisitos se
cumplimentaren desde el vencimiento general de la obligación hasta los
QUINCE (15) días posteriores a la notificación mencionada. En caso de
no pagarse la multa o de no presentarse la declaración jurada, deberá
sustanciarse el sumario a que se refieren los artículos 70 y siguientes,
sirviendo como cabeza del mismo la notificación indicada
precedentemente.
Artículo...: La omisión de presentar las declaraciones juradas informativas
previstas en los regímenes de información propia del contribuyente o
responsable, o de información de terceros, establecidos mediante
resolución general de la Administración Federal de Ingresos Públicos,
dentro de los plazos establecidos al efecto, será sancionada —sin
necesidad de requerimiento previo— con una multa de hasta PESOS
CINCO MIL ($ 5.000), la que se elevará hasta PESOS DIEZ MIL ($
10.000) si se tratare de sociedades, empresas, fideicomisos,
asociaciones o entidades de cualquier clase constituidas en el país, o de
establecimientos organizados en forma de empresas estables —de
cualquier naturaleza u objeto— pertenecientes a personas de existencia
física o ideal domiciliadas, constituidas o radicadas en el exterior.
(Párrafo incorporado por art. 1° pto. XIV de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial)
(Nota Infoleg: por art. 1° pto. XIV de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005 se
disponia la incorporación de dos párrafos, pero el segundo fue observada
su incorporación por Decreto N° 777/2005. Vigencia: a partir del día de su
publicación en el Boletín Oficial.)
Cuando existiere la obligación de presentar declaración jurada informativa
sobre la incidencia en la determinación del impuesto a las ganancias
derivada de las operaciones de importación y exportación entre partes
independientes, la omisión de hacerlo dentro de los plazos generales que
establezca la Administración Federal de Ingresos Públicos, será
sancionada, sin necesidad de requerimiento previo, con una multa de
PESOS UN MIL QUINIENTOS ($ 1.500), la que se elevará a PESOS
NUEVE MIL ($ 9.000) si se tratare de sociedades, empresas,
fideicomisos, asociaciones o entidades de cualquier clase constituidas en
el país, o de establecimientos organizados en forma de empresas
estables —de cualquier naturaleza u objeto— pertenecientes a personas
de existencia física o ideal domiciliadas, constituidas o radicadas en el
exterior.
En los supuestos en que la obligación de presentar declaraciones juradas
se refiera al detalle de las transacciones —excepto en el caso de
importación y exportación entre partes independientes— celebradas entre
personas físicas, empresas o explotaciones unipersonales, sociedades
locales, fideicomisos o establecimientos estables ubicados en el país con
personas físicas, jurídicas o cualquier otro tipo de entidad domiciliada,
constituida o ubicada en el exterior, la omisión de hacerlo dentro de los
plazos generales que establezca la Administración Federal de Ingresos
Públicos, será sancionada, sin necesidad de requerimiento previo, con
una multa de PESOS DIEZ MIL ($ 10.000), la que se elevará a PESOS
VEINTE MIL ($ 20.000) si se tratare de sociedades, fideicomisos,
asociaciones o entidades de cualquier clase constituidas en el país o de

34
establecimientos organizados en forma de empresas estables —de
cualquier naturaleza u objeto— pertenecientes a personas de existencia
física o ideal domiciliadas, constituidas o radicadas en el exterior.
La aplicación de estas multas, se regirá por el procedimiento previsto en
los artículos 70 y siguientes.
(Artículo sin número incorporado por art. 1°, punto IX de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
ARTICULO 39 — Serán sancionadas con multas de PESOS CIENTO
CINCUENTA ($ 150) a PESOS DOS MIL QUINIENTOS ($ 2.500) las
violaciones a las disposiciones de esta ley, de las respectivas leyes
tributarias, de los decretos reglamentarios y de toda otra norma de
cumplimiento obligatorio, que establezcan o requieran el cumplimiento de
deberes formales tendientes a determinar la obligación tributaria, a
verificar y fiscalizar el cumplimiento que de ella hagan los responsables.
En los casos de los incumplimientos que en adelante se indican, la multa
prevista en el primer párrafo del presente artículo se graduará entre el
menor allí previsto y hasta un máximo de PESOS CUARENTA Y CINCO
MIL ($ 45.000):
1. Las infracciones a las normas referidas al domicilio fiscal previstas en
el artículo 3º de esta ley, en el decreto reglamentario, o en las normas
complementarias que dicte la Administración Federal de Ingresos
Públicos con relación al mismo.
2. La resistencia a la fiscalización, por parte del contribuyente o
responsable, consistente en el incumplimiento reiterado a los
requerimientos de los funcionarios actuantes, sólo en la medida en que
los mismos no sean excesivos o desmesurados respecto de la
información y la forma exigidas, y siempre que se haya otorgado al
contribuyente el plazo previsto por la Ley de Procedimientos
Administrativos para su contestación.
3. La omisión de proporcionar datos requeridos por la Administración
Federal de Ingresos Públicos para el control de las operaciones
internacionales.
4. La falta de conservación de los comprobantes y elementos justificativos
de los precios pactados en operaciones internacionales.
Las multas previstas en este artículo, en su caso, son acumulables con
las establecidas en el artículo 38 de la presente ley.
Si existiera resolución condenatoria respecto del incumplimiento a un
requerimiento de la Administración Federal de Ingresos Públicos, las
sucesivas reiteraciones que se formulen a partir de ese momento y que
tuvieren por objeto el mismo deber formal, serán pasibles en su caso de
la aplicación de multas independientes, aun cuando las anteriores no
hubieran quedado firmes o estuvieran en curso de discusión
administrativa o judicial.
En todos los casos de incumplimiento mencionados en el presente
artículo la multa a aplicarse se graduará conforme a la condición del
contribuyente y a la gravedad de la infracción.
(Artículo sustituido por art. 1°, punto X de la Ley N° 25.795 B.O.
17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín
Oficial.)

35
Artículo...: Será sancionado con multas de PESOS QUINIENTOS ($ 500)
a PESOS CUARENTA Y CINCO MIL ($ 45.000) el incumplimiento a los
requerimientos dispuestos por la Administración Federal de Ingresos
Públicos a presentar las declaraciones juradas informativas —originales o
rectificativas— previstas en el artículo agregado a continuación del
artículo 38 y las previstas en los regímenes de información propia del
contribuyente o responsable, o de información de terceros, establecidos
mediante Resolución General de la Administración Federal de Ingresos
Públicos.
Las multas previstas en este artículo, en su caso, son acumulables con
las del artículo agregado a continuación del artículo 38 de la presente ley,
y al igual que aquéllas, deberán atender a la condición del contribuyente y
a la gravedad de la infracción.
Si existiera resolución condenatoria respecto del incumplimiento a un
requerimiento de la Administración Federal de Ingresos Públicos, las
sucesivas reiteraciones que se formulen a partir de ese momento y que
tuvieren por objeto el mismo deber formal, serán pasibles en su caso de
la aplicación de multas independientes, aun cuando las anteriores no
hubieran quedado firmes o estuvieran en curso de discusión
administrativa o judicial.
Sin perjuicio de lo establecido precedentemente, a los contribuyentes o
responsables cuyos ingresos brutos anuales sean iguales o superiores a
la suma de PESOS DIEZ MILLONES ($ 10.000.000), que incumplan el
tercero de los requerimientos indicados en el primer párrafo, se les
aplicará una multa de DOS (2) a DIEZ (10) veces del importe máximo
previsto en el citado párrafo, la que se acumulará a las restantes
sanciones previstas en el presente artículo.
(Artículo sin número incorporado por art. 1°, punto XI de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
Artículo ...: En los casos del artículo agregado a continuación del artículo
38, del artículo 39 y de su agregado a continuación, se considerará
asimismo consumada la infracción cuando el deber formal de que se
trate, a cargo del responsable, no se cumpla de manera integral,
obstaculizando a la Administración Federal de Ingresos Públicos en forma
mediata o inmediata, el ejercicio de sus facultades de determinación,
verificación y fiscalización.
(Artículo s/n incorporado por art. 1° pto. XIV de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
Clausura
ARTICULO 40 — Serán sancionados con multa de TRESCIENTOS
PESOS ($ 300) a TREINTA MIL PESOS ($ 30.000) y clausura de TRES
(3) a DIEZ (10) días del establecimiento, local, oficina, recinto comercial,
industrial, agropecuario o de prestación de servicios, siempre que el valor
de los bienes y/o servicios de que se trate exceda de DIEZ PESOS ($
10), quienes:
a) No entregaren o no emitieren facturas o comprobantes equivalentes
por una o más operaciones comerciales, industriales, agropecuarias o de
prestación de servicios que realicen en las formas, requisitos y

36
condiciones que establezca la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS.
b) No llevaren registraciones o anotaciones de sus adquisiciones de
bienes o servicios o de sus ventas, o de las prestaciones de servicios de
industrialización, o, si las llevaren, fueren incompletas o defectuosas,
incumpliendo con las formas, requisitos y condiciones exigidos por la
Administración Federal de Ingresos Públicos (Inciso sustituido por art. 1°
pto. XV de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su
publicación en el Boletín Oficial.)
c) Encarguen o transporten comercialmente mercaderías, aunque no
sean de su propiedad, sin el respaldo documental que exige la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.
d) No se encontraren inscriptos como contribuyentes o responsables ante
la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS cuando
estuvieren obligados a hacerlo.
El mínimo y el máximo de las sanciones de multa y clausura se
duplicarán cuando se cometa otra infracción de las previstas en este
artículo dentro de los DOS (2) años desde que se detectó la anterior.
Sin perjuicio de las sanciones de multa y clausura, y cuando sea
pertinente, también se podrá aplicar la suspensión en el uso de matrícula,
licencia o inscripción registral que las disposiciones exigen para el
ejercicio de determinadas actividades, cuando su otorgamiento sea
competencia del PODER EJECUTIVO NACIONAL.
e) No poseyeren o no conservaren las facturas o comprobantes
equivalentes que acreditaren la adquisición o tenencia de los bienes y/o
servicios destinados o necesarios para el desarrollo de la actividad de
que se trate.(Inciso incorporado por art. 1°, punto XIII de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
f) No poseyeren, o no mantuvieren en condiciones de operatividad o no
utilizaren los instrumentos de medición y control de la producción
dispuestos por leyes, decretos reglamentarios dictados por el Poder
Ejecutivo nacional y toda otra norma de cumplimiento obligatorio,
tendientes a posibilitar la verificación y fiscalización de los tributos a cargo
de la Administración Federal de Ingresos Públicos. (Inciso incorporado
por art. 1°, punto XIII de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a
partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
Artículo...: Las sanciones indicadas en el artículo precedente,
exceptuando a la de clausura, se aplicará a quienes ocuparen
trabajadores en relación de dependencia y no los registraren y declararen
con las formalidades exigidas por las leyes respectivas.
La sanción de clausura podrá aplicarse atendiendo a la gravedad del
hecho y a la condición de reincidente del infractor.
(Artículo sin número incorporado por art. 1°, punto XIV de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
Artículo ...: En los supuestos en los que se detecte la tenencia, el traslado
o transporte de bienes o mercancías sin cumplir con los recaudos
previstos en los incisos c) y e) del artículo 40 de la presente ley, los
funcionarios o agentes de la Administración Federal de Ingresos Públicos

37
deberán convocar inmediatamente a la fuerza de seguridad con
jurisdicción en el lugar donde se haya detectado la presunta infracción,
quienes deberán instrumentar el procedimiento tendiente a la aplicación
de las siguientes medidas preventivas:
a) Interdicción, en cuyo caso se designará como depositario al
propietario, transportista, tenedor o a quien acredite ser poseedor al
momento de comprobarse el hecho;
b) Secuestro, en cuyo supuesto se debe designar depositario a una
tercera persona.
En todos los casos, el personal de seguridad convocado, en presencia de
DOS (2) testigos hábiles que convoque para el acto, procederá a informar
al presunto infractor las previsiones y obligaciones que establecen las
leyes civiles y penales para el depositario, debiendo —en su caso—
disponer las medidas de depósito y traslado de los bienes secuestrados
que resulten necesarias para asegurar una buena conservación,
atendiendo a la naturaleza y características de los mismos.
(Artículo s/n incorporado por art. 1° pto. XVI de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
ARTICULO 41 — Los hechos u omisiones que den lugar a la multa y
clausura, y en su caso, a la suspensión de matrícula, licencia o de
registro habilitante, que se refieren en el último párrafo del artículo 40,
deberán ser objeto de un acta de comprobación en la cual los
funcionarios fiscales dejarán constancia de todas las circunstancias
relativas a los mismos, las que desee incorporar el interesado, a su
prueba y a su encuadramiento legal, conteniendo, además, una citación
para que el responsable, munido de las pruebas de que intente valerse,
comparezca a una audiencia para su defensa que se fijará para una fecha
no anterior a los CINCO (5) días ni superior a los QUINCE (15) días. El
acta deberá ser firmada por los actuantes y notificada al responsable o
representante legal del mismo. En caso de no hallarse presente este
último en el acto del escrito, se notificará el acta labrada en el domicilio
fiscal por los medios establecidos en el artículo 100.
El juez administrativo se pronunciará una vez terminada la audiencia o en
un plazo no mayor a los DOS (2) días.
Artículo ...: A los fines de aplicar las medidas preventivas previstas en el
artículo agregado a continuación del artículo agregado a continuación del
artículo 40, como asimismo el decomiso de la mercadería, resultarán de
aplicación las previsiones del artículo anterior, sin perjuicio de lo
dispuesto en el presente artículo.
A tales efectos, cuando corresponda, se adjuntará al acta de
comprobación un inventario de la mercadería que detalle el estado en que
se encuentra, el cual deberá confeccionarse juntamente con el personal
de la fuerza de seguridad requerida y los DOS (2) testigos hábiles que
hayan sido convocados al efecto.
En el supuesto de verificarse razones de urgencia que así lo exijan, la
audiencia de descargo deberá fijarse dentro de las CUARENTA Y OCHO
(48) horas de efectivizada la medida preventiva. El acta deberá ser
firmada por los actuantes y notificada al responsable o representante
legal del mismo y testigos intervinientes en su caso. En oportunidad de
resolver, el juez administrativo podrá disponer el decomiso de la

38
mercadería o revocar la medida de secuestro o interdicción. En caso
negativo, despachará urgente una comunicación a la fuerza de seguridad
respectiva a fin de que los bienes objeto del procedimiento sean
devueltos o liberados en forma inmediata a favor de la persona
oportunamente desapoderada, de quien no podrá exigirse el pago de
gasto alguno. Para el caso que se confirmen las medidas, serán a cargo
del imputado la totalidad de los gastos ocasionados por las mismas.
(Artículo s/n incorporado por art. 1° pto. XVII de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
ARTICULO 42 — La autoridad administrativa que hubiera dictado la
providencia que ordene la clausura dispondrá sus alcances y los días en
que deba cumplirse.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, por medio
de sus funcionarios autorizados, procederá a hacerla efectiva, adoptando
los recaudos y seguridades del caso.
Podrá realizar asimismo comprobaciones con el objeto de verificar el
acatamiento de la medida y dejar constancia documentada de las
violaciones que se observaren en la misma.
ARTICULO 43 — Durante el período de clausura cesará totalmente la
actividad en los establecimientos, salvo la que fuese habitual para la
conservación o custodia de los bienes o para la continuidad de los
procesos de producción que no pudieren interrumpirse por causas
relativas a su naturaleza. No podrá suspenderse el pago de salarios u
obligaciones previsionales, sin perjuicio del derecho del principal a
disponer de su personal en la forma que autoricen las normas aplicables
a la relación de trabajo.
ARTICULO 44 — Quien quebrantare una clausura o violare los sellos,
precintos o instrumentos que hubieran sido utilizados para hacerla
efectiva, será sancionado con arresto de DIEZ (10) a TREINTA (30) días
y con una nueva clausura por el doble de tiempo de aquélla.
Son competentes para la aplicación de tales sanciones los jueces en lo
penal económico de la Capital Federal o los jueces federales en el resto
de la República.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, con
conocimiento del juez que se hallare de turno, procederá a instruir el
correspondiente sumario de prevención, el cual, una vez concluido, será
elevado de inmediato a dicho juez.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS prestará a
los magistrados la mayor colaboración durante la secuela del juicio.
Omisión de impuestos - Sanciones
ARTICULO 45 — El que omitiere el pago de impuestos mediante la falta
de presentación de declaraciones juradas o por ser inexactas las
presentadas, será sancionado con una multa graduable entre el cincuenta
por ciento (50%) y el ciento por ciento (100%) del gravamen dejado de
pagar, retener o percibir oportunamente, siempre que no corresponda la
aplicación del artículo 46 y en tanto no exista error excusable. La misma
sanción se aplicará a los agentes de retención o percepción que omitieran
actuar como tales.
Será sancionado con la misma multa quien mediante la falta de
presentación de declaraciones juradas, liquidaciones u otros instrumentos

39
que cumplan su finalidad, o por ser inexactas las presentadas, omitiera la
declaración y/o pago de ingresos a cuenta o anticipos de impuestos.
La omisión a que se refiere el primer párrafo del presente artículo será
sancionada con una multa de UNA (1) hasta CUATRO (4) veces el
impuesto dejado de pagar o retener cuando éste se origine en
transacciones celebradas entre sociedades locales, empresas,
fideicomisos o establecimientos estables ubicados en el país con
personas físicas, jurídicas o cualquier otro tipo de entidad domiciliada,
constituida o ubicada en el exterior. Se evaluará para la graduación de la
sanción el cumplimiento, por parte del contribuyente, de los deberes
formales establecidos por la Administración Federal de Ingresos Públicos
para el control del cumplimiento de las obligaciones tributarias derivadas
de las transacciones internacionales. (Párrafo incorporado por art. 1°,
punto XV de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día
de su publicación en el Boletín Oficial.)
Defraudación - Sanciones
ARTICULO 46 — El que mediante declaraciones engañosas u ocultación
maliciosa, sea por acción u omisión, defraudare al Fisco, será reprimido
con multa de DOS (2) hasta DIEZ (10) veces el importe del tributo
evadido.
(Artículo sustituido por art. 1°, punto XVI de la Ley N° 25.795 B.O.
17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín
Oficial.)
Artículo...: El que mediante declaraciones engañosas u ocultaciones
maliciosas, perjudique al Fisco exteriorizando quebrantos total o
parcialmente superiores a los procedentes utilizando esos importes
superiores para compensar utilidades sujetas a impuestos, ya sea en el
corriente y/o siguientes ejercicios, será reprimido con multa de DOS (2)
hasta DIEZ (10) veces del importe que surja de aplicar la tasa máxima del
impuesto a las ganancias sobre el quebranto impugnado por la
Administración Federal de Ingresos Públicos.
(Artículo sin número incorporado por art. 1°, punto XVII de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
ARTICULO 47 — Se presume, salvo prueba en contrario, que existe la
voluntad de producir declaraciones engañosas o de incurrir en
ocultaciones maliciosas cuando:
a) Medie una grave contradicción entre los libros, registraciones,
documentos y demás antecedentes correlativos con los datos que surjan
de las declaraciones juradas o con los que deban aportarse en la
oportunidad a que se refiere el último párrafo del artículo 11.
b) Cuando en la documentación indicada en el inciso anterior se
consignen datos inexactos que pongan una grave incidencia sobre la
determinación de la materia imponible.
c) Si la inexactitud de las declaraciones juradas o de los elementos
documentales que deban servirles de base proviene de su manifiesta
disconformidad con las normas legales y reglamentarias que fueran
aplicables al caso.
d) En caso de no llevarse o exhibirse libros de contabilidad, registraciones
y documentos de comprobación suficientes, cuando ello carezca de

40
justificación en consideración a la naturaleza o volumen de las
operaciones o del capital invertido o a la índole de las relaciones jurídicas
y económicas establecidas habitualmente a causa del negocio o
explotación.
e) Cuando se declaren o hagan valer tributariamente formas o estructuras
jurídicas inadecuadas o impropias de las prácticas de comercio, siempre
que ello oculte o tergiverse la realidad o finalidad económica de los actos,
relaciones o situaciones con incidencia directa sobre la determinación de
los impuestos.
ARTICULO 48 — Serán reprimidos con multa de DOS (2) hasta DIEZ (10)
veces el tributo retenido o percibido, los agentes de retención o
percepción que los mantengan en su poder, después de vencidos los
plazos en que debieran ingresarlo.
No se admitirá excusación basada en la falta de existencia de la retención
o percepción, cuando éstas se encuentren documentadas, registradas,
contabilizadas, comprobadas o formalizadas de cualquier modo.
Eximición y reducción de sanciones
ARTICULO 49 — Si un contribuyente rectificare sus declaraciones
juradas antes de corrérsele las vistas del artículo 17 y no fuere
reincidente en las infracciones del artículo 46 ni en la del artículo
agregado a su continuación, las multas de estos últimos artículos y la del
artículo 45 se reducirán a UN TERCIO (1/3) de su mínimo legal. (Párrafo
sustituido por art. 1° pto. XVIII de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
Cuando la pretensión fiscal fuese aceptada una vez corrida la vista pero
antes de operarse el vencimiento del primer plazo de QUINCE (15) días
acordado para contestarla, la multa de los artículos 45, 46 y de
corresponder, la del artículo agregado a su continuación, excepto
reincidencia en la comisión de las infracciones previstas en los dos
últimos artículos, se reducirá a DOS TERCIOS (2/3) de su mínimo
legal. (Párrafo sustituido por art. 1° pto. XVIII de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
En caso de que la determinación de oficio practicada por la
Administración Federal de Ingresos Públicos, entidad autárquica en el
ámbito del Ministerio de Economía y Producción, fuese consentida por el
interesado, la multa que le hubiere sido aplicada a base de los artículos
45, 46 y, de corresponder, la del artículo agregado a su continuación, no
mediando la reincidencia a que se refieren los párrafos anteriores,
quedará reducida de pleno derecho al mínimo legal. (Párrafo sustituido
por art. 1° pto. XVIII de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005. Vigencia: a partir
del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
Cuando fueran de aplicación los artículos 45 y 46 y el saldo total de los
gravámenes adeudados, previamente actualizados, no excediera de
PESOS UN MIL ($ 1.000) no se aplicará sanción si el mismo se ingresara
voluntariamente, o antes de vencer el plazo indicado en el segundo
párrafo.(Párrafo sustituido por art. 4° de la Ley N° 25.868 B.O. 8/1/2004.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial)
En los supuestos de los artículos 38, agregado a su continuación, 39,
agregado a su continuación, 40 y agregado a su continuación, el Juez
administrativo podrá eximir de sanción al responsable cuando a su juicio

41
la infracción no revistiera gravedad. En el caso de los artículos 40 y el
agregado a su continuación, la eximición podrá ser parcial, limitándose a
una de las sanciones previstas por dicha norma, conforme a la condición
del contribuyente y a la gravedad de la infracción.
(Artículo sustituido por art. 1°, punto XVIII de la Ley N° 25.795 B.O.
17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín
Oficial.)
ARTICULO 50 — Si en la primera oportunidad de defensa en la
sustanciación de un sumario por infracción al artículo 39 o en la audiencia
que marca el artículo 41, el titular o representante legal reconociere la
materialidad de la infracción cometida, las sanciones se reducirán, por
única vez, al mínimo legal.
Plazo para el pago de multas
ARTICULO 51 — Las multas aplicadas deberán ser satisfechas por los
responsables dentro de los QUINCE (15) días de notificadas, salvo que
se hubiera optado por interponer contra las mismas las acciones o
recursos que autorizan los artículos 76, 82 y 86.
Intereses punitorios
ARTICULO 52 — Cuando sea necesario recurrir a la vía judicial para
hacer efectivos los créditos y multas ejecutoriadas, los importes
respectivos devengarán un interés punitorio computable desde la
interposición de la demanda.
La tasa y el mecanismo de aplicación serán fijados con carácter general
por la SECRETARIA DE HACIENDA dependiente del MINISTERIO DE
ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS, no pudiendo el tipo de
interés exceder en más de la mitad la tasa que deba aplicarse conforme a
las previsiones del artículo 37.
(Nota Infoleg: Por art. 2º de la Resolución Nº 1253/98 del Ministerio de
Economía y Obras y Servicios Públicos B.O. 02/10/1998, se establece la
tasa de los intereses punitorios previstos en el presente artículo en el
CUATRO POR CIENTO (4%) mensual)
CAPITULO VII RESPONSABLES DE LAS SANCIONES
ARTICULO 53 — Están obligados a pagar los accesorios quienes deban
abonar los respectivos impuestos, anticipos y otros pagos a cuenta.
Contribuyentes imputables
ARTICULO 54 — No están sujetos a las sanciones previstas en los
artículos 39, 40, 45, 46 y 48 las sucesiones indivisas. Asimismo, no serán
imputables el cónyuge cuyos réditos propios perciba o disponga en su
totalidad el otro, los incapaces, los penados a que se refiere el artículo 12
del Código Penal, los quebrados cuando la infracción sea posterior a la
pérdida de la administración de sus bienes y siempre que no sean
responsables con motivo de actividades cuya gestión o administración
ejerzan.
Todos los demás contribuyentes enumerados en el artículo 5º, sean o no
personas de existencia visible, están sujetos a las sanciones previstas en
los artículos 39, 40, 45, 46 y 48, por las infracciones que ellos mismos
cometan o que, en su caso, les sean imputadas por el hecho u omisión en
que incurran sus representantes, directores, gerentes, administradores o
mandatarios, o con relación a unos y otros, por el hecho u omisión de

42
quienes les están subordinados como sus agentes, factores o
dependientes.
Las sanciones previstas en los artículos 39, 40, 45, 46 y 48, no serán de
aplicación en los casos en que ocurra el fallecimiento del infractor, aún
cuando la resolución respectiva haya quedado firme y pasado en
autoridad de cosa juzgada.
Responsables infractores
ARTICULO 55 — Son personalmente responsables de las sanciones
previstas en el artículo 38 y en los artículos 39, 40,44,45, 46 y 48, como
infractores de los deberes fiscales de carácter material o formal (artículos
6º y 7º) que les incumben en la administración, representación,
liquidación, mandato o gestión de entidades, patrimonios y empresas,
todos los responsables enumerados en los primeros CINCO (5) incisos
del artículo 6º.
CAPITULO VIII DE LA PRESCRIPCION
ARTICULO 56 — Las acciones y poderes del Fisco para determinar y
exigir el pago de los impuestos regidos por la presente ley, y para aplicar
y hacer efectivas las multas y clausuras en ella previstas, prescriben:
a) Por el transcurso de CINCO (5) años en el caso de contribuyentes
inscriptos, así como en el caso de contribuyentes no inscriptos que no
tengan obligación legal de inscribirse ante la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS o que, teniendo esa obligación y
no habiéndola cumplido, regularicen espontáneamente su situación.
b) Por el transcurso de DIEZ (10) años en el caso de contribuyentes no
inscriptos.
c) Por el transcurso de CINCO (5) años, respecto de los créditos fiscales
indebidamente acreditados, devueltos o transferidos, a contar desde el 1
de enero del año siguiente a la fecha en que fueron acreditados,
devueltos o transferidos. (Inciso incorporado por art. 1°, punto XIX de
la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su
publicación en el Boletín Oficial.)
La acción de repetición de impuestos prescribe por el transcurso de
CINCO (5) años.
Prescribirán a los CINCO (5) años las acciones para exigir, el recupero o
devolución de impuestos. El término se contará a partir del 1 de enero del
año siguiente a la fecha desde la cual sea procedente dicho
reintegro.(Párrafo incorporado por art. 1°, punto XX de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
(Nota Infoleg: por art. 2° de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005 se dispone
que los plazos de prescripción previstos en el inciso c) y en el último
párrafo del presente artículo, —introducidos por la Ley 25.795—, se
considerarán operados al 31 de diciembre de 2005 y resultarán de
aplicación para los términos de prescripción que se encuentren en curso
a la fecha de entrada en vigencia de la presente ley, en la medida que
hubieren superado los plazos previstos en dichas normas.)
Prescripción de impuestos
ARTICULO 57 — Comenzará a correr el término de prescripción del
poder fiscal para determinar el impuesto y facultades accesorias del
mismo, así como la acción para exigir el pago, desde el 1º de enero

43
siguiente al año en que se produzca el vencimiento de los plazos
generales para la presentación de declaraciones juradas e ingreso del
gravamen.
Prescripción de multas y clausuras
ARTICULO 58 — Comenzará a correr el término de la prescripción de la
acción para aplicar multas y clausuras desde el 1º de enero siguiente al
año en que haya tenido lugar la violación de los deberes formales o
materiales legalmente considerada como hecho u omisión punible.
ARTICULO 59 — El hecho de haber prescripto la acción para exigir el
pago del gravamen no tendrá efecto alguno sobre la acción para aplicar
multa y clausura por infracciones susceptibles de cometerse con
posterioridad al vencimiento de los plazos generales para el pago de los
tributos.
ARTICULO 60 — El término de la prescripción de la acción para hacer
efectiva la multa y la clausura comenzará a correr desde la fecha de
notificación de la resolución firme que la imponga.
Prescripción de la acción de repetición
ARTICULO 61 — El término de la prescripción de la acción para repetir
comenzará a correr desde el 1º de enero siguiente al año en que venció
el período fiscal, si se repiten pagos o ingresos que se efectuaron a
cuenta del mismo cuando aún no se había operado su vencimiento; o
desde el 1º de enero siguiente al año de la fecha de cada pago o ingreso,
en forma independiente para cada uno de ellos, si se repiten pagos o
ingresos relativos a un período fiscal ya vencido.
Cuando la repetición comprenda pagos o ingresos hechos por un mismo
período fiscal antes y después de su vencimiento, la prescripción
comenzará a correr independientemente para unos y otros, y de acuerdo
con las normas señaladas en el párrafo que precede.
ARTICULO 62 — Si, durante el transcurso de una prescripción ya
comenzada, el contribuyente o responsable tuviera que cumplir una
determinación impositiva superior al impuesto anteriormente abonado, el
término de la prescripción iniciada con relación a éste quedará
suspendido hasta el 1º de enero siguiente al año en que se cancele el
saldo adeudado, sin perjuicio de la prescripción independiente relativa a
este saldo.
ARTICULO 63 — No obstante el modo de computar los plazos de
prescripción a que se refiere el artículo precedente, la acción de
repetición del contribuyente o responsable quedará expedita desde la
fecha del pago.
ARTICULO 64 — Con respecto a la prescripción de la acción para repetir
no regirá la causa de suspensión prevista en el artículo 3966 del Código
Civil para los incapaces.
Suspensión de la prescripción
ARTICULO 65 — Se suspenderá por un año el curso de la prescripción
de las acciones y poderes fiscales:
a) Desde la fecha de intimación administrativa de pago de tributos
determinados, cierta o presuntivamente con relación a las acciones y
poderes fiscales para exigir el pago intimado. Cuando mediare recurso de
apelación ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, la suspensión,
hasta el importe del tributo liquidado, se prolongará hasta NOVENTA (90)

44
días después de notificada la sentencia del mismo que declare su
incompetencia, o determine el tributo, o apruebe la liquidación practicada
en su consecuencia.
Cuando la determinación aludida impugne total o parcialmente saldos a
favor del contribuyente o responsable que hubieren sido aplicados a la
cancelación —por compensación— de otras obligaciones tributarias, la
suspensión comprenderá también a la prescripción de las acciones y
poderes del Fisco para exigir el pago de las obligaciones
pretendidamente canceladas con dichos saldos a favor.
La intimación de pago efectuada al deudor principal, suspende la
prescripción de las acciones y poderes del Fisco para determinar el
impuesto y exigir su pago respecto de los responsables solidarios.
(Inciso sustituido por art. 36 de la Ley Nº 26.422 B.O. 21/11/2008)
b) Desde la fecha de la resolución condenatoria por la que se aplique
multa con respecto a la acción penal. Si la multa fuere recurrida ante el
TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, el término de la suspensión se
contará desde la fecha de la resolución recurrida hasta noventa (90) días
después de notificada la sentencia del mismo.
c) La prescripción de la acción administrativa se suspenderá desde el
momento en que surja el impedimento precisado por el segundo párrafo
del artículo 16 de la Ley Nº 23.771 hasta tanto quede firme la sentencia
judicial dictada en la causa penal respectiva.
Se suspenderá mientras dure el procedimiento en sede administrativa,
contencioso-administrativa y/o judicial, y desde la notificación de la vista
en el caso de determinación prevista en el artículo 17, cuando se haya
dispuesto la aplicación de las normas del Capítulo XIII. La suspensión
alcanzará a los períodos no prescriptos a la fecha de la vista referida.
d) Igualmente se suspenderá la prescripción para aplicar sanciones
desde el momento de la formulación de la denuncia penal establecida en
el artículo 20 de la ley 24.769, por presunta comisión de algunos de los
delitos tipificados en dicha ley y hasta los CIENTO OCHENTA (180) días
posteriores al momento en que se encuentre firme la sentencia judicial
que se dicte en la causa penal respectiva. (Inciso incorporado por art. 1°,
punto XXI de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día
de su publicación en el Boletín Oficial.)
(Nota Infoleg: por art. 1° pto. XIX de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005 se
disponía la sustitución del presente inciso pero fue observada por Decreto
N° 777/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín
Oficial.)
Artículo...: Se suspenderá por ciento veinte (120) días el curso de la
prescripción de las acciones y poderes del Fisco para determinar y exigir
el pago de los impuestos regidos por la presente ley y para aplicar y
hacer efectivas las multas, desde la fecha de notificación de la vista del
procedimiento de determinación de oficio o de la instrucción del sumario
correspondiente, cuando se tratare del o los períodos fiscales próximos a
prescribir y dichos actos se notificaran dentro de los ciento ochenta (180)
días corridos anteriores a la fecha en que se produzca la correspondiente
prescripción.
(Artículo s/n a continuación del art. 65 sustituido por art. 18 de la Ley N°
26.063 B.O. 9/12/2005).

45
ARTICULO 66 — Se suspenderá por DOS (2) años el curso de la
prescripción de las acciones y poderes fiscales para determinar y percibir
tributos y aplicar sanciones con respecto a los inversionistas en empresas
que gozaren de beneficios impositivos provenientes de regímenes de
promoción industriales, regionales, sectoriales o de cualquier otra índole,
desde la intimación de pago efectuada a la empresa titular del beneficio.
Interrupción de la prescripción
ARTICULO 67 — La prescripción de las acciones y poderes del Fisco
para determinar y exigir el pago del impuesto se interrumpirá:
a) Por el reconocimiento expreso o tácito de la obligación impositiva.
b) Por renuncia al término corrido de la prescripción en curso.
c) Por el juicio de ejecución fiscal iniciado contra el contribuyente o
responsable en los únicos casos de tratarse de impuestos determinados
en una sentencia del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION debidamente
notificada o en una intimación o resolución administrativa debidamente
notificada y no recurrida por el contribuyente; o, en casos de otra índole,
por cualquier acto judicial tendiente a obtener el cobro de lo adeudado.
En los casos de los incisos a) y b) el nuevo término de prescripción
comenzará a correr a partir del 1º de enero siguiente al año en que las
circunstancias mencionadas ocurran.
ARTICULO 68 — La prescripción de la acción para aplicar multa y
clausura o para hacerla efectiva se interrumpirá:
a) Por la comisión de nuevas infracciones, en cuyo caso el nuevo término
de la prescripción comenzará a correr el 1º de enero siguiente al año en
que tuvo lugar el hecho o la omisión punible.
b) Por el modo previsto en el artículo 3º de la Ley Nº 11.585, caso en el
cual cesará la suspensión prevista en el inciso b) del artículo 65.
c) Por renuncia al término corrido de la prescripción en curso, en cuyo
caso el nuevo término de la prescripción comenzará a correr a partir del
1º de enero siguiente al año en que ocurrió dicha circunstancia. (Inciso
incorporado por art. 1° pto. XXI de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
ARTICULO 69 — La prescripción de la acción de repetición del
contribuyente o responsable se interrumpirá por la deducción del reclamo
administrativo de repetición ante la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS o por la interposición de la demanda de
repetición ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION o la Justicia
Nacional. En el primer caso, el nuevo término de la prescripción
comenzará a correr a partir del 1º de enero siguiente al año en que se
cumplan los TRES (3) meses de presentado el reclamo. En el segundo, el
nuevo término comenzará a correr desde el 1º de enero siguiente al año
en que venza el término dentro del cual debe dictarse sentencia.
CAPITULO IX PROCEDIMIENTO PENAL Y CONTENCIOSO
ADMINISTRATIVO
Del sumario
ARTICULO 70 — Los hechos reprimidos por los artículos sin número
agregados a continuación del artículo 38, 39, agregado a su continuación,
45, 46, agregado a su continuación y 48, serán objeto de un sumario
administrativo cuya instrucción deberá disponerse por resolución
emanada de Juez administrativo, en la que deberá constar claramente el

46
acto u omisión que se atribuyere al presunto infractor. También serán
objeto de sumario las infracciones del artículo 38 en la oportunidad y
forma que allí se establecen.
(Artículo sustituido por art. 1°, punto XXII de la Ley N° 25.795 B.O.
17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín
Oficial.)
ARTICULO 71 — La resolución que disponga la sustanciación del
sumario será notificada al presunto infractor, a quien se le acordará un
plazo de QUINCE (15) días, prorrogable por resolución fundada, por otro
lapso igual y por una única vez, para que formule por escrito su descargo
y ofrezca todas las pruebas que hagan a su derecho.
El acta labrada que disponga la sustanciación del sumario, indicada en
los supuestos de las infracciones del artículo 39, será notificada al
presunto infractor, acordándole CINCO (5) días para que presente su
defensa y ofrezca las pruebas que hagan a su derecho.
ARTICULO 72 — Vencido el término establecido en el artículo anterior, se
observarán para la instrucción del sumario las normas de los artículos 17
y siguientes.
ARTICULO 73 — El sumario será secreto para todas las personas ajenas
al mismo, pero no para las partes o para quienes ellas expresamente
autoricen.
ARTICULO 74 — Cuando las infracciones surgieran con motivo de
impugnaciones u observaciones vinculadas a la determinación de
tributos, las sanciones deberán aplicarse en la misma resolución que
determina el gravamen. Si así no ocurriera se entenderá que la
DIRECCCION GENERAL IMPOSITIVA de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS no ha encontrado mérito para
imponer sanciones, con la consiguiente indemnidad del contribuyente.
De la clausura preventiva
ARTICULO 75 — La clausura preventiva que disponga la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS en ejercicio de
sus atribuciones deberá ser comunicada de inmediato al juez federal o en
lo Penal Económico, según corresponda, para que éste, previa audiencia
con el responsable resuelva dejarla sin efecto en razón de no
comprobarse los extremos requeridos por el artículo 35, inciso f); o
mantenerla hasta tanto el responsable regularice la situación que originó
la medida preventiva.
La clausura preventiva no podrá extenderse más allá del plazo legal de
TRES (3) días sin que se haya resuelto su mantenimiento por el juez
interviniente.
Sin perjuicio de lo que el juez resuelva, la ADMINISTRACION FEDERAL
DE INGRESOS PUBLICOS continuará la tramitación de la pertinente
instancia administrativa.
A los efectos del cómputo de una eventual sanción de clausura del
artículo 40, por cada día de clausura corresponderá UN (1) día de
clausura preventiva.
El juez administrativo o judicial en su caso, dispondrá el levantamiento de
la clausura preventiva inmediatamente que el responsable acredite la
regularización de la situación que diera lugar a la medida.
Recurso de Reconsideración o de Apelación

47
ARTICULO 76 — Contra las resoluciones que impongan sanciones o
determinen los tributos y accesorios en forma cierta o presuntiva, o se
dicten en reclamos por repetición de tributos en los casos autorizados por
el artículo 81, los infractores o responsables podrán interponer -a su
opción- dentro de los QUINCE (15)días de notificados, los siguientes
recursos:
a) Recurso de reconsideración para ante el superior.
b) Recurso de apelación para ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION
competente, cuando fuere viable.
El recurso del inciso a) se interpondrá ante la misma autoridad que dictó
la resolución recurrida, mediante presentación directa de escrito o por
entrega al correo en carta certificada con aviso de retorno; y el recurso
del inciso b) se comunicará a ella por los mismos medios.
El recurso del inciso b) no será procedente respecto de las liquidaciones
de anticipos y otros pagos a cuenta, sus actualizaciones e intereses.
Asimismo no será utilizable esa vía recursiva en las liquidaciones de
actualizaciones e intereses cuando simultáneamente no se discuta la
procedencia del gravamen.
ARTICULO 77 — Las sanciones de multa y clausura, y la de suspensión
de matrícula, licencia e inscripción en el respectivo registro, cuando
proceda, serán recurribles dentro de los CINCO (5) días por apelación
administrativa ante los funcionarios superiores que designe la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, quienes
deberán expedirse en un plazo no mayor a los DIEZ (10) días.
La resolución de estos últimos causa ejecutoria, correspondiendo que sin
otra sustanciación, la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS proceda a la ejecución de dichas sanciones, por los medios y
en las formas que para cada caso autoriza la presente ley.
Artículo..: La resolución que disponga el decomiso de la mercadería
sujeta a secuestro o interdicción, será recurrible dentro de los TRES (3)
días por apelación administrativa ante los funcionarios superiores que
designe la Administración Federal de Ingresos Públicos, quienes deberán
expedirse en un plazo no mayor a los DIEZ (10) días. En caso de
urgencia, dicho plazo se reducirá a CUARENTA Y OCHO (48) horas de
recibido el recurso de apelación. En su caso, la resolución que resuelva el
recurso, podrá ordenar al depositario de los bienes decomisados que
traslade los mismos al Ministerio de Desarrollo Social, para satisfacer
necesidades de bien público, conforme las reglamentaciones que al
respecto se dicten.
(Artículo s/n incorporado por art. 1° pto. XXII de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
ARTICULO 78 — La resolución a que se refiere el último párrafo del
artículo anterior, será recurrible por recurso de apelación, otorgado en
todos los casos con efecto devolutivo, ante los Juzgados en lo Penal
Económico de la Capital Federal y juzgados federales en el resto del
territorio de la República.
El escrito del recurso deberá ser interpuesto y fundado en sede
administrativa, dentro de los CINCO (5) días de notificada la resolución.
Verificado el cumplimiento de los requisitos formales, dentro de las
VEINTICUATRO (24) horas de formulada la apelación, deberán elevarse

48
las piezas pertinentes al juez competente con arreglo a las previsiones
del Código Procesal Penal de la Nación (Ley Nº 23.984), que será de
aplicación subsidiaria, en tanto no se oponga a la presente ley.
La decisión del juez será apelable al sólo efecto devolutivo.
Artículo ...: La resolución a que se refiere el artículo agregado a
continuación del artículo 77 será recurrible por recurso de apelación ante
los Juzgados en lo Penal Tributario de la Capital Federal y Juzgados
Federales en el resto del territorio de la REPUBLICA ARGENTINA, el que
tendrá efecto suspensivo respecto del decomiso de la mercadería con
mantenimiento de la medida preventiva de secuestro o interdicción.
El escrito del recurso deberá ser interpuesto y fundado en sede
administrativa, dentro de los TRES (3) días de notificada la resolución.
Verificado el cumplimiento de los requisitos formales, dentro de las
VEINTICUATRO (24) horas de formulada la apelación, deberán elevarse
las piezas pertinentes al juez competente con arreglo a las previsiones
del Código Procesal Penal de la Nación —Ley Nº 23.984— que será de
aplicación subsidiaria, en tanto no se oponga a la presente ley.
La decisión del juez será apelable al solo efecto devolutivo.
(Artículo s/n incorporado por art. 1° pto. XXIII de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
ARTICULO 79 — Si en el término señalado en el artículo 76 no se
interpusiere alguno de los recursos autorizados, las resoluciones se
tendrán por firmes. En el mismo caso, pasarán en autoridad de cosa
juzgada las resoluciones sobre multas y reclamos por repetición de
impuestos.
ARTICULO 80 — Interpuesto el recurso de reconsideración, el juez
administrativo dictará resolución dentro de los VEINTE (20)días y la
notificará al interesado con todos los fundamentos en la forma dispuesta
por el artículo 100.
Acción y Demanda de Repetición
ARTICULO 81 — Los contribuyentes y demás responsables tienen acción
para repetir los tributos y sus accesorios que hubieren abonado de más,
ya sea espontáneamente o a requerimiento de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS. En el primer caso, deberán
interponer reclamo ante ella. Contra la resolución denegatoria y dentro de
los QUINCE (15) días de la notificación, podrá el contribuyente interponer
el recurso de reconsideración previsto en el artículo 76 u optar entre
apelar ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION o interponer demanda
contenciosa ante la Justicia Nacional de Primera Instancia.
Análoga opción tendrá si no se dictare resolución dentro de los TRES (3)
meses de presentarse el reclamo.
Si el tributo se pagare en cumplimiento de una determinación cierta o
presuntiva de la repartición recaudadora, la repetición se deducirá
mediante demanda que se interponga, a opción del contribuyente, ante el
TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION o ante la Justicia Nacional.
La reclamación del contribuyente y demás responsables por repetición de
tributos facultará a la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, cuando estuvieran prescriptas las acciones y poderes
fiscales, para verificar la materia imponible por el período fiscal a que
aquélla se refiere y, dado el caso, para determinar y exigir el tributo que

49
resulte adeudarse, hasta compensar el importe por el que prosperase el
recurso.
Cuando a raíz de una verificación fiscal, en la que se modifique cualquier
apreciación sobre un concepto o hecho imponible, determinando tributo a
favor del Fisco, se compruebe que la apreciación rectificada ha dado
lugar a pagos improcedentes o en exceso por el mismo u otros
gravámenes, la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS compensará los importes pertinentes, aun cuando la acción
de repetición se hallare prescripta, hasta anular el tributo resultante de la
determinación.
Los impuestos indirectos sólo podrán ser repetidos por los contribuyentes
de derecho cuando éstos acreditaren que no han trasladado tal impuesto
al precio, o bien cuando habiéndolo trasladado acreditaren su devolución
en la forma y condiciones que establezca la Administración Federal de
Ingresos Públicos. (Párrafo incorporado por art. 1°, punto XXIII de la Ley
N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en
el Boletín Oficial.)
CAPITULO X PROCEDIMIENTO CONTENCIOSO JUDICIAL
Demanda contencioso
ARTICULO 82 — Podrá interponerse demanda contra el Fisco Nacional,
ante el Juez Nacional respectivo, siempre que se cuestione una suma
mayor de DOSCIENTOS PESOS ($ 200): (Expresión "TRES CIEN
MILESIMOS DE CENTAVO DE PESO ($ 0,000003)" sustituida por la
expresión "DOSCIENTOS PESOS ($ 200)", por art. 2°, inciso c) de la Ley
N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en
el Boletín Oficial.)
a) Contra las resoluciones dictadas en los recursos de reconsideración en
materia de multas.
b) Contra las resoluciones dictadas en materia de repetición de tributos y
sus reconsideraciones.
c) En el supuesto de no dictarse resolución administrativa, dentro de los
plazos señalados en los artículos 80 y 81 en caso de sumarios instruidos
o reclamaciones por repetición de tributos.
En los supuestos de los incisos a) y b) la demanda deberá presentarse en
el perentorio término de QUINCE (15) días a contar de la notificación de
la resolución administrativa.
Demanda por repetición
ARTICULO 83 — En la demanda contenciosa por repetición de tributos
no podrá el actor fundar sus pretensiones en hechos no alegados en la
instancia administrativa ni ofrecer prueba que no hubiera sido ofrecida en
dicha instancia, con excepción de los hechos nuevos y de la prueba sobre
los mismos. (Párrafo sustituido por Título XV art. 18 inciso 4) de la Ley Nº
25.239 B.O. 31/12/1999)
Incumbe al mismo demostrar en qué medida el impuesto abonado es
excesivo con relación al gravamen que según la ley le correspondía
pagar, y no podrá, por tanto, limitar su reclamación a la mera
impugnación de los fundamentos que sirvieron de base a la estimación de
oficio administrativa cuando ésta hubiera tenido lugar.

50
Sólo procederá la repetición por los períodos fiscales con relación a los
cuales se haya satisfecho el impuesto hasta ese momento determinado
por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.
Procedimiento judicial
ARTICULO 84 — Presentada la demanda, el juez requerirá los
antecedentes administrativos a la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS mediante oficio al que acompañará copia de
aquélla, y en el que se hará constar la fecha de su interposición. Los
antecedentes deberán enviarse al juzgado dentro de los QUINCE
(15)días de la fecha de recepción del oficio.
Una vez agregadas las actuaciones administrativas al expediente judicial
se dará vista al Procurador Fiscal Nacional para que se expida acerca de
la procedencia de la instancia y competencia del juzgado. En el caso de
que un contribuyente o responsable no hubiere formalizado recurso
alguno contra la resolución que determinó el tributo y aplicó multa podrá
comprender en la demanda de repetición que deduzca por el impuesto la
multa consentida, pero tan sólo en la parte proporcional al impuesto cuya
repetición se persigue.
ARTICULO 85 — Admitido el curso de la demanda, se correrá traslado de
la misma al Procurador Fiscal Nacional, o por cédula, al representante
designado por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS en su caso, para que la conteste dentro del término de
TREINTA (30) días y oponga todas las defensas y excepciones que
tuviera, las que serán resueltas juntamente con las cuestiones de fondo
en la sentencia definitiva, salvo las previas que serán resueltas como de
previo y especial pronunciamiento.
ARTICULO 86 — La Cámara Nacional competente en razón de la materia
cuestionada y, en su caso, de la sede del TRIBUNAL FISCAL DE LA
NACION interviniente, lo será para entender siempre que se cuestione
una suma mayor de DOSCIENTOS PESOS ($ 200), en los siguientes
casos: (Expresión "TRES CIEN MILESIMOS DE CENTAVO DE PESO ($
0,000003)"sustituida por la expresión "DOSCIENTOS PESOS ($ 200)",
por art. 2°, inciso d) de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a
partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
a) En las apelaciones que se interpusieran contra las sentencias de los
jueces de primera instancia, dictadas en materia de repetición de
gravámenes y aplicación de sanciones.
b) En los recursos de revisión y apelación limitada contra las sentencias
dictadas por el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION en materia de tributos
o sanciones.
c) En las apelaciones que se interpusieran contra las decisiones
adoptadas por el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, en los recursos de
amparo de los artículos 182 y 183, sin limitación de monto.
d) En los recursos por retardo de justicia del TRIBUNAL FISCAL DE LA
NACION.
En el caso del inciso b), la Cámara:
1. Podrá, si hubiera violación manifiesta de las formas legales en el
procedimiento ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, declarar la
nulidad de las actuaciones o resoluciones y devolverlas al TRIBUNAL

51
FISCAL con apercibimiento, salvo que, en atención a la naturaleza de la
causa, juzgare más conveniente su apertura a prueba en instancia.
2. Resolverá el fondo del asunto, teniendo por válidas las conclusiones
del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION sobre los hechos probados.
Ello no obstante, podrá apartarse de ellas y disponer la producción de
pruebas cuando, a su criterio, las constancias de autos autoricen a
suponer error en la apreciación que hace la sentencia de los hechos.
ARTICULO 87 — En el caso del inciso d) del artículo anterior es
condición para la procedencia del recurso que hayan transcurrido DIEZ
(10) días desde la fecha del escrito de cualquiera de las partes, urgiendo
la sentencia no dictada por el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION en el
plazo legal. Presentada la queja con copia de aquel escrito, la Cámara
Nacional requerirá del TRIBUNAL FISCAL que dicte pronunciamiento
dentro de los QUINCE (15)días desde la recepción del oficio. Vencido el
término sin dictarse sentencia, la Cámara Nacional solicitará los autos y
se abocará al conocimiento del caso, el que se regirá entonces por el
procedimiento establecido en el Código Procesal Civil y Comercial de la
Nación para los recursos de apelación concedidos libremente,
produciéndose en la instancia toda la prueba necesaria. Toda vez que la
queja resultare justificada, la Cámara Nacional pondrá el hecho en
conocimiento del presidente del jurado a que se refiere el artículo 148.
De igual manera procederá en los casos que llegaren a su conocimiento,
cuando resultare del expediente que la sentencia del TRIBUNAL FISCAL
DE LA NACION no ha sido dictada dentro del término correspondiente.
ARTICULO 88 — Con la salvedad del carácter declarativo que -atento a
lo dispuesto en la Ley Nº 3952- asumen las sentencias respecto del
Fisco, corresponderá al juez que haya conocido en la causa la ejecución
de las sentencias dictadas en ella y al de turno la de las ejecutoriadas
ante la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS y se
aplicará el procedimiento establecido en el Código Procesal Civil y
Comercial de la Nación.
ARTICULO 89 — Las sentencias dictadas en las causas previstas en esta
ley, como las dictadas en las causas por ejecución de las mismas, son
definitivas, pasan en autoridad de cosa juzgada y no autorizan el ejercicio
de la acción de repetición por ningún concepto, sin perjuicio de los
recursos que autorizan las Leyes Nros. 48 y 4055.
ARTICULO 90 — Las acciones podrán deducirse ante el juez de la
circunscripción donde se halle la oficina recaudadora respectiva, o ante el
domicilio del deudor, o ante el lugar en que se haya cometido la infracción
o se hayan aprehendido los efectos que han sido materia de
contravención.
ARTICULO 91 — El procedimiento se regirá por las normas del Código
Procesal Civil y Comercial de la Nación y, en su caso por las del Código
Procesal Penal de la Nación.
CAPITULO XI JUICIO DE EJECUCION FISCAL
ARTICULO 92 — El cobro judicial de los tributos, pagos a cuenta,
anticipos, accesorios, actualizaciones, multas ejecutoriadas, intereses u
otras cargas cuya aplicación, fiscalización o percepción esté a cargo de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, se hará por la
vía de la ejecución fiscal establecida en la presente ley, sirviendo de

52
suficiente título a tal efecto la boleta de deuda expedida por la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.
En este juicio si el ejecutado no abonara en el acto de intimársele el pago,
quedará desde ese momento citado de venta, siendo las únicas
excepciones admisibles a oponer dentro del plazo de cinco (5) días las
siguientes:
a) Pago total documentado;
b) Espera documentada;
c) Prescripción;
d) Inhabilidad de título, no admitiéndose esta excepción si no estuviere
fundada exclusivamente en vicios relativos a la forma extrínseca de la
boleta de deuda.
(Nota Infoleg: por art. 1° pto. XXIV de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005 se
disponía la incorporación del de un inciso e) pero fue observada por
Decreto N° 777/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
No serán aplicables al juicio de ejecución fiscal promovido por los
conceptos indicados en el presente artículo, las excepciones
contempladas en el segundo párrafo del artículo 605 del Código Procesal
Civil y Comercial de la Nación.
Cuando se trate del cobro de deudas tributarias no serán de aplicación
las disposiciones de la ley 19.983, sino el procedimiento establecido en
este capítulo.
La ejecución fiscal será considerada juicio ejecutivo a todos sus efectos,
sin perjuicio de las disposiciones contenidas en este capítulo, aplicándose
de manera supletoria las disposiciones del Código Civil y Comercial de la
Nación.
Los pagos efectuados después de iniciado el juicio no serán hábiles para
fundar excepción. Acreditados los mismos en autos procederá su archivo
o reducción del monto demandado con costas a los ejecutados. Igual
tratamiento se aplicará a los pagos mal imputados y a los no
comunicados por el contribuyente o responsable en la forma que
establezca la Administración Federal de Ingresos Públicos, en cuyo caso
se eximirá de las costas si se tratara de la primera ejecución fiscal
iniciada como consecuencia de dicho accionar. (Párrafo sustituido por art.
1° pto. XXV de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005. Vigencia: a partir del día
de su publicación en el Boletín Oficial.)
No podrá oponerse nulidad de la sentencia del TRIBUNAL FISCAL DE LA
NACION, la que sólo podrá ventilarse por la vía autorizada por el artículo
86 de esta ley.
A los efectos del procedimiento se tendrá por interpuesta la demanda de
ejecución fiscal con la presentación del agente fiscal ante el Juzgado con
competencia tributaria, o ante la Mesa General de Entradas de la Cámara
de Apelaciones u Organo de Superintendencia Judicial pertinente en caso
de tener que asignarse el juzgado competente, informando según surja
de la boleta de deuda, el nombre del demandado, su domicilio y carácter
del mismo, concepto y monto reclamado, así como el domicilio legal fijado
por la demandante para sustanciar trámites ante el Juzgado y el nombre
de los oficiales de Justicia ad-hoc y personas autorizadas para intervenir
en el diligenciamiento de requerimientos de pago, embargos, secuestros

53
y notificaciones. En su caso, deberá informarse las medidas precautorias
a trabarse. Asignado el tribunal competente, se impondrá de tal
asignación a aquél con los datos especificados en el párrafo precedente.
Cumplidos los recaudos contemplados en el párrafo precedente y sin más
trámite, el agente fiscal representante de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS estará facultado a librar bajo su
firma mandamiento de intimación de pago y eventualmente embargo si no
indicase otra medida alternativa, por la suma reclamada especificando su
concepto con más el quince por ciento (15%) para responder a intereses
y costas, indicando también la medida precautoria dispuesta, el Juez
asignado interviniente y la sede del juzgado, quedando el demandado
citado para oponer las excepciones previstas en el presente artículo. Con
el mandamiento se acompañará copia de la boleta de deuda en
ejecución.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS por
intermedio del agente fiscal estará facultada para trabar por las sumas
reclamadas las medidas precautorias alternativas indicadas en la
presentación de prevención o que indicare en posteriores presentaciones
al Juez asignado.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS por
intermedio del agente fiscal podrá decretar el embargo de cuentas
bancarias, fondos y valores depositados en entidades financieras, o de
bienes de cualquier tipo o naturaleza, inhibiciones generales de bienes y
adoptar otras medidas cautelares tendientes a garantizar el recupero de
la deuda en ejecución. Asimismo podrá controlar su diligenciamiento y
efectiva traba. En cualquier estado de la ejecución podrá disponer el
embargo general de los fondos y valores de cualquier naturaleza que los
depositados tengan depositados en las entidades financieras regidas por
la ley 21.526. Dentro de los quince (15) días de notificadas de la medida,
dichas entidades deberán informar a la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS acerca de los fondos y valores que resulten
embargados, no rigiendo a tales fines el secreto que establece el artículo
39 de la ley 21.526.
Para los casos en que se requiera desapoderamiento físico o
allanamiento de domicilios deberá requerir la orden respectiva del juez
competente. Asimismo, y en su caso, podrá llevar adelante la ejecución
mediante la enajenación de los bienes embargados mediante subasta o
por concurso público.
Si las medidas cautelares recayeran sobre bienes registrables o sobre
cuentas bancarias del deudor, la anotación de las mismas se practicará
por oficio expedido por el agente fiscal representante de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, el cual tendrá
el mismo valor que una requisitoria y orden judicial. La responsabilidad
por la procedencia, razonabilidad y alcance de las medidas adoptadas por
el agente fiscal, quedarán sometidas a las disposiciones del artículo 1112,
sin perjuicio de la responsabilidad profesional pertinente ante su entidad
de matriculación.
En caso de que cualquier medida precautoria resulte efectivamente
trabada antes de la intimación al demandado, éstas deberán serle

54
notificadas por el agente fiscal dentro de los cinco (5) días siguientes de
tomado conocimiento de la traba por el mismo.
En caso de oponerse excepciones por el ejecutado, éstas deberán
presentarse ante el Juez asignado, manifestando bajo juramento la fecha
de recepción de la intimación cumplida y acompañando la copia de la
boleta de deuda y el mandamiento. De la excepción deducida y
documentación acompañada el Juez ordenará traslado con copias por
cinco (5) días al ejecutante, debiendo el auto que así lo dispone
notificarse personalmente o por cédula al agente fiscal interviniente en el
domicilio legal constituido. Previo al traslado el Juez podrá expedirse en
materia de competencia. La sustanciación de las excepciones tramitará
por las normas del juicio ejecutivo del Código Procesal Civil y Comercial
de la Nación. La sentencia de ejecución será inapelable, quedando a
salvo el derecho de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS de librar nuevo título de deuda, y del ejecutado de repetir por
la vía establecida en el artículo 81 de esta ley.
Vencido el plazo sin que se hayan opuesto excepciones el agente fiscal
representante de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS requerirá al Juez asignado interviniente constancia de dicha
circunstancia, dejando de tal modo expedita la vía de ejecución del
crédito reclamado, sus intereses y costas. El agente fiscal representante
de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS
procederá a practicar liquidación notificando administrativamente de ella
al demandado por el término de cinco (5) días, plazo durante el cual el
ejecutado podrá impugnarla ante el Juez asignado interviniente que la
sustanciará conforme el trámite pertinente de dicha etapa del proceso de
ejecución reglado en el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación.
En caso de no aceptar el ejecutado la estimación de honorarios
administrativa, se requerirá regulación judicial. La ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS establecerá, con carácter general,
las pautas a adoptar para practicar la estimación de honorarios
administrativa siguiendo los parámetros establecidos en la ley de
aranceles para abogados y procuradores. En todos los casos el secuestro
de bienes y la subasta deberán comunicarse al Juez y notificarse
administrativamente al demandado por el agente fiscal.
Las entidades financieras y terceros deberán transferir los importes
totales líquidos embargados al banco de depósitos judiciales de la
jurisdicción del juzgado, hasta la concurrencia del monto total de la boleta
de deuda, dentro de los DOS (2) días hábiles inmediatos siguientes a la
notificación de la orden emitida por el juez. (Párrafo incorporado por art.
1° pto. XXVI de la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005. Vigencia: a partir del día
de su publicación en el Boletín Oficial.)
Las comisiones o gastos que demande dicha operación serán soportados
íntegramente por el contribuyente o responsable y no podrán detraerse
del monto transferido. (Párrafo incorporado por art. 1° pto. XXVI de la Ley
N° 26.044 B.O. 6/7/2005. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
(Artículo sustituido por Título XV art. 18 inciso 5) de la Ley Nº 25.239 B.O.
31/12/1999)

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(Nota Infoleg: Por art. 1º del Decreto Nº 1390/2001 B.O. 05/11/2001, se
especifica que las designaciones de Agentes Fiscales previstas en el
presente artículo deberán recaer en abogados que acrediten un mínimo
de TRES (3) años de antigüedad en la matrícula respectiva.)
Artículo ...: Las entidades financieras, así como las demás personas
físicas o jurídicas depositarias de bienes embargados, serán
responsables en forma solidaria por hasta el valor del bien o la suma de
dinero que se hubiere podido embargar, cuando con conocimiento previo
del embargo, hubieren permitido su levantamiento, y de manera particular
en las siguientes situaciones: (Párrafo sustituido por art. 1° pto. XXVII de
la Ley N° 26.044 B.O. 6/7/2005)
a) Sean causantes en forma directa de la ocultación de bienes, fondos,
valores o derechos del contribuyente ejecutado, con la finalidad de
impedir la traba del embargo, y
b) Cuando sus dependientes incumplan las órdenes de embargo u otras
medidas cautelares ordenadas por los jueces o por los agentes fiscales.
Verificada alguna de las situaciones descriptas, el agente fiscal la
comunicará de inmediato al juez de la ejecución fiscal de que se trate,
acompañando todas las constancias que así lo acrediten. El juez dará
traslado por CINCO (5) días a la entidad o persona denunciada, luego de
lo cual deberá dictar resolución mandando a hacer efectiva la
responsabilidad solidaria aquí prevista, la que deberá cumplirse dentro de
un plazo máximo de DIEZ (10) días.
(Artículo sin número incorporado por art. 1°, punto XXIV de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
Artículo...: Si la deuda firme, líquida y exigible estuviera garantizada
mediante aval, fianza personal, prenda, hipoteca o cualquier otra
garantía, se procederá en primer lugar a ejecutarla, siguiendo para ello el
procedimiento previsto en el artículo 92; una vez ejecutada la garantía, si
la misma no fuese suficiente para cubrir la deuda, se podrá seguir la
ejecución contra cualquier otro bien o valor del ejecutado.
(Artículo sin número incorporado por art. 1°, punto XXIV de la Ley N°
25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su publicación en el
Boletín Oficial.)
ARTICULO 93 — En todos los casos de ejecución, la acción de repetición
sólo podrá deducirse una vez satisfecho el impuesto adeudado,
accesorios y costas.
(Artículo sustituido por Título XV art. 18 inciso 6) de la Ley Nº 25.239 B.O.
31/12/1999)
ARTICULO 94 — El cobro de los impuestos por vía de ejecución fiscal se
tramitará independientemente del curso del sumario a que pueda dar
origen la falta de pago de los mismos.
ARTICULO 95 — El diligenciamiento de los mandamientos de ejecución y
embargo y las notificaciones podrán estar a cargo de los empleados de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, designados
como Oficiales de Justicia ad-hoc. El costo que demande la realización de
las diligencias fuera del radio de notificaciones del juzgado será
soportado por la parte a cargo de las costas.

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La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrá, una
vez expedita la ejecución, designar martillero para efectuar la subasta. La
publicación de los edictos pertinentes se efectuará por el término de dos
(2) días en el órgano oficial y en otro diario de los de mayor circulación en
el lugar.
(Artículo sustituido por Título XV art. 18 inciso 7) de la Ley Nº 25.239 B.O.
31/12/1999)
CAPITULO XII DISPOSICIONES VARIAS
Representación Judicial
ARTICULO 96 — En los juicios por cobro de los impuestos, derechos,
recursos de la seguridad social, multas, intereses u otras cargas, cuya
aplicación, fiscalización o percepción esté a cargo de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, la
representación de éste, ante todas las jurisdicciones e instancias, será
ejercida indistintamente por los procuradores o agentes fiscales, pudiendo
estos últimos ser patrocinados por los letrados de la repartición.
(Artículo sustituido por Título XV art. 18 inciso 8) de la Ley Nº 25.239 B.O.
31/12/1999)
(Nota Infoleg: Por art. 1º del Decreto Nº 1390/2001 B.O. 05/11/2001, se
extiende la representación judicial prevista en el presente artículo a todos
los juicios, demandas o recursos judiciales en los que la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS entidad
autárquica en el ámbito del MINISTERIO DE ECONOMIA, sea parte
actora, demandada o tercero interesado. A tales fines, la expresión
"procuradores o agentes fiscales" engloba a todos los agentes de planta
permanente o transitoria y a los letrados contratados sin relación de
dependencia como servicio de asistencia del Cuerpo de Abogados del
Estado, a los cuales se les delegue o encomiende, por acto expreso del
Administrador Federal, la representación judicial del organismo.)
ARTICULO 97 — El Fisco será representado por procuradores o agentes
fiscales, los que recibirán instrucciones directas de esa dependencia, a la
que deberán informar de las gestiones que realicen.
La personería de procuradores o agentes fiscales quedará acreditada con
la certificación que surge del título de deuda o con poder general o
especial.
(Artículo sustituido por Título XV art. 18 inciso 9) de la Ley Nº 25.239 B.O.
31/12/1999)
(Nota Infoleg: Por art. 1º del Decreto Nº 1390/2001 B.O. 05/11/2001, se
extiende la representación judicial prevista en el presente artículo a todos
los juicios, demandas o recursos judiciales en los que la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS entidad
autárquica en el ámbito del MINISTERIO DE ECONOMIA, sea parte
actora, demandada o tercero interesado. A tales fines, la expresión
"procuradores o agentes fiscales" engloba a todos los agentes de planta
permanente o transitoria y a los letrados contratados sin relación de
dependencia como servicio de asistencia del Cuerpo de Abogados del
Estado, a los cuales se les delegue o encomiende, por acto expreso del
Administrador Federal, la representación judicial del organismo.)
ARTICULO 98 — Los procuradores, agentes fiscales u otros funcionarios
de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS que

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representen o patrocinen al Fisco tendrán derecho a percibir honorarios,
salvo cuando éstos estén a cargo de la Nación y siempre que haya
quedado totalmente satisfecho el crédito fiscal. (Párrafo sustituido por
Título XV art. 18 inciso 10) de la Ley Nº 25.239 B.O. 31/12/1999)
Cuando la representación se encuentre a cargo de funcionarios
designados por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, ésta podrá fijar la forma de distribución de los honorarios.
En los juicios de ejecución fiscal a que se refiere el cuarto párrafo del
artículo 92 no se devengarán honorarios en favor de los letrados que
actúen como representantes o patrocinantes de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS y de los sujetos mencionados en
el último párrafo del artículo 5º.
ARTICULO 99 — La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS anticipará a su representante los fondos necesarios para los
gastos que demande la tramitación de los juicios (de publicación de
edictos, diligenciamiento de notificaciones, mandamientos y otros
análogos), con cargo de rendir cuenta documentada de su intervención y
de reintegrar las cantidades invertidas cuando perciban su importe de la
parte vencida a la terminación de las causas. A este efecto se dispondrá
la apertura de la cuenta correspondiente.
Formas de notificación
ARTICULO 100 — Las citaciones, notificaciones, intimaciones de pago,
etc., serán practicadas en cualesquiera de las siguientes formas:
a) Por carta certificada con aviso especial de retorno, a cuyo efecto se
convendrá con el correo la forma de hacerlo con la mayor urgencia y
seguridad; el aviso de retorno servirá de suficiente prueba de la
notificación, siempre que la carta haya sido entregada en el domicilio del
contribuyente aunque aparezca suscripto por un tercero.
b) Personalmente, por medio de un empleado de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, quien dejará constancia en acta
de la diligencia practicada y del lugar, día y hora en que se efectuó,
exigiendo la firma del interesado. Si éste no supiere o no pudiera firmar,
podrá hacerlo, a su ruego, un testigo.
Si el destinatario no estuviese o se negare a firmar, dejará igualmente
constancia de ello en acta. En días siguientes, no feriados, concurrirán al
domicilio del interesado DOS (2) funcionarios de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS para notificarlo. Si tampoco fuera
hallado, dejarán resolución o carta que deben entregar en sobre cerrado,
a cualquier persona que se hallare en el mismo, haciendo que la persona
que lo reciba suscriba el acta.
Si no hubiere persona dispuesta a recibir la notificación o si el
responsable se negare a firmar, procederán a fijar en la puerta de su
domicilio y en sobre cerrado el instrumento de que se hace mención en el
párrafo que antecede.
Las actas labradas por los empleados notificadores harán fe mientras no
se demuestre su falsedad.
c) Por nota o esquela numerada, con firma facsimilar del funcionario
autorizado, remitida con aviso de retorno y en las condiciones que
determine la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS
para su emisión y demás recaudos.

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d) Por tarjeta o volante de liquidación o intimación de pago numerado,
remitido con aviso de retorno, en los casos a que se refiere el último
párrafo del artículo 11.
e) Por cédula, por medio de los empleados que designe el Administrador
Federal, quienes en las diligencias deberán observar las normas que
sobre la materia establece el Código Procesal Civil y Comercial de la
Nación.
f) Por telegrama colacionado u otro medio de comunicación de similares
características.
Si las citaciones, notificaciones, etc., no pudieron practicarse en la forma
antedicha por no conocerse el domicilio del contribuyente, se efectuarán
por medio de edictos publicados durante CINCO (5) días en el Boletín
Oficial, sin perjuicio de que también se practique la diligencia en el lugar
donde se presuma que pueda residir el contribuyente.
g) Por la comunicación informática del acto administrativo de que se trate
en las formas, requisitos y condiciones que establezca la Administración
Federal de Ingresos Públicos. Dicha notificación se considerará
perfeccionada mediante la puesta a disposición del archivo o registro que
lo contiene, en el domicilio fiscal electrónico constituido por los
responsables siempre que hayan ejercido la opción de registrar el mismo
en los términos del articulo sin número incorporado a continuación del
artículo 3º. (Inciso Incorporado por art. 1° pto. XXVIII de la Ley N°
26.044 B.O. 6/7/2005)
Secreto Fiscal
ARTICULO 101 — Las declaraciones juradas, manifestaciones e informes
que los responsables o terceros presentan a la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, y los juicios de demanda
contenciosa en cuanto consignen aquellas informaciones, son secretos.
Los magistrados, funcionarios, empleados judiciales o dependientes de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, están
obligados a mantener el más absoluto secreto de todo lo que llegue a su
conocimiento en el desempeño de sus funciones sin poder comunicarlo a
persona alguna, ni aun a solicitud del interesado, salvo a sus superiores
jerárquicos.
Las informaciones expresadas no serán admitidas como pruebas en
causas judiciales, debiendo los jueces rechazarlas de oficio, salvo en las
cuestiones de familia, o en los procesos criminales por delitos comunes
cuando aquéllas se hallen directamente relacionadas con los hechos que
se investiguen, o cuando lo solicite el interesado en los juicios en que sea
parte contraria el Fisco Nacional, provincial o municipal y en cuanto la
información no revele datos referentes a terceros.
Los terceros que divulguen o reproduzcan dichas informaciones incurrirán
en la pena prevista por el artículo 157 del Código Penal, para quienes
divulgaren actuaciones o procedimientos que por la ley deben quedar
secretos.
No están alcanzados por el secreto fiscal los datos referidos a la falta de
presentación de declaraciones juradas, a la falta de pago de obligaciones
exigibles, a los montos resultantes de las determinaciones de oficio firmes
y de los ajustes conformados, a las sanciones firmes por infracciones
formales o materiales y al nombre del contribuyente o responsable y al

59
delito que se le impute en las denuncias penales. La ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, dependiente del MINISTERIO DE
ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS, queda facultada para
dar a publicidad esos datos, en la oportunidad y condiciones que ella
establezca. (Párrafo incorporado por art. 1º del Decreto Nº 606/99 B.O.
09/06/1999); (Nota Infoleg: Por art. 3º del Decreto Nº 90/2001 B.O.
29/01/2001, se establece que donde dice "MINISTERIO DE ECONOMIA
Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS" debe entenderse "JEFATURA DE
GABINETE DE MINISTROS")
El secreto establecido en el presente artículo no regirá:
a) Para el supuesto que, por desconocerse el domicilio del responsable,
sea necesario recurrir a la notificación por edictos.
b) Para los Organismos recaudadores nacionales, provinciales o
municipales siempre que las informaciones respectivas estén
directamente vinculadas con la aplicación, percepción y fiscalización de
los gravámenes de sus respectivas jurisdicciones.
c) Para personas o empresas o entidades a quienes la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS encomiende la
realización de tareas administrativas, relevamientos de estadísticas,
computación, procesamiento de información, confección de padrones y
otras para el cumplimiento de sus fines. En estos casos regirán las
disposiciones de los TRES (3) primeros párrafos del presente artículo, y
en el supuesto que las personas o entes referidos precedentemente o
terceros divulguen, reproduzcan o utilicen la información suministrada u
obtenida con motivo o en ocasión de la tarea encomendada por el
Organismo, serán pasibles de la pena prevista por el artículo 157 del
Código Penal.
d) Para los casos de remisión de información al exterior en el marco de
los Acuerdos de Cooperación Internacional celebrados por la
Administración Federal de Ingresos Públicos con otras Administraciones
Tributarias del exterior, a condición de que la respectiva Administración
del exterior se comprometa a:
1. Tratar a la información suministrada como secreta, en iguales
condiciones que la información obtenida sobre la base de su legislación
interna;
2. Entregar la información suministrada solamente a personal o
autoridades (incluso a tribunales y órganos administrativos), encargados
de la gestión o recaudación de los tributos, de los procedimientos
declarativos o ejecutivos relativos a los tributos o, la resolución de los
recursos con relación a los mismos; y
3. Utilizar las informaciones suministradas solamente para los fines
indicados en los apartados anteriores, pudiendo revelar estas
informaciones en las audiencias públicas de los tribunales o en las
sentencias judiciales.(Inciso d) incorporado por art. 1°, punto XXV de
la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su
publicación en el Boletín Oficial.)
La DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA dependiente de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS estará
obligada a suministrar, o a requerir si careciera de la misma, la
información financiera o bursátil que le solicitaran, en cumplimiento de las

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funciones legales, la DIRECCION GENERAL DE ADUANAS dependiente
de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, la
Comisión Nacional de Valores y el Banco Central de la República
Argentina, sin que pueda alegarse respecto de ello el secreto establecido
en el Título V de la Ley Nº 21.526 y en los artículos 8º, 46 y 48 de la Ley
Nº 17.811, sus modificatorias u otras normas legales pertinentes.
ARTICULO 102 — El PODER EJECUTIVO NACIONAL podrá disponer
con alcance general y bajo las formas y requisitos que establezca la
reglamentación, que los Organismos recaudadores de los impuestos a las
ganancias, sobre los activos, sobre los bienes personales no
incorporados al proceso económico y al valor agregado, así como de los
aportes y contribuciones al sistema nacional de seguridad social,
publiquen periódicamente la nómina de los responsables de los mismos,
indicando en cada caso los conceptos e ingresos que hubieran satisfecho
respecto de las obligaciones vencidas con posterioridad al 1º de enero de
1991.
A los fines de dicha publicación, no será de aplicación el secreto fiscal
previsto en el artículo 101.
Requisitos para las transferencias de bienes
ARTICULO 103 — Las personas físicas y jurídicas y las sucesiones
indivisas deberán declarar a la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS los bienes muebles e inmuebles registrables, de
los cuales sean titulares de dominio.
Sin perjuicio de lo establecido en el párrafo anterior, los Organismos que
tengan a su cargo el registro de la propiedad de bienes muebles e
inmuebles, no inscribirán las transferencias de dominio de los mismos ni
la constitución de derechos reales sobre dichos bienes o sus
cancelaciones o modificaciones totales o parciales, cuando en las
respectivas escrituras o instrumentos no constara la presentación de un
certificado otorgado por la ADMINISTRACION FEDERAL que acredite
que los referidos bienes han sido debidamente declarados ante la misma
por el transferente.
Igual recaudo deberá observarse cuando la inscripción se realice por
orden judicial.
La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS
reglamentará la forma, plazo, requisitos y demás condiciones relativas al
cumplimiento de lo dispuesto en el presente artículo y fijará las
excepciones que corresponda introducir para no obstruir las operaciones
aludidas o en atención a las particularidades que el caso ofrezca.
Acreditación de Cumplimiento Fiscal.
ARTICULO 104 — Las personas físicas y sucesiones indivisas -mientras
no exista declaratoria de herederos o testamento declarado válido que
cumpla la misma finalidad- en oportunidad de encontrarse en las
situaciones o de realizar los hechos y actos, que al efecto determine el
PODER EJECUTIVO NACIONAL, deberán acreditar el cumplimiento de
sus obligaciones respecto de tributos cuya percepción esté a cargo de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, en los plazos,
forma y condiciones que establezca dicho Organismo.
Igual obligación a la establecida en el párrafo anterior deberá ser
cumplida con relación a los mutuos hipotecarios, cuando el acreedor —

61
sea éste persona física o jurídica, excepto las entidades financieras
comprendidas en la ley 21.526 y sus modificatorias— promueva la
ejecución hipotecaria. Dicha obligación se formalizará en ocasión de
entablar la demanda, mediante el certificado extendido por la
Administración Federal de Ingresos Públicos. (Párrafo incorporado por
art. 1°, punto XXVI de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a
partir del día de su publicación en el Boletín Oficial, siendo también de
aplicación la modificación dispuesta en el Punto de referencia para
aquellas ejecuciones hipotecarias que se encuentren en trámite a la
citada fecha, cualquiera sea el estado del proceso.)
La Administración Federal de Ingresos Públicos instrumentará un régimen
de retención, aplicable sobre el capital objeto de la demanda, cuando el
acreedor omita cumplir con la obligación dispuesta en el párrafo anterior,
debiendo efectuarse la retención en oportunidad de aprobarse la
correspondiente liquidación. (Párrafo incorporado por art. 1°, punto XXVI
de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003. Vigencia: a partir del día de su
publicación en el Boletín Oficial, siendo también de aplicación la
modificación dispuesta en el Punto de referencia para aquellas
ejecuciones hipotecarias que se encuentren en trámite a la citada fecha,
cualquiera sea el estado del proceso.)
Deberes de Entidades, de Funcionarios Públicos y de Beneficiarios
de Franquicias Tributarias
ARTICULO 105 — La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS propondrá al PODER EJECUTIVO NACIONAL las medidas
que deberán adoptar las entidades públicas y privadas para facilitar y
garantizar la mejor percepción de los gravámenes regidos por esta ley, y,
en especial, las que tiendan a evitar que las personas que no tengan
domicilio en el país se ausenten del mismo sin haber abonado los
impuestos correspondientes.
En caso de franquicias tributarias, los beneficiarios que establezca el
decreto reglamentario deberán informar de la manera que disponga la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS sobre la
materia y el tributo exento. El incumplimiento de esta obligación
significará la caducidad de aquellos beneficios sin perjuicio de las
sanciones que pudieran corresponder por aplicación del artículo 39.
Facúltase a la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS
para implantar un régimen de identificación de responsables del pago de
gravámenes cuya aplicación, percepción y fiscalización se encuentren a
su cargo, mediante el otorgamiento de una cédula o credencial que
cumpla esa finalidad.
La cédula o credencial será obligatoria para quienes ejerzan actividades
sujetas a los gravámenes mencionados en el párrafo anterior en los
casos, forma y condiciones que determine la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.
Los Organismos de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial nacionales,
provinciales y municipales y sus dependencias, no darán curso a ningún
trámite que resulte de interés para los solicitantes, si los obligados no
exhiben, de corresponder como consecuencia de lo dispuesto en el
párrafo anterior, la correspondiente cédula o credencial. Tales

62
Organismos deberán asimismo prestar obligatoriamente la colaboración
que se les requiera a los fines de su aplicación.
ARTICULO 106 — Las exenciones o desgravaciones totales o parciales
de tributos, otorgadas o que se otorguen, no producirán efectos en la
medida en que pudiera resultar una transferencia de ingresos a fiscos
extranjeros, sin perjuicio de lo que al respecto establezcan expresamente
las leyes de los distintos gravámenes.
Lo dispuesto en el párrafo anterior no será de aplicación cuando afecte
acuerdos internacionales suscriptos por la Nación en materia de doble
imposición.
ARTICULO 107 — Los organismos y entes estatales y privados, incluidos
bancos, bolsas y mercados, tienen la obligación de suministrar a la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS a pedido de
los jueces administrativos a que se refieren los artículos 9º, punto 1,
inciso b) y 10 del Decreto Nº 618/97, todas las informaciones que se les
soliciten para facilitar la determinación y percepción de los gravámenes a
su cargo.
Las solicitudes de informes sobre personas —físicas o jurídicas— y sobre
documentos, actos, bienes o derechos registrados; la anotación y
levantamiento de medidas cautelares y las órdenes de transferencia de
fondos que tengan como destinatarios a registros públicos, instituciones
financieras y terceros detentadores, requeridos o decretados por la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS y los jueces
competentes, podrán efectivizarse a través de sistemas y medios
comunicación informáticos, en la forma y condiciones que determine la
reglamentación. Esta disposición prevalecerá sobre las normas legales o
reglamentarias específicas de cualquier naturaleza o materia, que
impongan formas o solemnidades distintas para la toma de razón de
dichas solicitudes, medidas cautelares y órdenes. (Párrafo incorporado
por Título XV art. 18 inciso 11) de la Ley Nº 25.239 B.O. 31/12/1999)
La información solicitada no podrá denegarse invocando lo dispuesto en
las leyes, cartas orgánicas o reglamentaciones que hayan determinado la
creación o rijan el funcionamiento de los referidos Organismos y entes
estatales o privados.
Los funcionarios públicos tienen la obligación de facilitar la colaboración
que con el mismo objeto se les solicite, y la de denunciar las infracciones
que lleguen a su conocimiento en el ejercicio de sus funciones bajo pena
de las sanciones que pudieren corresponder.
Cargas Públicas
ARTICULO 108 — Las designaciones con carácter de carga pública
deberán recaer siempre en personas residentes en el lugar donde deban
desempeñar sus funciones, sin que pueda obligárselas a efectuar viajes o
cambios de domicilio, por razón del desempeño de las mismas.
Estas cargas públicas podrán renunciarse únicamente por causas
justificadas.
Exención del Sellado
ARTICULO 109 — Quedan exentas del sellado de ley todas las
actuaciones y solicitudes de inscripción, de aclaración, consultas sobre su
situación, pedidos de instrucciones para la liquidación y pago, como
asimismo los pedidos de acreditación, compensación y devolución de

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impuestos que formulen los contribuyentes y agentes de retención o sus
representantes. Las reclamaciones contra pagos y los recursos
administrativos contra la determinación de la materia imponible, contra el
impuesto aplicado y contra las multas quedan igualmente exentas.
Conversión
ARTICULO 110 — A los efectos de la liquidación de los tributos, las
operaciones y réditos no monetarios serán convertidos a su equivalente
en moneda de curso legal. Las operaciones y réditos en moneda
extranjera serán convertidas al equivalente en moneda de curso legal
resultante de la efectiva negociación o conversión de aquélla o, en
defecto de éstas, al equivalente al que, en atención a las circunstancias
del caso, se hubiera negociado o convertido dicha moneda extranjera.
Embargo Preventivo
ARTICULO 111 — En cualquier momento la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrá solicitar embargo
preventivo, o en su defecto, inhibición general de bienes por la cantidad
que presumiblemente adeuden los contribuyentes o responsables o
quienes puedan resultar deudores solidarios y los jueces deberán
decretarlo en el término de veinticuatro (24) horas, ante el solo pedido del
fisco y bajo la responsabilidad de éste.
Este embargo podrá ser sustituido por garantía real suficiente, y caducará
si dentro del término de trescientos (300) días hábiles judiciales contados
a partir de la traba de cada medida precautoria, en forma independiente,
la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS no iniciare
el correspondiente juicio de ejecución fiscal.
El término fijado para la caducidad de dicho embargo se suspenderá, en
los casos de apelaciones o recursos deducidos ante el TRIBUNAL
FISCAL DE LA NACION, desde la fecha de interposición del recurso y
hasta TREINTA (30) días después de quedar firme la sentencia del
TRIBUNAL FISCAL.
Régimen Aplicable a los Distintos Gravámenes
ARTICULO 112 — Sin perjuicio de los preceptos contenidos en las leyes
que establecen los gravámenes, las disposiciones de esta ley que no
sean de aplicación exclusiva para determinado tributo rigen con relación
al Impuesto a los Réditos; Impuesto a las Ganancias; Impuesto a las
Ventas; Impuesto al Valor Agregado; Contribución de mejoras establecida
por el artículo 19 de la Ley Nº 14.385; Impuesto a las Apuestas en los
Hipódromos de Carreras; Impuesto a los Combustibles Líquidos
derivados de la destilación del petróleo; Impuesto para Educación
Técnica; Recargo sobre petróleo crudo elaborado en el país; Impuesto a
las Ganancias Eventuales; Impuestos Internos a los Tabacos, Alcoholes,
Bebidas alcohólicas, Combustibles y aceites lubricantes y Vinos,
Cubiertas y llantas macizas de goma, a los Artículos de tocador, Objetos
suntuarios, Seguros, Bebidas gasificadas, Refrescos, Jarabes, Extractos
y concentrados, y otros bienes; Impuesto sustitutivo del Gravamen a la
Transmisión Gratuita de Bienes; Impuesto especial sobre el precio básico
de cada localidad o entrada a salas cinematográficas; Impuesto a los
Avisos Comerciales Transmitidos por Radio y Televisión; Impuesto a los
Ingresos Brutos por Explotación del Servicio de Radiodifusión y/o
Televisión; Impuesto Especial establecido por el artículo 56, inciso c) de

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la Ley Nº 17.319; Gravamen a las utilidades provenientes de
exportaciones agrícolas; Impuesto a la Venta de Valores Mobiliarios;
Impuesto Adicional al Impuesto Interno a la Nafta; Gravámenes a la
producción sobre la venta de cereales, semillas oleaginosas y lanas;
Gravamen nacional de emergencia al parque automotor; Impuesto a los
Incrementos Patrimoniales no Justificados; Impuesto a los Beneficios de
Carácter Eventual; Impuesto a los Capitales; Impuesto a los Patrimonios;
Impuesto a las Transferencias de Dominio a Título Oneroso de Acciones,
Títulos, Debentures y demás Títulos Valores; Impuesto a los Beneficiarios
de Créditos Otorgados por el Sistema Financiero Nacional y Gravamen
extraordinario a la posesión de divisas. La aplicación de los Impuestos de
Sellos, Derechos de inspección de sociedades anónimas, Arancel
consular, Canon minero y Contribución sobre petróleo crudo y gas, se
regirá por las leyes respectivas. Con relación a tales impuestos, el
Administrador Federal de Ingresos Públicos ejercerá en lo pertinente las
funciones que le confieren los artículos 7º, 8º y 9º, punto 1, incisos a) y b),
del Decreto Nº 618/97. Serán de aplicación con relación a los
mencionados impuestos, las facultades de verificación que se establecen
en esta ley. La aplicación del sobreprecio a los combustibles se regirá por
la presente ley, facultándose al PODER EJECUTIVO NACIONAL para
establecer las excepciones, aclaraciones o modificaciones que considere
convenientes para adaptar a las características de dicho gravamen el
régimen de esta ley.
ARTICULO 113 — El PODER EJECUTIVO NACIONAL queda facultado
para disponer por el término que considere conveniente, con carácter
general o para determinadas zonas o radios, la reducción parcial de la
actualización prevista en los artículos 129 y siguientes, la exención total o
parcial de multas, accesorios por mora, intereses punitorios y cualquier
otra sanción por infracciones relacionadas con todos o cualquiera de los
gravámenes cuya aplicación, percepción y fiscalización están a cargo de
la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, a los
contribuyentes o responsables que regularicen espontáneamente su
situación dando cumplimiento a las obligaciones omitidas y denunciando
en su caso, la posesión o tenencia de efectos en contravención, siempre
que su presentación no se produzca a raíz de una inspección iniciada,
observación de parte de la repartición fiscalizadora o denuncia
presentada, que se vincule directa o indirectamente con el responsable.
Facúltase igualmente al PODER EJECUTIVO NACIONAL para poder
acordar bonificaciones especiales para estimular el ingreso anticipado de
impuestos no vencidos y para hacer arreglos con el fin de asegurar la
cancelación de las deudas fiscales pendientes, así como también para
acordar la cesión total o parcial de los derechos sobre la cartera de
créditos fiscales provenientes de diferimientos promocionales de
impuestos. Todos estos actos deberán publicarse en el Boletín Oficial.
Anualmente se dará cuenta al Honorable Congreso DE LA NACION del
uso de las presentes atribuciones.
Artículo ...: Con excepción de lo indicado en el primer párrafo del artículo
precedente, el Poder Ejecutivo Nacional no podrá establecer regímenes
de regularización de deudas tributarias que impliquen la eximición total o
parcial del capital, intereses, multas y cualquier otra sanción por

65
infracciones relacionadas con los gravámenes cuya aplicación,
percepción y fiscalización se encuentre a cargo de la Administración
Federal de Ingresos Públicos, entidad autárquica en el ámbito del
Ministerio de Economía.
(Artículo agregado a continuación del art. 113, incorporado por art. 1° de
la Ley N° 25.678 B.O. 10/12/2002. Vigencia: a partir del día siguiente al
de su publicación en el Boletín Oficial y regirán para los regímenes de
regularización de deudas tributarias que se dicten a partir de la citada
fecha.).
ARTICULO 114 — Facúltase al PODER EJECUTIVO NACIONAL a
establecer procedimientos tendientes a incentivar y promover la
colaboración directa o indirecta del público en general, para lograr el
cumplimiento de los deberes formales a cargo de los distintos
responsables en materia tributaria.
Los citados procedimientos podrán consistir tanto en el otorgamiento de
premios en dinero o en especie a través de sorteos o concursos
organizados a tales fines, como en la retribución a las personas físicas o
jurídicas sin fines de lucro que aporten facturas o documentos
equivalentes emitidos de acuerdo con las condiciones establecidas por la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, que
respalden operaciones de compraventa de cosas muebles y locaciones y
prestaciones de cosas, obras y/o servicios.
ARTICULO 115 — En los casos en que ello resulte pertinente, el PODER
EJECUTIVO NACIONAL podrá disponer la aplicación provisoria de los
convenios firmados con otros países a fin de evitar los efectos de la doble
imposición internacional, hasta que los mismos entren en vigor.
A tales efectos queda facultado para disponer los alcances y efectos de
dicha aplicación frente a las disposiciones relativas a garantías,
actualización, intereses y repetición de impuestos previstos por esta ley.
ARTICULO 116 — En todo lo no previsto en este Título serán de
aplicación supletoria la legislación que regula los Procedimientos
Administrativos y el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación y, en
su caso, el Código Procesal Penal de la Nación.
CAPITULO XIII REGIMEN ESPECIAL DE FISCALIZACION.
PRESUNCION DE EXACTITUD
ARTICULO 117 — Para los contribuyentes y responsables cuyos
ingresos o patrimonio no superen las cifras que establece el artículo 127,
el PODER EJECUTIVO NACIONAL podrá disponer, con carácter general
y por el tiempo, impuestos y zonas geográficas que estime conveniente,
que la fiscalización a cargo de la DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA
dependiente de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS se limite al último período anual por el cual se hubieran
presentado declaraciones juradas o practicado liquidaciones con arreglo a
lo dispuesto en el artículo 11, último párrafo.
En caso de tributos que no se liquiden anualmente, la fiscalización deberá
abarcar los períodos vencidos durante el transcurso de los últimos doce
(12) meses calendarios anteriores a la misma.
La facultad establecida en los párrafos anteriores se extiende al caso de
los agentes de retención o percepción de impuestos que hubieran omitido
actuar como tales.

66
ARTICULO 118 — Hasta que la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS proceda a impugnar las declaraciones juradas
mencionadas en el artículo 117 y practique la determinación prevista en el
artículo 17 y siguientes, se presumirá, sin admitir prueba en contrario, la
exactitud de las declaraciones juradas presentadas por el resto de los
períodos anteriores no prescriptos.
La presunción que establece este artículo no se aplicará respecto de las
declaraciones juradas, originales o rectificativas, presentadas luego de
iniciada la inspección, ni aun de las que lo hubieran sido antes de ella, si
concurrieran las circunstancias indicadas en el primer párrafo, última
parte, del artículo 113.
Tampoco impedirá que la auditoría pueda extenderse a períodos
anteriores a fin de comprobar hechos o situaciones con posible
proyección o incidencia sobre los resultados del período o períodos
fiscalizados o bien para prevenir los supuestos indicados en los artículos
119, apartado 2 y 120, último párrafo.
La presunción a que se refiere el párrafo primero no regirá respecto de
los períodos fiscales vencidos y no prescriptos beneficiados por ella en
virtud de una fiscalización anterior, cuando una fiscalización ulterior sobre
períodos vencidos con posterioridad a la realización de la primera,
demostrare la inexactitud de los resultados declarados en relación a
cualquiera de estos últimos. En este caso se aplicarán las previsiones del
artículo 119.
ARTICULO 119 — Si de la impugnación y determinación de oficio
indicada en el artículo 118 resultare el incremento de la base imponible o
de los saldos de impuestos a favor de la ADMINISTRACION FEDERAL
DE INGRESOS PUBLICOS o, en su caso, se redujeran los quebrantos
impositivos o saldos a favor de los responsables, el Organismo podrá
optar por alguna de las siguientes alternativas:
a) Extender la fiscalización a los períodos no prescriptos y determinar de
oficio la materia imponible y liquidar el impuesto correspondiente a cada
uno.
b) Hacer valer, cuando correspondiere, la presunción de derecho prevista
en el artículo 120 y siguientes.
Una vez que la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS hubiera optado por alguna de las alternativas referidas,
deberá atenerse a la misma respecto a todos los demás períodos
fiscalizables.
No será necesaria la determinación de oficio a que se refiere el primer
párrafo si los responsables presentaren declaraciones juradas
rectificativas que satisfagan la pretensión fiscal.
Dicha pretensión se considerará satisfecha si tales declaraciones juradas
rectificativas no fueran impugnadas dentro de los sesenta (60) días
corridos contados desde su presentación.
ARTICULO 120 — Si de acuerdo con lo establecido en el artículo 119 la
impugnación y determinación de oficio se hubieran efectuado
directamente y por conocimiento cierto de la materia imponible o de los
quebrantos impositivos o saldos de impuestos a favor de los
responsables, se presumirá admitiendo prueba en contrario, que las
declaraciones juradas presentadas por el resto de los períodos no

67
prescriptos adolecen de inexactitudes equivalentes, en cada uno de ellos,
al mismo porcentaje que surja de relacionar los importes declarados y
ajustados a favor de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS en el período base fiscalizado, salvo que en posteriores
fiscalizaciones se determine un porcentaje superior para los mismos
períodos no prescriptos a los cuales se aplicó la presunción.
Cuando se trate de períodos de liquidación no anuales, el porcentaje a
que se refiere el párrafo anterior resultará de considerar el conjunto de
declaraciones juradas presentadas y de promediar los ajustes surgidos a
favor o en contra del responsable a moneda del último de los períodos
considerados. La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS establecerá la metodología de actualización respectiva.
En ningún caso se admitirá como justificación que las inexactitudes
verificadas en el período tomado como base de la fiscalización puedan
obedecer a causas imputables a ejercicios fiscales anteriores.
La presunción del párrafo primero no se aplicará en la medida que las
impugnaciones tuvieran origen en cuestiones de mera interpretación
legal.
ARTICULO 121 — Los porcentajes indicados en el artículo 120 se
aplicarán respecto de cada uno de los períodos no prescriptos para
incrementar la base imponible o para reducir los quebrantos o saldos a
favor del responsable.
El cálculo de la rectificación se iniciará por el período no prescripto más
antiguo respecto del cual se hubieren presentado declaraciones juradas y
los resultados acumulados que se establezcan a partir del mismo, se
trasladarán a los períodos posteriores como paso previo a la aplicación
de los porcentajes aludidos al caso de estos últimos.
ARTICULO 122 — En el caso de que las rectificaciones practicadas en
relación al período o períodos a que alude el artículo 117 hubieran sido
en parte sobre base cierta y en parte por estimación, el Organismo podrá
hacer valer la presunción del artículo 120, únicamente en la medida del
porcentaje atribuible a la primera. En lo demás regirá la limitación
indicada en el párrafo siguiente.
Si los ajustes efectuados en el período base fueran exclusivamente
estimativos, la DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrá
impugnar las declaraciones juradas y determinar la materia imponible o
los saldos de impuestos correspondientes a los restantes períodos no
prescriptos sólo en función de las comprobaciones efectivas a que arribe
la fiscalización en el caso particular de cada uno de ellos.
ARTICULO 123 — Los saldos de impuestos determinados con arreglo a
la presunción de derecho de los artículos 120 y 122 serán actualizables y
devengarán los intereses resarcitorios y punitorios de la presente ley,
pero no darán lugar a la aplicación de las multas de los artículos 39, 45 y
46.
Cuando corresponda ejercer las facultades del artículo 31, la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrá tomar
en consideración tales resultados para fijar el importe de los pagos
provisorios a que se refiere dicho artículo, indistintamente de que se trate

68
de períodos anteriores o posteriores al que se hubiera tomado como base
de la fiscalización.
ARTICULO 124 — La determinación administrativa del período base y la
de los demás períodos no prescriptos susceptibles de la presunción del
artículo 120 sólo se podrá modificar en contra del contribuyente cuando
se den algunas de las circunstancias previstas en el segundo párrafo del
artículo 19.
Corresponderá igualmente dicha modificación si en relación a un período
fiscal posterior sobreviniera una nueva determinación administrativa sobre
base cierta y por conocimiento directo de la materia imponible, en cuyo
caso la presunción del artículo 120 citado se aplicará a los períodos
fiscales no prescriptos con exclusión del período base de la fiscalización
anterior y aun cuando incluyan períodos objeto de una anterior
determinación presuntiva.
ARTICULO 125 — Las presunciones establecidas en los artículos 118 y
120 regirán respecto de los responsables de los impuestos a las
ganancias, sobre los activos, al valor agregado e internos.
Servirán como base para la aplicación de las mismas las declaraciones
juradas y determinaciones efectuadas a partir de los sesenta (60) días
corridos desde la publicación de la presente en el Boletín Oficial, en tanto
que correspondan a períodos fiscales anuales cuyo vencimiento general
hubiera operado con posterioridad al 1º de enero de 1991.
Si no se tratara de impuestos anuales, la presunción del artículo 120
quedará habilitada con la impugnación de la última declaración jurada o
determinación de oficio que reúna las condiciones indicadas en el primer
párrafo de dicho artículo, pero solo se hará efectiva bajo la condición y en
la medida que resulten de la fiscalización de los períodos a que alude el
segundo párrafo del artículo 117.
ARTICULO 126 — Una vez formalizada la impugnación de las
declaraciones juradas o determinaciones indicadas en el segundo y tercer
párrafo del artículo anterior, la presunción del artículo 120 se aplicará a
los resultados de todos los períodos no prescriptos a ese momento, aun
cuando su vencimiento general hubiera operado con anterioridad a la
vigencia de dicha norma.
La aplicación de la presunción referida podrá efectuarse, a opción de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, en forma
simultánea con el acto administrativo por el cual se determine el impuesto
del período fiscal que hubiere servido como base o dentro de los noventa
(90) días corridos siguientes.
ARTICULO 127 — A los fines dispuestos en el artículo 117, fíjase en diez
millones DE pesos ($ 10.000.000) el monto de ingresos anuales y en
cinco millones DE pesos ($ 5.000.000) el monto del patrimonio. Dichas
cifras se considerarán fijadas al 31 de diciembre de 1990 y se ajustarán
para el futuro conforme la variación en el índice de precios mayoristas
nivel general. Los ingresos y patrimonio se ajustarán igualmente a
moneda uniforme según el mencionado índice tomando en consideración
los montos correspondientes al último ejercicio económico actualizados a
la fecha en que se realice la comparación.
CAPITULO XIV CUENTA DE JERARQUIZACION

69
ARTICULO 128 — Créase la Cuenta "Administración Federal de Ingresos
Públicos - Cuenta de Jerarquización", la que se acreditará con hasta el
CERO SESENTA CENTESIMOS POR CIENTO (0,60%) del importe de la
recaudación bruta total de los gravámenes y de los recursos de la
seguridad social cuya aplicación, recaudación, fiscalización o ejecución
judicial se encuentra a cargo del citado organismo y se debitará por las
sumas que se destinen a dicha cuenta.
Déjase establecido que el porcentaje de la Cuenta de Jerarquización a
que alude el párrafo anterior, incluye los importes de las contribuciones
patronales.
La TESORERIA GENERAL DE LA NACION, dependiente de la
SUBSECRETARIA DE PRESUPUESTO de la SECRETARIA DE
HACIENDA del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS
PUBLICOS, depositará mensualmente el importe establecido en una
cuenta a disposición de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS.
La Cuenta de Jerarquización se distribuirá entre el personal de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, de acuerdo a
las pautas que establecerá el PODER EJECUTIVO NACIONAL, previa
intervención de la COMISION TECNICA ASESORA DE POLITICA
SALARIAL DEL SECTOR PUBLICO, conforme a un sistema que
considere la situación de revista, el rendimiento y la eficiencia de cada
uno de los agentes.
Lo dispuesto en los párrafos anteriores entrará a regir al sexto mes
siguiente de dictadas las pautas por el PODER EJECUTIVO NACIONAL.
Mientras tanto, la acreditación y distribución de las cuentas de
jerarquización de los Organismos que se disuelven de acuerdo al artículo
1º del Decreto Nº 618/97, continuarán efectuándose de conformidad con
los regímenes establecidos por los artículos 77 y 78 de la Ley Nº 23.760.
Durante el período referido en el párrafo anterior, delégase en el
MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS,
previa intervención de la COMISION TECNICA ASESORA DE POLITICA
SALARIAL DEL SECTOR PUBLICO, la facultad de dictar un régimen de
transición para el personal de cada organismo disuelto, modificando al
efecto las reglamentaciones vigentes. (Nota Infoleg: Por art. 3º
del Decreto Nº 90/2001B.O. 29/01/2001, se establece que donde dice
"MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS"
debe entenderse "JEFATURA DE GABINETE DE MINISTROS")
CAPITULO XV REGIMEN DE ACTUALIZACION
ARTICULO129 — Establécese un régimen de actualización de los
créditos a favor del Estado, administración central o descentralizada, y de
los créditos a favor de los particulares, emergentes de impuestos, tasas,
contribuciones y multas, en la forma y condiciones que se indican en los
artículos siguientes.
En lo que hace a su competencia y en todo lo no especificado, en
especial lo referente a plazos, cómputo e índices aplicables, se estará a
lo que disponga la SECRETARIA DE HACIENDA dependiente del
MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS.
A los efectos indicados en el párrafo anterior, el importe en concepto de
actualización más los intereses resarcitorios no podrá exceder del que

70
resulte de aplicar al monto adeudado el doble de la tasa de interés activa
de cartera general utilizada por el BANCO DE LA NACION ARGENTINA
en sus operaciones de crédito, sin perjuicio de la aplicación de los
intereses punitorios en los casos en que proceda.
El monto por actualización de los créditos que resulte de la diferencia
entre su valor actualizado y su valor original, participará de la misma
naturaleza del crédito a que corresponda.
Créditos sujetos a actualización
ARTICULO 130 — Estarán sujetos a actualización:
a) Los impuestos, tasas y contribuciones regidos por la presente ley.
b) Los impuestos, tasas y contribuciones nacionales regidos por otras
leyes.
c) Los impuestos, tasas y contribuciones, inclusive municipales, de
aplicación en jurisdicción nacional.
d) Los anticipos, pagos a cuenta, retenciones y percepciones,
correspondientes a los citados tributos.
e) Las multas aplicadas con motivo de los mencionados tributos.
f) Los montos por dichos tributos que los particulares repitieren,
solicitaren devolución o compensaren.
El régimen de actualización será de aplicación general y obligatoria,
sustituyendo los regímenes propios que, en su caso, pudiesen existir para
algunos de los tributos mencionados precedentemente, y sin perjuicio de
la aplicabilidad adicional de los intereses o recargos por mora, intereses
punitorios, demás accesorios y multa que aquéllos prevean.
Plazo de actualización
ARTICULO 131 — Cuando los impuestos, tasas, contribuciones, sus
anticipos, pagos a cuenta, retenciones o percepciones y multas, se
ingresen con posterioridad a la fecha fijada por los respectivos
vencimientos, la deuda resultante se actualizará por el lapso transcurrido
desde dicha fecha y hasta aquella en que se efectuare el pago.
De recurrirse al cobro judicial, la deuda reclamada se actualizará de
acuerdo con este régimen, sin necesidad de liquidación e intimación
previa por parte de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, siendo suficiente la reserva formulada en el título ejecutivo.
Multas actualizables
ARTICULO 132 — Las multas actualizables serán aquellas que hayan
quedado firmes y correspondan a infracciones cometidas con
posterioridad al 7 de abril de 1976.
En los casos de multas que hubieran sido recurridas y quedara firme la
sanción, corresponderá su actualización en los términos del artículo 131,
considerando como vencimiento el fijado en la resolución administrativa
que la hubiera aplicado.
Ese modo de cómputo del período sujeto a actualización será aplicable
aún cuando la apelación de la multa integrara la del impuesto respectivo y
en la proporción en que éste fuera confirmado.
Pago de la actualización
ARTICULO 133 — La obligación de abonar el importe correspondiente
por actualización surgirá automáticamente y sin necesidad de
interpelación alguna por parte del ente acreedor. Esta obligación
subsistirá no obstante la falta de reserva por parte de aquél al recibir el

71
pago de la deuda por los tributos o sanciones y mientras no se haya
operado la prescripción para el cobro de ellos. En los casos en que se
abonaren los tributos o sanciones sin la actualización y/o intereses
correspondientes, los montos respectivos estarán también sujetos a la
aplicación del presente régimen desde ese momento, en la forma y
plazos previstos para los tributos.
ARTICULO 134 — El monto de actualización correspondiente a los
anticipos, pagos a cuenta, retenciones y percepciones, no constituye
crédito a favor del contribuyente contra la deuda del tributo al vencimiento
de éste, salvo en los supuestos en que el mismo no fuera adeudado.
Cuando el monto de actualización citado en el párrafo precedente y/o el
de los intereses respectivos no fueran abonados al momento de
ingresarse el tributo, formarán parte del débito fiscal y les será de
aplicación el presente régimen desde ese momento, en la forma y plazos
previstos para el tributo.
ARTICULO 135 — En los casos de pago con prórroga, la actualización
procederá sobre los saldos adeudados, hasta su ingreso total.
ARTICULO 136 — La actualización integrará la base para el cálculo de
las sanciones y accesorios previstos en esta ley o los de carácter
específico establecidos en las leyes de los tributos a los que este régimen
resulta aplicable. Asimismo, la actualización integrará la base del cálculo
para la aplicación de los intereses del artículo 52, cuando ella se
demandare judicialmente.
ARTICULO 137 — Cuando la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS solicitare embargo preventivo por la cantidad que
presumiblemente adeuden los contribuyentes, podrá incluir en dicha
cantidad la actualización presuntiva correspondiente a la misma, sin
perjuicio de la determinación posterior del impuesto y de la actualización
adeudada.
Reclamo administrativo.
ARTICULO 138 — Contra las intimaciones administrativas de ingreso del
monto de actualización, procederá el reclamo administrativo —que se
resolverá sin sustanciación— únicamente en lo que se refiere a aspectos
ligados a la liquidación del mismo.
Cuando dicho reclamo involucrara asimismo aspectos referidos a la
procedencia del gravamen, serán aplicables las disposiciones que rigen
esta última materia inclusive en lo que hace a la correspondiente
actualización.
ARTICULO 139 — Para que proceda la repetición prevista en el artículo
83 deberá haberse satisfecho el importe de la actualización
correspondiente al impuesto que se intente repetir.
ARTICULO 140 — Serán de aplicación a las actualizaciones las normas
de esta ley referidas a aplicación, percepción y fiscalización de los
tributos con las excepciones que se indican en este Capítulo.
Vigencia
ARTICULO 141 — Serán actualizadas en los términos de esta ley las
obligaciones tributarias correspondientes a tributos, anticipos, pagos a
cuenta, retenciones o percepciones, cuyo vencimiento se haya operado
con anterioridad a la publicación de la Ley Nº 21.281, pero solamente
desde esa fecha.

72
Actualización a favor de los contribuyentes
ARTICULO 142 — También serán actualizados los montos por los que
los contribuyentes solicitaren devolución, repetición, pidieren reintegro o
compensación.
Dichos montos se actualizarán desde la fecha de pago o presentación de
la declaración jurada que dio origen al crédito a favor de los
contribuyentes o responsables.
No obstante lo dispuesto en el párrafo anterior, cuando se trate de
compensaciones que operen dentro del mismo impuesto o entre los
impuestos a las ganancias y a los activos, la actualización procederá
desde la fecha en que el saldo acreedor a compensar haya sido
susceptible de ser imputado como pago.
Capítulo XVI REGIMENES DE PROMOCION
ARTICULO 143 — En los regímenes de promoción industriales,
regionales, y sectoriales o de otra clase que conceden beneficios
impositivos de cualquier índole, las respectivas autoridades de aplicación
estarán obligadas a recibir, considerar y resolver en términos de
preferente o urgente despacho según las circunstancias, las denuncias
que formule la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS
ante las mismas y que se refieran al presunto incumplimiento por parte de
los responsables de las cláusulas legales o contractuales de las cuales
dependieren los beneficios aludidos. Transcurrido un plazo de noventa
(90) días sin haberse producido la resolución de la autoridad de
aplicación, la ADMINISTRACION FEDERAL quedará habilitada para
iniciar el procedimiento dispuesto en el párrafo siguiente, sin perjuicio de
observar los recaudos en él establecidos.
Cuando en uso de las facultades que le otorga esta ley la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS compruebe el
incumplimiento de las cláusulas a que se refiere el primer párrafo de este
artículo, podrá considerar a los fines exclusivamente tributarios, como
caducos, total o parcialmente, los beneficios impositivos acordados,
debiendo, en dicho caso, previa vista por QUINCE (15) días al Organismo
de aplicación respectivo, proceder a la determinación y percepción de los
impuestos no ingresados con motivo de la promoción acordada, con más
su actualización e intereses.
Asimismo, deberá intimar a los inversionistas simultáneamente y sin
necesidad de aplicar el procedimiento normado en los artículos 16 y
siguientes, el ingreso de los impuestos diferidos en la empresa cuyos
beneficios se consideran caducos. En caso de incumplimiento la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS deberá
proceder conforme lo establecido por el Capítulo XI de este Título.
La determinación e intimación previstas en el párrafo anterior, en relación
con los incumplimientos que la originan, serán procedentes, aun cuando
subsistan formalmente los actos administrativos mediante los cuales la
autoridad de aplicación haya acordado los beneficios tributarios, y sólo
podrá recurrirse cuando dicha autoridad, en uso de las facultades que le
son propias y mediante resolución debidamente fundada, decidiera
mantener los beneficios promocionales por los períodos a que se refiere
la mencionada determinación. Dicho recurso deberá interponerse,

73
exclusivamente, por la vía establecida en el artículo 81 y las sumas
repetidas se actualizarán desde la fecha en que fueron ingresadas.
TITULO II
CAPITULO I DE LA ORGANIZACION Y COMPETENCIA DE LOS
TRIBUNALES FISCALES Y ACTUACION ANTE ELLOS
ARTICULO 144 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION creado por la
Ley Nº 15.265 entenderá en los recursos que se interpongan con relación
a los tributos y sanciones que aplicare la DIRECCION GENERAL
IMPOSITIVA dependiente de la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS en ejercicio de los poderes fiscales que le
acuerda el Título I de la presente ley y en recurso de amparo establecido
en este Título. Asimismo tendrá la competencia establecida en el artículo
4º del Decreto-Ley Nº 6.692/63 —en la forma y condiciones establecidas
en los artículos 5º a 9º de dicho decreto-ley— en los recursos que se
interpongan con relación a los derechos, gravámenes, accesorios y
sanciones que aplique la DIRECCION GENERAL DE ADUANAS
dependiente de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS en ejercicio de los poderes fiscales que le son propios,
excepto en los que corresponden a las causas de contrabando.
Sede
ARTICULO 145 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION tendrá su sede
en la Capital Federal, pero podrá actuar, constituirse y sesionar en
cualquier lugar de la República:
a) Mediante delegaciones fijas, que el PODER EJECUTIVO NACIONAL
podrá establecer en los lugares del interior del país que se estime
conveniente. (Inciso sustituido por Título XV art. 18 inciso 12) de la Ley Nº
25.239B.O. 31/12/1999)
b) Mediante delegaciones móviles, que funcionen en los lugares del país
y en los períodos del año que establezcan los reglamentos del TRIBUNAL
FISCAL DE LA NACION.
Los jueces del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION podrán establecer su
despacho en cualquier lugar de la República, a los efectos de la
tramitación de las causas que conozcan.
En todas las materias de competencia del TRIBUNAL FISCAL DE LA
NACION, los contribuyentes y responsables podrán optar por deducir los
recursos y demandas en la Capital Federal o ante las delegaciones fijas o
móviles del TRIBUNAL FISCAL, las que tendrán la competencia que
establezca el PODER EJECUTIVO NACIONAL.
Constitución
ARTICULO 146 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION estará
constituido por veintiún (21) Vocales, argentinos, de TREINTA (30) o más
años de edad y con cuatro (4) o más años de ejercicio de la profesión de
abogado o contador, según corresponda.
Se dividirá en siete (7) Salas; de ellas, cuatro (4) tendrán competencia en
materia impositiva, integradas por DOS (2) Abogados y un (1) Contador
Público, y las TRES (3) restantes, serán integradas cada una por TRES
(3) Abogados, con competencia en materia aduanera.
Cada Vocal será asistido en sus funciones por un Secretario con título de
Abogado o Contador.

74
La composición y número de salas y vocales podrán ser modificados por
el PODER EJECUTIVO NACIONAL. (Párrafo sustituido por Título XV art.
18 inciso 13) de la Ley Nº 25.239 B.O. 31/12/1999)
El Presidente del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION será designado de
entre los Vocales por el PODER EJECUTIVO NACIONAL y durará en sus
funciones por el término de TRES (3) años, sin perjuicio de poder ser
designado nuevamente para el cargo. No obstante, continuará en sus
funciones hasta que se produzca su nueva designación, o la de otro de
los Vocales, para el desempeño del cargo. La Vicepresidencia será
desempeñada por el Vocal más antiguo de competencia distinta.
Los miembros desempeñarán sus cargos en el lugar para el que hubieran
sido nombrados, no pudiendo ser trasladados sin su consentimiento.
En los casos de excusación, vacancia, licencia o impedimento de los
miembros de cualquier Sala, serán reemplazados -atendiendo a la
competencia- por Vocales de igual título, según lo que se establezca al
respecto en el reglamento de procedimiento.
Designación
ARTICULO 147 — Los Vocales del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION
serán designados por el PODER EJECUTIVO NACIONAL, previo
concurso de antecedentes que acrediten competencia en cuestiones
impositivas o aduaneras, según el caso.
Remoción
ARTICULO 148 — Los miembros del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION
sólo podrán ser removidos previa decisión de un jurado presidido por el
Procurador del Tesoro de la Nación e integrado por cuatro (4) miembros
abogados y con DIEZ (10) años de ejercicio en la profesión, nombrados
anualmente por el PODER EJECUTIVO NACIONAL a propuesta del
Colegio Público de Abogados de la Capital Federal. La causa se formará
obligatoriamente si existe acusación del PODER EJECUTIVO NACIONAL
o del Presidente del TRIBUNAL FISCAL y sólo por decisión del jurado si
la acusación tuviera cualquier otro origen. El jurado dictará normas de
procedimiento que aseguren el derecho de defensa y el debido trámite de
la causa.
Son causas de remoción: a) mal desempeño de sus funciones; b)
desorden de conducta; c) negligencia reiterada que dilate la sustanciación
de los procesos; d) comisión de delitos cuyas penas afecten su buen
nombre y honor; e) ineptitud; f) violación de las normas sobre
incompatibilidad; g) cuando debiendo excusarse en los casos previstos en
el artículo 150 no lo hubiere hecho.
Las funciones de los miembros del jurado serán "ad-honorem".
Incompatibilidades
ARTICULO 149 — Los miembros del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION
no podrán ejercer el comercio, realizar actividades políticas o cualquier
actividad profesional, salvo que se tratare de la defensa de los intereses
personales, del cónyuge, de los padres o de los hijos, ni desempeñar
empleos públicos o privados, excepto la comisión de estudios o la
docencia. Su retribución y régimen previsional serán iguales a los de los
jueces de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Contencioso
Administrativo Federal de la Capital Federal. A los fines del requisito de la
prestación efectiva de servicios, de manera continua o discontinua, por el

75
término a que se refiere el régimen previsional del Poder Judicial de la
Nación, se computarán también los servicios prestados en otros cargos
en el TRIBUNAL FISCAL y en Organismos nacionales que lleven a cabo
funciones vinculadas con las materias impositivas y aduaneras.
Los Secretarios Generales y los Secretarios Letrados de Vocalía tendrán
las mismas incompatibilidades que las establecidas en el párrafo anterior.
El Presidente del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION gozará de un
suplemento mensual equivalente al veinte por ciento (20%) del total de la
retribución mensual que le corresponda en virtud de lo dispuesto en el
párrafo anterior. Igual suplemento percibirá el Vicepresidente por el
período en que sustituya en sus funciones al Presidente, siempre que el
reemplazo alcance por lo menos a TREINTA (30) días corridos.
Excusación
ARTICULO 150 — Los miembros del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION
no serán recusables, pero deberán excusarse de intervenir en los casos
previstos en el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, supuesto
en el cual serán sustituidos por los miembros restantes en la forma
establecida en el artículo 146 si la excusación fuera aceptada por el
Presidente o el Vicepresidente si se excusara el primero.
Distribución de Expedientes - Plenario
ARTICULO 151 — La distribución de expedientes se realizará mediante
sorteo público, de modo tal que los expedientes sean adjudicados a los
Vocales en un número sucesivamente uniforme; tales Vocales actuarán
como instructores de las causas que les sean adjudicadas.
Cuando el número, similitud y concomitancia de causas a resolver haga
necesario dilucidar cuestiones de derecho comunes a todas ellas, el
TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION con el voto de las DOS TERCERAS
PARTES (2/3), al menos, de los Vocales con competencia impositiva o
aduanera, tendrá facultades de establecer directivas de solución común a
todas ellas definiendo puntualmente las características de la situaciones a
las que serán aplicables. En estos casos la convocatoria a reunión
plenaria será efectuada en la forma prevista por el presente artículo.
Cuando la misma cuestión de derecho haya sido objeto de
pronunciamientos divergentes por parte de diferentes Salas, se fijará la
interpretación de la ley que todas las Salas deberán seguir
uniformemente de manera obligatoria, mediante su reunión en plenario.
Dentro del término de cuarenta (40) días se devolverá la causa a la Sala
en que estuviere radicada para que la sentencie, aplicando la
interpretación sentada en el plenario.
La convocatoria a TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION pleno será
efectuada de oficio o a pedido de cualquier Sala, por el Presidente o el
Vicepresidente del TRIBUNAL FISCAL, según la materia de que se trate.
Cuando la interpretación de que se trate verse sobre disposiciones
legales de aplicación común a las Salas impositivas y aduaneras, el
plenario se integrará con todas las Salas y será presidido por el
Presidente del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION.
Si se tratara de disposiciones de competencia exclusiva de las Salas
impositivas o de las Salas aduaneras, el plenario se integrará
exclusivamente con las Salas competentes en razón de la materia; será
presidido por el Presidente del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION o el

76
Vicepresidente, según el caso, y se constituirá válidamente con la
presencia de los dos tercios (2/3) de los miembros en ejercicio, para fijar
la interpretación legal por mayoría absoluta. El mismo quórum y mayoría
se requerirá para los plenarios conjuntos (impositivos y aduaneros).
Quien presida los plenarios tendrá doble voto en caso de empate.
Cuando alguna de las Salas obligadas a la doctrina sentada en los
plenarios a que se refiere el presente artículo, entienda que en
determinada causa corresponde rever esa jurisprudencia, deberá
convocarse a nuevo plenario, resultando aplicable al respecto lo
establecido precedentemente.
Convocados los plenarios se notificará a las Salas para que suspendan el
pronunciamiento definitivo en las causas en que se debaten las mismas
cuestiones de derecho. Hasta que se fije la correspondiente interpretación
legal, quedarán suspendidos los plazos para dictar sentencia, tanto en el
expediente sometido al acuerdo como en las causas análogas.
Cómputo de Términos
ARTICULO 152 — Todos los términos de este Título serán de días
hábiles y se suspenderán durante el período anual de feria del TRIBUNAL
FISCAL DE LA NACION.
Reglamento
ARTICULO 153 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION dictará reglas
de procedimiento que complementen las disposiciones de esta ley, a fin
de dar al proceso la mayor rapidez y eficacia. Dichas reglas serán
obligatorias para el TRIBUNAL FISCAL y las personas que actúen ante
él, desde su publicación en el Boletín Oficial y podrán ser modificadas
para ajustarlas a las necesidades que la práctica aconseje.
El Presidente del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION podrá dictar
normas complementarias del Reglamento de Procedimientos del Tribunal,
tendientes a uniformar trámites procesales y cuestiones administrativas
cuando no se encuentren previstos en el mismo.
Facultades del Tribunal
ARTICULO 154 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION actuará como
entidad autárquica en el orden administrativo y financiero, en lo que se
refiere a su organización y funcionamiento, según las normas del
presente Capítulo.
ARTICULO 155 — A tales fines, su patrimonio estará constituido por
todos los bienes que le asigne el Estado Nacional y por aquellos que le
sean transmitidos o adquiera por cualquier causa jurídica. Continuará la
gestión del actual Organismo, quedándole afectados íntegramente los
bienes propios o los cedidos en uso, créditos, derechos y obligaciones. El
PODER EJECUTIVO NACIONAL queda facultado para transferir sin
cargo inmuebles que sean necesarios para el funcionamiento del
TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION.
ARTICULO 156 — Los recursos del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION
provendrán de:
a) Los importes que anualmente le asigne la ley de presupuesto de la
Administración Nacional.
b) Los importes que provengan de la aplicación de multas contempladas
en el artículo 162 y en el artículo 1.144 del Código Aduanero.

77
c)Los importes que provengan de la venta de bienes muebles o
inmuebles registrables o no. Dichos importes podrán ser aplicados
exclusivamente a la compra o construcción de otros bienes de tal
naturaleza en forma indistinta.
d) Todo ingreso no contemplado expresamente, pero cuya percepción no
sea incompatible con las facultades otorgadas al Organismo.
El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION tendrá a su cargo la
administración y manejo de los fondos destinados a atender su
presupuesto.
ARTICULO 157 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION tendrá,
además facultades para:
a) Designar a los Secretarios Generales y Secretarios Letrados de
Vocalía.
b) Conceder licencia con goce de sueldo o sin él, en las condiciones que
autoricen las disposiciones administrativas, a los miembros del
TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION.
ARTICULO 158 — El Presidente tendrá las atribuciones y
responsabilidades que se detallan seguidamente:
a) Representar legalmente al TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION,
personalmente o por delegación o mandato, en todos los actos y
contratos que se requieran para el funcionamiento del servicio, de
acuerdo a las disposiciones en vigor, y suscribir los documentos públicos
o privados que sean necesarios.
b) Organizar y reglamentar el funcionamiento interno del TRIBUNAL
FISCAL DE LA NACION en sus aspectos estructurales, funcionales y de
administración de personal, incluyendo el dictado y/o modificación de la
estructura orgánico funcional y el estatuto del personal.
c) Proponer al PODER EJECUTIVO NACIONAL, por intermedio de la
SECRETARIA DE HACIENDA dependiente del MINISTERIO DE
ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS, el escalafón del
personal y su reglamento, incluidos el régimen disciplinario pudiendo
dictar las disposiciones reglamentarias pertinentes.
d) Designar personal con destino a la planta permanente y/o temporaria
así como también, promover, aceptar renuncias, disponer cesantías,
exoneraciones y otras sanciones disciplinarias, con arreglo al régimen
legal vigente y al estatuto que en consecuencia se dicte.
e) Aplicar sanciones disciplinarias a su personal de conformidad con las
normas legales y reglamentarias y determinar los funcionarios con
facultades para hacerlo.
f) Efectuar contrataciones de personal para la realización de trabajos
específicos, estacionales o extraordinarios que no puedan ser realizados
por su planta permanente, fijando las condiciones de trabajo y su
retribución.
g) Suscribir, en representación del PODER EJECUTIVO NACIONAL y
bajo la autorización previa de la SECRETARIA DE HACIENDA
dependiente del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS
PUBLICOS, convenciones colectivas de trabajo con la entidad gremial
que represente al personal, en los términos de la Ley N° 24.185.

78
h) Fijar el horario general y los horarios especiales en que desarrollará su
actividad el Organismo, de acuerdo con las necesidades de la función
específicamente jurisdiccional que el mismo cumple.
i) Elevar anualmente a la SECRETARIA DE HACIENDA dependiente del
MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS el
plan de acción y el anteproyecto de presupuesto de gastos e inversiones
para el ejercicio siguiente.
j) Administrar su presupuesto, resolviendo y aprobando los gastos e
inversiones del Organismo, pudiendo redistribuir los créditos sin alterar el
monto total asignado.
k) Licitar, adjudicar y contratar suministros, adquirir, vender, permutar,
transferir, locar y disponer de toda forma respecto de bienes muebles e
inmuebles para el uso de sus oficinas o del personal, conforme las
necesidades del servicio, aceptar donaciones con o sin cargo.
l) Toda otra atribución compatible con el cargo y necesaria para el
cumplimiento de las funciones del Organismo.
Competencia del Tribunal
ARTICULO 159 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION será
competente para conocer:
a) De los recursos de apelación contra las resoluciones de la AFIP que
determinen tributos y sus accesorios, en forma cierta o presuntiva, o
ajusten quebrantos, por un importe superior a PESOS VEINTICINCO MIL
($ 25.000) o PESOS CINCUENTA MIL ($ 50.000),
respectivamente. (Montos sustituidos por art. 74 de la Ley N° 26.784 B.O.
05/11/2012)
b) De los recursos de apelación contra las resoluciones de la AFIP que,
impongan multas superiores a PESOS VEINTICINCO MIL ($ 25.000) o
sanciones de otro tipo, salvo la de arresto. (Monto sustituido por art. 74 de
laLey N° 26.784 B.O. 05/11/2012)
c) De los recursos de apelación contra las resoluciones denegatorias de
las reclamaciones por repetición de tributos, formuladas ante la AFIP, y
de las demandas por repetición que, por las mismas materias, se
entablen directamente ante el Tribunal Fiscal de la Nación. En todos los
casos siempre que se trate de importes superiores a PESOS
VEINTICINCO MIL ($ 25.000). (Monto sustituido por art. 74 de la Ley N°
26.784 B.O. 05/11/2012)
d) De los recursos por retardo en la resolución de las causas radicadas
ante la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, en los
casos contemplados en el segundo párrafo del art. 81.
e) Del recurso de amparo a que se refieren los arts. 182 y 183.
f) En materia aduanera, el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION será
competente para conocer de los recursos y demandas contra
resoluciones de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS que determinen derechos, gravámenes, recargos y sus
accesorios o ingresos a la renta aduanera a cargo de los particulares y/o
apliquen sanciones —excepto en las causas de contrabando—; del
recurso de amparo de los contribuyentes y terceros y los reclamos y
demandas de repetición de derechos, gravámenes, accesorios y recargos
recaudados por la ADMINISTRACION FEDERAL como también de los
recursos a que ellos den lugar.

79
(Artículo sustituido por Título XV art. 18 inciso 14) de la Ley Nº
25.239 B.O. 31/12/1999)
Personería
ARTICULO 160 — En la instancia ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA
NACION los interesados podrán actuar personalmente, por medio de sus
representantes legales, o por mandatario especial, el que acreditará su
calidad de tal mediante simple autorización certificada por el Secretario
del TRIBUNAL FISCAL o Escribano Público.
Representación y Patrocinio
ARTICULO 161 — La representación y patrocinio ante el TRIBUNAL
FISCAL DE LA NACION se ejercerá por las personas autorizadas para
actuar en causas judiciales.
Tales funciones podrán ser desempeñadas, además, por doctores en
ciencias económicas o contadores públicos, inscriptos en la respectiva
matrícula y por todas aquellas personas que al 30 de diciembre de 1964
estuvieran inscriptas y autorizadas a actuar ante el TRIBUNAL FISCAL
DE LA NACION por haber cumplido los requisitos exigidos por el Decreto
Nº 14.631/60.
Sanciones Procesales
ARTICULO 162 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION y el vocal
interviniente tendrán facultad para aplicar sanciones a las partes y demás
personas vinculadas con el proceso, en caso de desobediencia o cuando
no presten la adecuada colaboración para el rápido y eficaz desarrollo del
proceso. Las sanciones podrán consistir en llamados de atención,
apercibimiento o multas de hasta PESOS VEINTE MIL ($ 20.000) y serán
comunicadas a la entidad que ejerza el poder disciplinario de la profesión
en su caso. (Monto sustituido por art. 75 de la Ley N° 26.784 B.O.
05/11/2012) (Párrafo sustituido por Título XV Art. 18 inciso 15) de la Ley
Nº 25.239 B.O. 31/12/1999)
La resolución firme que imponga esta multa deberá cumplirse dentro del
tercer día, bajo apercibimiento de seguir la vía de ejecución fiscal
establecida en el Código Procesal, Civil y Comercial de la Nación.
Las resoluciones que apliquen las sanciones a que se refiere este
artículo, serán apelables dentro de igual plazo ante la Cámara Nacional
competente pero el recurso se sustanciará dentro del término y forma
previstos para la apelación de la sentencia definitiva.
ARTICULO 163 — El proceso será escrito, sin perjuicio de la facultad de
los Vocales para llamar a audiencia durante el término de prueba cuando
así se estime necesario. En este caso la intervención personal del Vocal o
su Secretario deberá cumplirse bajo pena de nulidad, sin posibilidad de
confirmación. La nulidad podrá ser invocada por cualesquiera de las
partes, en cualquier estado del proceso.
Impulso de Oficio
ARTICULO 164 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION impulsará de
oficio el procedimiento teniendo amplias facultades para establecer la
verdad de los hechos y resolver el caso independientemente de lo
alegado por las partes, salvo que mediare la admisión total o parcial de
una de ellas a la pretensión de la contraria, en cuyo caso, si el
desistimiento o allanamiento fuera aceptado por la contraparte, deberá
dictar sentencia teniendo a la litigante por desistida o allanada según

80
corresponda. Cuando se allanare, el Fisco deberá hacerlo por resolución
fundada.
CAPITULO II DE LAS ACCIONES Y RECURSOS
Del Recurso de Apelación por Determinación de Impuestos,
Quebrantos y Aplicación de Multas
ARTICULO 165 — Serán apelables ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA
NACION las resoluciones de la AFIP que determinen tributos y sus
accesorios en forma cierta o presuntiva o impongan sanción, cuando las
obligaciones de pago excedan la suma que al efecto establece el artículo
159. Si la determinación tributaria y la imposición de sanción se
decidieran conjuntamente, la resolución íntegra podrá apelarse cuando
ambos conceptos en conjunto superen el importe mínimo previsto en el
párrafo anterior, sin perjuicio de que el interesado pueda recurrir sólo por
uno de esos conceptos pero siempre que éste supere dicho importe
mínimo.
Asimismo, serán apelables los ajustes de quebrantos impositivos que
excedan el respectivo importe consignado en el citado artículo 159.
(Artículo sustituido por Título XV art. 18 inciso 16) de la Ley Nº
25.239 B.O. 31/12/1999)
ARTICULO 166 — El recurso se interpondrá por escrito ante el
TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, dentro de los QUINCE (15) días de
notificada la resolución administrativa. Tal circunstancia deberá ser
comunicada por el recurrente a la DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA o
a la DIRECCION GENERAL DE ADUANAS dependiente de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, en su caso,
dentro del mismo plazo y bajo apercibimiento de lo dispuesto en el
artículo 39.
En el recurso el apelante deberá expresar todos sus agravios, oponer
excepciones, ofrecer la prueba y acompañar la instrumental que haga a
su derecho. Salvo en materia de sanciones y sin perjuicio de las
facultades establecidas en los artículos 164 y 177, no se podrá ofrecer la
prueba que no hubiera sido ofrecida en el correspondiente procedimiento
ante la DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA, con excepción de la prueba
sobre hechos nuevos o la necesaria para reputar el resultado de medidas
para mejor proveer dispuestas en sede administrativa.
Los requisitos de forma y condiciones a que deberán ajustarse los actos
precitados serán establecidos en el reglamento del TRIBUNAL FISCAL
DE LA NACION.
(Artículo sustituido por Título XV art. 18 inciso 17) de la Ley Nº
25.239 B.O. 31/12/1999)
ARTICULO 167 — La interposición del recurso no suspenderá la
intimación de pago respectiva, que deberá cumplirse en la forma
establecida por la ley, salvo por la parte apelada.
Intereses
ARTICULO 168 — Cuando el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION
encontrare que la apelación es evidentemente maliciosa, podrá disponer
que sin perjuicio del interés del artículo 37 se liquide otro igual hasta el
momento del fallo, que podrá aumentar en un ciento por ciento (100%).
Traslado del Recurso

81
ARTICULO 169 — Se dará traslado del recurso por TREINTA (30) días a
la apelada para que lo conteste, oponga excepciones, acompañe el
expediente administrativo y ofrezca su prueba.
Si no lo hiciere, de oficio o a petición de parte el vocal instructor hará un
nuevo emplazamiento a la repartición apelada para que lo conteste en el
término de DIEZ (10) días bajo apercibimiento de rebeldía y de
continuarse con la sustanciación de la causa.
El plazo establecido en el primer párrafo sólo será prorrogable por
conformidad de partes manifestada por escrito al Tribunal dentro de ese
plazo y por un término no mayor de TREINTA (30) días.
(Artículo sustituido por Título XV art. 18 inciso 18) de la Ley Nº
25.239 B.O. 31/12/1999)
Rebeldía
ARTICULO 170 — La rebeldía no alterará la secuencia del proceso y si
en algún momento cesare, continuará la sustanciación sin que pueda en
ningún caso retrogradar.
Excepciones
ARTICULO 171 — Producida la contestación de la DIRECCION
GENERAL IMPOSITIVA o de la DIRECCION GENERAL DE ADUANAS
dependientes de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS, en su caso, el Vocal dará traslado por el término de DIEZ
(10) días al apelante, de las excepciones que aquéllas hubieran opuesto
para que las conteste y ofrezca la prueba que haga a las mismas.
Las excepciones que podrán oponer las partes como de previo y especial
pronunciamiento son las siguientes:
a) Incompetencia.
b) Falta de personería.
c) Falta de legitimación en el recurrente o la apelada.
d) Litispendencia.
e) Cosa juzgada.
f) Defecto legal.
g) Prescripción.
h) Nulidad.
Las excepciones que no fueren de previo y especial pronunciamiento se
resolverán con el fondo de la causa. La resolución que así lo disponga
será inapelable.
El Vocal deberá resolver dentro de los DIEZ (10) días sobre la
admisibilidad de las excepciones que se hubieran opuesto, ordenando la
producción de las pruebas que se hubieran ofrecido, en su caso.
Producidas aquéllas, el Vocal interviniente elevará los autos a la Sala.
Causa de Puro Derecho. Autos para Sentencia
ARTICULO 172 — Una vez contestado el recurso y las excepciones, en
su caso, si no existiera prueba a producir, el Vocal elevará los autos a la
Sala.
Apertura a Prueba
ARTICULO 173 — Si no se hubiesen planteado excepciones o una vez
tramitadas las mismas o resuelto su tratamiento con el fondo,
subsistiendo hechos controvertidos, el Vocal resolverá sobre la
pertinencia y admisibilidad de las pruebas, proveyéndolas en su caso y

82
fijando un término que no podrá exceder de sesenta (60) días para su
producción.
A pedido de cualesquiera de las partes, el Vocal podrá ampliar dicho
término por otro período que no podrá exceder de TREINTA (30) días.
Mediando acuerdo de partes la ampliación no podrá exceder del término
de cuarenta y cinco (45) días.
Producción de la Prueba
ARTICULO 174 — Las diligencias de prueba se tramitarán directa y
privadamente entre las partes o sus representantes, y su resultado se
incorporará al proceso.
El Vocal prestará su asistencia para asegurar el efecto indicado,
allanando los inconvenientes que se opongan a la realización de las
diligencias y emplazando a quienes fueran remisos en prestar su
colaboración. El Vocal tendrá a ese efecto, para el caso de juzgarlo
necesario, la facultad que el artículo 35 acuerda a la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS para hacer comparecer a las
personas ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION.
Informes
ARTICULO 175 — Los pedidos de informes a las entidades públicas o
privadas podrán ser requeridos por los representantes de las partes.
Deberán ser contestados por funcionario autorizado, con aclaración de
firma, el que deberá comparecer ante el Vocal si lo considerara
necesario, salvo que designare otro funcionario especialmente autorizado
a tal efecto.
La DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA y la DIRECCION GENERAL DE
ADUANAS dependientes de la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS deberán informar sobre el contenido de
resoluciones o interpretaciones aplicadas en casos similares al que
motiva el informe.
Alegato - Vista de la Causa
ARTICULO 176 — Vencido el término de prueba o diligenciadas las
medidas para mejor proveer que hubiere ordenado o transcurrido ciento
ochenta (180) días del auto que las ordena -prorrogables por una sola vez
por igual plazo- el Vocal Instructor declarará su clausura y elevará de
inmediato los autos a la Sala, la que de inmediato los pondrá a
disposición de las partes para que produzcan sus alegatos, por el término
de DIEZ (10) días o bien —cuando por auto fundado entienda necesario
un debate más amplio— convocará a audiencia para la vista de la causa.
Dicha audiencia deberá realizarse dentro de los veinte (20) días de la
elevatoria de la causa a la sala y sólo podrá suspenderse -por única vez-
por causa del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, que deberá fijar una
nueva fecha de audiencia para dentro de los TREINTA (30) días
posteriores a la primera.
Cuando no debiera producirse prueba, el Vocal elevará de inmediato los
autos a la Sala respectiva.
Medidas para Mejor Proveer
ARTICULO 177 — Hasta el momento de dictar sentencia podrá el
TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION disponer las medidas para mejor
proveer que estime oportunas, incluso medidas periciales por intermedio
de funcionarios que le proporcionarán la ADMINISTRACION FEDERAL

83
DE INGRESOS PUBLICOS o aquellos organismos nacionales
competentes en la materia de que se trate.
Tales funcionarios actuarán bajo la exclusiva dependencia del TRIBUNAL
FISCAL DE LA NACION.
En estos casos, el término para dictar sentencia se ampliará en TREINTA
(30) días.
Si se hubiere convocado audiencia para la vista de la causa concurrirán
las partes o sus representantes, los peritos que hubieren dictaminado y
los testigos citados por el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION.
La audiencia se celebrará con la parte que concurra y se desarrollará en
la forma y orden que disponga el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, el
que requerirá las declaraciones o explicaciones que estime pertinentes,
sin sujeción a formalidad alguna, con tal que versaren sobre la materia en
litigio.
En el mismo acto las partes o sus representantes alegarán oralmente
sobre la prueba producida y expondrán las razones de derecho.
Acciones de Repetición
ARTICULO 178 — Cuando el contribuyente -en el caso de pago
espontáneo-, ejerciendo la opción que le acuerda el artículo 81,
interpusiera apelación contra la resolución administrativa recaída en el
reclamo de repetición, lo hará ante el TRIBUNAL FISCAL en la forma y
condiciones establecidas para las demás apelaciones, a cuyo
procedimiento aquélla quedará sometida. Si la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS no evacuare en término el traslado
previsto en al artículo 169, será de aplicación el artículo 170. El mismo
procedimiento regirá para la demanda directa ante el TRIBUNAL FISCAL
DE LA NACION, pero el término para contestarla será de sesenta (60)
días. Con la contestación de la apelación o la demanda, el representante
fiscal deberá acompañar la certificación de la ADMINISTRACION
FEDERAL sobre los pagos que se repiten.
ARTICULO 179 — En los casos de repetición de tributos, los intereses
comenzarán a correr contra el Fisco desde la interposición del recurso o
de la demanda ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, según fuere
el caso, salvo cuando sea obligatoria la reclamación administrativa previa,
en cuyo caso los intereses correrán desde la fecha de tal reclamo.
ARTICULO 180 — En el caso de que un contribuyente no hubiere
interpuesto recurso alguno contra la resolución que determinó el tributo y
aplicó multa, podrá comprender en la demanda de repetición que
deduzca por el gravamen, la multa consentida, pero tan sólo en la parte
proporcional al tributo cuya repetición se persigue.
ARTICULO 181 — Transcurrido el plazo previsto en el artículo 81, primer
párrafo, sin que se dicte resolución administrativa, el interesado podrá
interponer recurso ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION para que
éste se avoque al conocimiento del asunto, en cuyo caso se seguirá el
procedimiento establecido para la apelación; ello sin perjuicio del derecho
de optar por la demanda ante la Justicia Nacional, de acuerdo con lo
previsto en el artículo 82, inciso c).
Recurso de Amparo
ARTICULO 182 — La persona individual o colectiva perjudicada en el
normal ejercicio de un derecho o actividad por demora excesiva de los

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empleados administrativos en realizar un trámite o diligencia a cargo de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, podrá ocurrir
ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION mediante recurso de amparo
de sus derechos.
El recurrente deberá previamente haber interpuesto pedido de pronto
despacho ante la autoridad administrativa y haber transcurrido un plazo
de QUINCE (15) días sin que se hubiere resuelto su trámite. (Párrafo
incorporado por art. 1°, punto XXVII de la Ley N° 25.795 B.O. 17/11/2003.
Vigencia: a partir del día de su publicación en el Boletín Oficial.)
ARTICULO 183 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, si lo juzgare
procedente en atención a la naturaleza del caso, requerirá del funcionario
a cargo de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS
que dentro de breve plazo informe sobre la causa de la demora imputada
y forma de hacerla cesar. Contestado el requerimiento o vencido el plazo
para hacerlo, podrá el TRIBUNAL FISCAL resolver lo que corresponda
para garantizar el ejercicio del derecho del afectado, ordenando en su
caso la realización del trámite administrativo o liberando de él al particular
mediante el requerimiento de la garantía que estime suficiente.
El Vocal Instructor deberá sustanciar los trámites previstos en la primera
parte del presente artículo dentro de los TRES (3) días de recibidos los
autos, debiendo el Secretario dejar constancia de su recepción y dando
cuenta inmediata a aquél.
Cumplimentados los mismos, elevará inmediatamente los autos a la Sala,
la que procederá al dictado de las medidas para mejor proveer que
estime oportunas dentro de las cuarenta y ocho (48) horas de la
elevatoria, que se notificará a las partes.
Las resoluciones sobre la cuestión serán dictadas prescindiendo del
llamamiento de autos y dentro de los CINCO (5) días de haber sido
elevados los autos por el Vocal Instructor o de que la causa haya
quedado en estado, en su caso.
CAPITULO III DE LA SENTENCIA DEL TRIBUNAL
ARTICULO 184 — Cuando no debiera producirse prueba o vencido el
término para alegar, o celebrada la audiencia para la vista de la causa, en
su caso, el Tribunal Fiscal de la Nación pasará los autos para dictar
sentencia.
La elevación de la causa a la Sala respectiva deberá efectuarse dentro de
los DIEZ (10) días de haber concluido las etapas señaladas en el párrafo
anterior.
La Sala efectuará el llamado de autos dentro de los CINCO (5) o DIEZ
(10) días de que éstos hayan sido elevados por el Vocal Instructor o de
haber quedado en estado de dictar sentencia, según se trate de los casos
previstos por los artículos 171 y 172 o 176, respectivamente,
computándose los términos establecidos por el artículo 188 a partir de
quedar firme el llamado.
La sentencia podrá dictarse con el voto coincidente de DOS (2) de los
miembros de la Sala, en caso de vacancia o licencia del otro Vocal
integrante de la misma.
La parte vencida en el juicio deberá pagar todos los gastos causídicos y
costas de la contraria, aún cuando ésta no lo hubiere solicitado. Sin
embargo la Sala respectiva podrá eximir total o parcialmente de esta

85
responsabilidad al litigante vencido, siempre que encontrare mérito para
ello, expresándolo en su pronunciamiento bajo pena de nulidad de la
eximición. A los efectos expresados serán de aplicación las disposiciones
que rigen en materia de arancel de abogados y procuradores para los
representantes de las partes y sus patrocinantes, así como las
arancelarias respectivas para los peritos intervinientes.
Cuando en función de las facultades del artículo 164 el Tribunal Fiscal de
la Nación recalifique la sanción a aplicar, las costas se impondrán en el
orden causado. No obstante, el Tribunal podrá imponer las costas al
Fisco Nacional, cuando la tipificación de la sanción recurrida se
demuestre temeraria o carente de justificación
(Artículo sustituido por art. 1° pto. XXIX de la Ley N° 26.044 B.O.
6/7/2005)
ARTICULO 185 — La sentencia no podrá contener pronunciamiento
respecto de la falta de validez constitucional de las leyes tributarias o
aduaneras y sus reglamentaciones, a no ser que la Jurisprudencia de la
Corte Suprema de Justicia de la Nación haya declarado la
inconstitucionalidad de las mismas, en cuyo caso podrá seguirse la
interpretación efectuada por ese TRIBUNAL de la NACION.
ARTICULO 186 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION podrá declarar
en el caso concreto, que la interpretación ministerial o administrativa
aplicada no se ajusta a la ley interpretada. En ambos supuestos, la
sentencia será comunicada al organismo de superintendencia
competente.
Liquidación
ARTICULO 187 — El TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION podrá practicar
en la sentencia la liquidación del tributo y accesorios y fijar el importe de
la multa o, si lo estimare conveniente, deberá dar las bases precisas para
ello, ordenando a las reparticiones recurridas que practiquen la
liquidación en el término de TREINTA (30) días prorrogables por igual
plazo y una sola vez, bajo apercibimiento de practicarlas el recurrente.
De la liquidación practicada por las partes se dará traslado por CINCO (5)
días, vencidos los cuales el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION resolverá
dentro de los DIEZ (10) días. Esta resolución será apelable en el plazo de
QUINCE (15) días, debiendo fundarse al interponer el recurso.
Término para Dictar Sentencia
ARTICULO 188 — Salvo lo dispuesto en el artículo 177, la sentencia
deberá dictarse dentro de los siguientes términos, contados a partir del
llamamiento de autos para sentencia:
a) Cuando resolviere excepciones, tratadas como cuestiones previas y de
especial pronunciamiento: QUINCE (15) días.
b) Cuando se tratare de la sentencia definitiva y no se produjeran
pruebas: TREINTA (30) días.
c) Cuando se tratare de la sentencia definitiva y hubiere mediado
producción de prueba en la instancia: sesenta (60) días.
Las causas serán decididas con arreglo a las pautas establecidas por el
artículo 34, inciso 2) del Código de Procedimientos en Materia Civil y
Comercial de la Nación, dando preferencia a los recursos de amparo.
La intervención necesaria de Vocales subrogantes determinará la
elevación al doble de los plazos previstos.

86
Cuando se produjere la inobservancia de los plazos previstos, la sala
interviniente deberá llevar dicha circunstancia a conocimiento de la
Presidencia en todos los casos, con especificación de los hechos que la
hayan motivado, la que deberá proceder al relevamiento de todos los
incumplimientos registrados, para la adopción de las medidas que
correspondan.
Si los incumplimientos se reiteraran en más de DIEZ (10) oportunidades o
en más de CINCO (5) producidas en un año, el Presidente deberá,
indefectiblemente, formular la acusación a que se refiere el primer párrafo
del artículo 148, en relación a los vocales responsables de dichos
incumplimientos.
ARTICULO 189 — Si la sentencia decidiera cuestiones previas que no
ponen fin al litigio, la posibilidad de apelarla quedará postergada hasta el
momento de apelarse la sentencia definitiva.
ARTICULO 190 — Los plazos señalados en este Título se prorrogarán
cuando el PODER EJECUTIVO NACIONAL resolviera de modo general
establecer términos mayores en atención al cúmulo de trabajo que pesare
sobre el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, demostrado por
estadísticas que éste le someterá.
Recurso de Aclaratoria
ARTICULO 191 — Notificada la sentencia, las partes podrán solicitar,
dentro de los CINCO (5) días, que se aclaren ciertos conceptos oscuros,
se subsanen errores materiales, o se resuelvan puntos incluidos en el
litigio y omitidos en la sentencia.
Recurso de Revisión y Apelación Limitada
ARTICULO 192 — Los responsables o infractores podrán interponer el
recurso de revisión y de apelación limitada a que se refiere el artículo 86,
para ante la Cámara Nacional competente, dentro de TREINTA (30) días
de notificárseles la sentencia del TRIBUNAL y, con sujeción a lo
dispuesto en el artículo siguiente, igual derecho tendrá la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS. No
interpuesto el recurso, la sentencia pasará en autoridad de cosa juzgada
y deberá cumplirse dentro de QUINCE (15) días de quedar firme.
Será Cámara Nacional competente aquélla en cuya jurisdicción funcione
la sede o la delegación permanente o móvil del TRIBUNAL FISCAL DE
LA NACION, según sea donde se ha radicado la causa.
El plazo para apelar las sentencias recaídas en los recursos de amparo,
será de DIEZ (10) días. (Párrafo sustituido por Título XV art. 18 inciso 20)
de la Ley Nº 25.239 B.O. 31/12/1999)
ARTICULO 193 — La Dirección General Impositiva y la Dirección General
de Aduanas, dependiente de la Administración Federal de Ingresos
Públicos, deberán apelar las sentencias desfavorables, en tanto afecten
al Fisco, e inmediatamente elevarán un informe fundado a la
Subsecretaría de Política Tributaria —dependiente de la Secretaría de
Hacienda — o el organismo que la reemplace, quien podrá decidir el
desistimiento de la apelación interpuesta.
(Artículo sustituido por art. 1° de la Ley N° 25.720 B.O. 17/1/2003)
(Nota Infoleg: Por art. 1º de la Resolución Nº 401/2000 del Ministerio de
Economía B.O. 15/05/2000, se delega la firma de las autorizaciones para
apelar las sentencias del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, en el

87
funcionario a cargo de la SUBSECRETARIA DE POLITICA TRIBUTARIA
dependiente de la SECRETARIA DE HACIENDA del Ministerio de
Economía, las que se considerarán otorgadas por el mismo)
ARTICULO 194 — La apelación de las sentencias se concederá en
ambos efectos, salvo la de aquellas que condenaren al pago de tributos e
intereses, que se otorgará al solo efecto devolutivo. En este caso, si no se
acreditare el pago de lo adeudado ante la repartición apelada dentro de
los TREINTA (30) días desde la notificación de la sentencia o desde la
notificación de la resolución que apruebe la liquidación practicada, la
repartición expedirá de oficio la boleta de deuda a que se refiere el
artículo 92, fundada en la sentencia o liquidación, en su caso.
Interposición del Recurso
ARTICULO 195 — El escrito de apelación se limitará a la mera
interposición del recurso. Dentro de los QUINCE (15)días subsiguientes a
la fecha de su presentación, el apelante expresará agravios por escrito
ante el TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, el que dará traslado a la otra
parte para que la conteste por escrito en el mismo término, vencido el
cual, haya o no contestación, se elevarán los autos a la Cámara Nacional
competente, sin más sustanciación, dentro de las cuarenta y ocho (48)
horas siguientes.
La apelación contra las sentencias recaídas en los recursos de amparo
deberá fundarse juntamente con la interposición del recurso y se dará
traslado de la misma a la otra parte para que la conteste por escrito
dentro del término de DIEZ (10) días, vencido el cual, haya o no
contestación, se elevarán los autos a la Cámara sin más sustanciación,
dentro de las CUARENTA Y OCHO (48) horas. (Párrafo sustituido por
Título XV art. 18 inciso 21) de la Ley Nº 25.239 B.O. 31/12/1999)
ARTICULO 196 — En el caso de que la sentencia no contuviere
liquidación del impuesto y accesorios que mandase pagar al
contribuyente, el plazo para expresar agravios se contará desde la fecha
de notificación de la resolución que apruebe la liquidación.
CAPITULO IV DISPOSICIONES GENERALES
Aplicación Supletoria
ARTICULO 197 — Será de aplicación supletoria en los casos no previstos
en este Título y en el Reglamento Procesal del Tribunal Fiscal, el Código
Procesal Civil y Comercial de la Nación y, en su caso, el Código Procesal
Penal de la Nación.
ARTICULO 198 — El PODER EJECUTIVO NACIONAL podrá extender la
competencia de los Tribunales Fiscales que organiza la presente ley a
otros impuestos que los indicados en el artículo 144. Queda también
autorizado para modificar la suma que el artículo 165 establece como
condición para apelar de las resoluciones de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.
ARTICULO 199 — Contra las resoluciones que la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS dictare después de la instalación
del TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION, los particulares podrán
interponer ante éste los recursos y demandas que la presente ley
autoriza, los que en tal caso producirán los efectos que en ella se
determinan.
TITULO III OTRAS DISPOSICIONES

88
ARTICULO 200 — Los importes consignados en los distintos artículos de
esta ley se actualizarán anualmente, en función de la variación del índice
de precios al por mayor, nivel general, operada entre el 1º de noviembre y
el 31 de octubre de cada año. Los nuevos importes resultantes regirán a
partir del 1º de enero, inclusive, de cada año y deberán ser publicados
con anterioridad a dicha fecha por la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS. La primera actualización regirá a partir del 1º de
enero de 1979, inclusive.
A los fines de las actualizaciones a que se refiere el párrafo anterior, las
tablas e índices que elabore la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS para ser aplicados a partir del 1º de abril de 1992
deberán, en todos los casos, tomar como límite máximo las variaciones
operadas hasta el mes de marzo de 1992, inclusive.
ARTICULO 201 — Las actualizaciones previstas en esta ley de
obligaciones de dar sumas de dinero, se efectuarán hasta el 1º de abril de
1991, inclusive.
ARTICULO 202 — Las normas que establecen la actualización de deudas
fiscales, no serán de aplicación desde el momento en que se hubiere
garantizado con depósito de dinero en efectivo y a la orden de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS la totalidad del
importe controvertido. En caso de que procediere la devolución, ésta será
actualizada y no devengará intereses.
ARTICULO 203 — Los artículos 157, 158, 159, 160, 161 y 162 del texto
ordenado en 1974 -por Decreto Nº 1769/74-, así como el artículo nuevo
incorporado sin número por la Ley Nº 20.904, continuarán en vigencia en
los casos y situaciones que correspondan.
ARTICULO 204 — En la medida en que no fueren afectados por lo
dispuesto en los artículos precedentes, continuarán en vigor produciendo
sus correspondientes efectos, sin excepción alguna ni solución de
continuidad, las modificaciones a la Ley Nº 11.683 introducidas por las
Leyes Nros. 17.595, 20.024, 20.046, 20.219, 20.277, 20.626, 20.904,
21.281, 21.344, 21.363, 21.425, 21.436, 21.858, 21.864, 21.911, 22.091,
22.294, 22.826, 22.917, 23.013, 23.314, 23.495, 23.549, 23.658, 23.697,
23.760, 23.771, 23.871, 23.905, 23.928, 24.073, 24.138, 24.587, 24.765 y
los Decretos Nros. 2.192/86, 507/93 ratificado por Ley N° 24.447,
1.684/93, 618/97 y 938/97.

89
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS

Decreto 618/97

Organización y Competencia. Autoridades Administrativas. Requisitos,


Incompatibilidades e Inhabilitaciones de las Autoridades. Facultades de
Organización Interna. Facultades de Reglamentación. Facultades de
Interpretación. Funciones y Facultades de Dirección y de Juez
Administrativo. Organización del Servicio Aduanero. Recursos y
Presupuesto. Normas Transitorias. Vigencia.

Bs. As., 10/7/97

VISTO el Expediente Nº 250798/97 del registro de la DIRECCION GENERAL


IMPOSITIVA, dependiente del MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y

90
SERVICIOS PUBLICOS, la Ley Nº 24.629 y los Decretos Nros. 1156 de fecha
14 de octubre de 1996 y 1589 de fecha 19 de diciembre de 1996, y

CONSIDERANDO:

Que por dichos decretos se dispone la creación de la ADMINISTRACION


FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, como resultado de la fusión de la
DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA y de la ADMINISTRACION NACIONAL
DE ADUANAS, ambos organismos dependientes del MINISTERIO DE
ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS.

Que el Decreto Nº 1156/96 ha sido aprobado por el Dictamen de la COMISION


MIXTA DE REFORMA DEL ESTADO Y SEGUIMIENTO DE LAS
PRIVATIZACIONES de fecha 12 de diciembre de 1996 y el Decreto Nº 1539/96
se originó en dicho Dictamen.

Que, de acuerdo al Dictamen de la citada Comisión Mixta, el proceso de fusión


dispuesto por los artículos 3º y 4º del Decreto Nº 1156/96, terminará el día en
que se publique en el Boletín Oficial la norma que establezca el ordenamiento
de las competencias, facultades, derechos y obligaciones de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.

Que dicho ordenamiento debe recoger las normas que rigen las competencias,
facultades, derechos y obligaciones de los organismos que se fusionan, para
dar lugar al nuevo organismo, con las adaptaciones requeridas por la nueva
situación.

Que las normas aludidas en el considerando anterior son principalmente entre


otras disposiciones legales -las Leyes Nros. 11.683 (texto ordenado en 1978 y
sus modificaciones), 22.091, 22.415 y el Decreto Nº 507 de fecha 24 de marzo
de 1993, ratificado por la Ley Nº 24.447.

Que, como consecuencia de ello, las normas organizativas a dictarse, implican


la necesidad de sustituir otras de idéntica naturaleza que han sido plasmadas
por leyes formales.

Que, por tal motivo, el ordenamiento dispuesto necesariamente debe ser


adoptado por normas de idéntico rango del de aquellas que organizaban el
funcionamiento de los Entes fusionados, a fin de evitar eventuales
cuestionamientos que puedan perjudicar el ejercicio de dichas funciones.

Que, además, es de extrema urgencia que el Gobierno Nacional cuente con el


instrumento normativo que permita la puesta en funcionamiento de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, para que la misma
pueda comenzar a ejercer sus funciones a la mayor brevedad, con la finalidad-
entre otras- de combatir la evasión impositiva, aduanera y de los recursos de la
seguridad social.

91
Que el PODER EJECUTIVO NACIONAL considera que no puede demorarse
en poner en funcionamiento el organismo responsable de la mayor fuente de
ingresos del Estado Nacional y del control del comercio exterior.

Que el presente constituye un ordenamiento de textos legales preexistentes


referidos a competencias, facultades, derechos y obligaciones del organismo
encargado de la administración impositiva, aduanera y de los recursos de la
seguridad social; introduciendo las adecuaciones mínimas necesarias para la
conducción del organismo, sin innovar en las relaciones entre Fisco y
contribuyente.

Que, en tanto, el presente se limita a ordenar las disposiciones legales


existentes, referidas exclusivamente a cuestiones de organización y
funcionamiento del nuevo organismo, no se contraria lo dispuesto por el
artículo 99, inciso 3, tercer párrafo de la Constitución Nacional.

Que por el presente se incorporan numerosas disposiciones de la legislación


vigente a los efectos de contener en un solo cuerpo normativo todas las
normas que hacen a la organización y funcionamiento de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.

Que la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS ha sido


creada por el Decreto Nº 1156/96 a mérito de las facultades delegadas por el
PODER LEGISLATIVO NACIONAL al PODER EJECUTIVO NACIONAL por la
Ley Nº 24.629 y, dicha creación fue aprobada por unanimidad por la
COMISION MIXTA DE REFORMA DEL ESTADO Y SEGUIMIENTO DE LAS
PRIVATIZACIONES, la que requirió el dictado del ordenamiento que por el
presente se concreta.

Que el presente decreto se dicta en virtud del artículo 99, inciso 3 de la


CONSTITUCION NACIONAL.

Por ello,

EL PRESIDENTE DE LA NACION ARGENTINA EN ACUERDO GENERAL DE


MINISTROS DECRETA :

ORGANIZACION Y COMPETENCIA DE LA ADMINISTRACION FEDERAL

DE INGRESOS PUBLICOS.

Artículo 1º-La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS,


entidad autárquica en el ámbito del MINISTERIO DE ECONOMIA, tendrá la
organización y competencia fijadas por el presente decreto y, a partir de la
publicación del mismo en el Boletín Oficial, se considerarán disueltas la
ADMINISTRACION NACIONAL DE ADUANAS y la DIRECCION GENERAL
IMPOSITIVA siendo reemplazadas por la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS, la que ejercerá todas las funciones que les fueran
asignadas a aquellas por las Leyes Nº 11.683, Nº 22.091, Nº 22.415 y por el

92
Decreto Nº 507/93-ratificado por la Ley Nº 24.447 -; y sus respectivas
modificaciones, así como por otras leyes y reglamentos.

Las normas legales y reglamentarias referidas en el párrafo precedente


mantendrán su vigencia, en tanto no se opongan a las disposiciones del
presente decreto o a las que resulten aplicables de acuerdo con sus
previsiones. Aún cuando no mediare estricta oposición, sus alcances se
entenderán modificados en la medida en que resulten virtualmente ampliados,
restringidos o no contemplados por las disposiciones correlativas del presente
decreto.

Todas las remisiones que otras normas hagan a las normas legales y
reglamentarias mencionadas en el primer párrafo de este artículo que resulten
derogadas, se interpretarán como hechas a las disposiciones correlativas del
presente decreto.

Todas las referencias que las normas legales y reglamentarias vigentes hagan
a los organismos disueltos, su competencia o sus autoridades, se considerarán
hechas a la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, su
competencia o sus autoridades, respectivamente.

(Por art. 2° del Decreto N° 90/2001 B.O. 29/01/2001 se estableció que donde
decía "MINISTERIO DE ECONOMIA OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS" debe
entenderse "JEFATURA DE GABINETE DE MINISTROS". Posteriormente por
art. 3° del Decreto N° 617/2001 B.O. 15/5/2001, el Decreto N° 90/2001 fue
abrogado y transferida la AFIP al ámbito del Ministerio de Economía)

Art. 2°.-La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS actuará


como entidad autárquica en el orden administrativo, en lo que se refiere a su
organización y funcionamiento, según las normas del presente decreto, bajo la
superintendencia general y control de legalidad que ejercerá sobre ella
el MINISTERIO DE ECONOMIA.

A tales fines, su patrimonio estará constituido por todos los bienes que le
asigne el Estado Nacional y por aquellos que le sean transmitidos o adquiera
por cualquier causa jurídica, quedándole afectados íntegramente los bienes
propios o los cedidos en uso, créditos, derechos y obligaciones de la
ADMINISTRACION NACIONAL DE ADUANAS y de la DIRECCION GENERAL
IMPOSITIVA.

El PODER EJECUTIVO NACIONAL queda facultado para transferir sin cargo


los inmuebles en uso por la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS y que son de propiedad del Estado Nacional.

Sin perjuicio de la indivisibilidad de la ADMINISTRACION FEDERAL DE


INGRESOS PUBLICOS como ente administrativo y sujeto de derecho, las
Direcciones Generales que dependen de ella se distinguirán con las siglas
DGA (Dirección General de Aduanas) y DGI (Dirección General Impositiva),
respectivamente.

93
Las siglas referidas, precedidas por la sigla AFIP (ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS), serán utilizadas en toda
documentación o mención oficial que se refiere a dichas Direcciones.

La fiscalización de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS


PUBLICOS se regirá por las disposiciones de la Ley Nº 24.156.

(Por art. 2° del Decreto N° 90/2001 B.O. 29/01/2001 se estableció que donde
decía "MINISTERIO DE ECONOMIA OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS" debe
entenderse "JEFATURA DE GABINETE DE MINISTROS". Se aclara, sin
embargo, por art. 4° que sin perjuicio de ello el Ministerio de Economía ejercerá
el control de legalidad sobre la Administración Federal de Ingresos Públicos
de acuerdo a lo establecido en el presente artículo. Posteriormente por art. 3°
del Decreto N° 617/2001 B.O. 15/5/2001, el Decreto N° 90/2001 fue abrogado y
transferida la AFIP al ámbito del Ministerio de Economía. )

Art. 3º-La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS será el


Ente de ejecución de la política tributaria y aduanera de la Nación aplicando las
normas legales correspondientes. Tendrá las funciones y facultades de los
organismos fusionados mencionados en el artículo 1º del presente y en
especial las detalladas en este artículo, sin perjuicio de las conferidas por otras
normas:

a) La aplicación, percepción y fiscalización de los tributos y accesorios


dispuestos por las normas legales respectivas, y en especial de:

1) Los tributos que gravan operaciones ejecutadas en el ámbito territorial y en


los espacios marítimos, sobre los cuales se ejerce total o parcialmente la
potestad tributaria nacional.

2) Los tributos que gravan la importación y la exportación de mercaderías y


otras operaciones regidas por leyes y normas aduaneras que le estén o le
fueren encomendados.

3) Los recursos de la seguridad social correspondientes a:

I. Los regímenes nacionales de jubilaciones y pensiones, sean de trabajadores


en relación de dependencia o autónomos.

II. Los subsidios y asignaciones familiares.

III. El Fondo Nacional de Empleo.

IV. Todo otro aporte o contribución que de acuerdo a la normativa vigente se


deba recaudar sobre la nómina salarial.

(Punto 3, incorporado por art. 2° del Decreto N° 217/2003 B.O. 18/6/2003. Nota
Infoleg: Por art. 19 del Decreto N° 1399/2001 B.O. 5/11/2001 se había
dispuesto la derogación del pto. 3 del art. 3° presente. Por art. 1° delDecreto N°
1480/2001 B.O. 22/11/2001 se disponía que dicha derogación regiría a partir

94
de la fecha que estableciera el MINISTERIO DE ECONOMIA para la definitiva
constitución y el funcionamiento del INSTITUTO NACIONAL DE LOS
RECURSOS DE LA SEGURIDAD SOCIAL (INARSS).)

4) Las multas, recargos, intereses, garantías y cualquier accesorio que por


situaciones de cualquier naturaleza puedan surgir de la aplicación y
cumplimiento de las normas legales.

b) El control del tráfico internacional de mercaderías dispuesto por las normas


legales respectivas.

c) La clasificación arancelaria y valoración de las mercaderías.

d) Todas aquellas funciones que surjan de su misión y las necesarias para su


administración interna.

El PODER EJECUTIVO NACIONAL podrá incorporar a la ADMINISTRACION


FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS la aplicación, percepción y fiscalización
de gravámenes a cargo de otras reparticiones. En tales casos, las facultades
acordadas legalmente a estos organismos, en cuanto se vinculan con los
tributos cuya aplicación, percepción y fiscalización se pongan a cargo de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, serán igualmente
transferidas a esta, la que podrá aplicar también con relación a los mismos, en
forma supletoria, las normas de la Ley Nº 11.683 y de este decreto.

Facúltase a la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS a


actuar como agente de percepción de los impuestos provinciales o
establecidos por la Ciudad de Buenos Aires, que graven el consumo o la
comercialización mayorista o minorista de bienes, en las operaciones de
importación definitiva de mercaderías. A tal efecto se faculta al Administrador
Federal a la celebración de los convenios pertinentes con las autoridades
locales. Por la actuación que le pudiera corresponder en virtud de lo dispuesto
en el presente párrafo, no será de aplicación lo establecido en el artículo 14 del
presente decreto.

Facultase a la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS a


suscribir convenios con las provincias, la Ciudad de Buenos Aires y municipios,
los bancos oficiales - nacionales, provinciales o municipales, incluidos los de
economía mixta - y privados, a los fines de la aplicación, percepción y
fiscalización de los tributos interiores, aduaneros y de los recursos de la
seguridad social a su cargo, en cuyo caso podrá establecer una compensación
por la gestión que realicen los entes indicados, en función de lo efectivamente
recaudado para el Fisco Nacional, sin afectar lo previsto en el artículo 13 del
presente decreto.

Cuando la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS no


pueda debidamente desempeñar por sí las funciones y facultades a que se
refiere este decreto, podrá delegar el ejercicio de las mismas en otros
organismos de la administración pública y fuerzas de seguridad, en la medida
que se compadeciere con la actividad específica de dichos organismos o

95
fuerzas y que quedare a salvo el adecuado control y la integridad de la renta
fiscal. En estos supuestos, se ejercerá una cuidadosa supervisión.

AUTORIDADES ADMINISTRATIVAS

Art. 4º-La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS estará a


cargo de Un (1) Administrador Federal designado por el PODER EJECUTIVO
NACIONAL, a propuesta del MINISTERIO DE ECONOMIA, con rango de
Secretario, el que tendrá las funciones, atribuciones y deberes que señalan los
artículos 6º. 7º, 8º y 9º del presente decreto y los que las leyes y sus
reglamentaciones le otorguen.

En el ejercicio de sus atribuciones, el Administrador Federal representa a la


ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS ante los poderes
públicos, Ios responsables y los terceros.

Secundarán al Administrador Federal UN (1) Director General a cargo de la


Dirección General Impositiva y Un (1) Director General a cargo de la Dirección
General de Aduanas, y Subdirectores Generales cuyo número y competencia
serán determinados por el PODER EJECUTIVO NACIONAL. El Administrador
Federal designará y removerá a los Directores Generales, a los Subdirectores
Generales y a los Jefes de las Unidades de Estructura de primer nivel de
jerarquía escalafonaria.

Las designaciones y remociones de los funcionarios jefes de unidades de


estructura de primer nivel escalafonario, aludidos en la última parte del párrafo
anterior, no estarán sujetas a los regímenes de selección o remoción que rijan
para el resto del personal.

El Administrador Federal, los Directores Generales y los Administradores de


Aduanas en su jurisdicción, actuarán como jueces administrativos.

Los Directores Generales y los Subdirectores Generales participarán en las


demás actividades relacionadas con la aplicación, percepción y fiscalización de
los tributos: reemplazarán al Administrador Federal en caso de ausencia o
impedimento en todas sus funciones, atribuciones, deberes y
responsabilidades, de acuerdo con el orden de prelación que establezca el
propio Administrador Federal.

El Director General de la Dirección General de Aduanas será el responsable de


la aplicación de la legislación aduanera, en concordancia con las políticas,
criterios, planes y programas dictados por el Administrador Federal y las
normas legales que regulan la materia de su competencia.

El Director General de la Dirección General Impositiva será el responsable de


la aplicación de la legislación impositiva y de los recursos de la seguridad
social, en concordancia con las políticas, criterios, planes y programas dictados
por el Administrador Federal y las normas legales que regulan la materia de su
competencia.

96
Sin perjuicio de la competencia que se establece en los párrafos anteriores, el
Administrador Federal podrá delegar en los Directores Generales y los
Subdirectores Generales- y estos respecto de las Jefaturas de las Unidades
que de ellos dependen -la asunción, conjunta o separadamente, de
determinadas funciones y atribuciones señaladas por la naturaleza de las
materias, por el ámbito territorial en el que deban ejercerse o por otras
circunstancias, inclusive las que se indican en los artículos 6º, 7º, 8º y 9º en la
medida y condiciones que se establezcan en cada caso.

El Administrador Federal conservará la máxima autoridad dentro del organismo


y podrá avocarse al conocimiento y decisión de cualquiera de las cuestiones
planteadas.

Los Directores Generales y Subdirectores Generales y los demás funcionarios


de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS podrán actuar
por avocación en cualquier tiempo y con arreglo a la competencia de cada uno,
al conocimiento y decisión de las causas, quedando a este fin investidos de
toda la potestad Jurisdiccional del órgano sustituido.

Los actos y disposiciones de los Directores Generales serán impugnables, sin


previa instancia ante el Administrador Federal, por los mismos recursos que
corresponderían en caso de haber emanado de este último.

(Por art. 2° del Decreto N° 90/2001 B.O. 29/01/2001 se estableció que donde
decía "MINISTERIO DE ECONOMIA OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS" debe
entenderse "JEFATURA DE GABINETE DE MINISTROS". Posteriormente por
art. 3° del Decreto N° 617/2001 B.O. 15/5/2001, el Decreto N° 90/2001 fue
abrogado y transferida la AFIP al ámbito del Ministerio de Economía)

REQUISITOS, INCOMPATIBILIDADES E INHABILITACIONES DE LAS


AUTORIDADES.

Art. 5º.-El Administrador Federal, los Directores Generales y los Subdirectores


Generales no podrán ejercer otro cargo público con excepción de la docencia y
regirán para ellos las incompatibilidades establecidas para el personal del
organismo.

No podrán desempeñar dichas funciones:.

a) Los inhabilitados para ejercer cargos públicos, hasta DIEZ (10) años
después de cumplida la condena.

b) quienes no puedan ejercer el comercio,

c) Los fallidos condenados por la Justicia penal por quiebra fraudulenta,


ilimitadamente.

d) Los fallidos hasta CINCO (5) años después de su rehabilitación.

97
e) Los directores o administradores de asociaciones o sociedades declaradas
en quiebra, condenados por la Justicia penal por su conducta fraudulenta,
ilimitadamente.

Los directores o administradores de asociaciones o sociedades declaradas en


quiebra hasta CINCO (5) años después de su rehabilitación.

Sin perjuicio de los requisitos, incompatibilidades e inhabilitaciones previstos


en el Código Penal, en el Régimen Jurídico Básico de la Función Pública, en
otras leyes y en el Código Aduanero, no podrán ser designados ni aceptar
nombramiento alguno en la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS:

1. Quienes hubieren sido condenados por algún delito tributario o aduanero o


por la infracción de contrabando menor.

2. Quienes hubieren sido socios ilimitadamente responsables, directores o


administradores de cualquier sociedad o asociación, cuando la sociedad o la
asociación de que se tratare hubiera sido condenada por cualquiera de los
ilícitos previstos en el punto precedente. Se exceptúa de esta inhabilitación a
quienes probaren haber sido ajenos al acto o haberse opuesto a su realización.

3. Quienes se encontraren procesados judicialmente o sumariados por


cualquiera de los ilícitos previstos en el punto 1, hasta tanto no fueren
sobreseídos definitivamente o absueltos por sentencia o resolución firme.
Quedan también comprendidos aquellos que integran o integraron, en el
supuesto previsto en el punto precedente, una sociedad una asociación
procesada o sumariada.

Quienes desempeñen cargos de cualquier categoría, rentados o no, en la


ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS no podrán ocupar
cargos o mantener relaciones de cualquier naturaleza o de asesoramiento con
firmas exportadoras o importadoras o con despachantes de aduana.

FACULTADES DE ORGANIZACION INTERNA

Art. 6º-Las autoridades del organismo tendrán las funciones de organización


interna que se detallan seguidamente:

1) El Administrador Federal de Ingresos Públicos tendrá las siguientes


atribuciones y responsabilidades:

a) Representar legalmente a la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS


PUBLICOS, personalmente o por delegación o mandato, en todos los actos y
contratos que se requieran para el funcionamiento del servicio, pudiendo
también actuar como querellante, de acuerdo a las disposiciones en vigor y
suscribir los documentos públicos o privados que sean necesarios.

b) Organizar y reglamentar el funcionamiento interno de la ADMINISTRACION


FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS en sus aspectos estructurales,

98
funcionales y de administración de personal, incluyendo el dictado y la
modificación de la estructura orgánico-funcional en los niveles inferiores a los
que apruebe el PODER EJECUTIVO NACIONAL.

c) Entender en el proceso de negociaciones colectivas de trabajo con las


entidades gremiales que representen al personal, con la autorización previa
del MINISTERIO DE ECONOMIA, en el marco de lo dispuesto por las Leyes Nº
14.250 y Nº 18.753 y por el Decreto Nº 183 de fecha 10 de febrero de 1988,
sus modificatorios y concordantes.

d) Dictar los reglamentos de personal que no encuadren en negociaciones


colectivas de trabajo o que correspondan a niveles jerárquicos no
comprendidos en las mismas.

e) Designar personal con destino a la planta permanente o transitoria así como


también promover, sancionar y disponer bajas, con arreglo al régimen legal
vigente.

f) Efectuar contrataciones de personal para la realización de labores


estacionales, extraordinarias o especiales, que no puedan realizarse con sus
recursos de planta permanente, fijando las condiciones de trabajo y su
retribución.

g) Promover la capacitación del personal.

h) Participar en representación de la ADMINISTRACION FEDERAL DE


INGRESOS PUBLICOS, en el orden nacional e internacional, en congresos,
reuniones y/o actos propiciados por organismos oficiales o privados que traten
asuntos de su competencia.

i) Autorizar los viajes al exterior de personal competente del organismo, en


cumplimiento de misiones, por un lapso no mayor de TRESCIENTOS
SESENTA Y CINCO (365) días, de conformidad con las normas legales en
vigencia.

j) Autorizar la prestación de servicios a terceros con carácter oneroso, siempre


que no se afectare el adecuado desenvolvimiento del servicio.

k) Elevar anualmente al MINISTERIO DE ECONOMIA. el plan de acción y el


anteproyecto de presupuesto de gastos e inversiones para el ejercicio siguiente
y la memoria anual.

1) Administrar el presupuesto, resolviendo y aprobando los gastos e


inversiones del organismo.

m) Licitar, adjudicar y contratar obras públicas y suministros, adquirir, vender,


permutar, transferir, locar, construir y disponer de toda forma respecto de
bienes muebles e inmuebles para el uso de sus oficinas o del personal,
conforme las necesidades del servicio, aceptar donaciones con o sin cargo,
todo ello de conformidad con las normas legales en vigencia.

99
n) Determinar los responsables jurisdiccionales de los Fondos Rotatorios
Internos y de Cajas Chicas, estableciendo el monto y su régimen de reposición,
con arreglo a lo dispuesto en la Ley Nº 24.156 y normas complementarias.

ñ) Propender a la mas amplia y adecuada difusión de las actividades y


normatividad del organismo.

o) Toda otra atribución necesaria para el cumplimiento de las funciones del


organismo, compatible con el cargo o con las establecidas en las normas
legales vigentes, a cuyo fin se entenderá que la norma consagrada en los
apartados precedentes no reviste carácter taxativo.

2) Los Directores Generales tendrán las atribuciones y responsabilidades


fijadas en el artículo 4º del presente y las que se detallan seguidamente:

a) Establecer con carácter general los límites para disponer el archivo de los
casos de fiscalización, determinación de oficio, Iiquidación de deudas en
gestión administrativa o judicial, aplicación de sanciones u otros conceptos o
procedimientos a cargo del organismo, que en razón de su bajo monto o
incobrabilidad no impliquen créditos de cierta, oportuna y económica
concreción.

b) Representar a la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS


ante los tribunales judiciales y administrativos en todos los asuntos de su
competencia en los que sea parte el organismo o en los que se pudieren
afectar sus intereses.

c) Designar los funcionarios que ejercerán en juicio la representación de la


ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, en causas que se
substancien ante cualquier fuero, incluso el criminal.

d) Fijar el horario general y los horarios especiales en que desarrollará su


actividad el organismo, de acuerdo con las necesidades del servicio, tomando
en consideración las modalidades del tráfico internacional y los horarios de los
organismos estatales que prestaren servicios vinculados con sus funciones.

e) Toda otra atribución necesaria para el cumplimiento de las funciones del


organismo compatible con el cargo o con las establecidas en las normas
legales vigentes, a cuyo fin se entenderá que la nómina consagrada en los
apartados precedentes no reviste carácter taxativo.

(Por art. 2° del Decreto N° 90/2001 B.O. 29/01/2001 se estableció que donde
decía "MINISTERIO DE ECONOMIA OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS" debe
entenderse "JEFATURA DE GABINETE DE MINISTROS". Posteriormente por
art. 3° del Decreto N° 617/2001 B.O. 15/5/2001, el Decreto N° 90/2001 fue
abrogado y transferida la AFIP al ámbito del Ministerio de Economía)

FACULTADES DE REGLAMENTACION

100
Art. 7.-El Administrador Federal estará facultado para impartir normas
generales obligatorias para los responsables y terceros, en las materias en que
las leyes autorizan a la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS
PUBLICOS a reglamentar la situación de aquellos frente a la Administración.

Las citadas normas entrarán en vigor desde la fecha de su publicación en el


Boletín Oficial, salvo que ellas determinen una fecha posterior, y regirán
mientras no sean modificadas por el propio Administrador Federal o por el
MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS.

En especial, podrá dictar normas obligatorias en relación a los siguientes


puntos:

1) Inscripción de contribuyentes, responsables, agentes de retención y


percepción y forma de documentar la deuda fiscal por parte de los
contribuyentes y responsables.

2) Inscripción de agentes de información y obligaciones a su cargo.

3) Determinación de promedios, coeficientes y demás índices que sirvan de


base para estimar de oficio la materia imponible, así como para determinar el
valor de las transacciones de importación y exportación para la aplicación de
impuestos interiores, cuando fuere necesario.

4) Forma y plazo de presentación de declaraciones juradas y de formularios de


liquidación administrativa de gravámenes.

5) Modos, plazos y formas extrínsecas de su percepción, así como la de los


pagos a cuenta, anticipos, accesorios y multas.

6) Creación, actuación y supresión de agentes de retención, percepción e


información.

7) Libros, anotaciones y documentos que deberán llevar, efectuar y conservar


los responsables y terceros, despachantes de aduana, agentes de transporte
aduanero, importadores, exportadores y demás administrados, fijando
igualmente los plazos durante los cuales éstos deberán guardar en su poder
dicha documentación y en su caso, Ios respectivos comprobantes.

8) Deberes de los sujetos mencionados en el punto anterior ante los


requerimientos tendientes a realizar una verificación, requerir información con
el grado de detalle que estime conveniente - de la inversión, disposición o
consumo de bienes efectuado en el año fiscal, cualquiera sea el origen de los
fondos utilizados (capital, ganancias gravadas, exentas o no alcanzadas por el
tributo).

9) Suspensión o modificación, fundada y con carácter general, de aquellos


requisitos legales o reglamentarios de naturaleza meramente formal, siempre
que no afectare el control aduanero, la aplicación de prohibiciones a la
importación o a la exportación o el interés fiscal.

101
10) Dictado de normas estableciendo requisitos con el objeto de determinar la
licita tenencia de mercadería de origen extranjero que se encontrare en plaza,
a cuyo efecto podrán exigirse declaraciones juradas de existencia,
estampillado, marcación de mercadería, contabilización en libros especiales o
todo otro medio o sistema idóneo para tal fin.

11) Cualquier otra medida que sea conveniente de acuerdo con lo preceptuado
en el primer párrafo del presente artículo, para facilitar la aplicación, percepción
y fiscalización de los gravámenes y control del comercio exterior a cargo del
organismo.

FACULTADES DE INTERPRETACION

Art. 8º-El Administrador Federal tendrá la función de interpretar con carácter


general las disposiciones de este decreto y de las normas legales que
establecen o rigen la percepción de los gravámenes a cargo de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, cuando así lo
estime conveniente o lo soliciten los contribuyentes, importadores,
exportadores, agentes de retención, agentes de percepción y demás
responsables, entidades gremiales y cualquier otra organización que
represente un interés colectivo, siempre que el pronunciamiento a dictarse
ofrezca interés general. El pedido de tal pronunciamiento no suspenderá
cualquier decisión que los demás funcionarios de la ADMINISTRACION
FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS hayan de adoptar en casos particulares.

Las interpretaciones del Administrador Federal se publicarán en el Boletín


Oficial y tendrán el carácter de normas generales obligatorias si, al expirar el
plazo de QUINCE (15) días hábiles desde la fecha de su publicación, no fueran
apeladas ante el MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS
PUBLICOS por cualquiera de las personas o entidades mencionadas en el
párrafo anterior, en cuyo caso tendrán dicho carácter desde el día siguiente a
aquel en el que se publique la aprobación o modificación de dicho Ministerio.
En estos casos, deberá otorgarse vista previa al Administrador Federal para
que se expida sobre las objeciones opuestas a la interpretación.

Las interpretaciones firmes podrán ser rectificadas por la autoridad que las
dictó o el MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS PUBLICOS,
con sujeción a lo dispuesto en el párrafo precedente, pero las rectificaciones no
serán de aplicación a hechos o situaciones cumplidas con anterioridad al
momento en que tales rectificaciones entren en vigor.

FUNCIONES Y FACULTADES DE DIRECCION Y DE JUEZ


ADMINISTRATIVO

Art. 9º-Las autoridades del organismo tendrán las funciones y facultades que
se detallan seguidamente:

1) Serán atribuciones del Administrador Federal, además de las previstas en


los artículos anteriores:

102
a) Dirigir la actividad del organismo mediante el ejercicio de todas las
funciones, poderes y facultades que las leyes y otras disposiciones le
encomienden a el o asignen a la ADMINISTRACION FEDERAL DE
INGRESOS PUBLICOS a los fines de aplicar, determinar, percibir, recaudar,
exigir, ejecutar y devolver o reintegrar los tributos a cargo de la entidad
mencionada: o resolver las dudas que a ellos se refieren. En especial, el
Administrador Federal fijará las políticas, el planeamiento estratégico, los
planes y programas y los criterios generales de conducción del organismo.

b) Ejercer las funciones de Juez Administrativo, sin perjuicio de las


sustituciones previstas en los artículos 4º y 10 en la determinación de oficio de
la materia imponible y gravámenes correspondientes, en las repeticiones, en la
aplicación de multas y resolución de los recursos de reconsideración.

c) Conceder esperas para el pago de los tributos y de sus correspondientes


intereses de cualquier índole, en los casos autorizados por las normas legales.

d) Requerir directamente el auxilio inmediato de las fuerzas de seguridad y


policiales para el cumplimiento de sus funciones y facultades, sin perjuicio del
ejercicio de sus propias atribuciones.

e) Solicitar y prestar colaboración e informes, en forma directa, a


administraciones aduaneras y tributarias extranjeras y a organismos
internacionales competentes en la materia.

f) Realizar en el extranjero investigaciones destinadas a reunir elementos de


juicio para prevenir, detectar, investigar, comprobar o reprimir los ilícitos
tributarios, aduaneros y, en especial, el contrabando. Para el cumplimiento de
misiones que superen los TRESCIENTOS SESENTA Y CINCO (365) días se
requerirá autorización previa del PODER EJECUTIVO NACIONAL.

g) Proponer al MINISTERIO DE ECONOMIA Y OBRAS Y SERVICIOS


PUBLICOS las normas que complementen, modifiquen o reglamenten la
legislación aduanera, impositiva y de los recursos de la seguridad social.

h) Toda otra atribución necesaria para el cumplimiento de las funciones del


organismo, compatible con el cargo y las establecidas en las normas legales
vigentes, a cuyo fin se entenderá que la nómina consagrada en los apartados
precedentes no reviste carácter taxativo.

2) Son atribuciones del Director General de la Dirección General de Aduanas,


además de las previstas en los artículos anteriores:

a) Ejercer todas las funciones, poderes y facultades que las leyes,


reglamentos, resoluciones generales y otras disposiciones le encomienden, a
los fines de determinar, percibir, recaudar, exigir, fiscalizar, ejecutar y devolver
o reintegrar los tributos que gravan la importación y la exportación de
mercaderías y otras operaciones regidas por leyes y normas aduaneras a
cargo del organismo: interpretar las normas o resolver las dudas, que a ellos se
refieren.

103
b) Ejercer el control sobre el tráfico internacional de mercadería.

c) Aplicar y fiscalizar las prohibiciones a la importación y a la exportación cuya


aplicación y fiscalización le están o le fueren encomendadas.

d) Efectuar la revisión de las actuaciones y documentos aduaneros una vez


concluida su tramitación ante las aduanas, de conformidad con las
disposiciones aplicables, formular rectificaciones y cargos, así como disponer
las devoluciones o reintegros que correspondieren.

e) Autorizar las operaciones y regímenes aduaneros relativos a los medios de


transporte, así como las operaciones, destinaciones y regímenes a que puede
someterse la mercadería involucrada en el tráfico internacional.

f) Autorizar, según los antecedentes y garantías que brindaren los


peticionarios, y de acuerdo con la naturaleza de la operación y con los
controles que en cada caso correspondieren, la verificación de la mercadería
en los locales o depósitos de los importadores y exportadores, o en los lugares
por ellos ofrecidos a tal fin, siempre que estos reunieren las condiciones y
ofrecieren las seguridades requeridas para el adecuado contralor de la
operación y la debida salvaguardia de la renta fiscal.

g) Ejercer las atribuciones jurisdiccionales que el Código Aduanero


encomienda al Administrador Nacional de Aduanas.

h) Instruir, cuando correspondiere, los sumarios de prevención en las causas


por delitos o infracciones aduaneras.

i) Requerir directamente el auxilio inmediato de las fuerzas de seguridad y


policiales para el cumplimiento de sus funciones y facultades, sin perjuicio del
ejercicio de sus propias atribuciones.

j) Ejercer la superintendencia y dirección de las aduanas y demás


dependencias de su Jurisdicción.

k) Practicar las averiguaciones, investigaciones, análisis, pericias, extracción


de muestras o verificaciones pertinentes para el cumplimiento de su cometido,
así como también tomar, por sí o con la colaboración de personas u
organismos públicos o privados, las medidas necesarias para determinar el
tipo, clase, especie, naturaleza, pureza, calidad, cantidad, medida, origen,
procedencia, valor, costo de producción, márgenes de beneficio, manipulación,
transformación, transporte y comercialización de las mercaderías vinculadas al
tráfico internacional.

l) Llevar los registros y ejercer el gobierno de las matrículas de los


despachantes de aduana, agentes de transporte aduanero, apoderados
generales y dependientes de unos y otros y de los importadores y
exportadores.

m) Llevar los registros siguientes:

104
I.) De mercadería librada al consumo con liquidación provisoria.

II.) De mercadería librada al consumo con facilidades para el pago de tributos.

III.) De mercadería librada al consumo con franquicia condicionada, total o


parcial, de prohibiciones a la importación o a la exportación o de tributos.

IV) De mercadería sometida a las diferentes destinaciones suspensivas.

V.) Los que fueren necesarios para la valoración de la mercadería.

VI.) De infractores a las disposiciones penales aduaneras así como los que
resultaren convenientes para prevenir y reprimir los delitos y las infracciones
sancionadas por el Código Aduanero.

VII.) Los demás registros que estimare conveniente para el mejor cumplimiento
de sus funciones.

n) Habilitar, con carácter precario o transitorio, lugares para la realización de


operaciones aduaneras.

ñ) Ejercer el poder de policía aduanera y la fuerza publica a fin de prevenir y


reprimir los delitos y las infracciones aduaneras y coordinar el ejercicio de tales
funciones con los demás organismos de la administración publica, y en
especial los de seguridad de la Nación, provincias y municipalidades,
requiriendo su colaboración así como también, en su caso, la de las Fuerzas
Armadas.

o) Suspender o modificar, fundadamente con carácter singular, aquellos


requisitos legales o reglamentarios de naturaleza meramente formal, siempre
que no afectare el control aduanero, la aplicación de prohibiciones a la
importación o a la exportación o el interés fiscal. Las suspensiones o
modificaciones de carácter singular entrarán en vigencia desde su notificación
al interesado.

p) Toda otra atribución necesaria para el cumplimiento de las funciones del


organismo, compatible con el cargo y con las establecidas en las normas
legales vigentes, a cuyo fin se entenderá que la nómina consagrada en los
apartados precedentes no reviste carácter taxativo.

3) Son atribuciones del Director General de la Dirección General Impositiva,


además de las previstas en los artículos anteriores:

a) Ejercer todas las funciones, poderes y facultades que las leyes,


reglamentos, resoluciones generales y otras disposiciones le encomienden, a
los fines de aplicar, determinar, percibir, recaudar, exigir, ejecutar y devolver o
reintegrar los impuestos y gravámenes de jurisdicción nacional y los recursos
de la seguridad social a cargo del organismo; interpretar las normas o resolver
las dudas que a ellos se refieren.

105
b) Instruir, cuando corresponda, los sumarios de prevención en las causas por
delitos o infracciones impositivas o de los recursos de la seguridad social.

c) Requerir directamente el auxilio inmediato de las fuerzas de seguridad y


policiales para el cumplimiento de sus funciones y facultades, sin perjuicio del
ejercicio de sus propias atribuciones.

d) Toda otra atribución necesaria para el cumplimiento de las funciones del


organismo, compatible con el cargo y con las establecidas en las normas
legales vigentes, a cuyo fin se entenderá que la nómina consagrada en los
apartados precedentes no reviste carácter taxativo.

Art. 10.- Tanto el Administrador Federal como los Directores Generales y los
Administradores de Aduana en sus respectivas jurisdicciones, determinarán
qué funcionarios y en qué medida los sustituirán en sus funciones de juez
administrativo.

El Administrador Federal, en todos los casos en que se autoriza la intervención


de otros funcionarios como jueces administrativos, podrá avocarse por vía de
superintendencia, al conocimiento y decisión de las cuestiones planteadas.

Las nuevas designaciones de funcionarios que sustituyan al Administrador


Federal y a los Directores Generales en las funciones de Juez administrativo,
deberán recaer en abogados o contadores públicos. El PODER EJECUTIVO
NACIONAL podrá dispensar el cumplimiento de este requisito, estableciendo
las condiciones que estime pertinentes, cuando circunstancias especiales lo
hagan necesario en determinadas zonas del país, debiendo tratarse, en tales
casos, de funcionarios con una antigüedad mínima de QUINCE (15) años en el
organismo, computándose, a estos efectos, el tiempo de servicio en la
DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA o en la ADMINISTRACION NACIONAL
DE ADUANAS, y que se hayan desempeñado en tareas técnicas o jurídicas en
los últimos CINCO (5) años, como mínimo. Previo al dictado de resolución y
como requisito esencial, el juez administrativo no abogado requerirá dictamen
del servicio jurídico, salvo que se tratare de la clausura preventiva prevista por
el inciso f del artículo 41 de la Ley N° 11.683 y de las resoluciones que se
dicten en virtud del artículo agregado a continuación del artículo 52 de la Ley
N° 11.683.

ORGANIZACION DEL SERVICIO ADUANERO

Art. 11.- Constituyen aduanas las distintas oficinas que, dentro de la


competencia que se les hubiere asignado, ejerzan las funciones de aplicación
de la legislación relativa a la importación y exportación de mercadería, en
especial las de percepción y fiscalización de las rentas públicas producidas por
los derechos y demás tributos con que las operaciones de importación y
exportación se hallan gravadas y las de control del tráfico internacional de
mercadería.

El PODER EJECUTIVO NACIONAL podrá trasladar el asiento geográfico de


las aduanas cuando lo aconsejaren motivos de control o de racionalización o

106
eficiencia de la administración aduanera o, en especial, toda vez que se
produjeren o resultare conveniente provocar variaciones en el volumen,
composición u orientación del tráfico internacional o en la localización
geográfica de las vías de intercambio, con la reserva de que aquellas aduanas
a que se refiere el artículo 75, inciso 10 "in fine" de la Constitución Nacional
sólo podrán ser trasladadas dentro del territorio de la respectiva provincia.

La ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS, teniendo en


consideración razones de mejor control, racionalización o eficiencia del servicio
o de tráfico internacional, asignará a las aduanas el carácter de permanentes o
transitorias, fijar o modificará la competencia territorial de las mismas, así como
la clase, naturaleza e importancia de las operaciones, regímenes y
destinaciones que pueden cumplirse ante ellas. En materia penal aduanera, sin
embargo, la jurisdicción y la competencia se determinarán siempre de acuerdo
a las normas vigentes a la fecha de la comisión de los hechos.

Corresponde a las aduanas el conocimiento y decisión en forma originaria de


todos los actos que deban cumplirse ante ellas dentro del ámbito de la
competencia que les atribuyeren el Código Aduanero, este decreto y la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.

Los agentes aduaneros que, con motivo de sus funciones de control necesiten
portar armas, deberán ser autorizados por el Director General de la Dirección
General de Aduanas y sujetarse a la reglamentación vigente en la materia.

RECURSOS Y PRESUPUESTO

Art. 12.- (Artículo derogado por art. 19 del Decreto N° 1399/2001 B.O.
5/11/2001)

Art. 13.- (Artículo derogado por art. 19 del Decreto N° 1399/2001 B.O.
5/11/2001)

Art. 14.- (Artículo derogado por art. 19 del Decreto N° 1399/2001 B.O.
5/11/2001)

NORMAS TRANSITORIAS

Art. 15.- Los poderes otorgados por las máximas autoridades de la


DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA y de la ADMINISTRACION NACIONAL
DE ADUANAS para representar al Fisco en los asuntos que tramitan en
jurisdicción tanto administrativa como judicial se mantendrán vigentes no
obstante la disolución de los organismos que trata el presente decreto.

Art. 16.- Luego de la disolución de los organismos a que se refiere el artículo


1° del presente decreto, el personal de la DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA
y de la ADMINISTRACION NACIONAL DE ADUANAS, pasará a serlo de la
ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS PUBLICOS.

107
Conservará sus cargos y niveles escalafonarios y la atención del despacho de
sus oficinas, rigiéndose por las normas legales vigentes hasta su modificación.

Los funcionarios de los organismos fusionados que a la fecha del presente


decreto revistan la calidad de jueces administrativos, continuarán ejerciendo
esa función hasta tanto se disponga lo contrario por autoridad competente.

Art. 17.- El personal de la ADMINISTRACION FEDERAL DE INGRESOS


PUBLICOS, hasta tanto se dicte el instrumento legal que regule su relación
laboral, se regirá transitoriamente por las normas vigentes anteriores a la
fusión, en la DIRECCION GENERAL IMPOSITIVA y en la ADMINISTRACION
NACIONAL DE ADUANAS según correspondiere.

En relación al personal que ingrese con posterioridad a la fusión, se regirá por


las condiciones laborales conforme al cargo vacante en que fuere designado.

Art. 18.- Dada la vigencia simultánea de DOS (2) convenios colectivos de


trabajo, el Administrador Federal determinará las normas aplicables en
aquellos asuntos de organización interna en los que no puedan identificarse las
que correspondan.

Art. 19.- Durante el ejercicio 1.997, la ADMINISTRACION FEDERAL DE


INGRESOS PUBLICOS retendrá y afectará como recursos propios un
CUATRO POR CIENTO (4 %) del total de las recaudaciones que las aduanas
efectúen sobre los tributos nacionales no regidos por la legislación aduanera.

VIGENCIA

Art. 20.- Deróganse:

a) Los artículos 1°, 2°, 3°, 4°, 5°, 6°, 7°, 8°, 9°, 10, 114 y el incorporado sin
número a continuación del 5° de la Ley N° 11.683 (t.o. en 1.978 y sus
modificaciones).

b) Los artículos 1°, 2°, 3°, 4°, 5°, 6°, 7°, 8°, 10, 11 y 12 de la Ley N° 22.091.

c) Los artículos 17, 18, 19, 20, 21, 22, 23, 24, 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 33,
34 y 35 del Código Aduanero.

Aclárase que mantendrán su vigencia todas las normas legales y


reglamentarias que integran el régimen aduanero y el de aplicación, percepción
y fiscalización de tributos y recursos de la seguridad social, en tanto no se
opongan a las disposiciones del presente decreto o a las que resultaren
aplicables de acuerdo con el mismo.

Art. 21.- Dése cuenta al HONORABLE CONGRESO DE LA NACION.

Art. 22.- Comuníquese, publíquese, dése a la Dirección Nacional del Registro


Oficial y archívese.- MENEM.- Jorge A. Rodríguez.- Roque B. Fernández.-

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Carlos V. Corach.- Alberto J. Mazza.- Jorge Domínguez.- Guido Di Tella.-
Susana B. Decibe.- José A. Caro Figueroa.

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