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Erradicación socio – espacial como consecuencia de la inserción de Chile en

el modelo neoliberal: Gualliguaica (1973 – 1999)

Paulina Carvajal Carvajal


Estudiante de Licenciatura en Historia
Universidad de Chile
paulina.carvajal@ug.uchile.cl

Tihare Castillo Ríos


Estudiante de Licenciatura en Historia
Universidad de Chile
tiharecastillolbgc@gmail.com

Resumen:

En 1975 Chile se convierte en en el primer país neoliberal, en donde el Estado comenzó


por un proceso de modernización y a velar por el desarrollo de las empresas, es así como
en el Valle de Elqui en 1996 comienza la construcciòn del embalse Puclaro, de una medida
de 830 hectáreas aprox. La construcción de éste significó la inundación de pequeños
poblados como Punta Azul, La Polvada y Gualliguaica y con esto el reasentamiento de 828
habitantes. En Gualliguaica, 140 familias fueron ubicadas a 400 metros de lo que fue su
pueblo original, en un nuevo pueblo llamado “Siglo XXI”, nombre asignado por haber sido
fundado el 1 de enero del año 2000. La diferencia fundamental entre estos pueblos es que
los habitantes ya no cuentan con el paso directo del río para regar sus siembras, ahora
tienen un uso racional del agua de riego, a través de una matriz de alimentación de sistemas
de riego tecnificado para los huertos.

El presente artículo abordará la problemática del desarraigo y la reubicación de los


pobladores de Gualliguaica y sus consecuencias, como resultado de las políticas aplicadas
por la dictadura cívico - militar en Chile entre los años 1973 y 2000.

Palabras clave: Erradicación, desarraigo, sistema neoliberal, privatizaciòn, ruralidad.

Summary:

In 1975 Chile became the first neoliberal country, where the government started a
modernization process and ensured the development of the companies, this is how in 1996
the Elqui Valley starts the construction of the Puclaro´s reservoir, including almost 830
hectares. Its construction meant the flood of small villages as Punta Azul, La Polvada and
Gualliguaica, and with this, the resettlement of 828 habitants. In Gualliguaica, 140 families
were located 400 meters from their original town, on a new place called “XX1 Century”,
named after the date of its foundation, on January first of 2000. The fundamental different
between this towns is that people don’t have a straight pass to the river to water their sowing
and instead, they have a rational use of the water through a system of technified irrigation
for their orchards.

The present article will approach the problem of the deracination and resettlement of the
people from Gualliguaica and its consequences, as a result of the policies applied for the
civic-military dictatorship in Chile between 1973 and 2000.

Key words: Eradication, deracination, neoliberal system, privatization, rurality.

Introducción:

Con la inserción de Chile en el sistema neoliberal a partir de 19751, el país comenzó a ser
poblado por una gran cantidad de empresas transnacionales que, en función de sus rubros
e intereses se instalan en diversas zonas del país. El Valle de Elqui, en la cuarta región de
Coquimbo no fue la excepción. El valle, reconocido por sus tierras fértiles, clima templado
y por el río del mismo nombre, que con sus vastas vertientes alimenta a los diversos
poblados que se asientan en él, fue el centro de interés de grandes transnacionales como
mineras y agroindustrias, estas últimas, atraídas por las bondades mencionadas
anteriormente fueron las que, actuando gracias a la cesión de derechos por parte del
Estado, privatizaron la tierra y los recursos, especialmente el agua, convirtiendo así al Valle
de Elqui en una zona dedicada al monocultivo de la uva, la que representa cuantiosas
ganancias, provenientes sobre todo de las exportaciones de los productos derivados de
esta. Los intereses de estas grandes empresas y del Estado, buscando modernizarse y con
su noción de progreso articularon el contexto ideal no sólo para que los recursos naturales
fueran privatizados, sino también para que una gran cantidad de poblados en el Valle del
Elqui fueran erradicados y sus habitantes reubicados en otros asentamientos u obligados a
migrar hacia las ciudades debido a la modificación en sus formas de vida y al desarraigo al
que se vieron sometidos.

La instalación de grandes transnacionales, dedicadas a la agroindustria, especialmente en


la zona norte chico del país, donde el recurso hídrico es escaso y muy necesario, trajo como
consecuencia la construcción de diversas obras, entre ellas en 1996 el embalse Puclaro y
con ello, como se mencionó anteriormente, la erradicación de diversos poblados como La

1
Armijo, Gladys. Caviedes, Hector. “Vicisitudes y cambios en el mundo rural chileno. La ultima
modernización agraria. ¿La gran solución de fin de siglo? Anales de la Universidad de Chile. Sexta serie,
N°5.1997. pp. 13-29.
Polvada, Punta Azul y Gualliguaica, es en este último caso en el que se centrará nuestro
estudio.

En este trabajo investigaremos la erradicación del poblado de Gualliguaica como


consecuencia directa de la inserción de Chile en el sistema neoliberal en la década del 70’,
materializado en el Valle del Elqui con la construcción del embalse Puclaro. Para ello
consultaremos bibliografía referente a la inserción de Chile en el sistema neoliberal y al
traslado y reasentamiento de los gualliguaiquinos e intentaremos responder: ¿En qué
medida repercutió la construcción del embalse Puclaro en la erradicación del pueblo
de Gualliguaica y en el desarraigo de sus habitantes? Para ello presentaremos primero
un contexto general de la situación de Chile en el período de 1975-2000, para luego
centrarnos de lleno en la situación de Gualliguaica respecto a la construcción del embalse
Puclaro. La obra será estudiada por el impacto que provocó en la erradicación del poblado
y en la relocalización de sus habitantes, quienes sufrieron “transformaciones en sus modos
de vida por la erradicación y relocalización”.2

Chile neoliberal:

Con el gobierno militar impuesto en Chile en el periodo comprendido entre 1973 y 1990, el
país adoptó un sistema económico de carácter neoliberal en el que el rol del Estado quedó
reducido, en la mayoría de los casos, solamente a subvencionar a las grandes empresas
que se constituían en el territorio, “se impone un Estado que si bien no aparece como
subsidiario si favorece y subsidia al empresariado; no regula los precios del mercado, más
bien deja al mercado el rol autónomo de regulación de estos”3. Por otra parte, los territorios
nacionales fueron adquiridos por entidades transnacionales que obtuvieron los derechos
sobre los recursos naturales y las tierras, produciéndose la privatización de recursos tan
indispensables como el agua. Como consecuencia directa de esto último los derechos
sobre el recurso hídrico, a partir del año 1981 “pueden ser libremente comprados, vendidos,

2
Castillo, Sebastián. “Entre las autoridades, la agricultura comercial y las comunidades locales: conflictos
durante la construcción del embalse Puclaro (1996 – 2001)”. Revista de Historia y Geografía. No. 33. 2015.
Pp. 149 – 172.
3
Berrios, Francisca. 2016. “Descampesinización, proletarización y resistencias en el Valle del Huasco Alto,
comuna de Alto del Carmen”. Tesis para optar al título de Antropóloga Social. Santiago, Universidad
Academia de Humanismo Cristiano. 162 p.
hipotecados y transferidos, tal como otros bienes raíces”4, lo que trajo como consecuencia
la excesiva privatización del tan anhelado recurso y con ello de las tierras que lo contenían.
La privatización de estas últimas se da de forma acelerada, reconstruyendo el mapa de la
tenencia de la tierra con grandes predios privados, dedicados casi exclusivamente a los
monocultivos frutícolas, bajo este nuevo contexto es el sector privado el que se encarga de
la modernización, a través del otorgamiento de créditos, del sector agroindustrial y de la
comercialización de sus productos5. El sector privado, bajo el amparo de la liberalización
del mercado externo, de la rebaja de los aranceles y de la eliminación de las cuotas de
exportación encuentra un escenario ideal para sus inversiones y sus empresas, las que
ahora, gracias a que el mercado neoliberal es el encargado de regular los precios y a la
libre competencia concentran la gran mayoría de los recursos naturales. Además, “con la
apertura de los mercados extranjeros se potencia la inversión empresarial en los territorios
rurales, expandiéndose de esta forma las cadenas de exportación frutícola, de
agroindustria, pesca y forestal, entre otros recursos”6. Lo que genera un enorme cambio de
estructura y de fondo para el campesinado, ya que con la incorporación de Chile al mercado
internacional comienza la importación de productos alimenticios, lo que trae como
consecuencia una baja en la comercialización de los productos locales y con ello el
empobrecimiento de los pequeños productores y campesinos, quienes se ven obligados a
vender sus terrenos a las grandes transnacionales dedicadas a los monocultivos, entrando
así en un círculo vicioso en el que aumentan su dependencia hacia el empresariado y sus
políticas. Las grandes empresas logran además imponer los monocultivos de exportación,
sobre todo en zonas como el norte chico y centro del país, debido a las condiciones
climáticas que estas presentan.

Respecto al agua, la promulgación del Código de Aguas en el año 1981 promovió la


apropiación de tierras con el objetivo de controlar el recurso, sobre todo en zonas como el
Valle del Elqui, donde el agua es escasa y sus características geográficas son aptas para
el cultivo frutícola, dicho Código establecía que el recurso hídrico era un bien público pero

4
Bauer, C.J. “Contra la corriente. Privatización, mercados de agua y el Estado de Chile”. Citado en
“Descampesinización, proletarización y resistencias en el Valle del Huasco Alto, comuna de Alto del Carmen”.
Pp.21.
5
Berrios, Francisca. 2016. “Descampesinización, proletarización y resistencias en el Valle del Huasco Alto,
comuna de Alto del Carmen”. Tesis para optar al título de Antropóloga Social. Santiago, Universidad
Academia de Humanismo Cristiano. 162 p.
6
Gómez, S, J. Echenique. “Agricultura Chilena. Las dos caras de la modernización.”; FLACSO Chile; AGRARIA;
Santiago, 1988. Citado en “Descampesinización, proletarización y resistencias en el Valle del Huasco Alto,
comuna de Alto del Carmen”.
a la vez privatizable, “las aguas son bienes nacionales de uso público y se otorga a los
particulares el derecho de aprovechamiento de ellas, en conformidad a las disposiciones
del presente código” (Código de Aguas, Título II: del dominio y aprovechamiento de las
aguas, artículo 5°), recurso que además podía ser aprovechado y utilizado a perpetuidad
sólo con cumplir las disposiciones que establecía el Código de Aguas7. Así, “el sistema
moderno de producción agrícola se expandió mediante la compra de tierras y acciones de
agua, quitando a los pequeños campesinos sus recursos obligándolos a vender sus tierras”8

Gracias a este contexto en el que se abandonó el modelo de Estado proteccionista y el


modelo de “crecimiento hacia adentro” para pasar a uno en el que cada vez se dependía
más de las exportaciones y la inserción en el mercado internacional, las asociaciones
campesinas en 1983 comenzaron a tomar medidas en contra de la posición adoptada por
el Estado, el cual reprimió severamente a estas, lo que contribuyó a acelerar aún más la
pérdida de tierras y recursos naturales de los pequeños agricultores frente a las grandes
transnacionales. La represión sistemática del régimen militar fue fundamental en la
imposición de estas reformas, privatizando no sólo la tierra, sino también los servicios
públicos y además imponiendo instituciones que actuaban en función de la dictadura,
facilitando la compra y venta de tierras y recursos a las grandes transnacionales y además
facilitando la apertura al mercado internacional y la llegada de productos extranjeros
mediante la rebaja de impuestos y aranceles a los productos de exportación y suscribiendo
tratados de libre comercio. El primer periodo de la implantación del modelo neoliberal en
Chile en 1975 se caracterizó por la “política aperturista y desregulada que aplicó el Gobierno
Militar chileno, con fuertes estímulos a la emergencia de un estamento empresarial ligado
a la producción exportadora”9. Así, Chile al consolidar el modelo neoliberal transformó los
programas y servicios que beneficiaban al mundo rural, en servicios para la agroindustria
de exportación y circunscribiendo las políticas que amparaban al campesinado a las leyes
del mercado y a la modernidad. Lo que trajo como consecuencia la consolidación de una
serie de obras de construcción a lo largo del país que favorecían la inversión de las grandes
empresas dedicadas a la minería y a la agroindustria, el Valle del Elqui, en la cuarta región

7
“El derecho de aprovechamiento de las aguas es de dominio de su titular, quien podrá usar, gozar y disponer
de él en conformidad de la ley”. Código de Aguas, Título II: del dominio y aprovechamiento de las aguas,
artículo 6°.
8
Berríos, F. (2016). “Descampesinización, proletarización y resistencias en el Valle del Huasco Alto, comuna
de Alto del Carmen” (Tesis para optar al título de Antropóloga Social). Universidad Academia de Humanismo
Cristiano. Santiago, Chile.
9
Ríos, Sandra. “Reestructuración del sector agrario en Chile 1975 – 2010: Entre el proteccionismo del Estado
y el modelo económico neoliberal”. Revista Economia e Sociologia Rural. Vol. 51. No. 3. 2013. 515 – 533.
de Coquimbo no fue la excepción con la construcción del embalse Puclaro para alimentar
los predios dedicados a los monocultivos, especialmente de la palta y la vid.

Discursos divergentes y promesas incumplidas:

Ya en el año 1972 se planteaban conversaciones para la construcción de un embalse en la


zona, para poder alimentar los predios otorgados a los campesinos como consecuencia de
la Reforma Agraria. Sin embargo, tras el golpe de Estado de 1973, el propósito de la
construcción del embalse cambió, pasando a actuar en función de los intereses de las
grandes transnacionales avaladas por el Estado. De esta forma se planeó la construcción
de una gran obra, que no sólo contemplaba el embalse como tal, sino que además implicaba
la construcción de una ruta alternativa, un túnel que conectaría con el futuro mirador y la
posibilidad de realizar deportes náuticos. El embalse, sería construido en la zona donde se
ubicaban los poblados de Gualliguaica, La Polvada y Punta Azul, lo que desencadenó el
conflicto entre los habitantes de estos poblados y las autoridades, tanto nacionales como
regionales, ya que las autoridades veían en el embalse el tan anhelado progreso para la
región, mientras que los pobladores afectados, en especial los Gualliguaiquinos
comenzaron a movilizarse en contra de las operaciones que se realizaban en su pueblo10.

Durante la construcción del embalse 1996-1999, el discurso de las autoridades se basó en


que el proyecto traería importantes mejoras y el tan anhelado progreso, que se supone
necesitaba la región. Así, la obra fue construida bajo el amparo de autoridades, no sólo
regionales, sino también nacionales y apoyado por diversas entidades empresariales que
veían un gran beneficio en la construcción del Puclaro, ignorando las quejas de los locales
quienes no estaban conformes con la erradicación del lugar donde habitaban. Las
autoridades respondieron a estas quejas prometiendo la reubicación de los pobladores de
Gualliguaica en un lugar más alto, con mejores viviendas e infraestructura, una nueva
escuela, un centro de salud, plazas públicas, entre otras. Promesas que incluso se
encuentran en los discursos oficiales, como lo es el pronunciado por Carlos Cruz, ministro
de Obras Públicas durante el periodo estudiado, en el que se resalta la idea de reubicar el
pueblo prometiendo mejoras en la infraestructura de las viviendas, en el estado de las

10
Castillo, Sebastián. “Entre las autoridades, la agricultura comercial y las comunidades locales: conflictos
durante la construcción del embalse Puclaro (1996-2001)”. Revista de Historia y Geografía. No. 33. 2015.
pp.149-172.
calles, en los sistemas de alcantarillado, entre otras, las que, cabe destacar, no se vieron
en la práctica. El discurso del ministro resaltaba además, “el altísimo impacto social
negativo, a pesar del progreso que significaba el embalse”. Para contrarrestar el alto coste
que significaba la construcción del embalse el funcionario público, en el mismo discurso
sostiene que “junto con el pago de la expropiación de terrenos y edificaciones, se buscó la
compensación para sus pérdidas inmobiliarias”.11 Aunque según los locales no hubo
preocupación de las autoridades, quienes sólo se limitaron a entregar indemnizaciones,
dejándolos en la incertidumbre de no saber cómo, cuándo ni dónde serían reubicados.

Las autoridades argumentaron que la obra estaba a cargo de una empresa privada, por lo
que ellos no debían hacerse responsables de la reubicación de los gualliguaiquinos,
quienes además, daban cuenta de que el nuevo pueblo no contaba con lo prometido por
las autoridades, ya que las casas eran mucho más pequeñas de las que poseían en el
poblado original de Gualliguaica12, sólo seis calles estaban pavimentadas y no contaban
con derechos de agua ni con las mejoras en los sistemas de alcantarillado.13

Antiguo Pueblo de Gualliguaica

11
Ministerio de Obras Públicas (2001). Gualliguaica: Primer Pueblo del Siglo XXI. Santiago, Chile: Ministerio
de Obras Públicas.
12
Los terrenos del pueblo original de Gualliguaica contaban con una extensión de aproximadamente 1000
mts, mientras que los de Siglo XXI, son de 400 mts. aproximadamente. Araya, Francisco. “Narrativa histórica
de la identidad comunitaria del pueblo de Gualliguaica tras el traslado y reasentamiento en el nuevo pueblo
Siglo XXI”.
13
Diversos testimonios recogidos por el diario regional “El Día” dan cuenta de esta situación, los que son
presentados en el artículo de Sebastián Castillo Castillo, titulado “Entre las autoridades, la agricultura
comercial y las comunidades locales: Conflictos durante la construcción del embalse Puclaro (1996 - 2001)”.
Fuente: Memorias del Siglo XXI. Fotografía tomada por René Arias, director de la escuela Amelia

Barahona de Mujica, 1997.

Desmantelamiento de Gualliguaica

Fuente: Memorias del Siglo XX. Fotografía tomada por René Arias, director de la escuela Amelia

Barahona de Mujica, 1997.

El desarraigo de los habitantes del antiguo Gualliguaica y sus consecuencias:

La construcción del embalse significó para los habitantes de Gualliguaica no sólo la


erradicación del poblado, sino también la pérdida de identidad y el desarraigo, ya que se
vieron obligados a instalarse a 400 metros de lo que fue su pueblo original, en uno nuevo
denominado “Siglo XXI”, pueblo que no contaba con una distribución similar a la del antiguo
pueblo de Gualliguaica, ya que el antiguo poblado “poseía 1 kilómetro de extensión en el
que se observaba una calle principal a pie de cerro, en la que se erguían antiguas viviendas
de adobe, una Iglesia levantada en 1757, una escuela, una Estación de Ferrocarriles y
edificaciones asociadas a esta última. Este poblado rural poseía además una cancha de
fútbol, un cementerio, almacenes, un policlínico y zonas de cultivo en la que se
desarrollaban huertos familiares de verduras y hortalizas. Otras actividades de producción
estaban relacionadas a la elaboración de pan amasado y mantequilla, al ganado caprino y
la artesanía de cactus y madera. Contaba con luz eléctrica y agua potable”14.

Como consecuencia los vecinos del nuevo pueblo Siglo XXI perdieron la cercanía que
tenían, ya que no contaba con espacios públicos como plazas o sedes vecinales en las que
los pobladores pudieran reunirse. Además, como lo señalan algunos habitantes, los
pobladores más longevos ni siquiera pudieron llegar a habitar en el nuevo pueblo, ya que
“se fueron por la pena de sentirse desarraigados de Gualliguaica”15. Sumado a ello las
tronaduras, el constante ir y venir de personas ajenas al poblado y la incertidumbre de no
saber hacia dónde serían reubicados repercutieron de forma negativa en cómo los
habitantes de Gualliguaica reaccionaron ante el embalse. Además, los pobladores vieron
como el patrimonio cultural del pueblo se perdía a medida que avanzaba la construcción
del embalse, ya que la iglesia, la estación de ferrocarriles, la escuela, casas de adobe y
áreas de cultivos que habían acompañado a los gualliguaiquinos por generaciones fueron
cubiertos por el agua. “Recuerdo que el agua comenzó a llegar al portón del colegio y fue
ahí cuando decidimos trasladarnos. Cada niño tomó su silla y comenzamos lentamente a
subir las laderas del cerro dejando atrás años de esfuerzo y lucha”.16 A pesar de los intentos
por emular el antiguo pueblo con una iglesia a imagen y semejanza de la antigua y una
estación de ferrocarriles del siglo XIX, que funciona como un museo, y la premisa de
entregar mejores condiciones de vida a los habitantes de Gualliguaica, entregando casas
nuevas y calles pavimentadas, no lograron superar la pena que significaba dejar el que
había sido su hogar por generaciones.

14
Olivares Herrera, Marcelo. Coordinador del Comité de Refundación de Gualliguaica. [en línea]
http://www.angelfire.com/wa/Elqui/.
15
Castillo, Sebastián. “Entre las autoridades, la agricultura comercial y las comunidades locales: conflictos
durante la construcción del embalse Puclaro (1996-2001)”. Revista de Historia y Geografía. No. 33. 2015.
pp.149-172.
16
Testimonio de René Arias, profesor y director de la escuela Amelia Barahona Mujica de Gualliguaica.
Entrevista diario “El Día”, 22-II-1999. Citado en: Castillo, Sebastián. “Entre las autoridades, la agricultura
comercial y las comunidades locales: conflictos durante la construcción del embalse Puclaro (1996-2001)”.
Revista de Historia y Geografía. No. 33. 2015. pp.149-172.
Inundación de Gualliguaica

Fuente: Memorias del Siglo XXI. Fotografía tomada por René Arias, director de la escuela Amelia

Barahona de Mujica, 1997.

Al llevar a cabo el plan de reubicación, en palabras de los propios habitantes, no hubo


ninguna instancia de acercamiento con la historia, tradiciones, necesidades y deseos del
pueblo, por lo que para los gualliguaiquinos hubo un trueque entre sus tradiciones y el
progreso, de esta forma “la modernidad ha empujado a Gualliguaica a la adhesión de
patrones culturales y comportamentales externos, aquellos propios de los nuevos actores
sociales provenientes de zonas urbanas que desarrollan un estilo de vida que apunta a
fortalecer lo individual y no lo colectivo”17. Además, el embalse impulsó actividades
económicas en distintos rubros, dejando de lado la agricultura tradicional de los habitantes
originales del pueblo, obligándolos a adoptar actividades relacionadas al turismo y a los
trabajos por temporadas, interfiriendo con sus modos de vida, perdiendo sus tradiciones y
en muchos casos sus formas de subsistencia, lo que generó un sentimiento de desarraigo

17
Rozas, G.; Arredondo, J. “Identidad, comunidad y desarrollo”. Magíster en Psicología Comunitaria y
Mideplan. Departamento de Psicología, Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de Chile. [en línea] En:
http://www.ministeriodesarrollosocial.gob.cl/btca/txtcompleto/mideplan/identidcomunidad-des.pdf. Citado en:
Araya, F. (2012). “Narrativa histórica de la identidad comunitaria del pueblo de Gualliguaica tras el traslado
y reasentamiento en el nuevo pueblo siglo XXI” (Tesis para obtener el Grado Académico de Magíster en
Psicología). Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de Chile, Santiago, Chile..
en los habitantes del nuevo pueblo “Siglo XXI, viéndose, en muchos casos, en la necesidad
de migrar hacia las ciudades y/o poblados cercanos.

Nuevo pueblo Siglo XXI

Fuente: Memorias del Siglo XXI. Fotografía tomada por René Arias, director de la escuela Amelia

Barahona de Mujica, 1997.

Conclusiones:

En Chile, bajo la dictadura de Augusto Pinochet se inició junto al modelo neoliberal un


proceso de modernización, fomento e instalación de empresas transnacionales, dedicadas
principalmente a los rubros de la minería y la agroindustria. Como consecuencia a lo largo
del territorio nacional se privatizaron recursos tan indispensables como el agua. El valle de
Elqui no quedó ajeno a este proceso, pues en 1996 comenzó la construcción del embalse
Puclaro, inundando pueblos ancestrales como Gualliguaica, cuyos primeros asentamientos
datan del año 1500 aproximadamente, con las culturas Diaguita y El Molle.

La construcción del embalse repercutió en los gualliguaiquinos con el traslado del poblado
original, reasentándolos en un nuevo espacio llamado “Siglo XXI”, ubicado en un lugar más
alto que el antiguo pueblo. Aunque sus pobladores se refieren a este como “Nuevo
Gualliguaica”. Esto último lo interpretamos como una forma de los habitantes de connotar
la identificación y filiación con sus raíces ancestrales, teniendo en cuenta además, que
Gualliguaica es un nombre centenario que en lengua quechua significa “pelea desigual del
triunfo”18, mientras que el nombre “Siglo XXI” es sólo una iniciativa del Estado por su fecha
de inauguración, es decir, el 1 de enero del año 2000.

Los pobladores se vieron afectados por la pérdida de sus costumbres, relaciones sociales
y trabajo, ya que con la reubicación perdieron el terreno en el cual emplazaban sus moradas
y principalmente sembradíos. Si bien en el terreno actual pueden desarrollar huertos, estos
solo rinden para autoabastecimiento y no pueden desplegar la actividad campesina en la
magnitud con que la desarrollaban en Gualliguaica, que para la mayoría de sus pobladores
era su modo de subsistencia. Asociado a esto, los lugareños relatan un problema sobre el
abastecimiento del agua para los huertos, ya que las cuotas de tal elemento pertenecen a
los parceleros, quienes “de buena voluntad” le facilitan el regadío los fines de semana. Esto
demuestra como la privatización del agua se hace presente, y afecta a los gualliguaiquinos,
quienes estaban acostumbrados a un acceso ilimitado al recurso. Esto les afecta aún más
en temporadas de sequía, como las que ocurrieron en la Región de Coquimbo durante el
periodo 2010 - 2011, ya que la carencia y mala distribución se hacen más agudas, lo que
es percibido por los lugareños como una injusticia. De esta forma logramos concluir que
los gualliguaiquinos sufrieron la pérdida no sólo de su poblado, sino también de su historia
y tradiciones en favor del progreso.

La relevancia de esta investigación radica en que no solamente Chile está desarrollando un


proceso de modernización neoliberal, sino que Latinoamérica en general, por lo que el
número de reasentamiento rural producto de la instalación de embalses o hidroeléctricas
va en aumento. Ante lo cual resulta sustancial la búsqueda de evidencias que den cuenta
de los efectos individuales, sociales y comunitarios, ya que hoy en día la gran mayoría de
estudios sobre estas situaciones de reasentamientos son de carácter cultural y ecológico y
llevados a cabo por las propias empresas responsables de administrar estas edificaciones,
por lo cual ponemos en tela de juicio su objetividad en los resultados.

Bibliografía:

18
Araya, F. (2012). “Narrativa histórica de la identidad comunitaria del pueblo de Gualliguaica tras el
traslado y reasentamiento en el nuevo pueblo siglo XXI” (Tesis para obtener el Grado Académico de Magíster
en Psicología). Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de Chile, Santiago, Chile.
Artículos:

Araya, Francisco. “Narrativa histórica de la identidad comunitaria del pueblo de


Gualliguaica tras el traslado y reasentamiento en el nuevo pueblo Siglo XXI”.

Armijo, Gladys. Caviedes, Hector. “Vicisitudes y cambios en el mundo rural chileno. La


ultima modernización agraria. ¿La gran solución de fin de siglo? Anales de la Universidad
de Chile. Sexta serie, N°5.1997. pp. 13-29.

Berrios, Francisca. 2016. “Descampesinización, proletarización y resistencias en el Valle


del Huasco Alto, comuna de Alto del Carmen”. Tesis para optar al título de Antropóloga
Social. Santiago, Universidad Academia de Humanismo Cristiano. 162 p.

Bauer, C.J. “Contra la corriente. Privatización, mercados de agua y el Estado de Chile”.


Revista Chilena de Derecho. Vol. 30. No. 2. 2003. pp. 409 - 413.

Castillo, Sebastián. “Entre las autoridades, la agricultura comercial y las comunidades


locales: conflictos durante la construcción del embalse Puclaro (1996 – 2001)”. Revista de
Historia y Geografía. No. 33. 2015. pp. 149 – 172.

Gómez, S, J. Echenique. “Agricultura Chilena. Las dos caras de la modernización”.


Santiago. Edición de Leonel Roach. 1988. p. 22.

Metheus e Silva, Luis. “Desposeer para acumular: reflexiones sobre las contradicciones del
proceso de modernización neoliberal de la agricultura chilena”. Mundo Agrario. Vol. 17. No.
34. 2016. pp. 1 – 28.

Ríos, Sandra. “Reestructuración del sector agrario en Chile 1975 – 2010: Entre el
proteccionismo del Estado y el modelo económico neoliberal”. Revista Economia e
Sociologia Rural. Vol. 51. No. 3. 2013. 515 – 533.

Documentos:

Código de Aguas, Título II: del dominio y aprovechamiento de las aguas, artículo 6°. Libro
Primero: de las aguas y del derecho de aprovechamiento.

Ministerio de Obras Públicas (2001). Gualliguaica: Primer Pueblo del Siglo XXI. Santiago,
Chile: Ministerio de Obras Públicas.
Diario el Día, La Serena, 1996-2001.

Documentos en línea:

Olivares Herrera, Marcelo. Coordinador del Comité de Refundación de Gualliguaica.


(http://www.angelfire.com/wa/Elqui)

Rozas, G.; Arredondo, J. “Identidad, comunidad y desarrollo”. Ministerio de Desarrollo


Social. 2006.
(http://www.ministeriodesarrollosocial.gob.cl/btca/txtcompleto/mideplan/identidcomunidad-
des.pdf.)

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