Desde sus principios, Roma se ha caracterizado por poseer una reseña
religiosa, lo cual ha impulsado grandemente a esta civilización. En la antigüedad los Romanos varones utilizaban la “Toga” como prenda de vestir, esta era un tipo de traje largo blanco que en la parte del torso llevaba una medalla dorada llamada “bulla” esta a su vez logró identificar las clases sociales ya que en los varones de familia noble este objeto era de oro, más en los de las familias plebes se utilizaban de un tipo de pasta o material plástico rudimentario inventado por la antigua civilización Romana. A comienzos del medioevo las “bullas” pasan de ser un atavío en la prenda de vestir para convertirse en el sello de un documento apostólico lo que produjo cambio en su nombre pasando de “bulla a bula”. La bula es un sello redondo de plomo con lo que se sellaba el documento eclesiástico en donde exclusivamente iba consignado el nombre del Papa (pontífice) desde que fue escogido en su cargo hasta la fecha de caducidad de este mismo, las normas, los prescriptos, las salutaciones y reglamentos establecidos por el Papa obviamente encaminados en dirección con los principios de la religión. Anteriormente la bula estaban escrita las iniciales SPA Y SPE que hacia referencia a San Pedro y a San Pablo y entre medio de esas siglas había una cruz, el documento eclesiástico era escrito en pergaminos o en papiros su encabezado generalmente era una salutación y este documento iba dirigida al arzobispo y visto por él y toda la cancillería clerical y este registro era guardado como lo que conócenos en gestión documental como “archivo privado e histórico”. Como a medida pasan los años así mismo va creciendo el ingenio y la creativa en el siglo XX decidieron cambiar el material del estos documentos y ahora son hechos de papel. Todo esto acerca de bula ha sido de gran relevancia para la religión porque si bien ya sabemos Roma mundialmente es el país en donde más se mueve la fe religiosamente y en especial la católica, si este método de registro no hubiese sido inventado la labor de ser Papa y de llevar el orden y consecución de todas las ordenanzas divina sería todo un desafío, considerando que no solamente es del Papa actual sino también de todos aquellos que lo fueron en tiempos pasado. El fin de la bula es autentificar y dejar constancia de genuinidad en el documento, como este siempre es escrito en latín las traducciones hechas por el arzobispo son contadas como copias pero de igual manera ellas también se le coloca la bula firmada y sella con el sello Papal y luego por el arzobispo para así garantizar el buen manejo de legitimad y confidencialidad COSTUMBRE CRIOLLLAS
Desde la colonización de los Españoles en
América, comenzó a surgir una nueva raza llamada “Criollos” estos eran producto de padres Españoles pero engendrados y nacidos en el continente Americano, desde el origen de esta población hubo una falta de identidad que los obligo a tratar de hallar su propia razón de ser, enfrentándose a la realidad social y a los factores que influían en ella. Como ya lo había mencionado antes los criollos tenían sangre Española pero su nacionalidad era Americana, con el paso de los años el incremento de esta población era más notorio por lo cual comenzaron a dispersarse por toda América y de allí surgió el término “la nueva España” denominada así por el asentamiento Español y la gran cantidad de personas con raza Española. Desde ese momento comenzó surgir algo a quienes los historiadores llaman “Americanización” en donde los la interacción mutua entre criollos ya aborígenes fue el escalón para el surgimiento de nuevas costumbres. Los criollos nombraron los accidentes geográficos, las montañas, ríos llanuras, riveras, valles, vegetación y todo los recursos naturales Americanos según su conocimiento Europeo y teniendo en cuenta el dialecto y costumbres nativas, otras de las costumbres criolla fue la devoción religiosa ya que muchos frailes llegaron al nuevo continente y de su descendencia se promulgo el legado divino lo cual motivo el auge religioso en América, convenciendo y enseñando a la población nativa la creencia en un Dios y el respeto que merece la religión y el catolicismo. Posteriormente el enrace entre criollos e indígenas era más frecuentes lo que produjo un enlace cultural en donde las creencias, las artes, la cultura, la gastronomía y otros factores culturales fueron partícipes de esta unión racial. A demás esta unión no solo fue por gusto de ambas partes sino también por la búsqueda de identidad que sentían los criollos y esto provoco que la unión entre estas dos poblaciones fuese el encuentro de la identidad criolla.