Colombia Ciencia y

Tecnología
COLCIENCIAS
jaguirre@colciencias.gov.co
ISSN 0120-5595
COLOMBIA

2001

Alberto G. Flórez Malagón

CRISIS DISCIPLINAR Y ESTUDIOS CULTURALES
Colombia Ciencia y Tecnología, Octubre - Diciembre, Vol. 19, número 4
COLCIENCIAS
Bogotá, Colombia
pp.3-8

http://redalyc.uaemex.mx
 Rev. Colombia Ciencia y Tecnología, Vol. 19, No. 4 • Año 2001 • pp. 3-8 INFORME ESPECIAL

CRISIS DISCIPLINAR
Y ESTUDIOS CULTURALES
Por: Alberto G. Flórez Malagón
Profesor Asociado, Pontificia Universidad Javeriana.
Jefe del Programa Nacional de Ciencias Sociales
y Humanas, Colciencias

E
n reciente conferencia en Bogotá, el filó-
Postal cortesía del autor

sofo español Manuel Reyes Mate afirma-

ba ante la crítica situación colombiana
que, una de las razones por las cuales no
se alcanza la paz en este país es porque ella “no se piensa lo
suficiente”. El sentido de esta frase podría leerse como una
crítica contundente al pensamiento sin innovación, a aquel
ciclo cerrado en el cual, esencialmente, se insiste en leer la
RESUMEN :
realidad de manera positiva, como si ella hablara o se nos
ESTE ARTÍCULO ESBOZA CAMBIOS ESTRUCTURALES
abriera por sí sola.
EN EL QUEHACER DE LAS CIENCIAS SOCIALES Y Nos dedicamos a “estudiar” dicha realidad sobre todo a
PLANTEA CAMINOS DE REESTRUCTURACIÓN QUE través de la intervención, de la cuantificación, y de la divulga-
ción. Transcribimos nuestras observaciones y tomamos parti-
IMPLICAN UN RETORNO A LAS MIRADAS
do. De allí el auge pragmático de las violentologías y de otras
INTEGRALES ACERCA DEL SER HUMANO. ESTO SE maneras comprometidas de leer la “realidad” del país, prin-
cipalmente desde los modelos más tradicionales de la econo-
PROPONE A TRAVÉS DE PRÁCTICAS
mía, de la ciencia política, de la sociología, de la antropología
TRANSDISCIPLINARIAS QUE AVANZAN MÁS y de la historia. Lo común a estos modelos es su carácter
ALLÁ DE LOS EJERCICIOS DENOMINADOS objetivista, en el cual, además, el activismo académico espera
llevar a la resolución de “problemas concretos”, al tiempo que
INTERDISCIPLINARIOS. reduce el tema de la crítica al de la generación de propuestas
alternativas de tipo práctico.
SE EJEMPLARIZA EL CASO DE LOS ESTUDIOS
Una mirada retrospectiva y desencantada hacia los efectos
CULTURALES QUE OFRECEN NUEVAS MANERAS
sociales más amplios de las orientaciones y expectativas que
DE INTERPRETAR LA REALIDAD AL ENFATIZAR generó el pensamiento objetivista a partir del Siglo XIX en las
ciencias sociales, y que clama por un espíritu más allá de lo
EL ANÁLISIS DE LA FUNCIÓN POLÍTICA
que se ha producido, puede resumirse en las palabras de
DE LA CULTURA. Basarab Nicolescu:

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3 ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○ ○
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Rev. Colombia Ciencia y Tecnología, Vol. 19, No. 4 • Año 2001 • pp. 3-8

Por una parte, el nuevo mundo de mación las que han sido completamen- nariedad y su jerarquía interna, es de-
la revolución social ha sido experi- te alteradas.2 cir de la fragmentación de los saberes y
mentado ... y sus resultados han sido la jerarquización de los mismos a par-
Pensar un nuevo proyecto, que su-
catastróficos. El hombre nuevo no tir de modelos científicos decimonó-
pere las expectativas universalistas del
era más que un hombre vacío y tris- nicos, que en sus procesos de demarca-
metarrelato occidental, implica, ade-
te. Cualesquiera que sean los arre- ción separaron la actividad cognoscitiva
más de una revolución epistemológica,
glos cosméticos que no tardará en de sus elementos éticos, estéticos y por
comprometer ética y políticamente to-
sufrir en el futuro la “revolución supuesto metafísicos.4
dos los saberes en un intento por pen-
social”, no se podrá borrar de nues-
sar diferente, por comprender de ma-
tra memoria colectiva lo que ha sido
nera diferente nuestros problemas y
efectivamente experimentado. De
buscarles solución a la raíz. Esta solu-
otra parte, si se tratara de un “pa- 1
Basarab Nicolescu, La
ción no se logrará si no se parte de prác-
raíso perdido”... aún si ese eventual transdisciplinariedad-Manifiesto ,
ticas discursivas renovadas que pasan Éditions du Rocher - Collection
retorno se acompañara de una re- “Transdisciplinarité” International
por la revisión de los fundamentos de Center for Transdisciplinary Research
volución interior dogmática, ello no
las instituciones erigidas en productoras http://perso.club-internet.fr/nicol/
sería más que una imagen retros- ciret/ - 25 Août, 1999.
centrales de sentido, principalmente las
pectiva de la revolución social. Los 2
Ron Burnett “Disciplines in Crisis:
universidades, y el primer momento de Transdisciplinary Approaches in the
diferentes integrismos religiosos que
esta revisión pasa por la crítica episte- Arts, Humanities and Sciences” http:/
cubren la superficie de la tierra con /perso.club-internet.fr/nicol/ciret/
mológica de los saberes canónicos, la
su manto negro son un presagio 3
Unos buenos ejemplos serían: la
cual esbozaremos aquí brevemente. crítica de Carlos Reynoso, Apogeo y
funesto de la violencia y la sangre
decadencia de los estudios
que podría brotar de esa caricatura culturales. Una visión antropológica
(Barcelona: Editorial Gedisa, 2000),
de revolución interior.1 el ya clásico debate planteado por
Las nuevas ciencias Keith Windschuttle, The Killing of
Uno de los ámbitos donde se gene-
sociales y humanas History: How Literary Critics and
raron las expectativas teleológicas de la Social Theorists are Murdering our
Past (New York: The Free Press,
ciencia, y que ha empezado a cambiar El desarrollo actual de las ciencias 1997), el texto de Timothy Bewes,
de manera radical, es la naturaleza sociales y humanas es terreno abonado Cynism and Posmodernity (Londres:
Verso, 1997) y aun el más liviano
misma de las disciplinas sociales, su para las nuevas formas de pensamien- pero agresivo libro de Alan Sokal y
función y su papel dentro y fuera de las to que dicho proyecto requiere. La revo- Jean Bricmont, Imposturas
intelectuales (Barcelona: Paidós,
instituciones. Especialmente porque las lución científica que vivimos en la ac- 1999)
disciplinas, como espacios funcionales tualidad es una que da salidas a nuevas 4
Aunque los sociólogos e
preguntas, a nuevas formas de conocer, historiadores de la ciencia nos han
al desarrollo del mundo occidental, se recordado una y otra vez cómo la
constituyeron en sitios privilegiados de formas complejas, holísticas y trans- ciencia y las disciplinas no son cosas
sino procesos abiertos y que en la
generación de sentido para el proyecto disciplinarias. Inevitablemente, a pesar práctica de una “buena ciencia”, las
de control y disciplinamiento de las so- de las fuertes resistencias de muchos fronteras disciplinares no parecen
haber sido más que las excusas
ciedades modernas. académicos disciplinaristas 3, se están institucionales y gremiales para tener
desarrollando nuevas ciencias sociales, una puerta de entrada a una práctica
Sin embargo, el contexto para este que las supera en su pretensión
nuevos campos de pensamiento y cono- fundacional, me referiré aquí a
cambio no es solamente la naturaleza
cimiento, y por lo tanto nuevas formas aquellos espacios acríticos del
individual o la historia de una u otra ejercicio de la ciencia, que pueden
de acción. entenderse como aquellos de la
disciplina. Más precisamente son las disciplinariedad cerrada y
condiciones sociales y culturales para Uno de los principales puntos de neopositivista que todavía se
reproduce con pretensiones
la creación y la comunicación de las ruptura que potencia esta revolución del hegemónicas, especialmente a través
ideas, artefactos, conocimiento e infor- pensamiento, es la crisis de la discipli- del sistema educativo.

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Crisis Disciplinar y Estudios Culturales

Culturales, Alberto G. Flórez Malagón

Este modelo de ciencia se fundó,

como lo describe Santiago Castro,
“en un modelo de ciencia que, des-
de Platón hasta Luhman, pasando
por Descartes, Husserl y Durkheim,
plantea que la cientificidad del co-
nocimiento se obtiene solamente si
existe una ‘ruptura epistemológica’
con la opinión, con el sentido co-
mún y con todo tipo de nociones

Postal cortesía del autor

‘precientíficas’. Este modelo de la
representación, que Max Horkhei-
mer bautizara con el nombre de teo-
ría tradicional, señala básicamente
que a mayor distancia del sentido
común, mayor es la posibilidad de
crear teóricamente al objeto y de suma de saberes” como la llamaría muniquen y reconcilien, no únicamente
relativizar al máximo los prejuicios Nelly Richard.7 La pluridisciplinariedad, con las humanidades y las ciencias so-
subjetivos del científico, incluyendo, por ejemplo, consistiría en el estudio del ciales sino también con el arte, la lite-
claro está, sus valoraciones políti- objeto de una sola y misma disciplina ratura, la poesía y otras experiencias
cas y morales. Esta eliminación de por medio de varias disciplinas a la vez. espirituales.8
los elementos subjetivos del cono- Al tiempo, la interdisciplinariedad
cimiento viene garantizada por un concierne a la transferencia de métodos 5
método incontaminado por lo so- Santiago Castro-Gómez, “Apogeo y
de una disciplina a otra. Como se entien- decadencia de la teoría tradicional.
cial, que se funda en las matemáti- de, estas prácticas sobrepasan a las dis- Una visión desde los intersticios”,
cas y la lógica”.5 Ponencia presentada en el I Encuen-
ciplinas, pero su finalidad queda a la vez tro Internacional sobre estudios
inscrita en la investigación disciplinaria. culturales latinoamericanos: Retos
Aunque la realidad no existe frag- desde y sobre la región andina”.
mentada, las disciplinas académicas, Más adelante, y potenciada por la Quito, Junio 13-15 de 2001.
así la representaron.6 Las disciplinas si- crítica posmodernista, esta veta de rup-
6
Immanuel Wallerstein, et al., Abrir
las ciencias sociales. Reporte de la
guieron sus propios lenguajes, culturas tura se convirtió en alternativa cuando Comisión Gulbenkian sobre la
de investigación y aplicaciones prácti- surgió la transdisciplinariedad . Esta
Reestructuración de las Ciencias
Sociales (México: Siglo Veintiuno,
cas. La dificultad radica en que, a me- nueva manera de conocer aboga por un 1996)
dida que ellas se especializaron, cesa- conocimiento más allá de las discipli- 7
Nelly Richard, “Antidisciplina,
ron de ver o aun prever las conexiones nas. Por una mirada integradora, co-
transdisciplina y redisciplinamientos
del saber” Re vista de Estudios
potenciales que ellas tienen con otras múnmente tratada como holística. La Sociales. Universidad de los Andes/
áreas. transdisciplinariedad no busca el domi-
Fundación Social 1 (agosto 1998):
118-123.
La resistencia ante la propuesta nio en varias disciplinas, sino abrir to- 8
Basarab Nicolescu, La
fragmentadora que se fortaleció con el das las disciplinas a lo que todas tienen Transdisciplinariedad- Manifiesto.
Ver también Primer Congreso
auge de la modernidad, se empezó a en común y a lo que yace más allá de Mundial sobre transdisciplinariedad.
expresar dentro de las ciencias, a partir sus fronteras. La visión transdiscipli- Declaración Transdisciplinaria .
Artículo 3, 5 Convento da Arrábida,
de los movimientos, al principio tími- naria es definitivamente abierta y ade- Portugal, 6 de noviembre de 1994.
Comité de Redacción: Lima de
dos, hacia la pluridisciplinariedad, y la más trasciende el campo de las ciencias Freitas, Edgar Morin y Basarab
interdisciplinariedad, esa “pacífica exactas estimulándolas para que se co- Nicolescu.

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A los investigadores más ortodoxos,

las propuestas holísticas que acompa-
ñan a estas tendencias les seguirán pa-
reciendo utópicas, producto de “modas
intelectuales”, y aun contraproducen-
tes e irreales ante las crisis que vive el
país. Pero, ciertamente los ejercicios del
Postal cortesía del autor

nuevo pensamiento son más que ideas.

Son generadores de nuevo sentido. Ade-
más, ya van permeando las institucio-
nes tanto públicas como privadas. No
sorprende, por ejemplo, la reciente
apropiación del pensamiento de Edgar
Morin, uno de los defensores más reco-
nocidos de la transdisciplinariedad, por
parte de la Unesco y de nuestro Ministe-
la administración financiera en la toma aun sin querer, más y más incompeten-
rio Nacional de Educación en la reciente
de decisiones universitarias con claro tes. Los desafíos mayores de nuestra épo-
publicación de Los Siete Saberes para
interés instrumental. ca, como por ejemplo los desafíos éti-
la Educación del Futuro; el auge de
cos, requieren capacidades más y más
nuevos programas universitarios “for- No olvidemos, en este contexto, el
amplias. Pero la suma de los mejores
males” que rompen la tradición disci- carácter legitimador del poder de la ac-
especialistas en sus dominios no puede
plinar, especialmente a través de los tual estructura universitaria. En Colom-
engendrar, evidentemente, más que in-
Estudios Culturales; o la apertura del bia, profesionalización y política públi-
competencia generalizada, porque el
Ministerio del Medio Ambiente por in- ca han ido tomadas de la mano, desde
total de las capacidades no es la capa-
cluir en sus discusiones acerca de po- épocas decimonónicas y aun coloniales.
cidad: en plan técnico, la intersección
lítica investigativa otros “modos” de El individuo “doctor” legitimado por la
entre los diferentes campos del saber es
investigación diferentes a los estric- Universidad sigue siendo el dueño de un conjunto vacío. Ahora bien, ¿qué es
tamente científicos. importantes espacios discursivos y de la un dirigente individual o colectivo, sino
Parte de la dinámica incluye tam- realidad que ellos afectan. Desde allí aquel que es capaz de tener en cuenta
bién la fuerte resistencia y defensa ante accede, asciende y controla el mercado todos los elementos del problema que
el avance de las nuevas tendencias. laboral, desde allí se asocia gremial- examina? 9
Aparte de una rica y leída literatura co- mente y desde allí se relaciona con el
poder en sentido amplio. Es obvio entonces que la revolución
mo la mencionada anteriormente, di- epistemológica que expone y critica las
cha resistencia se expresa sobre todo en Pero esta función, lo que parece ex- prácticas disciplinares y disciplinadoras
la inercia de la profesionalización, en presar es un efecto contraproducente a sea “subversiva” y sea tratada como tal
la institucionalización pragmática que su propia existencia: un proceso de for-
genera y mantiene pequeños poderes mación babelizadora que genera diri-
gremiales, y en la excesiva presencia de gentes que eventualmente se vuelven 9
Ibid.

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Crisis Disciplinar y Estudios Culturales

Culturales, Alberto G. Flórez Malagón

LA REVOLUCIÓN CIENTÍFICA en combate) son inmensas. Todas com- objetivas; en segundo lugar, ... por-
parten la angustia de querer tratar de que el estudio de la cultura quedó
QUE VIVIMOS EN LA
manera diferente los problemas que no reservado, o bien a las humanida-
ACTUALIDAD DA SALIDAS A parecen resolverse adecuadamente des- des, que no producían ‘conocimien-
de la ciencia disciplinar. Todas son ex- to’ —como las ciencias— sino
NUEVAS PREGUNTAS, A NUEVAS
plícitamente políticas con un claro ho- únicamente ‘saber’, encargadas de
FORMAS DE CONOCER, FORMAS rizonte moral (de allí la importante abordar sistemáticamente las ma-
diferencia entre estudios de la cultura y nifestaciones de la cultura ‘alta’ y
COMPLEJAS, HOLÍSTICAS Y
estudios culturales, por ejemplo). Y ade- ‘letrada’ (a ello responde la crea-
TRANSDISCIPLINARIAS . más, han tenido alto éxito en sus pro- ción de las facultades de ‘filosofía y
cesos de institucionalización. Los estu- letras’), o bien a los folcloristas, en-
dios ambientales, de género, culturales, cargados de estudiar las culturas
poscoloniales y subalternos, son algu- llamadas ‘populares’... A diferencia
nos de los ejemplos más conocidos. de las ciencias naturales y sociales,
Aunque todas las expresiones de las las humanidades no conocían para
nuevas ciencias transdisciplinares son transformar, sino que sabían para
por los que defienden los efectos que esta
propuestas complejas y podrían ser dis- conservar.11
estructura generadora de discursos trae
cutidas en cada caso particular, aquí nos Es apenas durante el último tercio
en la cotidianidad de “los centros de
referiremos brevemente a una de estas del siglo XX cuando esta concepción de
saber” y por extensión en la sociedad
opciones, los estudios culturales, porque lo cultural empieza a ser cuestionada
colombiana. Se hace imperativo, enton-
representan una fuerza renovadora muy
ces, como nos lo recuerda Santiago Cas- seriamente. Nuevas voces, provenientes
importante en toda América Latina,
tro, “empezar a diseñar nuevos ‘mapas sobre todo de grupos marginales del
porque en el caso colombiano su evolu-
cognitivos’ que permitan conceptualizar primer mundo y de académicos activos
ción ha sido muy dinámica y ya co-
la estructuración de un mundo social en las ex-colonias europeas, empiezan
mienza incluso a institucionalizarse en
hoy en día mediado por la globalización a dudar de las metodologías de las cien-
varias de las principales universidades
del capital y de los imaginarios cultu- cias sociales, y de los estudiosos más
colombianas, y sobre todo porque su
rales. La reproducción de capital de- clásicos de la cultura, supuestamente
carácter crítico resulta muy pertinente
manda la generación de imaginarios orientados a estudiar leyes universales
para aportar académicamente ante la
que promuevan la innovación constan- y objetivas de la vida social, que pudie-
crisis nacional.
te, la experimentación y el nomadismo sen ser aplicadas a todas las sociedades
Como sintetizan Santiago Castro y del planeta. Actores políticos como las
de los individuos y de los grupos socia-
Óscar Guardiola, mujeres, los homosexuales y las mino-
les fragmentados.”10 Y tomará un tiem-
po para que en nuestras comunidades en el primer momento de discipli- rías étnicas pusieron en cuestión la neu-
de investigadores nos demos cuenta ca- narización de las ciencias sociales tralidad de las ciencias sociales y denun-
bal de esta tarea. ... ninguna de las disciplinas se ocu- ciaron su parcialidad en términos de
paba específicamente de un objeto género, clase y raza.
llamado ‘cultura’. La ‘culturología’
no se formó jamás debido a dos ra-
¿Y qué de los Estudios
zones estructurales: en primer lugar,
Culturales? 10
Santiago Castro, ed., La
porque el modelo positivista que Reestructuración de las ciencias
sociales en América Latina (Bogotá:
Las alternativas expresadas en los adoptaron las ciencias sociales obli- Centro Editorial Javeriano, 2000),
nuevos campos que surgen en contra de gaba a mirar el ámbito de la cul- XXII.

la disciplinariedad (en debate y a veces tura como epifenómeno de leyes 11

Ibid, XXXII

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En este contexto surgieron los es- dominantes que otras y por tanto estas do sus energías en los campos del aná-
tudios culturales como nuevo espacio últimas son las que más aportan en el lisis tradicional, para que pueda darse
de encuentro entre las disciplinas...11 componente de formación. Explicitar e cuenta de contextos holísticos que pue-
incluso revaluar dichos supuestos domi- den ser interpretados de manera reno-
La principal tarea de los estudios
nantes es una de las primeras tareas que vadora desde el nuevo campo, especial-
culturales es, entonces, la de enfocarse
los estudios culturales proponen en un mente en contextos de violencia, en los
al estudio de la función política de la
ejercicio que podríamos llamar de cuales la practicidad de la cotidianidad
cultura. En otras palabras, estudiar las
“pensar el país”. parece cerrar el pensamiento con más
prácticas culturales y sus relaciones con
frecuencia de la que percibimos.
el poder. De allí que su preocupación La segunda tarea implica una exi-
constante sea exponer las relaciones de gencia importante a las instituciones
poder y examinar cómo estas relaciones educativas y de investigación. No es po-
influencian y moldean las prácticas cul- sible continuar reproduciendo prácticas
turales. Este enfoque crea una diferencia sociales y culturales que alimentan las
con los estudios de la cultura que desa- expresiones viciadas de nuestra vida
rrollaron las disciplinas clásicas, en los pública. Y el corazón de estas deforma-
cuales se concebía la cultura como una ciones no es otro que la reproducción
entidad discreta divorciada de su contexto acrítica de lo cultural. La necesidad de
social o político. Los estudios culturales empezar con la crítica institucional res-
por lo tanto insisten en la no separación ponde igualmente a la función doble
de la experiencia subjetiva cotidiana de la que ejercitan los estudios culturales: la
red más amplia que la contiene. cultura es al tiempo el objeto de estu-
dio y la localización de la crítica políti- 11
Ibíd ., XXIII.“La ‘cultura’ de la que
Los estudios culturales se orientan
ca y la acción.12 se ocupan los estudios culturales
como campo académico hacia una eva- tiene menos que ver con los
Las instituciones se convierten, en artefactos culturales en sí mismos
luación moral de nuestra sociedad (textos, obras de arte, valores,
y hacia una línea radical de acción esta perspectiva, en campo de debate y tecnologías, conocimientos, etc.),
en consecuencia comunican su esencia que con los procesos estructurales de
política. Explicitar esta función plantea producción, distribución y recepción
una doble tarea que implica un trabajo crítica a la sociedad más amplia. En- de esos artefactos. Lo que se busca
investigar son las prácticas a través
interno crítico, el cual explicitaría los tonces, la propuesta de los estudios cul- de las cuales es construida
supuestos políticos que orientan la pro- turales busca complementar el aporte políticamente la subjetividad... Los
modos diversos en que nos ‘abrimos
ducción y reproducción de conocimien- de las disciplinas que siguen canalizan- al mundo’, antes que expresión
orgánica de la identidad de un
to, y segundo, una vez expuestas las pueblo o de competencias
opciones, la generación de proyectos de universales de la ‘naturaleza
humana’, son construcciones que se
comunicación acordes a las nuevas hallan ancladas en sistemas
orientaciones. materiales de significación
atravesados por lógicas y relaciones
de poder. Los estudios culturales
Aunque es claro que el tema no se toman como objeto de análisis esos
plantea en una sociedad intelectual- mecanismos de producción de
significados, el modo en que se
mente monolítica, aunque sí con mu- reproducen y distribuyen, los
chos grupos de ese tipo, armados y no, dispositivos de selección que
utilizan, así como la forma en que se
también es claro que la convivencia de genera la dialéctica entre sujeto y
diferentes posiciones, se da en contex- estructura” 11.

tos donde algunas posiciones son más 12

Ziauddin Sardar y Borin Van Loon,
Cultural Studies for Beginners
(Cambridge: Icon Books, 1997), p. 9.

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