Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La acumulación
de hechos no Leer: K. Popper, cisnes blancos y pintura filosófica
supone necesa- Para K. Popper la acumulación de resultados a favor de una teoría, nunca lleva-
riamente la ela- rá a la verificación de esa teoría. Pongamos un ejemplo que el mismo Popper
boración de las ha hecho famoso: supongamos que tenemos la teoría que dice “todos los cis-
nes son blancos”. Por más cisnes blancos nuevos que vayamos descubriendo,
explicaciones
esto nunca nos podrá llevar a la plena confirmación de que “todos los cisnes
más eficientes o
son blancos”, ya que no es descartable que en el futuro encontremos uno de
iluminantes.
otro color.
Aquí entra en juego otra intuición de Popper. Aunque nunca podemos demos-
trar la verdad de una hipótesis científica, si que está a nuestra mano demostrar
que es falsa. Si es cierto que la acumulación de casos a favor no la verifican,
un solo caso en contra la falsa. Descubriendo un solo cisne negro ya falsamos
la teoría que “todos los cisnes son blancos”.
Organiza: Patrocina:
LECCIÓN 4
¿Cómo conoce la realidad la ciencia?
Una consecuen-
cia del punto de
vista de Popper
es que nunca
sería posible
demostrar la ver-
dad de las teo-
rías científicas
Detalle del cuadro de K. Popper, a cargo del pintor austríaco Werner Hovart
Crítica a Popper
«Una consecuencia del punto de vista de Popper es que nunca sería po-
sible demostrar la verdad de las teorías científicas; éstas siempre serían
hipótesis o conjeturas que se aceptan de modo provisional en la medida en
Sin embargo,
que, por el momento, superan las contrastaciones experimentales a que son
esta perspectiva
sometidas. Esta idea se encuentra ampliamente difundida en el mundo cultu-
no da razón de
ral contemporáneo […].
los éxitos reales Sin embargo, esta perspectiva no da razón de los éxitos reales de la ciencia.
de la ciencia. Sin duda, en la ciencia se utilizan estipulaciones y construcciones teóricas que
no son una simple fotografía de la realidad, y se encuentran abiertas a ulte-
riores precisiones. Pero se consiguen conocimientos auténticos. Nadie duda
de la existencia de los electrones, los átomos, las ondas electromagnéticas y
muchas otras entidades cuyo conocimiento se debe a la ciencia natural. La ver-
dad científica existe, aunque se trate de una verdad que es contextual, parcial
y perfectible» M. Artigas en
Otra vez, la vi- http://www.unav.es/cryf/limiteslenguajecientifico.html
sión del conoci-
miento como un Otra vez, la visión del conocimiento como un esbozo perfectible de la realidad
esbozo perfec- nos ayuda a dar razón del conocimiento científico. Éste no es o blanco o negro,
tible de la reali- o total objetividad, o total rechazo, sino que es un proceso intelectual por el
dad nos ayuda que cada vez más vamos captando la realidad y nos permite decir que “el 98
a dar razón del % de los cisnes son blancos y el 2% son negros”.
conocimiento
científico.
Por lo tanto, la ciencia, ya desde sus inicios, y sobre todo a partir de la segunda mitad del
siglo XIX, ha privilegiado otro método en cierta manera opuesto: el de formular hipótesis con
valor predictivo, y luego verificar como son las cosas en la realidad. Popper ha llamado este
método deductivo. Sin embargo, hay más de una razón para que esta postura también se consi-
Facultat de Teologia de Catalunya - Diputació 231, 08007 Barcelona (Catalonia, Spain) - info@scienceandfaithbcn.com
www.scienceandfaithbcn.com
LECCIÓN 4
¿Cómo conoce la realidad la ciencia?
Facultat de Teologia de Catalunya - Diputació 231, 08007 Barcelona (Catalonia, Spain) - info@scienceandfaithbcn.com
www.scienceandfaithbcn.com
LECCIÓN 4
¿Cómo conoce la realidad la ciencia?
Facultat de Teologia de Catalunya - Diputació 231, 08007 Barcelona (Catalonia, Spain) - info@scienceandfaithbcn.com
www.scienceandfaithbcn.com
LECCIÓN 4
¿Cómo conoce la realidad la ciencia?
Sólo con el paso del tiempo la teoría (o el paradigma) muestra indicios de cansancio. Posi-
blemente el límite más grande de la explicación de Kuhn consiste en el hecho de no haber te-
nido en cuenta que, en la fase de madurez de una teoría (después del periodo inmediatamen-
te sucesivo a la aceptación inicial), se producen enmiendas substanciales. En el momento en
el que se descubren hechos que no son explicados completamente por la teoría aceptada, la
primera reacción de los científicos no es en realidad rechazarla (como creía aún Popper), sino
intentar cambiar algunos elementos. Kuhn diría que esta reacción es en sí misma conservado-
ra, pero de esta forma no entendería la naturaleza de este proceso que se sitúa precisamente
a medio camino entre la primera fase, normal y deductiva, y la llamada revolucionaria.
Ver: Para conocer un poco más las teorías de M. Planck te puede ayudar la
visión del siguiente vídeo (sobre todo a partir del minuto 2 hasta el 6)
http://www.youtube.com/watch?v=clMfg1TULGY
Facultat de Teologia de Catalunya - Diputació 231, 08007 Barcelona (Catalonia, Spain) - info@scienceandfaithbcn.com
www.scienceandfaithbcn.com
LECCIÓN 4
¿Cómo conoce la realidad la ciencia?
(el número de oscilaciones que la onda genera en un cierto intervalo de tiempo) que la luz
puede asumir, la catástrofe ultravioleta acababa siendo la consecuencia directa. Pero Planck
nunca habría puesto en discusión dicha naturaleza ondulatoria. Hizo algo diferente, en aquella
época se sabía que la estructura de la materia era discontinua (atómica) y entonces asumió
que, aunque la radiación incidente sobre la superficie interna de la esfera era continua, la
emitida y reflejada era discontinua y esta discontinuidad, por así decir inducida, era suficiente
para resolver el problema. Está claro que alguien podría ver en ello una explicación ad hoc,
básicamente un suplefaltas. Sin embargo, esta interpretación sería pobre y esencialmente
no conforme con los hechos. En la propuesta de Planck hay en realidad un elemento de
carácter general que va mucho más allá de la respuesta al problema concreto y hace que su
solución sea verdaderamente científica. De hecho, Planck asumía que sólo con la interacción
con otros sistemas (la superficie de la esfera) un determinado sistema físico (aquí la luz) podía
adquirir caracteres descontinuos. Esto se mantiene también para la mecánica cuántica, cuyos
sistemas, si no interactúan, se comportan de manera continua. El gran filósofo C. Peirce ha
llamado a este tipo de explicación abducción. Ésta consiste en inferir propiedades o compor-
tamientos nuevos (por lo tanto no previstos) de sistemas que también están supeditados a
leyes precedentemente conocidas.
Facultat de Teologia de Catalunya - Diputació 231, 08007 Barcelona (Catalonia, Spain) - info@scienceandfaithbcn.com
www.scienceandfaithbcn.com
LECCIÓN 4
¿Cómo conoce la realidad la ciencia?
Facultat de Teologia de Catalunya - Diputació 231, 08007 Barcelona (Catalonia, Spain) - info@scienceandfaithbcn.com
www.scienceandfaithbcn.com
LECCIÓN 4
¿Cómo conoce la realidad la ciencia?
Facultat de Teologia de Catalunya - Diputació 231, 08007 Barcelona (Catalonia, Spain) - info@scienceandfaithbcn.com
www.scienceandfaithbcn.com
LECCIÓN 4
¿Cómo conoce la realidad la ciencia?
greso hacia una generalidad cada vez mayor. Ahora bien, aunque nuestros itinerarios (perso-
nales y colectivos) sean contingentes, si estos resultados poseen verdaderamente su verdad
y realidad, estos se construyen como encrucijada de un mapa que, quien se mueva por el
camino del conocimiento tarde o temprano tendrá o tendría que cruzar, aunque no sea en el
mismo orden y no necesariamente todos. Esto es lo que constituye la unidad del saber y su
objetividad: es el mapa o la rejilla de todos estos puntos o resultados, un mapa o rejilla del
que no vemos hasta el final la convergencia de todos los recorridos, como todos los caminos
El gran Eins-
que llevan a Roma, pero la podemos de alguna manera inferir. Es un mapa cuya encrucijada de
tein (y con él todas las encrucijadas debería ser la Verdad.
muchos ostros
científicos) se
sorprendía por 5.- La ciencia y Dios
la correspon-
¿Pero entonces este mapa es Dios o por lo menos la mente de Dios? ¡No tan rápido! Dios,
dencia entre
por lo que la teología y la Revelación nos han permitido entender, no utiliza un pensamiento
nuestras teorías
discursivo, entonces no piensa y razona como lo hacen los seres humanos, y por lo tanto no
y la realidad del
podemos pensar que un mapa, que representa un progreso o de todas maneras un orden de
mundo.
los conocimientos, pueda ser identificado con la mente de Dios. Si estos resultados (o estas
encrucijadas) son verdaderamente objetivos y verdaderos (aunque sólo parcialmente), ellos
tienen que representar la manera en la que el ser humano o una mente finita se representa,
en su ascensión espiritual, la red de específicas conceptuales o ideales que está en el origen
de nuestro universo, o mejor en el origen de la creación de nuestro universo, y está aquí radi-
cada en la mente de Dios, aun permaneciendo está exenta de dicha articulación.
¿Pero tiene sentido decir una cosa de este tipo o se queda en mera especulación sin valor?
Si el universo El gran Einstein (y con él muchos ostros científicos) se sorprendía por la correspondencia en-
tiene una es- tre nuestras teorías y la realidad del mundo. En la lección 3 ya he tratado este problema y he
tructura inteli- dicho que, para evitar explicaciones de índole milagrosa, se tiene que reconocer que nuestras
gible, esto es teorías tienen un fundamento objetivo. Pero en esa ocasión no he llegado hasta el fondo del
realmente el problema y en concreto no he explicado la razón de este acuerdo. Ahora el problema puede
misterio de los ser tratado y la única respuesta racional me parece la siguiente: porque el universo mismo dis-
misterios y no pone de inteligibilidad y racionalidad, y entonces es normal que nuestra razón, en el momento
se me ocurre en el que intenta depurarse de los errores y elevarse a la objetividad, refleje dicha estructura
otra explicación inteligible, por lo tanto el conocimiento se convierte en conocimiento de la verdad. Pero si el
racional que no universo tiene una estructura inteligible, esto es realmente el misterio de los misterios y no se
sea pensar que me ocurre otra explicación racional que no sea pensar que ésta es la encarnación de la mente
de Dios, pero en el sentido en el que lo concebía san Tomás: el universo es manifestación in-
ésta es la en-
teligible de Dios en la medida que ello participa de manera múltiple y dividida a lo que en Dios
carnación de la
es uno y unido. Aquí la ciencia y hasta la filosofía (que, por su metodología intrínsecamente
mente de Dios
crítica no puede hacer tal paso sola) tienen que ceder el paso a la teología. Es por la racionali-
dad misma de la actividad científica (y filosófica) que este paso se hace necesario.
Facultat de Teologia de Catalunya - Diputació 231, 08007 Barcelona (Catalonia, Spain) - info@scienceandfaithbcn.com
www.scienceandfaithbcn.com