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El padre José María Morelos (1765- 1815) es uno de los personajes

importantes de la historia de la independencia de México. Morelos emergió


como el líder militar más prominente de las fuerzas independentistas después
de la muerte de Miguel Hidalgo.

Este sacerdote revolucionario mexicano se había unido a la rebelión en sus


primeras etapas. En 1813 declaró la independencia y convocó un Congreso
Constituyente en Chilpancingo, Guerrero.

Morelos, considerado uno de los más grandes héroes de México, demostró


ser un estratega militar mucho más competente que Hidalgo. Sin embargo,
sus fuerzas también fueron dispersadas. En 1815 fue capturado y ejecutado
por los españoles.

Morelos, el sacerdote
En 1790 Morelos se matriculó en el colegio San Nicolás de Valladolid para
comenzar una carrera en la Iglesia.

Después de estudiar en el seminario Tridentino en Valladolid, Morelos obtuvo


una licenciatura en artes en la Universidad Real y Pontificia de México.

En 1797 fue ordenado sacerdote y 2 años más tarde fue asignado a la


parroquia de Carácuaro. Allí permaneció hasta 1810.

En Carácuaro, un lugar remoto y muy empobrecido, su trabajo era


extremadamente exigente. Morelos atendía de manera diligente una
feligresía de casi 2000 indios.

Pero las condiciones y la falta de respuestas a sus peticiones por parte de


sus superiores eclesiásticos incrementaban su frustración.

En 1810 José María Morelos recibe noticias de la revuelta liderada por


Hidalgo. En una reunión, este líder insurgente convenció a Morelos de que el
levantamiento era en defensa del país y la religión.

Hidalgo estaba seguro de que los oficiales españoles en México estaban a


punto de entregar el país a Napoleón Bonaparte y los franceses.

Morelos aceptó unirse a la causa. Entonces, Hidalgo le dio una comisión


militar: capturar el puerto de Acapulco y extender la revolución hacia el sur.

Morelos, el estratega militar


Los españoles atraparon y ejecutaron a Hidalgo, y Morelos asumió el
liderazgo de la lucha. A finales de agosto de 1811 las tropas insurgentes de
Morelos controlaban una gran parte de la costa sur de México.
El héroe independentista mostró grandes habilidades militares: insistió en
una estricta disciplina y se rodeó de comandantes capaces. También
rechazaba la violencia sin sentido como instrumento de guerra.

Además, proporcionó al movimiento independentista un conjunto concreto


de objetivos. En 1813 Morelos organizó el Congreso Nacional Constituyente,
en el cual se abolía la esclavitud y la clase racial.

Este Congreso le otorgó el título de «Su Alteza», pero lo rechazó y, en


cambio, aceptó el título de «Siervo de la Nación». Bajo su liderazgo se declaró
la independencia de México.

Sin embargo, debido en parte a las contradicciones internas, el movimiento


de Morelos se vino abajo. Las tropas realistas capturaron Morelos a principios
de noviembre de 1815.

Fue llevado a la ciudad de México y juzgado por un tribunal español. Este


tribunal lo declaró culpable de herejía y traición, condenándolo a muerte.
Morelos fue ejecutado por un pelotón de fusilamiento el 22 de diciembre de
1815.

Hoy en día sus restos descansan en un mausoleo en el Paseo de la Reforma


en la Ciudad de México.

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