• La paternidad no nace del hombre, nace de Dios. • La paternidad debe ser desarrollada desde la perspectiva de Dios. • Sin paternidad celestial, no hay paternidad terrenal plena. • Cada decisión que tome, afectara a mi familia. El problema de nuestras raíces • Nuestras raíces vienen del paganismo. En el siglo XVI fuimos conquistados por la España sin Dios. Y nos trajeron una cultura humanista, aventurera y machista, idolatra y hechicera. • La reforma protestante. Con Lutero se levantó el diseño de Dios en la familia, y llego a Europa y la familia se levantó; pero no alcanzo a llegar a España, y los españoles llegaron a nuestra tierra sin el Diseño de Dios para la familia. La maldición generacional de nuestras raíces 1. Diseño de familia sin importancia. Para los españoles no era importante la familia, por eso lo dejaron todo y muchos nunca más regresaron, y nos quedó la herencia de la separación, divorcio y orfandad. 2. Diseño de familia sin pacto matrimonial. Los hombres usaron a las indias sin casarse, porque era una vergüenza casarse con una india, y nos dejaron la herencia de unión libre. Nuestras decisiones afectan a nuestros hijos y ellos repiten el mismo patrón. 3. Familia sin Limpieza moral. Los hombres en medio de la desnudes de las indias, se desbordaron en la inmoralidad y engendraron más de un 1.500.000 niños, que crecieron sin concepto de familia y sin concepto de pacto matrimonial y sin limpieza moral. 4. Superioridad del hombre sobre la mujer. Eso origino: La violencia doméstica, maltrato machismo, donde la mujer era solo un objeto de uso doméstico y sexual, sin valor ni dignidad, era considerada propiedad del hombre y él podía hacer con ella lo que quisiera. El machismo tiene cinco aspectos: Familiar. Sexual. Económico. Social. Intelectual. 5. Nos llegó una familia sin biblia. La Biblia estaba reservada solo para los sacerdotes, se leía únicamente en los templos y en latín para que nadie entendiera. La grandeza de Lutero fue traducir toda la Biblia al alemán y llego a Europa pero no llego a España. La Biblia nos enseña el orden correcto para la familia: Dios, varón, mujer hijos. Dios le va a pedir cuenta al varón por su hogar. La paternidad en el diseño de dios 1. El hombre gobierna su casa bajo los principios bíblicos. No hiere, no daña, no maltrata, no abusa a su familia. 2. Tiene autoridad delegada por Dios para direccionar el hogar. 3. Provee para su casa. Trabaja, lleva dinero, educa a sus hijos, su esposa no sufre por la economía. 4. Corrige con amor y justicia. No corrige con violencia para destruir, , corrige con amor para quitar la rebeldía y enderezar el camino. 5. Es amigo de sus hijos. Tiene tiempo para estar con ellos, los escucha, los comprende, se interesa por ellos, se identifica con ellos y los trata con amor. 6. Es maestro y visionario. El hombre es el visionario del hogar, debe procurar un mejor mañana. 7. Tiene a Dios como el centro de su casa. 8. Enseña a sus hijos la Palabra de Dios. 9. Enseña a sus hijos matrimonio como pacto Malaquías 2:14-16 NTV. Prepara a sus hijos para salir del hogar bajo el pacto del matrimonio y la bendición de sus padres. No consiente la unión libre como algo normal.