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L
a democracia como forma de gobierno se ha La relación recluso-funcionario en cifras
llenado de contenido valórico más allá del cómo
se elige a los gobernantes gracias al desarrollo Un primer parámetro para medir las condiciones
de los derechos humanos universales. Se supone, en que ambos grupos se relacionan es la
entonces, que las sociedades democráticas deben proporción entre personal y reclusos. Si bien
respetar la libertad de las personas y sus derechos es frecuente que se mencionen algunos
humanos, económicos, sociales y culturales. En estándares internacionales respecto del ideal
esos distintos ámbitos, los derechos de muchas de reclusos por funcionario, lo cierto es que en
personas son vulnerados diariamente en todo las diversas normas internacionales respecto
el mundo. Pero quizá son las prisiones las que del tratamiento de personas privadas de libertad
mejor reflejan los valores democráticos de un no existe mención alguna a dicho patrón,
país: un excesivo uso de éstas puede indicar que quedando más bien a criterio de cada
una sociedad es altamente insegura y punitiva; administración penitenciaria. Aunque se puede
por el contrario, aquella donde prevalece la suponer que para un gendarme será muy difícil
confianza es menos retributiva con el infractor encargarse de vigilar, por ejemplo, a más de 10
y más efectiva en atender las necesidades de las reclusos, ello también dependerá de otros
víctimas (Coyle, 2002). Si se midieran los valores factores, como el perfil de los internos, las
democráticos de los países a partir de sus sistemas condiciones del recinto carcelario y la cantidad
penitenciarios, la abrumadora mayoría sería real de empleados de trato directo con los
negativamente evaluada y Chile no sería la reclusos.
excepción.
En el caso de Chile, el aumento de la población
Cuando se describen las condiciones carcelarias encarcelada ha sido notorio, llegando a
y se hace referencia a los derechos humanos en incrementarse incluso más de un 50%. Por
ese contexto, frecuentemente se hace mención ejemplo, entre 1987 y 1997 la población atendida
a quienes cumplen condena. No obstante, el otro por la administración penitenciaria pasó de 37.585
grupo que convive con los presos la mayor parte a 57.402, aumentando en 53%. En la década
del tiempo los funcionarios penitenciarios siguiente, entre 1998 y 2009, se pasó de 60.990
también se ven vulnerados al tener que trabajar a 106.877 personas en el sistema, representando
en condiciones precarias, con escasa formación un crecimiento de 75%2. Ello es válido tanto para
y debiendo hacerse cargo de un complejo grupo el sistema cerrado como para el abierto: a
de personas, con muchas carencias y cuyos niveles diciembre de 2009 la población penal del
de violencia se multiplican en un contexto de subsistema cerrado era de 51.063 internos y en
encierro permanente. el medio libre había 55.339 personas.
1. Cientista Político por la Pontifica Universidad Católica de Chile, investigadora asistente del Programa Seguridad y Ciudadanía de
FLACSO-Chile.
2. Ver anuarios estadísticos de Gendarmería de Chile.
Sin embargo, mientras la tasa de reclusión lentamente (por razones obvias de procesos
crece (de 220 personas por cada 100.000 de formación y administrativos que deben
habitantes en 2000, a 318 en 2009) y los llevarse a cabo para dicho incremento)
ingresos al sistema superan los egresos (ver quedando siempre en desventaja.
Tabla 1) la cantidad de personal aumenta
La Ley nº 19.851 de 2003 pretendió resolver de los funcionarios más jóvenes (Castro, s/f, Pág.
la problemática del déficit histórico de personal 2). Más recientemente, el 8 de abril de 2009,
de Gendarmería. Este cuerpo legal contempló se presentó al Congreso el proyecto de ley que
el crecimiento de las Plantas Uniformadas nuevamente intenta modernizar Gendarmería
(oficiales y vigilantes), así como el traspaso a la de Chile, incrementando su personal y
Planta de par te del Personal Civil que se readecuando las normas de su carrera (Boletín
encontraba a contrata. En consecuencia, aumentó 6447-07). El proyecto, aprobado el 10 de marzo
la planta de personal uniformado de 5.076 a de 2010, contempla un aumento de personal
9.995 cargos y la de personal civil de 114 a 422 de 53,2% en la planta de oficiales, de 62,6% en
profesionales, los técnicos de 55 a 239 y los la de vigilantes penitenciarios y 67,8% en la
administrativos de 39 a 353. Sin embargo, esto planta de directivos4.
también conllevó una disminución en los sueldos
3. Así por ejemplo, el informe de Gestión Integral de Gendarmería de 2003, entregado a la Dirección de Presupuestos del Ministerio de
Hacienda, realiza esta proporción en relación a los funcionarios en guardia interna, lo cual indicaba en ese momento que el promedio de
internos por funcionarios de la guardia interna había pasado de 17,4 el año 2002 a 19,6 en 2003 producto del crecimiento de la población
penal y el mantenimiento de la dotación de personal, todo ello en el contexto de la Reforma Procesal Penal que aumentó ostensiblemente
la cantidad de condenas.
4. Ver datos en Consejo para la reforma penitenciaria (2010).
Esta situación se pudo haber detectado antes La institución debe, entonces, realizar no solo la
si se hubiese puesto atención a las cifras. En la auditoría interna que permita dilucidar
Tabla 4 se observa el total de días de licencias responsabilidad administrativa, sino también un
médicas otorgadas a personal de Gendarmería análisis serio de los tipos de patologías más
solamente durante el año 2008. La información comunes, los contextos en que se producen y si
fue entregada según tipo y cantidad de días y responden a enfermedades físicas o psicológicas.
no de número de licencias. Además, la tipología Ello permitiría tomar medidas para detectar y
no permite distinguir con detalle entre prevenir situaciones donde, probablemente, exista
patologías, pero se pueden obtener algunas cansancio por las condiciones laborales existentes
conclusiones generales. Por una parte, si se y para las cuales la institución presta escaso apoyo
divide el total de días de licencia médica por terapéutico, tanto para su propio staff como para
el total de personal que la institución registraba los reclusos.
en 2008 (13.563) significa que cada funcionario
tomó 24,5 días de permiso médico en el año, Dadas la situación carcelaria, es un derecho y
es decir, casi un mes completo. Ahora bien, si un deber de los funcionarios y los reclusos
se descuentan los días correspondientes demandar condiciones adecuadas en los centros
exclusivamente a personal femenino (que penitenciarios y apoyo permanente en las
representan el 21% del personal) tenemos que distintas áreas de la salud. Los descuidos u
cada funcionario tomó, en teoría, 20,1 días. omisiones en el cuidado de la salud mental y
Asumiendo lógicamente que no todo el física y el entorno higiénico en las cárceles
personal enfermó, es de suponer que una pueden implicar trasladar esos problemas a
cantidad impor tante de empleados tuvo toda la comunidad. Por ejemplo, un brote de
efectivamente un mes o más de licencia médica. tuberculosis en la Penitenciaria de Santiago en
2005 una de los penales más antiguos del
Además, la mayor cantidad de días de licencias país afectó a varios de sus empleados y
se concentran en enfermedad o accidente provocó cierta alarma en la opinión pública.
común y otra parte importante en accidente Tres años después los suboficiales de
del trabajo o del trayecto. Pero, en este caso, lo Gendarmería en huelga denunciaron que al
primero puede implicar estrés laboral y, lo segundo, menos 100 internos de ese recinto padecían
lesiones producidas en situaciones de violencia la misma enfermedad y temían por la expansión
carcelaria donde deben intervenir los vigilantes. de la epidemia (Salazar, 2008).
Aumentar, pero también mejorar cuenta con buenas condiciones laborales, lo más
probable es que se descargue con los prisioneros,
Los directores, las visiones y los indicadores abusando de su autoridad.
carcelarios pueden cambiar, pero hay tres cosas
que no: la prisión, los reclusos y el personal. Muchos explican la arbitrariedad en el trato que
Ambos grupos influyen en el ambiente humano dan los Gendarmes a los reclusos en la falta de
o inhumano que puede tener una prisión e capacitación y de formación profesional, e incluso
influyen también entre ellos (Coyle, 2002). Por se menciona que son los más jóvenes los más
ejemplo, si el funcionario penitenciario no tiene propensos a cometer abusos o tener actitudes
una sólida e integral formación profesional (que violentas. Pero lo cier to es que ellos son
no se les enseñe solo a vigilar y a aplicar la formados y guiados por quienes tienen más
fuerza cuando sea necesario) entonces serán experiencia, por lo tanto es responsabilidad de
vulnerables a contagiarse con el comportamiento todos. En cuanto a la formación, Gendarmería
de los reclusos (por ejemplo, disminuir la calidad de Chile destaca en el contexto latinoamericano
de su vocabulario y tener más actitudes violentas por otorgar dos años de instrucción a los oficiales
y resistentes al cambio). y un año a los suboficiales. Si bien esto puede
ser un estándar alto comparado con otros
No debe olvidarse que las cárceles son países, resulta ser una preparación que no alcanza
instituciones jerárquicas, no solo porque en un nivel profesional. El sistema requiere tanto
muchos casos como el chileno la de buenas condiciones laborales que sean
organización tenga efectivamente personal con respetadas, como de entrenamiento profesional
grados que en su origen responden a distinciones y capacitación permanentes. Si bien el personal
militares, sino porque cada grupo tiene su lugar de Gendarmería recibe preparación (actividades
y eso debe ser respetado. Es frecuente que los de formación fueron impartidas durante el
malos tratos se den, por ejemplo, hacia 2008), tanto por entidades externas como por
prisioneros cercanos a la administración o bien funcionarios de la propia institución, las áreas
se producen tensiones entre funcionarios cuando de esa capacitación son limitadas: desarrollo del
alguno de ellos está de parte de los reclusos. recur so humano; per sonal, finanzas y
Esto no es exclusivo de un sistema penitenciario administración; vida y tratamiento en recintos
de un lugar o de otro, sino de la cultura penitenciarios; seguridad penitenciaria;
organizacional que se produce en la cárcel. Por concesiones; entrenamiento técnico y especialista;
eso, cada estamento puede llegar a desarrollar apoyo al cumplimiento de metas e
fuertes diferencias con el otro: prisioneros versus implementación de nuevas normativas; y
vigilantes, esto últimos versus directores, perfeccionamiento para el ascenso. El personal
gendarmes versus profesionales, etc. La también tiene la posibilidad de seguir estudios
administración de un sistema correccional debe univer sitarios, pero luego no aplican
hacer lo posible para conseguir un balance entre necesariamente esos conocimientos en sus
los grupos. En el caso de su personal, si éste no tareas diarias.
5. Si bien no existe evidencia empírica y pública al respecto, se ha sabido de esta situación en conversaciones con diversas personas
involucradas en el sistema carcelario.
Referencias
Castro, Álvaro (s/f) El impacto de los derechos fundamentales de los gendarmes en los derechos
fundamentales de los reclusos. Recuperado de: www.cejamericas.org/doc/documentos/
Condicioneslaboralesyderechoshumanos2.pdf
Coyle, Andrew (2002) Managing prisions in a time of change. Londres: International Centre for Prison
Studies.
Consejo para la reforma penitenciaria (2010) Recomendaciones para una nueva política penitenciaria.
Disponible en: http://www.flacso.cl/extension_despliegue.php?extension_id=802&page=1
Dammert, Lucía y Zúñiga, Liza (2008) La cárcel: problemas y desafíos de las Américas. Santiago:
FLACSO-Chile.
International Centre for Prison Studies (2004) Prison staff and their training. Guidance notes nº 8.
Disponible en: http://www.kcl.ac.uk/schools/law/research/icps