Mi Autobiografía

Mi nombre es Kerlly Malu Polanco Peñaloza, nací un sábado 15 de julio del 2000 a
las 23:55 de la noche, en la cama #5 de la Maternidad Santa Marianita de Jesús.
Mi padre se llama Ronald Hamilton Polanco Cantos su profesión es técnico electricista
de manera independiente y mi madre se llama Victoria Elizabeth Peñaloza Lara su
profesión es Mercaderista actualmente ofrece sus servicios en la empresa Colgate
Palmolive.
A la edad de 4 años ingrese a la escuela ¨Semillita¨ ubicada en la 29 y Galápagos donde
estudie hasta 6to grado. En el jardín era una niña que usaba botas por que los médicos
les indicaron a mis padres que debía usarlas por mis piernitas chuecas, todos los niños
en el jardín se reían un poco cuando me veían y me conocían como la niña de las
botitas, era la única de mi salón con esas botas.
Desde que era niña me enfermaba
mucho, de las amígdalas, gripe o
de cualquier infección, como me
cuenta mi padre, el pasaba
trabajando y yo me quedaba en
casa con mi mamá pero un día me
puse muy flaquita y no tenía
apetito, los médicos ya me habían
dado de todo y nada que me
recuperaba, mis padres me
llevaron donde una curandera y le había dicho a mi padre que yo tenía unos piojitos en
la cabeza, eran por tristeza y cada que mi papa se valla de viaje me pongan la camisa
que el uso para dormir y aunque era extraño funciono.
Cada que venía de la escuela, yo llegaba a mi casa cantando una música en particular
¨CHABELA¨ la escuchaba en la escuela porque el rector de la escuela ponía músicas
nacionales para que canten al ingreso de cada clase, una de ellas era chabela y todos los
días llegaba diciendo hay chabela, chabela, chabela es el nombre que yo quiero…. Mi
papá se reía mucho.
Yo era una niña muy educada, alegre y no lloraba cuando me dejaban porque mi papá
siempre me decía no llores chito shuu. Y me tranquilizaba. Desde pequeña tuve cuadros
de oro y reconocimientos como buena estudiante.
A los 5 años mi mamá se fue de la casa con otra persona, ella estaba llorando por lo que
había hecho y le dijo a mi padre que la perdone, el solo se calmó y permitió que ella se
fuera hacer su vida con otra persona como quería. Su nombre es Freddy y en la
actualidad siguen juntos. A partir de ese suceso yo había cambiado mucho, comencé a
portarme mal en la escuela, era malcriada, rebelde y le pegué a un niño, hasta que mi
papá me puso frente de él y me dijo. Tu mamá no está solo estamos tu y yo, nos
tenemos los dos porque te estas portando así, tú no eres así, lloré y no volví a portarme
malcriada, pero me volví un poco introvertida dedicándome a estudiar y mi padre como
me cuenta, el para suplir esa falta viajaba.
 Desde ese momento yo vivía con mi bisabuela, mi padre cada
que venía de viaje intentaba que lo ocurrido no me golpee
como a él lo golpeo, me llevaba a pasear, me llevaba de viaje,
conocía sus trabajos realizados, me llevo a la playa, al cine, al
estadio y aunque no entendía nada, yo solo iba para comer
hot dog con cola, hacían gol y
gritaba muy fuerte sin saber que era
lo que hacían, así mismo, en el cine
mi papá pagaba dos asientos para
ver la película pero no me sentaba,
pasaba caminando por todas las
escaleras y él en vez de sentarse en
los asientos , se sentaba en las
escaleras para observarme y opto por pagar asientos adelante
para verme mientras yo me ponía debajo del proyector con la
cabeza alzada viendo la película. Mi padre siempre procuraba entretenerme para que no
me diera cuenta de la ausencia de mi mamá.
A medida que pasaba el tiempo no me encontraba en casa, sino, en casa de mis tías o mi
bisabuela, a veces mi padre se dedicaba a tomar por que no le encontraba sentido a la
vida como él decía. Los 25 de diciembre yo pasaba con mi mamá y los 31 con mi papá,
un 31 de octubre mi padre tuvo una fiesta y regreso a la casa a las 7 de la mañana del 1
de enero me vio sentada con mi bisabuela tomando café, se arrodilló y me dijo, te traje
algo yo emocionada lo abrace y saco una pierna de pollo del bolsillo en ese instante se
puso a llorar y prometió no volver a perderse en el alcohol.
Como el pasaba de viaje comenzó a conocer chicas y siempre me las presentaba, pero a
mi ninguna me agradaba, siempre las
dejaba porque no me agradaban.
A los 7 años fuimos a pasar 31 de
diciembre donde la familia Polanco, ese
día mi padre tomo y ellos tenían
planeado viajar a pajan donde vivía mi
abuelo, lo embarcaron y nos llevaron
hasta Pajan a pasar unos días por allá.
A los 8 años me fui con mi papá a Quito,
conocí el Palacio de Carondelet y conocí
todas las instalaciones de aquel lugar.
A los 10 años me enferme tanto que mi papá
llamaba a todas las personas, eran las 12 de la
noche y llamo a mi mamá, no queríamos
molestarla, pero no teníamos otra alternativa.
Cuando llamamos, ella le dijo a mi padre que
estaba ocupada y que no podía ir. El en ese
momento me llevo al hospital de Guayaquil, pero
no podían atenderme porque era una niña todavía,
 de ahí me llevo al león becerra. Para todas las personas
del lugar era extraño ver a un padre con su pequeña en el
hospital y no a la mamá. El doctor le indico a mi padre
que me diera suero oral por que estaba deshidratada y si
no me recuperaba me internaban. Por suerte no paso a
mayores y a las 5 de la mañana comencé a reaccionar
llegamos a casa y él tenía que viajar, se fue y me quede
en casa. Fuimos a una boda con mi papa de mi prima ese
día ella estaba hermosa.
Salí de la escuela con las mejores notas, seguía viviendo
con mi bisabuela y mi papá viajaba. cuando ingrese al
colegio Guayaquil conocí a una chica amiga de mi papa
que me acompañaba a las reuniones de la escuela
cuando mi mamá no podía, fue mi representante, yo me
comencé a llevar bien con ella, luego mi padre me
comento que le gustaba y como me parecía, la verdad
me agradaba mucho y le dije que sea feliz. Hice mi
primera comunión y después de haber culminado la
ceremonia mi mami me llevo a comer.
A los 13 años le pegue a un niño porque me borro el
pizarrón delante de la profesora, llamaron a mi representante y la psicóloga del colegio
le dijo a mi papi que firmara un convenio el cual constate que yo me iba a portar bien y
si no lo hacía me expulsaban de la institución. El muy molesto les dijo que le parecía
injusto que me cataloguen por una acción, juzgándome a pesar de todas las buenas cosas
que hacía y no firmo nada. En el colegio no tenía muchas amistades, las pocas amigas
que tuve a medida que cursaba los grados las perdía y conocía a otra nueva amiga para
pasar mi recreo, pero a la final siempre estaba sola.
El 14 de julio del 2015 a las 23:50 de la noche hacia deberes junto a mi papa y me dio
un dolor en el vientre, no podía moverme y comencé a llorar. Mi padre muy asustado
me llevo al hospital, pero no me atendían porque tenía 14 y aceptaban niños solo hasta
los 13 años, me llevaron al hospital Guayaquil, pero
no había camas donde me recuesten, entonces mi papi
decidió llevarme al hospital del día, me inyectaron y
me suministraron 3 sueros, ya era de madrugada y las
enfermeras iban a mi camilla a desearme feliz
cumpleaños. Había cumplido 15 años en aquel lugar.
Como mi papá no pudo hacerme una fiesta de
quinceañera, mi mamá se ofreció en hacer una
pequeña fiesta, realmente no era como lo esperaba
porque solo tuve 5 amistades en mis quince años y el
resto eran amigas de mi mamá. Mi padre reunió para
pagar unos mariachis. Él sabía que me gustaban
mucho y cuando aparecieron en mis quince años me
puse a llorar, quería a mi papa conmigo en ese
momento, pero sabía que él no podía estar ahí, era casa de mi mamá, cuando mi papá
me llamo a decirme que disfrute mi fiesta me entere que se encontraba abajo pero
cuando quise bajar a buscarlo nadie me dejo. La pase muy triste ese día, pero trataba de
que nadie se dé cuenta. A pesar de todo lo ocurrido tengo a mi lado un gran padre y
agradezco a Dios por todas las cosas buenas que han pasado, permitirme estudiar lo que
deseo y soy feliz.