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Originales Revista de Logopedia, Foniatría y Audiología

2005, Vol. 25, No. 2, 62-71


Copyright 2005 AELFA y
Grupo Ars XXI de Comunicación, S.L.
ISSN: 0214-4603

Comprensión gramatical
E. Mendoza Lara
J. Muñoz López y rendimiento académico
M. D. Fresneda López
G. Carballo García

Departamento de Personalidad,
Evaluación y Tratamiento Psicológico
Facultad de Psicología
Universidad de Granada

Con esta investigación se ha pretendido conseguir un Grammatical comprehension


doble objetivo. Por un lado, obtener un índice de vali- and academic performance
dez concurrente del CEG (Test de Comprensión de
Estructuras Gramaticales), tomando como criterio el The aim of this paper is twofold. First, to obtain a
rendimiento escolar de los alumnos, a juicio de sus CEG (Test de Comprensión de Estructuras Gramati-
tutores académicos, a través de la Escala de Valoración cales) concurrent validity index, which depends on
del Lenguaje Observable (EVLO) del CELF-3, edición the academic performance of children according to
en español. Por otro lado, pretendíamos comprobar si their teachers via the Spanish Assessment Scaling
las puntuaciones obtenidas en el CEG podrían ser un
for Observable Language (EVLO: Escala de Valo-
indicador del rendimiento escolar de los alumnos, esta
ración del Lenguaje Observable) of CELF-3, Spanish
vez también según los criterios de los tutores.
Con respecto al primer objetivo, la correlación obtenida edition. We have found that the correlation between
entre la puntuación total del CEG y cada uno de los the total CEG scoring and the EVLO assessment is
apartados de la EVLO es significativa en todos ellos, osci- significant for all sections of EVLO, ranging between
lando los valores entre -0,477 (escucha) y -0,621 -0.477 (hearing) and -0.621 (writing). Since all ques-
(escribe). Dado que las preguntas formuladas en la EVLO tions in EVLO refer to both oral and writing linguis-
son todas referidas a aspectos lingüísticos en sus domi- tics aspects, we can state that CEG is a good instru-
nios orales y escritos, podemos afirmar que el CEG es un ment for the determination of the academic
instrumento válido a efectos de la determinación del performance of children in the linguistic field.
rendimiento escolar de los niños en el ámbito lingüístico. Second, to check whether the CEG scores could be an
En lo referente al segundo objetivo nuestros resulta- indicator for the academic performance of children
dos indican que el rendimiento académico de los according to their teachers’ criteria. Our results show
niños que puntúan por encima del centil 67 en el CEG that the academic performance of children with CEG
es valorado por sus tutores de forma muy positiva, a scores above the centil 67, is assessed by their teach-
la inversa de lo que sucede con los niños cuyas pun- ers very positively. On the contrary, they assessed
tuaciones en el CEG se sitúan por debajo del centil 33. very poorly the children with CEG scores below the
Se puede, por tanto, concluir, que las dificultades de centil 33. Therefore, we conclude that the problems
comprensión del lenguaje oral pueden estar en el ori- of comprehension of oral language can be at the ori-
gen de los problemas de rendimiento académico en el
gin of the difficulties for academic performance in
área del lenguaje que presentan algunos niños.
the area of language which some children show.
Palabras clave: Comprensión gramatical, validez concurrente, rendimiento aca-
démico Key Words: Grammatical comprehension, concurrent validity, academic
performance

Correspondencia:
Elvira Mendoza
Departamento de Personalidad,
Evoluación y Tratamiento Psicológico
Introducción
Facultad de Psicología
Campus de Cartuja, s/n
18071 Granada En los últimos tiempos los problemas de fracaso
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Correo electrónico: emendoza@ugr.es escolar están preocupando a las autoridades políti- 24
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FRESNEDA LÓPEZ
Y CARBALLO GARCÍA

cas y académicas y a toda la sociedad. Sabemos que lectora se puede considerar como un «valor añadido»
el índice de fracaso escolar en España es uno de los a las competencias orales del los niños. Distintos
más altos de la Comunidad Europea (CE), por lo que autores que han abordado el problema concluyen en
se reconoce la necesidad de estudiar las posibles cau- la misma dirección (Catts, Fey, Tomblin y Zhang, 2002;
sas del mismo y de adoptar medidas pertinentes para Nathan, Stackhouse, Goulandris y Snowling, 2004;
resolver este problema. En la mayoría de los casos Nation, Clarke, Marshall y Duran, 2004).
este estudio tendrá que ser de tipo retrospectivo, con No sólo la lectura, sino también otras destrezas aca-
los inconvenientes metodológicos que implican estas démicas se pueden ver afectadas en niños con trastor-
investigaciones. nos del lenguaje, tales como los problemas de cálculo
Desde hace varios años se ha venido estudiando la aritmético a pesar de tener un CI dentro del rango
importancia del lenguaje oral para el aprendizaje de la considerado normal (Fazio, 1996; Manor, Shalev,
lectura y, en general, para la adquisición de las des- Joseph y Gross-Tsur, 2001).
trezas académicas. El lenguaje ocupa un lugar central Más allá de las dificultades académicas en sentido
en el perfil académico de los niños y es probable que estricto, existe otra línea de investigación dirigida a
las dificultades lingüísticas afecten a otros aspectos estudiar los retrasos en el desarrollo del lenguaje como
del desarrollo. Se han asociado distintas habilidades un importante factor de riesgo para el surgimiento
lingüísticas con el rendimiento escolar, tales como de conductas violentas y antisociales en la adolescen-
nivel de vocabulario (Wells, 1986) o habilidades fono- cia (Snow, 2000; Snow y Powell, 2004). Tarter, Mez-
lógicas (Snowling y Nation, 1997; Carroll y Snowling, zich, Hsieh y Parks (1995) encontraron en un grupo
2004), si bien otros autores, como Bishop y Adams de adolescentes que abusaban de sustancias un bajo
(1990), indican que las dificultades fonológicas afec- rendimiento en tareas de procesamiento de informa-
tan al rendimiento académico sólo si no se han ción lingüística. Los autores especularon que la impul-
resuelto antes de acceder a los aprendizajes escolares. sividad característica de esta población puede deri-
Catts (1993) llevó a cabo un estudio comparativo varse de dificultades para utilizar el lenguaje como
sobre el rendimiento lector de tres grupos de niños de un medio de regulación de la propia conducta. Si, por
6 años de edad: un grupo de niños con desarrollo lin- otro lado, está documentada la comorbilidad de las
güístico normal, otro grupo de niños con trastorno dificultades de lectura y las conductas agresivas en la
específico del lenguaje (TEL) y un tercer grupo de adolescencia (Fergusson y Lynskey, 1997; Smart, Prior,
niños con trastornos de articulación. En este estudio Sanson y Oberklaid, 2001), nos encontramos ante una
se comprobó que sólo los niños con TEL presentaban cadena que en muchos casos nos deberá conducir a
deficiencias significativas en el test de lectura. Al la búsqueda de dificultades lingüísticas básicas. Este es
analizar distintas habilidades lingüísticas se encontró un tema que deberá ser abordado desde perspectivas
que las medidas de conciencia fonológica y de deno- investigadoras diferentes para poder diseñar técnicas
minación estaban estrechamente relacionadas con el de intervención preventivas de la violencia juvenil y de
reconocimiento de palabras, mientras que las medi- otras conductas antisociales.
das de habilidades semanticosintácticas eran espe- En la búsqueda de las dificultades lingüísticas
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cialmente importantes para predecir el rendimiento básicas que puedan estar en el origen de problemas
lector en términos de comprensión. Tallal, Allard, académicos y sociales posteriores, nos enfrentamos a
Miller y Curtiss (1997) estudiaron las habilidades aca- una pregunta de difícil respuesta: ¿en qué casos
démicas de niños con TEL de edad preescolar, princi- existe un retraso o un trastorno del lenguaje? La res-
palmente las prerrequisitas para la lectura (discrimi- puesta a esta pregunta es relativamente fácil en los
nación visual, conocimiento de letras y del sonido de dos supuestos siguientes: a) cuando las dificultades
las letras). Encontraron que estos niños presentaban lingüísticas son muy obvias, fundamentalmente en el
dificultades con las prerrequisitas estudiadas y que plano expresivo y b) cuando existe una marcada dis-
esas dificultades se mantenían, al menos, hasta los 8 crepancia entre las destrezas cognitivas y lingüísticas.
años de edad. A la vista de los resultados, los autores En el resto de los supuestos la identificación no es tan
concluyeron que los trastornos del lenguaje en edad fácil, como por ejemplo, en los casos de niños con
preescolar son predictores de posteriores dificultades dificultades más sutiles o en los niños cuya discre-
académicas. Como Snow y Powell (2004), estos auto- pancia entre habilidades no sea tan pronunciada, así
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res reconocen que el desarrollo de la competencia como en los casos en que el problema haya remitido 63
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con o sin intervención, que habitualmente se cono- tan tratamiento logopédico para mejorar sus problemas
cen como «retrasos simples del lenguaje». En este de lenguaje son muchos más que los que cumplen los
punto hay que recordar el excelente trabajo de Scar- criterios diagnósticos estrictos.
borough y Dobrich (1990), que nos ayudó a estar más De especial interés en el rendimiento académico
en alerta ante estos mal llamados «retrasos simples es la comprensión lectora, base de un incremento
del lenguaje», puesto que en estos retrasos no se general del conocimiento. No es infrecuente la queja
alcanza la ansiada «normalidad», ya que las dificulta- de los maestros de que algunos niños no comprenden
des lingüísticas pueden volver a manifestarse cuando suficientemente bien lo que leen; muchos de estos
las demandas académicas requieran unas destrezas niños pueden compensar sus dificultades mediante el
más complejas de procesamiento lingüístico que, en uso de estrategias de memorización o de «estudiar de
algunos casos, pueden exceder la propia capacidad memoria», mientras que otros con menor capacidad
del niño. Además, como comentan Dockrell y Lindsay memorística fracasan en sus aprendizajes. Puesto que
(1998), es probable que los niños con dificultades lin- la comprensión auditiva y la comprensión lectora
güísticas más leves permanezcan sin identificar y no están fuertemente interrelacionadas, debido al hecho
reciban los apoyos necesarios desde sus primeros años de que ambas requieren el ejercicio de una facultad
de escolarización. Esta situación se suele presentar general de comprensión del lenguaje (Freedle y Kostin,
cuando no existen problemas fonológicos, que son los 1999), es razonable pensar que las dificultades de
de más fácil y rápida detección, aunque en tareas que comprensión del lenguaje oral puedan explicar parte
requieren velocidad y precisión de comprensión, así de los problemas de lectura que, a su vez, están en la
como procesamiento del lenguaje abstracto, se mani- base de muchos de los problemas escolares. Por otro
fiestan dificultades importantes. Show y Powell lado, tenemos que considerar que los problemas de
(2004) encontraron diferencias significativas en este expresión lingüística, principalmente fonológicos, son
tipo de tareas entre escolares adolescentes predelin- relativamente fáciles de detectar y diagnosticar, mien-
cuentes y escolares sin este tipo de problemas que tras que las dificultades de comprensión, al carecer
tenían 2 años menos. de una medida directa, presentan una mayor comple-
Tomblin, Zhang y Buckwalter (2000), en un estu- jidad diagnóstica (Miller y Paul, 1995). Por tanto, con-
dio sobre las fuertes asociaciones entre los trastornos sideramos que es necesario el diseño y la estandariza-
de lectura y los problemas conductuales, observaron ción de medidas que evalúen la comprensión
que la relación causal entre estas condiciones con- lingüística con el objeto de poder explicar algunos de
duce a la consideración de los problemas del lenguaje los problemas académicos que presentan algunos
oral como el precursor más probable de ambas. Nos niños durante la edad escolar. Este es uno de los obje-
alertan los autores sobre la necesidad de desarrollar tivos que se pretende conseguir con el CEG —Test de
las competencias del lenguaje oral para conseguir los Comprensión de Estructuras Gramaticales— (Mendoza,
siguientes objetivos: a) adquisición y desarrollo de la Carballo, Muñoz y Fresneda, 2005a, 2005b).
competencia en la modalidad escrita y b) aprendizaje El objetivo de la presente investigación es doble.
de una serie de reglas sobre la forma en la que se usa Por un lado, intentamos aportar un nuevo criterio de
el lenguaje en diferentes contextos de la vida diaria. validez concurrente del CEG, basado en las opiniones
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No es extraña la situación en la que existen marca- que tienen los maestros y tutores sobre el rendi-
das discrepancias entre las opiniones de los maestros y miento académico de los alumnos a los que se les
de los evaluadores cualificados sobre el rendimiento de estaba aplicando el CEG. Para alcanzar este primer
determinados niños: mientras que los primeros detec- objetivo utilizamos la Escala de Valoración del Len-
tan que el rendimiento escolar de estos niños en el área guaje Observable (EVLO; Observational Rating Scales,
del lenguaje es deficitario, los segundos asumen la nor- ORS) del CELF-3 (Clinical Evaluation of Language
malidad, tal vez por la carencia de instrumentos diag- Fundamentals), edición en español (Semel, Wiig y
nósticos lo suficientemente precisos. Aram, Morris y Secord, 1997), por tratarse de una escala basada en la
Hall (1993) documentaron que la congruencia entre observación con suficientes garantías psicométricas.
los criterios de identificación del TEL seguidos, respec- Esta escala tiene tres versiones diferentes: una para
tivamente, en la clínica y en la investigación sólo padres, otra para maestros y otra para los propios
alcanza entre el 20 y el 71 %, dependiendo de las fór- niños; en este caso optamos por el formato que
mulas de discrepancia utilizadas; los niños que necesi- deben completar los maestros.
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En segundo lugar, esta investigación pretende ser el A los profesores tutores de los niños se les pidió que
punto inicial de un proyecto encaminado a estudiar las cumplimentaran la EVLO del CELF-3, edición en español.
dificultades lingüísticas que pueden subyacer a los Esta escala consta de un total de 40 elementos con cua-
problemas académicos de los niños de edad escolar. tro alternativas de respuesta: nunca (1), a veces (2),
Intentamos determinar si existe correspondencia entre frecuentemente (3) y siempre (4). Los elementos plan-
las puntuaciones obtenidas en el CEG y las opiniones tean situaciones y conductas en las que deben juzgar si
de sus maestros sobre el rendimiento académico de el alumno en cuestión presenta dificultades en dicha
los niños evaluados o, en otras palabras, si el CEG es conducta o situación. Está dividido en cuatro apartados,
una medida adecuada para explicar algunas de las difi- relativos a las habilidades de escucha (9 elementos), de
cultades académicas de los niños de edad escolar. habla (19 elementos), de lectura (6 elementos) y de
escritura (6 elementos). Para una descripción detallada
del CELF-3 y de las escalas de valoración se puede con-
sultar Codesido (2004). Modificamos mínimamente la
MÉTODO redacción de algunos ítems con la intención de conse-
guir una mejor adaptación a los usos del castellano. En
Sujetos el anexo II se puede ver la escala tal como la cumpli-
Los sujetos participantes en este estudio fueron mentaron los maestros.
132 niños con edades comprendidas entre 7 y 11 años Las escalas se puntuaron siguiendo los criterios
y sus respectivos tutores (6 en total: dos maestros de que aparecen en el manual del CELF-3, edición en
segundo de primaria y uno por cada curso desde ter- español: suma de las puntuaciones en cada uno de los
cero hasta sexto de primaria). Todos los niños estaban apartados. Los rangos de puntuación para cada apar-
escolarizados en un colegio concertado de Granada y tado son los siguientes:
formaban parte de la muestra de estandarización del
CEG. Ninguno de ellos estaba recibiendo atención — Escucha: 9-36
logopédica y no figuraban en su expediente acadé- — Habla: 19-76
mico problemas de lenguaje ni de audición. — Lee: 6-24
— Escribe: 6-24
— Total: 40-160
Materiales y procedimiento
Hay que considerar que las puntuaciones más
A cada niño se le aplicó el CEG en sesión indivi- bajas corresponden a la mejor valoración de los
dual, siguiendo las instrucciones específicas de apli- maestros, mientras que las más altas lo hacen a las
cación que figuran en el manual (Mendoza y cols., valoraciones más negativas.
2005a). El CEG es un test que evalúa comprensión de
estructuras gramaticales con distintos grados de
complejidad, siguiendo un formato de elección múl- Resultados
tiple; se le presenta al niño una serie de láminas con
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cuatro dibujos cada una y éste debe señalar el dibujo Estudio de validación concurrente del CEG
que cree que se corresponde con la oración dicha por
el examinador. Consta de 80 elementos (láminas) Mediante el coeficiente de correlación de Pearson
divididos en 20 bloques, evaluando cada bloque una obtuvimos las siguientes correlaciones entre la pun-
determinada construcción gramatical. A cada niño tuación total del CEG y la puntuación correspon-
se le puntuó con la puntuación centil correspon- diente a la valoración de los tutores en cada uno de
diente a su edad que aparece en los baremos del CEG. los apartados de la EVLO:
En cada caso obteníamos una puntuación directa
(máximo 80) y una puntuación centil correspondiente — Escucha: r = -0,477, p < 0,0001 (R2 = 0,2275)
a su edad. La duración aproximada de la aplicación — Habla: r = -0,478, p < 0,0001 (R2 = 0,2284)
es de 20 minutos. En el anexo I se presentan las cons- — Lee: r = -0,563, p < 0,0001 (R2 = 0,2872)
trucciones gramaticales analizadas en cada bloque — Escribe: r = -0,621, p < 0,0001 (R2 = 0,3856)
del CEG. — Total: r = -0,569, p < 0,0001 (R2 = 0,3237)
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Todas las correlaciones son negativas, puesto que


en la EVLO la puntuación sigue un orden inverso: una Tabla 1 Estadísticos (media y desviación típica,
DT) correspondientes a la valoración
mayor puntuación corresponde a una peor valoración otorgada por los maestros a los tres gru-
y a la inversa. pos de niños según sus puntua-
ciones en el CEG

El CEG como predictor del rendimiento académico VARIABLE GRUPO N MEDIA DT

Para comprobar si las puntuaciones obtenidas en Escucha Bajo 46 15,9130 5,8417


Medio 56 12,9107 4,3160
el CEG podían predecir la valoración que los maes- Alto 30 11,1667 3,0522
tros otorgan al rendimiento académico de los niños
en el área del lenguaje, agrupamos a los sujetos en Habla Bajo 46 32,3261 13,4214
tres grupos en función de la puntuación centil alcan- Medio 56 24,5786 8,072
Alto 30 21,2000 3,585
zada en el CEG:
Lee Bajo 46 12,2391 5,6260
— grupo 1: bajo (centiles 1-33) Medio 56 8,4107 3,3126
Alto 30 7,2333 2,5553
— grupo 2: medio (centiles 34-66)
— grupo 3: alto (centiles 67-99). Escribe Bajo 46 12,8043 6,4139
Medio 56 9,0714 4,1641
Utilizamos puntuaciones centiles para controlar el Alto 30 7,0000 1,9298
efecto de la edad, puesto que valoración de la EVLO Total Bajo 46 73,2826 28,8449
es independiente de la edad. Medio 56 55,0714 17,3193
En la tabla 1 presentamos los estadísticos corres- Alto 30 46,6000 9,4050
pondientes a las puntuaciones otorgadas por los
tutores en la ELVO en cada uno de los grupos basados
en la puntuación del CEG.
Con estos datos realizamos análisis univariantes, entre los grupos alto, medio y bajo en el CEG, y los gru-
considerando la puntuación en cada dimensión de pos correspondientes según la valoración de los maes-
la EVLO como variable dependiente y el grupo tros. En la tabla 2 se puede ver esta correspondencia.
correspondiente a la puntuación centil del CEG como Mediante pruebas de chi-cuadrado hemos encon-
variable independiente, obteniendo los siguientes trado diferencias significativas en la valoración de los
valores: tutores mediante la EVLO (puntuación baja, media y
alta) y la puntuación en el CEG (baja, media y alta) con
— Escucha: F(2) = 10,258, p < 0,0001 las siguientes probabilidades: escucha (p = 0,012);
— Habla: F(2) = 13,846, p < 0,0001 habla (p = 0,001); lee (p < 0,001); escribe (p < 0,001);
— Lee: F(2) = 16,454, p < 0,0001 total (p = 0,001).
— Escribe: F(2) = 15,030, p < 0,0001
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— Total: F(2) = 16,927, p < 0,0001

En los análisis post hoc (DHS de Tuyey) compro- DISCUSIÓN


bamos que en ninguna de las variables existían
diferencias significativas entre los grupos alto y Los resultados obtenidos en esta investigación han
medio, aunque en todas ellas se registraron diferen- cubierto los objetivos inicialmente planteados: por un
cias significativas entre los grupos alto/bajo y lado, obtener un nuevo indicador de validez del CEG
medio/bajo. y, por otro, aportar evidencias sobre la relación entre
Por último, hemos llevado a cabo una distribución las dificultades de comprensión lingüística y el bajo
de los sujetos en función de la valoración otorgada por rendimiento escolar a juicio de los tutores de los
los maestros en cada dimensión de la EVLO (bajo: niños estudiados.
33,3 % inferior; medio: 33,3 % central y alto: 33,3 % A efectos de validación, la correlación obtenida
superior). Hemos establecido una correspondencia entre la puntuación total del CEG y cada uno de los
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Tabla 2 Distribución del número (y el porcentaje) de sujetos con puntuaciones bajas, medias y altas en el CEG,
según la valoración otorgada por sus profesores en cada dimensión de la EVLO (baja: 33,3 % inferior;media:
33,3 % central; alta: 33,3 % superior)

PUNTUACIÓN CEG
PUNTUACIÓN EVLO BAJA (n = 46) MEDIA (n = 56) ALTA (n = 30)
Escucha Baja 25 (54,35%) 16 (23,21%) 6 (20,00%)
Media 9 (19,57%) 19 (39,29%) 8 (26,67%)
Alta 12 (26,09%) 21 (37,50%) 16 (53,33%)

Habla Baja 24 (52,17%) 16 (28,57%) 2 (6,67%)


Media 9 (19,57%) 13 (23,21%) 10 (33,33%)
Alta 13 (28,26%) 27 (48;21%) 18 (60,00%)

Lee Baja 28 (60,87%) 14 (25,00%) 4 (13,33%)


Media 5 (10,87%) 13 (23,21%) 5 (16,67%)
Alta 13 (28,26%) 29 (48,21%) 21 (70,00%)

Escribe Baja 26 (56,52%) 15 (26,79%) 3 (10,00%)


Media 9 (19,57%) 16 (28,57%) 5 (16,67%)
Alta 11 (23,91%) 25 (44,64%) 22 (73,33%)

Total Baja 25 (54,35%) 18 (31,14%) 2 (6,66%)


Media 12 (26,09%) 19 (33,93%) 13 (43,33%)
Alta 9 (19,57%) 19 (33,93%) 15 (50,00%)

apartados de la EVLO es significativa en todos ellos, buena parte de su vida. En este sentido, se ha venido
oscilando los valores entre 0,477 (escucha) y 0,621 vertiendo desde hace ya tiempo y desde distintos sec-
(escribe). Dado que las preguntas formuladas en la tores gran cantidad de crítica hacia el uso de tests
EVLO se refieren a aspectos lingüísticos en sus domi- formales para la evaluación del lenguaje y la comuni-
nios orales y escritos, podemos afirmar que el CEG es cación, debido a que utilizan situaciones muy estruc-
un instrumento válido a efectos de la determinación turadas no representativas de la vida real. Cierta-
del rendimiento escolar de los niños en el ámbito lin- mente es así, pero también es cierto que un test
güístico. formal puede ser una medida rápida y representativa
Habitualmente se tiende a establecer la validez de una habilidad lingüística determinada; lo que sí
concurrente de un test buscando su correlación con se debe hacer con ese test es validarlo con medidas y
otros tests que midan constructos similares; no obs- situaciones de la vida real, como por ejemplo, el ren-
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tante, en la actualidad se está intentando que los dimiento escolar de los alumnos a juicio de sus pro-
estudios de validez se orienten hacia aspectos más pios tutores.
funcionales, referidos al estudio de la función comu- Los índices de correlación obtenidos son relati-
nicativa en situaciones de la vida real (Marquardt y vamente altos y significativos. Estos índices nos
Gillam, 1999), concepto próximo al de validez ecoló- indican la proporción de la varianza explicada por
gica, considerada por Sbordone (1996) como las rela- el CEG respecto al criterio aportado por los tutores
ciones funcionales y predictivas existentes entre la al cumplimentar la EVLO. Se refieren al grado en el
ejecución de una serie de tests y la conducta indivi- que una persona que obtiene una alta puntuación
dual en distintas situaciones de la vida real. En este en el CEG tiene un rendimiento escolar aceptable y
caso, hemos relacionado los resultados de un test a la inversa. Este grado oscila entre el 23 % en las
—CEG— con el rendimiento escolar de los alumnos subescalas de escucha y habla y el 39 % en la
en el área del lenguaje, que es, obviamente, una subescala de escribe, según se desprende de los
situación de la vida real de los alumnos durante una valores de R2. No explican todos los posibles proble-
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mas de aprendizaje referentes al área del lenguaje, la muestra de estandarización) a los que sus tutores
pero lo que sí indican es que una determinada pro- consideran que tienen un bajo rendimiento acadé-
porción de los mismos está relacionada con difi- mico en el área del lenguaje. Las valoraciones que
cultades de comprensión de diferentes construccio- otorgan a los niños con puntuaciones en la banda
nes gramaticales. media en el CEG son más dispersas, siendo mayor la
Intentando profundizar más de lo que permite un correspondencia en las bandas extremas, donde las
diseño correlacional en las relaciones entre rendi- dificultades son más evidentes. Si llegáramos a conse-
miento escolar y comprensión gramatical, optamos guir un perfil de las habilidades lingüísticas básicas de
por una aproximación factorial, con la intención de estos niños, probablemente podríamos ayudar a
determinar el rendimiento escolar, a juicio de los resolver muchas de estas dificultades. Entendemos
tutores, de los niños con altas, medias y bajas pun- que no es una situación ideal, porque este trabajo se
tuaciones en el CEG. Los resultados obtenidos debería abordar desde los primeros años de vida: ese
mediante los análisis univariantes confirman nuestra es el reto. Pero, probablemente, ayude a resolver los
hipótesis inicial con una alta probabilidad; los niños problemas académicos de determinados niños de
que obtienen una puntuación elevada en el CEG (por edad escolar y evite situaciones tal vez más conflicti-
encima del centil 67) son considerados por sus tuto- vas cuando lleguen a la adolescencia y juventud.
res como desarrollados en sus habilidades lingüísti- Aunque este porcentaje fuera mínimo ya merecería la
cas de comprensión y producción, tanto a nivel oral pena el intento.
como escrito, a la inversa de lo que sucede con los En este punto quisiéramos resaltar un dato que se
niños cuya puntuación en el CEG se sitúa en el tercio desprende del análisis de los resultados: la correspon-
inferior. dencia entre la valoración de los tutores y la puntua-
Queremos resaltar un dato que nos parece impor- ción en el CEG, aunque significativa, es mayor en los
tante, obtenido en los análisis post hoc. Los juicios aspectos relativos a la lectura y la escritura que a los
de los maestros no difieren de forma significativa que hacen referencia al lenguaje oral (escucha y
entre los estudiantes que obtienen altas y medias habla). Si el CEG es una medida de comprensión gra-
puntuaciones en el CEG, aunque sí existen diferencias matical oral, no debería darse, tal vez, esta situación.
entre estos dos grupos con respecto al que puntúa Tras un análisis detallado de los elementos de la EVLO
bajo —por debajo del centil 33— en el CEG. El rendi- se puede ver que las preguntas relativas a la escucha
miento escolar de este último grupo es el que real- y al habla se refieren a dificultades más básicas y
mente preocupa a sus tutores, tanto en lo que res- menos observables, por ejemplo, «tiene dificultad
pecta a sus habilidades de comprensión y expresión para seguir instrucciones orales», o «tiene dificultad
del lenguaje como en lo que respecta a su dominio de para mirar a las personas que le están hablando». Por
lectura y escritura. el contrario, las preguntas referidas a la lectura y la
En este tercio inferior de la muestra están inclui- escritura están más vinculadas con el aprendizaje
dos los niños con bajo nivel lingüístico, atendiendo a escolar y son más observables y evaluables. Conside-
una distribución normal de esta habilidad; este dato ramos que esta es la explicación de un resultado que
no nos dice si se trata de niños con cierto retraso lin- a primera vista pueda resultar contradictorio.
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güístico y cognitivo general o si el retraso relativo El trabajo que aquí se presenta es importante por las
afecta exclusivamente al área del lenguaje; tampoco perspectivas que abre y las posibles líneas de investiga-
nos indica si existen otros factores de tipo social, ción que puede generar sobre el estudio de los proble-
emocional o familiar que afecten negativamente a su mas de aprendizaje escolar y su vinculación con deter-
rendimiento académico. Lo que evidentemente nos minadas conductas agresivas y antisociales que pueden
indica es que a la mayoría de los niños que puntúan desarrollar los niños con bajo rendimiento académico.
bajo en el CEG (por debajo del centil 33 en la muestra Nuestros hallazgos sobre la importancia de la compren-
general de estandarización) sus tutores los consideran sión lingüística, concretamente gramatical, confirman
como más deficitarios en sus rendimientos académi- resultados de investigaciones previas y, como sugieren
cos en el área del lenguaje oral y escrito, tal como se Tomblin y cols. (2000), debe enfatizar la necesidad de
describe en la tabla 2. En esta tabla igualmente se evaluar las habilidades lingüísticas más sutiles e inter-
puede ver que son muy pocos los niños con altas venirlas desde la edad preescolar y primeros años esco-
puntuaciones en el CEG (por encima del centil 67 en lares con la finalidad de evitar su influencia negativa en
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el rendimiento escolar posterior y, probablemente, en el Tomblin y cols. (2000) sobre la importancia de desarro-
surgimiento de conductas agresivas y antisociales en la llar las competencias del lenguaje oral para aprender
preadolescencia. Nuestro trabajo sólo se ha centrado, una serie de reglas cada vez más sutiles y complejas
por el momento, en las habilidades académicas, pero no sobre el uso del lenguaje en el amplio rango de con-
puede ni debe olvidar la perspectiva social y comuni- textos de la vida real, tanto en el ámbito académico
cativa. Para concluir, lo hacemos con la sugerencia de como en el social e interpersonal.

Anexo I Construcciones gramaticales analizadas en el CEG

Bloque A: oraciones predicativas SVO no reversibles (p. ej., el niño juega a la pelota).

Bloque B: oraciones atributivas (p. ej., el perro es negro).

Bloque C: oraciones predicativas negativas (p. ej.,el gato no corre).

Bloque D: oraciones predicativas pronominalizadas (reflexivas/no reflexivas) (p. ej., la niña se lava las manos).

Bloque E: oraciones predicativas SVO reversibles (p. ej., el hombre besa a la mujer).

Bloque F: oraciones predicativas SVO con sujeto plural (p. ej., los perros persiguen a la niña).

Bloque G: oraciones coordinadas disyuntivas (con sujeto/objeto coordinado) (p. ej., ni el gato ni el perro son negros).

Bloque H: oraciones predicativas SVCC de lugar (encima/debajo/delante/detrás) (p. ej.,el niño está detrás de la niña).

Bloque I: oraciones coordinadas adversativas (con sujeto/objeto coordinado) (p. ej., no sólo la pelota es roja, sino también el libro).

Bloque J: oraciones relativas del tipo OS (p. ej., la mujer abraza a la niña que es rubia).

Bloque K: oraciones SVO con sujeto focalizado (p. ej., es la niña la que pinta al niño).

Bloque L: oraciones comparativas absolutas (p. ej., el cuadrado es más grande que el círculo).

Bloque M: oraciones activas OVS con objeto escindido (p. ej., a la mujer la peina el hombre).

Bloque N: oraciones con objeto pronominalizado (contraste de género). (p. ej., las niñas lo miran).
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Bloque O: oraciones relativas del tipo SS (p. ej., el perro que persigue al gato es pequeño).

Bloque P: oraciones coordinadas adversativas (con sujeto/objeto coordinado) (p. ej., el cuadrado es grande, pero no es azul).

Bloque Q: oraciones con objeto pronominalizado (contrastes género y número) (p. ej., la mujer los lleva).

Bloque R: oraciones pasivas OVS reversibles (p. ej., la niña es empujada por el niño).

Bloque S: oraciones OVS con objeto focalizado (p. ej., es al ratón al que persigue el gato).

Bloque T: oraciones relativas del tipo SO (p. ej., el círculo dentro del que hay un cuadrado es azul).

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Anexo II Escala de valoración del lenguaje observable

Las siguientes afirmaciones describen posibles problemas que pueden presentar los alumnos en el colegio para escuchar, hablar, leer o escri-
bir. Por favor: lea detenidamente este cuestionario e indique con qué frecuencia aparece en el alumno el comportamiento al que alude la pre-
gunta. Le rogamos que no deje ninguna pregunta sin contestar. Su colaboración es muy valiosa. Muchas gracias.
Claves de respuesta:
1: Nunca
2: A veces
3. Frecuentemente
4: Siempre.
APELLIDOS Y NOMBRE DEL ALUMNO/A _______________________________ CURSO_____
Al escuchar, el alumno/a: Frecuencia
1 Tiene dificultad para prestar atención 1 2 3 4
2 Tiene dificultad para seguir instrucciones orales 1 2 3 4
3 Tiene dificultad para recordar las cosas que se le dicen 1 2 3 4
4 Tiene dificultad para entender lo que se le dice 1 2 3 4
5 Pide que le repitan lo que le han dicho 1 2 3 4
6 Tiene dificultad para entender las palabras que oye 1 2 3 4
7 Tiene dificultad para entender los aprendizajes nuevos 1 2 3 4
8 Tiene dificultad para mirar a las personas que están hablando 1 2 3 4
9 Tiene dificultad para entender expresiones, gestos, lenguaje corporal, etc. 1 2 3 4
Al hablar, el alumno/a: Frecuencia
10 Tiene dificultad para responder a las preguntas que se le hacen 1 2 3 4
11 Tiene dificultad para responder a las preguntas tan rápido como los demás niños 1 2 3 4
12 Tiene dificultad para pedir ayuda cuando la necesita 1 2 3 4
13 Tiene dificultad para hacer preguntas 1 2 3 4
14 Tiene dificultad para utilizar un vocabulario variado 1 2 3 4
15 Tiene dificultad para encontrar la palabra correcta que quiere decir 1 2 3 4
16 Tiene dificultad para decir lo que está pensando 1 2 3 4
17 Tiene dificultad para describir (contar) cosas 1 2 3 4
18 Tiene dificultad para mantenerse en un tema de conversación 1 2 3 4
19 Tiene dificultad para llegar al punto que quiere 1 2 3 4
20 Tiene dificultad para contar una historia en el orden correcto 1 2 3 4
21 Usa una gramática muy pobre 1 2 3 4
22 Tiene dificultad para usar oraciones completas 1 2 3 4
23 Habla con oraciones cortas y cortadas (incompletas) 1 2 3 4
24 Tiene dificultad para extenderse en alguna respuesta o añadir detalles 1 2 3 4
25 Tiene dificultad para mantener una conversación 1 2 3 4
26 Tiene dificultad para hablar en un grupo de personas 1 2 3 4
27 Tiene dificultad para repetir algo de forma diferente cuando alguien no lo entiende 1 2 3 4
28 Se enfada cuando la gente no lo entiende 1 2 3 4
Al leer, el alumno/a: Frecuencia
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29 Tiene dificultad para encontrar los sonidos de las palabras 1 2 3 4


30 Tiene dificultad para entender lo que lee 1 2 3 4
31 Tiene dificultad para explicar lo que lee 1 2 3 4
32 Tiene dificultad para identificar la idea principal de lo que lee 1 2 3 4
33 Tiene dificultad para recordar los detalles de lo que lee 1 2 3 4
34 Tiene dificultad para seguir instrucciones escritas 1 2 3 4
Al escribir, el alumno/a: Frecuencia
35 Tiene dificultad para escribir lo que piensa 1 2 3 4
36 Usa una gramática muy pobre 1 2 3 4
37 Tiene dificultad para escribir oraciones complejas 1 2 3 4
38 Escribe con oraciones cortas y cortadas (incompletas) 1 2 3 4
39 Tiene dificultad para extenderse en una respuesta o agregar detalles 1 2 3 4
40 Tiene dificultad para escribir las palabras en el orden correcto en una oración 1 2 3 4
Del listado anterior indique, en su caso, los problemas que más le preocupan

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