Maestro Julio Castro

Seminario de Derechos Humanos

Patricia Fernández 3°A

Nataly Morales 3 C

giac
28/06/2013

I
Maestro Julio Castro

II
 Maestro Julio Castro

Señor general:

Es mi desesperación de esposa, que desde el 1º de agosto nada sé de mi

marido, lo que me lleva a pedirle, con todo respeto, me conceda una entrevista.
Hace hoy 57 días de la desaparición de mi esposo, sin que se me comunique
nada y sin que se responda a mis reiteradas gestiones ante las autoridades
correspondientes.
Mi esposo es Julio Castro, el que fuera su maestro en la escuela Sanguinetti.
Estoy segura que usted tiene que recordarlo por su excepcional calidad
humana, así como julio castro tenía presente en usted al pequeño escolar. Hay
relaciones que no se destruyen y una es la que se establece entre el maestro y
el alumno.
En nombre de ello y acuciada por la creciente desesperación, es que me decidí
a insistir en mi pedido, porque creo que sólo usted puede ayudarme y
orientarme para saber dónde está y cómo se encuentra este maestro que,
próximo a los 69 años, se halla en un estado de salud que requiere cuidados
especiales.
Por favor, señor general, permita que hable con usted, permita que oiga de sus
labios las palabras que tanto necesito, haciéndome llegar una respuesta.
Reciba mi anticipado agradecimiento con mi saludo respetuoso.
Zaira Gamundi.
Carta de Zaira Gamundi al General Gregorio Álvarez. Montevideo, octubre de 1977

III
 Maestro Julio Castro

INTRODUCCIÓN

Para analizar la temática de los derechos humanos, hemos decidido tomar al

maestro Julio Castro como referente, y partiendo de su situación en particular,
sus luchas, en las cuales reclamaba los derechos que le correspondían a él y al
pueblo, poder transitar por el estudio y análisis de los derechos humanos
consagrados internacionalmente.
En nuestro trabajo haremos hincapié en algunos de los derechos civiles, por
ejemplo el derecho a la vida y a la igualdad ante la ley.
También tomaremos los derechos políticos; el derecho al voto y a la
participación política, los derechos sociales y económicos que son el derecho a
la salud a la educación y al trabajo.
Partiremos de una concepción de ciudadanía que escribió T.H. Marshalll, él
analiza el desarrollo de la ciudadanía desde tres puntos de vista: desde el
desarrollo de los derechos civiles, derechos políticos y derechos sociales. Su
contribución distintiva fue la introducción del concepto moderno de Derechos
sociales . Proclamó que sólo existe la ciudadanía plena cuando se tienen los
tres tipos de derechos, y que los mismos no dependen de la clase social a la
que se pertenezca,
La condición de ciudadanía se expresa en tener derechos y obligaciones; la
pertenencia a una comunidad (identidad), y la participación democrática,
implican, una ciudadanía activa y responsable.
Existen derechos que son inherentes a todos los seres humanos, es decir
todos nacemos con derechos. Que están abalados y respaldados en nuestra
Constitución de la República Oriental del Uruguay, como en muchísimos
tratados internacionales, que garantizan una vida digna, la capacidad de
desarrollarnos plenamente y hacer uso de nuestras cualidades humanas,
nuestra inteligencia, nuestras aptitudes y nuestra conciencia, así como
satisfacer entre otras cosas, nuestras necesidades espirituales.
Los derechos existen porque hay seres humanos que desean vivir una vida en
la que se protejan y respeten la dignidad y valor de cada humano.

IV
 Maestro Julio Castro

UN POCO DE HISTORIA

Toda la ciudad estaba puesta en tela de juicio por los militares, siendo Castro,
maestro y escritor opositor del régimen, no librándose así de las consecuencias
que esto traería sobre él.
Previo a la dictadura en 1971 nuestro maestro firma el Acta Fundacional del
Frente Amplio, partido político de izquierda.
En el seminario Marcha, ese mismo año se publica su artículo: El Frente
Amplio, un horizonte de esperanza, luego de esto es candidato a la Cámara de
Diputados por la lista 77, “Movimiento Independiente 7 de octubre”, integrante
del Frente Amplio.
En las próximas elecciones nacionales es elegido diputado, dentro de sus
acciones se opone al proyecto de Ley de Educación General que el Ministro de
Educación y Cultura, Dr. Julio María Sanguinetti, había presentado al Poder
Legislativo
En el año 1973; el día 27 de junio. El Presidente Bordaberry disuelve el Poder
Legislativo. Comienza en el país la dictadura cívico militar a la que Julio Castro
ofrecerá resistencia hasta su desaparición.
En el año 1974 comienza una era militar en nuestro país, una dictadura; las
Fuerzas Armadas ocupan el Estado a través del nombramiento de generales y
coroneles en la mayor parte de los puestos de administración pública.
En la siempre creciente noción de enemigo, las Fuerzas Armadas abren dos
nuevos frentes de lucha: la enseñanza y la cultura, suprimiendo los viejos
planes de estudio.
En ese mismo año en el mes es de noviembre. Julio Castro es detenido, por un
día, por la Policía en Cuchilla Alta, Depto. de Canelones, adonde había acudido
a inquirir por la suerte de la Maestra Directora de la Escuela Nº 95, Beatriz
Etchepare Mántaras, perseguida por la dictadura.
En el año 1974, Marcha publica el cuento “El guardaespaldas”, de Winston
Marra. De inmediato, el autor, Calos Quijano, Julio Castro, Juan Carlos Onetti y
Hugo Alfaro son responsabilizados del contenido de dicho cuento.
La obra narra los recuerdos de un policía corrupto y torturador. El personaje
agoniza inmovilizado en una sala blanca donde recuerda momentos de su vida,
su infancia, sus momentos de policía y cuando fue Guardaespaldas de un
“Doctor”. Los recuerdos de este personaje evidencian andanzas sexuales y
torturas, mostrando un personaje sádico y perverso.
Narraba una historia tan real como la dictadura que se estaba viviendo, se
identificaba a un comisario llamado Héctor Morán Charquero, asesinado en
1970.
El cuento ganó el primer premio en el concurso de cuentos, siendo a su vez
criticado por tener pasajes de violencia sexual desagradables e inútiles desde
el punto de vista literario.

V
 Maestro Julio Castro

Bajo la acusación de apología a la sedición, las Fuerzas Armadas detienen a

Onetti. También se procesa a Marra, el cual pasará 4 años en la cárcel.
En 1974. La dictadura clausura definitivamente el seminario Marcha y
secuestra sus archivos, tres de las personas del cuerpo de redacción son
procesadas por un delito de Lesa Nación, o agravio contra la nación.
En este año Castro sufre un segundo ataque provocado por un aneurisma
cerebral, del que se restablece.
Entre los años 1975 – 1977 - Julio Castro facilita la salida del país de militantes
perseguidos por la dictadura, entre ellos la de Carlos Quijano, que se exilia en
México en 1975.
En el mes de agosto del año 1977 es secuestrado, y desaparece en
Montevideo.
Diez años después, Julio Cesar Barboza, ex integrante del SID (Servicio de
Información de Defensa) declaró en la Comisión Investigadora del Parlamento:
-“Una mañana, Zabala, oficial principal de Policía, me llevo a un operativo.
Paramos el coche en las inmediaciones de Rivera y Soca. De pronto sale un
hombre de unos 60 años, poco pelo, canoso, bajo, creo que con saco marrón
[…] Se le pararon al lado y lo agarraron del brazo, no fue un procedimiento
espectacular, no ofreció resistencia, fue como una sorpresa […] Lo llevaron a
una cárcel clandestina en la calle Millan y Loreto Gomenzoro […] quedo parado
allí en el sótano, con un guardia al lado”.
En ese mismo lugar, en Millán 4269 (SID), también fue torturado un periodista
que logró contar la historia; Flavio Tavares; durante su cautiverio oyó una
charla entre militares en la cual nombraban al maestro Julio Castro:
-“El veterano empeoro, esta jodido”.
Aquí solo encontramos relatos de un universo posible, ya que palabras del
mismo Castro no se oyeron más.
En ese mismo año de su desaparición, hacia fin de mes, la Dirección de
Investigaciones publica un aviso, pidiendo colaboración para ubicarlo.
Algunos meses después, la jefatura de policía de Montevideo informa que Julio
Castro, salió del país dirigiéndose a Buenos Aires en un vuelo de Pluna.
Era un hombre que tenía serios problemas de salud: recientemente había
sufrido una embolia y no podía mover una de sus manos
El ex agente de inteligencia Julio César Barboza, participante en el operativo,
contó que ese día, cuando llegaba a la oficina del Servicio de Información e
Inteligencia, en Monte Caseros y Luis Alberto de Herrera, el oficial Juan
Ricardo Zabala fue quien le ordenó acompañarlo a la misión, Barboza dijo
sentirse "conmovido" y "emocionado". En 1985, Barboza realizó una
conferencia de prensa en la sede de la Asociación de Empleados Bancarios del
Uruguay en la que develó su participación en el operativo. El ex agente dejó la
fuerza policial dos semanas después del secuestro. Desde entonces ha ido a
declarar a juzgados y a las convocatorias de organismos de derechos
humanos.

VI
 Maestro Julio Castro

En 1977, Barboza tenía apenas 19 años recién cumplidos. Según contó en su

momento, él y sus compañeros esperaron un largo rato en la esquina de Rivera
y Soca. Cuando lograron reducir a Castro.
Se transcribe a continuación la parte del Informe Final de la Comisión para la
Paz de 10 de abril de 2003, entregada a los familiares de Julio Castro;
“1. La Comisión para la Paz considera confirmada la denuncia sobre
desaparición forzada del ciudadano uruguayo Julio Castro Pérez (C.I. Nº
167.820), porque ha recogido elementos de convicción coincidentes y
relevantes que permiten concluir que:
• Fue detenido en la vía pública, en la intersección de la calle Francisco Llambí
casi Avenida Rivera, el día 1º de agosto de 1977, alrededor de la hora 10.30.
• Se le trasladó a un centro clandestino de detención sito en la Avenida Millán
Nº 4269, donde fue sometido a torturas a consecuencia de las cuales falleciera,
en ese lugar, el 3 de agosto de 1977, sin recibir atención médica.
2. Sus restos - según la información recibida - habrían sido primero enterrados
en el Batallón 14 de Toledo y después exhumados a fines del año 1984,
incinerados y tirados al Río de la Plata”.
Durante 34 años permaneció como un detenido desaparecido de la dictadura
cívico militar, hasta el 21 de octubre del año 2011, en el cual su cuerpo fue
encontrado en un enterramiento clandestino, que se había realizado por
personal militar uruguayo en una finca, que también pertenecía a la milicia; el
batallón 14.
"estallado por un impacto de alto calibre", "Huellas indicando que los pies
estuvieron atados con alambre", "Manos atadas con cuerda larga" .Estas son
las principales conclusiones del estudio forense realizado sobre los restos
humanos hallados el 21 de octubre en el Batallón 14.
El policía Zabala fue procesado por cómplice del “homicidio especialmente
agravado”; confesó ser el autor del secuestro del maestro y militante de
izquierda en la esquina de Francisco Lambí y Rivera, en 1977.La sentencia del
juez Fernández Lecchini indica que “El régimen dictatorial consideraba a
Castro peligroso por su labor a nivel de enseñanza y a nivel periodístico y
por su labor de ayuda a los perseguidos”.
Su desaparición y búsquedas causaron gran conmoción, siendo una
desaparición forzada, de un hombre ya mayor, fue investigada por
representantes de organizaciones de Derechos Humanos.
En ese marco de represión política que se estaba viviendo, los derechos
humanos reconocidos estaban siendo violados.
El derecho humano fundamental a la vida, el cual es el más importante para los
seres humanos, ha sido violado, al encontrar el cuerpo del maestro en el
batallón 14, este derecho está amparado en nuestra constitución de la
república en el artículo N° 7 -“Los habitantes de la República tienen derecho a
ser protegidos en el goce de su vida, honor, libertad, seguridad, trabajo y
propiedad…” ninguno de estos derechos que ampara nuestra constitución fue
respetado para este habitante de la República.

VII
 Maestro Julio Castro

El derecho a la vida está también garantizado en muchos tratados

internacionales: por ejemplo la Declaración Universal de los Derechos
Humanos
"Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su
persona".
Enumerando los derechos violados contra el maestro julio Castro podemos
apreciar, el derecho a la seguridad e integridad de la persona; el derecho a la
libertad de opinión y difusión de pensamiento; ya que escribía artículos
periodísticos y esto fue un factor decisivo para su captura, el derecho de
justicia no dándole nunca una respuesta a su esposa, el derecho a proceso
regular y asociación ya que la ley de caducidad no condena acciones
criminales, producidas en nuestra última dictadura.
Derecho a sufragio y
participación en el
gobierno, ya que fue
un gobierno de facto.
Dentro de este
régimen de terror la
esposa de Julio
Castro, pedía ayuda
para encontrarlo, el
mismo estaba bajo
captura, seguramente
en la prisión lo
torturaban de manera
sistemática, también
se mintió sobre la
salida del maestro del país, quedando este desaparecido hasta la fecha en la
cual encontraron su cuerpo. No es de extrañarse este hecho puesto que la
Política del momento se basaba en la aniquilación de los opositores al régimen,
subordinando al resto de la población.
El derecho a la integridad personal fue violado de una manera cruel, a un
hombre mayor, atentar contra su bienestar físico, y moral al torturarlo,
hostigarlo, lesionarlo para finalmente matarlo. Privándolo a su vez de otro
derecho que se relaciona estrechamente con este, la libertad individual,
protegido a través de la acción de hábeas corpus "tendrás tu cuerpo libre", y se
basa en evitar los arrestos y detenciones arbitrarios.
Época de acciones tiranas, Aristóteles definió el medio de conservación del
poder en las tiranías “El abatimiento moral de los súbditos, es la clave de la
tiranía, pues las almas envilecidas no piensan nunca en conspirar.”
Para reprimir toda superioridad, prohíben las asociaciones, y todo lo que pueda
aumentar la cultura, ya que esta da confianza en sí mismos, aquí se viola el
artículo 38 de la constitución de la República el cual garantiza el derecho a la
reunión pacifica,

VIII
 Maestro Julio Castro

La represión que se daba, que se implemento en él, dirigida al sometimiento y

la desmoralización, apuntaba a la disolución del ser, despojando de la dignidad
del individuo.
La tortura como violación del espacio privado del cuerpo, es una expresión
concreta de la falta de amparo, no tuvo garantías de protección, como nadie la
tenia.
Su cárcel, fue un lugar donde si bien estaba encerrado, continuaba
amenazado, la política de encierro que recibió apuntaba hacia la destrucción
del ser humano, a través de un continuo hostigamiento.
Los derechos de primera generación que son inherentes a todos los seres
humanos fueron transgredidos en toda su extensión, entre los derechos de
segunda generación quebrantados podemos hablar del derecho a la salud
física y mental, y a formar sindicatos.
En los derechos de tercera generación podemos situar de manera significativa
el derecho a la paz.

BIBLIOGRAFÍA:
Ediciones de la Banda Oriental; “Cuadernos de la Historia Reciente”
“Constitución de la República Oriental del Uruguay”
Martínez, Virginia; “Tiempos de dictadura”

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Maestro Julio Castro

X
 Maestro Julio Castro

Reflexión Personal

En este trabajo final decidimos focalizarnos en Julio Castro, periodista y

maestro desaparecido durante la época de la dictadura,encontrado
enterrado,sin vida en el año 2011.

Para la realización del análisis nos centramos directamente en los Derechos

Humanos, ya que en este caso se observa claramente que no son respetados.

Comenzando a no respetarse desde mi perspectiva el derecho a la vida y a la

libertad, ya que son Derechos Inherentes al ser humano.

Realizar esté informe me pareció muy enriquecedor, ya que me permitió

entender e informarme mas acerca de los derechos que tenemos que tener en
cuenta y las obligaciones también como persona que somos.

«Los derechos humanos son sus derechos Tómenlos Defiéndanlos,

Promuévanlos, Entiéndanlos e insistan en ellos. Nútranlos y enriquézcanlos,
Son lo mejor de nosotros. Denles vida.»

Patricia Fernández 3°A

XI
 Maestro Julio Castro

NO DEBIO SUCEDER, AHORA SOLO QUEDA APRENDER

Nadie merece morir por sus ideas si las expresa con respeto y tolerancia
hacia los demás, es un principio de convivencia fundamental.-Durante el
periodo más triste de la historia uruguaya muchas personas no supieron cómo
expresar sus ideas y muchos no toleraron esas ideas, por eso sucedió lo que
nadie quería entre esos hechos la muerte del maestro Julio Castro.-
No debió suceder, ahora solo queda aprender, de nuestros errores y
saber que somos capaces de equivocarnos, pero también reconocer que todos
tenemos derechos a equivocarnos, mi razón no es la única así que la razón de
los demás nunca será la más valiosa. La perfección no existe, siempre hay algo
por mejorar.
A nuestro Uruguay, no pudo pasarle lo que sucedió entre el 27 de junio
del año 1973 al 1º de marzo del año 1985, un país dividido en dos, por falta de
tolerancia, pero, paso ahora la enseñanza, mirar hacia adelante, luchando en
este presente por un futuro de paz para todos, para que no existan más casos
como Julio Castro.-
Nataly Morales 3ªC

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