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Introducción:

En la actualidad las redes móviles se caracterizan por el crecimiento exponencial del


tráfico, el cual es causado por el aumento de dispositivos móviles de los usuarios,
navegación por internet más rápida, dispositivos con capacidad de navegación a internet
y reproducción de contenido multimedia de alta resolución. Todo esto implica la
necesidad de mejorar la escalabilidad en las redes móviles para el manejo en tiempo y
espacio de patrones de tráficos fluctuantes, dispositivos con diferentes requisitos de
calidad y diversidad de servicios. Por estas razones las redes móviles están
evolucionando hacia la tecnología 5G. [1]
El proyecto europeo “Mobile and Wireless Communications Enablers for the 2020
Information Society” propuesto en el 2012 impulsó la investigación sobre el futuro de las
redes de comunicación móvil y cómo la gran demanda de información en distintos
sectores como el de la salud, empresarial, entretenimiento, viajes, noticias y entre otros,
involucrarían demandas de energía para los dispositivos móviles. Debido a esta limitante
múltiples estudios relacionados a la sostenibilidad de un dispositivo con respecto a su
consumo de energía permitió pensar en una solución para superar dicho obstáculo, la
computación móvil de procesos distribuidos. [2]
Este relativamente nuevo concepto nos abre las puertas a un mundo de interconexión
inteligente capaz de segmentar las tareas que un dispositivo puede realizar con el fin de
aprovechar la capacidad del canal de trasmisión de la tecnológica 5G y proveer de
resultados inmediatos sin depender del hardware propio del dispositivo móvil. Así mismo
gracias a la tecnología 5G se ha logrado pensar en una solución para mitigar el alcance
de enlaces para cada individuo sin que estos lleguen a ser afectados por interferencias
propias del canal de comunicación, propuesta que será descrita en el transcurso de este
trabajo. [2]

Descripción:

Móvil Cloud Computing (MCC) es un caso específico de Cloud Computing en el que el


usuario accede a los servicios en la nube a través de un teléfono móvil, esto aporta varias
ventajas, tales como: alargar la vida útil de la batería, con lo cual se busca realizar tareas
que consumen muchos recursos en la nube y descargarlas en el teléfono: un ejemplo de
ello podemos citar a un juego de ajedrez. La computación en la nube nos proporciona
altas capacidades de almacenamiento, además de poder ejecutar aplicaciones
complejas dentro de servidores en la nube. Se puede almacenar datos desde un
dispositivo móvil con un alto estándar de confiabilidad. Para realizar este tipo de
computación es necesario una red que soporte un alto número de tráfico y sobre todo
que sea escalable. En este punto nace la idea de una red 5G. El acceso de radio para
llegar al proveedor de la nube a través de las redes actuales es limitado debido a que se
generan latencias, los humanos son muy sensibles al retraso, la lentitud y cuando
aumenta la latencia, la calidad de respuesta interactiva cliente-servidor empeora. [2]
Para el aumento de las velocidades de transmisión de información es necesario el uso
de redes con mayor densidad, de potencia más baja y celdas pequeñas que posean una
reutilización espacial más alta. Estas celdas poseen dos efectos fundamentales. Primero,
la distancia existente entre los puntos de acceso remoto y los dispositivos terminales se
reduce, lo que permite que la probabilidad de línea de visión aumente. Segundo, el
espectro se utiliza de forma más eficiente debido a que cada punto de acceso remoto
utiliza el mismo rango de espectro. Además, las celdas pequeñas se utilizan para
complementar las macro celdas que ya existen, para proporcionar una red de cobertura
a usuarios que se trasladan rápidamente y donde exista baja densidad de cobertura para
usuarios. [1]
Mediante la segmentación e incorporación de pequeñas adaptaciones se nos permite
aumentar la densidad de conexión, pero por otro lado también aumenta la interferencia
entre las celdas y los escenarios aumentan su complejidad por la interferencia de
multinivel. Además, mediante la densidad de implementaciones sea mayor, existe la
posibilidad de que un punto de acceso remoto no transporte o posea poca carga de
tráfico debido a las fluctuaciones de tráfico espacial y temporal. Por lo tanto, con el uso
de procesamiento centralizado se pueden activar y desactivar de forma selectiva los
puntos de acceso remoto para obtener fluctuaciones del tráfico sistemáticos en tiempo y
espacio. Además, introducir un algoritmo que permita mitigar las interferencias y
cancelación entre las múltiples celdas, es posible gracias a la característica
computacional de los subsistemas o nubes pequeñas. Las redes de acceso remoto
centralizadas permiten un manejo centralizado de los procesamientos generados por los
dispositivos que acceden remotamente. En este tipo de redes, los cabezales remotos de
radio se encuentran conectados a través de enlaces de fibra óptica a un centro de datos
donde se realizarán los procesamientos de banda base. De esta forma se logra agrupar
el procesamiento de banda base en unidades banda base obteniéndose mejoras de
gracias a la centralización. Sin embargo, se requieren plataformas de hardware robustas
que utilicen procesadores de señal digital para llegar a completar los requerimientos
receptados de todas las conexiones. Por lo que se requiere de plataformas de
computación en la nube en funcionamiento conjunto con hardware de propósito general
para obtener varios tipos de beneficios como una gran cantidad de múltiples entradas y
múltiples salidas y varias tecnologías de acceso de radio. [1]
Gracias a la ventaja de escalabilidad de las redes inalámbrica y sobre todo de la
tecnología 5G se ha logrado proponer una interesante solución que permite combinar la
computación distribuida para dispositivos móviles y la mala recepción de las señales en
zonas urbanas. Un grupo de investigadores de la Universidad de Victoria en Canadá, ha
prototipado utilizando un dron y módulos Beamforming la primera red de nodos aéreos
para la expansión de la señal 5G basada en tecnología mmWave , buscando que cada
dispositivo que se pueda conectar al módulo, simulando una estación de radio base,
pueda distribuir la carga de procesamiento a través de él y esta pueda llegar con menor
latencia a los nodos inteligentes con capacidades computacionales limitadas, pero
también pudiendo llegar a la nube principal de procesamiento según lo requiera. [2]

Conclusiones:

Gracias al avance de las tecnologías que permiten establecer canales de comunicación


inalámbrica cada vez con un ancho de banda mayor, es posible levantar infraestructura
simple para abarcar un área de conexión relativamente amplia para la conexión de los
dispositivos teniendo en cuenta el nivel de perturbaciones en el área.
La subdivisión de las redes y la dotación de niveles de jerarquía con respecto al poder
de procesamiento de datos ha permitido resolver la demanda de datos crecientes y del
funcionamiento de ciertos dispositivos que aún se encuentran bajo pruebas, tal es el caso
de los autos inteligentes y de la inteligencia artificial en la nueva gama de dispositivos
móviles, entre otras aplicaciones.
Debido al crecimiento exponencial de los usuarios de telefonía móvil, y la alta demanda
en el consumo de datos, la red 4G y versiones anteriores empiezan a notar lentitudes en
sus respuestas y fue necesario escalar a una nueva generación de tecnología celular
5G.
Al implementar la red 5G es posible realizar cálculos en granjas de servidores y con lo
cual las aplicaciones móviles desarrolladas, empezarán a disminuir sus tamaños en
memoria y consumo de recursos tales como batería y memoria RAM debido a que
cálculos grandes y consultas van a ser realizados en servidores alojados en máquinas
virtuales.

Bibliografía:

[1] P. R. J. B. M. L. V. S. Dirk Wübben, "Benefits and Impact," IEEE SIGNAL


PROCESSING MAGAZINE, 2014.

[2] Y. Huo and X. Dong, "IEEE Xplorer," IEEE, p. 8, 2018.

[3] S. Barbarossa, S. Sardellitti and P. D. Lorenzo, "Communicating While Computing:


Distributed mobile cloud computing over 5G heterogeneous networks," IEEE.

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