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ENSAYO 1: EL ARTE DEL ACTOR EN EL SIGLO XX

Ramo: Historia del Teatro III. Docente: Carolina Araya


Por: Valeria Millanao. Segundo año, sección dos

Tesis:
¿Por qué el actor del siglo XX, necesita ser veraz en escena?

Introducción:
Para dar inicio a este ensayo, es importante primero, conocer el contexto a partir
del cual surge este cuestionamiento; durante los inicios del siglo xx, en donde, a
partir de la crisis que sufrió el teatro, surge la necesidad de renovar aquello que se
venía haciendo hasta ese entonces, con eso se refiere a la poca importancia que
tenía la acción física1 en escena, durante el siglo XX toma un giro rotundo la
relevancia de la acción física en el escenario, ahora no se comenzaba con un
trabajo de mesa2 en cuanto a un texto dramático (análisis psicológico), sino que a
partir de un análisis activo, el actor sería capaz de vivenciar y encarnar un
personaje, el cual no utiliza como recurso la palabra, por el contrario, a partir de la
acción que éste realiza, puede surgir la necesidad de emitir la palabra; hay un
objetivo claro, en donde el actor, luego de entender las ideas y las circunstancias
dadas del texto, empatiza con el autor y es capaz de individualizar aquel discurso
que plantea el dramaturgo, siendo capaz de volverlo suyo a través del “sí mágico”.
Para que todo lo anteriormente planteado suceda, el actor tiene que tener fe y
debe creer en las circunstancias análogas en las que se encuentra la obra, para
así lograr una interpretación orgánica, y que el actor logre verdaderamente la
vivencia en escena, siendo capaz de hacer visible su mundo interior a través de la
encarnación del personaje, solo así el actor logra la veracidad en la puesta en
escena.

1 Según Stanislavsky, “El arte del actor en el siglo XX”, p. 65


2 Stanislavsky, C., 1996, “El último stanislavsky”, p. 13
Desarrollo:
 Argumento 1: El Teatro de Arte de Moscú nace para hacer del teatro un
oficio y no un artificio.

Como ya fue mencionado a modo de introducción, el teatro sufrió una crisis


durante el siglo XIX, en donde se vio estancado el “como” se actua, es ahí
en donde el término “Vanguardia”3 comienza a tomar relevancia para el
teatro. Surgió una necesidad por renovar el “como” se actua, exigiendo una
toma de conciencia tanto personal como colectiva, de que el teatro no es un
hobbie solo para aficionados, más bien, es una profesión como tal, que
implica una investigación teórico-práctica activa a partir de la autoreflexión.
A partir de lo cual, nace el TAM, lugar en donde los estudiantes se formaban
para ser actores, exigiendo una ética en cuanto a la importancia que toma
el oficio.

(Stanislavsky, C., 1993 (a), o.c., p. 196) “Protestábamos contra las viejas
modalidades, contra la teatralidad, contra el falso pathos, contra la
declamación, contra la rutina histriónica, contra las malas puestas en
escena, contra los decorados, contra el sistema del primer actor que
echaba a perder el resto del conjunto, contra el régimen de espectáculos, y,
sobre todo, contra la nulidad de los repertorios de los teatros de entonces.”

Con la cita recién mencionada, queda más clara la situación del TAM, de
querer sacar de raíz las convenciones que se tenían del teatro en la época.
A partir de ello se inaugura en 1905, el Teatro-Estudio, dirigido por
Meyerhold (discípulo de stanislavsky), en fundamento de esta nueva
propuesta vanguardista para lograr encontrar nuevas formas teatrales a
partir de la práctica, en este “laboratorio” escénico que permitía probar todo
lo nuevo que estaba surgiendo. Cabe resaltar la importancia que comienza
a tener la acción física como tal, para dar cuenta al espectador de algo que
acontece a lo que le sucede al personaje de manera orgánica.

 Argumento 2: Lo particular, radica en “como” se caracteriza al personaje.

Como el actor se apodera de la acción física y hablada que propone el


autor, es aquel cambio más relevante en cuanto a cómo era la comprensión
de un texto dramático antes de la vanguardia; surge en análisis activo 4, con
el fin de no mecanizar el texto, sino que a partir de la lectura, determinar un
impulso, una acción y un objetivo. Entendiendo las ideas que plantea el
autor, determinar la causa-efecto, que responden al ¿Por qué hago esto?,
¿Qué quiere el autor que el actor haga con esas determinadas palabras?, a

3 Ruiz, B., 2012, consultar, El arte del actor del siglo XX, p.29
4 Stanislavsky, C., 1996, cap. 1, (Principios generales del Análisis Activo). El último Stanislavsky
partir de aquí el actor se comienza a familiarizar con el texto, se comienza a
plantear un objetivo, que muchas veces, en un principio, se veía
completamente ajeno a la realidad. Con estos elementos, el actor ya
debería ser capaz de construir un comportamiento5 al construir un
personaje, el cual por supuesto se determina mediante las circunstancias
dadas que plantea el autor y una empatía que el actor logra hacía el
dramaturgo, que generan que aquellos comportamientos tengan coherencia
con las ideas de la obra, y es así como la palabra evoca aquel mundo
interno del personaje en la puesta en escena, lo que se quiere decir con
éste término (evoca) es que la palabra crea una imagen para el espectador,
es decir, el actor le habla al ojo del espectador, ya que éste se crea
imágenes a partir de su propia experiencia, según lo que esté proponiendo
el actor. Entonces el texto responde al ¿Qué voy a decir?, que imagen
quiero generar en el público; y por lo tanto el subtexto respondería al
¿Cómo lo voy a decir?, es en este punto donde claramente cada actor se
cuestiona que haría el en las circunstancias que se le plantean en la obra,
donde cada quien pone de su cosecha y es capaz de individualizar el texto
dramático, siendo este el espacio para que actor plantee su punto de vista
frente a una situación x, “el actor como creador y no mero ejecutor” (caro
araya), es capaz de generar un discursoso individual del personaje
Argumento 3: hacerlo visible

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