Está en la página 1de 1

Fue un tal señor Morales Al fin llegó un policía

Para atender a su gente Diciendo tengan paciencia


Pidió un florero prestado Pero la gente gritaba:
A un tal González Llorente. ¡Qué viva la Independencia!

González que era tendero Y aunque el frío era tremendo


De procedencia española Este alentó con furor
Y se puso de grosero La gente estaba sintiendo
Que hasta le dijo mamola Efervescencia y calor.

Apenas había dicho Y en medio de aquel enredo


Aquella y otra indecencia Gritó de pronto alguno:
Morales se puso chicho Queremos que hable Acevedo
Y empezó la efervescencia. Acevedo el Tribuno.

Morales sacó la mano Por eso se


Y le aseguró a Llorente dirigieron
Un puño tan soberano Al cabildo con premura
Que alcanzó a volarle un diente. Y en un momento le abrieron
Para que hubiera mesura
Morales que era más diestro
No quiso dejarlo muerto Y Acevedo muy contento
Pero si de un tiestazo Les dijo con elocuencia
Le dejó el cabildo abierto No pierdan este momento
De calor y efervescencia
De pronto gritó alguno
Allá en el tierrero El día 20 de julio
Mueran todos, viva mijo Lo celebramos aquí
Que es el dueño del florero. Porque es un día importante
En todo nuestro país.
Entonces venía llegando
Gente y gente por montones Recordemos muchas cosas
Y todos venían gritando Y gente tan amarrada
¡Qué mueran los chapetones! Como González Llorente
Que no quiso prestar nada.
La gente muy exaltada
Rompió acuerdos y vitrinas El día 20 de julio…
Y los decretos pegados
Por España en las esquinas.

También podría gustarte