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DEFINICION
El termino de funciones ejecutivas se aplica a todo un constructo de conceptos que
abarcan una serie de procesos que regulan habilidades mentales con las cuales los seres
humanos logran una conducta propositiva, creativa, dirigida a metas concretas que son
capaces de planificar, ejecutar y monitorear. Gracia a ellas se logra canalizar los
estímulos externos y coordinar comportamientos adecuados a los estándares
socialmente aceptados. (Lozano Gutiérrez & Ostrosky, 2011, Ramos Galarza & Pérez
Salas, 2015, Fernández-Olaria & Flórez, 2016)
El primer autor que habló de funciones ejecutivas sin llamarlas como tal fue A.R
Luria (1974) en su teoría de bloques funcionales, asociándolas con una serie de
trastornos en la iniciativa, en la motivación, en la formulación de metas y planes de
acción y en la automonitorización de la conducta asociada a lesiones frontales. (citado
por Echavarría, 2017)
Sholberg (1989 citado por Echavarría, 2017) que las funciones ejecutivas
comprenden una serie de procesos cognitivos de anticipación, elección de objetivos,
planificación, selección de la conducta, autorregulación, autocontrol y
retroalimentación. Goldberg (2002 citado por Ramos Galarza & Pérez Salas, 2015)
establece una analogía entre del término ejecutivo y el líder que guía. Zelazo y Muller
(2002, citados por Lozano Gutiérrez & Ostrosky, 2011) plantea que no solo de ellas
hacen parte procesos cognitivos sino también respuestas emocionales, llamando frías a
las primeras y calientes a las segundas.
Más adelante Lezak, Howieson y Loring (2004, citados por Martínez, Aguilar Mejía,
Martínez Villa & Mariño García, 2013) sintetizan las funciones ejecutivas como ‘las
capacidades del sujeto para ser propositivo, independiente y autorregulado, es decir, lo
que le permite saber cuándo, cómo y por qué ejecutar una acción. Así mismo, Cicerone,
Levin, Malec, Stuss y Whyte (2006, citados Martínez, Aguilar Mejía, Martínez Villa &
Mariño García, 2013) afirman que el concepto de funciones ejecutivas es “ambiguo” y
plantean un esquema a partir de cuatro dominios que facilitan la organización de los
programas existentes para la intervención en estas capacidades. El primer dominio es
acerca de “funciones ejecutivas cognitivas” que incluye el control, la dirección de la
conducta y la memoria de trabajo. Un segundo dominio implica “funciones de
autorregulación conductual”. El tercero se centra en “funciones de regulación de la
activación”, relacionadas con la iniciativa y la motivación. El último dominio incluye
“procesos metacognitivos” que se basan en la autoevaluación de las propias habilidades
y de la conducta en relación con un objetivo.
En resumen, la mayoría de los autores (Kolb y Wishaw, 1990; León - Carrión y Barroso,
1997; Lezak, 1995) coinciden en incluir en el sistema ejecutivo aquellas capacidades
cognitivas empleadas en situaciones en las que el sujeto debe realizar una acción finalista,
no rutinaria o poco aprendida, que exige inhibir respuestas habituales, que requiere
planificación y toma de decisiones y que precisa del ejercicio de la atención consciente.
Son consideradas como un conjunto de habilidades cognitivas que operan para dar lugar a
la consecución de un fin establecido con anticipación (Baddeley y DelIa, 1998; Lezak,
1995). Estas funciones son primordiales en todos los comportamientos necesarios para
mantener la autonomía personal, así mismo, fundamentan la personalidad y el
mantenimiento del comportamiento: la conciencia, la empatía y la sensibilidad social.
(Herreras, 2005)
Así mismo otro autor como Gioia Et. Al (2000 citados por Fernández-Olaria &
Flórez, 2016) plantea que las habilidades que encierran las funciones ejecutivas son:
MODELOS TEORICOS
Por otra parte, la teoría del acontecimiento complejo estructurado propuesta por
Grafman, gira en torno al constructo de “acontecimiento complejo estructurado” (SEC)
este se define como “un conjunto de acontecimientos, estructurados en una secuencia
particular de actividad que por lo general se orienta hacia un objetivo” (Tirapu Ustárroz,
García Molina, Luna Lario, Roig Rovira & Pelegrín Valero, 2008a). La teoría propone
que los SEC almacenados contiene la información necesaria para que el sujeto sea capaz
de solucionar problemas específicos o alcanzar objetivos determinados. Por su Grafman
expone que los SEC se caracterizan por contar con independencia representacional,
frecuencia, similitud, especificidad categoría y jerarquización. Cabe resaltar que los
SEC son acontecimientos estructurados con un inicio y un final, de hecho, algunos
cuentan con una estructura realmente organizada y demandan de la ejecución de
acciones específicas para lograr alcanzar el objetivo planteado, la decodificación de este
tipo de SEC permite que el sujeto prediga la secuencia formada por los eventos que
componen dicho SEC. (Tirapu Ustárroz, García Molina, Luna Lario, Roig Rovira &
Pelegrín Valero, 2008a).
Por otra parte, el factor ‘g’ es un termino propuesto por Spearman en 1904 para
hacer referencia específicamente a la inteligencia general, este se refiere a nuestro nivel
de desempeño en la aplicación de procesos cognitivos orientados hacia la resolución de
situaciones complejas, además este factor ‘g’ indica Spearman, nos permite alcanzar el
éxito en un amplio rango de tareas cognitivas. Por su parte Duncan propone que el
factor ‘g’ surge de un sistema especifico determinante para el control de diferentes
formas de conducta. Más adelante Golberg propone el término “inteligencia ejecutiva”
para hacer referencia al buen hacer como resultado del funcionamiento ejecutivo,
teniendo en cuenta lo establecido por este autor el factor ‘i’ se define como talento
ejecutivo y a diferencia del factor ‘g’ o inteligencia general, este si existe. Golberg
indica que el factor ‘i’ depende en gran medida del reconocimiento de patrones, que nos
permite recurrir a la experiencia previa para enfrentarnos a situaciones o problemas
presentes. (Tirapu Ustárroz, García Molina, Luna Lario, Roig Rovira & Pelegrín Valero,
2008a).
Modelo propuesto por Luria: Este modelo propone que existen bloques o
unidades funcionales que se encargan de la programación, regulación y verificación de
la conducta (Echavarría, 2017), además establece que las funciones ejecutivas hacen
parte de un sistema funcional complejo que responde a la interacción de diversos
componentes cerebrales. Dicho sistema funcional pertenece a un sistema global
conformado por tres sistemas encargado de regular el tono y la vigilia, recibir y procesar
información del medio y el sistema ejecutivo propiamente dicho encargado de
planificar, ejecutar y verificar la actividad mental y comportamental. (Ramos Galarza &
Pérez Salas, 2015)
Modelo propuesto por Anderson: Este modelo entiende las funciones ejecutivas
como habilidades mentales y las resume en, flexibilidad cognitiva que agrupa la
atención dividida, la memoria de trabajo, la transferencia conceptual y la
retroalimentación; establecimiento de metas, constituido por el razonamiento
conceptual, la planificación y la organización de estrategias; procesamiento de la
información comprendido como eficiencia, fluidez y velocidad del procesamiento; y
control atencional constituido por atención selectiva, autorregulación, auto
monitorización y velocidad del procesamiento. (Ramos Galarza & Pérez Salas, 2015)
Modelo propuesto por Brown: Este modelo comprende a las funciones ejecutivas
como habilidades mentales independientes que trabajan de forma simultanea y de forma
inconsciente como sistemas funcionales interrelacionados. Las habilidades descritas por
el modelo son la activación, es decir la organización, establecimiento de prioridades y
el emprendimiento para trabajar; la concentración que abarca el mantenimiento y
desplazamiento de la atención hacia las tareas; el esfuerzo que hace referencia al estado
de alerta, la conservación del vigor y la velocidad del proceso; la emoción que es
básicamente la tolerancia a la frustración y la regulación emocional; la memoria
formada por la memoria de trabajo y el acceso a los recuerdos; y la acción que agrupa la
autoevaluación y la autorregulación. (Ramos Galarza & Pérez Salas, 2015)
COMPONENTES
Los componentes de las funciones ejecutivas varían dependiendo del modelo que
se utilice para explicarlas, en este aspecto uno de los modelos más completos es el
“sistema de control ejecutivo” propuesto por Anderson (2002) desde el punto de vista
de este “Las funciones ejecutivas dependen de funciones cognitivas de más alto nivel y
de más bajo nivel, por ello no pueden ser consideradas de forma aislada” (Bausela
Herreras, E, 2014) es por esta razón que Anderson (2002) propone cuatro dominios
independientes que interaccionan entre sí, dentro de los cuales incluye las funciones
ejecutivas, estos dominios son:
Establecimiento de metas ()
Este dominio agrupa “la capacidad de desarrollar nuevas iniciativas y conceptos,
así como la capacidad de planificar acciones por adelantado y abordar las tareas de
manera eficiente y estratégica” es decir el establecimiento de metas implica la iniciativa,
el razonamiento conceptual y la habilidad de planificar y organizar, es decir la habilidad
de anticipar los eventos, establecer objetivos claros y planear como alcanzarlos, además
de ser capaz de ordenar información densa y hacer una secuencia de estrategias lógicas
y sistemáticas (Bausela Herreras, E, 2014)
Control atencional ()
Procesamiento de la información ()
ASPECTOS NEUROBIOLOGICOS
RENDIMEINTO ACADÉMICO
Definición
El termino rendimiento académico, también conocido como rendimiento escolar,
desempeño académico o aptitud escolar, ha sido un termino discutido por diferentes
autores y de gran interés para los diferentes sistemas educativos