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Ensayo 2

Rousseau y lo político
Durante muchos siglos en Europa occidental, los temas sobre la humanidad se mantuvieron
con la concepción tradicional, donde simplemente el cuerpo de filósofos no se adentraba a
profundizar más el tema, manteniendo una determinada forma de pensar.
Si bien Maquiavelo y Hobbes, empezaron a poner este tema sobre la mesa, y de forma
abrupta, es Rousseau, un suizo exiliado de Ginebra, quien rompe de forma más radical la
menera de ver al hombre primitivo y como este fue evolucionando a medida que se iba
formando la sociedad civil.
En su Discurso sobre el origen de la desigualdad de los hombres, el autor hace un zoom para
enfatizar el estado natural del hombre primitivo, aquel hombre virgen en conocimientos
sociales. Este estado natural procura que el ser humano está en un etapa de felicidad y libertad
absoluta, donde priman de él los instintos sobre su futura capacidad de raciocino. En este
estado se puede hacer una simple comparación con el animal común, pero el hombre al ser
el único animal con la capacidad de perfeccionarse, hace uso de esta habilidad y establece
una brecha entre ambos.
Esta brecha que se crea, es simplemente la causa de una insignificante desigualdad porque la
que verdaderamente se crea es cuando el hombre, a través de su sentimiento de pertenencia
adquiere y se adueña de los terrenos que el mismo trabaja, es decir que en un primer momento
el ser humano empieza a arar una chacra, para luego trabajar un terrero más grande, y es en
ese momento cuando se deja el nomadismo de lado para dar lugar al sedentarismo cuando,
alrededor de ese tierra, se establece la familia de aquel hombre.
Dicho esto, podemos relacionar la desigualdad de los hombres con el sentido de lo político
en una primera instancia, cuando el hombre suplanta su debilidad a través del desarrollo
técnico, creando un progreso habitual, llamémoslo Trabajo, para decidir lo que es mío de lo
que es de él, llamémoslo Propiedad. Por ende, podemos decir que al momento de que el
hombre se cree dueño o propietario de un terreno, esta políticamente afectando a sus iguales,
ya que ellos al ser humanos también y poseer un sentimiento de superación, querrán luchar
por ese mismo pedazo de tierra que está en juego, provocando una lucha entre el que posee
bienes y el que no.
Esta última comparación hace referencia a una brutal desigualdad entre los hombres, ya que
se instala una brecha entre aquellos que si poseen una propiedad privada y los que
simplemente nunca la tuvieron. Con el pasar de los siglos, todas las tierras fueron tomadas
por los hombres generando una pugna entre ellos mismos, ¿Quién o qué es lo que separa mi
tierra de la de aquel? ¿Cómo se fijan los limites?
Todas estas respuestas se respondieron cuando el hombre crea una sociedad civil, es decir
que a través de las leyes se intenta delimitar las propiedades privadas de los seres humanos
y por ende son las instituciones públicas las encargadas de resolver estos conflictos
individuales y darle unión a la sociedad de una forma en que los seres que la conforman
puedan ser libres y felices como lo eran en su estado primitivo. Como sabemos que no se
puede volver a ese primitivismo, ahora serán las leyes y el ente público político los
encargados de brindarnos tales virtudes.
Lo político se liga directamente con el tema económico, ya que es a través del trabajo y el
progreso que el hombre consigue una propiedad casi por derecho. Esta “repartija” de tierra
alrededor del globo determinara el sistema político de gobierno para los siguientes siglos. En
una primera parte nos encontraremos con la mayor desigualdad existente en la historia de la
humanidad, una Monarquía comandada por los primeros hombres en poseer muchas tierras
y muchos bienes, podríamos decir que ellos son los verdaderos fundadores de la sociedad
civil y por ende también de la desigualdad social.
Luego de esto, llegamos a una aristocracia con menos índices de desigualdad que las
monarquías producto de un olvido humano en que los trabajos se hacen porque sí, porque se
acostumbraron a hacerlo sin cuestionarse su origen o desarrollo. Por último, hoy en día nos
encontramos en democracia, la cual establece una mínima desigualdad social en comparación
a los otros sistemas de gobierno, pero aun así es necesario que como sociedad nos demos
cuenta de que podemos seguir perfeccionándonos, siendo mejores y cada vez más libres.
Concluyendo, Rousseau nos intenta decir a través de su discurso que nos detengamos un
momento a reflexionar sobre la desigualdad contingente, que rompamos con la historia y
creemos una nueva sociedad civil, con nuevas leyes y nuevas entidades públicas capaces de
brindarnos las virtudes más importantes y aquellas que nos caracterizan como seres humanos:
la felicidad y la libertad. Quizás sea necesario en un futuro, establecer un nuevo sistema de
gobierno que garantice que todo aquel ser humano nacido en el planeta Tierra tenga y se
sienta dueño de una parte de él sin tener que ejercer una actividad de trabajo para conseguirla,
y que a su vez, el sentimiento de superación humana evolucione de tal modo en que el
crecimiento de bienes no determine la brecha de desigualdad, si no que serán características
trascendentales las que se busquen para calmar las ansias de distinguirme con el del al lado.

Diego Diaz

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